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Desde la irrupción de la web 2.0 las instituciones educativas han enfrentado el reto de cómo
apropiar las posibilidades individuales que permiten estas tecnologías en relación con la
búsqueda y procesamiento de información, el aprendizaje autónomo, la generación y
comunicación de conocimientos y la creación y difusión de contenidos; pero también, las
posibilidades sociales e institucionales de conexión y trabajo colaborativo y remoto, la co-
creación, y todas las potencialidades de compartir información y conocimientos en tiempo
real.
Las clases espejo son una de las posibilidades de este avance de las Tic en la educación, y
permiten conectar de forma virtual, a través de una plataforma digital compartida, a
profesores y estudiantes de diferentes regiones o países en sesiones de cursos, sincrónicas
o asincrónicas, y a partir de actividades planeadas por los docentes, fomentar en los
estudiantes el trabajo colaborativo, el intercambio académico, cultural y disciplinar, la
comunión de conocimientos en diferentes contextos, la apropiación tecnológica, la solución
de problemas y retos; y en general, el enriquecimiento de las experiencias de aprendizaje
de los estudiantes y de su formación integral.
En este nivel micro, una de las estrategias trazadas implican la armonización de procesos
curriculares en relación con la internacionalización, la interculturalidad y la ciudadanía
global; otras estrategia proponen el uso de recursos y prácticas educativas abiertas: REA,
OVA y MOOC, la introducción de contenidos y enfoques internacionales e interculturales en
los espacios de formación, la internacionalización conectiva y el aprendizaje basado en
proyectos de investigación comparativa internacional y la aplicación de estrategias
didácticas activas.
En este contexto resaltan las clases espejo como una estrategia que permite a profesores y
estudiantes de la Universidad compartir cursos y secciones de cursos, a través de
plataformas digitales compartidas, con programas y universidades de otros países,
intercambiar experiencias, información y conocimientos en contexto formativos que buscan
experiencias de aprendizaje y de resolución de problemas y retos, de manera colaborativa y
en contacto con otros contextos sociales, culturales y disciplinares.
El proceso para la realización de una clase espejo parte de la intencionalidad de dos o más
docentes, de diferentes universidades, regiones o países, de participar con su curso, o con
algunas sesiones, en esta modalidad de trabajo académico colaborativo. “Yo conocía al
coordinador del programa de Tecnología de regencia de farmacia, en la Universidad de
Caldas, y le propuse que realizaramos un curso o unas sesiones como clase espejo. Nos
reunimos virtualmente y le expliqué todo lo que sabía y me dio el contacto de una profesora
que me podía acompañar. Me reuní con ella, le propuse la idea y le gustó. Comenzamos a
planear, a buscar el curso más adecuado, y el tema más apropiado, y elegimos el tema de
Adquisición de medicamentos, que es de alta complejidad y se basa en fórmulas
matemáticas”.
Luego, es necesario decidir las plataformas y aplicaciones de trabajo para las sesiones de
clase y para las interacciones autónomas de trabajo de los estudiantes. Esta es una etapa
compleja porque tanto profesores como estudiantes pueden no tener dominio de las mismas
herramientas: “En mi caso tuvimos que capacitar a los estudiantes en manejo de algunas
plataformas y herramientas de comunicación. Yo asistí de manera virtual a una reunión del
curso de la profesora de la Universidad de Caldas, y les propuse la plataforma Mural, que
es una herramienta genial para trabajo colaborativo. Una vez que nos nivelamos en el
manejo de las plataformas, programamos la primera sesión”.
La profesora Elcy Ochoa reconoce la riqueza de esta experiencia para conectar profesores
y estudiantes, en torno del trabajo de clase, en universidades de todo el mundo, pero
también manifiesta que la riqueza de esta herramienta no se limita al plano de la
internacionalización, pues estos intercambios académicos mediados por Tics, y en especial
la clase espejo, son también muy pertinentes para conectar universidades colombianas,
como lo realizado con la Universidad de Caldas.
De igual forma, manifiesta que para la Universidad de Antioquia esta estrategia representa
una gran oportunidad para aplicar en los programas de sus sedes regionales: “por las
complejidades de movilizar a estudiantes por el departamento, la dificultad de traerlos de
manera frecuente a Ciudad Universitaria a que conozcan y compartan con sus pares, a las
necesidades de cursos y trabajo en laboratorios que no se tienen en regiones, esta
herramienta puede ayudar mucho a conectar estudiantes y profesores de toda la
universidad.
En el siguiente vínculo, se accede al video del profesor John Jairo Giraldo, de la Escuela de
idiomas, donde explica su proceso para la realización de un curso en la modalidad de Clase
Espejo: https://www.youtube.com/watch?v=XgmsLFipdas
Referencias.