Está en la página 1de 5

MOTIVACIÓN

Motivación

Por motivación se entiende la compleja integración de procesos psíquicos que efectúa


la regulación inductora del comportamiento, pues determina la dirección (hacia el
objeto-meta buscado o el objeto evitado), la intensidad y el sentido (de aproximación o
evitación) del comportamiento.

En una definición más amplia, la motivación es el conjunto concatenado de procesos


psíquicos (que implican la actividad nerviosa superior y reflejan la realidad objetiva a
través de las condiciones internas de la personalidad) que al contener el papel activo y
relativamente autónomo y creador de la personalidad, y en su constante transformación
y determinación recíprocas con la actividad externa, sus objetos y estímulos, van
dirigidos a satisfacer las necesidades del ser humano y, como consecuencia, regulan la
dirección (el objeto-meta) y la intensidad o activación del comportamiento, y se
manifiestan como actividad motivada.

Psiquis humana

El principio de la unidad de psiquis y actividad es una de las posiciones teóricas


fundamentales de la psicología marxista, desarrollada por los soviéticos a partir de la
década del 30 del siglo XX (Rubinstein, 1964). Un tiempo después, dentro de la
psicología soviética surgió la discrepancia entre Leontiev (1981) y Rubinstein (1965). El
primero afirmaba que el objeto central de la psicología es la actividad externa. El
segundo consideraba que la tarea fundamental de la psicología es el estudio del pro-
ceso, de la actividad psíquica interna.

El principio de la unidad de psiquis y actividad fue dirigido por la joven psicología


soviética contra el introspeccionismo de Wundt y Titchener, el conductismo de Watson y
otros, y la teoría de la Gestalt de Wertheimer, Köhler y Koffka. Hoy día habría que
añadir que se dirige igualmente contra la psicología humanista de Maslow, Rogers,
Nuttin y otros.
Procesos cognitivos

Los procesos cognoscitivos implican la unidad de lo cognitivo y lo afectivo, pero en


ellos predomina lo cognoscitivo, pues tienen como función principal producir, mediante
señales e imágenes, un reflejo cognoscitivo de la realidad. Estos procesos reproducen
y crean interna- mente, en un plano psíquico y subjetivo, las relaciones y propiedades
objetivas. Así, la sensación, la percepción y el pensamiento, constituyen ejemplos de
procesos cognoscitivos de diferente naturaleza, pero que tienen en común esta misma
función y resultado.

Procesos afectivos

Los procesos afectivos implican la unidad de lo cognoscitivo y lo afectivo, pero en ellos


predomina lo afectivo, pues tienen como función principal expresar de manera pasiva o
activa, excitada o inhibida, desorganizada u organizada, cómo afectan los objetos y
situaciones de la realidad a las necesidades del sujeto y, como consecuencia, aportar
energía, activación e intensidad al comportamiento.

Motivación reactiva

La motivación reactiva es aquella que regula la actividad como res- puesta o reacción a
los estímulos externos y requerimientos orgánicos que afectan positiva o
negativamente las necesidades del sujeto. Esta es la motivación típica del animal y del
niño pequeño, que también está presente en el hombre adulto. Tanto el niño pequeño
como el hombre adulto se sienten impulsados a actuar bajo la influencia de los
estímulos externos y de sus requerimientos orgánicos, por ejemplo, la acción del fuego
sobre el cuerpo, o el ruido ensordecedor de una explosión o, por el contrario, la
presencia de un bello panorama, o de una golosina o de una agradable conversación,
nos estimulan a reaccionar motivacionalmente, ya sea para evitar lo dañino o para
buscar y disfrutar los estímulos satisfactorios.

Motivación adaptativa

La motivación adaptativa regula la actividad sobre la base de fines y proyectos


aceptados y acatados por el sujeto, he aquí su independencia de lo externo y lo
orgánico, pero estos fines y proyectos son estimulados por el medio social externo
actual y apoyados por perspectivas de satis- facción, o de insatisfacción, premios o
castigos (por recompensas mate- riales o morales, o por sanciones). En este caso el
individuo asume una tarea, una meta, no porque él se la proponga como manifestación
intrín- seca de su personalidad, sino porque constituye una vía, un medio para
satisfacer sus necesidades, algo impuesto por las exigencias y posibilida- des externas
y los requerimientos del individuo, por ejemplo, para un trabajador que no siente ningún
apego por su trabajo y para el cual su necesidad fundamental o única es económica, la
meta de cumplir con las exigencias laborales de su centro es principalmente adaptativa.

Los motivos

Los motivos (las incitaciones) que caracterizan no tanto a la persona como a las
circunstancias en que se ha desarrollado su vida, se convierten en motivos firmes,
característicos de la persona en cuestión.

Necesidades

La necesidad es una propiedad caracterológica de la personalidad, que constituye una


fuente de activación posible si es excitada (pasiva o activa), con respecto a un
determinado objeto-meta, reflejado cognitivamente, que se evita o se busca. En cuanto
a propiedad psíquica, caracterológica de la personalidad, se manifiesta en estados,
procesos y reflejos psíquicos que expresan la interacción del sujeto con su medio y su
organismo biológico, en el decurso de la cual es excitada, incentivada, frustrada o
satisfecha.

Necesidad biológica (pag 77)

La necesidad biológica opera a través de su reflejo psíquico y de la forma


personalizada e individual que este ha asumido. Por otro lado, las necesidades
sociales, externas al psiquismo del hombre, se reflejan en él y engendran las
necesidades sociales personalmente significativas. Estas surgen porque el individuo las
ha hecho suyas, ha convertido en personalmente significativas las necesidades de la
vida social, los requerimientos de la moral y se comporta de acuerdo con ellos, de este
modo, las necesidades que aquí estudiamos son psíquicas, no son biológicas, ni del
medio social, pero surgen y están en íntima vinculación con el organismo biológico del
hombre y con su medio social.

Proceso motivacional (pag 99)

El proceso motivacional es un constante reflejo y regulador de la actividad externa, de


interacción con el medio físico o social y con el propio organismo biológico. Debido a
esta íntima unidad, las fases de su desarrollo incluyen ambos componentes: el proceso
interno y la actividad externa.

Estímulos extrínsecos / intrínsecos

Los estímulos extrínsecos son los que provienen de afuera (los premios y los castigos).
La motivación extrínseca es aquella dirigida hacia una meta parcial, cuyos motivos se
encuentran fuera de ella, por ejemplo, trabajar por dinero.

Los intrínsecos son aquellos estímulos que provienen de dentro, o sea, de las
necesidades ya existentes.

Necesidades naturales

Las necesidades naturales son determinadas por factores innatos, pero al concretarse
en los objetos y situaciones del medio y ser asimiladas en dependencia del lenguaje y
la conciencia social, adoptan un carácter social. Aparecen preferencias adquiridas que
no pueden ser explicadas por los determinantes innatos. Como consecuencia, el
desarrollo de las necesidades naturales se debe estudiar en función de su canalización
sucesiva en nuevos objetos y normas morales, aportadas por el medio social.

Reforzamiento (pag 117)

El reforzamiento consiste en el componente afectivo positivo o negativo que fija o


elimina esos procesos o reflejos psíquicos.

Necesidades superiores (pag 118)

Las necesidad superiores son adquiridas y no pueden ser reducidas a sus


determinantes innatos, por ejemplo, las necesidades morales son autónomas,
independientes, autosustentadas, con respeto a las necesidades inferiores.

También podría gustarte