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EDIPO REY, DE SOFOCLES.

Avance del guion teatral para su respectiva dramatización.


Escena 1: Ubicada dentro del palacio, entran los ancianos preocupados y con urgencia de
hablar con el Rey Edipo.
ANCIANOS: Su majestad tenemos un problema
EDIPO: ¿Qué es lo que sucede?
ANCIANOS: Una gran peste azota a nuestro pueblo, muchas familias están muriendo y
nuestros médicos no encuentran la cura y nuestros sacerdotes claman a los Dioses y no
obtienen respuesta
EDIPO: ¿Cuántas muertes ha habido?
ANCIANOS: Cientos su majestad
EDIPO: Gracias por la información

*Edipo va a hablar con médicos y sacerdotes sin tener una respuesta*

EDIPO: No puedo dejar que mi pueblo siga muriendo, pero no hay ninguna respuesta en
ninguna parte
EDIPO: Necesito encontrar una respuesta a esto de inmediato o habré fallado en mi
mandato
EDIPO: Lo tengo. Hablare con el oráculo para obtener una respuesta

* Edipo viaja hasta el lugar del oráculo*

EDIPO: Oh oráculo necesito un favor de los dioses, soy Edipo rey de Tebas mi pueblo
muere a causa de una inexplicable peste. Los ancianos, hombres mujeres o incluso niños
han perecido por esta peste.
EDIPO: Por favor oráculo necesito una respuesta para salvar a mi pueblo.

*Aparece El oráculo*

ORÁCULO: Rey de Tebas los dioses han respondido a tu llamado y te ofrecen la solución.
EDIPO: Qué es lo que debo hacer.
ORÁCULO: Debes encontrar al asesino de Layo el anterior rey de tu pueblo, encuéntralo
y esta peste se irá de tu pueblo.

*Edipo viaja rápidamente de vuelta a Tebas*

EDIPO: Manden a llamar a los mensajeros.

*luego de un tiempo llegan los mensajeros*

MENSAJEROS: A sus órdenes su majestad.


EDIPO: Mensajeros les encomiendo una tarea.
EDIPO: Deben buscar a los antiguos guardias del rey Layo e interrogarlo para saber quién
fue el asesino y así podremos liberar a nuestro pueblo de la peste

*Edipo viaja rápidamente de vuelta a Tebas*

*Entra Creonte*

EDIPO: ¿Cómo lograremos encontrar el asesino con un crimen de esta escala?

CREONTE: No lo sé su Majestad, el rey Layo fue a consultar al oráculo y unca regresó

EDIPO: ¿Y no sobrevivió nadie de los acompañantes del rey Layo?

CREONTE: El único sobreviviente no sabe exactamente lo sucedido, solo nos informa que
unos ladrones los atacaron

EDIPO: Creonte, ¿contaré con tu ayuda para ayudarme con el caso?

CREONTE: Su majestad, no pienso ayudarlo, además de que no quiero que me vuelva a


dirigir la palabra

EDIPO: Pero, Creonte, ¿qué te ocurre?

CREONTE: Su majestad, era tiempo que se diera cuenta

EDIPO: ¿De qué Creonte? ¿De qué hablas?

CREONTE: ¿Se seguirá haciendo inocente? O aceptará por fin que usted es el asesino de
nuestro rey Layo de Tebas

EDIPO: ¿Qué injuria me estás lanzando Creonte? ¿No eres fiel a mí?

CREONTE: Su majestad ignora la desgracia en la que vive, ignorándola con sus seres
queridos, tus palabras vienen de la cólera.
YOCASTA: Te lo dijo el mismo, o algún
Otro?
EDIPO: Un miserable adivino.
YOCASTA: Te probare, que no todas las adivinaciones son ciertas.
* //// Un oráculo, predijo a layo, que su destino era morir a manos de un hijo que tendría de
mí. Pero layo murió en manos de los bandidos de un paraje se cruzaba tres caminos ;
respecto al niño no tenía aún tres días cuando su padre lo ato de los pies y lo entregó a otras
manos , para que lo arrojaran a un monte . //// *
Ahí tienes, ni el hijo fue el asesino de su padre, ni Layo se atormentó con la profecía de
morir a manos de su hijo; por lo tanto no puedes hacer caso a las predicciones, porque
cuando un dios quiere hacer una revelación, él mismo la da a conocer.
NARRADOR: Edipo se siente confundido
EDIPO: ¿Creo haberte oído decir que Layo murió en un cruce de tres caminos?
YOCASTA: Así fue dicho en Fócida
EDIPO: ¡Oh Zeus! ¿Qué has decidido hacer de mí?
YOCASTA: ¿Qué pasa Edipo? ¿En qué piensas?
EDIPO: (ignorando la pregunta de Yocasta) Dime, ¿Cuál era el aspecto de Layo, y que
edad tenía?
YOCASTA: Era alto, con canas y su fisionomía era parecida a la tuya.
EDIPO: ¡Oh Dios mío! Creo que he acabado de lanzar maldiciones hacia mí. (Hacia
Yocasta) Pero me aclararas el asunto, si me dices una cosa: ¿Quién es el que les dio la
noticia?
YOCASTA: Un criado, que fue el único que se salvó
EDIPO: ¿Y se encuentra ahora en el palacio?
YOCASTA: No, porque cuando volvió, te vio a ti en el trono y a Layo muerto, y me
suplicó que lo enviara al campo.
EDIPO: Entonces, ¿Cómo haremos para que venga lo más pronto posible?
YOCASTA: Fácilmente, pero ¿Para qué lo quieres?
EDIPO: Me hallo en una incertidumbre:
* //// Mi padre era Pólibo , y mi madre Mérope ; fui el hombre más respetado , hasta que en
un banquete , un hombre había bebido demasiado y me dijo que yo era hijo fingido de mi
padre , lo aguante a duras penas ; aquel día les pregunté a mis padres y se sintieron
ofendidos , sus palabras me calmaron , pero aun sentía incertidumbre , y sin que supieran
me fui a Delfos donde Febo me rechazó sin creerme digno , pero me rebelo los males más
terribles , diciendo que yo había de casarme con mi madre y también sería el asesino del
padre que me engendro , desde que oí esas palabras , me escondía pero en mi marcha llegue
al sitio donde dices que mataron a Layo . Se encontraban en el coche el anciano que me
describiste, y el cochero me empujó violentamente, por lo que yo le di un golpe con furia,
pero el anciano, me infirió dos heridas con el aguijón en medio de la cabeza. No pago el de
la misma manera, porque le golpe que le di con el bastón que llevaba en la mano, cayó
rodando muerto: Enseguida los ate a todos.////*
Si quienes lo mataron fueron varios, entonces no fui yo; pero si dice que lo mató uno solo,
claro está que el crimen recae sobre mí.
NARRADOR: Edipo sale
CORO: Todos estamos llenos de espanto, pero hasta que te enteres del testigo de estos
hechos, ten esperanza.
YOCASTA: El pastor jamás probará, que tú eres el asesino de Layo, porque el oráculo dijo
que debía morir en manos de su hijo, pero su hijo murió antes que él.
NARRADOR: Entran los mensajeros
MENSAJERO: Tengo buenas nuevas para tu familia y para tu marido. Los habitantes de
Istmo, van a proclamarlo rey, ya que Pólibo murió
YOCASTA: " Dirigiéndose hacia una criada = Llama rápido a rey”. Edipo huyó hace
tiempo de ese hombre por temor a matarlo, y ahora ha muerto por su propia suerte y no en
sus manos.
NARRADOR: Entra Edipo
EDIPO: ¿Para qué me haces venir aquí desde el palacio? “Dirigiéndose al mensajero "
¿Quién es este? ¿Qué me quiere decir?
YOCASTA: Viene de Corinto, para anunciarte que tu padre Pólibo ha muerto a causa de la
vejez.

EDIPO: Él ha muerto ya, y no soy yo el que lo ha matado, a menos que por lo ausencia
haya muerto. Pero temo por merope.
MENSAJERO: ¿Porque temes aún, tienes miedo de cometer algún sacrificio por
ellos?....... ¿Sabes que no hay razón para que tema? ,Polibo no tenía ningún parentesco con
usted.
EDIPO: Si es así, ¿Porque me llamaba hijo?
MENSAJERO: Porque te recibió de mis manos como un obsequio, ya que le angustiaba
no tener descendencia.
EDIPO: ¿Me encontraste o me compraste?
MENSAJERO: Te encontré en las caderas del Gotero y te salve.
EDIPO: ¿Que dolores tenía cuando me recogiste?
MENSAJERO: Las articulaciones de tus pies, de ahí el porqué de tu nombre.
EDIPO: ¿Quién me puso el nombre, mi padre o madre?
MENSAJERO: No lo sé, quien te entrego a mi sabe mejor que yo.
EDIPO: ¿Quién es, si lo sabes, puedes decírmelo?
MENSAJERO: Solo sé que era un criado de Layo.
*Edipo se dirige a todos*
EDIPO: ¿Hay alguien que conozca al pastor que menciona este hombre? Para aclarar todo
de una vez.
YOCASTA: ¡Hay malaventurado! Ojalá nunca sepas quién eres ¡AY! ¡AY! Infortunado
porque de aquí en adelante no te hablaré más.
*Sale corriendo Yocasta*
CORO: ¿Porque tu mujer se ha ido con tal desesperación? tales lamentos pueden terminar
en grandes males.
*Entra el criado*
EDIPO: Eh, tu anciano ¿Tú fuiste criado de Layo?
Criado: Si señor, cuide los rebaños de Citarón.
EDIPO: *señalando al mensajero* ¿Hiciste algún contrato con este?
CRIADO: No sabría decirle, no lo recuerdo.
MENSAJERO: Yo te lo hare recordar, cuando estaba recogiendo mi rebano, me entregaste
a un niño para que lo criara cómo si fuera mío.
CRIADO: Ojala te murieras ¿No te callaras?
EDIPO: Atadle las manos por detrás de la espalda, porque al parecer no quiere hablar de
buena forma.
CRIADO: ¿Qué deseas saber?
EDIPO: Si entregaste al niño que pregunta.
CRIADO: Se lo entregué, ojala hubiera muerto ese día.
EDIPO: ¿Dónde lo recogiste, era tuyo o de otro?
CRIADO: Era de otro, había nacido en el palacio de Layo.
EDIPO: era criado, o hijo legítimo de aquel.
CRIADO: AY DE MI, me aterra decirlo.
EDIPO: A mi escucharlo.
CRIADO: Se decía que era su hijo, pero tu mujer te aclarara mejor como fue esto.
EDIPO: ¿Ella misma te lo entrego? ¿Para qué?
CRIADO: Si, para que lo matara. Porque se decía que él iba a matar a sus padres.
EDIPO: Ya todo está aclarado, yo contraje relaciones prohibidas con quienes no debía, y
mate a quien no debía.
2DO MENSAJERO: Vengo a anunciarles otra mala noticia: ha muerto Yocasta.
CORO: ¿Quién la ha matado?
2DO MENSAJERO: Ella misma, no aguantaba el dolor que sentía por dentro.
EDIPO: ¿Para qué me servía la vista, si no mire nada grato?
CORO: Como quisiera nunca haberte conocido.
EDIPO: Ojala muera quien me salvo en aquel monte.
NARRADOR: salen los mensajeros e ingresa Creonte.

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