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A B R E V I AT U R A S

ART. Artículo
C.C. Código Civil
CCA Código Contencioso Administrativo
C.Co Código de Comercio
CETA Centro de Estudios Tributarios de Antioquía
Cl. Calle
C.P. Consejero Ponente
C.P.N. Constitución Política Nacional
D.C. Distrito Capital
DANE Departamento Administrativo Nacional de Estadística
DIAN Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales
E.T. Estatuto Tributario
EXP. Expediente
Kr. Carrera
P.A.C Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo
UVT Unidad de Valor Tributario

Grupo Editorial
Nueva Legislación Ltda.

Dirigida por:
Jorge Enrique Chavarro Cadena
Prólogo V

PRÓLOGO

El Doctor Harold Ferney Parra me honró con su solicitud de


prologar esta obra en la que hace un profundo disernimiento
sobre el proceso de cobro administrativo coactivo, pues este es
un tema particular relativamente nuevo y sobre el cual no existe
bibliografía en el país.

Sólo una persona como el autor que une a su larga experiencia


en la administración de los tributos y con una gran dedicación
al estudio y la investigación, podía hacer un aporte efectivo e
inteligente, para dotar a todo los profesionales y contribuyentes
de una obra que recopila la legislación, la jurisprudencia y
desarrolla una doctrina especializada que será referente futuro
para todos quienes traten el tema del cobro coactivo.

El doctor Parra quien hace gala de su vasta experiencia


profesional y académica en los quehaceres del ámbito
a través del desempeño en diferentes dignidades en las
administraciones hacendísticas distrital y departamental, y en las
distintas universidades, culmina un nuevo esfuerzo intelectual
e investigativo en la presente obra titulada “procedimiento
Administrativo de Cobro”.

Sin duda esta obra constituye un valioso instrumento de


estudio y precisión de todos los aspectos y conceptos técnicos
fundamentales respecto de cada una de las diferentes áreas
del conjunto del proceso de cobro, para que sirva de apoyo
tanto a las administraciones fiscales, como para los asesores
y los profesionales que se inician en la materia, dado lo
extraordinariamente didáctico del material puesto a disposición
del público interesado.
El trabajo, que para mayor mérito abarca desde los albores legales del sistema
hasta los desarrollos legales recientes, e inclusive algunos de los aspectos
indirectos prácticos que conlleva la dinámica del mismo sistema, resulta
especialmente valioso porque aporta, secuencial y condensadamente, toda
la normatividad que regula el tema así como también y especialmente los
desarrollos jurisprudenciales y doctrinales que sirven de soporte orientador
al lector pero que además amparan y soportan jurídicamente las opiniones
y criterios personales del autor.

Por lo demás, lo detallado de la temática, la precisión de las definiciones y el


lenguaje técnico pero ágil y sencillo con que se exponen claramente todas
las implicaciones de la materia, hace de esta obra un valioso aporte a la
bibliografía tributaria lo cual merece el reconocimiento especial al esfuerzo
y contribución del doctor Parra en la especialidad tratada, de tal manera
que merece nuestro apoyo y respaldo por el camino trazado para los que
en el futuro decidan enriquecer con su esfuerzo, estudio y dedicación la
incipiente literatura tributaria.

FERNANDO ZARAMA VÁSQUEZ


Bogotá D.C. Agosto de 2010
Introducción VII

INTRODUCCIÓN

A través de los años, y luego de muchas conferencias sobre


el cobro coactivo, escuchando las dudas de quienes por
razones de trabajo en el área tributaria o por accidente luego
de la expedición de la Ley 1066 de 2006, tienen que aplicar
el Proceso Administrativo de Cobro Coactivo, lo que me hizo
pensar, que una de las formas de ayudarles a dar respuesta
a algunas de estas preguntas era realizando un documento,
en donde se analizara el procedimiento de cobro coactivo de
forma integral, explicándose el mismo de forma simple pero no
menos concreta, que permitiera a propios y extraños acceder al
proceso en cada una de sus etapas, dilucidando de antemano
muchos de los problemas que se encontrarán en su desarrollo.

Es así, como, nace el presente texto, al que decidí titular


“Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo”, y el
cual desarrollé, partiendo de mis propios conocimientos y
experiencias, sin alejarme de la doctrina oficial así como de la
Jurisprudencia emitida por las diferentes cortes.

En este documento, se analizan todos los factores que integran


el proceso de cobro coactivo, partiendo de las etapas previas
al proceso, pasando por elementos como la competencia, el
título ejecutivo, el deudor y después de analizar todas y cada
una de las etapas procesales llegar a instancias como las de
remate y terminación del P.A.C. y archivo del expediente.

Debo precisar que la realización del documento se hace no


solamente enfocada al desarrollo del campo tributario, porque
es claro que a partir de la entrada en vigencia de la Ley 1066
de 2006, muchos entes no tributarios debieron aplicar este
procedimiento, con las complicaciones que de forma necesaria
VIII El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

crea este tipo de dualismos; Bien porque, la constitución de los títulos, la


aplicación de tasa de interés, los términos de prescripción, las reglas de
notificación y las mismas competencias, se rigen o regían por regulaciones
especiales ajenas al campo tributario, o bien, porque, la misma esencia
de un proceso creado bajo el amparo de las normas especiales puede
generar problemas y grandes confusiones en aquellos cobradores que se
encuentran ajenos al tema tributario.

De allí, que, que traté durante todo el texto, de hacer referencias puntuales
en la aplicación de reglas tributarias, cuando se tratasen de aplicar por parte
de entes de estas características, o de asimilar o explicar la connotación
que una regla de este tipo podría generar en otro tipo de entidades públicas
no tributarias.

Debo finalizar agradeciendo a todos los que me colaboraron de una u otra


forma en la elaboración de este libro, en especial a mi padre el Doctor
José de Jesús Parra Rubio, a la Dra. Alexandra Guerrero Jara, así como
al Doctor Antonio Parra Rubio, y a todos y cada uno de los integrantes de
la Firma PARRA ASOCIADOS, Asesores y Consultores, ya que sin su
ayuda no hubiera sido posible alcanzar el objetivo propuesto.

De la misma forma quiero dar gracias al Dr. Fernando Zarama por su


participación en el prólogo, al Dr. Julio Roberto Piza por sus buenas
intenciones, al Dr. Daniel Manrique Guzman por sus consejos; a la Dra.
Myriam Lovado por sus observaciones y al Centro de Estudios Tributarios
de Antioquía (CETA), por permitirme acceder a sus bases jurisprudenciales
y doctrinales.

El Autor
Algo de Historia 1

ALGO DE HISTORIA
CAPÍTULO

El Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo, tiene sus orígenes en


el Decreto Ley 2305 de 1987, que crea en sus artículos 100 y siguientes
1
el denominado “Procedimiento Administrativo Coactivo”, el cual sufre
modificaciones realizadas por el Decreto Ley 0624 de 1989 (Estatuto
Tributario), la Ley 6 de 1992, que introdujo novedades interesantes al que
denominó “Procedimiento Administrativo de Cobro” y que constituye en el
pilar de cobro de las obligaciones fiscales nacionales que se encuentren
pendientes de pago.

En el año 1993, con la expedición del Decreto Ley 1421, Bogotá D.C. “Por
el cual se dicta el régimen especial para el Distrito Capital de Santafé de
Bogotá”, la ciudad adopta1 el procedimiento de cobro coactivo y los otros
procesos que en materia tributaria aplicaban para la DIAN, y vincula estos
procesos conforme con los requerimientos propios del Distrito Capital.

Posteriormente la Ley 383 de 1997, en su artículo 662, señala que Los


municipios y distritos, para efectos de los procesos de cobro relacionados
con los impuestos administrados por ellos, aplicaran los procedimientos
establecidos en el Estatuto Tributario para los impuestos del orden nacional.

Esta disposición se encuentra replicada para los Departamentos, en el


artículo 59 de la Ley 788 de 20023, es así que conforme con la normatividad

1 Artículo 162. Remisión al Estatuto tributario. Las normas del estatuto tributario nacional sobre procedimiento,
sanciones, declaración, recaudación, fiscalización, de terminación, discusión, cobro y en general la administración
de los tributos serán aplicables en el Distrito conforme a la naturaleza y estructura funcional de los impuestos de
éste.
2 Artículo 66. Administración y control. Los municipios y distritos, para efectos de las declaraciones tributarias y
los procesos de fiscalización, liquidación oficial, imposición de sanciones, discusión y cobro relacionados con los
impuestos administrados por ellos, aplicaran los procedimientos establecidos en el Estatuto Tributario para los
impuestos del orden nacional”.
3 Artículo 59. Procedimiento tributario territorial. Los departamentos y municipios aplicarán los procedimientos
establecidos en el Estatuto Tributario Nacional, para la administración, determinación, discusión, cobro,
devoluciones, régimen sancionatorio incluida su imposición, a los impuestos por ellos administrados. Así mismo
aplicarán el procedimiento administrativo de cobro a las multas, derechos y demás recursos territoriales. El monto
de las sanciones y el término de la aplicación de los procedimientos anteriores, podrán disminuirse y simplificarse
acorde con la naturaleza de sus tributos, y teniendo en cuenta la proporcionalidad de estas respecto del monto de
los impuestos.
2 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

vigente, la totalidad de entes tributarios tanto del orden nacional, como los
departamentales y los distritales y municipales deben aplicar en materia de
cobro coactivo lo señalado en los artículos 822 y siguientes del Estatuto
Tributario.

No obstante lo anterior, el gran impacto del procedimiento administrativo de


cobro coactivo a nivel nacional, lo fija la Ley 1066 del 29 de julio de 2006,
“Por el cual se dictan normas para la normalización de la cartera pública y
se dictan otras disposiciones” cuando en su artículo 5º señala que:

“Artículo 5°. Facultad de cobro coactivo y procedimiento para las


entidades públicas. Las entidades públicas que de manera permanente
tengan a su cargo el ejercicio de las actividades y funciones administrativas
o la prestación de servicios del Estado colombiano y que en virtud de
estas tengan que recaudar rentas o caudales públicos, del nivel nacional,
territorial, incluidos los órganos autónomos y entidades con régimen
especial otorgado por la Constitución Política, tienen jurisdicción coactiva
para hacer efectivas las obligaciones exigibles a su favor y, para estos
efectos, deberán seguir el procedimiento descrito en el Estatuto Tributario.
Parágrafo 1°. Se excluyen del campo de aplicación de la presente ley
las deudas generadas en contratos de mutuo o aquellas derivadas de
obligaciones civiles o comerciales en las que las entidades indicadas
en este artículo desarrollan una actividad de cobranza similar o igual a
los particulares, en desarrollo del régimen privado que se aplica al giro
principal de sus negocios, cuando dicho régimen esté consagrado en la
ley o en los estatutos sociales de la sociedad.
Parágrafo 2°. Los representantes legales de las entidades a que hace
referencia el presente artículo, para efectos de dar por terminados los
procesos de cobro coactivo y proceder a su archivo, quedan facultados
para dar aplicación a los incisos 1° y 2° del artículo 820 del Estatuto
Tributario.
Parágrafo 3°. Las Administradoras de Régimen de Prima Media con
Prestación Definida seguirán ejerciendo la facultad de cobro coactivo que
les fue otorgada por la Ley 100 de 1993 y normas reglamentarias.

De esta disposición se extrae que todas las entidades públicas que de


manera permanente tengan a su cargo el ejercicio de las actividades y
funciones administrativas o la prestación de servicios del Estado colombiano
y que en virtud de estas tengan que recaudar rentas o caudales públicos, del
cualquier nivel, o régimen especial, utilizarán el proceso administrativo de
cobro coactivo (PAC) descrito en el Estatuto Tributario, para hacer efectivas
las obligaciones insolutas a su favor, ya que este tiene como finalidad el
hacer efectiva mediante su ejecución, las obligaciones claras, expresas y
exigibles, previamente definidas a favor de las entidades públicas y a cargo
de los contribuyentes (deudores) en el respectivo título ejecutivo.
Las Etapas Previas 3

LAS ETAPAS PREVIAS


CAPÍTULO

2
Es común el entender que la etapa previa al proceso administrativo de
cobro coactivo es el denominado “cobro persuasivo”, no obstante este cobro
persuasivo, no se encuentra regulado en el Estatuto Tributario Nacional, lo
que nos da a entender que como tal el cobro persuasivo no es prerrequisito
para la realización del procedimiento de cobro coactivo, como muchos
piensan, ni que la omisión de realizar etapas persuasivas pueda generar
algún tipo de nulidad, esta situación ha sido analizada por el Consejo de
Estado en sentencia del 28 de enero de 2010, Expediente 11001 0324 000
2004 00 273-01, C.P. Doctor RAFAEL E. OSTAU DE LAFONT PIANETA,
consideró sobre el tema in exámine:

“En otras palabras, a juicio de esta Corporación, el hecho de que en los


trámites de cobro persuasivo, no obre en el expediente el original de las
liquidaciones privadas u oficiales; de los actos administrativos en los
cuales se fijen sumas líquidas de dinero a favor del fisco nacional; de
las garantías y cauciones prestadas a favor de la Nación para afianzar
el pago de las obligaciones tributarias, a partir de la ejecutoria del acto
de la Administración que declare el incumplimiento o exigibilidad de
las obligaciones garantizadas; o de las sentencias y demás decisiones
jurisdiccionales ejecutoriadas, que decidan sobre las demandas
presentadas en relación con los impuestos, anticipos, retenciones,
sanciones e intereses que administra la Dirección General de Impuestos
Nacionales, sino una reproducción mecánica, una impresión o constancia
relacionada con su contenido, a partir de la información que repose en
los registros o archivos oficiales que conserva la entidad, no constituye
ninguna violación del ordenamiento jurídico, pues en sí mismos los cobros
persuasivos no son “una ejecución”, ni comportan por ende el ejercicio de
un “poder coactivo” por parte de la Administración. Se trata simplemente de
una instancia previa en la cual se intenta hacer efectivo el recaudo de las
acreencias a favor del erario, poniendo de presente al deudor la existencia
de las obligaciones insolutas, a efectos de que proceda a su pago en
forma voluntaria. Ello no significa desde luego que la Administración no
pueda adoptar medidas cautelares en esa etapa previa, con el propósito
de asegurar el cubrimiento de las deudas pendientes a su favor.
4 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Así las cosas, las etapas persuasivas son actuaciones que pueden o no ser
utilizados por el ente público que busca satisfacer obligaciones insolutas a
su favor, y que a pesar de no tener regulación alguna y por ende carecer de
términos puntuales, tienen interesantes efectos jurídicos en la medida en
que conjuntamente con la realización de esta etapa persuasiva, podría la
administración, proceder a decretar medidas cautelares previas, buscando
evitar que el acreedor se convierta en ilíquido, claro que estas medidas
solamente podrían hacerse efectivas como medio para finalizar el cobro
o bien la autorización del deudor, o que se realice el cumplimiento de las
reglas procesales establecidas para el procedimiento administrativo de
cobro coactivo en materia de imputación.
Naturaleza Jurídica de Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo 5

NATURALEZA JURÍDICA DE
PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO
DE COBRO COACTIVO
CAPÍTULO

La naturaleza de este proceso es netamente administrativo, por lo cual debe


3
entenderse que los funcionarios encargados de adelantar este proceso
carecen de investidura jurisdiccional.

La Corte Constitucional en Sentencia T-604 del 9 de junio de 2005, M.P.


Dra. Clara Inés Vargas Hernández, sobre el tema consideró:

3. Naturaleza de la Jurisdicción Coactiva. El privilegio de la


Administración para adelantar el cobro de las acreencias a favor de
la Nación.

El artículo 29 de la Constitución (en especial en sus incisos primero y


segundo) otorga la facultad al Legislador para que defina las formas
jurídicas que deben gobernar cada juicio. Significa lo anterior que en
cabeza de éste se encuentra el poder para establecer los diversos medios
a través de los cuales se habrán de debatir los conflictos surgidos en la
sociedad. Esto permite aseverar que, salvo que la Constitución disponga
otra cosa, el Congreso es el primer llamado a definir las competencias
de las diversas autoridades para efectuar el trámite, direccionamiento
y decisión de esas controversias, entre las cuales se encuentra, por
supuesto, el cobro del incumplimiento de las obligaciones fiscales. Al
respecto, en la sentencia C 649 de 20024 la Corte precisó lo siguiente:

“Una vez cumplida la etapa anterior, es decir, definida la obligación


tributaria, si el contribuyente no cancela voluntariamente su deuda debe la
administración proceder al recaudo forzoso de los créditos fiscales. Para
cumplir ese cometido, el Constituyente no señaló ningún procedimiento
ni preestableció competencias distintas a las que genéricamente fueron
asignadas al Presidente como suprema autoridad administrativa. Ello
significa que el diseño específico de los mecanismos de recaudo forzoso
de los créditos fiscales quedó en manos del legislador, según los mandatos
del artículo 150-23 de la Carta (expedir leyes que regirán el ejercicio de
funciones públicas), la expresa previsión del artículo 189-23 de la Carta y
la ya referida cláusula general de competencia.

4 Magistrado Ponente: Eduardo Montealegre Lynnet. Sentencia en la que se declaró la exequibilidad del artículo 843
del Estatuto Tributario (“Cobro ante la jurisdicción ordinaria”).
6 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

“En estas condiciones, a juicio de la Corte, es claro que para


efectos del recaudo forzoso de los créditos fiscales, como función
pública administrativa, el legislador cuenta con un amplio margen de
discrecionalidad en el diseño de los procedimientos a los cuales deben
someterse autoridades del Estado y los contribuyentes. La Constitución
no exige que dicho recaudo sea gestionado mediante procedimientos
de índole judicial, pues bien puede el legislador, con el fin de dinamizar
la actividad de la administración, establecer mecanismos al interior de
la propia entidad que aseguren el efectivo y oportuno ingreso de los
recursos necesarios para cumplir los fines esenciales del Estado, según
será explicado más adelante” (subrayado no original).

Es cierto que, por regla general, la decisión sobre el cobro de deudas


patrimoniales se debe efectuar a través de los jueces de la República.
Sin embargo, tratándose de deudas de carácter fiscal, tal pauta goza de
una excepción que encuentra soporte en los artículos 2, 189 numeral
20, 209, 238 y 365 de la Constitución Política, en los que se autoriza
a la administración para que adelante el cobro independiente de las
obligaciones a favor de la Nación, a través del proceso administrativo de
jurisdicción coactiva.

Las facultades asignadas a la Administración para el cobro de las deudas


a favor de la Nación a través de los procedimientos de cobro coactivo sin
necesidad de acudir a los jueces, han sido estudiadas y aceptadas por la
jurisprudencia constitucional y administrativa de tiempo atrás. En efecto,
la Corte Suprema de Justicia5, el Consejo de Estado6 y esta Corporación7,
han identificado a la “Jurisdicción Coactiva” como el “privilegio exorbitante”
que tiene la administración a partir del cual se entiende que “las acreencias
públicas están amparadas por un privilegio general de cobranza”8.

Precisamente esta Corte a través de varios pronunciamientos, ha tenido


la oportunidad de consolidar la legitimidad constitucional de los cobros
coactivos efectuados de manera independiente (sin necesidad de acudir a
los jueces) por la propia administración. Además, ha definido la naturaleza
administrativa presente en estas actuaciones, indicando que respecto de
la misma es imperativo observar los pasos establecidos por el legislador
y, en todo caso, las reglas previstas en el Código de Procedimiento Civil
para el trámite del proceso ejecutivo.

5 Cfr. Sala de Negocios Generales. G.J. XLV. Nº 1929, Auto de septiembre 1 de 1937, pág. 773.
6 Cfr., Sala Plena, junio 15 de 1965, Anales 407-408, T.LXIX. 1965, p. 297. Sala de lo Contencioso Administrativo.
Sección Cuarta. Sentencia del 25 de marzo de 1969. Consejero Ponente: Dr. Hernando Gómez Mejía. Anales 1969.
Tomo 76, pág. 371. Sala de lo Contencioso Administrativo. Sección Cuarta. Auto del 8 de mayo de 1969. Anales
1969. T. 76, p. 231. C.P.: Dr. Juan Hernández Sáenz
7 La Corte ha abordado este tema, entre otras, en las siguientes decisiones: sentencia T-445 de 1994, M.P.: Alejandro
Martínez Caballero; sentencia T 459 de 1994, M.P.: Antonio Barrera Carbonell; sentencia C-294 de 1995, M.P.:
Jorge Arango Mejía; sentencia C 666 de 2000, M.P.: José Gregorio Hernández Galindo; sentencia C 1515 de 2000,
M.P.: Martha Victoria Sáchica Mendez; sentencia C-558 de 2001 M.P.: Jaime Araujo Rentería; sentencia C 649 de
2002, M.P.: Eduardo Montealegre Lynnet; sentencia C 939 de 2003, M.P.: Clara Inés Vargas Hernández.
8 Corte Suprema de Justicia. Sala de Negocios Generales. Providencia del 13 de agosto de 1936.-G.J. Nº 1911. Pág.
882.
Naturaleza Jurídica de Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo 7

Los procesos de Jurisdicción Coactiva, se ha indicado, tienen su respaldo


Constitucional en la prevalencia del interés general9 dado que dicha
facultad constituye uno de los presupuestos materiales para que el Estado
cumpla con el desarrollo de sus fines. Al respecto, en una decisión de
Tutela esta Corporación señaló:

“Esta Sala de revisión comparte esta última tesis sobre la naturaleza


administrativa del proceso de jurisdicción coactiva, pero en razón de los
siguientes argumentos:

“La administración tiene privilegios que de suyo son los medios idóneos para
el cumplimiento efectivo de los fines esenciales del Estado, prerrogativas
que se constituyen en la medida en que solo a la administración se le otorga
la posibilidad de modificar, crear, extinguir o alterar situaciones jurídicas,
en forma unilateral, con o sin el consentimiento de los administrados,
incluso contra su voluntad.

“Entonces la administración está definiendo derechos y a la vez creando


obligaciones inmediatamente eficaces, gracias a la presunción de validez
y de la legitimidad de que gozan sus actos. La presunción de legalidad
significa que los actos tienen imperio mientras la autoridad no los declare
contrarios a derecho. Este carácter del acto administrativo llamado efecto
de ejecutividad, tiene su fundamento en el artículo 238 de la Constitución
Política por cuanto al establecer que la jurisdicción de lo contencioso
administrativo podrá suspender provisionalmente los efectos de los actos
administrativos que sean susceptibles de impugnación por la vía judicial,
significa a contrario sensu que mientras no se suspendan los efectos de
los actos administrativos, son plenamente válidos.

(...)

“En conclusión, considera esta Sala de Revisión que el proceso de


jurisdicción coactiva es de naturaleza administrativa, por cuanto su objetivo
es hacer efectiva la orden dictada por la administración de cobro de una
obligación tributaria. En otras palabras esta jurisdicción es el uso de la
coacción frente a terceros y la expresión de una autotutela ejecutiva”10.

Pues bien, una vez verificado el respaldo constitucional11 que tienen los
cobros coactivos adelantados por la Administración, hay que tener en
cuenta que ellos son una actuación administrativa específica que debe
respetar las garantías inherentes al debido proceso previstas en los
artículos 823 y siguientes del Estatuto Tributario y en los artículos 561 a
568 del Código de Procedimiento Civil. Esto supone que, como mínimo, el

9 Corte Constitucional, sentencia C 666 de 2000.


10 Corte Constitucional, Sala Séptima de Revisión, sentencia T 445 de 1994. En esta decisión de tutela, la Corte
estudió la razonabilidad presente en las medidas cautelares de un proceso de cobro coactivo adelantado por la
Dirección de Impuestos Nacionales de Cali.
11 Incluso, uno de ellos se encuentra expresamente previsto en el numeral 5 del artículo 268 de la Constitución Política
de la siguiente manera: “Art. 268.- El contralor general de la república tendrá las siguientes atribuciones: (...) 5.
Establecer la responsabilidad que se derive de la gestión fiscal, imponer las sanciones pecuniarias que sean del
caso, recaudar su monto y ejercer la jurisdicción coactiva sobre los alcances deducidos de la misma” (Subrayado
no original).
8 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

procedimiento debe garantizar (i) que el deudor conozca el valor o monto


de la obligación debida y (ii) que cuente con medios reales para participar
y oponerse a dicho cobro12.

Además, es necesario resaltar que la capacidad ejecutiva que gozan


algunos de los actos de la administración13, tiene como uno de sus rasgos
definitorios la independencia que ostentan frente a los procesos que en
paralelo se puedan adelantar en sede judicial…14:

Es decir, que en el proceso administrativo de cobro, se concentran las


facultades administrativas para hacer valer el interés general, en defensa
de los recursos públicos como garantes de la acción pública del Estado.

12 Corte Constitucional, sentencia C 1515 de 2000, argumento jurídico número 4.


13 De manera estricta, aquellos que se encuentran enumerados en los artículos 68 del Código Contencioso
Administrativo y 828 del Estatuto Tributario.
14 En el mismo sentido la sentencia C 799 de 2003 estableció: “No sobra recordar que la jurisdicción coactiva es un
“privilegio exorbitante” de la Administración, que le permite cobrar directamente, es decir sin intervención judicial,
las deudas a su favor, y que se justifica en los principios de eficacia y celeridad de la función administrativa a que
se refiere el artículo 209 superior. Privilegio que, de por sí, entrega a las autoridades un mecanismo efectivo y
suficiente para lograr el pago de la multa, y que es una facultad extraordinaria que va atada indiscutiblemente a los
conceptos de imperio, soberanía, poder y autoridad”.
La Competencia 9

LA COMPETENCIA
CAPÍTULO

El PAC, nace como se indicó anteriormente para resolver temas de cobro


4
en materia tributaria, de allí que las regulaciones aplicables se encuentren
establecidas en el Estatuto Tributario Nacional, en donde en todo momento
por obvias razones se hace mención a la Dirección de Impuestos y Aduanas
Nacionales, (DIAN), esta entidad es una “Unidad Administrativa Especial”,
Estos son organismos administrativos diseñados para desarrollar, con
autonomía administrativa y financiera, ciertas actividades estratégicas para
el ministerio al que está vinculado, la DIAN está adscrita al Ministerio de
Hacienda y Crédito Público. (Decreto 1071 de 1999, art. 1; Ley 489 de
1998, art. 67)

Sin embargo, no debemos olvidar que a partir de la vigencia de la Ley 1066


de 2006, este tipo de procedimiento aplica para cualquier entidad pública,
que de manera permanente tengan a su cargo el ejercicio de las actividades y
funciones administrativas o la prestación de servicios del Estado colombiano
y que en virtud de estas tengan que recaudar rentas o caudales públicos,
del nivel nacional, territorial, incluidos los órganos autónomos y entidades
con régimen especial otorgado por la Constitución Política. 15

Nos señala la Ley 1066 de 2006, que la figura del cobro coactivo se hace
extensiva a otros tipos de entes públicos que se apartan de los entes
tributarios, para los cuales es creado el procedimiento administrativo de
cobro, lo que genera algunas dificultades.

El diccionario de la Real Academia de la Lengua Española16 define


competencia como la atribución legítima de un juez u otra autoridad para el
conocimiento o resolución de un asunto.

“La competencia es la atribución jurídica otorgada a ciertos y especiales


órganos del Estado de una cantidad de jurisdicción respecto de

15 Ley 1066 del 2006, Art. 5º.


16 http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=competencia
10 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

determinadas pretensiones procesales con preferencia a los demás


órganos de su clase. Ese órgano especial es llamado Tribunal.

La competencia tiene como supuesto, el principio de pluralidad de tribunales


dentro de un territorio jurisdiccional. Así, las reglas de competencia tienen
por objeto determinar cuál va a ser el Tribunal que va a conocer, con
preferencia o exclusión de los demás, de una controversia que ha puesto
en movimiento la actividad jurisdiccional. Por ello se ha señalado que, si
la jurisdicción es la facultad de administrar justicia la competencia fija los
límites dentro de los cuales se ejerce tal facultad. O, dicho de otro modo,
los jueces ejercen su jurisdicción en la medida de su competencia.

Mientras los elementos de la jurisdicción están fijados, en la ley,


prescindiendo del caso concreto, la competencia se determina en relación
a cada juicio (a cada caso concreto).” 17

La competencia dentro del Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo,


es la facultad que la ley otorga a un determinado funcionario para producir
los actos administrativos que le permitan adelantar el proceso desde su
inicio hasta su finalización; dicha competencia está regulada por el cargo que
ostentan las personas o funcionarios que la ejerzan, llámense, tesoreros,
Secretarios de Hacienda, Directores de Impuestos en el campo tributario
o representantes legales, directores financieros, jueces de ejecuciones
fiscales dependiendo del tipo de entidad pública que esté efectuando el
cobro.

Es importante precisar que la facultad de aplicación de cobro coactivo no


abarca a todas las entidades públicas dado que el parágrafo 1º del artículo
5º de la Ley 1066 de 2006, excluye del campo de aplicación de la facultad de
cobro coactivo a “las deudas generadas en contratos de mutuo o aquellas
derivadas de obligaciones civiles o comerciales en las que las entidades
indicadas en este artículo desarrollan una actividad de cobranza similar o
igual a los particulares, en desarrollo del régimen privado que se aplica al
giro principal de sus negocios, cuando dicho régimen esté consagrado en la
ley o en los estatutos sociales de la sociedad.”

Es decir, que las acreencias a favor de entidades públicas que se generen


como consecuencias de préstamos a interés, así como aquellas que nacen
de contratos civiles y comerciales (contratos de educación, servicios público
etc), no pueden ser cobrados en aplicación de las bondades del P.A.C. por
la exclusión en aplicación que hace la ley de estos casos.

17 http://es.wikipedia.org/wiki/Competencia_(derecho)
Carácter de las Providencias Dictadas en el Proceso Administrativo Coactivo 11

CARÁCTER DE LAS PROVIDENCIAS


DICTADAS EN EL PROCESO
ADMINISTRATIVO COACTIVO
CAPÍTULO

5
El artículo 50 del Código Contencioso Administrativo establece que por
regla general proceden recursos sólo contra los actos administrativos
que pongan fin a las actuaciones administrativas, y aclara que son actos
definitivos “que ponen fin a una actuación administrativa, los que deciden
directa o indirectamente el fondo del asunto; los actos de trámite pondrán
fin a una actuación cuando hagan imposible continuarla”.

A su vez, el artículo 49 de la misma norma establece que:

“Artículo. 49. No habrá recurso contra los actos de carácter general, ni


contra los de trámite, preparatorios, o de ejecución excepto en los casos
previstos en norma expresa.”

Los actos de trámite son aquellos que se producen dentro de una actuación
administrativa para impulsarla hacia su fin, actos preparatorios como aquellos
que se efectúan o profieren para posibilitar un acto principal posterior.

La doctrina al respecto ha considerado:

“Se suelen clasificar los actos administrativos según el procedimiento en:

a) Actos de trámite o preparatorios: Son los actos preliminares que toma la


administración para tomar una posterior decisión final o definitiva sobre
el fondo de un asunto. Por ejemplo, algunos actos de autorización, los
que ordenan la apertura de una licitación. A veces son simples o meros
actos administrativos (como con los conceptos que se emiten sobre la
legalidad de un decreto o resolución que se pretende dictar, algunas
inscripciones, algunos registros), y

b) Actos definitivos o principales: son los actos que deciden resolviendo


definitivamente algún asunto o actuación administrativa. No siempre
requieren de actos preparatorios.
12 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

El Consejo de Estado ha dicho sobre los anteriores actos

“ Como es sabido, al lado de los actos administrativos que resuelven


determinado asunto o actuación de esa índole (administrativa), conocidos
como actos definitivos, existen los que sirven de medio para que los
anteriores se pronuncien, llamados actos de trámite. Más, en ocasiones
los últimos deciden, de manera directa o indirecta el fondo de los asuntos
o actuaciones, asumiendo el carácter de definitivos”18

El Doctor Libardo Rodríguez R. Al respecto consideró:

H) Desde el punto de vista de su relación con la decisión. Podemos


distinguir los actos preparatorios o accesorios y los actos definitivos o
principales.

Los actos preparatorios o accesorios son aquellos que se expiden


como parte de un procedimiento administrativo que se encamina a adoptar
una decisión o que cumplen un requisito posterior a ella. Aquí se incluyen
también los llamados actos de trámite. Por ejemplo, el acto por el cual se
solicita un concepto a otra autoridad antes de tomar la decisión o aquel por
el cual se le imparte aprobación posterior a esta última.

Frente a los anteriores los actos definitivos o principales son los que
contienen la decisión propiamente dicha o, como dice el inciso final del
artículo 50 del Código Contencioso Administrativo, ´los que deciden
directa o indirectamente el fondo del asunto´ . Por ejemplo, la resolución
por la cual se concede una pensión de jubilación.”19

Así las cosas tenemos, que dentro de la clasificación de actos administrativos


a referir en este estudio existen dos grupos de actos a saber, los definitivos o
principales, y los preparatorios o de trámite y con respecto a la contradicción
o revisión de estos actos, el Código Contencioso Administrativo señala que
sólo proceden recursos contra los actos definitivos y los de trámite que
pongan fin a una actuación administrativa.

La anterior precisión es importante de ser aclarada en la medida en


que el artículo 833-1 del E.T. señala que decisiones dentro del proceso
administrativo de cobro son de trámite, es decir preparatorios o de ejecución
o definitivos, por lo cual no son susceptibles de ser recurridos, con excepción
de la resolución que falla las excepciones propuestas contra el mandamiento
de pago y que ordena seguir adelante la ejecución y el remate de los
bienes embargados y secuestrados, por así estar expresamente señalado
18 RODRIGUEZ, Gustavo Humberto, “Derecho Administrativo” Ed. Librería del Profesional, Bogotá, 1982, Tomo II,
Pág. 290
19 RODRIGUEZ R. Libardo, “Derecho Administrativo General y Colombiano” Ed. TEMIS, Bogotá, 1990, Pág. 204.
Carácter de las Providencias Dictadas en el Proceso Administrativo Coactivo 13

en el artículo 834 del E.T. Las demás decisiones que se adopten no son
susceptibles de controvertirse.

El Consejo de Estado, en sentencia del 24 de enero de 2008, Expediente


16378, C.P. Héctor J. Romero Díaz, consideró sobre el tema in exámine:

“En los términos de la apelación decide la Sala si procede o no el rechazo


de la demanda interpuesta contra la resolución que negó la solicitud de
nulidad de los procesos de cobro coactivo 9202471 y 9217339, iniciados
por el Distrito Capital en contra de la actora, con base en los mandamientos
P002373 de 25 de diciembre de 1999 y 017339 de 24 de diciembre de
2003, respectivamente, para obtener el pago del Impuesto de Industria y
Comercio de los bimestres 4 y 5 de 1998; 1 a 6 de 1999, 2000 y 2001 y 1,
2 y 5 de 2002 (folios 20 a 24).

De conformidad con el artículo 835 del Estatuto Tributario, dentro del


proceso de cobro administrativo coactivo sólo son demandables ante la
Jurisdicción Contenciosa las resoluciones que fallan las excepciones y
ordenan llevar adelante la ejecución. A su vez, el artículo 833-1 del Estatuto
Tributario establece que las actuaciones administrativas realizadas en el
marco de este procedimiento son de trámite y contra ellas no procede
recurso alguno.

Sin embargo, la Sala ha sostenido que el control jurisdiccional se amplía


a actuaciones que, sin ser las señaladas por el artículo 835 del Estatuto
Tributario, pueden constituir decisiones diferentes a la simple ejecución
de la obligación tributaria, porque crean una obligación distinta, como es
el caso de la liquidación del crédito o de las costas. Así se ha querido
dar protección jurídica a controversias independientes originadas en la
aplicación de normas tributarias especiales, recientes, o posteriores a la
expedición y notificación de las resoluciones que fallan las excepciones20.

En el caso sub exámine se demanda la resolución por medio de la cual


se negó la solicitud de nulidad de los procesos de cobro 9202471 y
9217339, acto que no es objeto de pronunciamiento jurisdiccional porque
es de trámite, dado que no pone fin al proceso. Igualmente, la actuación
demandada no crea, modifica o extingue una obligación diferente a la que
se ejecuta, por lo que no cabe el control jurisdiccional excepcional que ha
aceptado la Sala21.

De otra parte, lo que la actora cuestiona, en últimas, es que no existe título


ejecutivo para el cobro de las obligaciones supuestamente a su cargo, y,

20 Cfr. sentencia de 29 de enero de 2004, exp. 12498, C.P. doctora Ligia López Díaz y autos de 19 de julio de 2002,
exp. 12733, C.P. doctor Juan Ángel Palacio Hincapié y de 14 de julio de 2005, exp. 15040. C.P. Héctor J. Romero
Díaz.
21 Auto de 14 de julio de 2005, exp. 15040. C.P. Héctor J. Romero Díaz.
14 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

por ende, tampoco hay competencia de la Administración para hacerlo


efectivo. Tales aspectos debieron ser propuestos como excepciones
(artículo 831 [ 7] del Estatuto Tributario), dentro de los quince días
siguientes a la notificación de los mandamientos de pago22, conforme al
artículo 830 del Estatuto Tributario. Sin embargo, la demandante pretendió
revivir el plazo en mención con un escrito de nulidad presentado el 30 de
enero de 2006, lo que pone de presente que dejó vencer la oportunidad que
tenía para que la Administración se pronunciara sobre las excepciones y la
Jurisdicción resolviera si dicha decisión se ajustó o no a derecho (artículo
835 del Estatuto Tributario).”

No obstante lo señalado, es importante precisar que en ciertas etapas del


procedimiento administrativo de cobro coactivo, nos remitimos a las reglas
generales señaladas en el Código de Procedimiento Civil, en especial en
cuanto tiene que ver con los temas de embargo, secuestro y remate de
bienes, y siendo viable que dentro de este procedimiento civil, se presenten
recursos contra las actuaciones adelantadas, debe ser entonces viable,
que dentro del proceso de cobro coactivo que toca de forma puntual temas
a los cuales nos hemos remitido al C.P.C., los mismos tengan opciones
adicionales de discusión como lo serían los recursos de reposición y en
subsidio de apelación como lo señala expresamente el Código.

Así lo ha entendido la DIAN, en concepto 045557 del 4 de junio de 2009,


cuando señaló:

“Según el artículo 823 del Estatuto Tributario para el cobro coactivo de


las deudas fiscales por concepto de impuestos, anticipos, retenciones,
intereses y sanciones de competencia de la Dirección de Impuestos y
Aduanas Nacionales, deberá seguirse el procedimiento administrativo
coactivo que se establece en los artículos siguientes.

El artículo 833-1 del E.T dispone que las actuaciones administrativas


realizadas en el procedimiento administrativo de cobro, son de trámite y
contra ellas no procede recurso alguno, excepto lo que en forma expresa
se señalan en este procedimiento para las actuaciones definitivas.

El artículo 834 dispone que en la resolución que rechace las excepciones


propuestas, se ordenará adelantar la ejecución y remate de los bienes
embargados y secuestrados. Contra dicha resolución procede únicamente
el recurso de reposición ante el jefe de la división de cobranzas, dentro
del mes siguiente a su notificación, quien tendrá para resolver un mes,
contado a partir de su interposición.

22 El mandamiento de pago P002373 de 25 de diciembre de 1999 fue notificado el 17 de mayo de 2000 y el


mandamiento 017339 de 24 de diciembre de 2003, se notificó el 15 de enero de 2004 (folio 20).
Carácter de las Providencias Dictadas en el Proceso Administrativo Coactivo 15

Por su parte el artículo 839-2 dispone que en los aspectos compatibles


y no contemplados en este estatuto, se observarán en el procedimiento
administrativo de cobro las disposiciones del Código de Procedimiento
Civil que regulan el embargo, secuestro y remate de bienes.

Sobre las actuaciones en el procedimiento administrativo de cobro que


deben surtirse por el Código de Procedimiento Civil lo remitimos al
Concepto No. 036980 de 1998 (Problema Jurídico No. 2), pero teniendo
presente las modificaciones efectuadas al Código de Procedimiento Civil
por la Ley 794 de 2003 y al Oficio No. 056338 de 2008.

Ahora bien, los recursos de apelación dentro del proceso de cobro


coactivo contra las decisiones que son apelables los resuelve el superior
del funcionario que profiere el acto que para el caso de los actos proferidos
por el Jefe del Grupo Interno de Trabajo de Gestión de Cobranzas es el
Jefe de la División de Recaudo y Cobranzas.”
El Título Ejecutivo 17

6.1. EL TÍTULO EJECUTIVO


EL TÍTULO EJECUTIVO
CAPÍTULO

6
Es el documento en el cual consta una obligación contentiva de una suma
líquida de dinero a favor del ente público y a cargo del obligado tributario
o no tributario, en ese sentido el artículo 488 del Código de Procedimiento
Civil establece que es el documento en donde consta una obligación clara,
expresa y actualmente exigible, proveniente del deudor o de su causante
o expedido por autoridad competente, al cual la ley le confiere tal calidad y
constituye plena prueba contra él.

El Título Ejecutivo es aquel documento al cual la ley le atribuye la suficiencia


necesaria para exigir el cumplimiento forzado de una obligación que consta
en él.

Por último podríamos afirmar que dentro del proceso administrativo de


cobro coactivo, el Título Ejecutivo es aquel documento público dotado de
fuerza ejecutiva. El que trae aparejada ejecución contra lo obligado, de una
forma directa, y sin necesidad de mediar declaración judicial previa.

6.2. TITULOS QUE PRESTAN MERITO EJECUTIVO

Teniendo en cuenta que cuando hablamos de Proceso Administrativo de


Cobro Coactivo, siempre estamos haciendo referencia a obligaciones
de carácter público, porque el acreedor de la misma siempre es un ente
estatal, debemos entonces referirnos a las obligaciones a favor del Estado
que prestan mérito ejecutivo, por lo cual es necesario revisar primero el
artículo 68 del Código Contencioso Administrativo establece:

“Artículo 68.—Definición de las obligaciones a favor del Estado que


prestan mérito ejecutivo. Prestarán mérito ejecutivo por jurisdicción
coactiva, siempre que en ellos conste una obligación clara, expresa y
actualmente exigible, los siguientes documentos:
18 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

1. Todo acto administrativo ejecutoriado que imponga a favor de la Nación,


de una entidad territorial, o de un establecimiento público de cualquier
orden, la obligación de pagar una suma líquida de dinero, en los casos
previstos en la ley.

2. Las sentencias y demás decisiones jurisdiccionales ejecutoriadas que


impongan a favor del tesoro nacional, de una entidad territorial, o de un
establecimiento público de cualquier orden, la obligación de pagar una
suma líquida de dinero.

3. Las liquidaciones de impuestos contenidas en providencias


ejecutoriadas que practiquen los respectivos funcionarios fiscales, a
cargo de los contribuyentes, o las liquidaciones privadas que hayan
quedado en firme, en aquellos tributos en los que su presentación sea
obligatoria.

4. Los contratos, las pólizas de seguro y las demás garantías que otorguen
los contratistas a favor de entidades públicas, que integrarán título
ejecutivo con el acto administrativo de liquidación final del contrato, o
con la resolución ejecutoriada que decrete la caducidad, o la terminación
según el caso.

5. Las demás garantías que a favor de las entidades públicas se


presten por cualquier concepto, las cuales se integrarán con el acto
administrativo ejecutoriado que declare la obligación.

6. Las demás que consten en documentos que provengan del deudor.

Estas disposiciones las encontramos asimiladas en materia tributaria en el


artículo 828 del Estatuto Tributario Nacional, que señala:

“Artículo 828. Títulos ejecutivos. Prestan mérito ejecutivo:

1. Las liquidaciones privadas y sus correcciones, contenidas en las


declaraciones tributarias presentadas, desde el vencimiento de la fecha
para su cancelación.

2. Las liquidaciones oficiales ejecutoriadas.

3. Los demás actos de la administración de impuestos debidamente


ejecutoriados, en los cuales se fijen sumas líquidas de dinero a favor
del fisco nacional.

4. Las garantías y cauciones prestadas a favor de la Nación para afianzar


el pago de las obligaciones tributarias, a partir de la ejecutoria del acto
de la administración que declare el incumplimiento o exigibilidad de las
obligaciones garantizadas.
El Título Ejecutivo 19

5. Las sentencias y demás decisiones jurisdiccionales ejecutoriadas,


que decidan sobre las demandas presentadas en relación con los
impuestos, anticipos, retenciones, sanciones e intereses que administra
la Dirección General de Impuestos Nacionales.

Parágrafo. Para efectos de los numerales 1 y 2 del presente artículo,


bastará con la certificación del administrador de impuestos o su delegado,
sobre la existencia y el valor de las liquidaciones privadas u oficiales.

Para el cobro de los intereses será suficiente la liquidación que de ellos


haya efectuado el funcionario competente.”

Así las cosas, prestan mérito ejecutivo tanto las liquidaciones privadas
como las liquidaciones oficiales, sin embargo es muy común que en
algunos casos los entes tributarios territoriales expidan certificaciones
de las deudas que reposan en la base de cuenta corriente contribuyente
y sobre estas se inicien los procesos ejecutivos de cobro, al respecto el
Tribunal Administrativo de Cundinamarca en múltiples fallos ha considerado
que las certificaciones expedidas por los tesoreros distritales y municipales
no están contempladas en el Libro V del E.T. como títulos ejecutivos, ya que
la certificación a que hace referencia el E.T. debe recaer sobre la existencia
y valor de las liquidaciones privadas u oficiales previstas en los numerales
1 y 2 del artículo 828 del E.T. y no sobre certificación de deudas del sistema
de cuenta corriente. 23

Sobre el mismo tema, el Consejo de Estado, mediante sentencia del 18 de


mayo de 2001, Exp. 11637. C.P. Juan Ángel Palacio Hincapié, consideró que
los títulos a que hace referencia el artículo 828 del E.T. son las liquidaciones
privadas u oficiales ejecutoriadas.

Por su parte en fallo del 12 de octubre de 2001, Exp. 12190, el Consejo de


Estado consideró que si bien es cierto que la norma otorga al administrador
de impuestos una facultad de certificar, la misma está limitada por la ley
en la medida que sólo puede ejercerse para los efectos previstos en los
numerales 1 y 2, del artículo 828 del E.T., esto es la certificación de la
existencia y valor de las liquidaciones privadas u oficiales, que son títulos
ejecutivos.

No autoriza entonces la ley los actos de certificación sobre cuenta corriente,


23 Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Exp. 99-0629 del 20 de septiembre de 2001, M.P. Nelson Zuluaga
Ramírez, en el mismo sentido Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Exp. 99-0690 del 2 de febrero de 2001,
M.P. María Inés Ortiz Barbosa; Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Exp. 99-0729 del 22 de febrero de 2001,
M.P. Álvaro. E. Vera Jaimes; Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Exp. 99-0813 del 15 de marzo de 2001,
M.P. Álvaro. E. Vera Jaimes; Tribunal Administrativo de Cundinamarca, Exp. 99-0021 del 22 de marzo de 2001, M.P.
Álvaro. E. Vera Jaimes.
20 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

con base en los saldos a cargo del contribuyente que arroje el computador,
para elaborar títulos ejecutivos con base en tales cifras. 24

De otra parte y en cuanto tiene que ver con el tema de las facturas como título
ejecutivo, es claro que las mismas prestarían mérito ejecutivo si dentro de
ellas el contribuyente tiene derecho a hacer uso del derecho de defensa, en
respeto del debido proceso, es decir en el caso de las facturas del impuesto
predial unificado que es lo más común a nivel nacional, el municipio debe al
momento de expedir la factura, incorporar elementos claves como “Contra
la presente factura procede el recurso de reconsideración en los términos
señalados en el artículo 720 y siguientes del Estatuto Tributario Nacional”

En asunto similar el Concejo de Estado, sostuvo que cuando la determinación


del impuesto se realice en facturas o documentos de cobro, estos tendrán
los mismos efectos de una liquidación, veamos:

“Para la determinación de los impuestos se realiza una operación


administrativa que requiere actos de la administración y que puede
iniciarse por el contribuyente en cumplimiento del deber legal de presentar
declaraciones o autoliquidaciones tributarias.

Sin embargo, varios tributos se determinan mediante un solo acto singular


y la actividad de la administración se reduce a verificar la realización del
hecho gravado y a determinar el valor de la obligación por recibir su pago.

La liquidación del impuesto en estos últimos casos, está contenida en una


factura de cobro o en cuentas o documentos donde consta el pago, como
los recibos de caja, los cuales constituyen el acto administrativo definitivo
de determinación susceptible de control jurisdiccional. Allí se incorpora un
pronunciamiento sobre el tipo de gravamen, el concepto, y la cuantía del
tributo”25

Así las cosas, las facturas prestan mérito ejecutivo en la medida en que las
mismas incorporan como actos definitivos obligaciones expresas, claras y
exigibles, y por ende, y conforme lo ha señalado el Consejo de estado en
el fallo transcrito, deben incorporar en si mismas los actos de defensa a los
que puede recurrir el administrado, en respeto del derecho de contradicción
de los actos administrativos.

24 En igual sentido, Consejo de Estado, Exp. 7547 del 19 de octubre de 1995, C.P. Julio E. Correa Restrepo; Consejo
de Estado, Exp. 12165 del 13 de noviembre de 2001, C.P. María Inés Ortiz Barbosa; Consejo de Estado, Exp. 9585
del 15 de octubre de 1999, C.P. Daniel Manrique Guzmán; Consejo de Estado, Exp. 9659 del 10 de diciembre de
1999, C.P. Daniel Manrique Guzmán; Consejo de Estado, Exp. 9660 del 26 de noviembre de 1995, C.P. Julio E.
Correa Restrepo; Consejo de Estado, Exp. 10892 del 4 de mayo de 2001, C.P. Ligia López Díaz.
25 Consejo de Estado, Sentencia del 8 de septiembre de 2005, C.P. Ligia López Díaz
El Título Ejecutivo 21

Por último y atendiendo la modalidad de declaración y pago electrónico


para el cumplimiento de las obligaciones tributarias, se generaron dudas
sobre la ejecutoria de las declaraciones electrónicas como título ejecutivo,
situación que quedó debidamente aclarado cuando el Consejo de Estado,
se pronunció

“Considera la Sala que a partir de la expedición del Decreto ley 2150 de


199526 y la habilitación de sistemas de transmisión electrónica de datos
en las entidades públicas se implementó la utilización del “documento
electrónico” para que los usuarios envíen o reciban información requerida
en sus actuaciones frente a la administración.

Se considera documento electrónico el que “está contenido en soporte


diverso al papel, lo que no significa que por esa razón no sea capaz de
representar una idea o pensamiento. Por ello lo han definido como cualquier
representación en forma electrónica de hechos jurídicamente relevantes,
susceptible de ser asimilado en forma humanamente comprensible. El
documento electrónico es un método de expresión que requiere de un
instrumento de creación, conservación, cancelación y transmisión; tal
instrumento está constituido por un aparato electrónico. De esta forma la
disciplina de dicho documento no puede prescindir del computador que lo
crea, lo conserva y lo cancela, y la red de terminales de computador que
permiten su transmisión27.

Ahora bien, el Artículo 82828 del Estatuto Tributario enuncia los documentos
que prestan mérito ejecutivo dentro de un proceso fiscal de cobro
coactivo, entre los cuales se encuentran las liquidaciones privadas o las
correcciones a las mismas.

Los artículos 578 y 579-2 del mismo ordenamiento establecen la


posibilidad de que los contribuyentes o responsables puedan presentar sus
declaraciones tributarias a través de los formularios que la Administración
de Impuestos establezca previamente para el efecto o, a través de medios
electrónicos, previa autorización de la misma entidad29. Al efecto dichas
normas disponen:

26 Por el cual se suprimen y reforman regulaciones, procedimientos o trámites innecesarios existentes en la


Administración Pública”
27 GUERRERO Marta Fernanda. El mercado de valores desmaterializado (aspectos técnico-legales). Ponencia del
XIII Congreso Latinoamericano de Derecho Bancario. Santiago de Chile, 17 al 20 de Abril de 1994, Ps. 14-15.
28 Art. 828 E.T. “Prestan mérito Ejecutivo: 1) Las Liquidaciones Privadas y sus correcciones contenidas en
las declaraciones tributarlas presentadas desde el vencimiento de la fecha para su cancelación. 2) Las
Liquidaciones Oficiales ejecutoriadas. 3) Los demás actos de la Administración de Impuestos debidamente
ejecutoriados, en los cuales se fijen sumas líquidas de dinero a favor del fisco nacional. ( ....)”
29 En cuanto a la presentación de las declaraciones tributarias por medio electrónico, la Sección en la sentencia del
14 de julio de 2000’, señaló:
«( ...) el artículo 578 ibídem, prevé que las declaraciones tributarias se deben presentar en los formatos que
prescriba la DIAN, esto es, en los formularios oficiales, aun cuando excepcionalmente dicho organismo puede
autorizar la recepción de declaraciones que no se presenten en los formularios oficiales.
22 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

‘Artículo 578. Utilización de formularios. La declaración tributaria


se presentará en los formatos que prescriba la Dirección General de
Impuestos Nacionales. En circunstancias excepcionales el Director
General de Impuestos Nacionales, podrá autorizar la recepción de
declaraciones que no se presenten en los formularios oficiales. “

`Artículo 579-2. Presentación electrónica de declaraciones. Sin


perjuicio de lo dispuesto en el Artículo 579, el Director de Impuestos y
Aduanas Nacionales mediante resolución, señalará los contribuyentes,
responsables o agentes retenedores obligados a cumplir con la
presentación de las declaraciones y pagos tributarios a través de medios
electrónicos, en las condiciones y con las seguridades que establezca
el reglamento. Las declaraciones tributarias, presentadas por un medio
diferente, por parte del obligado a utilizar el sistema electrónico, se
tendrán como no presentadas. En el evento de presentarse situaciones
de fuerza mayor que le impidan al contribuyente presentar oportunamente
su declaración por el sistema electrónico, no se aplicará la sanción de
extemporaneidad establecida en el artículo 641 de este Estatuto, siempre
y cuando la declaración manual se presente a más tardar al día siguiente
del vencimiento del plazo para declarar y se demuestren los hechos
constitutivos de fuerza mayor.”

Cuando se adopten dichos medios, el cumplimiento de la obligación de


declarar no requerirá para su validez de la firma autógrafa del documento.

El Artículo 579-2 fue reglamentado por el Decreto 408 del 14 de marzo de


2001, en el que se precisaron aspectos relacionados con la presentación
de las declaraciones, el procedimiento de asignación de firmas electrónicas
y claves, así como los efectos jurídicos de los documentos electrónicos.
En su articulado se establece que las declaraciones tributarias, así como
el pago de los impuestos y retenciones en la fuente que se presentaran
electrónicamente, debía hacerse a

De la interpretación armónica de las disposiciones en mención, se


desprende que sin desconocer el mandato imperativo derivado del Artículo
579 del Estatuto Tributario, en el sentido de que la presentación de las
declaraciones tributarias ( que deben ser presentadas en formularios
oficiales), se debe efectuar en los lugares y plazos que señale el gobierno
nacional, el mismo gobierno nacional puede autorizar la presentación de
las declaraciones a través de medios electrónicos, “en las condiciones y
con las seguridades que establezca el reglamento”.

Lo anterior quiere decir que es potestativo del gobierno autorizar o no


la presentación de declaraciones por medios electrónicos, lo que se
corrobora no sólo con la inflexión verbal ‘podrá” que trae el Artículo 579-
2 del Estatuto Tributario, sino con la prevención de “dejara salvo” la
presentación “documental” de las declaraciones en los lugares y plazos
señalados, que es en últimas lo que significa la expresión “sin perjuicio de
lo dispuesto en el Artículo 579, que también trae la disposición en mención.
El Título Ejecutivo 23

Dicho de otra manera: el obligado a declarar debe presentar su


declaración tributaria ( en los formularios oficiales, por lo general), en
los lugares y plazos que para el efecto señale el gobierno nacional, pero
sólo esta entidad puede autorizar que los contribuyentes presenten su
declaración por medios electrónicos, ya que si el gobierno lo dispone, así
puede hacerlo.” A través del “Sistema Declaración y Pago Electrónico-
de la DIAN30, y que para todos los efectos jurídicos, los documentos
electrónicos que se presenten por este medio remplazan los documentos
físicos en papel.

Conforme con lo expuesto, la Sala concluye que las declaraciones


tributarias presentadas por los contribuyentes o responsables, bien sea
en medio físico a través de los formatos destinados para el caso o, a
través del Sistema de Declaración y Pago Electrónico, para todos los
efectos jurídicos y probatorios tienen la misma validez y constituyen
títulos ejecutivos idóneos que pueden ser cobrados coactivamente por la
Administración.

Además, cuando se trata de probar la existencia de un documento


electrónico, no es necesario que éste se materialice, pero, si se materializa,
el documento físico que se aporta, constituye prueba de la existencia del
documento electrónico.31

De otro lado y en cuanto a las materias no tributarias, es evidente que los


entes que aplican el procedimiento de cobro coactivo en virtud del mandato de
la Ley 1066 de 2006, sin ser entes recaudadores de impuestos, al momento
de expedir sus títulos deben tener presente que los mismos deben cumplir
las calidades mínimas que debe contener un título ejecutivo, es decir que
preste mérito ejecutivo el documento este debe estar especificado contra
quien se expide, porqué concepto, porque períodos y cuál es la cuantía.

30 En cuanto a la presentación de las declaraciones tributarias por medio electrónico, la Sección en la sentencia del
14 de julio de 2000’, señaló:
«( ...) el artículo 578 ibídem, prevé que las declaraciones tributarias se deben presentar en los formatos que
prescriba la DIAN, esto es, en los formularios oficiales, aun cuando excepcionalmente dicho organismo puede
autorizar la recepción de declaraciones que no se presenten en los formularios oficiales.
31 Consejo de Estado, Sentencia del 1º de octubre de 2009, Exp 16443, C.P. Hugo Fernando Bastidas Bárcenas.
Que debe entenderse por ejecutoria del Acto Administrativo 25

QUE DEBE ENTENDERSE POR


EJECUTORIA DEL
ACTO ADMINISTRATIVO
CAPÍTULO

7
La fuerza ejecutoria del acto administrativo está circunscrita a la facultad
que tiene la administración de producir los efectos jurídicos del mismo, aún
en contra de la voluntad de los administrados.

El artículo 64 del Código Contencioso Administrativo, consagra:

“Salvo norma expresa en contrario, los actos que queden en firme al concluir
el procedimiento administrativo serán suficientes, por sí mismos, para
que la administración pueda ejecutar de inmediato los actos necesarios
para su cumplimiento. La firmeza de tales actos es indispensable para la
ejecución contra la voluntad de los interesados.”

De acuerdo a esta norma, el acto administrativo tiene carácter ejecutorio


y produce sus efectos jurídicos una vez cumplidos los requisitos de
publicación o notificación, lo cual faculta a la administración a cumplirlo o
hacerlo cumplir.

La fuerza ejecutoria de los actos administrativos, es decir su ejecutividad,


depende entonces de dos aspectos fundamentales: la presunción de
legalidad del acto administrativo, siempre que no haya sido desvirtuada,
y su firmeza, que se obtiene en la forma expresada en el artículo 62 del
Código Contencioso Administrativo, que indica:

“Artículo 62. Firmeza de los actos administrativos. Los actos


administrativos quedarán en firme:

1. Cuando contra ellos no proceda ningún recurso.

2. Cuando los recursos interpuestos se hayan decidido.

3. Cuando no se interpongan recursos, o cuando se renuncie expresamente


a ellos.
26 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

4. Cuando haya lugar a la perención, o cuando se acepten los


desistimientos.”

En materia tributaria el artículo 829 del Estatuto Tributario Nacional señala de


forma similar a las ya enunciadas por el artículo 62 del Código Contencioso
administrativo, las situaciones que hacen que un título tributario (Liquidación
Oficial) adquiera firmeza.

Artículo 829. Ejecutoria de los actos. Se entienden ejecutoriados los


actos administrativos que sirven de fundamento al cobro coactivo:

1. Cuando contra ellos no proceda recurso alguno.

2. Cuando vencido el término para interponer los recursos, no se hayan


interpuesto o no se presenten en debida forma.

3. Cuando se renuncie expresamente a los recursos o se desista de ellos.

4. Cuando los recursos interpuestos en la vía gubernativa o las acciones


de restablecimiento del derecho o de revisión de impuestos se hayan
decidido en forma definitiva, según el caso.

Parágrafo (Derogado por el artículo 140 de la Ley 6ª de 1992.)

El título ejecutivo generado de un acto administrativo de contenido particular


se entiende ejecutoriado por regla general al día siguiente de su notificación,
ya que de forma necesaria con el culmina la actuación en vía gubernativa al
haberse agotado la instancia de discusión al no proceder recurso adicional
alguno.

Sin embargo el funcionario ejecutor debe ser supremamente cuidadoso


en tener presente al momento de librar el mandamiento de pago, que el
acto administrativo que sirve de título ejecutivo, no haya perdido su fuerza
ejecutoria, al respecto el artículo 66 del Código Contencioso Administrativo,
nos señala las razones por las cuales un acto administrativo pierde su
fuerza ejecutoria, veamos:

“Artículo 66. Pérdida de fuerza ejecutoria. Salvo norma expresa


en contrario, los actos administrativos serán obligatorios mientras no
hayan sido anulados o suspendidos por la jurisdicción en lo contencioso
administrativo pero perderán su fuerza ejecutoria en los siguientes casos:

1. Por suspensión provisional.

2. Cuando desaparezcan sus fundamentos de hecho o de derecho.


Que debe entenderse por ejecutoria del Acto Administrativo 27

3. Cuando al cabo de cinco (5) años de estar en firme, la administración


no ha realizado los actos que le correspondan para ejecutarlos.

4. Cuando se cumpla la condición resolutoria a que se encuentre sometido


el acto.

5. Cuando pierdan su vigencia.

Realmente es importante que la ocurrencia del fenómeno de la pérdida


de fuerza del acto administrativo es de vital interés, ya que de darse esta
situación, nos encontraríamos frente a la falta de título ejecutivo, veamos
algo de jurisprudencia al respecto.

JURISPRUDENCIA.“En efecto, la Compañía Aseguradora desde la vía


gubernativa ha aducido excepciones con miras a enervar el Mandamiento
de Pago No. No.0000l6 del 29 de enero de 1.999, mediante el cual la
División de Cobranzas de la Administración de Impuestos Nacionales Local
Atlántico, decidió hacer efectiva la Póliza de cumplimiento No. 3217385
de fecha 91 -03-12 expedida por la Compañía - Aseguradora de Fianzas
S.A “CONFlANZA” Nit:860.070.374 otorgada en favor de la sociedad
contribuyente EXVENTIL PORT LTDA. para garantizar la devolución del
impuesto sobre las ventas correspondiente al primer bimestre de 1.991; y
librar orden de pago contra la mencionada Compañía de Seguros a favor
de la Nación en cuantía de $68. 704.300, más los intereses a que hubiere
lugar, incrementados en un 50%

Las excepciones aducidas en el mencionado proceso administrativo


coactivo son las siguientes: 1) excepción de falta de ejecutoria del título
ejecutivo; 2) excepción de falta de título ejecutivo; 3) excepción de falta de
calidad de deudor solidario; 4) excepción de indebida tasación del monto
de la deuda.

En relación con las excepciones de falta de ejecutoria del título ejecutivo


y falta del título ejecutivo, el accionante ha considerado que en virtud de
lo dispuesto en el artículo 565 del Estatuto Tributario y según los términos
del artículo 71 de la Ley 6º de 1.992, tanto la liquidación de revisión como
la Resolución Sanción proferida por improcedencia de la devolución
solicitada por la contribuyente, debieron ser notificadas a la Compañía
Aseguradora, y que la Administración ha pretendido subsanar la falta de
notificación bajo el argumento que de conformidad con el parágrafo del
artículo 60 del Decreto Reglamentario 2314 de 1.989, bastaba el aviso de
haberle dado traslado a la afianzada del requerimiento especial y el pliego
de cargos, para determinarle su responsabilidad futura.

En consecuencia, que dichos actos no prestan mérito ejecutivo, y que para


ello, se requiere la ejecutoría del acto de la Administración que declare el
incumplimiento o exigibilidad de las obligaciones garantizadas.
28 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Como lo ha puesto de presente el apoderado judicial de la sociedad


actora con oportunidad de la sustentación al recurso de apelación ésta
Corporación en la sentencia de fecha 14 de febrero de 1.997, Expediente
# 7991, Actor: Cóndor SA. Compañía de Seguros Generales, M.P.
doctora Consuelo Sarria O., ha reiterado su tesis según la cual previo
a la vinculación del deudor solidario, la Administración debe notificar el
acto que constituye el titulo ejecutivo, para que a continuación se proceda
a dictar el mandamiento de pago, pues el sólo aviso a 1a Compañía
Aseguradora sobre la expedición del pliego de cargos a la responsable,
no es suficiente para integrar el titulo ejecutivo con la Póliza sino que en
cada caso, debe serlo la Resolución que declara la improcedencia de la
devolución.

La tesis expuesta ha sido reiterada en varias oportunidades entre otras, en


la sentencia de marzo 17 del 2000, expediente 9863, actor: Compañía de
Seguros Generales de Colombia, M.P. Dr. Julio E. Correa, y en la reciente
sentencia de abril 28 del 2000, Expediente 9849, MP. Dr. Daniel Manrique
Guzmán, cuyo actor es la misma Compañía Aseguradora de Fianzas
S.A, Confianza, razón por la cual y por tratarse de casos idénticos, se
retoma nuevamente en el presente proceso para dilucidar lo atinente a las
excepciones señaladas, en los siguientes términos:

“Los cuestionamientos de la accionante relativos al título ejecutivo, se


sustentan en que, tratándose de garantías prestadas por compañías de
seguros, dicho título se integra, además de la respectiva póliza de seguro,
por el acto administrativo ejecutoriado, “ que declare el incumplimiento o
exigibilidad de las obligaciones garantizadas”, conforme al numeral 4º del
artículo 828 del Estatuto Tributario.

Dicha afirmación es válida, ya que así lo prevé la norma parcialmente


transcrita y lo prescriben los numerales 4º y 5º del artículo 68 del Código
Contencioso Administrativo.

Según lo tiene establecido la Sala, la declaración de incumplimiento


o exigibilidad de la obligación, se profiere por acto individual, previo al
mandamiento ejecutivo, como elemento esencial del título, determinante
de responsabilidad solidaria (cfr. sentencias de la Sala. septiembre 9 de
1994, expediente 115665, consejero ponente. Dr. Jaime A bella Zárate;
marzo 8 de 1996, expediente 117381. consejero ponente, Dr. Julio E.
Correa Restrepo).

(…)

Teniendo en cuenta lo anterior, y como ya ha dicho la Sala en otras


oportunidades, el procedimiento de cobro coactivo, no tiene por finalidad
la declaración o constitución de obligaciones o de derechos sino la de
hacer efectivas, mediante su ejecución, las obligaciones claras, expresas
y exigibles, previamente definidas a favor de la Nación y a cargo de los
contribuyentes. Entonces la ejecución parte y requiere de la existencia
Que debe entenderse por ejecutoria del Acto Administrativo 29

de un acto previo, denominado título ejecutivo, el cual una vez exigible


permite el inició del proceso de cobro, el cual se inicia con el mandamiento
de pago.

De este modo, no comparte la Sala el proceder de la Administración ni la


decisión del Tribunal cuando con fundamento en el parágrafo del artículo
6o del Decreto 2314 de 1.989 y en el articulo 71 de la Ley 68 de 1.992,
consideraron como suficiente el aviso de notificación a la contribuyente
del traslado de cargos por la improcedencia de la devolución respaldada
por la garantía de la actora, para entender debidamente constituido el
titulo, así como la consideración de que no era obligatoria la notificación
a la Aseguradora del acto administrativo que declaró improcedente
la devolución, pues como se expuso anteriormente, para integrar
correctamente el título ejecutivo frente a la actora, la Administración debía
notificarle la Resolución Sanción No.098 del 24 de septiembre de 1.992 ,lo
que no ocurrió en el presente caso.

Por ende, y como no se integró en debida forma el título ejecutivo que


sirviera de base para la expedición del mandamiento de pago No. 00016
del 29 de enero de 1.993, librado en contra de la Compañía Aseguradora
de Fianzas SA. Confianza se impone revocar la sentencia apelada
para dar prosperidad a la excepción de carencia de título ejecutivo y se
ordenará cesar todo proceso ejecutivo contra la actora por las obligaciones
garantizadas en la Póliza de Cumplimiento No. No.3217385 de marzo 12
de 1.991, previa declaratoria de nulidad de los actos acusados, por lo cual
se releva del estudio de las restantes excepciones.” 32

32 Consejo de Estado, sentencia del 26 de mayo de 2000, Exp 9846, C. P. Delio Gómez Leiva
El Deudor 31

CAPÍTULO

EL DEUDOR
8
En toda obligación sea esta tributaria o no, se encuentran necesariamente
en presencia dos personas. Una que es ligada, es el sujeto pasivo de la
relación jurídica, el deudor, is qui debet y la otra, en cuyo provecho el lazo
existe, es el sujeto activo, el acreedor, creditor.

El sujeto (activo), titular del derecho, a cuyo favor existe el vínculo y que
tiene la facultad de exigir la prestación, en nuestro caso el estado bien a
través de entes tributarios y no tributarios. La parte activa de la relación
suele llamarse ‘crédito’ y el beneficiario ‘acreedor’. El paciente (sujeto
pasivo, obligation sobjekt del derecho alemán), que está en la necesidad de
dar, hacer o no hacer algo para el acreedor. La parte pasiva de la relación
se denomina ‘deuda’, y al gravado con ella, “deudor”.

En materia tributaria son deudores ante la administración tributaria los


contribuyentes o responsables de los impuestos que administra el ente
tributario que no hayan cumplido de forma oportuna con la obligación de
pagar el impuesto o la obligación a su cargo, esta interpretación se hace
extensiva a cualquier tipo de entidad pública que tenga obligaciones que
por mandato de ley deban cobrar.

En materia tributaria, al tenderse reglas especiales pueden llegar a


convertirse de manera indirecta en deudores del fisco correspondiente,
aquellas personas a quienes se les atribuya tal condición en virtud de
determinarles una responsabilidad solidaria o subsidiaria así como los
garantes de facilidades de pago otorgadas al contribuyente moroso.

8.1. LA REPRESENTACION DEL DEUDOR

La representación es aquella figura en la cual una persona, denominada


representante, actúa por cuenta y en nombre de otra llamada representado,
en este caso, los efectos del acto celebrado se producen en cabeza
32 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

del Representado, como si hubiera manifestado su consentimiento


personalmente.

La capacidad se ha definido como la aptitud de una persona para ser titular


de derechos y para ejercerlos, se es capaz por el hecho de ser persona.

Por excepción hay personas incapaces absolutamente, como los dementes,


los impúberes y los sordomudos que no pueden darse a entender por
escrito, Hay otras que lo son relativamente como los menores adultos o
púberes (hombres mayores de l4, mujeres de l2 y menores de l8) y los
disipadores en interdicción

Igualmente toda persona natural o jurídica puede ser parte en un proceso,


las primeras cuando son incapaces así como las personas jurídicas,
deberán comparecer al proceso con la asistencia de sus Representantes.
Dentro del procedimiento Administrativo Coactivo, la persona debe actuar
con la debida representación cuando no se actúa personalmente o se trate
de una persona jurídica.

Cuando una persona natural y una jurídica quieran actuar a través de


apoderado, éste debe ser abogado titulado

Los artículos 571, 572 y 573 del Estatuto Tributario Nacional, nos señala
reglas aplicables en materia tributaria tanto de los obligados directos,
los representantes que deben cumplir deberes formales, así como de la
responsabilidad subsidiaria, veamos:

“Artículo 571. Obligados a cumplir los deberes formales. Los


contribuyentes o responsables directos del pago del tributo deberán
cumplir los deberes formales señalados en la ley o en el reglamento,
personalmente o por medio de sus representantes, y a falta de éstos, por
el administrador del respectivo patrimonio.

Artículo 572. Representantes que deben cumplir deberes formales.


Deben cumplir los deberes formales de sus representados, sin perjuicio
de lo dispuesto en otras normas:

a) Los padres por sus hijos menores, en los casos en que el impuesto
debe liquidarse directamente a los menores;

b) Los tutores y curadores por los incapaces a quienes representan;

c) Los gerentes, administradores y en general los representantes legales,


por las personas jurídicas y sociedades de hecho. Esta responsabilidad
El Deudor 33

puede ser delegada en funcionarios de la empresa designados para el


efecto, en cuyo caso se deberá informar de tal hecho a la administración
de impuestos y aduanas correspondiente;

d) Los albaceas con administración de bienes, por las sucesiones; a falta


de albaceas, los herederos con administración de bienes, y a falta de
unos y otros, el curador de la herencia yacente;

e) Los administradores privados o judiciales, por las comunidades que


administran; a falta de aquellos, los comuneros que hayan tomado
parte en la administración de bienes comunes;

f) Los donatarios o asignatarios por las respectivas donaciones o


asignaciones modales;

g) Los liquidadores por las sociedades en liquidación y los síndicos por las
personas declaradas en quiebra o en concurso de acreedores, y

h) Los mandatarios o apoderados generales, los apoderados especiales


para fines del impuesto y los agentes exclusivos de negocios en
Colombia de residentes en el exterior, respecto de sus representados,
en los casos en que sean apoderados de éstos para presentar sus
declaraciones de renta o de ventas y cumplir los demás deberes
tributarios.

Artículo 573. Responsabilidad subsidiaria de los representantes por


incumplimiento de deberes formales. Los obligados al cumplimiento
de deberes formales de terceros responden subsidiariamente cuando
omitan cumplir tales deberes, por las consecuencias que se deriven de
su omisión.

Así las cosas los hijos menor obra a través de sus padres. Los pupilos por
sus tutores o curadores.

Las sucesiones ilíquidas por los albaceas con administración de bienes o


los herederos administradores o el curador de la herencia yacente.

Las sociedades jurídicas o de hecho, por sus representantes legales,


gerentes o administradores. La representación legal de las personas
jurídicas será ejercida por el Presidente, el Gerente o cualquiera de sus
suplentes, en su orden de acuerdo con lo establecido en los Artículos 372,
440, 44l y 442 del Código de Comercio, o por la persona señalada en los
estatutos de la sociedad, para la actuación de un suplente no se requiere
comprobar la ausencia temporal o definitiva del principal, sólo será necesario
34 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

la certificación de la Cámara de Comercio en la cual se debe verificar la


capacidad para actuar y la capacidad limitada para comprometerse sobre
su inscripción en el registro mercantil.(Artículo 556 E.T).

8.2. EL DERECHO DE POSTULACIÓN

En materia tributaria, al tratarse el proceso de cobro de un proceso netamente


administrativo, puede el deudor representarse así mismo, no obstante si
precisa de tener apoderado y en respeto del derecho de postulación, este
apoderado debe ser abogado.

El derecho de postulación se encuentra señalado en el artículo 63 del


Código de Procedimiento Civil, el cual señala que “las personas que hayan
de comparecer al proceso deberán hacerlo por conducto de abogado
inscrito, excepto en los casos en que la ley permite su intervención directa.”
El apoderado, que bajo el enunciado debe ser abogado, de acuerdo a la
normatividad civil es un mandatario judicial y encuentra el ejercicio de su
profesión en el Decreto Nacional 196 de 1971.

El artículo 65 del Código de Procedimiento Civil, señala los tipos de poderes


que existen, sean estos generales y especiales.

Generales: Los poderes generales para toda clase de procesos solo podrán
conferirse por escritura pública.

Especiales: Sólo pueden ser conferidos, cuando sean para varios procesos,
por escritura pública, y los asuntos deben determinarse claramente. Si es
para un solo proceso, se conferirá por escritura pública o por memorial
dirigido al funcionario ejecutor de conocimiento.

Poderes otorgados en el exterior: La extensión del poder y de la sustitución


deberá hacerse ante cónsul colombiano o el funcionario que la ley autorice
para tal fin en el exterior, en este último caso se cumplirán las reglas del
artículo 259 del CPC. “Documentos otorgados en el extranjero. Los
documentos públicos otorgados en país extranjero por funcionario de éste
o con su intervención, deberán presentarse debidamente autenticados por
el cónsul o agente diplomático de la República, y en su defecto por el de
una nación amiga, lo cual hace presumir que se otorgaron conforme a la ley
del respectivo país. La firma del cónsul o agente diplomático se abonará por
el Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, y si se trata de agentes
consulares de un país amigo, se autenticará previamente por el funcionario
competente del mismo y los de éste por el cónsul colombiano.
El Deudor 35

8.3. DEUDORES SOLIDARIOS

Debemos tener presente que puede darse varias situaciones especiales


respecto del deudor, en primera medida sobre el tema de la constitución de
los títulos para efectuar la vinculación, al respecto la doctrina ha manifestado:

DOCTRINA. “El Parágrafo 2 del artículo 51 de la Ley 633 de 2000, que


modificó el artículo 794 del Estatuto Tributario, dispone que en todos
los casos los socios, copartícipes, asociados, cooperados, comuneros
y consorciados responderán solidariamente por los impuestos,
actualizaciones e intereses de la persona jurídica o ente colectivo sin
personería jurídica de la cual sean miembros, socios, copartícipes,
asociados, cooperados, comuneros y consorciados, a prorrata de sus
aportes en las mismas y del tiempo durante el cual los hubieren poseído
en el respectivo período.

Por lo anterior los socios, copartícipes, asociados, cooperados, comuneros


y consorciados, se convierten por ministerio de la ley en una especie de
sujetos pasivos respecto de una porción de la obligación del ente jurídico
del cual hacen parte y proporcionalmente al tiempo de posesión del aporte
durante el respectivo período gravable. Antes de la expedición de la Ley
633 de 2000, se excluían de la solidaridad las sanciones, los intereses y la
actualización por inflación. Actualmente, solo se excluyen las sanciones al
modificar esta ley el artículo 794 del Estatuto Tributario, además de incluir
como deudores solidarios a los miembros de los consorcios.

Han surgido diversas interpretaciones con respecto a la vinculación de los


deudores solidarios frente a la administración tributaria y sobre la forma de
llevarla a cabo. Parecía, como lo manifiesta el consultante que el artículo
83 de la Ley 6 de 1992, incorporado en el artículo 828-1 del Estatuto
Tributario solucionaba este problema, al disponer que la vinculación del
deudor solidario se hará mediante la notificación del mandamiento de
pago en la forma indicada en el artículo 826 Ibídem, el cual deberá librarse
determinando individualmente el monto de la obligación del respectivo
deudor. Por esta razón, esta Oficina, en Concepto 036980 de Mayo 26
de 1998, sostuvo que a partir de la Ley 6 de 1992 la vinculación de los
deudores solidarios se hace independientemente mediante la notificación
del mandamiento de pago.

Sin embargo se hace necesario, a instancias de la consulta y de reiteradas


sentencias del Consejo de Estado, precisar nuevamente este aspecto.

De acuerdo con los artículos 497 y 561 del Código de Procedimiento


Civil, el mandamiento de pago al deudor, solo puede expedirse sobre la
existencia de un título ejecutivo.
36 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Por su parte, el artículo 68 del Código Contencioso Administrativo, al


enumerar los documentos que constituyen título ejecutivo, enfatiza que
prestan mérito ejecutivo por jurisdicción coactiva, siempre que en ellos
conste una obligación clara, expresa y actualmente exigible.

A su vez, el artículo 828 del Estatuto Tributario, establece:

“Prestan mérito ejecutivo:

1 Las liquidaciones privadas y sus correcciones, contenidas en las


declaraciones tributarias presentadas, desde el vencimiento de la fecha
para su cancelación.

2. Las liquidaciones oficiales ejecutoriadas.

3. Los demás actos de la administración de impuestos debidamente


ejecutoriados, en los cuales se fijen sumas líquidas de dinero a favor
del fisco nacional.

4. Las garantías y cauciones prestadas a favor de la Nación para afianzar


el pago de las obligaciones tributarias, a partir de la ejecutoria del acto
de la administración que declare el incumplimiento o exigibilidad de las
obligaciones garantizadas.

5. Las sentencias y demás decisiones jurisdiccionales ejecutoriadas,


que decidan sobre las demandas presentadas en relación con los
impuestos, anticipos, retenciones, sanciones e intereses que administra
la Dirección General de Impuestos Nacionales.”

Para nuestro caso, interesan los tres primeros documentos constitutivos


de título ejecutivo. No puede ser la liquidación privada del ente jurídico con
respecto a los asociados, pues con ella se establece una relación entre el
sujeto pasivo directo y la Administración de Impuestos.

De la misma manera, una liquidación oficial practicada a cargo de una


sociedad o ente colectivo, siendo un título ejecutivo se predica también
del sujeto pasivo primario, directo de los impuestos mas no de los
socios, copartícipes, asociados, cooperados, comuneros o consorciados,
precisamente porque respecto de ellos no existe una individualización
teniendo en cuenta la proporción monetaria y temporal de que trata el
artículo 794 del Estatuto Tributario y tampoco se cumple la exigencia del
artículo 68 del Código Contencioso Administrativo en el sentido de que
debe existir una obligación clara, expresa y actualmente exigible.

En estas condiciones y siendo que el cobro coactivo se inicia con el


mandamiento de pago, considera este Despacho que para salvaguardar
El Deudor 37

el principio del debido proceso debe darse la oportunidad a los miembros


de los entes jurídicos o colectivos con o sin personería jurídica, que
por medio de un título ejecutivo individualizado, antes del inicio del
proceso de cobro, puedan conocer su obligación tributaria, por efectos
de su solidaridad con independencia del título ejecutivo del ente al que
pertenecen. En consecuencia, debe apelarse al numeral 3 del artículo 824
del ordenamiento tributario, para que por un acto administrativo se obre en
consecuencia, en cuanto resulta desigual la vinculación directa al proceso
por medio del mandamiento ejecutivo.

Por lo expuesto, este Despacho hace suyas las reiteradas apreciaciones


sobre el caso hechas por la Jurisdicción Contenciosa Administrativa al
resolver demandas de nulidad y restablecimiento del Derecho sobre la
materia, que se sintetizan en la Sentencia No. 11150 de Abril 20 de 2001,
una de las últimas proferida por la Sección Cuarta del Consejo de Estado,
de la cual transcribimos los apartes pertinentes:

“...como lo ha dicho la sala en reiteradas oportunidades, no es válida la


vinculación hecha directamente en el mandamiento de pago, sino que ésta
debe realizarse mediante un acto administrativo previo que deberá ser
notificado en debida forma a los socios vinculados, donde se establezca
su calidad de deudor solidario, la proporción de su participación, los
períodos gravables a que corresponden las deudas objeto del cobro y la
cuantía de las mismas.”

“El criterio expuesto, que se reitera en esta oportunidad, sigue siendo


válido, después de la entrada en vigencia de la Ley 6ª de 1992, artículo
83, mediante el cual se incorporó al Estatuto Tributario el artículo 828-
1, según el cual “La vinculación del deudor solidario se hará mediante
la notificación del mandamiento de pago”, porque como lo ha expuesto
la Sala en anteriores oportunidades (sentencias de febrero 14 de 1997,
Exp. 7991; agosto 4 de 2000, Exp. 101599; y agosto 25 de 2000 Exp.
100446, entre otras), dicha actuación debe entenderse restringida al
proceso administrativo de cobro coactivo, no a la actuación precedente de
formación del título ejecutivo, que necesariamente debe cumplirse, porque
el proceso de cobro, que se inicia con la notificación del mandamiento
de pago no tiene como finalidad la declaración o constitución de
obligaciones, sino hacer efectivas las obligaciones claras, expresas y
exigibles, previamente definidas a favor de la Nación y a cargo de los
contribuyentes, por lo que para la ejecución se requiere la existencia
previa de un título, tal como se colige de lo dispuesto en el artículo 68 del
Código Contencioso Administrativo...”

Por último, el acto administrativo que constituye el título ejecutivo, debe


proferirse por el respectivo Administrador de Impuestos, previamente
al mandamiento de pago que se pretende frente al ente societario
notificarse de acuerdo con el artículo 566 del Estatuto Tributario dentro
del término de cinco (5) años, término de exigibilidad del título ejecutivo
contra el contribuyente directo, y como en todo acto administrativo debe
38 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

garantizarse el derecho de defensa mediante el otorgamiento del recurso


previsto en el artículo 720 del Estatuto Tributario. La decisión del recurso
de reconsideración deberá efectuarse dentro del término previsto en el
artículo 732 Ibidem so pena de la aplicación del silencio administrativo
positivo, pero en todo caso deberá tenerse en cuenta el término mencionado
de los cinco años, para poder ejercer la acción de cobro correspondiente,
dentro de la oportunidad legal.” 33

El vincular en los procesos de cobro a los deudores solidarios es un


instrumento necesario que debe aplicar la administración tributaria y no
tributaria para defender las obligaciones fiscales bajo su administración, y
permitir a los administrados conocer los procesos en su contra y de ser
necesarios haciendo uso del derecho de defensa, controvertir los actos en
los cuales se imponen los cobros, así lo han entendido tanto el Consejo de
Estado como la Corte Constitucional, cuando sobre el tema han manifestado:

JURISPRUDENCIA. A juicio de la Administración, no se requiere constituir


título ejecutivo previo a la vinculación del socio como deudor solidario al
proceso de cobro coactivo, como quiera que tal vinculación se efectúa
simplemente con el mandamiento de pago, como a su juicio lo indica el
artículo 828-1 del Estatuto Tributario.

(…)

En primer lugar advierte la Sala, que los procesos administrativos de


cobro coactivo tal como se desprende de los artículos 823 y siguientes
del Estatuto Tributario, por regla general, deben tener como origen y
fundamento un título ejecutivo en el cual conste una obligación, clara,
expresa y actualmente exigible a favor de la Nación, que permita su cobro
por la vía coactiva, dando sustento al mandamiento de pago, pues de no
existir tal documento, no puede jurídicamente predicarse que existe una
obligación a cargo de un contribuyente y a favor de la Nación, que pueda
ser ejecutada.

Tratándose de la vinculación como deudor solidario de un socio, en


relación con los impuestos de la sociedad, debe seguirse la anterior regla
y constituirse previamente el título ejecutivo, que .permita y fundamente su
posterior vinculación al proceso administrativo de cobro coactivo.

Como quiera que respecto del socio individualmente considerado, no


constituye título ejecutivo la liquidación privada o la liquidación oficial de
los impuestos que se efectúen, en cumplimiento de las obligaciones de
la sociedad, dado que dichas liquidaciones no tienen poder vinculante
ni obligatorio frente al socio, la Administración debe constituir el título

33 DIAN – Concepto 032601 del 4 de junio de 2002.


El Deudor 39

ejecutivo en los términos del numeral 3 del artículo 828 del Estatuto
Tributario, que establece que prestan mérito ejecutivo, los actos de la
Administración de Impuestos debidamente ejecutoriados, en los cuales
se fijen sumas líquidas de dinero a favor del fisco nacional, lo anterior en
atención que sólo prestan mérito ejecutivo los documentos señalados en
la referida disposición, cuyo carácter es taxativo.

De manera que, una vez constituido el título ejecutivo, procede la aplicación


del artículo 828-1 del Estatuto Tributario, que determina la forma como debe
efectuarse la vinculación del deudor solidario, mediante la notificación del
mandamiento pago, en el cual como es apenas lógico; debe determinarse
individualmente el monto de la obligación sin que ello pueda interpretarse
como que tal determinación del monto de la obligación, puede sustituir el
título ejecutivo, que es indispensable para adelantar un proceso de esta
naturaleza.

La posición de la Administración confunde el mandamiento de pago con


el título ejecutivo, para concluir que es dable en un solo acto contener el
acto administrativo contentivo de la obligación a cargo del contribuyente
y a favor del fisco, y la actuación administrativa que ordena librar el cobro
de tal obligación, posición que no pueda ser avalada por no gozar de
respaldo legal.

En este sentido se ha pronunciado la Sala en varias oportunidades como el


proceso 8131 de febrero 2 de 1991, con ponencia del Magistrado Dr. Julio
Correa Restrepo; el proceso 9989 del 6 de junio de 2000 con ponencia
del mismo Magistrado; el proceso 8041 del 14 de marzo de 1997 con
ponencia del Magistrado Germán Ayala Mantilla, entre otros. 34

JURISPRUDENCIA. “Teniendo en cuenta lo anterior, y como ya ha dicho la


Sala en otras oportunidades, el procedimiento de cobro coactivo, no tiene
por finalidad la declaración o constitución de obligaciones o de derechos
sino la de hacer efectivas, mediante su ejecución, las obligaciones claras,
expresas y exigibles, previamente definidas a favor de la Nación y a
cargo de los contribuyentes. Entonces la ejecución parte y requiere de
la existencia de un acto previo, denominado título ejecutivo, el cual una
vez exigible permite el inicio del proceso de cobro, el cual se inicia con el
mandamiento de pago.” 35

JURISPRUDENCIA. “Ha dicho la Sala en reiteradas oportunidades,


que no es válida la vinculación de los deudores solidarios directamente
en el mandamiento de pago, pues ésta debe hacerse mediante un acto
administrativo previo notificado en debida forma a los deudores solidarios,
donde se establezca tal calidad, la proporción de su participación, los
períodos gravables a que corresponden las deudas objeto del cobro y la

34 Consejo de Estado, Sentencia del 22 de junio de 2001, Exp. 11994, C.P. Dr. Germán Ayala Mantilla.
35 Consejo de Estado, Sentencia del 26 de mayo de 2.000, Exp. 9846, C.P. Delio Gómez Leiva.
40 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

cuantía de las mismas. (Sentencias de febrero 14 de 1997, Exp. 7991;


agosto 4 de 2000, Exp. 10159; y agosto 25 de 2000 Exp.10446, entre
otras).

La notificación del mandamiento de pago a los deudores solidarios, es una


actuación que se entiende restringida al proceso administrativo de cobro
coactivo, no a la actuación precedente de formación del título ejecutivo,
que necesariamente debe cumplirse, porque el proceso de cobro, que se
inicia con la notificación del mandamiento de pago no tiene como finalidad
la declaración o constitución de obligaciones, sino hacer efectivas las
obligaciones claras, expresas y exigibles, previamente definidas a favor de
la Nación y a cargo de los contribuyentes, por lo que para la ejecución se
requiere la existencia previa de un título, tal como se colige de lo dispuesto
en el artículo 68 del Código Contencioso Administrativo, según el cual,
“Prestarán mérito ejecutivo por jurisdicción coactiva, siempre que en ellos
conste una obligación clara expresa y actualmente exigible,” , entre otros,
“Todo acto administrativo ejecutoriado que imponga a favor de la Nación,
de una entidad territorial, o de un establecimiento público de cualquier
orden, la obligación de pagar una suma de dinero, en los casos previstos
en la ley”.

Como en repetidas oportunidades lo ha precisado la Corporación, no es


potestativo de la autoridad administrativa proceder o no a la notificación,
pues el conocimiento de los actos que interesen a un particular es cuestión
no solo de seguridad jurídica, sino del debido proceso. Así, pretender que
el acto administrativo no notificado al deudor solidario, en las condiciones
previstas en la ley, le sea oponible, es afirmar el principio de la arbitrariedad,
que es justamente lo que previó el legislador en el Código Contencioso
Administrativo, en lo relacionado con el deber de información y notificación
de los actos administrativos.
(…)

Así las cosas, es válido inferir la inexistencia de título ejecutivo y su falta


de ejecutoria, lo cual no permitía a la Administración exigir válidamente las
obligaciones tributarias determinadas a cargo del causante, pues si bien
es cierto que según el Artículo 1434 del Código Civil “los títulos ejecutivos
contra el difunto lo serán igualmente contra los herederos”, también lo
es, que conforme a la misma norma sólo es posible llevar adelante la
ejecución pasados ocho días de la “notificación judicial de sus títulos”.
Es decir que si bien los acreedores pueden obrar contra los herederos de
su obligado, de la misma manera que contra el causante, debe cumplirse
previamente el requisito de la notificación al heredero de la existencia del
crédito, ya que si bien éste está obligado a responder por las deudas del
causante, también es titular del ejercicio de los derechos del de cujus. 36

36 Consejo de Estado, Sentencia del 27 de marzo de 2003, Exp. 13393, C.P. Ligia López Díaz.
El Deudor 41

JURISPRUDENCIA. Sin perjuicio del fundamento constitucional que pueda


tener la responsabilidad solidaria o subsidiaria en materia tributaria, asunto
que no es objeto de debate dentro del presente proceso, los deudores
solidarios o subsidiaros llamados por la ley a responder de obligaciones
o deberes tributarios ajenos deben tener la posibilidad de ejercer las
garantías derivadas del derecho al debido proceso, no solamente en
el momento de ejecución coactiva de la obligación tributaria, sino, y
especialmente, en el momento de su determinación. En efecto, si bien la
obligación tributaria surge ex lege, y la solidaridad usualmente se deriva
también de la misma ley, la obligación tributaria debe ser determinada
respeto de cada contribuyente a través de un proceso en el cual, como se
dijo, se evidencia la ocurrencia del hecho gravado, es decir el supuesto
de hecho generador de la obligación tributaria, se establece la dimensión
económica del mismo o base gravable y se aplica la tarifa correspondiente.
En este proceso, por el interés jurídico que personalmente le asiste, tiene
derecho de intervenir en todas sus etapas el deudor solidario.

Además, la responsabilidad solidaria en materia tributaria exige la


determinación e individualización de las personas solidariamente obligadas
en cada uno de los supuestos legales en que dicha solidaridad resulta
exigible, así como las circunstancias de la solidaridad que les incumbe
según lo prescrito por los artículos 793 y siguientes del E.T. Es decir, dentro
del proceso de determinación de la obligación tributaria que culmina con la
liquidación de revisión, la liquidación de aforo o la resolución de sanción,
es necesario individualizar los terceros que resultan ser solidariamente
responsables y las circunstancias de su responsabilidad, en cada uno de
los supuestos de hecho a que se refieren los artículos 793 y siguientes del
E.T., pues así lo exige la naturaleza misma de esta solidaridad legal. …

(…)

Sólo de esta manera es posible que en todos los eventos anteriores,


durante la etapa del cobro coactivo, la Administración libre un mandamiento
de pago “determinando individualmente el monto de la obligación del
respectivo deudor”, como lo ordena perentoriamente el inciso primero
del artículo 828-1 del E.T. ahora bajo examen. Es decir los artículos 793
y siguientes exigen que, para que opere la responsabilidad solidaria, se
demuestren los supuestos de hecho previstos en esas disposiciones.

Si lo anterior es así, es decir si antes de que se libre el mandamiento


de pago es necesario determinar quiénes son los deudores solidarios y
las circunstancias de su responsabilidad, a la actuación administrativa
que culmina con esta determinación individual deben ser citados los
que puedan resultar señalados como responsables solidarios. A ellos
debe reconocérseles el derecho de responder requerimientos, presentar
pruebas, presentar recursos e interponer excepciones, habida cuenta de
42 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

que proceden no sólo las derivadas de la relación jurídico tributaria del


principalmente obligado con el Estado, sino las personales propias del
responsable subsidiario que puedan caber.

(…)

Si el proceso de determinación de la obligación tributaria tiene por objeto


construir un título ejecutivo en el que conste de manera expresa, clara
y exigible la responsabilidad tributaria del sujeto pasivo directamente
obligado, dado que esa responsabilidad es la misma que le puede ser
exigida al deudor solidario, éste último debe ser vinculado a tal proceso de
determinación, de manera que el mismo título ejecutivo que de él resulta
le pueda ser oponible posteriormente durante el trámite de la ejecución
coactiva.

Obviamente no es cierto que el acto administrativo de determinación de


la obligación tributaria no tenga efectos respecto del deudor solidario,
como lo consideró en aquella oportunidad esta Corporación, pues resulta
obvio que él tiene una responsabilidad que nace de la ley, que lo obliga a
satisfacer las obligaciones en tales actos establecidas. (…)37

Se establece en la jurisprudencia transcrita, que en todos los casos debe


observarse un procedimiento, mediante el cual se de a conocer a los
deudores solidarios, la existencia de las deudas pendientes y la tasación
que corresponde a cada uno, igualmente se observa que las Altas
Corporaciones a pesar de la disposición contenida en el artículo 828-1,
concluyen de forma similar que la vinculación a los deudores solidarios no
debe hacerse con el mandamiento de pago, sino con la expedición de un
acto previo a la expedición de este mandamiento de pago, respetándole en
todos los casos al contribuyente el derecho a contestar interponer recursos,
en ejercicio del derecho de defensa, lo anterior en aplicación de las normas
generales establecidas en Código Contencioso Administrativo, el cual en su
artículo 28 establece que “Cuando de la actuación administrativa iniciada
de oficio se desprenda que hay particulares que pueden resultar afectados
en forma directa, a éstos se les comunicará la existencia de la actuación y
el objeto de la misma.”

Así mismo en el Código de Procedimiento Civil, en su artículo 5138 que


regula lo concerniente al litisconsorcio necesario, “Que surge cuando la
relación de derecho sustancial sobre la cual ha de pronunciarse el juez,

37 Corte Constitucional, Sentencia C-1201 del 9 de diciembre de 2003, M.P. Marco Gerardo Monroy Cabra.
38 Artículo. 51. Litisconsortes necesarios. Cuando la cuestión litigiosa haya de resolverse de manera uniforme
para todos los litisconsortes, los recursos y en general las actuaciones de cada cual favorecerá a los demás. Sin
embargo, los actos que impliquen disposición del derecho en litigio sólo tendrán eficacia si emanan de todos.
El Deudor 43

está integrada por una pluralidad de sujetos, bien sea activos o pasivos, en
forma tal que no es susceptible de escindirse en tantas relaciones aisladas
como sujetos activos o pasivos individualmente considerados existan, sino
que se presenta como una sola única e indivisible frente al conjunto de tales
sujetos”39

Esta misma posición es reiterada por la Corte Constitucional en su sentencia


C-1201/03 (ya transcrita), cuando afirma y concluye que la vinculación
de deudores solidarios, debe hacerse siempre dentro de un proceso de
determinación, lo cual no nos genera la menor duda en cuanto a que el
ente tributario o no tributario, debe vincular a todos los deudores solidarios,
dentro de los procesos de determinación que adelante.

Sin embargo esta vinculación a los deudores solidarios dentro de los


procesos de fiscalización, debe sujetarse de forma básica a las regulaciones
señaladas en materia tributaria en donde uno de los elementos estructurantes
de los tributos (en su clasificación tripartita de impuesto, tasa o contribución:
especial y parafiscal) lo constituye el sujeto pasivo, el cual se debe expresar
en su norma creadora (art. 338 C.P.N.), y quien tiene el deber de contribuir a
los gastos e inversiones del ente público dentro de los conceptos de justicia
y equidad, cuando realizan el hecho generador del tributo correspondiente.

No obstante las obligaciones insolutas pueden ser exigidas no solo a los


responsables directos (contribuyentes) sino también a los responsables
solidarios y/o subsidiarios designados como tales, ora en el Estatuto
Tributario Nacional, Sin embargo, dicha responsabilidad tributaria debe
aplicarse estrictamente en los términos y situaciones expresamente
señalados en la ley tributaria, para lo cual las unidades de fiscalización y
liquidación del ente tributario correspondiente, deberán vincular directamente
a los deudores solidarios y subsidiarios, en respeto del artículo 28 del
Código Contencioso Administrativo40, a través de una comunicación41, en

39 HENAO CARRANQUILLA, Oscar Eduardo, “Código de Procedimiento Civil, compilado, concordado y anotado,” Ed.
Leyer, Bogotá D.C., 2002, Págs 33 y 34.
40 Artículo 28. Deber de comunicar. Cuando de la actuación administrativa iniciada de oficio se desprenda que hay
particulares que pueden resultar afectados en forma directa, a éstos se les comunicará la existencia de la actuación
y el objeto de la misma.
En estas actuaciones se aplicará, en lo pertinente, lo dispuesto en los artículos 14, 34 y 35.
41 La exigencia o deber de la Administración Tributaria de comunicar los actos que profiera a los deudores solidarios y
subsidiarios previamente al inicio de un proceso de cobro coactivo, con el fin de brindarles la oportunidad de ejercer
sus derechos de defensa, contradicción y, en general, el debido proceso, no solo deriva de la jurisprudencia tratada
en el presente pronunciamiento jurídico si no muy particularmente del contenido del artículo 28 del C.C.A, en cuanto
ordena de manera categórica que “… Cuando de la actuación administrativa iniciada de oficio se desprenda que
hay particulares que pueden resultar afectados en forma directa, a éstos se les comunicará la existencia de la
actuación y el objeto de la misma. En estas actuaciones se aplicará, en lo pertinente, lo dispuesto en los artículos
14, 34 y 35”. La comunicación, en los términos de la sentencia C-1201 de 2003 de la Corte Constitucional, es el
medio por el cual se da a conocer el inicio de una actuación administrativa tributaria a los terceros interesados y los
respectivos actos administrativos conforme lo dispone el artículo 28 del Código citado.
44 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

la cual se les informe que la Administración Tributaria ha iniciado contra


determinado contribuyente, responsable y agente retenedor un proceso
sancionatorio o de determinación del tributo, para lo cual ha expedido
los correspondientes actos preparatorios o de trámite, tales como los
emplazamientos para declarar, requerimiento especial y pliego de cargo así
como los respectivos actos definitivos: liquidaciones oficiales y resoluciones
sanción, comunicación que tiene por finalidad preservar el debido proceso
y en particular su eje central: el derecho fundamental de defensa, el cual
pueden ejercitar como litisconsortes facultativos de estos últimos, vale decir,
de los responsables directos de la obligación tributaria; significa lo anterior
que los deudores subsidiarios o subsidiarios no pueden ejercer la facultad
o poder de objeción y discusión de los actos administrativos tributarios en
forma independiente de los responsables directos sino como coadyuvante
de ellos.

Sin embargo, en cuanto tiene que ver con la vinculación de deudores


solidarios cuando la deuda proviene de una declaración tributaria (liquidación
Privada), tenemos que:

El artículo 828-1 del Estatuto Tributario Nacional, señala:

“Artículo 828-1. Vinculación de Deudores Solidarios

La vinculación del deudor solidario se hará mediante la notificación del


mandamiento de pago. Este deberá librarse determinando individualmente
el monto de la obligación del respectivo deudor y se notificará en la forma
indicada en el artículo 826 del Estatuto Tributario. (Ley 6/92 art. 83)

Los títulos ejecutivos contra el deudor principal lo serán contra los


deudores solidarios y subsidiarios, sin que se requiera la constitución de
títulos individuales adicionales. (Inciso adicionado por el artículo 9º de
la Ley 788 de 2002).

Determina la norma que los títulos ejecutivos contra el deudor principal,


lo serán contra los deudores solidarios sin que se requiera la constitución
de títulos individuales adicionales, es decir que la presentación de una
declaración por uno de los obligados a declarar, de la misma forma que
libera del cumplimiento de las obligaciones tributarias a los solidarios, hace
que la misma, sirva de título ejecutivo no solamente contra quien firma el
título, sino que incluye a la totalidad de deudores solidarios sin necesidad
de generar nuevos títulos contra estos.

De otro lado, cuando el título ejecutivo lo constituye una declaración


privada presentada por el sujeto pasivo, para hacer efectiva la solidaridad
El Deudor 45

y subsidiariedad debe el área de de Cobro que corresponda, comunicar


al interesado, previamente al mandamiento de pago, de que se propone
iniciar un proceso administrativo de cobro coactivo a los responsables
directos dándoles a conocer la existencia de las declaraciones tributarias
que servirán de títulos ejecutivos al proceso, su fecha de presentación, los
períodos gravables, el monto del impuesto determinado en ellas, su calidad
de deudor, la tasación del monto de la deuda a su cargo acorde con la
proporción de su participación, la cuantía de la obligación, etc.42.

Veamos algo de jurisprudencia de la DIAN sobre este punto.

Concepto DIAN 040423 de Julio 14 de 2003. La responsabilidad del


pago de una obligación fiscal según el artículo 792 del Estatuto Tributario,
es de los sujetos respecto de quienes se realiza el hecho generador de la
obligación tributaria sustancial. Esta responsabilidad abarca igualmente
las cargas que se deriven del incumplimiento en el pago. Por la cancelación
de las sanciones impuestas al incumplimiento de obligaciones fiscales
sustanciales o formales, responde el sancionado, sea o no el sujeto
respecto de quien se realiza el hecho generador de la obligación tributaria
sustancial.

Las figuras que extienden a otros sujetos las obligaciones propias de uno
de ellos, son conocidas como solidaridad o subsidiariedad. Estas surgen
de la voluntad de las partes, de las disposiciones legales o de la decisión
judicial, pero siempre debe ser expresa. Al respecto, es de advertirse
que en las obligaciones de orden fiscal solo en virtud de la Ley, puede
haber cabida a la solidaridad o a la subsidiariedad, por la imposibilidad del
obligado principal, de disponer voluntariamente de estas cargas.

La responsabilidad solidaria o subsidiaria en el pago de las obligaciones


tributarias, es entonces aspecto sustantivo del ordenamiento fiscal y como
tal, abarca únicamente los hechos, circunstancias y sujetos sobre los
cuales la Ley la determina; su aplicación cubrirá por tanto, solamente los
eventos que se sucedan durante la vigencia de la norma que la contiene.

Es de precisar que la responsabilidad solidaria hace referencia a la


obligación conjunta sobre una misma prestación, aunque en materia fiscal
esta se encuentra limitada, de modo que cada uno de los responsables,

42 La Sala encuentra que asiste razón a la accionante al aducir la excepción de “falta de título ejecutivo”, como quiera
que en su calidad de socia (deudora solidaria) de INDUSTRIA AUTOMOTRIZ INAUTO LTDA no conocía … las
liquidaciones privadas presentadas por dicha sociedad, de ahí que ante un mandamiento de pago en su contra
reclama ante la Administración que se ponga en su conocimiento, para constatar no solamente su existencia, sino
el origen de la obligación y la correspondencia con los valores cobrados. (…) Correspondía a la Administración
dar a conocer a la actora en su calidad de socia, en el caso concreto cuáles eran los actos administrativos y/o
declaraciones privadas del ente … que conformaban el título que fundamentó el mandamiento de pago y en esa
medida se pudiera hacer efectiva la solidaridad”. (C.E sentencia del 27-09-07, Rad. 15793. C.P Dra. María Inés
Ortiz Barbosa).
46 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

principal o solidario, puede ser reconvenido desde la exigibilidad de la


obligación sustancial y con ello, nace la posibilidad de ejercer en su contra
el cobro coactivo.

En cambio, la responsabilidad subsidiaria como su nombre lo indica,


aunque esté previamente determinada en la Ley, solo opera de manera
residual, al cumplimiento de una condición, que es la de que el deudor
principal no pague.

En el Diccionario de Derecho Usual de Guillermo Cabanellas, Quinta


Edición, Ediciones Santillana, se define la Responsabilidad Subsidiaria
como: “La escalonada, de modo tal que la insolvencia o incumplimiento de
una persona o de una clase de responsables, determina la posibilidad de
dirigirse contra otra, a fin de exigir la responsabilidad que no ha resultado
factible satisfacer en todo o en parte por los principales obligados.
“Significa lo anterior, que no puede iniciarse proceso de cobro contra el
deudor subsidiario, sino cuando esté demostrado en la actuación, que la
labor de cobro en contra del deudor principal ha sido fallida.

El artículo 9o. de la Ley 788 de 2002, dispuso que los títulos ejecutivos
contra el deudor principal, lo serán contra los deudores solidarios y
subsidiarios, sin que se requiera la construcción de títulos individuales
adicionales.

Constituye la anterior reglamentación una confirmación de las exigencias


de claridad, expresividad y exigibilidad de la obligación, como requisitos
indispensables para el cobro ejecutivo al deudor principal, responsable
directo del pago. Estando estos aspectos presentes, se establece hoy por
el legislador de manera expresa que ese es el monto base de ejecución y
se excluye cualquier posibilidad de su variación, generada por lo que fuera
la exigencia jurisprudencial de la necesidad de expedir a cada uno de los
llamados a responder por el pago de esos valores, actos oficiales de la
determinación de su proporción.

En consecuencia, serán las circunstancias señaladas como razón de la


solidaridad o subsidiariedad y los conceptos en que legalmente recaigan,
los que deben tenerse en cuenta para cuantificar el monto a cargo de cada
solidario o subsidiario, teniendo como fundamento el valor ya inamovible
de la deuda del principal, sin perjuicio de que por vía de las excepciones
procedentes dentro del respectivo proceso de cobro, se discutan además,
tanto la calidad de deudor solidario o subsidiario, como la tasación del
monto que le corresponde, según lo autoriza expresamente el parágrafo
del artículo 831 del Estatuto Tributario.

Por otra parte, se advierte que el término de prescripción para efectuar el


cobro coactivo tanto al obligado principal como a los deudores solidarios
El Deudor 47

y subsidiarios tiene el mismo inicio, aunque los fenómenos legalmente


establecidos para su interrupción o suspensión, dependerán de las
circunstancias propias de cada ejecución individualmente considerada.

Finalmente, se precisa que son aspectos diferentes el del título ejecutivo


para el solidario o subsidiario y el de la forma de su vinculación al proceso
de cobro, toda vez que el primero será la base para determinarle de
manera individualizada o específica la obligación a su cargo, en el acto
administrativo denominado mandamiento de pago, que una vez le sea
debidamente notificado, produce entre sus efectos el de la vinculación
de ese deudor al proceso, por disposición del artículo 828-1 del Estatuto
Tributario.

Coadyuda con esta teoría el salvamento de voto presentado por la Doctora


María del Pilar Abella Mancera, al cual adhieren los Doctores Luz
Clemencia Alfonso Hostios y Álvaro Leyva Zambrano, al concepto del
ICDT rendido sobre el Expediente D-4683, en demanda contra el artículo
828-1 del Estatuto Tributario (vinculación del deudor solidario), y en el cual
consideraron:

2. Si bien la responsabilidad solidaria en materia tributaria combina


algunos elementos ajenos a esta figura, como los beneficios de excusión y
de división, propios más bien de la responsabilidad conjunta o subsidiaria,
comparte la característica de la solidaridad pasiva consistente en la
pluralidad de sujetos y unidad de objeto: la prestación es una sola y uno
sólo el título, pero varios los sujetos vinculados jurídicamente.

(…)

Pero la vinculación del deudor solidario nace únicamente para exigir


el pago y no para determinar la obligación; por ello es a partir de este
momento –el de cobro- y no antes, que se le debe vincular formalmente
al proceso.

El acto de vinculación del deudor solidario puede ser una resolución


independiente (como en España) o puede también ser (como lo eligió la
ley colombiana) el mandamiento de pago: en este caso, el acto tendrá
un contenido doble o complejo, pues además de exigir el pago de una
obligación, contiene la decisión de vincular a un sujeto al proceso de cobro.
En consecuencia, es imperativo que le sea notificado personalmente al
interesado y que tenga oportunidad de debatir el cobro de la obligación
misma y también su calidad de deudor solidario y el porcentaje de
participación que sele asigna.

(…)
48 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Esta es la oportunidad para debatir, en vía gubernativa, el acto administrativo


-mandamiento de pago- que lo vincula al cobro. Posteriormente, contra la
resolución que decide las excepciones, cuenta con el recurso de reposición
en vía gubernativa y con acción de nulidad y restablecimiento del derecho
en lo contencioso administrativo, al igual que queda subrogado en la
acción de cobro para repetir contra el deudor principal.

La tesis del Consejo de Estado podía ser explicable antes de la Ley 6 de


1992, cuando existía un vacío; pero una vez adoptado por ella el inciso
primero del artículo 828-1 del Estatuto Tributario, a pesar de ser una tesis
garantista que invita a ser acogida, no la comparto porque contradice la
norma y crea un procedimiento previo y paralelo al mandamiento de pago,
que le resta la efectividad y agilidad que requieren todo proceso de cobro.

La Ley 788 de 2002 tan solo reitera, al agregar el segundo inciso, que el
título ejecutivo es uno solo como es una sola la prestación y el objeto de
toda obligación solidaria.

Podemos concluir sobre este punto

1. En los casos en que adelanten proceso de determinación, por inexactitud,


por no declarar, etc, es decir el título provenga de la administración,
deberá entidad tributaria competente comunicar al deudor solidario de
la existencia de los actos administrativos que recaen sobre la persona
contribuyente del tributo, de la cual es solidario.

2. En cuanto tiene que ver con la vinculación de deudores solidarios


generados de la presentación de una declaración tributaria (declaración
privada) deberá el ejecutor de cobro, vincular a los deudores solidarios,
mediante la notificación del mandamiento de pago a cada uno de los
deudores solidarios, no obstante con anterioridad a este acto debe
notificarse mediante comunicación al mismo de la existencia del título
privado de la cual es deudor solidario.

Debe precisarse aquí, que en este evento, el título proviene de los mismos
obligados, entendiéndose que cuando uno de estos cumple con la obligación
de declarar lo hace a nombre de la totalidad de los obligados, por lo cual
no existe entonces, (a efectos dar inicio a un proceso de cobro coactivo),
la necesidad de constituir títulos ejecutivos individuales para cada uno
de los deudores solidarios, siendo el mecanismo idóneo para efectuar la
vinculación al proceso, el realizar la notificación del mandamiento de pago
a cada uno de los deudores solidarios.

Estos, en ejercicio de los derecho de contradicción y defensa, una vez les


sea notificado el mandamiento de pago, podrán interponer las excepciones
El Deudor 49

contra el mandamiento de pago, previstas en el artículo 831 del Estatuto


Tributario Nacional, en especial las que les atañe como deudores solidarios,
consagradas en el parágrafo del mismo artículo a saber:

1. La calidad de deudor solidario.

2. La indebida tasación del monto de la deuda.

Obsérvese que la misma norma procedimental, establece como excepciones


puntuales en el caso de solidaridad aquellos ítems que precisamente
podría discutir un deudor solidario como lo serían la no calidad de deudor
solidario o la indebida tasación del monto de la deuda, porque se reitera
nuevamente, la obligación solidaria surge precisamente de una declaración
privada presentada por los mismos solidarios.

8.4. RESPONSABILIDAD POR EL PAGO DE DEUDAS

En principio, el responsable por el pago del tributo es el sujeto pasivo que


realiza el hecho generador descrito por la norma. Empero, para efectos
prácticos en cobranzas, el responsable por el pago del tributo será el
sujeto al cual se le hayan liquidado los tributos. Ahora bien, los impuestos
pueden ser autoliquidados por el propio contribuyente, facturados por la
administración tributaria, o liquidados oficialmente por la misma.

No obstante lo anterior, algunas personas diferentes del contribuyente


también pueden ser responsables solidariamente por el tributo, teniendo
como base la liquidación del mismo.

Responden solidariamente por el pago del tributo:

- Los herederos y legatarios: Por las obligaciones del causante y de la


sucesión ilíquida. Estos responderán a prorrata de sus respectivas
cuotas hereditarias o legados, sin perjuicio del beneficio de inventario.
El beneficio de inventario consiste en no hacer a los herederos, que
aceptan la herencia, responsables de las obligaciones del causante,
sino hasta la concurrencia del valor total de los bienes que efectivamente
reciban.

- Los socios, copartícipes, asociados, cooperados, comuneros y


liquidadores. Por los impuestos actualización e intereses de la persona
jurídica o sociedades de hecho, socios, copartícipes, asociados,
cooperados, comuneros y los liquidadores, a prorrata de sus aportes
50 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

o participaciones en las mismas y del tiempo durante el cual los


hubieren poseído en el respectivo período gravable. De igual manera,
los liquidadores que desconozcan la prelación de los créditos fiscales,
serán solidariamente responsables por las deudas insolutas que sean
determinadas por la Administración, sin perjuicio de lo señalado en el
Artículo 794 del E.T.N., entre los socios y accionistas y la sociedad.

Esta solidaridad no cobija a los miembros de los fondos de empleados, a


los miembros de los fondos de pensiones de jubilación e invalidez, a los
suscriptores de los fondos de inversión y de los fondos mutuos de inversión,
ni será aplicable a los accionistas de sociedades anónimas y asimiladas a
anónimas.

Los socios de sociedades disueltas: en los términos anteriores.

La sociedad absorbente o la nueva que surge de la fusión, responde por


los impuestos, anticipos, retenciones, sanciones e intereses y demás
obligaciones tributarias de las sociedades fusionadas o absorbidas.

Las sociedades subordinadas: solidariamente entre sí y con su matriz


domiciliada en el exterior que no tenga sucursal en el país, por las
obligaciones de ésta.

Los titulares del respectivo patrimonio asociados o copartícipes:


solidariamente entre sí, por las obligaciones de los entes colectivos sin
personería jurídica.

Los terceros: que se comprometan a cancelar obligaciones del deudor,


aunque con las restricciones que observaremos en el siguiente punto.

Los propietarios y los poseedores de predios: responden solidariamente por


el pago del Impuesto Predial Unificado.

Los representantes legales de las entidades del sector público: responden


solidariamente con la entidad por los impuestos no consignados
oportunamente y las correspondientes sanciones.

Los obligados al cumplimiento de deberes formales de terceros responden


subsidiariamente cuando omitan cumplir tales deberes, por consecuencias
que se deriven de su omisión, artículo 798 del E.T.N.

Casos de solidaridad en las sanciones por retención. Para el pago de las


sanciones pecuniarias correspondientes hay solidaridad entre: a) la persona
El Deudor 51

natural encargada de hacer las retenciones y la persona jurídica que tenga


legalmente el carácter de retenedor. b) la persona natural encargada de
hacer la retención y el dueño de la empresa si ésta carece de personería
jurídica, y c) entre la persona natural encargada de hacer la retención y
quienes constituyan la sociedad de hecho o formen parte de una comunidad
organizada, artículo 371 del E.T.N.

La solidaridad de los vinculados económicos por retención artículo 372


del E.T.N., existe cuando a) haya vinculación económica entre retenedor y
contribuyente. Para este efecto, existe tal vinculación entre las sociedades
de responsabilidad limitada y asimiladas y sus socios o copartícipes. En los
demás casos, cuando quien recibe el pago posea el cincuenta por ciento
(50%) o más del patrimonio neto de la empresa retenedora o cuando dicha
proporción pertenezca a personas ligadas por matrimonio o parentesco
hasta el segundo grado de consanguineidad o afinidad, y b) cuando el
contribuyente no presente a la administración el respectivo comprobante
dentro del término indicado al efecto, excepto en los casos en que el agente
de retención haya demostrado su entrega.

Mucho se ha discutido sobre el alcance de la solidaridad entre socios,


máxime cuando se constituyen entes de responsabilidad limitada, y norma
obliga a los socios, copartícipes y comuneros a responder por los
impuestos no pagados de la sociedad, sin habérseles brindado la
oportunidad de atender requerimientos o controvertir la liquidación
tributaria en la vía gubernativa, con antelación, lo que desconoce el
derecho de defensa de los deudores.

Al respecto y en análisis de constitucionalidad del artículo 794 del Estatuto


Tributario, modificado por el artículo 163 de la Ley 223 de 1995 y
adicionado por el artículo 108 de la Ley 488 de 1998, la Corte
Constitucional señaló:

“En este orden de ideas, la Corte no puede perder de vista la intención del
legislador al introducir en el ordenamiento tributario el artículo cuestionado,
que es una norma sustancial que consagró la responsabilidad solidaria
con miras a asegurar la efectividad del sistema tributario sustancial, vale
decir, el pago efectivo de los impuestos que se determinen a cargo de las
sociedades y otros entes asimilados a tales, con el propósito de contrarrestar
la evasión fiscal o tributaria, que al parecer se ha venido presentando
desde el año 1987, cuando algunos ciudadanos constituían sociedades
para evadir impuestos, amparados en el velo de la personalidad jurídica
de la sociedad y en la falta de eficacia de la administración tributaria,
52 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

para lograr el efectivo cobro de los impuestos, tasas y contribuciones. En


consecuencia, la circunstancia de que el propio legislador, dentro de su
soberanía fiscal, califique el régimen jurídico como de “responsabilidad
solidaria”, indica que el socio debe responder al lado de la sociedad y
no en el lugar de ésta, como sucede en el evento de las obligaciones in
solidum propias del régimen civil, relativas a ese tipo de obligaciones que,
por analogía, se aplican al régimen tributario.

A juicio de la Corte, el establecimiento de un régimen solidario en asuntos


fiscales, es un asunto propio del resorte del legislador, que en su condición
de depositario del poder impositivo (art. 150-12 y 338 de la C.P.), está
plenamente habilitado para determinar lo concerniente a la responsabilidad
tributaria, sin que en la Constitución existan limitaciones sobre el
señalamiento de los sujetos de la obligación tributaria o los mecanismos
para hacer efectiva la responsabilidad solidaria, pues repárese, que a la
luz de la Carta, es de competencia del legislador, tanto la determinación
del régimen jurídico de las sociedades y demás personas jurídicas como
la expedición, adición y modificación de las leyes relativas a impuestos
(art. 150 numeral 12 y 338 superiores).

Por otra parte, estima la Corte que la figura de la solidaridad es de


creación legal, y también el establecimiento de sus excepciones. Por lo
tanto, bien puede el legislador, como lo hizo en la norma cuestionada,
introducir la responsabilidad solidaria como un mecanismo tendiente
a impedir, se reitera, la práctica de la evasión tributaria, sin que ello
signifique desconocimiento de los principios y normas superiores, pues
es evidente que los socios tienen y mantienen, durante la existencia de
la sociedad, un interés económico y patrimonial en los resultados de
la gestión social que se adelante por parte de los órganos directivos,
gerentes, juntas directivas, etc.. Por otro lado, en opinión de la Sala, la
solidaridad en materia impositiva descansa también en la función social
del derecho de propiedad (art. 58 superior), y en la necesidad de financiar
permanentemente los gastos e inversiones públicas (art. 95-9 ibídem), ya
que es incuestionable que exista un interés patrimonial del socio en los
resultados de las actividades que cumpla la sociedad. Ello explica por
qué la suerte de ésta y las obligaciones que se causen por razón de la
misma no deben ser enteramente ajenas al asociado, socio, comunero,
cooperado o suscriptor, por lo que el legislador entendió que el miembro
del ente social asume los riesgos inherentes a las vicisitudes de este tipo
de negocios jurídicos contractuales.

Para la Corte no admite duda que el hecho de establecer la responsabilidad


solidaria de los socios, en la modalidad señalada, para el pago de los
tributos no desconoce principios superiores, pues ella descansa en la
circunstancia de haberse realizado el supuesto de hecho que genera los
elementos normativos que configuran el hecho gravable tipificado como
El Deudor 53

tal en la ley tributaria, por lo cual debe responderse en los términos que
señale el ordenamiento tributario, vale decir, que el legislador en virtud de
su libertad de configuración puede señalar los elementos de la obligación
tributaria estableciendo una pluralidad de sujetos que se encuentran
comprometidos en la satisfacción de una misma prestación, uno al lado
del otro, es decir, los socios al lado de la sociedad y no en el lugar de ésta.
La solidaridad como modalidad obligacional comporta un claro beneficio
para el acreedor tributario, esto es, para el Tesoro Público, y por lo tanto, el
diseño del sistema tributario así como la política subyacente en el mismo,
son atributos propios del legislador de conformidad con los artículos 150-
12 y 338 superiores.

5. Los cargos de la demanda y el artículo 794 del Estatuto Tributario


cuestionado.

Para el demandante el artículo 794 cuestionado vulnera los artículos 13,


29, 38, 95-9 y 363 superiores.

No comparte la Corte los anteriores planteamientos formulados en el


libelo, por cuanto los argumentos carecen de respaldo, en la Carta Política,
así como en la jurisprudencia relativa a la materia de la responsabilidad
solidaria de los socios por los impuestos de la sociedad.

En efecto, el primer ataque apunta a considerar que el artículo 794


cuestionado, viola el debido proceso, ya que, en opinión del demandante,
se restringe el derecho de defensa cuando al socio garante no se le notifica
el acto administrativo que impone una sanción fiscal, ni lo hacen parte
del proceso administrativo de determinación o discusión de los impuestos
a cargo de la sociedad, reservándose su vinculación para actuación
posterior, cuando formalmente se le notifica la existencia del proceso de
cobro coactivo o fiscal, sin que ya pueda defenderse adecuadamente.

A este respecto, la Sala estima que resulta ajena a la previsión legal señalar
que se vulnera el derecho de defensa, pues la autoridad administrativa
tributaria no juzga una conducta punible o disciplinaria del socio, sino
que dicha autoridad, a través de una actuación administrativa, reglada
expresamente por el Estatuto Tributario entre otros artículos, en las
disposiciones 555, 560, 565 a 570, 683, 720 a 791 del Estatuto Tributario,
y en donde se procura establecer o definir el alcance de una obligación
fiscal de los socios, dado que todas las personas deben aportar para los
gastos que demanda la administración pública (art. 95-9 superior).

De otra parte, la Corte estima importante reiterar, en aras de la armonización


del derecho y en procura de su unidad, que es preciso aceptar, como lo
hiciera la Corte Suprema de Justicia en su momento, cuando juzgó la
constitucionalidad del artículo 794 del Estatuto Tributario (sentencias de 7
54 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

de febrero y 15 de abril de 1991), en el sentido según el cual, la actuación


de la sociedad contribuyente o responsable puede llegar a beneficiar o
perjudicar a sus asociados, quienes ciertamente tienen interés patrimonial
en las resultas del correspondiente proceso tributario; por lo tanto, el hecho
de que la actuación se surta directamente con la solitaria participación de
la sociedad, obedece a la circunstancia de que la relación jurídica tributaria
sustancial se traba exclusivamente entre la Nación y dicho sujeto pasivo,
de suerte que los efectos jurídicos del acto administrativo o de la sentencia
respectiva no se extienden más allá.

Ello, sin embargo, no significa que los asociados se encuentren


desprotegidos en la defensa de sus intereses económicos, a lo largo
de las actuaciones administrativas fiscales, pues esa misión descansa,
en principio, en los representantes sociales y apoderados que dichos
asociados han elegido o autorizado elegir. Estima la Corte razonable el
argumento expuesto por el Instituto Colombiano de Derecho Tributario, en
el sentido de que es posible, de acuerdo con los señalamientos del Código
de Procedimiento Civil, aceptar la intervención adhesiva de terceros, para
la defensa de los intereses de los socios (artículo 52 de ese Código), pues
es claro que en el procedimiento administrativo que la autoridad inicie con
fundamento en el artículo 794 del Estatuto Tributario, los socios puedan
intervenir en apoyo de la sociedad comercial de la que forman parte, para
esgrimir todo tipo de argumentos relacionados con los hechos gravados,
que generan la base de los impuestos, a prorrata de sus aportes en
la misma y del tiempo durante el cual los hubieren poseído durante el
respectivo período gravado.

La Sala estima que cabría esbozar restricción al derecho de defensa o


violación al debido proceso, si la norma demandada, de alguna manera
prohibiera la coadyuvancia de los asociados que, por razón de una relación
jurídica sustancial diferente a la que es materia del proceso, pueden
perjudicarse económicamente con la decisión adversa, pero no cuando es
posible lo contrario, pues repárese que el procedimiento tributario permite
la intervención de los socios.

Obviamente, la Corte observa que no corresponde a la Administración


Tributaria la carga de la iniciativa, para que los terceros intervengan en
ese proceso de determinación o de discusión de obligaciones tributarias
sustanciales de la sociedad, pues además es asunto sujeto ordinariamente
a reserva, por lo que es del resorte exclusivo de los asociados, quienes en
ejercicio de su derecho de control e inspección, que permite el Código de
Comercio en cuanto a las sociedades mercantiles, pueden enterarse de
la existencia de ese litigio administrativo, y optar por coadyuvar o no a la
sociedad de la que forman parte, por lo que para la Corte no se encuentra
razón para afirmar que el artículo 794 es inconstitucional por violación del
artículo 29 de la Constitución Política.
El Deudor 55

En relación con la posible violación del derecho de libre asociación o


de la personalidad jurídica de la sociedad expuesto por el demandante,
esta Corporación no comparte el argumento, ya que es evidente que la
figura de la responsabilidad solidaria no entraña, en sí misma, ninguna
restricción al derecho de asociación o de celebración del contrato de
sociedad, conforme al Código de Comercio, pues la responsabilidad nace
de la condición simple y voluntaria de ser socio, independientemente de
si se tiene o no la representación o administración del ente social, o si la
misma fue encomendada a un tercero, pues se reitera, el hecho de que la
disposición cuestionada exija una actitud responsable a los socios por los
impuestos, no impide desarrollar actividades lícitas que el individuo desee
promover en compañía, pues es claro que el texto normativo acusado no
comporta una sanción impositiva, sino un deber fiscal enderezado al pago
de las acreencias tributarias, pero no impide encausar el ejercicio libre,
voluntario y espontáneo de fundar o constituir sociedades mercantiles o
empresas, dentro de los límites del bien común y del orden constitucional
y legal.

A juicio de la Corporación, la solidaridad del socio no implica una


responsabilidad ilimitada, como lo sostiene el actor, sino que claramente
el legislador reduce la responsabilidad del socio a una parte proporcional
que le corresponde a cada cual en la sociedad, esto es “a prorrata de
sus aporte en la misma y el tiempo durante el cual lo hubieren poseído
en el respectivo período gravable”, tomando en consideración su estatus
de socio en la misma, lo cual no es un elemento de exclusión del ente
social, ni mucho menos un impedimento para fundar agrupaciones con
determinados fines lícitos.

En cuanto a que el artículo 794 del Estatuto Tributario desconoce los


principios de justicia y equidad (art. 95-9), que debe soportar todo sistema
tributario, esta Corporación tampoco prohíja tal tesis expuesta por el
demandante, por cuanto la responsabilidad solidaria de los socios por los
impuestos de la sociedad no es una carga injusta, ya que la figura de
la responsabilidad tributaria, no traslada la carga tributaria a los socios,
quienes, entre otras cosas, en razón de la solidaridad pueden recobrar lo
pagado, subrogándose en los derechos de la Nación frente a la sociedad,
hasta concurrencia de su importe, es decir, que la responsabilidad solidaria
de los socios, es una regla general equitativa y justa, como quiera que la
obligación fiscal, esto es, los sujetos, el hecho gravado, la base gravable
y la tarifa, reposa, principalmente sobre el ente societario, como deudor
tributario, de manera que, en el evento jurídico en que surja la aplicación
del principio de solidaridad, el socio podría cancelar de su propio patrimonio
la obligación tributaria y posteriormente subrogarse en los derechos del
acreedor fiscal y naturalmente repetir contra los demás socios por la suma
pagada, pues recuérdese que de la clase y naturaleza de las obligaciones
solidarias está la posibilidad legal que uno de los deudores solidarios que
56 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

pague al acreedor puede subrogare en los créditos que haya satisfecho


para luego recuperar el mayor valor pagado de la prestación debida hasta
concurrencia de su deuda.

En consecuencia, la Sala debe reiterar que la responsabilidad establecida


en el artículo 794 del Estatuto Tributario se centra o se reduce al monto
de los aportes, o eventualmente al capital principal y durante un tiempo
específico, el cual se circunscribe al respectivo período gravable en donde
los aportes se hubiesen poseído, motivo por el cual no le asiste razón al
demandante en su tesis, pues el segmento normativo acusado no exige al
socio que responda fiscalmente por las deudas tributarias, más allá de sus
aportes, lo que es apenas justo, equitativo y proporcional en un sistema
tributario moderno.” 43

8.5. RENUNCIA A LA SOLIDARIDAD

Teniendo en cuenta que existe tanto en materia tributaria como administrativa,


solidaridad para el pago de obligaciones, bien porque las mismas son
impuestas por la ley (socios, cónyuges, etc) o bien porque un tercero de
forma voluntaria, libre y espontanea, acepta el pago de obligaciones de
terceros.

Sin embargo, se conocen varios casos en donde una vez creada la


solidaridad (por ley o voluntaria) el deudor solidario considera la opción de
retractarse de la obligación adquirida, situación que pone al ejecutor de
cobro en un aprieto, máxime cuando la solidaridad se da, por aceptación
voluntaria de obligaciones de terceros.

Al respecto debemos afirmar que no debe existir preocupación por parte de


quien ejecuta sobre el asunto, ya que la liberalidad de conceder el beneficio
de exclusión de la calidad de deudor recae exclusivamente en cabeza suya,
es decir, es el acreedor quien puede o no autorizar que un deudor deje de
tener esta calidad, apoyamos nuestra afirmación en el fallo proferido por el
Consejo de Estado que a continuación se transcribe:

“Según el demandante, la DIAN no surtió el procedimiento para aceptar a


un deudor solidario, sólo expidió un acuerdo de pago sin haber constituido
previamente el título ejecutivo en el que se aceptara la solidaridad
propuesta y se indicara si la garantía ofrecida era suficiente para cubrir las
deudas pendientes de pago.

Aduce también que la DIAN no resolvió sobre la renuncia a la calidad de


deudor solidario presentada por el demandante, sino que hizo referencia
43 Corte Constitucional, Sentencia C-210 del 1º de marzo de 2000, M.P. Fabio Morón Díaz.
El Deudor 57

a ella con la solicitud de revocatoria directa, que precisamente estaba


fundamentada, entre otros puntos, en el hecho de no haberse estudiado
la mencionada petición.

Pues bien, sobre el tema de la vinculación del deudor solidario a un proceso


de cobro coactivo, la Sala ha señalado en reiteradas oportunidades que
no es la notificación del mandamiento de pago la oportunidad y el medio
para hacer tal vinculación, sino que se requiere un acto administrativo
debidamente notificado en el que se establezca su calidad de deudor
solidario, la proporción de su participación, los períodos gravables a que
corresponden las deudas objeto del cobro y la cuantía de las mismas.

Conforme al artículo 793 del Estatuto Tributario, “responden solidariamente


con el contribuyente por el pago del tributo: [...] f) los terceros que se
comprometan a cancelar obligaciones del deudor”.

En el caso bajo examen, el 25 de septiembre de 1998 el demandante


manifestó a la DIAN -División de Cobranzas que se obligaba solidariamente
con el contribuyente XXXXXXXXXX para cancelar la obligación por
concepto del impuesto de renta por el año gravable de 1995 en cuantía de
$XXXXXXX (folio 70 c.a. 2)

El mismo día el demandante XXXXXXXXXXXXXXX, en su calidad de


deudor solidario solicitó a la DIAN una facilidad de pago de 36 meses para
pagar en cuotas mensuales. Como garantía ofreció un bien inmueble de
su propiedad (folio 69 c.a. 2)

La DIAN mediante Resolución 000XXXX de XX de XXXXXXX de 1998


aprobó la garantía ofrecida por el deudor solidario y concedió a XXXXXXXX
y a XXXXXXXXXXXX un plazo de 36 meses en cuotas fijas para el pago
de la deuda del impuesto de renta de 1995 a cargo del primero (folio 21
del c.ppal.).

Para constatar el vencimiento de las cuotas 1, 2 y 3 de la facilidad de pago


y su incumplimiento, la División de Cobranzas, mediante oficios XXX, XXX
y XXX (de X de marzo y las dos últimas de XX de abril de 1999), solicitó a
XXXXXXXXXXXX y XXXXXXXXXXXXXXXX allegar las pruebas del pago,
so pena de dejar sin efecto el plazo concedido y continuar con el proceso
de cobro administrativo coactivo.

Teniendo en cuenta que no hubo respuesta, la DIAN mediante la


Resolución XXXXXXXXXX de XX de abril de 1999 declaró sin vigencia
el plazo concedido en la Resolución XXXXX y ordenó hacer exigibles
los saldos insolutos objeto de la facilidad ($222.103.000) y el secuestro
y remate de los bienes ofrecidos como respaldo (folio 154 c.a. 2) El X
de julio de 1999 la DIAN profirió en contra de XXXXXXXXXXXXX el
58 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Mandamiento de Pago XXXXX por $222.103.000 en calidad de deudor


solidario de XXXXXXXXXXXXXXX, a quien en la misma fecha se le expidió
el Mandamiento de Pago XXXXXXX a cargo de XXXXXXXXXXXXX (folio
160 c.a.2).

El Mandamiento de Pago XXXXX de X de julio de 1999 fue modificado


por el Mandamiento de Pago XXXXXX de XX de julio de 2001, por cuanto
se había incluido la obligación del impuesto de renta a cargo del Señor
XXXXXXXXXXXXX del año 1996 cuando la solidaridad sólo era por el
impuesto de renta de 1995 y por otro valor.

Contra este acto administrativo el demandante propuso las excepciones


cuya decisión es la que se controvierte en este proceso.

Pues bien, de acuerdo con lo narrado, no hay sustento jurídico para


considerar la inexistencia del título ejecutivo porque la garantía que
prestó el demandante, por si sola, es un documento que presta mérito
ejecutivo, desde la ejecutoria del acto de la Administración que declare el
incumplimiento o exigibilidad de las obligaciones garantizadas.

En efecto, conforme con el artículo 828 numeral 4, prestan mérito ejecutivo:


“las garantías y cauciones prestadas a favor de la Nación para afianzar
el pago de las obligaciones tributarias a partir de la ejecutoria del acto
de la Administración que declare el incumplimiento o exigibilidad de las
obligaciones garantizadas”

Como se anotó, el deudor solidario ofreció como garantía un inmueble


de su propiedad descrito en el oficio presentado el 25 de septiembre de
1998 y esta garantía fue aprobada por la Resolución XXXXX de XX de
diciembre de 1998 (artículo 1), acto administrativo que al haber concedido
el plazo para el pago de la deuda, haber aprobado la garantía ofrecida por
el deudor solidario, estaba aceptando al demandante en tal calidad, por lo
tanto, en el caso de autos, sí existió título ejecutivo desde el momento en
que la Administración declaró sin vigencia la facilidad de pago y ordenó
hacer efectiva la garantía.

El demandante en el recurso de apelación señala que la facilidad de pago


concedida no le fue notificada y por tanto no le es vinculante, sin embargo,
aunque no fue un tema de la demanda y su alegato en el recurso de
apelación es inoportuno, la Sala observa que la Resolución XXXXXX
de XX de diciembre de 1998 fue notificada por correo certificado el XX
de diciembre de ese año, por lo tanto queda sin piso el argumento del
apelante.

De otra parte, el acto administrativo que declaró el incumplimiento de la


facilidad, Resolución 000XXX de XX de abril de 1999, quedó ejecutoriado
El Deudor 59

en esa fecha, toda vez que contra el mismo no se interpuso ningún recurso;
por el contrario, el XX de agosto de 1999 XXXXXXXXXXXX solicitó a la
DIAN que le concediera hasta el XX de diciembre de 1999 para cancelar
la totalidad de la deuda, que no secuestrara el bien embargado y que
si transcurrido el término no hubiera pagado, podían proceder contra el
inmueble.

Por todo lo anterior, a juicio de la Sala, sí existe título ejecutivo, por lo que
el cargo no está llamado a prosperar.

En relación con la calidad de deudor solidario observa la Sala que la


solidaridad surgió en virtud del compromiso adquirido por el demandante
ante la DIAN para el pago de la deuda a cargo de XXXXXXXXXXX según
lo dispuesto en el artículo 793 literal f) del Estatuto Tributario y según el
artículo 1571 del Código Civil señala que el acreedor podrá dirigirse contra
todos los deudores solidarios conjuntamente, o contra cualquiera de ellos
a su arbitrio, sin que por éste pueda oponérsele el beneficio de la división.

La renuncia a la solidaridad está prevista en el artículo 1573 del Código


Civil y dispone que el acreedor puede renunciar expresa o tácitamente
la solidaridad respecto de uno de los deudores solidarios o respecto
de todos [...] se renuncia la solidaridad respecto de todos los deudores
solidarios, cuando el acreedor consciente en la división de la deuda. Por
tanto, es una facultad en cabeza exclusiva del acreedor y no del deudor
solidario, por lo que su manifestación en tal sentido, presentada el XX de
septiembre de 2000 a la DIAN, no tenía ningún efecto.

Finalmente a juicio de la Sala no se desvirtúa la existencia del título


ejecutivo ni la calidad de deudor solidario por el hecho de que la DIAN
haya resuelto sobre la renuncia a la solidaridad en la Resolución XXXXXX
de XX de julio de 2001 que resolvió sobre la revocatoria directa interpuesta
contra el Mandamiento de Pago XXXXX de X de julio de 1999 (folio 469 de
c.a. 3) y luego cuando resolvió el recurso de reposición contra la decisión
de excepciones interpuestas contra el Mandamiento de Pago XXXXXX
de XX de julio de 2001, es decir, en la Resolución XXXXXXX de XX de
diciembre de 2001 (folio 561 del c.a 3)

Por las razones anteriores, la Sala no encuentra mérito para revocar la


decisión de primera instancia que negó las pretensiones del demandante,
por lo que forzosamente se confirmará.

En mérito de lo expuesto, el Consejo de Estado, Sala de lo Contencioso


Administrativo, Sección Cuarta, administrando justicia en nombre de la
República y por autoridad de la ley. 44

44 Consejo de Estado, Sentencia del 18 de junio de 2008, Exp. 15913, C.P. María Inés Ortiz Barbosa.
60 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

8.6. PAGO DE OBLIGACIONES POR TERCEROS EN NOMBRE DEL


DEUDOR

Respecto del pago de obligaciones, en principio es responsable el deudor


(en materia tributaria el sujeto pasivo), sin embargo es totalmente viable que
terceros se responsabilicen por las obligaciones del deudor, específicamente
encontramos en materia tributaria el literal f) del artículo 793 del Estatuto
Tributario Nacional, que señala:

“Artículo 793.- Responsabilidad solidaria. Responden con el


contribuyente por el pago del tributo (también por los intereses y las
actualizaciones por inflación, de conformidad con lo dispuesto en el
parágrafo 2º del artículo 51 de la Ley 633 de 2000):
(…)
f) Los terceros que se comprometan a cancelar obligaciones del deudor.”

Esta norma nos trae una primera relación frente a los terceros no sujetos
del impuesto y por ende no obligados al pago, y sus relaciones con el fisco,
en la cual se señala que responderán con el contribuyente por el pago de
obligaciones tributarias, aquellos terceros que se comprometan a cancelar
obligaciones del deudor.

El Departamento de Cundinamarca, a través de la Dirección de Rentas,


realizó mediante el concepto 014 del 9 de noviembre de 2009, un interesante
estudio sobre el tema de pago de obligaciones tributarias por terceros y la
no viabilidad de la subrogación de obligaciones a quien paga, veamos:

“En este caso la obligación de pago, surge como efecto de la existencia


previa de un compromiso entre el tercero y la administración tributaria
Departamental, encaminado al cumplimiento de una obligación insoluta en
cabeza del deudor, es decir del sujeto pasivo del impuesto.

Sin embargo, no en todos los casos nos encontramos frente a este tipo de
situación en donde el tercero de manera libre y espontánea se obliga con
el fisco a cumplir con el pago de obligaciones en cabeza de otro, entonces,
ante esta situación, debemos hacer un pequeño repaso de las normas
civiles que nos hablan de pago.

En primera medida tenemos el artículo 1626 del Código Civil, que define
“pago” como la prestación de lo que se debe.

Por su parte los artículos 1630 a 1632 del Código Civil determinan quien
puede hacer el pago, regulan el tema del pago por parte de persona
distinta al deudor jurídico y en el cual se contemplan claramente tres
situaciones, (1) pago hecho con conocimiento del deudor (2) pago hecho
El Deudor 61

sin el conocimiento del deudor y (3) pago hecho sin el conocimiento o


contra su voluntad, y aún contra la voluntad del acreedor, recordemos
estas normas:

“Artículo 1630. Pago por terceros. Puede pagar por el deudor cualquiera
persona a nombre de él, aún sin su conocimiento o contra su voluntad, y
aún a pesar del acreedor.
Pero si la obligación es de hacer, y si para la obra de que se trata se
ha tomado en consideración la aptitud o talento del deudor, no podrá
ejecutarse la obra por otra persona contra la voluntad del acreedor.
Artículo 1631. Pago sin consentimiento del deudor. El que paga sin el
conocimiento del deudor no tendrá acción sino para que éste le reembolse
lo pagado; y no se entenderá subrogado por la ley en el lugar y derechos
del acreedor, ni podrá compeler al acreedor a que le subrogue.
Artículo 1632. Pago contra la voluntad del deudor. El que paga contra
la voluntad del deudor, no tiene derecho para que el deudor le reembolse
lo pagado; a no ser que el acreedor le ceda voluntariamente su acción.”
(Se resalta)

De otro lado los artículos 1634, 1635 y 1636 del C.C. nos indican a quien
se le debe hacer el pago, siendo importante resaltar el artículo 1636, que
establece las causales de nulidad de pago, así:

Articulo 1636. Nulidad del pago. El pago hecho al acreedor es nulo en


los casos siguientes:
1o.) Si el acreedor no tiene la administración de sus bienes; salvo en
cuanto se probare que la cosa pagada se ha empleado en provecho del
acreedor, y en cuanto este provecho se justifique con arreglo al artículo
1747.
2o.) Si por el juez se ha embargado la deuda o mandado retener el pago.
3o.) Si se paga al deudor insolvente en fraude de los acreedores a cuyo
favor se ha abierto concurso.

La doctrina ha considerado respecto del pago de terceros dentro del


ordenamiento civil colombiano que:

“El pago hecho con autorización del deudor, faculta al solvens para ejercer
las acciones personales que nacen del mandato, o del mutuo (si prestó el
dinero para el pago), o de la agencia oficiosa (enriquecimiento sin causa)
El pago hecho sin el conocimiento del deudor, faculta al solvens para
ejercer la actio in rem verso, el reembolso de lo pagado, pero no permite
la subrogación.
El pago hecho contra la voluntad del deudor, no faculta al solvens ni siquiera
para el reembolso de lo pagado, salvo que el acreedor voluntariamente le
ceda la acción del crédito.”45

45 BAENA UPEGUI, Mario, De las obligaciones en derecho civil y comercial” (III edición) editorial LEGIS, Bogotá D.C.
2000, Pág. 650.
62 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Concatenando, lo trascrito, tenemos que puede darse el caso del pago


efectuado por persona no interesada en la solución de la deuda, es
decir que carece de un vínculo frente a la obligación como tal, por no
encontrarse vinculado de forma solidaria a ella, pero, es decir puede ocurrir
que cualquier persona pueda pagar una deuda ajena aún careciendo de
interés jurídico para ello, con la obvia salvedad de que exista una deuda
en cabeza de la persona del deudor (Intuitu persone), es decir que quien
paga siempre tiene como principio la intención de mejorar la condición de
otro, aún sin su consentimiento.

En estos casos, como se dijo anteriormente, se establecen tres opciones,


con el consentimiento del deudor, sin el consentimiento del deudor y contra
la voluntad del deudor, sin que importe en forma alguna el consentimiento
del acreedor, entendiéndose que este no puede declararse renuente a
recibir el pago.

Es así que, independientemente de la voluntad del deudor sobre el cual se


efectúa el pago, las relaciones a tener presente siempre estarán entre el
deudor y quien efectúa el pago, es decir, entre estos en los cuales importa
en que calidad se efectúa el pago por terceros, teniéndose presente si
puede o no solicitar reembolso, o repetir el pagador sobre las sumas que
canceló frente al deudor, pero nunca frente al acreedor, dado que como
ya se dijo, la voluntad de este no es relevante en este tipo de situaciones,
y por ende, una vez efectuado el pago, por parte del tercero a favor del
deudor, no queda ningún tipo de relación vigente entre el acreedor (en
nuestro caso la Secretaría de Hacienda) y quien paga la obligación a
nombre de otro, y mucho menos pretender el pagador la transferencia del
derecho por satisfecho la obligación a nombre de otro, situación que no
es viable en el caso en estudio, dado que se trata de la función pública
de administrar y recaudar tributos, adicionado a que la Administración
Tributaria Departamental, no tiene facultades para ceder “voluntariamente”
sus derechos y facultades a particulares.

Así las cosas, una vez efectuado el pago a nombre de otro, quien efectúa
el pago, no podrá solicitar a la administración la devolución de los dineros
pagados, puesto que estando impedida la administración a negarse a
recibir el pago como acreedor, y al surtir efectos el pago, en situaciones
como podría ser la cancelación del Impuesto de Registro, salvo que el
tercero pagador logre demostrar que existió un vicio del consentimiento
al momento de efectuar el pago46, es decir canceló la obligación en forma

46 3) Sobre la causa de la obligación. Error in causa, artículo 1524. Uno de los elementos esenciales del acto
jurídico es la causa. Cuando una persona se obliga o paga en falsa creencia de que su obligación tiene una
causa, la declaración de voluntad se emite en el vacío, Si alguien paga en la falsa creencia de que debe, su
consentimiento existe en tanto el pago es voluntario y querido, y el objeto está determinado y es conocido, pero
el móvil determinante del acto se ha producido por un error de hecho. Es difícil la diferenciación objetiva del
acto volitivo, es decir, la separación conceptual entre el consentimiento propiamente dicho, la cusa eficiente de
la obligación, y el móvil determinante de este sentimiento, la causa impulsiva del acto. Pero aquí, la Nulidad del
acto jurídico descansa evidentemente en el fundamento del aforismo: Nulla obligatio sine causa” BAENA UPEGUI,
Mario, “De las obligaciones en Derecho Civil y Comercial” III Edición, Editorial LEGIS, Bogotá, 2000, Pág. 202.
El Deudor 63

equivoca, sin voluntad de pago, o pago por error47 situación que deberá ser
revisada por el correspondiente área al momento de estudiar la solicitud.

“O sea, que el pago de lo no debido, conforme a lo estipulado en el artículo


2315 del C.C., podrá repetir lo pagado por error de derecho, cuando el
pago no tenía por fundamento ni siquiera una obligación natural. Siendo
de advertir que para que la acción consagrada en dicha norma pueda
complementarse se requiere: 1) un pago; 2) la falta de causa; 3) error de
hecho o de derecho de quien paga; y 4) La ausencia de una obligación
natural que pueda autorizar una retención de lo indebidamente pagado.
Por eso decían los latinos que el error de derecho vicia el consentimiento
para beneficiarse pero no para perjudicarse más. Es así como el artículo
2317 del C.C. advierte que “Del que da lo que no debe no se presume que
lo dona, a menos que `probase que tuvo perfecto conocimiento de lo que
hacía, tanto en el hecho como en el derecho”. Así, si alguien paga una
obligación que no debía, tiene plena facultad de repetir lo pagado, como
cuando se incluyen en las facturas de cobro por el uso de tarjetas de
crédito obligaciones que no fueron ajustadas por los tarjetahabientes.”48

Por consiguiente se concluye que en principio la administración no debe


devolver dineros cancelados por terceros excepto en el caso de descubrir
vicios en el consentimiento (por pagos efectuados sin voluntad de pago, o
pagos por error de hecho o derecho) teniendo en cuenta que:

1. Si se manifiesta que el pago se hizo con consentimiento del deudor,


el tercero que efectúa el pago (Solvens) deberá solicitarle al deudor
que le reembolse lo pagado a su nombre y no a la administración
Departamental.

2. Si el pago se efectúo sin conocimiento del deudor, al liberarlo de la


obligación tributaria, puede el solvens solicitar el reembolso al deudor
conforme con las reglas generales establecidas en el artículo 2308 del
Código Civil, pero como esta obligación de reembolso es diferente a
la pagada, el solvens ya no cuenta con los accesorios, y privilegios de
la obligación inicial, por lo tanto no hay subrogación como tal, en este
caso al igual que el anterior, el reembolso debe hacerlo el deudor y
nuca la administración tributaria .

3. Por último si el pago se hace contra la voluntad del deudor, civilmente


se da un dualismo sobre la opción de reembolso, dado que a pesar de
que el artículo 1632 del CC precisa que el que paga no tiene derecho
a que el deudor le rembolse lo pagado, y el artículo 2309 de la misma
norma, establece que si puede repetirse contra el deudor en la medida
en que el pago le haya sido útil, situación que de forma independiente

47 Código Civil Colombiano. “Artículo 2315, Pago por error de derecho de obligación sin fundamento. Se podrá
repetir aún lo que se ha pagado por error de derecho, cuando el pago no tenía por fundamento ni aún una obligación
puramente natural.”
48 CANOSA TORRADO, Fernando “Las nulidades en el Derecho Civil” Ediciones Doctrina y Ley, Bogotá, 1997, Pág. 96
64 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

de la norma que se pretenda hacer valer, (este despacho se inclina por


la segunda), tenemos que la opción del tercero que efectúa el pago
de solicitar la devolución al acreedor (en nuestro caso la Secretaría
de Hacienda) no es viable y mucho menos esperar la subrogación
del derecho que el tercero puede pretender al haber satisfecho la
obligación a nombre de otro, porque como ya se dijo, al tratarse de la
función pública de administrar y recaudar tributos, la misma en forma
alguna puede transferirse a particulares.

JURISPRUDENCIA. “El pago que un tercero hace por deudor, puede ser
de tres maneras : 1ª) Con la voluntad expresa o tácita del deudor, en
cuyo caso el que paga queda subrogado por el ministerio de la ley, y aún
contra la voluntad del acreedor, en todos lo derechos de este, en todas sus
acciones, privilegios, prendas e hipotecas (C.C. Arts. 1630 y 1668, ord.
5º), 2ª) Sin el conocimiento del deudor, y en este caso el que paga no se
entiende subrogado por la ley en el lugar y derechos del acreedor, ni podrá
compeler al acreedor a que le subrogue. El que paga en estas condiciones
sólo pretende liberar al deudor, extinguir la deuda; y esto no ocurriría si
mediara subrogación, porque en virtud de ésta el tercero que paga queda
en el lugar del acreedor y puede ejercer contra el deudor, la misma acción
que tenía el acreedor primitivo, con todos sus privilegios e hipotecas. Para
que haya subrogación es menester que el deudor consienta, expresa o
tácitamente en el pago que hace el tercero, o mediando conocimiento
del deudor, el tercero que paga por él, no puede entablar como aquel, la
acción correspondiente a la obligación extinguida por su pago, pero tiene
derecho para que el deudor le reembolse lo pagado, Tiene la nueva acción
como negotorium gestor, por haber desempeñado un negocio del deudor
(C.C., Art. 2313) este derecho es para el simple reembolso de la suma
pagada al acreedor, y 3ª) Contra la voluntad del deudor. En este caso el
que pagó tiene derecho a que el deudor le reembolse lo pagado, a no ser
que el acreedor le ceda voluntariamente su acción (C.C., Art. 1632). Este
es un caso especial de excepción, porque en principio, el que paga por
otro tiene recurso contra el deudor liberado” (Corte Suprema de Justicia,
sala de Casación Civil, sentencia de Junio 25 de 1945).

DOCTRINA. Efectos del pago realizado por persona no interesada en el


cumplimiento de la obligación. “El pago por persona no interesada en el
cumplimiento de la obligación, produce efectos distintos: si se hace con
el conocimiento del deudor, el solvens tiene frente a éste la acción legal
subrogatoria y la acción del mandatario, y así, depende de cual de estas
acciones él elija para determinar, respectivamente, si la obligación subsiste
con sus accesorios o si se ha extinguido por el pago, dando lugar a la
acción de reembolso ex mandato; si el pago se hace sin el conocimiento
del deudor, la obligación se extingue absolutamente y el solvens, no se
subroga en el respectivo crédito, sino que nace en su favor otro crédito
distinto, el de reembolso contra el deudor liberado, a menos desde luego,
El Deudor 65

que el acreedor se allane a cederle el crédito al solvens o a subrogarlo


convencionalmente en él, caso en el cual la obligación no se extingue sino
que cambia de acreedor; en fin si el pago se ha hecho contra la voluntad
del deudor, la obligación se extingue pero el solvens, tiene acción de in
rem verso contra el deudor, si el pago le ha sido útil a éste y dicha utilidad
subsiste al tiempo de la demanda de aquél”. (OSPINA FERNANDEZ,
Guillermo. “Régimen General de las Obligaciones”, Editorial TEMIS,
Bogotá, Pág. 346.

Con referencia a la solicitud efectuada, la Administración Departamental


considera que no es viable efectuar devolución a la sociedad que efectúa
el pago, entendiendo que la subrogación no procede para los efectos
tributarios.

Así las cosas, no se reúnen los requisitos formales de legitimidad para que
la sociedad que efectuó el pago, solicite a nombre de la sociedad a favor
de quien se canceló la obligación solicitud de devolución, en este caso por
pago en exceso.

Se concederá la devolución a nombre de un tercero, si se reúnen las


condiciones establecidas en el artículo 572 -1 del Estatuto Tributario
Nacional, que en su tenor literal ordena:

“Artículo 572-1. Apoderados generales y mandatarios especiales. Se


entiende que podrán suscribir y presentar las declaraciones tributarias
los apoderados generales y los mandatarios especiales que no sean
abogados. En este caso se requiere poder otorgado mediante escritura
pública.

Lo dispuesto en el inciso anterior se entiende sin perjuicio de la firma del


revisor fiscal o contador, cuando exista la obligación de ella.

Los apoderados generales y los mandatarios especiales serán


solidariamente responsables por los impuestos, anticipos, retenciones,
sanciones e intereses que resulten del incumplimiento de las obligaciones
sustanciales y formales del contribuyente.”

Así las cosas, es bien interesante como se puede observar que si bien el
obligarse a nombre de terceros es viable en materia tributaria y en materia
civil, el cumplir con las obligaciones de otros, no transfiere beneficios de
subrogación alguna a quien efectúa el pago, incluso cuando este se haga
con el consentimiento del deudor, quedando limitada la devolución a terceros
cuando el tercero actúa como mandatario y/o apoderado.
El Mandamiento de Pago 67

EL MANDAMIENTO DE PAGO
CAPÍTULO

9
También denominado MANDAMIENTO EJECUTIVO, es el acto administrativo
que da inicio al proceso administrativo de cobro coactivo, y mediante el cual
se ordena al deudor (contribuyente o no) cumplir la obligación contenida en
el título ejecutivo, la que siempre versara sobre una suma liquida de dinero
que el deudor debe al ente público que ejecuta administrativamente por falta
de pago, este debe señalar las obligaciones expresas claras y exigibles, así
como los intereses adeudados por los capitales generados, estos intereses,
se señalan como dato general “Mas los intereses generados hasta la fecha
de pago de la obligación” pero no se individualizan ya que podría viciar el
mandamiento de pago como tal, esto lo desarrollaremos más adelante.

En cuanto al tipo de documento bajo el cual debe denominarse el


mandamiento de pago, existen diversas interpretaciones, para algunos el
mandamiento de pago es un auto, otros un poco más formalistas le dan
alcance de resolución y otros con una óptica simplemente lo denominan
mandamiento de pago, esta diversidad conceptual deriva de la falta de
precisión del artículo 826 del estatuto Tributario, que simplemente señala
que “el funcionario competente para exigir el cobro coactivo, producirá
el mandamiento de pago ordenando la cancelación…”, lo que si es claro
que este documento o acto administrativo debe tener unos mínimos en su
contenido, a saber una parte considerativa y una parte resolutiva, veamos:

a) PARTE CONSIDERATIVA.

En esta sección debe señalarse como mínimo:

- Nombre de la entidad ejecutora.

- Ciudad y fecha.

- Identificación de cada una de las obligaciones por su cuantía,


concepto, periodo y el documento que la contiene. El mandamiento
68 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

de pago alusivo a un título ejecutivo complejo deberá enunciar todos


los documentos que lo conforman.

- La identificación plena del deudor o deudores, con su nombre o razón


social, NIT o cédula de ciudadanía, según el caso.

- Competencia con que se actúa.

- Valor de la suma principal adeudada.(impuesto y sanciones)

b) PARTE RESOLUTIVA.

Esta sección debe contener:

- La orden de pago por la vía administrativa coactiva a favor del tesoro


del ente público tributario o no tributario, según el caso, y en contra de
la persona natural o jurídica deudora, con su número de identificación
y que consiste en la orden expresa de pagar dentro de los quince
(15) días siguientes a la notificación, el impuesto, las sanciones, los
intereses moratorios calculados desde la fecha en que se venció la
obligación u obligaciones y hasta cuando se cancelen, la actualización
y las costas procesales en que se haya incurrido.

- La orden de citar al ejecutado para que comparezca a notificarse


del mandamiento de pago dentro de los diez (10)días siguientes a
la fecha de introducción al correo del oficio de citación y la orden de
notificar por correo si no comparece dentro del término para notificar
personalmente.

- La posibilidad de proponer excepciones dentro del mismo termino para


pagar. (Artículos 830 y 831 Estatuto Tributario), ante el funcionario
ejecutor a cargo del proceso.

- La Orden de: NOTIFIQUESE Y CUMPLASE.

- La firma del Funcionario ejecutor.

El mandamiento de pago es una actuación que debe entenderse restringida


al proceso administrativo de cobro coactivo, no a la actuación precedente de
formación del título ejecutivo, que necesariamente debe cumplirse, porque
el proceso de cobro, que se inicia con la notificación del mandamiento de
pago no tiene como finalidad la declaración o constitución de obligaciones,
sino hacer efectivas las obligaciones claras, expresas y exigibles,
El Mandamiento de Pago 69

previamente definidas a favor del ente público tributario o no tributario y


a cargo de los contribuyentes o deudores, por lo que para la ejecución se
requiere la existencia previa de un título, tal como se colige de lo dispuesto
en el artículo 68 del Código Contencioso Administrativo, según el cual,
“Prestarán mérito ejecutivo por jurisdicción coactiva, siempre que en ellos
conste una obligación clara, expresa y actualmente exigible”, entre otros,
“Todo acto administrativo ejecutoriado que imponga a favor de la Nación, de
una entidad territorial, o de un establecimiento público de cualquier orden,
la obligación de pagar una suma de dinero, en los casos previstos en la ley”.

Con el mandamiento de pago se ordena al contribuyente a cumplir con el


pago de la obligación insoluta dentro del término de los quince (l5) días
hábiles siguientes a la notificación del mismo, término que es común para
proponer por escrito las excepciones contempladas en el Estatuto Tributario
(Artículo 830 y 83l).
Notificación del Mandamiento de Pago 71

NOTIFICACIÓN DEL
MANDAMIENTO DE PAGO
CAPÍTULO

En el proceso Administrativo Coactivo, el mandamiento de pago, puede ser


10
notificado mediante varios mecanismos, aunque la gran mayoría de estos
llevan un orden cronológico como se detalla a continuación.

1. Notificación personal (Art. 826 E.T. )


2. Notificación por correo (Art. 826 E.T.)
3. Notificación por aviso (Art. 568 E.T. )
4. Notificación por Publicación. (Art. 563 E.T.)

10.1 CONCEPTO DE NOTIFICACION

La notificación del acto administrativo como regla general, es el mecanismo


mediante el cual se dan a conocer las decisiones de la administración,
es decir es la garantía que tienen los administrados de conocer las
decisiones u obligaciones que la administración pretende hacerle efectivas
o las determinaciones tomadas, respecto de la impetración de peticiones
o recursos o cualquier otra respuesta a una petición efectuada por el
administrado y que se genera sobre actos particulares y concretos.

La notificación debe surtirse so pena de que la falta de la misma haga


ineficaz el acto,49 lo que no quiere decir, que la notificación, cualquiera
que sea es la que le da sustantividad al acto que crea, modifica, declara
o extingue una obligación jurídica, ya que ese valor lo tiene el acto en sí,
dándole la notificación solamente el inicio de su eficacia.

A través de la notificación la administración da aplicación al principio de


publicidad, consagrado en el artículo 209 de la Constitución, respecto de

49 Consejo de Estado. Sentencia del 26 de abril de 1990, Exp. 783. “Finalmente, la falta de publicación o de
notificación de un acto administrativo de contenido general o particular, no implica su inexistencia sino que,
simplemente, no produce efectos. Las razones de invalidez que conducen a la nulidad se refieren a la realidad
jurídica dada que la fecha de nacimiento del acto y no al trámite secretarial de la notificación personal, por edicto o
mediante la publicación”.
72 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

los actos administrativos de carácter individual, garantizando el derecho al


debido proceso y concretamente el derecho de contradicción, pues es a
través de él que los administrados pueden conocer las decisiones de la
autoridad pública.

La finalidad de las notificaciones es dar cumplimiento al principio de publicidad


que debe preceder todas las actuaciones judiciales o administrativas, a fin
de que puedan ser controvertidas a través de los recursos establecidos por
la ley, por quienes resulten afectados con la decisión.

Con ello, se garantiza el debido proceso consagrado en el artículo 29 de


la Constitución Política, en virtud del cual “Nadie podrá ser juzgado sino
conforme a leyes preexistentes al acto que se le imputa, ante juez o tribunal
competente y con observancia de la plenitud de las formas propias de cada
juicio”..

El artículo 209 de la Constitución dispone que la función administrativa


se encuentra al servicio de los intereses generales y se desarrolla con
fundamento “en los principios de igualdad, moralidad, eficacia, economía,
celeridad, imparcialidad y publicidad”.

En desarrollo del principio de publicidad las actuaciones administrativas


deben ser dadas a conocer por parte de las entidades que las expidan, a
través de las comunicaciones, notificaciones o publicaciones establecidas
en la ley o en el acto administrativo de que se trate.

En relación con dicho principio la Corte Constitucional al examinar el artículo


5 de la Ley 788 de 2002, que modificó el artículo 566 del Estatuto Tributario,
expresó lo siguiente:

“El principio de publicidad plantea el conocimiento de las actuaciones


judiciales y administrativas, tanto por los directamente interesados en
ellas como por la comunidad en general.

En el primer caso, el principio de publicidad se realiza a través de las


notificaciones como actos de comunicación procesal; es decir, del derecho
a ser informado de las actuaciones judiciales o administrativas que
conduzcan la creación, modificación o extinción de una situación jurídica
o a la imposición de una sanción.(…)

Y en el segundo caso, el principio de publicidad se realiza mediante


el reconocimiento del derecho que tiene la comunidad a conocer las
actuaciones de las autoridades públicas y, a través de ese conocimiento,
a exigir que ellas se surtan con total sometimiento a la ley. Es decir, aparte
Notificación del Mandamiento de Pago 73

de las notificaciones como actos de comunicación procesal, el principio de


publicidad comporta también el reconocimiento del derecho ciudadano a
enterarse de las decisiones tomadas por la administración y la jurisdicción,
aunque, desde luego, con las limitaciones impuestas por el ordenamiento
jurídico. En este último evento, el principio de publicidad constituye una
garantía de transparencia en la actuación de los poderes públicos y un
recurso que permite las condiciones necesarias para el reconocimiento
del derecho a controlar el ejercicio del poder” (Corte Constitucional,
Sentencia. C-1114 de 2003 M.P. Jaime Córdoba Triviño.)

En relación con la notificación de los actos administrativos, estos existen


desde su expedición pero su eficacia se encuentra condicionada a la
publicación o notificación del acto, y quedan en firme, como lo dispone
el artículo 62 del Código Contencioso Administrativo, esto es: a) cuando
no proceda ningún recurso; b) cuando una vez interpuestos hayan sido
decididos; c) cuando no se interpongan o se renuncie expresamente a ellos,
y, d) cuando haya lugar a la perención o sean aceptados los desistimientos.”

Frente al principio publicidad de los actos de los administrativos ha dicho la


Corte Constitucional, que:

“El Estado de derecho se funda, entre otros principios, en el de la


publicidad, el cual supone el conocimiento de los actos de los órganos y
autoridades estatales, en consecuencia, implica para ellos desplegar una
actividad efectiva para alcanzar dicho propósito; dado que, la certeza y
seguridad jurídicas exigen que las personas puedan conocer, no sólo de
la existencia y vigencia de los mandatos dictados por dichos órganos y
autoridades estatales, sino, en especial, del contenido de las decisiones
por ellos adoptadas, para lo cual, la publicación se instituye en presupuesto
básico de su vigencia y oponibilidad, mediante los instrumentos creados
con tal fin. (Resaltado fuera de texto).

10.2. CONSTANCIA O PRUEBA DE NOTIFICACIÓN.

En la notificación de los actos administrativos debe quedar constancia de


haberse efectuado la misma, por regla general la notificación de actos
proferidos se hace por correo certificado, este correo certificado tiene reglas
claras que buscan dar garantía al remitente, sobre que efectivamente el
correo por él enviado llegue a su destino o en su defecto sea devuelto
indicándose las causales de la devolución.

Es así que las normas que regulan las reglas generales en materia de
correos certificado o recomendados, establecidas en el Decreto 1418 de
1945, establecen:
74 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

CAPITULO XVI
De los recomendados o certificados

(…)

Artículo 137. El fin primordial de recomendado es que al remitente le queda


una constancia escrita de la clase de su envío, de que éste sea entregado
al destinatario, mediante recibo especial, y de que la Administración de
Correos responda por la pérdida del envío recomendado en los términos
señalados en éste decreto.

(…)

Transmisión de Envíos Recomendados

Servicio Interior

Artículo 201.- Para el despacho de los recomendados dentro de la


República se observarán las reglas siguientes

(…)

b) El día de salida del correo que debe conducir los recomendados, el


empleado los anotará en la planilla perteneciente a cada despacho de
recomendados, con todos los detalles que ésta prescribe. Un duplicado de
la planilla quedará en la oficina, para formar el libro de despacho.

(…)

Entrega de Recomendados o Certificados

Servicio Interior.

Artículo 323. Los recomendados deberán entregarse siempre bajo recibo


y únicamente al destinatario o a la persona a quien éste haya dado poder
o autorización por escrito para este caso especial. En uno u otro caso será
obligatorias la identidad el interesado. Las autorizaciones correspondientes
al destinatario se conservarán con los recibos. En las poblaciones que
tengan nomenclatura urbana, se pondrá debajo de la firma, para el caso
de que haya necesidad e cualquier aclaración la indicación del domicilio
del destinatario.

Los envíos recomendados dirigidos al cuidado de una persona o entidad


no podrán entregarse sino a esta o por su orden, al otro destinatario
indicado en la dirección. Los avisos de llegada se enviarán a ambos, en
los términos previstos en el artículo 663
Notificación del Mandamiento de Pago 75

Artículo 324. Los recomendados con aviso de recibo se inscribirán en


el libro de recibo y entrega con la anotación “A.R.” en la columna de
observaciones. Cuando el destinatario se niegue a firmar el aviso de
recibo, se considerará el envío como rehusado y se hará constar esta
circunstancia en el mismo aviso y en la columna de observaciones del
referido libro.

(…)

Artículo 328. Para la entrega a domicilio de los recomendados, las oficinas


autorizadas al efecto se ceñirán a las disposiciones siguientes:

a) Los recomendados se remitirán al servicio de Correos urbanos bajo


recibo en el libro de recibo y entrega, o en caso de conveniencia en un
libro especial.

b) Se abrirá en el servicio de correo urbano un registro de los recomendados


que reciban los carteros , el cual contendrá: el número del libro de
recibo y entrega , el número originario del recomendado, el nombre de
la oficina de origen, el nombre y domicilio del destinatario, la indicación
de si el envío se ha entregado o no, y las observaciones conducentes.
La indicación –A.R.- cuando se trate de envíos con cuse de recibo se
hará constar entre las observaciones.

(…)

d) A cada recomendado se acompañará una fórmula especial de recibo


llenada debidamente, de acuerdo con las indicaciones impresas, para
los envíos con acuse de recibo, la fórmula correspondiente remitida por
la oficina de origen.

e) Cuando el cartero no encuentre al destinatario o a su apoderado en el


domicilio, podrá entregar los recomendados sin acuse de recibo a un
miembro adulto de la familia del destinatario, los recomendados con
acuse de recibo, deberán entregarse exclusivamente al destinatario o a
su apoderado.

f) Los carteros darán cuanta a su inmediato superior del resultado


de cada reparto, devolviendo los recomendados no entregados o
entregando los recibos o avisos de recibo, según el caso y cuidando
de que en el registro, en el cual se le carga dichos envíos, se hagan
las anotaciones concernientes a su descargo. Al reverso de los recibos
deberán indicar, con su forma, la persona a quien hayan entregado el
respectivo recomendado y la manera como ésta se haya identificado,
por ejemplo (…)”
76 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

h) Los carteros buscarán a los destinatarios de los recomendados hasta


tres veces, y si a la tercera vez no los encontraran, les dejarán un aviso
en el domicilio para que concurran a la oficina a recogerlos y devolverán
a esta los recomendados con indicación de la causa de devolución.
(Subraya ajena a texto original)

Como se aprecia, el correo certificado tiene reglas claras que buscan dar
garantía al remitente, sobre que efectivamente el correo por el enviado
llegue a su destino o en su defecto sea devuelto indicándose las causales
de la devolución.

Coadyuva a reafirmar lo manifestado, el Decreto 229 de 199550, en el


cual se establecen entre otras las definiciones de lo que debe entenderse
por servicios de correos (Art. 4), los servicios especiales de correo (art.
5), las obligaciones de los concesionarios de correos (Art. 26) y las más
importantes, los derechos de los remitentes (Art. 30) y la devolución del
correo (Art. 33), cuando no es posible su entrega, veamos esas normas:

“Artículo 4º. Servicio de correos. Se entiende por servicio de correo


la prestación de los servicios de giros postales y telegráficos, así como
el recibo, clasificación y entrega de envíos de correspondencia y otros
objetos postales, transportados por las personas naturales o jurídicas,
públicas o privadas, debidamente autorizadas por concesión otorgada
mediante contrato, por el Ministerio de Comunicaciones vía superficie y/o
aérea, a través de la red oficial de correos, dentro del territorio nacional e
internacional.

(…)

Artículo 5º. Servicios especiales y financieros de correos. Los


servicios especiales de correos estarán a cargo de los concesionarios
de los servicios de correos y comprenden los servicios tradicionales de
correo recomendado o certificado, asegurado, de entrega inmediata, de
correo expreso, apartados postales, lista de correos, respuesta comercial,
acuse de recibo, cupón de respuesta internacional, solicitud de devolución
o modificación de dirección, almacenaje, así como los nuevos servicios
que implementen los concesionarios en orden a ofrecer un servicio de alta
calidad que satisfaga los requerimientos de los usuarios.

(…)

Artículo 26. Obligaciones de los concesionarios y licenciatarios.


Es obligación de los concesionarios y licenciatarios entregar los envíos
de correspondencia y demás objetos postales a los destinatarios, en las
mismas condiciones en que fueron confiados al servicio postal.

50 “Por el cual se reglamenta el servicio postal”.


Notificación del Mandamiento de Pago 77

Artículo 30. Derechos de los remitentes. Los remitentes de los envíos


de los servicios postales tienen los siguientes derechos, sin perjuicio de
las acciones judiciales pertinentes y de las acciones que les confiere el
ejercicio de sus derechos fundamentales:

1. Obtener la devolución de los envíos que no hayan sido entregados a


los destinatarios.

(…)

Artículo 33. Devolución de los envíos postales. Los usuarios de los


servicios de correos, tendrán derecho a la devolución de los envíos cuando
éstos no puedan ser entregados a su destinatario.”

Es así, que atendiendo la garantía que la utilización del correo certificado


da a la administración de la entrega de la correspondencia, la Secretaría
Distrital de Hacienda celebró convenios Inter.-administrativos con
ADPOSTAL,51 en los cuales se establecen entre otras como cláusulas
compromisorias:

Es de anotar que el artículo 5º de la Ley 788 del 2002, que modifica el artículo
566 del Estatuto Tributario Nacional, y que faculta a la administración para
notificar los actos administrativos de que trata el inciso primero del artículo
565 del Estatuto Tributario Nacional a través de cualquier servicio de correo.

Al respecto debemos precisar que el mismo Decreto 229 de 1995 ya


citado que reglamenta el servicio postal, definió también en el artículo 5º
los llamados servicios especiales de correo, como “servicios tradicionales
de correo recomendado o certificado, asegurado de entrega inmediata, de
correo expreso, apartados cupón de respuesta internacional, solicitud de
devolución o modificación de dirección, almacenaje, así como los nuevos
servicios que implementen los concesionarios en orden a ofrecer un servicio
de alta calidad que satisfaga los requerimientos de los usuarios”52De otro
lado y teniendo en cuenta que conforme con el artículo 37 de la Ley 80
de 1993, los servicios postales comprenden la prestación de servicios
de correo y los servicios de mensajería especializada, veamos que se
entiende por esta última:

Artículo 37. Del Régimen de concesiones y licencias de los servicios


postales. Los servicios postales comprenden la prestación de los servicios
de correo y del servicio de mensajería especializada.53

51 Entre otros los convenios interadministrativos 03 del 15 de abril de 1999, y 24 del 28 de diciembre de 2001 y 19 del
17 de julio de 2003.
52 Decreto 229 de 1995 artículo 5º
53 Concordante con el artículo 1º del Decreto 229 de 1995.
78 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Se entiende por servicio de correo la prestación de los servicios de giros


postales y telegráficos, así como el recibo, clasificación y entrega de envíos
de correspondencia y otros objetos postales, transportados vía superficie
y aérea, dentro del territorio nacional. El servicio de correo internacional
se prestará de acuerdo con los convenios y acuerdos internacionales
suscritos con la Unión Postal Universal y los países miembros.

Se entiende por servicio de mensajería especializada, la clase de


servicio postal prestado con independencia a las redes postales oficiales
del correo nacional e internacional, que exige la aplicación y adopción
de características especiales para la recepción, recolección y entrega
personalizada de los objetos transportados, vía superficie y aérea, en el
ámbito nacional y en conexión con el exterior.

El Gobierno Nacional reglamentará las calidades, condiciones y requisitos


que deben reunir las personas naturales y jurídicas para la prestación de
los servicios postales. Igualmente fijará los derechos, tasas y tarifas, que
regularán las concesiones y licencias para la prestación de los servicios
postales.

Parágrafo 1o. La prestación de los servicios de correos se concederá


mediante contrato, a través del procedimiento de selección objetiva de que
trata la presente ley.”

Siendo claro que se entiende por servicios de mensajería especializada


debemos en primera instancia determinar que organismo de carácter
nacional regula y controla el sector, al respecto se hace necesario revisar el
artículo 1º de la Ley 72 de 1989, el cual establece:

“Artículo 1.- El Gobierno Nacional, por medio del Ministerio de


Comunicaciones, adoptará la política general del sector de comunicaciones
y ejercerá las funciones de planeación, regulación y control de todos los
servicios de dicho sector, que comprende, entre otros:

- los servicios de telecomunicaciones.

- los servicios informáticos y de telemática.

- los servicios especializados de telecomunicaciones o servicios de valor


agregado.

- los servicios postales.” (Negrilla ajena a texto)

Ahora bien, claro lo anterior se desprende que la actividad de mensajería


especializada es un servicio postal, sin tener en cuenta que este se celebre
Notificación del Mandamiento de Pago 79

con independencia de las redes postales oficiales del correo nacional e


internacional54, y es regulado, controlado y coordinado por el Ministerio
de dicha rama, sin importar el tipo de contrato que suscriban los entes
dedicados a esta actividad con sus clientes, pues lo que se busca precisar
con este concepto es la naturaleza de la actividad desempeñada.

Así mismo es necesario precisar que los servicios de mensajería


especializada tienen su propia regulación, y sobre los mismos existen una
serie de requisitos especiales impuestos por el Ministerio de Comunicaciones
y contemplados en el artículo 6 del Decreto 2229 de 1995, veamos:

“Artículo 6º—Servicios de mensajería especializada. Se entiende por


servicio de mensajería especializada, la clase de servicio postal prestado
con independencia de las redes postales oficiales del correo nacional
e internacional, que exige la aplicación y adopción de características
especiales, para la recepción, recolección y entrega personalizada de
envíos de correspondencia y demás objetos postales, transportados vía
superficie y/o aérea, en el ámbito nacional y en conexión con el exterior.

Parágrafo. Las características especiales que deben cumplir los servicios


de mensajería especializada son:

a) Registro individual de cada envío. Todo envío de mensajería


especializada debe tener un número de identificación individual;

b) Recolección a domicilio. Si el cliente lo solicita, el servicio de mensajería


debe efectuar la recolección en el domicilio del usuario o cliente
solicitante;

c) Admisión. El servicio de mensajería debe expedir un recibo de admisión


o guía, por cada envío, en el cual debe constar:

— Número de identificación del envío.

— Fecha y hora de admisión.

— Peso del envío en gramos.

— Valor del servicio.

— Nombre y dirección completa del remitente y destinatario.

— Fecha y hora de entrega;

54 Decreto 229 de 1995, artículo 6º.


80 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

d) Curso del envío. Todo envío de mensajería debe cursar, con una copia
del recibo de admisión o guía, adherido al envío;

e) Tiempo de entrega. Los envíos de mensajería especializada se


caracterizan por la rapidez en la entrega. El servicio de mensajería
debe prestarse en condiciones normales con unos tiempos de entrega
no superiores a: Veinticuatro (24) horas en servicio urbano. Cuarenta y
ocho (48) horas en servicio nacional a cualquier lugar del país. Noventa
y seis (96) horas en servicio internacional, y

f) Prueba de entrega. El cliente usuario del servicio de mensajería


especializada, puede exigir la prueba de entrega del envío, donde
consta fecha y hora de entrega y firma e identificación de quien recibe.”

Así las cosas no cabe duda que la actividad de Mensajería Especializada


es una actividad postal, es decir una actividad de comunicaciones que se
efectúa en virtud de la autorización legal existente.

Por lo cual, y partiendo de la esencia del servicio de correo y de la gran


credibilidad de que el correo certificado nos entrega, o de las regulaciones
que aplican al servicio de mensajería especializada que puede llegar a
utilizarse como mecanismo de correo, o la entrega de forma directa por
parte de la entidad pública de sus actos a través de sus funcionarios, es
claro que debe reposar en el expediente constancia bien sea vía colilla
de notificación o planilla de notificación de haberse surtido la notificación
del acto administrativo, so pena de violar el debido proceso al suprimir el
derecho de defensa de los ejecutados.

10.3. LA NOTIFICACION PERSONAL DEL MANDAMIENTO DE PAGO

El artículo 826 del Estatuto Tributario Nacional, señala que el funcionario


de cobro notificará personalmente al deudor, previa citación para que
comparezca en un término de diez (10) días, contados a partir de la fecha
de introducción al correo55, la citación debe dirigirse a la última dirección
informada por el contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante,
en su última declaración o mediante formato oficial de cambio de dirección.

Es decir que previa a la notificación debe efectuarse la citación al deudor


para que comparezca al despacho, una vez este comparece se realiza
constancia de presentación en donde se señala, el día, hora, nombre del

55 La explicación de esta expresión “contados a partir de la fecha de introducción al correo” se explica de forma amplia
en el subtema “Desde cuando se cuentan los términos de notificación por correo” que puede encontrarse más
adelante.
Notificación del Mandamiento de Pago 81

deudor, nombre de quien se presenta y su calidad para actuar en el caso


de tratarse de persona jurídica o apoderado y se deja anotación de haberse
entregado copia del mandamiento de pago correspondiente.

Generalmente surge un interrogante cuando algunas entidades públicas


envían a funcionarios de su dependencia a efectuar la notificación del acto
administrativo directamente a la dirección del contribuyente, saltándose el
paso de la citación para la notificación personal, esta notificación será válida
si y sólo si, se logra encontrar directamente al ejecutado o su representante
legal, no es válido pretender la notificación personal dejando copia del acto
administrativo en la dirección de notificación del ejecutado, ya que esto
equivaldría a una notificación por correo y generaría un salto a las reglas
procesales, viciando el proceso con las consecuencias que este tipo de
actuaciones pueden generar. (Ver Consejo de Estado, Exp. 9431 de 1999 –
Notificación no entregada correctamente no surte ningún efecto)

10.4. LA NOTIFICACION POR CORREO DEL MANDAMIENTO DE PAGO

Señala el artículo 826 del Estatuto Tributario Nacional que si el ejecutado


no comparece dentro del término de los diez (l0) días siguientes al de la
citación, se debe notificar por correo, el mandamiento de pago, cuyo
procedimiento se encuentra consagrado en los artículos 565 y siguientes
del Estatuto Tributario Nacional.

Es de anotar con el fin de evitar confusiones que en el Estatuto Tributario,


el artículo que señala expresamente como título la notificación por correo
es el artículo 566, disposición esta que fue derogada por el artículo 78 de
la Ley 1111 de 2006, no obstante en el artículo 565, encontramos las reglas
aplicables a la notificación por correo, veamos:

“Artículo 565. Formas de notificación de las actuaciones de la


administración tributaria. Los requerimientos, autos que ordenen
inspecciones o verificaciones tributarias, emplazamientos, citaciones,
resoluciones en que se impongan sanciones, liquidaciones oficiales
y demás actuaciones administrativas, deben notificarse de manera
electrónica, personalmente o a través de la red oficial de correos o de
cualquier servicio de mensajería especializada debidamente autorizada
por la autoridad competente.

Las providencias que decidan recursos se notificarán personalmente, o por


edicto si el contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante, no
compareciere dentro del término de los diez (10) días siguientes, contados
a partir de la fecha de introducción al correo del aviso de citación. En este
evento también procede la notificación electrónica.
82 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Parágrafo 1. La notificación por correo de las actuaciones de la


administración, en materia tributaria, aduanera o cambiaria se practicará
mediante entrega de una copia del acto correspondiente en la última
dirección informada por el contribuyente, responsable, agente retenedor o
declarante en el Registro Único Tributario - RUT. En estos eventos también
procederá la notificación electrónica.

Cuando el contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante, no


hubiere informado una dirección a la administración tributaria, la actuación
administrativa correspondiente se podrá notificar a la que establezca la
administración mediante verificación directa o mediante la utilización de
guías telefónicas, directorios y en general de información oficial, comercial
o bancaria. Cuando no haya sido posible establecer la dirección del
contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante, por ninguno de
los medios señalados, los actos de la administración le serán notificados
por medio de publicación en un periódico de circulación nacional.

Cuando la notificación se efectúe a una dirección distinta a la informada


en el Registro Único Tributario - RUT, habrá lugar a corregir el error dentro
del término previsto para la notificación del acto.

Parágrafo 2. Cuando durante los procesos que se adelanten ante la


administración tributaria, el contribuyente, responsable, agente retenedor
o declarante, actúe a través de apoderado, la notificación se surtirá a
la última dirección que dicho apoderado tenga registrada en el Registro
Único Tributario -RUT.

Parágrafo 3. Las actuaciones y notificaciones que se realicen a través


de los servicios informáticos electrónicos de la Dirección de Impuestos y
Aduanas Nacionales como certificadora digital cerrada serán gratuitos, en
los términos de la Ley 527 de 1999 y sus disposiciones reglamentarias

Señala el parágrafo 1º que la notificación por correo de las actuaciones de


la administración, se practicará mediante entrega de una copia del acto
correspondiente en la última dirección informada por el contribuyente,
responsable, agente retenedor o declarante en el Registro Único Tributario
- RUT. En estos eventos también procederá la notificación electrónica.

Aquí se hace necesario precisar que en la notificación por correo no es


necesario entregar una copia física al ejecutado, basta con la entrega de la
copia del mandamiento en la dirección de notificación, en los casos de los
conjuntos de apartamentos o edificios, la copia puede dejarse en la portería
con la constancia de firma del encargado de la misma, en el evento en que
limite el acceso al edificio por razones de seguridad.
Notificación del Mandamiento de Pago 83

La anterior ha sido corroborada en forma reiterada por el Consejo de Estado,


quien en fallos como el de 3 de diciembre de 2009, Expediente 16781, C.P.
Hugo Fernando Bastidas Bárcenas, consideró:

“Con respecto a la notificación, lo primero que conviene precisar es que,


de conformidad con el artículo 563 del E.T., los actos que profiere la
Administración tributaria deben notificarse a la última dirección informada
por el contribuyente, esto es, a la indicada en la última declaración o en
el formato oficial de cambio de dirección. Dicho artículo debe armonizarse
con el inciso 2º del artículo 612 ibídem, que prevé, como obligación formal,
la de informar cualquier cambio de dirección en el término de tres meses,
contados a partir de que ello ocurra.

El artículo 564 del E.T., por su parte, dispone que durante el proceso de
discusión y determinación del tributo, la Administración deberá notificar los
actos que profiera a la dirección que expresamente señale el contribuyente
o declarante. No obstante, según esa misma norma, en los casos en que
se cambie la dirección, la antigua dirección será válida por el término de
tres meses, contados a partir de la fecha en que se informe del cambio.

A su vez, el artículo 565 ibídem señala la forma en que deben notificarse


las actuaciones de la Administración tributaria, notificaciones que bien
pueden ser de forma personal, por edicto, por correo o por medio de aviso
en un periódico de amplia circulación. (Se subraya)

En el mismo sentido, la sentencia de fecha 19 de mayo de 2005, Exp 14151,


C.P. Ligia López Díaz, en donde se señaló:

“En consecuencia tratándose del procedimiento cobro del impuesto


predial por los años 1994 a 1997 se debe adecuar la norma que regula la
notificación de los actos oficiales, conforme a la naturaleza y estructura
funcional del impuesto predial, precisando que la dirección a tener en
cuenta es la informada por el contribuyente en su última declaración
presentada. (1997)

(…)

Ahora bien, señala el artículo 563 del Estatuto Tributario:

(…)

Observa la Sala que si no existe prueba dentro del expediente de que


el contribuyente hubiese informado una dirección procesal diferente de
la indicada en las declaraciones del impuesto predial presentadas, la
Administración debió notificar el mandamiento de pago cuestionado a la
84 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

dirección informada en la última declaración del impuesto predial o a la


indicada como nueva en el formato oficial establecido para el efecto.

A folio 14 del expediente aparece copia de la Resolución No. 1534 del 5


de octubre de 2001, por medio de la cual se libra mandamiento de pago
a cargo del demandante, conforme al título ejecutivo consistente en las
declaraciones privadas presentadas por los años gravables 1994 a 1997 por
impuesto predial unificado del inmueble ubicado en la KR 2 108 B 69 de
Bogotá D.C.

El demandante desde la presentación de la demanda ha alegado que no


informó cambio de dirección y que por tal razón el mandamiento de pago
debió notificarse a la dirección informada en las declaraciones del impuesto
predial presentadas por los años gravables 1994 a 1997. (Carrera 2 este No.
108B-69)

Se debe tener en cuenta que en el acto acusado (Resolución No. 457 del
19 de abril de 2002) se inadmite el escrito de excepciones presentado por
la demandante en contra del mandamiento de pago aduciendo que éste fue
notificado en debida forma el 6 de febrero de 2002, a la Calle 104 11 B 06 AP
303 de Bogotá, dirección que según el demandante no fue informada y sobre
la cual la Administración guardó silencio sobre su procedencia.

Adicionalmente observa la Sala que a folio 88 del expediente obra la


declaración del impuesto predial presentada por el demandante en la que
informa como dirección la carrera 2 este No. 108 B – 69, la cual debió ser
tenida en cuenta por la Administración para notificar los actos oficiales,
conforme al referido artículo 563 del Estatuto Tributario, sin embargo el
mandamiento de pago se envió nuevamente con la finalidad de efectuar la
notificación por correo a una dirección diferente, (carrera 2 No. 108 B – 69)
resultando por tanto ineficaz la actuación surtida.

Debemos aclarar que en el evento de no conocerse la dirección, bien


porque el deudor no la informó o porque simplemente la deuda a cobrar
no exige la necesidad de informar una dirección de notificación, el ejecutor
podrá notificar a la dirección que establezca la administración mediante
verificación directa o mediante la utilización de guías telefónicas, directorios
y en general de información oficial, comercial o bancaria.

De otro lado resulta interesante la posición tomada por el Consejo de Estado


respecto de la notificación en áreas rurales, ya que este considera que la
misma se surte con el recibo en las oficinas de correos del municipio, siendo
deber por lo tanto del ejecutado el recoger en la oficina de correos en la
cabecera municipal, la correspondencia, situación que preocupa a todos
aquellos que poseen como dirección de notificación un área rural, veamos:
Notificación del Mandamiento de Pago 85

“En efecto, al interponer el recurso de reconsideración56 contra la Resolución


sancionatoria, la parte actora informó que “recibiré notificaciones en la
Finca denominada El Porvenir, ubicada en la Vereda Las Cruces, municipio
de Chocontá, camino que de la cabecera municipal va hacia El Pedregal
-vereda Las Cruces- vereda Chinatá.”

Esta Sección en sentencia del 2 de diciembre de 2004, Exp 13013,


Consejera Ponente María Inés Ortiz Barbosa y sentencia del 10 de
octubre de 2007, exp 15601, Consejero Ponente Juan Ángel Palacio
Hincapié, cuya controversia fue entre las mismas partes, con fundamento
en similares supuestos fácticos y jurídicos, fijó el siguiente criterio que
ahora se reitera:

Cuando se suministra una dirección rural, es un hecho conocido que


no hay servicio de correo hasta el predio, por lo tanto es deber de la
persona recoger en la oficina de Adpostal en la cabecera municipal la
correspondencia. Su conducta negligente al no reclamarla y los efectos
derivados de ella, debe sufrirlos quien incurre en ese descuido.

Más grave aún cuando el contribuyente confiere a un apoderado la


representación ante la autoridad tributaria y éste informa como dirección
procesal la rural señalada, pero incumple su deber profesional de estar
atento al desarrollo del proceso encomendado, que incluía entre otras
gestiones, reclamar la correspondencia en la oficina postal de Chocontá,
a sabiendas de que para la época, la notificación de las providencias de la
administración tributaria se hacía por correo, en los términos previstos en
el artículo 566 del E.T. 57.

Esgrimir el apoderado en este caso, la indebida notificación y por


consiguiente la violación del debido proceso, es pretender obtener
beneficio de su propia negligencia, lo cual es inadmisible.

Reitera la Sala lo expuesto en otras oportunidades sobre notificaciones


por correo en zonas rurales58, en particular en la sentencia de 9 de octubre
de 2003, M.P. Dr. Germán Ayala Mantilla, Expediente No. 10506, en el cual
el demandante es el mismo del sub judice. En esta oportunidad se dijo:

“Pues bien, en relación con la notificación por correo y el aviso de citación


a direcciones rurales, en las cuales no existe el servicio de correo, ha
sido reiterada la jurisprudencia de la Sala en el sentido de señalar que

56 Fl. 28 c.p.
57 Declarado inexequible por la Corte Constitucional en la sentencia C-096 de enero 31 de 2001.
58 En este sentido se ha pronunciado la Sala en reiteradas oportunidades: Sentencia del 23 de agosto de 1996,
expediente No 7759, con ponencia del Doctor Delio Gómez Leyva, reiterada en el fallo del 2 de julio de 1999,
expediente No 9234, actor, Inversiones Martínez y Villegas y Cía S en C., Sentencia de diciembre 1º de 1.994,
expediente No. 6095, actor Rafael Espinosa Hermanos y Cía., S.C.A., Magistrada ponente, doctora Consuelo
Sarria Olcos.
86 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

tal circunstancia, más que conducir a la falta de notificación, evidencia


un error o negligencia del administrado, que además de obstruir el
procedimiento administrativo de determinación y discusión del tributo,
implica la falta de legitimación para desvirtuar la notificación postal.

De manera que como en el caso que se analiza, las circunstancias


fácticas que se plantean en torno a la indebida notificación corresponden
a las que dieran origen al anterior pronunciamiento, hasta el punto que
la dirección procesal informada por la demandante, es exactamente la
misma que se ha venido informando en otros procesos objeto de decisión
por parte de la jurisdicción, como el que diera origen a la sentencia de
octubre 24 de 2002. Exp.13014 Actor Luis Eduardo Andrés Martínez,
C.P. Dra. Ligia López, debe concluirse que la notificación enviada a la
dirección informada por la apoderada de la actora se efectúo en debida
forma, como quiera que el hecho de su devolución no es imputable a la
Administración Tributaria, sino a la apoderada de la demandante, quien
informando una dirección rural debió estar atenta de su correspondencia
en la oficina postal de Chocontá”.

Estima la Sala que si el apoderado no reclamó la correspondencia, ello


se debió a su propio descuido y por consiguiente no puede imputársele
tal hecho a la Administración, ya que ésta envió los actos a la dirección
procesal suministrada por él.

En el caso de autos, consta en el expediente el Oficio del 13 de septiembre


de 200159 , en el cual el Jefe de la División Documentación le comunica
al secretario general del Tribunal Administrativo de Antioquia que :”el
pliego de cargos No. 226 de mayo 11 de 1994, enviado por la División de
Fiscalización Tributaria de la DIAN fue devuelto por el correo el 1 de julio
de 1994 y renotificado con planilla de correo No. 1918 de agosto 3/94 cuyo
envío no fue devuelto nuevamente por el correo”.

(…)

Es evidente la intención del apoderado del demandante de obstruir el


proceso administrativo al cambiar la dirección tributaria localizada en la
ciudad de Medellín, por la dirección procesal ubicada en zona rural del
municipio de Chocontá Cundinamarca, hecho que atenta contra el principio
de lealtad procesal, como lo ha sostenido la entidad demandada, pues
aún en el caso en que se pretendió hacer la notificación personal de uno
de los actos, tampoco fue reclamada en el correo la respectiva citación.

En consecuencia no hay la indebida notificación que esgrime el actor y por


ende carece de fundamento sostener que operó el silencio administrativo
positivo y que por falta de notificación los actos sancionatorios son
extemporáneos.” 60

59 Fl. 81 c.p.
60 Consejo de Estado, sentencia del 27 de Agosto de 2009, Exp. 16342 C.P. Hugo Fernando Bástidas Bárcenas
Notificación del Mandamiento de Pago 87

10.5. DEVOLUCIÓN DE CORREO.

Cuando se notifica por correo pueden ocurrir dos situaciones diferentes que
debe el ejecutor tener presente:

1. No se devuelve el correo
2. Se devuelve el correo

En el primero de los casos, y atendiendo las reglas de correo certificado


o mensajería especializada ya estudiados anteriormente, existe una
presunción de entrega de la correspondencia, presunción que se certifica
con la entrega de la colilla o planilla de correo donde consta la entrega de la
correspondencia (mandamiento de pago) a la dirección correcta.

En el segundo de los casos debe el ejecutor advertir si la devolución de


correo efectuada corresponde:

- A un correo enviado a una dirección incorrecta o

- A un correo enviado a una dirección correcta

La respuesta a estas dos preguntas tiene gran relevancia procesal dado


que de la respuesta que se obtenga, se generan obligaciones en cabeza del
ejecutor, como se señalan a continuación.

En el primero de los casos, debe el funcionario ejecutor dar cumplimiento a


lo señalado en el artículo 567 del Estatuto tributario que señala:

“Artículo 567. Corrección de actuaciones enviadas a dirección


errada. Cuando la liquidación de impuestos se hubiere enviado a una
dirección distinta de la registrada o de la posteriormente informada por el
contribuyente habrá lugar a corregir el error en cualquier tiempo enviándola
a la dirección correcta.

En este último caso, los términos legales sólo comenzarán a correr a partir
de la notificación hecha en debida forma.

La misma regla se aplicará en lo relativo al envío de citaciones,


requerimientos y otros comunicados.”

Es decir que si se envió la correspondencia a una dirección errada debe


el ejecutor proceder a reenviar la correspondencia a la dirección correcta,
teniendo en cuenta que en este evento los términos legales, solo inician a
partir de la notificación hecha en debida forma.
88 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

De otro lado y de presentarse la circunstancia de haber enviado la


correspondencia a la dirección correcta y a pesar de esto la misma es
devuelta por el correo, debe el ejecutor dar cabal cumplimiento al Artículo
568 del Estatuto Tributario Nacional, es decir efectuar la notificación
mediante aviso en un periódico de amplia circulación nacional o regional,
según corresponda.

“Artículo 568. Notificaciones devueltas por el correo. Modificado por


el Artículo 47 de la Ley 1111 de 2006. Las actuaciones de la administración
enviadas por correo, que por cualquier razón sean devueltas, serán
notificadas mediante aviso en un periódico de circulación nacional o
de circulación regional del lugar que corresponda a la última dirección
informada en el RUT; la notificación se entenderá surtida para efectos de
los términos de la administración, en la primera fecha de introducción al
correo, pero para el contribuyente, el término para responder o impugnar
se contará desde el día hábil siguiente, a la publicación del aviso o de la
corrección de la notificación. Lo anterior no se aplicará cuando la devolución
se produzca por notificación a una dirección distinta a la informada en el
RUT, en cuyo caso se deberá notificar a la dirección correcta dentro del
término legal.”

En este último caso, debe tenerse presente el conteo de los términos, ya


que los mismos cuentan desde fechas diferentes tanto para el ejecutor
como para el ejecutado.

Para el primero los términos cuentan desde la fecha de introducción al


correo del acto administrativo devuelto por el correo y para el ejecutado a
partir del día hábil siguiente a la publicación del aviso, con el cual se surte la
notificación, buscándose así protegerle al ejecutado el derecho de defensa
garantizando así el debido proceso y por ende el derecho de contradicción en
virtud del cual el ejecutado tiene la oportunidad de controvertir las decisiones
de la administración, en uso de los medios legales y bajo el amparo de los
principios orientadores de las actuaciones administrativas, consagrados en
el artículo tercero (3º) del Código Contencioso Administrativo.

“JURISPRUDENCIA: La Sección en abundante jurisprudencia, entre


otras, la contenida en la sentencia de septiembre 3 de 1993, Expediente
4869, M.P.Dra consuelo Sarria O., al interpretar el alcance del artículo 99
de la Ley 9 de 1983, norma incorporada en el artículo 567 del Estatuto
Tributario, ha precisado:

“La Sala ha dicho que la expresión “ en cualquier tiempo” del artículo 99


de la ley 9 de 1983, referida a la corrección del error de dirección incurrido
en los pliegos de liquidación del impuesto, citaciones, requerimientos y
demás comunicaciones, tiene el sentido lato que se desprende de su texto.
Notificación del Mandamiento de Pago 89

Se trata de un procedimiento excepcional instituido por el legislador


ordinario destinado a prevenir y reprimir al lado de disposiciones conexas,
el abuso en materia de “cambios de dirección” ante las unidades de
documentación de las administraciones de impuestos.

Dicho procedimiento conlleva un relevante espíritu de justicia, pues se


establece a favor de ambas partes, del contribuyente o responsable,
porque se permite formular sus objeciones y recursos y presentar sus
pruebas, y de la administración, porque enmendados sus yerros puede
renovar sus actuaciones con sujeción a la más estricta legalidad, en
ambos casos, como si no hubiera transcurrido el tiempo, o término alguno.

Precisamente el inciso segundo de la norma citada, dice que “ los


términos legales sólo comenzarán a correr a partir de la notificación hecha
en debida forma, debiendo entenderse por tales “términos legales” no
exclusivamente los que pertenecen al contribuyente o responsable, sino
aquellos de los que en razón del error que se corrige, no ha hecho uso la
administración.

La disposición transcrita no hizo otra cosa que reproducir el inciso final


del artículo 42 del Decreto 3803 de 1982, según el cual “ durante el
lapso comprendido entre la fecha en la cual se cometió el error y la de su
corrección, no correrá términos para la Administración Tributaria ni para
el contribuyente, razón por la cual no puede concluirse como lo hizo el
a quo, la extemporaneidad de la liquidación oficial”. (Consejo de Estado,
Sentencia del 18 de julio de 1997, Exp. 8355, C.P. Delio Gómez Leyva).

JURISPRUDENCIA. “Con relación al procedimiento de corrección de


error de actuaciones proferidas por la administración (v.gr. liquidaciones
oficiales de impuestos) que de conformidad con el artículo 99 de la Ley
9ª de 1983 (E.T., art. 567) puede hacerse en cualquier tiempo enviándola
a la dirección correcta, la Sala en repetidas oportunidades ha precisado
los efectos del procedimiento en cuestión, los cuales se traducen en la
restitución de términos, a la fecha en que se produjo el acto administrativo
incorrectamente notificado, presumiéndose según lo dispone el citado
artículo 99 que “durante el lapso comprendido entre la fecha en la cual
se cometió el error y la de su corrección, no correrán términos para la
administración tributaria ni para el contribuyente. 61

10.6. DESDE CUANDO SE CUENTAN LOS TÉRMINOS DE NOTIFICACIÓN


POR CORREO.

Si bien algunas de las normas establecidas en materia de notificación en


el Estatuto Tributario señalan que los términos cuentan desde la fecha “de
introducción al correo” debemos tener presente lo dispuesto por la Corte
61 Consejo de Estado, Sentencia del 27 de febrero de 1995, Expediente 5273, C.P. Dr. Delio Gómez Leyva.
90 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Constitucional mediante sentencia C-96 del 31 de enero del año 2001, que
declaró inexequible la parte final del artículo 566 del E.T. que establecía que
la notificación se entendería surtida en la fecha de introducción al correo.

Cabe señalar que la declaratoria de inexequibilidad de la Corte


Constitucional, Sentencia C-96/01 del 31-de enero de 2001, Expediente.
D-3102, M.P Dr. Álvaro Tafur Gálvis, recayó únicamente sobre la parte final
del artículo “…y se entenderá surtida en la fecha de introducción al correo”,
del artículo 566 del E.T.N, situación que afectó solamente la notificación por
correo de las providencias susceptibles de ser notificadas de esta forma.

Como quiera que a partir de la sentencia proferida por la Honorable Corte


Constitucional C-096 del 2001 la notificación al contribuyente se entiende
surtida una vez éste recibe copia del acto administrativo y no desde la fecha
de introducción al correo, es claro que para efectos de las notificaciones
que han sido surtidas con fecha posterior a la sentencia, debe tenerse en
cuenta como fecha de notificación del acto administrativo, el día en el que
el contribuyente ha sido notificado de la actuación administrativa, mediante
el recibo de la copia del acto administrativo, objeto de notificación.

No obstante debemos aclarar que en cuanto tiene que ver con la citación para
la notificación personal, los diez (10) días a que hace referencia el artículo
826 del Estatuto Tributario se cuentan “a partir de la fecha de introducción al
correo” tal y como lo ha manifestado la DIAN, mediante concepto N° 010270
del 15 de febrero de 2010 amparada entre otras en la sentencia C-929 de
2005 en donde se ha aclarado que el término para que el contribuyente
comparezca a notificarse personalmente de las providencias, se cuenta a
partir de la fecha de introducción al correo del aviso de citación, veamos:

“Frente al tema me permito manifestarle que mediante sentencia C-929 de


2005 la H. Corte Constitucional se pronunció sobre la exequibilidad de la
expresión `de la fecha de introducción al correo” contenida en el artículo
565 del Decreto 624 de 1989 (Estatuto Tributario), entre otros expresó los
siguientes argumentos:

“La forma de notificación de los actos proferidos por la administración


de impuestos tiene una regulación especial en el Estatuto Tributario,
consagrada en los artículos 563 y siguientes.( . . . ) el artículo 565
cuestionado señala las formas de notificación de las actuaciones de
la administración de impuestos, el cual dispone en el segundo inciso
que las providencias que decidan los recursos han de ser notificados
personalmente o por edicto si el contribuyente no comparece dentro de
los diez días siguientes a la fecha de introducción del aviso de citación al
correo.
Notificación del Mandamiento de Pago 91

Se observa pues, que el legislador dentro de su amplia libertad


configurativa, estableció un término (diez días) para que el contribuyente
comparezca a notificarse personalmente de los actos administrativos que
resuelven los recursos personalmente, y sólo en defecto de esta, por no
presentarse el recurrente citado, procede la notificación por edicto. Quiero
ello decir, que la notificación personal es la forma principal de notificar esa
clase de actos y la notificación por edicto la forma subsidiaria...”.

Ahora bien, el actor cita como antecedentes jurisprudenciales aplicables


al examen del artículo 565 del Estatuto Tributario, la Sentencia C-096 de
2001 mediante la cual se declaró inexequible la expresión y se entenderá
surtida en la fecha de introducción al correo”, contenida en- el artículo 566
del citado Estatuto, de la versión- anterior a la modificación de que fue
objeto por parte del anterior artículo 5o de la Ley 788 de 2002.

En esa oportunidad, la Corte encontró que desconocía el principio de


publicidad y el debido proceso, que se asumiera por la ley que el afectado
conocía del contenido del .acto _administrativo con la sola introducción
de su copia al correo, momento a partir del cual se entendía surtida la
notificación. Resulta claro que del contenido normativo del artículo 565
del Decreto Ley 624 de 1989, no se deduce la misma situación, pues
se repite, la parte acusada del artículo 565 dispone que a partir de la
fecha de introducción al correo del aviso de citación, se contarán diez días
para que el contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante
comparezca a notificarse personalmente del acto administrativo que
resuelve el recurso interpuesto, pero no, que desde ese momento, es
decir, desde la introducción al correo del aviso de citación, se recibe la
providencia en cuestión y, por ende, se entiende surtida la notificación.

De lo expuesto no encuentra la Corte que se viole el principio general


de publicidad de los actos administrativos que profiera la administración
tributaria, sino por el contrario el aviso de citación a que se refiere el
precepto acusado, tiene por finalidad enterar al destinatario que el recurso
interpuesto ya fue resuelto a fin de que comparezca para ser notificado
personalmente, con lo cual se garantiza el derecho al debido proceso,
y sólo en defecto de su comparecencia se procede a la notificación
por edicto, poniendo de presente los principios de justicia y equidad
consagrados en el articulo 95-9 de la Carta Política...”

Igualmente sobre las formas de notificación de las actuaciones de la


Administración el H. Consejo de Estado en Sentencia del 17 de julio de
2008, Actor Domesa de Colombia S.A., Radicado 25000-23-27-000-2002-
01319-01 (15835) además de retomar los planteamientos descritos en la
sentencia que declaró la exequibilidad del artículo 565 del Decreto 0624
de 1989 expresó:

“...queda claro que el termino para la comparecencia del citado debe


contarse a partir de la fecha de introducción al correo del aviso de
citación, como lo dispone el artículo 565 del E.T. ...” (Negrilla fuera de
texto)
92 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Ahora bien, en cuanto a los efectos de la exequibilidad de las normas


dijo la H. Corte en Sentencia C-492/00 (Magistrado Ponente Dr. Alejandro
Martínez Caballero, frente a la demanda de inconstitucionalidad contra el
parágrafo del artículo 20 de la Ley 393 de 1997) lo siguiente:

“/... En efecto, en el caso de los fallos en los que la Corte Constitucional


declara la exequibilidad de un precepto, a menos que sea ella relativa
y así lo haya expresado la propia sentencia -dejando a salvo aspectos
diferentes allí no contemplados, que pueden dar lugar a futuras
demandas-, se produce el fenómeno de la cosa juzgada constitucional,
prevista en el artículo 243 de la Constitución. Y, entonces, si ya por vía
general, obligatoria y erga omnes se ha dicho por quien tiene la autoridad
para hacerlo que la disposición no quebranta principio ni precepto alguno
de la Carta Política, carecería de todo *fundamento jurídico la actitud del
servidor público que, sobre la base de una discrepancia con la Constitución
-encontrada por él pero no por el Juez de Constitucionalidad-pretendiera
dejar de aplicar la norma legal que lo obliga en un proceso, actuación o
asunto concreto. .

De lo anterior se concluye que en relación con la confrontación de normas


con la Constitución Política los contenidos y las consecuencias jurídicas de
esa doctrina constitucional tienen efectos vinculantes. Esta es la razón por
la cual el Concepto 076621 del 27 de noviembre de 2002 debe reiterarse,
pues los presupuestos jurídicos que dieron su origen concuerdan en el
punto expuesto con la sentencia que declaro la exequibilidad del aparte
pertinente del inciso segundo del artículo 565 del Estatuto Tributario.

10.7. NOTIFICACION POR AVISO DEL MANDAMIENTO DE PAGO

La notificación por aviso del mandamiento de pago, según lo señalado


en el Artículo 568 del Estatuto Tributario, se surte solamente cuando el
mandamiento de pago notificado por correo a la dirección correcta, es
devuelto

“Artículo 568. Notificaciones devueltas por el correo. Modificado por


el Artículo 47 de la Ley 1111 de 2006. Las actuaciones de la administración
enviadas por correo, que por cualquier razón sean devueltas, serán
notificadas mediante aviso en un periódico de circulación nacional o
de circulación regional del lugar que corresponda a la última dirección
informada en el RUT; la notificación se entenderá surtida para efectos de
los términos de la administración, en la primera fecha de introducción al
correo, pero para el contribuyente, el término para responder o impugnar
se contará desde el día hábil siguiente, a la publicación del aviso o de la
corrección de la notificación. Lo anterior no se aplicará cuando la devolución
se produzca por notificación a una dirección distinta a la informada en el
RUT, en cuyo caso se deberá notificar a la dirección correcta dentro del
término legal.”
Notificación del Mandamiento de Pago 93

En este último caso, debe tenerse presente el conteo de los términos, ya


que los mismos cuentan desde fechas diferentes tanto para el ejecutor
como para el ejecutado.

Para el primero los términos cuentan desde la fecha de introducción al


correo del acto administrativo devuelto por el correo y para el ejecutado a
partir del día hábil siguiente a la publicación del aviso, con el cual se surte la
notificación, buscándose así protegerle al ejecutado el derecho de defensa
garantizando así el debido proceso y por ende el derecho de contradicción
en virtud del cual el ejecutado tiene la oportunidad de controvertir las
decisiones de la administración.

10.8. NOTIFICACION POR PUBLICACION DEL MANDAMIENTO DE PAGO

Esta figura señalada en los artículos 563 y 565 del Estatuto Tributario
solo es procedente cuando se desconozca la dirección del deudor y no
sea posible establecerla por los medios que la Administración tiene a su
alcance, recordemos los apartes normativos que señalan este procedimiento
especial:

Artículo 563. Dirección para notificaciones.

(…)

Cuando no haya sido posible establecer la dirección del contribuyente,


responsable, agente retenedor o declarante, por ninguno de los medios
señalados en el inciso anterior, los actos de la administración, le serán
notificados por medio de publicación en un diario de amplia circulación.

Artículo 565. Formas de notificación de las actuaciones de la


administración tributaria.

(…)

Parágrafo 1.

(…)

Cuando el contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante, no


hubiere informado una dirección a la administración tributaria, la actuación
administrativa correspondiente se podrá notificar a la que establezca la
administración mediante verificación directa o mediante la utilización de
guías telefónicas, directorios y en general de información oficial, comercial
o bancaria. Cuando no haya sido posible establecer la dirección del
contribuyente, responsable, agente retenedor o declarante, por ninguno de
los medios señalados, los actos de la administración le serán notificados
por medio de publicación en un periódico de circulación nacional.
94 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Así las cosas, la notificación por “publicación” sólo opera en los casos en
que se hace imposible establecer la dirección de notificación del deudor
y se precisa efectuar la notificación del mandamiento de pago, este tipo
de notificación no debe confundirse con el de notificación por “aviso” en
periódico a que se refiere el artículo 568 del Estatuto Tributario pues ésta es
una formalidad de las notificaciones devueltas por el correo.

10.9. NOTIFICACIÓN POR CONDUCTA CONCLUYENTE

Sin bien la notificación por conducta concluyente no es un tema tratado de


forma puntual por el Estatuto Tributario Nacional, no es menos cierto que
más que un medio, es una inferencia que se obtiene de la actitud de un
sujeto procesal, que sin haber sido notificado del mandamiento de pago que
debía conocer, interpone excepciones contra el mismo o actúa en diligencia
o trámite a que se refiere el pronunciamiento.

Cuando se hubiere omitido notificación, o se hubiere hecho en forma


irregular a quién debió hacerse personalmente o por correo, se entenderá
cumplida para todos los efectos, si la persona hubiera actuando en diligencia
o trámite a que se refiere la decisión, o interpuesto excepciones contra
el mandamiento de pago o de cualquier forma la menciona en escrito o
diligencia que se encuentre en el expediente. Esta clase de notificación es
un medio de convalidación de actuaciones irregulares.

La notificación por conducta concluyente es una garantía tanto para la


administración como para el administrado, que no se da por sí sola sin
que medie comportamiento del que se deduzca inequívocamente el
conocimiento del acto; y que le abre así las puertas para el control de los
actos administrativos cuando la administración no cumple con el deber
de notificación que tiene. Y es por eso que la persona, que debiendo
ser notificada personalmente por edicto de un acto que lo perjudica o
afecta, puede asumir las siguientes actitudes: aceptar que lo conoce para
conformarse con él; recurrirlo gubernativamente cuando ello sea posible
o impugnarlo jurisdiccionalmente cuando no tenga recursos o sólo sea
susceptible de reposición.

La notificación por conducta concluyente es predicable en ordenamiento


tributario, con arreglo a las circunstancias señaladas en el Artículo 330 del
Código de Procedimiento Civil

“Artículo 330. Notificación por conducta concluyente. Cuando una


parte o un tercero manifieste que conoce determinada providencia o
la mencione en escrito que lleve su firma, o verbalmente durante una
Notificación del Mandamiento de Pago 95

audiencia o diligencia, si queda constancia en el acta, se considerará


notificada personalmente de dicha providencia en la fecha de presentación
del escrito o de la audiencia o diligencia.

Cuando una parte retire el expediente de la secretaría en los casos


autorizados por la ley, se entenderá notificada desde el vencimiento del
término para su devolución, de todas las providencias que aparezcan en
aquél y que por cualquier motivo no le hayan sido notificadas.

Cuando el escrito en que se otorgue poder a un abogado se presente en el


juzgado de conocimiento se entenderá surtida la notificación por conducta
concluyente de todas las providencias que se hayan dictado, inclusive el
auto admisorio de la demanda o del mandamiento de pago, el día en que
se notifique el auto que reconoce personería, a menos que la notificación
se haya surtido con anterioridad.

Cuando se decrete la nulidad por indebida notificación de una providencia,


ésta se entenderá surtida por conducta concluyente al día siguiente
de la ejecutoria del auto que la decretó o de la notificación del auto de
obedecimiento a lo resuelto por el superior. “

Así mismo es prudente revisar algo de la jurisprudencia sobre el asunto:

JURISPRUDENCIA. “Tanto el Artículo 209 de la Constitución Política


como el Artículo 3º del C.C.A., tienen estatuido que uno de los principios
que debe orientar la función administrativa, y dentro de ésta las
actuaciones administrativas, es el de la publicidad, que para el caso de
los actos administrativos de carácter particular se traduce en ponerlos en
conocimiento del interesado a través de su notificación. El C.C.A. tiene
previstas tres formas de notificación, a saber: la personal, por edicto y por
conducta concluyente. Respecto de la notificación personal, los artículos
44 y 47 ibidem prevén que si no hay un medio más eficaz de informar
al interesado, ella se practica enviando a éste por correo certificado una
citación a la dirección por él señalada, bien sea en su petición inicial o
en la nueva que hubiere reportado con posterioridad, dentro de los cinco
días siguientes a la expedición del acto. En lo tocante a su práctica
consagran dichos preceptos que se realiza entregando al notificado copia
íntegra, auténtica y gratuita del acto e informándole al mismo en el texto
de la notificación o en la parte resolutiva del acto —como es la práctica
inveterada en Colombia, sobre los recursos gubernativos que proceden,
ante que autoridad deben interponerse y los plazos para hacerlo. En
cuanto se refiere a la notificación por edicto el Artículo 45 ibidem prescribe
que ésta tiene carácter subsidiario, pues procede cuando no se pudiere
hacer la notificación personal dentro de los cinco días siguientes al envío
de la citación. En lo que respecta a su práctica prevé dicha disposición
que se efectúa mediante la fijación de un edicto en un lugar público del
96 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

respectivo Despacho, por el término de diez días, con inserción de la


parte resolutiva del acto. Debe constar igualmente la información acerca
de los recursos gubernativos que proceden, ante qué autoridad deben
interponerse los plazos para hacerlo. En lo que concierne a la notificación
por conducta concluyente el Artículo 48 ibidem prevé que ella tiene por
finalidad convalidar o legitimar la falta o irregularidades en la notificación
personal o por edicto y sólo procede en dos eventos: cuando el interesado
conviene con el acto, esto es, está de acuerdo con el contenido del
mismo; o cuando el mismo utiliza en tiempo los recursos gubernativos
procedentes.”62

JURISPRUDENCIA. Basta con mencionar que se conoce determinada


providencia para que opere esta clase de notificación. “(...) dejando de lado
la discusión sobre si la demandada intentó o logró darse por notificada o si
debía concurrir al despacho para ello, es lo cierto que para la notificación
por conducta concluyente basta que la parte mencione la providencia
(CPC, art. 330 “o la mencione en escrito que lleva su firma”). Entonces
si la abstrusa construcción gramatical empleada no permite descifrar la
intención de las partes, sí revela que se trata de un escrito que lleva firma
auténtica de la demandada y allí se hace mención al auto de mandamiento
de pago librado en contra de aquella demandada.

En suma basta que haya un escrito, de autoría de una de las partes y,


que haga mención a la providencia pendiente de notificación, sin que sea
necesario descifrar la intención de las partes”. 63

Así las cosas, la notificación por conducta concluyente es un mecanismo


válido de notificación, sin embargo el mismo es excepcional y no remplaza
de forma alguna a las obligaciones que tiene el ente ejecutor de efectuar
la notificación conforme con las reglas señaladas en el Estatuto Tributario
Nacional, en las actuaciones de notificación al mandamiento de pago.

62 Consejo de Estado, Exp. 3690, sentencia del 13 de junio de 1996, C.P. Dr. Ernesto Rafael Ariza Muñoz.
63 Tribunal Superior de Bogotá, Auto de abril 21 de 1994, CVI-286. M.P. Edgardo Villamil Portilla.
Acumulación de Procesos y de Títulos 97

ACUMULACIÓN DE
PROCESOS Y DE TÍTULOS
CAPÍTULO

11
11.1. LA ACUMULACION DENTRO DEL PROCESO ADMINISTRATIVO
COACTIVO

La acumulación de procesos es la reunión en un mismo proceso de dos o


más actos procesales en donde se tienen dos o más pretensiones, para que
en respeto del principio de economía se trabaje de forma unificada

11.2. LA ACUMULACION DE PROCESOS

En materia de acumulación procesal, los artículos 541 a 543 del Código de


Procedimiento Civil, señala:

“Artículo 541. Acumulación de procesos ejecutivos. Se podrán


acumular varios procesos ejecutivos, si tienen un demandado común y
estuvieren notificados sus mandamientos, siempre que se encuentren en
alguno de los casos previstos en el artículo 157, o cuando quien pida la
acumulación pretenda perseguir total o parcialmente los mismos bienes
del demandado, con la limitación establecida en el numeral 3º de dicho
artículo.

Para la acumulación se aplicarán las siguientes reglas:

1. Podrá formular la solicitud el ejecutante del proceso que se pretende


acumular, o el ejecutado en el caso previsto en el numeral 2º del artículo
157.

2. No procederá la acumulación si en cualquiera de los procesos ejecutivos


hubiere precluido la oportunidad señalada en el inciso primero del
artículo 540. En el certificado de que trata el inciso primero del artículo
159 se indicará esta circunstancia, y si a pesar de ello se solicita el
expediente para la acumulación, el juez se abstendrá de remitirlo,
haciendo saber la razón de su negativa.
98 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

3. No son acumulables procesos ejecutivos seguidos ante jueces de


distintas jurisdicciones.

4. La solicitud y el trámite de la acumulación se sujetarán a lo dispuesto


en los artículos 158 y 159, y el auto que la decrete dispondrá el
emplazamiento ordenado en el numeral 3º del artículo precedente; de
allí en adelante se aplicará en lo pertinente lo estatuido en los numerales
4º, 5º y 6º del mismo artículo.

5. Los embargos y secuestros practicados en los procesos acumulados


surtirán efectos respecto de todos los acreedores.

Artículo 542. Acumulación de embargos en procesos de diferentes


jurisdicciones. Cuando en un proceso ejecutivo laboral o de jurisdicción
coactiva se decrete el embargo de bienes embargados en uno civil, la
medida se comunicará inmediatamente, sin necesidad de auto que lo
ordene, al juez civil, por oficio en el que se indicarán el nombre de las
partes y los bienes de que se trate.

El proceso civil se adelantará hasta el remate de dichos bienes, pero antes


de la entrega de su producto al ejecutante, se solicitará al juez laboral o
fiscal la liquidación definitiva y en firme, debidamente especificada, del
crédito que ante él se cobra y de las costas, y con base en ella, por medio
de auto, se hará la distribución entre todos los acreedores, de acuerdo
con la prelación establecida en la ley sustancial. Dicho auto es apelable
en el efecto diferido y se comunicará por oficio al juez del proceso laboral
o al funcionario que adelante el de jurisdicción coactiva. Tanto éste como
el acreedor laboral, podrán interponer reposición y apelación en el efecto
mencionado, dentro de los diez días siguientes al de la remisión del oficio
por correo certificado, o de su entrega por un subalterno del juzgado si
fuere en el mismo lugar.

Los gastos hechos para el embargo, secuestro, avalúo y remate de los


bienes en el proceso civil, se cancelarán con el producto del remate y
con preferencia al pago de los créditos laborales y fiscales.

Cuando el embargo se haya practicado en el proceso laboral o fiscal, en


el civil podrá pedirse el del remanente que pueda quedar en aquél y el de
los bienes que se llegaren a desembargar.

Artículo 543. Persecución en un proceso civil de bienes embargados


en otro. Quien pretenda perseguir ejecutivamente en un proceso civil
bienes embargados en otro proceso y no quiera o no pueda promover
la acumulación de ellos, podrá pedir el embargo de los que por cualquier
causa se llegaren a desembargar y el del remanente del producto de los
embargados.
Acumulación de Procesos y de Títulos 99

Cuando estuviere vigente alguna de las medidas contempladas en el


inciso primero, la solicitud para suspender el proceso deberá estar suscrita
también por los acreedores que pidieron aquéllas. Los mismos acreedores
podrán presentar la solicitud de orden de remate y hacer las publicaciones
para el mismo.

La orden de embargo se comunicará por oficio al juez que conoce del


primer proceso, cuyo secretario dejará testimonio del día y la hora en que
la reciba, momento desde el cual se considerará consumado el embargo
a menos que exista otro anterior, y así lo hará saber el juez que libró el
oficio.

Practicado el remate de todos los bienes y cancelado el crédito y las


costas, el juez remitirá el remanente al funcionario que decretó el embargo
de éste.

Cuando el proceso termine por desistimiento o transacción, o si después


de hecho el pago a los acreedores hubiere bienes sobrantes, éstos o
todos los perseguidos, según fuere el caso, se considerarán embargados
por el juez que decretó el embargo del remanente o de los bienes que se
desembarguen, a quien se remitirá copia de las diligencias de embargo y
secuestro para que surtan efectos en el segundo proceso. Si se trata de
bienes sujetos a registro, se comunicará al registrador correspondiente
que el embargo continúa vigente en el otro proceso.

También se remitirá al mencionado juez copia del avalúo, que tendrá


eficacia en el proceso de que conoce, dándole traslado al ejecutante por
el término y para los fines consagrados en el artículo 238. La objeción se
decidirá en tal caso por auto apelable en el efecto diferido.”

Si bien el Código de Procedimiento Civil, señala la posibilidad de establecer


acumulaciones procesales por reglas de remisión, en la práctica la
acumulación es poco viable en materia de cobro, ya que en todo caso se
requeriría:

1. Que se realizara la acumulación procesal antes de aprobarse el remate


de los bienes embargados.

2. Que los procesos a acumular, se encuentren dentro de la misma


instancia procesal, es decir que si se han dado trámite de excepciones,
y recursos, los mismos deben encontrarse finiquitados, es decir que la
etapa de discusión debe estar agotada.
100 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

11.3. LA ACUMULACION DE TITULOS

El parágrafo único del artículo 826 del Estatuto tributario, señala que el
mandamiento de pago, podrá referirse a más de un título ejecutivo generado
en contra del mismo deudor:

“Artículo 826. Mandamiento de pago.

(…)

Parágrafo El mandamiento de pago podrá referirse a más de un título


ejecutivo del mismo deudor.” (Se subraya)

Bajo esta norma, se entiende que en primera medida para que pueda
acumularse títulos, se requiere que se trate del mismo ejecutado, lo cual
suena lógico, y se permite que dentro del mismo mandamiento de pago
se vinculen varias vigencias de un mismo impuesto, o varias acreencias
de diferentes impuestos que sean administrados por el ente tributario
cobrador, así las mismas se encuentren en diferentes títulos tal como sería
la combinación de títulos generados por declaraciones privadas con títulos
generados en liquidaciones oficiales, etc.

Esta regla puede ser traslada a entes no tributarios, lo que es claro es que
los mandamientos de pagos pueden en el evento de acumularse los títulos
establecer los medios de defensa establecidos en la norma tributaria y
efectuar el análisis de fondo de cada excepción que se presente.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 101

LAS EXCEPCIONES
DENTRO DEL PROCESO
ADMINISTRATIVO COACTIVO
CAPÍTULO

12
La excepción es un vocablo derivado del latín exceptio, La exceptio se
originó en la etapa del proceso por fórmulas del derecho romano como
un medio de defensa del demandado. Consistía en una cláusula que el
magistrado, a petición del demandado, insertaba en la fórmula para que
el juez, si resultaban probadas las circunstancias de hecho alegadas por
el demandado, absolviera a éste, aun cuando se consideraba fundada
la intentio del actor. La posición de la exceptio en la fórmula era entre la
intentio y la condemnatio.

Existen dos tipos básicos dentro del ordenamiento jurídico Colombiano, a


saber las excepciones de forma y de fondo, veamos.

Excepciones de fondo. Es el poder que tiene el demandado para oponer,


frente a la pretensión del actor, aquellas cuestiones que afecten la validez
de la relación procesal e impidan un pronunciamiento de fondo sobre dicha
pretensión, o aquellas cuestiones que, por contradecir el fundamento de la
pretensión, procuran un pronunciamiento de fondo absoluto, al contradecir
la fundamentación misma de dicha pretensión y procuran una sentencia
desestimatoria.

Excepciones de Forma. Son las cuestiones concretas que el demandado


plantea frente a la pretensión del actor, con el objeto de oponerse a
la continuación del proceso, alegando que no se han satisfecho los
presupuestos procesales, Es decir, dentro este sentido concreto de las
excepciones procesales objetan la válida integración de la relación procesal
e impiden un pronunciamiento de fondo sobre la pretensión del actor.

En materia tributaria esta clasificación de fondo y forma no existe, partiendo


de un principio y es que en la etapa de cobro no deben debatirse situaciones
102 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

que debieron ser debatidas en vía gubernativa, lo que impide que se


pronuncie el ejecutor de fondo sobre la constitución de la obligación como
tal.

Decimos entonces que dentro del proceso administrativo de cobro existen


las excepciones contra el mandamiento de pago, señaladas en el artículo
831 del Estatuto Tributario Nacional, a saber:

“Artículo 831. Excepciones. Contra el mandamiento de pago procederán


las siguientes excepciones:

1. El pago efectivo.

2. La existencia de acuerdo de pago.

3. La de falta de ejecutoria del título.

4. La pérdida de ejecutoria del título por revocación o suspensión


provisional del acto administrativo, hecha por autoridad competente.

5. La interposición de demandas de restablecimiento del derecho o de


proceso de revisión de impuestos ante la jurisdicción de lo contencioso-
administrativo.

6. La prescripción de la acción de cobro.

7. La falta de título ejecutivo o incompetencia del funcionario que lo


profirió.

Parágrafo. Contra el mandamiento de pago que vincule los deudores


solidarios procederán además, las siguientes excepciones:

1. La calidad de deudor solidario.

2. La indebida tasación del monto de la deuda.”

Así las cosas, entraremos a analizar cada una de las diferentes excepciones
aplicables en materia del procedimiento administrativo de cobro coactivo.

12.1. PAGO.

El pago es uno de los mecanismos principales para extinguir las obligaciones,


se puede afirmar que es el modo normal a través del cual se produce la
extinción de la obligación tributaria y no tributaria, en otras palabras es
la conducta mediante la cual el deudor se libera de las obligaciones y se
satisfacen las obligaciones a cargo del acreedor.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 103

Como ejecutores, el funcionario de cobro debe recordar que esta figura es


el objeto de su trabajo, y debe realizar las actividades tendientes al mismo,
como lo es el señalar medidas preventivas, (embargos y secuestros, etc.)

12.2. ACUERDO DE PAGO

El acuerdo de pago es otra de las excepciones válidas en materia del


proceso de cobro coactivo, ya que las facilidades de pago tienen dentro
del trámite procesal dos tipos diferentes de efectos, bien como interrupción
de la prescripción de la obligación o de suspensión del proceso de cobro,
veamos:

El artículo 818 del Estatuto Tributario Nacional, señala , las causales de


interrupción de de la prescripción, entre ellas vale destacar que en su
inciso primero señalad de forma textual que el término de la prescripción
de la acción de cobro se interrumpe por el otorgamiento de facilidades para
el pago, facilidades que deben ser concedidas con el lleno de requisitos
señalados en los artículos 814 y siguientes del Estatuto Tributario Nacional,
artículos que pueden aplicar de forma parcial a los entes no tributarios en
virtud de lo señalado en la Ley 1066 de 2006 y el Decreto Reglamentario
4473 de 2006, (Artículos 3º y 4º)

Por su parte el artículo 841 del mismo estatuto, señala los efectos del
otorgamiento de facilidades de pago dentro del proceso administrativo de
cobro:

“Artículo 841. Suspensión por acuerdo de pago. En cualquier etapa


del procedimiento administrativo coactivo el deudor podrá celebrar un
acuerdo de pago con la administración, en cuyo caso se suspenderá el
procedimiento y se podrán levantar las medidas preventivas que hubieren
sido decretadas.

Sin perjuicio de la exigibilidad de garantías, cuando se declare el


incumplimiento del acuerdo de pago, deberá reanudarse el procedimiento
si aquéllas no son suficientes para cubrir la totalidad de la deuda.”

Demos precisar que las facilidades de pago de las entidades públicas


deben respetar no solo las reglas procedimentales para su concesión,
sino que de forma adicional deben acatar las reglas de fondo (garantías,
plazos, imputación, cobro de intereses) señaladas en la Ley 1066
y normas reglamentarias, para que se garantice así el pago de las
obligaciones a favor del ente público
104 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

12.3. FALTA DE EJECUTORIA DEL TÍTULO (VER CAPÍTULO VII DEL


PRESENTE DOCUMENTO)

12.4. LA PÉRDIDA DE EJECUTORIA DEL TÍTULO POR REVOCACIÓN


O SUSPENSIÓN PROVISIONAL DEL ACTO ADMINISTRATIVO
HECHA POR AUTORIDAD COMPETENTE. (VER CAPÍTULO VII
DEL PRESENTE DOCUMENTO)

12.5. LA INTERPOSICIÓN DE DEMANDAS DE RESTABLECIMIENTO DEL


DERECHO O DE PROCESO DE REVISIÓN DE IMPUESTOS ANTE
LA JURISDICCIÓN DE LO CONTENCIOSO-ADMINISTRATIVO.
(VER CAPÍTULO VII DEL PRESENTE DOCUMENTO)

12.6. LA PRESCRIPCIÓN DE LA ACCIÓN DE COBRO

En primera instancia entraremos a definir, que debe entenderse por


prescripción, al respecto el artículo 2512 del Código Civil la define como:

“ART. 2512.- La Prescripción es un modo de adquirir las cosas ajenas,


o de extinguir las acciones o derechos ajenos, por haberse poseído las
cosas y no haberse ejercido dichas acciones y derechos durante cierto
lapso de tiempo, y concurriendo los demás requisitos legales.

Se prescribe una acción o derecho, cuando se extingue por la prescripción”.

La Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Civil, en Sentencia de


octubre 20 de 1971, consideró:

“El artículo 2512 del Código Civil distingue la prescripción adquisitiva o


usucapión de la extintiva, la primera es un modo de adquirir el dominio
de las cosas ajenas que están en el comercio, por haber sido poseídas
con las condiciones legales; la segunda es un modo de extinguir las
acciones o derechos ajenos por no haberse ejercido durante cierto tiempo
y siempre que concurran los demás requisitos de la ley. Aquella dada su
naturaleza, ha de hacerse valer como pretensión a efecto de obtener la
declaración judicial de que el bien pertenece al demandante por haberlo
adquirido por el modo de la usucapión; la otra, en cambio, constituye
una excepción encaminada a paralizar la acción del demandante, y debe
alegarse expresamente por el demandado”.

En materia tributaria encontramos que la palabra prescripción se encuentra


señalada en el Estatuto Tributario en dos artículos diferentes a saber, el
artículo 638 y el artículo 817, como lo veremos a continuación:
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 105

“Artículo 638. Prescripción de la facultad para imponer sanciones.


Modificado por el artículo 64 de la Ley 6ª de 1992. Cuando las sanciones
se impongan en liquidaciones oficiales, la facultad para imponerlas prescribe
en el mismo término que existe para practicar la respectiva liquidación
oficial. Cuando las sanciones se impongan en resolución independiente,
deberá formularse el pliego de cargos correspondiente, dentro de los dos
años siguientes a la fecha en que se presentó la declaración de renta y
complementarios o de ingresos y patrimonio, del período durante el cual
ocurrió la irregularidad sancionable o cesó la irregularidad, para el caso
de las infracciones continuadas. Salvo en el caso de la sanción por no
declarar, de los intereses de mora, y de las sanciones previstas en los
artículos 659, 659-1 y 660 del estatuto tributario, las cuales prescriben en
el término de cinco años..

(…)”

“Artículo 817. Término de prescripción de la acción de cobro.


Modificado por el Artículo 86 de la Ley 788 de 2002. La acción de cobro
de las obligaciones fiscales, prescribe en el término de cinco (5) años,
contados a partir de:

Sobre estas disposiciones es necesario precisar que las dos normas utilizan
la misma terminología (Prescripción), la misma debe verse en dos caminos
diferentes, la señalada en el artículo 817 que corresponde al caso en
estudio y que versa sobre la prescripción de la obligación de cobro, que
puede ser utilizada como excepción al mandamiento de pago y de otro
lado la consignada en el artículo 638 del estatuto tributario que aunque es
denominada por este como “prescripción” corresponde realmente a la de
caducidad de la acción de fiscalización tributaria, que es el término que posee
la administración tributaria (Nacional, departamental o distrital y municipal)
para realizar un proceso de determinación oficial a los contribuyentes que
voluntariamente y dentro de los plazos señalados no cumplieron con la
obligación de declarar y pagar un determinado impuesto.

Esta caducidad (prescripción) ocurre porque se extingue para el ente


tributario como sujeto activo del tributo el derecho a exigir la declaración
y pago del mismo y por consiguiente no puede ejercer las acciones de
fiscalización que obliguen al contribuyente a presentar su declaración.

Conforme a lo anterior, la obligación de declarar, vista desde la perspectiva


impositiva de la administración, esto es, como el poder exorbitante de exigir
que el contribuyente cumpla con una de sus obligaciones tributarias cual es
la autoliquidación o determinación del tributo, o para suplir tal omisión con
un acto oficial, Caduca (prescribe) en el término de cinco (5) años contados
106 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

desde que se hizo exigible la obligación, esto es, desde que venció el plazo
máximo otorgado por la administración para cumplir oportunamente con el
deber.

Sobre la caducidad de la acción de fiscalización se ha pronunciado la Corte


Suprema de Justicia, veamos

“No sobra anotar que el término de caducidad de las acciones o derechos


corresponde señalarlo al legislador y que el fin primordial de este instituto
jurídico, es el de dar seguridad a la colectividad, la cual se vería seriamente
afectada si se prolongan en el tiempo en forma indefinida las relaciones
jurídicas, debido no sólo a la negligencia, inactividad o incuria del titular de
los derechos, sino al vencimiento objetivo del plazo. Es que en el campo
del derecho, las personas deben obrar con diligencia y cuidado para
defender sus intereses (jus vigilantibus scriptum) y si la ley ha estatuido
un plazo para que se inicie una acción, se cumpla un deber, o se ejecute
un acto y el interesado lo deja vencer, pierde definitivamente la posibilidad
para reclamar posteriormente el reconocimiento del derecho.

(…)

En el presente caso no existe el tercer elemento, en consecuencia mal


puede hablarse de enriquecimiento injusto, y por el contrario hay mandato
legal que permite al deudor invocar la extinción de su obligación de pagar
por haberse operado el fenómeno de la caducidad, la cual además debe
ser declarada de oficio. En efecto, si los interesados no solicitan a la
administración de impuestos la compensación o devolución de impuestos
dentro de los dos años fijados en los artículos 816 y 854 del estatuto
tributario, pierden el derecho a reclamarlos posteriormente y esta causa
de extinción, prevista por la ley, es justa”.64. (Subrayados fuera de texto).

Precisado lo anterior, debemos hacer una claridad respecto de la aplicación


de los términos de prescripción, ya que nos encontramos frente a dos
mundos totalmente diferentes, uno el primero los términos de prescripción
aplicables a los entes tributarios y dos el término aplicable a los entes no
tributarios

a. Términos de Prescripción para entes tributarios

Los entes que administran impuestos, de cualquier orden, llámense


nacionales, departamentales o distritales y municipales, a estos entes
tributarios, les aplica el término de prescripción señalado en el artículo 817
del Estatuto Tributario Nacional, a saber:

64 Corte Suprema de Justicia, Sala. Plena, Sent. feb. 17/90.


Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 107

“Artículo 817. Término de prescripción de la acción de cobro.


Modificado por el Artículo 86 de la Ley 788 de 2002. La acción de cobro
de las obligaciones fiscales, prescribe en el término de cinco (5) años,
contados a partir de:

1. La fecha de vencimiento del término para declarar, fijado por el Gobierno


Nacional, para las declaraciones presentadas oportunamente.

2. La fecha de presentación de la declaración, en el caso de las


presentadas en forma extemporánea.

3. La fecha de presentación de la declaración de corrección, en relación


con los mayores valores.

4. La fecha de ejecutoria del respectivo acto administrativo de


determinación o discusión.

Modificado por el artículo 8 de la Ley 1066 de Julio 29 de 2006. La


competencia para decretar la prescripción de la acción de cobro será de
los Administradores de Impuestos o de Impuestos y Aduanas Nacionales
respectivos, y será decretada de oficio o a petición de parte.”

Esta disposición nos señala que el término de prescripción es de cinco (5)


años contados a partir de la fecha en que se hizo exigible la obligación
tributaria.

Por último es importante recordar a los entes tributarios territoriales que no


les está permitido (como lo han realizado algunos) el cambiar los términos de
prescripción de la obligación tributaria, tal y como lo ha entendido el Consejo
de Estado en variados fallos, de los cuales nos permitimos transcribir uno
a continuación:

“JURISPRUDENCIA. Prescripción

3.2 La prescripción de la acción de cobro en el Estatuto Tributario.

El decreto ley 624 del 30 de marzo de 1989, constituye, con las múltiples
modificaciones y adiciones introducidas por las sucesivas reformas
tributarias, como dice su título, “el Estatuto Tributario de los impuestos
administrados por la Dirección General de Impuestos Nacionales”,
denominada en la actualidad, Dirección de Impuestos y Aduanas
Nacionales –DIAN.

Sobre el tema de la prescripción de la acción de cobro de tales impuestos,


el estatuto trae los artículos 817, 818 y 819, los cuales se encuentran
108 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

dentro del Capítulo II “Formas de extinguir la obligación tributaria”, el cual


hace parte del Título VII “Extinción de la obligación tributaria”, que a su vez
pertenece al Libro Quinto “Procedimiento tributario, sanciones y estructura
de la Dirección de Impuestos Nacionales”.

Como se observa, las normas relativas a la prescripción como medio de


extinguir la acción de cobro por obligaciones fiscales están incorporadas
dentro de los procedimientos que contiene el Estatuto Tributario, a los
cuales remite expresamente el artículo 66 de la ley 383 de 1997.

Si bien la prescripción que extingue las acciones y derechos ajenos


constituye un tema normativo de carácter sustantivo, como sucede
en los Códigos Civil (arts. 2512 y 2535) y de Comercio, en el Estatuto
Tributario se regula la prescripción extintiva de la acción de cobro con
unas características diferentes a aquellos ordenamientos. En efecto, el
Código Civil establece un término de diez (10) años para la prescripción
de la acción ejecutiva, mientras el Estatuto Tributario reduce a cinco (5)
años, el término de prescripción de la acción de cobro.

Se explica que en este último ordenamiento se haya incluido la prescripción


dentro de las normas de procedimiento, por el hecho de que la acción de
cobro la ejerce el Estado de manera coactiva, unilateral, por su poder
impositivo, y éste fija un trámite que debe observar con celeridad y eficacia,
de tal suerte que si no lo inicia en cierto tiempo, que la misma normatividad
determina por seguridad jurídica, pierde la posibilidad de exigir el pago del
tributo.

En materia civil o comercial se toma como base que las partes contratantes
están en un plano de igualdad y, por consiguiente, la normatividad sustantiva
fija los derechos y obligaciones en cuanto a sus distintos aspectos, entre
los cuales están su nacimiento, duración y extinción (la cual comprende
la prescripción), para que las partes sepan cuál es el contenido y alcance
de sus compromisos y responsabilidades, y si sucede el incumplimiento
de alguna de ellas, la otra parte está en libertad de acudir a un tercero
imparcial, revestido de un poder soberano, el órgano jurisdiccional del
Estado, para pedir que se le resarza en su derecho.

En cambio, en el campo del derecho tributario, no hay libertad para la


adquisición de derechos y asunción de obligaciones sino que estas últimas
son impuestas por el Estado de manera unilateral, por el poder que le ha
conferido la comunidad, y en consecuencia, en caso de incumplimiento,
él se reserva la potestad de hacer exigibles las obligaciones derivadas
de los tributos, por sí mismo cuando la ley le ha conferido la jurisdicción
coactiva, sin acudir a un tercero, para lo cual debe fijarse un procedimiento
mediante el cual, con observancia de unas garantías para el obligado, le
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 109

pueda exigir a éste el pago. En consecuencia, resulta lógico que dentro


de ese procedimiento se establezca un plazo para la acción que le da
iniciación al cobro coactivo, vencido el cual no se puede ejercitar.

Así las cosas, no sería acertado afirmar que por ser la prescripción de
carácter sustantivo, la misma no pueda consignarse en las normas de
procedimiento de la acción de cobro de la obligación fiscal, y que por tener
ese carácter sustantivo no estaría comprendida dentro de la remisión a “los
procedimientos establecidos en el Estatuto Tributario para los impuestos
del orden nacional”, como establece el artículo 66 de la ley 383 de 1997,
para de ahí inferir que cada municipio y distrito puede fijar un término para
dicha prescripción respecto de sus tributos. No. Tal figura jurídica en este
caso, aunque sustantiva, está regulada en la parte de los procedimientos
y por ende, se halla comprendida en esa remisión normativa, debiendo ser
observada por las mencionadas entidades territoriales.

Adicionalmente, cabe indicar que el citado artículo 66 al hacer la remisión


de varias actuaciones a los procedimientos establecidos por el Estatuto
Tributario, menciona “el cobro” de los impuestos municipales o distritales,
dentro del cual se debe entender, en sana lógica, que se encuentran los
elementos que hacen parte de esta actuación o se relacionan con ella,
como la acción de cobro y su prescripción.

En síntesis, el término de prescripción de la acción de cobro de los


tributos, tanto nacionales como municipales y distritales, es uniforme, es el
establecido por el artículo 817 del Estatuto Tributario, para todos, sin que
con ello se afecte la autonomía de las entidades territoriales, y antes bien,
sí se respetan los principios de organización del país como una república
unitaria y de igualdad de los contribuyentes, además de darle a éstos
seguridad jurídica respecto de sus obligaciones.

LA SALA RESPONDE

4.1 La normatividad sobre prescripción de la acción de cobro de


obligaciones fiscales a favor de los municipios y distritos es, en razón de
la remisión hecha por el artículo 66 de la ley 383 de 1997, la contenida en
los artículos 817 a 819 del Estatuto Tributario.

4.2 Los municipios y distritos no tienen autonomía para establecer un


término de prescripción de la acción de cobro de las obligaciones fiscales
a su favor, diferente del señalado en el artículo 817 del Estatuto Tributario,
sino que deben sujetarse a éste.65

65 Consejo de Estado, Sala de Consulta y Servicio Civil, Concepto de l 10 de octubre de 2002, Rad. 1.446 C.P. César
Hoyos Salazar
110 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

b. Términos de Prescripción para entes NO tributarios

Los entes no tributarios deben observar que las reglas de prescripción


señaladas en el estatuto Tributario Nacional, son aplicables de forma
exclusiva a los entes que administran impuestos, y que no se puede vía
analogía hacer uso del término allí señalado, ya que la aplicación del
Estatuto tributario señalado en la Ley 1066 de 2006, está limitado al proceso
administrativo de cobro coactivo, procedimiento que inicia en el artículo
823 y que no vincula el artículo 817, artículo que enmarca los términos de
prescripción en materia tributaria.

Así las cosas, para los entes no tributarios, aplican los términos especiales
de prescripción de la obligación tributaria señaladas en la normativa especial
de cada ente, y de no encontrarse señalado de forma expresa término
alguno, aplicarán los términos generales señalados en el Código Civil

Debemos recordar al respecto que el artículo 2512 del Código define la


prescripción como el “... modo de adquirir las cosas ajenas o de extinguir las
acciones o derechos ajenos, por haberse poseído las cosas y no haberse
ejercido dichas acciones y derechos durante cierto lapso de tiempo y
concurriendo los demás requisitos legales.

La prescripción de la acción de cobro de las obligaciones por concepto de


la cualquier obligación, se presenta cuando trascurrido cierto tiempo, el ente
público cuya obligación se encuentra a su favor no ha ejercido la acción
para lograr el cobro de dichas obligaciones.

Si revisada la normativa base que autoriza el cobro de la obligación a favor


del ente público no tributario, tenemos que no existe norma especial que
consagrara el término de prescripción de la acción de cobro para las deudas
por concepto de la obligación a cobrar, debe entonces bajo el precepto de
que no hay obligación eterna, regirse por los parámetros señalados en el
artículo 2536 del Código Civil, (Modificado por el artículo 8 de la Ley 791 de
2002.) precepto legal que establece un término de cinco (5) años, contado a
partir del momento en que la obligación de pagar la obligación se ha hecho
exigible, para que la acción ejecutiva prescriba, recordemos la norma.

“Artículo 2536. Prescripción de la acción ejecutiva y ordinaria. La


acción ejecutiva se prescribe por cinco (5) años. Y la ordinaria por diez
(10).
La acción ejecutiva se convierte en ordinaria por el lapso de cinco (5)
años, y convertida en ordinaria durará solamente otros cinco (5).
Una vez interrumpida o renunciada una prescripción, comenzará a
contarse nuevamente el respectivo término” (Se subraya)
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 111

Así las cosas, y como ya se afirmó, los entes tributarios deben atender el
término de prescripción de la obligación tributaria señalada en el artículo
2536 del Código Civil, en el evento de no tener plazos especiales señalados
para la prescripción, en sus normas propias.

12.6.1. INTERRUPCION DE LA PRESCRIPCION


De acuerdo con el artículo 818 del Estatuto Tributario Nacional, la
prescripción de la acción de cobro, se interrumpe por:

- Por la notificación del mandamiento de pago.


- Por el otorgamiento de facilidades para el pago.
- Por la admisión de solicitud de concordato
- Por declaratoria oficial de la liquidación forzosa administrativa.

Como efecto de la prescripción podemos afirmar que el mismo es el de


volver las cosas a su estado inicial, es decir como si el tiempo no hubiese
transcurrido, por lo cual si un deudor a manera de ejemplo tiene una
acreencia que se vence en el año 2006, mes de enero, es decir cuyo término
de prescripción vence en el mes de enero de 2011, si se otorga una facilidad
de pago en el mes de diciembre de 2010, los términos de prescripción
comenzarían a contar de nuevo solamente a partir de la declaratoria de
incumplimiento de la facilidad de pago, que para el ejemplo ocurre el mes
de junio de 2011, en cuyo caso tendría el funcionario ejecutor hasta el mes
de junio de 2016 para efectuar el cobro de la deuda objeto del ejemplo.

JURISPRUDENCIA , Interrupción de la prescripción

“Corresponde a la Sala resolver el recurso de apelación interpuesto por


el apoderado del Distrito Capital, en su condición de parte demandada,
contra la Sentencia que declaró la nulidad de los actos que negaron las
excepciones propuestas contra el mandamiento de pago del impuesto
predial unificado a cargo de la actora, por el inmueble ubicado en la
Transversal 66 N° 148-32 Interior 14, por los años gravables 1989 a 1993.

El Decreto 807 de 1993, proferido por el Alcalde Mayor de Bogotá en uso


de las facultades otorgadas por el Decreto Ley 1421 de 1993 (Estatuto
Orgánico del Distrito), armonizó el procedimiento y la administración de los
tributos distritales con el Estatuto Tributario Nacional, por lo cual el término
de prescripción de obligaciones tributarias, de acuerdo con el artículo 137
del mencionado Decreto, “se regula por lo señalado en los artículos 817,
818 y 819 del Estatuto Tributario”.
112 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

De conformidad con lo previsto en el artículo 41 de la Ley 153 de 1887 y


toda vez que la actora eligió el término fijado en el Decreto 807 de 1993, la
prescripción se cuenta desde la fecha en que esta norma empezó a regir,
esto es el 20 de diciembre de 1993.

El artículo 817 del Estatuto Tributario dispone que la acción de cobro


prescribe en el término de cinco años, por lo que para el caso, ello ocurrió
el 20 de diciembre de 1998. Toda vez que el mandamiento de pago fue
notificado personalmente el 21 de diciembre de ese año, la oportunidad
de la Administración Distrital para realizar el cobro de las obligaciones del
impuesto predial anteriores al año 1994 había concluido.

El argumento de la entidad apelante es que el término de prescripción fue


suspendido por 117 días, por los Decretos 807 de 1993, 196 de 1994, 267
de 1995 y 405 de 1998.

Al respecto, el artículo 818 del Estatuto Tributario, aplicable por la remisión


expresa del Decreto 807 de 1993, señala los eventos en lo cuales el
término de prescripción puede ser interrumpido o suspendido:

(…)

Dentro de las causales de suspensión o interrupción de la prescripción


no se encuentran situaciones diferentes, como la aplicación masiva de
programas de formación o cultura ciudadana, que fueron los fundamentos
de los decretos invocados por la Administración.

Así mismo, tampoco puede aceptarse que el Alcalde Mayor, a través de


un Decreto, modifique prescripciones de orden superior, como serían el
Decreto con fuerza de Ley 1421 de 1993 o el Estatuto Tributario Nacional
(D.E. 624 DE 1989).

Para la Sala, la suspensión de términos establecida en los Decretos


Distritales 807 de 1993, 196 de 1994, 267 de 1995 y 405 de 1998, no
afecta el plazo de cinco años que tenía la administración para iniciar la
acción de cobro y por tanto no suspendieron el término de prescripción
para el cobro de las obligaciones.

Las normas invocadas por el apelante tenían como finalidad facilitar el


trámite de actuaciones que estaban surtiéndose en esos momentos,
sin pretender otorgar una nueva oportunidad a la Administración para
iniciar procesos de cobro que por la inactividad oficial, no se iniciaron
oportunamente.

Toda vez que la actora presentó la excepción de prescripción de las


obligaciones por haber cumplido el término para iniciar la acción de
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 113

cobro establecido en la ley, era procedente decretarla, como lo aceptó el


Tribunal de primera instancia, por lo cual, la Sala confirmará la Sentencia
apelada”.66

JURISPRUDENCIA , Interrupción de la prescripción

“Conforme al artículo 817 del Estatuto Tributario “La acción de cobro


de las obligaciones fiscales prescribe en el término de cinco (5) años,
contados a partir de la fecha en que se hicieron legalmente exigibles. Los
mayores valores u obligaciones determinados en actos administrativos, en
el mismo término, contado a partir de la fecha de su ejecutoria” (subrayas
de la Sala). Y el artículo 829, numeral 4, del mismo Estatuto señala que
los actos administrativos que sirven de fundamento al cobro coactivo
se entienden ejecutoriados “Cuando los recursos interpuestos en la vía
gubernativa o las acciones de restablecimiento del derecho o de revisión
de impuestos se hayan decidido en forma definitiva” (Subrayas de la Sala).

Esta norma contiene una regla específica sobre la fuerza ejecutoria de los
mencionados actos, diferente a la regla general plasmada en el artículo 62
del C.C.A., que consagra los eventos en que el acto administrativo queda
en firme, es decir, adquiere fuerza ejecutoria, la que no se pierde, tal como
se desprende del artículo 66 ibídem, por el hecho de ser demandado.

De conformidad con el artículo 829-4 del Estatuto Tributario, la acción de


nulidad y restablecimiento del acto administrativo que sirve de fundamento
al cobro coactivo impide que ese acto tenga fuerza ejecutoria, la que sólo
surge cuando se decida la respectiva demanda que no de prosperidad a
la pretensión de anulación de ese acto.

De allí que, en armonía con este precepto, el artículo 831, numeral 5,


del Estatuto Tributario, consagre como una de las excepciones contra
el mandamiento de pago la interposición de demanda de nulidad y
restablecimiento del derecho.

Cuando se demanda en acción de nulidad y restablecimiento del derecho


los actos administrativos de determinación oficial de un impuesto, y la
administración ha iniciado el proceso de cobro de ese tributo con base
en tal título ejecutivo, la excepción que se debe proponer es la prevista
en el numeral 5º del artículo 831 citado: “interposición de demanda de
restablecimiento del derecho o de proceso de revisión de impuestos ante
la jurisdicción de lo contencioso – administrativo” o la de “falta de ejecutoria
del título” (numeral 3º ibidem), pues no debe olvidarse que los actos
administrativos que sirven de fundamento al cobro coactivo se entienden
ejecutoriados, “cuando los recursos interpuestos en la vía gubernativa o
las acciones de restablecimiento del derecho o de revisión de impuestos

66 Consejo de Estado, Sentencia del 18 de septiembre de 2002, exp 12.553, C.P. Ligia López Díaz.
114 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

se hayan decidido en forma definitiva, según el caso” (artículo 829


Estatuto Tributario), y sólo es posible iniciar el proceso de cobro cuando
los actos administrativos tienen carácter ejecutivo y ejecutorio, como se
vio anteriormente.

Así las cosas, si la legalidad de las resoluciones que conforman el título


ejecutivo puede ser controvertida a través de los medios de control que
establece el Código Contencioso Administrativo, (acción de nulidad
y restablecimiento del derecho), es claro que en el proceso ejecutivo
pueda proponerse la mencionada excepción y, por ello, la circunstancia
de haberse dictado sentencia declarando la nulidad de tales actos
administrativos, resulta obligatorio tenerla en cuenta para resolver sobre
la procedencia de seguir adelantando el proceso de cobro o para decretar
su cesación.

Cuando el acto administrativo que contiene la obligación que sirvió de


base para el proceso de cobro ha sido anulado por la jurisdicción, su
legalidad ha quedado desvirtuada y esa obligación ha desaparecido
del ordenamiento jurídico. Por lo tanto, el proceso de cobro ya no tiene
finalidad y los actos administrativos dictados con el propósito de hacer
efectiva la obligación deben ser igualmente declarados nulos, dado los
efectos que un proceso tiene en el otro” 67

12.6.2. SUSPENSION DE LA PRESCRIPCION


De acuerdo con el artículo 818 del Estatuto Tributario Nacional, la
prescripción de la acción de cobro, se suspende por:

“Artículo 818. Interrupción y suspensión del término de prescripción.

(…)

El término de prescripción de la acción de cobro se suspende desde que


se dicte el auto de suspensión de la diligencia del remate y hasta:

- La ejecutoria de la providencia que decide la revocatoria.

- La ejecutoria de la providencia que resuelve la situación contemplada


en el artículo 567 del estatuto tributario.

- El pronunciamiento definitivo de la jurisdicción contencioso


administrativa en el caso contemplado en el artículo 835 del estatuto
tributario.”

67 Consejo de Estado, Sentencia del 20 de agosto de 2009, Exp 16.730, C.P. William Giraldo Giraldo.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 115

Adicionalmente, debemos tener presente que la Ley 785 de 2002, en su


artículo 9º68, al tocar el tema de bienes incautados en procesos de extinción
de dominio, señaló:

“Artículo 9°. Régimen Tributario. Los impuestos sobre los bienes


que se encuentran bajo administración de la Dirección Nacional de
Estupefacientes no causan intereses remuneratorios ni moratorios
durante el proceso de extinción de dominio, y en ese lapso se suspenderá
el término para iniciar o proseguir los procesos de jurisdicción coactiva.
Declarada la extinción de dominio, y una vez enajenados los bienes, se
cancelará el valor tributario pendiente por pagar con cargo al producto
de la venta. En ningún caso el Estado asumirá el pago de obligaciones
tributarias causadas con anterioridad a la incautación del bien.”

Así mismo en la Ley 986 del 26 de agosto de 2005, 69 encontramos en el


artículo 20:

“Artículo 20. Suspensión de términos en materia tributaria. Cuando


la presentación de declaraciones tributarias nacionales o territoriales
correspondientes al secuestrado y el pago de los valores respectivos,
no se realicen mediante agencia oficiosa en los términos previstos en la
legislación, se suspenderán de pleno derecho los plazos para declarar y
pagar, durante el tiempo de cautiverio y durante un período adicional igual
a este, que no podrá ser en ningún caso superior a un año contado a partir
de la fecha en que la persona recupere su libertad. La suspensión también
cesará cuando se establezca la ocurrencia de la muerte o se declare la
muerte presunta del secuestrado.

Cuando se aplique la suspensión definida en el inciso anterior, no


se generarán sanciones ni intereses moratorios por las obligaciones
tributarias nacionales o territoriales que se causen durante este período.
Asimismo, se suspenderán, tanto para el contribuyente como para la
administración, todos los términos que rigen los procedimientos de
corrección, información, revisión o sanción, discusión de actos de la
administración, solicitud de devoluciones, emplazamientos y los relativos
a la extinción de obligaciones tributarias, y cualquiera otro que se derive
de la presentación de las declaraciones tributarias.

Durante el mismo período, las autoridades tributarias no podrán iniciar


procesos de cobro coactivo, ni juicios ejecutivos, y se interrumpe el término
de prescripción de la acción de cobro.”

68 “Por la cual se dictan disposiciones relacionadas con la administración de los bienes incautados en aplicación de
las Leyes 30 de 1986 y 333 de 1996.”
69 “Por medio de la cual se adoptan medidas de protección a las víctimas del secuestro y sus familias, y se dictan otras
disposiciones.”
116 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

De otro lado encontramos que la Ley 550 de 1999, en su artículo 14,70


señaló:

“Artículo 14. Efectos de la iniciación de la negociación. A partir de la


fecha de iniciación de la negociación, y hasta que hayan transcurrido los
cuatro (4) meses previstos en el artículo 27 de esta ley, no podrá iniciarse
ningún proceso de ejecución contra el empresario y se suspenderán los
que se encuentren en curso, quedando legalmente facultados el promotor
y el empresario para alegar individual o conjuntamente la nulidad del
proceso o pedir su suspensión al juez competente, para lo cual bastará que
aporten copia del certificado de la cámara de comercio en el que conste
la inscripción del aviso. En los anteriores términos se adiciona el artículo
170 del Código de Procedimiento Civil; y el juez que fuere informado por
el demandado de la iniciación de la negociación y actúe en contravención
a lo dispuesto en el presente inciso, incurrirá en causal de mala conducta.

Durante la negociación del acuerdo se suspende el término de prescripción


y no opera la caducidad de las acciones respecto de los créditos contra el
empresario.

Parágrafo 1°. Dentro de los diez (10) días siguientes a la iniciación de


la negociación, el acreedor del empresario que sea beneficiario de
fiducias mercantiles en garantía o de cualquier clase de garantía real
constituida por terceros, o que cuente con un codeudor, fiador, avalista,
asegurador, emisor de carta de crédito y, en general, con cualquier clase
de garante del empresario, deberá informar por escrito al promotor si opta
solamente por hacer efectiva su garantía o si no prescinde de obtener del
empresario el pago de la obligación caucionada. Si el acreedor guarda
silencio o manifiesta que no prescinde de hacer valer su crédito contra el
empresario, se estará a lo previsto en el inciso 1° del presente artículo, los
créditos objeto de los procesos suspendidos quedarán sujetos a lo que se
decida en el acuerdo, y en caso de iniciarse procesos en su contra, los
terceros garantes y los titulares de los bienes gravación podrán interponer
la excepción previa correspondiente.

Cualquier acreedor o el propio empresario podrán informar en cualquier


tiempo al promotor de la existencia de las garantías a que se refiere el
presente inciso.

Cuando un mismo acreedor opte por hacer efectivas sus garantías de


terceros, y alguna o algunos obligaciones del empresario estén garantizadas
por terceros, y otra u otras no, el acreedor podrá hacer efectiva la garantía
sin perjuicio del cobro de las obligaciones no garantizadas frente al
empresario deudor.

70 “Por la cual se establece un régimen que promueva y facilite la reactivación empresarial y la reestructuración de los
entes territoriales para asegurar la función social de las empresas y lograr el desarrollo armónico de las regiones y
se dictan disposiciones para armonizar el régimen legal vigente con las normas de esta ley.”
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 117

Parágrafo 2°. Cuando un acreedor del empresario opte por hacer


efectivas sus garantías de terceros y ejerza sus derechos de cobro frente
a un codeudor solidario, fiador, avalista o cualquier otra clase de suscriptor
de un título valor en el mismo grado del empresario, si dicho garante es
una persona natural, el ejercicio de los derechos del acreedor se limita en
los siguientes términos:

a) Durante la negociación del acuerdo no podrá rematarse, adjudicarse, ni


enajenarse a ningún título el inmueble que sea de propiedad exclusiva
del garante o del cual éste sea comunero, siempre y cuando se trate del
inmueble que el garante haya ocupado para su vivienda personal por
no menos de dos años consecutivos e inmediatamente anteriores a la
fecha de iniciación de la negociación del acuerdo;

b) Durante la negociación del acuerdo podrán practicarse medidas


cautelares que recaigan sobre el inmueble, y podrán iniciarse o
continuarse ejecuciones judiciales contra el garante hasta que quede
en firme una cualquiera de las sentencias previstas en el inciso 1° del
artículo 523 del Código de Procedimiento Civil; de igual forma podrá
darse cumplimiento a las disposiciones contractuales que regulen
la ejecución de las garantías fiduciarias, hasta la etapa previa a la
enajenación del inmueble cualquier título;

c) Para que esta limitación temporal de la efectividad de los derechos


del acreedor proceda, el garante deberá inscribir, a su costa, en la
oficina de registro de instrumentos públicos y privados, una declaración
juramentada rendida ante notario público, en la cual identifique el
inmueble y afirme que se dan las circunstancias previstas en el literal
a) de este parágrafo, acompañada de una copia del escrito a que se
refiere el artículo 13 de esta ley y en la cual se señala su fecha de
fijación;

d) La enajenación a cualquier título o la tradición de un inmueble de los


previstos en este parágrafo, y que se lleven a cabo con posterioridad
a la inscripción prevista en el literal anterior, serán ineficaces de pleno
derecho. Cualquier diferencia o litigio sobre dicha ineficacia será de
competencia de la justicia ordinaria;

e) Adjuntando constancia de la inscripción en el registro de instrumentos


públicos y privados de la declaración a que se refiere el literal c) de este
parágrafo, el garante podrán pedir al juez competente que se suspenda
el señalamiento de la fecha para remate, y el juez que fuere informado
por el garante de la iniciación de la negociación y actúe en contravención
a lo dispuesto en este artículo, incurrirá en causal de mala conducta;
igualmente, el fiduciario que no suspenda la enajenación regulada
en el contrato de fiducia o encargo fiduciario respectivo, y enajene el
118 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

inmueble a cualquier título después de haber sido informado de tales


circunstancias por el garante, será sancionado por la Superintendencia
que ejerza inspección y vigilancia sobre las sociedades fiduciarias,
y los administradores de la fiduciaria que contravengan este artículo
podrán ser removidos por dicha Superintendencia;

f) Transcurrido el plazo previsto en el artículo 27 de esta ley, sin que se


celebre un acuerdo de reestructuración, el acreedor podrá hacer valer
sus derechos de cobro respecto del inmueble en cuestión e igualmente,
podrá adelantarse el remate judicial y dicho bien podrá ser enajenado a
cualquier título en caso de no pesar sobre él alguna medida cautelar.”

Esta misma disposición la encontramos en el artículo 20 de la ley 1116 del


27 de diciembre de 2006,71 así:

“Artículo 20. Nuevos procesos de ejecución y procesos de ejecución


en curso. A partir de la fecha de inicio del proceso de reorganización
no podrá admitirse ni continuarse demanda de ejecución o cualquier
otro proceso de cobro en contra del deudor. Así, los procesos de
ejecución o cobro que hayan comenzado antes del inicio del proceso
de reorganización, deberán remitirse para ser incorporados al trámite y
considerar el crédito y las excepciones de mérito pendientes de decisión,
las cuales serán tramitadas como objeciones, para efectos de calificación
y graduación y las medidas cautelares quedarán a disposición del juez
del concurso, según sea el caso, quien determinará si la medida sigue
vigente o si debe levantarse, según convenga a los objetivos del proceso,
atendiendo la recomendación del promotor y teniendo en cuenta su
urgencia, conveniencia y necesidad operacional, debidamente motivada.

El Juez o funcionario competente declarará de plano la nulidad de las


actuaciones surtidas en contravención a lo prescrito en el inciso anterior,
por auto que no tendrá recurso alguno.

El promotor o el deudor quedan legalmente facultados para alegar


individual o conjuntamente la nulidad del proceso al juez competente, para
lo cual bastará aportar copia del certificado de la Cámara de Comercio,
en el que conste la inscripción del aviso de inicio del proceso, o de la
providencia de apertura. El Juez o funcionario que incumpla lo dispuesto
en los incisos anteriores incurrirá en causal de mala conducta.

Durante el término se suspensión de la prescripción, no contará término


alguno, es decir que los mismos paran desde el día en que se decreta la
suspensión de la prescripción, y solamente se reinician estos una vez se

71 “Por la cual se establece el Régimen de Insolvencia Empresarial en la República de Colombia y se dictan otras
disposiciones.””
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 119

termine la suspensión decretada, no obstante vale la pena precisar que la


suspensión no habilita nuevos términos, por lo cual si había transcurrido por
decir cuatro (4) años de la prescripción, una vez se reanude el conteo de los
términos, faltará solamente un (1) año para que la misma se dé.

Igualmente debemos tener presente que el Funcionario ejecutor no podrá


realizar ningún tipo de actuación tendiente a ejercer la acción de cobro o
a impulsar el proceso administrativo coactivo; hasta tanto no se termine la
causal de suspensión.

“DOCTRINA, suspensión DEL PROCESO POR ACUERDO DE


RESTRUCTURACION

El artículo 14 de la ley 550 de 1999 preceptúa;

“Efectos de la iniciación de la negociación. A partir de la fecha de iniciación


de la negociación, y hasta que hayan transcurrido los cuatro (4) meses
previstos en el artículo 27 de esta ley, no podrá iniciarse ningún proceso
de ejecución contra el empresario y se suspenderán los que se encuentren
en curso, quedando legalmente facultados el promotor y el empresario
para alegar individual o conjuntamente la nulidad del proceso o pedir su
suspensión al juez competente, para lo cual bastará que aporten copia del
certificado de la cámara de comercio en el que conste la inscripción del
aviso. En los anteriores términos se adiciona el artículo 170 del Código de
Procedimiento Civil; y el juez que fuere informado por el demandado de la
iniciación de la negociación y actúe en contravención a lo dispuesto en el
presente inciso, incurrirá en causal de mala conducta.

Durante la negociación del acuerdo se suspende el término de prescripción


y no opera la caducidad de las acciones respecto de los créditos contra el
empresario. /..../ f) Transcurrido el plazo previsto en el artículo 27 de esta
ley, sin que se celebre un acuerdo de reestructuración, el acreedor podrá
hacer valer sus derechos de cobro respecto del inmueble en cuestión e
igualmente, podrá adelantarse el remate judicial y dicho bien podrá ser
enajenado a cualquier título en caso de no pesar sobre él alguna medida
cautelar.” (Resalto)

A su vez el artículo 55 de la misma ley dispone:

“Suspensión del proceso de cobro coactivo. En la misma fecha de


iniciación de la negociación, el nominador dará aviso mediante envío de
correo certificado al jefe de la división de cobranzas de la administración
ante la cual sea contribuyente el empresario o la unidad administrativa que
haga sus veces, respecto al inicio de la promoción del acuerdo, para que
el funcionario que esté adelantando el proceso administrativo de cobro
coactivo proceda en forma inmediata a suspenderlo e intervenir en la
negociación, conforme a las disposiciones de esta ley.
120 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Lo dispuesto en el inciso quinto del artículo 845 del Estatuto Tributario


no es aplicable a las cláusulas que formen parte de los acuerdos de
reestructuración celebrados de conformidad con la presente ley, en lo
que se refiere a plazos. Igualmente, el artículo 849 del estatuto tributario
no es aplicable en el caso de los acuerdos de reestructuración, y la
administración tributaria no podrá adelantar la acción de cobro coactivo
durante la negociación del acuerdo” (Resalto)

Por otra parte, el artículo 530 del Código de Procedimiento Civil dispone:

“Pagado oportunamente el precio, el juez aprobará el remate siempre que


se hubiere cumplido con las formalidades previstas en los artículos 523 a
528, y no esté pendiente el incidente de nulidad que contempla el numeral
segundo del artículo 141. En caso contrario, declarará el remate sin valor
y ordenará la devolución del precio al rematante.

En el auto que apruebe el remate se dispondrá, además:

1. La cancelación de los gravámenes prendarios o hipotecarios que


afecten al bien objeto del remate.

2. La cancelación del embargo y del secuestro.

3. La expedición de copia del acta de remate y del auto aprobatorio.


Si se trata de bienes sujetos a registro, dicha copia se inscribirá y
protocolizará en la notaría correspondiente al lugar del proceso. Copia
de la escritura se agregará luego al expediente.

4. La entrega por el secuestre al rematante de los bienes rematados.

5. La entrega al rematante de los títulos de la cosa rematada que el


ejecutado tenga en su poder.

6. La expedición o inscripción de nuevos títulos al rematante de las


acciones o efectos públicos nominativos que hayan sido rematados, y
la declaración de que quedan cancelados los extendidos anteriormente
al ejecutado.

7. La entrega del producto del remate al acreedor hasta concurrencia de


su crédito y las costas, y del remanente al ejecutado, si no estuviere,
embargado.

Empero, cuando se remate un bien para el pago de la parte exigible. de


una deuda garantizada con hipoteca o prenda constituida sobre él, no se
entregará al ejecutado el sobrante del precio, que quedará depositado a
órdenes del juzgado como garantía del resto de la obligación, salvo que
las partes dispongan otra cosa.”
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 121

De las normas precedentes se concluye que para la aprobación del


remate se requiere que no esté pendiente el incidente de nulidad que
contempla el numeral segundo del artículo 141 (el cual se alega antes
de proferirse el auto que apruebe el remate), así como el cumplimiento
de los requisitos señalados en los artículos 523 a 528 del Código de
Procedimiento Civil, como son la determinación de la fecha del remate,
su aviso y publicidad, la realización del Depósito para hacer postura y la
diligencia del remate para adjudicar al mejor postor el bien materia de la
subasta. Sin embargo, satisfechos estos requisitos, falta todavía dictar la
providencia de aprobación del remate en la cual se precisen y ordenen
los varios aspectos señalados en la norma transcrita, con lo cual queda
perfeccionado el trámite del remate.

De tal manera que mientras no se dicte el auto de aprobación del remate en


debida forma, no se entenderá perfeccionado el proceso correspondiente,
por lo cual ni el rematante ni las partes interesadas podrán dar cumplimiento
a unas obligaciones que aún no conocen toda vez que éstas se van a indicar
precisamente en el auto de aprobación del remate. Eventualmente, puede
suceder que el auto sea contrario y se declare el remate sin valor, caso en
el cual se ordenará, en vez del cumplimiento de los citados numerales, la
devolución del precio al rematante; por lo cual no se puede afirmar que el
proceso ha culminado antes de proferirse el auto aprobatorio del remate.

Considera el Despacho que, si en cumplimiento de lo previsto en el artículo


55 de la Ley 550 de 1999, el nominador del proceso de reestructuración
da el aviso correspondiente en forma oportuna al jefe de la División de
Cobranzas de la respectiva Administración de Impuestos sobre el inicio
del acuerdo de reestructuración, el proceso ejecutivo de cobro tributario
debe suspenderse y no se podrá dictar el auto de aprobación del remate
durante el tiempo que dure suspendido el proceso. Una vez haya concluido
la suspensión, el juez procederá a dictar la providencia respectiva acorde
con los resultados del acuerdo.

Si declara sin valor el remate, procederá a ordenar la devolución del precio


al rematante. Para efectos de la devolución de las sumas canceladas por
concepto de impuestos de remate se dispuso en el artículo 2 del Acuerdo
1118 de 2001 del Consejo Superior de la Judicatura:

“ARTICULO 2º - Para los casos de devolución de las sumas de dinero


que se hubieren consignado por concepto de impuesto de remate, la
dirección del tesoro nacional será la encargada de ordenar la devolución
afectando la respectiva cuenta, previo cumplimiento por el interesado de
los requisitos establecidos en la Resolución 2460 de 1993 del Ministerio de
Hacienda y Crédito Público. Para lo cual, deberá acompañar los siguientes
documentos: a) Solicitud suscrita por el interesado en la que afirme bajo
122 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

la gravedad del juramento que no se ha presentado otra solicitud de


devolución, ni se ha recibido pago por el mismo concepto, indicando su
dirección y teléfono;

b) Copia simple de la providencia o acto administrativo que declaró nulo el


remate y ordenó la devolución del dinero al interesado;

c) Copia simple del recibo de consignación que compruebe el ingreso de


los dineros a la dirección del tesoro nacional.” 72

12.6.3. REGLAS ADICIONALES DE INTERRUPCIÓN Y SUSPENSION DE


LA PRESCRIPCION DE LA OBLIGACIÓN DE COBRO.
La primera regla a tener presente es el efecto del otorgamiento de facilidades
de pago, esto porque debe tenerse presente que de haberse otorgado
con anterioridad al inicio del Proceso Administrativo de Cobro Coactivo y
conforme lo dispone el artículo 818 del Estatuto Tributario, la prescripción
se interrumpe.

Otra cosa muy diferente es que la facilidad de pago se conceda dentro del
proceso de cobro, en cuyo caso debemos aplicar el artículo 841 del Estatuto
Tributario, que señala:

“Artículo 841. Suspensión por acuerdo de pago. En cualquier etapa


del procedimiento administrativo coactivo el deudor podrá celebrar un
acuerdo de pago con la administración, en cuyo caso se suspenderá el
procedimiento y se podrán levantar las medidas preventivas que hubieren
sido decretadas.

Sin perjuicio de la exigibilidad de garantías, cuando se declare el


incumplimiento del acuerdo de pago, deberá reanudarse el procedimiento
si aquéllas no son suficientes para cubrir la totalidad de la deuda.”

Es decir que en esta instancia la facilidad de pago, tiene una aplicación


dual, ya que suspende el proceso de cobro coactivo y a la vez interrumpe la
prescripción de la obligación tributaria.

Por la anterior razón, debo recomendar que para darle el efecto señalado
anteriormente, las facilidades de pago deben ser expedidas con todas
las formalidades, es decir mediante acto motivado, estar debidamente
notificadas y su declaratoria de incumplimiento en un acto de similar
categoría y precisión.

72 Concepto DIAN No. 71001 del 30 de octubre de 2002.


Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 123

12.7. FALTA DE TITULO EJECUTIVO O INCOMPETENCIA DEL


FUNCIONARIO QUE LO PROFIRIÓ. (VER CAPÍTULOS VI Y VII
DEL PRESENTE DOCUMENTO)

12.8. LA CALIDAD DE DEUDOR SOLIDARIO. APLICABLE CONTRA


EL MANDAMIENTO DE PAGO QUE VINCULE LOS DEUDORES
SOLIDARIOS EXCLUSIVAMENTE. (VER CAPÍTULO VIII
(NUMERALES 8.3, 8.4, 8.5 Y 8.6 DEL PRESENTE DOCUMENTO)

12.9. INDEBIDA TASACIÓN DEL MONTO DE LA DEUDA. APLICABLE


CONTRA EL MANDAMIENTO DE PAGO QUE VINCULE LOS
DEUDORES SOLIDARIOS EXCLUSIVAMENTE. (VER CAPÍTULO
VIII (NUMERALES 8.3, 8.4, 8.5 Y 8.6 DEL PRESENTE DOCUMENTO)

12.10. PROCEDE LA ACCIÓN DE TUTELA DENTRO DEL PROCESO DE


COBRO COACTIVO?

Ha surgido al interior de los entes cobradores sobre la aplicabilidad de la


acción de tutela contra del título ejecutivo que sirve de base a un proceso
administrativo de cobro coactivo y sus efectos dentro del proceso en especial
en lo relacionado con el embargo y secuestro de bienes

La respuesta este último interrogante que no es propiamente una excepción


contra el mandamiento de pago, pero que se ha vuelto costumbre por parte
de los ejecutados como mecanismo dilatorio del procedimiento de cobro,
se resuelve integralmente con el Concepto 054826 del agosto 27 del 2002,
emitido por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (DIAN), en el
cual se consideró:

“En la consulta referenciada se pregunta si la División de Cobranzas


puede rematar bienes que fueron embargados en virtud de un proceso
administrativo de cobro, sin que se haya producido el fallo de segunda
instancia de tutela o de acción de cumplimiento instauradas contra las
Liquidaciones de Aforo, Revisión o Resolución Sanción. Al respecto éste
Despacho considera pertinente hacer las siguientes consideraciones
sobre la discusión de los actos de la Administración tributaria:

El artículo 720 del Estatuto Tributario, establece que:

“Sin perjuicio de lo dispuesto en normas especiales de este estatuto,


contra las liquidaciones oficiales, resoluciones que impongan sanciones
u ordenen el reintegro de sumas devueltas y demás actos producidos,
en relación con los impuestos administrados por la Unidad Administrativa
Especial-Dirección de Impuestos Nacionales, procede el recurso de
reconsideración.
124 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

(...)
PARAGRAFO: Cuando se hubiere atendido en debida forma el
requerimiento especial y no obstante se practique liquidación oficial, el
contribuyente podrá prescindir del recurso de reconsideración y acudir
directamente ante la jurisdicción contencioso-administrativa dentro de los
cuatro (4) meses siguientes a la notificación de la liquidación oficial.”

Producido el fallo del recurso previsto en esta disposición, se entiende


agotada la vía gubernativa, habilitando al interesado para acudir al
contencioso, instancia facultativa prevista legalmente, cuya decisión es
definitiva.

El artículo 829 del Estatuto Tributario, establece cuándo se entienden


ejecutoriados los actos que sirven de fundamento al proceso de cobro
coactivo, e indica que ello ocurre:

“ [..] 1. Cuando contra ellos no proceda recurso alguno.


2. Cuando vencido el término para interponer los recursos, no se hayan
interpuesto o no se presenten en debida forma.
3. Cuando se renuncie expresamente a los recursos o se desista de ellos.
4. Cuando los recursos interpuestos en la vía gubernativa o las acciones
de restablecimiento del derecho o de revisión de impuestos se hayan
decidido en forma definitiva, según el caso”.

También procede contra los actos administrativos de la Administración


Tributaria, la Revocatoria Directa de que trata el artículo 736 del Estatuto
Tributario, en concordancia con el artículo 69 del Código Contencioso
Administrativo, cuando contra dichos actos no se hayan interpuesto
recursos en vía gubernativa, cuando sea manifiesta su oposición a la
Cor1stitución Política o a la ley, cuando no estén conformes con el interés
público o social, o atenten contra él, o cuando con ellos se cause agravio
injustificado a una persona.

En este evento, de manera expresa el artículo 829-1 del Estatuto Tributario


señala que la interposición de la revocatoria directa no suspende el proceso
de cobro, pero el remate no se realizará hasta que exista pronunciamiento
definitivo.

Son las anteriores las únicas formas de discusión de los actos base de
ejecución coactiva previstas en el ordenamiento Tributario, en las que como
se advierte, hasta su decisión definitiva, se habilita a la Administración
para iniciar el proceso de cobro en el primero de los casos y para realizar
la diligencia de remate en el segundo.

Además, en el inciso segundo del articulo 829-1 del mencionado Estatuto,


se señala que en el procedimiento administrativo de cobro, no podrá
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 125

debatirse cuestiones que debieron ser objeto de discusión en la vía


gubernativa.

(…)

De acuerdo con lo establecido en los precitados artículos, la acción de


tutela sería improcedente para discutir el acto administrativo en que se
determina la obligación tributaria, por cuanto al tenor de lo dispuesto
en el artículo 6 del Decreto 2591 de 1991, que la reglamentó, ésta no
procede cuando existen otros recursos o medios de defensa judiciales,
salvo que aquellos se utilice como mecanismo transitorio para evitar un
perjuicio irremediable, y para el caso que nos ocupa como se advirtió, el
proceso de cobro no puede iniciarse hasta que se produzca la ejecutoria
del acto administrativo y no podrá culminar en remate si contra el mismo
se interpuso en debida forma Revocatoria Directa.

En tal sentido, la Corte Constitucional, Sala Plena, tutela contra sentencias


C-543, de Octubre de 1992, con ponencia del Magistrado José Gregorio
Hernández Galindo, dijo:

“... no es propio de la acción de tutela el sentido de medio o procedimiento


llamado a reemplazar los procesos ordinarios o especiales, ni el de
ordenamiento sustitutivo en cuanto a la fijación de los diversos ámbitos
de competencia de los jueces, ni el de instancia adicional a las existentes,
ya que el propósito específico de su consagración, expresamente definido
en el artículo 86 de la Carta, no es otro que el de brindar a la persona
protección efectiva actual y supletoria en orden a la garantía de sus
derechos constitucionales fundamentales.

En otros términos, la acción de tutela ha sido concebida solo para dar


solución eficiente a situaciones de hecho creadas por actos u omisiones
que implican la transgresión o la amenaza de un derecho fundamental,
respecto de las cuales el sistema jurídico no tiene previsto otro
mecanismo susceptible de ser invocado ante los jueces a objeto de lograr
la protección del derecho; es decir, tiene cabida dentro del ordenamiento
constitucional para dar respuesta eficiente y oportuna a circunstancias
en que, por carencia de previsiones normativas específicas, el afectado
queda sujeto, de no ser por la tutela, a una clara indefensión frente a los
actos u omisiones de quien lesiona su derecho fundamental.

“ Así pues, la tutela no puede converger con vías judiciales diversas


por cuanto no es un mecanismo que sea factible de elegir según la
discrecionalidad del interesado, para esquivar el que de modo específico
ha regulado la ley; no se da la concurrencia entre éste y la acción de tutela
porque siempre prevalece -con la excepción dicha -la acción ordinaria.

“La acción de tutela no es, por tanto, un medio alterativo, ni menos


adicional o complementario para alcanzar el fin propuesto. Tampoco
puede afirmarse que sea el último recurso al alcance del actor, ya que
su naturaleza, según la Constitución, es la de único medio de protección,
incorporado a la Carta con el fin de llenar los vacíos que pudiera ofrecer el
126 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

sistema jurídico para otorgar a las personas una plena protección de sus
derechos esenciales. “

Ahora bien, en cuanto a la Acción de Cumplimiento, para su finalidad y


alcance el artículo 87 de la Constitución Política, establece que procede
contra acciones y omisiones de la autoridad que incumpla o ejecute hechos
que permitan deducir inminente incumplimiento de normas con fuerza
de Ley o contra actos administrativos, siempre y cuando no contengan
obligaciones dinerarias y que contra ellos no exista otro instrumento
judicial para lograr el efectivo cumplimiento de los mismos.

Es evidente que la naturaleza y contenido de un acto administrativo que


determina obligaciones tributarias al contribuyente, no encuadra en la
premisa de obligatoriedad de cumplimiento de una norma o de un acto
administrativo prevista en la mencionada disposición; luego, esta acción
resulta improcedente para discutir actos de esta materia y por tanto,
su interposición o falta de decisión no pueden afectar el desarrollo del
proceso en que se pretende cobrar la obligación que determinada en
derecho dentro del procedimiento establecido por Ley para el efecto, se
encuentra ejecutoriada.

Se concluye por tanto, que al no ser las acciones de tutela o de cumplimiento,


mecanismos idóneos para discutir los títulos base de ejecución dentro
del proceso administrativo de cobro en materia Tributaria, aduanera o
cambiaria, su interposición o falta de decisión definitiva, no inciden en
el proceso de cobro coactivo; por lo que en su presencia, aquel puede
llegar a culminar en remate, a menos que una decisión judicial lo impida
mediante suspensión provisional, evento en el que ante la obligatoriedad
de acatar los fallos judiciales, el funcionario administrativo deberá obedecer
lo dispuesto suspendiel1do el remate y la Administración, asumirá la
controversia procesal de esta decisión para obtener su revocatoria por las
razones mencionadas.”

12.11. TÉRMINO PARA INTERPONER EXCEPCIONES

En el proceso administrativo coactivo, el término para pagar e interponer


excepciones se encuentra señalado de forma expresa en el artículo 830
del Estatuto tributario, en el se señala que el término que tiene el ejecutado
para interponer mediante escrito las excepciones contra el mandamiento
de pago es de quince (l5) días contados a partir de la notificación en debida
forma del mandamiento ejecutivo.

Si el ejecutado actúa a través de apoderado o representante legal, deberá


conjuntamente con el escrito de excepciones allegar el poder o certificado
de constitución y gerencia que permita corroborar la personería con la que
se actúa.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 127

12.12. PRUEBAS DENTRO DEL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO


DE COBRO

El Estatuto Tributario no se señalan reglas específicas para decretar


pruebas dentro del procedimiento administrativo de cobro coactivo, y
si viene es cierto que el artículo 742 y siguientes del Estatuto Tributario
señala el régimen probatorio que deben tener en cuenta las decisiones
de la administración, no existe norma expresa que señale a los entes no
tributarios la aplicabilidad de este régimen probatorio especial, previsto en
el Título VI del libro Quinto del ordenamiento Tributario Nacional.

Así las cosas, y ante la falta de norma que indique la aplicación de pruebas
dentro del PAC, así como sus efectos y términos, se hace necesario dar
aplicación al Artículo 58 del Código Contencioso Administrativo, que señala:

Artículo 58. Término. Cuando sea del caso practicar pruebas, se señalará
para ello un término no mayor de treinta (30) días, ni menor de diez (10).
Los términos inferiores a treinta (30) días podrán prorrogarse una sola
vez, sin que con la prórroga el término exceda de treinta (30) días.

En el auto que decrete la práctica de pruebas se indicará, con toda


exactitud, el día en que vence el término probatorio.

Así las cosas, debemos entender que dentro del proceso de cobro y
específicamente dentro de las actuaciones de la administración es viable
decretar pruebas, para ello podrá el ejecutor fijar términos no mayores a
treinta (30) días ni menores de diez (10), el decretar estas pruebas genera
efecto suspensivo en el término para dar respuesta a las excepciones
planteadas por el contribuyente, así como para resolver el recurso de
reconsideración impetrado cuando el fallo de estas excepciones es negativo.

Es decir que iniciado el término para resolver las excepciones y de llegar a


decretarse pruebas conforme con lo señalado en el artículo 58 del C.C.A.,
el término para resolver las excepciones se suspenderá por un tiempo
exactamente igual al tiempo requerido y decretado para practicar las
pruebas a lugar.

Una vez decretadas las pruebas, debe precisarse que las mismas aplicarían
de dos formas independientes una si se tratase de una entidad tributaria y
otra muy diferente si se trata de entes no tributarios.

Los primeros gozan de un mayor campo probatorio ya que el Estatuto


Tributario como se indicó, señala en sus artículos 742 y siguientes las
128 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

reglas probatorias aplicables en materia tributaria, reglas a las cuales debe


adicionarse en virtud del mandato expreso efectuado por el mencionado
artículo 742 las reglas compatibles señaladas en el Código de Procedimiento
Civil.

Con un afán netamente académico, procederemos a transcribir el régimen


probatorio aplicable en materia tributaria no sin antes advertir que estas
reglas están diseñadas para los impuestos nacionales y que algunos de
sus artículos como es el caso de los artículos 755-1, 755-2, 755-3 770, 771,
771-2, 771-3 y 789, que tienen aplicación solamente para los impuestos
nacionales, recordemos la normativa indicada.

“TÍTULO VI
Régimen probatorio

CAPÍTULO I
Disposiciones generales

Artículo 742. Las decisiones de la administración deben fundarse en


los hechos probados. La determinación de tributos y la imposición de
sanciones deben fundarse en los hechos que aparezcan demostrados en
el respectivo expediente, por los medios de prueba señalados en las leyes
tributarias o en el Código de Procedimiento Civil en cuanto éstos sean
compatibles con aquellos.

Inciso. Adicionado por el Artículo 89 de la Ley 788 de 2002. Las pruebas


obtenidas y allegadas en cumplimiento de acuerdos interinstitucionales
recíprocos de intercambio de información con agencias de gobiernos
extranjeros, en materia tributaria y aduanera, serán valoradas de
conformidad con las reglas de la sana crítica con el cumplimiento de los
requisitos y condiciones que se establezcan en los respectivos acuerdos.
(Lo subrayado fue declarado inexequible mediante sentencia C-896
de octubre 7 de 2003 de la Corte constitucional).

Artículo 743. Idoneidad de los medios de prueba. La idoneidad de los


medios de prueba depende, en primer término, de las exigencias que para
establecer determinados hechos preceptúen las leyes tributarias o las
leyes que regulan el hecho por demostrarse y a falta de unas y otras, de
su mayor o menor conexión con el hecho que trata de probarse y del valor
de convencimiento que pueda atribuírseles de acuerdo con las reglas de
la sana crítica.

Artículo 744. Oportunidad para allegar pruebas al expediente. Para


estimar el mérito de las pruebas, éstas deben obrar en el expediente, por
algunas de las siguientes circunstancias:
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 129

1. Formar parte de la declaración.

2. Haber sido allegadas en desarrollo de la facultad de fiscalización e


investigación, o en cumplimiento del deber de información conforme a
las normas legales.

3. Haberse acompañado o solicitado en la respuesta al requerimiento


especial o a su ampliación.

4. Haberse acompañado al memorial del recurso o pedido en éste.

5. Haberse practicado de oficio.

6. Adicionado por el artículo 51 de la Ley 6ª de 1992. Haber sido


obtenidas y allegadas en desarrollo de un convenio internacional de
intercambio de información para fines de control tributario.

7. Adicionado por el artículo 51 de la Ley 6ª de 1992. Haber sido enviadas


por gobierno o entidad extranjera a solicitud de la administración
colombiana o de oficio.

8. Adicionado por el artículo 44 de la Ley 633 de 2000. Haber sido


obtenidas y allegadas en cumplimiento de acuerdos interinstitucionales
recíprocos de intercambio de información, para fines de control
fiscal con entidades del orden nacional o con agencias de gobiernos
extranjeros. (La frase subrayada fue declarada inexequible por la Corte
Constitucional. Sentencia C-622 de 2004).

9. Adicionado por el artículo 44 de la Ley 633 de 2000. Haber sido


practicadas por autoridades extranjeras a solicitud de la administración
tributaria, o haber sido practicadas directamente por funcionarios de la
administración tributaria debidamente comisionados de acuerdo a la
ley.

Artículo 745. Las dudas provenientes de vacíos probatorios se


resuelven a favor del contribuyente. Las dudas provenientes de vacíos
probatorios existentes en el momento de practicar las liquidaciones o de
fallar los recursos, deben resolverse, si no hay modo de eliminarlas, a
favor del contribuyente, cuando éste no se encuentre obligado a probar
determinados hechos de acuerdo con las normas del capítulo III de este
título.

Artículo 746. Presunción de veracidad. Se consideran ciertos los hechos


consignados en las declaraciones tributarias, en las correcciones a las
mismas o en las respuestas a requerimientos administrativos, siempre y
cuando que sobre tales hechos, no se haya solicitado una comprobación
especial, ni la ley la exija.
130 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Artículo 746-1. Práctica de pruebas en virtud de convenios de


intercambio de información. Adicionado por el artículo 52 de la Ley 6ª
de 1992. Cuando en virtud del cumplimiento de un convenio de intercambio
de información para efectos de control tributario y financiero, se requiera la
obtención de pruebas por parte de la administración tributaria colombiana,
serán competentes para ello los mismos funcionarios que de acuerdo
con las normas vigentes son competentes para adelantar el proceso de
fiscalización.

Artículo 746-2. Presencia de terceros en la práctica de pruebas.


Adicionado por el artículo 52 de la Ley 6ª de 1992. Cuando en virtud del
cumplimiento de un convenio de intercambio de información para efectos
de control tributario y financiero, se requiera la obtención de pruebas por
parte de la administración tributaria colombiana, se podrá permitir en su
práctica, la presencia de funcionarios del Estado solicitante, o de terceros,
así como la formulación, a través de la autoridad tributaria colombiana, de
las preguntas que los mismos requieran.

CAPÍTULO II
Medios de prueba

Artículo 747. Hechos que se consideran confesados. La manifestación


que se hace mediante escrito dirigido a las oficinas de impuestos por el
contribuyente legalmente capaz, en el cual se informa la existencia de
un hecho físicamente posible que perjudique al contribuyente, constituye
plena prueba contra éste.

Contra esta clase de confesión sólo es admisible la prueba de error o


fuerza sufridos por el confesante, dolo de un tercero, o falsedad material
del escrito contentivo de ella.

Artículo 748. Confesión ficta o presunta. Cuando a un contribuyente


se le ha requerido verbalmente o por escrito dirigido a su última dirección
informada, para que responda si es cierto o no un determinado hecho, se
tendrá como verdadero si el contribuyente da una respuesta evasiva o se
contradice.

Si el contribuyente no responde al requerimiento escrito, para que pueda


considerarse confesado el hecho, deberá citársele por una sola vez, a lo
menos, mediante aviso publicado en un periódico de suficiente circulación.

La confesión de que trata este artículo admite prueba en contrario y puede


ser desvirtuada por el contribuyente demostrando cambio de dirección o
error al informarlo. En este caso no es suficiente la prueba de testigos,
salvo que exista un indicio por escrito.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 131

Artículo 749. Indivisibilidad de la confesión. La confesión es indivisible


cuando la afirmación de ser cierto un hecho va acompañada de la expresión
de circunstancias lógicamente inseparables de él, como cuando se afirma
haber recibido un ingreso pero en cuantía inferior, o en una moneda o
especie determinadas.

Pero cuando la afirmación va acompañada de la expresión de


circunstancias que constituyen hechos distintos, aunque tengan íntima
relación con el confesado, como cuando afirma haber recibido, pero a
nombre de un tercero, o haber vendido bienes pero con un determinado
costo o expensa, el contribuyente debe probar tales circunstancias.

Artículo 750. Las informaciones suministradas por terceros son


prueba testimonial. Los hechos consignados en las declaraciones
tributarias de terceros, en informaciones rendidas bajo juramento ante
las oficinas de impuestos, o en escritos dirigidos a éstas, o en respuesta
de estos a requerimientos administrativos, relacionados con obligaciones
tributarias del contribuyente, se tendrán como testimonio, sujeto a los
principios de publicidad y contradicción de la prueba.

Artículo 751. Los testimonios invocados por el interesado deben


haberse rendido antes del requerimiento o liquidación. Cuando el
interesado invoque los testimonios, de que trata el artículo anterior, éstos
surtirán efectos, siempre y cuando las declaraciones o respuestas se
hayan presentado antes de haber mediado requerimiento o practicado
liquidación a quien los aduzca como prueba.

Artículo 752. Inadmisibilidad del testimonio. La prueba testimonial


no es admisible para demostrar hechos que de acuerdo con normas
generales o especiales no sean susceptibles de probarse por dicho medio,
ni para establecer situaciones que por su naturaleza suponen la existencia
de documentos o registros escritos, salvo que en este último caso y en
las circunstancias en que otras disposiciones lo permitan exista un indicio
escrito.

Artículo 753. Declaraciones rendidas fuera de la actuación


tributaria. Las declaraciones rendidas fuera de la actuación tributaria,
pueden ratificarse ante las oficinas que conozcan del negocio o ante
las dependencias de la Dirección General de Impuestos Nacionales
comisionadas para el efecto, si en concepto del funcionario que debe
apreciar el testimonio resulta conveniente contrainterrogar al testigo.

Artículo 754. Datos estadísticos que constituyen indicio. Los datos


estadísticos producidos por la Dirección General de Impuestos Nacionales,
por el Departamento Administrativo Nacional de Estadística y por el
Banco de la República, constituyen indicio grave en caso de ausencia
132 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

absoluta de pruebas directas, para establecer el valor de ingresos, costos,


deducciones y activos patrimoniales, cuya existencia haya sido probada.

Artículo 754-1. Indicios con base en estadísticas de sectores


económicos. Adicionado por el artículo 60 de la Ley 6ª de 1992. Los
datos estadísticos oficiales obtenidos o procesados por la Dirección de
Impuestos Nacionales sobre sectores económicos de contribuyentes,
constituirán indicio para efectos de adelantar los procesos de determinación
de los impuestos, retenciones y establecer la existencia y cuantía de
los ingresos, costos, deducciones, impuestos descontables y activos
patrimoniales.

Artículo 755. La omisión del NIT o del nombre en la correspondencia,


facturas y recibos permiten presumir ingresos. El incumplimiento del
deber contemplado en el artículo 619, hará presumir la omisión de pagos
declarados por terceros, por parte del presunto beneficiario de los mismos.

Artículo 755-1. Presunción en juegos de azar. Adicionado por el


artículo 57 de la Ley 6ª de 1992. Cuando quien coloque efectivamente
apuestas permanentes, a título de concesionario, agente comercializador
o subcontratista, incurra en inexactitud en su declaración de renta o en
irregularidades contables, se presumirá que sus ingresos mínimos por el
ejercicio de la referida actividad estarán conformados por las sumatorias
del valor promedio efectivamente pagado por los apostadores por cada
formulario, excluyendo los formularios recibidos y no utilizados en el
ejercicio. Se aceptará como porcentaje normal de deterioro, destrucción,
pérdida o anulación de formularios, el 10% de los recibidos por el
contribuyente.

El promedio de que trata el inciso anterior se establecerá de acuerdo


con datos estadísticos técnicamente obtenidos por la administración de
impuestos o por las entidades concedentes, en cada región y durante el
año gravable o el inmediatamente anterior.

Artículo 755-2. Presunción de renta gravable por ingresos en divisas.


Adicionado por el artículo 61 de la Ley 6ª de 1992. Los ingresos
provenientes del exterior en moneda extranjera por concepto de servicios
o transferencias se presumen constitutivos de renta gravable a menos que
se demuestre lo contrario.

Parágrafo Esta presunción no será aplicable a los ingresos percibidos


en moneda extranjera por el servicio exterior diplomático, consular y de
organismos internacionales acreditados en Colombia.

Artículo 755-3. Renta presuntiva por consignaciones en cuentas


bancarias y de ahorro. Inciso Primero Modificado por el Artículo 29
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 133

de la Ley 863 de 2003. Cuando exista indicio grave de que los valores
consignados en cuentas bancarias o de ahorro que figuren a nombre de
terceros, pertenecen a ingresos originados en operaciones realizadas
por el contribuyente, se presumirá legalmente que el monto de las
consignaciones realizadas en dichas cuentas durante el período gravable
ha originado una renta líquida gravable equivalente a un cincuenta por
ciento (50%) del valor total de las mismas, independientemente de que
figuren o no en la contabilidad o no correspondan a las registradas en ella.
Esta presunción admite prueba en contrario.

Para el caso de los responsables del impuesto sobre las ventas, dicha
presunción se aplicará sin perjuicio de la adición del mismo valor,
establecido en la forma indicada en el inciso anterior, como ingreso
gravado que se distribuirá en proporción a las ventas declaradas en cada
uno de los bimestres correspondientes.

Los mayores impuestos originados en la aplicación de lo dispuesto en este


artículo, no podrán afectarse con descuento alguno.

Facultad para presumir ingresos

Artículo 756. Las presunciones sirven para determinar las obligaciones


tributarias. Modificado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Los
funcionarios competentes para la determinación de los impuestos,
podrán adicionar ingresos para efectos de los impuestos sobre la renta y
complementarios y sobre las ventas, dentro del proceso de determinación
oficial previsto en el título IV del libro V del estatuto tributario, aplicando las
presunciones de los artículos siguientes.

Artículo 757. Presunción por diferencia en inventarios. Cuando


se constate que los inventarios son superiores a los contabilizados o
registrados, podrá presumirse que tales diferencias representan ventas
gravadas omitidas en el año anterior.

El monto de las ventas gravadas omitidas se establecerá como el resultado


de incrementar la diferencia de inventarios detectada, en el porcentaje de
utilidad bruta registrado por el contribuyente en la declaración de renta del
mismo ejercicio fiscal o del inmediatamente anterior. Dicho porcentaje se
establecerá de conformidad con lo previsto en el artículo 760.

Modificado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Las ventas gravadas


omitidas, así determinadas, se imputarán en proporción a las ventas
correspondientes a cada uno de los bimestres del año; igualmente se
adicionarán a la renta líquida gravable del mismo año.

El impuesto resultante no podrá disminuirse con la imputación de


descuento alguno.
134 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Artículo 758. Presunción de ingresos por control de ventas o ingresos


gravados. El control de los ingresos por ventas o prestación de servicios
gravados, de no menos de cinco (5) días continuos o alternados de un
mismo mes, permitirá presumir que el valor total de los ingresos gravados
del respectivo mes, es el que resulte de multiplicar el promedio diario de
los ingresos controlados, por el número de días hábiles comerciales de
dicho mes.

A su vez, el mencionado control, efectuado en no menos de cuatro (4)


meses de un mismo año, permitirá presumir que los ingresos por ventas
o servicios gravados correspondientes a cada período comprendido en
dicho año, son los que resulten de multiplicar el promedio mensual de los
ingresos controlados por el número de meses del período.

La diferencia de ingresos existente entre los registrados como gravables


y los determinados presuntivamente, se considerarán como ingresos
gravados omitidos en los respectivos períodos.

Igual procedimiento podrá utilizarse para determinar el monto de los


ingresos exentos o excluidos del impuesto a las ventas.

El impuesto que originen los ingresos así determinados, no podrá


disminuirse mediante la imputación de descuento alguno.

Adicionado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. La adición de


los ingresos gravados establecidos en la forma señalada en los incisos
anteriores, se efectuará siempre y cuando el valor de los mismos sea
superior en más de un 20% a los ingresos declarados o no se haya
presentado la declaración correspondiente.

Adicionado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. En ningún caso el


control podrá hacerse en días que correspondan a fechas especiales en
que por la costumbre de la actividad comercial general se incrementan
significativamente los ingresos.

Parágrafo Adicionado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Lo


dispuesto en este artículo será igualmente aplicable en el impuesto sobre
la renta, en cuyo caso los ingresos establecidos en la forma aquí prevista
se considerarán renta gravable del respectivo período.

Artículo 759. Presunción por omisión de registro de ventas o


prestación de servicios. Cuando se constate que el responsable ha
omitido registrar ventas o prestaciones de servicios durante no menos de
cuatro (4) meses de un año calendario, podrá presumirse que durante los
períodos comprendidos en dicho año se han omitido ingresos por ventas
o servicios gravados por una cuantía igual al resultado de multiplicar por
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 135

el número de meses del período, el promedio de los ingresos omitidos


durante los meses constatados.

Adicionado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Así mismo, se


presumirá que en materia del impuesto sobre la renta y complementarios,
el contribuyente omitió ingresos, constitutivos de renta líquida gravable,
por igual cuantía en el respectivo año o período gravable.

El impuesto que origine los ingresos así determinados, no podrá disminuirse


mediante la imputación de descuento alguno.

Artículo 760. Presunción de ingresos por omisión del registro de


compras. Cuando se constate que el responsable ha omitido registrar
compras destinadas a las operaciones gravadas, se presumirá como
ingreso gravado omitido el resultado que se obtenga al efectuar el siguiente
cálculo: se tomará el valor de las compras omitidas y se dividirá por el
porcentaje que resulte de restar del ciento por ciento (100%), el porcentaje
de utilidad bruta registrado por el contribuyente en la declaración de renta
del mismo ejercicio fiscal o del inmediatamente anterior.

El porcentaje de utilidad bruta a que se refiere el inciso anterior será


el resultado de dividir la renta bruta operacional por la totalidad de los
ingresos brutos operacionales que figuren en la declaración de renta.
Cuando no existieren declaraciones del impuesto de renta, se presumirá
que tal porcentaje es del cincuenta por ciento (50%).

En los casos en que la omisión de compras se constate en no menos


de cuatro (4) meses de un mismo año, se presumirá que la omisión se
presentó en todos los meses del año calendario.

El impuesto que originen los ingresos así determinados, no podrá


disminuirse mediante la imputación de descuento alguno.

Adicionado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Lo dispuesto en este


artículo permitirá presumir, igualmente, que el contribuyente del impuesto
sobre la renta y complementarios ha omitido ingresos, constitutivos de
renta líquida gravable, en la declaración del respectivo año o período
gravable, por igual cuantía a la establecida en la forma aquí prevista.

Artículo 761. Las presunciones admiten prueba en contrario.


Modificado por el artículo 58 de la Ley 6ª de 1992. Las presunciones
para la determinación de ingresos, costos y gastos admiten prueba en
contrario, pero cuando se pretenda desvirtuar los hechos base de la
presunción con la contabilidad, el contribuyente o responsable deberá
acreditar pruebas adicionales.
136 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Artículo 762. Presunción del valor de la transacción en el impuesto a


las ventas. Cuando se establezca la inexistencia de factura o documento
equivalente, o cuando éstos demuestren como monto de la operación
valores inferiores al corriente en plaza, se considerará, salvo prueba en
contrario, como valor de la operación atribuible a la venta o prestación del
servicio gravado, el corriente en plaza.

Artículo 763. Presunción de ingresos gravados con impuesto a las


ventas, por no diferenciar las ventas y servicios gravados de los que
no lo son. Cuando la contabilidad del responsable no permita identificar
los bienes vendidos o los servicios prestados, se presumirá que la totalidad
de las ventas y servicios no identificados corresponden a bienes o servicios
gravados con la tarifa más alta de los bienes que venda el responsable.

Artículo 763-1. Régimen Unificado de Imposición (RUI) para pequeños


contribuyentes del impuesto sobre la renta y responsable del
impuesto sobre las ventas. Declarado Inexequible mediante Sentencia
C-740 de octubre 6 de 1999 por la Corte Constitucional.

Artículo 764. Determinación provisional del impuesto por omisión de


la declaración tributaria. Cuando el contribuyente omita la presentación
de la declaración tributaria, estando obligado a ello, la administración de
impuestos nacionales, podrá determinar provisionalmente como impuesto
a cargo del contribuyente, una suma equivalente al impuesto determinado
en su última declaración, aumentado en el incremento porcentual que
registre el índice de precios al consumidor para empleados, en el período
comprendido entre el último día del período gravable correspondiente
a la última declaración presentada y el último día del período gravable
correspondiente a la declaración omitida.

Contra la determinación provisional del impuesto prevista en el este


artículo, procede el recurso de reconsideración.

El procedimiento previsto en el presente artículo no impide a la


administración determinar el impuesto que realmente le corresponda al
contribuyente.

Prueba documental

Artículo 765. Facultad de invocar documentos expedidos por las


oficinas de impuestos. Los contribuyentes podrán invocar como prueba,
documentos expedidos por las oficinas de impuestos, siempre que se
individualicen y se indique su fecha, número y oficina que los expidió.

Artículo 766. Procedimiento cuando se invoquen documentos que


reposen en la administración. Cuando el contribuyente invoque como
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 137

prueba el contenido de documentos que se guarden en las oficinas de


impuestos, debe pedirse el envío de tal documento, inspeccionarlo y tomar
copia de lo conducente, o pedir que la oficina donde estén archivados
certifique sobre las cuestiones pertinentes.

Artículo 767. Fecha cierta de los documentos privados. Un documento


privado, cualquiera que sea su naturaleza, tiene fecha cierta o auténtica,
desde cuando ha sido registrado o presentado ante un notario, juez o
autoridad administrativa, siempre que lleve la constancia y fecha de tal
registro o presentación.

Artículo 768. Reconocimiento de firma de documentos privados. El


reconocimiento de la firma de los documentos privados puede hacerse
ante las oficinas de impuestos.

Artículo 769. Certificados con valor de copia auténtica. Los certificados


tienen el valor de copias auténticas, en los casos siguientes:

a) Cuando han sido expedidos por funcionarios públicos, y hacen relación


a hechos que consten en protocolos o archivos oficiales;

b) Cuando han sido expedidos por entidades sometidas a la vigilancia del


Estado y versan sobre hechos que aparezcan registrados en sus libros
de contabilidad o que consten en documentos de sus archivos, y

c) Cuando han sido expedidos por las cámaras de comercio y versan sobre
asientos de contabilidad, siempre que el certificado exprese la forma
como están registrados los libros y dé cuenta de los comprobantes
externos que respaldan tales asientos.

Artículo 770. Prueba de pasivos. Los contribuyentes que no estén


obligados a llevar libros de contabilidad, sólo podrán solicitar pasivos
que estén debidamente respaldados por documentos de fecha cierta. En
los demás casos, los pasivos deben estar respaldados por documentos
idóneos y con el lleno de todas las formalidades exigidas para la
contabilidad.

Artículo 771. Prueba supletoria de los pasivos. El incumplimiento de


lo dispuesto en el artículo anterior, acarreará el desconocimiento de los
pasivos, a menos que se pruebe que las cantidades respectivas y sus
rendimientos, fueron oportunamente declarados por el beneficiario.

Artículo 771-1. Valor probatorio de la impresión de imágenes ópticas


no modificables. Adicionado por el artículo 74 de la Ley 6ª de 1992. La
reproducción impresa de imágenes ópticas no modificables, efectuadas
por la Unidad Administrativa Especial-Dirección de Impuestos Nacionales
138 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

sobre documentos originales relacionados con los impuestos que


administra, corresponde a una de las clases de documentos señalados en
el artículo 251 del Código de Procedimiento Civil, con su correspondiente
valor probatorio.

Artículo 771-2. Procedencia de costos, deducciones e impuestos


descontables. Adicionado por el artículo 3 de la Ley 383 de 1997. Para
la procedencia de costos y deducciones en el impuesto sobre la renta, así
como de los impuestos descontables en el impuesto sobre las ventas, se
requerirá de facturas con el cumplimiento de los requisitos establecidos en
los literales b), c), d), e), f) y g) del artículo 617 y 618 del estatuto tributario.

Tratándose de documentos equivalentes se deberán cumplir los requisitos


contenidos en los literales b), d), e) y g) del artículo 617 del estatuto
tributario.

Cuando no exista la obligación de expedir factura o documento equivalente,


el documento que pruebe la respectiva transacción que da lugar a costos,
deducciones o impuestos descontables, deberá cumplir los requisitos
mínimos que el Gobierno Nacional establezca.

Parágrafo En lo referente al cumplimiento del requisito establecido en


el literal d) del artículo 617 del estatuto tributario para la procedencia de
costos, deducciones y de impuestos descontables, bastará que la factura
o documento equivalente contenga la correspondiente numeración.

Artículo 771-3. Control integral. Adicionado por el artículo 4 de la Ley


383 de 1997. El valor de los bienes introducidos al territorio nacional sin
el pago de los tributos aduaneros correspondientes, no podrá ser tratado
como costo o deducción en el impuesto sobre la renta por el infractor,
por quien de cualquier forma participe en la infracción o por quienes a
sabiendas de tal hecho efectúan compras de estos bienes.

Artículo 771-4. Control en la expedición del registro o licencia de


importación. Adicionado por el artículo 5 de la Ley 383 de 1997. El
Instituto Colombiano de Comercio Exterior, Incomex, verificará toda la
información suministrada por el usuario en la solicitud de registro o licencia
de importación. Cuando exista diferencia entre el precio declarado y los
precios oficiales o de referencia, según sea el caso, podrá postergar el
trámite de la solicitud, hasta que el importador demuestre la veracidad
de la información consignada en la solicitud de registro o licencia de
importación.

En todos los casos, informará a la autoridad aduanera para que inicie las
investigaciones a que hubiere lugar.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 139

Parágrafo. El control que realice el Incomex, se efectuará sin perjuicio de


las facultades de fiscalización de la Dirección de Impuestos y Aduanas
Nacionales.

Prueba contable

Artículo 772. La contabilidad como medio de prueba. Los libros de


contabilidad del contribuyente constituyen prueba a su favor, siempre que
se lleven en debida forma.

Artículo 773. Forma y requisitos para llevar la contabilidad. Para


efectos fiscales, la contabilidad de los comerciantes deberá sujetarse al
título IV del libro I, del Código de Comercio y:

1. Mostrar fielmente el movimiento diario de ventas y compras. Las


operaciones correspondientes podrán expresarse globalmente, siempre
que se especifiquen de modo preciso los comprobantes externos que
respalden los valores anotados.

2. Cumplir los requisitos señalados por el gobierno mediante reglamentos,


en forma que, sin tener que emplear libros incompatibles con las
características del negocio, haga posible, sin embargo, ejercer un
control efectivo y reflejar, en uno o más libros, la situación económica y
financiera de la empresa.

Artículo 774. Requisitos para que la contabilidad constituya prueba.


Tanto para los obligados legalmente a llevar libros de contabilidad,
como para quienes no estando legalmente obligados lleven libros de
contabilidad, éstos serán prueba suficiente, siempre que reúnan los
siguientes requisitos:

1. Estar registrados en la cámara de comercio o en la administración de


impuestos nacionales, según el caso.

2. Estar respaldados por comprobantes internos y externos.

3. Reflejar completamente la situación de la entidad o persona natural.

4. No haber sido desvirtuados por medios probatorios directos o indirectos


que no estén prohibidos por la ley.

5. No encontrarse en las circunstancias del artículo 74 del Código de


Comercio

Artículo 775. Prevalencia de los libros de contabilidad frente a la


declaración. Cuando haya desacuerdo entre la declaración de renta y
140 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

patrimonio y los asientos de contabilidad de un mismo contribuyente,


prevalecen éstos.

Artículo 776. Prevalencia de los comprobantes sobre los asientos de


contabilidad. Si las cifras registradas en los asientos contables referentes
a costos, deducciones, exenciones especiales y pasivos exceden del
valor de los comprobantes externos, los conceptos correspondientes
se entenderán comprobados hasta concurrencia del valor de dichos
comprobantes.

Artículo 777. La certificación de contador público y revisor fiscal


es prueba contable. Cuando se trate de presentar en las oficinas de la
administración pruebas contables, serán suficientes las certificaciones de
los contadores o revisores fiscales de conformidad con las normas legales
vigentes, sin perjuicio de la facultad que tiene la administración de hacer
las comprobaciones pertinentes.

Inspecciones tributarias

Artículo 778. Derecho de solicitar la inspección. El contribuyente


puede solicitar la práctica de inspecciones tributarias. Si se solicita
con intervención de testigos actuarios, serán nombrados, uno por el
contribuyente y otro por la oficina de impuestos.

Antes de fallarse deberá constar el pago de la indemnización del tiempo


empleado por los testigos, en la cuantía señalada por la oficina de
impuestos.

Artículo 779. Inspección tributaria. Modificado por el artículo 137


de la Ley 223 de 1995. La administración podrá ordenar la práctica de
inspección tributaria, para verificar la exactitud de las declaraciones, para
establecer la existencia de hechos gravables declarados o no, y para
verificar el cumplimiento de las obligaciones formales.

Se entiende por inspección tributaria, un medio de prueba en virtud del cual


se realiza la constatación directa de los hechos que interesan a un proceso
adelantado por la administración tributaria, para verificar su existencia,
características y demás circunstancias de tiempo, modo y lugar, en la
cual pueden decretarse todos los medios de prueba autorizados por la
legislación tributaria y otros ordenamientos legales, previa la observancia
de las ritualidades que les sean propias.

La inspección tributaria se decretará mediante auto que se notificará por


correo o personalmente, debiéndose en él indicar los hechos materia de la
prueba y los funcionarios comisionados para practicarla.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 141

La inspección tributaria se iniciará una vez notificado el auto que la ordene.


De ella se levantará un acta que contenga todos los hechos, pruebas
y fundamentos en que se sustenta y la fecha de cierre de investigación
debiendo ser suscrita por los funcionarios que la adelantaron.

Cuando de la práctica de la inspección tributaria se derive una actuación


administrativa, el acta respectiva constituirá parte de la misma.

Artículo 779-1. Facultades de registro. Adicionado por el artículo 2 de


la Ley 383 de 1997. La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales,
podrá ordenar mediante resolución motivada, el registro de oficinas,
establecimientos comerciales, industriales o de servicios y demás locales
del contribuyente o responsable, o de terceros depositarios de sus
documentos contables o sus archivos, siempre que no coincida con su
casa de habitación, en el caso de personas naturales.

En desarrollo de las facultades establecidas en el inciso anterior, la


Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales podrá tomar las medidas
necesarias para evitar que las pruebas obtenidas sean alteradas, ocultadas
o destruidas, mediante su inmovilización y aseguramiento.

Para tales efectos, la fuerza pública deberá colaborar, previo requerimiento


de los funcionarios fiscalizadores, con el objeto de garantizar la ejecución
de las respectivas diligencias. La no atención del anterior requerimiento
por parte del miembro de la fuerza pública a quien se le haya solicitado,
será causal de mala conducta.

Parágrafo 1. La competencia para ordenar el registro y aseguramiento de


que trata el presente artículo, corresponde al administrador de impuestos
y aduanas nacionales y al subdirector de fiscalización de la Dirección de
Impuestos y Aduanas Nacionales. Esta competencia es indelegable.

Parágrafo 2. La providencia que ordena el registro de que trata el presente


artículo, será notificada en el momento de practicarse la diligencia a quien
se encuentre en el lugar, y contra la misma no procede recurso alguno.

Artículo 780. Lugar de presentación de los libros de contabilidad. La


obligación de presentar libros de contabilidad deberá cumplirse, en las
oficinas o establecimientos del contribuyente obligado a llevarlos.

Artículo 781. La no presentación de los libros de contabilidad será


indicio en contra del contribuyente. El contribuyente que no presente
sus libros, comprobantes y demás documentos de contabilidad cuando
la administración lo exija, no podrá invocarlos posteriormente como
prueba en su favor y tal hecho se tendrá como indicio en su contra. En
tales casos se desconocerán los correspondientes costos, deducciones,
142 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

descuentos y pasivos, salvo que el contribuyente los acredite plenamente.


Únicamente se aceptará como causa justificativa de la no presentación,
la comprobación plena de hechos constitutivos de fuerza mayor o caso
fortuito.

La existencia de la contabilidad se presume en todos los casos en que la


ley impone la obligación de llevarla.

Artículo 782. Inspección contable. Modificado por el artículo 138 de


la Ley 223 de 1995. La administración podrá ordenar la práctica de la
inspección contable al contribuyente como a terceros legalmente obligados
a llevar contabilidad, para verificar la exactitud de las declaraciones, para
establecer la existencia de hechos gravados o no, y para verificar el
cumplimiento de obligaciones formales.

De la diligencia de inspección contable, se extenderá un acta de la cual


deberá entregarse copia una vez cerrada y suscrita por los funcionarios
visitadores y las partes intervinientes.

Cuando alguna de las partes intervinientes, se niegue a firmarla, su


omisión no afectará el valor probatorio de la diligencia. En todo caso se
dejará constancia en el acta.

Se considera que los datos consignados en ella, están fielmente tomados


de los libros, salvo que el contribuyente o responsable demuestre su
inconformidad.

Cuando de la práctica de la inspección contable, se derive una actuación


administrativa en contra del contribuyente, responsable, agente retenedor
o declarante, o de un tercero, el acta respectiva deberá formar parte de
dicha actuación.

Artículo 783. Casos en los cuales debe darse traslado del acta. Cuando
no proceda el requerimiento especial o el traslado de cargos del acta de
visita de la inspección tributaria, deberá darse traslado por el término de
un mes para que se presenten los descargos que se tenga a bien.

Prueba pericial

Artículo 784. Designación de peritos. Para efectos de las pruebas


periciales, la administración nombrará como perito a una persona o entidad
especializada en la materia, y ante la objeción a su dictamen ordenará un
nuevo peritazgo. El fallador valorará los dictámenes dentro de la sana
crítica.

Artículo 785. Valoración del dictamen. La fuerza probatoria del dictamen


pericial será apreciada por la oficina de impuestos, conforme a las reglas
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 143

de sana crítica y tomando en cuenta la calidad del trabajo presentado, el


cumplimiento que se haya dado a las normas legales relativas a impuestos,
las bases doctrinarias y técnicas en que se fundamente y la mayor o menor
precisión o certidumbre de los conceptos y de las conclusiones.

CAPÍTULO III
Circunstancias especiales que deben
ser probadas por el contribuyente

Artículo 786. Las de los ingresos no constitutivos de renta. Cuando


exista alguna prueba distinta de la declaración de renta y complementarios
del contribuyente, sobre la existencia de un ingreso, y éste alega haberlo
recibido en circunstancias que no lo hacen constitutivo de renta, está
obligado a demostrar tales circunstancias.

Artículo 787. Las de los pagos y pasivos negados por los beneficiarios.
Cuando el contribuyente ha solicitado en su declaración de renta y
complementarios la aceptación de costos, deducciones, exenciones
especiales o pasivos, cumpliendo todos los requisitos legales, si el tercero
beneficiado con los pagos o acreencias respectivos niega el hecho, el
contribuyente está obligado a informar sobre todas las circunstancias de
modo, tiempo y lugar referentes al mismo, a fin de que las oficinas de
impuestos prosigan la investigación.

Artículo 788. Las que los hacen acreedores a una exención. Los
contribuyentes están obligados a demostrar las circunstancias que los
hacen acreedores a una exención tributaria, cuando para gozar de ésta no
resulte suficiente conocer solamente la naturaleza del ingreso o del activo.

Artículo 789. Los hechos que justifican aumento patrimonial. Los


hechos que justifiquen los aumentos patrimoniales deben ser probados
por el contribuyente, salvo cuando se consideren ciertos de conformidad
con el artículo 746.

Artículo 790. De los activos poseídos a nombre de terceros. Cuando


sobre la posesión de un activo, por un contribuyente, exista alguna prueba
distinta de su declaración de renta y complementarios, y éste alega que el
bien lo tiene a nombre de otra persona, debe probar este hecho.

Artículo 791. De las transacciones efectuadas con personas fallecidas.


La administración tributaria desconocerá los costos, deducciones,
descuentos y pasivos patrimoniales cuando la identificación de los
beneficiarios no corresponda a cédulas vigentes, y tal error no podrá ser
subsanado posteriormente, a menos que el contribuyente o responsable
pruebe que la operación se realizó antes del fallecimiento de la persona
cuya cédula fue informada, o con su sucesión.
144 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Precisado lo anterior y entendiendo que este documento será revisado tanto


por personas con intereses en temas tributarios, así como por ejecutores
que se encuentran por fuera de esta órbita especial, procederemos a hacer
un análisis de las pruebas aplicables en materia del cobro coactivo.

En primera medida podemos afirmar que las pruebas son los medios o
argumentos que se tiene para demostrar la verdad de un hecho o de un
acto jurídico, utilizando medios considerados por la ley como conducentes,
eficaces y adecuados.

La prueba conduce a la convicción, nos lleva a la certeza de los hechos


afirmados por otros o por nosotros mismos, mediante un análisis de los
siguientes elementos:

a) Un hecho (afirmado por otro o no)


b) El medio
c) Una relación entre un hecho y el medio

Si estos extremos satisfacen nuestra razón hemos llegado a la convicción.

Las pruebas se pueden en

Plena Prueba: Cuando la prueba es reconocida por la ley como idónea


para declarar la existencia de un hecho estamos frente a una prueba plena
o completa.

Como fin, consistiendo en la demostración de la exactitud de un hecho, del


que depende la existencia de un derecho, es el mecanismo conducente y
legalmente eficaz para demostrar la verdad.

Prueba sumaria: Es aquella que, en los eventos expresamente señalados


por el legislador procesal, tiene pleno valor demostrativo inicial del hecho
o del acto jurídico a que se refiere, pese a que no haya sido controvertida
por la parte contraria y por contera que no haya sufrido el rito necesario de
la publicidad y contradicción. De ahí que, dentro de dicha concepción, de la
prueba sumaria dícese que es plena prueba no controvertida, eventualmente
sujeta a cuestionamiento posterior para que en definitiva adquiera fuerza
demostrativa.

Debe recordarse que el artículo 745 del Estatuto Tributario señala que
las dudas provenientes de vacios probatorios se resuelven a favor del
contribuyente.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 145

En conclusión, toda decisión del funcionario debe fundarse en hechos


probados, por tanto la carga de la prueba corresponde por igual al
contribuyente y a la Administración (Artículo 742 del E.T.).

12.13 LOS MEDIOS DE PRUEBA DENTRO DEL P.A.C.

El procedimiento tributario consagra como medios de prueba los mismos


del Código de Procedimiento Civil, sin embargo por la especialidad del
proceso administrativo de cobro en donde no pueden ser debatidas
situaciones que debieron haberlo sido en la vía gubernativa, es decir que
casi o nada puede discutirse del título como tal, limita casi por completo los
medios de prueba a utilizar, quedando como resultado de esta depuración
de los medios de prueba, básicamente, el documento, la prueba pericial
y la inspección, veamos los tres (3) medios de prueba más aplicable en
el proceso administrativo de cobro coactivo, no obstante debemos aclarar
que a pesar de la anterior afirmación, es viable aplicar cualquier medio
probatorio, solamente que se señalan los más comúnmente utilizados.

a. El documento
Es uno de los medios disponibles para demostrar la veracidad de un hecho
alegado. Esto por cuanto la información que consta en documentos o escritos
puede ser valorada por un juez como muestra veraz de la autenticidad de
un hecho.

Podemos afirmar que los documentos se clasifican en públicos o privados,


los públicos son otorgados por funcionarios públicos en ejercicio de su
cargo y constituyen plena prueba.

De otra parte están los documentos privados, que aunque son medio de
prueba para constituirse como plena prueba (auténtico) debe haber sido
reconocido por juez o notario, o ha sido inscrito en un registro público
(inmuebles, vehículos.

En el proceso de Cobro Coactivo podemos afirmar que los documentos


adquieren gran relevancia, en primera medida por es un documentos físico
o electrónico el que se constituye como título ejecutivo, así mismo por regla
general en documentos se señala la constancia de pago bien expedida por
la cuenta corriente de la entidad o por la entidad financiera recaudadora,
así mismo en documentos aparecen datos importantes para señalar la
titularidad de un bien, o la existencia de valores embargables, o la existencia
de direcciones (boletines catastrales, etc).
146 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

b. La prueba pericial
Es la que surge del dictamen de los peritos, que son personas llamadas
a informar ante el funcionario ejecutor, por razón de sus conocimientos
especiales (trabajo o labor científica, técnica o artística) y siempre que sea
necesario tal dictamen científico, técnico o práctico sobre que tiene interés
relevante en el Procedimiento Administrativo de Cobro Coactivo, esta
prueba la desarrollan personas a quien la ley denomina “peritos”.

El Artículo 785 del Estatuto Tributario Nacional en materia tributaria señala


que “La fuerza probatoria del dictamen pericial será apreciada por la oficina
de impuestos, conforme a las reglas de sana crítica y tomando en cuenta
la calidad del trabajo presentado, el cumplimiento que se haya dado a las
normas legales relativas a impuestos, las bases doctrinarias y técnicas
en que se fundamente y la mayor o menor precisión o certidumbre de los
conceptos y de las conclusiones.”

Peritos, Es la persona natural versada en un arte, ciencia u oficio, cuyos


conocimientos son requeridos por el funcionario ejecutor para que lo
ilustre en el esclarecimiento de un hecho que requiere de conocimientos
especiales.

Dentro del proceso de Cobro coactivo señala el artículo 843-1 del Estatuto
Tributario Nacional, que para el nombramiento de auxiliares de la justicia
(en donde encontramos a los peritos) el funcionario ejecutor podrá:

“Artículo 843-1. Auxiliares. Adicionado por el artículo 90 de la Ley 6ª


de 1992. Para el nombramiento de auxiliares la administración tributaria
podrá:

1. Elaborar listas propias.

2. Contratar expertos.

3. Utilizar la lista de auxiliares de la justicia.

Parágrafo. La designación, remoción y responsabilidad de los auxiliares


de la administración tributaria se regirá por las normas del Código de
Procedimiento Civil, aplicables a los auxiliares de la justicia.

Los honorarios, se fijarán por el funcionario ejecutor de acuerdo con las


tarifas que la administración establezca.”

De otro lado y en cuanto tiene que ver con la designación de peritos en


materia tributaria señala el artículo 784 del Estatuto tributario que “Para
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 147

efectos de las pruebas periciales, la administración nombrará como perito a


una persona o entidad especializada en la materia, y ante la objeción a su
dictamen ordenará un nuevo peritazgo. El fallador valorará los dictámenes
dentro de la sana crítica.

Por lo anterior, el ejecutor deberá tener en cuenta que para designar, peritos,
removerlos mismos y determinar la responsabilidad de estos aplican las
reglas procedimentales señaladas en los artículos 9º a 11 del Código de
Procedimiento Civil, normas que se señalan a continuación:

Artículo 9º. Designación, aceptación del cargo, calidades y exclusión


de la lista. Para la designación, aceptación del cargo, calidades y exclusión
de la lista de los auxiliares de la justicia se observarán las siguientes reglas:

1. Designación. Los auxiliares de la justicia serán designados, así:

a) La de los peritos, secuestres, partidores, liquidadores, curadores


ad litem, contadores, agrimensores, síndicos, intérpretes y
traductores, se hará por el magistrado sustanciador o por el juez
del conocimiento, de la lista oficial de auxiliares de la justicia. Los
testigos de la celebración del matrimonio civil, serán designados por
los contrayentes.

En el auto de designación del curador ad litem, se incluirán tres


nombres escogidos de la lista de dichos auxiliares de la justicia. El
cargo será ejercido por el primero que concurra a notificarse del auto
admisorio o del mandamiento ejecutivo, según sea el caso, acto que
conllevará la aceptación de la designación. Los otros dos auxiliares
incluidos en el auto conservarán el turno de nombramiento en la
lista. En el mismo auto el juez señalará los gastos de curaduría
que debe cancelar la parte interesada. El pago podrá realizarse
mediante consignación a órdenes del juzgado o directamente al
auxiliar y acreditarse en el expediente. Si en el término de cinco (5)
días, contados a partir de la comunicación de su designación, no se
ha notificado ninguno de los curadores nombrados, se procederá a
su reemplazo observando el mismo procedimiento.

b) La designación será rotatoria, de manera que la misma persona no


pueda ser nombrada por segunda vez sino cuando se haya agotado
la lista. Empero, si al iniciarse o proseguirse una diligencia faltaren
los auxiliares o colaboradores nombrados, podrá procederse a su
reemplazo en el acto, con cualesquiera de las personas que figuren
en la lista correspondiente, y estén en aptitud para el desempeño
inmediato del cargo. Cuando en el respectivo despacho faltare la
lista, se acudirá a la de otro del mismo lugar, y en su defecto se hará
la designación en persona debidamente calificada para el oficio.
148 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

c) Los traductores e intérpretes serán únicos, a menos que se trate


de documentos o de declaraciones en diferentes idiomas y que el
auxiliar no sea experto en todos éstos.

d) Las partes podrán de consuno, en el curso del proceso, designar


peritos y secuestre, y reemplazar a éste.

e) Los secuestres podrán designar bajo su responsabilidad y con


autorización judicial, los dependientes que sean indispensables
para el buen desempeño del cargo y señalar sus funciones. El
juez resolverá al respecto y fijará la asignación del dependiente, en
providencia que no admite apelación.

f) El curador ad litem de los relativamente incapaces será designado


por el juez, si no lo hiciera el interesado.

g) Los partidores y liquidadores podrán ser designados conjuntamente


por los interesados, dentro de la ejecutoria de la providencia que
decrete la partición o la liquidación, teniendo en cuenta lo previsto
en el artículo 608.

2. Aceptación del cargo. Todo nombramiento se notificará por telegrama


enviado a la dirección que figure en la lista oficial, y en éste se indicará
el día y la hora de la diligencia a la cual deban concurrir. Copia
debidamente sellada por la oficina de telégrafo respectiva, se agregará
al expediente. Lo anterior, sin perjuicio de que dicha notificación se
pueda realizar por otro medio más expedito, de lo cual deberá quedar
constancia en el expediente. En la misma forma se hará cualquiera otra
notificación.

El cargo de auxiliar de la justicia es de obligatoria aceptación dentro de


los cinco (5) días siguientes al envío del telegrama correspondiente o a
la notificación realizada por cualquier otro medio, so pena de que sea
excluido de la lista, salvo justificación aceptada. Los peritos deberán
posesionarse dentro de los cinco (5) días siguientes a la aceptación.

Si la persona designada estuviere impedida para desempeñar la


función, se excusare de prestar el servicio, no tomare posesión cuando
fuere el caso hacerlo, no concurriere a la diligencia o no cumpliere su
encargo dentro del término señalado, se procederá inmediatamente a
su relevo.

3. Designación y calidades. En las cabeceras de distrito judicial y


ciudades de más de doscientos mil (200.000) habitantes, solamente
podrán designarse como auxiliares de la justicia personas jurídicas o
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 149

naturales que obtengan licencia expedida por la autoridad competente


de conformidad con la reglamentación que sobre el particular realice
el Consejo Superior de la Judicatura, previa acreditación por parte
del aspirante de los requisitos técnicos, la idoneidad y la experiencia
requeridas. Las licencias deberán renovarse cada cinco (5) años.

En los demás lugares para la designación de los auxiliares de la justicia


se aplicará lo dispuesto en los literales a) y b) del numeral 1º del
presente artículo.

Las listas de auxiliares de la justicia serán obligatorias para magistrados,


jueces e inspectores, y en ningún caso podrán ser nombrados auxiliares
que no figuren en las mismas, so pena de incurrir en falta disciplinaria.

Las entidades públicas que cumplan funciones técnicas en el orden


nacional o territorial podrán ser designadas como perito sin necesidad
de obtener la licencia de que trata este parágrafo (sic).

4. Exclusión de la lista. Las autoridades judiciales excluirán de las listas de


auxiliares de la justicia, e impondrán multas hasta de diez (10) salarios
mínimos legales mensuales según el caso:

a) A quienes por sentencia ejecutoriada hayan sido condenados por la


comisión de delitos contra la administración de justicia.

b) A quienes hayan rendido dictamen pericial contra el cual hubieren


prosperado objeciones por dolo, error grave o cohecho.

c) A quienes como secuestres, liquidadores o curadores con


administración de bienes, no hayan rendido oportunamente cuenta
de su gestión, o cubierto el saldo a su cargo, o reintegrado los bienes
que se le confiaron o los hayan utilizado en provecho propio o de
terceros, o se les halle responsables de administración negligente.

d) A quienes no hayan cumplido a cabalidad con el encargo de curador


ad litem.

e) A las personas a quienes se les haya suspendido o cancelado la


matrícula o licencia.

f) A quienes hayan entrado a ejercer un cargo oficial mediante situación


legal o reglamentaria.

g) A quienes hayan fallecido o se incapaciten física o mentalmente.

h) A quienes se ausenten definitivamente del respectivo territorio


jurisdiccional.
150 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

i) A quienes sin causa justificada no aceptaren o no ejercieren el cargo


de auxiliar o colaborador de la justicia para el que fueron designados.

j) Al auxiliar de la justicia que haya convenido honorarios con las


partes o haya solicitando o recibido pago de ellas con anterioridad a
la fijación judicial o por encima del valor de ésta.

k) A quienes siendo servidores públicos hubieren sido destituidos por


sanciones disciplinarias.

Parágrafo 1º. La exclusión y la imposición de multas se resolverá


mediante incidente el cual se iniciará por el juez de oficio o a petición de
parte, dentro de los diez (10) días siguientes a la ocurrencia del hecho que
origina la exclusión o de su conocimiento. Para excusar su falta el auxiliar
deberá justificar su incumplimiento.

Parágrafo 2º. También serán excluidas de la lista las personas jurídicas


cuyos miembros incurran en las causales previstas en los numerales b),
c), d), e), i) y j) del presente artículo, así como las personas jurídicas que
se liquiden.

Las personas jurídicas no podrán actuar como auxiliares de la justicia por


conducto de personas que incurran en las causales de exclusión previstas
en este artículo.

Artículo 10. Custodia de bienes y dineros. Los auxiliares de la justicia


que como depositarios, secuestres o administradores de bienes perciban
sus productos en dinero, o reciban en dinero el resultado de la enajenación
de los bienes o de sus frutos, harán la consignación inmediatamente en la
cuenta de depósitos judiciales a la orden del juez del conocimiento.

El juez podrá autorizar el pago de impuestos y expensas con los dineros


depositados; igualmente, cuando se trate de empresas industriales,
comerciales o agropecuarias, podrá facultar al administrador para que,
bajo su responsabilidad personal, lleve los dineros a una cuenta corriente
bancaria que tenga la denominación del cargo que desempeña. El banco
respectivo enviará al despacho judicial copia de los extractos mensuales.

En todo caso, el depositario o administrador dará al juzgado informe


mensual de su gestión, sin perjuicio del deber de rendir cuentas.

Designación y calidades de los secuestres. En las cabeceras de distrito


judicial y ciudades de más de doscientos mil (200.000) habitantes,
solamente podrán designarse como secuestres personas jurídicas o
naturales que obtengan licencia expedida por la autoridad competente
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 151

de conformidad con la reglamentación que sobre el particular realice el


Consejo Superior de la Judicatura, previa constitución de una garantía del
cumplimiento de sus funciones a favor del consejo.

La notificación por telegrama, se podrá suplir enviando por correo


certificado el oficio donde conste la designación del auxiliar de la justicia
dentro del proceso.

Las licencias deberán renovarse cada año, previo reajuste del valor del
seguro, y podrán ser canceladas por el mismo funcionario en caso de
incumplimiento de los deberes que la ley impone a los secuestres.

Cuando se trate de secuestro de bienes muebles distintos de los


mencionados en los numerales 5º a 10 del artículo 682 y de vehículos de
servicio público, los secuestres deberán depositar los bienes que reciban
en la mencionada bodega; no podrán cambiarlos de lugar salvo para
trasladarlos a otra que haya tenido igual aprobación, previo informe escrito
al respectivo juez, y deberán abstenerse de usarlos en cualquier forma.

En los lugares distintos a los mencionados en el inciso cuarto, respecto


a designación de secuestres, dependientes de éstos, depósito de bienes
muebles y caución, se aplicará respectivamente lo dispuesto en los
artículos 9º, numerales 1º y 2º; 682, numerales 4º y 5º, y 683, inciso tercero.

El incumplimiento por los secuestres de cualquiera de los deberes


consagrados en los incisos anteriores y en el artículo 688, dará lugar a
la cancelación de la licencia y al relevo de todas las designaciones como
secuestre que estén desempeñando, lo cual se hará como lo prevé el
penúltimo inciso del artículo 688.

El juez que decrete el relevo enviará copia de la providencia a la


correspondiente autoridad, para que dé cumplimiento a la cancelación
prevista en el inciso anterior e informe a las oficinas judiciales del país
para que procedan a darle cumplimiento.

Artículo 11. Sanciones. El auxiliar de la justicia por cuya culpa deje de


practicarse una prueba o diligencia, será sancionado con multa de dos a
cinco salarios mínimos mensuales. La violación de los deberes indicados
en el artículo precedente, así como el empleo de los bienes, sus productos
o el valor de su enajenación, en provecho propio o de la otra persona, y el
retardo en su entrega, dará lugar a multa de dos a cinco salarios mínimos
mensuales, la cual se impondrá mediante incidente que se tramitará
independientemente del proceso, sin perjuicio de las restantes sanciones
y de la indemnización a que hubiere lugar.”
152 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

c. Pago de Honorarios a los auxiliares de la justicia.


Para cumplir con el pago de los honorarios a los auxiliares de la justicia,
peritos, secuestres, etc, se aplicarán las reglas previstas en los artículos
35 a 38 del Acuerdo 1518 del 28 de agosto de 2008, emitido por Consejo
Superior de la Judicatura – Sala Administrativa “Por medio del cual se
establece el régimen y los honorarios de los auxiliares de la justicia”, que
señalan:

“Artículo 35. Honorarios. Los honorarios de los auxiliares de la justicia


constituyen una equitativa retribución del servicio público encomendado y
no podrán gravar en exceso a quienes solicitan se les dispense justicia por
parte de la Rama Judicial.

Es deber del funcionario judicial aplicar los mecanismos que le otorga


la ley para garantizar la transparencia y excelencia en la prestación del
servicio de los auxiliares de la justicia, y fijar los honorarios con sujeción a
los criterios establecidos en este Acuerdo.

Artículo 36. Criterios para la fijación de honorarios. El funcionario


de conocimiento, en la oportunidad procesal, con criterio objetivo y con
arreglo a las tarifas señaladas en el presente Acuerdo, fijará los honorarios
de los auxiliares de la justicia, individualizando la cantidad dentro de los
límites que se le trazan, basado en la complejidad del proceso, cuantía
de la pretensión, si es el caso, duración del cargo, calidad del experticio,
requerimientos técnicos, científicos o artísticos propios del cargo y la
naturaleza de los bienes y su valor.

CAPITULO II.
TARIFAS.

Artículo 37. Fijación de tarifas. Con base en los criterios señalados en el


artículo anterior, la remuneración de los auxiliares de la justicia se regirá
con sujeción a las siguientes reglas:

1. Curadores ad litem. En los procesos de mínima cuantía los curadores


ad litem recibirán como honorarios, al finalizar su labor, entre dos y
treinta salarios mínimos legales diarios; en los procesos de menor
cuantía entre diez y ciento cincuenta salarios mínimos legales diarios
y en los de mayor cuantía entre veinte y quinientos salarios mínimos
legales diarios.

En los procesos o asuntos sin cuantía, de única instancia, los curadores


ad litem recibirán entre dos y cien salarios mínimos legales diarios, y en
los de dos instancias entre dos y quinientos salarios mínimos legales
diarios.
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 153

Cuando haya de señalarse previamente una suma para gastos, se


limitará a lo estrictamente necesario.

En los procesos de mayor y menor cuantía, si la labor del curador ad


litem se redujo a contestar la demanda, el juez podrá fijarle honorarios
por debajo de la tarifa aquí establecida.

1.1 Los curadores especiales o ad hoc recibirán como honorarios entre


dos y veinte salarios mínimos legales diarios.

2. Partidores. Los honorarios de los partidores oscilarán entre el cero


punto cinco y el tres por ciento del valor total de los bienes objeto de la
partición, de acuerdo con el avalúo señalado en el inventario aprobado
en el proceso, sin que en ningún caso supere el equivalente a cuarenta
salarios mínimos legales mensuales vigentes.

3. Liquidadores. Los honorarios de los liquidadores oscilarán entre el


cero punto cinco y el tres por ciento del valor objeto de la liquidación,
sin que en ningún caso superen el equivalente a cuarenta salarios
mínimos legales mensuales vigentes. Se podrá fijar remuneración
parcial y sucesiva.

4. Traductores e intérpretes. Los traductores devengarán honorarios


entre uno y seis salarios mínimos legales diarios por página; y los
intérpretes entre seis y diez salarios mínimos legales diarios, por hora,
según idioma.

5. Secuestres. El secuestre tendrá derecho por su actuación en la


diligencia a honorarios entre dos y diez salarios mínimos legales diarios.

Cumplido el encargo, aprobada y fenecida la cuenta de su administración


y restituidos los bienes que se le confiaron, el secuestre tendrá derecho
a remuneración adicional, así:

5.1 Por inmuebles urbanos entre el uno y el seis por ciento de su


producto neto, si el secuestre no asegura su pago con entidad
legalmente constituida, y el nueve por ciento si lo asegura.

5.2 Por inmuebles no urbanos entre el uno y el diez por ciento de su


producto neto.

5.3 Por bienes inmuebles improductivos de diez a cien salarios mínimos


legales diarios vigentes.

5.4 Por establecimientos industriales o comerciales entre el uno


y el siete por ciento de su producto neto; si el secuestre ejerce
154 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

solamente la función de interventor, este porcentaje se reducirá a


la tercera parte.

5.5 Por bienes muebles que produzcan renta, entre el uno y el siete por
ciento de su producto neto.

5.6 Por bienes muebles que no exijan una activa y constante


administración y no produzcan renta, entre tres y cien salarios
mínimos legales diarios vigentes.

Parágrafo. El funcionario de conocimiento podrá señalar remuneración


parcial y sucesiva de la administración o interventoría, a solicitud del
auxiliar y previo traslado a las partes.

6. Peritos

6.1 Los honorarios que devengarán los peritos avaluadores de bienes


serán los siguientes:

6.1.1 Inmueble urbano. Si se trata de inmueble urbano, los honorarios


máximos se fijarán conforme al Decreto 466 de 2000, esto es,
aplicando el porcentaje establecido al valor del salario mínimo legal
diario vigente, y multiplicando su resultado por el número de metros
cuadrados del inmueble, construidos o no, con la reducción que se
señala para los estratos socio económicos uno a cuatro, como a
continuación se estable

Porcentaje que se
Número de metros aplica al valor del
Cuadrados inmueble salario mínimo legal
diario vigente.
De 0 a 100 15
Superior de 100 a 200 13.5
Superior de 200 a 500 12
Superior de 500 a 1000 10.5
Superior de 1.000 a 5.000 6
Superior de 5.000 a 10.000 3
Superior a 10.000 1.5

El resultado se multiplica por el número de metros cuadrados del


inmueble.

Parágrafo. Para inmuebles ubicados en estratos socio económicos 1 y


2, se aplicará un descuento del 40% sobre las tarifa asignada; para los
estratos 3 y 4 del 30%, conforme al siguiente ejemplo:
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 155

6.1.1.1 Mejoras en inmuebles urbanos. En avalúos de mejoras de


inmuebles urbanos, los honorarios se fijarán aplicando el porcentaje al
salario mínimo legal diario vigente según el área en metros cuadrados
de la mejoras, como se señala en la tabla descrita en el numeral anterior.

6.1.2 Inmueble no urbano. Si se trata de inmueble no urbano o de


mejoras, los honorarios se fijarán teniendo como base o valor mínimo los
equivalentes a 0.20 del salario mínimo legal mensual vigente para áreas
entre 0 y 50 hectáreas, y 0.85 para predios o mejoras superiores a 50
hectáreas.

Los valores definidos en el inciso anterior se incrementarán en el


porcentaje que resulte de sumar la aplicación de los factores de área,
distancia y mejoras, conforme a las siguientes reglas:

a) Incremento por área

b) Incremento por distancia

Hasta un 25% de la base o valor mínimo conforme a la distancia, en


kilómetros, comprendida entre la sede del despacho judicial competente
o comisionado, según el caso, y el lugar de ubicación del inmueble;

c) Incremento por el valor de las mejoras

c.1. Si el valor de las mejoras del inmueble se encuentra entre el 0%


y el 25% de su avalúo total, un 5% de la base o valor mínimo definido
según su área.

c.2. Si el valor de las mejoras del inmueble es superior al 25% hasta


el 50% de su avalúo total, un 15% de la base o valor mínimo definido
según su área.

c.3. Si el valor de las mejoras del inmueble es superior al 50% de su


avalúo total, un 25% de la base o valor mínimo definido según su área.

Ejemplos:

6.1.2.1 Mejoras en inmuebles no urbanos. En avalúos de mejoras de


inmuebles no urbanos, los honorarios se fijarán teniendo como base o
valor mínimo los equivalentes a 0.20 del salario mínimo legal mensual
vigente para áreas de las mejoras entre 0 y 50 hectáreas, y 0.85 para
superiores a 50 hectáreas.

Los valores definidos en el inciso anterior se incrementarán en el porcentaje


que resulte de sumar la aplicación de los factores de área de las mejoras y
156 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

distancia, como se indicó en el numeral 6.1.2., en lo pertinente, conforme


al siguiente ejemplo:

Parágrafo. Los peritos avaluadores de bienes inmuebles y de mejoras,


para rendir su dictamen, atenderán los parámetros establecidos por la
Sala Administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, en formato que
diseñará para el efecto.

6.1.3 Bienes muebles. Los peritos avaluadores de bienes muebles


devengarán la siguiente remuneración:

Valor de los bienes muebles Tarifa por mil


Por los primeros $ 25.000.000 3.25
Por los siguientes $ 25.000.000 3.00
Por los siguientes $ 50.000.000 2.75
Por los siguientes $ 400.000.000 2.25
Por los siguientes $ 500.000.000 1.75
Fracción a superior a $1.000.000.000 0.75

6.1.4 Avalúos de renta de bienes muebles e inmuebles. Si se trata de


avalúos de renta, los honorarios se fijarán, así:

Renta mensual del mueble o inmueble Tarifa por ciento


Por los primeros $ 1.000.000 6.0
Por los siguientes $ 4.000.000 5.0
Por los siguientes $ 5.000.000 3.5
Por fracción superior a $ 10.000.000 1.5

6.1.5 Límite para la fijación de honorarios. En ningún caso los honorarios


de peritos avaluadores no podrán superar el equivalente a veinte salarios
mínimos legales mensuales vigentes.

6.1.6 Honorarios en dictámenes periciales distintos de avalúo. En


dictámenes periciales distintos de avalúos, los honorarios se fijarán entre
cinco y quinientos salarios mínimos legales diarios vigentes, dentro de los
criterios establecidos en el artículo 36 de este acuerdo.

6.1.7 Interés para recurrir en casación. Los peritos avaluadores designados


para estimar el interés para recurrir en casación, devengarán honorarios
entre veinticinco y cien salarios mínimos legales diarios vigentes.

Artículo 38. Honorarios de expertos en conocimientos especiales.


Cuando se requieran expertos en conocimientos muy especializados, el
juez podrá señalarles honorarios sin sujetarse a los límites cuantitativos
de este Acuerdo, pero teniendo en cuenta su prestancia y lo previsto en
los artículos 35 y 36 del mismo.”
Las excepciones dentro del Proceso Administrativo Coactivo 157

d. La inspección dentro del Procedimiento Administrativo de Cobro


Coactivo.
La inspección es una diligencia que debe adelantar por el funcionario
ejecutor que tiene por objeto el examen y reconocimiento de hechos o
documentos, para lo cual se puede acompañar de peritos o testigos, en tal
sentido su práctica procede de oficio o a petición de parte.

Con la inspección pueden concurrir otros medios de prueba como los


documentos, testimonios, y pruebas periciales, dependiendo del tipo de
inspección a realizar.

12.14. TÉRMINO PARA FALLAR LAS EXCEPCIONES INTERPUESTAS


CONTRA EL MANDAMIENTO DE PAGO.

El artículo 832 del Estatuto tributario señala que dentro del mes siguiente
a la presentación del escrito de excepciones el ejecutor debe decidir las
mismas, recordemos el artículo 832 del E.T.:

“Artículo 832. Trámite de excepciones. Dentro del mes siguiente a la


presentación del escrito mediante el cual se proponen las excepciones,
el funcionario competente decidirá sobre ellas, ordenando previamente la
práctica de las pruebas, cuando sea del caso.”

Debemos precisar que la norma utiliza la expresión “dentro” por lo cual se


hace necesario repasar el alcance del término “dentro” conforme con lo
señalado en la Ley 4 de 1913, artículo 60, que señala:

Artículo 60. Cuando se dice que un acto debe ejecutarse en o dentro de


cierto plazo, se entenderá que vale si se ejecuta antes de la media noche en
que termina el último día del plazo. Cuando se exige que haya transcurrido
un espacio de tiempo para que nazcan o expiren ciertos derechos, se
entenderá que estos derechos nacen o expiran a la medianoche del día
en que termine el respectivo espacio de tiempo.

Si la computación se hace por horas, la expresión “dentro de tantas horas”,


u otra semejante, designa un tiempo que se extiende hasta el último minuto
de la última hora, inclusive; y la expresión “después de tantas horas”, u
otra semejante, designa un tiempo que principia en el primer minuto de la
hora que sigue a la última del plazo.

Así las cosas, el fallo de las excepciones debe efectuarse dentro del plazo
señalado, incluyendo dentro del mismo el término de notificaciones, ya que
debemos entender que la resolución de las excepciones presentadas deben
ser resueltas (falladas) dentro de este plazo y una respuesta sin notificación
alguna, carecería de eficiencia.
Recurso contra el fallo que decide negativamente las excepciones y orden de ejecución 159

RECURSO CONTRA EL FALLO


QUE DECIDE NEGATIVAMENTE
LAS EXCEPCIONES Y ORDEN
DE EJECUCIÓN
CAPÍTULO

13
13.1 RECURSO CONTRA EL FALLO QUE DECIDE NEGATIVAMENTE
LAS EXCEPCIONES.

Como se indicó en el Capítulo V, del presente documento, en el proceso de


cobro coactivo el artículo 833-1 del E.T. señala que decisiones dentro del
proceso administrativo de cobro son de trámite, es decir preparatorios o de
ejecución o definitivos, por lo cual no son susceptibles de ser recurridos, con
excepción de la resolución que falla las excepciones propuestas contra el
mandamiento de pago y que ordena seguir adelante la ejecución y el remate
de los bienes embargados y secuestrados, por así estar expresamente
señalado en el artículo 834 del E.T.

Es decir que en principio solamente procede el recurso de reposición dentro


de la instancia de cobro coactivo contra el acto que resuelve de forma
negativa las excepciones interpuestas contra el mandamiento de pago, al
respecto el citado artículo 834 del Estatuto Tributario Nacional, señala:

“Artículo 834. Recurso contra la resolución que decide las


excepciones. En la resolución que rechace las excepciones propuestas,
se ordenará adelantar la ejecución y remate de los bienes embargados
y secuestrados. Contra dicha resolución procede únicamente el recurso
de reposición ante el jefe de la división de cobranzas, dentro del mes
siguiente a su notificación, quien tendrá para resolver un mes, contado a
partir de su interposición en debida forma.”

En primera medida entonces debemos aclarar que cuando la norma


habla de “recurso de reposición”, el mismo debe verse bajo las reglas
excepcionales del derecho tributario, en donde el recurso por naturaleza
es el de reconsideración, y de forma particular y solo en tres (3) casos
160 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

encontramos referencias al recurso de de reposición, la anterior aclaración


para evitar que el funcionario ejecutor se confunda con el recurso de
reposición contemplado en el Código Contencioso Administrativo, veamos.

a. El recurso de reposición tributario señalado en el artículo 834 del E.T.


tiene un término para ser interpuesto por el ejecutado de un (1) mes
contados a partir de la notificación en debida forma de la resolución que
niega las excepciones contra el mandamiento de pago, por su parte el
recurso de reposición de que trata el artículo 50 del Código Contencioso
Administrativo, debe interponerse “…por escrito, en la diligencia de
notificación personal, o dentro de los cinco (5) días siguientes a ella,
o a la desfijación del edicto, o la publicación, según el caso…”(Art. 51
C.C.A.)

b. El término para fallar el recurso de reposición contra la resolución que


niega las excepciones contra el mandamiento de pago es de un mes (Art.
834 E.T.), por su parte el recurso de reposición del Código Contencioso
Administrativo, debe ser resuelto en un término no superior a dos (2)
meses, so pena de que ocurra la figura del silencio administrativo
negativo. (Art. 60 C.C.A)

c. El recurso de reposición tributario del artículo 834 del E.T. carece de


recurso que lo revise, es decir no tiene recurso de apelación ante el
superior que revise su fallo de primera instancia.

d. Por último y siendo una de las situaciones más complejas y poco


entendidas por los funcionarios ejecutores, el recurso de reposición
señalado en el artículo 834 del Estatuto Tributario Nacional, opera
contrario a lo señalado en el artículo 50 del C.C.A., como un recurso de
segunda instancia, entraremos a explicar esta situación.

En principio debemos siempre recordar que el procedimiento administrativo


de cobro coactivo, es un procedimiento realizado para el cobro de
obligaciones tributarias, es así que cuando se revisa la competencia
funcional para el cobro de impuestos, encontramos en el artículo 824 del
E.T., lo siguiente:

“Artículo 824. Competencia funcional. Para exigir el cobro coactivo


de las deudas por los conceptos referidos en el artículo anterior, son
competentes los siguientes funcionarios:

El subdirector de recaudo de la dirección general de impuestos


nacionales, los administradores de impuestos y los jefes de las
dependencias de cobranzas. También serán competentes los funcionarios
Recurso contra el fallo que decide negativamente las excepciones y orden de ejecución 161

de las dependencias de cobranzas y de las recaudaciones de impuestos


nacionales, a quienes se les deleguen estas funciones. (Lo subrayado
se entiende derogado por lo dispuesto en el literal d) del artículo 66 del
Decreto 2117 de 1992).

Tenemos que la competencia es la facultad otorgada por la ley a un


funcionario para producir un acto administrativo. Respecto del cobro de
las obligaciones fiscales hay dos clases de competencias: la funcional y
la territorial. La competencia funcional es la referida al cargo que tiene el
funcionario y la territorial está referida al lugar donde se originó la obligación
o al domicilio del deudor.

Entendido lo anterior tenemos que existe una múltiple competencia para


el cobro de las obligaciones a favor de la DIAN, ya que la misma puede
estar en cabeza del administrador de impuestos, el jefe de la dependencia
de cobranzas y en los funcionarios de la dependencia a quienes se les
delegue estas funciones, siendo así la regla, y por simple lógica, debemos
entender que el cobro en la DIAN, lo ejercen funcionarios ejecutores de
las divisiones de cobranzas, ya que como lo ha entendido el Consejo de
Estado, en sentencia del 27 de septiembre de 2007, Exp. 16060, C.P. Juan
Ángel Palacio Hincapié, tal delegación en funcionarios de menor rango
dentro de la DIAN, para ejercer el cobro coactivo, es absolutamente válida,
al mencionar el legislador la posibilidad de delegar las citadas en estos
funcionarios, veamos:

“1. Incompetencia del funcionario que adelantó el cobro coactivo

Conforme al artículo 824 del Estatuto Tributario para exigir el cobro de


las deudas por concepto de impuestos, anticipos, retenciones, intereses
y sanciones relacionados con los impuestos administrados por la DIAN,
son competentes: el Subdirector de Recaudo (hoy Cobranzas), los
administradores de impuestos y los jefes de las dependencias de cobranzas.
También serán competentes los funcionarios de las dependencias de
cobranzas y de las recaudaciones de impuestos nacionales, a quienes se
les deleguen estas funciones.

Como lo ha señalado la Sala en otras oportunidades, la competencia


funcional para proferir los actos administrativos en impuestos nacionales,
no es privativa de los jefes de las unidades, pues, puede ser delegada en
otros funcionarios, cuando la ley lo autoriza.

En el caso bajo análisis, la funcionaria de la División de Cobranzas


que expidió el mandamiento de pago y la resolución que decidió las
excepciones, anunció actuar en uso de las facultades previstas en el
162 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

artículo 824 del Estatuto Tributario y las conferidas por Resolución de


delegación de funciones 0201 de 13 de marzo de 2002, expedida por el
Administrador de Impuestos de Personas Naturales de Bogotá D.C.

A folio 92 del expediente obra copia de la Resolución No. 0201 de 13


de marzo de 2002, por medio de la cual el Administrador de Impuestos
de Personas Naturales de Bogotá delegó en los servidores públicos de
la contribución de los grados profesional, técnico y auxiliar ubicados
funcionalmente en el Grupo Coactiva de la División de Cobranzas de
esa Administración, las funciones de iniciar, adelantar y llevar hasta
su culminación, los procesos de Cobro Coactivo Administrativo de los
impuestos y demás conceptos pendientes de pago de competencia de la
DIAN, Administración de Personas Naturales de Bogotá.

De acuerdo con lo anterior, la Sala no encuentra razón para considerar que


el mandamiento de pago y la resolución de excepciones fueron proferidos
por una funcionaria incompetente, pues el artículo 824 del Estatuto
Tributario autoriza esa delegación y conforme al inciso 4º del artículo 40
del Decreto 1071 de 1999, la delegación que efectúen los Administradores
Locales1 no requiere autorización previa del Director General.” (Subraya
ajena a texto).

Aclarado lo anterior, sobre la competencia de los funcionarios de la oficina


de cobro de la DIAN, para efectuar el cobro de las obligaciones insolutas
a favor de esta entidad, debemos entonces revisar quien es el competente
para resolver el recurso de reposición contra el acto que falla de forma
negativa las excepciones contra el mandamiento de pago, al respecto
procederemos a transcribir nuevamente el artículo 834 del E.T. ya que es
en esta norma en donde se indica quien tiene la competencia para fallar el
recurso en estudio:

“Artículo 834. Recurso contra la resolución que decide las


excepciones. En la resolución que rechace las excepciones propuestas,
se ordenará adelantar la ejecución y remate de los bienes embargados
y secuestrados. Contra dicha resolución procede únicamente el recurso
de reposición ante el jefe de la división de cobranzas, dentro del mes
siguiente a su notificación, quien tendrá para resolver un mes, contado a
partir de su interposición en debida forma.” (Se subraya)

Nótese que a diferencia de la amplia gama de posibles competentes para


efectuar el cobro de los impuestos administrados por la DIAN, señalados
en el artículo 824 del E.T., para fallar el recurso de reposición, la norma
señala de forma expresa la competencia en cabeza del Jefe de la División
de Cobranzas de la respectiva Administración bien sea esta especial, local
o delegada, es decir que solamente el jefe del área tiene competencia para
Recurso contra el fallo que decide negativamente las excepciones y orden de ejecución 163

resolver el recurso, contra la resolución que resuelve de forma negativa


las excepciones contra el mandamiento de pago, que partiendo de la
posibilidad de delegación que se permite en la DIAN, fue realizado por un
funcionario de inferior jerarquía, tratándose entonces de una clara figura de
doble instancia.

Si lo anterior no es convincente, coadyuda a reafirmar lo manifestado el


que en principio del debido proceso y el derecho de defensa, la respuesta
al interrogante “que sentido tiene que una misma persona, revise dos (2)
veces su propios actos”, ya que si quien libra el mandamiento de pago,
y resuelve las excepciones contra el mismo, ya tuvo la oportunidad de
revisar lo realizado, y de este entrar a conocer el recurso contra sus actos
de revisión, estaría nuevamente pronunciándose contra un acto en el cual
ya revisó y cuya argumentación no le fue convincente al punto de negar las
excepciones interpuestas.

13.2. ORDEN DE EJECUCION.

Una vez agotada la instancia de discusión en el proceso administrativo de


cobro coactivo, el funcionario ejecutor, debe dar cumplimiento a lo señalado
en el artículo 836 del Estatuto Tributario Nacional, que preceptúa:

Artículo 836. Orden de ejecución. Si vencido el término para excepcionar


no se hubieren propuesto excepciones, o el deudor no hubiere pagado, el
funcionario competente proferirá resolución ordenando la ejecución y el
remate de los bienes embargados y secuestrados. Contra esta resolución
no procede recurso alguno.

Parágrafo Cuando previamente a la orden de ejecución de que trata el


presente artículo no se hubieren dispuesto medidas preventivas, en dicho
acto se decretará el embargo y secuestro de los bienes del deudor si
estuvieren identificados; en caso de desconocerse los mismos, se ordenará
la investigación de ellos para que una vez identificados se embarguen y
secuestren y se prosiga con el remate de los mismos.

Es decir que agotada la oportunidad de contradicción del ejecutado contra


el mandamiento de pago y el título que dio origen al mismo, el funcionario
ejecutor debe proceder a expedir el acto denominado Orden de Ejecución,
el cual debe hacerse de forma obligatoria mediante resolución, tal y como lo
indica el citado artículo 836 del E.T..

Esta Orden de Ejecución dictaminada por el Funcionario ejecutor debe


ordenarse el avalúo y remate de los bienes embargados, o el decretar
el embargo y secuestro de los bienes del deudor cuando las medidas
164 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

cautelares no se hubiesen determinado de forma previa o conjuntamente


con el mandamiento de pago.

Algo que vale la pena resaltar es que el artículo 836 del E.T. señala de
forma expresa que contra la orden de ejecución no procede recurso alguno,
no obstante el Consejo de Estado a pesar de la norma expresa en auto de
mayo 12 de 2000, Exp. 10012 C.P. Germán Ayala Mantilla que si bien existe
la prohibición de presentar recursos en vía gubernativa, esta limitante no
aplica para que el ejecutado pueda acudir al contencioso administrativo.

“Precisa la Sala que el cobro coactivo y su respectivo procedimiento fue


reglamentado en varios artículos del Decreto 2503 de 1987, incorporado
ya en el estatuto tributario, en su título VIII, artículo 823 y siguientes, como
un procedimiento de carácter administrativo.

El título ejecutivo se cuestiona en la vía gubernativa y el mandamiento


de pago puede ser enervado a través de las excepciones consagradas
en el artículo 831 del estatuto tributario. El trámite de las excepciones se
realiza de acuerdo con el procedimiento prescrito en los artículos 830 y
siguientes del estatuto tributario y culmina con una resolución que falla las
excepciones y ordena llevar adelante la ejecución (art. 835 ibíd.).

En el evento de que no se presenten excepciones o que el deudor no


hubiere pagado, dicha resolución ordena llevar adelante la ejecución y el
remate de los bienes embargados y secuestrados (art. 836 ibíd.).

A juicio de la Sala en cualquiera de los anteriores eventos, sea que se


hubieren interpuesto excepciones o no, la citada decisión constituye un acto
definitivo proferido en un procedimiento administrativo y como tal es objeto
del control judicial por parte de la jurisdicción contencioso administrativa,
de conformidad con lo establecido en el artículo 83 del Código Contencioso
Administrativo.No le asiste razón a la administración cuando afirma que
según el artículo 835 del estatuto tributario, sólo son demandables ante
la jurisdicción contenciosa administrativa, las resoluciones que fallan
excepciones, excluyendo las que solamente ordenan llevar adelante la
ejecución, toda vez, que la norma que a ellas se refiera, el artículo 836
ibídem, cuando establece que contra la citada resolución no procede
ningún recurso, se refiere es a los recursos propios de la vía gubernativa,
pero no a las acciones ante lo contencioso administrativo”.

Auto que genera mucha preocupación, dado que precisamente es la agilidad


en el proceso administrativo de cobro lo que ha permitido su aplicación a otros
sectores de la administración pública, podría verse entonces torpedeado
con múltiples demandas ante la Jurisdicción Contencioso Administrativa,
eliminándose así la eficiencia del menor trámite que lo caracteriza.
Medidas Cautelares 165

MEDIDAS CAUTELARES

14.1. LAS MEDIDAS CAUTELARES


CAPÍTULO

14
Se entiende por medidas cautelares aquellas decisiones que en el campo
administrativo que nos ocupan, sirven de respaldo económico al resultado
del proceso en la medida que aseguran la eficiencia del mismo, cumpliendo
con una orden preventiva y evitando que los bienes que pueden servir
de respaldo al pago de la obligación se vendan o deterioren por parte del
ejecutado.

Las medidas cautelares en el proceso de cobro pueden ser dictadas por


el funcionario ejecutor en cualquier momento, incluso en las etapas pre-
procesales, en otras palabras las medidas cautelares como el embargo,
pueden ser dictadas antes de librarse el mandamiento de pago (como medida
preventiva), con el mandamiento de pago o con la orden de ejecución, es
decir que se tiene bastante liberalidad por parte del ejecutor de decidir el
momento indicado para ordenar las medidas cautelares, buscando con
ellas siempre garantizar el cumplimiento de la obligación, que tiene bajo su
cargo cobrar.

Se recomienda que la medida cautelar, cumpla la función que la reviste,


es decir que esta sea dictada de tal forma que no permita al ejecutado
insolventarse y así evadir su obligación, por lo cual no debe desecharse
por parte del ejecutor el dictar medidas cautelares previas, que impidan al
deudor a buscar mecanismos de transferencia de sus bienes o limitaciones
en sus cuentas.

Otra recomendación que debe hacerse, es que en casos como el cobro del
impuesto predial unificado, al tratarse de un gravamen real que recae sobre
los viene inmuebles sin importar quien sea su propietario, no necesariamente
el embargar el inmueble objeto del cobro es la mejor decisión, ya que por
regla general, el propietario del inmueble objeto del cobro, puede tener
otros bienes cuyo embargo puede generar mejores resultados de pago,
por el efecto inmediatez, tal es el caso de la cuentas bancarias, salarios,
contratos, etc.
166 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

14.2. EL EMBARGO DE BIENES DENTRO DEL PROCESO


ADMINISTRATIVO DE COBRO COACTIVO.

El embargo es la figura del derecho procesal consistente en la ocupación


e intervención judicial de determinados bienes, hecha por mandamiento
de funcionario ejecutor investido de facultad coactiva, que en uso de sus
facultades legales pone fuera del comercio un bien o derechos del ejecutado,
con la finalidad de sujetarlos al cumplimiento de las responsabilidades
derivadas del no pago de deudas tributarias.

Como se señaló en el punto anterior el embargo puede previo al


mandamiento, conjuntamente con el o posterior al mismo, y puede llevar
incluido el secuestro o éste último ser decretado de forma independiente

Si el deudor es renuente al pago dentro del proceso de negociación directa


o si incumple la facilidad de pago se adoptarán las medidas cautelares,
ordenando la aplicación de las mismas, recordando el funcionario ejecutor
que su actividad es la de cobro y que bajo el principio de eficiencia puede
embargar muchos tipos de bienes, entre los cuales encontramos:

• Embargo de dineros en cuentas: (corrientes, de ahorros, otros depósitos


de alta liquidez susceptibles de embargo), Este embargo se efectuará
directamente en la entidad financiera sobre el saldo que repose en
dicha Entidad.

• Embargo de cuentas por cobrar (facturas y vouchers), dividendos,


inversiones temporales). Este embargo se efectuará directamente
en el establecimiento del responsable del pago de la obligación
correspondiente.

• Embargo de otros títulos financieros tales como: bonos, acciones, otros


títulos o inversiones de carácter temporal, siempre y cuando sean de
renta fija.

• Embargo de salarios.

• Embargo sobre establecimientos de comercio.

• Embargos de Contratos, de cualquier índole incluyendo los de


prestación de servicios.

• Embargos de cánones de arrendamiento.


Medidas Cautelares 167

• Embargo de razón social y participación en sociedades, para su


posterior venta.

• Embargo de marcas, patentes, nombre y enseña comercial.

• Embargo de vehículos.

• Embargo de bien inmueble.

• Embargo de derechos fiduciarios

• Embargo de dineros producto de franquicias

Así mismo es importante saber que así como existen bienes que pueden ser
embargados, también existen otros sobre los cuales el funcionario ejecutor
debe abstenerse de decretar el embargo por considerarse normativamente
(Art. 684 C.P.C.) como bienes inembargables, a estos se le agregan aquellos
bienes que por leyes especiales están excluidos de la posibilidad de ser
embargados.

Entre los bienes inembargables señalados en el Código de Procedimiento


Civil (Art. 684) encontramos:

• Los de uso público.

• Los destinados a un servicio público cuando éste se preste directamente


por un departamento, una intendencia, una comisaría, un distrito
especial, un municipio o un establecimiento público, o por medio de
concesionario de éstos; pero es embargable hasta la tercera parte de
los ingresos del respectivo servicio, sin que el total de embargos que se
decreten exceda de dicho porcentaje.

• Cuando el servicio lo presten particulares, podrán embargarse los


bienes destinados a él, así como la renta líquida que produzcan, y el
secuestro se practicará como el de empresas industriales.

• Las dos terceras partes de la renta bruta de los departamentos, las


intendencias, las comisarías, los distritos especiales y los municipios.

• Las sumas que para la construcción de obras públicas se hayan


anticipado o deban anticiparse por las entidades de derecho público a
los contratistas de ellas, mientras no hubiere concluido su construcción,
excepto cuando se trate de obligaciones en favor de los trabajadores
de dichas obras, por salarios, prestaciones e indemnización sociales.
168 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

• Los salarios y las prestaciones sociales de los trabajadores oficiales o


particulares, en la proporción prevista en las leyes respectivas.

• La inembargabilidad no se extiende a los salarios y prestaciones


legalmente enajenados.

• Las condecoraciones y pergaminos recibidos por actos meritorios.

• Los uniformes y equipos de los militares.

• Los lugares y edificaciones destinados a cementerios o enterramientos.

• Los bienes destinados al culto religioso.

• Los utensilios de cocina y los muebles de alcoba que existan en la casa


de habitación de la persona contra quien se decretó el secuestro, y las
ropas de la familia que el juez considere indispensables, a menos que
el crédito provenga del precio del respectivo bien.

• Los utensilios, enseres e instrumentos necesarios para el trabajo


individual de la persona contra quien se decretó el secuestro, a juicio
del juez, con la salvedad indicada en el numeral anterior.

• Los artículos alimenticios y el combustible para el sostenimiento de la


persona contra quien se decretó el secuestro y de su familia durante un
mes, a criterio del juez.

• Los objetos que se posean fiduciariamente.

• Los derechos personalísimos e intransferibles, como los de uso y


habitación (C.P.N., art. 309; C.C., art. 1677)

Los mencionados en otras leyes especiales a saber:

• Los bienes inmuebles afectados a vivienda familiar, salvo cuando sobre


los mismos se hubiere constituido hipoteca con anterioridad a tal registro,
construcción o mejora de la vivienda.

• Las prestaciones sociales cualquiera sea su cuantía, excepto cuando


se trate de créditos a favor de cooperativas y pensiones alimenticias. En
todo caso, el embargo en estas últimas no puede exceder el 50% de la
prestación respectiva.
Medidas Cautelares 169

• Las pensiones, tanto del régimen de ahorro individual con solidaridad,


como del régimen de prima media con prestación definida y los bonos
pensionales, con la misma salvedad en lo relativo a créditos con
cooperativas y pensión alimenticia.

• Las sumas depositas en la sección de ahorros hasta en la cantidad que


determine la ley.

• Las rentas incorporadas al presupuesto general de la nación, así como


los bienes y derechos de los órganos que las conforman.

• Los bienes respecto de los cuales se haya declarado la extinción de


dominio de que trata la Ley 793 de 2002.

La DIAN, en concepto 026739 del 6 de mayo de 2002, sobre el tema


de los bienes inembargables dentro del proceso de cobro coactivo y
específicamente analizando la posibilidad de embargo de cuentas a un ente
territorial, señaló:

DOCTRINA. “El Decreto 111 de 1996, que compila las Leyes 38 de 1989,
179 de 1994 y 225 de 1995 y que constituye el Estatuto Orgánico del
Presupuesto, dispone en el artículo 19:
“Inembargabilidad. Son inembargables las rentas incorporadas en el
presupuesto general de la Nación, así como los bienes y derechos de los
órganos que lo conforman. “

“No obstante la anterior inembargabilidad, los funcionarios competentes


deberán adoptar las medidas conducentes al pago de las sentencias en
contra de los órganos respectivos, dentro de los plazos establecidos para
ello, y respetarán en su integridad los derechos reconocidos a terceros en
estas sentencias. “

“Se incluyen en esta prohibición..las cesiones y participaciones de que


trata el capítulo 4° del título XII de la Constitución Política.”

“Los funcionarios judiciales se abstendrán de decretar órdenes de


embargo cuando no se ajusten a lo dispuesto en el presente artículo so
pena de mala conducta.”

Los artículos 336 y siguientes de la Constitución Política se refieren a la


distribución de recursos, y dentro del mismo a las cesiones y participaciones
de los entes territoriales, que según la disposición transcrita, son
inembargables.

El artículo 684 del Código de Procedimiento Civil que es la norma genera]


que trata sobre los bienes inembargables, además de los que así se
consideran en leyes especiales señala como tales:
170 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

1. Los de uso público.

2. Los destinados a un servicio público cuando éste se preste directamente


por un departamento, una intendencia, una comisaría, un distrito
especial, un municipio o un establecimiento público, o por medio de
concesionario de éstos; pero es embargable hasta la tercera parte de
los ingresos del respectivo servicio, sin que el total de embargos que
se decreten exceda de dicho porcentaje.

Cuando el servicio lo presten particulares, podrán embargarse los


bienes destinados a él, así como la renta líquida que produzcan, y el
secuestro se practicará como el de empresas industriales

3. Las dos terceras partes de la renta bruta de los departamentos, las


intendencias, las comisarías. Los distritos especiales y los municipios.

4. Las sumas que para la construcción de obras públicas se hayan


anticipado o deban anticiparse por las entidades de derecho público a
los contratistas de ellas, mientras no hubiere concluido su construcción,
excepto cuando se trate de obligaciones en favor de los trabajadores
de dichas obras, por salarios, prestaciones e indemnización sociales.

5. Los salarios y las prestaciones sociales de los trabajadores oficiales


o particulares, en la proporción prevista en las leyes respectivas.
La inembargabilidad no se extiende a los salarios y prestaciones
legalmente enajenados.

6. Las condecoraciones y pergaminos recibidos por actos meritorios.

7. Los uniformes y equipos de los militares.

8. Los lugares y edificaciones destinados .a cementerios o enterramientos.

9. Los bienes destinados al culto religioso.

10. Los utensilios de cocina y los muebles de alcoba que existan en la


casa de habitación de la persona contra quien se decretó el secuestro,
y las ropas de la familia que el juez considere indispensables, a menos
que el crédito provenga del precio del respectivo bien.

11. Los utensilios, enseres e instrumentos necesarios para el trabajo


individual de la persona contra quien se decretó el secuestro, a juicio
del juez, Con la salvedad indicada en el numeral anterior.

12. Los artículos alimenticios y el combustible para el sostenimiento de la


persona contra quien se decretó el secuestro y de su familia durante
un mes, a criterio del juez.
Medidas Cautelares 171

13. Los objetos que se posean fiduciariamente.

14. Los derechos personalísimos e intransferibles, Como los de uso y


habitación (C.N., art. 309; C.C., art. 1677).

Con respecto a la inembargabilidad de los bienes que pertenecen a


las entidades territoriales, de la jurisprudencia proferida se deduce que
el principio de la inembargabilidad Con respecto a los municipios no es
absoluto. En la Sentencia No.18844 de Febrero 22 de 2001, una de las
últimas, el Consejo de Estado, Sección Cuarta, Sostuvo:

“En este campo el principio de la inembargabilidad de los bienes de loS


departamentos y municipios no es tan rígido, tal Como da a entender
el artículo 684 del Código de Procedimiento Civil, en armonía Con los
artículos 336 y 513 del mismo código. Así, mientras la ley no disponga
otra cosa, se aplicará a nivel seccional, en lo pertinente, el artículo 684 del
Código de Procedimiento Civil.”

“Se tiene entonces que el principio legal de inembargabilidad que prevé


el estatuto orgánico del presupuesto (D.ll1/96, art. 19, inc. 1°) para ciertos
bienes, derechos y recursos de propiedad de loS órganos que conforman
el presupuesto general de la nación, no se extienden a las entidades
territoriales y sus organismos descentralizados. “

“Por consiguiente, tales bienes Son por regla general embargables. Serán
inembargables, en principio, en los términos indicados en el artículo 684
del Código de Procedimiento Civil (en particular los nums. 2°, 3°, 4° y 7°),
que establecen lo siguiente:

(…)

En cuanto a los supuestos de inembargabilidad, en la misma sentencia


se manifestó que la carga de la prueba respecto de la característica de
inembargabilidad de los bienes de las entidades territoriales recae en la
Administración Local, o lo que es 10 mismo, el desembargo de los bienes
de propiedad de la entidad ejecutada, en este caso la entidad territorial
procede cuando ésta demuestra la ocurrencia de alguno de los eventos
que prevé la ley, para que los bienes sean inembargables.

Es así como la Administración Tributaria en uso de sus facultades de cobro,


debe actuar y utilizar los procedimientos coactivos que le concede la ley
para hacer cumplir la principal obligación tributaria como es el pago de las
deudas fiscales, aún en contra de los intereses de los entes territoriales,
correspondiendo a éstos, probar que los bienes, derechos, cuentas, etc.,
se encuentran amparadas por la constitución o la ley con el beneficio de
la inembargabilidad.
172 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

14.3. EL PERFECIONAMIENTO DEL EMBARGO

El perfeccionamiento del embargo conforme con lo señalado en el artículo


839-1 del Estatuto tributario Nacional en concordancia con lo señalado en el
artículo 681 del Código de Procedimiento Civil, tiene las siguientes reglas:

Artículo 839-1. Trámite para algunos embargos. (Adicionado por el


artículo 86 de la Ley 6ª de 1992.)

1. El embargo de bienes sujetos a registro se comunicará a la oficina


encargada del mismo, por oficio que contendrá los datos necesarios
para el registro; si aquellos pertenecieren al ejecutado lo inscribirá y
remitirá el certificado donde figure la inscripción, al funcionario de la
administración de impuestos que ordenó el embargo.

Si el bien no pertenece al ejecutado, el registrador se abstendrá


de inscribir el embargo y así lo comunicará enviando la prueba
correspondiente. Si lo registra, el funcionario que ordenó el embargo
de oficio o a petición de parte ordenará la cancelación del mismo.

Cuando sobre dichos bienes ya existiere otro embargo registrado, se


inscribirá y comunicará a la administración de impuestos y al juzgado
que haya ordenado el embargo anterior.

En este caso si el crédito que ordenó el embargo anterior es de grado


inferior al del fisco, el funcionario de cobranzas continuará con el
procedimiento de cobro, informando de ello al juez respectivo y si éste
lo solicita, pondrá a su disposición el remanente del remate.

Si el crédito que originó el embargo anterior es de grado superior al del


fisco, el funcionario de cobro se hará parte en el proceso ejecutivo y
velará por que se garantice la deuda con el remanente del remate del
bien embargado.

Si del respectivo certificado de la oficina donde se encuentren registrados


los bienes, resulta que los bienes embargados están gravados con
prenda o hipoteca, el funcionario ejecutor hará saber al acreedor la
existencia del cobro coactivo, mediante notificación personal o por
correo para que pueda hacer valer su crédito ante juez competente.

El dinero que sobre del remate del bien hipotecado se enviará al juez
que solicite y que adelante el proceso para el cobro del crédito con
garantía real.

2. El embargo de saldos bancarios, depósitos de ahorro, títulos de contenido


crediticio y de los demás valores de que sea titular o beneficiario el
contribuyente, depositados en establecimientos bancarios, crediticios,
financieros o similares, en cualquiera de sus oficinas o agencias en
Medidas Cautelares 173

todo el país se comunicará a la entidad y quedará consumado con la


recepción del oficio.

Al recibirse la comunicación, la suma retenida deberá ser consignada


al día hábil siguiente en la cuenta de depósitos que se señale, o deberá
informarse de la no existencia de sumas de dinero depositadas en
dicha entidad.

Parágrafo 1. Los embargos no contemplados en esta norma se tramitarán


y perfeccionarán de acuerdo con lo dispuesto en el artículo 681 del Código
de Procedimiento Civil.

Artículo 681. Embargos. Para efectuar los embargos se procederá así:

1. El de bienes sujetos a registro se comunicará al respectivo registrador,


por oficio que contendrá los datos necesarios para el registro; si
aquellos pertenecieren al afectado con la medida, lo inscribirá
y expedirá a costa del solicitante un certificado sobre su situación
jurídica en un período de veinte años, si fuere posible. Una vez inscrito,
el oficio de embargo se remitirá por el registrador directamente al juez
junto con dicho certificado. Si algún bien no pertenece al afectado,
el registrador se abstendrá de inscribir el embargo y lo comunicará
al juez; si lo registra, éste de oficio o a petición de parte ordenará la
cancelación del embargo. Sin embargo, deberá tenerse en cuenta,
cuando se trate de ejecutivo con garantía real, lo dispuesto en el
parágrafo del artículo 554.

2. El de los derechos que por razón de mejoras o cosechas tenga una


persona que ocupa un predio de propiedad de otra, se perfeccionará
previniendo a aquélla y al obligado al respectivo pago, que se
entiendan con el secuestre para todo lo relacionado con las mejoras y
sus productos o beneficios.

Para el embargo de mejoras plantadas por una persona en terrenos


baldíos, se notificará a ésta para que se abstenga de enajenarlas o
gravarlas.

3. El de bienes muebles no sujetos a registro se consumará mediante


su secuestro, excepto en los casos contemplados en los numerales
siguientes.

4. El de un crédito u otro derecho semejante, se perfeccionará con la


notificación al deudor mediante entrega del correspondiente oficio, en
el que se le prevendrá que debe hacer el pago a órdenes del juzgado
en la cuenta de depósitos judiciales. Si el deudor se negare a firmar
el recibo del oficio, lo hará por él cualquiera persona que presencie el
hecho.

Al recibir el deudor la notificación, o dentro de los tres días siguientes,


deberá informar bajo juramento que se considerará prestado con su
firma, acerca de la existencia del crédito, de cuándo se hace exigible,
de su valor, de cualquier embargo que con anterioridad se le hubiere
174 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

comunicado y si se le notificó antes alguna cesión o si la aceptó, con


indicación del nombre del cesionario y la fecha de aquélla, so pena de
responder por el correspondiente pago y de incurrir en multa de dos a
cinco salarios mínimos mensuales, de todo lo cual se le prevendrá en
el oficio de embargo.

Si el deudor no efectúa el pago oportunamente, el juez designará


secuestre quien podrá adelantar proceso judicial para tal efecto. Si
fuere hallado el título del crédito, se entregará al secuestre; en caso
contrario, se le expedirán las copias que solicite para que inicie el
proceso.

El del crédito de percepción sucesiva comprende los vencimientos


posteriores a la fecha en que se decretó, y los anteriores que no
hubieren sido cancelados.

5. El de derechos o créditos que la persona contra quien se decrete


el embargo persiga o tenga en otro proceso, se comunicará al juez
que conozca de él para los fines consiguientes, y se considerará
perfeccionado desde la fecha de recibo del oficio en el respectivo
despacho judicial.

6. El de acciones en sociedades anónimas o en comandita por acciones,


bonos, certificados nominativos de depósito, unidades de fondos
mutuos, títulos similares, efectos públicos nominativos y títulos valores
a la orden, se comunicará al gerente, administrador o liquidador
de la respectiva sociedad o empresa emisora o al representante
administrativo de la entidad pública o a la entidad administradora,
según sea el caso, para que tome nota de él, de lo cual deberá dar
cuenta al juzgado dentro de los tres días siguientes, so pena de incurrir
en multa de dos a cinco salarios mínimos mensuales. El embargo
se considerará perfeccionado desde la fecha de recibo del oficio y
a partir de ésta no podrá aceptarse ni autorizarse transferencia ni
gravamen alguno.

El de acciones, títulos, bonos y efectos públicos, títulos valores y


efectos negociables, a la orden y al portador, se perfeccionará con la
entrega del respectivo título al secuestre.

Los embargos previstos en este numeral se extienden a los


dividendos, utilidades, intereses y demás beneficios que al derecho
embargado correspondan, que se consignarán oportunamente por la
persona a quien se comunicó el embargo, a órdenes del juzgado en
la cuenta de depósitos judiciales, so pena de hacerse responsable de
dichos valores y de incurrir en multa de dos a cinco salarios mínimos
mensuales.

El secuestre podrá adelantar el cobro judicial, exigir rendición de


cuentas y promover cualesquiera otras medidas autorizadas por la
ley con dicho fin, tendrá acceso a los libros o comprobantes de la
sociedad y podrá solicitar exhibición de ellos.

7. El del interés de un socio en sociedad colectiva, de responsabilidad


Medidas Cautelares 175

limitada u otra de personas, se comunicará a la autoridad encargada


de la matrícula y registro de sociedades, la que no podrá registrar
ninguna transferencia o gravamen de dicho interés, ni reforma o
liquidación parcial de la sociedad que implique la exclusión del
mencionado socio o la disminución de sus derechos en ella.

A este embargo se aplicará lo dispuesto en el inciso tercero del


numeral anterior, y se comunicará al representante de la sociedad en
la forma establecida en el inciso primero del numeral 4º, a efecto de
que cumpla lo dispuesto en tal inciso.

8. Si el deudor o la persona contra quien se decreta el embargo


fuere socio comanditario, se comunicará al socio o socios gestores
o al liquidador, según fuere el caso. El embargo se considerará
perfeccionado desde la fecha de recibo del oficio.

9. El del interés de un socio en sociedades civiles sometidas a las


solemnidades de las comerciales, se perfeccionará en la forma
prevista en el numeral 7º. El de otras sociedades civiles se comunicará
a los demás socios y al gerente o al liquidador, si lo hubiere, y se
aplicará lo dispuesto en los incisos primero y tercero del numeral 6º.

10. El de salarios devengados o por devengar, se comunicará al


pagador o empleador en la forma indicada en el inciso primero del
numeral 4º, para que de las sumas respectivas retenga la proporción
determinada por la ley y haga oportunamente las consignaciones a
órdenes del juzgado, previniéndole que de lo contrario responderá por
dichos valores e incurrirá en multa de dos a cinco salarios mínimos
mensuales.

Si no se hicieren las consignaciones el juez designará secuestre que


deberá adelantar el cobro judicial, si fuere necesario.

11. El de sumas de dinero depositadas en establecimientos bancarios


y similares, se comunicará a la correspondiente entidad como lo
dispone el inciso primero del numeral 4º, debiéndose señalar la
cuantía máxima de la medida, que no podrá exceder del valor del
crédito y las costas, más un cincuenta por ciento. Aquéllos deberán
consignar las sumas retenidas en la cuenta de depósitos judiciales,
dentro de los tres días siguientes al recibo de la comunicación; con la
recepción del oficio queda consumado el embargo.

12. El de derechos proindiviso en bienes muebles, se comunicará a los


otros copartícipes, advirtiéndoles que en todo lo relacionado con
aquéllos deben entenderse con el secuestre.

Parágrafo. En todos los casos en que se utilicen mensajes electrónicos,


los emisores dejarán constancia de su envío y los destinatarios, sean
oficinas públicas o particulares, tendrán el deber de revisarlos diariamente
y tramitarlos de manera inmediata.

Parágrafo 2. Lo dispuesto en el numeral 1 de este artículo en lo relativo


a la prelación de los embargos, será aplicable a todo tipo de embargo de
bienes.
176 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Parágrafo 3. Las entidades bancarias, crediticias, financieras y las demás


personas y entidades, a quienes se les comunique los embargos, que
no den cumplimiento oportuno con las obligaciones impuestas por las
normas, responderán solidariamente con el contribuyente por el pago de
la obligación.

Por su parte el artículo 839 de la misma norma, señala:

“Artículo 839. Registro del embargo. De la resolución que decreta


el embargo de bienes se enviará una copia a la oficina de registro
correspondiente. Cuando sobre dichos bienes ya existiere otro embargo
registrado, el funcionario lo inscribirá y comunicará a la administración y al
juez que ordenó el embargo anterior.

En este caso, si el crédito que originó el embargo anterior es de grado


inferior al del fisco, el funcionario de cobranzas continuará con el
procedimiento, informando de ello al juez respectivo y si éste lo solicita,
pondrá a su disposición el remanente del remate. Si el crédito que originó
el embargo anterior es de grado superior al del fisco, el funcionario de
cobranzas se hará parte en el proceso ejecutivo y velará por que se
garantice la deuda con el remanente del remate del bien embargado.

Parágrafo Cuando el embargo se refiera a salarios, se informará al


patrono o pagador respectivo, quien consignará dichas sumas a órdenes
de la administración y responderá solidariamente con el deudor en caso
de no hacerlo.”

A manera de resumen podemos concluir que la forma de perfeccionar los


embargos se puede resumir así:

A. POR INSCRIPCION: Sobre los bienes cuya tradición se perfecciona


con el registro (Bienes inmuebles, vehículos, naves, aerodinos y títulos
valores).

B. POR SECUESTRO: Que es la aprehensión material del bien embargado


cuando se trate de una cosa mueble (bienes muebles no sujetos a
registro), y.

C. POR COMUNICACION O NOTIFICACION A UN TERCERO: Para que


se retenga o se abstenga de autorizar la enajenación o gravamen de un
bien. (En el caso de contratos, salarios, etc)

De otro lado debemos precisar que el embargo de ciertos bienes o derechos


tiene reglas propias que debe el funcionario ejecutor tener presente al
momento de decretar las medidas cautelares, por lo cual señalaremos a
Medidas Cautelares 177

continuación el bien a embargar y de forma inmediata el código en donde se


señalan las reglas y el artículo pertinente, sin comentario alguno dado que
las normas son precisas al respecto.

14.3.1. EMBAGO DE BIENES INMUEBLES


CÓDIGO DE PROCEDIMIENTO CIVIL

“Artículo 681. Embargos. Para efectuar los embargos se procederá así:

1. El de bienes sujetos a registro se comunicará al respectivo registrador,


por oficio que contendrá los datos necesarios para el registro; si aquéllos
pertenecieren al ejecutado, lo inscribirá y expedirá a costa del solicitante
un certificado sobre su situación jurídica en un período de veinte años,
si fuere posible. Una vez inscrito, el oficio de embargo se remitirá por el
registrador directamente al juez junto con dicho certificado.

14.3.2. EMBARGO DE ACCIONES


CÓDIGO DE COMERCIO

Artículo 408. Para enajenar acciones cuya propiedad esté en litigio,


se necesitará permiso del respectivo juez; tratándose de acciones
embargadas se requerirá, además, la autorización de la parte actora.

Artículo 414. Todas las acciones podrán ser objeto de embargo y


enajenación forzosa. Pero cuando se presuma o se haya pactado el
derecho de preferencia, la sociedad o los accionistas podrán adquirirlas
en la forma y términos previstos en este código.

El embargo de las acciones comprenderá el dividendo correspondiente y


podrá limitarse a sólo éste. En este último caso el embargo se consumará
mediante orden del juez para que la sociedad retenga y ponga a su
disposición las cantidades respectivas.

Artículo 415. El embargo de las acciones nominativas se consumará por


inscripción en el libro de registro de acciones, mediante orden escrita del
funcionario competente. El de las acciones al portador, mediante secuestro
de los títulos respectivos.

14.3.3. EMBARGO DE CUENTA CORRIENTE


CÓDIGO DE COMERCIO

“Artículo 1387. El embargo de las sumas depositadas en cuenta corriente


afectará tanto el saldo actual en la hora y fecha en que el banco reciba la
178 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

comunicación del juez, como las cantidades depositadas con posterioridad


hasta el límite indicado en la orden respectiva. Para este efecto, el banco
anotará en la tarjeta del depositante la hora y fecha de recibo de la orden de
embargo, y pondrá los saldos a disposición del juez, so pena de responder
de los perjuicios que ocasione a los embargantes.”

14.3.4. EMBARGO DE NAVES Y AERONAVES


CÓDIGO DE COMERCIO

Artículo 1449. Toda nave de matrícula colombiana podrá ser embargada


en cualquier puerto del país por los acreedores cuyos créditos gocen de
privilegio marítimo y, además, por los que sean hipotecarios.

Los acreedores comunes sólo podrán embargarla mientras se halle en el


puerto de su matrícula.

Serán competentes los jueces del lugar en que conforme a este artículo
debe hacerse el embargo, no sólo para el embargo mismo sino para
conocer del correspondiente proceso de ejecución.

Artículo 1450. La nave extranjera surta en puerto colombiano podrá ser


embargada en razón de cualquier crédito privilegiado o por cualquier otro
crédito que haya sido contraído en Colombia.

Artículo. 1451. Embargada una nave, el juez lo comunicará, antes de


notificar el auto respectivo, al capitán de puerto de matrícula para su
registro.

Dictada la providencia de embargo y secuestro, aunque no esté


ejecutoriada, la nave no podrá zarpar, a menos que se preste una caución
real, bancaria o de compañía de seguros, igual al doble del crédito
demandado, sin intereses ni costas, ni exceder en ningún caso el límite
señalado en el artículo 1481, para garantizar su regreso oportuno.

La nave que haya recibido autorización de zarpe, no podrá ser secuestrada


sino por obligaciones contraídas con el fin de aprestarla y aprovisionarla
para el viaje.

Artículo 1453. La nave no podrá ser embargada ni rematada por las


deudas particulares de uno de los copropietarios; pero podrá embargarse
y subastarse la cuota que en ella le corresponda al deudor.

Artículo 1908. El embargo de una aeronave, aun en vía de construcción,


deberá anotarse en el registro aeronáutico.
Medidas Cautelares 179

Pero el secuestro de una aeronave de transporte público de pasajeros


matriculada en Colombia, no podrá realizarse sino después de ejecutoriada
la sentencia que ordene llevar adelante la ejecución, a menos que la
aeronave se halle fuera de servicio por un término mayor de un mes.

14.3.5. EMBARGO Y SECUESTRO DE AUTOMOTORES


CÓDIGO DE COMERCIO

Artículo 922. La tradición del dominio de los bienes raíces requerirá,


además de la inscripción del título en la correspondiente oficina de registro
de instrumentos públicos, la entrega material de la cosa.

De la misma manera se realizará la tradición del dominio de los vehículos


automotores, pero la inscripción del título se efectuará ante el funcionario
y en la forma que determinen las disposiciones legales pertinentes. La
tradición así efectuada será reconocida y bastará ante cualesquiera
autoridades.

Ley 53 de 1989. Artículo 6º. El registro terrestre automotor es el conjunto de


datos necesarios para determinar la propiedad, características y situación
jurídica de los vehículos automotores terrestres. En él se inscribirá todo
acto o contrato que implique tradición, disposición, aclaración, limitación,
gravamen o extinción del dominio u otro derecho real, principal o accesorio
sobre vehículos automotores terrestres para que surta efectos ante las
autoridades y ante terceros.”

14.4. LIMITE DE LOS EMBARGOS

Para determinar el monto sobre el cual el ejecutivo de cobro decreta el


límite de embargo debe observar lo establecido por el artículo 838 del
E.T.N. “Límite de los embargos. El valor de los bienes embargados no podrá
exceder del doble de la deuda más sus intereses. Si efectuado el avalúo
de los bienes éstos excedieren la suma indicada, deberá reducirse el
embargo si ello fuere posible, hasta dicho valor, oficiosamente o a solicitud
del interesado…”.

Así mismo debe observarse las regulaciones implementadas sobre el punto


por el artículo 9º de la Ley 1066 de 2006, que adiciona el artículo 837-1 del
E.T., así:

“Artículo 837-1. Límite de inembargabilidad. Para efecto de los


embargos a cuentas de ahorro, librados por la Dirección de Impuestos
y Aduanas Nacionales dentro de los procesos administrativos de cobro
180 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

que esta adelante contra personas naturales, el límite de inembargabilidad


es de veinticinco (25) salarios mínimos legales mensuales vigentes,
depositados en la cuenta de ahorros más antigua de la cual sea titular el
contribuyente.

En el caso de procesos que se adelanten contra personas jurídicas no


existe límite de inembargabilidad.

No serán susceptibles de medidas cautelares por parte de la DIAN los


bienes inmuebles afectados con patrimonio de familia inembargable”.

No obstante no existir límite de inembargabilidad, estos recursos no


podrán utilizarse por la entidad ejecutora hasta tanto quede plenamente
demostrada la acreencia a su favor, con fallo judicial debidamente
ejecutoriado o por vencimiento de los términos legales de que dispone el
ejecutado para ejercer las acciones judiciales procedentes.

Los recursos que sean embargados permanecerán congelados en la


cuenta bancaria del deudor hasta tanto sea admitida la demanda o el
ejecutado garantice el pago del 100% del valor en discusión, mediante
caución bancaria o de compañías de seguros. En ambos casos, la entidad
ejecutora debe proceder inmediatamente, de oficio o a petición de parte,
a ordenar el desembargo.

La caución prestada u ofrecida por el ejecutado conforme con el párrafo


anterior, deberá ser aceptada por la entidad.

No debemos olvidar que en cabeza del ejecutor tiene responsabilidades


cuando a pesar de conocer que se ha excedido en los embargos los
mantiene causando así perjuicios en el ejecutado, la Corte Suprema de
Justicia sobre el tema ha manifestado

JURISPRUDENCIA. “(...), la Corte ha dicho ‘que cuando el actor


pudiendo, no destraba los bienes que ninguna garantía prestan para la
efectividad de la obligación perseguida’ incurre en un abuso del derecho,
generador de una responsabilidad civil y, por consiguiente, en tal caso,
habrá de indemnizar al deudor así perjudicado, tal cual lo ha dicho esta
corporación, entre otras en sentencias de 11 de octubre de 1973 (G.J.,
t. CXLVII, págs. 81 y 82) y de 2 de agosto de 1995. Además, como se
sostiene en esta última sentencia al reiterar doctrina anterior, ‘igualmente,
habría también abuso del derecho siempre que a petición del acreedor se
embargarán en exceso bienes del deudor’. Desborda, pues, el límite del
derecho, dice la Corte, ‘quien conociendo lo que se le adeuda por capital
e intereses y pudiendo calcular los costos de la cobranza, para garantizar
el pago de estas sumas embarga bienes de su deudor en cuantía diez
Medidas Cautelares 181

veces superior al monto de aquellas, y el que, pudiendo, no destraba los


bienes que ninguna garantía prestan para la efectividad de la obligación
perseguida, porque, en tal caso, es abusivo el ejercicio de la facultad que
al acreedor concede la ley para lograr la tutela de Estado, con el fin de que
su obligación insatisfecha se le pague con el producto de la subasta de
bienes del obligado’ (Sent., oct. 11/73, atrás referenciada).

Desde luego que la doctrina expuesta cobra mayor vigor si al consultar


el sistema procesal, instituido para la efectividad de los derechos
reconocidos por la ley sustancial, se localizan preceptos como los que
antes se mencionaron, destinados a salvaguardar la proporción entre el
quantum del crédito reclamado y el valor de los bienes perseguidos para
su pago, porque no otro es el objetivo de los artículos 513 inciso 8º y 517
inciso 1º y 2º del Código de Procedimiento Civil, frente a los cuales por
encima de la facultad y el deber que con tal finalidad se consagran con
respecto al juez, prevalece la obligación que el ejecutante tiene, sabiendo
el valor de su crédito, incluidos los intereses y las costas procesales, de
denunciar para los efectos de las medidas cautelares, bienes cuyo valor
‘no podrá exceder del doble del crédito cobrado, sus intereses y las costas
prudencialmente calculadas, salvo que se trate de un solo bien o de bienes
afectados por hipoteca o prenda que garantizan aquel crédito, o cuando la
división disminuya su valor o venalidad’ (art. 513 inc. 8º).

De modo que perseguir bienes cuyo valor excede los límites establecidos
por la propia ley, sin que concurra alguna de las circunstancias de
excepción que ella misma indica, torna abusivo el ejercicio del derecho
subjetivo establecido por el artículo 2488 del Código Civil, y como se dijo,
compromete la responsabilidad de quien así actúa, si con tal proceder
causa un perjuicio y se le puede imputar un comportamiento temerario o
de mala fe, pues al fin de cuentas el abuso se da en el empleo de las vías
de derecho, es decir, en la actuación procesal, donde no basta para dar por
descontado el elemento subjetivo de la responsabilidad personal, la culpa
sin calificación alguna, sino una que haya sido fruto de la temeridad o la
mala fe.” (Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación. Civil, sentencia
del 17 de noviembre de 1998, Exp. 4.909, M.P. José Fernando Ramírez
Gómez).

Igualmente en necesario precisar que no obstante lo anterior cuando lo que


se recaudan impuestos que graven la propiedad raíz como ocurre en el caso
del impuesto predial unificado, la participación en plusvalía, o la contribución
de valorización en donde el bien inmueble garantiza la obligación del tributo
a recaudar, este límite no aplica en la proporción señalada, ya que en la
mayoría de los casos, al garantizar el bien objeto del tributo el pago del
mismo, puede el funcionario ejecutor, proceder a embargar el bien inmueble,
a pesar de que el mismo multiplique varias veces el valor de la acreencia.
182 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

14.5. SUSTITUCIÓN, MODIFICACIÓN, CONCURRENCIA DE EMBARGOS.

Si revisado el proceso, se establece que la medida cautelar previamente


adoptada no es de fácil realización, o no se pudo concretar de la forma
esperada, puede el funcionario ejecutor proceder a efectuar la modificación
necesaria de la medida cautelar de manera simultánea, por una que
garantice la pronta recuperación de la deuda, esta acción podrá realizarse
sobre:

- Otros títulos financieros de carácter temporal y fácil realización.

- Embargo de salarios.

- Embargo sobre establecimientos de comercio.

- Embargos de cánones de arrendamiento.

- Embargo de razón social y participación en sociedades, para su posterior


venta.

- Embargo de vehículos.

La sustitución, modificación o concurrencia de la medida cautelar será


definido por el ejecutor de cobro y deberá tener un estricto seguimiento en
cuanto a la simultaneidad en el embargo y desembargo de la medida.

Puede darse de otro lado que varios entes públicos o estos y un juez de
la Republica ordenen embargos simultáneos, se deberá tener en cuenta
las reglas de preferencia de las obligaciones, y proseguir el procedimiento
señalado dentro del Estatuto Tributario en el artículo 839-1 que nos indica:

Artículo 839-1. Trámite para algunos embargos.

(…)

Cuando sobre dichos bienes ya existiere otro embargo registrado, se


inscribirá y comunicará a la administración de impuestos y al juzgado que
haya ordenado el embargo anterior.

En este caso si el crédito que ordenó el embargo anterior es de grado


inferior al del fisco, el funcionario de cobranzas continuará con el
procedimiento de cobro, informando de ello al juez respectivo y si éste lo
solicita, pondrá a su disposición el remanente del remate.
Medidas Cautelares 183

Si el crédito que originó el embargo anterior es de grado superior al del


fisco, el funcionario de cobro se hará parte en el proceso ejecutivo y
velará por que se garantice la deuda con el remanente del remate del bien
embargado.

(…)

14.6. LA REDUCCION DE EMBARGOS DENTRO DEL P.A.C.

El Código de Procedimiento Civil nos señala que el funcionario ejecutor


debe reducir los embargos cuando éstos superen los montos determinados
en los Artículos 513 y 681 numeral 11 del C.P.C.

No obstante lo anterior debe recordarse las reglas señaladas en el punto


13.4. respecto del cobro de tributos que afectan la propiedad raíz.

De la misma forma, debemos tener presente que conforme con el artículo


517 del C.P.C. y una vez practicado el avalúo de los bienes embargados y
antes de que se fije fecha para remate, el ejecutado puede solicitar que se
excluyan del embargo determinados bienes, por considerarlo excesivo.

14.7. LEVANTAMIENTO DE EMBARGOS

El levantamiento del embargo, nace generalmente o bien de una solicitud de


parte, efectuada por ejecutado o a voluntad del funcionario ejecutor cuando
se satisface el pago de la obligación que generó el proceso.

El artículo 687 del Código de Procedimiento Civil, señala las causales de


levantamiento de embargo y secuestro, fijando las mismas así:

“Artículo 687. Levantamiento del embargo y secuestro. Se levantarán


el embargo y secuestro en los siguientes casos:

1. Si se pide por quien solicitó la medida, cuando no haya litisconsortes


o terceristas; si los hubiere, por aquél y éstos, y si se tratare de
proceso de sucesión por todos los herederos reconocidos y el cónyuge
sobreviviente. El auto que resuelva la petición es apelable en el efecto
diferido.

2. Si se desiste de la demanda que originó el proceso, en los mismos


casos del numeral anterior.

3. Si el demandado en proceso ordinario presta caución para garantizar


lo que se pretende, sus frutos o productos si se trata de secuestro, y el
184 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

pago de las costas; en el proceso ejecutivo, en los casos contemplados


en el artículo 519.

4. Si se ordena la terminación del proceso ejecutivo por la revocatoria del


mandamiento de pago o porque prospere una excepción previa o de
mérito.

5. Si se absuelve al demandado en proceso declarativo.

6. Derogado. L. 794/03, art. 70.

7. Si se trata de embargo sujeto a registro, cuando del certificado del


registrador aparezca que la parte contra quien se profirió la medida no
es la titular del dominio del respectivo bien.

8. Si un tercero poseedor que no se opuso a la práctica de la diligencia


de secuestro, solicita al juez del conocimiento, dentro de los veinte
días siguientes, que se declare que tenía la posesión material del bien
al tiempo en que aquélla se practicó, y obtiene decisión favorable. La
solicitud se tramitará como incidente, en el cual el solicitante deberá
probar su posesión.

Para que el incidente pueda iniciarse es indispensable que el peticionario


preste caución que garantice el pago de las costas y la multa que
lleguen a causarse, y si se trata de proceso ejecutivo además que no
se haya efectuado el remate del bien.

Lo dispuesto en los incisos anteriores se aplicará igualmente al tercero


poseedor que se opuso a la diligencia de secuestro, pero no estuvo
representado por apoderado judicial. Promovido el incidente quedará
desierta la apelación que se hubiere propuesto y de ello se dará aviso
al superior.

Si el incidente se decide desfavorablemente a quien lo promueve,


se impondrá a éste una multa de cinco a veinte salarios mínimos
mensuales.

El auto que decida el incidente es apelable en el efecto diferido.

9. Cuando exista otro embargo o secuestro anterior, salvo lo dispuesto


en el artículo 558. Si se levanta el secuestro y se trata de proceso
de ejecución, se aplicará lo dispuesto en el parágrafo 3º del artículo
precedente.

10. En los casos de los numerales 1º, 2º y 8º para resolver la respectiva


solicitud no será necesario que se haya notificado al demandado el
auto admisorio de la demanda o del mandamiento ejecutivo.
Medidas Cautelares 185

Siempre que se levante el embargo o secuestro en los casos de los


numerales 1º, 2º y 4º a 8º del presente artículo, se condenará de oficio o
a solicitud de parte en costas y perjuicios a quienes pidieron tal medida,
salvo que las partes convengan otra cosa. Si el juez no impone dicha
condena, el auto será apelable en el efecto devolutivo.”

De otra parte y solo con fines académicos debemos indicar que el Código
de Procedimiento Civil en su artículo 519, señala que el ejecutado puede
solicitar al ejecutor que no se decrete embargo en contra suya, siempre
y cuando preste caución en dinero o constituya una póliza de seguros o
bancaria que cubran la obligación objeto de cobro.

“Artículo 519. Consignación para impedir o levantar embargos y


secuestros. Desde que se formule demanda ejecutiva el ejecutado podrá
pedir que no se le embarguen ni secuestren bienes, para lo cual deberá
prestar caución en dinero o constituir garantía bancaria o de compañía
de seguros por el monto que el juez señale, para garantizar el pago del
crédito y las costas dentro de los tres días siguientes a la ejecutoria de
la sentencia que desestime las excepciones, o del auto que acepte el
desistimiento de ellas, o de la sentencia que ordene llevar adelante la
ejecución, según fuere el caso.

Si las medidas cautelares ya se hubieren practicado, el demandado podrá


solicitar la cancelación y levantamiento de la misma, previa consignación
de la cantidad de dinero que el juez estime suficiente para garantizar el
pago del crédito y las costas, la cual se considerará embargada para todos
los efectos.

Inciso tercero (declarado inexequible en sentencia de la Corte Suprema


de Justicia de julio 26 de 1990.)

Cuando los bienes fueren perseguidos en varias ejecuciones o se


hubiere embargado su remanente, la consignación del dinero o la caución
bancaria o de compañía de seguros sólo podrá aceptarse si se acredita la
cancelación y levantamiento de otros embargos y secuestros.

El juez resolverá la solicitud del demandado inmediatamente y éste deberá


consignar o prestar la caución dentro del término que se señale al efecto,
el cual no podrá ser inferior a cinco días ni superior a veinte, contados
desde la ejecutoria del auto que la haya ordenado.

Lo dispuesto en este artículo no se aplicará a los embargos y secuestros


de bienes hipotecados o dados en prenda, cuando en el proceso se estén
haciendo valer exclusivamente dichas garantías.

El auto que decida la solicitud del ejecutado es apelable en el efecto


devolutivo.”
186 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Esta última opción debe ser analizada con sumo cuidado por parte
del funcionario ejecutor so pena de dejar las obligaciones sin respaldo
alguno, situación que podría repercutir en cabeza suya tanto fiscal como
disciplinariamente.
El secuestro de bienes objeto de embargo 187

EL SECUESTRO DE BIENES
OBJETO DE EMBARGO
CAPÍTULO

15
15.1. EL SECUESTRO DE BIENES DENTRO DEL PROCESO
ADMINISTRATIVO COACTIVO

El secuestro tiene como finalidad conservar los bienes, impidiendo que su


dueño o poseedor de los mismos los enajene, asegurando de esta forma
que se cumpla con la decisión resultante del proceso que dio lugar al
secuestro de tales bienes.

El secuestro es una medida cautelar para asegurar el cumplimiento o


ejercicio de un derecho legalmente reconocido, como en el caso estudio, en
donde para garantizar al deuda a favor de la entidad pública el Funcionario
ejecutor opta por secuestrarlos para preservarlos a su disposición y que
impidan que el propietario de los mismos los venda o deteriore.

El Código Civil Colombiano en el artículo 2273, define el Secuestro como:


“…el depósito de una cosa que se disputan dos o más individuos, en manos
de otro que debe restituir al que obtenga una decisión a su favor.

El depositario se llama secuestre.”

El secuestre está en la obligación de cuidar y guardar el bien adecuadamente,


respondiendo hasta por la culpa leve y debe además restituirlo cuando el
funcionario ejecutor así lo ordene.

El secuestro por regla general y en cualquier etapa procesal o incluso las


pre-procesales debe decretarse con el acto en el cual se ordena el embargo
de los bienes, de no haberse efectuado de forma conjunta con este podría
decretarse de forma independiente, aunque se reitera en principio debe
decretarse de forma conjunta el embargo y secuestro de los bienes, no
obstante la formalización del secuestro solamente podrá efectuarse en
el caso se bienes sujetos a registro, una vez se obtenga constancia de
188 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

la inscripción del embargo en el folio de matrícula inmobiliaria o registro


correspondiente y determinada la constancia del embargo en debida forma
debe procederse a la fijación de la fecha y hora en que tendrá la diligencia
de secuestro.

15.2. NOMBRAMIENTO, ACEPTACIÓN, CALIDADES Y OBLIGACIONES


DEL SECUESTRE

El secuestre se nombrará de la lista de auxiliares de la justicia de la rama


judicial, aunque se permite en materia tributaria que los entes que efectúan
el cobro de impuestos creen sus propias listas de auxiliares de la justicia
con el fin de hacer más expedito el proceso de cobro, la anterior afirmación
se basa en lo señalado en el artículo 843-1 del Estatuto Tributario Nacional,

“Artículo 843-1. Auxiliares. Para el nombramiento de auxiliares la


administración tributaria podrá:

1. Elaborar listas propias.


2. Contratar expertos.
3. Utilizar la lista de auxiliares de la justicia.

Parágrafo La designación, remoción y responsabilidad de los auxiliares


de la administración tributaria se regirá por las normas del Código de
Procedimiento Civil, aplicables a los auxiliares de la justicia.

Los honorarios, se fijarán por el funcionario ejecutor de acuerdo con las


tarifas que la administración establezca.”

Así las cosas, deben los funcionarios ejecutores, crear de forma institucional
en la entidad pública correspondiente, el listado de auxiliares de la justicia
propios, o utilizar en su defecto los establecidos para la rama judicial

De decidirse por la opción de crear listas propias, debe tenerse en todo


caso presente que quienes las integren deben cumplir con lo señalado en
el artículo 8º del Código de Procedimiento Civil, veamos:

“Artículo 8º. Naturaleza de los cargos. Los cargos de auxiliares de la


justicia son oficios públicos que deben ser desempeñados por personas
idóneas, de conducta intachable, excelente reputación e incuestionable
imparcialidad. Para cada oficio se exigirán versación y experiencia en la
respectiva materia y, cuando fuere el caso, título profesional legalmente
expedido. Los honorarios respectivos constituyen una equitativa retribución
del servicio, y no podrán gravar en exceso a quienes solicitan que se les
dispense justicia por parte del poder público.” (Se subraya)
El secuestro de bienes objeto de embargo 189

El nombramiento de los curadores sea la opción que se tome, se deberá


comunicar mediante oficio que el auxiliar deberá contestar por escrito; si
acepta el cargo se tendrá como posesionado, conforme con lo establecido
en el Artículo 9º del C.P.C.

“Artículo 9º. Designación, aceptación del cargo, calidades y exclusión


de la lista.

Para la designación, aceptación del cargo, calidades y exclusión de la lista


de los auxiliares de la justicia se observarán las siguientes reglas:

1. Designación. Los auxiliares de la justicia serán designados, así:

a) La de los peritos, secuestres, partidores, liquidadores, curadores


ad litem, contadores, agrimensores, síndicos, intérpretes y
traductores, se hará por el magistrado sustanciador o por el juez
del conocimiento, de la lista oficial de auxiliares de la justicia. Los
testigos de la celebración del matrimonio civil, serán designados por
los contrayentes.

En el auto de designación del curador ad litem, se incluirán tres


nombres escogidos de la lista de dichos auxiliares de la justicia. El
cargo será ejercido por el primero que concurra a notificarse del auto
admisorio o del mandamiento ejecutivo, según sea el caso, acto que
conllevará la aceptación de la designación. Los otros dos auxiliares
incluidos en el auto conservarán el turno de nombramiento en la
lista. En el mismo auto el juez señalará los gastos de curaduría
que debe cancelar la parte interesada. El pago podrá realizarse
mediante consignación a órdenes del juzgado o directamente al
auxiliar y acreditarse en el expediente. Si en el término de cinco (5)
días, contados a partir de la comunicación de su designación, no se
ha notificado ninguno de los curadores nombrados, se procederá a
su reemplazo observando el mismo procedimiento.

b) La designación será rotatoria, de manera que la misma persona no


pueda ser nombrada por segunda vez sino cuando se haya agotado
la lista. Empero, si al iniciarse o proseguirse una diligencia faltaren
los auxiliares o colaboradores nombrados, podrá procederse a su
reemplazo en el acto, con cualesquiera de las personas que figuren
en la lista correspondiente, y estén en aptitud para el desempeño
inmediato del cargo. Cuando en el respectivo despacho faltare la
lista, se acudirá a la de otro del mismo lugar, y en su defecto se hará
la designación en persona debidamente calificada para el oficio.

c) Los traductores e intérpretes serán únicos, a menos que se trate


de documentos o de declaraciones en diferentes idiomas y que el
auxiliar no sea experto en todos éstos.
190 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

d) Las partes podrán de consuno, en el curso del proceso, designar


peritos y secuestre, y reemplazar a éste.

e) Los secuestres podrán designar bajo su responsabilidad y con


autorización judicial, los dependientes que sean indispensables
para el buen desempeño del cargo y señalar sus funciones. El
juez resolverá al respecto y fijará la asignación del dependiente, en
providencia que no admite apelación.

f) El curador ad litem de los relativamente incapaces será designado


por el juez, si no lo hiciera el interesado.

g) Los partidores y liquidadores podrán ser designados conjuntamente


por los interesados, dentro de la ejecutoria de la providencia que
decrete la partición o la liquidación, teniendo en cuenta lo previsto
en el artículo 608.

2. Aceptación del cargo. Todo nombramiento se notificará por telegrama


enviado a la dirección que figure en la lista oficial, y en éste se indicará
el día y la hora de la diligencia a la cual deban concurrir. Copia
debidamente sellada por la oficina de telégrafo respectiva, se agregará
al expediente. Lo anterior, sin perjuicio de que dicha notificación se
pueda realizar por otro medio más expedito, de lo cual deberá quedar
constancia en el expediente. En la misma forma se hará cualquiera otra
notificación.

El cargo de auxiliar de la justicia es de obligatoria aceptación dentro de


los cinco (5) días siguientes al envío del telegrama correspondiente o a
la notificación realizada por cualquier otro medio, so pena de que sea
excluido de la lista, salvo justificación aceptada. Los peritos deberán
posesionarse dentro de los cinco (5) días siguientes a la aceptación.

Si la persona designada estuviere impedida para desempeñar la


función, se excusare de prestar el servicio, no tomare posesión cuando
fuere el caso hacerlo, no concurriere a la diligencia o no cumpliere su
encargo dentro del término señalado, se procederá inmediatamente a
su relevo.

3. Designación y calidades. En las cabeceras de distrito judicial y


ciudades de más de doscientos mil (200.000) habitantes, solamente
podrán designarse como auxiliares de la justicia personas jurídicas o
naturales que obtengan licencia expedida por la autoridad competente
de conformidad con la reglamentación que sobre el particular realice
el Consejo Superior de la Judicatura, previa acreditación por parte
del aspirante de los requisitos técnicos, la idoneidad y la experiencia
requeridas. Las licencias deberán renovarse cada cinco (5) años.

En los demás lugares para la designación de los auxiliares de la justicia


se aplicará lo dispuesto en los literales a) y b) del numeral 1º del
presente artículo.
El secuestro de bienes objeto de embargo 191

Las listas de auxiliares de la justicia serán obligatorias para magistrados,


jueces e inspectores, y en ningún caso podrán ser nombrados auxiliares
que no figuren en las mismas, so pena de incurrir en falta disciplinaria.

Las entidades públicas que cumplan funciones técnicas en el orden


nacional o territorial podrán ser designadas como perito sin necesidad
de obtener la licencia de que trata este parágrafo (sic).

4. Exclusión de la lista. Las autoridades judiciales excluirán de las listas


de auxiliares de la justicia, e impondrán multas hasta de diez (10)
salarios mínimos legales mensuales según el caso:

a) A quienes por sentencia ejecutoriada hayan sido condenados por la


comisión de delitos contra la administración de justicia.

b) A quienes hayan rendido dictamen pericial contra el cual hubieren


prosperado objeciones por dolo, error grave o cohecho.

c) A quienes como secuestres, liquidadores o curadores con


administración de bienes, no hayan rendido oportunamente cuenta
de su gestión, o cubierto el saldo a su cargo, o reintegrado los bienes
que se le confiaron o los hayan utilizado en provecho propio o de
terceros, o se les halle responsables de administración negligente.

d) A quienes no hayan cumplido a cabalidad con el encargo de curador


ad litem.

e) A las personas a quienes se les haya suspendido o cancelado la


matrícula o licencia.

f) A quienes hayan entrado a ejercer un cargo oficial mediante situación


legal o reglamentaria.

g) A quienes hayan fallecido o se incapaciten física o mentalmente.

h) A quienes se ausenten definitivamente del respectivo territorio


jurisdiccional.

i) A quienes sin causa justificada no aceptaren o no ejercieren el cargo


de auxiliar o colaborador de la justicia para el que fueron designados.

j) Al auxiliar de la justicia que haya convenido honorarios con las


partes o haya solicitando o recibido pago de ellas con anterioridad a
la fijación judicial o por encima del valor de ésta.

k) A quienes siendo servidores públicos hubieren sido destituidos por


sanciones disciplinarias.
192 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Parágrafo. 1º. La exclusión y la imposición de multas se resolverá


mediante incidente el cual se iniciará por el juez de oficio o a petición de
parte, dentro de los diez (10) días siguientes a la ocurrencia del hecho que
origina la exclusión o de su conocimiento. Para excusar su falta el auxiliar
deberá justificar su incumplimiento.

Parágrafo 2º. También serán excluidas de la lista las personas jurídicas


cuyos miembros incurran en las causales previstas en los numerales b),
c), d), e), i) y j) del presente artículo, así como las personas jurídicas que
se liquiden.

Las personas jurídicas no podrán actuar como auxiliares de la justicia por


conducto de personas que incurran en las causales de exclusión previstas
en este artículo.

No debe olvidar el funcionario ejecutor que el secuestre deberá prestar


caución, previo a la realización del secuestro, caución que garantizará
los valores que en él se depositarán, Si el secuestre no presta la caución
ordenada dentro del término de los diez (l0) días hábiles a partir del auto
que la ordena, el funcionario ejecutor procederá a relevarlo del cargo i por el
contrario presenta la caución, procederá a dictar auto por el cual se aprueba
la misma.

15.3. LA DILIGENCIA DE SECUESTRO

En la diligencia del secuestro se recomienda que además de los intervinientes


obligados como lo son el secuestre y el funcionario ejecutor, se recomienda
que se acompañe por un tercero que haga las veces de secretario y de
ser necesario se acompañe también la diligencia con personal de la fuerza
pública, para que exista garantía en el ejecutado de que se trata de una
diligencia administrativa y no de otro tipo de hecho, y a la vez para los
funcionarios públicos y el secuestre garantía de seguridad personal e incluso
de requerirse la práctica de allanamiento73, para que la misma se realice.
73 El allanamiento es el poder del cual se reviste el funcionario ejecutor, para que de requerirlo pueda ingresar a
habitaciones, establecimientos, oficinas e inmuebles en general, naves y aeronaves mercantes, y entrar en ellos
aun contra la voluntad de quienes los habiten u ocupen.
Las reglas de los allanamientos en materia de secuestro de bienes se encuentra reguladas en los artículos 113
y 114 del Código de Procedimiento Civil, y aplica cuando en el interior del inmueble objeto de allanamiento se
encuentren bienes que deban secuestrarse, entregarse, o ser objeto de inspección judicial o examen por peritos,
debe aclararse que el acto que se decreta el secuestro debe señalarse la facultad de allanar que tiene el ejecutor,
para la practica el allanamiento, el juez llamará previamente a la puerta del edificio o entrada de la heredad o
nave, a fin de hacer saber al ocupante el objeto de la diligencia y si no le contestare o no le permitiere la entrada,
procederá al allanamiento valiéndose de la fuerza pública en caso necesario.
El allanamiento sólo podrá practicarse durante las horas de despacho, pero si hubiere temor de que se frustre la
diligencia, el juez dispondrá que por la policía se adopten las medidas de vigilancia tendientes a evitar la sustracción
de las cosas que hayan de ser objeto de ella y podrá asegurar con cerradura los almacenes, habitaciones y otros
locales donde se encuentren muebles, enseres o documentos, colocar sellos y adoptar las medidas que garanticen
su conservación.
El secuestro de bienes objeto de embargo 193

En la diligencia de secuestro, los en ellas intervinientes, deberán observar


las reglas establecidas en el artículo 682 del Código de Procedimiento Civil,
así:

“Artículo 682. Secuestro. Para el secuestro de bienes se aplicarán las


siguientes reglas:

1. En el auto que lo decrete se señalará fecha y hora para la diligencia,


que se practicará aunque no concurra el secuestre, caso en el cual el
juez lo remplazará en el acto.

2. La entrega de bienes al secuestre se hará previa relación de ellos en


el acta, con indicación del estado en que se encuentren.

3. Cuando se trate de derechos proindiviso en bienes inmuebles, en la


diligencia de secuestro se procederá como se dispone en el numeral
12 del artículo precedente.

4. Salvo lo dispuesto en los numerales siguientes y en el artículo 10,


el secuestre depositará inmediatamente los vehículos, máquinas,
mercancías, muebles, enseres y demás bienes en la bodega de que
disponga y a falta de ésta en un almacén general de depósito u otro
lugar que ofrezca plena seguridad, de lo cual informará por escrito al
juez al día siguiente, y deberá tomar las medidas adecuadas para la
conservación y mantenimiento. En cuanto a los vehículos de servicio
público, se estará a lo estatuido en el numeral 2º del artículo 684.

No obstante los muebles estrictamente necesarios para la sala de


recibo y el comedor de la casa de habitación, a juicio del juez, serán
dejados en depósito provisional, en poder de la persona contra quien
se decretó el embargo, o en su defecto de uno de sus parientes o
del cónyuge, y serán retirados por el secuestre una vez decretado su
remate, para lo cual se podrá solicitar el auxilio de la fuerza pública.

5. Si se trata de semovientes o de bienes depositados en bodegas, se


dejarán con las debidas seguridades en el lugar donde se encuentren,
hasta cuando el secuestre considere conveniente su traslado y
éste puede ejecutar, en las condiciones ordinarias del mercado, las
operaciones de venta o explotación a que estuvieren destinados,
procurando seguir el sistema de administración vigente.

6. Los almacenes o establecimientos similares se entregarán al


secuestre, quien continuará administrándolos, como se indica en
el numeral anterior, con el auxilio de los dependientes que en ese
momento existieren y los que posteriormente designe de conformidad
con el numeral 6º del artículo 9º, y consignará los productos líquidos
194 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

en la forma indicada en el artículo 10. El propietario del almacén o


establecimiento podrá ejercer funciones de asesoría y vigilancia, bajo
la dependencia del secuestre.

Inmediatamente se hará inventario por el secuestre y las partes o


personas que éstas designen, sin que sea necesaria la presencia del
juez, copia del cual, firmado por quienes intervengan se agregará al
expediente.

7. El secuestro de cosechas pendientes o futuras se practicará en el


inmueble, dejándolas a disposición del secuestre, quien adoptará las
medidas conducentes para su administración, recolección y venta en
las condiciones ordinarias del mercado.

8. Si lo secuestrado es una empresa industrial o minera u otra distinta de


las contempladas en los numerales anteriores, el secuestre asumirá la
dirección y manejo del establecimiento, procurando seguir el sistema
de administración vigente. El gerente o administrador continuará en
el cargo bajo la dependencia del secuestre, y no podrá ejecutar acto
alguno sin su autorización, ni disponer de bienes o dineros; a falta de
aquél, el propietario podrá ejercer las funciones que se indican en la
parte final del inciso primero del numeral 6º.

La maquinaria que esté en servicio se dejará en el mismo lugar, pero


el secuestre podrá retirarla una vez decretado el remate, para lo cual
podrá solicitar el auxilio de la policía.

9. Cuando al practicar el secuestro de una empresa o establecimiento se


encuentre dinero, el juez lo consignará inmediatamente en la cuenta
de depósitos judiciales.

10. Cuando se trate de títulos de crédito, alhajas y en general objetos


preciosos, el secuestre los entregará en custodia a una entidad bancaria
o similar, previa su completa especificación, de lo cual informará al juez
al día siguiente.

11. El juez se abstendrá de secuestrar los bienes muebles inembargables,


y si se trata de inmuebles levantará el embargo. Estos autos son
apelables en el efecto devolutivo.

12. Cuando no se pueda practicar inmediatamente un secuestro o deba


suspenderse, el juez o el comisionado podrá asegurar con cerraduras
los almacenes o habitaciones u otros locales donde se encuentren los
bienes o documentos, colocar sellos que garanticen su conservación,
y solicitar vigilancia de la policía.
El secuestro de bienes objeto de embargo 195

De la misma manera y en cuanto tiene que ver con el secuestro de derechos


contenidos en un título valor o el secuestro de naves o aeronaves, debe
el funcionario ejecutor tener presente las disposiciones señaladas en los
artículo 629 y 1452 del Código de Comercio.

“Artículo 629. La reivindicación, el secuestro, o cualesquiera otras


afectaciones o gravámenes sobre los derechos consignados en un título
valor o sobre mercancías por él representadas, no surtirán efectos si no
comprenden el título mismo materialmente.

Artículo 1452. El secuestro de una nave se hará mediante su entrega


a un secuestre, que puede ser el capitán de la misma, previo inventario
completo y detallado de todos sus elementos, practicado con asistencia
del armador o del capitán.

Las oposiciones se tramitan conforme al Código de Procedimiento Civil.”

A manera de conclusión podemos afirmar, que en la diligencia de secuestro


el funcionario ejecutor debe en primera medida observar el tipo de bien a
secuestrar, si el bien es un bien inmueble o sujeto a registro se entregará
el mismo al secuestre detallando el estado en que se entrega, si por el
contrario es un ente productivo (empresa, industria, comercio, hacienda),
se hará entrega al secuestre para que este continué con el desarrollo de
la actividad y de sus frutos se satisfaga la obligación insoluta, y de ser un
bien mueble no productivo (electrodomésticos, otros), se realizará el acta
detallando su estado, seriales, numeraciones y demás datos que permitan
identificar el bien y sus estado.

En todo caso en el acta que se realice dentro de la diligencia de secuestro


debe hacerse un relato concreto de las cosas que se secuestran así
como los nombres de las personas que atendieron la diligencia a quienes
es obligación enterarlas del objeto de la misma; oír sus manifestaciones
y resolver las peticiones referidas a la propiedad tenencia o posesión de
los bienes a secuestrar; así mismo deberá examinarse los documentos u
otros medios probatorios que en apoyo de sus pedimentos aduzcan en ese
momento; la relación de las cosas, su estado y en poder de quién se dejan
y a qué título; las oposiciones que formulen y su decisión (Artículo 682 y
686 C.P.C.).

15.4. LA OPOSICION AL SECUESTRO

La oposición a la diligencia de secuestro sólo puede ser presentada


por terceros no vinculados al proceso que aleguen tener la calidad de
propietarios o poseedor del bien objeto de secuestro.
196 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Las reglas aplicables en materia de oposición al secuestro, las encontramos


consagradas en los artículos 686 del Código de Procedimiento Civil y 964 y
965 del C.Co, veamos:

“Artículo 686. Oposiciones al secuestro. A las oposiciones al secuestro


se aplicarán las siguientes reglas:

Parágrafo 1º. Situación del tenedor. Si al practicarse el secuestro,


los bienes se hallan en poder de quien alegue y demuestre siquiera
sumariamente título de tenedor con especificación de sus estipulaciones
principales, anterior a la diligencia y procedente de la parte contra la cual
se decretó la medida, ésta se llevará a efecto sin perjudicar los derechos
de aquél, a quien se prevendrá que en lo sucesivo se entienda con el
secuestre, que ejercerá los derechos de dicha parte con fundamento en
el acta respectiva que le servirá de título, mientras no se constituya uno
nuevo.

Parágrafo 2º Oposiciones. Podrá oponerse al secuestro la persona que


alegue posesión material en nombre propio o tenencia a nombre de un
tercero poseedor; el primero deberá aducir prueba siquiera sumaria de
su posesión, y el segundo la de su tenencia y de la posesión del tercero.
La parte que pidió el secuestro podrá solicitar testimonios de personas
que concurran a la diligencia, relativos a la posesión del bien. El juez
agregará al expediente los documentos que se presenten relacionados
con la posesión, ordenará el interrogatorio bajo juramento, del poseedor
y tenedor, si hubiere concurrido a la diligencia, del poseedor o tenedor,
sobre los hechos constitutivos de la posesión y la tenencia, y a este último
también sobre los lugares de habitación y trabajo del supuesto poseedor.
La parte que solicitó el secuestro podrá interrogar al absolvente.

Si se admite la oposición y la parte que pidió la diligencia interpone


reposición que le sea negada o insiste en el secuestro, se practicará éste,
dejando al poseedor o tenedor en calidad de secuestre y se adelantará el
trámite previsto en el inciso séptimo de este parágrafo. Si la parte no pide
reposición ni insiste en el secuestro, el juez se abstendrá de practicar éste
y dará por terminada la diligencia.

Si se admite la oposición de un tenedor a nombre de un tercero poseedor,


se procederá como dispone el inciso final del parágrafo segundo del
artículo 338.

Si la oposición se admite sólo respecto de alguno de los bienes o de parte


de un bien, el secuestro se llevará a cabo respecto de los demás o de la
parte restante de aquél.

Cuando la diligencia se efectúe en varios días, sólo se atenderán las


oposiciones que se formulen el día en que el juez identifique los bienes
El secuestro de bienes objeto de embargo 197

muebles, o el sector del inmueble e informe de la diligencia a las personas


que en él se encuentren.

El auto que rechace la oposición es apelable y sobre su concesión se


resolverá al terminar la diligencia.

En el evento previsto en el inciso segundo de este parágrafo, si quien


practicó el secuestro es el juez del conocimiento y la oposición se formuló
a nombre propio, dentro de los cinco días siguientes a la diligencia, el
opositor y quien pidió el secuestro podrán solicitar pruebas relacionadas
con la oposición; para su práctica se señalará fecha o la audiencia, según el
caso. Si quien formula la oposición es un tenedor, dicho término empezará
a correr a partir de la notificación al poseedor en la forma indicada en el
inciso tercero del parágrafo 2º del artículo 338.

Si la diligencia se practicó por comisionado y la oposición comprende todos


los bienes objeto de la misma, se remitirá inmediatamente el despacho
al comitente; el término para pedir pruebas comenzará a correr el día
siguiente al de la notificación del auto que ordene agregarlo al expediente.

Practicadas las pruebas o transcurrida la oportunidad señalada para


ello, se resolverá la oposición con base en aquéllas y en las practicadas
durante la diligencia; para que los testimonios presentados como prueba
sumaria puedan apreciarse, deberán ser ratificados. El auto que decida
la oposición será apelable en el efecto devolutivo si fuere desfavorable al
opositor, y en el diferido en el caso contrario.

Si la decisión fuere desfavorable al opositor, se entregarán los bienes al


secuestre, haciendo uso de la fuerza pública si fuere necesario. Cuando
la decisión fuere favorable al opositor, se levantará el secuestro. Quien
resulte vencido en el trámite de la oposición será condenado en costas,
y en perjuicios que se liquidarán como dispone el inciso final del artículo
307.”

CÓDIGO DE COMERCIO

“Artículo 964. El vendedor puede oponerse al embargo de la cosa


vendida bajo reserva del dominio, decretado a instancia de los acreedores
del comprador o de un tercero, presentando el contrato de venta que llene
los requisitos previstos en el artículo 953 de este código.

Artículo 965. Podrá oponerse el comprador al embargo de la cosa,


decretado a instancia de los acreedores del vendedor o de un tercero,
presentando el contrato de que trata el artículo anterior. Pero, en su caso,
al admitir el juez la oposición, decretará el embargo del crédito a favor del
vendedor y prevendrá al comprador sobre la forma como deba efectuar el
pago de las cuotas insolutas.”
198 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

En cuanto a los términos para resolver la oposición al secuestre mucho


se ha hablado sobre la aplicación de las reglas puntuales señaladas en el
Código de Procedimiento Civil, no obstante, no debe olvidar el funcionario
ejecutor que la remisión efectuada por el artículo 839-2 74 del Estatuto
Tributario Nacional en materia de embargo, secuestro y remate aplica en
lo no contemplado en el estatuto tributario, razón por la cual los términos
para resolver la oposición al secuestro deben regirse por lo señalado en
el artículo 839-3 del Estatuto Tributario Nacional, es decir dentro de la
misma diligencia de secuestro o dentro de los cinco (5) días siguientes a la
terminación de la diligencia.

“Artículo 839-3. Oposición al secuestro. En la misma diligencia que


ordena el secuestro se practicarán las pruebas conducentes y se decidirá
la oposición presentada, salvo que existan pruebas que no se puedan
practicar en la misma diligencia, caso en el cual se resolverá dentro de los
cinco (5) días siguientes a la terminación de la diligencia”

74 Artículo 839-2. Embargo, secuestro y remate de bienes. Adicionado por el Artículo 87 de la Ley 6ª de 1992.
En los aspectos compatibles y no contemplados en este estatuto, se observarán en el procedimiento administrativo
de cobro las disposiciones del Código de Procedimiento Civil que regulan el embargo, secuestro y remate de
bienes.
Avalúo de bienes 199

16.1. AVALÚO DE BIENES.


AVALÚO DE BIENES
CAPÍTULO

16
Teniendo en cuenta las disposiciones señaladas en el artículo 839-2 en
donde se indica la obligación de atender el Código de Procedimiento Civil,
en lo no regulado por el Estatuto Tributario y teniendo en cuenta que sobre
el tema de avalúos tiene la norma tributaria nacional, ya que la única
referencia que existe en materia de avalúos es la señalada en el parágrafo
del artículo 83875 del E.T., en donde se señala como regla única que los
avalúos se harán por el valor comercial, situación que nos hace necesario
repasar lo señalado en el artículo 516 del Código de Procedimiento Civil
que señala:

“Artículo 516. Avalúo y pago con productos. Practicados el embargo y


secuestro, y en firme la sentencia que ordena seguir adelante la ejecución,
se procederá al avalúo de los bienes conforme a las reglas siguientes:

El ejecutante deberá presentarlo en el término de diez días siguientes


a la ejecutoria de la sentencia o a la notificación del auto que ordena
cumplir lo resuelto por el superior, o a la fecha en que quede consumado
el secuestro, según el caso. Para tal efecto, podrá contratar directamente
con entidades o profesionales especializados o con un avaluador de la
lista oficial de auxiliares de la justicia.

Si no lo presenta el ejecutante, el demandado tendrá diez días para


hacerlo en la misma forma. Si ninguna de las partes aporta dicho avalúo,
el juez designará el perito avaluador, salvo que se trate de inmuebles o
de vehículos automotores en cuyo caso aplicará las reglas previstas para
éstos. En los casos previstos en este inciso no habrá lugar a objeciones.

75 Artículo 838. Límite de los embargos.(…)


Parágrafo El avalúo de los bienes embargados lo hará la administración teniendo en cuenta el valor comercial de
éstos y lo notificará personalmente o por correo.
Si el deudor no estuviere de acuerdo, podrá solicitar dentro de los diez (10) días siguientes a la notificación, un
nuevo avalúo con intervención de un perito particular designado por la administración, caso en el cual el deudor le
deberá cancelar los honorarios. Contra este avalúo no procede recurso alguno.
200 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Si una parte no presta colaboración para el avalúo de los bienes o impide


su inspección por el perito, se dará aplicación a lo previsto en el artículo
242, sin perjuicio de que el juez ejerza el poder de coerción mediante la
orden que sea necesaria para superar los obstáculos que se presenten.

Tratándose de bienes inmuebles, el valor será el del avalúo catastral del


predio incrementado en un cincuenta por ciento (50%), salvo que quien lo
aporte considere que no es idóneo para establecer su precio real. En este
evento, con el avalúo catastral deberá presentarse un dictamen obtenido
por cualquiera de las formas mencionadas en el inciso segundo.

Cuando se trate de vehículos automotores, el valor será el fijado


oficialmente para calcular el impuesto de rodamiento incrementado en un
cincuenta por ciento (50%), sin perjuicio del derecho otorgado en el inciso
cuarto a quien lo presenta. En tal caso, también podrá acompañarse como
dictamen, el precio que figure en publicación especializada, adjuntando
una copia informal de la página respectiva.

La contradicción del dictamen se sujetará, en lo pertinente, a lo dispuesto


en el artículo 238. Sin embargo en caso de objeción, al escrito deberá
acompañarse un avalúo como fundamento de la misma y no serán
admisibles pruebas diferentes.

Cuando el valor se hubiere acreditado con certificación catastral o de


impuesto de rodamiento, ésta sólo será susceptible de objeción por error
grave. El auto que resuelva la objeción será apelable en el efecto diferido.

En los casos de los numerales 5º a 8º del artículo 682 y de inmuebles, si el


demandante lo pide se prescindirá del avalúo y remate de bienes, con el
fin de que el crédito sea cancelado con los productos de la administración,
una vez consignados por el secuestre en la cuenta de depósitos judiciales.”

Se genera controvérsia respecto de la aplicabilidad de las reglas del Código


de Procedimiento Civil frente a las del Estatuto Tributario respecto del avalúo
de bienes inmuebles y vehículos, ya que si bien en este último documento,
se dice que se realiza el avalúo sobre el avalúo comercial, en la norma del
procedimiento civil, se señala que debe hacerse sobre el valor catastral o
del vehículo incrementado en un cincuenta por ciento (50%), al respecto
la DIAN h considerado de forma doctrinal que en este caso debe darse
aplicación a las reglas del Estatuto Tributario, es decir que debe avaluarse
por el valor comercial, al respecto transcribiremos apartes del concepto
018803 del 8 de marzo de 2001, proferido por la DIAN:

DOCTRINA. “Cuando en un proceso de cobro coactivo, el deudor no


está de acuerdo con el avalúo realizado a los bienes embargados, puede
Avalúo de bienes 201

solicitar dentro de los diez (10) días siguientes a la notificación, que se


realice un nuevo avalúo, con intervención de un perito particular designado
por la Administración y cancelando los honorarios correspondientes.

INTERPRETACION

El artículo 838 del Estatuto Tributario, establece que en el proceso de


cobro coactivo el valor de los bienes embargados no puede exceder del
doble de la deuda más los intereses. Si al realizar el avalúo, los bienes
excedan dicha suma, el embargo debe #000080ucirse hasta tal valor,
oficiosamente o a solicitud del interesado.

La Administración realizará el avalúo de los bienes embargados, teniendo


en cuenta su valor comercial y lo notificará al contribuyente en forma
personal o por correo.

La misma norma dispone que si el deudor no está de acuerdo con el avalúo,


puede solicitar dentro de los diez (10) días siguientes a la notificación, un
nuevo avalúo con intervención de un perito particular designado por la
Administración, evento en el cual el deudor debe cancelar los honorarios.
Contra este último avalúo no procede ningún recurso.

Por otra parte el artículo 839-2 del Estatuto Tributario prevé que las normas
del Código de Procedimiento Civil que regulan el embargo, secuestro
y remate de los bienes son aplicables al procedimiento administrativo
coactivo, en los aspectos no contemplados en el Estatuto.

Así las cosas, y considerando que tanto sobre el avalúo de los bienes
embargados, como sobre la posibilidad de estar en desacuerdo con el
mismo existe norma expresa dentro del ordenamiento tributario, se
concluye que siempre que el deudor esté en desacuerdo con el avalúo,
debe darse aplicación al artículo 838 del Estatuto Tributario y no a las
normas del Código de Procedimiento Civil, que se refieren a dicho tema.”

De la misma forma es necesario tener presente que algunos bienes como


el dinero, no precisan de ser avaluados, puesto que es precisamente en
dinero que se tasan los bienes a avaluar, medida similar puede darse
con aquellos títulos valores de renta fija, no ocurriendo lo mismo con los
títulos de renta variable cuyo valor base de remate es el valor de la última
cotización que haya habido en la bolsa, sin embargo, como quiera que el
proceso ha tenido trámite en el tiempo y sabido es que hay acciones que
sufren constantes modificaciones se recomienda al funcionario ejecutor
actualizar el monto nuevamente antes de proceder a liquidar los créditos
para que tenga un grado de certeza de cuanto es el valor real embargado.
(Artículo 233 C.P.C.).
202 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

16.2. LA NOTIFICACION DEL AVALUO

El artículo 838 del Estatuto tributario Nacional en su parágrafo único señala


que el avalúo debe ser notificado al ejecutado personalmente o por correo,
situación ya analizada de forma extensa en el presente documento en los
puntos 10.1 a 10.7

16.3. OBJECION DEL AVALUO

El inciso 2o. del parágrafo único del Artículo 838 del E.T, señala que si
el deudor no estuviere de acuerdo, podrá solicitar dentro de los diez (10)
días siguientes a la notificación, un nuevo avalúo con intervención de un
perito particular designado por la administración, caso en el cual el deudor
le deberá cancelar los honorarios.

Presentado el escrito de objeciones al avalúo inmediatamente se analizará


su objetividad y se considerará ordenar el nombramiento del perito
seleccionado de la lista de auxiliares del lugar y se decretará la práctica
de la prueba habida cuenta que a la Administración le interesa sólo hasta
el quantum de la obligación principal y sus intereses. Este dictamen final
no tiene recurso alguno, conforme lo señala el mismo artículo 838 del E.T..
Liquidación del Crédito 203

LIQUIDACIÓN DEL CRÉDITO


CAPÍTULO

17
El artículo 521 del Código de Procedimiento Civil, modificado por el artículo
32 de la Ley 1395 del 12 de julio de 2010 “Por la cual se adoptan medidas
de descongestión judicial.” señala como se efectúa la liquidación del crédito
y de las costas.

“Artículo 521. Liquidación del crédito y de las costas. EPara la


liquidación del crédito y las costas, se observarán las siguientes reglas:

1. Ejecutoriado el auto de que trata el inciso 2º del artículo 507, o notificada


la sentencia que resuelva sobre las excepciones siempre que no sea
totalmente favorable al ejecutado, cualquiera de las partes podrá
presentar la liquidación del crédito con especificación del capital y de
los intereses causados hasta la fecha de su presentación, y si fuere
el caso de la conversión a moneda nacional de aquel y de estos, de
acuerdo con lo dispuesto en el mandamiento de pago, adjuntando los
documentos que la sustenten si fueren necesarios.

2. De la liquidación presentada se dará traslado a la otra parte, en la


forma dispuesta en el artículo 108, por el término de tres días, dentro
del cual podrá formular objeciones relativas al estado de cuenta, para
cuyo trámite necesariamente deberá acompañar, so pena de rechazo,
una liquidación alternativa en la que se precisen los errores puntuales
que le atribuye a la liquidación objetada.

3. Vencido el traslado, el juez decidirá si aprueba o modifica la liquidación


por auto que solo será apelable cuando resuelva una objeción o altere
de oficio la cuenta respectiva.

El recurso que se tramitará en el efecto diferido, no impedirá efectuar el


remate de bienes, ni la entrega de dineros al ejecutante en la parte que
no es objeto de apelación.
204 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

4. De la misma manera se procederá cuando se trate de actualizar la


liquidación, para lo cual se tomará como base la liquidación que esté
en firme.

Parágrafo transitorio. El Consejo Superior de la Judicatura implementará


los mecanismos necesarios para apoyar a los jueces en lo relacionado
con la liquidación de créditos.”

En la liquidación de créditos se debe tomar la totalidad de los créditos o


valores consignados en el mandamiento de pago, más sus intereses y
sanciones así como los gastos que se hayan generado dentro del desarrollo
del proceso tal como los honorarios pagados a los secuestres, peritos.

La liquidación, se realizará a través de un auto, contra el cual como lo señala


el artículo 521 del Código de Procedimiento Civil, no procede recurso alguno,
aunque el ejecutado puede presentar objeciones se llegar a no encontrarse
de acuerdo con la liquidación efectuada.

Las objeciones que se realicen a la liquidación de créditos, no suspenden


el proceso, ni el remate, o la imputación de dineros retenidos y consignados
en depósitos judiciales.

Debe tenerse presente, que siendo la tasa de interés tributaria diaria, resulta
lógico entender que entre la fecha de liquidación del crédito y la fecha del
pago final del mismo pueden transcurrir varios días, debe el funcionario
ejecutor realizar una nueva liquidación al momento de efectuar la aplicación
de los dineros obtenidos en la realización del remate, o de la aplicación
de los títulos ejecutivos retenidos en los depósitos judiciales, con el fin de
garantizar el recaudo real de los recursos públicos en cobro.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 205

EL REMATE DENTRO DEL


PROCESO DE COBRO
COACTIVO
CAPÍTULO

18
Es la actuación con la cual se pone fin al proceso administrativo de cobro,
y a través de la cual en ejecutor en virtud de las facultades busca el pago
forzado de sus deudas fiscales de los contribuyentes o deudores morosos
mediante la venta pública de algunos de sus bienes patrimoniales.

18.1. MOMENTO EN QUE SE ORDENA EL REMATE

El artículo 840 del Estatuto Tributario Nacional, señala que en firme el


avalúo la administración efectuará el remate de los bienes embargados,
recordemos la norma:

“Artículo 840. Remate de bienes. En firme el avalúo, la Administración


efectuará el remate de los bienes directamente o a través de entidades de
derecho público o privado y adjudicará los bienes a favor de la Nación en
caso de declararse desierto el remate después de la tercera licitación, en
los términos que establezca el reglamento.

Los bienes adjudicados a favor de la Nación y aquellos recibidos en dación


en pago por deudas tributarias, se podrán entregar para su administración
o venta a la Central de Inversiones S.A. o a cualquier entidad que
establezca el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, en la forma y
términos que establezca el reglamento.”

Por su parte el artículo 523 del Código de Procedimiento Civil, modificado


por el artículo 33 de la Ley 1395 del 12 de julio de 2010 “Por la cual se
adoptan medidas de descongestión judicial.” señala:

“Artículo 523. Señalamiento de fecha para remate. En firme el auto


de que trata el inciso 2º del artículo 507 o la sentencia contemplada en
el artículo 510, el ejecutante podrá pedir que se señale fecha para el
remate de los bienes que lo permitan, siempre que se hayan embargado,
secuestrado y avaluado, aun cuando no esté en firme la liquidación del
crédito. En firme esta, cualquiera de las partes podrá pedir el remate de
dichos bienes.
206 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Cuando estuvieren sin resolver peticiones sobre levantamiento de


embargos o secuestros, o recursos contra autos que hayan decidido sobre
desembargos o declarado que un bien es inembargable o decretado la
reducción del embargo, no se fijará fecha para el remate de los bienes
comprendidos en ellos, sino una vez sean resueltos.

Tampoco se señalará dicha fecha si no se hubiere citado a los terceros


acreedores hipotecarios o prendarios.

En el auto que ordene el remate el juez realizará el control de legalidad


previsto en el artículo 25 de la Ley 1285 de 2009 y fijará la base de la
licitación, que será el setenta por ciento (70%) del avalúo de los bienes.

Si quedare desierta la licitación se tendrá en cuenta lo dispuesto en el


artículo 533.

Ejecutoriada la providencia que señale fecha para el remate, no procederán


recusaciones al juez o al secretario; este devolverá el escrito sin necesidad
de auto que lo ordene.”

Es decir que debemos entender que solamente puede efectuarse el remate


de bienes una vez se han agotado las instancias de discusión dentro
del procedimiento administrativo de cobro coactivo, es decir se ha dado
cumplimiento y resuelto los trámites de las actuaciones que en ejercicio del
derecho de defensa y del debido proceso ha impetrado el contribuyente,
excepciones al mandamiento de pago, recurso de reposición contra el fallo
que resuelve las excepciones, etc.

Esta misma restricción debe aplicarse a los recursos capturados mediante


depósitos judiciales, ya que conforme con lo establecido en el inciso 4º
del artículo 837-1 del Estatuto Tributario Nacional, la restricción de
aplicabilidad de títulos debe observar que “No obstante no existir límite
de inembargabilidad, estos recursos no podrán utilizarse por la entidad
ejecutora hasta tanto quede plenamente demostrada la acreencia a su
favor, con fallo judicial debidamente ejecutoriado o por vencimiento de los
términos legales de que dispone el ejecutado para ejercer las acciones
judiciales procedentes.” (Se subraya).

Debe entenderse que este agotamiento de la etapa de discusión, se da de


la misma forma cuando se vence el término para interponer las excepciones
y el ejecutado no hace uso de ellas.

Si transcurrido el término sin que el deudor por sí o por interpuesta persona


haya hecho uso de las normas antes citadas, el funcionario puede ordenar
la ejecución y el remate de los bienes embargados y secuestrados.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 207

18.2. CASOS EN QUE NO SE HACE EL REMATE

De la lectura del inciso final del Artículo 516 del C.P.C., se establece que
en los casos de los numerales 5º a 8º del artículo 682 y de inmuebles, si
el demandante lo pide se prescindirá del avalúo y remate de bienes, con el
fin de que el crédito sea cancelado con los productos de la administración,
una vez consignados por el secuestre en la cuenta de depósitos judiciales,
es decir que si se trata de almacenes, industrias, e inmuebles, etc, el
funcionario ejecutor podrá prescindir del avalúo y remate de bienes una vez
secuestrados y buscar que el crédito fiscal sea cancelado con el producto
de la administración, una vez consignados por el secuestre en la cuenta de
depósitos judiciales.

De otro lado y cuando lo embargado fuere dinero, señala el artículo 522


del Código de Procedimiento Civil, que una vez ejecutoriado el auto que
apruebe cada liquidación del crédito o las costas, se ordenará de oficio o
a solicitud de parte su entrega al acreedor hasta la concurrencia del valor
liquidado.

Así mismo nos indica este artículo 522, que si lo embargado fuere sueldo,
renta o pensión periódica, se ordenará entregar al acreedor lo retenido, y
que en lo sucesivo se le entreguen los dineros que se retengan, hasta cubrir
la totalidad de la obligación.

Por su parte el artículo 524 del C.P.C. señala el procedimiento establecido


cuando se trate de embargos de interés social.

“Artículo 524. Remate de interés social. Si lo embargado es el interés


social en sociedad colectiva, de responsabilidad limitada, en comandita
simple o en otra sociedad de personas, el juez antes de fijar fecha para el
remate, comunicará al representante de ella el avalúo de dicho interés a
fin de que manifieste dentro de los diez días siguientes, si los consocios
desean adquirirlo por dicho precio. En caso de que dentro de este término
no se haga la anterior manifestación, se fijará fecha para el remate; si
los consocios desearen hacer uso de tal derecho, el representante
consignará a orden del juzgado el veinte por ciento del precio al hacer la
manifestación, indicando el nombre de los socios adquirentes, y el saldo
dentro de los treinta días siguientes. Sin embargo, para el pago de éste
las partes del proceso podrán de común acuerdo conceder plazo hasta de
seis meses.

Si el saldo no se consigna oportunamente, se perderá el valor consignado


a título de multa y se procederá al remate.
208 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Pagado el saldo del precio, el juez adjudicará el derecho al adquirente, por


auto que se inscribirá en la forma indicada por la ley.

El rematante del interés social adquirirá los derechos del ejecutado en la


sociedad. En este caso, dentro del mes siguiente a la fecha del registro del
remate, los demás consocios podrán decretar la disolución, con sujeción a
los requisitos señalados en la ley o en los estatutos, si no desean continuar
la sociedad con el rematante.

Cuando se trate de títulos inscritos en bolsa y se ordena la venta por


conducto de las mismas, en la forma y términos previstos en el Artículo 534
del C.P.C.

“Artículo 534. Venta de títulos inscritos en bolsa. En firme la liquidación


del crédito, a petición de cualquiera de las partes podrá el juez ordenar la
venta de títulos inscritos en las bolsas de valores debidamente autorizados,
por conducto de las mismas; pero si se trata de títulos nominativos, para
autorizar la venta se requiere su entrega al juzgado.

Transcurridos quince días sin que hubiere sido posible la venta, los bienes
se podrán rematar conforme a las reglas generales, a menos que las
partes insistan en que su enajenación se efectúe en la forma prevista en
el inciso anterior, dentro del término que indiquen.”

Tampoco se efectúa el remate, si:

- El deudor haya pagado la totalidad de la deuda o haber constituido


depósito para impedir el remate y/o levantar las medidas cautelares.

- Aún el proceso se encuentra en etapas de discusión.

- No se ha agotado de forma integral el procedimiento señalado en el


Estatuto Tributario Nacional o el Código de Procedimiento Civil.

- Los bienes a rematar se trata de bienes inembargables.

- Hasta cuando no haya pronunciamiento sobre la revocatoria directa.

- Hasta cuando no haya pronunciamiento sobre la demanda de nulidad


y restablecimiento del derecho, presentado contra el fallo del recurso
de reposición contra la resolución que resuelve de forma negativa las
excepciones contra el mandamiento de pago.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 209

18.3. REGLAS GENERALES DEL REMATE.

La primera regla del remate es que para llegar a estas instancias, debe el
funcionario ejecutor, cerciorarse de haber cumplido y tramitado cada una de
las diferentes etapas procesales, respetando el debido proceso y el derecho
de defensa.

Podemos afirmar como segunda regla que deben existir bienes embargados
y secuestrados que sean susceptibles de ser rematados.

Así mismo debe observar el funcionario ejecutor la existencia de solicitud


de remanentes por parte de otras autoridades, sean estas tributarias o no
tributarias.

Debe igualmente, el funcionario ejecutor cerciorarse antes de decretar el auto


que ordena el remate, que no existen decisiones sobre inembargabilidad
pendientes, la concesión de facilidades de pago vigentes, fallos de recursos
de revocatoria directa pendientes de ser resueltos, así como procesos ante
la jurisdicción Contencioso Administrativa, pendiente de fallo.

“DOCTRINA Que consecuencias acarrea que dentro del proceso


Administrativo de Cobro, se rematen bienes que resultan ser de un tercero
ajeno al proceso?

De conformidad con lo establecido en los artículos 823 y siguientes del


Estatuto Tributario, el Proceso Administrativo de Cobro debe seguirse por
el funcionario competente contra el deudor de los impuestos administrados
por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales.

Las Medidas cautelares tales como el embargo y secuestro de bienes


tienen como finalidad asegurar la efectiva satisfacción de los créditos
fiscales; para ello, los bienes que sean objeto de las mismas deben ser
aquellos respecto de los cuales se haya establecido que son de propiedad
del deudor tributario tal y como lo dispone el artículo 837 del mencionado
Estatuto. El hecho de embargar bienes de terceros supone, de una parte
que la finalidad del proceso coactivo no se cumple, y sobre todo la violación
de los derechos de terceros ajenos al proceso, con las correspondientes
sanciones que para el juzgador, aquello conllevaría debe olvidarse que el
derecho de propiedad tiene amparo Constitucional, así el artículo 58 de la
Constitución Política garantiza la propiedad privada y los demás derechos
adquiridos con justo título.

Embargado un bien, que luego se comprueba que es de un tercero no


deudor tributario, debe procederse a su desembargo, por disposición del
210 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

artículo 839-1, numeral 10 inciso segundo, tal como se consideró mediante


el Concepto No. 34436 de Noviembre 5 de 1999, en el que frente a un
caso similar señaló el Despacho:

“De conformidad con el artículo 756 del Código Civil la tradición del dominio
de los bienes raíces se efectúa por la inscripción del título en la oficina de
registro de instrumentos públicos.

Se presume que quien aparezca como titular de un bien inmueble, sujeto a


inscripción o registro, lo aprovecha económicamente en su beneficio, dice
el artículo 264 del Estatuto Tributario.

De las normas citadas se concluye que es titular de un inmueble quien


aparezca inscrito en la oficina encargada para el efecto.

En consecuencia las medidas cautelares se deben mantener aI contrario,


se deben levantar si el bien no aparece inscrito a nombre del contribuyente.
“ Resaltado fuera de texto.

En caso de embargarse un bien inmueble que se certificó erróneamente


como de propiedad del contribuyente -deudor y que luego es reportado por
la misma autoridad como de propiedad de un tercero para la época en que
se dispuso y consumó la medida, será menester poner en conocimiento
de las autoridades competentes la posible irregularidad que pudo haberse
presentado en la Oficina que certifica el registro de la propiedad inmobiliaria
ante los perjuicios que ello ocasione tanto a la actuación coactiva como al
particular ajeno a ella.

Es indudable que si el bien es de un tercero y además con sus frutos


se han satisfecho obligaciones tributarias del deudor, se ha presentado
por parte del tercero un pago de lo no debido que podrá ser objeto de
devolución en los términos del decreto 1000 de 1997 con sujeción a las
demás disposiciones tributarias sobre ese procedimiento, para lo cual se
anexa el Concepto No.4534 de agosto 18 de 1999 que se refiere al tramite
que debe surtir en tales casos para tal efecto. Es importante tener en
cuenta que el artículo 863 del estatuto Tributario señala los eventos en los
cuales se causan intereses a favor del contribuyente.

No obstante, la cancelación de esa medida cautelar, el proceso coactivo


debe continuar en contra del contribuyente que aun no ha satisfecho sus
obligaciones fiscales.

Por otra parte, si como etapa culminante de las medidas cautelares a


que fuera sometido el bien del tercero se ha efectuado el remate, deberá
procederse a revocar de oficio o a solicitud de parte, todas las actuaciones
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 211

relacionadas con ellas y sus consecuencias, para eliminar el acto injusto


de la vida jurídica y reparar la injusticia advertida, como solución de
equidad, actuación en la que además, se ordenará reversar la aplicación
de los pagos que con los dineros producto de la subasta fueron imputados
a la cuenta del deudor.

Al efecto, señalan los numerales 1 y 3 del artículo 69 del Código Contencioso


Administrativo, que los actos administrativos deberán ser revocados por
los mismos funcionarios que los hayan expedido o por sus inmediatos
superiores, cuando sea manifiesta su oposición a la Constitución Política
o a la ley o cuando con ellos se cause agravio injustificado a una persona.

La revocación significa el retiro de un acto válido, acto que ingresó al


mundo jurídico con la completa aptitud para producir los efectos queridos
por el agente y garantizados por la norma que se justifica en la invocación
una causa sobrevenida y objetivamente cierta que legalmente determina
su eliminación.

La revocación abarca entonces, tanto los actos de preparación como


los definitivos de la venta forzada, o sea, los de aprobación del remate,
los de adjudicación del bien en la subasta y conllevaría el consecuente
levantamiento expreso de las medidas cautelares de embargo y secuestro
que fueron dispuestas, así como la orden de reversar los injustificados
pagos registrados en la cuenta corriente del deudor.

Ahora bien, sabido es que la revocación de un acto administrativo particular,


requiere en principio del consentimiento del titular del derecho en él
reconocido como garantía o protección de los derechos individuales y de la
firmeza de las situaciones jurídicas de carácter particular y concreto, para
que no puedan ser revocados ni los unos ni las otras, en forma unilateral
por la Administración. Sin embargo y de acuerdo con lo que al respecto
jurisprudencialmente se ha sostenido, como es el caso de la sentencia
del 6 de mayo de 1.992, sección segunda del Consejo de Estado, no
debe olvidarse que los derechos individuales según nuestra Constitución,
merecen protección en tanto hubieren sido adquiridos conforme con las
leyes, es decir, con justo título; y que el interés público prima sobre el
interés particular. Dicho en otros términos, sólo los derechos adquiridos
con arreglo a las leyes merecen protección.

De manera pues, que si la expedición de un acto administrativo que


reconoce un derecho individual se basó en circunstancias no cobijadas
con la legalidad exigida, exentas de error de hecho o de derecho por
parte de la Administración y además con él se causa agravio injustificado
a otros, el derecho que este confiere no es digno de protección y en
ese caso, opera el mandato contenido en el artículo 69 del Código
212 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Contencioso Administrativo y el acto puede revocarse directamente, sin el


consentimiento expreso y escrito de su beneficiario.

Como fundamento de ésta interpretación, sostuvo la citada Corporación


que: “debe tenerse presente que los actos jurídicos que realiza la
administración deben guardar una doble correspondencia: con la ley que
rige dichos actos, y con el interés público que con ellos va a satisfacerse.
La conformidad del acto con la ley constituye el concepto de legitimidad.
La conformidad del acto con el interés público hace nacer el concepto de
oportunidad. Ahora bien, mientras que el acto legítimo en su origen no
puede convertirse más tarde en ilegítimo, puesto que una ley posterior no
puede cambiar los elementos legales de un acto que cumplió con todos
los requeridos por la ley que rigió su formación, el acto que en su origen
fue oportuno por coincidir con el interés público existente en ese momento,
sí puede posteriormente tomarse en inoportuno, porque el interés público
cambia con frecuencia, de tal manera que, cuando el cambio ocurre, el
acto original no sirve ya para satisfacerlo, y aun puede llegar a contrariarlo”.

Doctrinariamente se considera, que la administración pública, en virtud


de lo dispuesto por el artículo 69 del Código Contencioso Administrativo,
tiene la potestad suficiente para tutelarse a sí misma, habida consideración
que su actividad siempre ha de estar sujeta al derecho, y por ende el
autocontrol de la juridicidad en sus propias manos no es sino la expresión
correlativa de este mismo principio.

En cuanto a la oportunidad de la revocación, establece el artículo 71


del mismo ordenamiento, que podrá cumplirse en cualquier tiempo,
inclusive en relación con actos en firme o aun cuando se haya acudido
a los tribunales contencioso administrativos, siempre que en este último
caso no se haya dictado auto admisorio de la demanda. Pero en materia
tributaria, como disposición aplicable por su especialidad, el artículo 737
del Estatuto Tributario, dispone que el término para ejercitarla, es de dos
(2) años contados a partir de la ejecutoria del acto administrativo.

Igualmente, el artículo 738 del citado Estatuto, radica la competencia para


fallar las solicitudes de revocatoria directa en el respectivo Administrador
de Impuestos Nacionales o su delegado, aspecto compatible con la entidad
de la determinación a adoptar que involucra mandatos a distintas áreas
que escapan a la órbita de actuación del funcionario que emitió el acto. y
el artículo 738-1 establece como término para resolver las solicitudes de
revocatoria directa un año contado a partir de su petición en debida forma.
(Concepto DIAN 024785 del 25 de Abril de 2002)
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 213

18.4. AUTO QUE ORDENA EL REMATE

El funcionario ejecutor, una vez corrobore el cumplimiento del proceso en


su integridad, y haya descartado cualquier actuación pendiente de fallo que
pudiese interferir en el proceso de remate, procederá a decretarlo, conforme
con las reglas señaladas en el artículo 523 del Código de Procedimiento
Civil, dicho acto deberá tener como mínimo:

- La base de licitación, que será el setenta (70%) por ciento del avalúo de
los bienes.

- La individualización e identificación de los bienes objeto del remate,


señalando con claridad, tipo, especie, clase, calidad, cantidad si se
tratan de bienes muebles, o dirección, matrícula inmobiliaria, cédula
catastral, linderos, área construida y de terreno, cultivos o mejoras si se
trata de bienes inmuebles

- La advertencia a los postores de consignar previamente el cuarenta por


ciento (40%) del total del avalúo para obtener la calidad de postor.

- Señalar día, fecha, hora así como el lugar exacto (dirección) en donde
se realizará la diligencia del remate.

- La orden de publicación mediante cuñas radiales, la fijación de avisos


de remate en lugares visibles de la oficina que ejecuta y avisos en un
periódico de circulación amplia circulación regional

18.5. REMATE POR COMISIONADO Y EN MARTILLOS

18.5.1. REMATE POR COMISIONADO.


Los artículos 528 y 568 del Código de Procedimiento Civil, señalan:

“Artículo 528. Remate por comisionado. Para el remate podrá


comisionarse al juez del lugar donde estén situados los bienes, si lo
pide cualquiera de las partes; en tal caso, el comisionado procederá a
efectuarlo previo el cumplimiento de las formalidades legales.

El comisionado está facultado para recibir los títulos de consignación para


hacer postura y el saldo del precio del remate, los cuales deberán hacerse
a la orden del comitente y enviarse a éste por el comisionado junto con el
despacho comisorio. Si el rematante no consigna oportunamente el saldo,
así lo hará constar el comisionado a continuación del acta de la diligencia,
para que el comitente resuelva lo que fuera pertinente.
214 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Parágrafo 1º. A petición de quien tenga derecho a solicitar el remate de


los bienes, se podrá comisionar a las notarías, cámaras de comercio o
martillos legalmente autorizados.

Las tarifas, expensas y gastos que se causen por el remate ante las
mencionadas entidades, serán sufragadas por quien solicitó el remate,
no serán reembolsables y tampoco tenidas en cuenta para efectos de la
liquidación de las costas.

Parágrafo 2º. La Superintendencia de Notariado y Registro fijará las


tarifas de los derechos notariales que se cobrarán por la realización
de las diligencias de remate. Las tarifas de las cámaras de comercio y
martillos serán fijadas por el Gobierno Nacional. Para estos efectos, las
entidades dispondrán de un término de tres (3) meses contados a partir de
la promulgación de la presente ley.

(…)

Artículo 568. Comisiones. Cuando haya lugar a comisiones, los


funcionarios investidos de jurisdicción coactiva deberán conferirlas de
preferencia a otro empleado de la misma clase, de igual o inferior categoría,
sin perjuicio de que puedan comisionar a los jueces municipales.

Conforme con lo señalado en las disposiciones transcritas, es viable


efectuar el remate por comisionado, es decir confiriendo comisión misión a
funcionario de de la misma clase, de igual o inferior categoría, sin perjuicio
de que puedan comisionar a los jueces municipales, cuando el bien o bienes
a rematar, e encuentre ubicados en una jurisdicción municipal diferente a
aquella en donde se ubica el funcionario ejecutor

Sobre el punto la DIAN, en el documento de cobro coactivo que elaboró


para sus funcionarios, consideró:

“Cuando el funcionario ejecutor decida comisionar para efectuar el remate,


en el mismo auto que lo ordena, indicará con toda claridad, el objeto de la
comisión, teniendo el cuidado de no determinar o establecer un término
dentro del cual debe cumplirse; ordena además, librar el despacho (Artículo
111 C.P.C.) con el cual se acompañará el auto por el cual se confirió la
comisión, anexando las demás piezas que considere necesarias, pero
nunca se enviará el expediente. Así mismo, el funcionario comisionado
deberá tener competencia en el lugar donde se encuentren radicados
los bienes, en caso contrario debe devolver el comisorio al funcionario
remitente (Artículo 32 C.P.C.).
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 215

Si el comisionado efectivamente tiene competencia adelantará las


siguientes diligencias:

- Recibido el despacho, dicta el auto fijando día y hora para llevar a cabo
la diligencia de remate.

- El comisionado tendrá las mismas facultades, obligaciones y derechos


que tiene el comitente para efectos de hacer el remate, entre otras la de
recibir títulos de consignación a la orden del despacho que comisionó
para hacer postura y por el saldo del precio del remate. Debe tenerse
en cuenta que si éste no se deposita dentro de los tres (3) días hábiles
siguientes al de la diligencia, así lo hará constar en el acta de la
diligencia, para que el comitente resuelva si otorga un plazo o imprueba
el remate. El rematante puede además consignar el saldo directamente
a favor de la Secretaría de Hacienda Municipal, lo cual, origina que al
comisionado no le es dable pronunciarse aprobando o improbando el
remate.

Diligenciado en debida forma el despacho comisionado, lo devuelve al


ejecutor comitente, sin que le sea permitido al comisionado tomar medida
alguna posterior y diferente a las que se facultó (Artículo 33 C.P.C.), so
pena de incurrir en nulidades (Artículo 34 ibidem).

18.5.2. REMATE EN MARTILLOS


El Decreto 2651 de 1991, señala en su artículo 50:

“Artículo 50. Remate en martillos. Cuando en el curso de un proceso


judicial de cualquier naturaleza deba efectuarse un remate, quien pida
fijación de fecha para remate, podrá solicitar que la mera diligencia de
remate se efectúe por conducto de un martillo legalmente autorizado para
operar y el juez así lo dispondrá indicando quién deberá hacer la subasta.

Transcurridos dos meses sin que hubiere sido posible la venta, el bien se
podrá rematar conforme a las reglas generales, a menos que las partes,
de consuno, insistan en que su enajenación se efectúe en la forma prevista
en el inciso anterior, dentro del término que indiquen.

Parágrafo. El gobierno reglamentará el presente artículo.

NOTA: El artículo 50 del Decreto 2651 de 1991 se adoptó como legislación


permanente a través del artículo 162 de la Ley 446 de 1998.

Es así que es viable, el funcionario ejecutor haciendo uso de las reglas


existentes en el procedimiento Civil Colombiano, realice el remate por
216 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

martillo, no obstante, este esquema maneja regulaciones especiales que


podrían complicar el correcto proceder del proceso y entorpecer el desarrollo
del mismo, por lo cual no se recomienda su implementación.

18.6. AVISO DE REMATE

El artículo 525 del Código de procedimiento Civil, señala que el remate debe
darse a conocer al `público mediante aviso y publicaciones, al respecto la
norma citada señala:

“Artículo 525. Aviso y publicaciones. El remate se anunciará al público


por aviso que expresará:

1. La fecha y hora en que ha de principiar la licitación.

2. Los bienes materia del remate con indicación de su clase, especie y


cantidad, si son muebles; si son inmuebles la matrícula de su registro
si existiere, el lugar de ubicación, nomenclatura o nombre y a falta del
último requisito, sus linderos.

3. El avalúo correspondiente a cada bien o grupo de bienes y la base de


la licitación.

4. El porcentaje que deba consignarse para hacer postura.

El aviso se publicará por una vez, con antelación no inferior a diez días a
la fecha señalada para el remate, en uno de los periódicos de más amplia
circulación en el lugar y en una radiodifusora local si la hubiere; una
copia informal de la página del diario y la constancia del administrador o
funcionario de la emisora sobre su transmisión se agregarán al expediente
antes de darse inicio a la subasta. Con la copia o la constancia de la
publicación del aviso, deberá allegarse un certificado de tradición y libertad
del inmueble actualizado, expedido dentro de los cinco (5) días anteriores
a la fecha prevista para la diligencia de remate.

Cuando existieren bienes situados fuera del territorio del circuito a que
corresponda el juzgado donde se adelanta el proceso, y en el lugar donde
estén ubicados no circule un medio de comunicación impreso, ni exista
una radiodifusora local, la publicación se hará por cualquier otro medio, a
juicio del juez.

En ningún caso podrá prescindirse de las publicaciones exigidas en este


artículo.”
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 217

Durante el proceso de remate, se aprecia que debe el ejecutor cumplir con


dos (2) clases de avisos como mínimo, ya que no puede según indica el
último inciso del artículo 525, prescindirse de realizar la notificación en los
términos señalados, estas notificaciones por aviso básicamente son:

- La publicación radial a través de una radiodifusora local

- La publicación del aviso en un periódico de amplia circulación a nivel


local o regional.

La omisión de estas formas de notificación origina nulidad procesal, lo cual


invalida el remate.

Estas dos formas de notificar el remate en principio son obligatorias,


sin embargo, puede darse el escenario, en el cual en la jurisdicción
municipal, no existan medios radiales o periódicos impresos, por lo cual
debe el funcionario ejecutor hacer uso de otros medios de notificación, se
recomienda la publicación de avisos y carteles en lugares visibles, en el
despacho del ejecutor, la alcaldía, la notaría, los juzgados y en cualquier
otra plaza pública que permita a la ciudadanía conocer de la actuación que
se pretende adelantar

El aviso de remate debe contener la siguiente información:

- Señalar que se trata de un remate que surge de un proceso de cobro


coactivo que adelanta la entidad pública “X”, contra el ejecutado “y”

- Fecha y hora en que ha de principiar la licitación.

- Los bienes materia del remate con indicación de su clase, especie y


cantidad, si son muebles; si son inmuebles la matrícula de su registro
si existiere, el lugar de ubicación, nomenclatura o nombre y a falta del
último requisito, sus linderos.

- El avalúo correspondiente a cada bien o grupo de bienes y la base de la


licitación.

- El porcentaje que deba consignarse para hacer postura (40% del valor
total e avalúo).

DOCTINA, Aviso de remate

Frente al aviso y publicaciones del remate el artículo 525 del Código de


Procedimiento Civil, modificado por el Decreto 2282 de 1989, artículo 1°,
numeral 283, establece en su parte pertinente:
218 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

“El remate se anunciará al público por aviso que expresará:

1. La fecha y hora en que ha de principiar la licitación.

2. Los bienes materia del remate con indicación de su clase, especie y


cantidad, si son muebles; si son inmuebles la matrícula de su registro
si existiere, el lugar de ubicación, nomenclatura o nombre ya falta del
último requisito, sus linderos.

3. El avalúo correspondiente a cada bien o grupo de bienes y la base de


la licitación.

4. El porcentaje que deba consignarse para hacer postura.

El aviso se publicará por una vez, con antelación no inferior a cinco días a
la fecha señalada para el remate, en un periódico de amplia circulación en
el lugar y en una radiodifusora local si la hubiere; la página del diario y la
constancia auténtica del administrador de la emisora sobre su transmisión
se agregarán al expediente antes del día señalado para el remate...”.

Para este despacho el artículo 525 del Código de Procedimiento Civil


debe aplicarse en los términos allí previstos, en consecuencia es claro
que el aviso que se debe entregar a la emisora para su radiodifusión debe
contener los aspectos señalados en los numerales 1° al 4° del artículo
citado.

Problema Nº 2

TEMA: PROCEDIMIENTO TRIBUTARIO.

DESCRIPTORES: REMATE DE BIENES EN PROCESOS DE COBRO


COACTIVO.

¿Existe alguna disposición que ordene que el depósito para hacer la


postura en la diligencia de remate, sea diferente al valor señalado en el
artículo 526 del Código de Procedimiento Civil?

Tesis jurídica

Para efectos del proceso administrativo de cobro de deudas fiscales el


monto de la cuantía de la consignación que se exige para hacer postura
en el remate debe ser por lo menos del veinte por ciento (20%) del
avalúo de los bienes en la forma señalada en el artículo 838 del estatuto
tributario, de conformidad con lo previsto en el artículo 526 del Código de
Procedimiento Civil.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 219

Interpretación jurídica

Los artículos 823 y siguientes del estatuto tributario regulan lo relativo


al proceso administrativo de cobro coactivo de las deudas fiscales.
Específicamente, frente a las medidas cautelares de embargo, secuestro
y remate de bienes, el artículo 839-2 ibídem establece:

“En los aspectos compatibles y no contemplados en este estatuto, se


observarán en el procedimiento administrativo de cobro las disposiciones
del Código de Procedimiento Civil que regulan el embargo, secuestro y
remate de bienes”.

Conforme con el artículo señalado, el estatuto tributario consagra un


procedimiento administrativo coactivo como medio coercitivo especial para
satisfacer el crédito fiscal con características propias y autónomas, pero
por expresa disposición de la misma Ley los vacíos existentes se suplen
con las disposiciones del Código de Procedimiento Civil que regulan el
embargo, secuestro y remate de bienes, siempre que tales aspectos sean
compatibles con lo previsto en el estatuto tributario. En consecuencia,
cuando el artículo 839-2 hace remisión a las normas del Código de
Procedimiento Civil en materia de remate de bienes, toda la actuación
se debe tomar conforme lo regula dicho ordenamiento, salvo aquellos
aspectos contemplados en el artículo 840 del estatuto tributario. En tal
sentido, el artículo 526 del Código de Procedimiento Civil, modificado por
el Decreto 2282 de 1989, artículo 1°, numeral 284. establece:

“Depósito para hacer postura. Todo el que pretenda hacer postura en la


subasta deberá consignar previamente en dinero, a órdenes del juzgado,
el veinte por ciento del avalúo del respectivo bien. Sin embargo, quien sea
único ejecutante o acreedor ejecutante del mejor derecho, podrá rematar
por cuenta de su crédito los bienes materia de la subasta, sin necesidad
de consignar el porcentaje, siempre que aquél equivalga por lo menos al
veinte por ciento del avalúo; en caso contrario consignará la diferencia”.
(negrilla fuera de texto)

Para este despacho la norma citada es clara y explícita al señalar que el


monto de la cuantía de la consignación que se exige para hacer postura
debe ser por lo menos del veinte por ciento (20%) del avalúo de los
bienes en la forma señalada en el artículo 838 del estatuto tributario, en
consecuencia para efectos del proceso administrativo de cobro de deudas
fiscales el valor del depósito para hacer postura es el señalado en el
artículo 526 del Código de Procedimiento Civil. (Concepto DIAN 49424
del 8 de agosto de 2002)
220 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

18.7. DEPÓSITO PARA HACER POSTURA

El artículo 526 señala el depósito que deben cancelar los postores para
hacerse parte dentro del remate, recordemos la norma:

“Artículo 526. Depósito para hacer postura. Todo el que pretenda hacer
postura en la subasta deberá consignar previamente en dinero, a órdenes
del juzgado el cuarenta por ciento del avalúo del respectivo bien.

Sin embargo, quien sea único ejecutante o acreedor ejecutante de mejor


derecho, podrá rematar por cuenta de su crédito los bienes materia de
la subasta, sin necesidad de consignar el porcentaje, siempre que aquél
equivalga por lo menos al veinte por ciento del avalúo; en caso contrario
consignará la diferencia.”

Nos aclara la disposición transcrita que toda persona que se encuentre


interesada en participar en el remate de un bien, debe tener presente que
para poder participar, debe consignar previamente en la cuenta de depósitos
judiciales a favor de la entidad pública ejecutora, en efectivo (la norma utiliza
la palabra dinero, lo cual hace suponer que no es válido aceptar cheques
u otros títulos valores) el equivalente al cuarenta por ciento (40%) del
total del avalúo señalado previamente, del respectivo bien; Este depósito
tiene como fin darle seriedad a la licitación y a los postores (sobre ellos que
tienen los dineros para pagar el remate) y garantizar el cumplimiento de las
obligaciones que asume el funcionario ejecutor, que remata.

Vale la pena precisar que este cuarenta por ciento (40%) se debe liquidar
sobre el valor total del avalúo del bien y no sobre la base de la postura que
inicia en el setenta por ciento (70%) del avalúo global del bien a rematar.

Veamos el siguiente ejemplo

Casa de la Cl 123 con Kr 321 de la ciudad de Bogotá D.C.

Avalúo de la casa: 100% $100.000.000


Base de la postura para remate 70% $ 70.000.000
Depósito para hacer postura: 40% $ 40.000.000

En este ejemplo, teniendo el bien a rematar un avalúo de $100.000.000 los


postores deberán consignar a favor del despacho que remata la suma de
$40.000.000, equivalente al 40% del avalúo del bien a rematar.

El depósito para el rematante constituye parte del precio por el cual se


adquiere el remate, por lo cual el rematante a quien se adjudique el mismo,
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 221

deberá solamente consignar el faltante en relación con el precio por el cual


remata el bien.

Si en la diligencia no se efectúa al remate, el funcionario ejecutor devolverá


la suma una vez concluida la diligencia, pero si se le adjudica el remate, el
depósito para hacer postura se conservará como garantía de cumplir con
la obligación de depositar el saldo dentro de los tres (3) días siguientes o
dentro del término que como plazo le conceda el funcionario ejecutor sin
que en ningún caso se exceda de seis (6) meses.

18.8. LOS POSTORES

Se le denomina postor, a la persona natural o jurídica que interviene dentro


del proceso, quedando limitado la participación de los funcionarios públicos
y judiciales que han intervenido en el proceso, como lo señala el Artículo
1854 del Código Civil.

“Artículo 1854. Prohibiciones del funcionario público y judicial de


comprar los bienes con los que han tenido relación en razón del
cargo. Al empleado público se prohíbe comprar los bienes públicos o
particulares que se vendan por su ministerio; y a los magistrados de la
Suprema Corte, jueces, prefectos y secretarios de unos y de otros, los
bienes en cuyo litigio han intervenido, y que se vendan a consecuencia del
litigio, aunque la venta se haga en pública subasta.

Queda exceptuado de esta disposición el empleado con jurisdicción


coactiva que, conociendo de alguna ejecución y teniendo, por consiguiente,
el doble carácter de juez o de prefecto y acreedor, hiciere postura a las
cosas puestas en subasta, en su calidad de acreedor, cuya circunstancia
debe expresarse con claridad.”

Puede ser postor cualquier persona natural o jurídica, de forma directa o


a través de apoderado, (en escrito y autenticado) en cuyo caso que no
requiere que el apoderado sea abogado, sin que se viole el derecho de
postulación, dado que el poder se da para la participación en una subasta
pública y no en un proceso litigioso.

Copia del poder debidamente autenticado debe quedar dentro del proceso
licitatorio y se requiere reconocimiento por parte del ejecutor de la calidad
de apoderado, de quien representa a un postor.

Las personas jurídicas, pueden participar como postores, en cuyo caso debe
presentarse además del certificado de constitución y gerencia emitido por la
Cámara de Comercio, una certificación expresa de parte del representante
222 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

legal de la misma, en donde se indique tener la facultad para adquirir el bien


en la cuantía y monto plasmado en el remate, esto con el fin de garantizar
los intereses societarios de los diferentes integrantes de la persona jurídica
interesada en actuar como postor.

18.9. LA DILIGENCIA DE REMATE

El artículo 527 del Código de Procedimiento Civil, modificado por el artículo


34 de la Ley 1395 del 12 de julio de 2010 “Por la cual se adoptan medidas de
descongestión judicial.” señala el trámite que debe surtirse en la diligencia
de remate, así:

“Artículo 527. Diligencia de remate y adjudicación. Llegados el día y


la hora para el remate el secretario o el encargado de realizarlo anunciará
en alta voz la apertura de la licitación, para que los interesados presenten
en sobre cerrado sus ofertas para adquirir los bienes subastados. El sobre
deberá contener además de la oferta suscrita por el interesado, el depósito
previsto en el artículo 526, cuando fuere necesario.

Transcurrida una hora desde el comienzo de la licitación, el juez o el


encargado de realizar la subasta, abrirá los sobres y leerá en alta voz
las ofertas que reúnan los requisitos señalados en el presente artículo.
A continuación adjudicará al mejor postor los bienes materia del remate.

Los interesados podrán alegar las irregularidades que puedan afectar la


validez del remate hasta antes de la adjudicación de los bienes.

En la misma diligencia se devolverán los títulos de las sumas depositadas


a quienes las consignaron, excepto la que corresponda al rematante, que
se reservará como garantía de sus obligaciones para los fines del artículo
529. Igualmente, se procederá en forma inmediata a la devolución cuando
por cualquier causa no se lleve a cabo el remate.

Cuando el inmueble objeto de la diligencia se hubiere dividido en lotes, si


para el pago al acreedor es suficiente el precio obtenido por el remate de
uno o algunos de ellos, la subasta se limitará a estos en el orden en que
se hayan formulado las ofertas.

Si al tiempo del remate la cosa rematada tiene el carácter de litigiosa, el


rematante se tendrá como cesionario del derecho litigioso.

El apoderado que licite o solicite adjudicación en nombre de su


representado, requerirá facultad expresa. Nadie podrá licitar por un tercero
si no presenta poder debidamente autenticado con presentación personal.

Efectuado el remate, se extenderá un acta en que se hará constar:


El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 223

1. La fecha y hora en que tuvo lugar la diligencia.

2. Designación de las partes del proceso.

3. La identificación de las dos últimas ofertas que se hayan hecho y el


nombre de los postores.

4. La designación del rematante, la determinación de los bienes


rematados, y la procedencia del dominio del ejecutado si se tratare de
bienes sujetos a registro.

5. El precio del remate.

Si la licitación quedare desierta por falta de postores, de ello se dejará


constancia en el acta.”

No señala la disposición transcrita que la subasta se adelantará mediante


audiencia pública que debe iniciar el día y hora establecidos en el acto que
la decreta.

El Abogado ejecutor, dirigirá la misma, iniciando el proceso de remate


declarando abierta la subasta y una vez escuche las posturas, las señalará
en voz alta, para que los presentes, tengan conocimiento de las mismas y
puedan mejorarlas.

En este caso el funcionario ejecutor, debe indicar el nombre del postor, la


cantidad de dinero ofrecido y el bien por el cual esta pujando el interesado,
además manifestarán en voz alta cual era el monto de la postura anterior
para efectos de determinar si la nueva postura mejora o no la anterior, o es
equivalente.

La subasta señala el artículo 527 del C.P.C., debe tener una duración de por
lo menos una hora, esto quiere decir que de no presentarse posturas de la
misma forma debe el funcionario ejecutor que esperar que el tiempo mínimo
señalado en la norma se cumpla, antes de proceder a declarar terminada
la audiencia, lo mismo ocurre cuando solamente se presenta un postor, en
cuyo caso solamente se podrá adjudicar el bien hasta tanto se cumpla el
término citado.

El término señalado es el tiempo mínimo, pero en el evento de requerirse un


tiempo superior, cuando existen varios postores, debe el funcionario ejecutor
utilizar el tiempo necesario para que se presente las pujas y contrapujas
necesarias, finalizando la audiencia solamente hasta que se presente una
oferta final que no sea superada por otra que se presente, sin que pueda
suspenderse la audiencia para ser finalizada el día siguiente.
224 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Una vez se finalicen las pujas, o se venza el término de las dos (2) horas, el
funcionario ejecutor declarará cerrada la audiencia de remate y procederá a
adjudicar el bien al postor que haya realizado la mejor oferta, en cuyo caso
deberá levantarse un acta la cual debe contener la siguiente información.

1. La fecha y hora en que tuvo lugar la diligencia.


2. Designación de las partes del proceso.
3. Las dos últimas ofertas que se hayan hecho y el nombre de los postores.
4. La designación del rematante, la determinación de los bienes rematados,
y la procedencia del dominio del ejecutado si se tratare de bienes sujetos
a registro.
5. El precio del remate.

Esta acta deberá estar firmada por el funcionario ejecutor, el adjudicatario y


el secretario. Es deseable, aunque no esencial.

En la misma diligencia y mediante auto, el funcionario ejecutor ordenara la


devolución de los dineros consignados por los postores a quienes no se les
adjudicó el bien, conforme lo señala el Artículo 529 C.P.C.

18.10. PAGO DEL PRECIO

El artículo 529 del Código de Procedimiento Civil, señala las reglas a aplicar
para el pago del precio del remate así:

“Artículo 529. Pago del precio e improbación del remate. El rematante


deberá consignar el saldo del precio dentro de los tres días siguientes
a la diligencia, descontada la suma que depositó para hacer postura, y
presentar el recibo de pago del impuesto que prevé el artículo 7º de la Ley
11 de 1987.

Las partes de común acuerdo podrán ampliar este término hasta por seis
meses, dando cuenta al juzgado en escrito autenticado como se dispone
para la demanda.

Vencido el término sin que se hubiere hecho la consignación y el pago del


impuesto, el juez improbará el remate y decretará la pérdida de la suma
depositada para hacer postura, a título de multa.

Cuando se trate de rematante por cuenta de su crédito, y éste fuere igual o


superior al precio del remate, no será necesaria la consignación del saldo.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 225

En caso contrario, se consignará la diferencia a órdenes del juzgado.

En el caso del inciso anterior, solamente podrá hacer postura quien


sea único ejecutante; si son varios, quienes pretendan hacer postura
presentarán autorización escrita de los otros, con firmas autenticadas
como se dispone para la demanda.

Cuando el rematante fuere acreedor de mejor derecho, el remate sólo se


aprobará si consigna además el valor de las costas causadas en interés
general de los acreedores, a menos que exista saldo del precio suficiente
para el pago de ellos.

Si quien remató por cuenta del crédito no hiciere oportunamente la


consignación del saldo del precio del remate y no pagare el impuesto
mencionado en el inciso primero, se cancelará dicho crédito en el
equivalente al veinte por ciento del avalúo de los bienes por los cuales
hizo postura; si fuere el caso, por auto que no tendrá recurso se decretará
la extinción del crédito del rematante.”

Nos señala la disposición transcrita, que el beneficiario de la adjudicación


del remate deberá dentro de los tres (3) días siguientes a la diligencia de
adjudicación, cancelar el monto del saldo del remate, para el efecto del
valor de postura de adjudicación deberá descontar el valor cancelado (40%)
para hacerse parte como postor.

Así mismo señala el artículo 529 del C.P.C., que la partes de común
acuerdo podrán ampliar este término hasta por seis (6) meses, aunque se
recomienda exigir el pago el total del remate dentro del término fijado en la
norma .

De orto lado es importante tener presente que una vez vencido el término
para pagar el saldo (3 días) sin que se hubiere hecho la consignación y
el pago del impuesto, por parte del adjudicatario, debe el funcionario
ejecutor decretar la improbación del remate así como la pérdida de la suma
depositada para hacer postura, a título de multa.

18.11. IMPUESTO SOBRE EL VALOR FINAL DEL REMATE

La ley 11 de 1987 en se artículo 7º, reiterado por el numeral 2º del artículo


243 del Decreto 633 de 1993 (Estatuto Orgánico del Sistema Financiero):

“Artículo 7º. Los adquirentes en remates de bienes muebles e inmuebles


que se realicen por el martillo del Banco Popular, el fondo rotatorio de
aduanas, los juzgados civiles, los juzgados laborales y demás entidades
226 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

de los órdenes nacional, departamental y municipal, pagarán un impuesto


del 3% sobre el valor final del remate, con destino al fondo rotatorio del
Ministerio de Justicia. Sin el lleno de este requisito no se dará aprobación
a la diligencia respectiva.

Parágrafo. El valor del impuesto de que trata el presente artículo será


captado por la entidad rematadora y entregado mensualmente al fondo
rotatorio del Ministerio de Justicia.”

Es decir que además del precio total de adjudicación del bien rematado,
debe el beneficiario de esta adjudicación cancelar un tributo equivalente
al tres (3) por ciento del valor total del remate, recursos que tiene como
destinación el fondo rotatorio del Ministerio del Interior y de Justicia, este
pago del tributo es requisito previo para la aprobación del remate.

18.12. REMATE DESIERTO

Cuando no se presenten postores, debe el funcionario ejecutor declarar


desierto el remate en los términos contemplados en el artículo 533 del
Código de Procedimiento Civil, modificado por el artículo 36 de la Ley 1395
del 12 de julio de 2010 “Por la cual se adoptan medidas de descongestión
judicial.”así:

“Artículo 533. Remate desierto. Cuando no hubiere remate por falta


de postores, el juez señalará fecha y hora para una nueva licitación. Si
tampoco se presentaren postores, se repetirá la licitación las veces que
fuere necesario. Sin embargo, fracasada la segunda licitación cualquiera
de los acreedores podrá aportar un nuevo avalúo, el cual será sometido a
contradicción en la forma prevista en el artículo 516; la misma posibilidad
tendrá el deudor cuando haya transcurrido más de un año desde la fecha
en que el anterior avalúo quedó en firme.

Para las nuevas subastas, deberán cumplirse los mismos requisitos que
para la primera.”

Así las cosas, en el evento de declararse desierto el remate, el funcionario


ejecutor, debe mediante auto señalar la fecha y la hora de la segunda
licitación y de declararse desierta esta decretar una tercera y última licitación.

La misma disposición no señala que en el evento de declararse desierta la


primera audiencia, la base de la postura disminuye del 70% al 50% , y en
el evento de requerirse una tercera licitación, esta tendrá como postura el
40%.
El remate dentro del proceso de Cobro Coactivo 227

18.13. REPETICION DEL REMATE

El remate puede repetirse por improbación del mismo, si:

- El rematante no cancela dentro del término legal el saldo del precio o


postura que ofreció en la diligencia

- Si el adjudicatario del remate no paga el impuesto del 3% sobre el


valor final del remate (Artículo 7 Ley 11 de l987)76, con destino al Fondo
Rotatorio del Ministerio de Justicia.

El remate puede repetirse por anulación del mismo si:

- Por violación de los requisitos señalados en los Artículos 523 y siguientes


del C.P.C.

El remate puede repetirse por falta de postores si ninguna persona se


interesó en hacer pujas y por ende en la diligencia no hubo ofertas.

18.14. LA APROBACION O INVALIDEZ DEL REMATE

Finalizada la audiencia y cumplido el término de tres (3) días, y una vez


verificado el pago tanto de la diferencia del remate como del valor del
impuesto, así como el cumplimiento de las formalidades generales y
particulares del proceso, el funcionario ejecutor debe calificar el remate

El artículo 530 del Código de Procedimiento Civil, modificado por el artículo


35 de la Ley 1395 del 12 de julio de 2010 “Por la cual se adoptan medidas
de descongestión judicial” señala las reglas de aprobación i invalidez del
remate en los siguientes términos:

Artículo 530. Saneamiento de nulidades y aprobación del remate. Las


irregularidades que puedan afectar la validez del remate se considerarán
saneadas si no son alegadas antes de la adjudicación. Las solicitudes de
nulidad que se formulen después de esta, no serán oídas.

Cumplidos los deberes previstos en el inciso 1° del artículo anterior, el juez


aprobará el remate dentro de los cinco días siguientes, mediante auto en
el que dispondrá:

76 Artículo 7. Los adquirientes en remates de bienes muebles e inmuebles que se realicen en el Martillo del Banco
Popular, el Fondo Rotatorio de Aduanas, los juzgados civiles, los juzgados laborales y demás entidades del orden
nacional, departamental y municipal, pagarán un impuesto del 3% sobre el valor final del remate, con destino al
Fondo Rotario del Ministerio de Justicia. Sin el lleno de este requisito, no se dará aprobación a la diligencia del
remate.
228 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

1. La cancelación de los gravámenes prendarios o hipotecarios que


afecten al bien objete del remate.

2. La cancelación del embargo y del secuestro.

3. La expedición de copia del acta de remate y del auto aprobatorio, las


cuales deberán entregarse dentro de los cinco (5) días siguientes a la
expedición de este último. Si se trata de bienes sujetos a registro, dicha
copia se inscribirá y protocolizará en la notaría correspondiente al lugar
del proceso; copia de la escritura se agregará luego al expediente.

4. La entrega por el secuestre al rematante de los bienes rematados.

5. La entrega al rematante de los títulos de la cosa rematada que el


ejecutado tenga en su poder.

6. La expedición o inscripción de nuevos títulos al rematante de las


acciones o efectos públicos nominativos que hayan sido rematados, y
la declaración de que quedan cancelados los extendidos anteriormente
al ejecutado.

7. La entrega del producto del remate al acreedor hasta concurrencia de


su crédito y las costas, y del remanente al ejecutado, si no estuviere
embargado. Empero, cuando se remate un bien para el pago de la parte
exigible de una deuda garantizada con hipoteca o prenda constituida
sobre él, no se entregará al ejecutado el sobrante del precio que
quedará consignado a órdenes del juzgado como garantía del resto de
la obligación, salvo que las partes dispongan otra cosa.

Sin embargo, si el bien rematado se encuentra en poder del ejecutado el


producto del remate sólo se entregará al ejecutante cuando aquel haya
sido entregado al rematante y se le haya reembolsado lo que hubiere
pagado por impuestos, servicios públicos, cuotas de administración y
gastos de parqueo o depósito, causados hasta la fecha de la entrega, a
menos que hayan transcurrido más de quince días desde la aprobación
del remate sin que el rematante haya solicitado la entrega o el reembolso
de gastos.

El incumplimiento de lo dispuesto en este artículo constituye falta


disciplinaria gravísima.
Terminación del P.A.C. y archivo del expediente 229

TERMINACIÓN DEL P.A.C. Y


ARCHIVO DEL EXPEDIENTE
CAPÍTULO

19
El Procedimiento Administrativo Coactivo, puede terminar:

1. Si el deudor paga totalmente la deuda, bien por pago directo, por abono
de depósito, por remate o por cualquiera de los otros medios de extinguir
la obligación como lo serían a manera de ejemplo, la compensación.

2. Si existe causales de prescripción de la obligación de cobro.

3. Por remisión de la obligación tributaria.

Una vez comprobado el pago total de la obligación insoluta, las costas del
proceso y demás acreencias generadas, el funcionario ejecutor procederá
a decretar la terminación del PAC y el archivo del expediente, para el efecto
deberá proferir un auto en donde se especifique la finalización del proceso
ordenando la cancelación de los embargos y secuestros, la devolución de
remanentes al ejecutado o la puesta en disposición de los mismos a otras
autoridades tributarias o no tributarias, así mismo ordenará la desanotación
y el archivo del expediente y demás diligencias tendientes a actualizar
registro en cuenta corriente e inventario de procesos.

No obstante, de no haberse cumplido el pago total de la obligación pretendida


con el proceso de cobro abierto, deberá el funcionario ejecutor, proseguir
con el proceso, hasta obtener el pago del excedente.
Otros 231

CAPÍTULO

OTROS
20
En este capítulo tocaremos ítems que si bien no se encuentran de forma
expresa señalados en el Título VIII del Libro Quinto del Estatuto Tributario
Nacional, se hace necesario su análisis, para el mejor conocimiento de las
diferentes situaciones que pueden presentarse dentro del proceso de cobro.

Entre estos ítems encontramos:

- La remisión de la obligación tributaria

- La compensación de obligaciones.

- La dación en pago

20.1. LA REMISIBILIDAD DE LA OBLIGACION TRIBUTARIA

El artículo 82077 del Estatuto Tributario Nacional, el cual aplica a las entidades
públicas facultadas para ejercer el cobro coactivo, en virtud de lo señalado
en el artículo 5º de la Ley 1066 de 2006, señala respecto de la remisión:

“Artículo 820. Facultad del administrador. Los administradores de


impuestos nacionales quedan facultados para suprimir de los registros y
cuentas corrientes de los contribuyentes de su jurisdicción, las deudas a
cargo de personas que hubieren muerto sin dejar bienes. Para poder hacer
uso de esta facultad deberán dichos funcionarios dictar la correspondiente
resolución, allegando previamente al expediente la partida de defunción
del contribuyente y las pruebas que acrediten satisfactoriamente la
circunstancia de no haber dejado bienes.

77 Artículo 5°. Facultad de cobro coactivo y procedimiento para las entidades públicas.
(…)
Parágrafo 2°. Los representantes legales de las entidades a que hace referencia el presente artículo, para efectos
de dar por terminados los procesos de cobro coactivo y proceder a su archivo, quedan facultados para dar aplicación
a los incisos 1° y 2° del artículo 820 del Estatuto Tributario.
232 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Podrán igualmente suprimir las deudas que no obstante las diligencias


que se hayan efectuado para su cobro, estén sin respaldo alguno por no
existir bienes embargados, ni garantía alguna, siempre que, además de
no tenerse noticia del deudor, la deuda tenga una anterioridad de más de
cinco años.

El director de impuestos y aduanas nacionales queda facultado para


suprimir de los registros y cuentas corrientes de los contribuyentes, las
deudas a su cargo por concepto de los impuestos administrados por la
UAE-Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, sanciones, intereses
y recargos sobre los mismos, hasta por un límite de trescientos mil pesos
($ 300.000) para cada deuda (Valor base para 1994), siempre que tengan
al menos tres años de vencidas. Los límites para las cancelaciones
anuales serán señalados a través de resoluciones de carácter general.
(Ley 1111 de 2006 UVT 58).

La remisión debe entenderse como uno de los medios o mecanismos para


extinguir las obligaciones, etimológicamente se entiende por remisión:

“Remisión: El perdón o exoneración de alguna obligación o deuda, como


también de un delito, culpa o pena.

(...)

La remisión que procede de mera liberalidad está en todo sujeta a las


reglas de la donación entre vivos, y necesita de insinuación en los casos
en que la donación entre vivos la necesita.”78

Claro que la remisión no es más que el perdón o liberación de cancelación


de una deuda que el acreedor hace al deudor, es la renuncia o el abandono
de sus derechos por parte del acreedor respecto de obligaciones insolutas
a su favor y a cargo de un deudor con ánimo de beneficencia.

El artículo 1812 del Código Civil, hace una asimilación expresa sobre el
tema a las normas sobre donaciones, veamos:

“Art. 1712.- La remisión que procede de mera liberalidad, está en todo


sujeta a las reglas de la donación entre vivos y necesita de insinuación en
los casos en que la donación entre vivos la necesita.”

Algunos doctrinantes contrarios a la tesis de la asimilación de la remisión a


la donación han considerado:

“709. La remisión y la donación.- Según quedó expuesto, la doctrina ha


incurrido en confusiones que han deformado la institución de la remisión,

78 DICCIONARIO JURÍDICO COLOMBIANO, Ed. Jurídica Nacional, Bogotá, 1988, Pág. 566
Otros 233

tal como esta fue concedida por los jurisconsultos romanos, y que, entre
esas confusiones, se encuentra la que ha pretendido reducirla al contrato
de donación, error este que se refleja en nuestro Código Civil, inspirado
por su modelo francés.

Así, el artículo1454 dice que “hace donación el que remite una deuda”,
principio que aplica el artículo 1452, relativo a los réditos de un capital
colocado a interés o a censo; y el artículo 1712, que también parece
acoger la falsa calificación de la remisión en gratuita y onerosa, ...”

Con fundamento en los precitados textos legales, concluyen algunos de


sus intérpretes, según se vio, que la remisión es una donación, Pero resulta
que las diferencias entre la remisión y la donación son perturbantes, a
saber:

1) Ambas constituyen actos jurídicos, pero de especies diversas: la


donación es un contrato y, como tal, productivo de obligaciones para
el donante y eventualmente para el donatario, lo que supone en estos
el ánimo de obligarse (animus donandi), al paso que la remisión es un
acto extintivo determinado por la intención de solucionar una obligación
preexistente (animus solvendi)

2) La donación, como contrato que es, siempre requiere el consentimiento


del donante y el donatario; la remisión es un acto unipersonal o unilateral
del acreedor, que al renunciar a su derecho, extingue un vínculo obligatorio
que no puede subsistir sin acreedor. La aceptación del deudor remitido no
es necesaria, al contrario de lo que para la donación prescribe el artículo
1443, ya que la remisión hasta puede ser tácita, ... (...)” 79

Podemos concluir entonces que la remisión es una condonación de


deudas que hace el estado en razón a la incobrabilidad de la obligación
tributaria, bien, porque el deudor ha fallecido sin dejar bienes que puedan
ser perseguidos dentro del proceso de cobro, sin que tal aplicación pueda
hacerse extensiva a las personas jurídicas como lo han interpretado otros
autores, ya que la norma de forma expresa habla de fallecimiento “muerte”
de la persona.

Así mismo se habla más delante de la posibilidad de remitir obligaciones,


cuando a pesar de haberse efectuado el cobro, no es posible conseguirse
el mismo dado que no existe bien que respalde la obligación ni se tenga
noticia del paradero del deudor, esto aunado a que la deuda tenga más de
cinco (5) años de antigüedad.

79 OSPINA FERNÁNDEZ, Guillermo, Régimen General de las Obligaciones, Edt. TEMIS, Bogotá 1998, Pág. 452.
234 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

Por último, nos señala la disposición que puede el funcionario de impuestos


que ostente la calidad de Director de la DIAN, Secretario de Hacienda,
Tesorero, o Director de Impuestos, decretar la remisión de obligaciones
cuando existan deudas inferiores a cincuenta y ocho (58) Unidades de Valor
tributario (U.V.T.) con más de tres (3) años de antigüedad, que no han sido
susceptibles de ser cobradas, pese a los esfuerzos de los funcionarios de
cobro, esta norma solamente es aplicable a los entes tributarios.

20.2. LA COMPENSACION DE LAS OBLIGACIONES

En materia tributaria las compensaciones de impuestos tiene su regulación


expresa señalada en el artículo 815 del Estatuto Tributario Nacional:

“Artículo 815. Compensación con saldos a favor. Los contribuyentes o


responsables que liquiden saldos a favor en sus declaraciones tributarias
podrán:

a. Imputarlos dentro de su liquidación privada del mismo impuesto,


correspondiente al siguiente período gravable, y

b. Solicitar su compensación con deudas por concepto de impuestos,


anticipos, retenciones, intereses y sanciones que figuren a su cargo.

Parágrafo. Modificado por el Artículo 68 de la Ley 788 de 2002. Cuando


se trate de responsables del impuesto sobre las ventas, la compensación
de saldos originados en la declaración del impuesto sobre las ventas, solo
podrá ser solicitada por aquellos responsables de los bienes y servicios
de que trata el artículo 481, por los productores de los bienes exentos
a que se refiere el artículo 477 y por aquellos que hayan sido objeto de
retención.”

Para los entes no tributarios así como para los tributarios adicionalmente
aplican las reglas de compensación señaladas en los artículos 1714 a 1715
del Código Civil, cuando los dos sujetos de la obligación son al mismo
tiempo deudores y acreedores, veamos:

“Artículo 1714. Cuando dos personas son deudoras una de otra, se opera
entre ellas una compensación que extingue ambas deudas, de modo y en
los casos que van a explicarse.

Artículo 1715. La compensación se opera por el solo ministerio de la ley


y aun sin conocimiento de los deudores; y ambas deudas se extinguen
recíprocamente hasta concurrencia de sus valores, desde el momento
que una y otra reúnan las calidades siguientes:
Otros 235

1. Que sean ambas en dinero o de cosas fungibles o indeterminadas de


igual género y calidad.
2. Que ambas deudas sean líquidas.
3. Que ambas sean actualmente exigibles.”

De suerte que el funcionario competente para resolver de la petición de


devolución deberá verificar que el solicitante de la devolución no adeude
sumas al ente público por concepto de otras obligaciones, ya que de existir
estas, deberá compensar las deudas a cargo del solicitante, cuando estas
se encuentren actualmente exigibles.

Debemos aclarar que, no se recomienda a los funcionarios ejecutores,


compensar obligaciones que se encuentren prescritas, como ocurre
ocasionalmente cuando se solicitan devoluciones de impuestos, ya que
se expone el funcionario ejecutor a sanciones de tipo disciplinario, por
compensar obligaciones no exigibles, en contravía de lo señalado en el
artículo 1715 del Código Civil ya transcrito.

20.3. DACION EN PAGO

Si bien, la figura de la dación en pago que se encontraba consagrada en el


artículo 822-1 del Estatuto Tributario Nacional , fue derogada por el artículo
134 de la Ley 633 de 2000, es evidente que se encuentra el funcionario
ejecutor en ocasiones frente a propuestas de pago en especie (dación en
pago) o incluso inmerso a acatar decisiones administrativas emitidas por
entidades como la Superintendencia de Sociedades, cuando se adelantan
procesos concursales, en los cuales se obliga a aceptar un bien como medio
de pago de una obligación insoluta.

Por dación en pago entendemos:

2. Concepto de dación en pago


Lo anterior nos lleva a considerar el concepto que se debe tener de la
institución; así, la dación en pago se puede definir como un subrogado
del cumplimiento que implica la existencia de un medio extintivo de las
obligaciones consistente en que, llegado el momento de cumplimento
de la obligación, el deudor ofrece al acreedor y este acepta de aquel
la realización de una prestación distinta de la inicialmente pactada,
de modo que, cuando el deudor la realice, la operación efectuada se
considerará perfeccionada, con los consiguientes efectos que le son
propios, esto es, la extinción de la obligación y, en consecuencia,
la liberación del deudor así como la satisfacción de los intereses
crediticios.
236 El Proceso Administrativo de Cobro Coactivo

De ello deriva que la dación en pago, considerada como un subrogado del


cumplimiento, implica una conceptualización descriptiva de lo que sucede
en la propia figura jurídica, pues se pretende poner de manifiesto que
existe una prestación, el aliud, que sustituye a otra, la originaria, con la
misma eficacia de esta última.

Por esta razón, veo más correcta la denominación que utiliza el derecho
italiano para referirse a la dación en pago, esto es, prestazione in
luogo dell’ademplimento, o lo que es lo mismo, prestación en lugar del
cumplimiento.80

De otro lado tenemos que la dación en pago, es una figura sin tipificación
expresa en la legislación civil Colombiana, pero que la contempla en varias
disposiciones, y se ha vuelto muy común como medio para extinguir las
obligaciones.

Debemos precisar que esta dación en pago no es la figura señalada dentro


del artículo 1672 del Código Civil Colombiano, que reza:

“Artículo 1672. Definición de cesión de bienes. La cesión de bienes


es el abandono voluntario que el deudor hace de todos los suyos a su
acreedor o acreedores, cuando a consecuencia de accidentes inevitables,
no se halla en estado de pagar sus deudas.”

Este proceso de cesión de bienes debe surtirse ante un juez, y de no


efectuarse ante esta autoridad judicial, básicamente estaríamos frente a
una dación en pago y no a una cesión de bienes.

Así las cosas, es importante precisar que debe el funcionario ejecutor,


analizar las propuestas de dación en pago, cuando la mismas, no se
encuentren dentro de la esfera tributaria, en donde no se acepta al carecer
de norma tributaria que lo permita.

80 M.ª Raquel Belinchón Romo “Nociones Generales sobre la dación en pago” en http://www.cesfelipesegundo.com/
revista/articulos2007b/Belinch_n_Romo_corregido.pdf

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