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GERMAN J.

B/DART CAMPOS

COMPENDIO
DE
DERECHO
CONSTITUCIONAL

PRIMERA REIMPRESiÓN

SOCIEDAD ANÓNIMA EDITORA,


COMERClAL,INDUSTRlAL y FINANCIERA
-

INTRODUCCION

El contacto con colegas docentes y con alumnos nos Illo!ivó a elabo-


rar este nuevo libro. desLinado. indudablemente, a satisfacer a quienes im-
parlen y reciben enseñanza constitucional en nuestras universidades.
Seguramente. hacía falta que. en forma de breviario, condensáramos
un lineamiento mínimo de nuestro derecho constitucional posterior a la
rcformade 1994. La síntesis no signil1caque el aprendizaje de la constitu-
ción deba reducirse. por lo que quienes utilicen este texto habrán de tomar
muy en cuenta que necesita completarse desde la cátedra y desde e l estu-
diantado. Acá solamente brindamos a unos y a o tros un panorama que
busca despertar atracti vos e incitar ampliaciones.
Por de pronto, los alumnos habrán de tener a su lado la constitución y
los instrumentos internacionales de derechos humanos que revisten su mis-
ma jerarquía, para que hagan de eje a los comentarios condensados en el
presente compendio.
Como siempre. la ¡mención de ofrecer un elemento útil que sirva de
base y piso para muchas añadiduras ha sido la razón de este modesto apor-
te.
Los 150 años de la constitución fundacional de J 853. siempre presen-
te en nuestras valoraciones. vinieron bien para proseguir haciendo camino
al andar. como seguramente repetiría Machadotfesde su poesía. Ojalá que
sean muchos los que acompañen y transiten esta ruta.

El autor
NOCIONES PRELIMINARES

El derecho de la constitución

l. - El nombre de nuestra disciplina es "derecho constitucional ", al


modo como. similarmente. se usan las expresiones "derechociviJ". "dere-
cho penal", "derecho labora''', elc. O sea que nos estamos refiriendo a un
sector, un ámbito, o un casillero, del mundo jurídico.
A lo mejor la terminología "derecho constitucional" no nos tiene acoso
tumbrados a pensaren profundidad laque acá significa el sustantivo "de-
recho". seguido del adjetivo "constilucional", por lo que vale la pena dedi-
carle un párrafo. Hablarde "derecho constitucional" es tanto como hablar
de "derecho de la constitución", con lo que aludimos a que la constitución
tiene TlaturaJezajurídica . O que es "derecho", Y decir que es "derecho'-
equivale a afirmar que la constiLUción manda, prohíbe. pennite. obliga,
vincula. tiene eso que se da en llamarJuerza I/onllativa, o vigor lIomuui-
vo. No son consejos, no son directi vas. Son normas jurídicas que descri-
ben lo que hay que hacer, Jo que no se ha de hacer. lo que se puede hacer.

2. - En síntesis, en el "derecho de la constitución" hallanXlS derechos de las


personas, de los grupos, de los sujetos colectivos, y deberes, tanto individuales
como colectivos y, fundamentalmente. del propio estado o, si se prefiere. de los
órganos que ejercen el poder del estado.

3. - Vayamos ahora a olIo vocabulario. Hemos mencionado el mun-


do jurídico. que es una rcaJidad humana, social, política y jurídicá. ¿Qué
hay en ella'! Hay nomlaS (las de la constitución rormal son normas escri-
tas, pero hay olras nomlas que no están escritas. como las del derecho
consuetudinario); hay cOl/ductas humanas interrelacionadas de unos suje-
tos con OlfOS: y hay valores. Las normas, las conductas y los valores son
14 COMPENDIO UfO UERECHü COSST111IC¡ONA L NOCIONES PRIlLlMINARES 15

jllrídic~s. y componen las tres dimensiones del mundo jurídico: cl orden perdido su supremacía. y que en su lugar funciona. una constituci6n material distin-
I/Orma/IIIO, el orden sociológico. y el ordel/ axiológico (o dikel6gico. si ta u opuesta (en todo o en parte).
damos por cieno que dikelogía es ciencia de lajusticia).

4. - Conviene destacar que la juridicidad a la que estamos relirién- Las fuentes


danos, provicn.e d~ ~a relaci6n necesaria que exisle en el mundo jurídico
entre este y lajustlc/(/ como valor. El mundo jurídico noes neutro al valor: 8. - Las fuentes dcl derecho constitucional argentino se clasifi can
si.empn? es justo o injusto. más justo o mcnos justo. según su proximidad o así:
distanCia con el valor just icia. a) Fue1lfes fommles:
\ a') lIonllas codificadas en el texto de 1853- 1860 con sus reformas de
5. - Hay otro~ I..'llnCeplOS que hCmtlS de lener prescnte~. Cuando ha- 1866,1898.1957 Y 1994;
blamos de derecho positivo. hemos de entender que hablamos de un dere-
cho que está ~'igellle, que runciona, que tiene efcctividad ; diríamos: tiene a") f10mlaS escritas que se hallanfttera del texto codificado. como
vigencia sociológica en y por las conductas humanas. Cuando hablamos son las leyes a las que por su materia O contenido cabe calificar como leyes
de comlituci6/1forlllal aludimos a la que está escrita. a la que está codiri- "constitucionales"; [XIr ej.: la ley de partidos políticos. de ministerios. de
¡,:ada en su normmiva escrita: y cuando hablamos decollstiluáólI lila/erial ciudadanía. dc habeas corpus. de amparo. etc,
o real. nos referimos ti la que t"uncillna y se aplica. tanto con normas escri- a''') tratados illlemaciol/ales, algunos con jerarquía igual a la de la
tas como con nornl:lS no escri tas; o sea, a la que podcmos encontrar o constituci6n, y otros solamente superiores a las leyes: por ej .• los que enu-
describir en la dimellshín sodol6gica del mundo jurídico consti tucional. mera el art. 75 ine. 22 de la constitución; el Acuerdo (o concordato) con la
Santa Sede, de 1966; la Convención de Viena sobre derecho de los trata-
6. - La materia n el contenido del derecho constitucional se desdo- dos, etc.
bla así: b) Fuelltes materiales (que dan origen a contenidos en la dimensión
a) un á.mbito que se refiere al modo o manera como se sitúan política- sociol6gica del derecho constitucional, o sea: en la constitución material):
mente los hombrt!S en el estado. tanto en la relación tlel hombre con el b') el derecho consuetudinario (costumbre); por ej., la que muestra
estado como en las relaciones con los demás hombres: que el congreso cumple todas suscompetenci asd iclando leyes (o sea. con
b).un ámbito rc f~rido al poder, asus órganos, sus funciones, sus com- forma de ley);
petenCIas. y las relaCiones de órganos y funci ones. b") el derecho espontdlleo, que surge rápidamente de conductas que
., Al primer ámbito se le suele apodar parte dogmática de la const itu- ljuedan propuestas como "modelo" para ser imitadas ¡x>r otras similares
cron. y al otro se lo denominapane orgánica. en casos análogos y en poco tiempo: la diferencia con el derecho consuetu-
. Hay que tener muy presente que /lO son dos sectores incomunicados. dinario radica en el lapso que se requiere para crear el prodUCIO: el derecho
Sll10 muy cntra mados entte sí, sin frontera~ rígidas ni separaciones tajan-
consuetudinario necesita largo tiempo y muchas conductas similares: el
tes. derecho espontáneo no, y ello porque siempre hay una interconexión con
el poder que acelera el surgimiento del prodUCIO; por ej., tiene origen en el
7. - A la ,const i.tución escrita se la considera una " ley": ley suprema. derecho espontáneo la mala praxis que desde la reforma de 1994 ha lleva-
o super/~v Esta rculll~a en un solo cuerpo de normas escritas, y se afirma do a un abuso en el dictado de decretos de nccesidad y urgencia, en viola-
que prO\'lcncen su ongen de un poder constitu¡ente. ci6n al excepcional supuesto que habilita el arto 99 inc. 30 de la constitu-
ci6n;
La COJlS~ituci6n escrita que no logra o que pierde su efectividad aplicaLÍva y. b''') el derecho judicial, o jurisprudencia, que generaliza esponlá-
por ende, no llene (en todo o en parte) vigencia sociol6gica, lleva a reconocer que ha neamenle a las sentencias más allá del caso en el que se dictan, principal-


16 COM 1'f.t''OIO DI:: DEREClto CONS 11 1UaONAl. NocrONES PRflJMINARES 17

meme cuando esas sentencias provienen de la Cone Suprema; por ej., la La tipología de la constitución argentina
creación del amparo desde 1957 hasta la legislación de 1966 y 1967; la
formulación de los contenidos del derecho de propiedad, o de la categoría 10. - Un somero examen de la tipología de la constitución argentina
de sentencias arbitrarias: arroja el siguiente resultado:
b"") el derecho ¡rIlemaciona/ cOllsuetudinario o derecho de gentes. a) E/texto origillario. histórico y fundacional data de /853. como
que a veces da origen, después, a su formulación por escrilo en tratados producto de la Convención Constituyente que ejerció el poder constituyen-
internacionales. te originario:
e) FuelUes históricas. que se dividen así: b) ese texto se complet6 en /860, cuando también en ejercicio del
c')fuemes doctrinarias o ideológicas, que son todas las que se rcla- mismo poder constituyente originario se integró la provincia de Buenos
donan con el complejo cultural de laconstituci6n; Aires a las otras provincias preexistenlcs:
,
e") fuemes I/ormativas, que son los textos o normas que funcionan e) la codificación aniculada en la constitución de 1853-1860 planifi-
como antecedente del articulado de la constitución; có el régimen político con pretensión de continuid ad futura , y volcó a su
c"')fueme,f jr/slrumentale,~. que se resumen en el proceso político- contenido todo cuanto hacían aconsejable los antecedentes que, al menos
jurídico que funciona como génesis de la constitución. desde 1810. fueron perfilando el estilo cultural de nuestra sociedad; esta
génesis permite afirmarquc la constitución de 1853- 1860 participa, en ese
sentido. dcllipo lradicional·/listoricisla, cn cuan to plasmó y legitimó los
Clasificación de las constituciones caracteres fundamentales que se habían venido afincando en la comunidad
social preexistente;
9. - La clasificación de las consti tuciones abre un arco de numero- d) hay suficiente base para sostener que, no por mcra afición raciona-
sas calegonas. Ejemplificando, podemos citar: lista. sino por la mencionada tradición histórica. la constitución hizo suyos
a) cOlwilución escrila O codificada en un texto único; cuatro contenidos que cabe calificar como pétreos. en el sentido de que en
b) cOllstitución dispersa. que puede constar de algunas nonnas escri- tanto no se modifique la estructura social subyacente que les dio apoyo, no
tas dispersas y otras no escritas; o bien ser totalmente no escrita, O total- debe" suprimirse, aunque pueden modificarse sin alterar su esencia; esos
mente formada por normas escritas dispersas; cuatro contenidos pétreos son:
e) constitución rígida, que para su reforma exige un procedimiento d') la democracia como forma esLatal basada en la dignidad de la
diferente al de la legislación común; persona humana, yen el reconocimienLO de su libertad y sus derechos:
d) cOllsliluciónjIexible, que puede reformarse por el mismo procedí- d") elfederalisnJOcomo forma estatal de descentralización territorial
mienLO de la legislación común; del poder;
e) cOflstüución pétrea, es la constitución codificada que no puede re- d"') la república como forma de gobierno opuesta a la monárquica;
fomlarse, sea en algunos de sus contenidos, o en la totaJidad de su nonna- d'''') la confesionalidad del estado como reconocimiento de la Iglesia
Uva; Católica en cuanto persona de derecho público.
f) consritució" pactada, cuando swge de un acuerdo o convenio;
g) constitución otorgada, cuando un órgano de poder la establece • 11. - La refomlQ cOllStitucioTlal de /994, no obstante las numero-
unilateralmente. sas enmiendas introducidas al texto, ha mantenido fi(lelidad y congruencia
con la constitución originaria en su contenido esencial .
Las categorías de constituci6nJomlQ/ y material ya fueron mencionadas an-
tes. Por ende, consideramos que subsiste, aunque ampliado a tenor de nue-



18 COMl'f:.NDIQ DE DERECHO CONSTIruOONAL
NoaONIiS I'RFJ.JMINARES 19

vas valoraciones y pretensiones sociales. el eje vertebral del primitivo sis- Podemos desg losarlo así:
tema axiológico. con sus pdllcipios. creel/cias. valores y den!cl1os.
a) Cuando alude a los "represen tan tes del puchlo". da a entender que
Al ritmo dcll icmpo histórico. hay derechos IIuevos y camellidos IIue·
el pueblo o la sociedad es el /ilular del poder COTl.\'IÍlu)"eme origiuario:
vos en derec/¡oJ viejos. y hay un techo ideológico con añadiduras y actua-
lizaciones que dan fisonomía a un régimen de cOflstituciollalismo social b) cuando añadc " por voluntad y elección de las provincias ..... reco-
0, si se prefiere. a un eSlilo de esU/do social y democrático de derecho. noce la preexisfeucia l¡ist6rica de las provincias que en 1853 y1860 die·
ron origen a la constitución;
12. - En la consti tución hay I/onu(ls operativas q ue son aulosufi- c) cuando se rt!fiere al "cumpli miento de pactos preexistentes". deja
dentes y aUloaplicalivas; y hay l/ormas programáticas, que obligan a que en claro que el poderconstituycnte ejercido por el pueblo de las provincias
se les dé desarrollo a través de otras normas y políticas que deben com ple- en 1853 y 1860 ha tenido base Comrtlc/Ua! O cm/sel/sual en los instru-
tarlas para que fun cionen plenamente. Cuando los órganos de poder que mentos que fueron preparando, L'omo antcccdentc$, la formación y el naci·
tienen a Su cargo ese deber de desarrollar las normas programáticas no lo miento del estado fede ral argt!llIino:
cumplen. inculTen en violación de la cOl1stitución por omisión. o sea, en
d) cuando enuncia seis jille.f que , a la vez, ap:.lrcccn como bienes y
omisi ón illcol/Sliludonal.
va/ores. traza el linc:.Imicnto del proyecto políti co; esos seis fi nes son:
En la m~didu de lo posible, los jueces deben dar aplicación a las normas COllslilltir fa ul/ión I/aciol/o/:
programáticas Cll los procesos judiciales que tienen a su cargo, para suplir ell sus afianzar fa jU.f1icia:
sentencias aquellas omisiones que son obstáculo para el desarrollo de la
programaticidad. De e~e modo se recupera la slIpremacla de la c0l1 slitr4ÓÓI1. COI/solidar la paz il/ferior:
proveer (/ /a defel/sa co/mill;
promover el biel/estar gel/eral:
L(/s mUt(lciol1eJ cOI/S/iluciol/ales
(I.~egurar los bel/eficios de la libenad.
13. - I.as mutaciones conslitucionaJes ~OIl cambios y ¡raus/omIG-
15. - Todu lo que iniciatmente había Je hacel"$C de Ulnlnrmidad con tos ver-
dones reales que se producen en la co" stilUdón ma/erial si" que el tex-
bos y los fines recién citados, persiste y SI! mantiene aCluati7.aJo como propuesta
10 de la cOl/stituciólI escrita o fprmal se refonlle o modifique. Cuando que, día a día, necesita y exigc las respuestas que la circunstancia de cada tiempo y
una de tales mutacioncs implica deformación u oposición respecto de las lugar hacen necesarias para que d preámbulu se cumpla. .
nonnas de la constitución fomla!. la tal mutación es violatoria de la cons·
titución y, por ende, illco" stiruciollal.
La interpretación y la inttgración constitucionales
El preámbulo 16. - Cuando tcnemos una consti tución con normas escritas. ¡mer-
prerar esas l/armas es buscarles el sell.fido, o sea, lo que quieren signifi·
14. - El preámbulo de la constitución contiene y condensa las deci- caro Pero. además, hay que interpretar las normas que están por debajo de
siones fJolít¡cas fllf/dallJe1/lale.~. En él se comprimen las paut as del régi· la constitución para averiguar, al compararlas con la constitución. lo que
mell, los fin es y objetivos, los valores y principios propugnados, el plan o quieren decir y el sentido que hay que darles.
programa del constituyente.
Cuando se interpretan las nomlas de la const itución en su propio pla-
El preámbulo comparte lajuridicidad y la fuena normativa de la cons-
no, hablamos de i1llerpretacióII "de " la constituciólI.
titución. Por eso, hay que conferirle apl icación.
, Cuando se interpretan las normas que están por debajo de la constitu-


20 Cm.11'END1Q DE DERECHO CONS ¡ ¡ IUClONAL 21

ción y se las compara con la consti tución, hablamos de ilJterpretació1/ constitucional una nomIa, si.no también cuando se desemboca en una de-
" desde" la cOlIstitucióu. claración que reconoce a una nornlll como compatible con la constitución.

17. - La interpretación puede tener un fm de puro cOl/ocimiemo 22. - COllvicm: dejar bien aclarado que los principios genemlesde la consti-
-por ej .. cuando se eSlUdia derecho constitucional-. o un fin aplicativo tuci6n-o los simples principios- y también los wdores, son aplicables no solamen-
práCtico -por ej., cuando 1m jueces han de resolver un caso dictando una te cuando por integración hay que cubrir un vacío normativo, sino a la vez, y mucho,
sentencia en virtud de normas de la constitución-o cuando hay oormas a las que dar interpretación. l-.:s así porque principios y valores
del sístema axiológico de la constit ución dan luz para entender y saber cuál es el
sentido de las nonnas exiSlentes.
18. - Cuando se hace illlerpretación, nunca se puede ir en contra de
la volumad histórica del auLOrde la consfitución, pero se puede y scdcbc
efectuar una imerprewci611 di"ámica que, sin descartar aquella voluntad.
vaya buscando con cri terio finali sta un sentido actuali1-ado para cada mo-
mento y cada circunstancia.

19. - C uandu fa/w UI/(lIIOnlW en la constitución o en los planos que


se sitúan por debajo ele el la, hay que cubrir ese vacío, que suele apooarsc
laguna, Hay una carencia o auscnciadc norma, y para salvar la omisión de
norma hay que hacer una operación de relleno o cobertura, que se llama
iruegraciólI.
En tanto la interpretación presupone que hay una norma a la cual se
interpreta, la integración da por cierto que falta una norma y que. para
solucionar un caso detenninado, hay que integrar cI vacío elaborando, para
ese caso, una nomIa,

20, - Aun así, la integración siempre exige también respetar la cons-


titución, de mooo que para elaborar la norma fall.ante y dar solución a un
caso, esa nomIa que se fabrica como cobertura de la norma ausente debe
ser compatible con la constilución. Esto impli ca que hay que -a la vez-
interpretar la constitución para ver si la norma fabricada como supletoria
de la que falta está o no de acuerdo con la constitución. De no respetarse la
consti tución, la norma sustitutiva de la norma que falta haría incurrir en
inconstitucionalidad a la decisión que para el caso se adoptara mediante
integración.

21. - Tanto la interpretación como la integración son mecanismos


que cobran un papel trascendente cuando los jueces ejercen el COtllro{ de •

conslilucionalidad. La interpretación y, en 'su caso, la integración , han de


llevarse a cabo en el referido control no sólo cuando se va a declarar in-
LA SUPREMACIA DE LA CONSTlTIlCION

Su formulación y sus alcances

l. - Decir que la constitución tiene supremacía alcanza dos signil1 -


cados posibles: a) con uno queremos afirmar que la cOlIsrituci6/1l1ullerja(
es la hase o el funda mento que da efectividad y funci onamiento al orden
jurídico-político de un estado; b) con otro. adosado a la tipología de la
cOlIslirución /onllal. se señala que. por estar revest ida de supcrlcgalidad y
supremacía. la constitución impone como "deber-ser" que tooo el mundo
jurídico inferior a ella le sea congruente y compatible, y no la viole ni le
resle efectividad fun cional y aplicativa.

2. - Desde la supremacía de la constilUción, el ordenjuridico se es-


calona enp/al/os de gradacióll jerorquica: los hay subordinantes y subor-
dinados. de modo que c uando se disloca esa gradación se produce. una
¡"constituciol/alidad en los planos inferiores que no compatibilizan con
los superiores.

3. - La supremada de la constituci6n se liga con la distinci6n entre el poder


constituyente que le da origen, y el poder constituido que, por serie infraconstilu-
cional, no Jebe vulnera r a la t:OnstilUci6n y debe darle cumplimiento.

4. - Para defensa de la constitución suprema, hace falta que ex ista y


funcione al gún sistema de COl/frol. El control constitucional sirve de ga-
rantía para declarar que las normas y los aclos violatorios de la constitu-
ción son illcolI.stitllciol/ales. El efecto de tal declaración , según cómo sea
el sistema de control, puede limitarse adesaplicar la nOffila Oel acto incons-
titucionales en el caso donde así se declara y dispone. o adquirir un efecto
general que llegue hasta derogar la nomlao el acto inconstitucionales.
24 COMPENDIO DE DERECHO CONSTITUCIONAL
LA SUPREMAdA DE LA CONSI L1UClÓN 25
5. -A la fecha, la doctrina de la supremacía de la constitución nccesila asi-
!1Úlar algunos reajuSIeS que, sin renegar de la superlegalidad, la coordinan con el hemos de dar por cierto que son y deben ser aplicables y aplicadas porque,
derecho internacional y con el derecho de la integración supraestatal o comunita- de no ser así, la complementariedad que la constitución les adjudica no
ria. Son aggiornamientos necesarios a la hora de interconectar armoniosamente el funcionaría ni tendría sentido alguno.
derecho internacional y el dcrecbo interno, especialmente en el tema y la materia de
los derechos humanos.
8. ~ Pero más allá del arduo debate interpretativo que este párrafo
tan inocuo ha provocado, la referencia a la primera parte de la constitución
6. - La reforma conslitucional de 1994 ha conferido la misma je- no nos impide. persona1mente. aseverar que:
rarquía de laconslitución a algunos instrumentos internacionales de dere-
chos humanos (declaraciones. y tratados o pactos) en el art. 75 ine. 22, y a a) los instrumentos internacionales de derechos humanos con jerar-
• quía constilUcionalno ¡onnan pane del texto de la constituciÓN; pero
los que no quedan dotados de jerarquía constitucional los ha definido como
superiores a [as Icyes. Con lal supralcgalidad queda investido el derecho b) se sitúan asu mismo nivel, y en común con la constitución encabe-
de la integración y el derecho comunitario derivado. zan el vértice del ordenamiento jurídico argentino;
e) esto significa que, también en paridad con la constitución, fonnan
parte de lo que cabe denominar el "bloque de constitucionalidad fede-
La supremacía y los if/Slrumentos illlemacionales con jerarquía consti- ral" .
tucional
9. - Como síntesis, olvidemos toda alusión a la primera parte de la constitu-
7. - Hemos de coordinar la supremacía de la constitución con laje- ci6n, y demos pOi" verdad que todUf las "parles" de la constitución (primera y
segunda) más los citados instrumentos internacionales de derechos humanos con
rarquía consti tucional de los instrumentos internacionales de derechos hu-
jerarquía constitucional. se integran y articulan en un sistema normativo conjunto y
manos previstos en el recién citado art. 75 inc. 22. común. que tiene supremacfa sobre todo el ordenamiellto infraconslitucional.
BI texto respectivo que los menciona dice, a continuación. que "110
derogaJl artículo alguno de la primera parte de esta constitución y deben
entenderse complememarios de los derechos y garantías por ella reconoci- El control constitucional
dos" .
¿Qué quiere decir esto? A nuestro criterio interpretativo quiere decir 10. - Cuando indagamos qué es lo que dentro del funcionamiento
lo siguiente: operati vo del control de constitucionalidad queda somelido a él, surge un
listado de materias en el que se incluye:
a) si ningún artículo de la primera parte de la constitución quedadero-
gado por normas de uno o más instrumentos internacionales aludidos en el a) las cOl/stituciol/es provinciales y la de la Ciudad Autónoma de
arL 75 inc. 22, conviene añadir que ninguna norma de tales instrumentos Buenos Aires;
es inaplicable o queda descartada por algún articulo de la primera parte de b) las leyes; •

la constitución; sencillamente, unas normas y alTas se suman, sin que, en- c) los tratados imenwciOlwles que no tienen jerarquía constitucio-
tre sí, alguna sufra derogación o inaplicación por causa de otra; nal;
b) según la Corte Suprema, lo que al respecto expresa el art. 75 mc. d) los decretos. reglamentos y actos administrativos de contenido
22 implica que el constituyeme hiw un juicio de comparación y corrobora- general;
ción, que le dio como resultado la aftnnación de que las normas interna- e) los actos administrativos individuaLes;
cionales son compatibles con las de la primera parte de la constitución; f) las sentencias;
e) si luego se agrega que han de entenderse como complementan·as.
g) la actividad de los paniculares.
LA SUPREMAdA Dé LA CONSTITUCIÓN 27
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b''') la elevaciól/ del CaJO constitucional que efectúa un juez que
11 . - El control no funciona respecto de laque se llama "cuestiones tiene a su cargo un proceso, derivando la cuestión constitucional que surge
políticas no judiciablcs" (por ej .• los actos políticos y de gobiemo). en lal proceso al órgol/o especialiuldo y único (de jurisdicción concentra-
Como principio, tampoco se controla si una refonlw de la C01lStitu- da) para que resuelva dicha cuestión y, una vez resuella, le devuelva el
ci6" es consti tucional O inconstitucional (por excepción, y en una situa- proceso al juez de origen que debe sentenciar la causa.
ción muy particular, la Corte ejerció control sobre W1acllmienda introduci- c) Cuando pregumamos quién (o qué sujeto) puede promover el con-
da allcxlocn 1994 que lijaba el ccsc de losjuCl.'Cscn sus cargos al cu mplir trol constitucional. encaramos un problema de legitimación procesal.
75 <lI10S: lo hizo en el caso ''Fayt'', fallado el 19 de agosto de 1999). i..Quién inviste o titulariza tal legitimación, como facultad de promover el
control de la cuestión constitucional? Las respuestas son éstas:
12. - El control de las olllisiolles illcolISrirucionaLes que. como sa- c') si en el sistema existe la acción popular. cualquier perso/la está
bemos, se configuran cuando no se hace algo que la constitución manda legitimada;
hacer. no funciona plcnamcntcen nuestro si stema; cuando ha operado po- c") al margen de la acción popular. pueden estar legitimados: el mi-
sit ivamente en forma excepcional no alcanzamos a considerar que tal mo- nisterio público; el defensor del pueblo; detern~il/ados órg(~lIo~ de poder
dalidad de control se haya convertido en la re~la asumida por lajurispru- a los que un sistema hace competcntcs; detennllladas aSOClacJ01Ie.s cuyo
dencia de la Corte. fin consiste en defender derechos e intereses de personas ú grupos; el pro-
pio juez dc un proceso cuando por el sistcma debe elevar la causa a un
tribunal de jurisdicción concentrada: y f malmenlC
Los sistemas y modalidades dcl control constitucional e''') el justiciable que invoca la lirufaridad de UII derecho o 1.11/ ¡lIfe-
rés porque alega que sufren agravio a causa de una ley o un acto:
13. - Un esquema de los sistemas de control ofrece los siguientes
agrupamientos: c"") un tercero que. sin investir un derecho o interés pe:S?~ales, se
halla obligado a cumplir una nonna o un acto que causan perJUICIO a per-
a) En cuanto al órgaflo, hay: sonas relacionadas con él (por ej., si el empleador tiene que retener una
a') control político, a cargo de un órgano poHtico; euota sindical a un trabajador suyo que no es afiliado al sindicato para el
a") controljurisdicciollal, a cargo del poder judicial, que puede ser: que debe retener la cuota).
C:Ollcelll rado, si hay un órgano jurisdiccional único (por ej .. un tribunal o d) Los efectos del cont rol se agrupan en dos grandes rubros:
corte constitucional); difuso. si lOdos 10$ jueces y cualquiera tienen com- d') cuando la sentencia declarativa de inconstitucionalidad implica 110
petencia para ejercerlo (por ej., en Argentina y Estados Unidos); mulO, aplicar la IlOrma (/1 caso en que se dicta, el efectO se. lin~ita a .Ias partes
CUlliIdo tanto un tribunal constitucional como los jueces comunes son com- intervinientes en ese proceso: o sea, es un efecto restmlgrdo o IIIter-par-
petemes. cada cual según determinadas vías procesales. tes, que mantiene (fuera del caso) la vigencia general de la llormadeclara-
b) En cuantO a las vías procesales, hay: da inconstitucional;
b') vía directa. de acció" o de demOlida, cuando el proceso judicial d") cuando la sentencia invalida con alcalice gel/eral la nomIa decla-
se promueve para impugnar la presunta ¡nconstitucionalidad de una norma rada inconstitucional, el efect o se extiende más allá del caso; o sea, es
o un acto; amplio, e.nm-parres, u erga-ol/llles; tal resultado admite producirse ~e
b") vía i1ldirecta, illcidel//al o de excepcióll, cuando la cuestión de dos maneras: o por derogación directa y automática: o porque la sentenCia
constitucionalidad se incluye en un proceso judicial cuyo objeto principal obligue al órgano emisor de la norma inconstitucional aderogarla.
no es el cOlllfOl. sino otro diferente (por ej .. un cobro de pesos, o un desalo-
jo. y alH hay que plantear la cuestión constitucional);
28 COMI'E.'UIO DE DERECHO CONS II It:OONAL LA SUPRroMAct... DE LA CONSTI1\1CION

El sistema argentino de control constitucional ma situación. (En este sentido, resol víó que todas llis personas privadas de
su libertad sin condena tienen derecho a votar en el establecimiento peni-
14. - Un esbozo lineal del sistema de control en el orden federal tenciario de detención : lo hi7..0 en un proceso de amparo colectivo promo-
argentino arroja el siguiellte resultado: vido por el Centro de Estudios Legales y Sociales al que le reconoció legi-
a) E1ICXlO de la constitución no define ni articula al s istema: tan solo timación para articular la pretensión.)
a partir de la rcfomla de 1994 podemos encontrar, aislad ameme, una nOf-
15. _ La mirada que puede recorrer el \'asto campo del derecho público pro-
ma en el art o43 (dedicada al amparo) que en su párrafo primero dice: "en
v¡ncial. así como de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, encuenlra marcadas
el caso. el juez podrá declarar la ¡nconstitucionalidad de la nonna en que se diferencias con el orden fL-dcra l, ya que hay normas locales que acogen aeciones de
funde el acto u omisión lesiva": incollstitucionalidad (para el caso, con jurisdicción concenlrada en el superior tri-
b) En cuanto al órgmlO de control , el derecho federal argentino ha bunal), aM como el efecto erga-oml/es de tas sentencias declarativas de inconstitu-
seguido el modelo norteamericano de col/trol jurisdicciol/al difuso. con eiooalidad.
posibilidad de acceso final a la Corte Suprema por vía del rccursoex.traor-
dinario;
e) La v{a procesal habitual es la ¡"directa o il/cidellla¡ pero, loman- El marco de cOlldiciollamiellto del colltrol
do en cuenta la jurisprudencia de la Corte, tal vfa no es la única, pues en 16. _ ¿Qué hace falla para que un tribunal judicial se halle en condi-
tomo del año 1985 la Corte comenzó progresivamente a alimmr que tam-
bién hay acciol/es directas de il/collstiLUciollalidad. como el amparo. el ciones de ejercer el control constitucional?
habeas corpus, la acción declarali vade certeza del art o322 del código pro- a) En primer lugar, hace falta que haya una causa oproceso en el que
cesal civi l y comercial; c') no obstante. nuestro sistema federnl no contiene se sitúe la cuestión constitucional a decidir. Los jueces no actúan de oficio
la acción declarati va de inconstitucionalidad pura; (o sea, por sí mismos), porque su jurisdicción debe ser provocada a efectos
d) El sujelO legitimado de primera categoría es el tüular aClUal de UI/ de configurar la causa judiciable.
derecho o UI! imerés legítimo pero. fundamentalmente a partir de la refor- b) En segundo lugar, es menester que un sujeto con legitimación pro-
ma de 1994. hay situaciones (por ej., en materia de derechos de incidencia cesal alegue o anicule la cuestión constiLUcional (pero en la actualidad la
colectiva) que confieren legitimación al "afectado". al deJellSor del pue-
blo, y a las asociaciones que propenden a fines conexos con los derechos
-
Corte ha dado un SCSi!O favorable al control sin necesidad de que haya
petitorio expreso de parte interesada).
cuya protección se demanda; no hay que olvidar que. paraeumplir las fun- c) Los jueces 110 juzgan la oportunidad, el acierto, la convenit:nciao la
ciones que el arto 120 adjudica al ministerio público, a éste se le debe eficacia de la ley.
reconocer también legitimación, aun cuando explícitamente la constitu- d) Tampoco resuelven cuestiones que, confonne a la jurisprudencia,
ción nada dice al respecto; se enro lan en la categoría de las cuestIones políticas 110 judiciables.
e) El efecto de las sentencias declarativas de inconslilUcionalidad se e) A la inversa, la razo"abilidad o arbitrariedad de una noOlla o un
limita al caso. o sea es imer-panes, pero; e') cuando la jurisprudencia de acto caen bajo la mirada del tribunal que tiene a su cargo el control de
la Corte sienta pautas en la materia, el resultado de sus sentencias suele constitucionalidad,
generalizarse por reiteración, o por aplicación que de ellas hacen los de-
f) La declaración de ¡nconstitucionalidad ha de rcscrvarse para los
más tribunales en casos similares (es el viejo adagio: la constitución es lo
casos en que sea imposible compalibilizar una nonna o un acto con la
que la Corte dice que es) ; e") a la fecha registramos unas pocas sentencias
constitución; por eso, se dice que tal declaración es la "última ralio" del
a las que la Corte les ha asignado un alcance aplicatiVo a personas que. sin
haber sido parte en el proceso donde se dictaron, se encuentran en la mis- orden jurídico,
30 CO.\lPfSDIO DE DERECHO CO;';SiIIUClONAL

g) Los jueces no pueden desapl icar una nomla vigente si, para hacer-
lo. no declaran su inconslitucionalidad.
h) Como principio. el control no recae sobre el modo o procedimiento
fonnal que se ha seguido para sancionar una ley, a menos que la transgre-
sión sea muy grave '1 ostensible.

17. - A criterio nuestro:


a) por leyes posible -y Qcseablc- que se confiera efecto "erga.{mmes" CAPInJtO IJ 1
o "extra-partes" (es decir, general) a las sentencias de la Corle que decla-
ran la inconsli lud onalidad de normas generales; EL PODER CONSTITUYENTE
b) son inconstitucionales las normas de cualquier tipo que. cualquiera
sea el motivo que invoquen, probíben o inhiben en alguna clase de proce-
sos el control constitucional. El poder constituyente originario y derivado

18. - A In !i..'Cha huy q ue recordar que cuando se alega vio!¡¡c¡ón a derechos. 1. - Cuando a la palabra "poder" le atribuimos el signiticado dccom-
libertades y garantías del Pacto de' Sall José de Costa Rica, es viable que dcspué~ pelencia, capacidad.() energ(a para cumplir un fm , y al adjclivo "constitu-
de agotar las instandas j udic iales en nuestra jurisdicción imema se lleve la queja o yente" le danlOs el sent ido de constitu ir algo. tenemos bastante biel1 descripto
denuncia a la Comi.~iÓn !nterlllllericrma de Derechos HUII/nno.t, la que a su Vel al ¡xx1er constituyentc: e.f el podl'r que constituye o que da cOIIStituci6/1
puede, luego, valorar si el caso ha de ser elevado --o no- a la Corte InteramcriCOl/fI al estado.
de Derechos HIIIIUIII OS.
Esto es así porque la República Argentina hu acatado [a jurisdicci6n ~pracstalal 2. - Sus dos grandes divisiones apuntan a un poder cOIlstilUyente
al morrento de ratificar, en 1984, e l Pacto de CO~la Rica. origi/lario y a un poder constitu yente derivado. El originario es el que se
ejerce en la etapa fundacional que - prccisamente- da orige" al estado en
su nacimiento y su estructura orgnnizB.tiva: el derivado es el que se ejerce
para introducir reformas o enmiendas a la constitución.

Del poder constiluyentc originari o se suele decir que tiene como titu-
larnatural al pueblo o a la sociedad, y ello porquc al no estar predctermi-
nada una fonna poUtica concreta para lu comunidad que se va a erigir en
estado , es esa comunidad la que uc.be elegir la de su preferencia. Ello a
efectos de conferir legitimidad en el ejercicio del poder constituyente ori·
ginario.

Por supuesto qU\l el pueblo como titular del poder constituyente originario no
lo ejerce en forma d irecta ni por srmismo, sino Indirectamente a través de la habili-
tación que, mediante rJivcrso~ mecanismo. posibles, otorga a determinados sujetos
que se hallan en condiciones de ado ptar con eficacia una constitución dotada de
suficiente consenso sociaL

3. - Cuando se cal ifica al poder cOl/stiruyel/te origi1lario como ilj-


32 COMPENDIO DE DERECHO CONS 111UCIONAL EL PODER CONSTffiJYENTE 33

mifado es menester, al día de hoy. escudriñar qué significa ese "no tencr tural que exigía la integración en un solo estado de lOdas las provincias
límites", En primer lugar, quiere decir que no Liene límites provenientes de preexistentes a la federación, da base para sostener que el ciclo de nuestro
una instancia de derecho positivo superior. En segundo lugar, no significa poder constituyente originario iniciado en 1853 quedó abierto hasta la
desconocer lasuprapositividad del valor justicia (o derecho natural), ni los incorporación de Buenos Aires en 1860, año en el que la llamada "refor-
límites quccolaIeralmemederivan del derecho internacional público -por ma" constitucional no fue ejercicio de poder constitu yente derivado sino
ej., tratados, derecho de gentes. clc.-; finalmente, hay que tomaren cuenta de poder constituyente originario. Por ende, la prohibición del texto de
los condicionamientos que. según el lugar, el momento. y la cultura social, 1853 que impedía su "reforma" haSta transcurridos diez años no ha de ser
provienen de la realidad con todos sus ingredientes concretos; y ello para aplioada para tildar de inconstitucional a los agregados y enmiendas de
no caer en los extravíos de un método racionalista que prescinda de cuanto 1860.
esa misma realidad aconseja o exige para lograr la eficacia del producto
constitucional. 7. - Mucho más larde, a raíl de la reforma de 1994, y aunque la "letra" del
arto 30 no fue modificada ni alterada, surgieron dudas acerca de la rigidez de nues-
4. - El poder constituyente derivado tiene límites, por dos razones tra constitución. Fundamcntaln~nte,la afirmación de que esa rigide7. se ha atenua·
do no ha de llegar, a nuestro criterio, a ascverar que se ha trocado en flexibilidad ,
como mínimo: a) porque para su refonna, la constitución señala quién
tiene competencia para intrOOucir modificaciones y qué procedimiento debe Para mitigar -no para suprimir- la rigidez, cabe tomar cn cuenla algunas co-
seguirse; b) porque si hay tratados internacionales incorporados al ordena- sas: a) la reforma de 1994 incluyó varias cláusulas muy "abiertas" o incompletas
miento interno con anterioridad a la refonna. dichos tratados a veces impi- que deben ser "cclTadas" mediante leyes del congreso (lo que alcanza para decir
-según algunas illterpretaciones- que el congreso ahora "comparte" una dosis de
den que posteriormente el derecho interno incluya cienos contenidos in-
p<xkr conslituycnte con el que ejerció la convención de 1994): 11) los instrumentos
compatibles (por ej., establecer la pena de muerte). inteOlacionates de derechos humanos que confonnc al nuevo arto 75 ine. 22 tienen
la misma jerarquía de la constitución y que dan amplitud al plexo axiológico de
5. - El constitucionalisllXl moderno ha difundido el conceptO de que el poder derechos no forman parte de ta constitución ni están "dentro" de su articulado, sino
constituyente es superior al podcr constituido (del estado), con lo que se aporta un que componen, al mismo nivel del vértice constitucional, lo qtJll se denomina el
c1emento a la teoría de la supremacía de la constitución. hloque de constitucionalidad federal.
Ahora bien, hemos de aclarar que si una constitución erige al derecho interna-
cional como superior a ella, o como investido de su misma jerarquía, el poder consti-
tuyente del que ha surgido esa constitución suprema no la priva a ésta de la calidad hlapas, límites y re/onuas efectuadas
de fuente primaria y básica. Ello"(Xlr cuanto ha sido ese poder constituyente el que,
en esa constitución, ha optado por conferir prelaci6n al derecho internacional, o por
instalarlo al mismo nivel suyo. 8. - El arto 30 consagra la rigidez a través de varias pautas.
a) En cuanto al procedimiento o mecanismo que debe seguirse para
modificar el texto constitucional, hay que distinguir dos etapas: a') en la
El poder constituyente en el derecho constitucional argentino primera, es el congreso el que loma la iniciativa para declarar que La
re/onna es necesaria y, según sólida doctrina que ha de reputarse como
6. - Un somero recorrido histórico en lomo de nuestro proceso cons- convertida en fuente de derecho espontáneo, debe puntualizar qué rema.r,
tituyente admite situarlo en una fecha cierta: el año 1810, en que la eman- cuestiones Onormas de la constitución incluye en el listado de refonna; a")
cipación del Virreynato del Río de la Plata da inicio genético a la futura en la segunda etapa, es una cOflvención convocada al efecto la que tiene a
formación territorial y política de la República Argentina, que culmina con su cargo decidir si, dentro del marco del listado antedicho, hace o no hace
la constitución de 1853. enmiendas en las materias y los contenidos para las cuales se ha reunido;
En mirada también histórica, decimos que, cómo en 1853 quedó se- por derecho espontáneo, la convención refonnadora surge de la elección
gregada la provincia de Buenos Aires, la predisposición geográfica y cul- popular, aunque la letra del ano 30 no lo especifica.
34 COMPENDIO Uf DERECHO OONS1TIlJOONAL El POOER oor-'snn IYE.vrE 35

a La declaración de la n~.'es idad derefonna loma fonnade ley. pero


f
) 10. - Estos límiles derivan de la propia const itución. pero hay ade-
no es un aCIO materialmente legislativo. sino pre-cOIlSlituyem€. más límites lIeleról/oIIIOl'. o sea. que vienen desde fuera de ella. Son los
a") La convención reformadora no puede inunducirenmicndas fuera propios del derecho illlernacional-por ej .. tratados-cuando preexisten a
del tcmario concreto que ha fijado el congreso: lodo exceso reformador la reforma. Así, desde que el Pacto de San José de Costa Rica fonna parte
queda incurso en inconstilucionalidad. de nuestro ordenamiento a raí7 de su ratificación en 1984, su prohibición
para que los estados que al tiempo de hacerse pane en el tratado no teRÍan
Si el congreso le ha dado plazo a la convención, ésta no puede hacer la pena de muerte queden impedidos de adoptarla después, configura un
reformas válidas después de vencido; si al declarar la necesidad de rclor- límite: ninguna rcformaconstilUcional podría incluir la pena de muerte en
ma no ha establecido plazo. el congreso no lo puede fijar después. la consti tución, ni establecer el deber del congreso de implantarla para
b) En cuanto a lamater;a, damos por seguro -aunque nuestraopinión determinados delitos.
tiene suscilados varios disensos y réplicas- que la constilución posee COI/'
tel/idos pétreos que. si bien se pueden reformar. no se pueden abol ir, su· 11. - I.ajurisprudeneia de la Corte ha perseverado en su axioma de
primir ni sustiluir por otros opuestos. Tal petreidad o petrificación surge que la reforma const ilucionalt ipifica una cuestión política l/O judiciable;
del carácter parcialmente lradicional-f¡isloricista de nuestra constitución O sea, que no puede scr objelo de revisión o control judicial. Sin embargo,
de 1853- 1860, o sea. de todo lo que hace parte de su con tenido porqul: después de la reforma de 1994, un caso muy espedalllevó a la Corte a
proviene, con suficiente legitimidad. de nuestro proceso entre 1810 Y1853- dec1ararquc era inconslitucionall a nueva norma que a los j ueces designa-
60. dos ames con inamovilidad vitalicia les fijaba plazo de desempeño sola-
mente hasla cumplir 75 a110s (sentencia c.:n el caso "Fayt" del año 1999).
Esos contenidos mantienen su naturaleza pétrea mientras la estructu-
ra social subyaccntc en la que hicieron base conserve su fisonomía. Esta sentencia \'iene a ser un aval a lo que significa un punlo de vista personal,
Cont amos cuatro: a) la formafedeml del estado; b) la forma republi- conrorme al cual todo aquél que Oc acuerdo a oonnas en vigor anteriores a una
cal/a del gob ie rno: e) la democracia como forma de estado: d) la rerorma adquiri6 un derecho (por ej., a desempeñar ulla función para la que se lo
confesionalidad del estado. designó por nueve ailos), no puede ser privado de ese derecho ni alterado en su goce
por una reronna constitucional ulterior.
Lo prohibido sería : ree mplazar el federalismo por el unitarismo. la
repúb li ca por la monarquía, la de mocracia por el IOtalitarismo. la 12. - La reforma de 199-1 y la previa declaración de su necesidad
confesionalidad pur la laicidad. por el congreso suscitó un amplio debate. acerca del cual diremos muy
brevemente que: a) cuando se declara necesaria una reforma. el congreso
Al día de hoy, el ..:jc: troncal dc los contenidos pétreos sigue apoyado en la que fij a el lemario puede señalar cuál es la fin alidad o el objeti vo que toma
f1sonomfa global de la sociedad aJ!;cntina, de modo que a criterio nuestro ninguno
en consideración para cada punto O anículo, y la convención queda vincu-
de ellos tolerarla su eliminación y sustitución por los opuestos.
lada por tal finalidad: o sea. puede no hacer rcforma, pero si la hace no
puede cambiar esa finalidad; b) es posible que asimismo el congreso con-
9. -Haciendo enlonces una rClrospccción, decimos que los límites
signe que se habilita la reforma de tal punto o artículo, a condici6n de que
de nuestro poder cOIlsliluyeme derimdo son varios: a) los cOl/lellidos a la \fez se modifique tal otro con el que ticnc relación la finalidad perse-
pétreos quc no se pueden abolir; b) los que impiden reformas sin que el guida; c) no es posible - y deviene inconstitucional- que el congreso que
congreso haya declarado su necesidad; e) los que surgen dellemarioque el establece el temario sometido a reforma le deri ve a la convención una en-
congreso le propone a la convl:ndón constituyente para que introduzca-<> mienda preelaborada o cerrada, O una nornlativa ya redactada en su formu -
no- modi fieadones; d) el quórum que precisa el congreso para declarar la lación.
necesidad de la reforma; e) el plazo para que trab.aje la convención, si es
que el congreso lo ha estipul ado al declarar necesaria la reforma. 13. - Una vez que la llamada "reforma" de 1860 es reputada como


36 COMPE:\'OI.O DE DERECHO CO:iSTrruaoNAL EL PODER CO:""S t 11 un:.v rE 37

ejercicio del poder COIIstiluyemt! orig illario que, en ciclo abieno, IUVIl en las propias provincias. Después de reformada en 1994 la consli-
inicio en 1853. las reformas habidas fueron las de / 866, 1898, 1957 \1 federal, muchas provincias también han realizado las suyas.
/994.
16. - También a rafz de que la reforma de 1994 introdujo un a nueva
La de 1949 dejó un pruducto que quedó sin efecto dcspué:r: de la Revolución c:ategoría de autonomía local para la ciudad de BlIenos Aires, se reunió en
Libertadora del año 1955 contra el régimen peronista. La de 1972, en una época ck &ta. un cuerpo con calidad de "Est3luycnlC", que dictó el llamado "Estatu-
faclo. se aUloa tribuyó transitoriedad y rigió solamente hasta el golpe de estado de ID Organizativo", al que muchos confieren la naluraleza de una constilu·
1976. La de 1957 I UVO un \'icio de origen, porque seefeclu6 en un período de fa..:!O
y. por ende, no hubo declaración del congreso (disuelto) sobre la necesidad de la
ci6n.
reforma, la que fue sustituida por el poder ejecutivo de faclo. La de 1994\u \'0 prohi-
bida por la ley declara tiva de la neccsidad de reforma toda modificación en Jos 35
primeros artículos de la constitución. cuyo texto hubo de mantenerse sin varianle~,
de manera que las numerosas enmiendas que se introdujeron en 1994 qUCdaroll
ceñidas a: a) los Iluevos derechos y garantías que sc numeraron desde el at!. 36 al
ar\. 43: b) la parte o rgánica de la constitución.

El poder constituyente de las provincias

14. - Las provincias son estados w mponentes de nuestra fede ración.


y disponen de poder constituyente para organizarse. demro de los ¡rmites
que impone la ronstilución rederal. El ano5° es muy el aro en este senti do:
"cada provincia dictará para sí una constiluciÓo... ,. "de al.'Ucrdo .. .", y "que
.,
asegure... .
Quiere decir que el poder constituyente provincial. lanto el que se
repUla origi1/ario como el derivado, ofrece la curiosidad de subordi1/arse
a una instancia superior que lo condiciona, y que es la cOlfstituciÓ1/ federal
--como ya lo acabamos de recordar-o Este límite no es heterónomo porque
no proviene de afuera: no es colateral ni externo. Sus pautas quedan csbo·
zadas así: a) las constilUciones provinciales han de adecuarse al sistema
represe1/tativo republicano y a los prillcipios, declaraciones y garcmt(as
de la constitución federal ; b) deben asegurar el régimen municipal. fa
administración de justicia y la educación primaria, con más la obli ga-
ción explícit a (en virtud del actual arto 123) de que los municipios sean
autónomos en el orden institucional, político . administrativo , económico y
financiero; c) tienen prohibido invadir el área de las competenci as federa-
les.

15.-A partir del rulo / 985. sin que se hubiera reformado la constituci6n
federal, tom6 curso un ciclo de novísimo constitucionalisrro provincial, cuya inicio.-

CAJ>truLO 1V

EL ENCUADRE CONSTITUCIONAL DEL ESTADO ARGENTINO

Los nombres del estado

l . - Nuestro estado surgió en 1853·J860como eswdo IIlleVO, cons-


tituido por las provincias históricalllellle preexislemes que se organiza-
ron en federación en cumplimiento de pactos I3mbién preexistentes, según
reza el preámbulo.
El arto 35 de la constitución consigna una diversidad de denominacio-
nes o nombres, entre los que el más atractivo yde mejor ancestro histórico
es el de " Provincias Unidas del Río de la Plata", Sin embargo. del listado
contenido en ese ano 35 el uso actual ha dado curso a dos : Nación Argen-
tina, y República Argentina.

Los elementos del estado

2. - Los elementos que componen a nuestro estado son cuatro:


a) La población, como conjunto de personas que, en convivencia, com-
ponen nuestra sociedad. fonnada por nacionaJes y porexLCanjeros: es posi-
ble distinguir: a') la población integrada por ''habitantes'' con pemUlIIeu-
da habitual y estable. a la que cabe llamar "pueblo"; a") la población
integrada por residellfes sin habitualidad pemlll1lelife; a''' ) la población
formada por trallseúllfes. que, no obstante, mientras se hallan en territorio
argentino titularizan derechos y obligaciones de acuerdo con la constitu-
ción.

3. - El vocablo ''pueblo'' se usa. asimismo para denominar a la parte de la


población con derecbos polflicos: m.ás coocretanrllte, "pueblo" es acá el c •• t'tpo
electornl.
El.. "-",CUADRE COl'lSI IIUC10NAI.. DEL ESTADO AROEhTlNO 41
40 COMPENDIO DE OEREClIO COI\S1TlUll0NAL

Rechazamos la supuesta sinonimia de pueblo y noción.


necesita ser puesto "en aClo",o sea, tiene que ser impulsado y ejercido. De
ahí que haya que ailadir como cuarto elemento al gobierno. porque el pó-
4. - La Ilación como comunidad de personas que, en sentido socio- der sin gobierno es como un motor al que le falta quien lo accione.
lógico, tienon una misma nacionalidad (que no necesariamente coincide
con la nacionalidad "política" que adjudica el derecho POSilivo). no se or- 9. - d) El gobierno -que, valga repetir. no es lo mismo que el poder
ganiza ni se transforma en estado. En nuestra opin ión. fa 1IocióII 1/0 recibe y no se confunde con él- es el conjunto de personas que, como tituú¡res
organización política 1/; deviel/e estado. del poder, y con cal idad de gobemames, ejercen el poder del estado. Se
los llama también operadores cOllstituciOf/ales, y vienen diagramados como
En el vocabulario usado por el derecho constitucional argentino, y con base en órganos que desplieganfu1Iciolles, La actividad del gobierno se imputa al
el arto 35. "Nación Argentina" es uno de los nombres oficiales del estado. Asimis- estado en cuanto persona jurídica a la que los órganos gubernamen tales
mo, se empica el término "Nación" como alusivo a [a entidad política ronnada por representan .
las pro\'incias. para así denotar la dualidad federal de "estado federal" y"provin-
. ..
ceas . 10. - Cuando se habla de "división de poderes" hay que tener en
claro que el poder es uno solo y que no se divide. Lo que se divide son las
5. - En nuestro vocabulario personal. en vez de "Nación Argentina" fU1lciolles y los órganos que, clásicamente, fonnan una tnada: poder eje-
debe decirse República Argentina O Estado Argenlino: yen vez de "Na- cutivo, poder legislalivo. poder judicial.
ción" como unidad compuesta por provincias debe decirse "Estado fede-
ral" . 11. - En cJ nexo que vincula al gobierno con el poder se hablade una
legitimidad "de origen" y una legitimidad "de ejercicio". Con la legiti-
b) El segundo elemento del estado es el territorio como base
6. - midad de ori gen se alude al título del gobema1l1e, según haya accedido al
física o espacio geográfico. que se compone de: b') el suelo O superficie; poder de acuerdo a las normas o reglas consti tucionales Olegales; {Xlr eso,
b") el subsuelo; b''') el espacio aéreo; b"") un espacio marítimo a partir a los gobemallles de Jacto (de hecho) que no han llegado al poder según
delliloral marítimo. las vías o los procedimientos preestablecidos, se les niega legiti midad de
Según la constil udón, el estado federal es el que "arregla" los lfmites origen. La legi timidad de ejercicio se refiere al modo como se ejerce el
imcrnacionales y el que "fija" los imerprovinci alcs. poder, o sea, que tal legitimidad existe cuando el poderes ejercido para el
bien común público. y se pierde cuando hay apanamiento o violación de
7. - Respei:lo del to.1rritorio, ha de distinguirse lo que es dominio y lo que es ese fin.
jurisdicción, porque -por ejemplo- las provincias cosieras poseen el dominio del
espacio marítimo como parte integrante de su territorio, pero el estado federal tiene 12. - El art. 36 de la constitución descatifica e incrimina la interrupción por
jurisdicción parcial en él para fines determinados por la constitución (así, para el aClos de fucr"La del orden instilucionaJ y del sistema democrálico, asf como la usur-
comercio intcrprovincial e internacional, para la defensa y seguridad del estado, pación que en consecuencia se haga de las funciones gubemam:ntales. Acá juega
para los ju icios que según la norma del art. 116 son de competencia de los tribuna- la ausencia de legitimidad de origen.
les federales). En el mismo art. 36 está previsto el derecho de resistencia contra quienes
ejercen los actos de fuerza a que acabamos de referimos.
8. - c) El poderes el tercer elemento del estado, conel que la mayor
parte de la doctrina cierra la trilogía porque, a diferencia de nosotros, no 13. - El poder que al organizarse jurídicamente no deri va la validez
agrega como cuarto elcmento al gobierno. de su nonnaciÓll positiva de una instancia más alta en cuanto orden supe-
El poder -que es poder político porque es del estado-- ent.raña una rior, posee una cualidad que sc llama soberlUlÚl. La soberanía, entonces,
capacidad o potencia disponible para desarrollar la actividad conducente es una cualidad del poder que, según dijimos, carece de subordi nación o
al fin estatal de bien común publico. Por eso, el poder en cuanto potencia dependencia para organizarse jurídicamente. La soberanía no tiene titular,
42 COMPENDIO UE! DERECHO CONS III UaONAL EL ENCUADRE COS~'TITIJClONAl.. DEL ESTADO ARGE.VI'L.....O 43

ni reside en el pueblo (lo que reside en el pueblo es el poder constituyente libertad, con respeto a su digllidn.d. y con efecti va vigencia de los dere-
ori ginario). El cSladoes o no es soberano según que su poder posea o no la ellOS.
aludida cualidad de soberanía.
Habíancs anticipado que tal conc ....'Pto no aparece descri pto en la constitución,
no obstante que hay alusiones a la democracia en llurn!fOSOS califi¡;;ativos adjudica-
dos al sistema político (por ej., en los arts. 14 bis, 36, 38, 75 illcs. 19 y 24).
Formas de estado y de gobierno
Federalismo JI democracia, en cuanto formas de estado. mle-
18. -
14. - Cuando atendemos a nornlas de la constitución como las de
s~s arls. 10. 22, 39 Y 40, encontramos fo rmas de estado, fomlOs eje go-
grart los comenidos pétreos de nuestra constitución.
blen/o. y formas que se apodrul como semidirec/as.
19. _ En la eSIructura que éSIa delinea dentro del segmento dedicado
E/federalismo es una fa rma de estado. y no de gobierno. Lo repúbli· a la organización del poder (derecho constitucional del poder), la letra de
ca es una/om/a de gobiem o. La dem ocracia, que no viene definida en la la constitución divide lo que ella llama "Autoridades de la Nación" (o sea.
letra de la constitución. pero que integra su contenido, es una formo de autoridades del estado) en "gobierno federal" y "gobiernos de provincia"
estado. (con inclusión, desde la rcfomla.de 1994, de la Ciudad Autónoma de Bue-
Las dos forma.c; scmidirectas que introdujo la reforma de 1994 son la nos Aires) .
iniciativa legislativa popular y la cOf/sulta popular.

Sobre el f.::dcralismo onlitiremos ahora todo desarrollo, porque será objeto liel La población: nacionalidad, ciudadanía y extranjería
capítulo V.
El rubro constitucional dedicado a la población en cuanto ele-
20. -
15. - La república es un a fonna organizativa del gobiemo. a la que mento humano del estado obliga a analizar 10 que es la nacionalidad, la
se tipifica con los siguientes caracteres: a) divisió" de poderes (o sea. de ciudadruúa y laextranjerfa. Nacionales, ciudadanos, extranjeros. son serl!S
órganos y funciones); b) elecció" popular de los gobernantes; e) rempo- humanos que conviven socialmente.
ralidad del ejercicio del poder (o sea, renovación periódica de los gober-
nantes); d) publicidad de los actos del gobierno; e) respol/sabilidadde los 2 1. _ Ya dijimos que la nacionalidad a la que se refiere la constitución no es
gobernantes: f) igualdad ame la ley. la nacionalidad en sentido sociotógico (o sea. el vínculo espontáneo y natural que a
una persona la hace pertenet;er a una naCión); la nacionalidad regulada por el dere-
16. - La forma representariva, mencionada y definida en el 3rt. 22 cho constitucional es la ,wcionalidad "polftica" que. huelga repetir. depende de lo
de acuerdo al adagio de que "el pueblo se gobierna a sí mismo por medio que las normas jurídicas disponen.
de sus represcOlantes", no tiene ni puede tener, a juicio nuestro, existencia
y funcionamiento. senci llamente porque una pluralidad tan heterogénea de Esta nacio1/alidad política se define como la situación jurídica con
personas y grupos como es la sociedad (el pueblo) carece de la mínima que una persona es invesIida por el derecho positi vo en relación al estado.
unidad indispensable. tanlo en su composición como en sus fines parcia- según el criterio que ese dcrecho positi vo adopta (por ej., el lugar de naci~
les, para hacer viable fácticamenle su representación en cuanlo totalidad. miento, la nacionalidad paterna, la naturalización, el domicilio, cte.). Si
reducimos las catcgorías a las de "ius soli" y "ius sanguinis", decimos que
17. - La democracia es una forma de estado porque, como toda for- nuestra constitución ha elegido el "ius soli".
ma de estado, implica relación entre el poder y otro elemento (que puede
ser el territorio en el federalismo. o el pueblo en la democracia) y que, por 22. _ La ciudadallfa.lomada científicamente desde el punto de vista
ser el pueblo, sitúa a las personas que fonnan parte de él en un régimen de doctrinario. es también una siluación jurídica que depende del derecho
44 COMPl;:NDIO DE DERECHO COl\-sn-ruOONAL 45
..... ADO ARGn.-rtNO
EL ENCUADRE COI"'Sliil'OO/'.'AL 0 ~"_' """.

positi vo. y que ostenlanlas personas que titulari zan el ejercicio de los de- . . ' d d' . perjuicio de los ciudadanos de otra
rechos políticos. mooificar la condición de CIU a a!~ocn . . que de dicho ar-
. ti .o de los Ciudadanos prOpiOS. por
provincia, ll1 en bene IC I . , l' ldad de lodos los ciu-
En nuestra <:onstilUción , la ciudadanía está identificada COI/ la "a_ lículo se desprende el principiO que consagra a Igua
ciol/alidad, de modo que lodos los nacionales son ciudadal1os. y vice- dadanos en todas las provincias.
versa: ello se in fiere del ano 20. cuando dice que los eXlranjeros gozan en
.,' (a..:tinmente) a la mujer casada con
el territorio argentino de los mi smos derechos civiles del "ciudadano", o 27, ~ No sería constitucional Imponer ~co sería incollslitucional que la tey
sea. de quien por haber nacido acá no es extranjero sino "nacional", Ade- . I 'onalidad de éste aunque !lO . l'
un argcntillo a nacl . . 'echo de elegir (volulllanamente) la naClona ¡-
más. el mismo ano20 aclara que los extranjeros no están obligados a ad- previera en caso de malnmOIllOel ~e~ I lIJal art 75 ioc, 12 prevé la
mitir la ciudad anía. o sea, la nacionalidad por naturalización. dad argcnúna dd cónyuge, Esto ultuno porqu~ e ac .
"opción" en beneficio de la Llacionalidad argcntma.

23. - Deslindemos, entonces, lo que a la fecha creemos que deriva dos de J'erarquía constilucio-
28 _ConlareformadeI994 , haYlfUla. '11 I
tanto de la constitución (incluso después de su reforma en 1994) COlUOde ' " d' nacionalidad. Una de e as, en e
la ley 346. Hay: a) nacionalidad por 1/acimielllo, llamada así mismo Ilati- nal que contienen normas t.::n matena : e roda perwl/a tiene dere-
va, natural, O de origen, que surge de aplieru;el .tius solí", y que es igual a Pacto de San J~sé d~ Cost~ Ri,ca, C~~SI]~;~~~os Civiles .y Políticos, y la
ciudadal/ía (también natural); b) l/aciol/alidad por opción, a favor de elw a 1I11~1 Iwc/Ollall~(l,~, El :~t~~ ño, conlicnen normas similares: La ~la­
quicnes son hijos de argentinos nativos que nacen en el extranjero y que ConvencIón sobre ~I:rech~s .e 1_ Convención sobre la Elimmaclón
"optan" por la nacional idad paterna o materna argentina: e) I/ociol/alidad cionalidad está preVista, ~SIll~ISI~IO, ~~ aRada! y de Discriminación contra
de todas las Formas de Dlscnmlllacl 11
por lJaturali:ación, que se confiere al extranjero que la solicita y que reú-
ne las condiciones fijadas en la constitución y en la ley. la Mujer,

24. - La nacionalidad por opción y por naturalización son vo/ullta. ,


El derecho constitucional de los extranjeros
rias. y quedan sujetas a cvelll ual pérdida, si concurre una causal razona-
ble. En cambio, eSLamos cienos de que /a nacionalidad flmiva 110 admite
pénlilÚl , y si acaso una ley establece lo l:ontrario, hay que decir que esa ley 29. _Nacionales y extranjeros titulari~~ I~~~~,~~~~e::;~~~:~
es inconsti tucional ; ello porque la nacionalidad nati va está automática y les, según los a~s. 14 y ~O. AClualme~te~ p~~~ro lado, son muchas las
direclameme alrihuida por la conslilución a quienes nacen en territorio abarcali va también de I~s dcre~os ~l~~ con jerarquía constitucional
argentino. cláusul as de tratados dI: derec OS b' an'as se prohíben incJu-
. . .
que entre las dlscnnunac ,
' ones que por ser ar . ur 1 é ' '
ycn\a que se sustenta en el origen racial o naclOna o trllco.
25. - Por la identidad entre nacionalidad y ciudadanía, si la nacionalidad
nativa no lolera pérdida, su equivaleme ciudadanía natural tampoco. A la inversa, d - de la igualdad de los extranjeros
cuando se pierde la nacionalidad por opción o por naturalización se pierden las 30. - Es impoltante l'~cO\~ocer qU':ia~~ma; cierto que toda persona. sea o no
equivalentes ciudadanías. que se hallan en nuestro ternt~n~, de~lt¡nO ~eda sometida ajurisdicción argell-
habitalllc, se halle o no en lI::mlOr.l0 ~J r I~; aClos que realiza en el país desde el
26. - Nuestro derecho constitucional acoge launidad de la naciona- tina y al ampa~ de tlu~~tra COl.1Sl]~UC:,;: uc implica reconocerle su dere\:ho de
lidad ; Osea que, salvo la excepción de doble o múltiple nacionalidad (deri- exterior (por ej. , adqu!nr un bIen 1m 17) T;l protccción, por ende. cubre bien~s y
vada habitualmeme de tratados internacionales), cada persona solamente propiedad a tenor del art. 14 y del arto .. L s personas colectivas o jurídicas
capitales que cxtranjero¡¡ tieneLl en ArgentLlla. a
liene una " acionalidad, La nacionalidad, además, es una sola para todo -es decir, no físicas- gozan de anliloga cobertura.
e/ pafs, y lo que es consecuencia de ello: 110 hay nacionalidad lIi ciudada-
nía provincia/es. El art. 8° da a elllender que las provincias no pueden 3 1, _ Cuando repasamos el dcrecl,l~ constitucional de los extranje-
ros, comenzamos con su ingreso y admISIón.
46 COMPf.NUlO DE DERECHO CONS'nnJL10NAL Er. ENO ADRE CONsmlJCiONAr . DFL EST r.oo AKGE1,tl1¡'¡O 47

Esta dualidad significa que hay un delC!cho "a elllrar" al territorio está en terri torio argentino. titulariza determinados derechos que a ningu-
argcnl ino (que el éiI1. 14 atribuye a los habitantes), que deriva no sólo de la na persona le pueden ser negados (a la vida. a la salud, al debi.do~.
igualdad de derechos entre nacionales y extranjeros. sino de la convocato- etc.). Hay, al contrario. otros derechos que no pueden ser cJerctdos por
ria que hace el preámbulo a todos los que quieran habitar en el país. Esta quienes. según su cal idad de residen~ia ¡) pennanencia. qu~dan raz?nabl~­
"elllrada" no es un acceso puramente físico porque, además de "entrar", mente excluidos (por ej .. para trabaj ar eS menester revestIr una cIerta SI-
hace falla que quien ingresa cumpla ciertas condiciones razonables de con- tuación de residencia que. con suficiente r31..onabilidad. esté exigida por la
trol y admisibilidad. a e fectos de alcanzar Wla pemulI/el/c;a legal. ley).

La adm.isión de clttranjcros guarda cierta relación con el (,silo polftico y con la 36. ~ La expulsi6n de extranjeros - li sa y lIana- es para nosotros
protccción qUl: el dCfL'Cho illlernacitlllal dispensa a los refugiallos (que son perso. i1lconstitucional. porque los argentinos no son pasibles de ella, de modo
nas que han abandonado su país de origen por temor a persecuciones a causa de su
raza, rdigión, opiniones polílicas, nacionalidad, ctc.). que la igualdad de derechos civ iles que consagra el art 20 para ambos
hace arbitraria la discriminación.
32. - En el tema del ingreso y la admisión de ex;tranjcros hace fuerte La expulsión inconstitucional es la que se consuma en desmedro de
presencia la obligació/I que el arto 25 impone al gobierno federal para extranjeros que. por su situ ación legal o fáctica. tienen un derecho "a per-
fomel/tar la il/migración (la norma la califi ca como "europea", debido a manecer" que el arto 14 reconoce a todos los habitantes. Tal derecho no se
que a la época de dictarse la constitución era casi la úni ca posible para pierde ni aun cuando e l extranjero delinca.
cumplir con los fines útiles que [a misma norma señala : labrar la lierra. No es expulsión (y por ende. no es inconstitucional) la !iaJida, incluso
mejorar las industrias. elc.). compulsiva, de extranjeros que ingresan ilegalmente (siemp~e que tal sali-
Una inlerprewción hislóricamellle actualizada nos lleva a dar porck:rto da sea relativamente inmediata. pero no si recién es compehda cuando ha
que ahora la promoción inmigratoria no se recluye en favor de personas de transcurrido largo ti empo desde la entrada ilegal. pues en tal c~o bien
origen europeo. sino de todas cuaOlas cumplan las condiciones que prevé cabe alegar que el extranjero "ilegal" se ha trans~ormadO en h~bilante).
el ar!. 25. Asimismo. las pautas sobre inmigración no se limitan a [a que es Tampoco es expulsión la salida. incluso compulSIva, de eXlranJCros co~
plural o masiva. sino que alcanzan también al ingreso individual de ex- residencia te mporaria o Iransitoria que se quedan en el país una vez vencI-
Iranjeros. do el plazo aUlorizado para permanecer.
En jurisprudencia a nuestro criterio equ ivocada. la ~orte consid.eró
33. - El arto 14 alude al derecho de permanecer, una vez que men- que la expulsión (para nosotros inadmiSible) noes contrana a la conSlltu-
cionó el derecho Je entrar. Hay que ver, entonces, un mínimo de tres supues-
tos. que son: a) el de los residel//es "ilegales ", que ingresaron eludiendo o ción.
no some tiéndose al conlrol y a las condiciones razonables, o que habiendo
37. - Las denegatori as de pcnnancneia o de radicación que no satis-
entrado legalmente por tiempo determinado, pennanecen una vez vencida
fac en razonabilidad de causa y fundamento son inC01/Slilllciollales.
la aut~rizaeión para permanecer; b) los residellles "tempora rios", que
son qUIenes pcrman~en durante el lapso autorizado, a cuyo témlino deben
salir, o renovar su residencia: e) fmalmente, los residelltes "pennof/en- 38. _ Los traJados iTllemadorrales que fonnan parte del derecho
tes". que son habitantes de permanencia regular. argentino, tengan o no jerarquía ~onstitucional , y que .habilitan I~ expul-
sión de extranjeros. no deben aplicarse. porque el propiO derecho tntema-
34. - El extranjero que se naturaliza argentino deja de ser cxlranje. donal hace prevalecer en tal supuesto la aplicación de normas -inte.~as o
ro. internacionales- que son más favorabl es para la persona. y ya dIjImos
que, conforme a nueSlra interpretación. la constitución impide la expul-
35. - Todo extranjero que. cualquiera sea su calidad de residencia. sión de extranjeros.
48 CoMI'El-'OI0 DE DERECHO CONSTIruOONAL

39. - Es útil también recordar que "salir" del países Wl derecho y no


una obligación, lo que vale para respaldar la noción de que en los casos
que a juicio nuestro configuran expulsiones inconstitucionales. el estado
se arroga la competenciadcconvenirel "derecho" a salir en el "deber" de
irse.

Las obligaciones constitucionales CAPfTULO V

40. - Conviene que el panorama descriptivo del encuadre constitu- EL FEDERALISMO ARGENTINO
cional de nuestro estado incl uya. aunque sea someramente, una referencia
a lo que damos en llamar obl igaciones constitucionales. Obligación es acá
sinónimo de deber, y permite trasladar al tema la tríada que el derecho Fisonomía y origen
privado compone con: a) obligaciones de dar; b obligaciones de hacer; e)
obligaciones de omitir. L- Nuestra const itución adopla la forma fedcral de eSlado. Ella
Así como hay derechos implícitos. hay también obLigaciof/es implí- importa una relación del poder COII el rerrilorio: el poder se descentraN-
citas. w políricameme eOIl baseftsica. geográfica o IerrilOrial.
Las ob ligaciones conslitucionales pueden recaer: a) en el estado (fe- Fedcralismo es lo opuesto a unitarismo. Además. combina una fuerza
deral, provincial. municipal. y en [a Ciudad Autónoma de Buenos Aires): cel/trífuga en cuanto descentraliza al ¡xxJer. con una fuerza cel/tripeta en
b) en todos los Iwbitallles. sea en relaciones entre particularcs, sea en rela- cuanto la pluralidad y autonomfa de varios estados se integra en la unidad
ción con el estado; e) en los ciudadanos (si se toma la ciudadanía en sen- de uno solo: el estado federal.
tido restringido. COmo por ej., para armarse en defensa de la patria y la Con la refornla de 1994 hay que completar el cuadro: en las provin-
constitución -ano 20-; para votar -art. 37-). cias hay. y debe haber. municipios con autonomía colúorme a los arts. 5° y
123; y a las provinci as se suma un nuevo sujcto de la relación federal, que
41. - La constituci ón emplea en su texto una serie de palabras que. es la Ciudad Autónoma de Bue1los Aires.
sea con una expresión o con otra, no dejan duda de que se está refiri endo a
obligaciones o deberes del estado. del gobierno. de los órganos de poder, y 2. ~ La federación argentina surge como estado nuevo con la consti-
a compete1lcias cuyo ejercicio viene impuesto también imperarivamente. tución de 1853. La provincia disidente de Buenos Aires se incorpora en
o sujeto a condiciones que implican la obligación de atenerse aellas aUIl- 1860, y deja clausurado en esa fecha el ciclo de poder cOllsrituyeme origi-
que. acaso, la competencia no sea en sí misma de ejercicio obligatorio. nario.
Pero ha de recordarse que el federalismo no ha sido una improvisa-
42. - Para el sistema eonsLitucional de derechos humanos es muy ción ni una creación repentina, sino que ha estado precedido por un proce-
importante tomar en cuenta la reciprocidad de derechos y obligaciones. SO que fue gestando su realidad sociológica y política.
para señalar cuáles son las obligaciones que el estado y los particulares
--en cuanto sujetos pasivos- deben cumplir en relación con las personas 3. - En apretado resumen. retrocediendo a la etapa anterior a 1810,
que titulari zan derechos como sujeto activo. Tales obligaciones pueden hay que mencionar a las ciudades qut: la colonización española fue fun-
ser de omisión o abstención. de dar y de hacer (estas dos implican presta- dando en las corrientes del norte, del oeste y del Río de la Plata, y que
ciones positivas -por ej .. pagar el salario. otorgar horarios de descanso extendieron sus zonas de influencia preparando las futuras regiones terri-
laboral, brindar atención médica paga o gratuita, etc.-). toriales.
50 COMPENDIO 00 DERl:.CI~O COXS I [¡liaONA!. El l'U>ERALlSMO ARGENJ1NO 51

Por otro tado. los órganos de gobiernos locales -sobre lodo los cabil- l..as relaciones feder .. les
dos- proporcionaron al federalismo futuro una haS\:! municipal o comunaL
Ideológicamellte, desde la revolución de Mayo. se perfil aron dos sec- 7. - Hay tres relaciones típicas en la estructura federal, que son:
lores: el unitario y el federal que. un poco ligeramente. ll eva a recordar a) la re lación de subordinaciólI, en virtud de la cual los ordenamientos
que el unitarismo fue prepondcrantcmentc monárquico, liheral. centralis- locales han de ajustarse 01 ordenamiento federal; de esta relación dan testi-
ta, y de fuerte influencia porteña, en tanto el federalismo aglutinaba a la monio los arlS. 5°, 31. 12\ 75 illes. 22 y 24, Y 128;
masa popular e inorgánica de tendencia republicana y federalista. Sin que b) la panic;paciól/. cn virtud de la cual se da cierto espacio a la cola-
esto signifique una coi ncidencia perfecta, cabe situar al principal núcleo boración de las provincias en las decisiones del gobierno federal; en nues·
rcpresenlati vo de la corriente unilaria en la capital, y al pu,eblo federal en la tra constitución, se institucionaliza en la cámara de selwdore5. que en
campai'ia. representación de las provincias integra el congreso federal:
4. _ La cronología histórica del federalismo argentino reconoce tres c) la coordinación, por su lado, delimita las competencias federales y
fucn~as de integración, que son otros lantos factores de predisposición: a) provinciales mediante una distribución o un reparto. que merece un denso
una fu erza proveniente del medio jísico- fl(//ural (fuen:a mesológica), don- desarrollo explicativo.
de la situación capitalina de Buenos Airesjugó como polo de atracción de
las provincias. y conformó el diseño de un ámbito territorial preexisteme a
1853-1860; b) Wla fuena ideológica. que es la doctrina federal. cuya me- El repano de competellcias
jor expresióll sistematizada fue el pensamiento oriental con basecnAnigas:
e) una fuerza imlrumemadora. que fue aponada por los paclos itlferpro· 8. - Hay que empezar por e l ano 121. según el cual las provillcias
vil/ciales. COl/servlll/ todo el poder l/O delegado por /a cOllstitucióu al gobiemo
federal, y el que ex.presamente se hayan reservado por pactos especiales al
5. - De todo este proceso genético inferimos que el federalismo que tiempo de su incorporación.
el constituyente organizó en 1853-1860 es un colltel/ido pétreo de la cons- En primer lugar. la delegación ha sido efectuada por las provincias (/
titución, que se puede reformar pero no se puede suprimir. través de la const itución: o sea, mediallIe la cOl/slilució1l.
En segundo lugar. la norma esclarece que el poder de las provi ncias
preexisti6 al del gobierno federal. que ha recibido el suyo por delegación
El derecho "federal" que ellas le hicieron a través de la constilución. De tal mooo, el poder
provincial fue y es el poder origüwrio.
6. - Nuestra estructura federa l ha dado curso a la expresión "derecho fede-
ral". En sentido amplio, e~ta denominación alude al derecho emanado del estado En lercer lugar, el repano de competencias arroja este resultado: a)
federal a través del gobierno federal. competencias exclusivas del estado federal; b) competencias eXc!IHivas
No obstante, en nuestro derecho constitucional hay que hacer un desglose den- de las provincias; c) competencias cOllcurrellles; d) competencias excep·
tro del sentido amplio del derecho fede ral para dar lugar al llamado "derecho 00- cionales del estado federal y de las provincias: e) compelencias compar-
l/l/in". El derecho común queda li brado para su interpretación y aplicación a los tidas por el estado federal y las provincias.
tribunales locales (art. 75 inc. 12), y prevalece sobre el derecho provincial. Tal lo
que se desprende del MI. 31. Las prohibidas a las provincias constan en los ans. 126 y 127.
Otro rubro del derecho federal merece el nombre de derecho "intra.federal", y
se compone de las relaciones de las provincias con el estado federal, y de las relacio- 9. - Vamos a algunos ejemplos.
nes interprovinciales -por ej., los tra tados interprovinciales-. Son competencias exclusivas del gobierno federal: la intervención
52 COMPENDIO UE DERECIIO l-"ONSII IUnONAL 53

federal; el estado de sitio; las relaciones intemacionalcs: dictar los códigos Las provincias
de fondo, etc.
Son competencias exclusivas de laI provincias: dictar la constitución 14. - Las provi ncias son las tmid(ldes políticas que, con calidad de
provincial, las leyes procesales, las que establecen impuestos directos: lo estados. integran nuestra federaci ón. No son soberanas. pero sí 5011 aut6-
IWmas (para ambas cosas remitimos a los ms. 5°. 31, 122 Y 123). Histó-
referente a asegurar el régimen de autononúa de sus municipios y la educa·
ricamente, son p~exis(elltes al eslado rederal. aunque solamente las catar-
ción primaria. Conviene remitir a los arts. 121. 122, 123 Y 124.
ee que existían al ejercerse en 1853·1860 el poder constituyente origina-
Entre las competencias cOl/currel1les se hallan los impuestos indirec- rio.
tos inlernos, y laS que surgen del an. 125 concordado con el75 ¡nc. 18.
más las de los arts. 41 y 7S ¡ne. 17. Al estar prevista cnla constitucióllla incorporación y creacioo de nuevas pro-
Como facu llades excepcioll(lle.~ del esrado federal cabe citar la de vincias (ver los arts. 13, 75 ine. 15 y 121) hem:ls de afirm:tr que adquieren idén/ico
status que las preexistentes.
establecer impuestos directos en el marco severo del arlo 75 ine. 20 y sola-
Las ca/orce prc/I'incias preexislenles no pueden su primirse ni fusionarse, por-
mente por tiempo determinado.
que su realidad e identidad cuentan con m{¡, his/6rica, de modo qut! el federalismo
Las competencias excepciol/ales de las provillcias ofrecen poco mar- en cuanto comenido pétreo impide su desaparici6n.
gen de ejemplos: así, dictar los códigos de fondo mientras no los dicta o
haya dictado el congreso. Para esto. remitimos al art. 126. 15. ~ Los lfm;f('s inlcrprorincialcs son fijados por d congreso (art. 75 inc.
15). En tal delimitación, respcc10 de las provincias histocicamente preexistentes,
10. - Las competencias COlllfJartidas intcgran una categoría que no dejamos aclarado que el congreso no dispone de disercclonalidad COIDJ para igno-
rar o alterar la dimensión que a cada una de aqu.:llas prm'incias le corrcsponúc por
ha sido habitual explicar. No deben confundirse con las concurrentes, pues sus antecedentes históricos.
las concurrentes son las que tanto pueden ejercer el estado fcdera l como
Los conflictos entre prol'incia,\' están previstos en d art. 127, que prohíbe La
las provincias, mient ras que las compartidas requieren una doMe decisiól/ gucn'a entre ellas y que deriva a la competencia de la Corle Suprema "dirimir" las
illlegratoria-por ej., cuando debe intervenir el estado federal yuna o más "queja~" entre provincias. (El ra.!lo de la Corte de 1987 en el litigio entre La Pampa
provincias participantes en la I1jaci6n de la capilal federal (art. 3°), o en la y Mendoza por la interprovincialidad del rro Atuel es ejemplo de un caso relevante
crcación de nuevas provincias (art. 13)--. en el tema.)
Según el arto 70 los aclos públicos y procedimientos judiciales de una pro"ill'
11. - Asr como Las competencias exclusivas del estado f\-"(Ieral se suponen cia gozan de entera re en Las denús. la jurisprudencia de la Corte añade que se les
prohibidas a las provincias, las exclusivas de Las provincias se reputan prohibidas al debe asignar el mismo efecto que SOIl capae!.!s de producir en la provincia de origen.
estado federal. E! arl. 80 prescribe que Jos "ciudadanos" de cada prol'incia gozan de los de-
rechos, privilegios e inmunidades inherentes a ese tímlo de ciudadano en las demás.
12. - Se ha de tener muy presente que las competencias excl usivas Asimismo, la extradición de criminales es obligación reciproca de todas las provino
del estado federal no exigen hallarse taxativamCllIe enumeradas en la cons- cias.
titución, porque las hay implícitas en los tres órganos de ¡x>der: legislati-
vo, ejecutivo, y judiciaL Para el congreso, el arto 75 inc. 32 las contempla. 16. - La unidad territorial implica que el terri torio del estado fede -
ral es uno solo, no obstante la pluralidad de provincias. Entendemos que el
13. - La observación de la praxis constitucional pone en claro que ha habido gobierno federal no puede alterar el elemento territorial de las provincias
una marcada innaciÓll de las competencias federales, a veces en desmedro del re· sin consentimiento de sus legislaturas (por apliC<lci6n de los arts. 3° y 13).
parto que efectúa la constitución formal. Se trata de una mil/ación que, cuando viola
la constituciÓll, es inconsritucional. 17. - La integn'dnd de las provincias conduce al siguiente desglose:
a) el dominio de sus biencs no ha sido delegado al estado federal; actual-
CO.\o1I'El\'DIO l>I:. Ot:.Rf.cIiO CO¡';Srm.;OONAl.. EL "WERAUSMO ARGENTINO 55

mente. el arto 124 les reconoce el dominio originario de los recursos natu- el desarrollo económico y social. y para estableccr órganos con facuJ ta·
rales existentes en sus territorios: b) deslindar cuáles de esos bienes son de des destinadas al cumplimiento de sus fines.
dominio público y de dominio pri vado de las provincias es competencia
del congreso. porque se trata de una cuestión propia del código civil; e) es Entendemos que las regiones no se convierten en una nueva estructura política
que viene a intercalarse en la estructura fede ral, por lo que tampoco los recién cita-
competencia provincial la legislación sobre el uso y goct:: de csos bienes; d)
dos órganos regionales son niveles de decisión polflica.
dominio y jurisdicción no coinciden (porej., los ríos de las provincias son
de dominio provincial en las aguas que corren por sus territorios. pero la Como síntesis diremos: a) sólo las provi"CÜIS puede" crear regio-
jurisdicción es federal a efectos de la navegación y el comercio interpro- nes; b) el estado federal no tiene esa facuJtad pero: b') puede participaren
vincial). tratados entreé l y las provincias con fmes de regionalización; e) el congre-
so debe promover (X)líticas di ferenciadas para equilibrar el desigual desa-
Un listado de cuanto ..:ntra en d dominio y la jurisdicción provinciales puede rrollo relativo de provincias y regiones. según la letra del arto 75 inc. 19
ser este: recursos naturales, subsuelo. mar territorial. plataforma ~ubmari"a, espa-
segundo párrafo; aun así, tal {X)lítica de promoción regional no importa
cio ao5r..:o, ríos, lagos yaguas, camino!>. islas (cuandO el álveo es provincial), playas
marinas, riberas interiores de los río~, ctc. Las leyes opuestas a estos principios son,
una atribución para crear regiones; más bien, equivale a Wla especie de
a juicio nuestro, inconstitucionales. demarcación territorializada para superar el desequilibrio y la desigualdad
entre provincias y regiones.

Lm nml/icipio.~
La ciudad de Buenos Aires
18. - Hemos ya recordado que el viejo ano S" de la conSlitución obli-
gaba -y sigue obligando- a las provincias a asegurar su régimell mUllici- 20. - La reforma de 1994 trazó un lineamiento mínimo para laatllo-
pal, Siempre descubrimos allí, implícitamente, la autonomí(/ municipal. flomía de la ciudad de Buenos Aires. previn iendo [a acumulación de tal
status con su actual calidad de capiJal federal.
pero la jurisprudencia de la Corte sostuvO -hasta 1989- que sólo eran
descentralizaciones administrativas con cualidad de autarquía. El arto 129 alude a un régimen de gobiemo autónomo. co" faculta-
des propias de legislació1I y jurisdicción, y a la elección popular directa
El cambio de ese cri terio en el cilado año 1989. y el constitucional is-
del jefe de gobierno. Asimismo, previ6 que una ley garantizaría los intere-
mo provincial enlre 1957 y 1985 hasta hoy, nos convencen deque en nues-
ses del estado federal mientras la ciudad fuera capital de la república. Por
Ira estructura federal hay una trinidad: provincias. mUllicipios. estado Je-
fin, dio curso para que el congreso convocara a los habitantes de la ciudad
deral. para elegir a los integrantes de un cuerpo destinado a dictar el Estatuto
Desde 1994, la reformaconstilucional especi ficó la autonomía muni- Organiwtivo de las insti tuciones locales.
cipal en los términos del arto 123. Yañadió un nuevo sujeto de la relación
federal con la Ciudad AUTónoma de Buellos Aires (art. 129). 21. - Conforme a este diseño. nuestra interpretación es la siguiente:
a) el territorio de la ciudad ya 1/0 está totalmemeJederalizado sino sujeto

ajurisdicci6n federal ¡Jarcialme"te, sólo en lo que se refiere a los intereses
La regionalización que en dicho territorio inviste el estado federal, en razón de residir allí el
gobierno federal y de estar situada la capital federal; b) tal jurisdicción
19. - La misma reforma de 1994 formalizó el reconocimiento de la federal parcial tiene sentido institucional y competencial, pero no territo-
regionalizaci6n. El arto 124 atribuye a las provincias (como facultad que rial , porque el lugar no está fcderalizado; e) la ciudad de Buenos Aires no
para nosotros cs cxclusiva de ellas) la posibilidad de crear regio,(es ¡Jara alcanza la categoría de provincia, pero su autonomía es más amplia que la
56 COMPENDIO DI:. DERECHO COXS IllUQONAL EL FEVEIlAUSMO "11.0 E.''11NO 57

de los municipios: d) como nuevo sujeto de la re/acitmfederal, cabe atri· en los territorios nm..ionales que queden fuera de los límites asignooos a las
buirle -según sólidas opiniones-la categoría de municipio "federado", provincias.
similar a 10 que se sue le entender por "ciudad-estado". Actualmente. l/O fl"islell territorios nacionales -anles llamados
gobernaciones--. porque ellcrritorio argentino se compone ahora solamen-
te de provincias, más el de la ciudad de Buenos Aires con su régimen auto-
Los lugares de jurisdicción federal nómico.
22. - El ar!. 75 ¡lIe, 30 ha atribuido al congreso la facullad de ejercer El último territorio nacional fue provincializ..ado con el nombre de Tierra del
una legislación exclusiva en el territnrio de fa capital, y dictar la necesa- Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur. y en 1991, cOrnJ nueva provincia, dictó
ria para cumplir con los fines específicos de los establecimiemos de utili- su constitución local.
dad IIacio1lal en el territorio de la república. Y añade que fas autoridades El sector alltánico argelltino es un territorio sometido inlcmacionalrnwte al
provinciales y municipales conservarán los poderes de polida e imposi- Tratado Antártico. del que Argentina es parle.
ción sobre tales establecimientos. en tanto no interfieran en el cumplimiento
de los fines antes seí\alados. 26. - La cláusula lransitoria 1" de la constitución rcfon11ada en 1994
reivindica la territorialidad argentina de las Islas Malvillas. Georgias del
23. - En cuanto a la legislaci611 eu la capilal federal, hay que ad- Sur}' Salldwicl¡ del Sur, mús los espacios marítimos e insulares corres-
vertir que: a) mientras la capital esté ubicada en la ciudad autónoma de pondientes.
Buenos Aires. tallegislaeión no es "exclusiva", porque el art. 129lc con-
fiere a dicha ciudad facultades de legislación, y la cláusula transitoria IS-
reservó la legislación exclusiva sólo hasta que se constituyeran los pode- La intervención federal
res locales propios de la autonomía: b) a partir de tal momento. la compe-
tencia legislativa del congreso se limita a garantizar los intereses federa- 27. _ Nueslra constitución prevé la garmllía federal. Ella significa
les en la ciudad, siempre mientras ella sea capital federal. que el estado federal asegura, protege y vigila la integridad. la autononúa y
la subsistencia de las provincias dentro de la unidad coherente de la federa-
24. - En cualllO a lo que. respecto de los esrablecimiemos de utili- ción a la que pertenecen.
dad IIacional, podemos llamar "enclaves" en territorio de las provincias. La propia intervención federal es el recurso extremo y el remedio tal
la competencia legislativa del congreso viene calificada por la constitución vez más duro que se depara como garantía federal.
como aquélla que es lIecesaria y circullscripra a los filies de los mellcio- Esta gardJ1tía federal queda condicionada al cumplimiento de las pau-
nadas establecimiel/los. De este modo, se supero en mucho Jaque la letra tas que las provincias tienen obl igación de respetar y cumplir, dentro de la
del viejo inc. 27 del que fue ano 67 consignaba. y laque en una mala ¡mer- relación de subordinación que es típica de los estados federales.
pretaciónjudicial había sostenido la Corte entre 1968 y 1976, cuando juz-
gó que tales "enclaves" eran lugares de jurisdicción federal amplia y exclu-
siva. TIpologra. causas y filies en las distintas clases de illten'ellci6n
28. - La intervención federal procura conservar, defender o restau-
Los territorios I/acionales rar -según el caso--la integración autonómica de las provincias. cuando
hay dislocamientos o peligros que la perlurban o amenazan.
25. - El inc. IS del art. 75 sigue previendo la competencia del con-
El arto 6° hablade intervenir "en" cltclTitorio de las provincias, y no
greso para legislar en materia de organización, administración y gobierno
de intervenir "a" las provincias. Elto pcrnlite pensar que la constitución no

, ,
58 COMPENDIO DE DERECHO CUN~"TTIU(10~'AL 59

impone nc¡,;csa.ria ni cJararncnteque la inlervención haga caducar, sustituir los ejemplos (en forma similar a la declaración del estado de silio) más' elocuentes de
o desplazar a las autoridades provinciales. una mutación cons/ill4CWfWI transgresora de la constitución f\lnna!.
No obslallle, el actual an o75 inc. 31 establece entre las competencias
del congreso. la de "disponer la Inlcrvenci6n 'a' una provincia o a la ciu- 32. - El art. 6° no individualiza cuál es el órgano del gobierno fede-
dad de Buenos Aires", ral que tiene competencia para intervenir. El actual un. 75 illc. 31 especi-
fica que es competencia del congreso, en tanto el un. 99 ¡ne. 20 establece
29. - Vamos a desdoblar la intervención que puede disponer el go- que si el congreso está en receso puede intervenir el presidente de la repú-
bierno federal: blica. quien simu ltáneamente debe convocarlo; finalmente. la norma del
art, 75 ine. 31 dice que el congreso puede aprobar o revocar la intervención
a) por sí sólo. "para" garantiz.ar la /anlla republicana de gobiemo. o
repeler ¡IIm.fiones ex/en'ores: que dural1le su receso decretó el poderejecutivo.
b) (/ requi,ficiólI de las autoridades cOllsticuidas. "para" sostener/m'
33. - La intervención federal es un ru:lode lltUuraleza política, pero
o restablecer/as si han sido depuestas por sedición o por invasiól/ de Olm
provincia. ello no significa que escape al control judicial de eonslituciooa1idad. Por
ende, no le reconocemos la calidad de r..;ucstión política "no judiciable".
A tenor de esta dualidad, las causas de la interwnción federal se resu- aun cuando yaen 1893 la Corte la definió así cn el caso "Cullen d Llcrena".
men así;
a') garanlizar la forma republi- 34. - Ln designación del intervelllar federal es siempre y en todos
a) sin pedido de la provincia ' "para" cana alterada, O los casos una facultad del poder ejecutivo (an, 99 inc. 7°). El interventor
a") repeler invasiones exteriores; es un funcionario federal quercpresenta al gobierno federal. Sus atribucio-
nes dependen, en cadaeaso, del actO concreto de intervención. de la finali-
b) COII pedido de las UUlOri-¡ b') sostenerlas o b") restablecer- dad yel alcance que se le ha asignado al disponerla . y de las instrucciones
dades provincial es "para" las cuando hay sedición o inva- precisas que se le imparten al interventor por el poder ejecutivo,
sión de Olt3 provincia.
35. - La intervención no extingue la pcrsonalidad jurldica de la pro\"incia ni
30. - Según cada situación. la intervención que disfX1ne el gobierno suprime su autononúu. Ergo, e l interventor debe respetar la constitución y el dere-
fed:ral por su. propia inici~tiva puede ser, a la vez, unafacl.Ilrad y una cho local, apartándose sólo y excepcionalmente si tiene que dar prioridad al derecho
obhgaclólJ. aSI como tambtén puede operar como slIlIcionaroria O como federal de la intervenci6n, y ello debido II la su premacía de la constituci6n federal.
restauradora.
T~lbién resulta viable que a una causa1 de intervención fX1r iniciati va 36. - F.Jl la medida en que caducan autoridades provinciales, el in-
del gobIerno federal se le sume Olta causa1 para intervenir a requisición de terventor opera como sustituto y asume sus funci ones, con excepción de
las autoridades provinciales. las judiciales. porque aun si la intervención alcanza al poder judicial pro-
Pero en cualesquiera de los supuestos posibles, es menester recordar vincial, las facultadcs del interventor se limitan a reorganizar la adminis-
que,.como el art. 6° fija las condiciones y causales para la intervención, el tración dc justicia, a remover jueces y a designar reemplazantes.
gobierno federa/llo puede ni debe actuar discreciol/almente. Si se evade
el marco del citado arto 6° es fácil sostener que se incurre en il/conslirucio-
llalidad. La di námica del federalismo argentino

31. - La práctic:l abusiva y frecuen~ de las intervenciones federales, en nume. 37. - Habíamos adelantado que la dinámica de nuestro federalismo
rosos casos sin C:lUS:I ni sujeción :1 la constitución, lleva a dar por cierto que es unQ de dejaba lugar para detectar una mutación constilU1jonal. muchas veces
60 COMP€NOIO DE DERECIIO cm,sTrroaO!'<AL EL I'WERAUSMO AHGErmNO 61

vioJaloria óe la constitución formal. En ese espacio se suele hablar de Sin entrar a detalles y a citas del articulado. proponemos que para la
dcsfcdcralización. así como de factore s procli ves a la ccntraliz.ación. revisión del lema se acuda al siguiente paisaje:
Una lisia cjcmplificaliva de algWlOs de tales factores lleva a mencio- a) la reforma esboza unfedemlislJlo de cOl/cerlaciÓI/ y panicifJació//
nar los siguientes: (por ej .• en el ano 75 inc. 2°):
a) el abuso de las intervenciones federales y del estado de sitio; b) se introduce como novedad que el senado debe ser cámara de ori-
b) las épocas de /aclo; gel/ para ciertos proyeclOs relacionados can el federalismo (an. 75 incs. 2°
y 19);
e) las crisis ecor/ómiClI.'i;
c) la vieja cláusula del progreso (ex arto 67 inc. 16) ha recibido una
d) la concentración del régimen impositivo en las competencias fede·
rales ; añadidura en el inc. 19 del art. 75. que fija un parámetro en el desarrollo
COII equilibrio provincial y regiol/al. o sea, toma en cuenta al pluralismo
e) la ¡;cntralización federal de servicios que son susccptihlcs de divi- territorial de siluación; como sumatoria. de acá se infiere un lineamiento
~ió n territorial: de solidaridad y Jealwd federales;
1) [as polí/icas ecol/ómicas celllrales; d) las particularidades provincia les y locales son atendidas en materia
g) las poi íticas y Jos comportamicllIos de los parIidos políticos " 1/0- educativa (arl. 75 ine. 19);
ciona/es ": e) se retiene el podcrde policía yde imposición de provincias y muni-
h) la transferencia de organismos de la seguridad social de las pro- cipios en los esrabfecimiemos de ulifidad nacional previstos en el art. 75
vincias a la administración federal. inc.30);
t) se reconoce a las provincias cl dominio origillario de los recursos
I/aturales que ex istcn en sus territorios (fin. 124):
El federalismo cOllcertado
g) se les reconoce "conservar" orgal/ismos locales de seguridad so-
cial para los empleados públicos y profesionales:
38. - Si de contrapesos cupiera bablar acá. habríamos de apelar a lo
que se ha dado en denominar. por Pedro 1. Frías en el ámbito de la dinámi- h) se reconoce la ml1ol/omía de los municipios provi"ciales Can. 123);
ca federal. el "federalismo concertado'·. Lo difícil de su definición se su- i) se especifican explícitamente algunas competencias COllcurremes
ple con una noc.ión simple: se trata de concertar o arreglar interjurisdic- entre eslado federal y provincias. así como la facultad de las prpvillcias
dOlla/mellte aquellas cuestiones que, sin vulnerar la constitución. hallan para crear regiol/es y concertar acuerdos imemaciollales en forma limi-
sitio para resolverse contractualmente. Tal cooperación - recíproca el/lre tada (verart. 75 inc. 2°: arto 41 ; are 75 ine. 17: arto 125; arto 124);
estado federal y provincias- halla un buen instrumento en el principio de j) hay competencias concurrentes en j urisdicción de las provincias en
leal/adfederal o buella fefedeml. que preste atención a los intereses del relación con la cláusula sobre los pueblOS indígenas (art. 75 ine. 17).
conjunto federativo.

El fedentllsl110 en la reforma de 1994

39. - La reforma de 1994 ha dado lugar. en el mundo de ladoctrina,


a dos enfoques divergentes: uno cree que ha habido un fortalecimiento del
federali smo, en tanlO ot ro valora que en algunos aspectos el federalismo se
ha esfumado.

CAPhlJLO VI

EL SISTEMA DE DERECHOS

La parte dogmática de la constitución en el desarrollo del constitucio-


nalismo

1. - A la parle dogmática de la constitución la titulamos derecho


cOl/sriluciolllll de la libertad porque allí se centraliza un núcleo que coin-
cide con la forola de eSllIdo democrárico. al inslaJar a la persol/a humana
de acuerdo con su digllidad, su libertad y sus derech os.
Para ello. une - por un lado- la defensa)' promociól/ de los derechos,
con - por el otro- Ia limitación del estado y del poder en pro de [a seguri-
dad de las personas. De ahí que la parte dogmática y la parte orgánica se
hallen intercomunicadas. ,
,I
2. - En la primera ctapa del constitucionalismo moderno. el sujeio
(Jolivo que quedaba obligado a omitir violaciones a los derechos era el
estado. Esos derechos eran los llamados derechos públicos subjetivos del
hombre "frentc" O ;'contra" el estado.
Paulatinamente, el desarrollo del constitucionalismo logró ampliacio-
nes: a) los particulares también han llegado a ser sujetos pasivos que,
junto con el estado, deben respetar los derechos; b) a la obligación de omi-
tir violaciones se añaden. según los casos, obligaciones de dar o de hacer.
Del cOf/Stilucio1lalismo liberal se pasa al COtlslitucio1lalismo social,
y de la democracia liberal a la democracia social. A los derechos, ade-
más de protegerlos, hay que promoverlos, para lo cual muchas constitu-
ciones actuales obligan al estado a remover los obstáculos que impiden a
muchos seres humanos acceder al disfrutc y ejercicio pleno de sus dere-
chos. A su vez, a los clásicos derechos civiles y políticos se agregan los
derechos económicos, sociales y culturales.


64 COM.i'E.'lDlO DE DERECHO CONS1TruQONAL EL SISTf.\!A DE DERECHOS 65

Un atractivo perlil del estado lo ofrece la calificación que. tomada de de valores, [a I/aturaleza humana, la idea racional del derecho jusEO,
la constitución española, lo define como eSTado social y delllocrdrico de necesidades humallas en cada situación concreta., la tradición históri-
derecho. de cada sociedad, la cultura social, la ética o moral , etc.

3. - En este marco, el lenguaje actual ha introducido la denomina- 8. - Que baya nornlas declarativas de derechos no significa que cuan-
ción "derechos humanos" para abarcar a las distintas categorías de dere- '¡tan normas haya ausencia de derechos. Las cláusulas de los derechos
chos que deben recibir recepción en la constitución. Cuando ésta los enumerados que muchas constituciones contienen, da prueba de que
positiviza. se suele echar mano de otra expresión, que es la de derecllOs derechos implícitos. O sea, que en un estado democrático el sistema
)l'tlllli(¡/lle/lf(lles. derechos debc operar tanto con normas como sin normas.

4. - Cuando se hace un recorrido histórico en la génesis de las declaraciones 9. - Al despuntar el nuevo siglo y el nuevo milenio reiteramos una
de derechos y se arranca de la constitución de Filadelfia en los Estados Unidos, hay convicción: un sistcma de derechos en un marco conslitucional de-
que advertir que su texto originario de 1787 no contenía una declaración de dt..Te- 1l<X'" e"en" con dos fuentes: la propia interna, encabe-
ehos, y no porque se los menospreciara o ignorara sino, a la inversa, IX'rque se la constüución, y la internacional (derecho internacional de los
hallaban tan arraigados en la tradición cullltral de la sociedad que se consideraba humanos). Tallo que exige el sistema de derechos paru ser com-
innccesario, o hasta su~rabulldante, consignarlos en las normas esenias. plcto.
Poco después, las diez y catorce primeras enmiendas norteamericanas se a¡ia-
dieron a la constitución, haciendo las vcces de una dedaradón de derechos.
Los derechos en nuestro constitucionalismo actual
5. - Quejos derechos sc "declaran" equivale a decirquc la constitu-
ción a cuyo texto se incorpora tal declaración, los reCOl/oce, con todos los 10. - El sistema de derechos cn nuestro constitucionalismo argenti-
cfeclosquc según cada momento histórico se adjudica al reconocimiento: no ha trans<-'Urrido por tres fechas: 1853-1860, que es lade la constiLución
originariamentc. era suficiente /lO violarlos: después, y ahora, es mencster histórica; 1957. que es ladc la refonna que en el art. 14 bis incorporó un
promoverlos. Siempre - además- proTegerlos. ejede constitucionalismo social; lade 1994, que teniendo prohibido intro-
ducir enmiendas a los 35 primeros artículos. dio acogimiento a la fuente
6. - Lafi/enre que podemos calificar como "idoológica" de la declaración de inteJOacional en el an. 75 jnc. 22 e inc. 24. a más de conferir la misma
derechos tiene, históricamente, 1..'1 sentido de valorar positivamente a la persona jerarquía de la constitución a varios instrumentos internacionales de dere-
humana. La fu.ente que se define como "formal" halló su lugar en el constituciona- chos humanos, yde acentuar fuertemcnte en la pane orgánica dc la consti-
Iismo de los Estados Unidos, y no en el francés que, entre otras cosas, es tución la valoración del orden institucional , de la democracia, del pluralis-
cronológicameme posterior.
mo, de la igualdad de oportunidades, de la participación, etc. Es impres-
cindible que, al díade hoy, cuando se confecciona el listado de derechos, se
7. - Cuando se escruta el fUl/damento de los derechos se roza a la
interconecten en el articu lado las normas de los arts. 14.20, 14 bis. 15. 16.
filosofía JXllítica y jurídica. Al rctomar lo ya dicho acerca de que la decla- 9 a 12,26,17,7°,8°.19.28,33,36.37,38,39,40.4 1,42,75 (incs. 17,
ración constitucional de derechos implica reconocerlos, se a.ílade que tal
19,22,23,24), 43,18,125.
reconocimiemo no equivale a una dádiva ni a un OIorgamientoque el csta-
do le hace a las personas. El estado que reconoc'e los derechos no los "cons. Vna lectura a fondo dc tal normativa proporciona un catálogo denso
tituye" como tales, Por ende. [os derechos no son "[o que" el estado dice de derechos, valores y principios en la constitución actual.
que son, ni son "[os que" ct estado define como siendo derechos.
La diversidad de enfoques que se apartan del voluntarismo estatal
11. - Alcanzada lal visión integral, y comprobado que entre la parte
dogmática (arls. ) 0 a 43) y la parte orgánica, con más el preámbulo y las
abre una pluralidad de fundamentos: e[ derecho natural, el sistema objeti-

66 COMI'E.'.Il)IO DE DERECHOCONS ¡ ti UOONAL. EL SISTEMA DE DERECHOS 67

di sposiciones transitorias, hay ahora una muy fuerte realimentación, vale 10 Ocontroversia entre sujetos que disputan entre sí di versos derechos, hay
agregar que es posible atribuir raigambreconslitucional a algunosprinci- que preferir el que "según las circunstancias dc ese caso concreto" resulte
pios de muy útil aplicación , entre los que. sintéticamente, citamos tres: más valioso de acuerdo a ellas:
a) el principio ;'pro lJomil/e'.' (a favor de la persona), conforme a1 1) el titular de los derechos puede o no ejercerlos, porque como pri nci-
cual una vez que se utiliza la fuente interna y la fuente internacional. siem- pio le resultan dispollibles; en cambio, el sujeto pasivo debe cumplir su
pre hay que elegir en cada caso concreto la [ueme y la norma que proveen prestación (de omisión, de dar o de hacer), por lo que. en cuanto a él, los
la solución más favorable para la persona y para el sistema de derechos defCchos ajenos le son illllispol/ibles:
iusli (udonal mente considerado: g) con forme a la jurisprudencia de la Corte. nadie puede sustraer al
b) el principio "pro aCliol/e" (a favor de la acción), que con enfoque poder judicial la facultad yel deber de hacer respetar la constitución y los
garantisl3 le señala a los jueces el deber de brindar al justiciable en cada dl.-rcchos, ra.t.611 JXlr la cual se produce agravio a la garantía de la defensa
proceso la vía que mejor favorezca su derecho ala tUlclajudicial efectiva; enjuicio cuundo una cuestión justiciable qucda excluida compulsivamente
c) el principio del 'favor debilis ", para que en cada situación en que de la decisión de [os jueces:
aparecen derechos controvertidos se tome muy en cuenta la inferioridad de h) los bienes jurídicos que quedan comprendidos y amparados por la
condiciones de la parte más débil. declaración de derechos no irnlxmen necesariamente la obligación de que
la política criminal del congreso les depare tutela pellal por incriminación
y sanción de la lesión que se infiera a tales bienes. salvo cuanoo es [a
Pautas de caracteri::ación ele los derec/¡os propia consti tución la que tipinca una conducta como delito (qu~ es el
IUpuesto de los delitos constilUcionales), o cuando algo semejante surge
12. - Las pautas fundamentales son las siguientes: de tratados intern acionales.
a) hay derechos el/u merados y derechos 110 enumerados (impl ícitos);
todo derecho fundamental Oprimario debe considerarse incluido en la cons-
titución; a') en el bloque de constitucionalidad, fuera del texto de la cons- El sujeto aClh'o y el sujelo pasivo
titución, hay derechos que Iluyen de iflslrume1ll0s illlemacio1lales -algu-
nos con jerarquía constitucional , y otros supralegales- (lodo el[o en virtud 13. - De mucho de [o hasla acá expuesto se desprende que el sujeto
de los arts. 14,33,75 inc, 22. más los enlaces mencionados en el parágrafo activo o titular de los derechos es lapersol/a hum(/I/{/ que, en el marco de
10); la constitución. tanto es un nacional como un extranjero con calidad de
b) los derechos referidos en el párrafo anterior pertenecen tanto a ,/a- habitantes. Asimismo. hay derechos susceptibles de quedar titularizados
ciol/ales o ciudadanos como a exlranjeros (arts. 14,20 Y75 ine. 22): por el/lidades coleclÍvlIs que revisten calidad de sujeto de derecho (así,
por ej .. el arl. 14 bi s alude a los "gremios", yel ano 42 a asociaciones de
c) tales derechos obligan, como sujeto pasivo, t.anto al estadofederal
como a las provi"cia.s; con.sumidores y usuarios, en tanto el 43 trae también referencias de equi-
valente sentido); es importante recordar que el art. 75 inc. 17 depara
d) los derechos no son absolutos sino relativos; ello significa que son personería jurídica a [as comunidades indígenas.
susceptibles de reglamentación razonable, la cual reglameIllación deja de
serlo si los altera e incurre en arbitrariedad (art. 28); El sujeto activo cobra relie ve cuando se picnsa q ue, de acuerdo a la jurispru-
e) la imerprelaciólI de los derechos ha de hacerse, en cada caso, a dencia de la Corte, es él quien puede provocar en su favor el control j udicial de
tenor de principios como los que explicamos en el parágrafo 11 : e') si bien constitucional idad.
es posible distinguir algunos derechos "más val iosos" que otros, o con
mayor jerarquía, no hay que olvidar que en cada caso en el que hay conflic- 14. - El estado no es titular de derechos (sal vD, analógicamente, en

68 Co...1PF../'IDIQ DE DERECHO OOl\S 1II VaONAL EL SISTEMA DE DERECII06 69

supuestos como el de su parti cipación en un proceso judicial para que selc Por todo ello hemos de afirmar que: a) la persol/a IIUIIUI1IO es ahora
resguarde la defensa y el debido proceso). UD sujeto investido de persollalidad inremaciollal; b) la cuestión de los
derechos humanos ya no se recluye en la jurisdicción exclusiva o reservada
15. - Quienes ni son habitantes ni se hallan en tenilorio argemino pueden del estado, porque sin haberle sido sustraída pertenece a wlajurisdicciórI
excepcionalmente titularizar derechos relacionados con U11 punto de conexi6n obje- concurrente o compartida entre el estado y la jurisdicción internacional;
tivo y suficiente que tengan con nuestra jurisdicción (lXlr ej., un extral~cro residente c) nuestro ano 75 inc. 22 ha as.imilado lo que surge de los anteriores. incisos
en Francia que tenga un inmueble en Córdoba, podrá alegar en su favor el derecho a) y b).
tic propiedad de nuestros arlS. 14 y 17).

20. - El estado asume responsabilidad illlemacional por las obli-


16. - El sujeto pasivo es doble: a) el estado (federal y provincial); b) gaciones que los tratados de derechos humanos le irrogan. No solamente
los demás particulares. tiene quena violarlos y que conferirles efectividad, sino que tiene que im-
C ualquier actividad -por acción u omisi6n- proveniente de uno o más pedir, prevenir. vigilar. sancionar y reparar las violaciones que los particu-
sujetos pasí vos que lesiona derechos es inconstituciof/al. La<; garantías se lares puedan inferir a los derechos.
deparan para proteger derechos tanto cuando la violación proviene de acti-
vidad estatal como de acti vidad privada. 21. - Los tratados de derechos humanos que forman parte de nues-
tro derecho interno también obligan a l asprovil/cias, como desde siempre
17. - Las obligaciones del sujeto pasivo-sean dc omitir daño. sean lo tu vo establecido el ano 31 de la constitución.
de dar o de hacer- son obligaciones de naturaleza constilucional. y así
como se pone énfasis a fa vor de los derechos. también hay que tener muy
cn claro que, por la correspondencia entre derechos y obligaciones, las El derecho provil/cial
obligaciones que son redprocas de derechos revisten igual valor que éstos.
22. - El derecho provil/cial debe dar acogimiento al sistema de de-
18. ~ Si acaso toda\'ía cn~'O!llramos ciertas sitlwócmes jurfdiclIs subjetivas a rechos, según Jo prescribe el ano 5°. A la vez, estamos convencidos dc que
lal' que no se les otorga la naturaleza de derec hos, conviene regi~tl'arlas para depa- en esta materia el derecho fede ral es un pi so. por lo queel derecho provin-
rarles las garantía.¡; nccesarias. Por ej., si a ciertos intereses de los clásicamente cial puede incrememar los derechos. así como en el área del garantismo
apodado~ como difusos o coleclh'os no se los incluye en la calegoría de "derechos puede mejorar y ampliar las vías procesales (amparo. habeas data. habeas
de incidencia colectiva" aludidos en el arto 43. corpus, control constitucional).

23. ~ En materia vinculada a la tutela del tJmbienle, y a los pueblos indíge-


La fueme infemac;onal nas --que, s in duda, integra el orbe del sistema de derechos-la constitución habilita
competencias concrlrrentes o complelllenUlriru a fa \'or de las provinciils.
19. - El derecho i"femacio;¡al de los derechos humanos ha adqui-
rido una presencia vigorosa en el derecho constitucional, sobre todo a par-
tirde la reforma de 1994. Los derechos y la legitimación
Los tratados de derechos humanos aSIentan como caractcrística dife- 24. - La legitimación procesal-o sea, la capacidad para articular
rencial con los tralados clásicos, la de obligar a los estados que se hacen en un proccso judicial una pretensión alusiva a dercchos- viene a ser como
parte en ellos a cumplirlos y darles efecti vidad en sus jurisdicciones inter- la "llave" con la que se entra a ese proceso. De ahf que es importanle en
nas, además de adjud icar directamente a las personas físicas la titularidad cada caso determinar quién puede actuar como parte actora (legitimación
de los derechos que cada uatado conliene. activa) y frente a quién puede aetuar como parte demandada (Iegilimación
70 COMPENDIO nE OERFruo CON~:¡T1n¡ao:,'AL EL SES1't;'\IA 01-: OL'REt'ltOS 71

jJa,\"i m). de modo que ello contigura un tema tr3$(.'Cndcntc que pertenece al Tal esel principio de m:ollobilidad, quc hace de cumplcmcnlo imprescin-
derochnconstitucional de los derechos humanos. Desconocer. negar a es- dible al dc legalidad . Lo opuestO a la ra70nabil idad es la arbitrariedad.
trangular la Icgil ¡mación procesal. pri vandode aquella "Ilave'- a quien quiere Para una comprensión sencilla y plena, rodemos reformular unidos
y precisa formular pretensiones en un proceso que le atañe. para hal'cr amtxJs principios: el de legalidad y el de razonabilidad. diciendo: nadie
valer un derecho que cree titularizar. es il/constitucional. puede ser obligado (/ hacer lo qlle la le)' ';jusUl" (ra:onabfe) 1/0 manda.
II¡ fJrivado de fo que fa le.\' "jusW" (rm,ollobfeJ 110 ¡Jrohíbe.
Nuestro ar1. 28 condensa la regla dc razonabilidad cuando enuncia
El princi (lio de legalidad Que los princi pios. derecho!'. y garantías l/O podráll ser ;'olterados" por
las leyes que reglamenten su ejercido. Esa "alteración" equivale a ¡rrazo·
25 . - Cuandu se echa mano del aforismo "gobierno de la ley en vez nabilidad o arbitrariedad y. pur cnde. a im:ol/StitucionaJidad.
de gobierno de los hombres" se está apelando al princi pio de legalidad: lo
que se mrulda y lo que se prohíbe necesita ley que prescriba lo que tenemos 29. - Se suete decir que el prindpio de razonabilidad equivale a la g<lrantía
que hacer y Jo que tenemos que omitir. O 'Sea, no se descarl a a los gohcr- del debido proce.<o SIIS/lInlil'O . Su fillalidad es preservar el valor justicia en el con-
nantes. pero se los somete a la ley. tenido de ¡odas los actos dd pwer. y también de los particulares.
Nuestro art, 19 lo ha ex presado así: I/adie puede ser obligado (1 (/(l-
30. - La arhitral.'kdad ha sido muy elaborada por la jurisprudencia de la Cor-
eer lo que la fe:v l/O mallda I/i privado de lo que ella //0 prohíbe. le en su categoría de sentencias aroi/r(lrias.
La finalidad del principio de legalidad es afianzar [a seguridad indi vi-
dual y damos previsibilidad anticipada de lo que han de ser nuestras con-
ductas. Se pretende. así. evitar las decisiones sorpresiva...

Como aclaratoria. hay qUe dejar estabkcido que no sólo la ley obliga y prohíbe:
toda olra fu ente distillla de la ley. o inferior a ella, también dispone de competencia.
en la medida que provenga de un órgano habilitado por la constitución. Asimismo.
fuellles no estatales -como los contratos- tienen capacidad de generar obligacio-
nes.

26. - Se ll ama "zona de reserva" de la ley el ámbito donde la regul a-


ción de un a matcri a es de competencia legislativa del congreso.

27. - El principio de legalidad guarda ne:(o CO Il la esfera de liherlruJ juddic(I


segiln la cual. para la persolla humana. lo que no le esllí prohibido le está pen/lifi-
d, .

El principio de ra7.onabilidad

28. - Ahora bien. cuando la ley manda o prohíbe. nuestro sentido de


justicia agrega que esa ley tiene que ser justa . o -con lenguajc dc nucstro
derecho conslitucional- "razonable" en lo que manda y en lo que prohíbe .


·
CAPITuLO VJI

LA LIBERTAD Y I.A IGUALDAD JURU) ICAS

La libertad como derecho. y sus contenidos

l. - Todadcmocracia pcrsonalista contiene un espacio suficienlcdc


libertad jurídicamente relevante, en disponibilidad para la persona huma-
na. POTesO se habla de libertudjurfdica, o de la libertad como derecllO de
la persona.
Sus aspectos fundamentales son éstos:
a) Un status persollal que le confiere al ser humano la calidad de per-
sOl/a jurídica eDil capacidad de derecho; Su negación 10lal es la esclavi-
tud como incapacidad total de derecho. A su modo, el ano 15 da albergue a
tal status de libertad. en cualllo suprime la esclavitud .
b) Un ¡Joder de disposiciól/ que. en uso y ejercicio de la libertad, sea
susceptible de producir efectos jurídicamclIle relevaTlles (as!' si en uso de
mi libertad decido casarme. mi casamienlO se compadece con la libertad
únicamentc cuando el estado me reconoce el estado civil de casado).
c) Un área de imimidad oprivacidod quese sustrae a toda interfcren-
cia arbiltaria del estado. La fórmula viene dada por el art, 19 cuando res-
guarda las accionc~ privadas que no ofenden aJ orden. a la moral pública.
ni perjudica a terceros.
d) Un principio a favor de la persona humana. por el que lodo lo que
l/O le está prohibido le está permitido.

2. - Todo cuanto el hombre hace u omite en su espacio de libertad está den-


tro. y no fuera, del mundo jurídico. No es a-jurídico ni extra-juridico, sino que se
sitúa en un ámbito de licitud.

3. - El principio de libertad está expresado en el preámbulo. cuando propone


-

COMI'E.'\1:>1O DF. L>ERECIIO CONSTm l( 10l'<AL LA Ullf.RT AD Y ~ tGUALDAD JURfDIC AS 75

asegu rar los beneficios de /a ¡;ber/ml. ¡-Iay nonnas.,k (ralado!> de derechos IlUma- del más variado lipo -por ej .. los pueblos indígenas de nuestro art. 75 ine.
nos con jerarquía constitucional que. a su modo, flX:OllOCCIl el den.'Cho a la libenad. 17-. Las prohibiciones sobre discriminaci61/ raci al, étnica, religiosa. na·
ciona!, económica. elc. - muchas de las cuales CQll!Olan en tralades de jerar-
4. - Cuando a la libenad la caliricamos como "física" CSlamos pen- quía censlitucional- tiendcn a amparar la identidad y la di ferencia, perso-
sando en que nadie puede ser arrestado (privado de su lihertad) sin justa nal y grupal. Subyace aeá el derecho a ser "uno mismo", es decir, la
causa y siu forma legal. Apareja. además, la libertad de locomoción y ci r- mismidad persol/al.
cu/oción. Los arts. 14. 17 Y 18 protegen estos contenidos.
La garantía constitucional a favor de la libertad corporal o física es el 8. - Muchos de los aspectos propios de la privacidad encuentran ca-
habeas C0'lJUS (art. 43). rril procesal de protección en el /¡abeaJ dala (art. 43).
Acá 13mhién hay tratados internacionales cOll vcrgcnlcs con nuestra
constitución.
La igualdad y sus proyecciones
5. - Cuando el léxico const itucional apela a la vida privada. a lo que
los ingleses llaman "righl o f privacy". o a lo que por nuestro art. 19 deno- 9. - En alguna medida. de la libertad se desprende la iglWldtld. Si a
minamos intimidad o privacidad. está dando hospitalidad a las conductas toda persona debe reconocérscle el derecho a la li bertad con los conte,nidos
"auto-referentes". que por "referirse" al autor de esa conducta no proyec- ya ex.plicados, hay que admitir que lodos también participan de una Igua/·
tan incidencia dañina para el orden. la moral pú blica, o los derechos ajc- dad elemel/tal ele status en cuanto personas jurídicas.
nos. Si tal enfoque atañe a la igualdad civil, es fácil deducir que elimina
las discrimi"aciolles arbitrarias entre las personas. Pero la igualdad no
CondUC/{IS mllQrre[erenles no son solamente las que ticnen COIllO amor a una es lo mismo que e l igualitarismo, porque hay diferencias JUStaS y ra7.0na·
sola persona (lo son también, por ej" las de una pareja en relación con la iminúdad bies que no deben arrasarse. Por algo. hemos aludido 3.Jlles -en reciproci-
de su comivencia, o las propias de un paciente con su médico): tampoco lo son dad- al derecho a la identidad y al derecho a la diferencia.
solamente las que se recluyen en la interioridad sin que tercem.~ tengan noticia de
ellas (lo son también, por ej., las de quien se viste o se pei na a su gusto. de forma
qUI; los demás pueden vcrlo). 10. - Conviene advenir que:
a) el estado debe remover los obstáculos de tipo social. cu ltural. po-
6. - Un listado de conductas autorre[erenles como contenidos de la lítico y económico que limitan "de hecbo" la libertad y la igualdad de to-
libertad de imimidad sirve para que muchas de ellas se liguen con dere- dos los hombres:
chos implícitos. Valga citar, ejcmplificativarncme: b) mediante tal remoción el estado ha de hacer viable un orden
a} la elección del proyecto personal de vida; socioecol/6mico justo que iguale las posibilidades de todos los hombres;
b) la objeción de cOllciencia por razones morales o religiosas; e) se ha de promover con políticas adecuadas el acceso efectivo al
e) la preservación de la propia imagen; goce de los derechos personales de las tres generaciones, para todos los
d) el derecho a la idef/tidad personal, y a ser d¡¡ereflle; hombres de todos los sectores sociales,
e) la negativa de personas con discernimiento para someterse a tera-
pias o tratamientos. 11. - a) Un primer aspecto de la igualdad se smisface con el recono-
cimiento de la Iibenad jurídica a todas las personas, y con la abolición de
7. - El derecho a /0 idemidad •\" a la diferencia enriquece mucho la la esclavitud.

convivencia societaria cuando traslada su aplicación a grupos y minorías b} A renglón seguido, los derechos civile.f de los arts. /4 y 20 quedan
-


76 COMPENDIO DE DERECHO CONSI [I UCIONAL L A UBl:RTAO y LA IGUALl)AD JURfDlCAS 77

titularizados por todos los habitantes. sin distinción de nacionalidad o ex- 14. - El recorrido que acabamos de hacer cOI\duce a dos aflfmacio-
tranjería. a) en primer lugar. no e~iste ámbito alguno en el que la igualdad que-
. o relegada o exenta de cumplimiento: pero b) no obstante tal
e) Finalmente, 1(1 igualdad t's/a base del impuesto y de las cargtlS públicM: en la cobertura igualitaria, la constitución ha recalcado algunas
la admisibilidad en los empleos !lO requiere otra condición que la idoneidad; y están a las que coloca bajo expresas directrices igualitarias -parejo,
suprimidos tanto los [Ílulos de nobh!za, así COO}';) los fueros personales y las prerro- orden al desarrollo de pro\'ü¡cias y regiolles, a los pueblos indígenas.
galivas de sangre y nacimiento.
,,,:ulllu,a' ,'o sus múlLiplcs aspe<.10S, a la educaciól/. a la materia impos;-
No obslantc, los derechos polí/ieQs q uedan, como principio, reservados a los a la illlegraciólI en organizaciones supraeslatales, al pluralismo en
nacionales. (Personalmente, propiciamos rt.-'Conoccrlos a los extranjeros que, por su panidos políticos. cte.-,
residencia, lienen calidad de habitall!es.)
Hay que sumar las discriminaciones expresamente prohibidas. y la
12. - La refomta de 1994 ha especificado otros aspectos de la igual-
discriminació/I "il/\'ersa" (en virtud de la que resulta constitu-
dad. Así: I favorecer a ciertas personas o a ciertos grupos sociales en mayor
que a otros. cuando esa "discriminación" procura compensar,
a) el congreso debe legislar y promover medidas de acción posiriva y superar la marginación o el relegamiento desigualitario que
que garant icen la igualdad real de oportunidades y de lrato; recaen sobre aquéllos a quienes la discri minación inversa beneficia).
b) ello se hade enderezar al pleno goce y ejercicio de los derechos;
e) lo enunciado en los anteriores incisos a) y b) se debe particularil.ar 15. - El repertorio de pautas sobre la igualdad en lajurisprudencia
n:specto de los /tillos, las mujeres, los ancianos y las personas COII de la Corte se condensa así.
discapacidad: a) hay que lratarde igual modo a quienes se hallan en iguales situado-
d) se reconoce y garantiza la identidad y la diferencia de los pueblos DeS;
indígenas argentinos; b) es posible crear categorías o grupos a los que se dé trato direrente.
e) las leyes de organización y de base de la educación tienen que ase. a condición de que el criterio utilizado para discriminar responda a razo-
nes objetivas sufi cientes (sea razollable y 110 arbitrario);
gurar la igualdad de opoNullidades y posibilidades sin discriminación
alguna. e) las dl!sigualdades arbitrarias SOIl illcol/slÍlucionales.

16. - Para dar algunos ejemplos en los que personalmente lencmos opinión
13. - Si todo lo mencionado fluye del ano 75 en sus ¡nes. 23. Jl Y
muy personal hemos de añadir:
19. hemos de añadir:
a) al día de hoy sería arbitrariamenle desigualitario dividir a los hijos I;!fl matri-
a) las cláusu las sobre la igualdad, las minorías y la no discriminación moniales y extramatrimoniales a los efectos de cuantos derechos y situaciones per-
en varios fratados dc derechos humanos con jerarquía constitucional (art. sonales derivan de la filiación;
75 inc. 22); b) es contraria a la igualdad la jurisprudenria controJictoria (o sea, la exis-
b) la igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para ac- tencia de sentencias que en aplicación dI! la misma normativa en situaciones simi-
ceder a cargos electivos y partidarios (an. 37), que se ha de asegurar por lares interpretan de distinta manera dicha normativa):
acciones positivas en la regulaci ón de los punidos políticos y del régimen e) es iguaLilarismo lesivo del pluratismo democrático el que surge de estable-
electoral; cer una forma única de //wlrimonio (por ej .• la civil) con la que sea posible emplazar
el estado de familia (porque no deja opción razonable par,a que cada parcja pueda
e) la disposición transitoria primera reconocc el respeto al modo de elegir la fonna matrimonial según su preferencia religiosa o Il'J.)ral):
vida de los habitantes de las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich d) es desigualitario que la/1lf4jc r casad" que ha tenido un hijo extramatrinxmial
del Sur. no pueda remover judicialmente (por falta de legitimación) la paternidad que la ley

78 COMPENDIO DE Df:RECHO CONS111 UCIONAL

le ,adju.dica al l~larido respecto a aquel hijo que biológicamente no es de él: la discri-


nunaclón provlCllC, entre olras razones, de que la ley sr deparlllegitimación para tal
fin a otras ¡xrsonas.

17. - Hemos de proseguir coo algunos lineamientos adicionales. Así:


a) La igualdad ame el estado se triplica en igualdad ame : a') la ley
a") la administración; a ''') la jurisdiccióll; .
CAPhULO VIII
• b) ~ igualdad. al/~e y entre particulares debe protegerse en la medida
de I? posible (por ej.. SI un empleador discrimina entre personas morenas y
rubias para seleccionar a sus empleados); LA LIB ERTAD RELIGIOSA
b'~ un cjc,mplo Jo propone el arto 14 bis cuando. en la relación de cm.
pleo pnva~o, Impone la pauta de igual salario por igual trabajo; Aspectos, contenidos y aplic:tciones
. . e) ,La I?ualdad allle la jurisdicción tiene como base la unidad de ju-
~I,Sdl.CCI6~ UU,eces naturales) para [Oda~ I~ personas; no hay fueros cspc- 1. - En materia de libertad religiosa la constitución argentina acoge
~lal~s ~Il se~1tldo pcrS?',lal, aunque hay Junsdicciones especiales (por ej, la la confesionalidad del estado que, dentro de la categoría por nosotros
a~mml stratlva ,y la m~lilar), pero de lo que en éstas se decide debe quedar defmida como "sccularidad". implica asumir. desde la realidad religiosa
siempre expedIta la vw de ulterior revisi6n judicial; de la sociedad, un reconocimiento institucional a tenor con la fisonomía
, ~') ya dijil,llOS que. a nueSIIO criterio, la igualdad sufre violación por del fenómeno espiritual.
la JUriSprudencia contradictoria. Dada la mayoría numérica y la influencia cultural del c-atolicismo, la
Iglesia Católica Apostólica Romal/(I cuenta, constitucionalmente, con el
status de persol/a jurídica de derecho público ""o-estatal", en tanto las
demás iglesias, confesiones O cultos no se hallan en pie de igualdad de
status.

2, - Más allá de las réplicas de que pueda ser objeto nuestro pW110
de vista, reiteramos lo que tenemos dicho desde siempre:
a) la "letra" del art o 20 cuando habla de "sostener" el culto católico
por parte del gobierno federal 11 0 e(luivale a UII sostenimiento ecollómico
obligatorio, sino a la diferente naturaleza en la relación de tal culto con el
citado gobierno, cuando a esa relación se la compara con la mantenida con
los OllOS cultos;
b) el catolicismo 110 es "religión de estado" ni "religión oficial";
c) el art. 2° de la constitución,junto c.:on el an. 33 del código civil, dan
curso a la noción que, entre las personas jurídicas, confiere a la Iglesia
.Católica la condici6n de ser de "existencia necesaria":
d) el "sostenimiento" aludido en el are 2° define la unió" "moral"
enlre el estado y la Iglesia Católica.
80 COMI'E."/T)IO DE DERECHO CO~SIIIUCIONAL LA UOERTAD REUGlOSA 81

I 3. - En 196f) la República Argentina celebró un "Acuerdo" con la f) el derecho personal a no soponarcompulsión para prestar unjura-
San ta Sede. que tuvo naturaleza de cOtlcordalo mínimo. Implicó el "arre- mento que la conciencia rechaza:
glo" del patronato a que entonces aludía ellexlO de la constitución antes de
g) el derecho personal a disponer de liempo suficiente para asistir a
su reforma de 1994.
las prácticas religiosas ell los días de culto. y a no ser obligado a trabajar
violando las reglas de conciencia;
En 1994, mantenido el arto 2°, fueron eliminadosdcl texto constitucional todos
los anlcriores artículos con referencias confesionales -entre éstos, el qucconfcña a l h) el derecho a no sufrir discriminaciones por razones religiosas;
cOngreso el deber de pron.,vcr la con\'ersión de los indios al catolicismo-. i) el derecho a CO/llraer mmrimol/io de acuerdo con la propia reli·
gión;
4. - Las cOl/sTitllciones provinciales que no se compadecen con el principio
de confesionalidad que damos por existente y subsistente en la constitución federal. j) el derecho personal a no ser obligado a recibir una enseñanza opuesta
son inConstitucionales. a su propia religión;
k) el derecho de las iglesias y cOl/fesiol/es a prestar asistencia religio·
5. - El Conci lio Vaticano lJ ha definido a la libertad rcligiosu como sa a sus fieles en cualquier parle. incluidos hospi tales, cárceles, cuancles,
un derecho civil de lodos los hombres en el estado que, tal como lo diseña etc.;
en su Declaración "Dignitatis Humanae", deja inmunes de coerción a las 1) el derecho de las iglesias y cOI/fes iones a fomlar ministros de su
personas tanto por parte de panicularcscomo de gru{Xls sociales yde cual. culto, y a comunicarse con sus autoridades dentro y fuera del país.
quier potcstad humana. Que no se obligue a nadie a obrar contra su con-
ciencia, ni se impida actuar conforme a ella, en privado y cn público, solo 7. - Hemos de resaltar que, tat como se desprende dcllistado precedente. la
O asociado. pero siempre dentro dc los límites debidos. pbjeción de conciencia se encastra en la libertad religiosa.
Nuestra Corte, en el caso " Portillo" det año 1989. admitió la objeción de con-
Esta libertad religiosa como derecho frente al estado)' a los demás. que tiene ciencia alegada por un católico que, al impugnar el deber militar del art 21 de la
titularidaJ 00 sóto en la pt.'fsona individual sino a la vez en asociaciones y comuni. constitución, fu.; eximido de emplear armas en el servicio militar.
dades religiosas. no exime a la conciencia personal aote Dios del deber de buscar la
verdad. Y no hay quc olvidltf que la Ig lesia incluye en su haber dogmático a la 8. - Desde nuestro personal concepto, una IÍnicafomla de nUlIrimo·
revelac ión divina.
nio impuesta por el estado para adquirir el eslado civil de familia derivado
de las nupcias, es violatoria de la libertad religiosa, porque el derecho de
6. - Los múltiples aspectos que se hilvanan en la Iibenad religiosa
hallan ejemplificación en: casarse conforme a su cuila requiere que quien contrae un matrimonio re-
ligioso a su elección obtenga el reconocimiento dc sus efectos ci viles, una
a) la libenad de co"ciencul; vezquc ese matrimonio se inscribe en el regislro público correspondiente.
b) la libenad de CUIIO :
9. - El reconocimiento de iglesias, confesiones y comunidades religiosas
e) el derecho de los padres de decidir la orientación espiritual y reli. admite una razonable reglamentación que establece la regi.ftración correspondien-
giosa de sus hijos menores hasta que éstos alcanzan la edad del discerni. te, pero satisfecho tal recaudo e l estado no debe imponer el requisito formalista de
miento; que las instituciones religiosas se revistan ficticiamente de la máscara de asociacio·
d) lodos los derechos que han de titularizar las iglesias y comuf/ida- nes civiles.
des para cumplir sus fines;
e) el derecho persol/al a no ser obligado a participar en actos o cere. 10. - Como ocurre con todos los derechos•.cl de libertad religiosa
monias dc culto en contra de la propia conciencia, o en actos o ceremon ias exige que, constitucionalmente, se computen las normativas que la reco·
con sentido relig ioso; nocen y la prevén en los tratados de derechos humemos. especialmente los
que de acuerdo al ar!. 75 inc. 22 tienen jerarquía constitucional.
CAPíTuLO IX

LA LlDERTAD DE EXPRESION

Su encuadre constitucional evolutivo y sus contenidos

l. - La libertad de expresión cs Wla exteriorización de la libertad de


pensmmemo.

El pensamiento en cuanlo tal no aparece externa mente corno libertad j uríd ica-
mente relevante porque escapa a toda posible relación de alto...-ridad con otro sujelO
distinto al que piensa. El derecho y la libertad jurídica aparecen recié n cuando el
pensamiento se e.flerioriz¡¡: o !lea, cuando .ff: expresa.

2. - Actualmente, no sólo por los avances de la ciencia y la tcenolo-


gú sino, asi mi smo. pur el derecho internacional de los derechos humanos,
cuandocn el texto de nuestra constitución " Icemos" en los arts. 14 Y32 las
menciones a la "prensa" y la "imprenta" . debemos expandir en mucho los
contenidos de la libertad de expresión. en UIl doble sentido: a) para incor-
porar rodas los medios de los que hoy disponemos para expresamos: b)
para hacer puente con el derecho a buscar. reci bir. transmitir y difund ir
illjomwciólI. de modo que desemboquemos en la comunicación social
como un bienjuridico de naturaleza colectiva.
Oportunamente haremos mención de un importantísimo contenido,
cual es el derecho de reclijicación y respuesta (o derecho de réplica).

3. - Con la rejonlw de 1994 se agregan parámetros de convergencia


con la expresió n y la comunicación. Por ejemplo. cuando en el arto7S se
alude a la invesrigació1/ y al desarrollo cielllíjico y lecllológico. a su difu -
sión y aprovechamiento: a la identidad y pluralidad cU/fural: a la libre
creación y circulación de las obras del aUlor: al patrimonio artíJrico y
los es/x/Cios cu/rumles y audiovisuales (inc. 19); y al derecho a una educo-
84 Cm.1PE¡"'UIO DE DERECHO CONSTITIJClO:-lAL LA LmERTAD DE EXPRESiÓN 85

ción imercultural para los pueblos indígenas (inc. 17). Por su lado. el arl. e) la libertad de creacióll artística;
38 garantiza a los partidos políticos el acceso a la infonnacióll pública y f) la expresión cinematográfica;
la difusión pública de sus ideas. La información y educación ambienta-
g) la expresión por radio .v televisión;
les (an. 41) y la educación para el consumo (arlo 42) presuponen la nece-
saria y convergente libertad de expresión. h) los contenidos humorísticos, cómicos, de entretenimiento que se
vierten a través de los distintos medios;
4. - Ln interpretación dinámica de la constitución, y la integración de sus i) la publicidad comercial (o propaganda comercial);
vacíos normativos, tiene -por ende- que acompañar al seguimiento evolutivo de la j) el derecho de reclificacióll y respuesta;
libre expresión en todos sus contenidos y m,anifestaciones.
k) la llamada expresión "simbólica", o lenguaje simbólico a través
5. - Con anterioridad a 1984- 1986, que fueron las fechas de ralifi- de gestos, conductas, etc.;
cación del Pacto de San José de Costa Rica y del Pacto Internacional de • 1) la expresión oral;
Derechos Civiles y Políticos, era lógko entender que cuando se extendía a 111) la expresión teatral;
los medios de expresión distintos de la "prensa" una tutela "análoga" n) todo cuanto surge de los añadidos incorporados por larefonnacons-
-pero no igual- a la conferida por el ano 14 a la li bertad de prensa, tenía titucional de 1994 que mencionamos en el parágrafo 3.
asidero rawnable computar semejanzas y diferencias. Pero a partir de
1984-1986 hasta la refOnlla de 1994, hubo de aplicarse a todas las formas Varios de los aspectos citados CIl la lista euentall eOIl expresa mención en la
y los medios de expresión las mismas prohibiciones emergentes de la cons- jurisprudencia dc la Corle.
titución en relación con la censura previa. Con mayor razón, la jerarquía
eonslitucionaJ de dichos tratados desde la reforma de 1994 vino a afianzar
la equiparación de todos los medios .)1 fonnas de expresión para eximir- El derecho de "réplica" (rectificación y respuesta)
los de censura previa.
8. - El llamado derecho de réplica reclama una breve explicación.
6. - La libertad de cxpresión presenta, por lo mcnos, tres caras: Tenemos ya la noción de que la expresión que circula a través de la comu-
a) una, como derecho personal; nicación social hace ingresar sus productos al circuito ilúormalivo. Cuan-
do lo que ingresa es -según vocabulario del Pacto de San José de Costa
b) otra, como proyección social e institucional a través de los medios Rica en su arto 14- un i/lforme agraviame o inexacto respeclo de una
de comunicación masiva contemlxlfáncos (prensa escrita, radio, televisión, persona deternlinada, hay que dar oportunidad a ésta para que respo/lda o
publicaciones de toda índole, medios informáticos, etc.); rectifique a través del mismo medio. De no ser así, el público que recibió
c) finalmente, la naturaleza empresaria y lucrativa de la actividad el inforole inexacto o agraviante oye una sola campana. y su información
que desarrollan los referidos medios. queda incompleta al faltarle la respuesla de la persona afectada.
Por ende, es la misma integralidad de la expresión y lacomunicación
7. - Noticias, ideas, consensos, disensos, críticas, imágenes, opini<r ~oci al la que exige dar recepción al derecho de réplica, no para contestar
nes públicas, entran en circulación y componen un espectro de libertad, en ideas o doctrinas, sino para responder o rectificar un informe agraviante o
el que no debemos dejar de incluir: inexacto.
a) el derecho a no expresarse, o derecho "al silencio";
b) la cláusula de conciencia de los periodistas; 9. - En 1992, la Corte dictó una sentencia referida a la réplica en el
caso "Ekmekdjian c/Sofovich".
c) el secreto profesional;
Desde /994, lajerarquíaconstitucional deparada al PacLO de San José
d) la reserva de las fuemes de il/fomlación; de Costa Rica por la reforma de ese rula ha colocado al derecho de recti-
COMPElIo'DIO DE DERECHO CONS 1l111CIONAL LA LIBERTAU DE EXPRESIóN 87

licación y respuesta en 11.1/ mismo nivel respecto de /a libertad de expre· cia ha tomado de la Cone de Estados Unidos, establece que cuando se trata de
..
S101I. funci onarios púhlicos o personus I"íblicas que se sienten afectados a través de la
prensa y reclaman civil o penalmclltc. C"'l'; pcr¡Ollas deben probar que la publica-
ción o la crónica fue realizada con "real malicia", es deci r, con conocimiento de que
La censura lo que se difundía era fal so, o con desinterés temerario por a\'eriguar si la infomUl-
ci6n era fal sa o no.
10. - El ano 14 de la constitución proMbe la cen~ura previa. Tam- ..:Sta doctrina no puede darse por estabil izada en la jurisprudencia de la Corte.
bién la prohíbe el Pacto de San José de Costa Rica. En 19% SI! la aplic6 en un caso que, más allá de lo qu~ suele denominarse "perio-
dismo". \·crsaba sobre una narraci6n incluida en un libro (caso "Morales Solá, Joa-
Entendemos que. según lo dijimos en el parágrafo 5, los tratados de quín").
derechos humanos incorporados en 1984 y 1986 equipararon todos los
medios de expresión, de forma que a panir de allíno se pudo diferenciar a
la prensa O imprenla de los arts. 14 y 32 de la constitución respecto de la
expresión vertida a través de otros medios. Por eso. todos ellos quedan El artículo 14
euhiertos en pie de igualdad con la prohibición de censura previa.
14. - Cuando el ano 14 de la constüudón reconoce el derecho de
DicllO de otra manera: queda prohibida/oda censura previa en cua/- publicar las ideas por la prensa sin censura previa se nos hace muy cierto
quier caso, all1e cualquier situación. respecto de toda e/ase de lIIateria!
que presu¡xme dos cosas: que "hay" prensa. y que "debe haber" prensa.
o cOl/lellido que puede ser objeto de expresiól/ o illfonnación. Es/(/ pro·
ltibiciólI va dirigida a lodos los órgallos de poder. incluidos los jueces. Tooo para que se haga viable publicar las ideas a través de esa misma
prensa.
El Pacto de San José de Costa Rica ~n su art. 13,4 haCe un mal empleo
11. -
de la palabra. "censura" cuando dice que los especlácu los públicos pueden S<..'f so- 15. - El desglose del derecho de publicar ideas por la prensa puede
metidos por ley a "censura previa" con el exclusivo objeto de regular el acceso a ser el siguiente:
ellos para la protecci6n moral de la infancia y adolescencia. Eslo no es CenSllrtI,
sino ulla fomla razonable de cOn/mI para impedir. por motivos de moralid{/d p,¡bli·
a) Para el autor:
ca, que tengan acceso a tales espectáculos los menores de edad. a')frellle al estado: inmunidad de censu ra:
a") frente a/ periódico: la pretensión de publicación. sin que el diario
12. - La prohibición dc censura previa deja a salvo euantas respoll- quede obligado a publicar:
.tabilidades ulteriore.f de índole petlal o civil pueden eaber por las expre-
siones vertidas a través de cualquier medio. a''') si el periódico decide publ icar: inmunidad de alteración en lo que
publique. o sea que si el periódico no tiene obligación de publicar pero
Tal responsabilidad reparatoria no existe si el medio de comunicaci6n ante el publica, debe atenerse a reproducir el texto del autor;
cual una persona se siente afectada ha citado la fuente de la cual tom51a noticia o el b) Para el periódico (en la persona de su propietario o editor):
informe difundido, o si ha omitido individualizar el nombre o la identidad de dicha
persona, o si ha utilizado un tiempo de verbo potencial. Tallo que, con muy buen b' )freme al estado: la misma inmunidad de censura que tiene el au-
criterio, dej6 sentado el fallo de la Corte en el caso "Campillay Julio e/La Raz6n y tor;
otro~", de 1986. b") frente a/ autor: libertad para publicar o no publicar, pero si publi -
ea, obligación de manlener la fidelidad del texto.
La d0l.1rina de la real malicia
16. ~ La única obligacióII de publicar es la que impone el derecho
13. - La doctrina de la denominada "real malicia", que nueS!ra jurispruden-
de rectificación y respuesta para que el afectado por Wl infonne inexacto

88 COMPE-T\'OJO DE DERECHO CQNSTITIJOQNAL LA lIDERTAD HE EXPRESiÓN 89

o agraviante rectifique o responda a través del mi smo medio periodístico. El artículo 32


En este caso. el medio periodístico tiene el deber de incluir la rectificación
o la respuesta que el afectado tiene derecho a publicar. 19. - El arto 32 de la constitución consigna que el COllgreso federal
110 puede dictar leyes que restrinjan la libertad de imprelltu ni que esta-
17. - La jurisprudencia de la Corte considera que la libertad de blezcan sobre ella la jurisdicción federal.
prensa es illla de las que poseen mayor entidad constitucional. así como La prohibición dirigida a la legislación restrictiva divide las opinio-
sostiene que la prohibición de censura previa no exime de las responsabi- nes. porque mientras con una interpretación extrema (que consideramos
lidades ulteriores ni significa impunidad. equivocada) parte de la doctrina entiende que la norma le impide al con-
greso legislar sobre prensa, otro sector asevera que lo prohibido es única-
Asimismo, ha distinguido: el derecho "individual" de información a través de
mente la restricción, pero no la reglamentación legal razonable.
la palabra impresa, el sonido y la imagen: el derecho "social" a la información; yel
derecho "de la industria o comercio" de la prensa, el cine. la radio y la televisión
(caso "Ponzetti de Balbín", fallado en 1984). 20. - Enrolados personalmente en la línea que admite la legislación
razonable en materia de prensa (o imprenta), hemos de añadir:
a) que el congreso puede incluir en el código penal incriminaciones y
Los tratados COII jerarquía constitucional sanciol/es para las conductas que det1na como delitos que sean suscepti-
bles de cometerse por medio de la prensa;
18. - El Pacto de San José de Costa Rica depara amplia cobertura a b) que el arto 32 con su referencia exclusiva dirigida a la "imprenta"
la libertad de expresión. de información y de comunicación a través de deja claramente habilitada la legislación del congreso en (...'Uantos aspeclos
todos los medios y, además de prohibir en ellos la censura previa, también o cuestiones de naturaleza federal atañen a la eJ.presióll por medio de la
los exi me de restricciones por vías o medios indirectos que cohiben la cir- radio, la televisión. la cinematografía. etc.
culación de ideas y opiniones. Dijimos ya que consagra el derecho de rec-
tificación y respuesta (réplica). 21. - La segunda parte del arto 32 referida a la jurisdicción federal
El Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos contiene nor- hace pensar que la legislación sobre imprenta (prohibida al congreso) no
mas que, más escuetas que las del tratado recién citado, también protegen puede ser aplicada por U'ibunales federales, ni siquiera si se trata de delitos
ampliamente la libertad de expresión. Lnteresa destacar que obliga a prohi- cometidos por medio de la prensa. Tal lo que hasta el año 1932 fue juris-
bir mediante ley toda propaganda a favor de la guerra y toda apología del prudencia firme, con la sola excepción del caso "Calvete" que en 1864
odio nacional, racial o religioso que constituya incitación a la discrimina- falló la Corle, y en el que aceptó la jurisdicción de los tribunales federales
ción. la hostilidad y la violencia. para juzgar injurias contra un senador, porque interpretó que estaban en
juego inmunidades parlamentaria<;.
Asimismo la Convención sobre los Derechos del Niño y la COI/ven-
ciónsobre Discrimifwcióll Racial incluyen cláusulas favorables a la liber-
22. - En 1932 la jurisprudencia sufre un cambio importante. porque
tad de expresión. La última obliga a declarar punible conforme a la ley
admite la jurisdicción de los U'ibunales federales con carácter excepcional
toda difusión de ideas basadas en la superioridad o el odio racial.
en el caso de delitos comunes cometidos por medio de la prensa cuando
afectan aJ estado federal, al gobierno fedcraJ, a su seguridad, a sus inte-
Vale insistir en que las nonullS internacionales en materia de libertad de ex-
presión, información y comunicación -sobre todo las de instrumentos que tienen grantes y. en general, cada vez que está en juego un bien jurídico de natura-
jerarquía constitucional- han de tomarse muy en cuenta para completar la fuente de leza federal, tutelado en la incriminación.
nuestro derecho interno.
23. - En 1970 la Corte Calla e! caso "Batalla, Eduardo J.", e imprime
90 COMI'I!NOIQ DE DERECIIO CONSIII CCIONAL

un giro total a su jurisprudencia centenaria. El nuevo crilCrio puede •


resunlirse de la siguiente manera:
a) el ano 32 fue incluido en la constitución en 1860 para evitar que la
libenad de imprenla fuera 100almente regida por leyes federales y. como
consecuencia. quedara sometida a la jurisdicción de los tribunales federa-
les;
b) el congreso en ejerci cio de su competencia para dictar d código CAPtruLO X
penal puede legislar sobre delitos comUfles con independencia del med io
empleado para cometerlos (por ende, también cuando se comelen por me· LA EDUCACION y LA CULTURA
dio de la prensa), y el juzgamicnto corresponde a los jueces federales o
locales según la jurisdicción que en cada caso es procedente.
Derechos y deberes en relación con "enseñar y aprender"
24. - De las explicaciones anteriores, conformamos nuestra opinión
de la siguicllIc manera: el cOl/greso es/(í habilitado para dictar leyes {jue l . _ El art. 14 reconoce el derecllO de ensel1ary aprender. En tomo
"reglomel/tell" razonablemente la libertad de prensa (ans. 14 y 28), Y de esta norma no se duda de Que tiene el alcance de habilitar a toda persona
para crear delilOJ {jue se /Jlledell cometer por medio de la prenso, inclu· o a toda asociación para impartir enseñanza, y a todo habitante para reci·
yéndolos en la legis lación penal uniforme para todo el país (an. 75 inc. birla. Lo que importa es el efeclo jurídicalllellle ~e/('valite ~~e surte la.1en·
12). Las provillcias 110. señam:a, de moJo que el estado reconozca los utulos, cen lheados. diplo-
mas o constancias de los estudios cursados.
De todo ello se infiere que. en la actualidad. esta fórmula de "enseñar
y aprender" cubre cOnlenidos mucho más amplios que.los que el vocabula-
rio insinúa. Por algo se apela al derecl/O a /a educaCIón y al derecho a la
cultum; al derecllO a illfomwrse e itlvesligar en lodos los cam~ del
saber humano, y al derecho (/ difundir conocimientos. infomlaClones o
investigaciones.

2. _ La refonlw de 1994ha sido profusa en la maleria, no s.610 ~uan­


do en el ar\. 75 inc. 19 alude a la itlve~·tigaciólI y al desarrollo nemíjico Y
tecnológico. sino cuando. además, cspeci lica una serie de as~t?:' pun-
tuales a tomar en cuenta para la sanción de las leyes de orgal/lwclOl/ )' de
base de [a educaciólI. Por su lado, el inc. 17 hace referencia a la educa·
ción bilillgüe e ;'llercultuml para los ¡Jueblos il/dígenas argentinos.

3. - Tanto un análisis de cuanto explícitamente consigna el citado


¡nc. 19 del arto 75 como de loque flu ye impUcitamentc de las pautas funda-
mentales de la libertad de enseñanza. conducen a reconocer que los padres
tienen derecho a elegir el tipo de educación que prefieren para sus hijos.
sin inhibir a los hijos mellores adultos para que por sí mismos escojan la
• •
92 COMPE."l)IO DE DERECHO COl\S II IUOO:-"AL LA EDUCAOON y LA OiLTURA 93

orientación que gustan, si discrepan con la elegida por sus padres. El esta. dres, tutores y guardadores respecto de los menores a su cargo, así como las propias
do no puede coartar la iniciativa privada para crear y hacer funcionar de tos empkadores que en la relación laboral tienen a su~ órdenes a analfabetos.
eSI~bl.ecjn.licmos de enseñanza, ni negarles el reconocimiento. ni im[Xluer
un UIllCO IJpo de enscilanza obligatoria - ni religiosa. ni laica-, ni crear pri -
vilegios lesivos de la igualdad a favor de los establecimientos o ficiales. La libertad de eflselÍtll1W

4. - Las áreas tle libertad así encaradas se deben compagi nar con la 7. - La libertad de eflsel1al/UI se cxhibe también como un derecho ,
facultad estatal de diseñar el lineamiento de los plal/es de ellset1anza v consistente en la opción posible por un tipo de enscf\anza preferido, su por
eSlulli~ COII carácter flbligmorio; asimismo. el estado debe controlar que orientación ideológica o espiritual. por un establecimiento delemunado ,
no se viole la moral. el orden y la seguridad públicos, y que se respeten los con más -fi nalmenle- el reconocimiento de esa enseñanza por parte del
valores democráticos. La educación pública a cargo del eSlado tiene que estado.
acoger los principios de gratuidad y equidad. En cuanto al pluralismo Como principio, los establccimientos paniwl arcs disponen de mar-
educativo, el estado debe subsidiar o subvenir a la cnseñanza que se im- gen razonable para seleccionar a quienes aspiran a ingresar a ellos.
pane en establecimientos privados mediante Wl reparto proporcional de
los fondos destinados a la educación. La objeción de conciencia debe respetarse para no o~lig~ ni ~ d.occntes ni a
estudiantes a participar e n actos o ceremonias qUt: su concIenCia religIOsa o moral
5. - El ya citado il/c. 19 del ano 75 aswne como eje muchas de las reprueha, ni a prestar juramentos de lal natu raleza. ni a exteriorizar aClitudes o sen·
pautas que acabamos de ejemplificar, y combina una tríada imponanlC timientos q ue no comparten, ele.
cuando remarca la rcsp:msabilidad indelegable del estado, la par1icipaciÓI1
de la familia y la sociedad, y el respeto de las particularidades provinciales
y locales. L(I libertad de cótedra

8. - La libertad de cótedra significa que el derecho a impartir y a


W derecho "a" la educación recibir la enseñanza no ha de quedar sujeto a directivas que impongan un
contenido ideológico detenninado. o una orientación obligatoria, que le-
6. - Habíamos adelantado que la expresión "derecho de enseñar y sionen la libre investigación científica y el juicio personal de quien enseña
apre~der" expande contenidos muy amplios. Uno es el sugerido por la ex- y de quien aprende.
preSIón -lIOy muy usada- "derecho 'a' la educación".
El mínimo de enseñanza que et estado tiene competencia para imponer, así
El derecho elemental a educarse tiene un mínimo y un máximo que como los planes y contenidos de estudio. tienen que dejar margen para que ta liber-
c.stán dados por factores diversos: la propia capacidad , la propia preten- tad de cátedra quede exenta de orientac iones oficiales o polfticas.
SIón, los medios individuales y sociales disponibles. y las poJíLicas estata- Los profesores y alumnos que se incorporan voll/nwriamenle a un e~tableci.
les. Todo en y con igualdad de oportunidades. miento de enseñanza que tiene asumida una orientación o ideología deterrnmad a no
pueden invocar la libertad de cátedra para lesionar dicha orientación.
Para dar c urso viahle al acceso de todos a este derecho a educarse, e s obvio
que el estado y los particutares dcben abstenerse de eualllO signifique impedimen-
tos porque, a la inversa, hay que facilitar y prorruver aquel acceso en e l ámbito de
La reforma de 1994
un pluralismo educativo, dentro del cual el estado tiene q ue crear establecimientqs
o ficiale s gratuitos.
9. - La reformaeonstitucional de 1994 que, como dijimos antes, dio
Conviene, asimismo, no marginar tas responsabilidades que gravan a los pa- desarrollo al derecho de enseñar y aprender del art. 14, así como a la vieja
94 COMPr:.NTJIO DE DF.IU:.cHO CON:rnTVClO:"<Al L A EDUCACiÓN Y LA CU Ll'l)ltA 9,

alribución del congreso para dictar planes de instrucción general y uní ver- recluyen en la categoría de los clásicos derechos <;indi vidualcs'·. sino que
sitaria (ex inc. 16 del an o67, que subsiste en el actual inc. 18 del art. 75). se explayan hacia los derechos socia/es, aparece la conexión con el dere-
nos deriva al siguiente resumen: cho " a la cultura". de muy vastos contenidos.
a) Una ley· marro -o varias- de organización y de base que en mate- Para limitamos al texto de la constitución, digamos que el ('11. 75 inc.
ria educativa: a') consoliden la " unidad nacional "; a") resl'etell las pani - /9108 indi vidualiza así en su párrafo cuarto:
cularidades provinciales y locales; y que a) la idemidad y pluralidad culwral;
b) (/,fegurel/ la responsabilidad indclcgablc del estado. la participa- b) la libre creación y circulació" de las obras de aUlor;
ción de la famili a y de la sociedad, la promoción de los valores democráti- c) el patrimonio 0I1ístico y los espacios culturales y audiovisuales.
cos. y la igualdad de oportunidades y posibilidades sin discriminación al-
De nuevo la pluralidad cultural reenvia a la cultura de los pueblos
guna: y que
indígenas que, en el inc. 17. alude a la il/terr:ulturalidad, y en cua",? al
e) respecto de la ellsel1(lI/W pública esta/al garanticen la gratuidad y patrimollio artfsrico -comprensivo del hisLÓricO. cultural. arqueológiCO.
la equidad. y la aUlonomía y autarquía de las universidades nacionales. etc.- bien podcmos ligarlo con el ambiellte, porque inlegra el entorno,
muchas veces inmaterial. que sirve de emplazamiento de la vida humana y
10. - Con forme al ine. 17 del art. 75, se ha de tener presente el liga- social , recordando que la normativa del ano 41 sobre el a~\biente hace
mcn que a las leyes federales de educación las obliga a garantizar a favor mención del palI'imonio natural y cultural, al que las autortdades deben
de los pueblos indígel/as el respeto a su identidad, y una educación bili n- proteger. y a cuya protección tienen derecho los habitantes.
güe e intercultural.

11 . - Como alladiduras parciales, recordamos que el ano .; /, cuando Los tratados illtemaciollales
consagra el derecho al ambielllCsano. obliga a las autoridades a proveer a
la in/orll/aciól/ y /a educaciólI ambientales. lo que apunta a un rol educa- 15. _ Numerosas c1áusulasde rratado.f intenUlciol/ales de dereclws
tivo en la materia. De modo similar. el arlo 42, cuando reconoce el derecho humlmos con jerarquía constitucional deparan reconocimiento y tutela a
de los consumidores y usuarios de bienes y servicios, asigna a las autorida- derechos tales como los vi nculados a la educación: a la libertad de los
des un análogo deber para proveer a /a educación para el cOl/Sumo. padres para escoger la orientación en la educación de sus hijos: al de~ec.ho
a que éstos reciban educación reli giosa y mora) confonne a sus convIccIo-
12. - La lIurollom(a y aurarquía que la constitución depara a las nes: a elegir escuelas distintas de las oficiales: a participar en I~ vida cultu-
universidades I/aciol/ales reviste el sentido de reconocerlas como perso- ral ' a la libertad de investigar: a la actividad creadora; a la Igualdad de
nas jurídicas de derecho público "no-estatales". de;echos de la mujer respecto del varón; a la educación de la mujer rural.
etc,
13. - Es fácil admilirque las pautas generales que el ine. 19 del art, De tal normativa internacional se desprende, asimismo, que los dere-
75 fija para las leyes de orgrulización y de base de la educación obligan a chos que hemos estado desglosando encuentran sitio en el espacio de los
las provil/cias en 1000 cuanto les compete en materia de ensel1anza. derechos sociales.

El derecho (1 la culLUra

14. - Una vez que el derecho de enseñar y aprender. la libert ad de


enseñanza. el derecho a la educación, y todo cuanto les es afín ya no se
EL DERECHO DE ASOCIARSE

La libertad de asociación y s U~ contenidos

J. - El an. 14 reconoce el derecho de libre asociación con la f6rmu la


de "asociarse con tilles úti les", Este concepto de "ut ilidad" debe inter-
pretarse como referidu a uri fill que 110 sea dmlillo ¡}(1m el bien comúlI, o
sea, neutro o inofensivo.
Tielle dos aspcl:tos:
a) Como derecho "il/dividual", implica que toda persona dis(XJue de
libertad para: a') formar una asociación; u") ingresar a un a asociación ya
exi stente: u"') no ingresar a una asociación determinad a. y no ingresar a
ni nguna: a"") dejar de pertenecer a un a asociaci6n de la que se es miem-
bro. En síntesis. acá se aloja la libertad de asociarse y de no asociarse.
b) En cuanto derecho "de /a" asoclació" , implica reconocerle a ésta
un stalus jurídico y una zona de libertad Jurídicamente rdevanlc que quede
exenta de interferencias arbilfarias del estado.

2. - El reconocimiento estatal puede Ir desde el otorgamiento formal de la


personalidad jurfdica, si [a asociación lo solicita, hasta la simple consideración de
la asociadón como sujeto de derecho sin pcr&Ooalidad jurfdiclI.
Las decisiones administrativas que otorgan o niegan reconoc imiento a una
asociación deben quedar sujetas a posible revisión judicial.

3. - Nuestro orden amiento conoce: a) las personas j urídicas de dere-


cho público. que pueden ser eSlOrales 't 1/0 estalalel: b) las asociaciones
profesíorlrtles o sindicales con perso1/alidad gremial: e) la eJtlratcrrho-
rialidad dt: personas j urfdicas extranjeras reconocidas en nuestro pafs en
su calidad de sujetos de derecho, o para realizar actos aislados.
98 COMPI1'iJI O DE OEREC lm CONSlll Vt.'10!'lAL El. DERECHO 010 "S(Je'!ARSI:. 99

4. - Con la refomlll constitucional de 1994. el texto del artkulado 8. - Nuestra legislación ha bi furead o habitu almente a las asociacio-
incluye también: a) a loslJarlidos politieos (an. 38): b) a las asociaciones nes sindicales: a) las meramellf{> il/scripuu: b) las reconocidas oon perso-
de cOl/Jumidores y usuario.~ (art. 42); e) a las asociaciones que propenden nena gremial.
a losji"!'s que el arl. 43 protege mediante la viabilidad del amparo : d) a
los pueblos illdfgeulI$ que. l:onforme al arto75 ¡ne. 17. deben ser rccomx:i· 9. - Para dejar sentada brc\'l!mcme nuestra postura constitucional, diremos
dos en su personería jurídica. que: a) no n:probalTJ)~CO nD inconstitucional la existencia de entidades con person....ría
gremial, a condición de que no titu laricen cn fo rma monopólica la total idad de los
5. - Así con},) para la persona fís ica todo lo que 00 k está prohibido le queda derechos gremiales; b) cs inconslÍlucionaltodo sistema legal que no deja espacio
{>\!rmitido. para las asociaciones rige la regla de {(I especialidad, según la cual suficiente al pluralismo sindical. porque en realidad implica cOlwertir a [as asocia-
tienen capacidad para todo cuanto se halla comprendido en susfines propios. Ta llo ciones m:ramente inscriptas en entidades sin ningún protagonismo propio de las
q ue surge del código civil, bien que por encima de ti tal principio de riva implícita- entidades gremiales.
mente de la conslituciÓn.
10. - Mientrascn lo estrictamente propio de la agremiación la Corte
6. - La asociación como sujeto activo de la libertad jurídica que dictó una muy acertada sentencia en 1967 en el caso "Oulón, Carlos.l. y
litulariza dispone de: otros" rechazando la sind icación coacti va como lesiva del derecho de afi-
a) un status jurídico que le depara cierta capacidad de derecho, aun liarse, de no afiliarse y de dcsafiliarse . cuando hubo de decidir el tema de
cuando no tenga personalidad jurfdica: la llamada "colegiación obliga/oria" de los profesionales a una emidad
b) un poden/e disposició1/ para realizar actos jurídicamente relevan- pública (o colegio) interpretó, ell el caso "FclTari, Alejandro J. clEstado
tes para el fin propio: Nacional" de 1986. que el Colegio Público de Abúgados de la dudad de
Buenos Aires no era una "asociación" integrada por la adhesión espontá-
c) un área de libertad jurídica inofensiva para regir con autonomía nea de cada componente. por lo cual tampoL.'O quedaba violado el derecho
su propia órbim:
a no ser compelido a ingresar a una asociación.
d) un espacio en el que lo que no le está prohibido dentro del siempre En el eje del problema hubo de tenerse en cuenta que el Colegio Públi-
mencionado fin propio, le cstáper/IJi/ido a tenor de la regla de la especia-
co tiene a su cargo la matriculación profesional encomendada por el ~ado
lidad:
mediante la ley, o sea, el control de una acLividad con proyecciones públi-
e) un poder disciplil/ario sohre sus miembros o afiliados. cas - incluso en lo di sciplinario y ético-.

Ue\'ada la impugnació n a lajurúdicciólI s/¡proeSlallll.la Comisión Interam!-


La libertad de asociacióll Jilldical ricana de Derechos Humanos con~ide ró -en 1988- que la libre asoc iación no resul-
taba lesionada por la colegiación obligatoria de los abogados.
7. - El derecho de libre asociación nos conduce ahora al te ma de la
libenad sindical, que encuentra definición en el arto 14 bis cuando alude a 11. - Las normas imemacionales de /ralados cOlljerarquía cOlIsli-
la "organización sindical libre y democrática, reconocida por la simple tuciollal prestan reconocimiento y cobertura a la libertad dc asociación
inscripción en un registro especial". respecto de diversas clases de entidades y para múltiples tines.
La nonna citada impone claramente el pluralismo sil/dical y descartu
el wlicalo, así como permite inferir que es inconstitucional obligar a afi-
liarse a un sindicato, aunque acaso se deje opción para elegir a cuál entre
varios. O sea. acá también rigc el derecho de "110" asociarse. Como coro-
lario, es inconslitucional toda norma que obligue a los trabajadores no
agrcntiados a pagar una cuota sindical.
CAP1nJLO XII

LA LIBERTAD DE CONTRATAR

El contrato y la autonomía de la voluntad: espacios y límites

l. -La libcnad de contratar ha de darse por comprendida entre los


derechos implícitos. Sus aspectos lineales son:
a) el derecho de decidir si se va (1 COf/lratar o 110; es decir que acá
aparece el derecho de "no contratar";
b) si se decide contratar, el derecho de elegir eOIl quién:
e) el derecho de I1!gular el cOllfel/ido del C01l1ralO: o sea que éSlc
viene a ser e l ámbito de la llamada autotlomía de la vo/umad.

2. - Atguna.~ excepciones ra zo nables a ciertos aspectos de la libertad de con.


trataci6n pueden ser éstos: el deber de co otratar un seguro ind ividual o cokcti vo en
la relaci6n de empleo. en las empresas de transporte, etc.: o de contratar a personas
discapacitadas o lisiados de guerra en el empleo privado, etc.

3. - La autonomía de la volwlIad nos muestra en el conlralo una


fueme l/ O estatal de producción jurídica. Sin embargo, según cuál sea el
ámbito en el cual o sobre el cual se contrata, la presencia reglamentaria del
estado se vuclve razonable; tal - parej.- lo que acontece cuando eOlrc las
partes contratantes hay asimetñas o disparidades, o cuando se trata dc
contratos standard con cláusulas de adhesión, o en la relación de trabajo
para el contrato individual y colectivo, etc. Asimismo, ha de admitirse toda
limitación razonablc impuesta por el orden público, la moral pública, los
derechos de terceros, la seguridad pública, o las relacioncs propias del dc·
recho de familia.

4. - Conforme a la jurispru denci a de la Corte, una pauta trascendental SCl1ala

J
LA UBERTAD DECO"íRATAR
103
102 CU!-iPE:l\"IJIO DE DERECHO CONSlll1JCIONAL

· bargo en 2002 y 2003 la Corte rescalÓ el derecliO de propie-


SIn cm . &1' traídos
que los derechos y obligaciones emergentes de los contralOs integran uno de los dad fren te a la normativa que transformó a pesos los cr Itas con
contenidos del derecho !Onsl;llIciona¡ de pmpiedad.
en dólares estadounidenses.
5. - La iflterve1lci611 del estado en los contratos se mueve en dos d 199\ la ley de convertibilidad prohibió toda indexación fulU -
9. - e uan o en od pérdida CIl el valor
esferas: ra hubimos de reafimlar nuestra tesis de: que, no obstante, t a . d d 1
a) con carácter permonel/le y (lllficipado, poniendo cienos marcos a re~l de la moneda ha.;;c pro¡,;c!.k:llte -para salvaguardar el derecho de prople a - a
la autonomía de la voluntad: actualización o el reajuste dinerario.
b) con carácter excepciol/al y transitorio, en situaciones de emergen- 10 _ No ha de olvidarse que, al margen del problema que suscita t.od~~
cia, con un doble efecto: b') sobre contralOs celebrados ame.s que se hallan uc rec~c sobre el curso d..: cumplimiento de contratos .celebrados con ant~l~on .
en curso de ejecución: b") sobre los contratos que se van a celebrar el/ ~ ,eorla de la imprevisi6n admite quo.: los jueces n.lVlscn 105 contr~tos o,;uando se
ade/ame mientras durc la emergencia. roducen cambios sustanciales en las condiciones que las par1es tuvIeron en ~~nta
P il toona de la impro.:visi6n porque el aconteclllllen-
Por supuesto que la regla de ra zol/ahilidad marca los límites de am- allTllJn~nto de contratar. S e ama . d d ser ,
to que altera el cumplimiento del contrato ha de ser de tal enuda que no pu o
bas intervenciones.
"previsto" verosímilmente por adelan tado_
ó_ - Para [os contratos en curso de cumplimiento. una ley posterior peca de
reIrVllct¡'¡·idad inconsritllcional si afecta los efectos del contrato. a menos que se
trate do.: una real emergencia. y que [a ley quo.: captura contratos anteriores no disnu-
nuya prestaciones debidas (por ej., montodcl alquiler, tasa de interés, cte.) sino que.
transitoriamente. se limite a prorrogar plazos o congelar precios_

7 _- Lajurisprudellcia de la Cortc nos lI ~va a registrar fal los como


los siguicmcs:
a) cn 1960. respecto de la ley que obligó a incluir "números vivos"
durante los espectáculos cinematográncos. la Corte reputó constitucional
la medida aun cuando las salas de cine debían contratar (compu lsivamcn-
le) a quienes iban a llevar a escena el "número vivo", de fOffila que se les
imponía una actividad no elegida; y, además. muchas salasdebicron incu- •
rrir en gastos para adecuar los escenarios:
b) en 1968, al pronunciarse sobre la ley 16.507 que obligó a reincor-
porar tx:rsonal cesante en enlidades bancarias y similares, declaró incons-
titucional la imposición de obligaciones que no existían a la fecha de la
Cesantía.

8. - Cuando se rastrca desde la década de 1920 a hoy lajurisprudell-


cia de la Corte en épocas de emergencia. es fácil corroborar que las obje-
ciones de ¡nconstitucionalidad -salvo e,,-cepciones- no han tenido é,,-ito.
Una síntesis actualizada al año 1990 surge de la scmencia en el caso
"Peralta". que admitió un decrcto dc necesidad y urgcncia por cuya aplica-
ción se convinieron los depósitos a plazo fij o en titulas públicos.

j
UN PLEXO DE DERECHOS ENUMERADOS E lMPLICITOS

El derecho de reunión

l. - No obstante la importancia institucional del derecho de reunión.


y los enfoques que siempre ha suscitado en la doctrina y lajurisprudencia,
hay que recordar que nueSlJ'a constitución no lo integró al catálogo de los
derechos enumerados. Pero nadie duda de que fomla parte de los implíci-
tos.

Ahora bien, cuando el arL 22 incrimina a toda fuerza armada o re-


Wli6n de personas que se atribuye los derechos del pueblo y peticiona a su
nombre, deja espacio para interpretar que la reunión pacífica queda reco-
nocida

2. - Si las reuniones se dividen en públicas y privadas. creemos que


el criterio para distinguir una clase de la olra es éste: pública resulla toda
reuni6n que queda abierta indiscriminadamente al público. o sea, a cual-
quiera; privada es la que no goza de esa apertura.
La diferencia interesa porque las reuniones públicas quedan someti-
das a lajurisdicci6n del estado en grado variable. según el fm que se pro-
ponen y el lugar donde se llevan a cabo; de ahí que si se realizan en lugares
públicos (calles, plazas, elc.) suscilan un control razonable más intenso
por razones de IX'licía, y hasta a veces precisan el permiso previo.

Las reuniones en los templos. bien que son públicas, se sustraen en principio a
la intervenci6n estataL

3. - El sujeto activo del derecho de reunión se clasifica así: a) la


UN PLi:.XO DE DE.kECUOS E.'WMERAlX)S E lMPLlcrrOS 107
106 COMI'E."DIO DE DERECHO CONS111tK.'O~AL

encarar el tema como dereclw (J In jllr1sdicción, o den.'Cho de acceder a La j usticia


I
persona o una asociación: b) las personas Lienen un derecho "propio", ejer-
cido colectivamente. depanicipar en la rewli6n; e) hay un aspecto negati -
para q ue resuelva lo que se le peticiona como pre tensión, I
vo, que es el derecho a 110 asistir. 10. - Damos por verdad que el derecho de peticionar obliga al órga-
El sujetO pasivo es, fundamentalmente , el estado, pero también los no requerido a dar una respuesta en tiempo razonable; o sea. a ~ntestar
particulares en cuanto se tienen que abstener de impedir o alterar la re- sobre lo que se le pide. Pero no implica Wl derecho aobtener lo peuaonado.
unió n, o de interferir en ella obstaculizándola.
11. _ Si bi¡;1l estamos analizando la petición que scdinge a ulla "autoridad",
4. - La jurisprudencia de la Corte ha dejado en claro que una re- no ha de omitirse la idea de que también hay derecho de "pelicionar" a /lII sujeto
unión no puede prohibirse a causa de las ideas, opiniones o doclrina'l de (individual o colectivo -por ej.: una asociacióll. un banco, un registro de datos-)
sus promotores. sino únicamente en razón de sus filies (en caso de ser que no es "autoridad": por ej.: para recabarle una información.
éstos contrarios a la constitución, las leyes o la moral pública, o de resultar
la reunión peligrosa para el orden y la Lranquilidad pública en una silUa-
ción u oportunidad determinadas). El derecho de circular
5. - La reglamelllaci61/ del derecho de reunión queda sujeta. según 12. - El (m. 14 menciona el derecho de elllrar, pemumecer, lnmsi-
nuestra panicular opinión. a la legislación de l cOllgreso (para todo el país) tar y salir del territorio, que es equivalente a la libenad de Jocom~ió" o
como todos los otros derechos; reroen alfa interpretación muy difundida circulación o movimiento. yquc deriva de la libertad corporal o fíSIca, en
prevalece la Iloción de que, por su relación con el llamado "poder de poli- cuanto ésta apareja el desplazamiento y traslado de la persona. así como su
cía" (local). son las provincias y la ciudad de Buenos Aires las que pueden residencia, radicación o domicilio en dlugar que elige.
reglamentar -<:.ada una en su jurisdicción- el ejercicio del derecho de rc-
unión. 13. _ El derecho (j obtener pasaporte es parle esencial de estos derechos.
Así lo sostuvo la Corte en 1985. en el caso "O.A, c/Estado Nacional".
6. - Las normas de tratados de derechos humanos de jerarquía cons-
titucional concuerdan, en su lineamiento básico. con lo que es propio de
nuestro derccho interno.
14. _ Si los derechos mencionados pertenecen allwbitallle, cabe pre-
guntarse cómo quien no lo es porque no ha ingres~o al país. ,Puede invO-
I
car su titularidad para entrar. La respuesta es obVia: potencialmente. su
El derecho de petición pretensió" de entrar lo habilita como habitante futuro. De todos modos. el
derecho de entrar queda sujeto a reglamentación razonable en tomo del
7. - El art. 14 cita el derecho de peticionar a las (jutoridades. Pero acceso y admisión de personas.
"toda fuerza armada o reunión de personas que se atribuya los derechos
del pueblo y peticione a nombre de éste. comete delito de sedición" confor- 15. - A panir del ingreso. surge el derecho de permanecer , también
me al ano 22. con diferentes calidades a tenor de reglamentaciones razonables: como re-
siden tc permanente, o en fomla transitoria, o como simple turista ocasio-
8. - El sujeto activo del derecho de petición es la persona humana y nal.
las asociaciones. por lo que puede ejercerse indí vidualmcnte o en grupo. El
sujeto pasivo es siempre el estado a través de sus órganos gubernamenta- La permanencia. con cualesquiera de tales condiciones. permite decir que la
les. persona fOnDa parte. en ese momento, de la pobl~i6n del. es~a~ (~aso de la que se
considera "Ootante" u ocasional) y queda sometIda a su junsdicclón.
9. - Cuando el órgano al que se peticiona es un tribun(ll judicial. hay que

r
108 COMPfJ',DIO DE DERECHO CONSIllUaONAL UN PlEXO DE DERECHOS ENUMERADOS E lMPÚOTOS 109

La pennancncia confiere el derecho de Iransitar y circular. El deret:ho de casarse

16. - El derecho de salir abarca el de hacerlo con ¡mención definiti. 21. _ El an. 20 incluye entre los derechos reconocidos a Jos ext~n­
va.. o solamente transitoria. jeros el de casarse confomle (l las leyes. Dada la igualdad entre extranJe-
ros y nacionales, cabe decir que estamos ante un derecho de IOdos los
Según nuestro punto de vista, la t'xlranjerfa no confiere al estado la facultad lIabitallles.
de .o]'d~nar la s.IIUda t.:ompuls,iva o de expulsar. Puede. en combio, obligar a sn!lr a El sujero activo es la persof/a humana. El sujeto pasivo es, funda-
qUien m~rcs6 Ilegalmente, sIempre que entre ese ingrelJO y la expulsión no haya mentalmente. el estado, pero a la vez los demás hombres en cuanto no
transcumdo un plazo que, ¡xlf su duración y condiciones, haya cOllvertido en "habi- pueden impedir que una persona se case. ni obligarla a hacerlo.
tante" a la persona que accedió sin cumplir [as reglamentaciones aplicables.
Este derecho a casan;e no da pie pan1 afirmar que tas uniones de ~,eclw ~l
17. - En su fin. 25 la constitución prohíbe someter a gravamen O ilícilas o ilegales, si se trata de personas h'biles para conlraer matrimomo que eh-
impueslOs el ingreso de extranjeros. gen oo[)vivir sin casarse entre sí.

. 18. - Aun cuando los derechos de en trar, permanecer, transitar y sa-


lir pertenecen a las personas físicas, es IX'sible argumentar que. analógi- El matrimol/io
camente, las personas jurídicas o asociaciones extranjeras lienen derecho a
cstablecerse en el país o a aCluar en él como sujetos de derecho. 22. _ La regulaci611 e.Ha/al del matrimonio da lugar a las siguientes
pautas:
19. - La "ley de tránsito'· abre sitio al debate. Podemos afirmar que a) hay una liberrad juridica para casarse y para que, de ese. modo,
el congreso tiene competencia para dictarla en cuanto abarca el tránsito quede emplazado el estado civil de familia; ello implica qu~ I,a u0l6n que
interjuri sdiccional . ya que: a) por un lado, se le hace aplicable analógica- comIaen ha de ser reconocida por el eSladoen sus efectos CivIles;
mente la cláusula comercial del arto 75 inc. 13; b) por el otro. estamos ante b) por ende, el estado ha de habilitar y deparar algut/a fomlll legal
un derecho que figura en el arto 14 y que puede ser reglamentado. De todas para obtener el resultado expuesto en el ine. a);
m~eras, la ley del congreso no puede ir más allá de lo conveniente y nece- c) asimismo, es menester reglamentar un régimen pluraUslo de múl-
san.o para proteger y asegurar el tránsito imerjurisdicciollal. dejando a las tiples fOffilas matrimoniales para que los contrayentes elijan la de su prcfe·
entIdades locales todo lo no abarcado por ese objetivo. renda, también con los efectos del inc. a);
d) no basta -por ej.- que el estado reconozca libertad para con.tr~er un
20. - Los illSlrUmeTltOS iTltemaciol/ales de derechos humanos eOIl matrimonio religioso. porque si el único matrimonio con efectos cl:~les es
jerarquía constiluc~ona' dan colx!nura a derechos similares a los que sur- el matrimonio civH (obligatorio para emplazar el estado de (anulta), la
gen. ~e nuestro art. 14, y admiten la cxpulsión de extranjeros con base en libertad jurídica de casarse de acuerdo a la propia opción resulta innecesa·
deCISIOnes confomle a la ley, pero rechazan la de nacionales. Un extranjero riamenle lesionada;
no puede ser expulsado o devuelto a otro país, sea o no de origen, si Su e) establecido el sistema pluralista ya indicado, el estooo puede ~ndi.­
derecho a la vida o a la libertad personal corre riesgo de ser violado a causa donar el reconocimiento de los matrimonios religiosos a que se los U/scn-
de raza, nacionalidad, religión, condición social u opiniones políticas. La /la en un registro público.
expulsión colectiva de extranjeros se halla prohibida.
Tales normas surgen fundamentalmente del PaclO de San José de 23. _ El matrimonio religioso si" matrimonio civil fue reconocido
Costa Rica. por la Corte en 1957 para otorgar derecho a pensión a la viuda que estuvO
unida al causante sólo mediante nupcias religiosas. siendo ambos solteros.

_ _ _ o
HO COMPI,,'-'OIO De DERECHO COl"STIl1JClONAL UN I'I..EXO Ole: OERECHOS ENUMERADOS f! IMPLlaros 111

24. -- Pese a su carácter commcLUal, el matrimonio recibe: numero- 30. - Ha de dejarse en claro que "familia" 0 0 es solamenle la que
sas limitaciones a la voluntad de los cnntrayemes en razón de la naturaleza está fundada en el matrimonio. Los hijos nacidos fut!ra del matrimonio
de orden público de la~ norlllas que lo regulan. Hay -por cj.- una ún ica componen la familia y, para determinadas prestaciones sociales. las unio-
pauta legal en malcria de monogamia y de disoluci6t1 del víncu lo. nesdc hecho confieren derecho a los integrantes de la pareja conviviente.

25. - En el caso "Scjean" fallado en 1986, la Corte declaró. por ma- 31. - La refonllo cOllsliruciollOl de J994 ha incluido en el jllc. 23.
yoría, que la indisolubilidad del matrimonio-vigenteaesa fecha en nues- párrafo segundo. delorT. 75 una referencia al nino ~ a la madre e~ ~ateria
tro derecho civil de familia- era ¡nconsliTuciollal. Poco después. la ley de seguridad social. El inc. 19 prevé la par1icipacl6n de la (amlha en la
introdujo el divorcio vincular. educación.

26. - En c uanto al dil'Orr:io (vincular o no) por mutuo acuerdo, se trata de un 32. - El Pacto de San José de Costa Rica. de jerarquía constitucio-
régimen que deja librada a los qposos ulla vía y una forma procesales para resguar. nal, obliga a igualar las filiaciones.
darel secreto y la imilllidad de las causales del divorcio. y aun cuando la i'Cntencia
no puede. entonces, dar rar.ón de los hechos que motivan la decisión judicial (por- Cláusulas sobre el matrimonio. la familia, la filiación, la mujer, el
que 110 queda constancia de eI!os), creemos que no concurre causal para tildarla de niño, más un plexo de derechos y deberes conexos , aparecen en normas de
arbitraria, porque el sistema del ao;;uerdo mutuo exhibe, en el marco del dcrcclJCl de los tratados de derechos humanos con jerarquía constitucional .
familia, razonabilidad suficiente.
33. - De cuanto hasla acá traemos explicado, deducimos que: a) queda
asegurada la igualdad emre varón y mujer en las relaciones de familia, y
La familia entre las distintas filiaciones biol6gicas: b) no se puede discriminar a Jos
l/OmoseJ:uales con el argumento (falso) de que carecen de inclin ación o
27. - Cuando scenearan las nom"laS sobre la familia, hay que Ixmer- aptilUd para formar una familia mediante el matrimonio: c) la abstenci61/
se de acuerdo en definir qué es "familia". Familia no es una el1l idad dife- sexual asumida voluntariamente ha de ser respetada. porque no pugna con
rente de las personas fTsicas que forman parte de ella. sino la denomina. la norma constitucional de protección a la familia.
ción acordada al conjulllo de quienes tiellen Ull vínculo parelllal. Por ende.
la fanlilia l/O es un sujeto de derecho 11; una persollajurídica. de lo que se
desprende que cmUldo se habla de "derechos de la familia" ha de enlendcr- La libertad de comercio e industria
se que se alude a "derechos de las perSOl/as físicas en sus relaciones de
familia". 34. - La correlaci6nde los (IrIS. 14 y20 permite agruparen un rubro
común a los derechos de comerciar:. novegar:. ejerr:er illdustrin lícira. Ira-
28. - Tales derechos no se limitan a los reconocidos entre parientes bajar y ejercer profesi61/.
(o sea, dentro de la familia) sino también a los que, en virtud de una rela-
ción de familia. se reconocen a sus miembros el/ relaciól/ eOIl terceros 35. - En tanto el derecho de trabajar será analizado al tratar el cons-
ajenos a la familia (por ej .. frente a un empleador para que pague un sala- titucionalismo social, el resto del plexo recién propuesto merece atención
rio familiar, o conceda una licencia por maternidad). desde la normativa que en la constitución ha recibido algunas añadiduras
con la reforma de 1994. El esbozo puede ser éste:
29. - El (In. 14 bis en su parte final dispone que la ley establecerá a) el congreso es competente para "reglar" el comercio marítimo, te~
"la protección integral de la familia. la defensa del bien de familia, la com- rrestre y aéreo con otros estados, y el de las provincias entre sí; talla cláu-
pensación económica familiar y el acceso a una vivienda digna". sula "comercial" del arL 75 inc. 13;
112 CQMI~O DE DERECHO cONsTrruaoNAL U:-; PLEXO DE. OIiRl:CHOS E/'.'UMERAOOIi E IMPllqros

b) lo es laIllbi~ll para dic tar ¡;l ródigo de comercio para todo el país e) al crecimiell(o armónico de lOdo ellerritorio;
(¡¡n. 7S ;ne. 12);
f) promover políticas difere1lciadas que lienf,lar¡ a equilibrar el des-
e) ftsimismo, PIlI1l reg1amcnlar la libre lIovegació,¡ de los ríos ¡nterio- igual desarrollo relativa de provincias y regiopcs;
re¡ y l1abililar puenoli (art. 75 i'W. 10) conforme al principio de libre nave-
~aci6n (an. 26); Todo este plexo surge del arto 75 ¡ncs. 19 y 23.
Es imponante lOmar en consideración, ~&i mismo. qtW ªI regular la
d) por igual. parq proveer a lapromoci ófI de la illdustria (a tenor del coparticipació"federal en el reparto impositivo, el art. 75 ¡nc. 2° ~~o
arl. 75 inc. 18), en concurrencia cpo las provincias (art. 125);
tercero su ministra parámetros imperativos para llevar a cabo esa <hstnbu-
1;) ni el copgreso ni las provin¡;jas pueden afectar l¡t libre circulación ción; dice que¡
territorial de bienes, productos. venícu1os, buques. etc. (an s. 9 a 12);
a) será equitativa. solii/aria, y
f) lit poder impo.\'üivo del cQngreso y de las provincias puede incidir,
b) daráprioridlld al logro de un grado eQuivalente de d~arrollo, ca-
da acuerdo al r~parto constitucional de competencias, en la fWli vjdad co-
o}erda! e industrial; lidad de vida e igualdad de ofJortul/id¡uJes en todo el territori o.

g) similllf incidencia den ya de la competencia del congreso para regu- 37. - La alusión a la libertad ecof/ómica no puede eludirse. Se IIata
lar el trabajo (ans. 14. 14 bis , y 75 ¡nc. 12); de la libertad de los paf\.iculares en el ámbito de la e:conomía.
h) por ig~al, a raíz del llamado poder de policía en razón de higiene. La constitución no define cxpresl\lnente un detf!rminadp sistema eco-
seguridad y rporalidijd públicas, también a tenpr d6 la distribuci6n nómi~. pero contiene ~n principio nlfnimo de IibcIlad (asegurar sus bcne-
comretencia! entre el estado federal y las provincias; ncios, según el preárr¡bulo) que resulta aplicable para abrir un espacio
i) las reglamelllaciones locales d~ la acti vidad ~omercia! e industrial sujiciem8 de libertad, cuyas medidas ordenadoras por pl\fle del estado
"intraprovincial" no pueden violar normas emanadas del congreso sobre han de hallarcauee para lograrel biellesw r gel/eral (también preambular).
comercio e industria. tamo si son leyes federalos ouanto si lo son de dere- Segu ramente. el principio de justicia y progreso económico con justicia
cho común (por ej., el código de comercio); social (an. 75 ine. 19) f,la ingreso al principio do subsidiaridad, según el
j) ha de tomarse en cuenta Iª relación que liga a la libertad comercial e cual el estado no ha de hacer lo que con eficacia pueden hacer IOi pílrticu-
industrial con los derechos que ~ consumidores y usuarios reconoce el arto lares, a quienes ha (h~ ayudar sin sustituir, absorber O destruir.
42 en el mercado de consumo y uso de hienes y serviGios; En síntesis, hace falla unaprese1lcia esuual razonable para la gestoría
k) Otro ne~o a analizar es el qQc tiende puente haoja el ¡;Ierecho de de la política y de la actividad económicas en el marco del estado de demo-
comrarar y el derecho de propiedad. cracia social o estado social de <Icrecho, así diseñado por la refonna do
1994.
36. - Con referencia exclusiva a la refomUl de 1994, guardan direc-
38. - En sumatoria, hay que acudir a la igualdad de oportunidades Cut. 75
ción hacia l¡llibcrlad económica, el comercio, la industria, etc., una serie
inc. 23) y a la distribución razonablemente igualitaria de la libertad, que es Q[l
de pautas obligatorias para la legislación y las políticas de estado. principio implícito. de forma que el ID!rcado no se torne irrcstricto ni la ~mpcten­
Así, proveer: cia se absolutioo. Asimisml. muchas "des-regulaciones" aceleradas a parurde 1989
a) al desarrollo humallo; han reñido con la reforma constituciona l de 1994.

h) al progreso económico justicia social;


COI/ 39. - En líneas generales, podemos decir que ta ju risprudencia de la Corte,
e) a la productividad de la economía nacional; desde una vieja sentencia de 1887 en el caso de los Saladeros de Barracas C'Podestá,
Santiago José y Jerónimo y OltOS c/Provincia de Buenos Aires'') dejó sentado el
d) a la generación de empleo:
criterio de que la actividad industrial y comercial no puede comprometer con su
,
114 COYl'PEXDlO DE DERECHO CO~'STrroClONAL

nocividad bienes colectivos como -por ej.- la salud pública . En Olfas palabras, la
salubridad, la moralidad, el orden público, y los mismos intereses econ6micos kgi-
timan la intervención reglamentaria del estado, aun cuando -a la inversa- no puede
prohibir determinados negocios por considerarlos ruioosos, ni imponer otros que
repute de conveniencia pública.
En 1967, el caso "Empresa Mate Larangeira M~ndez S.A. y otros" dio lugar a
que la Corte declarara que la prohibición para cosechar la yerha mate para el año
1966 según lo estableció un decreto. cuando ya la cosecha se había realizado y c. . Phuto XIV
había originado gastos y obligaci()nes, vulneraba el derecho de trabajar y de gozar
de la propiedad adquirida.
LOS NUEVOS OERECHOS DE LOS ARTICULOS 41 y 42

El derecho .ambiental

1. - Una lectura atenta del nuevo ano 41 en materia ambiental nos


autori za a sostener que:
a) La re rerencia al '·derecho de lodos los hahitantes" a un ambiellle
sano. con todas las calificaciones que utiliza la norma, personaliza a este
derecho en cada UI/O, al modOl'omo lo hace el texto del arto 14. pero: a') ha
de tomarse en cuenta que la alusión del art o43 a [os derechos "de inciden-
cia colectiva" (cuando depara la vía del amparo para proteger al ambiente)
asume además la dimensión colecliva y grupal que reviste el derecho a1
ambiente;
b) Se ha de advertir la relación con el derecho de los recursos natura-
les - por ej .. en lo que atañe al agua. la nora. la fauna, los bosques. el sucio,
la tierra, etc.- y la titularidad que el arto 124 asigna a las provincias sobre
el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio:
e) El ambiente queda propuesto como saliO. equilibrado. apto para el
desarrollo humano y para las actividades productivas que satisragan las
necesidades humanas:

d) Cuando se agrega en el art. 41 que ello no ha de comprometer las
necesidades de las generaciones futuras, se ccha mano de la expresión
"desarrollo sustentable", con la que se configura un tipo o modelo de de-
sarrollo duradero para hacer posible la vida de los seres humanos en el
marco de un entorno que cu mpla las veces de hábitat; o sea, las políticas
ambientales han de tomar en cuenta elfuturo con un claro sesgo de solida-
ridad social;
e) El vocablo "ambiente" merece a nuestro juicio un contenido plúrimo

-
116 CoMPENDIO DE DERECHO CO~SIII UaONAl Los NUEVOS DERECHOS DE LOS ARTICULaS 4 I y 42 117

y amplio que no se agota en el enlomo físico y sus elcmcnlOS naturales 3. _ El arto 41 hade pre8umirse operativo. y aplicable aun a falta de
(agua, atmósfera, biosfcra, ticrra. subsuelo), sino que abarca todo cuanto ley, lo que no significa que resulte innecesario el desarrollo leglslativo;
atru1c a la vida, subsistencia y desarrollo de los seres vivos (ecosistema y pero los jueces -romo "autoridades" que 800- no puedcn a~slcner.se de
ecología) y, además, el patrimonio histórico, cultural, artístico. natural, tutelareJ ambiente porque falte la ley o porque laque hay sea lDsuficlenle.
etc., que goza de menciones en el ¡ne. 19 del arto 75.
4. _ "Los derechos que protegen al anlbiente" cuentan, según el arl.
43 con la vía del amparo para esa proteét!Íón. Puede, por ende, llamarse
Obligaciones que diversifica" (lIIelas amparo anlhicntal o amparo ecológico.
2. - Hay una serie de obl igacioncs constitucionales respeclo del am- 5. _ La información yeducací6n ambientales se ligan mu~ estre-
bicllIe. Veamos en quiénes recaen y en qué consisten. chamente a la libertad de expresión e información, a la comunicaCión so-
a) Después decnunciarcl arto 41 que todos los habitantes tienen dere- cial. y a la enseñanza. La obligación estatal en t~1 ~l1lido abru:ca una ví~
cho a un ambiente sano. agrega que tienen el deber de preservarlo. Como indirecta, cual es la de prestar ayuda a las asociaCiones y c~tldades que
mínimo, preservar equivale acá a no dañar ni deteriorar. También a cu idar. tienen como finalidad la tutela ambiental en todos los cOll temdos que ha-
b) La nonna grava a las "autoridades". Latamente, al estado. tanto cen parte del ambiente.
federal como provincial y municipal, en los tres departamentos de gobier-
no, cada uno según sus competencias. Asimismo. al defensor del pueblo,
al ministerio público. ya todos los organismos y reparticioncs estatales. LIls competencias federales)' provinciales
Pero. ¿cuál es la obligación? El ano 41la resumeafumando que proveerán
a la protecci61/ de "este derecho" (del que tienen todos los habitantes a un 6. ~ La parte final del arto 41 establece que al estado federal.le ~n­
ambiente sano, etc.). Desdoblando el deber, cabe afimlar que tanto es de cumbe dictar las "nomlas de presupuestos mínimos". y a las prov/ IICU:S
omisiól/ -para no dañarlo- como de prestaciol/es positivas con el fin de las normas "necesarias para complementarlas". Se lrata de u?~ categona
preservarlo, de evitar que otros lo alteren o destruyan. de recomponerlo. especial de competel1cias conCurrentes, porque las nO~/llas nllm/llas e~~­
cte .. así como comprende el deber de exigir a los paniculares eada obliga- pan a la competencia provincial, y las complemcntarlas de compcte~cla
ción concreta en cada circunstancia en que el ambiente queda comprometi- local son una ruladiJura para maximizar to mínimo. Scguramente, eqUIva-
do O perturbado. le a una versión del federalismo concertado.
e) En conexidad, el ano 41 imputa a las autoridades antes citadas la
obligación de proveer a la utilizaciólI raciol/al de los recursos naturales, a 7. _ En cuanto a los dai'los ambientales susceptibles de incrimi~ ¡use como
la preservación del patrimonio natural y cultural (quc es prutcdel ambien- delitos, la compclencia es exclusiva del congreso por tratarse de matena penal.
te, según lo dijimos antes) y de la di versidad biológica; además, el estado
8. _ Cuando un problema ambiental es jurisdiccionalmente divisible y sobre
debe proveer a la información y la educación ambientales.
él recae ta respectiva legislación pro\'incial, ésta debe. ail n así. respetar la protec-
d) Cuando el siempre citado arto 41 consigna que el dwlo ambielltal ción surgida de la ley de presupuestos mínimos.
generará prioritariamcllIe la obligación de recomponer según lo establez-
ca la ley, hay que aclarar que tal recomposición prioritaria no elimina ni 9. _ En cuanto a la ejecución y aplicación dela le.gislación del ~ongreso, el
reemplaza a la reparación. Asimismo, h..ty situaciones en que lo que se arto41 &dopla ta solución cibica del arl. 75 inl.:. 12 al disponer que dicha legYa-
"des-compuso" no puede ser "rc·compuesto". En suma, cuando las cosas ción no altera las jurisdicciones locales. No obstante, creemos que: a) algunos deli-
son susceptibles de volver a su estado anterior. la obligación prioritaria es tos ambientales admiten ser calificados como de naturaleza federal y provocar, por
recomponer. e lxle la jurisdicción de tribunales federales: b} fUCfa del ámbito penal, es razonable
, que en I.II.:tcrnllnarlas
suponer ' po1'JUcas amb'len tI"
a Y ,----'idas
....... pro tec toras del amo
,,

118 Los NUEVOS DEJlliCIlOS 00 LOS ARl'fClJLQS 41 y 42 119

bicntc el estado federal !as invista excepcionalmente de judiciabilidad por tlibuna- 14 ~ La lealtad comercial, la propaganda competiti\' ~. el deber de ,'eracidad,
les f<'x!cra1es.
íri~u de lucro. la tendencia al consumismo eu muchos estratos SOCIales, y ante
e~~a dignidad de la persona y los derechos que le son propIOS, O~llg;n; que en el
10. - No hay duda de que, al margen del reparto competencial en el ~rbe del consumo y los scf\'icios se procure equili brar la prolecclón e a persona
derecho interno. nucSlfo estado está habilitado para afrontar cuestiones con el mercado. la competencia y la orerta-demanda.
ambientales mediante tratados illlemacionales. Dada la supralegalidad
15 ~ E I "derecho de consumo" hay que ordenar cualllO, conforme ~I arto
de éstos. y su prelación también sobre el derecho provincial . creemo~ que
los tratados en materia ambiental pueden superar Jo que, en el derecho 42, gira~nIO;~: de los "der~ch(os': ~~i:~~:~l:~:~ ~:~f:s~l:a~II~~~a;:l:~sn:
perfil de derechos persona es o I . .
intcrno. es propio de la ley de presupuestos mínimos. incidencia colectiva o de intereses de pertenencIa dIfusa.

11. - Dentro de las colllpt'lencicls prol·jllciales. los convenios de regio na tiza· 16. _ En la letra del arto42 según su párrafo primero aparecen:
ci6n del art o 124 pueden prever la protección del ambiente que se vincula con el
desarrollo económico y socia l. Asimismo, [os tradicionales "tratados" interprovin- a) el derecho a la protección de la salud (que incluye el derecho a la
eiales del arto 125, y los convenios intemacion¡¡les de las provincias en el área del vida y a la integridad): , .
cilado art. 125 .
b) el derecho a la protección de la se.guridad pe~s,?IU~I, en cuanto se
halla en juego por la índole y calidad de bIenes y SerVII.;I ~S, .
Consumidores y usuarios: dertchos, protecciones y deberes e) el derecho a la prOlccción de los illlereses económicos del usuano y
conswnidor: .
12. - El nuevo ano 42 traza un marco elástico, pero de parámetros d) el derecho a la i//formació1I veraz Y adecuada en la oferta y proVI-
inesquivablcs, para el mercado de cOI/sumo y uso de bienes y servicios. sión de bienes y serviciOS;
No hay duda de que en aquel marco aparece un eje direccional hacia el e) el derecho a la libertad de elecció//;
sistema económico quc es propio de la democracia social. Las alusiones a t) el derecho a coudicio1les de lrolO equitativo y digno.
la competencia. al control de los monopolios, al consumo, etc., presuponen
la existencia del mercado, pero ello no equivaJe a sostener que el estado 17. _ El segundo párrafo destaca la defe1lso del consumidor y de~
retraiga supresel/cia razonable en el área de la Iibenad y de la competen- usuario por parte del estado, al decir-de modo análogo al art ~ 1en mate
cia. En suma, el art o42 no da pie para alemar una postura abstencionista . ambiental- que "las autoridades proveerán a la protección d~ esos
del estado. na
derechos" .
(los enunciados en el pnmer párraf o) . Y a renglón segUIdo la
norma extiende igual obligación de proveer a:
13. - Parlamos de la mcnción que la norma hace al "derecho de los a) la educación para el consumo:
consumidores y usuarios" para eslabonarlo con las puotualizacioncs que
b) la defensa de la competencia en el mercado;
el art o42 efectúa en los párrafos segundo y tercero y, de ahí en más, com-
prender que el ya citado sistema democrático con su plexo de derechos e) el control de los mOllopolios;
apuntala la presencia estatal para evi lar desigualdades injustas y para d) el control de la calidad y eficiel/cia de los servicios púb¡¡~S;
mantener -O recuperar cuando haga falta- el equilibrio en las relaciones de e) la formación y participación de asociaciones de consumidores y
consumidores y usuarios. Todo con una finalidad muy clam: incluir la aten- usuarios.
ción de las necesidades primarias y fundamentaJes que. por un interés
jurídico relevanle -de naturaleza colectiva- han de ser satisfcchas por el 18 _ S· de cuanto surge de la letra de la constitución ros e~pla~a~
consumo, los bienes y los servicios. . , . /" s podemos mclUlr.
mosrazon ablcnlc nle a una serie de derechos 1m}} tCl to ,
, ,

120 COMPI!."'DlO DE DERECHO CONS J11 UaONAL Los r-'UEVOS DERECHOS DE LOS AR11ct.'lOS 41 y 42 121

a) el derecho de acceder al consumo; mas de control) de las asociaciones de consumidores 'i usuarios y de las
b) el derecho a un trato l/O discriminatorio, sino en igualdad de opor~ provincias interesadas.
¡unidades:
e) el derecho a la lealtad comercial. 22. - Es bueno insistir en que:
y como bi sagra con el p/(U'o de valores. reaparecen: a) del arto 42 surge una específica órbita del derecho de libre asocia-
ción en el espacio de los consumidores y usuarios. con el deber del estado
a) el valor solidllridad:
de proveer a la protección de dicho derecho; a') tales asociaciones han de
b) el valor cooperaciól/ ; participar en los organismos de control:
e) el valor seguridad; b) tanto el estado como la'i citadas asociaciones deben promover la
d) el valor panicipaci6,,: educación para el consumo, lo que equivale a difundir infontraci6" y
e) el valor igualdad; predisponer a las gentes para que sepan disl"emir y elegi r libremente lo que
puede o debe consumirse, de modo que consumidores y usuarios est~t1l!n
1) el valor justicia.
aptitud suficiente para ejercer y defender sus derechos a tenor del arL 42.
19. ,- En sínte~is, a cada uno de los nspectos a cuya protección deben proveer
lal Ilutondlldcs, C(Irresponde en reciprocidad la serie de derechos correlativos del 23, - No obstantl! el deber estatal de legislaren la Itlalerla. decimos
consumidor y del usuano. que si no lo hace queda a cargo de los jueces conferi( aplícabiUdad
Hay que indagar bien en caso "ame quién" -como sujelo /X/sil 'o- existen o se operaIiWl a la norma bajo análisis porque, no en vano, el arto 43 prevé
hllC,c? valer ellOs de~echOfl. ,No hlly duda de que el estado es sujeto obligado. pero a di rectamente la acción de amparo en orden a los derechos relatIvos a la
la \cz hay una ambl\'alencIII de los derechos cuando son oponibles a quien provee competencia, al usuario y al consumidor.
los bi~ne¡ y ,SC~ICios: As{ -por ej.- el derecho a la calidad y eficiencia. y a que el
IllCrcado no ¡¡e dj!ltol'8lOne en desmedro de la competencia. En el púra(o primero del
al1 ..42 hay t.ambién supuestos de similar ambivalencia. que muestran como sujetos
pain'oli o~J~gados tanto al estado (las autoridades) como a los prol'eedores de bie- El perfil de los nuevos derechos
nes y serVICLOS.
24, - La recapitulación global de los ¡¡nuevos dctcchog" emergentes
20. - No ha de perderse de vista que muchos de los derechos en el orbe del de los arts. 41 Y42 incita a insistir en:
consumo y uso de bienes y servicios guardan conexidad con los del arto 4 t sobre el a) la dimensión colectiva y tral/sil/dividual que IIC suma a lo que de
al/lbi~n/c. As!, .loi prc~adores de servicios de agua han de cu idar que el agua no se personal e individual tienen:
poluclonc; las IIl~USlnas que procesan productos para la alimentaci6n y la bebida
b) la estrecha intersección con muchísimos otros derechos (libcnad
~10 de~n conlanunar el ambiente; los proveedores de carnes y vegclales no han de
IIlcumr en depredación. ni los cultivos han de arrasar el sucio volviéndolo impro- de expresión; de comercio e industria: de contratar: de asociación, etc.;
ductivo a cierto plazo, etc. derecho al desarrollo: a la calidad de vida: a la Igualdad de oponunidades:
a la reparación del daño; a la propiedad; al tráfico negoclal. etc,).
21, - El párrafo final del art. 42 remite a la legislación para que Todo ello queda atravesado por un eje de cOllslÍlucioff alismo social y
establezca procedimientos eficaces en orden a prevenir y solucionar con- por el contenido del sistellUl axiológico de la. constitución.
O! ctos en la ~~le relación de "consumidores y usuarios-prestadores de
btenes y servIcIOs-estado", La ley ha de discernir también los marcos
regulatorios de los servicios públicos de competencia "nacional", Para
todoeUo la ley tiene que prever laparricipaci6n necesaria(en los organis-
CAPtruLO XV

LOS OERECHOS IMPLlCITOS

Una radiografía de encuadre

l. ~ CUllildo con un enfoque muy personal. que no elude algún nexo


con las perspectivas iusmosóficas que se filtran al derecho constitucio-
nal. decimos que hay derechos "co/l "l/onllas y "sin" I/omUlS, pisamos
un primer umbral hacia el lema de los derechos 1/0 el/l/merados o dere-
chos implícitos.
Convergen a admitirlo: a) el valor justicia y los restantes valores del
plexo ax iológico: b) la ideología de la consti!ución; e) el an. 33: d) los
ImlOllos ¡//lemaciol/ales sobre derechos humanos, tengan o no jerarquía
constitucional: e) el aporte de las valoraciolles socialeJ progresivas.

2. ~ Todo esto da razón al axioma de que. a la hora de interpretar la


const ituci ón y de cubrir sus silencios e implicitudes, hay que echar mano
de la calegoría de derechos implícitos. que se halla permanentemente abiena
en su listado maximizador. sie mpre a lona con otra paula muy cara. como
es lade que hay derechos l/uevos y c01lfe1/idos I/uevos en derechos ~·iejos.

3. ~ Hay, por ende. una doble implieitud: a) una e$ la que w1ade


derechos "nuevos" -por ej., el derecho al desarrollo (en cuanto la letra de
la constitución reformada menciona el desarrollo. a veces sin adjetivo, y
otras calificándolo como humano, Ocomo socioecon6mico)-: b) otra deri-
va de proponer que los derechos que licncnfilel/le ¡lIten/acional y no ligu-
ran entre los constitucionalmente enumerados, se han de dar (X)r alojados
en la cláusula de los derechos implícitos de nuestro arl. 33.

4. -Algunos ejemplos ilustran el tema. Asf:


,

Los DERECHOS IMPLlmos 125


124 CmtPENDIO DE DERecHO CONSTll1JaO~AL

a) hay un enjambre profuso de derechos ¡mrenloles, o sea. derechos que pro- 11) el derecho a indagar, conocer 'i emplazar la propiajiJiación:
vienen del parentesco; por ej.: los emergentes de la patria potestad: el derecho de m) el derecho de reunión;
mantener y proteger los vínculos parentales; el derecho de "ser adopt¡¡do" cuando
concurre la situación razonablemente prevista en el ordenamiento jurfdico: el dere-
n) el derecho a la tutela judicial efectiva:
cho a la procrcaci6n responsable: ñ) el derecho de cal/tratar:
b) de la garantía del habeas daUl (innominada en el art. 43 que la incluye o) el derecho a la imagen propia y a la voz personal;
como una modalidad dd amparo) se infiere el derecho a los dalas persoTUlles, pafa
preservarlos. rectificarlos, controlar su uw y difusión, etc.; también el derecho de
p) el derecho a la culJUra: I
peticionar a los bancos de dalos; q) el derecho a lapa:::
e) el derecho a la ,'erdad, que implica variolO aspectos: a conocer y saber la r) el derecho a la legitimación procesol:
verdad: a im.lagarla y buscarla: a recibir información para acceder a la verdad: a que s) el derecho a la colida,! de vida y el nivel de vida dignos:
So! la averigüe en los procesos judiciaks (por ej., para descubrir la verdadera filia -
ci6n-bioI6gica-; para invesligar un delito, su aUforía, etc., 1000 a tenor de la pauta t) el derecho de rectificación)' respuesUI (réplica);
jurisprudencia! que irn.lica a los jueces el deber de prio¡;z.ar la verdad material u u) el derecho a la libertml jurídica y a la segurt'dad jurídica:
objetiva sobre la verdad forma!).
v) el derecho al desarroflo:
w) el derecho de huelga a favor de sujeLOs que ilO son "gremios":
Un listudo abierto x) todo cuanto halla cabida en los denominados. jllt~reses difusos o
colectivos. o de ¡"cidenci(/ colecliva. o de pertenencia di/usa.
5. - Cuando rastreamos lo que al día de hoy puede y debe i ncorpo~ •
rarsc a la nómina de derechos implícitos, todo con bascen lo quedccimos 6, _ Desde el caso "Sejean" - resuelto por la Corte en 1986-- cabe
en los parágrafos antecedentes. hemos además de citar: añadir que, de acuerdo a su jurisprudencia. ha ~ reput~se c?n~ derecho
a) el derecho a la propia dignidad personal; implícito el de recuperar la aptitud nupcial mediante drvorclO vmcular, y
b) e l derecho a la vida; el de cOfltraer lluevo malrimonio.
o) el derecho a la salud; (ahora lo menciona el art. 42 en el ámbito 7, _ En varios tf{l/odos de derechos humanos con jer~quía consti-
específico de consumidores y usuarios de bienes y servicios); tucional hay cláusulas que liencn que entenderse como reenVIando a dere-
d) el derecho a la imimüfad; chos implícitos - por ej .. cuando establecen que los ?c,rcchOS de~ t~tado no
e) el derecho a la idel/lidad y a la diferencia; (incluido el derecho a la limitan el goce y ejcrciciodcOlros que surgen de distinta fuent ... (lOtemao
propia identidad sexual); inlcmacional}-.
J) el derecho a la reparación o al resarcimiento del dafto;
g) el derecho al hOllor:
h) el derecho a la illlegridad ffsica. síquica y moral;
i) el derecho a tener uno. nacionalidad:
j) el derecho a elegir el proyecto personal de vida;
k) el derecho a la objeció1l de conciencia que es inofensiva para ter-
eeros;
1) el derecho a la jl/formació" y la comunicación;
EL DERECHO DE PROPIEDAD

Su encuadre

l. - El derecho de propiedad ha sido uno de los derechos "individua·


les" que con más intensidad protegió el COllstilucionalismo moderno, para
luego tener adjudicada unafu1IóólI social con la irrupción del constitucio-
!lulismo social en la pri mera mitad del siglo XX (la propiedad "obliga",
según la constitución alemana de Weimar de 1919).

2. - El derecho "o tener propiedad " se concreta en un derecho "dc"


propiedad sobre un bien determinado cuando el derecho positivo confiere
a un sujeto e1rÍlufo respccti \f0 (tic propiedad) según un flCIO jurídico Teco·
nacido como adquisilivodc propiedad. De ahí que la propiedad al udida en
los ans. 14 y 17 de nuestra constitución enfoquen el derecho respectivo en
su aspecto de propiedad "adquirida ".

3. - El sujelO activo abarca a la persona física y a toda elllidad o


IJerSOua de existencia ideal o colectiva (persona jurídica. a'iociación con
calidad de sujeto de derccho). Ello sin distinción denaeionaJidad oextran-
• •
Jcn a.
El sujeto pasivo es ambivalente: por un lado el estado. al que funda-
mentalmcnte se dirige la proltibición de violar la propiedad privada: por el
otro, los particulares que nodebcn perturbar el uso y ejercicio del derecho
que ostcma el sujeto activo. Ambos sujctos pasivos están obligados a no
impedir que alguien adquiera propiedad cuando pretende adquirirla legíti-
mamente.

4. - Por su obli gación de promover los derechos, el estado debe es-


'.",

128 C OMPENDIO DE DEREn 10 rol\S 1II UClO:>lA l EL DERECHO DE Pl<QPlEDAl) 129

truclurar tin orde;, socioecoTi6mico jl.mo, que haga viable e l acceso de las h) El tJerecho a que la sentel/cia se dicte de acuerdo Clla ley deJOlldo
~ersolla<; a .Ia¡ p~opied.ad de 105 bienes necesarios para poder vivir. ejerci - que estaba \'igeme al momef/lO de trabarse la litis (salvo que con poste-
tando su ltticülllva pnvada, eohfurmc a la dignidad del sct humano. rioridad una ley de urden público estipule expresamente que se debe apli-
Acá hacen presencia las políticas gCllcraJésde bie"eJlary desarrollo. car a los procesos en trámite);
i) En materia de seguridad social - jubilaciones y pensiones- hay que
5. - L~ reforma d~ 1994 reconoció a los puelilO1 ;1Il/{ge1las argenti - distinguir: i ') mientras la persona se halla en acti vidad, sólo tiene un dere-
nos la posesión y propiedad comunitaria de lar; üerrds que tradicional - cho "cn expectativa" a su jubilación futura, por lo que la ley lo puede
mente ocupan. modificar y variar, pero: i") cuando cesa en su aCli vidad, se vuelve invia-
ble que la ley vi gente en ese momento deje de regir para su tJerecho a
jubilarse; in.) una vez que la jubilación es otorgada, el status personal de
Los contenidos jubilado implica un derecho irrcvocable. pero: i .... ) el mOfllo o haber
jubilatorio 1/0 es illlal/gible. y puede disminuirse. a condición de que la
· ~. - La amplitud abarcativa de lo que es propiedad en sent ido cons- memla no sea confiscatoria por su cantidad: i ".'') Pat'd el haber jubilalOrio.
tnuclotlal fue CSlereOli~ada en la pauta que, conforme a la jurisprudenCia el arto 14 bis impone la pauta de la movilidad. a tenor del principio según
~c la Corte Suprema. Incorpora al contenido de la propiedad lodos Jos el cual la Carie ha sel1alado que debe existir proporcionalidad entre el monto
U/te~eseJ aprec;~blej que el l!o;lJbre ¡Juede poseer fuero de sí mismo, de de la jubilación (tanto el originario como el que luego se va reajustando
.fUVIda ~' de su Itbenad. Por ende, lodos lus bienes susceptibles de valor ¡:Klr la movilidad) y lo que esa pcrsona ganaba cuando csmbaen actividad;
e~onónllco. o aprc~ia~lcs en dinero. alcanzan ni ve l de derechos ¡)(lfrimo- j) El llamado efecto liber(l1Orio del pago implica que el deudor que
males rOl ulados ullltanamemc tomo derecho constitucional de propiedad.
~o hay ~uda de que le corresponde, entonces. el calificativo de derecho o
paga su deuda conformc a la ley vigente alliempo de cfectuar ese pago
adquiere --romo derecho de propiedad- el derecho a no ser obligado a nin-
,
libertad "preferidos" dentro del ple"-o de los derechos personales. guna clase dc pago suplementario:
1
k) Los derechus que se adquieren par causa de muerle (derecho here- ,
7. ~ Conforme al mencionado derecho judicial de la Corte. cabe ha- ditario) integran la propiedad (el derecho de testar está reconocido en el
cer el slguiellte listado de contenidos de la propiedad:
arl. 20):
· a~ El deré~ho de dominio y sus desmembraciones. conlarme a la le- 1) Si bicn la irretroactividad de las leyes sólo t)stá prohibida en la
gislaCión cOinun ;
constitución en materia penal. también 10 está cada vez que la aplicación
. b) Las concesiones de uso sobre bicncs del dominio público, y lasque de una ley nueva-en cualquier materi a-conducc a privar a un sujeto de un
tlencn como causa una delegación del estado a favor de particulares (como derecho ya incorporado a su patrimonio:
empresas de transportes. de eleclricidad, de teléfonos. elc.); 11) La propiedad intelectual, industrial y comercial cuenta con nor-
c) Los derechos y obligaciones emergentes de los COlllratos; ma de reconocimiento en el arto 17;
d) Los actos de disposición y uso de la propiedad; m) La nornla que en !!Iart. 42 se refiere al derecho deconsumidorcs y
· e) Los derechos "adquin'dos" e ingresados al patrimonio (sea por usuarios en el mercado de consumo y uso de bienes y servicios traba en
vlflud de ley. contrato, acto administrati va, sentencia firm e, elc.); numerosos aspectos una relación con el derecho de propiedad ;
f) ~a sentencia pasada en autoridad de cosa juzgada (en tanto esa n) Cuando la reforma de 1994 contempla en su arto 75 inc. 19 la in-
scnten.cIa no sea nula o frrita. como ocurre si en el proceso ha habido dolo vestigación y el desarrollo cielllíJico y tecnológico, así como la libre crea-
o estala procesales): ción y circulación de las obra.f de (lutor, traza un puenle hacia el ¡U1. 17,
g) Cada acro válidameme cumplido durallfe un proceso judicial: especialmente citado en el precedente ¡ne. 11) de esta liSIa.
130 Cm.1Pf..l','OIO DE DERECHO CON"STITIJCIONAL EL DERECHO DE PROI'IEJ.)AJ) 131

La depreciación monetaria vado, o las de interés público -como restricciones administrativas, servi-
dumbres administrativas. ocupación temporánea-conviene tener presente
8. -Un arduo problema para el derecho de propiedad se suscita cuando en que con la refamla (le 1994 en la constitución se reconocen fimitaci?lIes
períodos de lunación se produce una depreciacióIIl/lonelaria que implica la pérdi- ;'sociales" en diversos ámbitos, tales como: a) en el derecho al ambteflle
da o disminución de su real valor adquisitivo. Se babIa, entonces, de indexar, o sano (art. 41); b) en el derecho de consumidores y uSIHm·os (art. 42); e) en
re valuar, o actualizar una deuda, tamo si ésta fue originariamente contraída en dine-
lo que viene diagramado como ordel/ social y econ6mico jliSfO_ y ya con
ro - por ej., un alquiler, o un seguro- como si se trata de una deuda de valor -por ej.,
la indemnización de un daño. o por una ex.propiaci6rl--.
antelación a 1994, hemos de mencionar las limitaciones referidas a dere-
chos que se relacionan con el trabajo y la seguridad social (art. 14 bis).
Con ley que lo pre\'ea. sin ley, y hasta contra l/na fey que sea prohibitiva. cs-
lallV)S ciertos de que cuando hay depreciación monetaria toda deuda tieoe que ser
objeto de inde.x ación para conservar ,) recomponer el valo r intrrnseco del crédito,
sah'o voluntad en contrario del acreedor o de ambas parles. Los tratados internacionales
Sin embargo. el fallo de la Corle de 1992 en el caso "Yacimientos Petrolífe-
ros Fiscales e/Provincia de Corrientes" no prestó acogida a dicho criterio. y estimó 12. - El derecho de propiedad no es de los que más abundan en el
que la prohibición de la indexación Cilla ley 23.928 --de t 99 t- no era inconstitucio- derectlo intcmacional de los derechos humanos. El Pacto de San José de
nal. Costa Ri ca le dedica su ur!. 2 1. en tanto el Pacto de Derechos Civiles y
Políticos no lo menciona. Sí lo hacen la Convención sobre Discriminación
Racial y la Convención sobre Discriminación contra la Mujer.
I nviol<tbilidad
Es fáci l coincidir, entonces, en que la propiedad no exhibe acá el perlil
9. -Cuando el arto 17 dispone que la propiedad es in\'iofabfe no quiere decir
de una libertad "preferida".
que sea absoluta o que carezca de una fu nción social, sino que debe ser garami7.ada,
para lo cual la constitución cstablece que:
a) a nadie se puede privar de su propiedad sino mediallle sentenciafimdada
en ley;
b) la confiscación de bienes qUI..-da borrada para siempre del código penal (y si
es así en cuanto pena, con igualo mayor razón la prohibición de confiscar rige para •
siluaciones que se hallan al margen del derecho penal);
e) ningún cuerpo annado puede hacer requisiciones o exigir auxilios de ningu-
na especie.

10. - Al combinar estas pautas con la que exige indemn;z¡u;ión prel'ül en



ClIStl de expropiación, se proyecta un principio constitucional general M:gúll el cual
cada vez que un derecho patrimonial cede por razón de interés público o social
frente al estado, o sufre daño por acti,'idad estatal o de los particulares, el daño debe
ser indemnizado. Y ello tanto si la actividad que produl..'C ese drulo es ilícita o ilegí-
tima con"Kl si es lícita o legítima.

Limitaciones

11 . - Dejando de lado las limitaciones a la propiedad en illler6s pri-


CAPITllLO XV lJ

LA EXPROPIAClON

Encu.:tdre: requisitos y etapas

l. - En cuanlo lill/itaci6n al derecho de propiedad el/ eltiel/Jpo. la


expropiación es un acto ul/ilatf!ral del estado por el cual éste priva de la
propiedad de un bien al lilular del derecho sobre el mismo. con fin es de
utilidad pública. Hace fa lta calificaci6n por ley de esa utilidad, e ifldellt-
lIi:.aci611 previa e integral del valor del bien.

2. - P.I fundamelllode la e~pro(li ación no radica en un supuesto "do-


minio eminelUe" del estado como atribulo de su "soberanía". sino en: a) el
bien eOll/tíl 1público, o la real ización del valor justicia como fin del e~lado:
b) la naturale.la reJatim de la propiedad pri vatla conJunci6n social.
En la constitución tiene base en el arto 17.

Es un instituto de derecho público e n toda su integridad. aun cuando doctrinas


ya supo.:radas te dicron a veces el carácter mixto qlle derivaban de aplicar el derecho
privado en todo lo referente al dcn..'(;ho indenmi7.atorio del expropiado.

En el ámbito provincial , las expropiaciones locales se rigen ror las


constituciones y leyes provinciales. si n perjuicio de su necesario ajusle a
las paulas de la consLüución federal.

3. - No hay que confundir la "'ley" de expropiaci6n (federal O local) quc rc-


glamenta el instituto de la expropiadón, con "cada una" de las k}'es que sobro esa
ha~e es dictada par~ proceder a realizar "una'" expropiación concreta y actual.

4. - La calificaci61/ que la ley debe hacer de la ulifidad pública lle-


va a afirmar que: a) el congreso tiene espacio para decidir en forma di s-
114 CO~I'E"l)[() DE DERECHO CONsllluaONAL
LA I.:XI'II.OI'IACIÓN \35

cn:cional - pero no arbitraria- la opununidad. el alcancc y la convcnicm:ia


que la indemnización ha de cubrir el 1'(llor "actual" del bien y que-debe
de 1.1 expropiación, estableciendo la utilidad pública de los bienes someti ·
pagarse (/lIfe~· de que se transfiera la propiedad expropiada;
dos a ella: h) lal exigencia de la utilidad pública funciona como una garan-
tía para el derecho de propiedad de los particulares: e) la naturaleza o e) la indemninción tiene quc pagarse en dinero, salvo acuerdo de
, esencia de lo que es "utilidad pública" divide las imerpretaciones doctrina- panes que escoja vías sustilutivas o Compensaciones no dirterarias,
rias, porque algunas entienden que implica la necesaria transferencia del
bien que se expropia al dominio público. mientras otras -3 las que adheri- 9. ~ Hay que distinguir dos circwlstancias dl rereñtcs: a) una es la
mos- consideran que el calí ficativo "pública" alude a ;'social" o "general" des/Josesióll o el desapoderamiento material del bien ealiflcadode utilidad
en cuamo. de esa manera, se satisface un beneficio del "público", es decir, pública y determinado con una individualizadón precisa: b) otra la trans,
de la comunidad, aunque el bien no pase al dominio público. lerencia de la propiedad.
Con la desposcsión. el exproplan tc ¡afila poseJi6/1 del bien. Con la
5. - La calificación de utilidad pública 00 requiere especificar illdividualil.a· transferencia, se extingue la propiedad del c"-propiado, En situaciones
damcntc los bicJ\c~. (X!ro sí e,;ige que sean detenllinables. razonablemente urgentes y necesarias. la ley puede prever la desposeslón:
lo que nunca puede es autorizar que la propiedad se transfiera con un pago
6. - I.a calificación de la utilidad pública es indispensable para encuadral· el
a cuenta o provisorio de la imlcllUllzadón, JXlrquc dicho pago (inlegral)
caso Cilla categmía de lacxpropiadón: ningún caso cabe cn esa categoría si falla la
ley que declara la utilidad pública de UII bien. Pero esto no niega que. por analogía, debe ser previo a la p6rdida de la propicdad (aunque no a la despose~i6n).
se pueda o deba acudir al in~tituto cxpropiatorio cuando, no habiendo expropiación.
hay que evaluar el n:.sarcimielllo por {><'"rjuicio a derechos patrimoniales. lO. - Asimismo, hemos de considerarotro~ aspeCIOS. a) La valuación
o lasación del hicn se rcali.la cn Ull momento detenninado; pero: b) esa
7, - A nucstro critcrio, la calificación de utilidad pública debe que· valuación se puede remitir a ulla fecha anterior (por cj., la valuación reali-
dar sujelll a comrol judicial ele COlIslitucio1lalidad. No companimos la zada en el año 1989 puede lomar en cuenta lo que el bien valía en 1983
jurisprudencia según la cual lal calificación es un acto político no judiciable. cuando se produjo la desposesión). No obstanle. desde 1967. lajurispru-
(Por exccpción, la Corte ha dejado a salvo la revisión en casos de mani· dencia que la Cone sentó en el caso " Nicchi" ha dejadocstablecido que si
fiesla arbitrariedad en la cali ficación.) entre el momento en que se hace la tasación y la fecha amerior a la que la
Nuestra formulación sería éSla: la calificació1I de utilidad pública tasación reenvía se ha operado un proceso de depreciación monetaria.
por ley siempre es ''iudic;alllleme cOlllrofable" (o revisable). pero sólo hay que actualizar la valuación hasta el momento en que se abona la in·
es "descalijicable judicialmente" cual/do resulta arbitraria. demnización.

11. - Cuando lie califica a la indenmi7.BCión r.:umo imegml, tal afirmación ~e


8. - Entre las condiciones que ha de satisfacer la indemnizaci61/, a ha de completar con otra que dice asr: la compensación ha de ofrecerle al e,;propia-
más de ser previa. podemos mencionar: do un equivalente econdmico que le permita. de ser viable. adquirir otro bien ¡imi·
lar al que pierde por causa de la expropiación. ~n otras palabras. ya dijimos que la
a) debe ser justa e il/tegral: 110 debe empobrecer ni enriquecer al expropiación 00 debe empobrccer. pero tampoco enriquecer al expropiado. De esto
expropiado. sino dejarlo en igual situación económica; aunque se paga en se infiere que la suma dineraria no admire dedllcciones ni puede gravarse con
dillero. la deuda l/O es de dinero sino de valor; ello ayuda a entender que impllestos.
ha de restituir al propietario el mismo vofor eco1lómico de que se lo priva:
b) la sell/ellcia que fija la indemnización tiene que lomar en l:ucn ta lo 12. - Asimismo. debe abollarse infereses respecto de la suma dineraria
indemniz.atoria. correspondiendo liquidarlos por el lapso que ha COrrido entre la
que el bien vale a la fecha de ser dictada, porque se supone que es en ese desposes16n del bien y el pago (por lo que. si no hubo desposesión ni ocupación del
momento cuando se transfiere el dominio. lo que equivale a dar por cieno bien por el c,;propiante. no procede pagllT intereses).
U6 C0\1PI~"1J10 DE DI!REc! lO CO;o.;ST1Tt '('tn~Ar 137

Los sujetos expropiantes No e.\ e.\11ropiuble el dinero, aunque M el dine!'o I!Xlr,IIlJcro. Se dliCute si lmi
cadáveres dI! seres humanos son exprú¡lIablc~ . En cuanto a bi<.!ne~ de! d{l/uj¡Jio plÍ·
blico p,m'im:ifll (ljue parte de la doctrina reputa suS(;cptiblcs d ... cxpropHldón) crC\!-
! 3. - En el rubro de los slijelOJ t::J.prop;ames hay que mencionar mos personalmente que la expropiación por el cstado fl.'deral n:quicn: el coo~"'lIti­
cnmo sujelo llctÍl'O "din'clo" y "originario" al errado fel/eral. a cada mknto d... la provincia. No usí ~i lo~ hiencs ~on ,1<: dominio privado pro\'incial.
pro\'il/cill. y a la Ciudad AlIlól/ol/la de RuellOS Aires, Ello quiere decir que
tales sujetos tienen competencia para decidir la expropiación que se tradu-
ce en una ley declarati va de la utilidad pública de un bien. El procedimiento ex propia torio

. 14. - La expropiación "indi1l'C/(/'',,:s una expropiación pordefesación: quiere 17. - El procedimiento expropiatorio ofrece dos vías po¡¡ibks: a) una
decl~ q.ue h.ay algunos sujetos (/clil'{ls de expropiación a los cuales /In slIjew direclo es la del acuerdo t!ntre expropiante y expropiado (que St! llama a"cní mien-
y (Jr/gma r lO les delega la facultad e.,propiatoria. Pero para que un sujeto activo to): b) otra t!s la judidal,
expropie por delegación es imprescindiblc que, previamente. el sujeto directo
dclegante (estado federat, provincia, ciudad de Bueno~ Aires) dicte una le\' declarativa Cuando no hay avenimienlo, el estado que prcten¡Je consumar la C.>:-
de la utilidad públku. en mérito a J¡¡ cu~1 el sujeto indirecto lleve a ca~ después la propiación ¡Jebe promover el juicio correspondiente contrq el propietario
expropiaci6n. con quien 110 hubo arreglo,
Son sujetos actl \lOS de esta expropiación indin..-cta los IIIlmiápios. Iu~ ('lllida-
d('~ 1I11flÍITlllicm y t>mpreSlI.f del estado. y lo~ l){Irticlllares a quienes hahilita la ley Cuando la j urispl1ldenc itl retrae el conlml judici al de 1actn dedílrat i vo de Ut iti-
21.499. dad pública (porque In reputa una cue.~tión p0!ítiea ÜTi,!visablc), la causa de utilidad
pública no hacc pal'''- lkl objeto del proceliO expropialorio. 1.0 mb común. enton-
ces, es que tal übjelu se limite al m'l/I/c) de /a ¡"dClIlI1iZtlciríll y, acaso, ,L la determi-
nación adminislrati\'a ue] bien.
Los bienes t=xpropiublcs
18. - Eljuicio expropiatorio se suele conocer con el nombre de "eon-
15. - Una referencia a los bienes expropiables lleva a adelantar como tcndoso expropiatorio". La relllellcia tiene carácter 'óconsl ilulim". por-
principio gent=ral el que nos dice que fodo lo que es propiedad puede ser que t!s ella la que CfJIISUllla la trallsferenci(l de la propiedad.
objeto de expropiación. Esto implica que todo bien de naturalcla patri mo-
nial y valor económico cs suscept ible de expropiaci6n. (No obslante, al
recorrer los rubros que antes mencionamos como incluidos en lo quc se La expropiad6n In\'crsu
C?nSide-: prop iedad en sentido con'ilit ucional. encon tramos alguna excep-
cIón; aSI, parece que no puede expropi arse la cosa j uzgada, o los actos 19. - Una fomlll cspccial de expropiación es la cxpropillción "inver-
válidamente t:umpl idos en un proceso judicial. lo que conduc\! a compren- sa", a la que algunos apodan expropiación "indirecta" () "irregu lar".
der que hay casos de improcedencia de la expropiación, o en otros térm i- El adjctivo qut! cali fi ca a una expropiación como "inversa" significa
nos. que hay contenidos del derechode propit=dad que l/O sou e.\propiables.) que el procedimiento expropi atorio opera al revés: es el expropiado quien
demanda al estado \!n cuanto expropiantc cuando concu rren las situacio-
16. - Sí son expropi ablcs, a título de ejemplos: los bienes inmuebles. nes siguientes: a) hay ley ({(!c/aratiWl de utilidad pública respecto del bien.
muebles y semovientes: las universalidades (una empresa. una biblioteca, pero b) el ex propiantc 1/0 inicia la acción judicial expropiatoria. y e) hay
la maquinaria de una fábrica); los lugares históricos; el espado aéreo: el cOllductas dd mismo expropiantc quc implican desposeer al expropiado.
s~bs~el? (SÓlido.o nuido); los biencs inmateriales (derechos de autor. energía u ocupar el bien. o impedir cl librc ejercicio y la disponibilidad plena por
htdrau !tea); las tglesias: los bienes de una embajada extranjera: las unida- parte del propietario sobre el bien sujCto a la expropiación que no se
des de un inmueble di vidido cn propiedad horizontal. cfe(.1i\'iza.
1:\8 COMI't'~''DIO 010 DEltEClIO COSSTn1; CU.JNAI. LA EXPROPlAOóN 139

Tooo e llo revela que ese propietario padece cierta dosis de il/disponi- sea. no lleva a cabtl la expropiación. Vencido ese plazo. la potestad expro-
bilidad en el goce de su derecho. piclarla incumplida se extingue.

La expropiación inversa tiene por obj eto, entonces, obligar al


20: - 24. _ La aparente semejanza con la retrocesión se visualiza ~orque
cxproplUnle a consumar [a expropiación y a pagar [a indemnización, lo también en el ahandono la ex propiación queda sil/ ~f('ct(). Pero, la dlfercn-
que vQelve a dejar en claro que el adjetivo "inversa" alude a la parte que cia radica en que para la retrocesión hace falta que la expropiaCión se h~ya
promueve el juicio expropiatorio: acá es el expropiado. y no el expropiante. consumado en todas sus etapas si n que. posleriomlcll1c. se haya cumplido
con la utilidad pública del bien que se ex.propió: en lanto en el aband~o ~o
único que hubo fue la ley declarativa de la utilidad pública, a la que S1gUl6
La rf,roc"CSión la inercia del expropiante.

21. - Hay otro inst ituto que en el ámbito de la expropiación ti ende a 25. _ También la comparación con ta exprupiación iJwcrsa nos recuerda q.uc
hacer efectivos los requisitos que [a conSliluci6n tiene establecidos para su en ésta ha debido haber algún aclo lurhalorio del cxpropialllc respeclO de la propl\~­
procedenci a. Es la retrocesión . cuyo diseño lineal exige que: dad declarada dI: utilidad pública. cosa que está ausente en el supueslO del ahando-
no.
a) [a ley declarativa de ulilidad pública de un hien haya dado lugar a
I ~ cOllsumación de la expropiación mcdialllc la tramferellcia de [a pro- 26. _ Asimismo. Wla co.....a es el abandono en que incurre el expropiante
plcdad y c.l pago de la indcmnizaci6n: pero b) "después" de esa ctapa 1/0 incne . y Olra el desistimietlto del mismo en eljuiclO expropiatono. ya que
se ha desllllado el bien eJ.propiado al fiu para el cual se lo había declara- en el abandono ni siquicra se ha iniciado dicho juicio.
do afectado a la Ulilidad pública. o se ha destinado a otro fi n para el cual no
se había dictado la ley cali fi cmoria de la utHidad pública. 27. _ Si consumado al abandono el expropiante quisiera e~pr.opiar
Es lógico que el eJ.propiado que demanda al eJ.proIJ;allle por retro- el bien. debería dictar una llueva ley declaratoria de su utilidad pubhca.
cesión ticne que reif/tegrare1 monto de la indemnización que cobró.
28. _ Si abandonada la expropiacióll cl cxpropiante ocupara el biel/,
22. - La misma palabra "n.:troccsiÓn" cnwlCi a que todo vuelve para el expropiado no podría demandar la expropiación inversa porque la po-
aIroso o sea. que se relrocede. Ello porque si la causa de utilidad pública testad cxpropi utoria quedó cancelada. y habría entonces que cchar mano
no se ha cu mplido. la expropiación debe quedar sin efecto. de las acciones de derecho comúlI.
~ retroc~si6n surge implícitamente de la constitución. de forma que
aun S I no estuviera prevista y regulada en la ley, habría de recibir operativi-
dad y aplicación por pane de los jueces.

El abandono

. ~3. - Queda todavía otro instituto, que es el abandol/o de la expro-


pwclón. Se parece a la retrocesión, pero liene diferencias. Veamos.
El abandono se oonfiguracuando, después de dictada la ley que cali-
Jic~, a UI/ biefl o a varios como afectados a la ulitidad pública, el expropiante
deja trm/scurrir cierto tiempo durame el cual penllfll/eCe il/activo. O
CAPtlUlO XVlIl

LA TRIBUTACION

La ~tctividl.td financiera del estado y el poder tributnrio

l . _ La JI amada actividad t1nanciera del estado -o pública- que se


exteriori za en la oblellción de recursos yen la realización de gastos, apa-
reja. recíprocamente. la recaudación fisc·al y laafcctación de erogaciones.
Esta actividad financiera queda engarzada en la constitu¡.:ión. Y lejos
de indt:pcndizarsc del ordenamiento jurídico, tiene respecto de él carácter
instrumental. Vale, enlonces. afirmar que los fines de esa actividad finan -
ciera apuntan a hacer viable el funcionamien to integral del estado demo-
crático en todas sus insliluciones yen la efectividad de los derechOS.

2. _ En esa línea, la política del estado debe guiar su actividad finan-


ciera a tenor d? pautas como:
a) el desarrollo huma"o; el desarrollo económico-social: el equili-
brio en t'l (/esigua! desarrollo de provincias y regiones:
b) la solic/aridad;
e) la igualdad de oportunidades y de troto;
d) el progreso económica COI/ justicia social;
e) la generación de empleo;
t) la produclividad de la economía;
g) la defensa del valor de la mOlleda;
h) el piel/O goce de los derechos. con la consideración especial de los
niños, las mujeres, los ancianos y ¡<ti personas con discapacidad.
I 1,

142 COMPfll\'DIO 1)1: DERECHO CONS II I UClON"Al. 143


LA TRlBUfAGÓN

Ta] repertorio surge del (m. 75 de la constitución cn divcrsos incisos vicios que son de utilización raeul·
(2",17,19,23),ydelosarls.41, 124y 125. público; y del ~recio. porque é~te sel~~!:apopor rS:~umbrado público o por limpieza).
tativa y no obhgatona (como o es

3. - Por supuesto que estas mismas pautas deben tomarse en cuenta Tarifa no es sinónimo de tasa ni de precio. Tarifa es la lista de lasas y
para la ley de copanicipacióllfederal, para el presupuesto, y para la cuenta precios.
de inversi6n. En suma, todo lo que además consigna el art. 4° sobre el
"tesoro nacional" debe subsumiese en ese marco. 7 _ El carácter obligatorio de los impucstos, lasconlribuciones Y~as
lasas debe cumplir detemlinados recaudos constituci,:nales, ~omo el pnn-
La tributación fiscal acusa muchas conexiones. Así, con el de-
4. - cipio de legalidad, el de igualdad fiscal, el de no conhscatonedad, yel de
recho de propiedad, con la política social, con la polít ica económica, con finalidad.
la igualdad, con la razollabilidad, con los ingresos públicos, con el pre-
supuesto, etc. 8 _ Por el principio de legalidad, todo tributo tiene que ser estable-
En sentido amplio la tributación fiscaJ abarca el sistema de impues- • • 1
cido por ley: rlullum Ifibutum sme ege.
Esa ley debe comenzar su trata-
.. '6n federal ha
tos, tasas y cOlllribuciones, y se apoya en lo que comúnmente se (Jama miento e? l.a~ámarade dixut(ados.;; ~a~~oi~:~~;~~~~~~~~~, el principio
"poder impositivo" (o tributario, o fiscal) del estado federal y de las pro- de tener mlCtO en el sena o arts. . sólo el congreso
de legalidad viene expresado en el arto .17 cu~: d~~e ~ur:ferirse aJ tesoro
vincias.
impone la" contribuciones que mencIOna e -
5. - lIay "cargas" que no son ni impuestos, ni tasas, ni contribuciones (como nacional. "
por cj., los aportes a un régimen jubitatorio), por lo que suele dcnominárselas COIl-
tribuciones "parafiscales".
También hace falta ley para establecer exellCI071eS fiscales.
1
. I
99 discierne al poder ejecutivo tiene
6. - El poder tributario del estado apunta a la posibilidad jurídica La competcncia exc~pcI~nal q.ue(~ ~.") Tampoco puede incluirse en la ¡ni-
prohibido recaer en malena tnbutana mc. .
(competencia) de crear y exigir tributos con relación a personas o bienes dativa popular (art. 39).
que se hallan en la respectiva jurisdicci6n. El lribUlo es, en tonces, la de-
tracci6n que se hace de una porci6n de riqueza del contribuyente a favor I d' do debe prever: el hecho imponible. los
del estado, e integra el rubro de los "ingresos públicos" . La ley.a que estamos a ~ sli:~ema o la base para determinar el hecho
a) El impuesto es la prestación patrimoniaJ, generalmente en dinero. ~~~~~~~:~l~a~~~:ld~a;~~:. las exenciones, las infracciones y sanciones,
que el contribuyente debc al estado sin contraprestaci6n especial, para sa- el 6rgano competente para recibir el pago, etc.
tisfacer necesidades colectiva~ y atender con su recaudaci6n a gastos gene-
rales. Quien lo paga, entonces, no recibe beneficio concreto y directo. 9 _ El principio de igualdadfisclÚ está expresado en el art 6 cUb~n~~·!
. I b d 1 'mpuesto en tanto el arL 4 1la a

?~~~~U~~~~;~U~:~i~~~: i~r.~::~~:~~~1u~:~~~;~~:~
b) La contribución --especial o de mejoras- es el tributo debido aJ
estado por quien obtiene un beneficio o'l!n aumento de valor en un bien de
su propiedad, en razón de una obra pública o una actividad estatal. ga el congreso. ,y ~e~ion~ d~1 congreso) las califica de "proporcionaJ-
c) La tasa es la prestación que se paga por un servici o público apro- ~~e~~~~~I:~:,a ~ menester también tomar en cuenla la iguaW,ad real de
vedrado; hay, como en la contribuci 6n, un beneficio recibido por el contri- oportu,~dades ~ de trato a que alude genéricamente el art. 75 me. 23.
buyente, pero no se da relación aJgWHl con un enriquecimiento proveniente I
de actividad estatal. La tasa se cobra para cubrir el gasto del servicio. L roporr:ionalidad está referida a la riqueza que se grava.

Se diferencia del canon porque éste se paga por el uso de un bien del dominio L: cr~lerio
:iSCriminaciÓn está prohibida si el que e;:ab~~g~!~~~I: ~~;~:
rías de contribuyentes es arbitrario, pero no SI es razona e.

• •
LA TRlB uT.... a óN 145
144 CO,\!f>E,,\l)IO DE DERECIlO COKSlTn)I.'O~Al.

la pmgresil'idcu¡ del impue~lO. pero prohílx: que el congreso CSlah1ezca tributos dad). porque cuando se afirma que los tributol> dcben ser ge~rales y uni-
lClTi!orialmClllc diferclllcs. formes se está seftalando que la ley que los establece. n que ex.lme de ellos.
ruando un tributo correspond,.; a la juri~dicci6n provincial, la igualdad no
no puede hacer discriminaciones arbitrarias o irrazona?l~ cuando deter-
queda violada si una provincia 10 establece y otra no. mina quiéncs son los sujclOs ohligados a pagarlOS o e~l ,!l1~OS de hace.rlo.
ni al njar de antemano el destino especílico. o los bcncllclarlos de la recau-
10. - El principio de '/0 C01/jiscaroriedad apunta directamelHc al dación.
derecho de propiedao , porqut! manda mantener delllro de límites razona·
bies e l quantum ( monlo) que el tribulo toma como parle del patrimonio o
la riqueza del contribuyente. Lajurisprudencia de la Corte repula que es La relación y la obligación tributarias
conliscatoriocl gravamen queabsorbc másdcl33% dcla mmeria imponible
-cuando es de capital y no de renla-. 14. _ Se Uama relación fi scal o tribularia al vil/culo juridicoentre el
estado (o el ente autorizado a exigir c1lributo) y el sujeto afec~adO po.r el
En materia de taS(/S, la no confiscaloriedad indica que la recaudación tolal de tributo. La obligación fiscal Q lribularia es la que pesa sobre dIcho ~uJeto
la tasa tiene que guardar proporción razonable oon el costo también total del servi- obligado a pagar el tributo. Esta obligación de d~lr (gc.neralmente dUl~ro)
cio público efectivamente prestado. se completa con otras (por ej .. presentar declaraclClncs Juradas). La obhga-
Cuando la slIpcr¡R).fición o oClflllII/ación de varias contribuciones fiscales que ción de pagar se denomina "deuda tributaria". .
soporta un mismo comribuyenlc supera cllímÍl<.l por encima del cual se considera
que Ullllibuto es ioconstitucional, es viable impugnar globalmente a aquella carga El sujelO acri\'o en la relación fiscal es el ~stado-fi~o. El suje.1O ~)aSl­
tributaria en su conjunto, imputándole conflscaloricdad a la sumatoria de todos los vo t::;S el comribuyellle (o el agente de rClenc¡ón a qUIen la ley obliga a
tributos. pagar el tributo que debe el contribuyente).

11. - El principio defillalidadex.ige que todo tributo lenga un lIn de 15. _ El hecho impollible es el hecho o conjwlIu de hechüs de si.gni-
interés gcneral. La tribulación no ticne como objetivo enriquecer al es.tooQ. ficación económica. que la ley describe como lal )' establece como ongen
sino lograr un beneficio colcctivo, común o público. de la obligación fiscal.
En el impuesto. el oonlribuycnlc no recibe directamente bcncficio al- Hay hechos imponibles que se materializan o p?rrecciol1.an en un solo
guno: en la tasa, hay una prcstación estatal que beneficia al contribuyente; momento (por ej.. en los impuestos aduaneros de ImportaCIón, el hecho
en la cQmribución especial o de mejoras el contribuyente retribuye un be- imponibtc es el "despacho a plaza" dcl arúculo importado): y h.ay h~chos
ncficio O plusvalía que ha obtenido en una propiedad a causa de una obra imponibles "de ejercicio". que abarcan una serie de hechos o SItuaCIOnes
pública o actividad estatal. durante el lapso que la ley dctermina (IXlr ej .. en el impuesto ,3 la renta o l~
ganancias. que computa las sumas. obtenidas durante un penado. que pUl': -
12. - Los principios mencionados (legalidad. igualdad. no confisca-
dI.; ser anual).
toriedad y finalidad) se relacionan con el de razol/abilidiul: la ley Iributaria
debe ser razonable. las discriminaciones también. al igual que el monto de 16. _ Personalmente decimos con mucha convicciÓn que es in~sritllc~onCl/
las cargas y la finalidad de cada una de cllas. Además, en orden a la políli- convertir en hecho imponible -y por ende, gravado- a las manifestaCIOnes de ~Iquc­
ca fi scal ha de existir una proporcionalidad adecuada y razonable entre la za que se exteriorizan/"era del territorio de nuestro esta~. lo que ocu~e allmpo-
rccaudación de la carga impositiva lotal y los bcneficiosque porellarecibc ner tributos a hiencs situados en el extranjero, o a gananCias que se obtienen en ~I
la comunidad. extranjero. Ello significa quc la jurisdicci6n fiscal del eswdo se lIgOta ell SI~ t~m ­
torio, y que d hecho imponible debe radicarse dentro de é l y no fuera de sus ¡mutes.
13. - Lo que no Im:c como consLitucional es gravar a un seClor o
17. _ La detenllil/ació/I tributaria es el acto de la administración ·en
grupo social (parcialidad) en beneficio de olro sector o grupo (parciali-

-
146 CO~PEl\UlO DE DERSCHO CO:':S 1II UaO~AL LA TRJnUTAClÓS 147

elque ésta manifiesta y fonnaliza su pretensión fiscal contra un contribu- 23. - El principio conocido como "solve el repete" establece que par..
yente o responsable. estableciendo el monto e inlimando el pago. alegar judicialmenle la inconstitucionalidad de un tribulo hay que cumplir
¡Jrcviamellte con la obligación de pagarlo. La aplicación rígida y severa
18. - El juzgllmiento de los ilrcilOS fIScales de naturaleza penal necesita que, del "solve et repete" llega a ser inconstitucional por pri vación de justicia
prc"inmcnte al juicio. un acto administrativo con 10005 los recaudos constitucional- cuando el monto de lo que debe pagarse para poder iniciar el juicio excede
mente exigibles haya pn.:determinado la obligaci6n fiscal.
la capacidad del contribuyente y le impide acceder a la justicia.
• Tampoco debe aplicarse con fuerte rigorismo el principio del pago
19. - La llamada Iibenad fisc(¡1 nos Ucva a inclinarnos personal-
mente a favor de un criterio interpretativo favorable al contribuyente; o bajo prolesla, según el cual para demandar judicialmente e l reintegro de
sea. ¡¡ apoyamos en el principio "in dubio contra fiscum", un tributo se lo ha de haberoblado "bajo protesta".

20. - Las leyes que crean o modifican tributos 110 puede" ser retro- 24. - Hay docu-ina que a la IUL dd Pacto de San José de COSla Rica, que
desde 1994 ticlle jcrarquía constitucional, sostiene que el "sol ... e el repete" está
activas, por la sencilla razón de que la ley tributaria debe ser previa o
derogado o se ha vuelto improcedente. porque dicho Pacto consagra el derecho a un
anterior al hecho imponible. Si un hecho no es imponible porque no hay
proceso razonabl.:mcnle rápido para determinar dercchos y obJigaclolleJ> del
ley jiscal vigente al tiempo de producirse, hemos de admitir que hay dere- justiciable, incluidos los de índole fiscal.
cho "adquirido" a quedar libre de obligación fiscal respecto de ese mismo
hecho. Cuando el hecho imponible es de ejercicio (por ej .. impuesto a la ')s. _ l.a Corte Suprema abandonó en 1977 un principio <lue habia estableci-
renta o a las ganancias) la ley debe ser anterior a la fecha en que se cierra el do entre t 973 Y 1976, co nforme al cual la act:iónjudicial por reintegro de impuestos
ejercicio (por ej .• el 31 de diciembre) pero no necesariamente ha de ser necesitaba que quien los haMa pagado ao;;n::ditara quc, a caUSJ de ello, había sufrido
anterior a la iniciación del período. pudiendo dictarse duranle su Iranscur- un empobrecimiento.
so.
21. - El pago de un tributo conforme a la ley vigente al tiempo de La tribulación en nuestra estructura federal
efectuarlo surte efecto liberatorio a favor del contribuyente.
26. - A causa de nuestro federalismo, el poder tributario se halla re-
partido entre el eSUldo federal y las provincias. Además, después de la
El control constitucional refomla de 1994, hay que Cnlender que los municipios de provincia lienen
reconocido un ámbito de autonomía en el que cada constitución provincial
22. - La creación y aplicación de tributos queda sometida, como to- debe reglar el alcance y contenido de dicha autonomía en el orden econó-
dos los aelos estatales, a conrrol judicial de cOl/stiluciormlidad. Tal con- mico y financiero, laque implica admitir el podertribulario municipal (no
trol puede recaer en: a) la imposiciól/ de contribuciones por el congreso; b) por delegación provincial sino de carácter originario). No hay que olvidar.
la recaudació', de las mismas. Por ende. el poder judicial se halla habilita- asimismo, que el régimen aulÓnomode la ciudad de Buenos Aires también
do para pronunciarse sobre la validez de los gravámenes cuando son im- lo presupone.
pugnados por inconstitucionalidad: en cambio, no revisa el criterio, la opor-
tunidad , la conveniencia o el acierto con que el legislador ha manejado su 27. - La constitución siempre previó en su (lrt. 4° cuáles son los fondos dcl
poHlica riscal . ni los efectos sociales. económicos. fiscales o políticos. f('soro Illlcion(ll, y ciló entre ellos a los derechos de importación y exportación (im-
puestos aduaneros) y las demás contribuciones que imponga el congreso.
El jlúcio de amparo es viable en materia fiscal.
Los grallámetles prol·jnci(lles sólo caen bajo control del poder judicial federa l 28. - Aunque doclrinariamentc sea discutible y opinable, nuestro
si, directa o indirectamente, se oponen a la constitución federal. conslilucionalismo se ha manejado siempre con dos categorías de impues-
148 COMPENUIO DE DEREC\Ul CONSTnUCIONAL LA TRlBUfAOÓN 149

tos: los direCLOS y los il/directos. Se dice que en los directos el conlribu- tes parámetros: debe ser equitafiva, solidario, y dar prioridad al logro de
yeme está seilalarlo "de iure", mientras en los indirecws el que es contribu- un grado equivalente de desarrollo, calidad de vida e igualdad de opor-
yente "de jure" transfiere la carga tiscal a terceros como contribuyentes tunidades en todo c1 lerritorio.
"de facto",
La referida dualidad se describe así: La ley-convenio no puede ser mod ificada unilatera lmente, como tampoco re-
glamentada, y será aprobada por las provincias.
Como pril/cipio, son de competencia provincial. Personalmente, interpretamos que la copartici pación prevista en el inc. 2° del
A) ImpuesTOs Por excepciólI los puede establecer el congreso por nr!. 75 no es facultativa sino oblig(lloria , de modo que no depende de la voluntad
direcLOs tiempo determinado, y sie mpre que la defensa, seguri- del congreso establecerla o no.
dad común y bien general del estado lo exijan.
Según el inc. 3°, pueden quedar fuera de la copanicipación las cont ri-
buciones a las·que el congreso les establezca asignaciones específicas por
EXfernos (aduaneros), son de competencia exclusiva tlem]X) úeferminado (para ello, no se ha previsto que sea necesario el acuerdo
B) Impuestos del estado federal. con las provincias, pese a que tales afectaciones especiales detraen fondos
il/directns h ite m os, son de competencia concurrente del estado a la coparticipación).
federal y las provincias. En el inc. 2° se adjudica a un organismo fiscal federal el conLrol y la
fiscalización de lo que dicho inciso establece. La ley que lo organice habrá
oe asegurar la representación de Ladas las provincias y de la ciudad de
La coparticipación Bucnos Aires en su composición.

29. - La reforma de 1994 ha previsto explíci tamente en el arl. 75 En las cláusulas transitorias se había fijado un plazo hasta la finalización del
inc. 2° la denominada copartici{)(tci6/1 federal, más la ley-convellio basa- aiio 1996 para cumplir con el ¡ne. 2" del arto 75 , pero el congreso no lo hizo Yquedó
da en acuerdos entre el estado federal y las provincias, y la distribución de incur~o en incon-," Iitllcionalidad por omisión. (Ver disposición tral!sitoria sexta.)
las contribuciones coparticipablcs.

Desck antes de 1994. la constitución material ya conocía el régimen de copar- La cláusula comercütl
ticipación mediante leyes-contrato (que ahora el aJ1. 7511ama ley-convenio).
31 . - Todo cuanto explicamos en desarrollo del ]Xldcr impositivo,
Los impuestos il/directos ext enlOS (aduaneros) no entran en la copar- no ha de confu ndir dicho poder con la competencia úel congreso para re-
ticipación, en tanto son coparticipables los indirectos ¡memos. y los direc- glar el comercio interprovincial e ¡lItemaciol/al (art, 75 inc. 13). Vimos
tos (pero estos últimos mantienen los requisitos que a la ley del congreso que el poder impositivo cuenta con su propia normativa, confoffilc a la
ya vimos que les impone el inc. 2° del arto 75: por tiempo limitado, y cuan- cual no todas las competencias son federal es, como sí lo es la Itamada
do la defensa, la seguridad común y el bien general 10 exijan). cláusula comercial recién citada, Sin entrar a detalles, la distinción condu-
ce a afirmar que a las provincias les queda prohibido reglar el comercio
_ 30. - La ley-convenio tiene al senado como cámara de origen. A'ii- interprovincial e internacional, pero no necesariamente lescstá inhibido el
mismo, la constitución garantiza la automaticidad de los fondos derivados poder impositivo local que grava actividades relacionadas con dicho co-
de la coparticipación, y en materia de su distribución prescribe que se hará mercio, (Por ej. las provincias no pueden convertir en "hecho imponible" a
en relación directa a las competencias. servicios y funciones del estado la actividad comercial i.nterjurisdiccionaL pero sí el ingreso o la ganancia
federal, de las provinci as y de la ciudad de Buenos Aires, con los siguien- que ella reporta.)
150 Cm.fPEl\TII() 1)1;: OfItEOIO co."S 1[1 CClONAI.

El régimen adua1/ero y fa circulación " territorial"

32. - Surgt! de las explicaciones que acabamos de haccrcn IOnlodel


poder imposilivo que la constitución ha federalizado la~ aduan(ls. Desde
el arto 9° al 12. con más el art. 75 ¡ne. 1(> e ioc. lO. y el arto 4". hay sobrada
normativa para admitir dos cosas: a) Que toda alusión a las aduanas "na-
cionales" se rcliere a apuanas exteriores. quedando prohibidas la:; adua-
nas "interiores" (tanto para el estado federal como para las provincias); b) CAPiTuLO XI X
que la compe/el/cia federal en las aduanas exteriores es exclusiva.
LOS DERECHOS SOCIALES y EL mABAJO
El adjetivo "exteriore.,," no liene scmido geognifico o terrilOri&I, porque adua-
na.<¡ exteriores ~n [as referidas al tráfico intcmacional, asi como las "interiores"
(rrohibida~) son las referidas al tráfico interno. El conslitucionalismo social

33. - Todo esto se interconecta con la circulación "terrirorial" que. 1. - Desde la primera postguerra del siglo XX cobró nacimiento y
por eSlar prohibidas las aduanas interiores. implica libertad de circula- auge progresivo el llamado <.'Onslitucionallsmo social, que ofrece una plu-
ción y di' tr{¡nsito por todo elterriwrio. para las personas, los bit.:nes. los ralidad de lineamientos. Así:
buques. los medios tic transporte. cte. Está en juego la libertad tle comer- a) incluye en las constituciones escritas una tledaración de derechos
cio, de navegación, y has(a de trabajar. de fonnaqueno se puc<.le convenir sociales v económicos. abarcando la educación. la cultura. la familia, el
en hccho imponible tudo lo que queda exento en virtud de los ya d tados Ifabajo.lá asociación profesional o sindical. la propiedad , la economía, la
ans, 9 a 12, más el 26 sobre libre navegación de los ríos interiores. que es
minoridad, la ancianidad. la seguridad social. etc.:
matcria de reglamemación por el congreso según el art. 75 inc. 10.
b) asume regulaciones de la "cuestión social" que atiende a la relación
34. - Pero hay que diferenciar muy bien la circulación territorial de ent re. capital y trabajo, los factores de producción. los sindicatos y el esta-
la circulación económica. Esta última no goza de la exoneración im{X)sitiva do, la situación del hombre en runción del trabajo, cte.:
que liclle la primera. porque según lajurisprudencia de la Corte la circula- c) acusa una tendencia a remarcar lafunción soc;al de los derechos:
ci6n territorial no impide que las provincias graven mercaderías no produ- d) se preocupa por eSlructurar un orden social y ecol/ómico en el que
cidas en el las una vcz que han entrado en la circulación económica local, o se remuevan los obstáculos que impiden acceder a una igualdad de ojX)rtu-
que se han incorporado a la riqueza provincial. No obstante, hay que com- nidades y a un ejercicio efectivo de la", libertades y los derechos.
putar ciertas prohibiciones. Así. las provincias no pueden imponer gravá·
menes más fuertes a las ventas locales de productos importados O ingresa- 2. - Actualmente, damos curso a la denominaci6n de estado social y
dos desde aIra provincia. democrático de derecho --que utiliza la constitución cspafiola de 1978-
para diseñar a la organizaci6n político-jurídica propia del constituciona-
35. - El peaje que dcoo pagar et usuario de una obra pública vial (camino. lismo social en las postrimerías del siglo XX y en el comienzo del siglo
puente, ruta) no vulnera la circuladón territori:Jlllhre mientras no sea un tributo por
XXI.
el mero paso. sino por estar vinculado a servicios o prestaciones a favo~ del usuario,
como es el caso de la construcción y et mantenimiento de una vía de tránsito. Cuan-
do, conform•.: a cierta doctrina. el peaje es considerado una tasa, se advicrte que el 3. - Para satisfacer sus tines, tal estado despliega políticas sociales
monto ha de guardar proporción razonable con el costo, el uso y la cOllserv3ción de activas y queda gravado con prestaciones positiva,f -de dar y de hacer-
la obra, y ser unirorme para rodos los us uarios que se hallen en las mismas condi- que se enmarcan en la solidaridad social , en la liberaci6n, y en el desarrollo
ciones. tanto humano como socioeconómico,
l

152 COMPt:NDtO OE DERECHO CO.NsrrruaO:-<AL Los IlEII.ECHOS f>OClA.LES y El. TlI.AnA.lO 153

Aunque ya no está de moda, hemos de recordar que expresiones como "estado lente al trabajo. En y con ese sentido, cabe decir que son también titulares
de bienestar" (o estado de la procura existencial) han significado que el c l á!~ico bien
del derecho de trabajar.
común público, () tlienestar gencral de nuestro preámbulo. tiene y precisa conteni-
dos que superan el ¡;implc "libre goce" de los derechos, y que acogen como pauta El e.rmmjero que pretelKk como habitante titularizar y ejo.:rcer el ~rec!lO ~
una dislribuci6/1 rtl lJ)lIahlemellle igualitaria de la libertad. COI1 numerosos equili- trabajar debe llallarse legalmente radicado en el país para colocarse en ~Ie de Igual·
brios de ai'ladiduru para lo que pudo ser el estado liberal en los inicios del conslitu- dad y sin discriminación alguna, con los nacionales. Si cuenta con radicaCión tem-
ciona lismo m:xk.'rno, r:ma, cabe limitarle su aclividad al ámbito ocupacional y p?r el lapso para el cual
~ lo haya autorizado. Si se. halla en tránsito, pa",:"'Cc I~ecesano ~ue el desarrollo de
una actividad remunerada o lucrativa tenga autOrizaCión especia\.
El derecho de trabajar
El sujeto pasivo es doble: el est~l(lo, y I,OS de,!,á s IlOmbres., La ,obliga~
4. - Nueslra consulución histórica no omitió consignar en el \:alálo- ción de estos sujetos pasivos no es Igual m la nmma en I~OS lo:s ~asos,
go de derechos, a favor de habitantes y extranjeros. el derecho de trabajar así. en tanto siempre deben respclar la elección ~ue el sUJeto aCllv~.ha
(arts. 14 y 20). hecho dI! determi.nada actividad, la siluación cambIa cuando en l~ rel~clón
El trabajo 1111/11(/110 se basa en la dignidad de la per.wlla y. lejos de de empleo - público o privado- el que es ()mpleador tiene obligacIOnes
ser una mcrcancía. es una cOl/dllctrl hum(/na wlliosa, en la que se compro- específicas e individualiradas para con cada trabajador que se desempena
meten la vida. la salud, la energía. la subsistencia y la seguridad de la per- a sus órdenes (pago de salario justo, tiempos de descanso, cte.).
sona que trabaja, Por todo ello. el trabajo no debe esclavizar. denigrar.
7 _ Cuando el vocabulario usa, y la doctrina postula, un supuesto ciere~ho
expoliar ni enajenar a la persona.
.'(Jllr~b(Jjo", se piensa en el derecho (I conseSlIir OCWpaciÓII: ~)ero ¡,frente .a qUién
.. to p,<·,~·o obligado- alguien puede pretender o eXigir quc ese SUjeto pa-
5. - El derecho de trabajar implica. en primer lugar, la disponibili· --<omo sUJe ~ l "1 b· "?
sjvo le provca UlI cmpleo en cuanto sujeto activo de un dcrec"lO a tra aJo.
dad individual de elegir Iibrememe ulfa actividad. Si tal actividad .se de- La única respuesta que juzgamos posible y razo~a~le. es ésta: a) cl ,estado
sarroUade rorma independiente y jX)rcuenta propia (o sea, sindependerde d'be de canl a toda la comunidad y no a cada persona mdlvlduahncnte, despl.cgar
un empleador). aparcccentonccscl derecho de cumplir la actividad elegi- ;'Ulic{/s que cstable7..can uu orden social y ecoll6l1li('o qu~ acti\'c y haga acceSibles
da Si la actividad se desarrolla en relación de dependencia, aparece el las fuentes de lfabajo para lodos en el mercado ocupacional: b). además de .lales
. . _ _ .l. das de acción positiva el estado dcbe arbitrar pre5facfOnes
víncu lo. la relación o e l co",r(l1O de empleo o de trabajo. políticas activas y 11"",,1 ' • • b· I
de de5cmpleo, dentro del régimen de la seguridad social, para pre"cmr y cu nr e
Con las modalidades propias de cada UIIO en ambos casos, la actividad laboral riesgo de desocupación, dcsc.mpleo, o paro forzoso. .
ha de permitir a la persona el disfrule de su rendimienlo económico.

Por supuesto que las políticas sociales del estado han de tender al El derecho judicial
orrecimiento de un mercado ocupacional suficiente y amplio, donde el jue-
go de la competencia se equilibre con la presencia y la rectoría del propio
8. _ Un somero esqucmadc lajurisprudenciadc la Corte ha dado las
estado. El art. 75 ¡ne. 19 primcr párraro señalaejemplificativanlcntc una siguientes pautas: , .. .
serie de parámetros que es huellO releer. a) En el contrato dc trabajo es requisito esencial de laJus\tcla la Igual

Iiberllld de las partes comrarallfeS;
6. - El sujeto actillo del derecho de IIabajar es el hombre. Pero aso- b) cuando la libertad de contratar entra en conflicto con la li~e~a(1
ciaciones, empresas, pcrsonasjuridicas (o sea. entes que no son hombres) cOlllra fa opresi61/ del empleado u obrero, ha de pre\'alec~r ~ta ull1ma
pueden desarrollar también una actividad comercial, indusuial, etc.. equiva- porque así lo requiere la serie de principios de un orden SQC1al .lUSto:
154 Los 1>IlRECIlOS SOCIAI.~~" y 1:1. TRABAJO 155
COMI'Et-'OIO DE DERF.rHO CO:-;S i tluoONAL

e) c~ empLeador debe respetar la personalidad del trabajador. de modo das de la empresa (este aspecto juega - por un lado- frent e al empleador
q~c ,al ejercer sus atri buciones de dirección en la relación laboral no le que debe sati sfacer todo lo acá involucrado. y freme al estado que debe
ongme a aquél ningún perjuicio material o moral ; protegerlo y hacerlo operativo mediante leyes);
d) los crédilos salan'o/es ¡iencn naturaleza aJimemaria. y se relacio- e) Duració1l ele/trabajo, diversificada en la jomada diaria, el descan·
nan ~on el.derecho de propi edad y el de la retribución justa, por lo cual, si so y las vacaciones pagados. y la rrotección contra el despido arbitrario;
hay IIltlaclón, es meneSter indexar o actualizar su monto: d) Colllml de la producción y colaboración en la dirección de la em·
e). el derecho a la remuneración se extiende a los honorarios de los presa.
p,rofeslOlJoles, dentro de las modalidades propias de la rélación del profe-
sional con su cliente.
VI estabilidad

El artícu lo 14 bis 11. _ El empleo público cuenta en el ano 14 bis con lila 1l0rnla dife-
rencial respecto del empleo privado. Es la que atafie a la estabilidad.
. 9. ~ 131 un. 14 bis, añadido por la reforma constitucional de 1957. Vimos que en el lineamiento recién sintetizado ligura la prolección
deja el sl gule~llC resumen: a) cltrabajo tiene y debe tener tutela: b) esta c:olltra el (Iespido arbilrario. En cambio, para el empleo .público la ~ey
tutela surge lhrccla y opcrafivamentc de la constitiJeión, y debe depararla debe asegurar la eSUlbilit/(/d del empleado. ¡,Qué alcan~ tiene la aludida
la ley; e) la le! debe "asegurar" fodo lo que el citado artículo cnUlilera; d) diferencia?
la eompcten~la q~c para ello JX'lscc el congreso es de ejercicio obligatorio: Para comentarlo, hay que recordar que la doctrina divide la estabili-
e) el poder eJccut lvo no puede asumirla ni interferirla, salvo en su zona de dad en dos clases o formas: lapropia o absoluta. y la impropia o relativa:
potestad reg~amenl.aria de la legislación; f) el deber de legislar que tiene el la primera apareja proJ¡ibición para el empleador de despedir (sin justa
congr~so es mmed lato, o sea. no deja opción para elegir en qué momCllIo causa), y obligación de reincorporar si despide. OlicDLras la segunda no
se legisla: g) .Ia demora o la omisión son inconstitucionales. y los jueces prohíbe el despido. pero cuando se dispone sin justa causa hay deber de
deben re mediarla en cada causa judicial que es de su competencia. indenmizar.
Aunqucc l dcber p.rimarioque surge del art. 14 bis s.,.· dirige al eOllgre. Trasladada la cuestión al ano 14 bis, parece que para el empleado
so, la Corle ha entendido que también. y a su modo, alcanza a todos los priWldo la ley no está obligada a establecer la cstabilidad .propia, pero
otros órganos del gObierno federal que, en la órbita de competencia de ca- tampoco impedida de acogerla razonablemcntc p~a ~etenmna~s tipOS,
da uno, han de dar prioridad al espíritu protector de la normati va en juego. cluses o casos de empleo privado. Para el empleo publICO. adveI1Imos que
Igual deber se extiende a las provil/cias, conforme al arto Y'. en lugar de figurar en el art o 14 bis el vocablo "protección contra:,,:', se
consigna la palabra "estabilidad", lo que lleva a su~.ner con S~lclente
certeza que acá se la utiliza comu equivalente a cstablhdad propia; o sea.
El plexo de derechos para que no se pueda disponer el cese sin justa causa, y para que s~ se lo
hace haya que reintegrarle su empl eo al cesante, de modo que estanamos
10. - Los derechos emergentes dei arto 14 bis pucden agruparse Mí: antc un "derecho a 1/0 ser privado del empleo (público)".
a) COl/diciol/es de Irabajo, definidas como dignas y equitati vas; 12. _ La Corte registra jurisprudencia en la que: a) ha repulado que, como
. b). Remulleración JUSta. comprensiva del salario míni mo vital y mó- principio. la ley no puede establecer ta estabilidad propia en el empico privado: b) et
VI l; de Igual remuneración IX)f igual tarea, y de participación en las ganan- art . 14 bis no consagra la estabilidad propia en el empico públiC't'
Los DEIU,CIIOS SOCIA! f$ Y El- TR,\DA.TD 157
156 CO.\.ll'r..NTJIO LJE LJERECHO CO .... .'¡T1TIJCrO~' AL

, 13, - La estabilidad d(!1 empleado público aludida en el art 14 b' Las eOIllI}etent.:ias en el reparto federal
obliga a las provillcias a asegurarla a favor de quienes integran l¡; Plan::
Ut _ La divisoria entre las competcndasfederalet Y prorillcio/es
de su personaL
en cuestiones vinculadas al derecho del trabajo muestra variaciones.
a) Cuando la nommtiva incipiente ell1l1a1ena laboral se consideró como
El de,wrrollo ill!racol/slituciol/a! una especie de prolongación de las que. en el código civil, eran aplicables
• a la /OCtlc iólI de servicios. la Corte estimó en 1929 que siendo t:l salario
algo equi valente al precio del servido o u abajo convenido, la legislación
. , l ~, ~
Para el desarrollo del an o 14 bis hay que tener prcsellle. cnlre
pro\'illcia! sobre salarios mínimos resultaba illcmrslilUciollal.
n~ras ~os,a~. qu~ el eong,rcsll li en: compelencia para dictar el código de
tI(/b~Jo ,\' :e~.llnd{/d sOCIa! en d alllbito de lo que se ca lil1ea como dere· h) Cuando surge el "lluevo derecho úel trabajo" y se lo reguló en una
C~J~ CO/llIlIJ • y puede hacerlo en forma coJ ilIeada u mediante le1!islación legislación dispersa (XIr el congreso. la unidad leg islt/fj\Yl en la materia
dl~persa
, [ , d (esta"competencia no eanecla la prop;, .'. u" las provlnCIUS
. . -para sus conró refuer/O. y puso fuera de duda que las provincias care,-'ían de com-
cm~ ea os pubh cos. lamo en [u órbita laboral como en la de la ~"gU· ,',L ,.
petencia. Por ende. en 1951 la Corte pudo decl arar illCOl/Slifllciolla¡ una
SOCIal). "" ,u<lu ky santafcsina que úisminu ía el horario laboral en el empleo po vado cU311do
la remuneración se hallaba lijada en runción.del tiempo de trabajo; tOOo
, La fe8~sf(~ción qu,: U\!s.arrolla el cOIll\!llido esencial de lo;; dcn:chos sur-
,15" -
ello porque la duración de lajomada cs un elemento que forma parle del
gldo~,Ud art, 14, hls II\!llC caraCI\!r de OrdCll 1'11blico. por lo que la voluntad d l contrato de trahajo. para cuya regulación el congreso posee competencia
parl",~pucde JIlcJorill'la pcro no
lectivo pucde rebajarla.
di~lninuirla
ni dcs..:artarla Tan"
-,
¡ e as
.,lOCO e COlllralQ co· exclusiv(/,
el En orden a la denominada/JOlieía del fr(/ úajo, cuyo ámbito es muy
vasto (porque abarca el control en la aplicac ión de las leyes laborales, el
16" - Si lo~ C~III 'ell¡os
coleclivos se suborJinan a la legislación la- cuidado de la salud, la hi giene y la segundad de los trabajadores, la pre-
OOml ~~ o ~~en ~ u bllco en cu~nt O ésta les significa un piso que. como míni- vcnción de accidentes y enfe rmedades, elc,) hay un principio genérico que
mo. es ~ nd~s~)JUbl c (susceptible de ser elevado contractualmen tt:). los COI/- reconoce la facul tad ¡Jrol'incjal de leg islar en esa materia. pero aun así no
/ra/as mdmduales de trabajo no pueden d i~minu"'lo qu,
• e como PiSO
" . Ipro- ludas los deslindes entre lo provincial y lo federal son nítidOS entados los
vIene de la ley o de la conlral ación colectiva, . casos, Los hay en zonas grises,
d) La jurisprudencia de la Corte confiere competencia a las provin-
cias para regular la retribución razonable de las profesiolfes liúero/es.
La fuente intermlcional

, I ~. - En ~a:jos
I raJados de derechos humal/os con jerarquía consti - La "tle"ibili1.ación" laboral
IU.C I ~~~ ~ay C ~~USU Ia." q~c versrul sobre temas y aspectos vinculados <:00 el
tr~ba!o. cabe ~ Ila r. espeCialmente. el Pacto lntcmacional de Derechos Eco- 19, _ El derecho constitucional debe estar alerta ante lodo 10 que.
nomlCOS, Sociales y Cultural es. desde la llamada "globalizaeión" de la economía proyecta "fl exi bilizacio-
A~nquesin jerarquía constitucional. nuestro derecho del trabajo nes" laOOrales que riñen con lodocuanlO la constitución ordena en el ám-
halla vtl1culado asi mismo por los convenios de la Oroa t' '6 I se bito del derecho del trabajo,
C'OI Id J 11 b . ( O ' .,) , f:::.aCI 1/ 1/Iema-
1 ,w e ra aJo IT), que para un sector de la doctrina. sobre todo
dcs ~u és de l~ reforma de 1994 (art. 75 inc. 22), lienen naturaleza de !rata-
tlos In!emaelOnalcs,

,
,

CAPtnlLO XX

LOS DERECHOS GREMIALES

Los "gremios" y el pluralismo sindical

1. - El art. 14 bis en su segunda pane C¡¡tú destinado a Jos "gre-


mios", Comienza diciendo que "queda garantizado a los gremios" todo
cuanto luego enuncia la norma. Pero antes. al cierre del párrafo primero.
hay que recordar que en la referencia a las leyes que "asegurarán al tr<lba-
jadar" una seric de derechos allí mencionados, aparece el prlnclpib de "or-
ganización sindical libre y democrt1tica. reconocida por la simple Inscrip·
ción en un registro especia''',

2. - Indagar qué son los gremios en este vocabulario que emplea el


arto 14 bi s no resulta sencillo, porque tunto cabe entender que "grem io"
puede ser una pluralidad o un conjunto de trabajadores de Wla husma
actividad ({Xlf ej ., el gremio de los ponuarios. de los bancarios. etc.) como
una asociaciólI de trabajadores (por ej. un sindicato).
Pues bien. si optamos por lo último. los gremios a los que alude la
rórmula constituci onal de "orgallización sindical libre y democrática" en-
cuadran en el pluralismo sindical.
Sin embargo. se hizo común en nuestro derecho colectivo del trahajo
implantar asociaciones con "perroncría gremial", adjudicándoles la repre·
sentación de los intereses gremiales de una categoría de trabajallores. En-
tonces, cuando no todas las organizaciones de trabajadores tienen tal per-
sonalidad gremial. nos preguntamos: ¿se compadece este sistema con la
organización "libre y democrática. reconocida por la simple inscripción en
un registroespcci al"1

3. - La respuesta breve que condensa nuestro punto de vista es ésta:


160 CO~PEl'IDIO DE DERECIIO CONSrrn;aONAL
Los DERECHOS GREMIALES 161

la J~y que rc~lamcnla la organización sindical puede deparar a una sola


en,lIdad grellual por categoría de trabajadores la aludidapersol/alidad gre-
hacer un dcsdoblamicmo: por un lado. el sujeto que declllrt/ la huelga! o
que disponc ¡mee/' huelga; por otro lado, los sujetos Que j1aniciptUl en la
I/~,~/: con la que le confi ere la represcmaci6n de esa calegoría, pero a con-
huelga.
dl clon de que la ulularidad de los derechos gremiales l/Oquede mOl/opoli-
zada con exclusividad lotal por la enlidad con personal idad gremial ; o sea Cuando al sujeto c/clivQ que declara y conduce la huelga se lo identl-
queot~as asociaciones sil, personalidad gremial han de quedar habilitadas lita con una 3..<;()(.'iación sindical eon personalidad gremial. hay que aclarut
paracJcrcer algunos derechos gremiales. quc. <.tdl!más. al menos por aplicación de los derechos implfcitos del arl.
33, hemos de reconocerle el derecho de huelga a un grupo de trabajadores,
4. - A Sí.. dada la modalidad que revistclllos con venios colectivos de ¡rabajo, ya una asociación sin personalidad gremial. Si así era y fue cuando. ant ~
parece n~ccsano ,-!uc para poder darles la proyecci6n obli ga toria que aharca a todos de [a reforma de 1957, no babfa norma alguna de la constitución sobre la
I~s ~.abapdorl!S de una dClcrminada actividad, ha de haber " unidad di: rcprcscma- huelga, tenemos que admitir que a1lOra que esa Ilorma existe en el 3rt . 14
CI?II de ellos ~r ~arte ~e. u~a línica asociación: la que posee personalidml gn'- bi s no podemos eSlar peor o más rcstringidos.
mwl. ~ camhlú. S il] pelJu/cm de q ue las asociaciones con personalidad grclrual
El otro sujeto activo -que no declara ni conduce la huelga- sino que
tltulanccn el d.crc<:h? de Iwelg1/: cretmos que también tal derecho puede ser ejerci-
do por una ~nttdad S il] personllltdad gremial en el ámbito de un sector de trabaj ado-
participa en ella, es cada persono (trabajador) que se adhiere. El derecho
res en relaCIón con uno o más empleadores. de participar en una huelga implica también el de respetar la libertad per-
sonal de 110 hacer huelga.
5. - En nuestra cOllsl iIUcióIlIlUlltm·al. la casi tOlalidad de los regí- La nómin a a incluir en. el rubro del sujelO pasivo de la huelga es ésta:
me~les legales exhibe discrepancias con el art. 14 bis. y lejos de in stitucio- el estado. el empleador y [os particulares ajenos al conflicto; la obligación
nalIzar la democracia sinJical pluralista ha consolidado posiciones jurídi- comú n ti. todos el los consiste en respetar la decisión del sujeto acti \'O que
~as exd~ycn.tes o dominalllcs y. para peor, hasta con fuerte presencia polí- declaró la huelga. y la de cada trabajador que participa en ella. Ahor... bien,
IICO-panldlrla de las asociaciones con personalidad gremial . hay que agrcgarcomo sujelo pasivo a los trabajadores que, sean Ono hue[-
guistas, deben abstenerse de Icsionarenlre sr la libenad de los que adhie-
ren a la huelga y de los que no adhieren.
Los derechos gremiales en el 3rt. 14 bis
9. - La norma constitucional que reconoce el derecho de huelga es
6. - El párrafo segundo del arto 14 bis que venimos comentando enu- operativa según [a Cone. por lo cual no es imprescindible que haya rcgla-
mera Ires derecbos reconocidos a los gremios: a) la tme/g(l. b) la concerta- mentación legal . Cuando se lo reglamenta. las restrit:eiollcs que se le impo-
ción de cOl/venios coleclivos de trabaj o, e) el recurso a la conciliación y a[ nen ti enen que ser ra:,ollables (así. pucde haber limitaciones severas en e[
arbitraje. área del I!mplco público. de los scrvicios públicos básicos, elc.).

10. - Cuando hay huelga, la autoridad adJ/lill islralim puede calificarla para
La huelga deh.:mÚnar si es o 11 0 e.f legal. pero esto lo hace desde el punto de vista sindical para
encauzarla. De ahí en más. la repercusión de esa huelga en los contratos individua-
les de trabajo (cuando, pur ej., el empleador suspende o despide a los huelguistas)
7. - La huelga no puede entenderse como el derecho "individual" de sude dar lugar a procesos judiciales. en los que la Con e tiene establecido que la
1/0 trabajar porque e[ sentido con que [a constitución lo consagra es el de calificación admi nistrativa que se hi zo de esa huelga puede y debe en cada juicio ser
una abstención colec/ú'{I de trabajo, o sea un "no trabajar" plural. "risada j udicialmente, y en esa re visión e l juez esll. obligado a hlcer 5U propia
calificación. de mooo que no está obligado a reproducir la ealiftcaclón administra-
8. - Cuando hay que referirse a los sujetos de la huelga, debemos tiva: y si no hubo clllificación administrativll, igualmente el juez tiene que hacer la
sUyll.

=. FE __

Los OI:RECHOS GRI').4tALES 163
162 COMPEKD!O DE DEREC1 10 CO~!ITlnJ('IO~AL

La sentencia que ami/e calificar la huelga ~segúll lo ha dicho la Cor- trativa del estado y. a partir de al! í. su aplicaciólI se extiende no só lo a las
te- está viciada de arbitrariedad. partes contratantes que han intervenido en su celebración sino a lOdos los
trabajadores y empleadores de la actividad. categoría o 70na comprendi-
11 . - Los eJectos de la huelga en cada COlffralO jlldiriduol de traba- das en el convenio: tal es el efecto "erga omnes". o la generalidad normati-
jo son los siguientes: va.
a) La huelga l/O produce automáticamcnlc la ruptura del contrato Ja- 14. _ La I!sencia o naturaleza del convenio colecti vo es cOfllracrual.
boraL sino que lo suspende; y su producción jurídica ha de ser considerada unafuel/le "1/0 eswta''',
b) cuando la hue lga es declarada ilegal administrativamente, el que no pierde ese carácter por el hecho fonnal-ya a1udido- de la homolo-
empleador puede ¡mimar a los huelguisla'i a volver al trabajo. y si no vuel- gación estatal. Pero no se debe decir que es una "ley". aunque más no sea
ven puede despedirlos con justa causa: porque no emana de ningún órgano gubcmamcmal del poder del cstado.
e) mientras la relación laboral está suspendida por la huelga. el cm-
plc~dor no se h~lIa obligado a pagar el salario (porque no hay contrapres- 15. _ Reiteramos que el conceder a una sola entidad sindical (con personali-
taCi ón del trabaJador); tal es el principio general, que deja espacio a nume- dad gremial) la titularidad del derecho a concertar con\'e!lio~ coh.,<:t i vo~ no ha de
monopolizar en esa entidad la totalidad de los demás derechos gremiales.
rosos pomlcnorcs:
d) el dcrcchurle huelga 1/0 cOllviem' el/lícitas a cualcsqukm conduc- 16. _ El conveniocoJcctivo nodebc menoscabar derechos más favo-
tas de acción directa. pudiéndose sancionar las que incurren en excesos. y rables para el trabajador que surgen de leyes laborales de orden públit.'O. o
las que implican comisión de delitos. de los comratos individuales de trabajo. Desde nuestro punto de vista.
tampoco puede obligar a trabajadoreS no amiados a contribuir a un sindi-
12. - ~uando la huelga qu<;:d~ definida como el abandono colectivo y tempo-
calo con cuotaS u obligaciones pecuniarias, porque si eso ocurre se les
ral del trabajO y dd lugar de trabajo, se abre el debate doctrinario acerca de si el
dercc.ho de huelga comprende también algunas medidas de fuerza que. cOrnJ el viola a dichos trabaj adores su derecho de no asociarse.
trabajO a desgano. o el paro de brazos caídos, son cumplidas por los trabajadores sin
dejar su lugar de trahajo. Personalmente crcenlOS que quien puede lo más pulXtc lo 17. _ Mientras el plazo de vigencia de un conven io coleclivo se halla
me~o~. por lo que medidas de fuerza que, dentro del marco razonable de legalidad y en curso. una ley posterior a su celebración no puede cercenar a suprimir
de licitud, no encuadran en el molde tfpico de lo que es huelga, se han de dar por beneficios anteriores. (La jurisprudencia de la Corte registra fallos en dis-
incluídas en el derecho constitucional de huelga. crepancia con este criterio.) En cambio, un nuevo convenio colectivo que
sucede y reemplaza al anterior puede mooilkar y suprimir bcneticios con-
cedidos por este último. porque siempre juega el princirio de que 1000
La cOl/lrataci6n colectiva beneficio cuya fuente es un convenio colectivo subsiste mientras dura el
plazo de vigencia del convenio.
13. - Los convenios colectivos de trabajo permiten con facilidad re-
conocer que el ano 14 bis da recepción al llamado "poder I/ormativo" de 18. _ Los topes constitucionales que es fácil inferir del arto 14 bis y del prin-
/(~s asociaciolles !"oJl'siollales. Tal JXXIcr normali vo significa que me- cipio protcctorio núninJJ del trabajador no toleran ser dejados de lado o rebasados
dl<lIlte.la contratación colectiva se crean normas de carácter general y obli- por ninguna polftica de la llamada "flexi bilización" laboral, como tampoco admiten
gatorIO. la preponderancia unilateral de la voluntad patronal.
En efel-10, los convenios colectivos Liencn como sujetos a una entidad
19. - Lo que se denomina "encuadramiento sindical" es el mecanis-
sindical y a un empleador o grupo de empleadores (o. en caso de existir. a
mo que se dirige a deternlinar cuál es la asociación sindical que representa
una asociación patronal similar a las sindicales). Para ser típi camente tal.
al personal que trabaja en una empresa. en un establecimiento, n en un
el conveni o colectivo requiere la homologación por la autoridad adminis-

,
164 CO~U'ENf>lO DE DERECHO cONSTrruaoNAL Los DERECHOS GRI~"dlALf~~ 165

sector de aclividad. Tal encuadramiento, de no solucionarse por acuerdo de I.a esU/bi/idad el/ el empleo dura clticmpo de la geslión sindical . o un
parles. está a cargo de la aUloridad administrat! va del estado. breve plazo razonable posterior. y para nucslro punto de vislaequivale ~ la
estabilidad "propia" que. en caso de despido. obliga al empleador a relll-
Aun cuando d cncu¡¡Jramlt:nlo sindical no limita sus efectos a la conlrat<Jclón
co)ecti\'a, sirve par::. sci\.. lar d 1Ímbilo en que el pt:rsonal se halla incluido .. los fines
corporar.
de saber cuál es la a~\lcillción gn::mial y c uál el convenio coleclh'o corresp(Jndielllc~
22. - 1.a ley tiene que ser nl<Xkrada y razonable en el alcance y los efcctos
a dicho personal, '
que asigna a la estabilidad sindical. Por un lado, ha de tOmar en cuenta qUl;': d marco
completo de la garantía sindical tiene no sólQ caráct,-'f subjetivo o ~rsonal. p~ ,el
trabajador rcpre~cntatlto::. sino además cariÍcter sindical, por el cual su \'lOlaclOll
Lo cOl/ciliaci6/1 y el arbitrajl' incurre en lo que se reputa "práctica deslt~(I/".
Pero no es constitucionalmente ra1.Onablc que en ,,;aso de tenerqut: promo\"ers..:
20. - Una clasilicadón de los conflictos o controversias entre traba· un proceso pellal al representante gremial haya que tramitarse una especie de "ante-
jadares y e mpleadores los di vid¡; en il/dividuales y colectivos. st:gún que juicio" ante un organismo administrativo.
estén en juego intereses com:retos ue uno o varios trabajadores, o intereses
abstractos de una categoría profesionaL También hay conllictos di) dere·
ello y de imereses. st:gún que se refieran a interpretar o aplicar el deredlo
vigente. o que ti¡;ndan a Illooilkarlo o reemplazarlo por otro. Cuanuo el
arl. 14 bis enunda entre los uereehos gremiales el de recurrir a la concilia·
ción y al arbitraje, nos está dando a entender que queda "permitido" diri-
mir connictos colectivosfllera de la órbita del poder judicial mediante
procedimientos conciliatorios y arbitrales.

Si bicn cstarnos an te un "dcr.:cho", hay situadones extremas en las que una


ley reglamelltaria puede imponer ta obligaloriedad de tratativas conciliatOrias o del
arbitraje, cuando et oonOic!o cotccll\'o tiene capacidad de alterar la paz; social. La
Corte lo ha reconocido.

La representaciól/ sil/dical

21. - El arl. 14 bi s dispensa. además, garamías necesarias a los tra-


bajadores que son representantes legales, para que puedan cumplir su ges-
tiól/ sil/dical. Tales garantías se extienden a la estabilidad en sus empleos.
Es una tutela al trabajador en mérito a la función gremial que desempeña.
Los sujetos protcgidos son sie mpre trabajadores que invisten alguna
represel/tación gr('ntÍa!. sea por ocupar cargos electivos o representati vos
en asociaciones sindicall!S O en organismos que requieren representaci6n
gremial. sea por actuar como delegados del personal, o por ser miembros
de comisioncs intcmas, o por ocupar cargos si milares de naturaleza gre·
mial.
,

CAprruLO x X!

LA SEGURIDAD SOCIAL

Su encuadre constitucional

l. - La tercera parte del ano 14 bis está dedicada a la seguridad su-


cial.
La expresión "seguridad social", muy en boga en e l vocabulario jurí-
dico, licne varias acepciones. Una, demasiado elástica, la hace coincidir
con el bie1lestar gel/eral de la sociedad y hay que descartarla: las otras
dos apuntan a riesgvs. comingellcias o lIecesidades de: a) todas las per-
sonas. porque son comunes a cualesquiera y al conj Wlto. como la protec-
ción y cobertura de las cllfem lcdades, el desempleo, la vejez. la mucn e. e l
accidente: b) esa misma protección y cobenura con respeCLO a los trabaja-
dores. Además. si prioritariarncnlc se ha lomado en cuenta 10 que es riesgo
o infortunio, enfoques más amplios incorporan eventos (como la matemi -
dad y las cargas de familia) y silUaciones que provocan necesidades (como
los gastos de vacaciones o de estudios).

2. - En tooas estas dimensiones hace presencia el valor solidaridad


social. que se exterioriza en prestaciones y beneficios a favor de los sujc·
tos a los que incluye un sistema de seguridad social. Lo normal para el
caso de que abarque a los trabajadores es que éstos deben contri bui r O
aport ar al fondo con el que se fi nancian las prestaciones, en tanto cuando
la cobertura se extiende a todas las personas y su campo incluye la llamada
asiste1/cia social. el sistema suele ser gratuito (o sea, los beneficiarios no
deben efectuar aporte alguno, JXlrque los fondos tienen Olras fuen tes).

3. - La tendencia actual es la de no poner a cargo del empleador las presta-


ciones que cubren lIecesidades de los trabajadores, sino la de trasladarlas a organis-
168 COMI'9.'DIO DE DERECHO CONSlTIUL"lDNAL LA SEGtlRIDAD SOCIAL 169

IIIOS dI! 111 S~8l1 ridml social que cuentt:l\ con fondos propio~ para finallciar y otorgar SOLJre el tema. Pero la doctrina y la jurisprudencia le han dado, en cambio.
los beneficIOs.
un desarrollo muy vasto y pormenorizado.
4. - Conforme al al1. 75 lne. 12 de la constitución, la legislación queua desa-
9. ~ El derecllo a la jubilación se bifu rca en:
rrollo a la ~guridad social del all. 14 bi~ integra el llamado den;>cho COI/l/In; o sea,
no es derecho kdc:ra1. a) derecho "a" la jubilaciónfutura, o derecho "en expectativa". mien-
tras la persona se hall a lfabajando ;
-
::l. -
'
La seguridad social absorbe lo que se denomina den:t:ho de la b) derecho jubilatorio "adquirido" mediante el acto ororg(mte del be-
prel'isióu sodal o derecho previsional. clásicarucnteestructurado sobre la neficio.
base de [as jubilaciones y pensiones.
, El beneficio jllbi/morio cOI/cedido consta. a su vez, de dos aspe<:tos:
6. - El d iado art. 14 bis consigna que el estad o Otorgará los bcnc~ a) el status de jubilado que titulariza Quien ha obtenido el beneficio:
neias dc la seguridad social , que tendrá carácter illlegral e irrellunciable ; este status inlegra el derecho constitucional de propiedad ;
Y,luego añade que la ley establecerá el seguro social obligatorio, las jubila- b) el goce dd beneficio. que consiste en el cobro de una suma dineraria,
Ciones y pensiones móviles. la protección integral de la familia. la defensa normalmente periódica ; tal suma O monto no es intangible. y puede variar
del bien de familia. la compensación económica familiar (que es elllam;::¡- incluso en menos, a condición de Que la reducción Que se le imponga no
do salario fa miliar). y el acceso a una vivienda digna. resulte confi scatoria.

7: - Para e! seguro social. la norma estipula que ha de estar a cargo 10. - Los vericuetos dcltemajubilatorio /la concluyen acá. Hay que
de entidades nacIOnales o provinciales con autonomía económica y finan- analizar varios aspectos del momo de la jubi ladón. que llevan al siguiente
ciera. En cambio, para lo que latamente se engloba en la cx.presión "bcne- deslinde:
licios de la seguridad social", consigna que el eswdo los "otorgará". a) cuando al otorgarse el benefi cio se tija cuál es su mo nto, tal canti-
dad debe guardar cierta proporción razollable eOIl el salario Que la perso-
Esto último suscita la duda de si siempre es el cstado el que delx: haCe!"S"; car- na ganaba mientras estaba en actividad; de esa manera se satisface el prin-
~o de la cobertura y dd pago. Según la jurisprudencia. ciertas prestaciones pueden
cipio de la naturaleza sustitutiva que es propia de lajubilación, en cuanto a
estar a carg~ de.l en~r!eador.. Asimismo, implantados regímenes jubilatorios surgi-
la necesaria proporcionalidad entre el haber de acti vidad y el haber de pa-
dos de la prl\'atlZaclón del Sistema, afirmamos q ue su existencia no es inconstitu-
cional en la medida en que subsista también un régimen estatal: pero, ademlÍs, aun sividad que lo reemplaza:
~ara e l s istema privado, el estado no puede abdica r de su rol de pr()(ccción y garan- b) este primer aspecto a la época de concederse la jubilación cuenta
tIa. (.:on adaptaciones posteriores, todas las cuales vienen presididas por la única
En suma, "otorgar" los beneficios de la seguridad social no significa, literal- pauta constitucional explícita, cual es la de la movilidad; durante el lapso
tI.leme, que es e l estado el q ue siempre y en lodos los casos tk llo; que concederlos. de goce o disfrute del beneficio, su monto ticne que aumentar pero 110
Slll? que e l estado debe organizar y cOlllrolar el sistema, yen parte puede deja r que disminuir. y cuando el arto 14 bis no establece ningún sistema específico
entIdades no estatales te ngan a su cargo la concesión y el pago <k los beneficios. de movilidad. la jurisprudencia tiene exigido que al irse aumentando el
monto móvil , cada cantidad tiene que guardar a su vez cierta proporción
razonable con lo que ganaría el jubilado si hubiera seguido trabajando;
Las jubilaciones y pensiones
c) las sucesi vas variaciones del sistema de movilidad que procuran
mantener el nivel de vida a Que estaba habituado el jubilado. hallan dos
8. - En la realidad de nuestro sistema constitucional, cI núcleo bási-
co de la seguridad social está compuesto JXlr las jubilaéiones y pensio nes, excepciones: c') el cOllgefamiemo dcl haber jubilatorio por plazo incierto
a las que el arto 14 bis obliga a ser móviles. Es la única norma expresa ha sido declarado inconslitucional por la Corte. de modo quc si en situa·
LA SEGUII.[1)AD SOCIAL 17\
170 COMPENDIO DE DERECHO <.:O"'S IJI LiCI ONAL

El estado y la seguridad social


ciones de emergencia el haber 00 SI: moviliza. tal congelamiento exige ser
de <hIración transitoria breve; e") la rebaja del haber jubil alorio que. por 15. _ El arto 14 bis a la luz del sistema axiológico de la constitudó.n
supuesto, vendría a conflgur-clt una moví lidad al revés --Q sea para atrás en nos suminisU"a la conclusión deque se impone al estado el deberd~ asunur
vez de para adelamc- requiere también causa de grave emergencia y, ade- una presencia reglamentaria. reguladora y controladora en matena de ~­
más. que la disminución no sea confiscatoria. guridad social. Tal deber queda reforzado por el art. 75 inc. 2~, que ~bhga
a legislar y promo\'er medidas de acciólI positiva. que gara~tt~~.la Igual-
11. - Muchas de las .pautas expucslali son útiles ..:n su aplicación durante dad real de opOrlunidades y de trato, y el pleno g~ y eJerctc~O de los
épocas de inflación. Personalmente estamos seguros de que las prohibiciones lega-
derechos. todo ello -en particular- respecto de los mnos. las mUJeres, los
I..:s de la indexación /lO pueden prevalecer sobre Cllamo la jurisprudencia de la Corte
liene elaborado en tomo dclmoOlo móvil y n:ajuslable de las jubilaciones. ancianos. y las pcrsonascon discapacidad.
El mismo jnc. 23 obliga a dictar un régimen de seguridad social espe-
12. - Cuandocl arto 14 bis prescribe Que no puede exist ir super¡)osi- cial e integral en protección del niño en si l~ación de desa~paro y d~ su
ció'l de opones. hemos de en tender -según la Corte- quc la prohibición se madre. desde el embaraw, durante la lactanCIa. y hasta finalizar el penodo
dirige a impedir que por una misma actividad laboral la persona deba con- de enseñanza elemental.
tribuir a dos o más sistemas de seguridad social ; pero nada obsta que quien No hay que dejar de lado cuanto. en conexidad. emerge de Ira/ados
cumple más de una actividad pague apones jubilatorios a cada uno y por il/tenwciolfales con jerarquía conslitucional.
cada uno de los regímencscorrespondiemes a tales actividades diferentes.
O sea que lo vedado es la "superposición" pero no la "mulliplicidad" de 16. _ Vale reiterar que cuando globalmente apelamos aobligadones
aportes. °
de "el cstado", cuando las competencias se asignan e~presamcnte .al.C?"-
greso para que legisle, la jurisprudencia de .'a c.0rte. Sin saltear I ~ ~Ivlslón
13 . - Asimismo, la ley que obliga a contribuir a un sistema de seguridad de poderes, ticne señalado que el arto 14 bIS vlIlcula a l.oJOS fo.~ orgal/os
socia! ha de tomar en cuenta que las personas que deben eolizar han de tener una gubemamelllafes. cada uno en el área de .su~ c~m~tcncl~ propias: como
razonable relación con aquel sistema. Por eso, se reputÓ inconstitucional que el asimismo a las provincias cuando cn sus junsdlcc,ones eXisten reglmencs
sector de comerciantes e ilxJustrialcs que vendía instrumental usado par los profe-
sionales del arte de curar tuviera que aportar a la caja de previsión que afiliaba a locales.
dichos profesionales.
17. _ Si de la exégesis de la normati\'a constitucional emi~aJn).s a la consti-
/lldón lila/erial, los datos de la realidad dejan lamentable te~tnromo de que I.a
14. - Las provil/cias tienen competencia para dictar su propia legis-
seguridad social exhibe múltiples insurtciencias, tanto ~r accl~n cO!~o p?r onll-
lación local en materia de seguridad social para sus empleados públicos y ·6 y que muchas de esas insuficiencias se han converhdo en Itlconsfttucwnales.
para los que ejercen actividades profesionales en su jurisdicción. Por ende, ~ ~i'Iero el "oto del juez Fayl en el fallo dictado por la Corte en el caso ·"CIl<x;obar",
pueden crear losorganisroos o cajas OIorgantesde los beneficios jubilatCl"ios. del año 1996.
La circu nstancia de que el art. 125 de la constitución reformada en 1994
haya consignado que las provincias y la ci udad de Buenos Aires pueden
"conservar" organismos de seguridad social para los profesionales y los
empleados públicos parece indicar que pueden "mantener" los existentes
pero no crear otros, lo cual conduce a Wla interpretación equi vacada, des-
de que las provincias "conservan" todo el poder no delegado al gobierno
federal y, por ende, también "conservan" (con igual sentido competencial)
el que siempre se les ha reconocido en la indicada área de la seguridad
social local .
--------==-

CAf'Íl1.1LO XXII

LOS DERECHOS I'OLITICOS

El régimen electoral y los derechus políticos

l. - Derechos políticos y régimen electoral componen Wl temario que


pcrtClll:CC, a Su ve/.. a la parle dogmática y a la parte orgánil:a de la cUllsti-
lución. En elCclo. cuando a los partidos políticos y al sistcllla declaral los
relacionamos con derechos de las personas (a asociarse. a vOlar, a ser ele-
gido. ctc.) enfrentamos a la 1>ll11e..(Jogmálica. Cuando el vínculo se traba
con el fundonamictuo dd poder y con los órganos gubcnwllIcmalcs, más
la dinámica política. nos uhicamos en la parte orglÍllic(I.

2. - Nuestro pUnto de visla 110 califica como derechos políticos a los dcn~­
ehos que son susc.:ptibles <lo.: ejercerse con fines políticos. Reduciendo la categoría,
entendemos que los derechos políticos sollllllcs únicim'lCntc, cuando: a) los sujetos
que los titularir.an son ciudadanos (o e,\lfanjeros habihtados) o son entidades polí-
ticas n:conocidas 1.'0100 tak-s (por ej., los p¡lI1idos): y b) no tienen ni pueden tcner
o tra fina lidad q ue la política.

3. - La mejor ubicación actual de los derechos políticos y del régi-


men electoral la brinda la democracia participa/ira. La participar.:i<Ín con-
voca al protagonismo activo de personas y agrupaciones. que dinamiza al
sistema democrático desde su base popular. Tal participación no se reduce
a los actos electorales. sino quc alcanza a "ías infonu(lles que dan prcSCIl -
da a múltiples intereses a través del ejercicio de derechos que no son polí-
ti cos pero que pueden revestir finalid ad rolítica (petición. reunión, expre-
sión. asociación. ctr.). De CSIa manera se logra. entre otfas cosas. que la
sociedad conozca y controle las ofen as y los programas electorales.


4. - Por su lado, el den>cho electoral no se limita al acto de votar

174 COMPI!f>,'OIO VF. DERIiCIIO CON"STnt '('"[ONAL Los DI,Rl,CIIOS POLtncos 175
,

porque. además del sufragio. abarca al proceso decLOral en looa su secue- El derecho de elegir contigura subjetivamente el derecho elcctoral
la y dcsarroJIn para exigirle e impri mirle legitimidad . actil'o; el derecho de ser elegido conl1gura el derecho eleclOral pasivo.

5. - La panicipación. el derecho a voto. el derecho ascrc lcg ido. yel En e l marco del c Uerpo e lectorat y del dectorado activo no cabe incluir a 101i
órganos de poder que. por diferentes normas de la !.:onstituci6n. lienen competencia
sistema electoral democrático cuentan con nomlas de reconocimiento en
para designar a portadores O integrantes de dichos órganos.
tratadoJ de jerarquía COl/stÍfuci orwl.
9. - El cuerpo eh'ctoral no tiene más entidad que la propia de la
6. - En suma, lodu converge a hacer efect iva la legitimidad de ori- pluralidad o su ma de electores. No es un órgano del estado sino, cuando
ge". como dependiente de la forma y manera en que los gobemantcs acce- más. un sujeto auxiliar del estado o del poder.
den al poder de acuerdo a la ley, y no por la fuerza .
Para integrar el cuerpo electoral hace falta tener la aplitud calilicada
El aClualllrt. 36 de la constitución tiene mucho que ver con el tema. como ciudadanía. Cuando el ar!. 20 de la constitución afirma que los ex-
en concurrenc ia con el arto 22. tranjeros gozan de los mismos derechos "civiles" de los ciudadanos está
diciendo que no necesariamente han de gozar de los mismos <.Ierechos po-
líticos, aunque creemos que no prohibe que la ley los conl1era.
El artículo 37 y sus proyecciones
10. _ Nucslra perspectiva nos lleva a sugerir que los extranjero.l· no naturali-
7. - GI ano 37 cncara los derechos políticos y el sufragio. así como la zados argentinos que cuentan eon un tiempo suficiente de residencia en el pafs
igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres para acceder a car- deben merecer la litu laridad del derecho a vota r. porque en la mcdida quc forman
parle estable de nue.~lra soci,..dad poseen interés en cuanto se reCiere al gobierno del
gos electi vus y partidarios.
estado.
Cuando alude -con efecto operativo y djrectü- a la garamía de los /\. la inversa., los ciudadal1Qs ql¡t! IIQ SO" IlClbiluntcs de nue.~tro l.'Stado poRllle
derechos polít kos. hay que recordar que. además del sufragio. el texto de no vin!ll acá, no deben ser e tectores de autoridades argentinas. y ello por la muy
la constitución contiene ahorallas formas semidirectas en Jos arl$. 39 y 40 simple razón de q ue si la constitución afinna en su arto 45 que son elegidas por el
sobre i"iciativa legislativa y consulta popular. " pueblo'·, hay que fonnar pane de ;:so; pueblo. y no de la població n de OlIO CSlado.
Discrepamos. por eso, con la solución que en 199 1 adop ló la ley 24.007.
El Jufragio queda calil1cado como universal. igual. secreto yobliga-
torio.
ti . - El eleclOrado pasivo es el conjunto de personas que tienen
Todos estos parámetros. propios de la parte dogmática de la constitu- capacidad.polCtica para ser designados: tal capacidad equivale a derecho
ción, hacen parle de su sistema de derechos y, por ende, obligan tamhién a electoral pasivo. Nuestra conslitución carece de una nomla uniforme, por-
las provincias. de modo que el derecho local debe deparar iguales garan- que fom1U la normas propias para los distintos órganos de poder. Com.o
tías. y hacer aplicable este ano37 para el acceso a cargos electivos y parti- principio general, decimos que cuando la constitución establece las condi-
darios de índole local. ciones de elegibilidad para un cargo o función , esas condiciones no pueden
ser ampliadas ni disminuidas por la ley.
8. - La expresión "derecho electoral" cuenta con dos sentidos: a)
objetivameme, alude a la regulación de la actividad electoral en cuanto a 12. - HabCamos dicho que desde el enfoque subjetivo. el derecho
sus sujelos. a su objcto. n los siste mas, etc. ; b) subjetivamel/te. dcsigna la electoral implica la funci6n del sufragio. El sufragio es. para nosotros. una
capacidad de delerminados sujetos para votar o para ser elegidos. ''función'' polílica de naturaleza electoral y de caráclcr individual.
El vocablo "electorado" es equivalente a cuerpo electoral. a electora- Por ende. 110 es una función "estatal" o del ¡xxIer, todo lo que traduci-
do activo y electorado pasivo. mos calil1cándola como fu nción pública l/O estatal, que da origen a <kre-
• -

116 CoMPf~1)lO DE Df.REC IlO <.'01'15111 CQO:'lo'AI Lus D c RECllQS PQÚTICQS 177

ehos y obligacionc¡¡, y que opera \,:OIllO Wl3 técnica que se utiliza para que 18. - A la fecha, el 01'1. 39 c:oncede derecho Pilra que ;í!OS ciudada-
las personas expresen su voluntad poI ítica a efectos de la nominación de nos" presenten ¡n-oyectos ele ley en la cámara de dipulados, a los que el
l(ls titulares de poder. Tamhién para la adopción de decisiones que no se congreso tiene que darles lratamienlo expreso dCUlro de los doce meses,
rdacionan con la designación de gobcrnanles,lo que ocurre en las formas Quedan fuera los proyectos sobre refonna I..:onstiluciorral, UlH&c1os inter-
~m idireclas (rcfcréod l!lll, iniciativa. consulta popular. CIC.). nacionales.t ributos. presupuesto, y materia penftl.

13. - Conviene req¡lcar que el rcq uisito de idol/eidad <.jU!! impone el F.1 congre~o debe dictar ]¡¡ cOll-cspondicnte tey re~lament¡¡ri~ q~ la l!liciativiI
ano 16como única com1idón para el acceso a loscmpk!)~ alcam<i también púpul~r, 10 qUI: hizo en 1996 Illediantc la nO24.147.
a los cargos públicos electivos. En cll:aso. esta idonojdad se bifurca en Elltelldemos que esta iniciativa ha dll ser "formulada". o sea, d proy¡.;cto úllley
idoneidad élica e kloncidad lécnica (o sea, la e)(;igida para la función espe- que se propone debe I:star articulal-io o reda~tado.
cífica).
19. - Por su lado, el ar(. 40 rcgIJIa. la cOlIsulw popular, cslableclcn-
14. - Aunque un candidato a l:urgo electivo sólo po~c un derecho do que a iniciativa dI! la cámara ~c dipulados el congreso podrá someter a
"en expectativa" (que recién se conviene en "adquirido" una vez que la consu lta un proyecto de ley; la ley de convocatoria no p\ledc ser vetada, y
elección y la admisión a la fWl ci6n se han operado). hay que dar por ciertu si el voto popu lar es afimlativo, el proyecto queda convenido en ley y su
que las proscripciones y discri minacinnOli arbitrarias son inconstituciona- promulgación scrá automática.
les po rqu ~ bloquean la postulac ión y el acceso al cargo. El Paclo de San Se arhitra una dualidad: la consulla villculalll(, y la 1/0 vill(.'¡~lmlfe.
José de Costa Rica, en su an o23. 2 respalda esta afirmación. para la cual el voto nocs ohl igatorio; la consulta no vinculante puede ser
convocada por el congreso o por el presidente de la repúhlica dentro de las
15. - Incumbe a los partidos que haccn ofena de candidaturas asu- competencias de cada uno.
mire! deber de efectuar una buena selección con base en la idoneidad a que
recién hicimos referencia. El arto 4() di!;dcnle al congreso el deber de dictar una tey reglamentando las
materias, los procedinúentns y la o portunidad de la consulta popular. Tiene lógica.
a nuestro criterio. suponer que aunque el arlo 40 uo tncncio na materias sustraídas a
16. - Las prohibiciones y restricciones cOllstitucionales a la ree/ec-
ta consulta. te alcanzan las mismas prohihic iones que para la iniciativa popular
ciÓl/ de gobcmantes no implican proscripción ni imJX!dimento violatorios consigna e l :lrt. 39.
de la constitución y del Pacto de San José de Costa Rica.
La reglamentación se hizo en 200 I por ley 25.432.

20. - Si partimos del principio Je que los derechos políticos hacen


Los nuevos derechos políticos en la reforma de 1994
parte de los derechos huma/los. hay que enfocar la legirilllaciólI procesal
para su tutela por los jueces. Esta legitimac ión hade dcpararse. como mí-
17. - La novedad que ahora citaremos atiende a los arts. 39 y 40 que nimo a dos sujctos: a) los ciudadal/os que t.iLularizan derechos políticos:
incorpora dos formas semidirectns de participación polítka en materia dt: b) los partidos po/{ricos.
derechos políticos: la iniciativo legis/miva popular y la cOl/sulta popu-
lar. Damos por cntendido que para que tales sujetos accedan a un tri bunal
postulando su legit imación y sus derechos políticos. hay quc accptarcomo
Con anterioridad a la refonna de 1994. hubo doctrina qu..: reputaba ioconstitu- presupuesto que. con amplitud . los temas que se enlazan a los derechos
c ionales a la fonnas scmidirectaa, por entender que entraban en colisión con el arto políticos. al derecho electoral y a los partidos se dcfinan como cuesriones
22. Nada más lejos de nuestra opinión. como lo dijinDs en ocal'i6n de la "consulta judiciables. y no como cuestiones "políticas" que evaden lajudiciabilidad.
popu lar" que se Ite\'ó a cabo en 1984 para que e l cuerpo electoral votara voluntaria- Asimi smo. la ya aludida legitimación procesal debe ser amplia y elástica.
mente por "si' o por "no" acerca del arreglo del diferendo aU$tral con Chile. para no estrangular el derecho de acceso a la justicia.

178 COMPENDIO DE Dl:IiliCHO CONSTnUClONAL

21. - Coadyuvan a reforzar nuestra propuesta:


a)en el derecho imemo. la existencia enjurisdicciÓll federal de tribu-
nales con competencia electoral Uuzgados de 1- instancia. y Cámara Na-
cional Electoral): asimismo. la dosis de cuestión constilucionaJ en la ma-
yoríade los casos que involucran as~ctos electorales, de derechos políti-
cos, y de partidos:
b) en el ordel/ imemaciol/ol. muchos instrumentos de derechos hu-
manos que se hallan integrados a nuestro ordenamiento y que tiencnjerar- CAl'tnlLO XXlII
quía igual a la de la const itución integran a los derechos políticos en el
rubro de los derechos humanos, y les disdemenjudiciabilidad mediante el l.OS PARTIDOS POLlT1COS
reconocimiento de vías de acceso a la justicia.

22. _ En el historial de nuestra jurisprudencia, nos limitamos a recordar un Su encuadre


mal nlllccedel1te ellla scntencia de la Corte lX.'Cafda en el caso ''Gascón COlli, Alfredo
y olros", de 1990. en el que se impugnaban al>1'tctos relacionados con la ref{lfl1l<l a
l. - La reforma constitucional de 1994 incorporó rorprimcra vez al
la constitución de la proviodo de Buenos Aires. no obstante lo cual a los aClores.
que eran ciudadanos convocados a vOlar en un acto e lecloral de consulta popular
texto un artículo -el 38- sobre los partidos políticos. En la constitución
vinculallle sobre dicha enmienda. se les negó la legitimación pl'()Usal activa para material exislieron desde mucho antes, y la jurisprudencia de la Corte ha-
formular sus planteas. bía dado base en el art. lOa la existencia y pluralidad de los partidos.
En síntesis. JXXIemos aventurar el juicio de que hasta la actualidad el ck:rccho
judicial no nos suministra un parámetro seguro y estable en la materia. 2. - El panido político es, para nOSOtros, un sujeto auxiliar del es-
lado (o del [Xxler) que posee naturaleza de persona jurídica de derecho
público ""0 estatal ". En la eSIl1J<:tura ¡,Iel partido hay un conjunlo de per-
sonas con calida¡,l de afiliados: una ideología política que plasma en el
programa y la platafornm partidarias: un fin ¡:K)lílico genérico que consiste
en gr<.lVitar políticamente conforme al proyecto recién mencionado, y que
¡,le modo inmediato se endereza. muchas veces. a la conquista o retención
del poder.

3. - En la dinámica de los partidos y de l poder, las relaciones de los


pan idos con órganos gubemamcmales comlxmen la categoría de relacio-
nes "exlraórgonos". que podemos dividir así:
a) relaciones en laformación de los órganos de poder. que se advierte
en la oferta de cal/didaturas para cargos de origen electivo:
b) relaciones en el ejercicio de l poder. que aparece en la composición
partidaria de dichos órganos. en las presiones que ejercen sobre el poder y
viceversa (las del poder sobre los partidos), etc.

4. - El derecho judicial emergente de la CorLe abunda en reconocí-


"
-

LSO CO\fI'13!\TJIO DE VITRE! 'liD CO!'lS [ ¡ [ UaO:"iAL Los rAII."nOOS POl.tncos L81

mientos, descripciones. ubicaci ón constitucional y garantías de los parti- d) los partidos deben hacer públi<:ocl origen y dc~{ino-de sus/oudos y
dos como propios del sistema democrático. patrimonio,
lodo dentro del marco de respeto a la constitución, lo que según nues-
5. - La rcgla n~ll[ aci{i n legal y el control de los partidos en UlI marco W rdZO· tro puma de visla obl iga a los pan idos a sustentar una ideología demacró-
n¡¡b ilidad constitucional puede llegar. excepcionalmente. en situac iones de peligro
Iica en subordinación a las inslÍtuciones de la constitución y a su sistema
r('(/{ y (/cll/uf p.ua el siste ma democrático, a negar el reconoci mienlQ de uno o m~ s
parlidos rei'lidos COlllal s is\ema. o a cancelar el que se les había deparado. Iodo lo axiológico integral.
cual presupone que e l estado asume un control "cualitativo" (o doctrinario) de los
pal1idos. 9. ~ De la letra del art . 38 se desprenden derechos como el de libre
No en vann la u(X;lrinil califica como partido hanti-:-;islcma" al que, rnin'lo!li· expresión. información>, comunicación social : el de las minorías que dan
l.1!1dosc con el sistcrlu dcmocr~tico. tiende a su destrucción mediante lo que Du\'crgcr presencia al pluralismo inlrapanidario en la estructura interna: y el de par-
Ilalll.illucha "contra" o "sobre" el regimcn (cuando la democracia c xig<: qu<: la "lu- ticipación electoral. En cuanlOa ésta hemos de señalar con mucha convic-
cha" polÍ1ica se dcsalTolk "dentro" del régimen). ción personal lo siguiente:
a) el arto 38 asigna literalmente a los partidos "la competencia" para
6. - Lus partidos. de modo análogo a In que acontece en las d C lllj~
postulnl" ca1/didatos, lo que les reconoce un fuerte nexo con el regimen
asociaciones, licncn poder disciplil/a rio sobre sus afiliados, con cuyo ejer-
electoral; pero
ddo razonahle pueden aplicar gancioncs y hasla disponer la cxpulsión,
medidas éstas que sicmpre han de quedar sujetas a evcnlual revisiól/ y b) la duda y la discrepancia aparecen cuando la mentada alusión a la
COl/lrol jud':ci(lle~·. "competencia" se interprel.Lde modo diferenle: b') para algunos. signilica
que los partidos 1IIOI/opalizall esa competencia. de modo que por fuera de
7. _ l:'u .;;uatllo al ~(lt! rtori u de pautas que sobre los partidos regi~lra d ya ellos se hau: inviable ofrecer candidaturas; b") nosotros no cnc.:ontramos
mencionaJo derecho judk ial de la Corte Suprema, bemos de afirmar que en d dise- cn el arto 38 nada que equivalga a conferir lal exclusividad monof'Ólica a
ño úoclrinario con que describimos la na tu ralCla y la función de los partidos uos los partidos, por lo que, en dclinitiva, creemos que:
inspiramos fundamentalmente en su bagaje, para as, delinear la inlermediaóólI
quc, <:11 cuanto muili{/~s del estado, cump len cnlrc gobernantcs y gobernados. e) además de las cand idaturas partidarias, el pluralismo democrático
deja espacio ntlonable para que la ley adicione la posibilidad de Olras
calldidmuras no (fUSIJidadas por un partido.
El artículo 38
10. - Antes de la rcfOnlla de 1994, el fallo de la Corte en el caso
8. - Mucho de lo recién dicho ha eJicontrado asilo normati vo en el "Ríos Antonio J. ". del <lila 1987. sostuvo que no era inconstitucional el
ano 3R de la conslilución, que dcline a los partidos como ;/lSlifLIciOfles sistema legal que otorgaba a los partidos en forma exclusiva la nomina-
fUl/dame/ltales del si.wema democrático y. desde tal platafomla. afiade ción de candidaturas para cargos públicos electivos.
que:
a) su creaci{~ n y el ejercicio de sus actividades son libres: 11. - Hay que dejar aclarado que, además de las interpretaciones en
tomo de la nominación dc candidatos aludida en dan. 38, el art. 54 consa-
b) se les gar(l1Itiza la organización y funcionamiento democráticos. la gra expresamente que para la composición dcl senado con tres senadores
representación de las minorías, la competencia para postular candidatos a por cada provincia y tres por la ciudad de Buenos Aires. dos bancas co-
cargos públicos electivos, el acceso a la infomlación pública y la difusión rresponden al partido que obtiene mayor número de \'OlaS y /a resfUllfe
de sus id~as ; al que le sigue el/ número de \lOtos. Dc esta forma, para la formación del
c) el estado contribuyc al sostenimiento económico y a la capacita· senado parece claro que la conslÍtución depara a los partidos el monopoli o
dón de sus dirigentes: de las candidaturas .



182 COMPE.''DIO DE DERECHO CO:\STlTUClONAL

12. - Otros anículos de la constitución obligan a que haya determillada pre·


• sencia Pllrlidariu en las estructuras gubernamcJUaJes. Así:
a) el arto 85 al diseilar la AHdilor(a General de la Naci6n:
b) el arl. 99 ine. 3° al referirse a la Comisión Bkameml Pemlllnenle;
e) en el régimen de bflllolage para la elección directa del presidente y vicepre-
sidente de la república.

13. - Del panorama expuesto se desprende. con carácter de princi- CAPhuLO XXIV
pio constitucional, que debe haber partidos, y que es la sociedad la que
deparaeJ ámbito de su creación y funcionamiento libre y democrático. LAS GARANTIAS

La seguridad

L - Hay que re<:ordar que el constitucionalismo moderno o clásico


procuro desde su inicio organizar al estado en defensa de las lilxrtades y
los derechos del hombre. lo que equivaJe a decir que ha tendido a asegurar
al llOmbrefrente al estado. Todo el andamiaje constitucional se armó para
proporcionar seguridad y garamías, tal como lo testimonian las dos par·
tes tradicionales en que se divide la constitución: la pane dogmática con su
declaración de derechos, y la parte orgánica con la llamada división de
poderes.
El baluarte último de la seguridad jurídica es, sin duda, el poder judi-
cial.

2. - Si bien en sentido amplio todo el ordenamiento jurídico gara11li-


za las libertades y los derechos, la acepción más restringida de lo que es
"garantía" apunta a la disponibilidad que tiene la persona para movilizar
al esUldo en protección suya, tanto para evitar ataques como para restable-
cer la situación anterior al ataque. o para compensarle el daño sufrido, sin
dejar de lado la sanción al transgresor.

El derecho de la jurisdicción

3. - Nuestra Corte elaboró el derecho a lajurisdicción como lo que


ahora se denomina derecho de acceso a la justicia; es decir, el derecho de
acudir a un tribunaJ en procura de justicia Este derecho de la persona cali-
ficada como "justiciable" es recíproco de la función del poder que consiste
\84 Co.\1I'f:.NDlO D" DERECHO CONSTf!lJC10:"AL 185

en admillis(rtlr justicia, y que está a cargo de los órganos del poder judi- 9. _ El derecho a lajurisdkciÓll eltige que la pe~naque. con sun·
cial. Lo que en rigor se busca es que. mediante ese pri mer paso de acceso a ciente razonabilidad , pretende acceder a W1U vía procesal para el reconoci-
un tribunal. seguido por el desarrollo del proceso judicial (debido proce- miento y la tutela de sus derechos, disponga de lo que se denomina legiti-
so). el Justiciable disponga de tutela judicial efectiva. mación procesal acliva, como capacidad para provocar y tramitar el pro-
ceso, y/o para intervenir en él con eficacia.
4. - Queda claro que acudir a un tribunal es pisarcl umbral : hay que
recorrer en segu ida las c tapas del proceso. para culminar en la se1llenc;a 10. - El plexo de derechos relacionados con el acceso a la justici a
que resuelva con j usticia la pretensión del justiciable. cuenta con reconocimiento en varios tratados dI! derechos 1/UllulJIOS de
jerarquía constitucional.
5. - La Corte tiene dicho en su jurisprudencia que todo justiciable
tiene derecho a que no se excluya compulsivamenle la intervención sufi -
ciente de un órgano de l poder judidaJ. Los "jueces naturales"

6. - La de/el/sa en juicio c:xige. entonces, una instanci ajudicial como 11 . - La garantía de los "jueces naturales" tiene cJ siguiente signifi-
mínimo cuando se trata de resol ver controversias entre paniculares. En el cado: para cada causa o proceso jurJ icial "su" j uez natural es el tribulla!
proceso IJl!llO!, esa instanci a ha de ser doble, porque así lo exigen t ralados judicial cuya creaciól/, jurisdicciólI y compelencia provienen de ulla ley
dcderecho..'1 humanosconjerarqu ía constitucional: esto significa que ha de alllerior al '·hecho" que da origen a aquella causa (o proceso).
ex.istir recurJO ame un juez o tribunal superior. El arto 18 dice que nadie puede ser juzgado por comisiones li:speda-
les, ni "sacado" de los jueces dcsignados por la ley antes del hecho de la
7, - Los llamados "métodos alternati vos" para di rimi r con mctos no causa.
pueden imponerse obligatoriamente; por ende, es inconstitucional la inter-
ILa garantía del juez natural rigc no sólo para el proceso penal, sino
vención forzosa de árbi tros o amigables componedores.
para toda clase de procesos.
La mediacíó" prejudicial obligatoria demanda, a nuestro juicio. que
no demore demasiado la promoción del proceso judicial (si acaso la me- 12. - Nuestro derecho constitucional consagra: a) la ullidad de ju-
diación fracasa), y que la instancia de mediación y el medi ador no pene- risdicción, que radica exclusivamentc en el poder judicial , con tus solas
nezcan ni dependan del poder ejecutivo. lo que implica que su organiza- eltcepciones de los/ueros reales y lasjurisdicciolles especiales (para cuyo
ción y fW1cionamiento se han de radicar en la esfera mi sma del poder judi- caso siempre debe queJar expedita una última vía de acceso a un tribun al
cial. judicial; b) la igualdad de todos ante lajurisdicción. lo que elimina a los
jueces especiales, tanto a tflulo de privilegio como de castigo.
8. - Para satisfacer el derecho a la jurisdicción como correJati vo del
deber estatal de admini strar justicia. el estado debe: a) establecer los 6rga· 13. - Con la garantía de los jueces naturales se conecta:
I/OS (tribunales) del pOOcr judicial; b) asignarles jurisdicci61/ y competen·
cia: e) dictar las lIonllas de procedimielllo. a) la prohibición del arto109 dirigida ul poder ejecutivo. a lona COll la
similar que para el estado de silio establece el art. 23;
Tales órganos deben ser los 'jueces naturales" de! arto 18 de la constitución. b) la prohibición del art. 29;
los cuaJes. de no edl\ir nwnlll. procesales para tramitar un proceso, hall de inge- c) el principio dc divisiól/ de podere.~, que veda loda clase de delega-
niarse para cubrir ~a carencia normativa, como lo hizo ejemplarmente ta Corte cuan- ción de la función judicial IXIr parte de sus órganos a otros cxtraI1os:
do en 1957 y 1958 dio curso a la acción de amparo contra actos de autoridad y de
particulares sin que entonces hubiera norma alguna en la r.:onstituclón y en ta legis- d) una serie de pautas sentadas por lajurisprudcnciade la Corte, con-
lación. forme a las cuales 110 se puede excluir compulsivamclIlc lo il/len'el/ció/I
186 CO....PENDIO DE DERECHO Co,""S 111 UaONAL
187

de UII tribunal judicia l para solucionar co1ltrovers;as individuales de 19. _ Para los tribunales de al:ada rige el mismo principio: han de
IIatllraleza jurídica. sercrcados con j urisdicción y competencia por ley anterior al "hecho" que
dio origen al proceso en la instancia inferior. (Por excepción, admitimos
14. - La garantía dc1jucz natural obliga también a las provincias en que por ley posterior se ruiada una instancia de alzada que antes no existía,
su organización judiciaria, y beneficia a los justiciables que intervienen en porque así se mejora la jusliciabilidad.)
procesos ante los tribunales locales .
• 20. _ Los denominados ji/Cros reales, de ma/eriu Q de CllUsa, no son incons-
15. - El Pacto de San José de Costa Rica y el Pacto Inlcmacional de titucionales ni vulneran la garantía del j uez natural. E.I más importante de ta les
DerechosCiviles y Políticosconlienen cláusulas afines con la garantía del fueros es la jurisdicción mili/ar. para cuya constit ucionalidad la Corte e,;ige que
juez natural. sus sentencias sean susceptibles de revisión por un tribunal jud icial.

La sustracción prohibida La inmunidad de declaración

16. - Cuando el art. 18 prohíbe "sacar" a unjusliciabledc sus jueces 21. - El ort. /8 consigna que nadie puede ser obligado a declarar
naturales ("designados por la ley antes del hecho de la causa") hemos de comra sí mismo. Según la Corte. esta garantía rige solamente en materia
cnlCnder que: a) "después" del "hecho" que va a dar lugar (en el futuro) a ¡:w:nal. pero --discrepando con tal interprctación- nosotros afu-mamos que
uoa causa judicial. o que b) ya ha dado lugar a una causa (iniciada o pendien- el arto 18 no contiene tal limitación y que. por ende, la prohibición debe
te). e) 110 se puede cambiar o alterar la competellcia de/tribul/al Guez extenderse a todo tipo de causas, aunque no con el mismo rigor. Por eso
natural) al que le fue Q{orgada por leya/llerior a aquel "hecho" para trans- creemos que en el proceso no pena] se puede pedir la absolución de posi-
ferirla a otro tribunal que recibe esa competencia "después" del hecho. ciones (prueba l.'()nfcsional) a lacontrapartc. pero no puede tenérselas por
absueltas cn rebeldía.
17. - Si este es el alcance q ue alribuimos a la prohibición de "sacar", resta
a~adir que la prohibición de SOIll~ t cr a algu ien a enjuiciamiento por comisiones Por supuesto que la no autoinculpación signif ica tamb ién dt:stituir de valor
especiales implica impedir qu~ se crecn organismos ad-llOc o ex-post [aclo (des- probatorio a la declaración prestada bajo ooacción. apremios, us.o de drogas .para
pué.~ del hecho) o es peciales para juzgar determinados hechos o a detenninadas indagar la conciencia, cte. Protege asimismo la relación confidencial entre el c1lenle
personas, sin la generalidad y permanencia que son propias de los trib unales judi- y el profesional.
ciales.
22 . _ La exención de declarar contra sí mismo da base para deparar
18. - La jurisprudencia de la Corte. más benigna que nosotros en su al periodista o comunicador social la garanLía del secreto de las ¡ue1lfes
interpretación en tomo del alcance que reviste la prohibición de "sacar". de ilf!omwciófl.
ti ene establecido que no es indispensable que un tribunal, para satisfacercl
requisito de "juez natural" de una causa, haya recibido jurisdicción y com- 23. _ En posición muy solitaria, sostenemos que no se puede obligar
pctcncia por ley anterior al "hecho" que da origen al proceso. Pero, de a nadie a prestar el propio cuerpo para obtencr una prueba (por ej .. la
todos modos, hay W1 "momento" procesal después del cual ya no es viablc cxtraccióncompulsiva de sangre).
sustracr el proceso al tribunal que está conociendo de él; ese "momento"
es la traba de la litis (para el proceso no penal); para el proceso penal
podría ser --como equivalente- la acusación. La inmunidad de arresto
Asimismo, no es posible retrotraer el proceso a etapas procesales vá-
lidas ya cumplidas para privarlas del efecto producido. 24. _ Nadie rJUede .~er arrestado si1/O en vinud de arde" escrita de
188 COMPENDIO DE DEKI:.CIIO COl\:.írnJctuNAl I...ASOARA.w IAS 189

a,lIloridad eOll/pe/eme. Esta cl áusula del ano 18 no define cuál es la auto- bi{(/leralidad Ocontradk:ción. para que cada una de aq ucl las panes t.t!nga
ndad CO~lPCLCntC. pero se interpreta que, como principio, solamente lo es derecho de defensa y de control de los aclOS procesales propios y ajenos; e)
[a {/lIIondad judicial. y únicarncnlc - por cxcepci6n- la que no lo cs. el pn"l/cipio de co"gruencia prescribe que la sentencia no se puede apar~
. Nuestra Cone tiene dichu que las dos únicas fi gu ras que en la consti. tar, cn lo que resuclve. de las pretensiones articuladas por las panes. ni
tuclón dan b~sc a la privación de libertad son el proceso pellal y el estado para excederse ni para omitir algo respecto del malcri al que es objeto del
de .tilio (ver, para ése. el art. 23). proceso .

E~ j.urisr~'Udcl1cia ~eciellle. la Corte ha negado que las cámaras del congre~o y En maleria 1/(1 penal. el proceso puede sustandarre en rebeldía cid dcm~nda­
Ja~ l.egl~latura:. loc.11e!( Impong-an arrestos a lcrcero¡ invocondo ofensa o lesión a do, siempre que se hayan cumplírJo las formas lcg~les de la notificaci6n de la de-
pnvlJegJOs parlamelltarios. manda; en cambio, I."n el p({)(X!iO l>enalla rebeldía obsta a la trDll1ilaciÓlt.

25: -:- Ento:nden'K)s que ITlI.:diamc ley razonable se puccle atribuir a la IIII/(lr;. 29. - La duración del proct.:SO ticne que ser razonable a tcnor de
dad po~/{;UlII~ la..:.u lt3d cxcepciolllll de dt!lcLlcr personas en ca¡;o~ muy especiules Je cuál sea la naturaleza de la pretensión que, como sicmpre, requiere gozar
u~~~n_CJa. ~dehto~ 1/1 rra~clI!ti,. i~diCio ~'chcmcnte de delito) COI1 la úhligación de po- de lutela judicial efi caz; en consonancia, la sel/lel/cia se ha de dictar en
lh;J!h de inmedIato a d1Sposlclón d~ Juez competente.
tiempo también oportul/o para que sea capaz de rendir utilidad y cficaci¡¡
. ~'~ org,c~lIismQs .de ~u lldlllin/.ftmción carecen de facultad jurigdicdonal para al juslici able.
Imponer san!;IUJII.:S pnvatlvas de libertad que, por su duración, equivalcn!l penas y
que carecen de posible revisión judicial. Como resumen, queda bien visible el derecho del j usticiable a 10gf¡¡r
. Desde el fallo de la Corte del año 1957 en el caso "Mouvi<.:l", los edie/(u poli-
una dccisi6njudicial (sclllcnda) rápida -" efica:.. Tal dcrecho se viola cuandu
elalel' no pueden establecer sanciones privati\'as de Iihertud. los tribwlalcs dilalan sin término la decisión de cuestioncs planteadas ante
ellos.
. 26. -yarios tralados de derec/¡oJ humano!i con jerarquía constitu-
cIOnal contIenen normas cquivalcntes a éSla que comentamos de nueStro 30. - La "formalidad" (o "formas") del proceso no ha de incurrir.
ano 18. ¡x>r exceso, en lu que la Corte dcscalilica como exceso ritual mmliJie!ilo.
Ello porque la verdad material u objctiva liene que prevalecer sobre la
verdad formal.
El debido proceso
3 l. - Las formas regulares y básicas del debido proceso son condi-
. . 27. - El punto de arranque se halla, nuevamente, en el arto lB: es ción indi spensable para que la scll tcncia que pone fin al proceso goce de la
/f/vrolable la de/el/Ja el/ juicio de la persona y de los derechos. En su inmutabilidad y del efeclo de la cosa ju::.gada, que se convierte así en un
brevedad, esta frase condensa el núcleo y contenido esencial del debido colllcnido del derccho de propiedad inviolable.
p~oceso, ~ue es un aspecto del derecho a lajurisdicción y a la tutelajudi-
ctal efcctl va. 32. - Para dictar la semcnda, los jueces tienen obligación de suplir
°
el derecho que las partes no le invocan que lc invocan mal; ciJo porque
28; ~ El esquema sería éSle: a) lodo jusliciable licne derecho a un así Jo establece el principio del "iura novit curia". En cambio, en CualllO a
procedlllllemo que no es cualquiera, sino el "debido": b) si no hay ley los hechos, el juc7. deoc atenerse a los alegados y probados por las partes.
razonable.qu~ lo tenga eslablecido. el juez. de la causa debe arbitrarlo; e) con miras a conocer la vcrdad material u objetiva.
en la tranUlaclón tlel proceso, eljusliciable ha de disponer dc oportunidad
para su part~cipaCiól/ útil y suficlclllc: d) cuando hay disputa entre partes 33. - El debido proceso se ex.tiende asimismo a la segl/llda jl/SU/fl-
que coptroVtenen sus pretensiones Oderechos. el debido proceso ex.ige la cia. cuando la hay. Se considera segunda instancia lactapa procesal que, a


L ASOAII.M'IAS 191
190

continuación de la primera. se propone revisar lo resuelto en ella: si la ley ción ante legisladollcs de emergencia). así eomo de tos den vados de oonvcnios
abre una tercera instancia. hay que in volucrarla latamente en lo que llama- colectivos de trabajo.
mos la instancia IIní/riple.
En el proceso 110 pellal. no es inconstilucional la instancia única: en el El derecho procesal constitucional
proceso pellal. hay tratados con jerarquía constitucional que obligan a que
haya doble instancia. ' 36. _ Actualme nte, ha ~:obrado auge cl llanladO dcn::cho procesal con."-

Asimismo, cuando hay aClividadjurisdicdonal a cargo de organi smos titucional. ¿D más bien derecho constitucional procesal?
o tribunales admillisrraIivo$, al igual que a cargo de tribul/ales mili/ares, Con una u otra denominación. se trata de e ncarar desde el derecho
es indispensable que de lo que en esas instancias se resuelve haya una constitucional IOdo cuanto precisan los derechos para cncarr~lI~sc
alzada jud icial de revisión. procesal mente ante los tribunales de justicia: vías, formas. procedlllucn-
Cuando la doble inslallcia no es exigible. pero está establecida en la tos. garantías que den curso a los derechos para su defensa y su tutela.
ley. resulta inconstitucional impedir el acceso a cll a.
37. _ Puede llamarse ju risdicci6n constiluciol/al a la administració.n
Este argumento concurre para decir que el "pcr saltum" o salto de
de justicia que. mediante procesos y recursos, presta cobertura a la consti-
instancias para llegar de esa manera hasta [a Conc Suprema es inconstitu-
cional. a menos que esté previsto y reglamentado legalmente con suficien- tución y a los derechos en el sistema garantista.
te razonabilidad excepcional.
:\8. _ Ya dijimos que para su efoctividad. este sistema c~i.ge q~ quien
pretende la tu tela judicial de sus derechos di sponga de legllllllacIÓIlI"0-
34. - Aunque los derechos y garantías están conferidos a los parti-
culares fn;nte al estado, hay que tener muy en daro que cuando el estado cesal para hacerlos valer.
liliga en un proceso como un justiciable equiparable a cualquier otro, se le 39. _ La jurisdicción consti tucional cuenta hoy ~n un últ.i~lO espa-
ha de respetar y garantizar el debido proceso y la defensa en juicio. cio en la jurisllicci6n supraeswwl cuando hay organismos ~ tn bunal:S
internacionales a los cuales acudir después de agoLar las vías mlemas. En
el sistema imeramerica/lo existe la Comisió" Imeramericw/a de Dere-
La irretroacth'idad de la ley elws Humanos v la Corte Imeramericmw de Derechos Humanos.

35 . - La retroactividad de la ley susci ta problemas consti tucionales,


y aun cuando la constituci ón no contiene -salvo en materia pcnal- norma
alguna que resuelva expresamente cuándo la retroactividad queda prohibi-
da, contamos con una pauta en la jurisprudencia de la Cone. conforme a la
cual el principio de que las leyes 110 SOIl retroactivas sólo e mana de la ley.
pero adquiere rango cOflStituc;ollal cuando una ley nueva viene a privar
a alguien de U1¡ derecho ya incorporado a su {JaIrim ol/io, porque en ese
caso transgrede la garantía de inviolabilidad de la propiedad del arto 17.

Est~standard resguarda ac tos administrativos pasados en autoridad de cosa


juzgada administrati va: ac tos procesales válidamente cumplidos en un ju icio con-
forme a la ley e n vigo r al tiempo de llevarse a cabo; y los derechos y obligaciones
emergeotes de contratos válidamente celebrados ~ntre particulares (salvo la execp-

CAPtruLO XXV

LAS GARANTlAS PENALES

Ley y juicio previos

1. - La garantía penal específica del an 18 reza así: ningún habi-


faflle de la lUIción puede ser pellado sin juicio previo fUI/dado en ley
(llIterior al hecho del proceso. Sintetizado, quiere decir que "no hay delilo
ni pena sin ley pena] anterior",
El desglose de la norma es éste:
a) debe existir ley del congreso ames del "hecho": a') en materia pe-
llalla competencia legislativa es exclusiva del congreso (art. 75 inc. 12) y
prohibida a las provincias (art. 126); a") la ley debe des<.Tibir e l tipo delictivo
(ilícito penal) y contener ¡apena (sanción); a''') el poder ejecutivo no pue-
de dictar decretos de necesidad y urgencia en materia penal, ni el congreso
delegarle facultade s legislativas en ese ámbiLo, como tampoco es viable
que mediante el derecho de iniciativa legislativa popular se dicten leyes en
materia penal (ver aJlS. 99 ine. 3°,76 Y39);
b) la ley aludida en el ine. a) debe ser previa "al hecho del proceso".
entendiéndose que tal "hecho" es la conducta humana que coincide con la
figura legal de la incriminación; Osea. aquí se consagra la ¡rretroactividad
de la ley penal:
e) es menester. todavía, eljuicio previo a la condena; en tal juicio, el
debido proceso exige cuatro etapas: acusaci6n. defensa, prueba, y sef/-
tef/cia;
d) la semencia tiene que estar fundada en ley; tal ley es la que hemos
referido en los mcs. a) y b).

2. - Hasta que se dicta sentencia y ésta queda nrrnc. toda persooa tiene dere-
194 COMPENDIO DE DERECHO CONS mUClONAL LAS GARA.vr1AS ffiNAI..ES 195

ello a ta presunóón de inocenci!l. Es éste un derecho implícito en la cQnsliluciótl, que, en orden a la duracióf/ razonable del proceso penal, la garantía de la
que consta en algunos tralJ)dos de derechos humanos con jerarquía constitucional. defensa en juicio incluye el derecho de todo imputado a obtener un pronWl-
El ¡lid/lito dispuesto mienlras pende el proceso penal es ioconstitucional, a ciamiento que, definiendo su posición frente a la ley y a la sociedad, ponga
menos que el procesado lo consienla o lo solicite. término del modo más breve posible a la situación de incenidwnbre y de
restricción de la libcnad que componael enjuiciamiento penal. O sea que
3. - Los delitos del derecho illlemacional que se denominan "de existe un derecho a librarse del estado "de sospecha" que, no obstante la
lesa humanidad" o "contra el derecho de gentes" plantean el requisito de la
presunción de inocencia. deriva de la acusación de haberse cometido un
ley previa de la siguicllIc manera: a) si el tralado describe claramente una
delito.
conducla típica como delicluosa, la " ley previa" queda satisfecha; b) como
el tratado no establece la sanción penal, hace falla la ley interna !ambién
7. - El juicio penal en plazo razonable cuenta con normas en traJa·
previa al hecho. que fije la pena; e) el estado queda obligado a dictar tal h.:y
dos de jerarquia constitucional.
sancionatoria para dar efectividad al tratado.
8. - Respecto de la pella, vale agregar que: a) no l¡ay pella sin cul-
El proceso penal pabilidad. lo que implica que la responsabilidad penal presupone como
condición que el sujeto condenado haya ejecutado culpablememe un acto
4. - El proceso penal no tiene que ser entendido como instrumemo prohibido; b) la pena espersollal. o sea que no se transmite a terceros (ver
para penar, sino "para conocer si se debe penar o no". Bn. 1l9).
Es necesario que el ministerio f iscal ejerza la acción penal con la que
9. - El error judicial cuenta con disposiciones en tratados de jerarquía cons-
delimite el objetodel proceso. En los delitos de acción pública (que titularil..a titucional para reparar el daño sufrido por quien fue mal condenado, o fu e ilegal-
el minislcrlopúblico) scdebe reconocer a la víctima la legitimación proce- mente detenido o preso. Pero nuestra Corte tiene dicho que la res¡xmsabilidad del
sal para querellar. estado por error judic ial sólo es "jable una vez que el acto judicial originame del
El principio de bilmerafidad, contradicción o congruencia requiere daflO es declarado ilegítimo y dejado sin efecto, porque hasta ese momemo subsiste
que en el proceso penal se legi li me al impU13.do como aulordel delito; que la autoridad de la cosa juzgada.
no se excluya la ineludible intervención del fiscal, y que se dé cobertura al
debido proceso y a la defensa en juicio.
El artículo 118
5. - Laprivaci6n de libertad durallle el proceso solamente es cons-
Litucionalmcnte viable para asegurar, como medida cautelar, que el impu- 10. - El art.l 18dispone que los juicios criminaJes ordinarios se ter-
tado no obstruya el proceso ni eluda su comparecencia, todo lo que -con- minarán por "jurados", luego que se establezca en la república esta institu-
fonlle a tratados de jerarquia constitucional- significa que la privación ción. Hacen 13.mbién alusión aljuicio por jurados los ans. 24 y 75 iJlc. 12.
precauloria de la libertad sólo debe motivarse en suficientes razones pre-
ventivas que guarden relación con el fin del proceso penal y el descubri- La forma en que está redactada la frase citada del art. 118 nos lleva a pensar
miento de la verdad. En todo los casos en que proceda, la duración de la que la constitución ha concedido al congreso un espacio temporal ampLio y elástico
pd vación de libertad ha de ser razonablemente breve. La índole del delito, para decidir en qué momento considera oportuno y conveniente implantar el juicio
su gravedad, y la pena que la ley le asigna, no son por sí solos un motivo por jurados. 10 que de ser asr no permitiría afirmar que la inexistencia deL jurado
equivale a una omisión inconstitucional. Pero, evidentemente. queda la duda de
razonable de detención preventiva. hasta cuándo es razonable suponer que se prolonga el plazo indeterminado a fa\'or
del congreso, porque en algún momento se habría de reputar extinguido y. por ende,
6. - La jurisprudencia de la Corte Suprema tiene sentada la pauta de configurada la inconstitucionalidad por omisión.

. "
• •

196 COMPE..'TIIO DE DEJU":.Cl1O CONSTrruOO~Al LAS GAII.AA,.fAS pe.·ALES 197

11. - El mismo arl. J /8 establece que el juicio penal se ha de Su stan~ llamada "rcfomlatio in pcjus" (o reforma en perjuicio), y se enuncia así:
ciar en la misma provincia donde se cometió el delito. Tal regla se conoce el uibunal de segunda instancia (o de alzada) al que recurre solamente el
como "forum delicti commissi". o sea: competencia territorial de los tri- inculpado pura que se mejore su si luación penal, no puede empeorar o
bunales penales determinada por el lugar donde el delito fue perpetrado. agravar su situación; esto último sólo es viable si concurre recurso acusa-
torio del fi seal.
La regla requiere una interpretación elástica que, sin desvinuar el recaudo de
inmediatez geográfica, peÍ-mita distribuir ra 'onahlcmntc la competencia tcnitorial. 15. - Una de las más palenles lesiones a las garaflllas propias del
y dio tanto para los tribunales provinciales como para los federales. En relación proceso penal se consuma cuando se condena por un hecho diferente del
con estos últimos, sería illconslitucional un lrihunal penal con competencia territo- que ha sido objeto de acusación y prueba.
rial en todo el país.
16. - Si en vczde delitos se trata de faltas y conlral'i?nciones. y el juzgamiclI!Q
12. - Finalmente. el ar/. /18prcscribc que si el delito se comctefue- se halla a cargo de organiSll'K>S administrativos con competencia jurisdiccional, es
ra de/territorio argemino "cOntra el derech o de gellles", el congreso de- imprescindible 4ue exista una "ía de posible m<isi6n judicial respecto de la san-
be determinar por ley especial el lugar en que se ha de seguir el juicio. ción impuesta.

Por una razón de sentido común tenemos dicho, a la inversa, que analógica- 17. - El principio de la ley pe/lal más benigna. que la CarIe consi-
mente debe aceptal'Sll quc si el delito contra el derecho de gentes se comete ••m terri- deraba de rango solamente legal (art. 2° del código penal), tiene desde
torio argentinu, puede existir jurisdicción a favor de un tribunal extranjero. Por ende, 1994 jerarquía constitucional por emanar de tratados que por el arto 75 ¡nc.
en ambos supuestos no rige el principio de territorialidad para los delitos contra el 22 se hallan a ese nivel.
derecho de gentes. equiparables a los de lesa hll1/U¡nidtld.
Las dos caras del principio son: a) la "nueva" ley penal más benigna
es retroactiva; b) la ley "anterior" más benigna es uffraacliva.
Una serie de pautas y principios
18. - El principio del " /10 11 bis in ¡de"," también cs tomado en cuen·
13. - En el proceso penal l/O puede exiSlir la iJl.'ilallcia única. Al la por tralados con jerarquía const itucional, aunque con distinto alcance;
contrario,taJ como tratados con jerarquía constitucional lo ordenan, se ha en efecto, según el Pacto dc San José de Costa Rica el inculpado "absucl·
de poder recurrir el fallo ame juez O lribunaf sl/perior. De ello se des- to" no puede ser procesado nuevamente por el mismo hecho. mientras el
prende que en el proceso penal ha de existir instancia doble (o múltiple: PaclO lmemacional de Derechos Civiles y Políticos impide el posterior
más de una). juicio tanto si el inculpado fue absuelto como si ya fue condenado.
La jurisprudencia de la Corte posterior a 1988 ha dejado aclarado que En el traslado a nuestro derecho constilucional, opinamos que el "non
la instancia recursiva debe existir al margen del recurso extraordinario. lo bis in idem" abarca la doble hipótesis de una anterior absolución y una
Que significa que si del fallo penal sólo se pudiera acudir a la instancia anterior condena.
extraordinaria de la Corte. el recaudo de la instancia doble no estaría satis-
fecho. 19. - En materia de política crimi"al, a menos que se trate de deli-
tos que están previstos y tipificados cnla constitución, O que tienen fucnte
Parece lógico inferir que este derecho de acudir a una instancia de
internacional. es el congreso el que escoge razonablemente cuáles son los
revisión está dcparadoafavordeJ il/culpado, y no del mini sterio fi scal. lo
bienes jurídicos a los que va a dar cobertura pellal median le la il/crimi·
Que implica que a eSle último la ley puede conferirle el derecho de recurrir,
• nación y sanció" de conduclas que los lesionan. lncriminar o no incrimi·
pero Que de no ser asf no existe violación constilucional.
nar es, pues, una competencia del congreso.
14. - En el proceso penal rige asimismo el principio que protube la Ahora bien, en esa selección hay que dejar bien admitido Que el COI1-

199
198 CO~1PENOIO DE DERECHO CO:"lSlTIlJQOl"AL

greso puede incurrir en Ülcol/slitucionalidtld, lo que acolllecc en cualquie- Los delitos constitucionales
ra de los dos campos: el del tipo penal, y e l de la sanción penal. En el
primero. ello ocurre cuando incrimina conductas que penenecen al ámbilo 25. - La constitución trae cinco normas que tipifican conductas
de la ;1/Iimidad o privacidad (lo que seda, a nuestro juicio, convirtiendo en deliclUosas, pero no establecen la sanción penal. Son los arts. /5,22; 29,
delito la tenencia y el (,.onSumo personales dI! drogasen dosis mínimas): y 36 Y 119.
en el segundo cuando la pena no guarda proJxxción razonable con la con- El más llamativo es el arto 29, que tiene una ruene raíz histórica en
ducta delictuosa. ' cuanto incrimina conductas que fueron propias del perlodo corrcspondien.
te a la tiranía de Rosas.
20. - La pena de muerte siempre es inconstitucional en nuestro
derecho. Hay tratados de jerarquía constitucional que prohíben restable- Así como dijin.,s que la política criri1lnal del congreso es la que dedde qué
bienes jurfdicos van a rt:cibir tutela penal. hemos de reilflrrnar qlle cuando la cons-
cerla en los estados que la han abolido, o que impiden extenderla a delilOS titución contiene delitos, In leyeslá obligada a liujudicarles la peria corresportdiell-
a los que la ley inlerna no les adjudica aClUalmente lal sanción. te. Asimismo, la ley penal no puede alterar la descripción típica de las condudas
que la constitución incrimina en los artículos antes citados.
21. - La ejecución de fa pella no es un mero problema de política
criminal , porque la condena guarda nexo con múltiples derechos y garan-
tías, y excede el marco de una mera cuestión ¡xnitenciaria. Por ende, el
tribunal que aplica la pena, u otro competente. ha de asumir o retener el
cOlllroljudicial necesario, tanto a los fines de una eficaz defensa social y
de la seguridad, como a los de tutelar la dignidad y los derechos del conde-
nado, y vigi lar las condiciones de vida en su encarcelamiento.

22. - En tratados de jerarquía c01/stituciOlwJ se alude a la finali-


dad de refomlu y readaptación socia] de los penados, a la vez. que se obliga
a separar a los procesados de los condenados.

Las prohibiciones constitucionales

23. - Ha de tenerse en cuenta la serie de pro/¡ibicio"e,f que conllcne


la constitución en materia penaL As(;
a) están abolidos los tormemos y los azotes Cart. 18);
b) está abolida la pena de muerte por causas polfticas (ídem);
e) eSlá abollda la qor¡fiscació" de bienes (art. 17);
d) las clfrceles serán sanas y limpias, para seguridad y no parac.astigo
(an. 18).

24, - Hay tratados de jemrqufa cOllstituciolla! que prohíben la tor-


tura. y las penas o los tratos crueles, inhumanos o degradantes.

CAPlruLO XXVI

LAS LIMITACIONES EN EL SISTEMA DE DERECHOS

Las limitaciones permanentes y las ex~epcional6'i

J. - Es un axlomaconSli lucional el que asevera que los derechos 110


SOI/ absolutos silla relativos, lo que presupone que: a) lienen límites por-
que son onto16gicsOlcntc "limitados". y b) son "limitables" por las normas
que, a tenor del art. J 4. reglament an su ejercicio. Todo d io es consecuen-
cia natural de un dalO real: sociológicamente. hay derechos porq ue hay
convivencia societaria entre las personas que titularizan enlIc tiÍ esos dere-
chos.

2. - Las limitaciones a los dcrt;chos son de dos clases: algun a.. son
pemlOlIemes. y otras son excepcionales y tnl1lJitorias. Mienlrlü a los dere-
chos se los debe interpretar siempre con criterio amplio. a las limitaciones
se las liene que interpretar de manera restrictiva.

3. - En el derecho constitucional se hQ acuñado la expresión "poder


de policía" (police power en el derecbo norteamericano) para aludir a la
competencia limitativa de los derechos, y se lo divide según dos concep-
lOS: a) el concepto amplio, propio del "bread and plenary" de Estados
Unidos. incluye en el ámbito del poder de policía a rooas las limitaciones
de que son susceptibles los derechos; b) el concepto restringido, en cam-
bio, s610 incluye las limitaciones que, con un objetivo bien específi co, tien-
den a proteger la salubn'dnd. la moralidad y la segu ridnd públicas,

4, - Si se adopta el concepto amplio, creerros que estamos ame el poder del


t!stado a secas. por lo que no vate darte un nombre eSpt..'Cial con ta expresión "poder
de polida", Si se adopta el concepto restringido. tiene sentido usar una denomina-

202 COMPr,XDIO DE DERECHO CONSTmJClO:O<AL LAS UMITACIQNI''s El'· EL SISTEMA DE DERECHOS 203

ci6n específica, porque nos hallalllJs ante una porción o un segmento dd poder las emergencias como situaciones de e:t:cepciófI. o a1/om/afes. o criticas .
o;:statal. Lo que resulta más sencillo es desdoblar el tema para abordar: a) las emer·
gencias como acontecimientos reales (por ej .. la gucrra, los desórdenes
5. - El poder de policía esUiclO no consiste únicamelllc en la facul- domésticos, las cri sis económicas, etc.): b) los ;,witutos de emergellcia
lad de dictar normas, sino que ru1adc todo acto de autoridad que sea condu- qut: se ponen en vigor para conjurar y sUJX!rar a las cmergencia.~ (por ej., el
cente al fin de proteger la salubridad, la moralidad y la seguridad públicas. estado de guerra. el t:stado de sitio. la ley marcial, la suspensión de garan-

tías, los remedios innominados, etc.) .
6. - Cuando se adopta la tesis amplia y. por ende, poder de policía
significa (oda clase de limilación a los derechos por cualquier objetivo de 10. - Al trasladar este breve esquema a nuestro derecho cons\i tucio--
bienestar. parece que, como principio, la compctcnciaes propia del eswdo nal . encontramos en la L'Onstitución formal I a mención de dos emergencias:
federal en virtud de los art s. 14 y 28. Cuando se loma partido por la tesis a) la guerra (ataque exterior) y la cOllmoción imema; y b) un instituLO de
restringida. la salubridad. moralidad y seguridad públicas incumben, en
principio, y primariamcmc, a lasjurisdicciolles focales.
emergencia común ti ambas. que es el estado de sitio. El "estado de í!.UC-
era" como instituto habilitado para una emergencia bélica no Cütlsta expre- -
En convergencia, y como tesis personal favorable al criterio estricto, samentc ni tiene denominación. pero surge implícitamente de!as compe-
hemos de decir que si bien la competencia es en principio local. el estado tencias previstas para el caso en los ans. 75 inc. 25 y 99 inc. 15.
federal la puede asumir excepcionalmente cada vez que la salubridad. mo-
ralidad y seguridad públicas guardan relación con el bien común de toda la 11 . - Fuera de la constitución formal , conocemos las emergencias o
población y repercuten en él. crisis eco/lómicas. para las que se adoptan medidas de di versa clase.

En situaciones de emergencia, la pauta limitativa de los dere-


7. - 12. - Con la reforma de 1994 hay que recordar que cl1I11. 76 empica la locu·
chos se ajusta a lo que tiene señalado la jurisprudencia de la Corte: la ción '·emergencia pública" para catificar una situación excepcional en materia de
emergencia /lO autoriza el ejerricio de poderes que la constitución /la delegación legislativa a favor del poder ejecutivo; asimismo. el art. 99 ¡ne. J Oprevé
acuerda a los órganos gubemamemales, pero proporriona ocasión para las circunstancias también excepcionales que permiten al poder ejecutivo dictar
que los cOllcedidos se empleen COII Ufl ejercicio plello y a menudo disti,,- decretos de "necesidad y urgencia".
to del ordiMrio.
13. - El efecto global que cabe atribuir a los instilutos de emergen-
8. - En los tratados de derechos humO/lOS con jerarquía constilU- cia se bifurca así: a) acreciel/tol/ ciertas competellcias del poder, refor-
ciona! existen previsiones limilaljvas de los derechos. Como ejemplo, re- zando las de un órgano o de varios: b) origil/al/ limi/aciol/es nuis severas
cordemos que el Pacto de San José de Costa Rica contiene una cláusula que las habituales para los derechos, libertades y garall1{as.
genérica en el art. 32, donde se enuncia que los derechos están limitados
por los derechos de los dem(Ís. por la seguridad de todos y IX'r las justas 14. - Desde nuestro punto de vista, ha de funcionar ampliamente el
exigencias del bie.tI común en una sociedad democrática Las restricciones c01lfrol judicial de cOl/slilUciol/alidad, tanto para verificar S! realmente
que autoriza el Pacto no pueden aplicarse sino conforme a las leyes que se hay emergencia -o no-; si el instituto de emergencia que se hallaen vigor
dicten por motivos de interés general y con el propósito para el que han se corresponde con las nonnas existentes en la constitución -o no-: y si las
sido establecidas (an. 30). medidas adoptadas en consecuencia respon~en a los parámetros de
razonabilidad y limitación que las justifican -o no-.

Las situaciones de emergencia 15. - Hay, según la Corte, condiciones núnimas para la validez cons-
titucional de los institutos y las medidas de emergencia: a) una situaciól1
9. - Es difícil describir en un concepto genérico y común lo que son real de emergencia. declarada o comprobada; b) unfin real de interés so-
LAS UMlTACJONes EN EL SISTE.>.!A DE DERECHOS 205
204 COMPENDIO DE DERECHO CO:-.:S [ tI UaONAL

Wla dc las dos situaciones recién ciUldas debe poner en peligro el ejerci·
cíal y público; e) trallsitoriedad en la regulación excepcional: d) razona· cio de la constitución y de ¡as autoridades crcadas por ella; y b) debe
biliCÚld del medio elegido. o sea. proporción y adecuación entre la medida prtXlucir perturbación del orden. O sea que no es suficiente que hay~ ala-
dispuesta. el fin buscado. y los motivos y causas que han dado origen a la que exterior o conmoción interna, porque además han de concumr los
medida de emergencia. requisitos que acabamos de enunciar.

21. - Dcellos sc desprende que no estamos ante una competencia de


UI gueml .Y la paz ejercicio discrecional sino todo lo contrario: el órgano que va a disponer la
declaración del estado de sitio se encuen tra ceñido al encu adre que para su
16. - Respecto de la guerra. JXldcmos afirmarsinlélicarncnlc que los procedencia consigna la constituci6n. Por ende, aunque es innegable la
arts. 6° y 23 en sus alusiones al ataque o la in vasión exterior limi tan el naturaleza "política" del acto declarativo. y aunque por ello se poslule su
marco constitucional de la guerra a la que tiene carácter defemivo. Es la no judiciabilidad, nosotros afirmamos que:
única que parece quedar legitimada. La guerra "civil" está prohihidaen el a) no obstante la jurisprudencia en contrario de la Corte, el acto de·
arto 127. claral;vo debe caer bajo control judicial de constitucionalidad para ven fi -
car si concurren los presupuestos habilitantes; además: a') oo incidimos
17. - Como COnlracara, (:\.Ianda el preámbulo obliga a "consolidar la con la Corte cuando considera revisables judicialmente los requisitos de
paz imerior" y "constituir la ulliólIl/{/ciolla!" se nos hace fácil, en coordi- competencia y defomUl que prescribe la constituci6n: más a") la exigen-
nación con lo recién dicho acerca de la guerra. delectar en la constitución cia de fijaci 6n del plazo de vigencia del estado de sitio y del lugar donde
<.:0010 derecho implícilO el derecho "a la paz n. A su vez, el deber de "pro- ha de regir:
veer a la defensa común" nos lleva a pensar que hay que "defender la b) SOl/ judiciables las medidas COllcreras que se adoptan en ejecu-
paz". Todo sin olvidar que el an. 27 obliga al gobiemo federal a afi anzar ción del estado de sitio, a efectos de controlar su razonabilid ad;
sus relaciones de paz con las polcncias extranjeras. c) la duraciólI o subsistencia del estado de sitio no ha de cvadir el
control judicial, porque si bien debe tener plazo fijado. puede ocurrir que
18. - Si avanzamos al derecho ifl/emacional de nuestros días. aca- antes de su venci miento hayan desaparecido las causas y razones que en su
so tenga asidero coincidir con quienes sostienen que la guerro es Ufl cri- momento hicieron viable la puesta en vigor del estado de sitio.
men de lesa humanidad.
22. - Cuando la cauSal radica en el ataque exterior, el estado de si-
19. _ En un retorno a la guerra y la paz en el derecho constitucional argcntiuo tio tiene que ser dcclarado por el poder ejecutivo con acuerdo del senado
no omitirnos postular que la llamada ley mnrcial con sujeción de los civiles a la (art. 99 jnc. 16) (si el congreso está en receso, debe ser convocado); cuan-
justicia militar no solamente carece de encuadre en la wnstitución, sino que 1(1
do la causa consiste en la cOllmoción ¡mema, el estado de sitio tiene que
";0/(4.
ser declarado por el congreso (art. 75 inc. 29 y 99 inc. 16); (si el congreso
está en receso. la facultad puede ejercerla el poder ejecutivo - arto 99 inc.
16-. correspondiendo al congreso aprobarlo o suspenderlo - arto 75 inc.
El estado de sitio
29-; pero además pensamos que cuando el congreso está en receso, el eje-
cuti vo que declara el estado de sitio debe convocarlo inmediatamente).
20. - El eslado de sitio es el instituto de emergencia que la constitu·
ción tiene arbitrado para dos situaciones: a) ataque exterior, b) conmo-
23. - Surge, entonces, que:
ción imerior.
a) el estado de sitio es una situació" de excepci61/. con causales y
Elart. 23 cuida muy bien el disei'lo de los casos. que quedan condicio- condicionamientos bien definidos;
nados dentro de un marco reglado a tenor de las siguientes pautas: a) cada



LAS UMJTACIONES EN EL SISTE.\tA DE DERECHOS 207
206 COMPUNDIO DE. DEltECHO COl'Ó 1II UnONAl

29. _ Aunque las medidas que limitan la libertad corporal y los derechos sean
b) por ende, es transitorio; consideradas propias del poder ejecutivo. creelTlOs que el congreso ~a regla-
e) debe tener fijado plazo de duración y luga r detenninado: mentar por ley el estado de sitio, pero con parámetros globalc~ y l1l\ly ~e,lt~bles. ya
que cada estado de sitio tiene una flsollonúa muy concreta que es difiCIl captar
d) es competencia exclusiva del gobiemo federal. anticipadalTJ!llte y de m:xlo global hacia el futuro. ..
En la competencia del congreso para declarar el estado de SItIO. podrfa .(p~a
24. - En la constitución material, es uno de los institutos que en su~ aplica- ese caso particular) establecerse qué derechos quedHían afectados: pero en mogun
ciones sucesivas ha acusado mayor apartamjt:1l10, y hasta violaci6n, de la collstitu- caso et congreso puede inhibir o limitar la facu llad privath·a. de.\ ?residente par.a
ción. • arrestar o trasladar personas. ni retacear o interferir el control JIKhclal de razonabl·
Iidad.
En trarados con j erarqula cOllSlitucional están previstas las
25. -
emergencias y sus posibles institutos. con suspensión de algunas garan- 30. ~ Hemos de comprender que las limitaciones a la.liben~d corpo-
lías. ra! y a los derechos tienen naturaleza de medidns de ~eguridad ~ Jamás de
por lo que si acaso Wl arresto o un traslado revIsten durac..,ón exagc·
;::~:S~uiparable a la de una pena, han de ser descalif¡ca~~sjudicia!men~e
La limitación de los derechos duranle el estado de sitio y dejados sin efecto. Además, para satisfacer la razonablltdad, toda medi-
da restrictiva de un derecho ha de circunscribirse al caso c?~creto en qu.c el
26. - Nuestra constitución es sobria en su referencia a la limitación ejercicio del derecho limitado o impedido es capaz de.o.ng~nar unp~ll~ro
de los derechos durante la vigencia del eSlado de sitio. Hay una pauta glo- real y actual para el fin específico que ese estado de SlttOtJellc en VIsta.
bal. según la cual quedal/ suspetlsas las garalll{as constitucionales en la
I,rovincia o e/ territorio donde ¡/aY perturbació1/ del orden. Y hay una
31. _ Cuando la medida restrictiva recae en la libertad corporal. la
paula específica que prohíbe (/1 presidenre de la república condel/ar por vía judicia! de impugnación es el habeas corpus.
sí o aplicar penlls. limitando su poder a arresta r Otras/aliar personas de 32. _ El arreslO o Imslado se vuelven inCOn5Iil!lc~n(/l~s. ~is. allá de la r~·
un punto a olro. si ellas no prefi eren salir de! territon·o argentino.
zonabI·\ IUd
""d
en su causa • cuando son dispuestos por funCionarIOs
. dlstUltos
·6 . al f
presl-
Itad
denle de la república. que es et único habilitado por la COnstltUCI n, SUl acu
27. - La fórmula "suspensión de garantías" ha recibido diversas in- para transferir el ejercicio de su competencia.
terpretaciones, desde la muy amplia que las abarca a todas (a veces aña-
diendo control judicial de razonabilidad respecto de cada medida limitativa). 33. _ Ade más. estanlOs seguros de que la facu~tad de arresto o tras-
hasta la muy estricta que sólo admite la restricción de la libertad corpo- lado 11 0 es ~usceptible de reglamelllaci611 alguna, asl como tampoco.lo es
ral mediante arresto o traslado. Entre medio, la tesis más acertada es, a el derecho de la persona arrestada O trasladada para optar por salir del
,
nuestro criterio. la que en cada situació/. concreta va a afectar Iimitati va- pms.
mente sólo a aquellos derechos cuyo ejercicio resulte illcompatible con
los fines que en aquella misma situación concreta busca el estado de sitio; 34. ~ En líneas generales bay que reivindicar la respollsa~ilitlad del
y eUo. más el cOl/frol judicial de razonabilidad cada vez que la persona esrado por el daño causado a una persona a causa de la. ausencia de razo-
afectada impugnajudicia!mente la medida que le ha sido aplicada. nabilidad en una o más medidas que la afectaron en su Itbe~ad O s~s dc({~­
chos durante el estado de sitio. De ser así, surge el deber mdemlllzatorw
28. - El de~ho judidtJl emanado de la Corte Suprema registra un reperto- del estado.
rio de fallos que, en la actualidad. permite rescatar - aunque con modalidades y
alcances no uniformes- un ámbito de posible control judicial de razonabilidad, bien
que limitado a supuestos de arbitrariedad en las medidas restrictivas.
,
CAPtruLO XXVll

EL AMPARO

La etapa anterior a la reforma constitucional de 1994

1. - Ha sido común conceptuar al amparo como la acción desunada


a tutelar Jos derec1¡o.~ y libertades que, por ser diferentes de fa libertad
corporal ofísica. escapan a la prOlccción judicial por vía del habeas cor·
pus.
El amparo en cuanto garantía reviste la naturaleza de una acción de
¡I/constituciollalidad y de un proceso cOflstiluciollOl.

2. - flaswla re/onllo cOllstitucional de 1994 el amparo carecía de


norma en el texto de la constitución. La refonna lo incorporó en el ano 43.
El ingreso del amparo a nuestro derecho constitucional se produjo no
sólo sin norma consti tucional alguna, sino además sin norma legal. La
fuente que le dio recepción fue lajurisprudellcia de la Corte Suprema en
1957 y 1958. Hasta estas fechas. se entendió que el amparo no era viable
porque fa llaba la ley que previera y reglamentara el procedimiento judicial
a seguir.
"
3. - En 1957, elleading-case "Siri" acogi6 un amparo contra un acto
de autoridad pública. A la Corte le bastó afirmar que las gamlllías exis-
ten y protege" a los individuos por el solo I¡echo de esta r consagradas
en la constitución, independiememente de las leyes reglamentarias.
, , Esta aseveración no significó que la garantía del amparo constaba
como tal en la cpnslitución, sino que, aun sin mención ni denominación,
surgía como vía defensi va de los derechos cuando cra menester arbilrarla
por su rapidez y efi cacia en un caso concreto. O sea que el garanlismo
constilucional lo daba por implfcitamellte incluido.

210 COMPENDIO DE DERECHO CONSTTruCIONAl EL AMPARO 211

4. - En /958. ellcading-case " Kol" dio curso a un amparo contra como propio del amparo "colectivo". AlU 5C añade que la acción de am-
acIOS de paniculares, y explayó más el fundamento que un año antes ha- paro,se podrá intcrponercontra cualquier fomlade discriminación. yen lo
bía expuesto en el caso "Siri". Así dijo: siempre que aparezca de modo relattvo a derechos que protegen:lI ambiente, ala competenci a, al usuario
claro y manifiesto la ilegitimidad de una restricción cualquiera a U1IO de y al consumidor, así como a derechos de incidencia colectiva en general .
los derechos esenciales de fas personas. así como el dallo grave e irre- En estos supuestos. están legitimados para promover el amparo el sujeto
parable que se causaría remitiendo /a cuestión a los procedimiemos or- que resulta afectado, así como el defensor del puebLo y las asociaciones
dinarios (administrativos o judiciales), les correspollderá a los jueces que propendan a C50S fines. (Cabe entender que, aWl sin estar mencionado.
ff!srablecer de inmediato el derecho restri"gido por la rápida vía del hay casos en los que también este tipo de amparo puede ser interpuesto por
recurso de amparo. el ministerio público.)

5. - A partir de allf, en 1966 se dict6 la ley 16.986 sobre amparo 9. - En el amparo clásico del primer párrafo seesboza un lineamiento
call1TO aclOS estatales, y en 1968 se incorporó al código procesal civil y amplio, del que se infiere que para interponer la acción no es menester
comercial (ley /7.454) el amparo contra actos de particulares, rcgulán- agotar ninguna vía previa. Asimjsmo, si el acto lesivo tiene apoyo en una
doselo como proceso sumarísimo. 'IOn/W gel/eral-por ej., una ley- el juez está habilitado para declarar la
il/constitucionalidad de esa nomla. Si la lesi6n deriva directamente de
6. - En esta elapa brevemente descripta seentendió que el amparo debía fun- una ley autoaplicaliva que no es inlermediada por un acto concreto, cree-
cionar contra actos indil'id/wles (de autoridad o de particulares) pero no con/m mos que también procede el amparo y ladeclaraci6n de incoru;Litucionali-
n On/las generales (leyes) quc directa o irKIirectamenle vulncraban derechos. No
dad. En lo que, en cambio, hay duda es en la viabilidad del amparo contra
obstante tal exclusión,lanto cn el caso "Outón", fallado en 1967, como en el caso
"Peralta", fallado cn 1990 (para no citarolrOs) la Corte admitió la procedencia del
decisiones judiciales que, por ser actos estatales, pueden reputarse com-
amparo para controlar judicialmente s i una supuesta lesión a un derecho por aplica- prendidas en la mención que de ellos hace la nonna cuando describe los
ción de ulla ley significaba que esa ley causante de tal lesión era contraria a la supuestos de la acción: personalmente no nos merece objeción la respuesta
constitución --() no-. afinnaliva, a condici6n de que tal tipo de amparo no funcione como Wl
medio de sustraer causas judiciales del curso regular de un proceso y del
tribunal que. como juez natural, está interviniendo en él.
El amparo después de 1994
. 10. - La franja de mayor debate se abre en torno de la locución que
7. - El actual an 43 vino a disipar numerosos problemas y dudas. se Inserta en el art. 43 cuando alude a la interposici6n del amparo "siempre
Según el texto. toda persona puede interponer acci6n expedita y rápida de que no exista otro medio judicial más id6neo". No ha de llegarse al extre-
amparo (en rigor, los calificativos de "expedito" y "rápido" corresponden mo de proponer que siempre y en cualquier caso el amparo se vuelve una
más bien al proceso de amparo que a la acci6n) cuando no exista otro vía procesal sustituli va de todas las demás, y que cada persona se halla en
medio judicial más idóneo, contra lodo acto u omisión de autoridad púo condición de elegir la de su preferencia. A la inversa, tampoco cabe i magi-
blica o de paniculares. que en forma aetual o inminente lesione. restrinja. nar que el amparo queda descartado por el mero hecho de que haya cual-
allere o amenace con arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, derechos y ga- quiera otra vía procesal disponible. En un punto medio de equilibrio, y
rOl/lías reconocidos en la constitución, un tratado O una ley; el juez podrá atendiendo a cada caso y a la naturaleza de la pretensión que se articula
declarar la inconstitucionalidad de la nonna en que se funde el aclO u onli- judicialmente, la solución más prudente y objetiva viene a ser ésta: si una
sión lesivos. Talla letra del párrafo primero, que alude al amparo común, vía procesal, o todas las posibles, no resu ltan "más idóneas", hay que ad-
o amparo clásico. mitir el amparo en reemplazo de cualquiera Otra vía "menos idónea". En
suma, la mayor idoneidad juega muy conectada a la eficacia que un deter-
8. - En seguida aparece un segundo párrafo. que se suele considerar minado proceso es capaz de rendir para tutelar el derecho que se supone



212 CUMPL''DIO fJE DERECHOCONSllTUC10NAL
El AMPARO 213

agredido por un acto arbilrano o manifiestamente ilegal; y la circunstancia


de que sea necesario aportar y producir prueba, o que la cuestión merezca ehos e intereses protegidos tanto puedtn deri var de la constitución como
mayor amplitud de debate no revisten - hoy-entidad suficiente para recha- de un tratado o de una ley; y que es menester la ex istencia de arbitrariedad
O ilegalidad man ifiesta en el acto lesivo. que bien puede consumarse a
zar a priori la proccdenda del amparo.
través de una amenaza.
11. - Lo que sí es indispensable resguardar en el amparo es la
bilaleralidad o contradicción en el proceso, para que quien es imputado 17. - El art. 43 en sus dos primeros párrafos hasta aquí explicados
como autor del acto lesi vo disponga dcolx )fIunidad participativasuficien-
esdircclamente operativo, por lo que aun en ausencia de ley rcglanlentaria
tiene que ser aplicado por los jueces. Y por ser una normafederal obliga a
te.
las provil/cias, quc no pueden disminuir o negar la garantía ampari sta,
12. - En nuestra perspectiva personal damos por inclu ido en el amparo el pero la pueden mejorar y ampliar. porque la norma del art. 43 runciona
caso en que la lesión proviene de una omisión incon.stitucional; o sea, de "no hacer" como un PiSO ffi •trumo,
• •

lo que la constitución "manda que se haga" (por ej ., omitir el dictado de una ley o
un decreto cuya ausencia bloquea la efectividad de una nornlll superior y proyecta 18. - Aunque sin perJilar los rasgos lípk:os del amparo que es pro-
lesión a uno o más derec hos que, debido a esa ausencia normativa, quedan indispo- pio del derecho interno. ha)' tratados intemaciollales de rango consti tu -
niblcs), cional que albergan innominadamente un proceso judicial queda cabida y
encuadre a nuestro amparo,
U. - Cuando ingresamos al párrafo segundo del art . 43 que, según
dijimos, describe al amparo "colecti vo", yano se alude aque "toda perso-
na" pu..:de interponer la acci6n, sino que se menciona una triple legitima-
ció" a favor de: "el afec tado", el defensor del pueblo, y "las asociacio-
nes.,.". De inmediato, circunseribe los bienes y derechos protegidos de la
siguiente manera: a) contra toda /o mJa de discn'millllción: b) en lo relati -
vo a derechos que protegen al ambiellle, a la competencia, al usuario y
(11 cOflSul/üdor: c) en lo relati vo a "derechos de incidencia colectiva en
generaJ" ,

14. - No es dudoso que aquí han hallado recepci6n eXpresa los inleft!5es
difusos o colectivos, y que la "afectaci6n" personal no requiere que el dalia o peljui-
cio recaiga solamente en "cl afectado", porque también si es común a muchos (afec-
taci6 n grupal O colectiva) hay que admitir q ue en ella queda comprcndido e indivi-
d ualizado cada uno de esos "varios" O " muchos". Por ende. rechazamos toda inter-
pre tación que, ai'iadiendo a la norma algo que la norma no dice. sostenga que para
deducir este amparo el sujeto promotor haya de ser afectado "persona.l y directo",

15. - Cuando la norma triplica la legitimación del modo ya explica-


do, hay que enlender que ninguno de los tres legitimados tiene el monopo-
lio de la acciÓR.

16, - También en este amparo del párrafo segundo hemos de dar por
cierto que procede el control de constitucionalidad; que los bienes, dere-
CAPtruLO XXVIII

EL HAB EAS DATA

Encuadre, tipologías y alcances

l . - En el temario que el congreso derivó a la convención constituyente euan-


do declaro la nocesidad de la refonna constitucional no figuraba merlCionado el
habeas data con este nombre. Por cso, la reforma lo incluyó inno",inadtllllenle en el
ámbito nonnalivo del amj'(lro. Es así como <'-Sle habeas data innominado quedó
regulado en el párrafo lercero del ar/. 43.
Antes de 1994. el conslilllcionaliJmo provincial -adcmb del ~omparado- ya
lo habían acogido.

2. - "Esta acción" (a tenor de lo que dice el art. 43) podrá interpo-


nerse por " toda persona" con el objeto de:
a) cOllocer los datos a ella referidos y la finalidad de su almacena-
miento;
b) exigir la supresi6n. rectificación, confidencialidad o actualiw-
ción de esos datos que
e) consten en registros o bancos de daros públicos. o IJrivados si
éstos eSlán destinados a proveer il/formes.
La nonna añade que no podrá afectarse el secreto de las fuemes de
informació1/ pedodística.

3. -A nuestro criterio. aun cuando los registros privados sólo pueden ser
materia de habeas data si están destinados a proveer datos. creemos que si no po-
scen esa finalidad pero suministran información a terceros, han de considerarse
abarcados en la viabilidad del habeas data.

4. - El vocabulario actual alude a derechos ¡T!fomláticos COl/stitu·


EL BABE...s DATA 217
216 COMPENDIO [)f DERECHO CONS [1 IUaONAL

ciollales c uando loma en cuenta que la (ute la mediante el habeas dala co- a) La información en regimos o ficheros referidos a la acüvicúld co-
bre los servicios infonnáticos, computarizados o no, con toda clase de uti- mercial, empresarial o fina1lciera de las personas, cuando su conocimien-
li zación, aunque no sea automatizada. si el soporte material de losdaloses to parece de acceso necesario a terceros que se hallan en la red de activida~
susceptible de tratamiento automatizado. des similares;
b) La documentación histórica destinada a consulta e infonnación de
Todo ello obedece al aClUal desarrollo tecnológico, al tratamiento clcclrÓnico investigadores. estudiosos, científicos y personas en general, con fmes vin·
de la info rmación, al nujo cibernético, elc., que han hecho necesario resguardar la culadas a lo que cabe denominar como cultura social:
pril'ocidad personal elija circulación de la información. De ahí qut.: al encararse el c) La de/ema ." seg uridad del estado. cuando en un caso concreto
bien j¡¡rídico protegido por el habeas data sea frecuente, en lomo de la intim.idad, deba facilitarseexcepcionalmentc el acceSO a ciertos datos personales re-
aludir a la reserva de bienes personales como los vinculados COIl el honor. la digni-
dad.la información "sensible", la verdad, la igualdad, la autodeterminación infor- gistrados.
m~tiva, la privaeidad, ele,
7. - Conviene hacerOlro breve repertorio con ciertas caractcrísticas.
5. - La variedad de fisonomías que ofrece el habeas data arroja el Así:
siguiente resumen: a) como principio. la legitimaciólI para promover el habeas data debe
a) Hay un habeas data informativo para solicitar: reservarse allitulardc los dalaS, lanto si es una persona física como si se
trata de una entidad colectiva, una asociación. etc.;
a') qué dmos personales están registrados;
b) al igual que en el supuesto de los dos primeros párrafos del arto 43,
a") con quéfillalidad se han obtenido y registrado; éste referido al habeas data reviste carácter de norma operativa, que debe
a''') de quéfuellle se han obtenido (salvo que se trate de fuentes pe. funci onar aunque no haya ley reglamentaria, )'obliga a las provincias:
riodísticas u otras resguardadas por secreto profesional); c) es viable el comrol judicial de cOl/sÚluciol/nlidad de nonnas ge-
b) Hay un habeas dara reclificador para: nerales que puedan estar en juego;
b') corregir datos que son falsos o inexactos; d) no hace falla arbitrariedad o ilegalidad manifiesta cuando el habeas
b") actualiwr o adiciol/ar datos atrasados O incomph:LOs; data. tiene por objeto conocer los datos personales archi vados, o se pm-
mueve para rectificarlos, cancelarlos. actualizarlos. ele.
e) Hay un habeas dala de preservaciólI para:
e') excluir datos archivados que contienen infonnación personallla~ 8. - El secreto periodístico al que alude la parte final de este tercer
mada "sensible" (por ej., los referidos a orientación sexual, identidad éblica párrafo del arto 43 tiene el siguicnte alcance:
o racial. religión. ciertas enfemledades, ideas políLicas. elc.); a) impide usar el habeas data para averiguar qué dalos personales fi-
c") reservar en la confidencialidad cienos datos archi vados que han guran registrados periodisticamcnte:
sido legalmente acumulados. pero resultan innecesarios y sustraídos para b) impide conocer de dónde fueron obtenidos;
el acceso de terceros, o son susceptibles de eausardaf'io a la pcrsonasi son e) incita a considerar como fuente periodística a la que es propia de
conocidos por terceros; lodos los medios audiovisuales y escritos de comunicación social, com·
d) Puede haber un habeas data mixto. que tiende a más de una de las prendidos los infoffimtizados.
flllalidades expuestas en los anteriores incisos,
9. - Los lratados de jerarquía cOllstitucional no se refieren cxpre·
6. - En la enumeración de ámbitos que 110 queda" resguardados samente al habeas data, pero es fácil comprender que lo abarcan cuando
por el habeas data podemos citar, ejemplificativamente, algunos datos que aluden al recurso sencillo y rápido que debe dispensársele al justiciable
razonablcmente admiten reputarse de interés público o general. Así: cuando le resulta necesario.
c.~pfn¡1..0 XXIX

EL HABEAS CORPUS

Lo clásico y lo nuevo en sus tipologías

l . - El Ilabeas corpus es la garanúa tradicional que. como acción.


¡utelllla liberrad jisica o cor{Joml o de l ocomoción, a través de un proce-
dimiento judicial sumario que se tramita en fomla dejuicio.
Al decir que el habeas corpus protege la libertad fisica damos a enten-
der que es la garantía deparada contra actos que privan de esa libertad . o
que la restri1/gen sin causa o sin formas legales. o con arbltmricdad (de-
tenciones. arrestos. traslados. prohibiciones de deambular, etc.).
Al dra de hoy hemos de añadir que quien se encuentra legrtima o le-
galmente privado de su Iil>enad (por prisión preventi va, condena penal ,
elC.) también puede deducir un habeas corpus cuando se agmvlI/I las con-
diciones de su privación de libertad de manera ilegal o arbitraria; en tal
caso, el habeas corpus no intenta la recuperación de la libertad sino el cese
de lo.f restricciones que han agravado su privación,

2, - Antes de la reComla de 1994, una buena base del habeas corpus


se halJaba cnla nonna del ano lB según la cuall/adie puede serarreswdo
,fil/o el¡ virtud de ordel/ escrita de autoridad competente. En 1984, la ley
23.098 dio desarrollo reglamentario al habeas corpus, Ahora, el párrafo
cuarto y Jinal del al1. 4310 contempla especílicamento.

3. - Las distintas categorías de habeas corpus son éstas:


a) el habeas corpus clásico para rehabilitar la libertad física frente a
actos u omisiones que la restringen o impiden sin orden legal de autoridad
competente;
• •
220 (~O.\1PIi"'iDlO DE DERECHO CONSTlnJCIO:"AL EL HAIlI;AS CORPUS 221

o) el habeas corpus pre~'elllivo para frenar amenazas ciertas e inmi- efecto suspensivo; o sea que mientras se tramita el. recurso el benel1ciario del ha-
nentes para la libertad física: beas COrpUi mantiene recuperada su \iberia<!.
e) el habeas corpus correctivo contra ¡oda fOfma ilegítima que agra-
8. - La ley 23.042 habilitó excepcionalmente el uso de! habeas corpus para
va la I,;ondición de una persona legalmente privada de su libertad: revisar sentencias finnes de cundena aplicadas a civiles por tribl/na/es ,,,¡¡¡tan's.
d) el hahcas corpus restringido contra moles/ias que perturban la li-
bertad de locomoción sin llegar a la privación de libertad (seguinúcllIos. 9. - Aunque la ley 23.098 no previó. en el ámbito federal. el habeas
vigilancias. CIC.). corpus contra actos de particulares, consideramos que lampoco niega su
e) d arto 43113 incorporado como novedad el supucslOde procedencia procedencia. de forma que si en tal supueslo un juez recibe una acción de
en el caso de la desaparicióllfol7fula de persollas. habeas l'Orpus, debe imprimirle trámite sumario (al modo como lo hizo la
Carie en 1957-19S Q en materia de amparo a falta de ley que lo reglara).
4. - La leg;¡ilJ/aciólI procesal pafa interponer un h'abca~ corpus no
10. _ En caso de sanciones privativas de libertad que son impuestas por or-
se limita a la persona que acusa restricción en su libertad, sino que se ganismos no judiciales que disponen de esa competencia. es sabido que debe que-
extiende a cualquier Olra, aun sin estar apoderada por ella. Y a la vez, la dar expedita una vía judicial de relúiólI ulrerior "suficiente"'. Si acaso tal control
ley 23.098 ha previSl0cJ habeas corpus "de oficio", que confiere al juez la no abaslL'Ce en un caso dctcrnúnldo eS!! rCCludo de "suficiencia". debe reputarse
habilil<lción cuando toma conoci mienlo por sí mismo de la afcctación gra- viable el uso del habeas corpus.
ve de libenad padecida por una persona. con riesgo de sufrir perjuicio irre-
parabk u de ser trasladada fuera del ámbito de la jurisdicción dcllribunal. 11. - De loda la serie de situaciones que hemos ven ido exponiendo
hay que derivar una conclusión. que es éSla: todo lo que no se halla expre-
5. - La ley citada contieTl\! otros dos aspectos interesantes: samente prcvistoen el ano 43 último párrafo. pero era tenido como proce·
a) <.:uando la restricción a la libt:rtad Sil produce JI/nm/e el esfllJo de sitio, el dente en la ctapa anterior a la reforllla de 1994, induce a afirmar que si-
juc./: del habeas corpus ticne competencia para controlar, en el caso concrllto a dedo guen vigentes cuantas amplitudes son útiles y convenientes para colmar
dir, la legitimidad del acto declarativo del eSlado de sitio (pc!iC a que, según dijimos. omisiones o silencios normativos.
la jurisprudencia de In Corte ha considerado que se trata de una cuestión política no
judiciable); 12. - Asimismo. el art. 43 úllimopárralo es operalivo, y obliga a las
b) c uando la limitación a la Iibennd se basa en una orden de autoridad que
. . .. .
proV/1/CtaS como ptSO muumo.
actún aplicando ulla norma legal contraria a la constitución, el juez del habeas cor-
pus está habilitado a declaror inconsriw("iona/ dicha noma "de oficio" (o sea, sin 13. - En trawdos de derechos humanos con jerarquía constitucio-
petición de parte). nal hay normas que, sin usar ¡a denominación del habeas corpus, prevén la
procedencia de acciones de naturaleza análoga para resguardar la libertad
6. - En el proceso de habeas corpus hay que respetar el principio de corporal.
contradicció" que asegura la bilatcralidad, a tin de que pueda participar el
aulor del acto lesi vo.

7. - El llamado "auto" de habeas corpus es la orden que emite el juez de la


causa requiliendo 11111 autoridad presuntamente autora del acto lesivo que informe
acerca del mismo, conminándola -incluso- a presentar a la persona detenida. Que·
da claro, entonces, que el ~'auto" de habeas corpus 1\0 es la sentencia fina l que se
dicta en el proceso.
Si tal sentellda hace lugar al habeas corpus y es recurrida, el recurso no tiene
,
I

CAPIroLO xxx

LOS TRATADOS INTERNACIONALES

Su panorama internacional y constitucional

l . - En virtud de las dos Convenciones de Viena sobre derecho de


los tratados, de 1969 y 1986, ambas incorporadas al derecho argentino, se
consideran tratados todos los acuerdos entre "sujetos de derecho Interna-
cional", aunque acaso no sean estados sino -por ej.-organizaciones inter-
nacionales.

Un criterio objetivo para distinguir un tratado de cualqu ier otro convenio o


contrato intcmacional es el que propone excluir de In clltegol'ía de 1U8 trallldo. a los
comeoios que qu..:dan sometidos al denx:ho interno de un estado pllJ'Q regirse por
sus disposiciones (por ej., los convenios intcrnaciotlale! qUtl, sllgún I.!l IIrt. 124 de
nues tra constitución, pueden celebrar las provincias).

2. - El itinerario nonna} de un tratado transita por cuatro etapas:


a) negociación. a cargo del poder ejecutivo;
b)fimlO , a cargo del poder ejecutivo;
e) aprobación, a cargo del congreso (su opuesto es el rechazo);
d) ratificación, a cargo del poder ejecutivo.
Salvo estipulación en contrario, una etapa no obliga a cumplir la sl~
guiente.

3. - Otras modalidades son las siguientes: a) el estado puede "adhe-


rir" a un tratado sin haberlo negociado ni firmado; b) hay tratados que
prevén su vigencia y obligatoriedad solamente con su fimla, sin ratifica-
ción.

I
224 CO~I'E.'ffilO DE DERE.CHO CONSTITIJClONAL L os TRATAOOS lNTE.RNAL10NALES 225

4. - En nuestro sistema, el aCIO de celebración de un tratado es un acto com- el cstadodicte la normativa para darle desarrollo. la ley que así lo ha<.:e DO
plejo porque requiere la concurrencia de \'Qlunladcs de dos órganos: el presidente y produce la "incorporación" del tratado (que ya está incorporado por la
el congreso. ratificación) sino que permite sufullciollamiento (porque el tratado por sí
solo es incomplelo) (por ej .. la nornla del Pacto de San José deCosta Rica
5. - El repertorio de nornlas constilucionales aplicables es éste: según la cual la "ley" "debe igualar" las filiaci ones, no produce por sí
a) por el arto 99 jllc. JJ el presidente concluye y jimIO tratados. con- ntismo tal igualdad. sino que "'obliga" al derecho interno a hacerla efecti-
cordatos y otras negociaciones con estados extranjeros y organismos inter- va).
nacionales;
b) por el ano 27, el gobierno federal "está obligado" a afianzar sus 11. - Los tratados ya ratificados deben ser objelodepublicaciól/ en
relaciones de paz y comercio con las potencias extranjeras por medio de el Boletín Oficial. En tal semido cabe citar la ley 24.080 del año 1992.
tratados I;que estén en confonnidad con los principios de derecho público
establecidos en la constitución"; 12. - Cuando e l arto 75 ine. 22 prevé que el congreso puede olO'8ar jerar-
quia constitllcional CI tratados de derechos humanos, hemos de dcsdoolar la hipó-
e) según el an. 75 ¡l/C. 22 el congreso aprueba o desecha los trala- tesis: a) si el tratado ya fomla parte de nuestro derecho interno y recibe jerarquía
dos: si los aprueba, el poder cjccuti vo tiene competencia para ralinearlos. cons~itucinnat del congreso, logra ese nivel directa c inmediatamente: b) si el trata-
do toda"ía no está incorporado a nuestro dcrecho interno y recibe jerarquía constitu-
6. - El congfl'so aprueba los tratados dictando una ley, pese a que e l acto de cional antes de ser ratificado por el ejeculivo, la decisión del congreso no le da
aprobación e.~ de naturaleza política y no legislativa. La "ley" aprobatoria no incor- recepción, por lo que la jerarquía constitucional se posterga hasta que se lo ratifi-
pora cllratado a nuestro derecho intcnlo, porque como principio tal incorporación que.
recién se produce con la ralineación en sede internacional a cargo del poder ejecuti-
vo. n. - Los llamados IJClleroos ejeclltivos de tramitación simplifICada omiten
la aprobación por Id congreso y. por I!ndc, cuando de acuerdo al derecho Intcrnacio-
7. - Desde nuestro punto de vista, cuando nuestro estado se hace parte en un oaI revisten verdadcra natunlcza de tratados, implican viotaci6n de nuestra consti-
tratado que con su "sola firma" implica obligarse a cumplirlo, el congreso debe lUción.
aprobarlo antes de quc el ejecutivo lo firme. Análogamente, es menester la aproba-
ción del congreso cuando nuestro estado "adhiere" a un tratado que no ha sido 14. _ Cuando el congreso redUlZlI un tratado, to t6gico es dar por CiC¡10 que
objeto d~ firma. el ejecutivo no puede ratificarlo: y si pretende rcncgoclarlo debe Mroceder a la
etapa inicial de celebración.
8. - Si el congreso. en vez de aprobar un tratado, autoriza al cj~utivo a rati-
ficarlo. entendemos que está dando por implfcita la aprobación. 15. - En materia de reservas a los tralados (que se hallan internacio-
nalmente previstas) y de denuncia de los tratados (también prevista), se
9. - Adhiriendo al mOl/ismo, afirmamos que la ratificaciól/ de un JllUltiplica la serie dc situaciones posibles en cuanto a la intervención del
tratado le confiere if/greJo y rece/Jciót. en el derecho interno. El dualis- ejecutivo y del congreso.
mo, al contrario, diría que después de la ratificación sería indispensable la La constitución enfoca expresamcntcen su ano 75 ine. 221a denuncia
fuenle interna (ley del congreso) para que aquel ingreso se produjera (con de tratados de derechos humanos con jerarquía constitucional, dando par-
lo que el congreso, entonces, intervendría dos veces: una para aprobar el ticipación a tos dos órganos. Los de integración supracslalaltambién re-
tratado, y Olra para incorporarlo después de la ratificación por cl poder quieren aprobación del congreso para ser denunciados por el ejecutj vo.
ejecutivo).
16. - Como punto de vista personal, damos por cierto que cuando
lO. - Si las normas de un tratado no son aUloaplicativas O self- un lratado de derechos humanos conjcrarquíaconsthucional es denuncia·
executing y precisan que. una vez integrado ese tratado al derecho intemo, doy extingue su vigencia de acuerdo con el derecho internacional. scdebe
226 CO~PENDlO 1)10 DE.RECHO CONS'III UdONAL Lo." TItA TAOOS IN'TEltNAaONALr~ 227

considerar que los derecllos emergentes de ese trollado mamienell su vi· hay que tomar muy en cuenta cuál es la interpretación que a Jos menciona-
gencia en nuestro derecho interno. Ello por el principio de irreversibilidad, dos instrumentos les OIorga la jurisprudencia internacional.
conforme al cual una vez que uno o más derechos ingresan a nuestro orde-
namiento. no es posible darlos por inexi stentes o derogados. aunque la 20. - Cuando en la misma cláusulaseconsignaque estos insuumen-
fuen te que les dio origen haya desaparecido. lOS 110 deroga" artículo algu1/o de la primera parte de la cOlISlitució" r
que SOI/ complemel1larios. hemos de dar por seguro que: a) se articu lan en
17. _ Tampoco puede el congreso derogar la ley por la que con anterioridad el sistema de derechos sin que ni aquellos instrumentos ni la consti tución
dio aprobación a un tratado que luego ratificó el poder ejecutivo y que, por ende, cancelen normas entre sí: y elto porque b) la complementariedad que al
entró a formar parte del derecho inleroo. sistema de derechos contenido en la constitución se le aJ1ade a causa de los
instrumentos internacionales que ti enen su misma jerarquía. exige que los
derechos de la const itución y los derechos de los instrumentos internacio-
La reforma de J994 nales se sumen y se realimenten recíprocamente.

18. - 1..(1 refomw de /994 aborda el lema de los tratados en el arto 21. - En síntesis, nuestro sistema de derechos cuenta con dos [uen-
75 irlc. 22 e ¡l/c. 24. El ¡ne. 22 enumera once instrumentos de derechos tes: la ¡mema y la imert/tlciollal.
hunuUlOS a los que asigna jerarquía COl/stitucional, y prevé la facultad del
congreso para añadir posteriormente otros. Asimismo. a los tratados sin 22. - Es. interesante aclarar que en el supuesto de tralados a los que después
rango eonstitucionall os dclinc como supra/ego/es. El ¡ne. 24 se refi ere a de la reforma de 1994 el congreso les otorga jerarquía constitucional, hay que dar
por cieno que a un tratado que ¡;¡SJo parcialmente contiene Ilonnas sobre derechos
los tratados de illlegmciól1 supraestalal. humanos es posible conferirle. en ese Segmento o sector. la mcmadajerarquía cons·
La lectura de estas cláusulas deja entrever con mucba claridad el enla- ütucional. O sea, no es necesario que todo el tratado verse sobre derecl"lOs humanos.
ce cntral1.able que actualmente cobra el régimen de Jos tratados con la parle
dogmática y con el sistema axiológico de la constitución. No en vano el
vicjo an. 27, ya citado antes, pertenece a la primera palle del texto de Los tratados y el derecho interno
1853.
• 23. - El derecho internacional. dcsde laConvenciónde Vicnade 1969,
19. - Aun cuando al explicar la supre macía consti tucional (cap. 11) contiene dos principios axiales: a) uno da prioridad a los tratados sobre el
ya hicimos alguna glosa en tomo de los tratados. no es redundante ahora derecho interno: b) otro establece que el estado 00 puede alegar que el
reiterar ciertos lineamientos. tratado se suscribió O ratificó en violación al derecho interno (a menos que
tal violación sea manifiesta y resulte objetivamente evidente para cual-
Los illSlrumetllOs imemacionoles de jerarquía constitucional l/O
quier estado según la práctica usual y la buena fe).
están incorporados a la constitución, pero se ubican a S!J mismo I/ivel en
el bloque de constitucionalidad federal. Asimismo, cuando el inc. 22 los Cuando un tratado ingresa a nuestro derecho interno y está en pugna
erige con jerarquía constitucional , alude a "las condiciones de su vigen- con una ley anterior, hay que afirmar que esta ley queda incursa en incons-
cia", lo que tiene el siguiente significado. "Condiciones de su vigencia" titucionalidad sobrcviniente.
quiere decir: a) condiciones que, a la fecha de la reforma de 1994. surgían
del previo reconocimiento o ratificación que a dichos instrumentos les ha- 24. - Cuando un tratado supral egal entra en colisión con la constitu-
bía conferido nuestro país; b) condiciones en que se hallaban vigentes in- ción, nuestro sistema habilita el control y la declaración de inconstituci o-
ternacionalmente en el momento de la reformaconslituci onal : e) condicio- nalidad de la norma iOlemacional contraria. Pero ello implica una illcolle·
nes en que subsisten en el ámbito del derecho internacional. para lo cual renda de nuestro derecho ;memo. porque el estado que consiente hacerse

l
228 COMI'(NDlO DE DERECHO CONSTIllJl:IONAl. Los T1tAT ADOS INTERNAOONALES 229

parte en un lratado debe. antes de que ello ocurra. cerciorarse de que no de un organismo o un tribunal cuya jurisdicción ha sido consentida y acep-
hay incompatibilidad con la constitución. Además. ya vimos que el dere- tada por nuestro estado. como ocurre en el sistema interamericano con la
cho imcmacionalno admite quedar postergado o descartado a causa de su Comisión lnteramericana y la Corte lnteramericana de Derechos Huma-
eventual oposición a la conslilUción. nos.
La interpretación e integración constitucionales han de sintonizar y
e)
25. - Respecto de los il/strWllemos inlenlllciol/ales de derechos 1/11- armonizar a la constitución con el derecho internacional; sobre todo en
mal/os eQII jerarquía cOflstiruciol/nl es ohvio que. por situarse al mismo materia de derechos hUlI/a1/os: c') los tratados que fomlan parte de nues-
nivel de la constiluci6n. no toleran que se los acuse de ser contrarios o troderecho interno (aunque sólo sean supraJegales) y el derecho de gentes
violalorios ni. por ende. se sujetan a control judicial de constitucionalidad. han de merecer una interpretación aplicativa que, en coordinación con la
constitución, acentúe la tendencia a la maximización y progresividad del
26. - Conviene recordar que el llamado "jus cogens" como núcleo plexo de derechos, y c") confiere hospedaje en la cláusula constitucional
del derecho internacional que no admite derogación ni disponibilidad por de los derechos implícitos (art. 33) a los derechos que emanan de fuente
normas opuestas o distintas de un tratado, cuenta dentro de su contenido internacional o de fuente interna, a tono con las reglas del art 29 del Pacto
con tndo lo que C·1l el actual derecho intemacional de los derechos hUnl<UlOS de San José de Costa Rica.
se re1iere a la protección de esos derechos.
29. - Todo illcumplimielllo y toda violación de un tratado, sea por
27. - A la fecha. hay que ponderar como valiosalajurisp¡'udencia de nuestra
Corte Suprema en cuanto, finalmente, ha reconocido la 1wlllrc/Je1.U Jede"jJ de [os
acción o JXIr omisión, compromete la responsabilidad imenUlciollal del
tratados, tanto urgánicamo.:ute por su fomUl, como materialmente por su conteniw. estado. Para tenerlo bien claro, de cara al derecho intemacionaJ, vale repe-
Ello significa que un tratado cuya materia tiene naturaleza de derecho eomún en Lir insistentemente que el estado que incumple o viola un tratado. o que
nuestro derecho interno (por ej. si versa sobre temas de derecho ci\'il) es, no obstan- descarta su aplicación por contrariar a la constitución. no queda excusado
te, parte de nuestro derecho federal. Se trata de UDa cuo.:stiÓn que, más allá de su ni exculpado si alega que su derecho interno le impide priorizar al tratado.
interés doctrinario, sune efectos en materia de recurso extraordinario. Ello en virtud de que según ya dijimos antes, en el ámbito del derecho in-
ternacional éste tiene primacía respecto del derecho interno de los estados.
28. - La illterpretaci6" de los tratados y del derecho internacional También sobre su constitución.
no escrito en el derecho interno muestra algunos perfiles que. en ruladidura
a todo cuanto hemos sintetizado en tomo de la interpretación e integración 30. - También hay que traer a colación otro recordatorio: el derecho intema·
constitucionales (cap. 1), aconseja computar parámetros adicionales. Así: ciOl1al hUI//(lnilariQ. destinado a aplicarse en los connietos bélicos para proteger
0.) Debe tenerse en cuenta los principios generales, que se dividen en: personas y bienes, y el derecho internacional de los refugicuJos que tutela a las
a') principios generales del propio derecho internacional (por ej., el de personas que con esa calidad. forman parte de nuestro ordenamiento intemo.
protección de los derechos hwnanos); ya") principios generales del dere-
cho que se suelen reputar de aplicación supletoria, y que tienen origen en el
derecho inlerno pero, además. son reconocidos y aceptados JXIr las ll ama- La integración supraestatal
das "naciones ci viJizadas". Los principios generales del derecho interna-
cional mencionados en el inc. a') son normas fundamentales del "derecho 31. - La imegraci6/1 supraestawl. y el llamado derecho comul/ita ·
de gcnt.e&" y acusan origen consuetudinario. rio como derivaciÓn de ella, cuentan desde la reforma de 1994 con el ya
b) Cuando tales principios tienen que ser aplicados por nuestros tri- citado iuc, 24 del arto 75.
bunaJes. corresponde que éstos tomen en consideración lajurisprudencia Según la letra de esta norma, nuestro estado está habilitado para "de-
de los tribunales ¡lIten/acionales. muy especialmente: b') cuando se [rata legar cdmpetencias y jurisdicción" a orgalliUlciones supmeslatales me-
230 COMPf.NDlO DE 0EftEC11O CO:-'S I , IUOONAL LosTRATADOS I¡"TER."'ACIONALES 231

La ley 24.588 habilitó a [a Ciudad AmónOllu, de Buenos Ai~s a concertar el


dianlc tratados de imegración. Ello en oondiciones de reciprocidad e igual-
lipo de convenios mencionados en el arto 124. Y la constitución de la ciudad ha
dad. y con respeto al orden democrático y los derechos humanos. dado deslllTollo a dicha competencia en su arl. 104 inc. 3".

32. - Hay que distinguir el "tratado-marco" de in legración. que sue- 37. - Tales convenios internacionales celebrados por las provincias
le reputarse derecho comunitario "primario", y el derecho comunitario "se- pueden versar sobre materias de competenciaprovinciaJ o de competencia
cundario" o "derivado", que se compone de las normas que emanan de los concurrente con d estado federal.
órganos de la comunidad supracstatal creada por el tratado-marco de inte-
gración. Según nuestro inc. 24. Que alude a "normas dictadas en su conse- 38. - Si bien decimos que acá no se trata de tratados intcmaciooalcs. cree-
cuencia" (en consecuencia de la transferencia competencial efectuada por mos que a los tratados previstos en los a.rIS. 124 y 125 les son aplicables slIple/oria-
el tratado de integración a favor de organizaciones supraeslulales). el dere- mt'nle las disposiciones del dcTC1:ho imernacional de los tratados cuando hace falta

cho co munitario secu ndario o derivado tiene. al igual que el tratado de integrar alguna laguna Ilomlativa en nuestro derecho ¡memo, o interprelar al tratado
provincial en su naturaleza de tal.
integración, jerarquía superior a las leyes.

33. - Es fácil coincidir en que las normas del mencionado dcrecho comunita-
rio derivado se incorporan directmuenle a nuestro derecho interno, sin intervención
de ningún órgano de poder inlemo.

34. - Además, hay que tomar en cuenta todo lo que la constitución tiene 5e-
iialado respecto de los mecanismos de celebroción y denuncia de los tratados de
integrac ión.

Los "tratados" provinciales

35. - Finalmcnte, el arlo124 -como propio de un estado fedcral- ha venido a


prever competencias prorinciales en materia de '·tratados", al modo como lo hacía
el ex arto 107, que hoyes el 125, respecto de los llamados ''tratados interprovincia-
les" (o tratados "internos").
A su \'ez, el arto 121 habilita o tra c lase innominada de tratados a los que alude
con la expresión "pactos especiales" de una provincia al tiempo de incorporarse a la
federación.
Al abarcar globalmente toda esta tipología. hay que repetir que ninguno de
estos "tratados", "convenios", " pactos", etc., tiene la naturaleza de los tratados in-
ternacionales a tenor de las convenciones de VIena. En nues tro derecho interno los
hemos ubicado en la categoría del derecho intra{edeml.

36. - El arto /24 habilita a las provincias a celebrar "convenios ¡I/-


temacionales" que no sean incompatibles con la IXllílica exterior del eSla-
• do y queno afecten las facultades delegadas al gobierno federa] o al crédi-
to público. Ello "con conoci miento" del congreso.
CAPfn.,1.0 XXXl

LA PARTE ORGANICA DE LA CONSTlTUCION

El poder

l. - Lapane orgánica de la constitución, a laque asignamos el nom-


bre de "derecho constitucional del poder", es la que ordena al poder del
estado, Hayqueesl Nclurar y componer los órganos y funciones, y hay que
organizar lodo el aparato orgánico-funcional que, en sentido lato, llama-
mos gobiemo.

El poder del estado es un poder sobre ho mbres, un /liando de uno o JXlCos


individuos sobre muchos individuos, que distingue al gn/po gobemante de la co-
lIIunidad gobemada, en la irreductible real idad dicotómica del mando y la o/w-
diencia_

2. - El derecho constilrlcional del poder no es ni debe considenuse un com-


partimiento estanco. Por un lado, el ejercicio del poder !lO se recluye ni clausura
dentro de la estructura gubernamental que)o pone en ejercicio, porque se exptmde y
proyecla haciaw sociedad; por otro lado, la parte dogmática de la constitución no
se inco nulIlica sino que guarda relación recíproca con la organización del poder. Po r
esta tangente, el sistema axiológico integrado por valores, principios y derechos
obliga y limita al poder que, en consecuencia, es un poder limitado, repartido y
controlado. Latamente, se trata de la reciprocidad entre "derechos de la persona" y
'¡división de poderes".

3. - El poder del estado se ejerce por hombres. A los hombres que


asumen esa tarea se les llama órganos, y su conjunto compone el gobier-
110.

En los órganos estatales se acepta un doble enfoque: a) el"órgancrifld¡\'idllo",


---------~.. .,


L A PARTE OROÁNICA DE LA CONS¡ ¡ IU<.1ON 235
234 COMPENOlO DE DERECHO CONSlTTlJOO:-':AL

Los "sujetos auxiliares"


que es la pe~lla física (una o varias) que realiza la función o actividad del poder:
b) el "órgano-inslilrlóóll", como repartición con una determinada esfera de compe-
tencia.
8. - Encontramos también fu era de los tres JXX1eres clásicos. pero
sin tcner calidad de órganos, una serie de sujetos auxiliares del poder. A
Así, el "congreso", el "poder ejecutivo" y el ''poder judicial" son 6rg(IIIO$-
estos sujetos los reputamos también "extrapodercs" porque no forman parte
institución, que el orden de normas con rigura y describe, en tanto los diputados y
de ningwlO de los poderes de la tríada, pero 1/0 los involucramos entre los
senadores son los órganos-individuo del congreso: el presidente de la república es
el órgtl/Jo·illdil'iduo del poder ejecutivo: y los jueces son Jos órganos-individuo del "órganos" extrapoderes porque carecell de la lIaturaleza de órgaflos es·
poder judicial. lata les.

4. - El poder del estado como capacidad o energía para cumplir su Asf, S<!lÍan sujctos auxiliares del estado: la [gl(!sia Católica, el cuerpo electo·
n.I, tos partidos políticos, los s indica tos, etc. Tales sujetos pueden ser, en su caso,
fin es " Uf/O" solo. con "pluralidad" de ful/ciolles y actividades. Lo que penonas públicas o entes "paraestataks" que, cotn> auxiliares del estado, están "al
se divide no esel (XXIer, sino las fun ciones y los órganos que las cumplen. Ildo" de él, pero en ese caso hay que decir que tienen natu raleza de personas de
Cuando el derecho constitucional habla de "poderes" --en plural- quiere derecbQ público "no estatales". Vn ejemplo claro de estas últimas son las universi-
mentar los "órganos institución" con sus respecti vas competencias. dades nacionaks, a las que el arto 75 inc. 19 párrafo tercero les reconoce autonomía
y autarquía .
5. - El órgano-institución ti ene un área de competencia y un conjun-
to de atribuciones y facuilades. La competencia es la asignación de "su"
funci ón a un órgano-instilución. El uso del poder "fuera" de la competen- Las relaciones en los órganos del poder
cia provoca exceso o abuso de poder; y el uso del poder "dentro" de la
competencia, pero con un "fin" distinto, la desviación de poder. En el 9. - La actividad de los órganos del poder implica relaciol/es de muy
derecho constitucional del poder, la incompetencia es la regla y la com- variada especie, sea dentro del mismo órgano, sea de éste en relación con
petellcia fa excepción. otro, sea en relación con los gobernados.
Llamamos: a) relaciones inrerórgallos. a las que se dan "el/lre" dos
6. _ La competencia condiciona la validez del acto, de modo que el emitido Omás órgallos; b) relaciones illtraórgallos a las que se dan "del/tro" de
fuera de ella se considera afectado de nulidad. un órgano colegiado o complejo (si el órgano es complejo, o sea, fonnado
por más de un órgano. las relaciones intraórgano pueden ser simultánea·
mente relaciones "entre" los órganos que componen al órgano complejo);
Los órganos eXlrapoderes por fin , e) relaciones e.xtraórgallos son las que vinculan a los llamados
sujetos auxiliares del estado con órganos del poder o con órganos cxtrapo-
7, - La leoría clásica de Montesquieu ha elaborado una tríada O tri· deres.
nidad de poderes: ejecutivo. legislativo y judicial, y ha incluido en esa
tríada a todos los órganos y todas las funciones del poder. No obstante, Algunos ejemplos pueden ser los siguientes:
aparecen. a veces. otros órganos que no encajan en ninguno de los tres a) En las reÚJciones interorganos. las que se dan:
poderes citados, El derecho constitucional del poder los coloca, entonces, a') entre el poder ejecutivo y los ministros;
al margell ofuera de ellos, aunque en relación con los mismos. Por estaT al a") entre el poder ejecutivo y el con~reso ;
margen o fuera, se les dael mencionado nombre de órganos "exI rapode-
re,... a"') entre los ministros y el congreso;
a'~') entre el poder judicial y otros ó rganos del poder.
b) En las relaciones intrtlórgaflos, las que se dan:
236 COMPENDIO DE DERECHO CONS ! (¡ UOON AL LA PARTE OROÁNt,A DE LA CONS ti tUCIÓX 237

b' ) entre las dos cámaras del congreso: en sus dos partes -<!ogmática y orgánica- que deben interpretarse de ma-
b") entre órganos del poder judicial: nera annónica y compat ible entre sí con el contexto integral:
b ''') para quienes consideran que nuestro poder ejecutivo no es unipt."1'Sonal e) el control de cOllstituciotlalidad a cargo de los jueces. no como
(porque incluyen dentro de él al ministerio), I!ntrC el presidente de la replÍblica y sus su(lCrioridad acordada a éstos por sobre los otros poderes, sino como de·
ministros. fcnsade la consLitución en sí mismaeada vez que padece transgresiones.
e) En las relaciones ~Xl mó'8anos. las que se dan:
c') entre un órgano de poder (por ej., congreso o poder ejecutivo) y un sujeto 13. ~ En tomo de la división de poderes, el den'cho jlldicinl derivado de la
auxiliar de poder (que no eS órgano de poder, por ej., los partidos, el cuerpo electo- Corte Suprema ha sentado numerosos principios: asf:
• ral, los sindicatos. elc.): a} la doctrina d~ la limitac ión de los poderes es de la esencia de ese sistema de
e") entre un 6rgano extrapodeJ'l!s (que es órgano, por ej .. el ministerio) y un gobierno. que impone la supremacía de la constitución y excluye la posibilidad de
sujeto auxiliar del poder. la onmipotencia legislativa:
bo) ningún departamento del gohienlo puede ejercer lícitamente otras faculta-
des que las que le han sido acordadas expresamente o que deben considerarse con-
La división de poderes y su finalidad feridas por necesaria implicancia de aquéllas;
e) es una regla elemental de IIUCSU'O derecho público que cada uno de los tres
10. - Nuestra consti lución fomlaJ ha acogido el sistema clásico de la altos poderes que forman d gobierno de la nación aplica e intcrpre1a la consti tución
llamada división de poderes. consislcnle en el reparto de órganos y fun- por sr mismo cuando ejercita las facultades que ella les confiere respectivamente:
ciones dentro de la Iríada que la constitución formal compone con las de· d) para poner ell ejercicio un poder conferido por la constituci6o a cualquiera
nominaciones de "poder legislativo" . "poder ejecutivo" . "poder judi· de los órganos del gobierno nacional es indispensable admitir que éste se encuentra
cial" . autorizado a elegir los medios que a su juicio fueM':n los más COllduceotes para el
mejor desempt.:ño de aquéllos, siempre que no fu esen incompatibles con alguna de
Esto no quita que reconozcamos la existencia de órganos creados por la propia lal' limitaciones impuestas por la misma constitución.
constitución, a los que colocamos fuera de la trrada y definimos como~.xlmpoden>s.
14. _ La clásica expresi6n "división de poderes" -G.lnlO acabamos de ver-
ill sido usada habitualmente para aludir al reparto y a la distribución de órganos y
11. - Ladivisión de poderes responde a la ideología de seguridad y fUllciones den/ro del gobienl(J.
comrol que organiza toda una eSIIUCLura de contención del poder para pro-
No obstante, es importante que lracemos otros lineamientos de "separación"
teger a los hombres en su libertad y sus derechos. Es importante reconocer
adicionales.
que la estructura divisoria debe interpretarse en tomo de la finalidad básj-
a) Recurriendo a M~urice Ilaw'iou, cabe hablar de ¡res separaciones ineludi-
caque persigue: eviU/rla cO/lcelllraci611 que degenera en tiranía (o autori - bles respecto del poder del estado, que son: a') el poder religioso -o espiritual-
tarismo), y resguardar /a libertad de las personas. propio de las iglesias; a") el poder militar, propio de las fuerzas armadas: a''') el
poder econ6mico. que tiene su sitio en la sociedad. Ninguno de estos tres poderes
12. - De este breve repertorio de pautas deducimos un eje inaltera- ha de fusionarse. ni confundirse, ni entrar en maridaje con el poder estatal, como
ble quc resumimos as!: tampoco éste debe asumirlos para sr. No obstante, el poder militar tiene que subor-
dinarse al poder del estado en el estado democrático, y el poderdeJ estado tiene que
a) la i"dependencia de cada uno de los "poderes" con respeclo a los
ejercer rectoría y control respecto del poder económico -respetando razonablemente
otros;
el ámbi to de libertlld que corresponde al 6ltimo dentro de la sociedad-.
b) la limitaciólI de todos y cada uno, dada por: b') la esfera propia de b) Glosando a Pedro J. Frías decimos también que hay otra separación o divi-
competencia adjudicada: b") la esfera de competencia ajena; b"') los dere- sión entre poder y sociedad, porque el estado democrático deja fuera de su poder
chos de los habitantes; b"") el sistema tolal y coherente de la constitución todo el espacio de libertad necesaria a favor de la sociedad, sin intrusiollcs arbitra-
..
238 COMPENDIO DE DERECHO COSS 1I I UaO:-lAI. LA PARTIl OROÁ....1CA DE LA CONS"ITT\JaÓN 239

das, para que quede a sal vo el sistema de derechos de la persona y de las asor;;iacio- 17. - Al trasladar las nociones expuestas a la gradación o escala
rres. jerárquica de las funciones del poder, la consecuencia es ésta: en esa seríe
e) Alberto A. Spota, por su parte, habla de tres di,'isioncs: e') una primera. de planos del ordenanliento jurídico interno, lasupraordenaciólI y la sub-
entre poder constituyente y poder constituido; e") una segunda. entre estado fede- Ordj,/llCiÓf' tienen que limitarse dentro de la pirámide jurídica a las fuentes
ral y provincias, a la que personalmcnt~ agregamos, sobre todo despué~ de la refor- y productos estatales (o internos). O sea, a las funciones específicas del
ma de 1994, los municipios de prtwincia y la Ciudad AutónOIllO de B/lenos A ¡res; poder est.atal.
e''') la tercera, que es la clásico división de poderes dentro del gobierno federal y de
Si esto se accpta. el escalorwmieflto illfracollstituciollal coloca en el
los gobiernos locales.
primer nivel a la legislación, en el siguiente a la administració", y en el
d) Los añadidos que hCllns incorporado en el ine. c.'") del anterior ¡oc. e ) dan
tercero a la administración de jusI/da. Expresado en otros términos, se
lugar a una cuarta división entre: d') poder prol'incial y poder IIIlInicipal.
dice que la legislación solamente tiene por encima a la constitución: la
administración a la legislación; y la administración de justicia a la legisla-
ción y la administración, de modo que administración y administración de
La clasificación de las funcion~ del poder y la competencia de los
, justicia son "sub-legales".
organos
18. - Al no incluir en este esquema piramidal de gradación a las filen/es
15. - Cuando se toma rígidamente la sencilla uilogía de "collgreso exJraestntales viene bien recordar que -por ej.- un contrato puede dejar de aplicar
(o parlamento) - poder ejecUlivo - poder judicial" se anexa a cada uno de una ley, sal\'oque ésla sea de orden público: un convenio colectivo de trabajo puede
los respcclivos órganos su propia fUI/ció1/. que por consiguiente también aumentar beneficios previstos en una ley: los trataoos prevalecen sobre las leyes (y
se triplica: "función legislmh'a - función administrativa - administración algullOS tienen la misma jerarquía de la consl.ltución), etc.
de juslicia (o jurisdicción) ".
19 - El "paralelismo" de las COnllJeIencias es un principio genera!
No obstante, la realidad no es tan simple como estas categorías lo según el cual el órgano que tiene competencia para emitir un acto o una
sugieren. Por un lado. el poder ejecutivo cumple unaful/ció" política que nonna es el que dispone de competencia "paralela" para dejarlos sin efec-
no puede confundirse ni identificarse con la administrativa. También el 10.
congreso posee competencias de naturalezapolírica y de naturalezaadmi-
lIiSlrativa. Por otro lado, el poder judicial incluye en su órbita, fuera de su Así, las leyes que dicta el congreso se derogan por otras leyes del mismo con-
función estrictamente jurisdiccional, una dosis de función admi"islraliva. greso; los decretos o reglamentos del poder ejecutivo, por otros decretos o regla-
Hay, además, actividad jurisdiccional en tribunales que no son judiciales mentos del mismo poder ejecutivo, etc.
sino administrativos y. a su modo. en el congreso cuando lleva a cabo el Sin embargo, (..'Ste principio [)() es rígido ni absoluto, y adnúte excepciones.
juicio político, y en el Consejo de la Magistratura y el jurado de enjuicia-
miento en el mecanismo de juzgamiento para la remoción dejueces. 20. - La Zafia de reserva de cada poder compone un margen de com-
petencias propias y exclusivas que no pueden ser interferid~ por otro po-
16. - Esta indagatoria acerca de las fUIlCiones del poder se circunscribe a las der; hay así: a) una zona de reserva de la ley (o del congreso); b) una zona
que son propias del poder del estado, o sea, a las que con su ejercicio ponen en de reserva de la administración (o del poder ejecutivo); y c) una zona de
acciónfilentes estatales do producción jurídica (normas, actos, sc ntcncia~). reserva del poder judicial.
Dccilms esto porque no hay que olvidar que también existe una serie de fuen-
les "no-esta/ales", o sea. ajenas al estado, entre las que podemos mencionar a Algunos pocos ejemplos esclarecen el tema. Así:
Útulo de ejemplo: a) los tratados internacionales; b) los contratos; e) los convenios .) Re.ferva de la ley: se precisa ley para crear impuestos. para expropiar. para
, colectivos de trabajo; d) las sentencias emanadas de tribunales supraestatales; e) establecer delitos y penas, etc.;
los laudos arbitra tes. b) Reserva de la administración: el presidente de la repúblka y su jefe de
24() COMP8'.'DIO DE DERECHO CO:-ÓSTrnJCIONAL LA PARTE OROÁNICA DE LA CONS1TIlJaó:-; 241

gabinete: (que es ó rgano cxtrapoder) nombran al personal que la colIStitución prevé 23. - La impuraci611 de fu nciones, a diferencia de la delegación,
rifa la admi nistración pública o para cargos determinados de nalural..:'l.a política: implica que dentro del ámbito de un mismo 6rgal/ o de fX)der éste enco-
tienen el respeclivo poder reglamentario. elc. ; el presidente "deleg"" en el jefe de mienda o atribuye parte del ejercicio de sus competencias a otro órgano del
gabincl": las facullades que la constitución señala, etc.:
mismo poder. o a personas fTsicas que lo integran, o a un órgano ·'exlfapo-.
e) Resen'u del poder jl.diciol: los tribunales de justicia dictan sentencia en deres" con el que se relaciona; así. el congreso, o unade sus cámaras, a una
[Olll procCIM)S de su competencia. ejercen privativa[lK':lltc el conlrol constitucional.
comisión investigadora o de seguimiento; el presidente de I~ república al
ele.
jefe de gabi nete. etc.
21. - El diagrama de la competencia lleva a proponer que:
24 . - Con la refomlO COI/SlifllCiol/al de 1994 hay cláusqlas severas
a) Cuando Ii! constitución scñalp. a qué órgano pertenece una compe· que prohíben la delegación legislativa (art. 76) o el ejercicio par e l poder
tencia, quiere decir que. implícitamente, tal competencia 11 0 puede --como ejecutivo de competencias que ~rteneccn al congreso (art. 99 inc. 3°);
principio- ser cjt;rcida por otro órgano; por ej.: señalar qui ~ 1l debe di ctar pero a renglón seguido se prevén excepciones.
las leyes apareja señalar quien "no debe" dictarlas; •
b) Cada competencia asignada a un órgano involucra la de if/Wr{Jre-
flír y aplicur las normas de la conslirución que la conceden (cad" ve7.. que Los oblig¡:tciones constltucion:tles
el órgano va a ejercer esa mismacompclencia): de esta pauta se infiere que
todos los órganos de pcxIer deben. cuando usan sus competencias constitu· 25. - Cuando el ejercicio de una competencia es obligalorio estamos
cionales. preservar la ilupremacía de la constitución; ante obligaciones cOllsli/Uciona/es de naturaleZ'd eS/alal.
e) En el marco uc ubicación de cada competencia. el órgano que la Hemos de agrupar algunos ejemplos.
ejerce goza de margen para escoger los medios razonableil que considera a) Obligaciones globalmeme imputadas al "gobienlO federal" .. así,
más apropiados y conducentes, siempre que no resulten incompatiblescon las que surgen del arL 5° (en cuanto a la garantía federal a las provincias) y
el principio de razonabilidad y con las limitaciones que surgen de la cons- de los arts. 25, 27 y. en gener.d . de las normas que reconocen derechos que
titución : todos los órganos de poder deben hacer efectivos cuando ejercen su propia
d) Como principio general se puede aceptar que. otorgada una com- c'.'ompetenda;
petencia por la constitución. el órgano respeclÍvo dispone de los llamados b) Obligaciones que se imputal/ al "esUldo", sin determinar el órga·
"poderes implfciros" para hacer efeclivos los que le han sido expresamen· no. cpmo la del ano 38 párrafo tercero;
te reconocidos.
e) Obligaciones que se imputan a las "auIOridades", sin determinar
el órgano, como en los arts. 41 y 42;
22. - El principio di visorio encierra un reparto de competencias en·
treórganos separados. Tal adjudicación obliga a plantearse la pregunta de d) Obligaciones que se imputal/ al {'col/greso"; así -a nuestro crite-
si es válido que un órgano transfiera motu proprio a otro esa competencia, rio-Ias Que emanan de los arts. 14 bis y 24: y las del art. 75 inc. 2° (en
total o parcialmente. Es lo que se denomina delegaci6n de competencias. cuanto a la coparticipación impositiva); inc. 6°. inc. SO; inc. 16; inc. 17:
facultades, o poderes. tne. 19; inc. 23: inc. 32:
e) Obligaciones que se imputan a "cada cámara" del congreso. como
La delegación que en nuestro derecho se da en llamar "propia ", consiste las emergentes de los arts. 63 a 67 (excluido, en el arto 66, el poderdiscipli·
-según fórmula judicial de la Corte Suprema- en que una autoridad investida de un narlo', Que es de ejercicio optati vo);
poder detcnninado hace pasar el ejercicio de ese poder a otra autoridad o persona,
descargándoto sobre dla. EJ;ta forma de detegaci6n. a falta de norma habilitante en f) Obligaciones que se in/pulall al "gob ienlO" (que cor~spol/da),
la constitución. es I'io/n/oria de la constitución. como la del art. 62;
-------

242 COMpe.;l){Q DE DERECHO COSS [¡ fUQONAL LA PARTE ORGÁNiCA DE LA CQ>l1,TI11JOÓN 243

g) ObligaciolleJ que se impuran al "poder judicial"; implícitamen- quiere, o se abstiene. Por ej.: el llamado poder tributario; las del arto 75
te, entendemos que se trata de las que incumben a los tribunales de justicia incisos 22 y 24; las de los arts. 125 y 126. cte.
para tramitar y decidir las causas que son de su competencia y que se pro- b) lIay competencias para cuyo ejercicio la conslilUción parece COIl-
mueven ante ellos. como asimismo las del Consejo de la Magistratura en ceder al órgano el plazo que éste considere oportuno tomarse para usarla.
los incisos 1, 2 Y3 del ano114, y las del jurado de enj uiciamiento para dar Así interpretamos al arL 11 8 sobre juicio por jurados.
trámite a la acusaci6n efectuada por el Consejo de la Magistratura (an. •
e) Hay competencias que el órgano puede ejercer cuando prudencial -
11 5); mente considera que debe hacerlo; por ej .. declarar la guerra, o el estado de
h) Obligaciolle.~ que se in/pulall al " poder ejecuti vo", como las del sitio. o intervenir una provincia,
arL 99 incisos 1°, SO, 10. y 12: d) Hay competencias que tienen marcado un cOlldlcumamiel/lo ex-
i) Obligaciolles que se imputan al "jefe de gabinete", como las que prcsQpor la constitución y que. si se ejercen fuera de él. violan laconstitu-
surgen del art. 100 incisos 1",5", 6°,7', 8°, 10. 12 Y 13; y las del arto 101: ción; por ej.: el eSlado de sitio. la intervención federaL el esLablecimiento
j) Obligaciones que se imputa1l a los "mi1listros"; así, la del art. de impuestos directos por el congreso. deben sujetarse al marco de situa-
104: ciones, causas y condiciones que daran'lCnte eslá Irazadoen los arts. 23. 6°
k) Obligaciones que se imjJuu11! a las "provincias", como las de los Y75 jnc, '1:', respectivamente.
arts. 122 y 123: y la del art. 127 (en cuanto a someter las quejas contra otra e) Hay competencias para cuyo ejercicio la constitución //0 señala
provincia a la Corte Suprema); condicionamientos ni oportunidades. Por ej.: declarar la guerra, •
1) Obligaciolles que se imputan a los •. goben/adores de provincia ", t) Hay competencias que abren variedad de opciones en el momento
como la emanada dcl an o128: en que son ejercidas con suficiente margen de arbitrio parad órgano, pero
11) Hay obligaciones para cuyo cumplimiento la conslitución fija un que quedan orientadas y enderezadas por un claro criterio consti tucional
plazo; así. el an o39 para que el congreso trate los proyectos de ley surgi- defotalidad. Así, la cláusula del progreso del an. 75 inc. 18. y las compe-
dos de iniciati va popular: la del jefe de gabinete que debe informar una vez tencias de ejercicio obligatorio que encontramos en el ine. 19.
por mes a cada cámara del congreso sobre la marcha del gobierno. (art. g) Hay competencias quc. euando se ejercen, imponen acalar una paUla
10 1); las referidas en cláusulas transilori as (6", para establecer el régImen inesquivable que suministra la constitución . Por ej.: cuando el congreso
de coparticipación; 13", para el funcionamiento del Consejo de la Magis- dicla la ley de ci ud adanía, debe necesariamenle acoger el principio de la
tratura: 15". parar elegir al jefe de gobierno de laciudad de Buenos Aires y nacionalidad "natural" (jus soli); cuando dicta 1a.1O leyes laborales (o códi-
para dictar la ley de garantía federal; todos estos plazos quedaron incum- 10 de trabajo) debe "asegurar" los derechos del art o14 bis.
plidos).
28, - Veamos también algunas de las precauciones especialrrente dirigidas a
26. _ Cuando las competencias de ejercicio obligatorio están impuestas con contener al ejecutivo: a) el arl. 29 ful milla la concesión por parte del coogreso al
una impcratividad que no deja margen para que el órgano obligado escoja y decida presidente (y por parte de las legislaturas a los gobernadores de provincia) de facul-
la oportunidad de hacer efectivo aquel ejercicio, y con el incumplimiento se blo- tades extraordinarias, dc la suma del poder público, y de sumisiones o supremacías:
quean derechos personales, estamos ante una omisi6n inconslitrlcional o incol1sti- b) el arto 109 prohíbe al presidente ejercer fu nciones judiciales, arrogarse el conoci-
tucio nalidad por omisión. miento de las causas pendientes o restablecer las fenecidas: c) d an. 23 le veda
condenar por sr o aplicar penas durante el estado de sitio.
27, - El panorama competencial admite todavía otros comentarios .. Autorizada la reelecci6n dd presidente y vice por el art. 90, surgen dos prohi-
adicionales sobre algunas de sus modalidades. Así: biciones: a) al limitar el descmpei'lo solamente a dos periodos, y b) los cuatro años
a) Hay competencias de ejercicio potestativo: el órgano las ejerce si del perlodo hacen ellipirar el desempeño del cargo, "sin que evento alguno que lo
,

244 CO),iP'P,OIO DE DERECHO CONSTrn.JOO¡'¡"'1. LA PARTE ORGÁNICA DE LA CO~SII I Ua Ó/'l 245

haya intemllllpido pueda ser motivo de que se le complete más tarde" (arts. 90 y jo de la Magistratura, y jurado de enjuiciamienlo); algunos de estos ótga·
91). nos son ul/ipersol/alesGueces de \" instancia) y otros son colegiados (Corte,
cámaras de apelaciones, Consejo de la Magistratura, jurado de enjuicia-
29. - Una vez que tmtados jlltemaciol/oJes se incorporan al dere- miento).
cho imemo. con o sin jerarquíaconsLitucional . surge la obligación cOrlsr;- Antes de la reforma de 1994 ubicábamos entre los órganos e.rlrapo-
luciol/al de naturaleza illlenwciollol, rererida al cumplimiento del trata- tkre~' a dos: a) el milllslerio; b) el vicepresideme (Je la rep,íblica. como
do, lo que parale lamente origin a respollsabiTidad intemaciollal si se órgano extrapoderes respecto del presidente (formandOparte -en cambio-
incumple o se viola -por acción u omisión-o del congreso como presidente nato del senado).
Esto se mantiene, pero se ru1aden olrosórganosextrapoderesque son;
30. - Queda. fm almcOlc , la curiosidad de muchos "deberes" (u obli-
gaciones) conslitucionales que pesan sobre los órganos de poder como
a) la Auditoría General de la Naci6n; b) el Defel/sor del Pueblo; e) el
Ministerio Público,
prohibiciones. Es el ámbito de [o que tales órganos l/O ';debell" hacer. Lo
que se les prohíbe hacer es un límite a la competel/cia. Cuando hablanlOs del mjnisterio en su relación con el poder ejecutivo,
A tí! ulo cnunciati vo. pensemos en la prohibición de censurar la pren- hemos de decir que la reforma ha dado perfi l propio al jefe de gabif/ele de
sa (an. 14). de alterar reglamentariamente los derechos y garantías (an. minislros como nuevo órgano eXlrapoder.
28), de gravar la entrada de e;IC uanjeros{an . 25). de confiscar la propiedad
(an. 17), de imponer tri butos a la circulación territorial (ans. 10 a 12), etc. 34. - Una característica nueva que atañe a la división de poderes
radica en que ahora hay órganos de poder de la tríada originaria que tienen
3 1. - Hade tomarse en cuenta que numerosas prohibiciones son ¡/l/- iruervenci6n en otros, que componen otros, que participan en el ejercicio
plíciras (por ej .. la que pe~a sobre un órgano para /lO invadir competencias de competencias de otros.
de otro, la de /lO dictar sentencias arbi trarias, elc.). Asr, los" órganos polflicos" resullames de elección popular partici -
pan, conforme al arto 114, cn el ejercicio de las facultades que esa nonna
asigna al COllsejode la MagislralUra. incluido en el capítulo que la cons-
El nuevo esquema del poder en la reforma de 1994 titución destina al poder judicial. Ello porque tienen representación en la
integraci6n de aquel Consejo. Asimismo, según el art. 115, cl jurado de
32. - La reforma cOllstitucional de 1994 modilicó cllmucho la estructura del enjuiciamiento de jueces de los tribunales inferiores a la Corte Suprema
poder si se la compara con la histórica de la constitución fundadonal de IK53- J860. está parcialmente integrado por legisladores.
Lo iremos detallando a medida que hagamos las explicacioncs referentes a cada uno
de los órganos. 35. - S in que sea totalmente análogo al caso recién scilalado, la Comisión
' icamerof Penllllllenle instituciona1i7..a dctNro del congreso un órgano compuesto
33, - La trinidad originaria subsiste con su tipológía clásica: a) un por legisladores de cada cántara, que ha de integrarse respetando la proporcióll ~
congreso bicameral que tiene naturaleza de órgano complejo (porque sc lu representaciones políticas (o sca, partidarias) de cada una de ellas.
compone de d<)s cámaras, cada una de las cuales es un órgano) y de órgaf/o Tal Comisión tiene tres competcncias: a) intervenir cuando el poder ejecutivo
colegiado (porque está fomlado por muchas personas físicas en su con- dicta deCTf!los de necesidad y /lrge/rcia. a modo de seguimiento y control antes de
junto bicameral yen cada cámara separadamente); b) un poder ejeculivo que los trate el congreso (an. 99 ¡nc. 3° párrafocuano): b) controlar los decretos que
que para nosotros es un órgano unipersollal porque lo forma una sola por delegación del congreso (art. 76) dicta el poder ejecutivo (art. 100 inc. 12): c)
persona, que es el presidente de la república; e) un poder judicial que se intervenir cuando el poder ejecutivo promulga parcialmente una ley de acuerdo al
arto SO, a efectos de considerar el decreto de promulgación parcial (art. 100 ine. 13).
compone de varios órganos (Cone Suprema, tribunalt:s inferiores, Consc-
COMI'fNDIO DE DERECHO Co:-<"sIIlUaOSAL
LA PARTE ORGÁNICA DE LA CONSTTIlJOÓN 247

El poder ejeculú'o b) El Defensor del Pueblo (an. 86):


e) Fl Ministerio Público (an. 120).
36. - Veamos algunos de sus actuales caracteres:
a) J)os prollibiciolles enfáticamente expresas se atenúan en las mis-
mas nonnas que las contienen mediante excepciones: se Lrata de la que El poder judicial
impide al ejecutivo emitir disposiciones de carácter legislalivo, salvo cuando
se Lrata de decrew.l' de lIecesidnd y urgencia (an. 99 ¡ne. 3° párrafos se- 38. - En el poder judicial. además de las modificaciones para la de-
gundo y tercero) y de la que veda al congreso la delegaciólllegislativa en signación y la remoción de los jueces federales (con el régimen especial
el ejecut ivo salvo en la hipótesis prevista en el ano 76. que rige para los de la Corte) que surgen de la creación del Consejo de la
b) La ley de convocatoria a consulla. popular 110 puede ser velada Magistratura y el jurado de enjuiciamiento, se ha encomendado al primero
(art . 40). un a serie de facultades no judiciales que se desglosan de la acumulación
e) El presidel/te reliene la "titularidad" de la administración general vigente antes de larefomla.
del país y es responsable político de ella, peTO es eljefe de gabinete quien
"ejerce" esa administración (arts. 99 inc. l° y 100 arto 1").
Los partidos políticos
d) El lIombramiemo de jueces federales queda modificado: d') los
miembros de ¡aCorle siguen siendo designados por el ejecuti vo con acuer- 39. _ A los partidos polfticos se los inserta o loma en cuenca con especial
do del senado, pero éste requiere un quórum de decisión agravado y la protagonismo en algunos órganos de poder, como son el senado, la Auditoría Gene-
sesión en que se preslael acuerdo tiene que ser pública (an. 99 ¡nc. 4~: d") ral de la Nación, la Comisión Bicamerat Permanente, y en la fónnula para la elec-
los jueces de tribunales inferiores son designados previa intervención dcl ción directa de presidente y \'icepresidcntc.
Consejo de la Magistratura (art. 99 mc. 4° párrafo segundo, y arto 114).
e) El arto 100 inc. r. al prever las competencias del jefe de gabinctc
de mini sLros. hace referencia a posible "delegación" de facultades que le ÚJs cotltroles
haga el presidente: similar "delegación" aparece en el mc. 4°.
40. _ Se desparrama e n el texto constitucional reformado una serie de posi-
f) Hay nombramienlos de empleados de la administración que cslán a bles controles, mtes inexistentes, algunos desde el miSD.:l poder, y otros desde la
cargo del jefe de gabinete y no del presidente (art. 100 inc. 3"). sociedad. Podemos mencionar, además de los citados en el n° 37:
g) El congreso puede remover al jefe de gabinete (art. 101). a) El organismo Jiscalfederal para controlar y fiscalizar la ejecución de las
pautas que rigen la coparticipación federal impositiva de acuerdo al arl. 75 inc. T'
h) El presidente ha perdido la jefatura local e inmediata de la capital (conforme a su párrafo sexto).
federal (por supresión del ine. 3° del que era ano86, hoy arl. 99).
b) Se prevé la existencia de organislIJ)s de control con participación de las
provincias y de los usuarios y conS/lmidores para la tutela que a favor de los últi-
mos obliga a discernir el art. 42.
Los órganos de cOlllrol
c) El derecbo de inicialiva legislaliva popular (art. 39) Y la consulta popular
(art. 40) abren espacio a la democracia participativa.
37. - La refonna de 1994 ba institucionalizado Constitucionalmente tres ór-
d) La acción de amparo para proteger derechos de incidencia colectiva en
ganos de control que personalmente reputamJs órganos e:ctrapoderes. Son:
general en las cuestiones a que alude el art. 43 plÚrafo segundo, y la triple legitima-
a) La Auditoría General de la Nación (art. 85): ción procesal que reconoce, significan una ampliación favorable en el control judi-


CO~I'E",'l)tO DE DEItECHO CONSTmJt.,ONAL LA PAKTE OROÁNlCA DE LA CONSTII1JdÓN lA9

cíal. Lo UlÍSIUO cabe decir del habeas dara (párrafo tercero del citado artículo) y del lico son, a esle fin de atrapar penalmenfe 11.1 conducta tipificada, 105 que la
ha!Jea.t corpus (pálTafo cuarto). constitución diseña y establece.
el El aTt. 85 incorpora controles a cargo del congreso y de la Auditarla Gene- También deClara la norma que "esta constitución" mantendrá su im-
ral de /tI Nación ~obre el sector púhlico oacional y la actividad de la administración perio aunque su observancia se interrumpiere por los actos de fuerza
pública, respectivamente. incriminados. Y añade que taJes actos serán illsanablemetlle nulos.

Hay dos conductas tipificadas como delitos: a) las de qu¡~ue, sC<\n t'jecurores
La descelltraliwci6n polrtica de actos defue17J.1 calma el orden institucional y el sistema demotrlitico; b) la de
quienes. como !,;onsccuencia de tales IIctOS, USllrpe/J (es decir. I!Jertan "de faélo")
4 1. - En orden a la de¡;ccntralización polftica, la reforma presenta dos mati- los funciones que la constitución señala para las autoridades creadas: por Cllll, su-
ces: a) explfcitamcnte reconoce la autonomía de los IIJunicipio$ de provincia (an. puesto para el cual se suma la responsabilidad civil a la l'C§ponsabllidad penal.
123). y b) establece el gobierno autóno¡m de la ciudad de BuellOs Aires, erigiéndola Las acciones peno les para la persecución de ambos delitos S<ln imprescriptibles:
en un sujeto de la relación federal (art. 129). p<lfa los que los cometan hay inhabilitación a perpetuidad para desempeñar cargos
públicos: y queda excluido el beneficio d~1 indl.lto y de [a cO/wlII/ación de pertas.
El art. 36 no fija la sanci6n penal, pero hace una remisión clara: será la misma
El artículo 36 y el poder que tiene prevista el viejo arto 29. Este artfculo -sobre concesión de facultades ex-
traordinarias y la suma del poder público- reenvía a su vez a la pena de la tlttiáóll
42. - Consideramos quc cn la introducción al estudio del poder halla a la patria, que se halla estClblecida en el código penal.
ubicación el nuevo an, 36 surgido de la rcfomla constitucional de 1994, La acculn penal es de ejercicic> obligatorio para el Mini.~rerlo IJliblico. en la
entre otras razones porque tiende a resguardar la Iral/SII/isi6n legal del med\Uu en que entendamos que tal deber dimana directamente de la constitución en
poder y, 0011 ella, la legitimidad de origen del poder mismo y de los gober- razón de estar también directamente tipificado el delito por sus llontUS. Es válido,
además, argUir que es tirlllar posible de la llf:ciÓfl cada cilldadllno. Yti que el párra-
nantes que lo ponen en acción. así como la defe1lsa en la COllslituciólI.
ro cuarto del artfculo dispone que todos los ciudadanos tienen el derecho de resis-
tencia contra quienes ejeculan los actos de fuerza enunciados en él.
Es liugesliva la ubicaci6n del art. 36, que preserva al poder, dentro del rubro de
[os fW eYOS dereclws y garantías. Por eso, también 10 liganns al sistema de dere-
chos. . 45. - Qué es este derecho de resistencia, no viene definido. Tal vez cabe en-
samblarlo con el arto 21, que obUga a todo ciudadano ti annrlrsc en defensa de la
En efocto, es fácil entender que el orden instiWcional y el sistema democroti- co"stiwción.
ro hallal! eje vertebral en dicho sistema de derechos, y que atentar contra el orden
institucional democrático proyecta consecuencias negativas y desfavorables para
46. - El penúltimo párrafO del arto 36 define como contrario al sisfe-
los derechos. No en vano en el aft. 36 también viene encapsulado, con definici6n
expresa. el derecho de resistencia dentro del marco genérico que incrimina las con-
ma democrático al grave delito doloso cOlltra el estado. qtlC conlleve en-
dUCllIS que lesionan al bien jurídico pena/mente tutelado en forma directa por la riquecimiemo para quien lo cometa.
con~titución, para evitar la ruptura en la transmisi6n legal del poder.
47. - El arto 36 añade que el congreso "sancionará una ley sobre
43. - El arto 36 procura enseñar que el orden institucional y el siste"", demo- ética pública para el ejercicio de lajunció,,".
crático deben ser respetados. Tiene también algo de prevención, de admonición y
de disuasi6n para que la continuidad constitucional no se interrumpa.
El poder en el den:cho público provincial y en la ciudad de Buenos
44. - Lafigura peflal que describe el art. 36 consiste en interrumpir Aires
la observancia de la constitución por actos defuerza contra el orden ins-
titucional y el sistema democrático. Orden institucional y sistema democrá~ 48. - La parte orgánica de la constitución viene incorporada en el tcxto como
250 COMPENDIO DE DERECHO CONSTrnJOONAL
251

"Segunda PancO., y lleva el título de "Autoridades de la Nación", En nuestro léxico


personal dedillos "Autoridades del Estado".
Ensambladas ambas pautas, preferimos decidir la respuesta a favor
del margen más amplio de autonomía posihJe para la ciudad de Duenos
El título primero de esta segunda parte se encabeza con el nombre de "Gobier-
Aires, y por ende decimos que la ley que razonablemcnte sirúa en la órbita
no Fedemt' y abarca del arto 44 al arto 120.
federal detcnninadas competencias para garanúa de los intereses federales
El título segundo se encabeza con el nombre de "Gobiem()S de Provincin", y
implica que esas competencias federaJes quedan ta.xativamellte estableci-
abarca del arto 121 al arto 129. Es en este sector donde el constituyente de 1994 ha
incluido el nuc\'o régimen autonómico de la ciudad de Buenos Ai/'l!'s, la que si bien
das, y que el remanente favorece a la ciudad; de este modo . el espacio de
no tiene catcgoña igual a la de las provincias. tampoco es un municipio común ni BUl'OIlomía de la ciudad de Buenos Aires rC(.'Onoce una fuente distinta a la
un territorio ímcgratn!ntc fl,.-deralizado. de las provincias. porque según el arto 121 son las provincias las que "a
Del precedente diagrama divisorio y de las denominaciones empleadas surge lravés de la constitución" han hecho [a delegación de poderes al gobierno
claramente que para nuestra constitución son "Autoridades de la Nación" lanlO las federaJ , por [o que retienen lo "no delegado": en tanto para la ciudad de
que componen el gobierno federal como las que integran los gobiernos de provin- Buenos Aires ha sido la misma constitución federal la que ha efectuado la
cia, y el gobierno autónomo de la ciudad de Buenos Aires. distribución de competencias a tenor del arto 129 (y no la ciudad u a través
de la constitución''), de lo que inferimos que la constitución deja a la ciu-
49. - No obstante la autonomía de las provincias, y la que surge del dad todo el residuo de competencias que expresamel~t e no adjudica al go-
art. 129 para la ciudad de Buenos Aires, la constitución les traza algunos bierno federal.
parámetros: por ejemplo, la tripartición del poder obliga a acoger el eje
fundamental del principio di visorio; si para las provincias así se entendió S l. - El reparto de competellciaJ entre el estado federal. las pro-
siempre con base en el ano 5°, también el nuevo arl. 129 lo señala para la villcias y la ciudad de Buenos AireJ abre un arco muy amplio de materias,
ciudad de Duellos Aires al bacer mención de sujefede gobierno de origen entre las que elegimos éstas:
elect ivo y de las facultades de legislación y de jurisdicción: el sistenUl de a) En cuanto al sistema de derechos. la obligación que para las pro-
derechos obliga, como piso núnimo; asimismo, queda trasladada la foml(( vincias se desprende del art. S° representa un piso y no un techo; por ende
republicana de gobierno y, en su esencia, el sistema democrático. decimos que, sin alterar el reparto de competencias y sin ejercer las que
pertenecen al estado federal. las provincias pueden ampliar el plexo de
so. - Desde la reforma de 1994 la dualidad de estado federal y pro- derechos.
vincias muestra un rostro parcialmente nuevo, porque aparecen las men-
b) Respecto del derecho a fa educaci6u y a c.uanto le es aledaño, ya
ciones expresas a los mUllicipios provillciales y a la ciudad de Buenos
antes de la reforma de 1994 se reconocía a las provincias una serie de
Aires. esta última como un sujeto de la relación federal.
competencias para completar y adecuar la ley general de educación a cargo
El lineamiento básico es éste: del congreso; desde la reforma, creemos que el art. 75 ¡oc. 19 párrafo ter-
a) Desde la constitución federal se reconoce en el arl. 123 la autol/o- cero no ha innovado en la materia. máxime cuando: b') el art. 125 diseña a
mía de los municipios de provincia. con lo cual el disel10 del poder en favor de las provincias y de la ciudad de Duenos Aires una competencia
jurisdicción de las provincias cuenta con una pauta obligatoria impuesta COl/currellle con la federal para promover la educaci61l. [a ciencia, el co-
por aquél la. Puede decirse, entonces. que la autonomía municipal surge de nocimiento y la cultura.
la constitucional federal, y que las provincias le confieren desarrollo cuan- c) En cuanto a la normativa vinculada con el derecho ambiel/lal, el
do organizan su estructura de poder. arto 41 desglosa las competencias así: c') al estado federal le corresponde
b} Para la ciudad de Buenos Aires, la cuestión institucional se com- dictar la de preSU¡meSIOS míl/imos de protección, y e") a las provincias, las
plica; b') el ano 129 adjudica a la ciudad un régime1/ de gobiemoaUIÓ1/0- necesarias para complementarla.
filO. con facultades de legislación y jllri.sdicciól/; pero, b"} para resguar- d) En orden a la cláusula del an . 75 ine. 17 sobre los pueblos indíge-
dar los imereses del estado federal mientras la ciudad sea capital, el con- nas, su parte final reconoce a las provincias el ejercicio de facultades con-
greso debe dictar una le)'. currentes con las del congreso.

252 Co~~¡..nlo DE OI:.RECHO CO:>lSrrruaO:-;'AL LA PARTE ORGÁ."ICA L>E LA CONSTmJdÓN 253

e) A las provincias se les confiere la facuhad de crear regi ol/e.f para Ido'), produdéntlosc el impedimento funcional del congreso; e) el presi-
el desarrollo económico y social (art. 124). . defácro ha asumido las competencias del COl/g r eso; d) sobre la va-
1) Asimismo, las provincias pueden celebrar cOl/venios ;lIIemacio- . en el ejercicio de las mismas,lajurisprndellóll de la Corte ha sido
I .
I/a/es con las limitaciones consignadas en el arto 124 (la ley 24.588 extien-
de esta facullad también a favor de la ciudad de Buenos Aires).
Los dos últimos períodos de facto fueron muy largos: d..: 1966 a 1973, y de
a 1983.
En el siglo pasado. Milre JI/e 1"'esiJcllle delacIo cuando, eOlm gobemador de
El poder y las épocas de facto
provincia de Buenos Ain.'s, asumió la presidencia de la república después de
gohierno federal a raíz de la batalla de Pavón. J...:,n 1865, la Corte Supre-
52. - Nuestro dercchoconstitucional matcrial ha acuñado unacspe- • oc pronunció sobre el ejercicio de sus facuHlldes invocando el hC\;ho de la revo-
cíal situación de emergencia, conocida con el nombre de emergencia revo- triunfante y el asentimiento de los pueblos (caso "Martfncz e/Otero").
lucionaria. Es la que corresponde a las épocas defaclO, y su ubicación se En 1930 Y 1943, reconoció en sendas Acordadas el "título" de facto de los
encuentra en ladoctrina de facto, que trabaja sobre dos supucstos: el golpe '0' presidcntes.
de estado y la revoluciól/. Ambos significan la ruptura de la col/tilluidad
COlls t it uciona/. 55 . - De una admisión muy estríela q ue en lomo de la validez y la
de las 1I0 nlUlS legislatims emanadas del ejecuti vo de facto en
Tal ruptura acontece cuando SI.l quil!bra el orden de sucesión o tmnsmisión del del congreso disuelto efectuó la Con e entre )930 y 1947, se
poder.
a convalidaciones más amplias a panir de 1947, pud iendo separarse
Suck di~!i n gu irsc golpe de es((ulo y rl!\'Olución - por 10 menos desde la óptica , jurisprudcnciales con varianlCs: así, entre 1973
consLitucional- en cuanto el primero se limita a cambiar los titulares del poder dan- e n ade lante.
do lugar a la ocupación de éste por vfas de fuerza no pre\'istas en ta constitución o
en l~ leyes, núelltras la segunda involucra un cll mhio institucional que produce En su sentencia del 27 de diciembre de 1996, en el caso "Herráiz,
altcraciorle~ en la e~tructura constitucional. etc" Eduardo clUni versidad de Buenos Aires", la Corte sostu 'lO que las
de faclo son válidas mienlras no se las deroga.
La ruplura de la conlinuidad en la lfansmisión del poder provoca la
ilegitimidad de origell. 56, - En un si mp le balance queremos recordar que:
a) el seguinúento que siempre hicimos de la doctrina de facto y de su reitcrada
53. - La doclrirU/ tk Jacto integró nuestro de recho constitucional material, I en la constitución material nunca nos llevó a adnútir una supuesta
sobre todo a tra\'és de fue ntes de derecho espontálleo y de derecho jlldiciaf, de la emergenc ia provocada por las interrupciones de la
En la doctrina de racto argentina, recién después de concluido el período de constitucional:
facto de 1976-1983, se ha COJllCtlllldo con generalidad a tildar a los ocupantes del b) tampoco a considerar a los estatutos y las actas enúlidos en los pt.:ríodos
podercomo "ulurpadores", Hasta enlonces, siempre se los considero casi pacffica- 1966-1973 y 1976-1983 como extracunstitucionales, o superiores a la c.onstituci6n,
mente como gobernantes "de facto", O de su misma jerarquía;

e) la acumulación de poder y la arbitrariedad en su ejercicio se acentuaron


54. - Las rupturas de la continuidad constitucional en el siglo XX progresivamente, hasta alcanzar su punto máxirro entre 1976 y 1983:
comenzaron en 1930, y se repilieron en 1943. 1955, 1962, /966 Y /976. d) las épocas de facto causaron deterioro e ingobemabilidad eu nuestro siste-
El esque ma más simple de la época de faclo iniciada en cada una de esas ma político, y habitualmente concluyeron fracasando en los fines y objetivos que
fechas nace ver que: a) e l presidente defacto ha reemplazado lisa y lIana- fueron proclamados como justificaci6n iniciat cada vez que las fuerzas armadas
mcnte al prcsidenlc de iure con iguales competencias; b) las cámaras del accedieron al poder:
congreso han sido disueltas (en 1962 varios meses después del golpe de e) en la constitución material SI.! ejerrq>larizó de~de 1930 la competencia de
254 COMPENDIO DE DERECHO CONS I [ [ UaONAL LA I'ARTE ORGM1CA I>E U. COXST1TIJOÓN 255

los gobcmantcs de facto para r<'lIxwcr a los jueces de: sus cargos, llegándose a des- La diferencia entre faclOr de presión y factor de poder se nos hace
tituir a los de la Corte Suprema en 1955, 1966 Y 1976: y fácil: el factor de presión es el que ejerce gravitacióll o ¡"flue"cia,
O aunque no fu e pacífica la jurisprudencia sobre el status de los jueces que lanto el faclor de poder es también una fuerza política pero que en
dcsignaron los gobernalllcs de raclo para <..-ubrir vacantes. siempre se reconoció cOlllif/ua - aunque acaso sea latente- está presente -en aclO o en
inlul1gibifidud {/ las sell¡encías dictadas por los tribunales de justicia en los pctío- ellla generalidad de fas decúiof/es que adopta el poder polí-
dos de racto. {XIsee una visión O una p.JSición políticadeconjwlLO queno se
un único aspcetoo contenido de las posibles decisiones del

Las presiones sobre el poder


Tanto los facl ores de presi6n como los factores de poder en cuanlo fuerzas
57. - El lema de las presiones que se ejercen o r<.:CDCI1 sobre el po.xIer es pro- ue la sociedad) operan de algún modo como un con/rol
pio de la ciencia política y de la sociología. No obstante, como fen 6meno que acon- poder, sea en UII área limitada de decisiones determinadas, sea en la gene-
tece en la constitución /lw/erial, no hcmos de onútir unas breves explicaciones. ""d,m,"',;~ o de todas.

Una frase de Alfredo Sauvy se vuelve para ello elocuente: la cOf/s firu- 59. - Asimismo, no hay 4ue olvidar que adem.is de las presiones que provie-
ción dice eDil e/a ,idad "quién" ejerce el poder. pero ignora las presio- desde la sociedad, otras tienen como autores a oJ'(!radores gubernamentales
nes que puedel/ ejercerse "sobre él". ... ,. cuando un ministro presiona al presidente de la república, o éste a legisla-
También hemos de recoroar que sujetos que se encuentran constilUcio-
Esta alimlación nos hace sostener que: institucionalizados pueden actuar como factores de presi6n o de poder
a} cualesquiera sean las presiones y su intensidad, el goviemo siem- la Iglesia Católíca, los pan idos polrticos, las entidades sindicales-.
pre queda radicado en el emplazamiellto formalmeute estableciclo por
la constituciól/; 60. - En la medida en qne el fin y los medios que empleen los factores de
los factores de poder sean /lci/os, las presiones significan un JT\I!WO de
b) sin transferir sus competencias, ocurre que muchas veces los influencia que no parece disvalioso. Las excepciones que nos merecen
detentadores del poder debilital/ o disminuyen su capacidad de decisión negalh·o de valor son, por ejemplo:
propia. y las decisiones que adoptan qucdan condicionadas IJor las pre- a) las presiones que ~ ejercen $Obre el poder judici(ll, porque los jueces de-
siOl/es, al extremo de que el contenido materia] de aquellas decisiones pue- O> ,e~M siempre exentos de interferencias en el ejercicio de su funci6n;
de venirles impuesto desde afuera a los gobernantes por los sujetos
presionantes;
b) la excesiva concentración ° acumulaci6n de poder (social) en un determi-
!leCtor o grupo;
e) en ningún supuesto aceptalllos decir que a raíz de este fenómeno e) la corporati\·i1.aci6n que pulveriza a la sociedad con una atomización o frag-
exista un gobiemo (o un poder) oculto o paralelo, o un "poder de f¡ecllo", de grupos que, sin solidaridad convergente al bien común público, pug-
frente al que se seguiría ll amando "gobierno oficia!" o "gobierno visible"; propio interés sectorial y fracturan el consenso de base;
d) la expresión que parece más adecuada para resaltar la gravitación d) la propensi6n o proclividad que por pane de los mismos operadores guber-
de las presiones, en especial de las muy fuertes. nos parece ser la de a veces a congraciarse con determinados factores de presión o
"cofllrapoderes" , cualta complacenda los lleva a conferir
satisfactorio para aquéllos y para sus intere-
58, - Aun cuando se halla muy incorporada al vocabulario laexprc-
sión "grupos de presión", preferimos reemplazarla por olra, porque a ve~
ces las presiones no provienen de gru¡xJs sino de sujetos individuales.
Entonces, nuestro vocabulario alude a ''factores de presión y factores de
poder".
CAPITuLO XXXll

EL CONGRESO

El "poder legislativo"

l. - Nuestra constitución formal comienza el articul ado dedicado a


la pane orgál/ica o derecho constitucional del poder con las nornlas sobre
el congreso. encabezando la sección primcradcl tilulo primero (Gobierno
federal ) de la segunda parte (Autoridades de la Nación) con el rótulo " Del
Poder Legislmiro'·.

La palabra "poder" aquí y así empicada, más que connotar una "func ión" del
poder, está mentando a Ull "órgano". Es órgano co/~g iado, porque se compone de
varios individuos (diputados y senadores), y es 6rgano complejo porque cada una
de sus cámaras tiene naturaleza de órgano.

2. - Aceptando esta calegoña, decimos que: a) los actos del congreso que
exigen competencia compartida de ambas cámaras. son actos complejos (el acto de
cada cámara compone al acto complejo del congreso): a estos actos, y a la compe-
teocia en cuyo ejercicio se cumplen, lo~ llamallXl~ congresionales; b) los actos de
cada cámara que no requieren la competencia compartida de la otra son actos sim-
ples de la cámara que los cumple: por eso, no pueden denominarse actos dc.1 congre-
so, ni tienen naturaleza compleja.

La reforma de 1994

3. - Los am. 44 , 45 Y54 han introducido modificaciones Cilla com-


posición de ambas cámaras, y el arto54 incorpora además un cambio im-
portante en el número y la elección de los senadores.
Los arls. 44 y 45 traen dos innovaciones:
• •

258 COMPE.'D10 DE DERECHO CONSTITIJClO:-JAl


EL CONGRESO 259
a) mladen diputados {Xlf la ciudad de Buenos Aires (en vinud de su .- Nuestro 1Ir1. 45 establece qu~ "un congreso compuesto de dos cámaras,
régimen autonómico -ano 129-); pero t de la nación. y otra de senadores de las provincias)' de la ciudad
b) lIu/Iltieuen diputados por la copital federal para el caso de que se , serd investido del poder legislativo de la nación ". La cámara de
Iraslade fuera de la ciudad de Buenos Aires. la norma escrita, represetlta al ''pueblo'' (o a la naci6n). Es la dog-
de la represenlación política en la teona de la democracia popular.
De esta manera, la cámara de diputados tiene prevista una composi-
La norma. no tiene ni puede tener vigencia sociológica, porque no hay repre-
ción Tripartita: a) diputados por cada provincia; b) diputados por la ciu- pueblo ni de la naci6n. De la norma rolo tiene vigencia socio-
dad de Huellos Aires; e) diputados por la capilal federal (en caso de tras- la existencia de tina cállUlra de diputados. que no represel1la al pueblo en su
lado). m", (a lo sumo, en la constitución malcrial, Jos diputados -pero no la cámara-
El art. 54. en cambio, ofrece estas variantes: a sus partidos políticos). La dmara de senadores represenla, según la
norma, a las provincias respectivas y a La ciudad de Buenos Aires.
a) añade senadores por la ciudad de Buenos Aires; pero
b) suprime los senadores por la capital federal, que dejará de tener- - Las provincias no quedan obligadas a reproducir el bicamarismo
los si se traslada fuera de la ciudad de Buenos Aires. porque no concurre la misma razón que preside la división del
La composición del senado es bipartita: a) senadores por cada pro- dos cámaras.
~'ÜICia; b) senadores por la ciudad de Buenos Aires. cuando las pautas de la cOnstitución federal se proyectan a
Además: local del poder hemos de decir que el bicarllarismo no es
esencial de nuesLIa estructura tripartita del poder.
a) eleva de dos a tres el número de senadores;
b) reemplaza con elecciófI directa el sistema mediante el cual se ele-
gían los senadores por las provincias (que era el de designación por las de la,~ bancas del congreso
legislatums) y por la capital federal (que era el de elección indirecta por
colegio electoral); , - Se discute a quién pertenecen las bancas legislativas: si allegis-
c) reparte las tres bancas de cada jurisdicción del siguiente modo: c') titular de una de ellas o al partido político con cuyo patrocinio
dos selladores al parlido que obtiene el mayor número de votos: c") un la candidatura del titular.
senador al partido que le sigue en número de votos, a) InLentamos sugerir que los senadores representa1l a [as provi1/-
\' a la ciudad de Buenos Aires a través del partido al que también
''''/11,''1. La mixtura parece rara, pero no hay porqué rechazar la posi-
El bicamarismo una doble representación.
De aquí en más, aunque el ano 54 no defme explícitamente que las
4. - La índole compleja del órgano congreso nos lleva al tema del de los senadores pertenecen a los partidos a los que representan,
bicamarismoo estructura bicameral del órgano. En nuestro derecho cons- . para aseverarlo con certeza.
titucional, el bicamarismo no se apoya en una mera división interna del b) En cambio, los diputados (que en el ord~n normativo de laconsti-
órgano y del trabajo que la constitución le encomienda al asignarle sus se dice que representan al pueblo) representan realmente a sus res-
competencias. Nuestro cOflgreso es bicameral porque el estado es fede- que
ral: el bicamarismo federal tiene su modelo en la constitudón de los Esta- an,;as de diputados son de pertenencia de los pattidos que postularon
dos Unidos, y responde a la teoría de que la cámara de representantes (di- candidaturas triunfantes.
putados) representa al "pueblo", y la de senadores alas estados miembros
o provlllcras. Este criterio empírico conduce a propiciar que cuando un diputado se desvincula
""r cualquier causa del partido que nominó su candidatura, debe perder su banca .


• •

260 COMPr~'W[O DE DERECHO CONS IIIUClONI\L Et(."ONGII.ESO 261

$1 :>e implantara un sistema d islillto al de monopolio partidario de las candida- ha~ de población fijada en el art. 45 puede ser aUlllt'lIl1lda pero no dislIIl-
turas, el diputado electo sin patrocinio partidario no sería reprcscn tanlede un parti- de lo resulta que el número de dIputados extraído de la población de
do. que I¡unpoco titulari7.aría su banca. ..i,,,<i, '
Y de la capital puede ser inferior al que existe allte~ de cada censo.

8. - Ilay conslililciones provincia/~s que definen expresamente para sus le- - Si man tcncmos firmemente la opinión de que una ley puede
gislaLUras la ¡>Crtenencia parlidaria de las ba ncas. mínimo de dos diputados porcada provincia (aunque la base
Respecto del senado federal creemos que: a) las provincias no pueden condi- alguna no alcance más que para dcsignar"uno" solo) tam-
cionar la dc~i snaci6n y permancncia de los senadores federales con un mandato ""',OO,
con seguridad que es i1/cOl/sr¡'¡uciollof "agregar" más dipu-
imperativo: ni, b) prever revocatoria o cesación en el cargo de senador federal. sobre esos dos, porque Jos diputados adicionales vienen a ser
"regalados", en conlradicción con la pauta rigurosa del arto 45,
relación r.:on la población.
El congreso y los órgal/os extrapoderes
- La elección de los diputados se efectúa de modo directo v a
9. - Dentro de la misma sección que la constitución dedil.:a al congrcso apa· de sufragio.\·, considerándose a las provincias, a la ~i u­
recen dos. órganos. quc, a nuestro ¡;riterio, ya hemos dicho que consideramos eXlm· Aires y a la capital federal como di stritos electorales de un
poderes. Son la Auditoda General de la Nación y el Defensor del Pueblo.

requiere haber cumpl ido veinLidnco afios de edad,


La cámara de diputados ciudadanf,t en ejercicio, y ser natural de la provincia
con dos anos de residencia inmcdiatacn ella. Estas condicio-
JO, - Los diputados son, de acuerdo con la letra y el espúitu de la constitu· en el art. 48- deben rcunirse "para ser diputado", o sea, al
ción lomlal, representantes de la "nación" (arl. 44) o del "pueblo" (art. 45). Son de aprobarse el diploma del electo por la cámara (a diferencia de
elegidos por el pueblo: "pueblo" es, a este fin, el electorado activo o cuerpo electo- cic" e, para ser "elegido" senador, que deben reunirse al tiempo
ral.
El nún~ro de habitanteS que sirve de índice básico para establecer el número diputados duran cuatro años, y son reelegibles. pero la cámara
de diputados debe computarse incluyendo a los extranjeros: no es posible limitarlo
cada bienio.
a la población "argentina", porque la norma habla de "habitantes", y habitantes son
tanto los ciudadanos O nacionales como los extranjeros.
- El arto 51 prescribe que en caso de vaca1l1e, el gobiemo de la
La base de población de la que surge elnúmcro de diputados se reajusta perió·
dicamente de acuerdo con el censo gener%~~ Este censo -o-(X)nforme al ano 41- "sólo
. hace proceder a elección legal de un nuevo
podrá renovarse cada diez. alfos"; el censo "debe" realizarse cada diez años, y "no La constitución quiere que ladipulación se cubra con Wlanueva
puede" efectuarse oon periodicidad menor. Esta obligación responde al propósito a la vacancia; por eso, reputamos inconstitucional todo
de que el nÚ/l~ro de diputados refleje la cantidad de población de cada distrito que,j untamentc con los diputados, obliga a elegir sur/emes
electoral. aza;r alos titulares. No obstante, el derecho constitucional ma·
la práctica de elegir suplelllcs en la elección de dipu-
1\ . -Una interpretación coherente y relacionada de los arts. 45 y 46 llcva a tener sustitutos anticipados en caso de vacantes, por lo que
sostencr, con seguridad suficiente, que después de 1853 ninguna provincia puede rcaliza nueva elección en los términos del arto 51.
lener menos de das diputadas. porque ese ITÚnimo lo tu\"o para formar el primcr
congreso. De ahr que, a nuestro criterio, la constitución au toriza a que el congreso F... inconstitucional que el diputado que cubre la banca dejada "acante porotro
mantenga por ley ese mismo número ITÚnim> de dos cuando, al reajustar la base de du'lfll~el plazo de cuatro años, \'ca reducido el suyo por urtO menor para sólo corn-
población después de cuda Cl!nso, una provincia queda con un solo diputado. pWtar el penodo.
• •
262 COMPE.'l.lIO DI' DEREOKl CO:-;STrruCIOl'lAL ELCO!>l(¡ II.ESO 263

La cámar:.t de senadores El vicefH"esideme de la república es el presidellle I/alo del


('on respecto al poder cjccuti vo, es un órgano al margen de él
15. - El sellado se compone de tre.~ senadores porcada provincia \" pero con respecto al senado, lo integra a lÍtulo propio como
lreJ por la ciudad de Ruellos Aires. Cuando los senadores votan en la muo. Sin embargo. sólo dispone de ·'volo'· en caso de emJ'ate
cámara. la representación no se unitica. como pudiera pensarse en razón . lo que no debe imerprclarsc como impidiéndole lener "voz".
de que los tres representan a un mismo eme, sino que cada senador tiene un
voto (an. 54). 58 establece que el senado nombrará un presidente prowsorio para que
vicepresidcllIe. o cuando éste ejerza las funciones
La $crtadllr{a por In capilal ha desaparecido. de la naciÓn .

16. - Los senadores de las provincias ya 110 SOIl elegidos por sus
legislaturas a pluralidad de sufragios. conforme al anterior ar!. 46 de la . y remuneración de los legisladores
constitución. sino por el cuerpo electoral; ahora, pues, la elección es di-
recIO (art. 54). COllil:! disposición común a ambas cámaras, relacionada con el eJcrd-
o. o, arl. 72 consigna que ningún miembro del cOllgre!\O
17. _ I.os requisitos para ser "elegido" senador (que deben reunirse. ''';''1 o comisiÓn del poder ejecutivo, siti previo consentimiento de
respectiva. elleepto los cmph..'O~ de escala. Conviene, asimismo, vill¡:ular
por eso, en el momento en que la elección se realiza. y no en el que el
la incompatibllidad con la disposición del arl. 105. incluida en la palie de
senador se incorpora a la cámara) son: edad de trcinta años. haber sido seis que se tefiere a los minIstros del poder eJecutiVO, y !.Iue dic~ que
afias ciudadano de la nnción. disfrutar de una renta anual de dos mil pesos !Cr senadores ni diputados sin hacer dimiglÓn dc sus elT{lleos de
fuertes o cnlIada tquivalentc. y ser natural de la provincia que lo elige o I ,que los $cno.dores y diputado! tampoco pUOOCl1 BCU-
eon dos años de residencia inmediata en ella. Así lo establece el art. 55. parlamcntario el cargo de nUllistIú9 del poder ejecutivo).
Los senadores. de acuerdo eon el art. 56. ya l/O duran I/ue\'e añoJ en ~mpleos de escala que se ellccpll1an de la incompatibilidad son 101 que
el ejercicio de su mandato. sillo seis, y son reelegible.f indefinidamente un estado O profesión habitual que no se reciben por fa\'oto grada 1Ic1
(este adverbio no figura Cilla cláusula de reelección de los diputados del en los que se ascicnde por antigUcdad en furma gL'aduada.
arto 50). El senado se renueva a razón de una tercera parte de los disLTitos "'~ del espíritu y Iu loolivaciom!s que fundamenta n las ¡ncom-
1 , el arto 13 estipula que los f'cJcsidslicos TCglfl(/fl"J no puc-
electorales cada dos años,
micmbros del congreso, ni 109 gobem(ldofl!s de pnJl'incin pvr la dI! SIl
Cuando vaca U1/a pla:'lI senatorial por muene, renuncia u olr¡¡ causa. ""'I""X por otra).
el gobierno a que corresponde la vacante hace proceder inmediatamente
(este adverbio tampoco figura en la norma análoga para la cámara de dipu- - Los miembros del cungrcso tienen prevista una n?lIl1lneraÓÓn en el ano
tados, del arto 51) a la elección de un nuevo miembro. ,oo",,''00' 1 Esa dOIQciÓn debe ser fijada por ley, y pagada porel tesoro de

La vacancia por renuncia no se opero por la presentaciÓn de la dimisiÓn. sino rctrilhici6il de los legislaOorc! -<Iue se conoce con el nombre de díela- no
recién a partir del nXlmento en que el senado la acepta. Por ende, no se puede desig-
nar nuevo senador antes de dicha aceptaciÓn, porque la banca no eSI!1. vacante. En
,.".0'''''' un verdadero privilegio parlamentario, y por eso /lO la im:luimos en
propia del derl!cho parlarilclltarlo. Se trata de una mera compensación
caso de realizarsc. tal etecciÓn anticipadamente, queda afectada de nulidad e incons- Il,:'rviclos prestados.
titucionalldad.
Cuando un senadol· deja vacante su ballca mientras pende su período. estima-
rnos inconstitucional que el nuevo senador que lo reemplaza ¡(a designado para
completar dicho lapso. porque la constituciÓn asigna a cada senador y II todos un
tiempo de úc¡;cmpeño de 5els años que 00 es \·iable de reducciÓn.
CAPtruLO XX XIII

EL DERECHO PARLAMENTARIO

Su contenido
, l . - El derecho parlamentario es la parte del derecho COflslitucionaJ
del poder que se refiere a la con~ti lución, los privilegios y el funcionamien·
lO de los cuerpos parlamentarios --en nuestro caso, del congreso y sus eá·
maras-,
De este modo, el derecho parlamentario comprende solamente:
a) la CotlSlüuciólI del cOTlgreso en senlido famla/. o sea, desde las
sesiones preparatorias hasta la incorporación de los legisladores, abarcan-
do el juicio sobre la validez de la "elecci6n-derecho-úlulo" do los mismos,
la aceptación de sus d ip lo mas, el j uramento . y laconstilución de las aUIO-
ridades;
b) los.lJamados privilegios o inmunidades - indi viduaJelil y colcctvos-;
e) el funcionan/remo del COl/greso: sesiones y sus cl'lSes, duración,
modo de reunión, carácter de las mismas, formas de omisión de los actos
de su competencia, ql,Jórum, mayoría de votos, etcétera.

Algunos de estos aspectos están regulados por la propia constitución formal ;


otros mediante el reglamento interno de cada cámara, que anlbas dic~an por expre-
11 compelencia acordada por la constitución (art. 66); muchos surgen de la práctica
o costumbre (derecho espontáneo), especialmente por la intercalación de los parti-
dos palrtieos en la dinámica del dereeho constitucional del poder.

Las sesiones del congreso

• 2, - Las sesiones del congreso se dividen en cuatro categorías: tres


• •
266 COMPENDIO DE DERECHO COXS 1lllJOONAL EL DIoRECHO PAIU.AMENT,fJUO 267

previ slascn la constitución, y una en los reglamentos intemosdc lascáma- o aprobación de lisias. la pcrsoneríade los partidos políticos,
ras. Las primeras son: a) las ordinarias; b) las de prórroga; e) las ex- es competencia eXlrtlparlamelllarÚl. y propia de otros 6r-
traordil/arias. La cuarta calcgoría está dada por las sesiones pre/)(lr(UO- -especialmcOlc de los órganos judiciales en materia electoral-; e)
rias, que son las primeras en el orden del tiempo porque se anticipan a las iaa:al.' . . sobre la validez de "útulo-derccho-elecci6n" de los
ordinari as. por cada cámara, estimamos que en ciertas situaciones
el control judicial (y ello porque cada cánlara es juez.
J. - Las ses;(Jnes preparatorias tienen por objeto recibir a los clectos que han jue7~ "exclusivo"); por ej .: si una cámara. después de aceptar el
presentado diploma expedido por autoridad competente, y elegir las autoridades de electo, desconociera su validez y revocara la incorporación
cada cámara.
. obrara con arbitrariedad manifiesta. etcétera. (La Corte
El juramenlo de diputados y senadores es exigido por el art. 67 de la constitu- una facultad "privativa" de cada cámara.)
ción. y se presta en el ac to de la incorporación.
, - En ejercic io de la facu ltad que consagra el arl. 64 las dmaras pueden-y
También prevé la constitución una facultad de las cámaras, que
4. - si e l electo reúne el requisito de la "idoneidad" para ser diputado o
esprivariva de cada una de ellas (competencia propia) y que suele incluir- 'm~' al art. 16). Inclusive, c uando el arl. úo vtorga a las cámaras el
se entre sus "privilegios" coleclivos. Normalmente, se ejercita en las se- para remover a sus miembros por inhabilidad física o moral
siones preparatorias para constituir la cámara. Es la que el art. 64 contiene a su incorporación, fluye de la norma que si su similar inhabilidad
en la fórmula de que "cada cámara es juez de las elecciolles. derechos y incorporación (y la cámara la conoce), el legislador electo no debe
IEfUlos de sus miembros en cuallfO a su validez ".

Cabe observar que el texto dice que cada cámara '"es ju~z" pero no dice que sea - El congreso liene asignado un período ordinario de sesiones, y
juez "exclusi\'O". Esta acotación debe tenerse presente para analizar si es una facul- entre tales períodos.
tad que admite o no control judicial.
propia conslitución formal prevé la intermitencia en el ejercicio de las com-
Vanossi resume en un cuadro muy gráfico la norma del ano 64: del congreso y de sus cámaras. lo cual revela que el podcr legislati vo no e s
illlpCf'tante, desde que la dinámica constitucional puede subsislir durante el
~s;o,'" cosa q ue nOQCurre con el poder ejecutiyO ni
Cada cámara es juez

elecciones ) arto 63 dice que ambas cámaras se reunirán en sesiones ordinarias


de
( derechos de sus miembros los atlas desde el 1" de marzo hasta el 30 de noviembre.
títulos
art. 99 inc. SO menciona entre las facuJtades del presideme de
la de hacer anualmente la aperlura de las sesiones del con-
en cuanto a su validez
suscita la duda de si es imprescindible ese acto presidencial para
congreso entre en funciones.
5. - Nuestro punto de vista esel siguiente: a) el ser juez con el alcan-
ce antedicho se limita a conferir el "privilegio" de examinar la validez de ,tra ,""pU"SI' es ésta: el ejecutivo tiene la .. obligaci6n constitu-
"título-derecha-elección", y nada más (por ej., si el electo reúne las condi- de convocar las cámaras ell o de marzo y de abrir sus sesiones
ciones que la constitución exige. y si las reúne en el momento que la cons- pero si no lo hace, el congreso tiene competencia para reunirse
titución determina): b) pero no significa que las cámaras juzguen los as- y debe hacerlo.
pectos "contenciosos" del proceso electoral (por ej.: la validez de los vo-
En el derecho constiwcional material, la fecha inicial del período ordinario no
lOS. su anulación u observación. los votos en blanco,la validez de las actas
llol11pt'e ha sido respetada.
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268 COMPENDIO DE DERECHO CONSTITUt,Ol'>Ar, EL OCRECHO PARLAMENTARIO 269

8. - Fuera del período de SCf>iOIl CS, no queda inhibido el trabajo par- Alf,unismo, la refomU/ de 1994 ha previsto que la aprobación en panicular de
t de- ley puede ser aUlari1.ada por cada cámara a favor de una o más
lamentario que no requiere la reunión de las cámaras. Lo que no pueden
(art. 79), por lo que la falta de una nonna general específica sobre las
éstas es scsionar. pero sí ejercer las competencias que no demandan se-
legislaüvas parece subsanarse implícitamente con esta habilitación.
sión. Así, JXlrej .. pueden reunirse las comisiones. los bloques. las comisio-
nes investigadoras, eLcétera.

9. - El arto 63 agrega que "pueden ser convocadas (las cámaras) ex- . parlamentario
lraordillarial1lell1e por el presidente de la nación. o prorrogadtls sus se-
siones". Coordinando esta norma con ladel inc. 'P del ano 99, Icemos en él 12. - La fijación del periodo de sesiones ordinarias más la práctica
que el presidente de la república "prorroga las sesiones ordinarias del con· el congreso no las prorroga por sí mismo ha conducido a rcducir el
greso o lo convoca a sesiones extraordinarias cuando un grave interés de re'~ y a que, en suma. acrezca la preponderancia presidencial .
orden o de progreso lo requiera". Enlre tanto, yen el marco de la constitución fonnal, no fallan opi nio·
Nuestra interpretación es la siguiente: a) las sesiones extraordi1/arias para el ejercicio excepcional de ciertas competencias consideran
dcben siempre ser cOllvocadas por el poder ejecul iva. no pudiendo el con· habilitada la autoconvocaloriadel congreso o de alguna de
greso disponer por sí solo su realización; b) la prórroga de las sesiones cámaras (por ej.: para promover juicio IXJlítico al presidente durante el
ordinarias puede ser dispuesta 1llllto por el presidellte de {" república parlamentario).
como por e/mismo cOllgreso porque la facultad del presidente (que para
este caso no surge del art . 63 sino del 99 inc. 9°) existe, ~ro no parece 13. - Creemos que nuestra constitución formal no contiene ninguna
exclusi va. porque el arto 63 no lo dice. "","general que establezca de qué modo trabajan las cámatas paraejer-
las competencias congresionales (o sea. las que requieren el concurso
10. - En la prórroga de las sesiones ordinarias el congreso colllinúa ambas cámaras).
su período anual , y mantiene la plenitud de la competencia del cuerpo. y
cada cámara la propia de sus facuhades privativas. En cambio en las sesio· Hay una serie de normas que hacen referencia a las sesiones se/Jara·
nes extraordinarias, cuya convocatoria depende inexorablemente de un pero aliado de esta serie, Otras normas no reseñan el modo de trabajo
aClO del ejecutivo motivado IXJrun "grave interés de orden o de progreso" ej,: el arto 30). Por fin , en alguna ocasión la constitución ex ige expre-
(art. 99 inc. 9") el congreso no dispone de la plenitud de su competcncia, la reunión de ambas cámaras en sesió" conjunta -que se llama
que queda circunscripta a las cuestiones que provocan la realización de las legislativa- (por ej.: arto 93 Yart. 99 ¡nc. 8").
sesiones, y que son fijadas IXJr el presidenlc de la república.
Una vez efectuada la convocatoria y determinado el temario. el poder 14, - Si nos fijamos en el mecanismo de sallción de las "leyes", no
ejecutivo no puede privar al congreso de su competencia para reunirse y dudade que la constitución ha previsto e impuesto el tratamiento de
tratarlo. ect'DS ole ley (deliberación y aprobación) (X)r cada cánlara separa-
es cámara de origen, y otra es cámara revisora. Ahora bien:
I t. - Nuestro derecho constitucional no conoce - ni en ta constitución formal 0111,0 nosotros entendemos que no todos los actos del congreso tienen na-
Di en la rnaterial- un instituto que ofrece modalidades interesantes en el derecho ley, y que aquéllos que no lo son no deben emanarse con "for·
comparado. Se trata de las cOlllisiones pemwnenles del parlameoto que, como ór· ley", interpretamos que el trabajo parlamentario separado está orde-
gano transitorio del mismo, ejercen algunas competencias durante el receso parla·
nado solan/eme paro las leyes (entendiendo por tales los actos con natura-
mentario para suplir la actividad suspendida e n ta totalidad del cuerpo.
Ie-La material de ley y fomlade ley)_ Para los casos en que laconSlÍtución
Sin embargo, la Comisión 8icomerol previsla en tos arts. 99 (inc. 3<] y 100
no arbitra ese procedimiento. creemos que reserva al congreso la opción
(incs. 12 y 13) ha sido calificada (.:emo "pemwnenre" por el propio texlo reformado
en 1994 a los fines en ét eslablecidos. del trabajo separado o conjunto.
270 COMPEh'DIO DE DERECHO CONS I [ IUaONAL EL DEREClm PARLAMENTARIO 271

Para el tra bajo de cada cámara por separado. existe la opción de aplicar. por Se trata de un requisito elemental del principio republicano de publici-
cmalog(a, el procedimiento de sanción que la constitución establece para fas leyes.
de lodos los actos de gobierno. por lo que no vacilamos en sostener
inconsl.ilucionales. salvo en casos excepcio-
15. - Lo que sí contempla la constitución después de la reforma de
secretos de estado que realmente son tales objetivamente.
1994 es la aprobación en comisiones de cada cámara de proyeclOS de ley
en particular, conforme al art. 79.

16. - Para cumplir los actos de su competencia, el congreso tiene parificadlls


a ambas cámaras.
Esta igualdad no quila que, en el mecanisrm legislativo. no todas las leyes 19. - Quorufli significa el número de miembros que se necesita para
puedan teller origen en cualquiera de las cámaras: o que la insistcncia de una dma- ;ano colegiado pueda constituirse, funcionar y adoptar dcci sio-
°
ra acerca de un proyecto de ley pueda a veces asegurar la sanci6n: que el rechazo
101al de un proyecto por una cámara impida repetir su tratamiento en las sesioncs de Nuestra constitución contiene una disposición general y básica sobre
ese año.
sin perjuicio de excepciones quc ella misma introduce en casos
De esta igualdad de ambas cámaras sólo puede hablarse en el caso de actos de! ares; el arto 64 dice que I/il/gllna de fas cántaras entrará en sesión
congreso que requieren (pl'edsarrentc por ser del congreso) la aprobación de dipu-
tados y senadores. En las co mpetencias pril'otiV(/s y exclusivas de una sola de las
la mayoría absoluta de sus miembros,
cámaras, la co mparaci6n con la otra no es posible (y el senado tiene mayor cantidad Mayoña absoluta no es. como vulgarmente se sostiene. la "mitad más
de esas competencias que la cámara de diputados). no", sino "más de la mitad" de los miembros. que es cosa dislima, por-
. -por ej.-suponemos 187 legisladores, más de la mitad son 94, mien-
17. - Ambas cámaras, reza el ano 65. empiezall y concluyel/ sus se- la mitad más uno son 95.
siolles silllultálleaflleme; lIil/gwU/ de ellas, mie1ltras se lU/lIen reunidas,
podrá suspel/der sus sesiones más de tres días sin cOI/sentimiento de la 20. - La imposibilidad de sesionar sin quórum parece dejar librado a
otra. de los legisladores el funcionamienlo de las cámaras. La cons-
no ha ignorado esa hipótesis. y por eso el mismo ano 64 añade que
La coordinación dclttabajo parlamentario parece haber elligido esa simultane i- número mellor podrá compeler a los miembros ausentes a que COIlCU-
dad y, dada la generalidad de la norma, ellterxlemos su aplicación; a) a todo tipo de a las sesiones. e1l los términos y bajo las penas qlle cada cámara
sesiono::s constituciona les (ordinarias, de prorroga y extraordinarias); b) tanto a los
actos del congreso como a los privativos de cada cámara.
En la constituci6n material esta nonna es incumplida normalmente.
Para que la norma no llegue a quedar bloqueada nos ioclinamos por la posibi-
la minoda por si misma (que para esta situaci6n vendría a ser "cámara
18. - Ninguna norma constitucional impone con generalidad el prin- , disponga los términos y las pcnas de compulsión, a menos que la
cipio de que las sesiones deben ser públicas. Hay solamente algunas nor- ""~ cámara (con quórum) o su reglamento ya tuviera establecida la norma gene-
mas especiales que lo prescriben, como el arto 59 para el juicio político en pe¡tinente. en cuyo caso la minoría no podría apartarse de esa nonna para reem-
el senado, el art. 99 inc. 40 para el acuerdo del senado en el nombramiento .2.<1. "" 01'" ocasional.
de jueces de tribunales federales inferiores y, según nuestra interpretación, Como principio, entendemos que cuando una llOnlla que ex.igc on qu6rum de
también el arto 83 para la insistencia de las cámaras en proyectos vetados votQS para "decidir" no dice expresamente que se trata de los miembros "presen-
por el poder ejecuti vo. les", aquel quórum de votos debe computarse sobre el total de los que componen la
Los reglamemos de ambas cámaras sí prevén la publicidad de las se- cálpara.
siones.
21. - Diversas normas han especificado en el texto refon/lado en 1994 un

l
.


272 COMPENDIO Dt DERECH~ CONS ¡ ¡ I UaONAL El.. OéRECHO PARLA.~ENTAR.lO 273

quórum especial o agravado para las decisiones propias de las cánlaras del congre· rotal de sus miembros; h") con igual quórum cada cámara puede dejar sin efecto
so. tanlO relativas a competencias privativas CQrrK> a las comunes a ambas. esa dele gación: h''') con igual quórulll cada comisión aprueba el proyec.to enco-
Así: mendado por la cántara de su pertenencia.
a} El arl. 39 prcvlS que la ley reglamentaria del derecho de iniciativa popular i) El art. 81 pre\i hipótesis de quórum de votos en el proceso común de san-
legislativa (pero no cada proyecto que en ejercicio del mism:> se presenta) habrá de ción de las leyes que en su trámite han tenido ad iciones ocorrecciones; las mayorías
sancionarse con el voto de la mayorill absoluta de ftl totalidad de miembros de I llí fijada~ son: i') mayorla absoluta de los presentes, o i") dos terce'a.~ parles dt!
cada cámara; los presefl/es, según las hip6 tesis que el artículo regula:
b) El art. 40 fija igual quórulII de votos favorables para la sanción de la ley j) El art. 85 consigna que la ley reglamcntaria de la Auditoría General de la
reglamentaria de la consulta popular (pero no para cada ley por la que se somete un Nación tiene que ser aprobada por la mayona absoluta de los miembros de caaa
proyecto a consulta popular): rámara;

e) El art o75 ine. T párrafo cuarto consigna que la ley-convenio en materia im· k.)El art. 86 prescribe que la designación y remoción del Dcrensor del Pueblo a
positiva necesita aprobarse con la mayarla absoluttl de la lolalitkld de miembros de efectua.rse con el voto de dos terceras parles de los miem.
de cada cflmarn; presentes de cada cámara;

~
d) El arto 75 ine. 3° prescribe igual quómm de votos favorables para establecer :'~)~E1:,~,,:"t. 99 inc. 3° párrafo cuarlO, al
regular el tránlite a que quedan sujetos los
y modificar asignaciones e specíficas de recursos coparticipables; ~ necesidad y urgencia dictados por el poder ejecutivo, establece que la
e) El arl. 75 inc. 22 se diversifica así; c') para denunciar uno o más instrumen- final del congreso será reglamentada en SU tránlite y en sus alcarlCes
tos internacionales de los que taxativamente enumera COItt> investidos de jerarquía que precisa ser aprobada con el VQ{O de la mayona absoluta .fobre lo
. de cado CÚlr/O ro;
constitucional, hace [alta que con anterioridad a la denuncia que le compete al po-
der ejecutivo el congreso la apruebe con dos terceros partes de la towlidad de U)tI arto 99 ioc. 4° prevé que elllCucrdo del senado para la designación de los
miembros de cada cámara; e") igual quómm de votos favorables se necesita para . de la Corte Suprema de Justicia debe prestarse con el \'Oto de dos
que otros tratados y convenciones sobre derechos humanos (fuera de los que direc- . presentes de la citada cámara;
tatn!nte han recibido jerarquía con~titucional) gocen en el futuro del mismo rango m) El arl. 101 contempla dos situaciones respec to del jefe de gabinete de mi-
de la constitución (debe recordarse que para esta hipótesis el inc. 22 también ;agrava , n') para ser interpelado a los fines de una moción de ccnsura hace falta el
el procedimiento , porque es menes ter que primero el tratado sea aprobado. y luego la absoluta sobre la totalidad de miembros de cualquiera de la,f
se le otorgue jerarquía conslilUcio nal -a menos que. según interpretamos, ya la n', para SCr removido es menester e l voto de la mayorla
aprobación alcance el quórum exigido para obtener esa jerarquía-); de miembros de cada Ma de las cámaras;
O El arlo 74 inc. 24 se diversifica así: f ') los (tatados de integración supraestalal n) El arto 114 dispone que la ley reglamentaria de l Consejo de la Magistratura
con estados de Latinoamérica han de aprobarse con e l voto de la //layaría absoluta
de la totalidad de miembros de cada cámara; f") cuando tales tratados se celebren
con otros estados no latinoamericanos, el mecanisIlD se desdobla: primero la decla-
..";,,.
que sancionarse con la mayoría absoluta de la totalidad de miembros de cada

o) En la misma ley reglamentaria del Consejo de la Magistratura -y, por ende,


ración de conveniencia ha de aprobarse por la ma)'orla absolula de los miembros
t quÓrum de votos- se determinará la integración y e l procedimiento del
presentes en cada cámara, y después de transcurridos ciento veinte días deese acto
de enjuicianuento para la remoción de Jos jueces federales de instancias
declaralivo el tratado tiene que ser aprobado por la mayorla absoluta de la lotali, a la Corte Suprema.
dad de miembros de cada cámara; r ''') la denuncia de cualquier (tatado de integra-
ción -que está a cargo del poder ejecutivo- requiere la aprobación previa por mayo-
rfa absoluta de la totalidad de miembros de cada cámara;
privilegios e inmunidades
g) Las leyes modificatori as de l rég imen e lectoral y de partidos políticos deben
aprobarse por 1II00'orla absoluta del to/al de miembros de las cámaras;
22, - Tal vez el punto neurálgico del derecho parla m e n tario sea e l de
h) El arl. 79 establece que: h') después de aprobarse un proyecto en general en
el congreso, cada cámara puede delegar (debe decirse: imputar) en sus comisiones los llamados '''pn·v!legios'' parlamentarios. Estos privilegios -q ue son
la aprobación en particular de ese proyec to, con el voto de la maJorla absoluta del Wl3 constante en el derecho constitucional del ¡xxler comparado-- se rcpu-
IWI establecidos en ifllerés del parlamento o congreso como órgano, y se
274 CO.\tf'f>NOIO l>f.llElU,-CHO CO~STrructO:-;AL El DERECHO PARLAMrXr ARlO 275

alega que tienen como finalidad asegurar la independencia. el funciona- 27. - Entre los pri vilegiospersonalcJ se ci ta: al la inmu nidad de opi -
mienlCl y la jerarquía del mismo. Por eso se los llama también ¡ml/l/1/ida- '1 expresión: b) la in munidad de arresto; e) el desafuero: d) la dicta.
des. en cuanto preservan al órgano.
nosotros. el destlfilCrO es a la ve~ un pri\'ilcl!!LO "pcrsonar' y un privilegio
Aunque la Icnninología "privilegios" o "inmunidades" ¡iene curso tra-
. lo primero. porque protege allegi¡¡lador: lo lIegundo. porque implica
dicional en el lenguaje constitucional del derecho parlamentario. creemos la dispoLlibilidad dc poner o no a sus miembros a la orden de un juez.
más correCIO el sustituto de "gartlmías de funcionamiento", Son garafl-
La diela o remuneración no e¡¡. a nuestro juicio. un privilegio: sólo reviste el
tías que se otorgan a un órgano de poder. tanto si tales garantías cubren al por e l scn·Ldo.
"órgano-institución" como si protegen a los "órganos-individuo". porque
en ambos casos tienden a resguardar al congreso y a sus cámaras. que 28. - Las cámaras ¡ienen poder disciplinario para corregir. remover
actúan a través de las personas que son sus mi embros. "Garantías de fun- ""a sus miembros. El ar!. 66 dispone que cada cámara podrá. con
cionamiento" son, entonces, lIItelasful/ciOTwles. tercios de VOlos. corregir a cualquiera de sus miembros por desorden
en el ejercicio de sus funci ones. o removerlo por inhabilidad
2~.
- Si están dadas para el buen funcionamiento del órgano parece
que debe inlerpretárselas en el sentido de que 110 puedel/ ser declinadas o
.óc. o moral sobreviniente a su incorporación. o hasta excluirle de su
relll/l/ciadaJ.
Cualesquiera de las hip6h.:sis de ~anci6n disciplinaria parecen exigir que se
24. - Nuestra Corte Suprema, en el antiguo caso "Alem" -del ailo 1893- sos- el debido proceso y la defen .w. para asegurar ta ffl:.ontlhilidad de la
tuvo que la eon¡¡tituei61lllo ha buscado garantizar a los miembros del congreso con
una inmunidad que tenga objetivos personales. ni por razones de! individuo mismo
a quicn se hace inmune; son allos fine~ políticos -agregaba- los que se ha propues-
29. - El art. 66 no induye e! poder disciplinario ¡rente (/ terceros extraños a la
to. ':1 si ha considerado csencial esa inmunidad es precisamente para asegurar no
. Se lo ha inteLpretado como pri\'ilcgio implícito. COllsish:nle en castigar a
sCllo la independencia de los poderes públicos entre sí. sino la existencia misma de
tas autoridades creadas por la constituci6n.
n."legisladores comelen actos que implican una ofcnsa al parlamento. o
de sus miembros en su carácter de tales.
Nosotros desconocemos lolu/mente cualquLer poder disciplinario de t congreso
25. - Los privilegios parlamentarios suelen dividirse en dos grandes
,"',." peoas o sanciones a tcrceros. 5610 admitilOOs dos cosas: a) un poder
gru pos: colectivos y ¡)enona/es; los primeros atañen al cuerpo o cámara . limitado exclusivamente at man te nimiento del omen de las sesiones
el/ cOI/juma y como "órgano-institución" para facilitar el ejercicio de su
funci ón: los segundos se rel1eren a la situació" o actuación ':"dú'it!ual de
cada hombre que es miembro del cuerpo o cámara. pero no en protección a ;~:~;:~:¡;~f;::;:~;;la barra a quien lo altere o incurra en oren~ al ¡;uerpo o a un
su posterior acceso, etc.- ; b) un poder para aplicar sancio·
prc¡'ia quc tipillea el acto ycoocede al congreso la facul-
su persona. sino a la fUI/ció" que comparte integrándolo, para tutelar su represiva. sicmprequc d h...'Cho no sea a la vez delito del código penal. en cuyo
libertad, su decoro y su independencia. ni aun con la ley previa puede el congreso ejercer represi6n (la que s6lo es
n .. ' del poder judicial).
26. - Entre los privi legios coleClivos se incluyen: a) cl juzgamiento
30. - Nuestra COrle Suprcma, al fallar en 1877 el caso "Lino de la Torre",
por cada cámara de la validez de "elección-derecha-título" de sus micm-
bros; b) la competencia de cada cámara para hacer su reglamento; c) el .';:;~~:~,~';l~".:o.cárnarm; la facu llad de reprimir hechos ofensivos que (/0 están
ti delitos en el c6digo pcnul.
poder disci plinario de cada cámara sobre sus propios miembros, y aun
En un fallo mur.:ho más rer.:iente recaído en el caso "Pclácz, Víctor". de! 15 de
sobre ¡erecros extraños: d) el derecho de cada cámara de hacer comparecer
octubre de 1995, la Corte hi1.o lugar a un habeas corpus y consideró justiciable el
a su sala a los ministros del poder ejecutivo; e) se incluye también como .creslO que había dispuc¡¡to el senado contra quien había efectuado una publicaci6n
privilegio el aceptar las renuncias que voluntariamente hacen de sus car- periodística que la cámara reput6 ofensiva para sus miembros. La Corle sentó doc-
gos los legisladores.


276 C01,U"'.,-';OIO DE DERECHO CO~SnJ1JClONAL EL I)I;RI;CHO ri\II.I..A.\1ENT AR\(I 277

trina qUe! compartimos, COllfornk! a la cual el poder disciplinario f.;untra tcrceros 1'610 Con posteriOlidad. otros fallos hi.!1l aclarado que el arl. 68 no sólo consagra la
procedo; cuando ~c entorpece u obstaculiza el cumplimiemo de las runciones de la de sanci6n, sino la inrlllmiJ,uf de prr-'Ccso.
cámara.
33. - La aplicación que la Juri$prudencia dl' li.! Corte ha hecho del art. 68 es
3 1. - Rcputándosca l congreso un 6rganocmincntcmenle deliberatil'o. ,,,,",,"'SW la vigencia de la norma constilucional. En cambio. ¡'a{orali¡'u-
la libertad de eJpresió1/ de sus miembros ha sido considerada como im- norma escriticablc. porque la impunidad total y absoluta con la que un
prescindible para el descmpei'io del cargo. Al pri vilegio consiguiente se lo en ejercicio de su maudalO puede injuriar. calumniar ofeocler, etc., no
conoce con cll Í1ulo de "inmunidad" de opinión. y mediante él. a ¡cnordel 1 sostenible.
ano 68 de In c.:onslitudón. ninguno de los miembros del congreso puede ser
acusado. imerrogado judicinllllellle ni /IIo1eswdo por las opiniones o los 34. - Para otros hechos distimos de la expresión, los arts. 69 y 70.
discursos que emi ta desempel1al/do su mandaLO de legisl(/dor. consagrando privilegios. admirel/ [a procedel/cia de causa judicial.
°
El art. 69 dice quc ningún senador diputado. desde el día de su elec-
En doctrina penal. hay t¡uu:nes consideran que la nomlii del art. 68 consagra nu hasta el de su cese, puede ser arrestado. excepto el caso de ser sor-
una "inlllunidad" sino una indemJlidad. "in fragalHi" en la ejecución de algún crim¡:n que merelca pella
muer/e. il/fml/allfe u otra aj/icrú·o. de [o que se dará cuenta a la cámara
La il/delllllidad del caso protege opiniones y discursos (inc luyendo con la información sumaria del hecho.
otras man ifestaciones simbólicas y actitudes) emitidos "en el descmpclio
del cargo". Quiere decir que. en el liempo, esas opiniones y e!'os discursos Es fácil comprendcr que el autor de la constitución apullló con esas
tienen que emitirse desde que el legislador se incorpora a la dmara hasta a incriminaciones de gral'edad. cualquiera sea su nombre en
que concluye su mandato. Pero emitidos en tallapso, quedan cubiertos del momento.
todavía des¡més del cese en el cargo. o sea que lo expresado en t:I descm- La norma exticnd~ el privilegio, ell el1Íl'lI/po. desde la elccción (y no
peño del mismo goza de indenmidad \'iIalicia. desde la incorporación. como interpretamos implícitamente para el arto 68)
basta el (:ese. Concluido el período de mandato. el pd vilegio temlilla.
DiSl;utS(l$ y opilliom:s :oignifican toda c}¡pre~i{m oral o escrita vertida en ct de~ ·
empeoo del cargo. con oca"i6n dd mismo y en cumplimiento de su fun ción. aunque
Se trala de inmunidad de dClencióllo privación de la libertad corporal.
no sea en el ~cinto de !;Csiones, pero siempre con suficiente conexid"d flmcional El artículo abarca dos su puestos: a) uno. que es el genérico. yse refiere a la
con el cargo de legistador. imposibilidad de delellcióll; h) otro. que es su excepción. y que prevé la
úl/ica hipótesis en que la detel/ción es posible.
32. - La ('orte Suprema manifestó, en el caso "Fiscal clBenjamín Calvele". La inmunidad de arresto 110 es. por el/de. "i"mullidad de proceso".
del 19 dl' setiembre de 18M. que esta inmunidad debe interpretarse en el sentido
Pucde iniciarse lacausa penal y tramitarse micntras no se afectc la libertad
m:i~ amplio y absoluto. porque si hubiera un medio de viularla impunemente, él SI!
empIcaría con frecuencia por los que intentaren coartar la libertad de los legislado- corporal ni se dispongan medidas de coerción personal.
res, dejando burlado su privilegio y frustrada la constitución en una de sus más
su~tanciales disposiciones. 35. - Si admitimos que en el supuesto de delito "in fraganti" es posi-
En 1960, al fallar el C3SO "Mario Martínez Casas". reiteró y e~pecifie6 su doc· ble ¡a detención del legislador, hay que preguntarse qué ocurre después de
trina, que puede resumirse en las siguiemes afirmaciones: a) la inmunidad del art. la detención. cuando se da cuenta de ella a la cámara. Lo más verosímil es
68 (al tiempo del fallo era arto 60), destinada a garantizar la independencia funcio- que la cántara, apli cando el arl. 70. decida si mediante desafuero suspende
nal de las Cán1.1raS legislativas, integra en nuestro régimen el sistema representativo () no al legislador detcnido. y si lo pone o no a disposición del juez penal
republicano: b) el car:iclcr absoluto de la inmunidad es requisito inherente a su para su juzgamiento. Quiere decir. entonces. que la privación transitoria de
concreta eficacia: c) pero los posibles abusos deben ser reprimidos por los mismos
legisladores sin afectar la esencia del privilegio.
li bertad no puede prolongarse después que la cámara decide no desaforar
allcgislador arrestado.
278 EL DERF.CHO PARL"~1ENT ARIO 279

36. ~ El art. 70 contempla e l desafuero : la nomla habilita un procedi- C uando resuelve desaforar, cabe suponer que no nc<:esariamcme tiene que ha-
ambas cosas: podría poner al acusado a disposición del Juez sil! suspenderl() (a
miento de allal/alllielllo del privi leg io, para que el juei'. pueda plenamente
que, ordenada la privación d..: tibellad, la detención Jcllegislador le impi-
acluar su competencia en el proceso [lCnal.
,""" m,,~ "').
Dice el artícu lo que cuando Je forll/e querella por escrito ame las
justicias ordinarias cOll/m cualquier sellador o diputatlo, examinado el 39. - La jurisprudencia tic la Corte, a través de numerosos fallos, ha puntua-
mérito del sumario en juicio público, podrá cada cámara con dos tcrcios ..,"o el alcance de est.: privilegh1: asi, por ej., en el caso "C R." tlcl4 de noviem-
de votos. suspellder en sus func iones al acusado y ponerlo (1 disposición de 1986, confillUÓ su anterior jurisprudencia en el sentIdo de que la inmunidad
no impid.: instruir sumario criminal para in\'estigar la conducta de
del juez COlllpereme para su juzgamielllo.
legisladores (excepto en el caso del art. 68) en tanto no se afecte la libertad
No se trata de un privilegio de irresponsabilidad sino de un a1/Iejuicio; rlUsmos por orden de m..:sto o prisión, provisional o definitJ\'a.
consiste. pues. en un impedimemo que posterga cienos aclOS en el proce·
so penal común hasta que se hayan producido otros actos: desafuero. des- 40. - Si ¡¡Itiempo de la elección de un legislador ya está en curso un proceso
titución. etc. Y ni siqui era dilata la iniciación del proceso, si no sólo la ...,,1por un presunto delito cometido an/es, la cámara no debería incorporarlo
pri vación de la libertad o la condena. ella, como juez de la elección (art. (4), habrra de estimar que no reúne la
r de "idoneidad" dd arto 16.
El término "quer..:J1a" no deh..: int..::rprclarsc en un sentido procesal estricto, lo Si, además. cllcgislador ya e~tuviera pril·ado de Sil libertad, la solución seria
que queda demostrado por emplear el mismo artículo. poco más adelante. el térmi· JI misma.
no sumario. La Cortc tienc dicho qu..: la \'erifical'ión por la cámara del propósito de En camhio, si por un delito anterior a la elección el legislador recién es S01l1e·
j uzgar al legislador ..::n caso penal se satisface iguahnente con el sumario o con la do , proceso penal despllés, delx- aplicarse la inmunidad de arreSlo y el mecanis-
acusación. mo del desafuero.

Sin necesidad de desafuero previo, el jUCL puede illcoa r la causa pe- 4 1. - Nuestra valoraciónllos lleva a decir quc no hallarnos razón suficiente
nal; ello surge con evidencia del artículo, que comicnza presumiendo la para que. si cada cámara pued..: corregir. renlO\"er o cx.p\rlsar a un legislador por
"fornmdún de querella". y prosigue refiriéndose al examen del sumario, y hec hos tal ve1.. menos graves que un delito, el poder judicial no pueda condenar por
a la puesta a disposición del acusado ante juez competente. deli to sin previo desafuero parlamentano; supeditar la finalizacion de ta causajudl-
c ial mediante sentencia. al "permiSO" de la cámara a que pertenece el legislador
La cámara examina el sumario, incluso desde el punto de vista de la proce sado, es mcnoscabar la administracion de justicia. De ahí que si bien 13 juris.
conveniencia política: si no se dispone el desafuero. el jueL no puede dictar prudencia tamhién nos parece en este ca${) ajustada a lo que prescriben los arlS. 69
sentencia. En esta competencia, la cámara ha de actuar con ética. y no con y 70, ambas normas constitucionales no satisfagan nuestro ~entimiento de justic ia.
prejuicios panidistas, tanto si concede como si niega el desafuero.
42. - Los privi legios parlamentarios. aun los individuales. por eSlar
37. - Una vel. que la cámara ha dispuesto d desafuero de un legislador, el acordados por la constitución a favor del congreso como órgano del poder
privilegio queda allanado solamente para la causa penal que da origen a la lnedida. Independiente y autónomo, no quedan suspendidos durante el estado de
y no es posihle que en virt ud dc ese desafuero se sustancien "otros" procesos judi- silio . Así lo declaró la Corte Suprema en el caso " Alem" de 1893.
ciales por hechos distintos.
Sin embargo. In Corte Suprema decidió lo contrario en el caso " Balbín, Ricar· 43. -1!cUlOS de preguntamos qué ocurre con los privilegios de los legislado·
do", con fecha 26 de junio de 1950. ~s cuando éstos -si son abogados- actúan en sede judicial. Compartimos lo decidi-
do por la Corte en 1911 cn el caso "Manuel Gascón (h)", en el sentido de que tales
38. -El ano 70 enfoca dos facultades de ejercicio OpW!iI"O -y no obligatorio- privi tegios no obstan a la imposicion de sanciones disciplinarias por parte de un
por ta cámara: dice que ésta pOllní: a) "suspender" al acusado, y b) "ponerlo a tribunal judicial cuando un legislador que actúa en juicio incurrc en inconductas
disposición" del jucz. lesivas del decoro y la buena administración dc justicia.
280 Co~,rrSDlO DE DERECHO CO:':.!¡Tl11:CIO~A¡. EL DI::lI.E.CIIO PARLA,\11:.'ITAlIJO 28 1

44. - Otro problema se su~ita COIl los privilegios qU<! las constLlUciolll!s de b) de esta información nocabcdccirque limile su finalidad a un cono-
pn.wincia conflcrcn a los It:gisladorcs locales. Corrigiendo una opinión anterior. de ulilidad para el congreso. ya que además puede derivar a una
ahora sostenemos qu..: aquellos privilegios son opon;bfe~ en toJo ellr:rrilorio del de cellsura y hasta a la remoción dd jefe de gabim:tl!.
pafs ante la jurisdic¡,;ión federal y la jurisdicción de otras pro\Jncias. El principio de
lealtad federal y bu¡:na re apona una de las razones existente:. para respaldar CSIa
nueva propuesta. 47. - La insatisfacción. desaprobación o disconformidad de las cá-
respecto de los informes que reciben de los minimos, o del poder
45. - a) El arl. 71 di sponl! que cada una de las cámaras puede hacer :cu"h'o a través del jefe de gabi nete, solamente reviste el alcance de una
venir a su sala a los mil/istros del poder ejccutivo para redbir las ex.plica- adversa, pero que l/O resulta villculallte. ni para el o los minis-
ciones e informes que estimc convenientc. , ni para el jefe de gabinetc, ni para el pooer ejecutivo. En cambio.
' lCde repercutir e influir en la $( Idcdad por medio de las opiniones públi-
En nucstro derecho const ilUcional del poder. siempre se denominó ill-
y de la informaci ón que proporcionan los medios de comunicación
rerpelaciól/ a este llamado que efectúan las cámaras para hacer compare -
cer a los ministros.
La única excepción en cua1llo al efecto que estamos analizando viene
h) Sin perjuicio de lo dispueslo en el ano 71. ahora el arto 101 hace
)uesta en el art. 101 cuando prevé la moción de censura y la remoción
obfigmoria la cont.:urrcncia del jefe de gabinete de mil/iSlros al menos una
I jefe de gabinele: la I/Ioción de cel/SI/m puede provcnir de una sola
vel Dor mes, altemutivamcntc, a cada una de las cámaras. La linalidad es
inulTa. en cuyu caso no surte efecto destilutorio. y la remociólI necesita el
informar sobrt! la /l/archa dd gobien/O.
cada cámara,O sea, Lit: las dos.
Asimi smo. el je fe de gabinete puede ser imerpelado según la misma
norma a efectos de tratar una mociólI de cel/sura. y puede ser removido, 48. - Es posible dividir lafacultad /n\'(!$/isadofll cn dos: a) la dcl"congrcso"
todo ello con las mayorías previstas para el caso. cuerpo conjunlo que rl!úne a ambas cámaras: b) la de "cad a cámara" por
e) Hnalmentc. el ano 100 ine. 11 dispone que al jefe de gabillete le En ambos casos. lo más frecuente y fácil es que ta investigación no la
corresponde prooucir los infomles y explicaciones verbales o escritos que el pleno del congreso ni dI.! cada dnlaTa sino una "comisión" investigadora
o~m,~ del se no de uno o de otra.
cualquiera de las cámaras solicite al poder ejecu tivo.
49. - Un agrupamiento de los principios que reputamos fundanlC.!ltales po-
46. - Después de la refomltl constitucional de 1994. que ha mante- sistematizan;c así:
nido el art. 71 y ha agregado el ano 10 1, hemos de diferenciar la interpe la- a) El ejercido de la fal:ultad de investigación 110 requiere la existencia previa
ción a los ministros y la interpelación al jefe de gabinete. ~ ,<n. ley regtamentaria que regule dicha facultad:
Parece que para los lII;nütros, la interpelación posee únicamente una b) Se trata de una facultad emergente ele 105 poderes implícitos (de cada cáma-
fina lidad informativa, que a nuestro criterio debe ser conducente para (lIgo 'no ". la investigación c~tá a cargo de clla. o del congreso, si la cumple el cucrpo con
que le sea úti l al congreso a efectos de ejercer una competencia suya. o de tus dos cámaras):
cu mplir su fun ción de control. c) La investigación así funJad<l dcbc:guardar reltu:ióll flmcwllal de finalidad
En cambio, el jefe de gabinete fielle respollsabil¡dad ¡Jolífica ante el con alguna competencia de! congreso o de sus cámaras: y debe desarrollarsc de
modo compatible cOlllOda~ las /imitaciones que la co nstitución impone a los órga-
congreso en virtud del art. [00, de 10 que inferimos quc:
nos de poder, y con los derechos y gafan/fas per~onales:
a) en su deber de informar a las cámaras en los términos del arl. 101
d) La investigación 110 puede: d') invadir la zona de resen'a del poder ejecuti-
sobre la marcha de gohiemo, pueden aquéllas requerirle puntualmente cual- \'0 y del podcr judicial: J") violar la pn'\'acidad de las personas: d''' ) no existe una
quicr informe referido a materias propias de cualquier ministro, O el pano- facultad de revelar públicamente informes obtenidos por el solo hecho de hacer
rama de conjullto, O la gestión personal del jefe de gabinete: revelaciones:
282 COMPI'SVlO UE I>ERECHO ro:><SllIUClO.sM

el El ejercicio de las facultudes de investigación está sujeto a control jlldicial


de constitucionalidad cuando se alega por parte interesada 'Iue !\C ha incurrido ell
violación a la constitución:
1) Ni la cámara investigadora. ni el (.xmgrcso. pueden aplicar SOl/ciones a terce·
ros ajenos a dichos cuerpos.

CAPtnJLO XXXI V

LA COMPETENCIA DEL CONGRESO


FUERA OEL ARTICULO 75

Las eompclenci.ls dispersas

l. - La primera competencia del congreso no incluida en el ano 75 es


la que en el art. 30 establece elmccanismo de refonlla de la com/i/lldólI.

Los oCIOS qlle deben cumplirse eOI/ participaciól/ y COllse1llilll;elll0 pro·


l'illciales

2. - Dada la estructura fede ral de nuestro régimen. el congreso cum-


ple cienos actos que son de su competencia. eOIl COlIst!lIIimielllo o parlici·
Imcióll de las legislaturas prol'illeiales. Es decir que hace fa lta la concu-
rrencia de un órgano provincial y de un órgano del gobiemofederal.

Es imerc:~antc advC11ir que en la doctrina se ha elaborado la categoría de "facul-


tades cOl/lpnrridas" entre estado federal y provincias para connotar aquéllas cuyo
ejercicio rcquier~ un acto inh:gratorio de los dos órdenes gubernamentales.

3. - En pri mer lugar. lafijació1/ o el establecimiemo de la capital


federal. donde reside el gobierno federal, requiere queel congreso declare,
mediante una ley especial, la ciudad capital. previa cesión hec{¡a por l/na
o más legislaturas provinciales. del terri torio que haya de fcderalizarse
(an.3").

Interpretamos que para reintegrar a una o más pro\'incias el territorio de la


capital federal ~ sea, para "desfederali1.arlo"- también hace falta (por analogía co n
la "fedcralilación") el consentimiento provincial.
,~ .'
284 COMPE....nIO DE DERECHO CONSTITUOONAL LA CúMPETEJ..:CIA DEL L"'Th'lGRESO AJERA DEL ARTICULO 75 285

4. - El art. 13 determina que podrán admitirse lluevas provil/cias, :on ~'conocimiento" del congreso federal (que para nosotros impli·
pero no podrá erigirse una provinci a en el territorio de otra u otras, ni de . del congreso) las provincias pueden: a') celebrar los rra-
varias formarse una sola. sin el conse1ltimiel/to de la legislatura de las parciales a que ya se refería el ex art. 107. que ahora subsiste como
provincias illleresadas y del congreso. Por su parte, cuando el inc. 15 dcl 125 ; a") crear regiones para el desarrollo económico y social confor-
art. 75 otorga al congreso la competencia de fijar los límites de las provin- ano 124; a"') celebrar cOl/venios illlernacionales con el marco y los
cias, se refiere también a la de "crear" ot ras nuevas. fijados por el arto 124.
b) Con autorización del congreso federal, las provincias pueden esla-
5. - La previsión de posible formación de una provincia con varias no crec- laneos' con facultad de emitir billeles. Ello surge del art. 126 que, en
mos quc pueda aplicarse a las catorce provincias históricamente pr\!Cxistentcs. si es
que seguimos apegados a una interprctaciónlradicional-historicista de nuestra cons-
, les prohíbe hacerlo sin autorización del congreso.
titución; pero cabe pensar que la misma previsión puede prosperar con respecto a e) Finalmente. si se acepla dentro del marco de un federalismo "con-
provincias que adquirieron calidad de tales con posterioridad a 1853-1860. la inclusión como derecho illlrajederal de con venios, acuerdos,
o nomlas (también "leyes-contrato") que son resultado de deci-
6. - Haydoctrina que incluye entre los actos del congreso requeridos coincidentes del estado federal y de las provincias, es válido agre~
de participación provincial a la "fijación" de límites imerprovinciales, su ejemplo como uno más de facultades compartidas (aunque acaso
que es una competencia prevista en el ine. 15 del arl. 75. compart idas "volumariamente" y no obligatoriamente).
No parece que pueda generalizarse esta interpretación.
lO. - Si se pasa revista prolija a tudo el articulado constitucional que queda
7. -Cuando el congreso fija los límites interprovinciale~. cabe pensar en el :,:::1,,:;';'
75, es posible encontrar otras wmpetcncias que cjemplificativamente
límite marftimo de cada provincia que tiene costa oceánica. Los límites marftimos : en seguida.
no son límites "de" provincias ni "entre" provincias, sino límites internacionales. Asimismo, ha de computarse en este rubro todo lo que bajo el nombre de ''re-
Por supuesto que cl "arreglo" de éRtos incumbe también al congreso, pero entonces '(y latamente, "principio de legalidad") implica una competencia pa-
no resultaría posible que (so pretexto de fijar los límites provinciales) el congreso cuyó ejercicio la constitución exige "ley" de! congreso.
estableciera límites matÍtimoli diferenciales respecto de y entre las provincias lin- El art. 4~regula la formad6n del llamado ''tesoro nacional" cuyos recursos
dantes con cl océano.
Si bien sólo menciona al congreso cuando le asigna espcdfica~nte la
La competencia del congreso en materia de límites marítimos no incluye la de . para imponer "contribuciones" y decretar "empréstitos y opcraciooes
fedcralizar la porción marítima que, integrando el terntorio de las provincias. es • todos los OIroS ingresos del tesoro que prevé el mismo artículo implican
definida por la ley como de dominio público. de facultades que. sin señalarse en él expresamente, incumben al congreso
incluidas en el art. 75.
8. - Cuando se lec e interpreta el arto 75 inc. 20 es fácil ubicar a la El art. r otorga al congreso la facnltad de dictar leyes generales que determi-
coparticipaciólljedera{ impositiva en la serie de competencias comparti- la fonua probatoria de los actos públicos y procedimientos judiciales de cada
das. aun cuando esta vez no aparezca fuera del art. 75 sino dentro de él. y los efectos legales que producirán (atento qne la misma norma dispone
t las demás provincias).
Esta coparticipación requiere: a) que la ley-convenio tenga base en acuerdos El an 9" asigna al congreso la facultad exclusiva de establecer las tarifas que
entre el estado federal y las provincias, y b) que sea aprobada por las provincias una en las aduanas nacionales.
vez dictada por el congreso.
El art. 14 reconoce los derechos individuales que se gozan conforme a las leyes
reglamentan su ejercicio. El carácter relativo de tales derechos los somete a
9. - Hemos de analizar supueslOs que caben en el listado de faculla· Ilmitaclones (razonables, a tenor del art. 28), que el congreso puede establecer a
des compartidas. pero con la modalidad de que a veces lacompetenciadel través de la legislación. Lo misn~ cabe decir con respecto a los derechos reconoci-
congreso se ejerce después de ejercida una competencia provincial. do¡ a los extranjeros por el art. 20, y a los incluidos en el arl. 14 bis.
2&6 CoMPE."1)JO DE DERECHO CONSTrruCiONAl LA CO~PETENa ... DEL CO:-¡OMESO A iERA Da A1rTfCULO 75 U7

El art. 15 I:slipula q ue una ley especial reglará las indellUlizaciones a que da El (in 42, coordinado con e14J, requiere que la ley prevea la existenc:ia de las
Jugar la abolición de la esclavitud. de consumidores y usuarios y tU rcg islrac ión. rcqUllilos y fortuas de
El (I r l . / 7 o torga al congreso la competencia exclusiva para declarar y calificar
por ley la utilidad pública en caso de ex propiación. El an. 45 menciona la fijación por el congreso de la representación que. des-
También se fl.'quicrc ley para exigir servicios personales e impone rcontribu cio· eada censo, compondrá la ctimara de diputados de acuerdo ron la pobla-
Hes. El arto 49 remite al congreso la expedición de ulla ley electoral para proveer a
después de la instalación del primer congreso.
E/l/fl. /8. al estalUir que nadie puede ser penado sinjnicio pre\'io fu ndado en
ley anterior al hccllO del proceso, ni sacado de los jueces designados por la ley ante;; !M ..74 prevé la remuneración de los diputados y senadol\-'S de acuerdo con la
del hecho de la causa. implica atribuir al C(:lfigreso la competencia exclusiva para que seftale la ley.
incrillúnar conduetal! que constituyen delitos del código penal, y para establecer la 85 prevé una ley para la Auditoría General de la Nación.
organi".ación estabh! y pennaneillC del poder judidal; lo primero vuelve a apareccr
· 86 sobre el Defcllsor del Pueblo dice que "la organización y el funciona~
expresamente en el art. 75 inc. 12 -que prevé la sanción dd código pcnal- y lo
institución serán regulados por Ulla ley especia!" .
segundo en d 3rt. 108 y en el art. 75 inc. 20, que ordenan al congreso establecer IOI!
Iiibunales inrcriorcs. arto88 asigna al congreso la facultad dc dctcmunar qué funcionario público
A~¡llli smo. el arl. 18 dctcrnúna que una ley establocerá en qué casos y con qué
la presidencia, en caso de destituci6n, muerte, dimisión o inhabi-
presidente y vicepresidente.
ju~tH1C:ltiYOS podrá pnx:edcrsc al allanaITÚcnlo y ocupaci6n del domicillo, la C01T\$-
pondencia epistolllr y los papele~ privados. arlo 92, al aludir al sucldo del presidente y vicepresidente, da ]Xlr &entado
El arl. 19 cOntiene (o.:n su parto.: final) el enuncíado del principio de legalidad. su fijaci6n por el congreso.
El (lrl. 21 contcmpla la obligación del ciudadano de armarse en dcl'ellsa de la 'a". 93 habilita al congreso en pleno (asamblea legislativa) para que el pre-
patria y la constituci6n. confornle a las leyes que al efecto dicte el consre..~o (y, vicepresidente de la repLlblica presten juramento constituclonal en mallOS
ad.!más. a los decretos dd ejecU!ivo nacíonal). del §cnado.
El ar/. 24 dispone que el congreso promovcni la reforma de la actual legisla- 'un. /00 11!Cnciona a la ley que, con n:laci6n al jefe de gabilil!tc dc mInistro!!
ción en lodos sus ramos. y el cstablecimiento del ju icio por jurado:>: eSlo último es ministros sccl\:tarios, debe establecer su ml mero y competencia.
in¡;istido en el art. 75 lne. 12 (in fi ne) y en el arto 118, 'a" 110 !le refiere a la determinaci6n por ley del!!ueldo de los ju~ fedon-
El an. 26 pn:\'é la libre navegación de los ríos, con sujeci6n llnica a los " regla.
mentos" de autoridad federal, que implican una po~ible legislación. onl. //4 Y 115 mencionan la ley que ha de regular el Consejo de la Magis-
El (In. 36 remite a la ley para: a) fijar elliempo de inhabilitaci6n para ocupar . r;k 10 1 juccC8 federales de tribullalC5 inferiores
cargos o empleos públicos en caso de delito doloso contra el estado que conllc\'e
enriquecimiento: b) reglllurntar la ética pública para el ejercicio de la (unción. · /17 depara la competencia de establecer reglM y excepciones a la juris-
el arl. 37 pmvé que las leyes de partidos políticos y régimen cle<:torlll garanti. de la Corte: en general, tanto det citado arlfculo como del 1/6 se
cen la igualdad real de oportunidades entre varones y mujeres. facultad del congreso de regular la competencia de los tribunales fede-
El {In. 18 abre el espacio para la legislación sobre-partidoli polrticos. excepci6n de la originaria y exctuaivll. de la Corte, que no puede ser am-
disminuida por ley).
El arlo 39 se reOl.'fe a la ley reglamentarIa del derecho de iniciativa legislativa
popular, y a la competencia (obligatoria) del congreso para dar trámite y tratamiento · 120 habilita a dictar la ley para el Ministerio Ptlblico.
expreiQ a 10$ proyectos de ley surgidos de aquella iniciativa. /27 contempla la repre~i6n por ley de las hostlJidadcs entre provincias.
El (Irt. 40, ~bre consulta popular, consigna la cumpetencia del congreso par~ /29 pre\'é una ley para garantizar los hllcreses del estado federal mien-
convocarla y para dictar la ley reglamelllaria de la núsma. dI! Buenos AlreslI\!a capital federal, 'i la competencia para
El arl. 41, !IObre derecho ambiental, alude a 111 ley que e,tablezca la obligaci6n al electorado de 1I ciudad para elegir los representantes encargados de
de recomponer el dailo IImbiental, y a las normas que contengan 101 presupuestos f.lltatuto Or8lnizativo.
míniroo¡ de prolección del ambiente. 1,(1' artJeulol que contienen irlcrimir/ac;ones (15, 22, 29. 36 Y /19) I'KI fijan las
• •
288 CQMI'flIo"DID DE I>ERECHO CO:-;SIII UOm<AL

penas cOIruspondientes a los respectivos delitos, pero obligan al congreso a estable-


cerlas denlrO de la legislación penal. El an J1910 consigna expresamente.
En los (irls. 99 y lOO aparecen algunas con~tencias del poder ejecutivo y del
jefe de gabinete que ¡itlOen correspondencia con otras del congreso; asimismo en el
ano 101 para la remoción del jefe de gabinete.

1L - Si siempre fue t:omún destacar que el congreso cumple una función de


con/mi, después de la reforma de 1994 el nl/el'O arto 85 ha incorporado fuera del art.
75 una competencia explícita. Dice el primer párrafo del arto 85: "El control externo
del sector público nacional en sus aspcclQs palrilD)niales, económicos, financieros
CAPfruLo XXXV
y operativos, será una atribución propia del poder legislativo".
EL ARTICULO 75
El congreso cuenla para ello con un órgano (extrapodercs) de asist..:ncia técni-
ca. que es la Auditorla Geneml de la Nación.
con la parte dogmática
Las obligaciones de omisión como límites a la competencia
l . - En el art. 75 se condensa el agrupamiento que de las compctcn-
Otro repaso de la constitución pcmlite confeccio nar un catálo-
12. - congreso hace la constitución. aun cuando ya vimos que hay otras
Ide
go deproltibiciol/es. Lo que "no se puede hacer" queda al margen de toda
competencia : por eso, el encuadre de las prohibiciones halla marco en lo ano 75 pertent:ce a la parte orgánica de la constitución, pero es
que denominamos obligaciones C01lstitucionales, que en el caso son obli- de un fenómeno normativo propio de la reforma de 1994, con-
gaciones de abstel/ción u omisiÓII. . la parte orgánica una serie de valores. principios y
Cuando hallamos prohibiciones genéricas que van dirigidas al estado obhgadamente reenvfan a taparte dogmática. Asf:
o al gobierno federal, es válido sostener que alcanzan al congreso. Pero las el ine. 2" sobre copanicipaciólI federal impositiva señala la!! pau-
hay directamente impuestas a él, o a la ley. valor que han de tomarse en cuenta para la distribución de la recau-

Las citas no exhaustivas se ejemplifican con: b) el ínc. 17 contiene derechos de los pueblos indígenas argel/lillos;
A rt. 25 (prohibición de gravlÍn~nes a la entrada de extranjeros); arl. 12 (prohi- e) el inc. 19 en sus cuatro párrafos suma referencias principistas para
bición de leyes preferenciales entre pucnos): arto 13 (prohibición de desmembrar la
. , para el credll/iemo y el desarrollo desigualitario.
integridad territoriat de las provincias sin consentimiento de sus legislaturas); arl. la educaci61/ y la cultura;
14 bis (prohibición de superposición de aportes en materia de seguridad social);
MI. /7 (prohibición de establecer la confiscación de bienes en la legislación penal); d ) el ine. 22 alude a instrumel/los ¡rIlen/aciol/ales sobre derechos
url. 45 (prohibición de disminuir la base de población que la norma expresa para
cada diputado); art. 76 (prohibición de delegación legislativa a favor del ejecutivo); e) el inc. 23, a la igualdad real y a los derechos;
arl. 82 (prohibición de sanción ficta o tlÍcita de leyes); arto 110 (prohibición de
disminuir el sueldo de los jueces federales). f) el ¡nc. 24, cuando prevé los tratados lle il/tegraci6n supraestalal,
,¡én ¡ml:xme pautas valorativas.
13. - El examen de las prohibiciones reviste un interés práctico. en
cuan to hacer lo que el las impiden irroga illcollstiluciollalitUld en la activi-
dad del congreso. susceptible de contro l judicial deconstitucionaJidad. .:1 ~istema rentístico y financiero

2. - El arto 4" de la constitución prevé la formación y los recursos del


• •

290 COMP!;.'''D\O DE DERECHO ("O:"S IIIUOO~AL


El. ARTI(."UI.O 75 291

lIamadoresoro 1/acional, enumerando las fuemes de ingreso. Con rcferen- . se hadcspla7..ado sin duda hacia el poder ejecutivo. y ha
cia a ellos. e l arto 75 cont iene diversas cláusulas. ámbitu congresional.
Después de la reforma conviene tomar en cuenta dos cosas: a) subsiste
ta competencia del congreso para establecer y reglamentar un banco "fede- 8. - En materia de presupuesto la refanna de 1994 ha introducido
raJ" con facultad de emilir moneda (art. 75 ¡ne. 6"); b) se ha agregado entre . . Por un lado. ha eonstitucionalizado la ¡'¡iciativa o prcpa-
las competencias del congreso la de "proveer lo conducente ... a la defensa el poder ejecutivo del proyecto de ley presupuestari a. cuando el
de! valor de la monedo" (an. 75 inc. 19 párrafo primero). sobre competencias del jefe de gabincte dicc en su ine. ff que le
enviar al congreso el proyecto de ley de presupuesto, previo
3. - El ¡ne. l° del ano75 ha sufrido modificaciones de rcdacci6nen la ,en acuerdo de gabinete y aprobación del poder ejecutivo.
refonna del que alltes era ¡ne. 1° del arto 67. Mucho más breve, ahora dice 1:1 ine. 8'" dice que <.:Orrespondc al congreso: "Fijar anualmente, eonfor.
que: a) al congreso le corresponde legislaren malcriaaduanera yestable- a las pautas establecidas cn el tercer párrafo del inciso 20 de este artícu-
cer los derechos de importación y e,\lJortaciólI, así como las avalulIciot/es de gastos y cákulo de recursos de la administra-
sobre las que recaigan; y b) serán unifontles en todo el tenitorio. en base al programa general de gobierno y al plan de in ver-
públicas y aprobar o desechar la cuenta de inversión".
4. - El loe. 1:' del ano 75, mucho más extenso y objeto de sustancial
reforma en el texto de 1994 tiene como núcleo importante [a coparticipa- Esta remisión a las pautas del ioc. 2° «!ue en él están destinadas a la distribu-
ciól/ federaf impositiva. ele la copa1'1icipaciÓIl federal) le impone al presupuesto un oroen de priorida-
& !Ia~: l~s cn'len'os objeli\'Qs (como los califica el inc. 2°) aluden a la et¡/Ii-
5. - El inc. 3 del ano 75 mantiene la competencia de cOI/traer em·
D
la ,wJuJand(ld, cllogro de un grado equivalente dc desarrollo, calidad de vida
préstitos (aunque ha suprimido del ex inc. 30 del arto 67 la alusión a em- oportunidades en todo el tClTitorio.
préstitos "de dinero"). Relacionando la norma con el arl. 4°, encontramos
en éste la mención de los "empréstitos y operaciones de crédito que decre- l..a leyde presupuesto esanuoJ: no es una "Super-ley" que pueda prcs.
le el congreso para urgencias de la nación o para empresas de utilidad de los parámetros axiol6gicos de la consti tución: tanlpoeo es una
nacional". fiscal, por lo que no puede crear, mod ifi car ni suprimir tributos.
El inc. 5° del arto 75 aUlOriza al congreso a disponer del uso y de la
Para las im'Crsione$ públicas damos por cierto que, aun cuando el inc. 8 0 no
enajenación de las tierras de propiedad 1Ulcionaf. también en consonan-
inc. 19 del misrm ano 75, hay que tomar en consideració n las pautas
cia con el arto 4°, que incluye entre los fondos del tesoro nacional el pro- él se estipulan.
ducto de la venta y locación de tielTas de propiedad nacional.
El inc. 14 del arto 75 consigna la competencia de arreglar y establecer 9.- El art. 75 jne. 80 acuerda al congreso la facullad de aprobar O
los correos generales (se ha suprimido la mención de "las postas"). cuellla de im·ersiól/. Es evidente que la constilución ha mri-
La nonna se refiere a los correos federales y. por analogía. a los telé- al congreso un importante papel de cOl/lrof del presupuesto ejecu-
grafos, teléfonos y otros medios de comunicación similares. . parte de la doctrina llama control "póstumo", y que no ha de
el control durante la "ejecución".
6. - Con los fondos del tesoro nacional el congreso puede acord ar sllbsidios a
las provincias cuyas renlaS no alcancen a cubrir sus gastos ordinarios. según sus 10. - En materia mOl/elaria y bancaria:
presupuestos (art. 75 ine. 9"). 0
Confomlc al inc. 6 le <.:Orrcslxmdc al congreso establecer y reglamen-
un bllllcofederaJ con facultad de emitirmo1/edo. El texto del que antes
7. -Al congreso le incumbe por imperio del inc. Tdel art. 75 "arre-
de la reforma era me. 50 del ano 67 hablaba de un banco "nacional" con
glar" el pago de la deuda interior y exterior del estado. pero el ejercicio 'I",'ultad de emitir "billetes".
292 COMPENDIO DE DEREOIO CüNSTl"ll1C10NAL EL ARTICULO 75 293

Las provincia.l' no pueden establecer bancos con facultad tic emisión n, ". energía eléctrica e hidroeléctrica, los servicios telefónicos, telegráfi-
. alcanzando a cosas, productos, mercaderías, personas, pensamientos. imá~
sin autorización dcl congreso (art. 126).
.. etcétera.
El im:. JI. por su lado, asigna al congreso hacer sellar mOlleda, fijar
Aparece acá, conectado con la cláusula comercial, el ¡nc. 10 del misnXl art. 75,
su valor y el de las extra1ijeras. ,;,,10 al congreso la reglamentación de la libre navegación de Jos ríos interio-
Las {Jrovil/cias no pueden "acuTiar" moneda (an. 126). y la habilitación dc pllCrtos que considere convenientes, con la limitación del
, 26, que declara libre para todas las banderas la navegación de los ríos interiores,
El ¡ne. 6u también prevé que el congreso eswblezca, además del banco
¡;ujeción únican~llte a los reglamentos que dicte la autoridad nacional.
federal, o/ros ballcos "/1acio1/ales".
Suele también vincularse la facultad del congreso de adoptar un sistema uni-
El im: 12 incluye en la legislación general a la ley sobrcfalsificaci6n '00 de ~"" y mOOidas (art. 75 inc. 11) con el comercio interjurisdiccional y con
de la mOlleda corriente. . La competencia ha sido ejercida estableciendo d sistema métrico
Parece verdad que, por su carácter federal, el banco aludido en el inc.
60 debe incorporar a representantes de las provincias en sus órganos de
conducción y administración.
pueblos indígenas

13. ~ El ¡nc. 17 se refiere a los "pueblos indígenas argcntinos".


El inciso 12
"Pooblo" sería aquí equivalente a población y, con ese sentido, los "pueblos
11. - El ine. l2 condensa varios rubros en materia de legislación, dis- argentinos" vienen a definir los sectores de población o comunidades
tribuida en la que es de derecho común -que fundamentalmente aparece que componen al conjunto humano qne es elemento de nnestro estado.
en la clásica codificaci6n civil. comercial. penal, minera y en leyes disper- a) El re<::ooocimiento de la pree.ristencia étnica y cultural de los pueblos indí-
sas (por ej., en matcria laboral y de seguridad social)- y la que se define argentinos ofrece varios aspectos. Uno quizá aparezca como simbólico}' re-
,"," Otro como histórico.
como derecho federal. El Loe. 12 usa a veces la denominación de leye.."
"generales". Que étnica y cultnralmente hayan preexistido los pueblos indígenas implica
negativamente, es inviable desconocer o contrariar la herencia que hoy se acu-
Se menciona la ley de naturalización y dudadarua, la de bancarrotas, ell sus comunidades y en nuestra sociedad toda; positivamente, quiere decir
la de falsificación de moneda y documentos públicos del estado, y la del hay que promol'erla. El congreso tiene el deber de no tomarla inocua y de
juicio por jurados. deSalTOllo en cuanto ámbito resulta posible.
Uno es el de la integración. Inte,grar a los pueblos indígenas es no aislarlos ni
sino depararles un trato igualitario con el reslo de la sociedad para
(,3 cláusula comercial integrante de ella, sin renuncia ni abdicación a su estilo, a sus dire-
a su idiosincrasia, a su cultura.
12. - En el ¡nc. 13 del art. 75, cltcxtoconstitucional reconoce l acom~ b) El congreso debe garantizar a los pueblos indígenas el respeto a su idenfi-
petencia congresional para reglar el comercio COII los estados ex/mI/je- y el respeto a una educación bilingüe e interr:ultural;
ras, y de las provincias ellfre sí. O sea, el comercio exterior y el comercio las conultlidades indígenas obtengan reconocimiento de su personalidad
illlerprovillcial (o comercio intcrjurisdicdonal). En cuanto al primero, la implica admitir su organización, acorde con la peculiaridad asociativa que
normajuega e n concordancia con el régimen aduanero de carácter federal. "P,nm<la índole indigenista.
también a cargo del congreso. e) Hay en seguida un reconocimiento a la posesión y propiedad eOll/lmitarias
tú /tu ti~rras que tradicionalmente ocupan.
Comercio no es sólo tráfico o intercambio, sino también comunicacióp; o sea, El congreso tiene, además, que regular la entrega de otras ticrras que sean aptas
comprende el tránsito de personas, el transporte, la transmisión de mensajes. la y lIuflelentes para el desarrollo humano.
• •

294 EL ARTICULO 75 295

Ninguna de las ticlTas mencionadas será susceptible de enajenación, de trans- Ademú., la extensión del progreso y del bienestar a "todas las provin-
muión, o de gravámenes y embargos. Oc esta manera se garanlir..a aquel espacio lacl'usula ulla dimensión territorial y social que abarca a la intcgrnlidad
geográfico de asentamiento, d..: modo congruente con la finalidad de desarrollo a la y poblacional de todo el estado.
que hacíamos referencia. del arto 125 constitucional, lodo estc c úmulo de competencias es can-
d) Como último pUrlIo la norma alude a asegurar la !)(Irlidpaci6n de los pue- las provincias, que pueden hacer lo mis mo eu sus respel.:tivas jurisdic-
blos indígenas en la ges tión referida a sus recursos naturales y a los Otros intereses
que los arecten.
El ¡ne. 17 trae, con);) cierre, una previsión sobre el reparlQ de competencias , - Para e l "progreso de la illUfración", el ¡ne. 18 concede al congreso la
entre el estado federa l y las provincias. Dice asf: "las provincias pueden ejercer dictar "planes" de instrllcción general y universitaria. Esta terminolo--
concurrentemente e stas atribuciones". e l lineamiento y la estructura de la educaeiÓCI en todos los niveles y
pa:~ la enseñanza cnjurisdícción federal y provinc ial, y para la ensci\anza

14. - El inc. 17 permite aseverar que, explícitamente, ahora la cons- . (1 elltatal).

titución se hace cargo de los derechos de las mil/orlas, lu que en el texto


El inc. 18, después de armar su repenorio de competencias arbitra ex-
conSlitucional creemos que es una novedad inusitada respecto del históri-
I algunos medios para darles cumplimiento. A la meoción de "leye.~ pro-
co y originario.
de esos fines añade las '·co[K;csione~ temporales de pril'ilegios y recom -
Por otra parte, hay simelrías con el plexo de derechos. lo que demues- de est/illufo".
tra Olra vez en la reforma de 1994 la original conexión de la parte orgánica alusión del ine. 18 puede servir para extenderla a favor de los fines que
con la parte dogmática. ¡"ros incisos del art. 75; por ej., el 19 Yel 23. Es fácil consentirlo cuando se
ro ," ' verbo "proveer lo conducente a ... ". que aparece en el ine. 18. con el
15. -Además. hemos de eofalizar que el nuevo inc. 17 se hace cargo verbo ''pro,·eer~ y COfl el verbo " promover", que e l constituyente -antes y
del derecho a /a diferencia, que es una expresión del derecho a la idemi- de la reforma de 1994- ha utilizado varias \'eces.
dad personal y que se relaciona ínti mamente con él.
. - Con la reforrnade 1994, el il/c. /9 prolonga y completa muchos
Esta nueva cláusu [a revest ida del alcance recién aludido para nada riñe
por el inc. 18. Se trata de un amplio arco de cuestiones
ni pugna con la abolición y prohibición de las prerrogati vas de sangre y de
con el desarrollo, la educación, la ciencia y la culturo, sin
nacimiento que mantiene el viejo art o 16. Acá no se otorgan privilegios ni
de lado otros importantes temas como la política demográfica, la
prerrogativas, sino que se asume una justa expresi6n del pluralismo de-
la iguaJdad de oportunidades, la autonomía y
mocrático y del mencionado derecho a la diferencia. imprescindibles en un
las universidades nacionales. la participación socia] y fam i-
estado democrático.

Es fácil advertir que estos contenidos del inc. 19 se conectan con el


Las políticas p.lra e l desarrollo, la cultura. y las cuestiones poblacio- 17 sobre los pueblos indígenas, con el inc. 23 en sus dos sugestivos
nales - muy úti les para los derechos humanos-. y con los ¡IlCS. 22 y 24.
>do ello, el recorrido del mc. 19 en sus cuatro párrafos resulta imprcs-
16. - El inc. 18 (que fue inc. 16 del arto 67, Yse ha d ado en llamar la cláusula
del progreso) es de una amplitud manifiesta y engloba en su enunciado uoa temáti-
ca que, sin carácter ta xativo, equivale a los contenidos dd bien cOl/lún y de 10 que 20. - Vale repetir que los ejes lineales de las políticas públicas hall an
hoy se denomina desarrollo. itA UIl n6cleo de naturaleza operativa al que debe dársele desarrollo con-
Proveer 10 cond ucente a la prosperidad del país, al ade lanto y bienestar de " to- gruente. y que nuevamente nos revela fu ertes reenvíos hacia la pane dog-
das las provincias", y a l progreso de la ilustración, abarca aspectos materiales y nuitica de la constitución. Así, una manera especia] y diferenciada de aten-


- .
296 CO~PENDIO DE DERECHO CONSTnuaoNAL EL ARTfCULO 75 297

der al pluralismo poblacional encontramos en el ir/c. /7 sobre los pueblos Emplea dos verbos para se/1alar la competencia del congreso: legislar y pro-
indígenas. Otros seClores de población son objeto también de protección Promoción es movimiento hacia adelante: se ''promueven'' los derechos cuan-
especial en el ¡tic. 23 párrafo primero in fine (niños, mujeres, ancianos y adoptan las medidas para hacerlos accesibles y disponibles a favor de todos.
personas con discapacidad), y para el régimen de seguridad social en el exige una base real ig/wlitaria. que elimine, por debajo de su nivel, cuanto
mismo inc. 23 párrafo segundo (a favor del niño y de su madre). de toda naturaleza empecc a que muchos consigan disfrutar y ejercitar una
. [y efectiva.
Hay reminiscencias de normas que en el derecho comparado (caso de Italia y
. [ yen nuestro constilucionalislTl) pro\'incial obligan al estado a
Las políticas de derechos humanos
impeditivos de la libenad y la igualdad de oportunidades y de la
de lodos en la comunidad.
21 . - No es posible recluir en un casiHero todo lo que, en orden a competen-
cias del congreso, se refiere a los derechos personales. No es osado decir que en el
ejercicio de todas sus competencias el congreso ha de tomar muy en cuenta tooo
cuanto la constitución apOlta en materia de derechos. No obstante, dentro del an o75
haremos unas breves menciones.
23. - El ¡nc. 20 del art. 75 !>c refiere a la organización del poder judi-
El arto 75 contiene tres incisos claramente alusivos a los derechos hu- En el breve enunciado que concede al congreso la competencia de
manos, que hacen de eje a otras numerosas menciones del orden democrá- tribunales inferiores a la Calle Suprema de Justicia" (correlati-
tico y del sistema democrático. Son los ¡!lcs. 22, 23 Y 24. art. 108) se prevén tres aspectos implícitos: a) establecer los órga-
a) El inc. 22 es muy rico en el tema porque apoota directamente a la de administración de justicia; b) distribuir la competel/cia entre lo!>
fuente imenwcioflal de los derechos humanos, no sólo cu ando se ocupa con sujeción al art. 116; c) dictar las Ilomws de procedimiemo.
de instrumentos internacionales con jerarquía constitucional. sino también ello se'cumple la obligación estatal de proveer a los justiciables del
cuando hace referencia a la supralegalidad de los demás tratados. (/ la jurisdicción
b) En cuanto a los tratados de integraci6n del inc. 24. la constitución
24. - El mismo inciso dice quc corresponde al congreso crear y suprimir
fija entre las condiciones para que Argentina se haga parte de una organi- y fijar sus atribuciones.
zación supraestatal, la de respeto al orden democrático y a los derechos
I~.. ta facultad no incluye la de crear entidades descentralizadas y autárquicas
humanos.
~;~~~~,;;:::.,;;: del poder ejecutivo, ya que a éste le

22. - El ine. 23 condensa políticas específicas. Su texto es uno de los


más sugestivos e innovadores, al menos respecto de la "letra" de laconsti- 2~ - "Dar pensiones" se refiere, para nosotros, a los beneficios de carácter
tución documental. Diee así:
"Legislar y promover medidas de acción positiva que garanticen la igual-
dad real de oportunidades y de trato, y el ple1lo goce y ejercicio de los 26. - "Decretar honores" incluye, por práctica, la facultad de autorizar a los
a aceptar condecoraciones otorgadas por estados extranjeros.
derechos reconocidos por esta constitución y por los tratados internaciona-
les vigentes sobre derechos humanos, en particular respecto de los niños, las
mujeres, los ancianos y las personas COIl discapacidad. Dictar un régimen de
umnistta
seguridad social especial e integral en protección del nifio en situación de
desamparo, desde el embaraw hasta la finalización del pcñodo de enseñan-
27. - "Conceder amnistías generales" es disponer el olvido o per-
za elemental, y de la madre durante el embarazo y el tiempo de lactancia."
/MII de delitos; el adjetivo generales significa que la medida no recae en un

• •

298 COMPENDIO DE DERECHO CO!\S 111 UaONAL El. ARTfCIJLO 7 ~ 299

reo O individuo determinado. sino en muchos genéricamente. teniendo más


en cuenta los hechos cometidos que [as personas que los cometieron.
- El "arreglo de límites" (internacionales) previsto en el arto 75
Tiene más amplitud y dist intos alcances que el indulto (privativo del poder 15 parece que debe concluir siempre a través de un tratado con el
cjcculivo), ya que la amnistfa extingue la acción y la pena, y repula inocentes a los limítrofe, o de arbilmje acordado en común.
autores del hecho, pudiendo asimismo disponerse antes del proceso, pendiente el
mismo, o después de concluido por sentencia fl!ll1e. . También en relación con los límites, el ¡ne. /6 obliga al congreso a pro-
jeguridad de {as ¡ron/eras como medida de defensa y de pre¡;:auci6n. y si
facuhad se ejerce en e l ámbito interno, por referirse a las fromeras guarda
La amnistía es una competencia paraJela a la de "incriminar" y "desin-
la pol ftica internacional.
criminar"; por ende. como ésta incumbe privativamente al congreso, pen-
samos que amnistiar es una facultad delegada al estado federal en cabeza
del congreso. De ahí que las amnistías provinciales sean. para nosotros, "IJresalias
incollstitucionales. (Co$a di fercnte ocurre con el indulto.)
. - El ¡nc. 26 sufrió modificaciones con la reforma de 1994. En
lugar se eliminó la competenc ia referida a las patentes de corso. En
Las relaciones con el poder ejecutivo lugar, la redacción actual alude a "facultar al poderejeculivo para
'"'" represalias". y mantiene la atribución de establecer reglamentos
28. - Por el ¡nc. 21 el congreso admite o desecha los motivos de la las presas.
dimisión del presidente O vicepresidente de la república, y declara el caso
de proceder a una nueva elección. Las demás relaciones están fuera del an o
75. federal

~4 . -El nuevo il/c. 31 vino a aclarar explícit amente la competencia


Las relaciones con la Iglesia católica congreso en materi a de intervención federaJ a las provülcias o a la
de BuellOS A ire,i, atribuyéndosela con una norma nueva, y aña-
29. - Suprimidas en la reforma constitucional de 1994 las anacrónicas no r-
,,,,lo, aprueba o revoca la decretada durante su receso por el poder
mas regalistas sobre e l patronalo.las ó rdenes religiosas, los documentos pontificios
y conciliares, y la conversión de los indios a l catolicisrrn, que figura ban en e l ante·
rio r inc. 67 y cuya vigencia sociológica había decaKJo porel Acuerdode 1966 con la De dte modo se despeja toda duda en tomo de l arto 6", que globalmente sigue
Santa Sede, nada queda de ellas en el tex to actual. que el '"gobierno fcdt.T3I" intervie r.e en e l terri torio de las provincias.

poderes ¡m plícitos
El estado de sitio
35. - Por fin, cerrando la enumeraeión del arl. 75, su me. 32 consagra
30. - El ine. 29 del arto 75 pone a cargo de l congreso declaror en eslado de
sitio uno o varios puntos de la república en caso de conmoción interior. También
klS denominados poderes implícitos. Al congreso compete "hacer todas
apnleba o suspende a posteriori e l estado de sitio declarado du rante su receso por el las leyes y reg/amel/los que sean cOllvelliel/les para paner en ejercicio los
poder ejecuti vo. JXXIeres antecedentes y lodos los otros concedidos por la presente constitu-
cióp al gobierno de la Nación Argentina".
• •

300 COMPENDIO DE DERECHO CONSI (IUCONA!.

La fórmula no deja lugar a dudas de 4ue la constitución concede podcre.<¡ implí.


citos, lo que equivale a afirmar que en la distribución de competencias entre estado
federal y prol'incias, hay "delegación" implfcita a favor del primero.

Sugerimos hacer un desdobfamiemocn los poderes implícitos del con-


greso: a) para legislar. hay una norma expresa (el ine. 32) que se los otor-
ga; b) para cumplir otras actividades !lO legislativas. no hay norma ex.
presa que los conceda, perocxistcll en virtud de toda la masa de compelCn- Apéndice al capítulo XXXV
das asignadas al congreso, en fomla paralela y cond ucente a su ejercicio.

36. - Es indispensable ad\'crtir que al recOf'lOCL'fSC los poderes ifllllícilos pan


poner en ejercicio los poderes "antecedentes" del congreso, y "todos IO.f Olros con- CORRELACION ENTRE EL ANTERIOR ARTICULO 67
cedidos" por la constitución a/gobierno federal. la constitución no cercena la auto-
y EL ARTICULO 75 ACTUAL
nunúa e independencia de los demás pocleres; o sea. no otorga al CQllgreso una
competencia que permita ksionor la división de poderes ni intervenir en el área
propia de competencia o en la 7.Ona de reserva de los otros.
Artículo 75
37. - Como el inc. 32 OIorga los poderes implícitos al congreso para pol~r en
ejercicio los o tros concedidos por la constitución "al gobierno de la Nación Argen- . 1° Reformado
tina", queda algo por añadir porque. según las divisiones que efectúa y menciona el
texto constitucional, "Autoridades de la Naci6n" son también (además del gobier- Reformado
no reJeral) los gobiernos de pmvillcia. Quiere decir que para poner en ejercicio los Pasa a ser 4u , refonl/ado
poderes que la constituci6n reconoce a los gobiernos provinciales y al de la ciudad
Inciso 3: nuevo
de Buenos Aires, el congreso federal también inviste podcres implícitos.
Inciso 4: es el anterior inc. 3", rejonlUldo
Pasa a ser 5", sin rejonlul
Otras (.'Om petencias Pasa a ser 6", rejomwdo
38. - I.n guerra cuenta con la nonna del ine. 25; los límites inlerprovinciales,
Pasa a ser 1", sin refomw
con la del ¡ne. 15; fos correos, con la del ine. 14; los IlIgares sometidos a jllrisdic- Pasa a ser ~r, refonlwdo
ci6n federal, con la del ine. 30: los poderes militares, con las de los ¡nes. 27 y 28. Pasa a ser 'Y', sin refonutl
IDe. 9" Pasa a ser 10. rejomuulo
loe. 10 Pasa a ser 11, siu rejon1/a
loe. 11 Pasa a ser 12, refonllado
loe. 12 Pasa a ser 13, sin refonl/a
loe, 13 Pasa a ser 14, reJan/lado
Ine. 14 Pasa a ser 15, si" refomw
loe. 15 Pasa parcialmente a ser 16, refomwdo
Ine. 17: nuevo
102 COMPENDIO DE DERECIIO CON:nnVOO:-'AL
..
,

Ine. 16 Pasa a ser 18, Jill re/amIa


Ine. 19: lluevo
lnc. 17 Pasa a ser 20, re/omlOdo
loe. 18 Pasa a ser 2 1. re/omlOdo
Ine.19 Pasa parcilllmeme, y COll re/arma a
integrar el 22 I/ue~'o ARTICULO 75 ACT UAL
Ine.20 Suprimido
Inc. 22: lluevo
Lne. 23; lluevo Refon1wdo (corres¡x:mde al anterior inc. 1°
Inc. 24: lluevo del arl. 67)
Ine. 21 Pasa a ser 25. sin re/onllo Reformado (corresponde al anterior mc. T
Ine.22 Pasa a ser 26. refon/IGdo del arl. 67)
lne.23 Pasa a ser 27. refomwdo NI/evo
lne.24 Suprimido Mantiene el anterior ine. 3° del ano 67
Ine.25 Pasa a ser 28, Ji" refom/a Mamiene el anterior inc, 4° del arto 67
Lne.26 Pasa a ser 29. Jiu reforma Refon1wdo (corresponde al anterior inc. 5°
Ine.27 Pasa a ser 30, refomltldo del arto 67)
Ine. 31: lluevo 7" Mollliel/e el anterior inc. 6° del arto 67
Inc.28 Pasa a ser 32, si" refonllo .8" Refomwdo (corresponde al anterior inc. 7°
del ano67)
9' Mal1lie1/e el anterior inc. SO del arto 67
10 Re/orillado (corresponde al anterior ine. 9"
del art. 67)
11 Matl/iene el anterior inc. 10 del arto67
12 Refon1Uldo (corresponde al anterior ¡ne. 11
del arl. 67)
Ine. 13 Mantiene el anterior inc. 12 del arto 67
Ine. 14 Reformado (corresponde al anterior me. 13
del ano 67)
Ine. 15 M(U/tie1/e el anterior inc. 14 del arto67
lne. 16 Reforlllado (corresponde a1 anlerior inc. 15
del art. 67)
304 COMP8<U!O 010 OEREOlO COl\"STIruaoNAL
- .,

Ine. 17 Nuevo
Ine. 18 Mallliene el anLerior ¡ne. 16 del arto 67 •

Ine. 19 Nuevo
Ine.20 Refomuulo (corresponde al anterior ¡ne. 17
del arto 67)
Ine.21 Reformado (corresponde al anterior me. 18
del arto 67)
CAPtruLO XXXVI
Ine.22 Nuevo (curresponde parcialmente ycon reforma LA LEY
aJ anterior jne. 19)
Ine.23 Nuevo
Ine. 24 de la ley en su aspecto slfstancial
Nuevo
Ine.25 Mal/tie"e el anterior ¡ne. 21 del ano 67 1. - Al congreso se lo llama órgano legislativo o "poder legislali vo".
InC.26 Refomwdo (corresponde al anterior ¡ne. 22 legisla. En el repano orgánico y funcional que la técnica del poder
del ano 67) la fu nci6n pri mordial y fundamental de eSle órgano es emilir la
Ine.27 Pero 110 la función única. El congreso. además de legis lar, cumple
Reformado (corresponde al anterior ine. 23
administrati vas, realiza acti vidad genu inamente polilica. y a ve-
del an o67) I• •
lne.28 Mamiel/e el anterior ¡ne. 25 del ano 67 hl segundo lugar, quiere decir que en la estructura de los órganos de
lne.29 Mamiene el anterior ¡ne. 26 del arto 67 .rúnicameme legisla el congreso"; no lo hace el ejecutivo ni lo hª-
lne.30 Re/anun cio (corresponde al anterior ine. 27 lo&jueces.
del ano 67)
Dcspués de [a n:fonll(l de 1994. las disposiciones de carácter legislativo que
Inc.3l Nuevo ¡'orma de decrelos de m '.Ccsidad y lIr;gencia dicta el poder ejecutivQ, y los dl."Crc-
Inc.32 Manrielle cl3.Luenor ¡ne. 28 del art o67 también emanados de él por delegación legisfmil'(J. vienen precedidos por pro-
a",,, ''" los arts. 99 ine. 3", y 76, respcctiva~llIe, y rodeados de un scvero
exccpcionalidad.

Elltercer lugar. hoy se acentúa la necesidad de que el congreso, tan to


su funci ón legislativa como en la que no lo es, asuma e n plenitud el rol
control sobre el poder ejecuti vo.

2. - El proceso legislativo deformación de la ley consta de tres e/a-


fases:
a) la il/icimiva o fomlUlacióll del proyecto;
b) la cOlIslilutiva o de "sanci6n" del proyecto;
e) la de eficacia, o de promulgación y publ icación de la ley.

• •
306 CO~1PE."''OIO DE DERECHO CO:-'S 111t!CIONAL LA LEY 307

La inicÍluivlI puede provenir del seno del mismo congreso. o del poder congreso emitidos con forma de ley no tienen natu raleza o contenido tna -
ejecuti vo y. con la reforma de 1994. lambién del cuerpo electoral en la ley.
forma prevista en el ar!. 39 de la constitución. síntesis, ha de quedar en claro que : a) sowmente el congreso ejerce la
La ctapa constitutiva, consistente en la sanción tlcl proyecto, está a de legisltlr ¡//(Ilenalmenle; pero b) no ladas las compe/encias a las
cargo del congreso y transita por los cauces que regulan los arls. 78 a 84. t / ley en sentido material.
Después de la reforma, también puede inserlarsc el mecanismo de la con-
sulta popular previsto en el art. 40 de la constitución. - Una conducla ejemplarizada por el dert?Clto esponláneo consiste en la
I los actos del congreso con fonlla de It-y. El congreso cumple
La etapa de eficacia está a cargo del poder ejecutivo: en los casos en '"' actos díclando leyes, es decir, con ' fonna de lel·...
que la propia conslitución dispone excepcional mente que la promulgación
sea automática , o que el proyecto sancionado no puede ser vetado. o que . -- La constitución ofrece el siguiente panorama:
queda sancionado como ley (por ej .. en tos arts. 40 y 83) el margen de
arbi trio de que dispone normalmente el ejecutivo en la etapa de eficacia se solllmeme prevé en forma expresa el procedimiento para lasanciólI
pero
reduce mucho.
b) ninguna norma establece expresamenle que todos los actos y com -
3. - La doctrina constiLucional habla de ley " /l/merial" y ley "for- del congreso deben expedirse con forma de ley.
mal". No hallaríamos inconveniente en que, por analogía, el congreso utili-
Para distinguir las funciones del podcr se han intcntado tres criterios: mismo pro(.'Cdimiento de las leyes cuando cumpliera competencias
a) el orgánico. que consistc en defi nir la función por el "órgano" que la
cumple; b) cIJom/(/l. que consiste en defi nir la función por la "forma" del
acto que exterioriza su ejercicio: c) el material o sustancial. que consiste 8. -Si pasamos re vista al artkuladode la const ituci6n. dentro y fuera del arto
en dermir la función por el "contenido" o la esencia de l acto, prescindien- v~::: a saber que algunas normas imputan a t congreso la función de "legislar",
do del órgano que lo emite y de la farola con que se reviste. In 1 I \'erbos diferentes. Así, encontralTlOS:

La aplicación del criterio material a la lcgislación es la que permitc a) "admitir" y "erigir" provincias (art. 13);
distinguir la "ley" en sentido material de la "ley forma/". b) "dectarar"la n~sidad de reforma constitucional (art. 30):
Es fácil decir que ley fanual es todo acto al que el congreso le asigna cl e) "someter" y "convocar" a consulta popular (art. 40):
cará<..1er y la denominación de ley, cualquiera sea su contenido material. En "imponer" contribucio nes (an. 4" y arl. 75 inc. 2"); "decretar" y "contraer"
cambio. no es pacífico el concepto de ley material. (art. 4" y art. 75 ine. 4°, respectivamente);
e ) "establecer" y "modifica r" asignacio nes específicas (art. 75 ine. 3°);
4. - Nucstra opinión acoge ladermición siguientc: ley "material" es f) ..dispone .... e l uso y la enajenaci6 n de tierras (art. 75 ine. 5");
solamente la creación nonllativa que da origen a un derecho llUevO 11 ori- g) "establecer" y "reglamentar" un banco federa! (art. 75 ¡ne. 6");
ginario. o sea, a un derecho cuyo contenido no está determinado ni condi-
h) "arreglar" e l pago de la deuda, los correos. y los límites intt.'rnacionales (art.
cionado por otra producción jurídica superior dentro de las funciones del
.7", 14, y 15. respectivamente);
poder del estado (aunque sí lo esté fuera de ese poder por la constitución.
cuya supremacía proviene del poder constituyente. o por los tratados ;fI- i) "fijar" el presupuesto, los límites de las provincias, el valor de la moneda, y
fuerzas armadas (art. 75 iocs. 80 ,11,15 Y 27, respectivamente):
lemaciol/ales, que son fuenle eXlIaestatal).
j) "acordar" subsidios (art. 75 inc. 9"):
5. - Definida la ley en sentido material como creaci6n de derecho oue\'o u k) "'reglamentar" y " hacer reglarremos" (art. 75 ¡ncs. 10,26 y 32):
o riginario, salta a la vista que no coiocide siempre con la ley formal. porque muc hos 1) "reglar" el comercio (art. 75 inc. 13);
• •
J08 COMI'E.."I)IO DI' DERECHO CONSTrnJaONAL LA LEY 309

m) "reconocer". ·'garanti7.ar", "regular", "asegurar" todo lo referente a los pue- ,re" st'" en los arls. 78 a 84. Lograda tal aprobación en las dos, el
blos indígenas (an . 75 ¡ne. 17): usándose para la sanción la fónnula estable-
11) "proveer" y "Tlromovcr" todo lo que scftala elurL 75 ines. 1Ú, 18 Y 11): "pro. an. 84: "El Senado y Cámara de Diputados de la Nación Argen-
mover" y "dictar" (inc. 23); congreso . .. decrctan Osancionan con fuer.lu de ley".
ií) "establecer" Iribunales (an. 75 ine. 20);
o) "adrnilir o desechar", "aprobar o desechar' cuando hace referencia a lascom- La sa"ód" del proyeclO de leyes un acto complejo. porque requiere el
pClcncias del arl. 75 ¡nes. 21, y 22, respectivamcntot: de dos órganos. que son cada una de las cámaras. Acto comp lejo ¡nlemo o
porque concurren a formarlo Ia.~ voluntades de órganos --cámaras- 4ue
p) "aulorinr" 1L dl.'Clarar la guerra y hacer la paz (arl. 75 ine. 25): n11 mismo órgano -congreso- : Q c~te acto complejo de la sanci6n de la ley
q) "facultar" para ordenar rcpn::!ialias (ar!. 75 ine. 26): en la erapa de eJicacia. la voluntad de otro órgano - poder ejecutivo con
r) "pennitir" la entrada de tropas extranjeras y la salida de las nacionales (art. O\inisterial- que prolllldga la ley. con lo que la ley también es un acto comple-
75 ine. 28): 'a~" o externo. ya que concurren las \"olunLades del congn!so y del pode/"

s) ·'dl.'C!arar" el estado de sitio. "aprobar o suspender" el declarado por el ejecu-


tivo (art . 75 ¡ne. 29):
14 . - El esquem:! simplificado sería el siguiente:
1) "disponer" la intervención federal", "aprobar o revocar" la decretada por d
ejecutivo (art. 75 ine. 31).
SallciÓn + Prolllulgación

9. - Excepcionalmcnte, aunque se emplee acaso un verbo distinto a


"legislar" debe dictarse una ley cuando el principio de legalidad así lo exi- Cámara de Senado Poder ejecutivo con
ge, como C!'i el caso - (Xlr ejemplo-- de la ley pellal o la ley tributaria. diputados refrendo ministerial

• •
• . . .
10. - Latam..:nt..: se habla de "n:se'vo·· de 1(1 fey para cubrir competencias
privativas del congreso. La ex.presi6n es válida en la medida en que se interprete
Ac to complejo Acto complejo
que " reserva de In ley" abarca todas las citadas competcncias, aunque no posean
n¡¡turaleza matcrial de ley o no hayan de ejercerse dic tando una ley ("formal"). interno eXlemo

~ J.,
CONGRESO PODER EJECUTIVO
Lo. sanción de la ley en su aspecto pnx't!Sal .

LEY
11. - El ejercicio de la función legislativa como etapa ofa,~e cOl/sr;- (Acto complejo externo )
luriva de la ley U"ansita separad1lllleme ell cada cámara; la cámara donde
empieza el tratamiento del proyecto se llama "cámara de origen", y la otra
se llama "cámara revisora".
15. _ En el procedimiento de !omwcidn }' sanción de las If!yes que ahora
Cuando en el proceso de fomlación de la ley se intercala una c01lsulta regufan los arts. 77 a 84, hay algunas innovaciones respecto de la constitución antes
popular vinculame, el cuerpo electoral -que TlOes un órgano del poder de su reforma. Las encontramos en los arts. 77, 79, 80, 8 1, 82 y 84. Los actuales
estatal- panicipa desde la sociedad con su volO allrmalivo Onegativo en el ans. 78 y 83 !lO han modificado a los que eran 68 y 72.
comicio. y si es afirmativo convierte en ley al proyecto consultado. Los cambios recaen dcsde el señalamiento de la cclmom de origen, haSla el
derrotero del proyecto en su tránsito por las dos cámaras, y su prolllulRaó611 o su
12. - Cada cámara apnJeha por sf el proyecto, siguiendo los meea- veto, más el veto parcial y la promulgaci6n parcial.
• •

LA LEY 311
310 COMPENDIO DE DERECHO cONsrrruaoNAJ

Sin entrar al detall e en la explicación de las distintas etapas del proce· ",,,,,,, privativas como a las comunes a ambas. El detalle puede verse en el
dimiemo, cabe señalar que el arlo 8 1 imprime un trámite má.t acelerado XXXII n" 2L
que el que anles estaba t'.n vigor; el 79 introduce la novedad de Jaaproba-
ció" el/ particular del proyccto por comisiones de las cámaras: se prohíbe 19. _ El procedimientO deformación y sa~l~ióll de la ley C~1ntempla
. la aprobación, el rechazo, las adiCiones y correCCiones, ~os
la sanción tácita en el arl . 82: y se ha reglamentado la posible prolllulgación
vetados. Cada uno de tales supuestos cuenta con su respectiva
parcial en el arlo 80.
,va en la constitución, que ya hemos citado, a partir del arto77.
16. - Los arts. 39 y 40 han introducido en el proceso de formación de 20. _ El procedimiento o trámite parlamentario que la con~tilució.o
la ley dos formas de /xmicil'ilCiólI social posible. que son la il/iciativa para la sanción de las leyes no puede en modo a1g~o ¿e~n nues-
legislativa popular y la cOllSulta popular. unto de vi sta- eximirse de comcol judicial de constllu~lOnah?~d. El
p . a la cuestión como unacuesuón poll uca 1/0
17. - Acerca de la cámara de origen el ano 77 establece: . Si una ley puede y debe scrdeclarada ¡ncons-
"Las leyes pueden tener principio en cualquiera de las cámaras del cuanto a su comen ido, también puede y debe serlo cu.ando se
congreso, por proyectos presentados por sus miembros o por el poderejc- i las nonnas que la constitución prcscnbe para
cuti VO. salvo las excepciones que establece esta constitución. f< porque cualquiera comprende que un.a ley "sancioo ada".def~c­
no es una ley "sancionada" en la torma que la consutuclón
Esas excepciones son las siguiemes:
a) leyes sobre contribuciones (igual que antes); en cámara de dipuw-
do.f: ver el clT1. 52; 21. _ La constitución refOnllUda ha incluido treS pro/¡ibicio"e~ antes
b) leyes sobre reclutamiento de lropas (igual que antes); en cámara de I~~~S pero, luego de formularlas normativamente. ha añadIdo las
diputados; ver el art. 52; :li excepciolles.
c) leyes cuyos proyectos son propuestos por ciudadanos en ejercicio Se trata de:
del derecho de iniciativa previsto en el art. 39; en cámara de diputados: a) la delegación legislativa a favor del poder ejecutivo (art. 76);
ver el arto 39; b) la em isióll por el/Joder ejecutivo de disposiciones de carácter le-
d) leyes mediante lascualesel congreso dccida sometcr un proyectodc (art. 99 mc. 3° párrafo segundo);
ley a consulta popu lar, conforme al arto 40; en cámara de diputados: ver el e) la promulgación parcial de leyes por el ejecutivo (art. 80). .
arto 40; Hay otra prohibiciólI diferente a estas tres, QU~ se ~irigc exclUSiva-
e) ley--convenio entre el estado federal y las provincias que instituye el mente al congreso. sin relación alguna con el poder eJccuuvo. Es la del an o
régimen de coparticipac-ión impositiva, conforme al arl. 75 ¡nc. r: en cá- 82 sobre la sanción tácita o flcta de las leyes.
mara de selladores; ver el arto 75 ÚIC. 2";
O leyes que proveen al crecimiento anJlónico de "la nación" y al
poblamiento de su LCrritori o, yque promueven políticas diferenciadas para Las facultades legislativas del congreso
equilibrar el desigual desarrollo relativo de provincias y regiones confor-
me al arto 75 inc. 19; en cámara de selladores; vcr el ano 75 i1lc. /9. 22. _ Las ucs clascs de leyes que diela el congreso son: a) leyesfede-
rales; b) leyes de derecho comú,,; c) leyes locales. Las f~de.raJcs y las de
18. - Diversas normas han especificado en et nuevo te,;to un qllÓrulll especial derecho común tienen ámbito de vigencia en todo el terntoflO del estado.
o agravado para las decisiones propias de las cámaras del congreso, tanto relativas Las locales, sólo cn la eapiral y territorios federa les (actualmente no hay
J I2 CO~I'I~'DlO DE DERECHO CONS¡ IIUOO:-; ....L LA LEY JIJ

terri torios federalizados íntcgramcmc), A las tres. pane de la doctrina las derecho judicial pennile elaborar la categoría de "leyes de derecho
cali fica como leyes "nacionales". A las federales, a veces se las ha llamado . , . Ello ocurre cuando una ley del eongreso IIObn! derecho co-
también leyes "especiales" del congreso (el ano 75 ine. 12 las menciona con razón suficiente, "apartar" la materia regulada del ámbito del dere-
como leyes "generales"), A las de derecho común. leyes "o rdil/arias ". lo que ~ustrae su aplicación a lo~ tribunaleS ptovinciale~.
La Corte Suprema de Justicia 10 ha admitido en el ea~o "Oberti, Pedro c/PanlÍ-
23. - Las leyes federales, de difícil conceptuación genérica. pueden . Santiago". fallado en 1960.
serlo por razón de la maten'n (por ej.: fiscal. electoral. partidos políticos.
nacionalidad, administración de justic-ia. etc.): de las persol/as (embajado- 29. - Desde la refornla de 1994 la legiJlaciól/ I/acional "Iocal" pre-
res, ministros plenipotenciarios, ctc.), y excepcionalmente de lugar (fron- un perfil distinto al que revestía anles.
teras).
Fue normal decir que las leyes nacionales locales eran las q ue e l congreso dic-
con &mbito de aplicación en la Ct/piwl federa l (que era territorio federallzado
. Guasta"j~o define ilsf al derecho federal: "es el sancionado por el legislador
","",,,.,,,) elllos lerrilorios nacionales o gobernaciones (que con la pnlVlncia-
na~lOnallcndlente a la consecución, de modo inmediato, de todos los fines que se
de del Fuego hoy ya 110 existen, y (jue estaban bajo jurisdicción
atnouyeron 111 congreliO y al gobiemo federal por el preámbulo y los preceptos de la
com¡¡itución. " y para los lllgares del ex arlo 67 ¡nc. 27 (que se hallaban sujeto~ aJurisdic-
rederal. a veces total, a ve!':cs parcial, segun los virajes que registró la jurispru-
Por concomitancia. son también federales los decretos que reglamentan leyes ,;,,10 la Corte).
federales.
es Olro. Es cierto que la cil/dad de Buenos Aim sigue sien-
pero también lo es que por el art. i291icne O/4Ionollll(/ y faculla-
24. - Las leyes federales son aplicadasjudicialmemc en todo el país , y jurisdicción Gudicial). Po r ende, la legis laci6n que puede dictar
por los tribunales federales. la ciudad se reslringe (1 lo rtll.O/U/bkmenll' neceSClrio (/ efectos de
en elfa fas intereses del estado fede rtlL De este modo. la legi~ la r,;i6n
25. - Las leyes nacionales u ordinarias de derecho comú" son las "",",, 'que para la capital sigue previendo el aClual aJ'!, 75 inc. 30 queda aco-
que sanciona el congreso cuando. en el art. 75 ine. 12. Se alude a los códi- en la disposición transitoria séptima, a teno!' de la cual sólo ejerce. mien tras 13
gos llamados "de fondo". que pueden dictarse en cucI'JXls unificados o de Buenos Aires mantenga la capitalidad, las atribuciones legislatIvas que
sep~ados (civil. comercial. penal. de minería. y de trabajo y seguridad re.,' oo".cm . ,o<, .rreglo ., ,," 129.
SOC13J).
30. - Normalmente, la constitución no suele indicar para la diversa
Con la rcfonna de 1994 quedó Imperada la controversia acerca de si los "códi- riec de leyes que puede dictar el congreso a qué pautas bien especffi-
~Oi" ~ue mencionaba el anterior arl. 67 ine. 1l -ahora arl. 75 inc. 12- exigían y concretas ha de rcsponderel conlenido de éstas, por loquc el margen
meludlblemente la cocJificación, o admitían una legislación dispersa o adicional. discreción legisl:llivaes amplio. Sin embargo. es muy claro que a veces
al legislador con la obligación concreta de adoptar o
, 26. - Las leyes de derecho común son aplicadas judicialmente por constitucional en determinadas leyes. Así, y a ,",010
tnhulla!es.1e1er~les o prov;,/ciales según las personas Olas cosas caigan enunciativo de ejemplo, advertimos que la ley de nacionalidad (art.
en unaJunsdlCCl6n oen Olra (an. 75 inc. 12). inc. 12) ha de adoptar inexorablementc cl principio de la nacionalid ad
soli): que las leyes aque se rcfiere el ruto 75 en incisos como el
27 . - Cuando la materia que es objeto de una determinada legislación --codi- 18. 19 Y23 han de tender a los fines allí establ ecidos: que la legislación
ficada o no-- se califica como de derecho comt1n (por ej.: el derecho comercial. el m:esal debe. por imperio (implícito) del un. 18. resguardar el debido
derecho penal. el derecho civil), hemos de tener en cuenta que, excepcionalmente, proceso; que el código (o legislación dispersa) sobre trabajo y seguridad
puede contener .no mlos de ca rácter fede ral. La ley de quiebras COITD propia del social ha de dar desarrollo al ano 14 bis: que las leyes de amnislía ( art. 75
derecho comercial es federal ~e halle o no incorporada al código de comercio-. En
maleria penal hay delitos ·'federales". inc. 20) han de disponer solamente anmisúas "generales", etcétera.
, .
314

31. - La ley cobra vigencia "normológica" a partir de su promulgación y pu-


blicaci6u. pero puede establecer expresamente pilfa su aplicación una fecha distin-
la. Si se reltOtrac a l pasado, es reuvocIiva. La retroactividad tiene dos límiles cons-
titucionales que la impiden: a) uno explfcilO en materia penal (art. 18): b) otro il/l-
pUdIo cuando afecta el derecho de propiedad (art. 17).

CAl'tnJLO XXXVIJ

L AS COMPETENCIAS PR IVATIVAS DE CADA CAMARA

noci6n y ejemplos

l. - El congreso es un órgano comp lejo, formado poi' dos cámaras que tienen,
"I~~~:~:'~'~:'~"'~ una separadamente. la calidad de órgano. Por eso distinguimos
lo I Y actos "del col!gn.>,w" (que requieren la concurrencia ¡:onjunta
cada cámara, en sesión separada o ell asamblea) y competencia y actos de "cada
forma priviltiva, sin el concurso de la otra).
Las facultades privativas de cada cámara se traducen, entonces, en aCIOs que
• "on del congreso.

2. - Los llamadoRprivilegios de las cámaras y de sus miembros encierran el


una competencia privativa cuando. para su aplicación y goce, es rnencs-
la cámara haga algo sin el concurso de la otra.

3. - En las compctencias privativas del senado y de la cámara de diputados


que incluir sus "poderes imp/(óros". existentes para ejercer competencias pri-
competencias del congreso a cuyo ejercicio cada cámara concurre en co-
con la otra.

4. - No es errado considerar que cada vez que la constitución señala cuál debe
ICr la cúmam de origen para determinados proyectos de ley, la competencia de esa
la iniciativa y el tratamiento del proyl.'(;!o debe reputarse COID:l privati-
de ahí, pros iga el trámite legislativo en el que toman
intervención 1", dO"";
Podemos citar cn el lema los arlS. 52, 39. 40, Y 75 inc. 2° párrafo 4°, e ine. 19
párrafo 2°.

5. - A pesar de la ya señalada igualdad de ambas cámaras. el senado


"

3 16 COMPE.'ffiIO DE DERECHO CONSII i l lQO",' AL LAS COMPETENCIAS "II.I VATl VAS DE CAllA CAMARA 317

tiene mayor número de competencias privati vas a través de un a serie de En cuamo al procedimiel/to, el del juicio polítiCO en el congreso no
actos que expide él solo. modificado, pero por lo qUf.! decimos en el precedente sub-inciso
a) El senado nombra su presidellle provisorio (ar1 . 58). ha establecido un mecanismo independ iente de enju iciamiento polí~
para los jueces de tribul/ales federales il/ferioreJ en los arts. 114 Y
"
La diferencia con la cámara de diputados radica en que ésta elige sus autorida-
des de acuerdo con normas infracnnstitucionales (por ej.: las de su propio regtamen- e) De lo cxpuesto surge quc actualmeOlccl juicio político ha quedado
to interno) en ta nto et senado lo hace porconccsi6n e,xpresa de ta constitución, para las magistratunts y cargos superiores del gobi emo federal.

h) El senado alllori-;.a al presidente de la república para declarar en 8. - Estudiamos el juicio político entrc las competencias propias de
eSllldo de silio uno o varios puntos de la república en caso de ataque exte- cámara porque si bien intcrvicnen las d O.f cámaras, cada una lo hace a
rior (arts. 61 y 99 ine. 16). de fWlción pril'atiwI. y con alcances distintos; o sea. no concurren
e) El senado pres/a acuerdo para que el presidente de la repú blica en la sanción de la ley-a realizar un acto común. sino que cumplen
nombre: e') a los magistrados de la Corte Suprema (art. 99 inc. 4°); y c") a a"" "" IJe.'IJI"' un aclO especial: una "acusa" y la otra 'Juzga ".
los ofi ciales superiores de las fuerzas armadas (are 99 inc. 13 - sal vo en a) La cámara de diputados declara haber lu gar a la formación de cuu-
campo de batalla-). También presta acuen:lo para que el presiden te nom- de conocer de la razón que se invoca para el juicio político.
bre y "remuevu" a los embajadores, ministros rlenipotend arios yencarga- mayoría de dos terceras partes de los miembros presentes (art.
dos de negoc ios (an . 99 ine. 7°).
En In elapa acusatoria que se cumple en la cámara de dipu tados cs nccesario
:om y respetar tas reglas básicas det debido proceso,
El juicio político
b) El sellado j uzga enjuicio público a los acusados por la cámara de
6. - El juicio político esel procedimiento de destituciólI previsto para Previanlente. los senadores prestan j uramento para este aelo.
quc los funci onarios pasibles dc él no continúen en el desempei10 de sus la declaración dc culpabilidad también se exige una mayoría de dos
cargos. de los miembros presentes (art. 59). El fallo del senado "0 tielle
Se lo denomina j uicio "político" porque 1/0 es un juicio pellal quc efecto que "destituir" al flcusado (fin principal) y ailll declararle in-
persiga casti gar (aunque una de sus causales pueda ser delictuosa), sino ocupar ningún e mpleo de honor, de confianza, o a sueldo de la na-
separar del cargo. Por eso. su trámite se agota y concluye con la remoción, (fin accesoria) (ar1 . 60). De tal modo, se puede destilUir sin il/habili-
de donde inferimos que carece de objetivo y finú lid ad si el fun cionario ya tar, pero 110 i"habilitar sin destituir.
no se halla en ejercicio. Ade más, para que el senado pueda destituir es necesario que el acusa-
do esté en ejercic io de su función.
7. - La refom lll de 1994 introdujo variaciones:
a) En materia. de fun ciol/arios enj uiciables hay una reduccilln y una 9. - Son pasibles de juicio político, confo rme al ano53: a) el presi-
ampliación, porque: a') en el poder judicial. el j uicio se reserva para los dente de la república: b) el vicepresidente; e) el jefe de gabinete y los mi-
jueces de la Corte. y se suprime para los de tribunales federales inferiores nistros; d) los miembros de la Cone Suprema.
que, por los arts. 114 y 115, quedan sometidos a acusación por el Consejo
La serie de funcionarios pasibles de j uicio político que trae el art o 53 no puede
de la Magist ratura y a enjuiciamiento por un tribunal o jurado dc enjuicia- ser ampliada por ley.
miento: a") en el ministerio. se ha incorporado al jefe de gabinete,
No obstante lo dicho, la competencia del congreso en materia de organinción
• •

3 18 Cm.1PENO[O DE DERECHO CO~S 111UaO~AL LAS OOMPI:.¡¡:";CIAS PRIV AnVAS DE CAllA CÁMA RA 319

del poder jutlid~¡ federal y la del art. 120 para regular el ministerio público habilita La constitución no prevé la sllspensión del funcionarIO ni después de la
a la ley para incluir a Jos miembros de díclXl mil1i~lcrio COllD funciona.rios que sólo por la c6.mara de diputados, ni durante el juzgamiento por el senado.
pueden ser removidos de sus cargos mcdia..llle juicio polílico, a efectos de asc~urar­ que ni una ni otro pueden disponerla. El. funcionario ¡x:rmanecc en la
les sus inmunidad<..'S funcionales.
,io, ,~" funciones -a meoos que, lfatándos..: de un minislI"O o de
el presidente de la república o el propio tribunal disponga, en
10. - Las "causas" de respollsabilidad -<:0010 las denomina el arto dcl poder disciplinario, la suspensión a las resultas del juicio político-.
53 conslitucional- qUt: haceJl viable [a acusación y la destitución son Ires:
a) lila! de.~efllfJel1o; b) delito ell el ejercicio de sus fUl/ciol/es; e) cr(I1I('lIeJ - La (ndole jurisdiccional del ju icio político no lo convierte en un proceso
comUlleJ. porque se trata de una actividad jurisdiccional a cargo de un órgano emi-
como es el senado. Por ende. la naturaleza jurisdiccional no
11 . - a) Mal deselllpello es lo contrario de " buen" dí'selllpel1o. La caracter político.
fórmula tiene latitud y fl exibilidad amplias. Mien tras los delitos en ejerci- naturaleza jurisdiccional hace obligatoria la aplicación de las pautas
do de la función o los crímenes comunes circwlscriben [a causa aUlla dd debido proceso. y así lo tiene establecido el derecho judicial de la
figura penal preexistente en la constitución o en la ley penal, el mal desem- Suprcma. Asimismo, la acusación qUt: efectúa la cámara de diputados ante el
peño carece de un marco definitorio previamente establecido. No está des- impide a éste juzgar por hechos no incluidos en ella.
cripto el concepto constitucional de mal desempeño.
. _ Cuando la cámara de diputados en cuanto ejerce su función de acusar
Por ello. estimatnls que el mat dcsempcilO pucdo.: no ser doloso ni culposo, y fo acusación, y por ende ellfámitt: no pasa al senado. estamos cienos de
prov~n¡r - por ej.- de causas ajcnas a la voluntad del funcionario. Un president\! que los mismos hechos no puede postcrionnente reiniciar otro procedimiento
perdiera el U$O de la razón, o padeciera una hemiplcj ia, y no renunciara o no puuicra '¡I~
renunciar, sería pasible de juicio polftico. Cuando en la etapa de enjuiciamiento el senado /lO de.uituye, tampoco es via-
oo de,p"," recornienct: otro enjuiciamiento por los mismos hechos.
Entendemos que el " mal desempeño" no es susceptible de ninguna
reglamentación infraconsti tucional . 17. - El arto 60 estipula que después de la destituci6n por juicio polí-
la parte "condenada" quedará sujeta a acusación,j uicio y castigo <:on-
12. - Cuando el acusado es el presidente de la república, el senado debe ser
presidido por el presidente de la Corte Suprema, y 1)() por el vicepresidente: la pre-
rrn,,, las leyes ante los tribunales ordinarios. Esto significa claramente
"antes" de la destitución por juicio político. es imposible someterla a
cauci~n. contenida en el arto 53 obedece a prevcnir quc el vicepresidente influya en
la deCISIón para suceder en el cargo al presidente en caso de destitución. Cuando el ",u'lo, o lo que es igual. que " mientras" se halla en ejer-
acusado es el vicepresidente, la constitución no dice quién preside el senado: nor- . de su fundón está exenta de proceso penal.
malmente. se pensarla que debería hacerlo el presidente provisional del senado,
pero nos parece que también en este caso, por razones de cargo e imparcialidad, la Se trata en realidad 1.1<;,: un antejuicio. o pril'ifegio prrx:esal, que establece detcr-
presidencia le incumbe al presidente de la Cone Suprenu. condiciones extraordinaria:.: para el proceso penal de una persona, y con-
en un impedimento que posterga el proceso común hasta que se hayan produ-
13. - El juicio debe ser público. Se trata de una funciónjurisdiccio- ort"" '"''H''' el caso, destitución por juicio polftico-. No es una inmunidad
/lal y, por ende. ha de rOOeársela de las garantías de defensa y debido pro- que ,kl"ive de la persona, sino una garamla de fllncionamiento a favor del
ceso. El fallo debe ser mOlivado. ""':, con)) inmunidad oc proceso.

Si el perfodo de sesiones concluye antes de la terminación del juicio, el senado 18. -Que el proceso penal no se puede sustanciar respecto de los funciona-
debe contin uar sus funciones de tribunal. sin interrupciones, hasta la finalización rios incluidos en el art. 45 quiere decir que tampoco se los puede absolver o sob~·
del juicio poHtico. .reerdurante el descmpdio de su cargo, sl!ncillamente porque para llegar a ese rc-
¡ultado hace falta et proceso judicial que la constitución impide.
• •
320 Cm..!PIlNDlO i)l¡ DERECHO CON~"lruCIONAL

19. - Tal oomo nuestro derecho constitucional del poder ha institu·


cionalizado el juicio político, no cabe duda de que es competcncia exclusi-
va de cada cdnmrcl del congreso, "acusar" y"deslilUir" ,
Nos estamos preguntando si después es posible algún recu.rso anle el
poder judicial; en principio parece que l/O, porque es al senado a quien
incumbe ponderar la acusación de la cámara de diputados, investigar Jos
hechos. y resolver si el acusado debe o no ser destituido e inhabilitado. CAPtrn.o XXXVIII
Pero si aparle de ese juicio sobre el ''fondo del asullto" -que parcc..'C ¡rre-
visable- se incurre en algún vicio grave deJanllO en el proc.:edimicnto. el EL PODER EJECUTIVO
recurso extraord inario ante la Corte Suprema de Justicia ha de quedar ex-
pedilo. a efectos de preservar la garantía del debido proceso, y el derecho
de defensa.

20. - Hasta 1986 la Corte inhibía --con divcrsidad de argumentos-el control


judicial sobre la!; decisiones recaídas en los cnjuiciamicntos políticos.
t. - El "órgano~ in s titu ci6 n " que la constitución formal denomina
, se individualiza en el "presideme de la Nación ArgeJ1(i~
El 19 de diciembre de 1986 admitió la procedencia del recurso extraordinario
federal en el juicio político a miembros de la Corte de Justicia de San JU:II1. yel 29
de diciemhre de 1987 dejó sentado el criterio de lajllsliciabilidad cuando media
disputa sobre violación de garantías constitucionales (ea.~o "Magin SUárcL"). 2. - El ano 87 enuncia que "el poder ejecuti va de la nación será des-
EII otra serie de casos referidos a enjuiciamiento político de funcionllrios PfV-
por UII ciudadano con eltÍlulo de «Presiden te de la Nación Ar-
\'illcia/es (no solamente jueces) consolidó el nue\'o sesgo de lajllsliciabi/idad, has- . Una interpretación puramente gramali cal de eSlanorma no dc~
ta que en 1993 ratifica esta pauta por vez primera en el juicio polftico a UII jue7 carácter u"ipersonal o mOllocrático de nuestro
federal (caso "Nicosia"). "Poder ejecuti vo" es solamente "el presidente" de la re~

Pero lo que dccide la loma de posición acerca dc la unipersonalidad


es la interpretación del arto lOO, quc exige el refrendo y lega~
ministerial de los actos del presidenlC, por medio de la firma. sin
., re< esos actos carecen de eficacia; esto nos lleva a interpretar
ministerio es un órgano constitucional auxiliar. al margen del eje-
y por ende, también de la trinidad de poderes que la constitución
(wrapoderes).

3. - Para nosotros. el poder ejecutivo resume una triple actividad: 1") la po_
g/ibemativa, vinculada a la constitución. pero libre en su iniciativa y en su
,""ó 2°) la administraci6n. que tampoco es siempre meramente de ejecución.
si bien es sub-legal (o sea, que debe moverse en un plano inferior, vincula-
por la ley) presupone también en amplias zonas un poder de iniciativa; 3°) la
1nllción, o decisión ejecutoria, que recae en la aplicación y el cumplimiento de
\lila decisión, sea ésta emanada de otro órgano -congreso o judicatura- o del mismo
"I~ano ejecutivo.

-

322 COMPENDIO DE DERECHO CONS1111JOONAL
EL PODER EJECUTIVO 323

4. - La reforma de /994 ha suscitado debate acerca de si las modificaciones - Además, si se admire que el presidenciaJismo ha variado algo,
introducidas en la organización del poder han atenuado o no al presidencialismo. La queda "literalmente" expresada en tres aspectos:
lectura de las normas que iremos citando puede. según la interpretación de cada In prohibiciólI de que el presidente ejerza facultades delegadas
uno, responder tanto afirmativa como negativamente. Pero, nuevamellle, hay que
congreso ---con las excepciones habililantes del art. 76-; añadiría-
auscultar la realidad, y desde 1994 a hoy no parece que el presidencialismo haya
cambiado demasiado.
la de promulgación parcial de leyes --también con la
:vista en el art. 80-:
Vamos a pasar revista altt.:xto constitucionaL

5. - Por un lado. el presidente de la república retiene lajefatura del


estado y la del gobiemo (af!. 99, ¡ne. 1"), pero lajefanua de la adminis- e) la prohibición de que el presideme dicte decretos de necesidad y
traci61/ ha recibido un deslinde bastante ambiguo: el presidellte es respon- las excepciones autorizantes del art. 99, inc. 30 _.
sable "políIico" de la administració1I ge1leral del país (an. 99, ¡ne. 1") y
cljeJe de gabillete de ministros "ejerce" esa administración gel/eral (arl. 9. - Existe otra serie de paliativos posibles. en conexión con dife-
100, inc. l°). órganos de poder y extrapooeres. Así:
El presidente conserva el poder reglamemario de las leyes en forma a) En el poder judicial hacemos una subdivisión que presenta modi-
igual a la descripta en el viejo arto 86, ine.1:' (ahora ano 99, ine. 2°), pero el on," respecto del régimen anterior: a') los magistrados de la Corte
jefe de gabilJete expide: mantienen el mismo mecanismo de designación -por el poder
a) los actos y reglamentos que sean necesarios para ejercer las facul- con acuerdo del senado- pero el acuerdo ahora requiere dos ter-
tades que a él le atribuye el arto 100, más votos de sus miembros presentes. y la sesión debe ser pública: a")
-
b) los que sean necesarios para ejercer las que le "delegue" (dehería
los jueces de tribunales federales inferiores, los nombramientos se
mediadora del Consejo de la Magistratura, y las
decir: "impute") el presidente, con el refrendo del ministro del ramo al cual
se refiera el acto o el reglamento.
on,,, a través de un jurado de enjuiciamiento.
b) Los 6rgal/os de control-como laAuditoría General de la Naci6n
6. ~ El jefe de gabinete tiene algunas facultades "pri~'ativas" o exclusivas, Defensor del Pueblo-- pueden ser valorados como elementos de cqui-
como: a) presidir las reuniones del gabinete de ministros cuando está ausente el fiscalización y contralor. Algo similar cabe predicar del Ministerio
presidente (arl. lOO, inc. 5°); b) refrendar los decretos que dicta el presidente por que ha logrado conar amarras con el poder ejecutivo.
delegaci6n legislativa del congreso (art. lOO, ine. 12); c) tomar a su cargo la inter-
c) Si examinamos la relaci6n if/rerórgallos "poderejecutivo-congre-
venci6n y el refrendo en el mecanismo de los decretos de necesidad y urgencia (art.
lOO. inc. 13, en correlaci6n con el arto 99, inc. 3°) y de los que promulgan parcial-
. aparece la facultad de eada cámara paraimerpelar(aefectos de tratar
mente una ley (art. lOO, ine. 13, en correlaci6n con el arto 80). moción de censura) al jefe de gabinete, por el voto de ta mayoría
ulade la totalidad de miembros de cualquiera de las cámaras; y para
Si en este LLíptico se clausuran las facultades que solamente puede ejercer el
eOIl el yotode la mayoría absoluta de los miembros de cada una
jefe de gabinete, parece que en toda la gama de las demás competencias que le
atribuye el texto reformado hay conc/lrrencia con las del presidente, a condici6n de ellas, todo conforme al arto 101.
aceptar que éste inviste la "titularidad" en la jefatura de la administraci6n, y que el
jefe de gabinele illviste únicamente su "ejercicio". El. arto 101 obliga también aljefe d~ gabinete a concurrir al tronos una vez por
En suma, subsiste la relación jerárquica entre el presidente y el jefe de gabi- alternativamente, a cada una de las cámaras, para infonnar de la mare/m del
nete, al que nombra y remueve por si solo (art. 99 inc. 7").

7. - El presidente ha perdido lajefatum local e inmediata de la capilal fede- d) El período de sesiones ordinarias del congreso se ha ampliado
ralo desde ell o de marzo al30de noviembre (arl. 63), pero esta formalidad no

324 COMPENDIO DE DERECHO CONSI [IUOONAL EL I'OOER FJEctmVO 325

basta para afirmar. sin más, que el congreso se halle en condición de roni· I,a rellta de dos mil pesos fu enes -() un ingresoequivaleme- pudo
licaf sus competencias y. de ese modo. atemperar las presidenciales. significado a la época de la constitución histórica, totalmeme
después. Se trata de un requisito que en la práctica ha sido
e) La competencia para ;mervenir a una provincia o a la ciudad de
y dejado de lado.
Buenos Aires queda ahora explícilamente atribuida al congreso (art. 75
ine. 3 1), así como la de aprobara revocar la que, de acuerdo con el ano 99 _ El act o 89 consigna los requisitos que haccn falta "para ser
ine. 20. di spone durante su re<.:eso el poder ejeculi va. presidente o vicepresidente". 131 arl. 94 dice que ambos "serán
1) La h"" de COIlVOCa!or;a (/ consulta popular sobre un proyecto de directamente por el pueblo ... ", de donde surge que el momento
ley 1/0 puede ser vetadil: el voto afinnati vo del cuerpo elcclOralla convier- eJecció1/ deJ presidellte y vice es el del acIO electoral en el que el
te en ley de promuLgaci611 aulomálica (art. 40). vota por la fórmula. Es entonces cuando deben estar reunidos
de elegibi lidad .
10. - En cuanto a la habilítaci6n de la reelección presidencial. podemos va-
lorar que la reforma introducida 110 es inocente, y que facilita la tendencia a la con- B. - En cuanto a la duración del período presidencial, aparece en
centraci6n del poder en el presidente. I del período de desempeño dcl presidente y vicc
a cuatro; Juego viene la supresión de la prohibición de reelec-
reemplazándose por la habilitación para ser reelegidos-o
El acceso al cargo y la permanencia en el mismo erserecíprocamente- por un soloperíodo cOllSeeutivo (art. 90). (Debe
presente la excepciól/ estipulada en la disposiciól/ transitoria dé-
11. - El actual arl. 89 dice: "Para ser elegido presidente o viccpresi- dio duraci6n mayor al perfodo presidencial-dcsde el 8 de julio
dentede la Nación, se requierchabcrnacido en el territorio argentino, o ser al 10 de diciembre de 1999-.)
hijo de ciudadano nativo, habiendo naddoen país extranjero: y las demás Inferimos de los an s. 90 y 91 que el período presidencial (salvo el
calidades exigidas para ser elegido senador. " I autorizado) l/Oadmire prórroga. ni duración ma-
cuatro años. pero queda la duda de si es susceptible de acortar-
Antes de la reforma de 1994. et entonces arto76 inc luía entre las condiciones
para SCI" eleg ido presidcnlc la de "penenecer a la comuni6n cat61ica apostÓlica ro- Interpretamos que el lapso fijado descarta y prohíbe. a la vez, am-
mana".
o reducir su tiempo. Una permanencia menor de cuatro 3110S exactos
derivar de alguna causal de acefalía derlOitiva.
En la remisión que el arto 89 hace a los requisiLOs para ser elegido
senador (fijados en el arto 55), cabe decir que: 14. - El presidente y vice gozan por el arto 92 de un sueldo pagado
a) La edad es de treillta al1os. tesoro nacional. Su monto no puede "alterarse" en el período de sus
b) La ciudada"ro con Ollligüedad de seis al10s no se apl ica al presi- .",roic,nto,. o sea, ni aumel/farse ni dismil/uirse.
dente cuando éste ha nacido en el país, porque la posee desde su nacimien-
to. Tampoco rige para el extranjero que, como hijo de ciudadafl o f/nLivo. Durante el período de descmpefio. agrega el arto 92, ni el presidente ni el vice
. otro empleo, ni recibir ningún Olro emolumcnto nacional ni provin-
puede ser elegido conforme al arl. 89 que, para tal supuesto, descarta al
requ isito del arto 55.
Tampoco se aplica el llaber nacido en fa provincia que lo elige o te- 15. - El art. 93 contiene la nueva fórmuladeljuramemo que han de
ner dos ailos de residencia inmedia/a ell ella. porque el presidente no es prestar el presidente y el vicepresidente al tomar posesión de sus cargos
elegido por provincia alguna. ante el congreso reunido en asamblea. respetando sus creencias religiosas.

326 CO.\ll'E.'LHO DE DERECHO CONSTn1:L10NAL


EL I'UOI:.R E.n::CVl1VO 327
El juramento es un requisito que hace a la v"lidez, del/íll¡/(I de jure del presi-
denle. Si se negara a prestarlo. ti si hiciera asunción del cargo antes de pr,,:slarlo, el los dos supuestos previstos en el ano 88 se trata Jiempre y so/a-
título presidencial quedaría viciado y. por ende, seria de ¡"c/o. de "cinco" línicas cau.mfe.f. de fo rma que las "cuatro" mentadas
parte son iguales (o l:q uivalen) a las "cinco" del vocahulario
al comienw de la norma: a) e,,¡emledad o inhabilidad (como
Los problemas vinculados con la aceralía b) (/usellcia de la cafJiwf (y t'On más razón dd país). c)
d) renuncia o dimisión. e) de.wirución.
16. - b palabra acefalía, que proviene de la \'OZ latina "acephalus" y de la
ausencia de /a capilal ha de entenderse at·t ual mente como au-
grkga "aképalos", significa privado de cabeza o sin cabe;r:a. "Accfalfa del poder
ejecutivo" quiere decir que el poder cjc(;utiyo queda sin cabeza, o sea, sin titular: de/ país.)
siendo el ejecutivo 1II1ipenollfr{, eso ocurre cuando falla el único tilular que liene. es
decir. el presiden/lo. 1..1. remoción por golp<: do; estado, revolución, o cualquier hecho de fuerza, es
Que haya quicnlo su(;cda, es Olra cosa: la acefalía desaparecerá tan pronto ese
" ~,~ ex/mconsl;lIIciclI1(/l; por e:>o, quien asume la presidencia e,; un presiden-
ja( y no de jure (aun cu~ndo asuma la presidencia aquél que señala la ley de
a lguien reemplace al presidente de la república.

17. - El 3rt. 88 -que mantiene el lexto del anteri or an. 75- enfoca
18. - Cuando una causal de <:tccfalía afecta al presidente, "~ l poder
dos supuestos: a) que una causal de acefalía afecte IÍnicamel/te al presi-
será ejercido por el vicepresidenle". según reza la primera parte
dellte de la república, en cuyo caso el poder ejecuti vo es cjercido por el
89. Hay acefalía. pero hay un .fUcesor.
vicepres idente (es lo que llamamos la "sucesión" del viccprcsidentc): h)
que lalllO el presidente como el \'ice es/él! afectados por una causal de a) Si la acefalía es defillitiWl. el presidente cesa y la vacancia debe
acefalía, cn cuyo caso fe cabe al congreJO "detenllif/ar" el fUl/ciO/llIrio fonna pemumeme: el vice ejerce el poder cjccuri vo por todo el
plÍblico (fI je ha de desempel1ar la presidencia. del período presidencial pe ndicnte y asume el cargo en Jí mi.mlO, y
La primcra parte del art. 88 dice: "en caso de enfenllec/ad. ausencia en presidenle .. no es el vice "en ejercicio del poder ejecutivo".
de la capilal. muerte. n'I/Ullda o destilllciólI del presidente. el poder eje- "el presidente": con eso, desaparece la acefalía. porque deli nitiva-
culi vo será ejercido por t:l vieepresideme de la nación". un nuevo ti lular.
Si se Ice delenidamente el arto88, se observa que en la pri mera pane, ('on ta transformació n dd \'iceprcsidente en presidemc, el órgano vicepresi -
donde se refiere al presidente de la república. habla de "enfenned:kl'·. "au- queda a su "el acéfalo; de aiH en adelante. habrá pIPsiden /e y no I/abrá
sencia de la capital", ·'muerte". "renuncia" o "destitución" (dl/co causales).
En cambio. en la segunda pane, cuando se refi ere al prcsidelllc y al vice-
presidente. habla de "destitudón". "muerte", "dimi sión" o "inhabilidad" b) Si la acefalía 110 es defil/iliva-por ej.: por ausenci a o enfermedad
(cuatro causales). a del prcsidcnte- el ejercicio que el viccpresidente hace del poder
Haciendo el cotejo. se mantienen dos causales COIl las mismas pala- así como una sllplellcia, hasta que el presidenle reasuma
bras: "muerte" y "destilución"; se cambia la palabra de otra causal: "dimi- funciones; en esos casos, el vice es sólo vicepresideme el/ ejelt'icio
sión" en vez de "renuncia": desaparece una causal : la "ausencia" de la ejecutivo: l/O sucede al prcsidcllle en el cargo. sino sólo lo re-
capital; y es dudoso si la palabra "inhabilidad" equivale a "enfermedad", en las funciones del cargo.
lo quc también conviene en dudoso si la causal "enfermedad" se suprime y
Se sust ituye por otra (inh abilidad), o si es la misma causal con nombre 19. - El art . 88 prevé que en determi nadadrcunstancia, tanto el prc-
di fercllle. vicepresidente están incursos en alguna de las cinco causales
Estamos ciertos dc que. no obstante los matices diferenciales apunta- )18 esludiadas. o sea que la sucesión constitucional del vicepresidentc que-
da impedida.


••
328 COMPf"l..'DIO DE. DERECHO CONSIIIUCIO:>"AL EL PODER EJECl ,!VO 329

El ano 88 dice entonces que en caso de dcslilución, muene, dimisión o ralta defutitivamellle el vicepresidcnte, el órgano-institución que-
inhabilidad del presidenlc y vicepresidente, el congreso detenl1;l/ará qué que 10 porte. ¿Qué cabe hacer ante ese vacío?:
funciol/ario público ha de desempeñar la presidencia, hasta que h aya cc- constitucióll l/o obliga expresamcnte a elegir nuevo vicepre<;i-
sado la causa de inhabilidad o un nuevo presidente sea electo. la constitución 110 pmllfbe elegirlo; e) parece mejor elegirlo.
El artículo autoriza, a nuestro juicio. dos interpretaciones igualmente prevé la existencia y la función dcl vicepresidente;
válidas. La determinación puede hacerla el congreso: a) en/orma amic;- la falta de vice desarticula las previsiones conslilUcionalcs sobre la
pada y general, mediante una ley que para los casos futuros ordene la suce~ión en el poder ejecutivu: y. además, conviene advcnirque
sucesión al poder (y así se hizo dictando las leyes de acefalía 252 y 20.972); suponc y regula como Situación fl On/WJ la existencia conjunla
b) en cada caso particular, una vez producida la acefalía presidencial e . presidente-vice. O sea, que debe haber un vicepresidente.
impedida la sucesión del viceprcsidcmc.

20. -La primera ley de acefalía fue la 252. dictada en 1868. En /975 flw presidencial
derogodo fa fey 252 y SIIsliluida por la n" 20,972.
E~taley di~puso dos etapas para cubrir la acefalía: ulla provisoriu hasta que el
_ En los articulos 94 a 98 se reglamenta el nuevo sistema de
congreso elijn ell1ue"o presidente, y otra defillit;!'cj a cargo del presidente electo por del presidentc y vicepresidente de la repúbl ica.
el congreso reunido en asamblea. Si la causal de acefalía es transitoria, la segundn texto Iloffilativ() dispone que el presidenle y el vicepresidentc serán
etapa no ~ cumple. . directamellle por el pueblo. en doble vuelta (an. 94).
a) Cuando la vacancia del poder ejecutivo es 1r(/IIsiroria yel vice no puede segUttdll vuelta electoral. si correspondiere, se real izará enlre las
suceder al presidente, la ley prevé el desempeiio temporario del podcrcjeculivo poI" , di' ca"didmos más votadas (art. 96).
alguno de los siguientes funcionarios, en este orden: l°) el presidente provisorio
del senado: 2") el presidmle de la {"(ímara de dipl/lados; 3) el presiden/e de lu
Corre Suprema de Jllslicia. El que asume, ejerce el poder ejecuti\'o "hasta que
.- La doble vuelta 110 se realiza cuando:
reasullla su titu lar". a) en el primer aClo clecloral la fórmula más votada supera el 45% de
b) Cuando la vacanda es pemUmef!le hay dos etapas: b') en la primera, el válidamenle emitidos":
poder ejecutivo es oCllpado IransilOriumente por uno de los funcionarios ya men- h) en ese primer acto clcctoral la fómlUla más votada alcaliza el 40%
cionados que prevé el arto l° de la ley, en el orden que ella consigna: b") en la <",)5(le los votOS aflrmal ivos válidamentc emitidos, y además hay una
segunda, el congreso reunido en asamblea elige definilivamentc al nuevo presiden- . movordel JO% respecto de l (Olal de votos "afirmativos emiti-
te, entre los senadores federales, diputados federales, y gobemadores de provincia.
válidamente" a favor de la f6 mmlaque le sigue en número de VOIOS.
Cuando no concurre ni nguna de estas dos hipótesis, se debe realizar
Lo vacancia de la vicepresidencia
""do actO electoral para que el eleclOrado activo elija entre las dos
más votados en la primera vuelta. La segunda tiene lugar dentro
los treinta días de realizada la anterior.
2 1. - Puede no haber vicepresidenle por dos circunstancias: a) por-
que habiendo presidente el vicepresidente il/curre en alguna de las causales lIa de tenerse en cuenta que las normas analizadas imponen el VOIO "por 16r-
del ano 88 -enfermedad o inhabilidad, ausencia, renuncia, muene o desli- .1<, "'. es decir, por el binomio de candidatos que se postulan a la presidencia y a la
lución-; b) porque afectado el presidente por una causal de acefalía, qui en Vk:cpre.<!.idencia. No se vota por personas y, cn consecuencia, el escrutinio se tiene
es vicepresidente pasa (1 ejercer la presidencia. En cualquiera de ambas 'lue realizar por fórmulas y no por personas.
hipótesis, la falla de vicepresidente puede ser definitiva o temporaria.
24, - Queda sembrada una eluda cuando Jos arts. 97 y 98 , al fijar los pon:cn-

• ,
• •
3)0 COMPI'.NDIO DE DERECI 10 COXSIII UaONAL

~~j':S .~e su(ragios C[~ rclac ~6~1 con la prin~ra Y,la segulKla \'\IdI3, empican la cxpre-
q"'
~J611 votos (/finllOlll'os L'ollJomenle ellulidos '.¿Q ué Sil!lliflc3 "aJirnllluvo ' " y
significa "válidarncnlc'''! - 1i e
El problema apunta a los mIOs en blanco: no a los: nulos o impugnados .
.VUIO (lfinllflfil'O es el que "afirma" algo. pero queda en dud3 si vOlar en blallco
tamb ién es "afirmar" una abstención o un rechazo respcclo de lodos las fórmu la!; y
de cualqukra, como expresión de desagrado o de repudio. .
. Dentro de lo opinable, prefcrilTK)s interpretar que la expresión "votos afimw - CAPtruLO X XXIX
111'0$ válidamente emitidos" alude a \'otos que realmente son/(l vorables posiril'(I .
/l/enfe pum 11I1(1/ónlluICl. Dc este nDdo. no se han de computar los 1'000.f en b/(//I- LA COMl'ETENCIA DEL PODER EJECUTI VO
w. y se han de dedurirdel total de los válidamente emitidos

_ El conjunto de facultades que inlegnlll las competencias del poder ejecu-


o:¡¡la mera ~uma do: todas y cada una de las enunciadas o:n el art. 99 de la
,y cn el reSIO lIel articulado que confiere otras no incluid:Js ..m aquél. Al
nllrtcamencano. e il\clu~() al estilo cxpresamcnh! adoptado en la constitución
de 1958. creemos que la competencia de! poder cjecUlivo importa una IIW $(/
.\' amplia de facultades y atrihuciones, que no requiere asign ación expresa.
remanente de las competcndas pertenecicntes al congreso y a
«pn"" o implícitas) se entrega a favor del poder ejccut i\'o.
1.0 que debe quedar claro es que las cOIl1pCh!nci:Js implícitas y las residuales
alterar la regla que en el derecho corlStitu!;lonal del podcr enuncia que
poder estatal "la jnoompctcocia es e l priocipio, y la compclen-
excepció n".
Asimismo, [)Os pan!ce indudable que el h!xto ahora en vigor impide desaITQ-
análisis de I a.~ competen.:i::.s del poder ejecutivo sin imcn:onectarlas con las
de gabi/!ete de ministros, I'or tal razón. los arts. 99 --.;;011 las atribuciones
presidente- y lOO -con las del jefe de gabil1ete~ acotlsejan acumular el cstudio
ambas nomus.

presidenciales

2. - En la constitución de 1853-60, el poder ejecutivo asunúa CUalro


a) la jefatura del estado; b) la jefatura d~ la adm;lIisfració"
pública; e) la jefatura local e inmediata de la capital federal; d) la jefatura
de las fuerzas anJwdas.
El art. 86 ¡nc. 1° dccía: "Es el jefe supremo de la nación y liene a su
cargo la administración general del país",
332 CO.\1PENDIO DE DERECHO CO~S IIIVcrO..... AL LA COM?ETENt1A DEL PODER EJECUTI VO 333

F.~ tcxI,O reformado, en 1994 dice: an 99 ¡nc. IQ : "Es el jefe supremo de o sea, subordinado a la ley, haremos una bre\'c clasificación
la nacIón. Jefe del gobIerno y responsable político de la administración tipos o clases de administración.
general del país", . I activa, que es la que ejecma, decide y obra:
La comparación nos hace ver que: que es la que asesora, preparando ge nera lmcn-
a~IO de la administració n activa:
a) se molltiel/e la jefatura "del estado":
b) el texto actual menciona laje/Mura "del gobiemo";
",,¡, t in lema, es la que despliega su actividad sin entrar en rc1a-
lerceros;
c~ l~je!?lUra de la admi"islració" también se mamiene. aunque hay Admi nistración externa, es la que en su acth'idad se vincula con terceros:
una ,dl Slmc,I,o,n a erectuar ['Iarque: e') el texto anteri or estipulaba que el I es la que decide cuestiones en forma similar
p~cslden[c '[lene a su cargo" la administración general del país. en tanlo administración de justicia, pudiendo distinguirse, como
C.) cll CX.to ae/ua] reza que "es responsable político" de esa administra- entre el mero acto administrativo con contenido jurisdiccional,
ción; pero c''') el an. 100 ¡IIC. /" asigna el "ejercicio" de la misma admi - tribuna les u o rg anismos administrati vos que ejercen func ión jurisdiccio nal:
nistración al jefe de gabil/ete. Administración de con/mIar, es la q ue se ejerce para "erificar la legitimi-
d) la jefmura local e il/mediara de [a capital ha sido t>limil/ada; i u oportunidad de la actividad administrativa (esta fiscaLización
financiera):
e) Si' mllllliene la jefárura de las fuerzas anlwdas.
1) A dministradón reglada, es la q ue se cu mpk de acuerdo con no rmas
Si hacemos otro resumen, surgc que: ... ,I",j', ,que seiialan cuándo y cómo debe actuar la administración:
h) Admini ~traci6n discreciol1al, es la que, sin escapar a La sumisilSn a la ley,
a) h?y f~S je/ml/n/S eJ.plídfllmen/e COI1Sig/JaMS , que son: a' ) la jefatura del
estado; a ) la Jcfatura del gobiemo: a"' ) la jefatura de las /lIer:!.as (/ml(lda~; .,,~ de arbitrio más elástico y amplio, como para ponderar la oportunidad, el
la conveniencia del acto:
" b) hay.una j:/afllm que implica para e l presidente la ''r~ponsabilidad políti-
i} Administrac ión burocrática, es la que asigna la fu nció n a personas físicas
ca ¡xlI' su I~tuln"dad, pero cuyo ejercicio 110 ('l/Ú a Sil cargo 5ino delje/e de gabi,
/Jete; es la Jefatura di' la administración. actóan individualmente:
e) hay una je/ml/m suprill/ida, I.jUC es la de la capital. j ) Administración colegiada, es la que asigna la función a varias personas
actúan en conjunto;

. . 3. --:- En su relación con el jefe de gabinctc y con los demás func ionari os ad- Administración tllltátquiea, es la que actúa a través de órganos con perso-
nutllstr,atJvos,.e1 ~·t: 9911"ac dos di sposidones: a) respecto del plimero, el presidente "'" forma tal que se trata de una administración indirecta del estado.
sl~pen'f~tI el eJerciCIO de la facultad del jde de gabinete respecto de la recaudación
e m\'ers~ÓI) de las r:c lllas, con .arreglo a la ley o p re;¡upU<..'Sto de gastos Cinc. 100): b) 6. - La aUJl\inistración es una ac tividad pennanente, concreta, práctica e in·
lanto re~p....'1:to del.J~fc de.~abUlete como de los jefes de todos los ramos y departa- ata '" e,'",I<>" que tiende a la satisfacción de las necesidades de la sociedad.
mentoS de la adnumstraclO11, les puede pedir informes (inc. ! 7). No toda la administración estatal pertenece al poder ejecutivo ni depende de él
hay administración en el congreso y en el poder jlldicial), pero no cabe
4. - La administración pública, aunq ue depende del poder cjccutivo, no for- la administració n que depende del poder ejecutivo es la fundamental,
ma parte de él: la .adJll~n istr.aci6n se diyersifka en 6rganos y tipos de actividad, que en sentido "orgánico" (estruct ura), como "funcional" (actiYidad).
no son el podc!r eJecUILYo SIDO tan s610 se le s ubordinan jerárquicamente.
7. - En la funci6n administrativa encontramos actos "de administración",
actos "administrativos", "contratos" administrativos, etc. Algunos de esos actos
La administración públka tienen contenido general, y suelen llamarse reglamentos: y otros contenido indivi-
dual o particular.
. . . 5: - Sentado quc administmr excede en mucho a ejecutar. porque implica
llllclatlva -y a veces di~crcc i ona lid ad_, y recordado que la administración Sc sitúa 8. - El (lelo Mminislmlil'o es, en noción amplia, toda expresi6n de voluntad
L." CO~I'El'ESC[A DEL I>()I)E".R fJECUnVO 33!'
334 COMPE....'DIO DE DERECHO CO~STnl.."aOj\.'AL

12. _ Con respeclO a los reg/amemos de ejecuciólI, o decre~os ~e/


que, en ejercicio de función administrativa, surte un efeclll jurfdico que se proyecta . dicrados el! reglamellwciólt de las leyes, la consutuclón
fuera del ámbito de la administración (en tanto al que los retiene en su esfcm in/er- en su arto 99 ine. 2°, que el pre~identc expide las instrucciones y
n(/ SI;: lo repula un "aclo de administmción"). que sean necesarios para la ejecución de la:' leyes. cuidal/do
alterar su espíritu con t'xcepciolles reg/alllt'l1lanas.
9. - La administración puede d('scenlrali:¡rrse e, incluso, esa descentraliza-
ción puede aparejar f/lItarr¡u(a cuando el ente ucscentraJi.lado adquien.: personali-
13. _ I ,a jurisprudencia UI! la Corte tiene exigido el requ.isilO de la pllblica-
dad jurfdica y evade la relación jenirquica (que SI.: suple con el control administrati-
los decretos como condición para su obligatoriedad, habIendo aclarado pos-
vo). ¿Quil:n puede descentralizar y erigir entidades autárquicas? ¿A qué órgano
••".",,, que ello rige únicamente en el caso de decretos di~tados en uso de I.a
pcrlCnt'Ce esa cOIllP'!lcncia?
constitucional que acuerda al poder ejecuti\"O el art. 9~ IOC. 2" de .Ia consll-
El congreso SÓ!l) puede erigir {¡rganos autárquicos cuando los crea en virtud de 00 extendi~ndose a los decretos que carecen de contemdo normal1vo gcnc-
una competencia constitucional paralela a una "materia" que el propio congreso
puede regular: así, por ej .• por sus facullades en malería ue educación o bancaria, de
I.a publicación de acto~ ndministrati\'os de alcance 8t'1feral es un requisito de
seguridad social, elc. En lo demh, la ley no está en aptitud de desmembrar porcio-
. . de gobierno.
nes de la administración que no le ha sido atribuida al congreso sino al presidellle
de la ft'{)/íblica. Por eso, en el ámbito de la administración que depende del poder
°
ejIXuli\'o, la creación de órganos des.xntralizados autárquicos por ley del congre-
14. _ La derogación de una ley priva dc vigenda a su decretO reglamentari\).
so es ill(.{lllslilllc;ollaf, porque \"i\)la la "reserva" de la administración y la dÍ\'isión
de podcre~. 15. _ El exceso reglamel/tario transgresor de la ley que se regla-
es siempre inCollstilUciolla/.

Los reglam entos administrati vos J6 _ En el derecho constitucional argentino tomó curso la denominación de
'. "impropia" para el supuesto en que: a) el congreso. dicta Ulla ley en I,a
trllza el fin ewuiento de Sil política legisla/ira en la matena que .regula y, a )
10. - El término "rcglamemo" se suele aplicar a toda maní (estación
." ,~ poder ejecutivo la pomtenorización de los aspectos que en dlch," ley sólo
de voluntad de órganos admi nistrativos que crea status generales. imper- recibido un marco general: por lo que. b) se ha interprctado quc en ngor no se
sonales y objcti vus med iante I/OnllOS generales. (Con cse alcancesc utili- de una delegación "legislativa" sino de un ensanchamiellto de /a !aCllf.tad n:-
za también para designar actos similares del congreso O del poder j udicial; que es propia del ejecutivo, 1" cual, b') queda con un ámbIto dl~l1I ­
en ese caso, a tales actos se los llama reglamentos "legislativos" o regla- en la mooida en que el referido marco de la leyes general yelástlco.
mentos "judiciales",)
El reglamento ad minislrati vo es un aClo admillistrarú'o dc contenido 17. _ Los reg/amelltos autónomos no son reglamentOs de ejecución
general. la ley, sino reglamentos sobre /I//IlalaS 110 ~gulad~ por ley,,;\( reser-
a fa admillisf roción, Recaen sobre matenas proptas de la zona de
JJ . - En ~entido estricto, y cualquiera sea la denominación que se les asigna de la adminislración. que no pueden regu larse por ley.
nomll'lti\'ameme, son reglamentos adm.inistratÍ\"Os los que en sus respectivas áreas
de competencia ad.minisl]"ativ~ I!milen el poder ejeclltivo, el jefe de gabillete, los Una materia propia de reglamento autónomo es _por ej.-la regulación d~ I.OS
ministros, y los vrgll/lisllloS y repMticiones de la administración pública. lO'"'"''''' . y la organización administrativa \!11
el área de la adrru1llS-
del poder ejecutí'lO.
La clasi fi cación cuatripartita más usual y sencilla es la que reconoce
las siguientes categorías: a) decretos reglamemarios de las leyes. O regla- 18. _ El reglameTlfo deLegado. a diferencia del decreto reglamcnta-
mentos de ejecuciólI de la ley: b) reglamel/tos autónomos o independien- rio que ejecuta la ley, ydel autónomo que surge de la esfera de rcservadt! la
tes: e) reglamemos de/egndo.5: d) reg!amemos de lIecesidad y urgencia.
336 LA CO~1P1:"'ENaA DEL PODI:R E.lF..ctmVO 337

administración. se dicta en mérito a una habilitación conferida por el po- se interrumpe la previsión constitucional sobre el destino final
der legislativo. cabe al decreto en el congreso, y ésta es la apertura que debe cerrar
l.a refonna de 1994 ha previsto la delegación por e! congreso al po- que. por prescripción del inciso, necesita sancionarse con
der ejecutivo en el marco de excepción que traza el arl. 76. No hay que la tOtalidad de miembros de cada cámara, y que ha
perder de vista la rotunda prohibición genérica que encabeza a esa norma, trámite y los alcances de la intervención congresionaL
ni la que en el ano 99 inc. 30 impide al presidente emitir d isposiciones de
carácter legislativo. '. _ Nos parcce quc qucda suficientemente esclarecido que la ley reglamen·
trámite y los alcaliCes de la intervención final del congreso rumc(I' puede
La delegación legislativa permitida sólo puede ser efectuada por el . ., que el silencio del mismo significa apromlción tácita del decreto de ne-
congreso a favor del presideme. No al jefe de gabinete. ni a los ministros, y urgencia. ya que el art. 82 contiene una nonna, que repulamos general
ni a organismos administrativos. easos y para cualquiera. confonne a la cual la voluntad de cada cáma-
"" expresamenle. agregando para disipar cualquier duda que "se
19. - Los reglamemos de lIecesidad y urgencia son los que se dic- en todos los casos. /a sanción tácita o fieta .'.
tan sobre materias propias de la competencia legislativa, cuando una ur-
1. _ La intermediaci6n de la Comisi6n Bicameral es r>bligalor;a. pero su
gencia súbita exige emitir las normas que el congrew no ha dictado, o su-
plirlo lisa y llanamente. La lIt!-cesidod y [a urgencia son [as razones justi-
loe'' 'no resutta vinculante para el congreso.
tkailles para consentir que se margine la di visi6n de poderes, y que el eje- 22. - La práctica abush'a en ITlateria de decretos de necesidad y urgencia en
cuti V\l ejern una función del congreso. ha incurrido a partir de la refonna constitucional (incluso porque sin existir
La reforma de JW410s ha previsto para situaciones especiales (an. "'"' Bicameral PI.-rmanente convocada a inter\·enir se han dictado en dema·
99 inc. 3°). i a extremar la se"eridad en el cumplimiento de las ex:igcn-
,para la cxcepcionatidad de esta competencia, consigna el ano 99 ine. 3" .
En el (¡r(. 99 los párrafos tercero y cuarto del inc. 3° encauzan y orde-
nan así el uámite: 23. - Ello conduce, además. a reivindicar un muy estricto cOl/lror
a) solamente circunstal/cias excepcionales que imposibilitel/ seguir citll. de constitucionalidad, de amplio espacio.
el procedimiento legislalivo ordinario, habilitan el dictado de decretos de A nuestro juicio, puede recaer en:
necesidad y urgencia: pero:
la verificaci6n de que ha existido la serie de recaudos que la cons-
a ') están absolutameme prohibidos en materia penal. m·butaria. elec- exige: a') circunstal/cias excepcionales, a") que hacen imposible
loral, yen el régimen de parlidos políticos; ""Ilrámire legislativo, y a''') necesidad y urgencia en la emisión
b) deben emanar del presidellle de la república, por decisión adopta-
da en acuerdo general de ministros. los que han de reJrendarlos junta- b) la verificación de que se ha cumplido en todas sus etapas el segui-
mente con eljeJe de gabi1lete de minisuos; . por: b') el jeJe de gabillele, y b") la Comisión
e) eljeJe de gabinete de mini stros liene que someter personalmente, Permalle1lle, hasta b''') su ingreso al COllgreso.
dentro de los diez días, el decrcLO a consideraci6n de la Comisión Hicameral Cuando acaso no se ha cumplido la instancia final en laque el congre-
Permanellle del congreso; rechaza o aprueba el decreto, también consideramos viable el control
d) dicha Comisión debe elevar su despacho en el plazo de ouos diez acerca de todo cuanlo - hasla ese momento- se le propone al juez
día.' al plenario de cada una de las cdmaras para su expreso tratamiemo; causa judiciable por parte interesada; incluso mediante una medida
e) las cdmaras han de considerar ese despacho en forma il/mediata. cautelar.

,
3~8 COMPENDIO l)E DEREC!lü COKSlTIUCIONAL
LA I.."'OMI'ETENOA DEI . rom:1I. EJEClJlWQ 339

La pOlrticipación en el proceso legislativo


Si el presidente aprueba cJ proyCCIO. puede hacer dos cosas: b')
24. _ El poder eje¡;;uti\'o interviene: e:11 el pmceso de formación dI! leyl!$. S\..' ~xpresal1/el/1e, o b") dejar lCanscurrir el plazo de diez días
aoostumbra atribuirle, por eso, el título de "¡;;olegislador". En realidad no parece que se opere la promulgaciól/ ráciw: en r.:ualesquiera de ambas
plenalT\l!llte exa¡;;ta la afim}a(:ión, porque la participación del presidente sólo tiene cOIlI.-"Urrido la voluntad del poder ejecutivo para consumar la
cabida Cilla etapa de iniciativa, y en la posterior de efica¡;;ia (promulgación) pero no dc eficacia y convertir al proyecto sancionado (X)r el congreso en
e:n la intermedia. que es la "ronstituti\'a", o de creación de derecho nuevo, donde se
centra la función legislativa.
e) El {'residente dispone la publicaciólI dcllCXIOde la ley. La publica-
imegra en nuestro sistema la etapa de eficacia para dar vigencia
25. - El arto 99 ¡ne. 3° primer párrafo consigna que el presidente
l ' . t a la ley, ¡x>r lo que puede decirse que dicha
"part icipa de lafonllociólI de las leyes con arreglo a la constitución. las se compone de: e') la promulgación y c") la publicacióll.
promulga y hace IJUblicar".
En primer lugar. el art. 77 le reconoce la facultad de presel/tar pro- 27. - Lapublicaci6n de !aley viene ahora exigida expresamente en
veCIOS en cualquiera de las cámaras. salvo las excepciones que estab lece la . form al pore l arl. 99. inc. 3°, primer párrafo; y no dudamos
constitución. también las leyes promulgadas tdciwmellfe exigen el requisito de
Acá hay que hacer un desdoblamiento:
a) el presidente l/Opuede preselltar proyectos cuando a') se trata de Cun/a publicación 1;1 h:y "es puesta" en el ortlellllonoológicll ¡;;()ll I'igencia
la il/icia(i\'a POIJU/cIr. porque son "los ciudadanos" quienes lo haccn en la , y el iustalllc y el acto de "ponerla" puede adquirir efce/os llplicll/j),OJ
cámara de diputados (arl. 39); a") se trata dc someter a cOl/su/ra IJOpular distintos: a) que se aplique a partir "do;: aur'; b) ljue se aplique
vil/cula/lte un proyeclo. porque si ~s el congreso el que debe decidir hacer- 1 . e) que se aptique después de un cierto lapso.

lo a iniciativa de la cámara de diputados (an . 40). parece claro que el pre-


sidente no puede impulsar dicho proyecto: 28. - Es sabido que la rc/fVacfi,'jdad es inCOI/Slit/lcional en dos silUadoncs:
b) el presidente 110 puede prcsellwr w/ proyecto en cualquiera de las ",:'::':~ ;:~~:!'
e
.
18, en II/aleria pen(l/: b) implícitamente, cuando alte-
suprime o viola dl!rechos "adquiridos".
cámaras cuando b') se trUla dc proyectos sobre contribuciones y recl uta-
miento de llopas, porque los debe presentar en la cámara de dipurados 29. - La ';;gn!cÍlI sociológica, como fenómeno del orden de conductas, no
(art. 52): b") se trata dc proyectos de iey-convenio en materia ~e copartici- de lo que la norma diga, sino de su cumplimiento yeflCacia.
pación federal (art. 75 ine. n yde leyes para proveer al crecimiento armó-
nico de la nación, al poblamiento dc su territorio, y a políticas diferencia-
Jas que tiendan a equilibrar el desigual desarrollo relati vo de provincias y
regiones (art. 75 jnc. 19), ¡x>rque los debe presentar en el sellado.
30· - Nuestro derechoconSlitucional del podcrreconocc al poderejc-
observar los proycctosde ley sancionados por el COIl-
La fose de eficacia. . Regula dicha facultad en la pane dedicada a la formación y sanción
las leyes, o sea, en la referente al congreso.
26. - La fase de eficacia se desglosa en varios aspectos.
La constitución formal ignora la palabra I'ero que, sin embargo, es común en
a) El presidente exami1/a el proyecto sancionado, conforme al arto 78: lenguaje ¡;;onstitucional.
según sea el criterio presidenci al, el proyecto sancionado será promulga-
do o vetado. El veto está previsto en el arl. 83 de la constitución. ''Desechado en el
IOdo o en parte un proyecto IXIr el poder ejccuti vo, vuel ve con sus objecio-
340 COMPf-'ffiIO DE DERECHO CO~STIn;aO:"'AL LA CO~I'I:.'·1:J\"('1A DEL PODER EJECUTIVO 341

nes a la cámara de origen". Desechar significa obserWlr. Lo qut! el poder del senado; de removerlos, solo o con acuerdo del senado. y de
ejecutivo observa es el "proyecto" de ley sancionado por el congreso. El "en comisión".
presidente observa. y observa lodo el proyecto. o ur.a¡Jarte de él. Según el inc. 4° del art. 99, el presidente nombra a magistrados de la
·n e Suprema eOIl acuerdo del senado por dos tercios de sus miembros
3 1. -Hay a ira previsión cancelada con lapromulgaci6" parcial de ,en sesión pública, convocada al efecto. Nombra Jos demásjue-
la parle no velada en el arl. 80. Es ésta: el veto pardal que, conforme al de los tribunales federales inferiores en base aUlla propuesla viI/CU-
art 80. va acompai'iado por lapromulgaciólI parcial de la parle no vetada. enten/a de! Consejo de la Magistratura, con acuerdo del sellado,
tiene expresamente establecidos en el ano 100 inc. 13 la fOfmal,id,ad de pública, en la que se tendrá en cuenta la idoneidad de los cand i-
decreLO. el refrendo conjunto pureljefc de gabinete y los demás ministros, . Un nuevo nombramiento. precedido dc igual acuerdo. será necesa-
y el sometimiento a la Comisión DicameraI Permanente (para esto. el 3rt. mantener en el cargo a cualquiera dc e~s magistrados. una vez
0
80 hace aplicable el procedimiento que el ano 99 inc. 3 prevé para los ,-a "", la edad de setcnta y cinco 3.I10s. Todos los nombramientos de
decretos de necesidad y urgencia), cuya cdad sea la indicada o mayor se harán por cinco años, y
Dice también el art. 80 que los proyectos desee/IOdos pardafmeme repetidos indefin idamente, por el miSIllO trámite."
l/O podrál/ ser aprobados ell la parle reslaflle. Si n e?l~argo. las part~s
1/0 observadas so!alllellfe podrán ser promulgadas SI l/el/en aulOllOIIIUl La diferencia con el anlClior il1(.:i~o 5" del MI. 86 es notoria.
lIorll/{//iva y su aprobación parcial/lO altera el espíritu 1/; la unidad del l;a facultad del presidente -con acuerdo del senado- para designar a los juc-
proyecIO sanciol/ado por el COl/greso. se ha limitado en varios asp(.'Ctos:
a) solamellle SI! mantiene para nombrar con acuerdo dd senado a los magis-
Es la pauta que ya antes de la refomla de 1994 sentó la Corte ~n el caso :·Cotella la Corte Suprema; pero;
c/Fevre y Bassct S.A .... del ai'lo 1967. Vigente ya la reforma,.~ lo por aph~able e l b) ese acuerdo necesita ahora un qll6rlUII fm'Omble agrm,ado. que se fija en
mismo criterio en la hipótesis del ano &O al fallar la causa Bustos, Julio O. el "".; tercios de los miembros prescllles de la cámara. debiendo la sesión ser plÍ-
Servicios Especiales San Antonio S.A.". el 20 de agosto de 1996. y-eon\"ocarse a ese efecto:
'u, los demá.f jueces ele los tribunalc,. inferiores e l procedinuc:nto de de-
32. - La opción presidencial para promulgar o velar es solamente oon acuerdo de l senado viene precedido por la imt:r\"ención del Consejo
un principio. al que la constitución le pone algunas excepciolleJ. Así, por Magislrot,ml (previsto en el ano 114), que propone una tema vinculante:
ejemplo: norma añade -con carácter obligatorio- que se teodrá en cUenta la ido-
a) Es clásica la que obliga a promulgar la ley que se convierte en tal del candidato. y esta indicaci6n imperati\'a alcanza tanto al senado para
porque después de un veto se logra la il/sütencia de amba! cámaras sobre ..tu i oomo al prcsicJcn!e para selecciOllar dicho candidalo entre los tres
por el Consejo de la MagistralUra.
el proyecto anteriormenle sancionado, confomlc al arto S." que ha manlc-
nido cllexlo del anterior arl. 72: Una vez efecluado elllombramiemo, los jueces de la Corte 0010 pueden ser
..." político y los demás por unjurado de enjuiciamiento. O sea, la
b) Es nueva la prohibición eJ.plíciw de veto que establece el arl. 40 de tos órganos dcsignantcs no puede revocarles el nombramiento.
cuando el congreso decide someter acollsulta popu/arvil/culal/te un pro- •
yecto determinado. 34. ~ Es obvio. para nosotros. que si el acuerdo y el nombramiento deben
orl, a un cargo judicial dete rminado y concreto. todo Iras lado a un cargo dis-
al que se halla desempeñando ULl juez. neccsila doblemente el acuerdo y el
Los nombramientos lo que no cabe que el poder ejecutivo traslade a otro cargo igual.
sede. el fuero, y menos el grado,
33. - El art. 99 reconoce al poder ejecutivo la facultad de realizar
35. - Cuando el ejecutivo pide el acuerdo para nombrar como juez JI ulla
Wla serie de nombramientos de cienos funcionarios y agentes, solo o con
L" ('OMI'ETE.'I("J¡\ DEL PllDER r:JECUT1VO 343
342 ('O~l¡>I:..\:I)/O DE OERECHO CONl>,TI1 -(10NAt.

.a2. _ No obstante la cláusuladcl ¡nc. 70 que atribuye al prcsidente la


persona que !lI' t!~tá descmpcíltíndo~e. o qut! lo está ell un cargo di~tinto a aquél para
t!l \,:ual t:l acuen.lp ~~ solicita. entendemos que UllU vez prc~tado ese acuerdo pUl" el '·remover". creemos que ni ésta ni la del art. 100 inc.
S<.!nado, hace falla el nmubramie!lto presidencial para integrar d título completo. de la garantía de "eJ/(Ibilidad del empleado públi-
conLiene el lIn. 14 bis.
36. - El poder ejecu Livo IJOlllbra)' remue\'e con acuerdo del sel/ado
a los embojadore.\, ministros plenipotenciarios y encargados de I/ello- .a3. - El inc. 19 del art. 99 prevé los nombramientos "en comisión".
dos. Para el rcrsonal diplomático, observamos que el acuerdo senatori al la constitución denomina de esa manera: dice que el presidente
es requi si to de desiglloci6n y de remoción conforme al inc. -¡o del arl. 91}. facult ad para llenar las vacantes de los empleos que requieran el
,do. y que ocurmll durante su receso. por medio de "nol11-
ell comisi6n" que expirarán al fin de [a próxima legislalura.
37. - El pockr ejccutivo. a tcnor del ine. 13 del arto 99 provee eOI/
acuerdo del senado los empleos m.ililares en la (..'OncesiÓn úe los emplcos o
44. - s~ nos ocurre qu..: la misma nomm del inc. 19 regula también el caso de
grados de oficialeJ .wlJeriores de las fuerzas armadas. Por sí solo -es de- "",.,,,,,., para cargos "nuevos·' que, por ser de creación recien te, se han de
cir, sin acucrdo del senado, y tamhién sin refrendo de un ministro- Io pue-
de hacer en campo dI! batalla. JU7,gamos inviable. porque implica bloquear la partidpaci6n del senado so
,,,,O de ejerccr la facultad presidencial de efectuar nombramientos en comisión.
El ¡nc. 7° del art. I}I} cslablccc que el prcsidcnle nombra y fl'-
38. - el poder cj ...'Culi\'O deje "cncer el periodo legislalh'o sin solicitar.:l acuerdo. y
mueve por sí sólo al jefc de gabinete y a los ministros del despachu. Pensu- al caducar dicho nombramiento vuelva a realizar olro para la misma persona.
mos que 110 necesita refrendo de otro ministro. Es un acto persol/o!ísilllu. Ildy duda de que, de dars..: este pfO(;edimienlo. el designado permanecerfa en su
u través de sucesh'as renovaciones de su nombramiento, con marginamicnto
intervención senatorial. q ue se hac..: imprescindible para la continuidad O per-
39. - También el ¡ne. rOlorga la facultad presidencial de nombrar y ""~ en la función.
remover a los oficiales de sus secrctarías. a los agentes consu lares. y a los
demás empicados de la administración cuyo nombramientO 110 está regla- "5. _ Si el ejecutivo solicita acu..:rdo a fa \'or de un candidato que no es la
du de otra mal/era por esta COIISÚlllcióII. designada por él ":11 r.:omisión. el scnado tiene plenitud de compe lenci~
ese acuerdo declarando que el cargo 00 eSl:i vacante. Sólo después de
40. - Es con fusa la distribudón que. con la refunlla Je 1994. ha he- . senatorial expresa con res]leCto al mismo funcionario designado en
por el ejecutivo, podr:i el ejecutivo proponer el acuerdo para otra persona.
cho la constitución elllrc e[ presidente y el jefe dc gabinete en materia de
los nombramiclllos aquí analizados. En efecto, el art. 100 inc. 3° dice que
al jefe de gabi nete le corresponde ·'clh:tuar los nomhramientos de los elll-
relaciones con el congreso
picados dI.; la administración, excepto los que correspondall al presiden-
te" .
46. _ Acá vamos a ocupamos solamente de la~ relaciones con el congreso
¿Cuáles le quedan al jefe de gabinete. una vez que en el art. 99 se son puran-.:me "formales", y que no significan aportare! concurso de la \'Olun-
agrupan los que ineumtx:n al presidente? presidencial para la realización de aclOs del congreso
Parecería que solamente [os del personal Qerarquizado y común) dd
47. - El inc. 8" del art. 99 establece que el presidente hace anualmente la
elenco administrativo que, no obstante estar reglados en el inc. r del arl. sesiones del congreso.
99. no parece necesario personalizarlos en el presidente.
48. - El inc. 9" otorga al presidente la facultad de prorrosar las sesiones
41. - I,a ley qUI! requiere el acuerdo senatorial para cargos que por la ordinarias del congreso -que. con);) hemos visto ya, no impide al propio congreso
consti tución no cxigen ese requisi to es ;ncolIsl;lIIciollal. .h'POnerla por sí núsmo (o sea se ¡rata de un fa cultad concllrren/e)-.
344 CO~fPB'DIO DE PERECIIO CONS ti ¡UaONAl LA COMPETESctA DEL PODER EJE.CUT1VO 345

También convoCll a sesiones extmoroinariCls cualldo un grave interés de or- 53. - El. indulto presidencial se lllnita a penas impuestas por tribunalesfede-
den o de progreso lo requiera. Esta sí es una facultadp n"va¡iva del poder ejecutivo. . o sea, no alcanza a [as impuestas por tribunales provinciales.

49. - Según el ¡ne. 18 e l presidente puede il usentarse del país con pernuso 54. - Al igual que el congreso al disponer una anmi Slía, el podcr
del congreso.
actuar éticamente y por notorias razones de equidad cuan-
un indulto.
50. - El arto 99 no habla de la renuncia del prcsidcmc. Pero el ano 75 en su
¡ne. 2 1 prevé cntre las facu ltades del congreso, la de admitir o desechar los "moli -
vos" de su dimisi6n (y de la del vicepresidcmc). La renuncia presidencial es un aC IO
persona/[simo e indclegable. que se cumple sin refrendo minist.:rial - aunq ue la relaciones internacionales
constitu ción tampoco dice nada al respec to--. Pero como la nornm consigna que el
congreso admite o desecha los "motivoll" de la dimisión, pare<.:c que la renuncia 55. - El presidente como jefc del estado asume la represe1l1aciótl
debe ser fimdllda. ' estado como persona jurídica en el ámbito illten/aciona/. Aunque
Si el congreso está en receso, creemos que la re nuncia del presidente configura I dc las facultades cn orden a las relaciones e;w;leriorcs las ejerce en
uno de los casos de grave interés que validan la inmediata con vucatoria a sesio nes con el congreso, el poder ejecutivo conduce esas relaciones .
e;w;trao rd inarias. parece dudoso, pues, que el presidente mOl/opoliza la facultad de vin-
1 con los gobiemos extranjeros,

El indulto El poder ejecutivo, asimismo, reconoce a los estados y gobicmos extranjeros,


según el inc. 11 del MI. 99 también recibe los minislrOs y admite los c6nsules de
51. - El inc. 5° del art. 99 contiene la facultad del indulto y de la . estados e;w;tranjeros.
conmutación. Dice la norma que el presideme puede indultar o conmutar
pellas por delitos sujetos a la jurisdicciól/ federal, previo informe del 56, - El inc. 11 del arto 99 dispone que el presidcnte concluye y
tribunal correspondiente, excepto en los casos de acusación por la cámara tratados. concordatos y oIl-as negociaciones requeridas para el
de diputados, El indulto es conceptuado como el perdón absoluto de la t de buenas relaciones con las organizaciones intemaciona-
pella ya impuesta; y la conmutación, como el cambio de una pena mayor Icf\ y las naciones extranjeras. Según el arto 75 inc. 22 el congreso los
por otra menor, aprueba o los desecha, Cuando el congreso los aprueba, el poderejeculi-
\lO tiene compelellcia para ratificarlos en sede internacional.
No cabe duda de que el indulto no puede concederse ames, sino des-
pués de la comi sión del delito, porque se indulta la "pena " adjudicada al
delito: es menester no sólo la existencia de un proceso, sino la selllenóa J.a intervención federal
finlle imponiendo una pella, porque la pena que se indulta no es la que con
carácter general atribuye la norma penal a un hecho tipi licado como delito, 57. - El ¡nc. 20 del arto 99 faculta al presidente a decretar la interve nción
sino la que un jue-l. ha individuaHzado en una sentencia. aplicándola a un federa l a ulla provincia o a la ciudad de B uenos Aires durante el receso del congre-
reo. !lOO, y 10 debe convocar simu ltáneamente.
Por otra parte, el indulto anticipado viola el derecho de toda persona
-aun procesada- a la presunción de su inocencia hasta ser convicto de de-
lito por sentencia finne de juez competente, El estado de sitio

52, - El indulto es un acto de neta y clara ltaluraleza polftica, y no 58. - El ¡oc. 16 del ano99 prevé la declaració n del estado de sitio pOI' el
-como algunos sosticnen- jurisdiccional. presidente de la repú blica, 1.:on acuerdo del senado. en caso de ataque exterior y
por un término limitado. En caso de conmoción interior, anade la norma, sólo tiene
346

la fa..:ultad de tl<.:darar el cSlad.., de sillo cuando el congreso eStá en receso. porque


es atribución que corresponde a c~lc cuerpo.

La actividad "política" del pf)(ler ejecutivo

59. - Así como vimos nucleado en el centro d..: la competencia del poder
Apéndice al c apítulo XXXIX
..:j,-'Cul ivo el ejercicio de la función 3dministndiv3 como dif..:rcnlc 1.1.: la aclh'idad
política en sentido estricto. ahora debemos dedicar ulla refcr..:ncia a rJicha act ividad
genuinamente política. que da lugar a los "actos políliros", dcnominlldos --cuando
los cumple el /m:údenfC' de la repúh lica- "ac/(Is de gobierno ", CORRELAC ION ENTRE EL ANTERIOR A RTICU LO 86
Son ejemplo de actos de gobierno: a) la iniciativa de las leyes. su rromul~ad6n
Y EL ARTICULO 99 ACTUAL
y ¡;u velO: b) la apertura del período de sesim~s del congreso. su pmn'oga, y la
cUIl\'QCatori .. a scsiollc~ ..:xtraordinarias; e) todos los que hacen a [as n.;laciullcs in-
temaciolllllcs, incluyendo la c(JIlc!usión y ratificación de tratado~: d) todos lus que Artículo 86 Artículo 99
haccn uso de los poderes militares y lIe guerra: e) la declaración de gUClTa y del
estado Uc sitio, y d cjen.:icio de las facultades que durante los mismos se efectúa: f) Inc. 1" Reformado
el mdulto y la cOllJnUlación .. le pcna~: ~) el nombramicnto (y la remoción, en su
caso) de todos los funcionario!' que requieren acuo.'!nJo dd senadú, del jde do.'! gabi- Inc.T' Sill refonl/ar
nete y de los ministros {el de los dcm:is emplo.'!ados de la udnunistración ..:s acto (nc. ~o: lluevo
administra tivo}: h) la expulsión de extr,IIYCros: i) la intervención federal (cuandl.l la
Ine. JO SuprimicJo
dispone el poder ej!!Cutivo). cte.
Inc. 4" Pasa COII reforma a imegrar el ~" 1/lIe1',;

Inc.5° Pasa a ser 4°, reformado


J;,,'/ acto "iI/STiTuciol/al" Ine. 6" Pasa a ser 5°, sin refonuu
60. -
No obstante que. por ahora. mantenemos conn categoría genérica la
Inc. r Pasa a ser 6°, refonlwdo
del "acto político" y den lm de él la dd "ado de gobie nw". nos parece relevante Ine. 8° Suprimido
uceplur dentro de ella un tipo espccírico de ac to que se vincula dirC(;lall"ll:l1!e COl! la Inc. 9" Suprimido
urg(lniZ(lción y .f1fbsi5Iencia del e.fwdo. o ~a, que se locali7a inmedialilmcnte en el
derL'Cho constitucional del poder y traduce relaciones interorganos o imraórgallos Inc. 10 Pasa a ser 7', refonluufo
sin ninguna re laci6n dirc~ta e inmediata con los panicu lares. A ese li po de acto le Inc. II Pasa a ser 8", refonuado
deparamos la denominación as ignad a por Marienhoff. "de acto il/sfilllcional": pero
lo seguinns considernrxlo como una clasc de acto po/(/ICO -el m:is devado, por
lne. 12 Pasa a ser er, sin refomur
cierto, como que af~la a la orguni7'ucióll estatal misma-o Ine. 13 Pasa a ser 10. refomwdo
Se incluye entre los actos institucionales, a los siguie nt es: u) dc(;]ofoción de Inc. 14 Pasa a ser 11 , refonlwdo
gucna: b) celebración de tratados y concordatos, negociaciones con o rganismos
inlemaciunales: c) illlervención federal; d) d~'(:laraci6n de! estado dc sitio: e) lIom-
Ine. 15 Pasa a ser 12. refomwdo
bramicnln de magistrados de la Cone Suprema dc J usticia: 1) ac tos que concretan Lne. 16 Pasa a ser 13. refomwdo
las relaciones del ejecuti\'o con el parlarnenlo -cilación para iniciar el pcríooo ordi- Inc. 17 Pasa a ser 14. refomwdo
nario de Sl.'Siones. pronuga. convocatoria a extraordina ri as, promu lgación y veto de
proy~'Ctos de leyes-, cte. lne. 18 Pasa a ser 15. refonl/ado
3-18 (~O~PID"DTO DE DERECHO COV;TrJl.:ctO~AL

lllc. 19 Pasa a ser 16. si1l refan/U!


lnc.20 Pasa a ser 17. refonl/ado
lile. 21 Pasa a ser 1R. refonl/ado
Ine.22 Pasa a ser 19. refonl/ado
Ine. 20: l/llevo

ARTICULO 99 ACTUAL

lne. 1° Refonuodo (corresponde al anterior ine. 1"


del urt. 86)
lne. 2° Mallliellf d anterior ine. 2" del art. 86
Ine.3° NI/el'o (corresponde parcialmente al alHcrior
ine. 4°dcl art. 86)
Reformado (corresponde al antcrior ine. 5°
del art. 86)
Ine.5° Mallf;el1(! el anlcrior ine. 6° del art. 86
Jne.6° Rt1orll/ado (corresponde al anterior i!le. r
del afl. 86)
Ine. 7" Reformado (corresponde al anterior ine. 10
del afI. 86)
1m:. 8° Reforll/ado (corresponde al alllerior ine. 1I
del afI. 86)
lne. cr Mallfielleel anterior ine. 12 del art. 86
lne. 10 Reformado (corresponde al an:erior ine. 13
del ano 86)
lile. 11 Reformado (corresponde al anterior ine. 14
del Urt. 86)
lne. 12 Reformado (corrcs¡xmde al anterior ine. 15
del Urt. 86)
lne. 13 Reformado (corresponde al anterior ine. 16
del arl. 86)

CO.\11'~.•NDlO DE UERE'HO CO:-;SIl n lOONAL

1m:. 14 Reformado (corresponde al antcrior inc. 17


del art. 86)
Ine. 15 Reformado (corn.:sponde al anterior inc. IR
del arto 86)
lne. J6 Mamielle el amerior inc. 19 del art. 86
lnc. 17 Reformado (corresponde al alllcrior ine. 20
dt:l art. 86) CAPh1JLO XL
Inc. 18 Reformado (corresponde al anterior inc. 21
del art. 86) LOS ORGANOS DEPENDIENTES DEL PODER EJECUT IVO
loco 19 Reforlllado (corresponde al anterior inc. 20
del art. 86) nsonomía genern1
Ine.20 NI/evo
l . - Al ser el poder cjecu ti vll-cooformc. ¡¡ nuestra intcrpretadón- un
11110 unipersol/al qu~ es [X"lrtado únicamente por el presidellfe de la
. ,todo el vasto tejido de competencias, fundones y actividades
ebe cumplir constitucionalmente. oque dependen de él,extiende una
de órganos extrapodcres y de organismos admin ist rativos que hacen
infraestruc.¡ura.
Desde siempre. nuestro derecho const itucional del poder incorporó a
estructura auxiliar del poder ejecuti vo un ministerio. que es 6rgal/o
no integra ninguno de los poderes de la clásica tríada,
que se acopla al ejecuti vo sin fomlar parte de é l.
Actualmente, el panorama ex.hioo cambios. cn buena parte porque la
de 1994 incorporó al jefe de gabinete de millÚtrOJ.


2. - Existe, asimismo, un funcionario --(!l Procurador del Tesoro-
tíene a su cargo el asesoramiento jurídico del presidente.

El jefe de gabinete

3. - Procurando reagrupar sus competencias, en especial a tenor del


arto 100. podemos intent ar una rápidaclasificación:
a) Expedición de lIctos y reg/amemos I/ece.wrios para:
f
a ejercer las facultades que le acuerda el (//1. 100. Y
)
352 Los ÓRGA.....OS DEPENDIENTES DEL PODER EJECl.ITIVQ 353

a") las que le delegue el presideme; todo e llo conforme al inc. 2°; i") en el correspondiente a decretos dicllldos en ejercicio deJaculta-
b) Ejercicio (directo) de las fu nciones y atribuciones que fe delegue defegadas por el congreso al poder ejecúlivo, I.:Ol1forme al inc. 12 en
el presideme, según el inc. 4°; ,Ioc n~(m el art. 76. para control de la Comi sión Bkameral Permanente;
e) Resolución, e n acue rdo de gabinete. sobre mate rias que le indique j) Rej'rwdar los decretos del pcxler ejecutivo:
el poder ejeclIli vo, y j') que prorrogal/ las sesiones ordina rias del congreso, y
c') resolud 6n por decis ión pro pia e n las /IIcllen'as que estime necesa- j") que COIIl'OCllII a sesiol/es exlraordillaria.f. todo ello conforme al
rio IXlf su importanciacll el ámbito de su competencia; todo el lo confomlc 3°;
al inc. 4°;
j"') que regfamellfml leyes, según el inc. 8°;
d) Nombramienlo de e mpleados de la adm inistración, con ex.cepción j'''') queejerwl1facufwdes defegadas ¡xJr d congreso al ¡xxIer ejecu-
de los que correspondan al presidente; según el inc. 12;
e) Coordinación. preparación y convocatori a de las reuniol/es de ga- j ""') que se dictan por razones de lIecesidad y urgellcia. según el inc.
binete de ministros, y
e') presidencia de las mismas en ausencia del presidente; todo ello j'''''') que promulgall J)a rcialmemc tlIwley. según el ¡nc. 13;
conforme al ine. 50;
k) Refre1ldar los mel/sajes del presidente que promuevan la iniciati-
f) Rem isi6n al COl/greso de los proyectos de ley de min is te rios y de . según el ¡nc. 8°.
presupuesto, una vez que se han tratado en acuerdo de gabinctc y han sido
aprobados por el poder ejccutivo; tOOO ello conforme al ¡ne. 6°: 4 . ~ Si examinamos cuál es la situación del jefe de gabinete en la
g) Hacer rccaudar las remO.f del estado y ejecutar la ley dc presupues- interórgalloj' "poder ejecmivo-col/greso". se nos aparece la fa-
tO, según el inc. 7°; de cada cámara para illlerpelar (a efectos de tratar una moción de
h) Concurrir a las sesiones del cOllgreso y participar. sin voto, en sus al jefe de gabinete, y para remove rfo con el voto de la mayoría
debatcs, según el ine. 9°, y de los miembros dc cada W1a de ellas, lodo conforme al art o 10 1.
h') producir los illfon/Jes y explicaciones verbales o escritos que sean
5. - El an o10 I de la constitución obliga -adcmás- al jefe de gabi ne-
solicitados por cualquiera dI.! las cámaras al poder ejeeuti vo, según el me.
11 - a concurrir al congreso al menos una vez por mes. alternati vamente a
- de sus cámaras.
h") prescntar j un LO a Jos demás ministros, al iniciarse las sesiones or-
El objeti vo de esa asistencia consiste en "infomlar" a los legisladores
dinarias del congreso, una memoria detallada del estado de "la nación" en
marcha del gobierno.
cuanto a los negocios de los respectivos departamCnlos, según el inc. 10;
h" ') cOllcurr;rcomo mínimo una vez por mes al congreso. alternati - 6. - Ha de tenerse en cuenta que el mi smo art. 10 I prosigue con un
vamente a cada cámara. para infomwr sobre la marcha del gobierno, con- mce diferente:
forlllC al art. 10 I ;
a) Por el voto de la mayoría absoluta de la totalidad dc miembros de
i) Tomar ifllervellcióf/ en cl procedil1liemo inmedi ato al dictado de de (as cámaras puede illterpefarse al jefe de gabinete; cada
decretos de necesidad y urgencia para someterlos a la Comisión Bicamcral . separadamente de la Otra. inviste esta facultad. que la norma de-
Permaneme. confomle al inc. 13 en relación con el arto99. inc. 3°, y nomina "interpelación". y que ¡xJsec como objetivo el tratamiento de una
i ') en el correspondiente a decretos de promulgación parcial de le- moción de cellsura;
yes. conforme al ine. 13 en relación con el arto80. Y b) Por el voto de la mayoría absoluta de los miembros de cada ul/a de
354 COMI'\iNOIO [)E IJERI::CIIO CONS11TUaONAL Los 6I1.GANO~ DEPf.."rnE~T¡:':; I)Io.L I'ODER EJECllTIVO 355

las cámaras (o sea. d~ amhas) el jefe de gabinete puede ser removido de su dos medi~ntc juicio político (~cu¡;ación por la CiÍmara de diputados y
por e! senado, wnfnrme a los arts. 53 y 59).
cargo; aquí hace falta la coincidencia de las dos cúmaras en la remoci ón,
con el quórum de votos indicado. FJ jefe de gahil/ctc. además, puede ser J'l.'movKlo por el voto dú la mayoría
. de los miembros de cada una de las cámara!> del cong reso (arl. 101 ).

El ministerio
compelellcias y relaciones mil/isleriales
7. - Después de la reforma de 1994, la constitución menciona sepa-
11 . - Frente al podcrtjecfltivo. cuyos actos refrendan. se acentúa el carácter
radamente al jefe de gabinete y a los demás ministros secretarios de esta-
de los ministros. Frente a sus re~pccti\'n~ ministerios. prevalece el aspecto
do, además de establecer para el primero la serie de competencias de los 1
an s. 100 y 10 1, aparte de [as genéricas que para los ministros aparecen en
o/.i",,,,
los >ns. 102, 103, 104 Y 106.
El arl. 103 dispone que no pueden por sí solos, en ningún caso, lomar resolu- i
a excepción dc lo concerniente al régimen económico y administrativo de
."p<C ,t ' De todo ello se deduce que los miniSlnJS, que careo 1
8. - Hahlar del min isterio exige preguntarse si con esa palabra de- para rcglJmentar las leyes, tampoco pueden suplir la ausenda
signamos a la totalidad de los ministros, o a cada uno de ellos separada- I resoluciones.
mente. y nos parece que con el término mt!ntamos las dos cosas: el "COI/-
jumo", y "cada UI/O" de sus componenles. El mini steriu es un órgano de 12. _ El presidente puede hacer "imputación dI! funciones" propias del pod¡,:r
rango constilucional, colegiado y complejo. . a fa \'o\' de los mini stro~, siempre que no transfiera las gUl! ~JI1 de carácter
Como órga/Jo colegimlo y complejo. el ministerio actúa junto al po-
der ejecutivo-presidentc de la república- en dos tipos dc relaciones: 13. - El un. 102 dispone que cada ministro e,~ f'C'spnnslfble de los actos que
a) mediante el refrendo, que puede ser múltiple , o no: hay ahora nor- y $olidan'lflllente de los que acuenl;l con sus colegas.
mas que prevén cl del jefe de gabincle (por ej., arto 100, incs. SO y 12), Y
• otras el de éste en conjunlo con los demás mini stros (art. 100, ine. 13); 14. - El jefe de gabinete no puede desempeñar a la vez otro ministerio (an.
. Los ministros no pueden ser S\!nadoNs ni diputados sin hacer d lllúsión
b) mt.-'diante las TFul/iol/es de gabil/ete, ahora también previstas en el
IUS cargos (art. 105).
art . 100 ¡nc. 4°, que fucron práctica conSlitucional cuando, antes de la re-
forma de 1994. no contaban con norma expresa, y que también se han 15. - Acerca de las relaciones del ministerio con e l congreso la constitución
denominad.o "acuerdo de ministros" o "aeu.erdo de gubinele ". [teS fu ndamentales: al IIr/llwlllienlo de uno o ... arios ministros por cada cúma·
También cada mil/iSlro por s( liene calidad de 6rgal/o. tanto como ." q" conCU1Tall a su saja, a efectos de proporcionar explicacionc~ l! informes
jefe de su ministerio como en su relación personal con el poder ejecutivo. 71); b ) CO/lCllrrencia espol/fúnea de los ministros a las sesiones del congn::SI'J,
participación en los debates pero sin \'oto (arl. 106): c) presentación obligatoria
El jefe de gabil/ele ostenta, asimismo, la naturaleza de 6rgall0. cada ministro de una memoria detalluda del estado del país e n 10 relativo a los
de su departamento, luego que e l congreso abre alluiLImenlc sus sesiones
9. - La reforma de 1994 prescribe en su art. 100 que elllúmero y la 104). I
competencia de los ministros serán establecidos por una ley especial.
La ley de ministerios es, por su naturaleza o contenido, una ley de 16. - a) Cuando el jefe de gabinete o un núnislrO se encuentran cn cl seno de
carácter materialmente constitucional. del congreso, sea por asistencia espon tánea, sea por llamanúcnto de la
mi ma, gozan trans ilOriamc1l1e de las inmunidades y de los privifegi(J.~ que I~ cons-
titución depara a los dipulados y a los senadores.
10. - Tanto ~I
jefe ue gabinete como los demás ministros son lIombmdos J
removidos poreJ presidente (arl. 99 inc. 'JO). Todos son. asimismo, susceptibles dt! b) La circunstancia de que puedan ser pasibles dt! juicio político significa q ue

,

356 COMPI::NOIO DE DERECHO C()i';S l [1 UCJONAL

mient ras no quedan destitUIdos por fallo senatorial 110 pueden ser )ul,gados crinli·
Ilalmenlc.
e) Según el arto 107 tal' ministros gozan por sus servicios de un sueldo estable-
cido por la ley. que no puede aumentarse ni disminu irse en ravaro perjuicio de los
que se hallan en ejercicio.

17 . - El arto lOO habla de "ministros secn:larios", los que en lenguaje de la


constitución forma l pl-Tmile que a los minislros se les llame tamhién "secretarios", CArtruLO XLI
No obstante, el vocabulario se ha habituado, más bien, a reservar el nombre de
"secreta rio" de estado para los funcionarios que están a cargo de una "secretaría
EL PODER MlLITAR
de estado", que 110 tiene naturale za ministerial.
Las secretarías y sub-secretarías no tienen ni pueden tener rango de ministe-
rios, ni quienes las ocupan pueden equ ipararse a los ministros prc\'istos en la cons-
titución.
tuerzas armadas

l . _ Doctrinariamente, se plantea Ulla interesante cuestión en torno de la cual


18. ~ Discrepa la doctrina aCerca de la relación enlrc el jefe d.: gabinete y el
partido: o las fuen.as armadas son "órga"os eSllltales", o son me ramente
resto de los ministros. Un sector le reconoce al primero UIUJ preeminencia jeflírq/fi-
ca sobre los otros, en tanlO otro sector la niega. ;rl,,, muiliares del estado" si" cC/li(úld de órganos. Lajefatura que la constitu-
atribu ye al pode r ejecJlfil'o sobre las fuerzas armadas paree!; incardinar a éstas
r1mbilO de tos órganos estatales dependientes del presidente de la república, y
más probable es que, reconocida la naturaleza de "órganos castrenses", éstos
Otros organismos en el ru bro de los órganos "exlrapoderes".

19. ~ Con jerarquía distinta a los ministerios, puede haber y hay o tros órga-
nos depcndiellte.~ del poder ejecutivo, de creación y origen infraeonstitucional.
" defensa nacional" y la ''seguridad interior"
El poder ejl'Culi l'O tiene competencia para crear órganos dependientes con
fines de asistencia o asesoramiento técnico-administrativo para todas las cuestiones 2. _ La legislación argentina ha distinguido la "defensa nacional" en sentido
propias de su competencia, o afines con ella, y para establecer los que integran el y la "seguridad interior", asignando la primera a las fue rzas armadas, y la
organigrama de la administración pública de la qU!; •.$ titular, inclusive erigiendo a las fuenas policiales y de seguridad.
entidades autárquicas.
3. _ A nuestro juicio debe quedar en claro que ninguna ley puede inhibir o
rtlo!noscabar laje/mura presidencial sobre las fnenas annadas, que otorga compe-
lencia al poder ejecutivo para recunir a cUas y disponer su intervención razonable
en resguardo tanto de la llamada t!cÍt;nsa nacional cuanto de la seguridad inlerna
, uande existe grave perturbación de ambas, imposible de superar por otros medios
regulares. Tal competencia existe con ley o sin ley, y ni nguna ley puede impedir su
ejercicio, porque provie ne directame nte de la constitución.

Los "poderes militares" del congreso

4. - Ha de entenderse que el congreso dispone de los llamados "po-



EL PO\)EJt MlLrTAR 359
358

deres militares" que la conslitución le asigna, pero que los mismos no se armadas: es una jurisdicción creada por ley. en cumplimiento de
constitucionales, para establecer la constitución, organiza-
superponen, ni reemplazan a la jefatura que sobre las fucrl.a$ armadas
titulariza el presidente de la república, la cual jefatura tampoco queda COIll- y procedimienlo de los tribunaJes militares.
partida en modo alguno con el congreso.
9. _ El aO. 75 ine. 27 conficre al congreso la facultad de dictar 1I0r-
Se puede decir que en lo orgal/iZlIc;ol/al la competencia es del con- "/Jara " fa I Y el gobiemo de las fuerzas arnwdns (ley
greso. yen 10 operacional es del poder ejecutivo . militar").
idea delfin. Que la ley ha de tener eseji" significa. a los
5. - En orden a los poderes militares. el inc. 25 del arto75 reconoce
al congreso la competencia para autori zar al JXlder cjccutivo a di'clarar fa nueSlro lema. que solamellle puede instiluir el fuero mililar como
real "para " tutelar biel/es jurídiCOS de específica y estncIa I/atu ·
guerra o hacer la paz.
militar.
6. - El ¡ne. 27 del arto 75 pone a cargo del congreso fijar !asJuertas
Si se extiende la jurisdicción militar más allá de esa finalidad precisa, el ''ptus''
anllo(/as en tiempo de paz y de guerra ydictar las I/onnas para su orgal/i-
,"" un fuero "¡>I:rsonal" opuesto a la constitución, y no un fucro real.
znciÓfI y gobierno.
Por ende, para recon()l,;cn:arácter constitucio nal de fuen}n:al a la ~urisdicci,ó n
El lnc. 28 le otorga permitir la il/troducción de tropas eXlra"jerm en los hechos q ue juzga sean infracciones a la ley nutHar que n gc
ellcrritorin de la nación, y la salida de fuerzas "aci ol/ales fu era de él. fuerzas armadas, porque lo esencial y decisivo es que esa ley militar que san·
infracciones incluya en su categoría línica/llcnle a los hechos q/le nml y e.f·
dañml a la 0'8(1ni Zllci6n Cl/strellSt', lfmite que no So;! guarda cuando
La jurisdicció1/ militar ej .- se ¡;:alifican wmo ilúracciom..'S militares a delitos comunes que, aunque
ser conexos con el servicio castrellse, perte necen al campo general del deN-
común, Para nosotros, delitos I/Iililllres son los que dañan bienes juódi·
7. - Una ardua cuestión se plantea en tomo de la Ilamada jurisdic- institución armada, y nada más,
ció" militar como Juero real o de causa.
En línea general se ha dicho siempre que la abolición y la prohibición 10. _ A nuestro criterio, el código de justicia mi litares Ulla ley de naturalelll
constitucional de losJueros persol/oles no arrasan la posible subsistencia Si en vez. de cre;lf tribu nales militares el congreso atribuyera competencia
del fuero militar como Juero •. real ". "de 1Il1l1eria ". o "de causa" (que no " delitos militares al poder judicial, lendña que asignarla a ¡ribun(lles
ha sido suprimido), cuyo fundamento radica en l al/afuraleza de los actos
(y no de sus autores) que sirven de base a los procesos ante la justicia
militar. 11. - En suma, cabe decir que los tribunales militares son órganos
ere's". que 110 imegnlll el poder judicial, lIi tampoco dependen
8. - Nos parece necesario deslindar dos ámbitos: a) la jurisdicción poder ejecutivo.
milit~ meramente discI/J/inaria; b) la jurisdicción miliIar IJenal. La pri- Con tal característica. no hallamos óbice en decir que son tribunales
mera es, sin lugar a dudas, propia y privativa del presidente de la república de la comtiluci6" y "jueces naturales" (bien que fu era del poder judicial).
como comandante en jefe de las fuerza.<¡ armadas. La segunda. 110, porque
se trata de una "jurisdicción especial" - aJ margen del poder judicial- pero 12, - A panir de la reforma al código militar p?r la ley2~,04~ yde la
al margen también del pOOer de mando militar del presidcmc. nueva jurisprudcnciade la Corte, desde 1984 la vahdez conslltucl.onal ~e
La jurisdicción militar "no disciplinaria" -{) sea. la pellal- está a car- las leyes quc organizan los tribunales castrense.s depende de la ~ xlst enC!3
go de tribU/Jales militares, y em(lIlO de la Jacultad cOl/gresional -y no de revisión judicial suficiente de los pronunc13nucntos ~ue dl~I~: ,s us
presidencial- de dictar nonnas para la organización y el gobierno de las sentencias han de ser susceptibles de un recurso ante un mbwlal JudiCial.
360 COMPENDIO DE DEREcno CONS1TTUCONAl EL PODER MlUTAR 361

Los " poderes militares" del presidente ; se agravia el derecho a la jurisdicción del justiciable, en cuanto al so-
a los trihunales mililares se le cercena el acceso alas trihunales deJ
13. - El presidente es cOlllandame elljefe de todas las fuerzas arma- judicial.
das (inc. 12 del ano 99). Dispone de ellas y corre con su organización y
distribución según las necesidades de la nación, dice el ine. 14. Declara la
guerra y ordena represalias con autorización y aprobación del congreso deber militar de los civiles
(an.99 ine. 15).
18. - El art. 21 de la constitución dice que "todo c iudadano" está obligado a
De estas prerrogativas dimana una masa de atribuciones que se cono- """ de la patria y de la misma constituc iÓn, conforme a las leyes del
ce con el nombre de poderes militares y poderes de guerra. y a los decretos del poder ejecutivo.
No inferimos de esta norllla que el congreso esté obligado a implantar el servi-
14. - Además cOllviene resaltar la facullad que COIlD comandante cnjcfe asiste
militar coactivo . De hecho. durante un período suflCientemenle targo ti partir de
al presidente para ejercer el poder disciplinario en el ámbito del órgano castrense.
• ",o,t no existió ley en tal sentido. Tampoco existe en la actualidad (ley
La sanciones aplicadas disciplinariamente no deben eximirse de revisiónjudi- . Siempre fuimos propensos a abolir el servicio obligatorio.
cía!, pero sólo han de "deS<.:alificarse" judicialmente cuando exhiben arbitrariedad
manifiesta

15. - No c abe duda de que los actos presidenciales q ue, tanto en tiempo de
paz conlJ de guerra, traducen el ejercicio de los llamados poderes militares y de
gUClTa, son --como principio- de naturaleza polftica.

La jurisdicción militar y los civiles

16. - El derecho judicial de la Corte Suprema ha admitido entre 1976


y 1983 el someti miento de civiles a los tribunales militares.
Una fónllula bastante estereotipada en el derecho judicial que comen-
larnos tiene dicho que, suscitada una situación de emergencia, l/ose mues-
1m illcompmible ca" la cot/slüucióll la regla excepcional que sujeta a
los civiles a juzgamiemo por fas tribunales milirares.

17. - Nosotros entendemos que la sujeción de civiles a los tribuna-


les militares siempre es inconstitucional, aunque haya emergencia. Los
argumentos acumulados son varios: la jurisdicción castrense como fuero
real es de excepción, y jamás puede alcanzar a quienes carecen de estado
militar (como son los civiles); implica una "comisión especial" prohibida
por el arto 18, Yuna sustracción de los justiciables (civiles) a sus jueces
naturales (que son los del poder judicial); significa violar la división de
poderes, precisamente por inhibir lajurisdicción y competencia de los tri-
bunales civiles en las causas penales que se asignan a la jurisdicción mili-
CAf>fn.ILO XLII

LOS NUEVOS ORGANOS DE CONTROL "EXTRAl'ODERES"

Jnt rod ucción

1. - Lti re forma constitucional de 1994 incorporó allexlo algunos


mlel'OS COlllroles que no estaban incluidos en la cons titución histórka.
Acá hemos de limitamos :J explicar los dos órganos que el constitu yente
ubh:ó en el sector dedicado al congreso. bien que pcrsonalml!llIe no los
colocamos "dentro" de él sino que los caracterizamos como órg:ll1os {'.l"
¡,.I/poderes.
Se trata de la AlidiLOría Cen('ral de la Nació" y del Def ensor (Iel
Pueblo.
No dudamos que, con d los. el Millis¡en'o Público compone una trilogía
instilucional novedosa. pero al Mini sterio Público lo eSludian:lllos con el
poder judicial.

La Auditor i:, General de la Nació n

2. - La Audit oría es defin ida como órgano de asiJtel/cin técnica del


congreso, COI1 aUlol1 omía ful/ciol/al. La locución "autonomía funcional"
se emplt:a también para caracterizar al Defensor del Pueblo en el ano 86, y
al Ministerio Público en el ano 120.
En orden a la Auditoría. el senlido de la autonomía se adscribe al
ejercicio de la función que k: incumbe. ya que la nonna dire "au tonomía
¡I//Idolla"'. como para prohibir toda interferencia - así sea del congrcso al
cual aquel organismo asiste técnicamente-o Por eso decimos que es un
órgano eXlrapode,.eJ .

••
364 COMPENDIO DE DERECHO CON),1'ffiJOOl\'AL Los ~""'EvOS ÓRGANOS llE COl'l'TROL "EXTNAI'OOF.RES
. 365

3. - El an. 85 dice: ya la "admillislraCfón pub~lca. centra!zad a y descentraJiza-


. •• l' ( ]'

"El cOl/frol externo del sector público I/acional en sus as¡x:ctos pa- ticlra sea su modalidad orgall1zau va). ,
trimoniales. económicos, linanderos y operativos. será una atribución del El adjetivo "nacional" a continuación de "sector público" eqUivale.
poder legislcltú'o. lenguaje personal. a fedemL y federal es t~to el congreso~
er e ·et.'Utivo. como el poder j udicial, más lo~ ~rgru~os e,xtr,apo
El examen y la opinión del poder legislati vo sobre el desempeño y
situación general de la administración pública es/aro" susrelltat!os en los
Ge~raJc gabi nete. Defensoría del Pueblo. y Mm!steno Púbhco).
dictámenes de /a Auditoría Ge1leral de la Nación De ser así no qucda para nada claro si el control s~ ha de explayar a
esos ámbitos con el alcance y las finaJ idades previstos cn.el. arto 85.
Este organismo de asistencia técnica del congreso, con aulol/omía
fU1Icional, se integrará del modo que establezca la ley que reglamenta su "Administración pública", en cambio. admitiría circunscnb!r ~u ~s;
creación y funcionamiento, que deberá ser aprobada por mayoría absoluta do al de laque típicamentc se ticne como tal: osea. a la que ~epen, :d~
de los miembros de cada cámara. El presidente del organismo será desig- . . con lo que ya no habría sitio para controlar a act!VI
nado a propuesta del partido pOlítico de oposición con mayor número de o de administración en las esferas del congreso y dcl poder
legisladores en el congreso.
Tendrá a su cargo el colltrol de legalidad, gestión y auditoría de tO' Un. parámetro bastante razona bl e serra eI que diera por cierto
'd dque en
da la actividad de la administraciól/ pública centralizada y deS<.:cntrali. órgano de poder, en todo órgano ex~rapoderes, ,en .Ioda ent! :trola~~
zada cualquiera fuera su modalidad de organización. y las demás fUl/cio, ni federal - que recibe o malleJa foudos publlcos. el c~ ,.
Y el de la Auditoría tendría materia suficiente para su CJerCICIO.
nes que la ley le olorgue. Intervendrá necesariamente en el trámile de apro-
bación o rechazo de las cuentas de percepción e inversión de los fondos 11 .
·de dci arasalvoquchaydol.":lnnaCOn for~alacualcJan.85e.r;;· .
públicos." 6
. - - enXJs ".. """,l ' d' . 1 d' los I.":ontroles en él preVistos,
clll 'e al propio poder IcgHdatlvo y 1I1¡"""cr JU ¡cm e ",'

4. - Si se presla debida atención al arto 85 queda la impresión ciena


) No obstante. cuando el ámbito de conlfoll~ma ~n cucnta.~ta~:~ ~"~:l~~~
'ó 'b!' "1 doctnnaVlenecnseuallUU..,_
de que dMde el/ dos el ámbito de competencias de la Auditoría: b
blico" como la "administracl n ~~ ~ca a la adminis/ mci6n pública en Sil lolali-
por la Auditoría recae con amp Itu so re 'd de 11 las que hay
a) por un lado, la asistel/cia técnica del congreso; J-d así como respecto de entes autárquicos. empresas y cnu a s e 'b1' 0'
"" ,
participación . . o a Ias qu e e'1 estado aporta fondos pu le .
estatal significativa
b) por el otro, el COntrol de legalidad. gestión y auditoría en el ámbi.
10 demarcado por el párrafo tercero del arto 85. e ree ,,"" que no e\'aden dicho controlbl'las entidades privadas que. por causa
de la dcsreguladón, prestan servicios al pú ICO .
En el primer caso, la Auditoría dictamina; en el segundo. calUro/a.
. '- (au t6nomas por el ."
art '.75, ille.
A ambos aspectos, la ley reglamentaria puede OIiadir otros, porque el 7. - En ...''anto a las IInil'ersid(/des nlIc/Onolt'S
b T d rden a la aull1lillS
(
ra-
' la Auditoría solan~nte ~ueda ha 1 Ita o en.o
19) el control de
arto85 así lo tiene previsto.
,'00 que efectúan de los recursos que denvlln del tesoro nacIOnal. .
La obligatoriedad que se le impone al congreso de sUSlentar su exa. ¡ 'bl d l Auditoría en relación
men y opinión en los dictámenes de la Auditoría surge imperativa y Por ana~og~a de raz.ollam~:~\:o. 1~~~:Ola ~s~;ci~n ~ue coparticipan en la
con las prol'tnCWS parece tanllJten l a . Q

operarivamef/te de la constitución, al igual que la funci ón de control que le distribución de contribuciones conforme al arl. 75 I1\C. 2 ,
imputa a la Auditorfa como competencia propia,

5. - El arto 85 no ha perfilado con nitidez la lotalidad de las áreas a El Defensor del Pueblo
las que coloca bajo control del congreso y de la Auditoría; el vocabulario
utilizado en los distintos párrafos de la norma apunta al "sector público 8, - El an o86 ha creado la Defensoría del Pueblo. Dice así:
CO:\lli'E.''DIO I)r. DI.:.RECm) (:O:\Sml ¡aONA •. Los NlIEVOS ÓRG",,"OS llI' CO:--TROl. "'EXTRAPOOllt ES" 367

"EI Defensor del Pueblo es un órgal/o ifldependieme instituido en el ~n ninguna de sus I.:ompetencias posee facuhadcs de decisión con ns-
ál,llbito d~1 con.g~cs~ de la nación. que actuará con plena oUlol/omía fUI/- vinculante y efectos obligatorios.
clOnal. reCIbir /1/s1rucciolles de ninguna allloridad. Su misión es la
5/11
(~efefl.~a y prO/ecciól/ de los dl'rechos humal/os y demás defC('hos, garan- 11. - Hemos de alabar que el arl. 86 confiera alUcfensor la legitr-
tlas e Intereses Melados en esta const itución. y las leyes. wUe hechos. ac- ,ciL en lodo cuanto hace a las cuestiones de su competencia.
t~S u omisi~n~s de la administración: y d co1ltrol del ejercicio de [as fun - En correspondencia con el ano 86. el art. 43 también se la confiere
ciones admllllstrati vas públicas. ora promover la acción de amparo prevista en su segullllo párrafo.
El. Defensor del Pueblo tielle legitimaciólI procesal. Es designado y De ahí que:
rc~lovldo por el congreso con el VOto de las dos terceras partes de los a) la legitimación del Defensor del Pueblo se entienda como extendi-
mu.:mbros presentes de cada una de las cámaras. Goza de las inmunidades a toda clase de procesos judiciales. incluso para plamear mediante el
y privilegios de los legisladores. Durará en su cargo cinco años. pudiendo ec'un;o extraordinario una cuestión constitucional a efectos de su resolu-
ser nuevamente designado por una sola vez. por la Cone Suprema:
La organización yel funcionamiento de esta inst il ución serán regu la- b) similar legitimación lo habilita para acudir a il/sIal/cias admil/is·
~.~~ale~" - IrlItiwlS e intervenir en ellas a efect.os de plantear pretensiones en defensa
El Defensor del Pueblo reviste naturaleza de órgal/o e.l"Impoderes. El de derechos e intereses. de modo equivalente a como lo puede hacer ante
ar!. 86 lo ha creado CO IllO órgano if/dependiellle. con piel/a aUlOnomía los tribunales judiciales:
funcional. y exel/lo de recibir i1/Jlrucciol/es de ninguna aUlolidad. Por e) en ambas esferas -judicial y administraliva- no es menester que:
ende. la ubicación nonnativa congresional no implica que forme parte del c') actúe (X1r denuncia o requerimiento de parte interesada: c") si aClúa en
congreso, y muCho mellos que guarde dependencia res pecIo de él. virtud de una denuncia o un requerimiento de particulares, tampoco éstos
han de ser necesariamente los titulares del derecho o del interés por los que
. 9. - La compclencia central eSlá definida constitucionaImelllc, y mil- se recaba la intervención del Ocfcnsordcl Pueblo;
Slste en la defensa y protección de los duechos humanos y de los demás d) en cuanlOa la acción pública en nI(l/erü¡ pellal. pensamos que tie·
derechos, garantías e illtereses tutelados por la COIIStitució" y las leres, ne legilimación suficiente para incoarla, sin necesidad de hacerlo a través
ante hechos, actos u omisiones de la administración. . del Ministerio Público.

. EH ~l párrafo no apare¡;e la mendón de dCfI:(.:hos emergenle~ de los tmlados 12. - El control en sentido lato que el arto 86 confía al Defcnsor del
/IJ:enJaclOnaleJ: re~o Ull3 inlclllfetación amplin nos hace entender que cuatquier I~blo para laprotecciólI de los derechos y sobre el ejercicio de las "fun-
d..,recho, garJntla u mlcres que surgen de un tratado incorporado al derecho argenti- d ones admil/istrativas públicas" abre un espacio amplio.
no - aun cuando C¡¡rC7.ca de rango constilucional- provoca la competencia del De-
El área tutelada se enmarca en la actividad -¡x>r hechos. acciones u
fensor en caso de padt.>cer las violaciones que especifica la non na.
omisiones- de la administraciól/. Damos ¡x>r cierto que alude a la admi·
nistración pública --<.:eotralizada Odescentralizada- que el arto 100 ¡ne. 10
10. - Si hubiéramos de agruparsintélicamellle las competencias del hace depender en su ejercicio del jefe de gabinete de ministros, y que el arto
Defensor del Pueblo en una sola funci ón, diríamos que ésta I.:onsistc en 99 inc. 10 coloca bajo la responsabilidad política del presidente de la repú-
fiscaliUlr, eDil/rolar y proteger todo cuanto queda incluido cn el ámbito blica.
que el arlo 86 coloca bajo su órbita. En todo este conjunto de posibilidades
No dudamos de que también la actividad del cOllgreso. en cuanto se
damos por cieno que su acción 00 se debe limitar a los actos u omisiones
despliega en el ámbito administrativo. queda sometida a la competencia
ya consumados, silw que ha de tener a la vez carácter pre\·l'lItivo.
del Defensor del Pueblo.
368 COMI'E/>.'T)!O DE DERECHO CO:>O"S'lrruaoNAL

13. -Quizás el mayor punto de conflicto radica en relación con el


poder judicial, porqu~ sabemos que aWl cuando su función cenlJal es ad-
ministrar justicia. también despliega función administrativa.
Por un lado. la indepcndenciadel JXldcr judicial parecería inhibir todo
control del Defensor del Pueblo en el área de administración de dicho
poder, incluida la del Consejo de la Magistratura. Por otro lado. si a la
expresión "funciones administrativas públicas" que utiliza el arlo 86 se la
interpretara holgadamente. la objeción alcanzaría a disiparse. aunque sin
eliminar totalmente la duda. CAI'fruLO XLIII

En el caso "Prfas Molina, Nélida c/1nstituto Nacional de Previsión Soda''', EL PODER JUDICIAL
del 12 de setiembre de 1996. la Corte Suprema negó legitimaci6n al Defensor del
Pueblo para ser tenido como parte en los juicios que se hallaban pendientes ante el ,
tribullal por reclall'(Js de actualización de haberes de jubilación y pensión. estrllctllra y carácter
14. - Fuera de la estricta función defensiva de los derechos, la insti· l. - El llamado "poder judicial" se compone de una serie de órganos
tución del Defensordel Pueblo tiene a su cargo. por imperio del mi smo arto [orulan pane del gobierno federal y que ejercen una función del poder
86. el control del ejercicio de lasfullciones adminLnrativas públicas. Este estado, cual es la denominada "ad minisLración de justicia", "jurisdic·
control verifica si el ejercicio de las funciones administrativas presenta o o "función jurisdiccional". A ello se afiade ahora el Consejo de la
no irregularidades, aun cuando /la irroguen violación a los derechos o no el jurado de enjuiciamiento.
se proyecten a ellos.
Lo!> 6rganos del poder judicial que genéricamente llallLllllOS "tribunales de
15. - Por úhimo dehcmos decir que el Defensor del Pueblo, como • son los jueces naturales deparados a los habilantes por el art. 18 de la
6rgal/o federal de colltrol. circunscribe su competencia al espacio exclu- "''';",c;6" Así como desde la parte Ofgúnica visualizamos a la administración
sivamentefederal. o sea, a las violaciones de autoría federal y a la fi scali· en cuanlo fimcwn del poder. desde la parte dogmática descubrimos que
zación de las funciones adminislrativas públicas de a1cance federal. Si lo "",he de los habitantes a acudir en demanda de esa administración de ju¡ticia
el derecho a la jurisdiccwn. Las (X'Tsonas y entes colectivos en cuanto
enunciamos negalivameme. queda claro que no puede intervenir en la zona
que es propia de las provincias.
"""de", acceso al poder judicial se denominan ·~usliciables".

2. - En primer lugar, conviene advertir que el poder judicial se COfll-


de varios órganos. Jlleces y tribunales de múltiples instancias, más
Consejo de la y el jurado de enjuiciamienlO, integran
órgano máximo y supremo, que
reza del poder judicial: la Corte Suprema. A estos órganos, bien que
el gobierno y lienen a su cargo una función del poder, se los
on,¡id<"a"no políticos", por la diferencia que acusan en relación con el
órgano ejecutivo y con el congreso. Se habla también, por eso, de imiepen·
dencin. del poder judicial.
Pero el poder judicial, que integra el gobierno federal , también es un
"poder político" porque <!jerce una función del estado.
370 CO~PENDlO DE DERECHO CONSTlTl.'CION .... L EL PODER JUDlCt .... L ::m
3. - Sería difícil agotar en una enumeración todos los mecanismos 1) Establecimiento directo e inmediato de: a) ulla Corte Suprema; b)
de organización que. sustrayendo a los órganos judiciales de ataduras a lo demás. queda derivado a la ley, que puede dividir
otros órganos y sujetos de la acción política. asientan la imlepel/dellcl(l ud instancias: e) un C01lsejo de la Magistrmum y wljurado de enjuicia-
poder judicial. (,ns. 108. 75 ine. 20. 114. 115 Y 116).
a) En primer lugar. el derecho constilUcional del poder ha ordenado 2) Establecimiento de los tribunales creados por la constitución --o
los órganos judiciales en forma pemwnellle mediante el establecim iento ley conforme a ella- con calidad dejueces T/murales, y abolición de
de los lIibunalcs de justicia y la eliminación de los tribunales de excepción. ICS. comisiones de la misma índole. etc. (art. 18). Tarn-
especiales o ad-hoc. A esos lfibunales preestablecidos se los denomina de losflleros personales (o sea, del privilegio de ser juzga-
"jueces naturales". status personal-cclcsiástico. militar, uni vcrsitario-- por jueces
b) En segundo lugar, el estado reivilldica para sí enforlllo privM;vo (arl. 16).
la función de administrar justicia. Está abolida la justicia privada. porque 3) Prohibición de que el pre.~idenre de la república ejer.,afunciones
hay interés público y legítimo en que los individuos resuelvan sus conflic- . !'e arrogue el conocimiento de causas pendientes o restablezca
lOS y pretcnsiones dentro de la esfera del poder estatal.
fenecidas (an. 1(9). La prohihición rige también durante el estado de
(art. 23).
Por just1cia "privada" hay qUI! I!mcnder la justicia por mano propia que cada
UllO se hace a sí mismo en sus connictoscon otro, pero no las solucioncs altemali- 4) Fijación por la propia constitución de las condiciofles para ser lIIiem-
vas al proceso judicial que. de no estar compromctido el orden público. son válidas de la Cone Suprema de Justicia (art. 111 ). y previsión de su presidel/-
cuando las partcs en connicto resuelven, de comón acuerdo y con pleno conscnti- (arts. 59 y 11 2).
miento, pactar en pie do; igualdad un mecanismo sustitutivo del proceso judicial,
5) Previsión del ~'isteflla de designaciól/ de los jueces de la Cortc por
como puede st:r d sometimiento a arbitraje: la ley puede también. ra zonable1l'lCnll:.
implalllat la e tapa de mediación como previa al proceso judicial. le,,' . t del scnado, yde los demásjucces inferiores
poder ejccuti va con acuerdo del senado en base a una tema propues-
e) En tercer lugar, la función de administrar justicia en forma pri vati- r el Consejo de la Magistratura (an. 99 ine. 4").
va, que se asigna a los órganos judiciales, excluye también totalmente su 6) Incompatibilidad: Los jueces de las cortes federa les no pueden serlo
arrogación y ejercicio por el órg(ll/o ejecutivo y por el órgano legislativo. mismo tiempo de los tribunales de provincia (art. 34).
d) En cuarto lugar. no se admiten ni son constitucionales las il/fluen- 7) Juramellfo de los miembros de la Corle SlIprema (art. 11 2).
cias o presiones extemas. ni las instrucciones acerca del modo de ejercer 8) Competencia del poder judicial de la nación (an. 116), con reserva
la función. Sólo la constitución y las leyes imponen obligaciones a los lasjurisdicciol/es locales (art. 75 ¡ne. 12).
JUeces.
9) Competel/cia originaria y exclusiva de la Corte Suprelfra (art.
e) En quinto lugar. el juez -tanto de jurisdicción federal como I<x:al- 17).
tiene estabilidad cn su cargo: ello quiere decir que es inamovible -si no
siempre vilaliciamente, sí durante el período para el cual ha sido designa- 10) Competencia de la Corte Suprema para dictar su reglamento inte-
do--. De este modo, la destitución sólo procede a titulo de excepción y de y nombrar lodos sus empleados subalternos (an. 11 3).
acuerdo a un procedimiento también especial -por ej.: enjuiciamiento--. 11 ) II/amovilidad de los jueces mient ras dura su buena conducta (an.
O En sexto lugar. el ejercicio de la función judicial apareja il/compati- 10), y remoción de los de la Corte por juicio político (arts. 53, 59 y 60). y
bilidades casi totales con toda otra actividad. los demás por un jurado de enjuiciamiento (art. 115).
12) Remuneración de los jueces. determinada por ley. quc no puede
4. - Nuestro derecho constitucional del poder contiene pocas nor- disminuirse en forma algwla mientras permanecen en sus funciones (an .
mas cn la constitución formal sobre el poder judicial. ElJas son: 110).
372 COMPENDIO DE DER ECHO CONSI nUaONAL EL PODER JUDIOAl 373

13) Establecimiento por ley del juicio por jurados (arls. 24 y 75 ¡ne. lrOl constilucional, cumple para lulelar los derechos y garanúas persona-
12) y conclusión (después de establecida la instimción) de todos los jui- les.
cios criminales ordinarios por jurados (arl. 118). Así, cabe recordar que la Cone:
14) Adminisrraci6/1 de recursos y ejecución del presupuesto por el a) da desarrollo a la doclril/a constituciol/al en diversos campos, a
Consejo de la MagislIalura(arl. 114). medida que sus sentencias despliegan la i!lterpretacióll y la aplicación de
15) Previsión de la existencia de un poder judicial local en la ciudad la constitución;
de DI/eflos Ain>s (art. 129).
b) ejerce en instancia última el comrol judicial de COllstituciOlWli·
dad. incluso cuando el derecho provincial discrepa con la constilución;
La Corte Suprema de Justicia e) aClÚa como custodio del sistema de derechos;
d) vigila que los tratados ¡lIten/aciO/rates /la se violen, ni por acción
5. - La constitución ha establecido ulla Cone Suprema de Jusricia, ni por omisión, para resguardar la responsabilidad internacional del esta-
cuya composición no fija directamente. Ello es competencia legal. Pero sí do;
fija las condiciones para ser miembro de ella: a) ser aoogado de la nación e) integra los vados lIormativos de la constitución y del derecho in-
con ocho rulos de ejercicio; b) tener las calidades requeridas para ser sena- fraoonstitucional, y confiere desarrollo y c01l1ellidos a las normas que,
dor. Estos requisitos del art. III no pueden, a nuestro criterio. ser amplia- por su generalidad y apertura, requieren irse completandu;
dos -pero tampoco restringidos-por ley.
f) controla la correcta aplicación del derecho, especial mente cuando
6. - La Corte es el órgano supremo y máximo del poder judicial. Es 8C hace cargo de las sentencias arbitrarias dictadas por tribunales inferio-
titular o cabeza de ese poder, como el presidente lo es del ejecutivo. y el res -sean federales o locales- .
congreso del legislativo. S610 que mientras el ejtXutivo es unipersonal o
monocrático, y el congreso es órgano complejo, la Corte es: a) órgano co- 9. - Asimismo, la Corte ha invocado y ejercido "poderes implícitos"
legiado, y b) órgano en el cual -no obstante la titularidad- no se agota el para poner en funcionamiento su oompelencia.
poder judicial, porque existen otros tribunales inferiores que juntamente
con la Corte lo integran en instancias distintas, además de órga1los que no lO. - Dentro de la estructura del poder judicial, [a Corte Suprema inviste
administran justicia pero forman pane del poder judicial (Consejo de la algunas atribuciones no jlldiciales. La propia constitución le adjudica en el art. 113
la de dictar su reglamento interno y la de nombrar a sus empleados subaltemos.
Magistratura y jurado de enjuiciamiento).

7. - En el gobierno tripartito que organiza nuestro derecho consti-


La inamovilidad de los jueces
tucional del poder, la Corte también gobiema, o sea, ~omparte dentro del
poder estatal las funciones en que ese poder se exterioriza y ejerce. Y las
1 1. - La constilución histórica de 1853-60 consagró para lOdos los
comparte reteniendo una de ellas, que es la administración de justicia.
jueces del poder judicial federal la inamovilidad vitalicia mientras dure su
Po r integrar el gobierno federal como titular del poder judicial, la Corte debe
buena conducta en el ano 96, que se mantiene como art. 110.
residir en fu capital federal confonne a [o prescripto por el arto 3° de la constitu- A veces se interprela que la inamovilidad ampara únicamente contra
ción. la '/remoción", que es'ia violación máxima. Sin embargo. la inamovilidad
resguarda también la "sede" y el "grado".
8. - La Corte se ha denominado a sí misma como "tribunal de ga- De este modo. la inamovilidad vitalicia se integra y complementa oon
rantías const iIuciona/es", para resaltar la función que, en materia de COII- la inamovilidad en el cargo ocupado y en el lugar donde se desempefia .



374 CO:.1PL"l)lQ DE OERECHO CONSmUClONAL EL PODER JUDICIAL 375

12. - Actualmente. el ano 99 inc. 4° ha eslablecitlo en su párrJ.fo tcrce- ""lO lIe vooar [a alteración nominal por "aelO del príncipe". im-
ro un témlino al dcscmpcilo de los jueces el/ razón de su edad; al l:umplir la obligación constitucional de mantener su significado económico y de n'Clj-

seten ta y cinco años cesan, salvo que recaiga un nombramiento nuevo prc- pérdida cada vez que ésta se produce con intensidad detcriorantc.
cctlido del acuerdo del s¡;nadll: la nueva designación de magislradoscuya
edad sea la indicada u Olra mayor se puede hacer por cinco años. suscepti - 15. - Asimismo, sostu vO que la referida intangibilidad es una condi-
bles de repetirse indefinidamente med iante el mismo Ifántilc. de la adminiSJraci6n de justicia que resu lta exigible a las provil/cias a
lines del arto5° de la constitución .
Esta cláusula fue declarada 1/u/a de "ulUlad absoluta por la Cone
Suprema en su sentencia del caso "Fayl", de 1999. por entender que la 16. - Queda por descifrar si la garantía de irreductibilidad de las
garantía de inamovilidad de los jueces no figuraba en el temario que el . que éstas soponcn deducciones IX'lf alX'lnes jubila-
congreso propuso para la reforma a la convención constituyente. cargas o cualquier otro concepto que, C01/ ge1/eralidad.
a los habitantes.
Estamos seguros de que ninguna de tales reducciones viola al arl. 110.
El sueldo de los jueces los jueces están sujetos a soponarlas como cualqu.ier otra perso-

De ahí que reputemos equi vocada la jurisprudencia que los ha exone-


13. - El art. 110 dispone que la remuneración de los jueces es deter- de tributar el impuesto a lo:; réditos (o ganancias).
minada por la ley, y qU(~ /lO puelle ser disminuidll "en manera alguna"
micnlras permanezcan en sus funciones.
I
a) En primer lugar, es indudable que si es la ley la que fija la retribu- disciplinarias del poder judicial
ción de los j ueces. el no poder disminuirla "en manera alguna" tiene el
sentido de prohibir las reducciol/es I/omillales por "octo del príncipe ", o
sea. las que dispusiera una ley. Por supueslo que si la ley no puede hacer
tales reducciones. mucho menos puede hacerl as cualquier otro órgano del a) Una abarca a los fimcioflorios y empleados del pode, judicial;
poder. b) otra se dirige a ejercerlo sobre las partes en el proceso, comprendiendo a
k>s justiciables y a los profesionales que intervienen e n él:
b) En segundo lugar. una interpretación dinámica de la constitución
exige que la prohibición de disminución "en manera alguna" se entienda e) otra atiende a la propia dignidad del juez. para sancionar las ofensas y faltas
respeto hacia él durante el proceso.
referida no só lo a las mermas nominales o por "acJo del príncipe". sino a
toda OIra que. proveniente de causas distintas, implica depreciación de! 18. - Con este deslinde. el panorama puede ser ésle:
mlor real de la remuneraci ón - por ej .• por inflación- o De tal modo. la
a) la reforma constitucional de 1994 ha cOlút.Tido el poder disciplinario sobre
garantía de irreductibilidad resguarda también toda pérdida de ese valor Iosjlleces al Consejo de la Magistrotura (art. 114):
real en la significación ecol/6mica del sueldo.
b) respecto de los demás agentes que componen el personal que se desempeña
en los tribunales de justic ia, el poder disciplinario incumbe a cada uno de éstos
14. - La Corte Suprema ha cstahlcddo que la intangibilidad de los sueldos cespeelO de su elenco.
de los jueces es g,mmf(1/ de independencia del poder judicial. y que no ha sido
estableciua por razón de la persona de los magistrados, sino en mira a ta institución 19. _ En su resolución de julio 1" de 2003. en el caso del juez Magariños, el
de dicho poder. Consejo de la Magistratura dejó sin efecto la sanción (mu lta) que le había aplicado
En el caso "Bonorillo Pero clEstado Nacional", fallado el 15 de novicmbre iX a dicho juez la Corte Suprema. resolviendo que la Corte carece de atribuciones para
1985. la Corte intcrpretó que la prohibición de disminuir "en manera alguna" la~ IIIplicar sanciones disciplinarias a tos jueces. y que el poder disciplinario sobre los


376 COMPENDIO DE OERECHOCONS! t IUaONAI.. EL PODER JUDlL1Al 377

juoccs del poder judicial de la nación e~ competencia exclusiva y excluyente del Los jueces de la ciudad de Buenos Aires
Consejo de la Magistratura (ar1. 114 de la constitución). (La Corte había aplicado la
illllCióu al juez Mngariños por decisión del 12 de setiembre de 2002.) 24. - AJ entrar a regir la reforma de 1994, y pese a la ausencia en el
art_75 inc. 12 de (oda mención a los tribunales de la ciudad, la compatibiliza-
20. - En cuanto al poder disciplinario de los jueces sobre los abogados, en la ción cohcrente de dicho artículo con el arto 129 nos lleva a proponer que:
sentencia del 4 de mayo de 1995 en el caso "Del Sel, Pcrcy Ramón", la Corte des-
lindó tas facultades disciplinarias de los jueces y las del Tribunal de Disciplina del a) el espíritu (o nIosoría) de la reserva que en favor de lasjurisdiccio-
Co-Jegio Público de Abogados, sosteniendo que "las primeras tienen por objeto /les provinciales hizo originariamente -y conserva- el ex un. 67 inc. 11
mantener el huen orden y el decoro en los juicios sometidos a la dirección del juez -hoy arto 75 ine. 12- significa que lajuslicia federal es de excepciól/ y
intcrviniente, mientras que las segundas persiguen unobjctivo más amplio que es el recae en razón de lugar. de materia y de partes conforme al actual art. 11 6.
de asegurar el correcto ejercicio de la abogada en todos los ámbitos de la actuación pero deja fuera de su ámbito al derecho común;
profesional".
b) el arto 129 depara a la ciudad de Buenos Aires facultades de juris-
dicción para cuyo ejercicio debe tener tribunales propios;
La unidad de jurisdicción e) si como principio la materia de derecho común evade la jurisdic-
ción de los tribunales federales. no concurre razón para que en la ciudad de
21. - Nuestro derecho conslilucional acoge el principio de la "uni- Buenos Aires subsistan tribunales federales que la retengan (así se los siga
dad de jurisdicciól/". que consiste en que: a) la administración de justicia llamando tribunales "nacionales" y no fCi bunrues "federales");
eSlá a cargo exclusivamellle, y para todos los justiciables. de los órganos d) se refuena el argumenlo de que solamente subsiste jurisdicción fede-
(tribunales) del poder judicial; b) hay una jurisdicción judicial única para ral en la ciudad de Buenos Aires (para legislar. administrar y juzgar) cuando
todos; e) por dio, existe simultáneamcnlc la igualdad de rodas los jusli- hay que garantizar cn ella imereses fe.derales mientras sea capital tederal:
ciables afile la ju risdicci6f/ (única y la misma para todos): d) esa jurisdic- e) no existe ningún inlerés federal que quede comprometido si las cue.<¡-
ción judicial ;'única" es ejercida por tribunales que deben revestir el carác- tiones de derecho común en la ciudad de Buenos Aires son juzgadas por
ler de jueces "murales. tribunales de la ciudad, por lo que cclenerlas dentro de la juri sdicción de
los tribunales federales conspira contra el carácter /imilado de la jurisdic-
22. - No obstante estar abolidos los jueces ex post facto o "ad ción del gobierno federal en el territorio de la misma ciudad:
personam", pueden subsislir con determinadas condiciones las llamadas f) reducir la jurisdicción de los tribunales de la ciudad sin ningún inte-
"jurisdicciones especiales" (no judiciales) que aplican su competencia a rés federal que requiera garantIa, se nos hace incompatible con la wnplilUd
determinadas 1Il00erias -por e.i. fiscal , administrativa, militar, ctc.-. de la jurisdicción que debe tener el poder judiciaJ de la ciudad si la coordi-
Admitir jurisdicciones ';especiales" fuera del poder judicial parecería namos razonablemente con el régimel1 de gobierno "autónomo" definido
desmeOlir el principio de unidad de jurisdicción, desde que la jurisdicción en el arto 129, porque "gobierno" (autónomo) es abarcalivode las tres fun-
judicial no sería la única. Sin embargo, la unidad de jurisdicción se salva ciones clásicas del poder. también de lajudlcial; y "autónomo" quiere de-
en nuestro derecho constitucional porque las decisiones de las jurisdiccio- cir exento de interferencias ajenas irrazonables.
nes especiales deben comar con posibilidad de revisión (o cOlllrol) judi-
cial suficiente. lo que en definitiva reenvía la última decisión posible a la 25. - La ley de garantía de 109 IntereSeS federales en la ciudad capital (n"
jurisdicción judicial. 23.548) estipuló en su arto 8" que "la justicia nacional ordinaria de la dudad de
Buenos Aires mantendrá su actual jurisdicción y competencia continuando a cargo
del Poder Judicial de la Nación", y que '·Ia ciudad de Buenos Aires tendrá facul!a-
23. - Comrol "suficieme" quiercdecir revisión que abarque no sólo des propias de jurisdicción en maleria de vecindad, contravcncional y de faltas.
el derecho aplicable. sino tambi(!n los "/¡ee/lOs" y la "prueba" del caso contencioso-administrativa y tributaria locales".
al que ese derecho se aplica.
Es fácil objetar las deficiencias de esta normativa.
CAPh't'LO XLIV

EL MINI STERIO PUB LICO

Su encuadre

l. - Según el arL 120. el Ministerio Público cs un órgano ¡lIllepel/-


diell[(' con autot/omía JUllciol/of y outarquía fil/anciera. que tiene ¡:x>r
función promover la actuación de lajusticiacn defe nsa de la legal idad, de
los intereses generales de la sociedad, en coordinación con las demás auto-
ridades de la República. Está integrado por un Procurador Gel/er(/{ de la
Nación y un Defemor Gel/eral de la Nación y los demás miembros que la
leyestabJezca. Sus miembros gozan de inmunidades funcionales e imangi-
bilidad de remuneraciones.

2. - El Mini sterio Público es el único órgano que. fuera del poder


legislativo. del poder ejecuti vo y del poder judicial, no aparece "denu o"
del sector nornlativo dedicado en la constitución a cada uno de esos tres
poderes clásicos. Posee una sección normativa especial. no compartida.
que es la cuarta, contenida en la segunda parte del texto consti tucional
(par1e orgánica o derecho constitucional del poder).
De ahí que haya doctrina que, después de la reforma de 1994. hable
de un "cuano poder', que se agregaría a los ouos ues sin inscr1 arse en
ninguno de ellos (legislativo. ejecutivo y j udicial).

3. - Para nosotros. el Ministerio Público. si bien 1/0 forma parte del


IJoder judicial. es un órgal/o auxiliar que se le adosa como órgano extra-
poderes. de modo que después de la refornlade 1994. con sección y norma
propias, mantiene la naturaleza que le habíamos atribuido desde antes de
la reforma. cuando la constitución no contenía norma alguna sobre el tema .


El \l[ll,'TSTERIO PÚBUCO 381
380 CO).1I'El'.'DIO DE DERECHO CONSTm;C10:-JAL

4. - El art. 120 solamente menciona a dos de sus funcionarios: el e) defender los illlereses generales de la sociedad en iguales oportu-
Procurador General de la Nación yel Defensor General de la Nación. nidades;
Todo lo restante queda derivado a la ley. d) controlar, desde el ejercido de las funciones señaladas. a los otros
órganos del poder y a los del poder judicial, todo ello en la medida y en el
Que el art. 120 individualice al Procurador General y al Defensor General no marco que le traza y le delimita su intervención en los procesos judiciales
puede interpretarse como definición de un órgano bicéfalo. Damos por cierto que la donde la cuestión que se ventila guarda relación con actos u omisiones de
ley debe desglosar el árnhito propio de cada uno, y considerar que la cabeza del dichos órganos o de los particulares: d') ejercer el cOlllrol de constitucio-
Ministerio Público es !íl1ica y se sitúa en el Procurador General de la Nación. El I/alidad de leyes, normas infralegales. actos y omisiones del poder yde los
Defensor General ha de depender de él, y tener a su cargo el área que hasta ahora
panicul ares con igual perfil que el recién descripto:
conocfamos (,:omo propia de los defensores oficiales -de pobres, de menores, de
incapaces y de ausentes-o e) asumir judicialmente las fWlciones tradicionales del mirlisterio
pupilar (defensa oficial de pobres. menores, incapaces, ausentes, etc.: y,
5. -La autonomía funciol/al traza. en primer lugar. una frontera en su caso, representación de los mismos),
externa que impide cualquier injerencia de los Olros poderes. En segundo f) se le hade reconocer legitimación procesal, aun sin norma expresa
término. implica illlemal1lellte que las relaciones dentro del organismo en la constitución o en la ley. a los efectos de todo proceso en el que deba
son conducidas porquicn inviste su jefatura máxima, que esel Procurador defender la legalidad o los intereses generales de la sociedad, lo que abarca
General. sin ¡:x:rjuicio de lo que sugerimos con el vínculo que, en subordi- la legitimación para interponer la acción de amparo prevista en el art. 43
nación hacia él. se da en el Defensor General y el ministerio pupilar a su párrafo segundo, aun cuando allí no se lo consigne expresamente. porque
cargo. en toda la descripción que hace ese segmento de la nomm se alude clara-
mente a intereses generales de la sociedad -como, por ejemplo, es el caso
La autonollliafuncional - inlcrna y eXlerna- implica independizar al Ministe- de los derechos de incidenciacolectiva-.
rip Público de loda subordinación a cualquier Olro poder u órgano del estado.
8. - En cuanto a la titularidad de! ejercicio de la acci6n pública en materia
6. - La autarqu{afillallciera parece indicar que laley de presupucs- penal, queda margen para que el Ministerio Público actúe adt)ptando criterios ra-
t.q debe asignarle los recursos en forma separada, y que el mismo Ministe- ZJ)nables de oportunidad para la promoción de dicha acción.
riq ~blico tiene a su entera disposición la administración de los mismos.
fin este aspecto, creemos que en virtud de tal asignación de fondos 9. - El núe!eo del arlo 120 tiene carácter operativo, pero deja abierto un am-
plio espacio a la ley para que ésta desanolle todo cuanto no viene directamente esta-
públicos está sujeto a los controles que prevé el arl. 85 de la constitución a blecido cnla nOffila constitucional. Así, lo referido a las inmunidades para equipa-
cargo del congreso y de la Auditoría General de la Nación. rarJas a las del Defensor del Pueblo (quc confonne al are 86 son las mismas de los
legisladores); al régimen de designación y remoci6n, similar al de los jueces: a la
7. - Del arto 120 cabe inferirWladivisión en las fWlciones del Minis- pem/(lIIcncia en el cargo y su remuneración, de modo análogo, etc. ComJ eje orien-
lerio l'úbli o. Éstas serían: tador, subsiste la manda conslitucional que preserva la independencia funcional.
a) promover la actuación de la justicia, lo que a su vez admite des-
doblarse en: a') para incitar lapersecucióII penal en los delitos de acción
pública; a") para Iniciar procesos no penales cuando -usando el vocabu-
lario que empica la norma-es necesario hacerlo en defensa de la legalidad
o de tos 111lcrescs gcncralcJ de la sociedad;
b) dl/ellder 1(1. legalidad en cada proceso judicial que promueve o
en el que interviene;
CAPtnJLO XLV

EL CONSEJO DE LA MAGISTRATURA
Y EL JURADO DE ENJUIC IAMIENTO

orgánica y runcional, y la naturaleza de ambos órganos

l. - Los arls. //4 y /1 5 trazan ellineamicnto reglamentario dI! dos


poder judicial, que son el Consejo de la Magislratura y el jura-
enju iciamiento. I.a ley debe c:.:omplctar lo que no viene especificado

2. - El Consejo de la Magistratura está ubicado normalivamenle


la sección que la constitución dedica al poder judicial. así como
General de la Nación y el Defensor del Pueblo se sitúan en la
destinada al poder legislativo. y el jefe de gabinete y los demás
en la del poder ejecutivo.

De la Auditorfa General, del IXfcnsor del Pueblo, del jefc de gabinet<! y de los
hemos sostenido que, 110 obstante el sector donde los regulan las oormas
constitución, son órganos extrapoderes.
Del Consejo de la Magistratura ¿cabe afirmar lo mismo, o no?
lIay quienes han contestado que no fomm parte del poder j ud icial. y para ello
al arto 108, que en forma tenninante dice que "el poda judicial de la nación
ejen:idCl por una Corte Suprema de Jvsticia y por los demás IriblUUlles inje-
que el congreso estableciere en todo ellerritorio de la uación".

.d ,'" , "" n. "¡,,,,,


Esta norma subsiste intacta después de la refom'\a de 1994, y tomada en su
niegan que el Consejo dela Magistratura integra el

No es nuestro punto de vista. En efecto, el 0.11. JOS. alude a la ''fimción'' de


Id""nistror justicia en las causas que otros arIfculos atribuyen a la competencia del
po&kr judicial. O sea. no se refiere {/ la t'stmcturu de órganos quc lo forman, JXIr lo


384 COMPENDIO DE DERECHO CONSI [IUOO~AL EL COI'¡SEJO DI: LA MAGISTRATURA'" I'.L JURADO DE ENJUlCIAMIEr-...O 385

qu..: al día de hoy no debe interpretarse como negando que, dentro de esa eSIl'Uctura, b) representantes de losjuec.:esfederales de lodas las instancias;
haya otros órganos que no cumplen fu nción judicial (los que los arts. 114 y 115
ahora cncuQdran en el segmento de la constitudón destinado al poder judicial). e) representantes de los (lbogadoJ de la malríeula federal ; y
d) otras personas del ámbito académico y científico.
I 3. - Esto nos conduce a reafimlar que el COl/sejo de la Magistrfllll'
ra l/ O es un órgano "exlrapoderes" qut! esté fuera del poder judicial, si-
El número y la fonna han de surgir de la ley.

1/0 que ., orgál/icamellle " lo ¡meg ra. No obstante, la "[ul/ción de adminis- 7. - Las competel/cias del Consejo de la Magistratura exh iben dife·
trar justicia" en causas de competencia del poder judicial sigue privati va- entre sí: tres se refieren directamente a la formación de los cua-
mente reservada a la Corte y los tribunales inferiores, según surge del art. . una al poder disci/J!illario; otra al poder reglamentario;
108. a la admillistración de los recursos económicos.
Por eso decimos que el Comejo de la Magistratura es U/I órgo/lo in- a) En cuanto a laformaciól/ de los cuadros judiciales, posee dos atri·
tegrado demro del poder judicial. eOI/ competencias (110 judiciales) que mes: a') realizar los COI/cursos públicos para cubrir los cargos de
son propias de dicho poder. y que antes de la reforma incumbían a los 6r· en todas las instancias inferiores a la Corte, y selecciollar a los
ganas judiciales. a") formular temas vil/culal/les para proponer el nombramien·
: a"') la lercera facultad que relacionamos con las dos anteriores es la de
4. -- Si mi lar argumentación aplicamos al jurado de elljuiciamiel/to el enjuiciamiel/to político de los jueces de instancias inferiores
(art. 115) que ha venido a susti tuir el enjuiciamiento políticO ¡x.¡rel senado ala Cone.
para los Jueces de tribunales federales inferiores a la Corte. b) En lo que hace al poderdisciplil/ario, el Consejo tiene su ejercicio
sobre los magislfados.
5. - De todas maneras, si cabe hablar de una "jefatura" o cabel..il. del poder c) El poder reglamelltario recae sobrc una triple mmcria: e') para la
judicial, ella sigue a cargo de la Corte S!/pre/1l(J.
. . judicial: e'") para asegurar la independencia de los jueces:
la eficaz prestación del servicio de justicia.
El Consejo de la Magistratura d) Por fm, en loadmi"islrali\'O-ecollómico. adminislra los recursos y
presupuesloque la ley respectiva dedica al poder judicial .
6. - El primer párrafo del arto 114 diseña la competencia del Canse· Las seis competencias admiten reagrup3.f5e en tres:
jo con una bifurcación: a) seleccionar a los magistrados, y b) admillis·
a) todo lo referente a la selecció" de candidatos para ser designados como
trarel poder judicial. Luego vendrá el desglose de las atribuciones. todas ,ec,,, de tribunales federales inferiores a la Cone, 'f a ') a la iniciativa para promo-
vinculadas a esos dos ejes. ver su enjuiciamiento ante el jurado de enjuiciamiento; más a") lafacllltad discipli-
El párrafo segundo traza el lineamiento que ha de tOJUar en cuenta la noria sobre los mismos;
ley reglamentaria del Consejo de la Magistratura en lo referido a su com· b) el poder reglamentario;
posicióf¡. e) la admillistración de los recursos económicos del poder judiciaL
En pri mer lugar, el desen/pello de sus miembros es temporario, ya
que la norma habla de integración periódica. En segundo lugar, ordena 8. - Se ha de tener muy presente que no tiene cO/llpetencia para: a) intervenir
en la designación de los jueces de la Corte; ni b) para promover el juicio polftico
procurar un equilibrio entre las representaciones que invisten los fund o· contra ellos; ni e) para ejercer sobre ellos el pode]' disciplinario: ni d) para ejercer
narios del Consejo: poder disciplinario sobre el personal del poder judicial.
a) rcpresct1!antes de los órganos políticos resultantes de elección po.
pular -o sea, del congreso y del poder ejecutivo-: 9. - Las competencias que la refonna ha asignado al Consejo de la


386 COMPE...... f.lIO DE DERIiCHO CO:-;S IllUaONAL El... CONSEJO DE LA MAGtSTRATURA y EI./URAOO OE ENflJIC[A,\{[E.'TO 387

-
Ma[!iSlralUra SOJl plenamente decisorias, es decir. no son consultivas ni de
asesoramiento. le
12. ~ El jUÜ;lO político arbitrado en et texto anterior a la reforma. ahora sólo
mantiene para destituir a los j/leces de J(/ Corle SlIpre/lU/ de JlIstici(l.
Empalmando esta naturaleza de las decisiones del Consejo con laje-
fatura que la Corte retiene sobre el poder judicial al cual aquél integra. se L3. - El procedimiento actual se desdobla: en unaprilllera etapa. el
abre un il11crrogantc: ¿aquellas decisiones tienen carácter final y definiti- COlisejo de la Magism"lIra acusa al decidir la apertura del procedimien-
vo. o son recurribles'! lo -y puede sUJpeltder al juez-: en la segunda etapa. interviene el jurado
de elljuiciamielllo. que puede remover. o no. Se trata de una relación entre
Nos afianzamos en contestar que S0" recurriblef;, pero resta pensar
dos órganos -Consejo y jurad~ que forman parte -ambos~ del poder ju-
cuál tribunal ha de ser alzada para las decisiones del Consejo de la Magi s-
dicial, por lo que cabe calificar a esa relación como imraórgm/O.
tratura.
Creemos que, dada la jerarquía que la reforma le ha deparado, no pue- 14. - El ar!. 115 solamentc esboza en su párrafo primero la integra-
de scroU'o sino la Cone Suprema. La vía de tránsito haciaelJa habrá de ser ción de los jurados de enjuiciamiento con ulla triple composición: legi.da·
recursiva. magistrados y abogados de la matrícula federal. El detalle queda
v"lo a la ley prevista en el ano 114.
10. - Sintetizando nuestra posición, decimos que:
El segundo párrafo asevera drásticamente que su fallo será ¡rr'{'curri-
a) las decisiolll's jurisdicciollales, como son las sanciones discipli - no tendrá más efecto que el destiturorio. Se ha suprimido la "acce-
narias. han dc ser susceplibleJ de recurso judicial; a') por analogía. ((/11/- que estaba incorporada al anterior art. 52, y que consistía en la po-
biélllas decisiones sobre acusación para dar paso al enjuiciarnienlo poU- imposición por el senado de la inhabilitación. declarando al juez re-
tico: como incapaz de o(..'upar em pleode honor. de conlianza. o a sueldo
b) también han de serlo las que recaen en la Jelecciól/ y confección estado.
de femaJ de postulantcs para cargos judicialcs a fin de remediar irregula- En lo demás. la norma aClual mantiene la previsión del anterior arto 52
ridades graves en el mecanismo respectivo cuando causan perjuicio a los el somelimientocventual del destituido al proceso penal ordinario.
eventuales candidatos-incluidos o excluidos-;
e) los reg/all/emo.f que interfieren en la tramitación de los procesos 15. - La apertura y la sustanciación del procooimiento de remoción 110S coto-
judiciales deben quedar sujetos a control, sea por la Corte. sea por cual- ¡.... ante la posibilidad de que el órgano que tiene a su cargo la competencia para
quier tribunal , en la medida en que a una ya otros les resulten a¡J/icab/es . la apertura -(.·onsejo de la Magistratura- sllsfX'nda al juez cuyo trámite de
inc it a mediante acusación.
en ulla o más causas de su competencia que se sustancien ante ellos; este
control podría ejercerse sin recurso y de oficio en cada causa: 16. - El ano 115 contiene otra previsión institucionalmente impor-
d) en cambio. Iodo lo referente a la admiuisfración de los recursos A contar desde la decisión que dispone abn'r el procedimielllo de
presupuestarios parece l/O ofrecer materia que caiga bajo posible revi- 'mi',,,, el jurado tiene cielllo ocllema días para dictar su fallo.
siónjudicial. en ese lapso no lo hace. deben arc/¡ivarse las actuaciones y. en su caso.
reponer al juez suspendido.

El jurado de enjuiciamiento y la remoción de los jueces 17. - Nos queda la irrecllrribilidad del fallo destitutorio. La norma
nwnci'a taO y hay que aventurar una opinión sobre su alcance.
11. - El art. liS dispone que los jueces de los tribunales inferiores serán Si se la interprela literalmente, no hay duda de que el/tra en pugna
relllovidos por las causales expresadas en el ruto 53, por un jumdo de enjllicitlmit'n. C01l el derecl/O judicial de la Corte Suprema. que acept61a revisiónjudi-
to inlcgflldo por legislt¡dores, III(/gütmdos y abogados de la IIIlIlriCII/tI fed.eml.
dal cuando el anterior art. 52 omitía definir el punto .


388 COMPENDIO DE DERECHO C01'SI [ IuaONAl

En tal caso. es razonable suponer que una vt!z incorporada la admi -


sibilidad de aquella revisión por la jurisprudencia de la Conecn el derecho
conslilucional material. hay que dar por cierto que nos hallamos ante un
requisito cOl/sliruciol/a! ¡"alterable e inamovible del siJtell/o gllrflmisto.
que ni siquiera una reforma de la constitución puede desconocer. so pena
de violar un principio fundamental del sistema axiológico de la mi sma
constitución.
Tal es nuestro punto de vista, por lo que a la irrccurribilidad que im- ( CAl'f'l1JLO XLV I
pone el art. 115 le asignamos únicamente el mismo sentido que la Corte
fijó en 1993 en el caso HNicosia": escapa a la competcnciajud icial el en- LA ADMINISTRACION DE JUSTICIA
c~adrc y la valoración que el jurado hace de las conductas que toma de
base para la remoción, y la decisión misma de removec pero sigue siendo
revisable todo lo que alañe a la competencia del órgano y lasJom/{/lida- El modo y la ocasión de su ejercicio
des de su ejercicio. asf eomo a las garamÍas del enjuiciado en orden al
dehido proceso y el derecho de defensa. l. - Nunca hemos dudado de que la función de admillisIrar justicia
es u1Iafunción "jurisdicciol/al" (/ cargo {le fos tribunoles del poderjudi-
dal. Por eso. nunca abandonamos la denominación de "adminisIraciólI de
justicia", si bien compartimos Olras denominaciones que -actualmente-
alguna doctrina repula más acertadas como. por ejemplo. la de "impar-
Iici6n" de jusIicia.

Nuestro poder judicial es. en verdad, un poder. cuya función nuclear


en lo que hace a lo estriClamcme judicial es administrar (o imparIir) jus-
licia. a lo que se suma -ahora- las otras fWlciones ""0 judiciaJcs" a cargo
del Consejo de la MagislralUra y eljuradodccnjuiciamiemo. introducidos
por la reforma de 1994 denlrO del mis mo poder judicial.

2. - La administración de juslicia como función del poder que ejer-


cen los órganos judiciales se enmarca y transcurre a través de cauSl/S (o
procesos) judiciales.

(por supuesto que aquí encaramos solamente la función de "adminis-


lrar justicia", y no la función "administrati va" que también tiene a su car-
go el poder judicial en la medida requerida para ejercer la administración
de justicia.)

3. - Algunas nociones vinculadas con el tema son las siguientes:


a) Todo juez requiere que su jurisd icción sea incitada. Es decir. no
actúa "de oficio" o motu propn'o «(X>r propia iniciativa). Su función per-


390 COMI'I::."'UlO DE DtRECIIO CUNSTrIlJClOSAL LA AI)MlNISll1.¡\CtÓ:>l DI! ruSTIL1A 39]

mancce inhibida y latente mientras no hay proceso, y el proceso se inicia a judicial en causas donde la tutela de un derecho subjetivo configura cues-
impulso de parle. mediante la flcciólf. (Las excepciones son muy pocas.) tión justiciable;

Las formas habituales de incitar la jurisdicción son: a') origi//aria- i) los jueces deben alcanzar en sus sentencias la solucióII objetiva-
mellle (en primera instancia) para acceder al proceso mediante acciólI (o nle/lle justa del caso con arreglo a las circwlst3nci as del mismo y al dere-
tt
demanda): a en instancia de revisión (sea ame la misma instancia origi-
) cho que le resulta aplicable.
nariamente provocada, o ame otra superior) mediante rewrso.
b) Todo pronunciamienlo judida! que implica adminislrar justicia recae
en una "causa" judiciabfe. y la forma de resolver esa causa es la sen/en- La sentencia
CUI.
6. - La sentencia recaída cn causajudiciablc como culminación del
proceso. es el modo único y normal de ejercer la runción de administrar
4. - Nuestro art. 116 constitucional hace la enumeración de casos
justicia.
que configuran la competencia judicial federal, y habla de "causas".
La sentencia es una IJorma. entanada del jucz en y para tul caso COI/-
El "caso" o la "causa" judicial equivale a "juido" o "proceso judi- creta. O sea, es una norllla il/dividual. El juez. al dictarla. "crea" dere-
cial", y para nada se limita o identi fiea al "caso cOllfel/cioso'·. o juicio con- ellO. pero ese derecho que crea. /JO es derecho" /Jue),'o" (como sí lo es el
tradictorio. Para nOSOtros. cabe en el concepto constitucional dt: "cau s~" la que crea la ley) porque en su creación el juez extrae la norma individual
acción dedarati va de inconslitucionalidad. la acción declarativa de certe- creada por él, del ordenamiento jurídico vigente. O sea. que la administra-
za; el juicio llamado de jurisdicción voluntaria, etcétera. ción de justicia es una función sub-lega!.

5. - Si procuramos :trmar un repertorio de principios básicos que 7. - El juez actúa en ejercicio de una función de individuación de la Ilorma
señala el derecho judicial emanado de la jurisprudencia de la Cone. pode- gmera/'"en" y "para" un caso singular y conCft•.'(o.
mos esbozar los siguientes: El juez. al crear la norma individual de la sentencia, no puedc evadirse del
a) los jueces son se/-vidoreJ del derecho para la realización de lajus- marco del oruenamiento jurídico \'igente: debe apoyarla en a lgún sector o parte del
miSITll.>. De ahí que sea clásica la norma judicial de la Corte, definitoria de lo que
ticia:
debe ser una sentencia para merecer reconocimiento corro acto jurisdiccional váli-
b) el ejercicio imparcial dc la administración de justicia es un e le- do: der;l'{/óón m::'OfJod" del derecho I,jgente cOlljonlle a tas circunstancias de la
mento indispensable de la defensa en juicio: causa.
e) la selltellcia debe ser derivación razonada del orden juridico vigcn-
le: De todo ello surgcn dos requisitos de la sentencia: a) su motivacióll;
b) sufundame/llació/J. Se suele decir quc la sentencia se motiva en los
d) el respeto a la voluntad dellcgislador no requ iere admitir solucio-
hechos del casu. y se runda en el derecllQ aplicable. La fundamcmación y
nes notoriamente injustas; la motivación ~razo nada y razonablemente expuestas por el juez- expli-
e) el apartamiento deliberado y consciente de la verdad es incompati- can por qué el caso se resuelve como se resuelve. O sea. por qué la deci-
ble con una adecuada administración de justicia; si6n es la que es, y d6nde halla sustento .

f) la verdad objetiva o material debe prevalecer sobre la pura verdad
formal: 8. - El derecho judicial de la Corle tiene señalado que la exigencia
g) la intervención del poder judicial no puede ser excluida compulsi- de que las sentencias tengan debido rundamento reconoce raíz constitu-
vamentc a los fines de solucionar controversias indi viduales; cional.
h) importa agravio a la garantía de la defensa la e.xclusión del poder 9. - La carencia de fundamento mínimo, oel fundamento capricho-
392 COMI'fl',1>IO DE DERECHO COXSlTl1.1(10NAf. LA ADMI.'lSTRAClóN DE JUl'oítaA 393

so O dogmático. insostenible o insuliciente. conSliluyen un vicio que tipifica e) útil )' eJica~;
uno de los casos de arbitrariedad de seflle1lcia. d)justa:
Es importantísimo destacar que lIingúlIl ribul/al puede prescindir de e) ajustada al principio de cOl/gruencia (que se explicó en el tema del
la I/orma que rige el caso 1/; dejar de aplicarla al mismo. salvo que {/ esa debido proceso);
I/orma la declare "incol/stituciollal", Oimparcial.
10. - Nu<!slra Corte Suprema ha elaborado toda una rica teoría acerca de los
No debe:
casos en que falla la verdadera culidad de acto jurisdiccional (o sentencia) a un a) rel/I/llciar conscienlernentc a la verdad objeriva o material;
pronunciamiemo judicial. E.s la teoría de la arbitrariedlld de sclUencia. ode la "s.:n-
b) anreponer la verdad Jonllal;
tcneia arbitrana". Tal descalificación implica, para nosotros, un vicio o defecto de
inCOlIstifucionl/lid(ld, que nos permite hablar de sentencias "inconstitucionales", e) incurrir en exceso riLUl/lmallifieslO (según se cltplicó en el tema
La sentencia arbitraria es susceptible de recllrso ex/rooroi/lurio ante la C0I1c del debido proceso).
Suprema.
14. - Hay también presUpUeSlOJ necesarios de la sentencia. Así: a)
11. - Una rápida si ~tematizadón de la jurisprudencia sobre sentencia arbi- que el fribwUlI que dicta la sentencia haya sido constitucionalmente esta-
trari~ pernúte scl"ialar Jos siguiente!! supuestos fund~melltale~: blecido antes del ''hecho'' del proceso, con c01llpetencia para conocer de él
a) sentencia (.jue / l() St' ¡unda en ley (o más ampliamente, en el derecho vigen- (es decir. que sea "juez natural"); b) que se haya suslanciado el "debido
le. que no se agola en la ley) como por ej.: la que C31\!l:e de fUlldamcmos u o mite proceso" en la causa que la sentencia resuelva.
tollo fundamen to o cita h.:gal;
b) sentencia que resuelve el! contra de la ley: 15. - Del principio de celeridad raZOllable del proceso y de OpOrlU-
c) sentencia que aplica nomms 110 v¡gen/es -porque han sido derogadas. o IIidad de la sentcncia, se extrae (dentro del derecho a la ju ri sdicción) el
tooavfa no han entrado en vigor, o son extraíias al caso-: derecho del justiciable a obtener una dccisión judicial (scnlencia) rápida y
d) sentencia que mili/e decidir una cuestión esencial paril la resolución del efica:. o sea, "útil".
caso;
el sentencia que decide "extrapctita" una el/eslió/! ajena al caso: 16. -El juez no puede: a) 1/egarse aJalfar: b) di/mar sin término O
O sentenci a que mili/e considerar unll pnteba rendida cuya comideración es demorar arbitrariamenle la sentencia.
esencial para resolver e l caso:
g) scntencia que da por probado algo que no lo ha sido: etc.stcra. 17. - La sClllencia pasada en aUlOridad de "cosa juzgada" llo puede
ya revisarse en el futuro. (Remitimos a lo explicado al tratar los contenidos
12 . - En cambio, ulla sentencia no es arbitrarÜI -y por ende, tampoco sus- del derecho de propiedad.)
ccptibli.! de recurso elttraordinario- porque sea errónea, o pueda discutirse en sus
fundamentos. La intangibilidad de la. cosa juzgada esU: condicionada por la regularidad del
proct'so en que la sentencia se ha dicudo.

Los requisitos de Jo sel/le1/cia 18. - La eosajuzgada Irrita o nllla proporciona ocasión para ser atacada por
vía judicial, cualquiera sea la solución que arbitren las leyes procesales.
13. - La sente ncia debe ser:
19. - El principio republicano de Pllblicidad de los aclOS estalrues rige tam-
a) lIIotivada y JUlldlida (según lo ya explicado); bién re.'1pcclo de las sentencias que emanan del poder judicial. Ello significa que no
b) oporlUfla el/ el/iempo; puede haber secreto en tas decisiones judiciales: que hay derecho a informarse res·
3<)4 LA AI>Ml!\'1STll. ...aóN llE lt'Sl10A "\95

piXlO de ellas: y que los procedimientos Judiciales tampooo se c)(imen de aqudla e) Por fin. hay que dotar de las I/omws /Jrocesales a qut: deben ate-
publicidad, salvo re~r\'a en situaciones excepcionales razonables, nerse el juez y las. partes.

La ausencia de normas procesales no es un obstáculo insalvable para que se


La jurisd icción, 1.. acción y el proceso sustancie un proceso. La Corte dio CU I'SO al proceso de amparo en 1957-1958 sin ley
procesal que lo pre\·icra, por las r.lzones que se explican at tratar el tema del ampa-
20. - Se debe a Podclli la elaboración de lo que él mismo llamó la ro.
trilogía estructural del derecho proccsal:jurisdicciólI. acción y proceso.
22. - I.a denegación o priwlciólI de justicia se tipifica de cuatro
a) Lajwüdiccióf/ integra el poder estatal como una/ullción del mis-
maneras:
mo. Se define como la potestad con1crida por el estado a determinados
órganos para resol ver mediante la sentencia las cuestiones que les son so- a) cuando el tribunat .te niega a fallar;
metidas ()Or loS justiciables. [n fornJa más breve, se dice que es la capaci- b) cuando el tribunal demoro irrazonablemellle o indefinidamente
dad de administrar justici(/. su sel/lencia;
b) Podctt i dice que el elemento fun damental del derecho de "acciólI" el cuando el justiciable l/ O ellCUel1l ra tribullal competente para que le
es la facultad de pedir protecciólI jurídica. resuel va su pretensión:
d) cuando los tribunal c~ 110 se //alloll ell condiciones de dictar sell-
La pl'elCn~i61l de prott!CciÓll o mIela jurídica no significa que el juez deba tellcias "efica ces" que rindan utilidad.
acoger favorablemente el !'lC1itorio de la parte, sino que debe tomarlo en cuenta y
re~l\'crlo conjuj;ticia. 23. - La responsabilidad del "estadu-juc:r." no necesita. en nuestra
La :acción no debe ya considerarse como el "mismo cJen."Cho subjetivo en ejer- opini6n. de ley alguna que le preste reconocimiento, porque encuentra ~un­
cicio". o como la faz dillámica y procesal del derecho subjclivo. La mIlOlwm({/ di' la damcnlo en la propia constitución, en cuanto ésta priorizacl afianzamien-
a«i6n h ace decir que con su ejercicio se pre1ende por el justiciable la IUtela de un to de la justicia y los derechos personales.
"derecho" que él alega o supone ser suyo, pero que puede no existir, y cuyo eventual
Actualmente, la indemnización por error judicial en caso de condena
reconocinúento -o su dencgato ria- sólo surgirán al 1énnino del proceso con la sen -
tencia.
penal, cuenta con norma expresa en el derecho argemino, porque la prevén
elPacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (art. 14.6) yel Pacto
c) La aClividad jurisdiccional que se movi liza a través dell1'oceso de San José de Costa Rica (art. 10), que tienen jcrarquía constitucional.
tiene unfi/J público, que cs, precisamente, hacerjusticia a los justiciables.
El proceso no es un asunto puramente privado, sino un insliluto publicístico
La "creación d e d erecho" pOI" los ól"ganos judiciales
con participación COl/currel/te del juez y de las partes.
24. ~ Parece imposibte negar que el derecho se crea u origina también por vía
2 1. - Para satisfacer la administración de justicia - y correlati vamcnte judicial, o sea, llor lajurisprJ4dencia de los tribunales. Si a esta creació.n h~ ~signa­
el derecho de los justiciables a la jurisdicci6n- el estado debe; a) estable- Il10S el tradicional título de "fuente", la jurisprudencia o el den.'Cho JUthC1at son
cer los órganos (tribun ales) del poder judicial; b) asignarlcsjurisdic:ciólI fuente del derecho ,
y competencia: e) dietar las nomlas de procedimiento judicial.
a) Los "6rganos" son los tribunales j udiciales. 25. - En primer lugar, la jurisprudencia vinculatoria es la que por
una obligaton'edadintrínsccaemanada de la constitución o de la ley, debe
b) J)e¡¡pu(!s de establecidos los órganos, es menester que la ley les ser acatada en el futuro porque surte efecto ergo ommes. Ello puede tener
atribuya jurisdicción .v cOlIJpetel/cia. distintos grados:
LA A1)Mt¡"1Sl1l.ACtÓN DE ruSTIClA 397
396 o IMl'EI\'DIO DE DERECHO COl\S 111 UaO~AI_
30. - Por eso también creemos que los fr;bul/ale.~ ¡l/feriares (los fe-
a) significa una intcrpreta~ión de derecho sobre la norma aplicada,
que en el futuro deberá ser aplicada tal cuaL se fa imerpretó;
derales y también los provinciales) debe" ajusfOra la jurisprudencia de la
Cone las dccisiones que dictan sobre puntos regidos por la constitución.
b) s i gni fi ~a un~ inlcrprclat'ión de derecho sobre la norma aplicada. la Cuando esos tribunales son provinciales. tal subordinación responde al
que por esa misma 1I11crprctación queda derogada o invalidada, o sea, que
esquema de la estructura rederal de nuestro régimen. expresado en los arts.
1/0 se puede lI/JUcar m(¡s;
SOy 3 1 de la constitución, porque el derecho rederal (en el cual ubicamos a
e) sig.nific~ una interpretación de derecho sobre la norma aplicadaquc. lajurisprudencia de la Corte en materia constitucional) prevalece sobre los
por esa mIsma IIllcrprctación. obliga a OlIO órgano a derogar la norma, o ordenamientos jurídicos provinciales.
a l/O promulgar/a. O a no ponerla en vigor, etc.

26. - En segundo lugar. encontramos el sistema del SUlre decisis.


El derecho jlldicial
confomlC el cual los jueces deben fallar las causas ateniéndose a los prece-
dentes en casos análogos. 31. _ Vale agregar que. aclarado el carácter creador de lajl/rispru-
deuda como fuel1lc del derecho. hay que analizar en qué orden de prela-
27. - Por último, puede la jurisprudencia actuar espollf(¡¡¡eOmfllTe
ción se ubica la jurisprudencia constitucional dentro del mundo jurídico.
co m~ fuente del dcr~1.:h() para casos generales: basta que por el prestigio
d~llnbun.al, Opor la lIl(]ult! Je la materia decidida, una sentencia adquiera Nuestra Corte ha afirmado que la jurisprudencia tiene un valor allá-
e)emplandad 1.:UIllU ~rl!~eden~e '.IUÍ.\". allá del caso resucito. y sea suscepti- lago al de la ley, porque integra con ella una realidad jurídica; no es una
ble de provocar seXUlflllellto. ImItacIón o reiteración en situaciones análo- norma nueva sino la /lOn/llI il/terpretada cumpliendo su función rectora
gas del futuro. en el caso concreto que la sentencia decide. O sea que el derecho judicial
acompaña. como "fuente". a la misma fuente (constitución fonual) que
interpreta y aplica; la creación por vía de jurisprudencia se coloca aliado
UI ulll!onllidad de la jur;s/Jnulencia en su el/cuadre cOIIsl;,uciollal de la nomla interprclada, porque es la misma nonna que ha pasado por la
interpretación judicial. y la illfer¡JreraciólI jurisprudel/cial de la COl/su·-
~8. - El p.rO~ito estrictamente constitucional que persigue la uni· lUció" il/tegra la propia constitución eOIl su misma jerarquía de1/lro del
fomllda~ de laJun.sp~~encia es, par~... ~ osot.ros, dar resguardo y c lcctivi- derecho federal. cual/do aquella imerpretaei611 emalla de la Cone SI/-
d?d a. la ~g.ualdad )undlca dc los Justlclables, de forma que la il/lerprera- prema.
cI6n }/Ultcwl de esa nurllla por los distintos tribunales judiciales (locales o
federales) Jebe lambién ser 1/1Iifonlle.cn casos análogos. Por ende de la 32. _ Cuando reivindicamos que en detenninados casos una sentencia debe
"legislación úllica" hay que pasar a la "illlerpretaciólltambién úlli~a" de ser dc aplicación obligatoria COI1 carácter general se suele decir que aquel efecto
la ley. no obstantc la pluralidad dI! órganos judiciales de aplicación (cuan- general viola la divisi6n de poderes, porque solamente las leyes tienen carácter de
do las "circunstanci as" de los casos son análogas). normas "generales y obligatorias"; una sentencia, por ende, 00 podría imitar la na-
turaleza material de la ley.
. . 29. - .ActUalmcnte, sin reforma tegal alguna, el recurso extraordinario pU,"de • Como breve réplica decimos que:
~ debe ~~rvlr de cauce proc~sa.l para ~Ie~ar ante la Curte Suprema la rcvisi611 de • a) si acaso una sentencia reviste carúcter dc norma general y obligatoria, (al
scn.t.encla~ que, por c~fllm1./cc/óll d; jurlspmdencia, piolan la ;glw!dat! jllrrdica. generalidad obligatoria es solamente U11 efeclo o consecuencia de la sentencia, que
~a cue~tI6l\ co\Ut~tuc lonal que dana andamiellto al recurso extraordinario sería la no bace a su esencia y que no alterll ni desvirtúa la naturaleza que toda sentencia
¡.llvocacI6n de esa 181/~/dad jllrrdica, lesionada en cualquier selllencia que. compa- tiene como norma individual: por ende, tal sentencia no implica ejercicio de la fun-
I ~da c?n otra u o~as dictadas por el mismo tribunal o por otros, acusara interpreta- ción legislativa, ni vulnera la división de poderes; no hay, pues, inconslitucionali-
ción ~I\'ergcnte Sllllultánca de una misma norma (de cualquier natura1cLa) en casos
dad·•
senlCJantcs.
,
398 COMPE....OIO DI: DD!ECHO coNSTrruaON/\L

b) dI.! ahí que lo~ fallos llamados "plenarios" 110 s~an ill~on~tituciona1o:s.

33. - Una ve/.. que dejamos csboJ.:ados nuestros l-Titcrios sobre lo que
es el dCfCl.:ho judicial. sobre la posible extensión de los efectos de las sen·
¡encias más allá del caso que resuelven, sobre la uniformidad y unificación
de la jurisprudenda para resguardar la igualdad jurídica. ele., no hemos de
omiti r alguna referencia a 10 que tiene dicho la Corte Suprema.
a) Tal vez, en cierto sentido, pueda entenderse que -a su manera- nues- CAPÍlULO XLVll
tra Corte comparte el aforismo de los Estados Unidos según el cual "la
constitución es lo que los jueces dicen que es", En efeclo, nuestra Corte El . CONTROL Y LA JURISDlCCION CONSTITUCIONAL
afirma que los tribullales inferiores deben tomar el/ cuenta su juri~pru­
dellcia , y para apartarse de eHa sin desconocer la autoridad del tribunal
suprt!mo han de controvertir sus fundamentos y proporcionar los propios Su concepto
diferentes.
b) Con lodo, ha afianzado la noción de que la constituci(¡n consagra l. _ Por "jurisdicción constitucional" suele ente nderse la fun: ión
la igualdad "ante lale.v'·. ¡xJr manera que la desigualdad deri vada de fa llos jurisdiccional ejercida para tutelar. manlencr y controlar la suprem:lc,/O de
contradictorios no viola la garantía de la igualdad . Como consecuencia, el la cO ll stitu ción. La referida tutela parece recaer, fundamentalm~mc, sobre
recurso extraordinario no es. para la Corte, una vía hábil para lograr la la actividad que, por ser infractora de la constitución, se cahfica como
unificación dI! la jurisprudencia di vergentc. incoII s¡iluciollaf o anticonstitucional .
Hay, como se advierte. un punto medi o o una mixtura: por un lado, la Es vocablo an:'ilogo, o quizá sinónimo, de "jurisdicción" constitucio-
Corte rescata el valor de su jurisprudencia y el seguimiento que han de nal el de "justicill" cOllstilucio1U/l.
darle los demás lribunalcs. Por el otro, al no acoger la nociÓn de que la Entendemos que, en un sentido amplio, la jurisdi~ció'~ constitucional
jurisprudencia contradictoria afecta y vulnera la igualdad jurídica (que para comprende también la interpretación de la con.sllt~Cló~, aunque al
la Corte es solamente igualdad "ante la ley" según la constitución). declina efectuarla no se arribe a una declaración de inconstll~ctOnahdad. Por .su-
erigir la desigualdad emergente de fallos contradictorios en una cuestión puesto. también la integraciól/ de los vacíos nonnatlvOS de la constitu -
constitucional susceptible de ser resuella medianle el recurso extraordina-
rio federal. ción.
1. _ La jurisdicc ión constitucional despliega en el derecho procesal const~­
t . 1dos ámbitos conexos: a) la organización de las t'slrucll/nu (o los órgano)
~~~~:rcen dicha jurisdicción (principalmente los judi~¡al~s); y b) los procesos en
que !le deciden. por razón de materia, cuutioneS conStitUCIOnales.

3. _ A nuestro juicio, cada Vel que en un proceso judicial se inserta y hay qu:!
d«;idir una cuestión CQtlStitucwlUll, hay cn juego, ell. CS~ aspccto yen su recfproca
medida. jurisdiccwn constitucional, proceso constItucIOnal, y derecho procesal
conslilllcionaf.
De tal encuadre surge que el proceso constitucional es. el que tiene ~r objeto
la "materil!" constitucional, de [onna que cuando tal materia hace parte de un pro-
ceso, tOlal o parcialmente, el proceso es constimcionaf.
400 COMPE.'1>IO DE DERECHO CO:-¡S I t 1UClONAL EL CO!\TR.OI. y LA JURISDICCIÓN COI'STITUOO!\"AL 401

4. - No nos cabe duda """flor eso- de que en el derecho COflSlilUcio- traordillan·o, todo lo seilalado en el anterior inc. b') más el ejercicio de la
/la! federa! argelllif/o existe jurisdicci6n constitucio1lal. en la medida en casación constilucional v federal.
que f unciooa el control constitucional en sede judicial. b''') en illstallcia originaria y en ejercicio de su jurisdicción diri-
Nuestra jurisdicción constitucional puede reputarse abarcadora de dos mellte del arto 127, la solución de los conmctos y quejas entre provincias.
aspectos: a) uno "negati vo", cUllildo descali fica normas o actos COntrarios para preservar la paz interior y la "wlÍón naciona!" aludidas en el preám-
a la constitución y los declara inconstitucionales; b) otro "positivo", cuan- bulo.
do realiza "interpretación" de normas constitucionales o infraconslitucio- e) En la medida en que se mo"iliza el control diseñado en los prece-
naJes. dentes incs. a) y b), es flOSib lc que. según el caso de que se trate, se dirija a
resolver:
5. - La jurisdicción constitucional en Argenti na dentro del ámbilO
c') cuestiones vinculadas al reparto COIIStilUCio1lal de competencias
federal admite diseiiar sus fina lidades y su contenido de la siguicnlc mane-
que surge de la división de órganos y funci ones del gobierno federal ;
ra:
e") cuestiones vinculadas al reparto cOllstitucional de competencias
a) En la medida en que LOdos los tribul/ales de justicia, tanto federa- entre el estado federal y las provincias;
fes como provinciales, tienen a su cargo el control constitucional federal
c''') cOl/flictos de competencia elltre órgano,~ del poder judicial que
de modo obligatorio, deben asegurar:
no tienen un superior común;
a') [a supremacía del bloque comtitucional del are 3 1 compuesto
por "constitución fede ral-leyes del congreso-tratados internacionales" por c'''') cof/troversias judiciales en las que la presunta lesión de dere-
sobre el derecho provincial: chos personales se imputa a actividad de los particulares.
a") la eSlruclum jerárquicamellle escalollada del orden constitucio-
nal (constitución y tratados con jerarquía constitucional, tratados solamente La cuestión constitucional
supralegales, leyes, reglamentos administrativos y actos administrativos
de contenido indi viduaJ , sentencias); 6. - La c uesti6n constitucional es siempre una CIII!.HiÓfl de derecho, porque
a"') la tutela de los derechos personales contenidos en lodo el plexo en ella está en juego la interpretación o la supremacra de nomlas federales, y no deja
constitucional; de ser así cuando y porque en la misma cut!sli6n constitucional se alojen eventual-
mente cuestiones "de hecho" o "de prueba", ya que en este caso el análisis de los
a"") el seguimiento de la imerprelacióll constitucional emanada del hechos y la prueba se hace a la luz de su venienle de constitucionalidad o inconsti-
derecho judicial de la Cone Suprema de Justicia. lucionalidad, que es eminentemcllle una cuesti6n de derecho.
b) En la medida en que la Corte Suprema de Justicia. tanlO en su
jurisdicción originaria y exclusiva. cuanto en su jurisdicción apelada (or- 7. - Cuando se dislingue el control constitucional federal y el con-
dinaria y extraordinaria). es el guardián y el intérprete final de la constitu- trol constitucional provincial, hay que encarar Jajurisdicción y lacompe-
ción federal, el control constituci onal federal a su cargo en las respectivas tencia de los tribuT/ales federales y de los tribunales locales,
instancias debe asegurar: a) Las cuestioncs constitticionalesJedaa/es sólo provocan la juris-
b') en cualesquiera de ellas, la supremacía constitucional federal por dicción y competencia originarias de los tribuna/es federales cuando la
sobre el derecho provincial; la eSlructurajerárquicamcnte escalonada del causa judicial queda regida directa e iUlI/ediatamellfe por derecho fede-
orden constitucional; la tutela de los derechos personales contenidos en el ral.
plexo constitucional: b) Cuando ello no ocurre, c1juiciodebe iniciarse, tramitarse y fenecer
b") en ;'lSlal/cia apelada e.\"/r(lOrdinaria. a través del recurso ex- ante los tribunales locales; pero, a no de resolver la cuestión constitucio-
402 CO.\1PEI,1[)IO DE DERECHO Co.'1STlTUOONAI. EL COJ\:,ROL y LA JURISDJCt.,6~ CONS1TI1.1C1ONAL 403

nal federal, es menester que: b') esa cuestión obtenga en jurisdicción local quiere como base 1111pmceso o una causa judidaks en los que. altcncrse que dictar
una decisión del superior tdbunal de la provincia, y b") producida su ·S<.::lJlcncia, se hacc necesario cf~ctuilr aquel control y. evcntualmente, declarar la
jutcrvención, quede abierta la IX'sibilidad última de acceso posterior a la illCollstituciollalidad de una norllla o de un acto r~lacion¡¡dos (;On la materia de la
causa.
, juri:idicciól/federal (que se da mediante el recurso extraordinario ante la
Corte Suprema).
De acá en adelanle surgen los interrogantes y las discrepancias: ¿es
e) Cuando en juicios que tramitan ante tribunales locales ex iste una
menester que en esa causa exista "petición" de parte impetrando el con-
cuestión constitucional provincia' que no excede el marco del derecho lo-
trol mediante tacha de inconstitucionalidad'!; o, aJ comrario, ¿aunque falte
cal. el control constiLucional se reduye en el ámbito de los tribunales lo-
esta petición, cI juez puede declarar la inconslitucionalidad?; o, todavía
cales.
más, ¿aun sin petición debe declararla?
d) Cuando en el supuesto del anterior jnc. e) [a cuestión constitucional
provincial es a la vez. ydc alguna manera. cuestión constitucional federal. En general. la jurisprudenoia de la Corte Suprema exige que medie
la causa respectiva se somete a las mismas pautas que hemos reseJ1ado en solicitud de inconstitucionalidad. lo cual significa que: a) la cuestión de
el lnc. b). inconstitucionalidad debe articularse en el peliIorio. b) la cuestión de cons-
e) Las cuestiones constitucionales exclusivamente provil/ciales que~ titucionalidad debe formarpane expresamente de la materia sometida a la
dan reguladas solamente por el derecho provillcial. jurisdicción del juez de la causa.
f) En las cuestiones constitucionales provinciales que, a la vez, son Se interpreta que si la parte no alega la incollstimcionalidad, ésta no integra la
cuestiones constitucionales federales (supuesto del inc. d). los tribunales eausajudiciable y. por ende, el jUCllIO la puede im.:luir en la sel.l!cllcia sin incurrir
locales no pueden negarse a resolver la cuestión federal; f') si el derecho en decisi6n ·'cxtrapetita".
local se los impide. la norma local es inconstitucional; r') debe quedar
abierto el posible acceso ulterior a la jurisdicción federal. una vez que ha 11. - La primera conclusi6n (heterodoxa, por cierto) que a nuestro
recaído la necesaria deci sión del superior tribunal de la jurisdicción local. criterio deriva de este principio jurisprudeneial es que el control de const.i~
lucionalidad por los jueces pende de la volulltad de las partes en el proce~
8. - A pat1ir de 1986 en el ca~o "Slrada" el derecho judicial de la COTle ha
establecido que para acceder desde las jUlüdicciones provinciales a la jurisdicción
so, o dicho en otros témlinos, que el juez no lo ejerce "de oficio"; la segun~
federal en instancia extraordinaria ante la Corte Suprema en las causas que contie- da conclusión: que no pedir la declaraci6n de inconstitucionalidad implica
nen una cuestión constitucional federal, es inexorable que, previamente, se agoten una renul/cia de parte; la tercera conclusión: que si el juez no puede eono~
las insTancias provinciales ante el superior lrihunal de juslicia local. con indepen- cer "de oficio"la ineonstj¡ucionalidad en una causa, y si las partes pueden
dencia de que la organización y legislación provinciales tengan o no previsto en la renunciar a pedir la declaraci6n judicial, la supremacía de la constitución
causa respectiva un medio procesal para provocar la intervención y la competencia 110 es de orden público. Todo esto es equi vocado.
de dicho superior tribunal.
12. - En el viejo caso "Los Lagos c/Gobierno Nacional" (del afio 1941), la
9. - Las normas legales que en alguna clase de procesos judiciales Corte alegó que el control constitucional Jifl pedido de ¡mrte vendría iI significar
inhiben el control dI; constHucionalidad, son incollstiIucionales. Ello IX"lr ~ que los jueces pueden controlar por propia Iniciativa (de oficio) los actos legislati-
que lodo tribullal judicial. en cualquier tipo de proceso, puede y debe vos o los decretos de la administración. lo que a su criterio rompe el equilibrio de
resolver una cuestión constitucional vinculada COII la causa. poderes por la absorción del poder judicial en desmedro de los otros dos.

13. - En el año 2001. el fallo de la Corte en el caso "Mill de Pereyra


El control de constitucionalidad sin petición de parte c/Provinciade Corrientes" pudo ser interpretado como un alivio a la nccc~
sidad de petitorio de pune para habilitar el cOlllrol de constitucionalidad.
10. - Es sabido que el control de constitucionalidad en nuestro régiln!n re- En efecto. de los nueve jueces de la Corte cuatro avalaron el control de
404 COMP¡;.... \)IO DE DERECHO CONSTI'I'UGONAL EL COt-."TROL y LA JURISDlCCl6~ CONS1"ITLCIONAL 405

oficio, y dos lo hicieron implícitamente, con lo que. a partir de allí, cabría I!(¡/idad de las actividades que, por configurar cuestiones políticas, que-
decir -como mínimo-que la negatoria del control de o1icio ha suavizado drul exentas Lie control judicial.
su rigidez. d) Si el estado no es justiciable cuando algullas de sus actividades se
escudan tras la pantalla dc las cueslioncs políticas, la "responsabilidad"
14. - Pafa propugnar el control "dl' oficio" recordemos que el coo- e~·ta((/l se esfuma. pese a la eventual infracción constitucional en que incu-
trol de consL.itucionalid ad hace parle egencial e ineludible de la función rra.
judicial de interpretación y aplicación del derecho vigente para cada proce-
e) SI! obstruye un área del sistema garalltista para la defensa de la
so y. por eso. debe efec/Llarse por el juez aunque no se lo pida la parte.
cOIISútuciólI y de su supremacía.
porque configura un aspecto del "iura novi! curia", que significa: "el juez
suple el derecho que las parles no le invlx:an o que le invocan mal " ,
El juez depende de las partes en [o que "riel/e" que/aliar, pero no en Posibles ampliaciones
:'cómo" debe/aliar. El control aludido ¡mpana una cuestión de derecho.
,ven ella el juez no está vincul ado por el derecho que las partes le invocan. 17. - Es bueno sugerir una serie de ampliaciones de distinto tipo en el con-
En consecuencia, configurada lacausajudicial, la declaración de inconsti- tml de constitucionalidad. Así:
tuciollalidad es procedellfe sin petición cJ.7Jresa. cuando en el derecho a) dar holgura y aí'tadiduras a las actuaks acrinl1es de iJl("onSlifllcionafidad (o
aplicable el juez descubre la inconstitucionalidad. vías directas, como amparo, habeas corpus. acción declarativa, etc.): b) prever para
ciertos casos la acciól/ popular: e) no apelar a la no jlldiciabilidad de determinadas
cuestiones <.:alil1cadas como "políticas" para eximirlas o:.lc control: d) no usar abusi-
Las cuestiol/es "po!{licas" vamente la categoría de facultades "privativas" con igual finalidad: e) prever me-
diante ley el (ieCIO erga,ol/lIIes o derogatorio que, respecto de nonnas dcc!Jradas
inconstitucionales, pueden proo:.lucir las sentencias de ta COlte Suprema.
15. - Es sabido que en nuCSlrO derecho constitucional del poder se
denominan cuestiones políticas aquéllas que 110 SOlI judiciables. Este es un horizonte propicio para pensar elasticidades que suponemos valío,
sas en materia de control.
El aspecto fundamental de las cuestiones políticas radica, entonces,
en que la exención de control judicial involucra exención de collfrol de 18. - Mediante reforma constitucional, sigue pendiente la opción para crear
constitucionalidad. un Tribunal o Corte Constitucional, al estilo del derecho comparado que registra ese
sistema con modalidao:.les diversas.
16. - La retracción del control judicial en las cuestiones políticas
importa, para nosotros, una construcción defectuosa que tiene vigencia
I~Jf obra del derel:ho judicial derivado de la Cone. En tomo del punto.
afirmamos que:
a) El no juzgarniento de las cuestiones políticas viola el derecllO a la
jurisdicciól/ de la parte afectada, en cuanlO le impide obtener una senten-
cia que resuelva la cuestión política propuesta o comprometida en la cau-
sa; la sentencia que se dicta no lo hace, porque se limita a decir que sobre
aquella cuestión el juez no puede pronunciarse.
b) El no juzgamiellto de las cuestiones políticas implica también de-
clinar el ejercicio pIel/O de la funciól/ estatal de administra r justicia.
c) Con ello se impide asimismo remediar la evelllual il/constitucio-
CAPtruLO XLVIII

LA JURISDlCCION y LA COMPETENCIA DE LOS


TRlDUNAI..ES rEDERALES

F:I " poder judicial de la nación"

1. - La jurisdicción federal es dclinida por Hugo "¡sina como la


facultad conferida al poder judicial de la nación (dígasedel estado federal)
para administrar justicia en los casos, sobre [as personas yen los [ugare~
especialmente determinados por la constitución.

ESla jurisdicción (judiciaJ) federal es ejen.:ida por órganos que se llaman lrihu·
na/es de justicia (o judiciales), cuyo conjunto integra el poder judicial rfficral (o "de
la nación").
Además (k la Corte Suprema como "caheza" del poder judicial, hay por crea-
ción de la ley tribunales federale s de primera ins/anci(l (ju:r.gados) y de segund(l
in,uan.áa (cámaras de apelaciones).

2. - A diferencia de los otrOS dos órganos del gobierno federal-po-


der ejeculÍvo y congreso- que están radicados en la capital federal, el po-
der judicial federal no circunscribe el asiento (o la sede) de la Lotalidad de
sus tribunales a la capital federaL Además de tribunales federales e n la
ciudad de Buenos Aires los bay e n territorio de provincias. para ejercer
jurisdicción en los casos que. por raz6n de materia, personas o lugar, son
de su competencia federal.

Lo jurisdicci6n 'federal" y la jurisdicción "provincial"

3. - Genéricamente. puede hablarse de "jurisdicció n" ofuero fede-

----------------------...........
408 COMI'I)óI)IO DF.IlERECHO CONSI [IUcrONA!. LA IURtSD!CCION y LA CO:.1PE1"I:.."cr" DE LOS TRIBUNALES FU>ERALES 409

raf t:1l oposición a "j urisdicción" provillcial, para distinguir el poder judi- en que las "partes" a cuyo ravor está discemida la jurisdicción federal pueden pro-
cial fedéral del poder judicial provincial. Ha sido la dicotomía tradicional rrogarl(I a favor de tribunales no rederales.
en nuestra eSlruClura judiciari a.
Si en vez de habla r de "poder judicial federa/" y "poder j udicial lJfO- e) Es improrrogable si surge por razón de materia o de lugar. c') Al
vi"dal" apelamos a "poder judicial federal" y "poder judicial local". hay contrario, es prorrogable cuando sólo surg~ por razón de las personas.
que hacer en el último un desdoblamiento en: a) poder judicial provincial. salvu los casos de competcncia originaria y exclusiva de la Corte, que se
y b) poder judici al de la ciudad aut6noma de Buenos Aires. reputan absolutamen te improlTogables.
El esquema graficado sería éSle:
5. ~ Dice el art. 116 que a la Corte y a los tri bunales inferiores les
Federal corresponde el conocimien to y la decisión de "tod{/.~ las causas" que ver-
sen sobre puntos regidos por la c01ls/iwciólI, {Xlr leyes de la nación (con
a) Provincia! (tantas
la reserva dd ar!. 75, ¡ne. 12) y por los [mUIdos con las naciones extranje-
Admini stradón como provincias hay) ras.
de Justicia Local De aquí en más. siguiendo la enu meración de las "d~lllás" causas y
b) De /a ciudad {/UIÓ' asuntos, el anÚ,:ulu ya no vuelve a emplear la palabra "todas", sil10 que se
1/0111(/ de Buellos Aires circunscribe a agregar: "de las causas ... : de Jos asuntos ..... , etc. El uso y el
(única) no usu de la expresión " todas" tiene doble alcance:
a) en primer témlino, "todas las causas" quiere decir que elllre la" allí
incluidas 1/0 se exceptúa ningul/o;
Los caracteres de la jurisdicciól/ federal b) en segundo ténnino, "toda s las causas" quiere decir que dichas
eausas deben necesariamente atribuirse a los tribunales federales (al me-
4. - La jurisdicción federal está atribuida a los órganos del poder nos en su instancia fin al), mientras las "demás" causas que el arto 116
judicial del estado federal por los arts. 116 y 11 7 dc la constituci6n. y individualiza sin precederlas del adjetivo loclas (salvo las de compelencia
regulada en diversas leyes. originaria y exclusiva de la Corte que deslinda el 117), pueden serexclu i-
La j usticia fcderal divide su competcncia por razón dc mnteria. de das de la j urisdicción federal por ley del congreso, en caso de no exis1ir el
persolfas (o ;'panes"), y dc lugar. propósito que informa a dicha jurisdicción.
Ofrece como características principales las siguientes:
6. _ Solamenl!' la jurisdicción vricinaria y exclHsj"a de la Corte impide
a) Es limitada y de excepci ó1I, lo que quiere decir que sólo se ejerce
total y absolutamente que la ley la amplk" la disminli)'a.
en los casos que 1a constitución y las ky-.::-. r-.:glamentari as sel1alan.
Quiere decir que /a ley pueJ,: a) "iuduir" en la jurisdicción federal otras
b) Es privativa y excluyellfe, lo que signifi ca que, en principio. no causas no enumeradas cn el u l. 116: b) "u~cluir" algunas de las enumeradas. En
pueden los tribunales provinciales conocer de las causas que pertCJll'~'l' Jl a ambos casos, la ley ha de contar con motivos de mzonabilidad suficiente. En cam-
lajurisdicción federal. bio.la ley,1O puede: c) "excluir" ninguna de las tres causas preredidasen el arl. 116
de la palabra "todas" (que son las que versan sohre puntos regidos por la cOllstitu-
En ténninOll generales, cabe afirmar que: b') tajurisdicción federal admlJc que ción, las leyes federales, y los tratados).
la ley del congreso regule los casos de su competencia, sin que se oponga a ello la
generalidad de los h~rmillos del al1. 116. atento que el arl. 75 ine. 20 presupone que 7. _ El arto 116 utiliza los vocablos cauu, y asunlo, que en el lenguaje COIlS-
la organi.laci6n dc los tribunales f~derales por ley del congreso incluye la de atri- lieudonal y procesal han sido asimilados también a caso, proceso, juicio, pleilO,
buirles jurisdi..:ci6n y compeh!l1cia: b") ¡¡demás de esta regulaci6n leglll, hay casos cuestión. etc.
LA JLlRISOICCIÓ:-;' y lA O).11'E1"I--.1'("(A m. LOS TRIDl"NALES FEDERALES 411
410

I,a jurisdicción federal "apelada" y su relación con la instanci~ b) respecto de decisiones de los tribulla/es militares;
única o múltiple e) respecto de las deci siones que en procesos Iramilados ante tribuI/a-
les prol'il/ciales deben dict¡¡r los su/)(!,.;ores tribul/ales de ¡Jrovil/óa para
8. - Nuestra constitución alude a la Corte S/lprema y a los demóJ abrir la jurisdicción apelada de la Corte cuando las causas conlienen una
rn·blll/(/Ies i"fedores cuya creación es t'Ompetencia del congreso, pero no cuestión constitucional federal.
divide ni multiplica instancias. U I única adjudicación directa de compe-
Tencia que ejecnía es la originar;tI y exclusiva de la CorIe ell elllrt. 117.
Las causas regidas por el deredlO federal
De ello inferimos que:
a) la (.;oordinación de los arts. 11 6 y 117 de la constitución conduce a 10, - En este rubro se agrupan Ires clases de causas que en el arto 116
ad\'cn i r quc clla esoo7u 1¡nealmente dos clases de causas: a') las que desde vienen precedidas por la palabra ·'Iodas". y que son federales por m.zó". de
el ano 116 J1uedellllegar (/ fa jurisdicciól/ apelada de la Corte "según las (a '·materia": lao;; que versan sobre puntos regidos por a) la COIlsutUCIÓ"
regl as y eXt"l:pciuncs que prescriba el congreso" (a tenor dc la f6rmu la qUl': federal; b) las leyes federales: c) los rrarados ¡//lemacio/Ja/es.
usa t::I ~irt . 1(7): a") las de jurisdiccióJ/ originaria y exc!usil'{( de fa Corre,
taxativalllente scl1aladas en el arto 117: En la trilogía aludida no se agowll las (;aus~s ft:derillcs por m:ón do, "nmlC-
b) tomado en (.;ucnta tul diseño, las causas de jurisdicción federal pl/t!- ria .. ; el propio arto 116 trae expresamente a continuación las .de almirantazgo y ju-
dell ser rt'g/lladm {lOr ley COI/ il/sIal/cia lÍnica o COI/ il/stal/cia múfliple, risJicción mruítima. que iamhién son fcdci"alc~ por su nmlena. Las kye~ dI:! con-
greso han podido asignar asimismo a la jurisdicción federal otras cau~as por razón
Jl"ro de su "materia", como PI'r ej.: las resida~ por el derecho dcronáutico, fX'r cJ derecho
c) si el arto 117 prevé la jurisdicción apelada de la Cune "segú n las aduanero, ctc.: pero, ell rigor. los "i.Iñadidos" qUIl por ra1.ón dI; materia introduce el
rcgl;Js y excepciones que prescriba el congreso". es indudable que enlre las COllb'Tl!SO responden a la naturaleza fLoderal de las rcsp<.:ctivas ICylls. y se subsumen
causas co mprend idas en el ano 116. ··algu1las" ha/l de dispoller por h'.,· en los easos regidos por "leyes federales".
de 1111 recurso que le.f proporcio1/e acceso ti la jurisdicci61/ apelada de la
11. _ Las causas que: \'ersan sohre pl/nlOS regidos por ÚIS leyes del congn'so
Cone, 10 que nos demuestra que
obligan a repasar las categorías de leyes que el congreso sanciona: a) leyes federales
d) el cOl/greso 110 riel/e jaclIll(/(1 para slIprimir rOlOllllf!llIe f(l juris- o especiales; b) teyes nacionales ordinarias o de den.'eho común; e) leyes.~l~s.
dicci61l apelada de 1(1 Cone porque, conforme al ano 11 7 de la conSlitu· La parte del arto I 16 que eslamos cltaminando c:cclllye e.~pres"/JIenle de lu Junsdj~­
ei6n, debe existir (no en todos los casos, pero sí en algunos). ción Jel/cml a las C(U/Sl/s que l'usan sobre puntos regidos por el deredw co/Uun
(im:. b), y que quedan resguardadas C\lIllól reserva del arto 75 inc: 12, que confi~re.a
Además: los tribunales provinciales la aplicación del derecho común (báslcamentc COllSIltUl'
e) Dl.!sde el bloque de constitucionalidad federal, Trawdos i//lema- do por los códigos dI; fondo -civil. penal, comercial, de minllfÍa, de trabajo y segu-
ciOl/lIles de derechos I/UIIUIIIOS CO/l jerarquía cOlIstiluciollal obliga/{ a la ridad social-).
doble illstancia en el proceso pellal. y ellu tanlO cuando los procesos tra·
mitan ante tribWlalcs federales como locales. 12. - Vale reiterar asimismo que si en una causa regida por el dere-
cho comlÍn se inserla una cuestión federo{, la jurisdicción federal apelada
9. - Tambi~n es indispensable que exista Ul/a vía recursiwl de ac- debe quedar disponible para resolverla.
ceso a la jurisdiCciólIfederal en los siguientes casos:
a) respeclo de decisiones emanadas de tribunales admi"ülrariros y 13. - Son rederales todas las causas que versan sobre puntos regi-
organismos admillislrmivos federales que ejercen función jurisdiccional dos ¡Jor ¡rotados con los otros estados y. gen~ricamente, por el derecho
illlemaciollaf. De ahí que es!e tipo de causas involucra también las regu·
(incluso para salisfacer la competencia de los tribunales fede rales en las
lada,; por derecho internacional consuetudinario (o derecho de gentes).
causas en que "la nación" es panc):
4 12 COMI'E.'I)IO DE UERECHO CONS 111 ITIUNAL

Los lraHu..!os intcmacionales. cualquiera sea la matcria que regulan. refiere al eSllIdo federal. en una eVidente confusión de conccptos, ya que uno es
siempre tienen naturaleza y carJctcr de derecho federal. 13mbién cuando sociológico, y el otro político. Por ende. donde el artícu lo suscita jurisdicción fede-
abarcan malcrí as que en nuestro derecho interno son propias del "derecho ral cuando "la nación" es parte, debemos leer: cmllldu "eI eswdu feJertl/ es pane.
H

común" (civil. penal. comercial. t.:IC.).


19. - La jurisdkdón rederal en causas en que el estado es parte se
14. -I.a competencia de los lribunales federales por mwn de lIIa/e rifl (fc<k- discieme "ratione personae" (por razón de parte) y, por lo lanto. no intere-
ral) s610 eS i"inalllwlI/e jcdemf y sólo obliga a radicar el proceso ame un tribunal sa la " materia" de la causa (o el derecho que la rige).
fcocral cuando la caus" qucd<t "dircctamcllIc" e "inm.;dialamentc" regida por ..:1
derecho federal; cuando 110 queda "directamente" ni "inmL'<Íialarnentl:!" regida p\lr Tampoco interesa cuál sea la otra parte que intervjcne en el juicio.
el derecho fClkral. pero guarda relaci0tl COI1 él. la causa no es inicialmente de com-
petencia de los lrihullltlc~ federales por su materia, y debe tramitar (si así corresron- 1.01 jurisdicción federal procede tanto cuando el estado federal es parte aClOm
de) ante un tribunal pro\incial: perO esto obliga a que en eSTe caso /¡am /l/U! insron- como cuando es parte delllandada. Además, por '~laci611" no se entiende solamente
óa opefada e/l jllrlSdicciónfedcml. . el estado federal, sino también algunas enlidades al/tárql/ic(/.~ y empresa.\ del e.~ta­
do que, autorizadas por las Jispo$iciolleS que la!> rigen para actuar Jirtttamente en
15. - l.a~ (yw.ws qlle pr¡r m:.6n de "lIIateria" (no ¡('dera/) xc SIISlrae/! (/ /a juicio, pueden comprometer la eventual re~p()nsabilidad del estado.
jllrisdirf"iI)1I ft'deral, pueden llegar a perlcm'cer a die/m jllrisdirch'm fH.Ir razón de
"p<:f5(m".~·· (u !,anes) () por razÓn de "/lIgar", pese 11 quc s/llIIa/erill sea de d"'t!- 20. - En nucstro den::r.;ho constitucional del poder, nunca pudo ser
ello e(lllllíll, o de derecho prol'ill<:ial.
dudoso que el estado federal es justiciable. porque el art. 116 de la cons-
titución incluye entre las "causas judiciales" que son de competencia del
poder judicial federal, aque llas en que la "/lació,," (léase " el estado") es
Las ('ausas del almirantazgo y jurisdicción marítima
parte. Afirmar que el estado "cs flanc" en una causa judicial significa pre-
ló. - Por ra/ón de la ··materia". son de competencia de los tribuna- suponer que es jllsliciable.
Ic!o. federa les l a~ causas de al mirantugo y jurisdicción marítima.
21. - S in entr:rr al detalle de las lcye~ que regulan las dema.ndas contra e l
La voz "almirantazgo" proviene del derecho inglés, y se refiere a los estado, creemos que no es inconstItucional prever en ellas que an tes de promover
hechos que acomecen en el mar, más al lá de las líneas de alta y baja marca. juicio COlllra el estado haya que efectu ar en dete rminados casos una reclamación
Genéricameme. la Corle Suprema ha conceplUado que la materia está administralim pre,·ia.
dada por " Ia lIt/ vegación yel comercio marítimos". Las prol"incias que demandan al estado federal no quedan sometidas, sin em-
bargo, a obsen'ar el requisito de la reclamación admini5lrati"1I previa ante él (ver
17. - Dentro de las causas de almirantazgo y j urisdicción marítima doctrina. del fallo de la. Corte en el caso "Provincia de Salla clEstado Naciooal", del
se induyen no sólo las relati vas a actividad marÍlima, sino también a la 25 de julio de 1985).
aerol/áutica, conforme al código aeronáutico.
22. ~ Entendemos -como principio- q ue ningwta emergencia prestCI Slls/en-
10 constitllcional suficiente f/ nOnlUlS ql/e: aun por pl(l].os c:orlOs. impidan iniciar
Las causas en que la ' Ílación" es parte o tmmitar j l/icios con/m el estado. asf tcngan éstos COIoo objcto el cobro de suma.s
de dinero.
18. - El arl. 1 L6 &Cñala como competencia de la justicia federal los
asun tos en que la "I/ació,," sea parte. 23. - El an. rcle la ley 3952 consagra el privilegio de lainejecuciólI
forzosa de la sentencia condenatoria dictada en juicio contra el estado. Tal
La constituci6n sigue utilizando em5ncamenle el término nación cuando se disposición es, a nuestro criterio. ¡tlconst;lUciollol porque hiere por lo me-
414 CO:-'1I'ENDIO DE I)F.~ECHO COl\srrruaO:"lAL LA Jt.:R1SDlCClÚN y LA COMPlITE1'';ll'' DE LOS TRlBl.''NAlES FEDERALES 415

nos varios derechos que la constitución consagra: a) afecta al derecho de parte; es decir. basta que el estado sea pane. En cambio. en las causas que
propiedad de la pane que obtiene sentencia a su favor. porque ¿Qué senti - ahora hemos de enunciar se emplea otra lcnllillología. porque se habl a de
do efectivo tiene su crédito. si su sati sfacción queda librada al arbi trio y la causas "que se susci tcn entre... "o "comra " tales y cuales partes: es decir.
discredón del cstado deudor sin posibi lidad de coerción?: b) burla el dere- aquí viene indicado cuál es --o debe ser-lo l){Irte actom y la parle deman,
cho a lajurisdicciólI en su ctapa final de obtención razonablt: mente rápi- dada. La lemünología aludida sólo revisle - por ende-el alcam_'C de seña-
da de una sentencia eficaz y útil , porque ¿qué utilidad ye ficacia tiene una Jar la biJateralidad de panes que han de intcrveniren un proceso para que
scn tencia que "declara" un derecho y que no se puede ejecutar'!: e) ofende quede comprendido en el arto 116.
a la igualdad ame fa ley y all/e la jurisdicción, ¡xJrque el estado liene un
privi leg io irritante del que carecen los paniculares y todos los demás justi- 28. - La letra del are I 16 apunta a causas que se suscitan:
ciables (sean personas físicas o jurídicas). a) entre dos o más provif/cias;
b)enlre una provincia y los vecinD.s de o/m:
24. - Solamente razones inequívocas y fundadas de real emergencia penni-
ten, por excepción, considerar constiUjciOlw!cs 11 JIIS leyes que, rempora/I//ente Ji- e) entre vecinos de diferel/tes provincias;
lI/i/(lllllS ti p/a:!,os brt'l'es. dilatan ti suspenden el cllmplimiento por porre de/estado d) entres ulla provincia o sus vecil/os, v UII e~·tado o ciudada1/o ex-
de IIlJ Jentellcill,~ di' condel/lI dicwdas en Sil contra .
tranjero.
25. - Como principio general del derecho judicial vigente. cilan"Os el que 29, - Desglosando la serie de causas por razón de partes que aquí
surge de la jurisprudencia dc la Corte en el caso ''Chiodelli. Remo J. y otros d
Clobicnw Nacional" -del año 1967-: el cará!,;h..'1" declarati\·o de la... senlenc i a~ contm
analizamos obtenemos las siguienlcs:
el e¡:tado no significa_ en modo alguno_ una suerte de autorización al estado para a) " /Jrov;lIcia" (ul/a o más! COI/ "pro\'illc:i(l " (u lla o máJ!;
que no las cumpla, porq ue 0.1110 imp0l1aría tanlo como colocarl u fuera del orden b) "prm·illcia" COII -'vecinos de otra pro\'il/cia";
juñdico. cuando es precisamente quien debe velar por su respeto: por cllo. el art. 7"
de la ley 3952 no descarta una pertinente intervención judiciallcndicnle al adecua- e) "provil/cia " COI/ "estado extralljero";
do acatamiento del fallo cuando So: dilata irrdzonablemente su cu mplimiento. d) ··provincia" COII "ciudadal/o ex/ral/jero";
e) "vecil/os de WIG provillcia " con "vecinos de otra prol·jl/cia";
26. - El arto 116 -entre las causas que incluye denlrO de la jurisdicción fede -
ra l de lluestros tribunales- prevé a lgunas en que es "parte" un estado e.ltr(/njero: f) "vecinos de ulla provjllcia" COI/ "estado eJ.1ml/jero";
o sea, admite como posible que un estado extranjero litigue ante tribunales argenti- g) "\'ecillos de uI/a pra\'il/cia'· COI/ "ciudadano extranjero",
nos. De aquí inferimos que si los estados extranjeros son justiciables por nuestra
cOllStituci6n en juri!ldicc i6n argentina, la clememaJ regla de igualdad. rt."Ciprocidad
30. - Si pretendiéramos alargar las causas por razón de partes, in·
y coherencia conduce a afulllar que, a la inversa, Úl constitución pemlite implfcita-
mente qne nuestro estado sea jllsticiable (/nf(- frib¡males extmnjeros.
cluycndo aqué llas en que es parte el estado fec/eral , cabría añadir a los
incisos a) a g) las causas entre:
h) el '-estado" y los "vecinos de ulta provincia";
Las otras causas por razón de partes i) el ·' es/ado'· v UlI "ciudadallo extral/jero",-
j) el "estado" y UII "estadoextralljero";
27. - Analizadas las causas en que el estado es pane resta otro cú·
k) el "estado" y tilia " provinci{/ ,•.
mulo en que también dicha jurisdicción está dada por el arto 116 en virtud
de (o en razón de) las pers01las o panes. Si se lo Ice atentamente, se ad·
vierie una diferencia con el enunciado de las causas (o los asUnlos) en que 31. - Las posibl es CUaIro causas de jurisdicción federal por razón
de "pe rsol/as" en que aparece una provincia como parte a tenor del arto
"la nación" (el estado) es parte. sin indicarse cuál es -o debe ser- la Olra
116, son:
LA ruRISDIC"CIÓ~ y LA ro"I!'.,.1 E"'CIA DE LOS TRllll~,\LES FEJJr:RAI..E.'> 417
416 CO~!I~1)tO lJt:. DERECHO COXS III L'OQNAl

nale;; propios (imponiendo. por ej., la recla mación administrativa pre\'ia en sede
a) una " provincia" co" O/ro u otras; local para poder ser demandadas judicialmente). Igualmellte el procedimiento.
b) una "provincia" y vecinos de otra;
e) una "provincia" y UII estado extralljero;
La "vecil/dad" a los eJeclos del tlrt. lJ6
d) una "provincia" y un ciudadano extranjero.
Estos cuatro tipos de cau sas son. ademá.<;, de compelel/C;a originaria 34. - El art. 11 6 !.!stablece la jurisdicción rederal para las causas que
)' exclusiva de la Corte en virtud del ano 117. se suscitan:
a) eOlre "\'ecillos" de diJerell1es provincias:
32. - Queda claro, enlonces. que hay dos causas en que. pese a ser
b) elUre "vecil/oJ" de Uf/a provincia y IIIt estado eJ"lmnjero:
parte una provincia, es improcedeme su agregación a las únicas cuatro
antes citada,>. Esas dos son: e) entre ",'ecillos" de ulla provincia y 1.111 ciudadano extral/jero;
a) Enlfe "una provincia y el estado federal" (la "nación "), que son de
d) entre ulla provincia)' "vecinos de otra ".
jurisdicción federal porque es parte el estado (y no porque lo sea una pro-
vincia) (y a nuestro criterio. no son de competencia originaria de la Corte);
Las causas ell que es par/e 111/ ciudadallo extral/jero
b) Entre "una provincia y sus vecinos" (que 110 son de jurisdicción
fed eral ¡x>r razón de personas. aunque puedan serlo por razón de lIU1te- JS. - Son tamoién de jurisdicción federal Jascau sasen que son parte
ria) (yen caso de serlo por razón de materia. tampoco son decompelencia un a provinci a o sus vecinos con 1.111 cituladal/o ex/ml/jero.
originaria de la Corte). Se repula lal no $\')10 allmbitanle extranjero, sino también a quien, sin
ser habitante ni tener domici lio en territorio ar¡;entino. litiga ante sus tribu-
nales.
UI justiciabilidad de fa s provincias
La extranjería debe probarse.
De la última parte del ano 11 6 surge que las causas posibles en que e~
33. - Las provincias son personas jurídicas "esta/a/es ", o sea, son
pune un ciudadano extranjero se suscitan entre: a) unaprovil/cia y un ciu-
"estados" ca" persollalidad de derecho público.
dadO/lO extranjero: b) vecil/os de ul/a provincia y un ciudluJallo e~rfr(lII­
Lajusticiabilidad de las provincias merece un desdoblamiento, con- jero (cualquiera sea la vecindad de éste). Podemos ru1adir: c) el estado
rorme al cual una provincia puede -según los casos- estar en juicio ante: (federa]) y un ciudadano eJ.ualljero (caso en el que lajurisdicci6n fed eral
a) (ribunaJes federo/es Uurisdicción federal) : b) lTibunales provinciales surge (X>r ser parte el estado).
Uurisdicción provincial o local). Además queda pendiente: d) un estado ext.ranjero y un ciudadano ex-
tranjero, que no está expresamente incluida en el art. 116.
('uando la pro vincia es justiciable en jllrisdicci6n federal, la jurisdicción fo.!-
dcral surgc de la constituci6n federal: ]Xlf eso, las normas de derecho provincial
(constitución provincial, leycs provinciales, etc.) no PUCd':ll n:guJarla. De ahí quc el
Las causas en que es parte un estado extnllljero
derecho judicial emanado de la Corte Suprema considere inconstitucional a loda
nonua del derecho prrwincia/ qlle "g/amento a condiciona /a jllsliciabilidad de
las provincias ante tribuna/es federales (por ej., las norn13S locales que ex.igen 36. - Podemos decir que. actualmente, en el derecho argentino se
reclamación adminisltativa previa en jurisdicci6n provincial para poder demandar acepta:
a una provincia). a) La jutlicillbilidad de Wf estado extranjero ame nuestros tribuna-
Al contrario. tas provincias puedcn reglarrazonablemcntc su acceso a los tribu- les. a condición de que
418 CO.\lP1!¡"'DIO D€ DERECHO CONSTrTUaO:-'" AL
1.10. JURISDICCiÓN Y LA COMPf:..e.NCIA DE LOS TRIBUNAU",-~ FEDERALES 419

b) dicho estado la cOt/Jiellla. expresa o tácitamente: pero


como propios de la jurisdicci6n federal, qUI! fueron suprimidos en la mencionada
el Si no la consit.:IlW y el acln por el cual se pretende someterlo a juicio enmienda.
no tiene naturaleza de aCIO del poder público (iure imperiO. la judiciabilidad
Eran tos siguientes:
procede direclamenle.
a) los "recursos de fuena" (que eran apelaciones contra resoluciones y proce-
dimientos de los tribunales eclesiásticos):
En el caso " Manau!a". de 1994, la Corte distinguió:
b) los "conniclos entre los diferentes poderes públ icos de una misma provin-
a) para hat.:cr jU$liciabh.: a un estado extranjero por "actos de impen'o" hace
cia";
falta que ese cst:tdo cOtI.(jeflw la jurisdkci6n de los tribunales argentinos: b) si se
e) las causas que se su~citaren "cntrc: una provincia y sus propios vecinos".
¡rata de actos que 110 son oc imperio ("iure gestionis") ese consentimiento no !I(lce
/0'''',
Lajurisdieción y la competencia de la Corte Suprema
37. - El art. J 16 prevé expresamente lajurisdiccióll!ederal cuando
es pane un estado extranjero para los casos que se susciten : 41. - La jurisdicción federal estipulada cn cl ano 116 determina
a) entre ul/a provil/cia y UII estado extranjero; g10balrnclHe las causas y los asuntOS que, en términos gel/erales. son de
jurisdicción de los trihunales federales, si n dividir instancias ni competen-
b) vecil/os deprovincia y UII estado extranjero. sin que importe
U/IO
cuál de ambos es parle aClora o parle demandada. cias.
La constitución s6fo especifica luego -en el art. 117- los casos en
Impl ícilamente. como los asuntos en que nuestro estado (la "nación")
que esa competcncia cs origino n'o y exchlsiva de la Corte Suprema de
es parle, también provocan la jurisdicción federal , podemos incluir como
Justicia. Yel propio art. 117 aclara que. salvo "estos casos", en todos los
inciso e): los asuntos en que es parte el estado argemino CDlI U/I estado demás el congreso puedeeslablcccr las "reglas y excepciones" que regirán
extralljero.
lajun"sdicció" "apelada " de fa Corte,
38. - Los organismos o emes internacionales con personalidad internaciona l De ello surge que se prevén dos clases de instancias para la Corte: a)
deben asimilarse a los eSlados extranjeros a efectos de suscilar ta jurisdicción fede- originaria y exclusiva, en la que conoce como tn"bwwl de ¡IIstal/cia ú""-
rat cuando li tigan en nueslro estado. ca; b) apelada, en la que conoce causas que le llegan de un tribunal infe-
rior, donde han sido juzgadas (a veces en más de una instancia, e inclusive
por tribunales provinciales. o por tribunales ajenos al poder judicial . como
L<ts causas crim ina les los militares y los administralivos).
En inslancia de aIJe/l/ci6" , la Cone ejerce aClualmente su competen-
39. - Nos resta decir algo sobre la competencia de la justicia fl.'<leral en cau- cia de acuerdo con una subdivisión: a) por vía ordilJaria y b) por v(a ex-
sas pena/es. Ella puede surgir: a) en razón de mate¡;a (federal) por la naturaleza lraordil/an·a. Esta última es la que encarrila el recurso e;flraordiflario.
(federal) del hecho criminoso: b) en razón del lugar donde se ha cometido: e) en
razón de ma/eria y de persona, por la naturaleza del hecho y la calidad del autor. 42. - El arto 117 en su primera parte dice que en los casos agrupados
en el art. 116 la Corte Suprema ejercerá su jurisdicci6n por apelaciólI
segúl/ las reglas y excepciones que wescriba el congreso; pero ..... (y
Las eausas suprimidas en 1860 aquí aparece la jurisdicción originaria y exclusiva).
40. - En ellexto originario de 1853, el artfculo que después de la reforma de
De esta fómlUla inferimos:
1860 l!ev6 !llln~m 100 (y entonces e ra el 97) contenía algunos asuntos y cau sas a) Que las causas en que resulta campe/elite la Corte elljurisdicciól/
apelada dependen de lo que estahlelca la ley que diclael congreso regla-
420 COMI'I:.."DIO I)t DERECHO COSS1TI\JClONAI. t .\ JURISDICCIÓN Y LA o)MPETEl'\CIA DE LOS TRlDt:NAI.FS ~"EDERALES 42 '

mentando esajurisdio.:ión . de forma que: a') no es imposición constitucio- la CarIe no puede abreviar los procesos con saltcamit:nto de esas in stan-
nal que "tndas" las causas del arto 116 puedan acceder en apelación a la cias;
Corlc; pero a") estando previsto en la constitución que debe existir /n e) si existiendo diversidad de instancias la propi a Corte afirma que no
ju risdicción apelada de la Corre. "algunas" de esas causas han de poder puede privarse al justici able del derecho a usarlas y recorrerlas. parece
l legar a tal j urisdicción, a cri teriu de la ley del congreso. imposible que ella misma, al saltearl as, impida que aquél ejerza ese dere-
cho;
d) en la hip6tesis de que sean lodos los justiciables intervinienLes en
Los poderes "implícitos" de la Corte Suprema
un proceso las que resuelvan saltear instancias para arribar "per sallum'· a
43. - El derecho Judicial emanado de la jurisprudencia de la ('orle sostiene
la extraordinaria de la Corle, hay que decir que el derecho que ticne n de
que el tribunal ticlle, como órganu supremo del poder judicial y cahela dc uno de provocarlas y uti lizarlas no incluye el de privar a los tribunales de inst an-
los poderes del <.:81300. poderes ;/IIpUciros que le son connaturales e im:nunciahlcs cias inferiores a la Corte del ejercicio de su competencia de orden público.
para salvaguardar la eficacia de la administraci6n de ju~tü;ia. que no se hall a adisposición del acuerdo de partes para su salteamiento. ni
La interpretación, el uso y la aplkación de estos poderes impUcitos depellde para abreviar el carril de acceso final a la Corte.
de la prudencia razonable del propio tribunal en caúa I:aso. En suma. so lamente la ley que establece las instand as puede. por pa-
ralelismo. admitir las excepciones a su empleo. No [a Corte ni las partes.

El "per sa ltum " en la justici.\ federal

44. - "Per saltum" (o "by pass") significa proccsalmente salteamiento


de instancias en un proceso. En oU"OS lérminos, signifi ca alcanzar la ins-
lancia últi ma de la Cort !;;! Suprema sin haber recorrido toda.... las inferi ores a
ella que, para cada proceso, están previ slas en las leyes de procedimiento
aplicables a él.

El leading I:asc del ··p<.!f sahum'" es el fallo de- la Corte Suprema del 6 de •
setiembre de 1990 en el caso ··Dromi José R., ministro de Obras y Servicios Públi-
cos de la Nación, slavocac i61l ell autos: FOlltda Moisés E. el Estado Nacional". que
versaba sobre el tr.'imi te de licitación para privatizar la empresa Aerolíneas Argen-
tinas.
,
45. - Estamos rotundamCnle convencidos dI! que el "per salrum"
sill ley del c01lgreso que lo prevea es inconstituciOlw/.

Las razones son éstas:
a) una primer~ n~ u y' ~e né ri ca, nos recuerda que lajuri sdicci6n apela-
da de la Corte furiciona según las reglas y excepciones que establece el
congrcso(an. 117);
b) las leyes tienen reglamentadas las instancias procesales de las cau-
sas que pueden llegar en último Lénnino a la Corte: sin habilitación legal.
'. LA JURlSDlCCION y LA COMPETENCIA ORIGINARIAS
y EXCLUS IVAS DE LA CORTE SUPREMA

Su encuadre

l. _ Después de enunciar en el arto 116 las causas y los asuntos que


globalmente corresponden a lajurisdicdón federaL dice el 117: "En estos
casos, la Corte Suprema ejercerá sujurisdiccióll porapelaciól/ según las
reglas y excepciones que prescri ba el congreso; pero en todos fos asul/tos
cOl/cen/¡ellles (/ embajadores, mil/istros y cónsules extranjeros. )' en los
que algul1a provincia fuese parle, {a ejercerá originaria y e.J.:clusivamell-
te " .

2. _ Si hiciéramos una especie de redacción aclaratoria del arto 117,


diríamos que contiene la siguiente formu lación:
En los casos de jurisdicción federal que, de modo genérico. enuncia el
an o 11 6, la Corte tendrá competencia por apelación según lo que esta-
blezca el congreso, aumentándola o restringiéndola. Pero entre esos mis-
mos casos. hay dos eu que la. Corte ejercerá competencia a título origi-
nario y exclusivo: a) asuntos cOllcemiellles a embajadores, ministros y
cónsules extranjeros; b) asul/tos en los que sea parte U f/a provincia.
3. _ El arto 117 es como una prowngfJción del 116, tanto que por su misma
redacción se aprecia que lo continúa. en forma que casi podrían incluirse ambos en
una sola y misma norma COn numeración única. De este modo, los asunlOS de com-
petencia originaria y exclusiva previstos en el art. t 17, no son asuntos nrlt~I'Os. sino
asuntos que la disposición extrae de entre los que el 116 encomendó a la jurisdic-
ción federal de modo genérico.
Cualquiera de las causas enu~adas en el 117 debe ser una causa que enun-
424 COMPENDIO DE DERECHO CONSTITUCIONAL
JURISDICOÓN O RIGINARIA DE 1../\ CORTE SUPREMA 425
ció el all/erior; y que "pasa" ~ I 117 porque en el 116 ya se le deparó lajurischcción
federal. f) La Corte mezcla en el art. 1/ 7 lú "mmeria " de la causa. y a veces
amplía o disminuye su competencia ori ginaria y exclusiva "en razón de la
. 4. - Nuestra iUlcrpretación personal es éSla: Que además de ori gina~ materia" en casos en que. a nueslro juicio, no debería hacerlo.
na, esa competencia es "exclusiva", importa para nosotros lo siguiente:
a) Que dentro de la jurisdicción federal, "Úflicameme" la Corte co-
noce de esas causas: Las causas en que es parte una provincia

b) Que. por ser Ilonna inmediatamente opcrati va de la constitución, el 9. - El art. 117 dice que corresponde a la Corte ejercer su jurisdic-
cOl/greso l/O puede ampliar ni restringir esa competencia, ruiadicndo Olras ción originaria y exclusivamente en los asuntos (causas) en los que fuese
causas o rClaceando las enumeradas en el arto 117: parte ul/a provincia.
e) Que si esa competencia es intangible para el congreso. es asimismo En nuestra interpretación, sólo procede esa competencia originaria
improrrogable por las partes: cuando en una causa es parte una provincia con alguna "otra parte" de las
d) Que la propia Cone /lO puede dedil/arIa, disminuirlal/i oll/pliar- cuatro que menciona el arto 11 6, de forma que 110 siempre que ell Uf/juicio
hr, "es parle Uf/a provincia" debe abrirse la competencia origif/aria de la
e) Que por ello. /(/ COrle con/rola de oficio (o sea. sin petición dc Corte, sino úllicameme cuando. segúlI cuál sea la "otra parte". la causa
pane) la integridad ele su compelencia originaria y excl usiva. én que es parre una provi1lcia esrá asignada a la jurisdicción federal
"por razó" de personas" en el arto1I6.
. 5. - Rcsult.a para nosotros importantísimo reiterar que la jurisdicción migi-
nana y exclusiva Jamás pu..xlc dc~ndcr de la ""materia" de la causa, sino únicamcn- 8. - Valga, entonces, repetir cuálcs son las cuatro únicas causas del
~e de .las "personas" (o partes) a las que concierne la causa, o que con)) partes arto 116 a que nos venimos refiriendo:
"~tervl~nen CIl. e!.la: por eso es iIlCQIIS""II~ionalllleq:lo.r ell la jllrúdicción origina- a) "provincia" con "provincia ";
;:0 la . 1I,~OIen~, de la CtIllSC/ pam al/lpllOr o para disminuir f'sa jllrisdicciólI. La
1l1i1lCnll. no sIrve para hacer entrar o salir ulla causa que es "ratione pcrsonae" y b) "prO\'incia" con ··vecino.f de aIra provincia"; ,
que en el 117 se halla enumerada ¡x>r cXlracción del 116. e) "provincia" con "ciudadano extranjero";
d) "provil/cia" con "estado extranjero".
6. - Veamos si todas nuestras atirmaciones cuentan con el aval de la
juri sprudencia de la Corte. y I/atUl más.
. a) La Corte admite que dentro de la jurisdicción federal. sólo ella Por eso, para nosotros, 110 S01l de com'petencia originaria y exclusi-
ejerce competencia originaria yexclusiva en los dos tipos de asuntos aque va de la Corte las causas en que litigan: a) provillcia con sus propios
se refiere el art. ll7. vecinos (salvo que el avecindado sea extranjero); b) provillcia COII el es-
tado federal (la "nación").
b) También acepta que el congreso 1/0 puede ampliarla ni restringir-
la. 9. - La jurisdicción originaria y exclusiva de la Corte que prevé el ID. 127 de
e) No acepta que eS(1 competencia excluya necesariameme a la ju- la constituci6n con cndic\cr de t;lirimenle para resolver las qllcjas en/re provincitls.
risdicciólI IJI'Qvillc;al. no configura -pese a su natufate7..a peculiar- una hipótesis ajena a la de las causas
de una provincia con otra. tanto que 1a.~ referidas quejas interprovinciales deben
d) Tampoco acepta la illljJrorrogabilidad cuando las partes disponen pro¡x>ncrse con fonna de demanda judicial.
lo contrario.
e) .La Corte admite cOlll;olar de oficio (o sea, sin petición de parte) 10. ~ A los efectos de su competencia originaria la Corte exige que pa.ra que
cualqulcr nonna o actO que viole su competencia originaria y exclusiva. una provincia pueda ser tenida ¡x>r "pane" en ta fonna prevista por el ano ll7, la
provincia debe ser parTe "nomi,wl" y "sus/ancial".
J UIHSOICClÓN ORIGINARlA DE LA CORTE SUPRE.."1A 427
426 Cm-WIc..NDro DE DERECHO CQNSI 11 ucrOSAL

ajustado la intervención de la Cone Suprema al modo como le correspon-


11. ~ Asimismo, la competencia originaria y exclusiva de la Corte en los
cuatro casos en que es parle una provincia, 110 desaparece por el hecho de que al
de de acuerdo (11 "derecho de gemes".
juicio concurran otros litisconsortes o terceros no aforados.
15. - Esbozado el panorama de la inmunidad de jurisdicción, tene-
[2. - El derecho judicial emergente de la jurisprudencia de la Corte mos que afrontar el problema de si la competencia originaria de la Cone
ha ampliado y dismilluido-a nuestro juicio indcbidamente- su competen- estatuida en los arts. 116 y 11 7 se limita a los supuestos en que el derecho
cia originaria y exclusiva en causas en que es parle una provincia, haciel/- internacional otorga aquella inmunidad, o si abarca también a los exentos
do jugarla "materia". de inmunidad.
a) Como principio. adoptamos el alcance amplio de nuestraconstitu-
a) La Iw ampliado cuando:
ción, y como en el caso se trata de compeLCncia originaria de la Corte
<1') se trata de causas entre UlJ (I provil/cia y SI/S propios vecillos. si la (insusceptible de ampliación ni disminución). dcci mas que: a') si una cau-
"materia" esfedeml (puntos regidos por la constitución, o leyes federales. sa judicial "concierne" realmente a un diplomático, debe entender en ell a
o Iralados internacionales); la Corte, aunque el derecho internacional no cubra el caso con la inmuni-
a") se trata de causas entre Uf/a proviflCü¡ y el estado federal, si la dad diplomática; a") si el derecho internacional no la cubre con la inmuni-
"maleria" esfederal en iguales cond iciones. dad. la Corte podrá entender en ella sin necesidad del consentimiento a la
b) La 1m disminuido cuando. pese aser parte Ulla provincia en alguna jurisdicción argentina:
de las cuatro causas que provocarían su competencia originada yexclusi- b) Nuestro estado -y delllro tic él, la Corte- no debe declinar su juris-
va. la "materia" de esas causas versa sobre cuestiones regidas por el dere· dicción en causas concernientes a diplomáticos que le incumben por los
ello provincial. arts. 11 6 y 117, cuando el caso está exent Ode inmunidad por el derecho
internacional :
c) Todo ello porque ni la ley. ni el derecho judicial. ni el deredlO inler-
Las causas "concernientes" a embajadores, ministros públicos nacianaJ público, pueden ampliar o disminui r ¡a competencia originaria de
y cónsu les extranjeros la Corte en causas que realmente "conciernen" a diplomáticos.

13. - Los agelltes diplomáticos -al igual que los estados extranje- 16. - La Corte debe conocer del modo como puede hacerlo un tri-
ros- están investidos por las normas del derecho internacional público de bUllal e011 arreglo al derecho de gemes. Norma tan antigua en nuestro
un pd vilegio de inlllunidad frente a la jurisdicción del estado en que ac- régimen presupone que la causa no es judiciable por la Corte sin previa
túan como representantes del propio. Esa inmunidad [os exime de lajuris- rel/uf/cia al pri vilegio de exención de jurisdicción (si eltiste para el caso).
dicci6n de los tn'bunales de justicia del estado ante el cual ejercen su
función. La violación del privilegio origina responsabilidad internacional Enlendemos que no basta la conformidad per.wnal del embajador o ministro,
sino que es necesaria la del estado u tranJero cuya represemaei6n diplomática ejer-
del estado que 10 ha infringido. cen. Ello viene impueslo. ademb. por el arto 32 de la Convenci6n de Viena sobre
relac iones diplomáticas.
Por la Convtncl6n de Viena sobre relaciones consulares, de 1963, de la que
Estimamos que una yez que se ha prestado confonnidad para allanar la inmu-
Argentina es parte, se reconoce a los c6nsllles una inmunidad de jurisdicci6n res-
nidad, el respectivo estado 00 puede retractarse.
tringida.
17. - La inmunidad de jurisdicci6n que nuestro derecho admite respeclo de
14. - La inmunidad de jurisdicción de los diplomáticos depende en los diplomáticos ante los tribunales argentinos no viola el derecho a la jurisdicci6n
su alcance y en sus efectos del derecho fU/emacional público. Ni el art. que nuestra constituei6n acuerda a los justiciables, porque queda abierto a favor de
116 ni el 117 reenvían a él, pero desde siempre el derecho argentino ha
428 CO,\1PIiNDIO DE DERECHO COl\SrrnJLi ONAL Jt:IlI.')OICI..'IÓS ORIGI:-.'ARIA DE LA COltTE !lIlI'RI'MA 429

éSlos el acceso a la jurisdicción ante los tribunales locales del estado extranjero al recordando que: a) los arls. 116 y 117 los colocan en paddad de condicio-
cual representa el diplomático. nes con los embajadores y mi nistroS públi cos a efectos de hacer sun ir la
Si en su propiajurisdu.:dón tampoco resultara justicia ble. el caso se il.similaría com[lCtcncia origi naria y cxclusi va de la Corte en causas o asuntos que le.o;
al de privació n de Justic ia. conciernen: b) pero según el derecho inlemJcional público. no ostentan
carácter de agcnlcs diplomáticos.

Qué es causo "col/cemlel/te " 23. - Los cónsules no gozan en el derecho internacional de una in-
munidad de jurisdicción que tenga igual alcance quc la dc los diplomáti-
18. - Causas y aSuntos "concernientes" a embajauores. etc .. no son cos. El art. 43 dc la Convención de Viena sobre relacioncs consulares la
únicamenLC aquóllos en que proccsalmelltc y fonnaJmeme es "parte" uno conlicrc sólo por aclOS ejeculados eu ejercicio de la funci6n COl/SU lar. y
de los agentes mentados en el art. 117. aún así contempla algun as excepciones.
COllcemirequival c a afectar. Una causa "concierne" a un diplomáti- Sin embargo, "causa concerniclltc" a cónsules cxtranjeros tiene una
co o un cónsul en la medida en que lo afecta. interesa. y compromet.e, sin amplitud que no discrim ina hipótesis di feremes para el caso dc actos cum-
di slingui r entre las causas referidas a acti vidad propia de su funci ón o lidal plidos en el dcscmpeiio UC su funci ón y para el de negocios privados o
y las ajenas a éSla (o total mente referidas a acti vidad pri vada). No int eresa personales. Por ende. ni la ley ni el uerecho judicial pueden válidamente
lampoco la "maleria" de la causa (civil , penal. administrativa. etc.) regular 1a competencia originaria de la Corte sobre la hase de ese dualismo
no incluido en las normas constitucionales.
19. - Para saber qué son "embajadores", "ministros" y "cónsulcs" (a quie-
nes debe "concemi rl es" la C¡IUsa). es tamo~ cier10s de que la interpretación de la Sin embargo. hay vieja jurisprudencia de la COJ1e quc restringe su competen·
nonl\.1 collstitucional dd)C necesariamente remitirse a las definiciones del derecho r.:ia originaria al caso en qu..: e~tán afectados privilegios y exenciones de los cónsu-
imcfllac io nal público, de forma que a los efectos del r.:orrespondicnte tex to de la les t'll Sil cflnícfer plíbli("o,
constitución. son "embajadorcs··. "ministros", y "cónsules" extra.njeros aquellos
agc llIes dip lomáticos y consulares a los quc el derecho internacional considera de 2-'- - En la medida en que a tra\'és de todas nuestras opiniones hemos encon-
ese rango. trado casos en que la teyo el dCI\."'(:ho j udicial amplían o dism.inuycll la jurisdicción
originaria de la Cone interpretada a 1;] IU7 de l an. 117. hemos de reconocer sLmultá-
20. - No ha y duda de q ue los an..... 116 y 117 se refieren a agentes diplomáti. neamente que la extensión o la det racción en el dc r...'Chc constitu cional mat ...'"Iial
cos extranjeros. o SC4, acreditados por o tro estado aOle el nuestro, lo q ue sign ifica configuran una IIIIIWciólIl'OIlStil,4ÓO/UI/ por interpretación que desfigUre! y l"iola a
que las causas concemientes a agentes diplomáticos que nuestro estado ac redita en la citadll rumlln di> 1(1 constitu ción fOrllUlI.
otro. escapan a la previsión especial de estas oonnas.

2 1. - Las demandas que se promueven contra "embajadas" extran.


jeras están mal clú¡;x;adas: una embajada earece de personería y legitima-
ción para estar e n juicio y noes dc mandablc. Las demandas deben dirigir.
se conlra el titul ar de la embajada (embajador extranjero) o contra el res.
pecti vo estado extral/jero, según proceda en cada caso.

Ltu causas cOllcemiemes a c6//Sules eXlr(lJIjeros

22. - Con respecto a los c6nsules extranj eros debemos comenzar


CAvtn..rLO L

EL RECURSO EXTRAORDINARlO

L... apelación ante la jurisdicción extraordinaria de la Corte Supre-


ma

l. - Como primera descripción, cabe decir que el recursocxlraordi-


nario es un recurso. o sea ulla ,,(a de acceso a la Corte que l/O e.~ origil/a·
ria. sino posterior a una inSlancia previa O anterior. En este sentido, res-
ponde a la previsión constitucional de que haya una juri sdicción no origi·
naria (apelada) de la Corte según el arto 117.
De todos modos. sus características son especiales. Por algo se lo lla-
ma "extraordinario". o sea, "no ordinario".
Esa naturaleza extraordinariaconsisLc en que es W1 rccursoexce¡JCio-
l/al, resfn'1Igido y de mareriafederal. Puede decirse que es "parcial" por-
que recae sobre la "pane" federal (constitucional) exclusivamente.
No faltan opiniones que ven en la vía que analizamos una especie de
"casaciól/" constitucional o federal.

2. - Los artículos chtvedel recurso extraordinario son el [4, d 15 Yel [6 de la


Icy48.

3. - El objeto del recurso extraordi nario consiste, lato scnsu. en asc-


gurar en últi ma instancia ante la Corte el cOlllrol de la supremacía consti-
tucional.
Puede desglosarse este "control " en dos: a) interpretación constitu-
cional; b) conflicto tle constilucionalidad.
4:l2 COM 1'10:>-1)10 DE DERECHO CO ....srrruClONAL EL REClIkSO EXTRAORDINARIO 433

La cuestión constitucional y sus clases Ejemplos de c lles/ión COIIslitucional compleja "directa " son: los conflictos
entre:
4. - La revisión constitucional en instancia extmordi naria en torno a l la constituc ió n federal rnfis los tratados con jerarqu ía conitituciOllal por un
del objeto propio del recurso ante la Corte. confiere primordial importan- lado, y:
cia a lo que en él se ll ama "cuestión constitucional" (o caso rl..'d eral). requi- b) por el otro. una ley del congreso (de cua lquier naturaleza: federat, de dere-
sito inexorable si n cuya 1.:Ollcurrencia el mismo recurso pierde su meollo. cho común, o local): b') un tratado intern acio na l sin jerarquía constitucional: b'· )
un acto de au toridad federal: b'·") ulla nonna del derecho provincial (constitución
Se puede definir la cuestión constitucional como una cuestión "de
provincial, ley, decreto, ordenanza municipat. etc.); b..•. ) un acto de au toridad pro-
derecho" en que, dircctao indirectamente, está compromctida la con::i,itu- vincial .

ción rederal (sea en su interpretaciólI. sea en su supremacía).
Ejemplos de elles/ión constitllcion(ll compleja "indirecta " son:

5. -La cuestión cOll stÍlucional se abre en dos grandes rubros OcIa- a) conflicto entre normas o a~IOS de autoridad federales - por ej.: entre un de-
creto reglamentario y la ley reglamcllIaria-;
ses: a) cuestión cOIlstituciol/a! "simple"; b) cuestión cOflstiruc:iOlllll ··COIIJ·
pleja ". b) conflicto emre no rmas federales y locales - por ej.: entre una ley federal y
una ley o decreto provincial-:
Ln cueslión constitucionnl "s implo" versa siempre sobre la ··¡mer-
e) conflicto entre normas nacion~ lc s de derecho común y normas provinciales
pre((lción" pura \' simple de I/ormas o aelOS de //aturalew ''federol ".
-por ej.: entre una norma del código civil y una constitución o ley provinciales-;
La cuestión constitucional "compleja" versa siempre sobre l/I/ ··COI/- d) conm~to entre Jlorn"\a$ federales y actos provinciulcs:
flicto de consTitucio//{/lidad" elllre lIomws (1 actos infr{/comtituciOlwles
e) conflicto entre .lelOS federales y nonnas provinciales;
(de cuafquierl/nfuraleza) y la COl/slituciÓI/ federal.
f) conn icto entre actos federales y actos provinciales.
6. - IJI cllestió" COllst;llIciollal "simple·' recae, entooces. sobre la illlcrprc·
tación de: 8. - Es rrccuenlC, cuando se esboza el lineamicmo de las cuestiones
a) la propia constitución federal y los tratados con jerarquía constitucional; constitucionales que hacen de base al recurso extraordinario, afirmar que
b) las leyes federales: son eJ.1nlllas al mismo por no configurar cuestión constituc ional, dos gran-

e) los demás tratados internacionales:


des grupos:
d) los decretos reglamentarios de leyes federales: a) Las cuestiones sobre "illlerprelació,," del derecho común o local
e) otras nonnas federa les (por ej., reglamentos au tónomos del poder ejecuti-
(sal vo que aparezca conflicto de (,."'Onstitucionalidad originan te de cuestión
vo, resoluciones o instrucciones ministeriales, etc.); federal compleja).
1) los ac tos federales de órganos ud gobierno federal. b) Las cuestiones de hecho y prueúa (salvo que por su íntima co-
nexión con puntos de derecho federal no sea posible separarlas denlrOde
7. - Lu cuestiól/ constitucional "compleja" se subdivide en: la cuestión constitucional planleadaJ.
a) cOlllpleja "direcw", cuando el conflicto de constitucional idad se Se sue le agregar que. comó principio, también le son extrañas:
susci ta "directamente," cntre una norma o W1 acto inrraconstitucionalcs y c) Las cuestiones sobre interpretación del derecho procesal federal .
Jaconsli luci6n federal;
b) compleja ,j¡lUlirecta ", cuando el confli cto se suscita entre normas
o actos infraconstitucionalcs que, dentro de su gradación jerárquica, in- Ln arbitrariedad de sel/lencia como cuestión cOI/S(ilUciollal
fringen "indireclamente" a la constitución federal que establece la prela-
ción de la norma o del acto superiores sobre los inferiores. 9. - La construcción jurisprudencial de la sentencia arbitraria como
EL !tE<..'URSI) I:XTII.AOIHJL'>;AII.IO 4~5
4'\4 o )~1PEl\l)1() OE DERECHO CONSTIllJOO:-lAL
apertura del recurso extraordinario no es, para nosotros. una creación "con- SEWfENCIA JWCfO TRIBUNAl·
tra Icgcm", ni un supuesto que se haya jm.'orpor ado en fornla autÓllo ma e JUDICIAL
independiente al ano 14 de la ley 48. Tratándose de un a sentencia que. por
arbitrariedad, es ¡I/coII.Hitllciol/al. hay más que fundamcnlO para sostener de cual ·
que se trala de una "cuestión const itucional compleja directa",
dicta· 1""
I"¡ ··definitiva'· da en quier cia· ¡t'dualo
""
se siempre pIlJi·incilll.
10. - Las categorías y tipologías de la arbit rariedad de sentencia multiplican "" que haya que debe
su puesto!! de muy variada índole . Sin descender a tal detalle, daremos solamente
algunos cjcml'tos fácilmente comprensibles. Así, son sclltcndas arbitrarias: concluido ser el ··tri·
a) las que d••!cidcn en contra de la ley (colltra-Icgcm): por "sen- bU!I;J.l su-
b) las que (muten exponer y desarrollar el fundamento en que se basan: tencia de, perior de la
e) la que aplican nonnas que uo tienen relación COII el caso y no Se refieren a finitiv;¡·· eaus;!'·.
él:
d) las que omiten resolver Ulla o más pretensiones articuladas por las part\l~: A¡x:lab le
\l) las que rcsu\ll\'en pretensiones que no fonnan parte del objeto t1c1 P!"()(;Cso • 2") po,
porque no fueron anicuJada.1\ por las parles: RECURSO EXTRAORDlNARJO ante la Corte Suprema
l) las que dan por probndo algo que no está probado en el juicio:
g) las que omiten consickrar y valorar pruebas conducentes a la wluci6n del
caso: Los requisitos del n!Cur.W e~\"fraort.Ii,,(/rio
h) lasq ue incuITeIl en grave violación del debido proceso.
Este sencillo mU\lstra rio es suficiente para abarcar la serie de situaciones que, 13, - Suele esquematizarse la serie de requisitos para el recurso ex-
anal(j~icamen t c. pueden encuadrar en la hipótesis de la arbilTafiedad de sentencia. traordinario en un triple agrupamiento:
1) ReqllisilOs "colI/unes":
a) previa intervención de un Iribunaljudicia/ federa l o provincial que
El carril: sent encia - juicio - tribunal judicial
haya:
11. - La primera pregunta atiende a saber "contra qué" se recurre en a') tenido lugar en un juicio y
instancia extraord inaria; o dentro de qué " marco" previo debe situarse:: ¡,;sc a") concluido con una semellcia;
"algo" contra lo que se recurre. Se recurre "contra" una senlel/cia, y esa b) decisión en la sentencia de una cuesli6" que selljudiciabJe;
sen tencia se sitúa "dentro" del "marco" de unjuicio; la scntencia debe
e) gravamel/ o agravio paraquicll deduce el recurso, con ¡mués per-
provenir -como principio- de lribulIa/es del poder judicial, seal/fede-
sOllal en la cuestión;
rales o provil/ciales.
d) subsistellcia aClual de los requisi los anteriores en el momento en
Ordenando la exposición tenemos: a) sentencia; b) (dictada en)jui·
que la Corte va a sentenciar la causa.
cio; c) (por un) tribuna/ judicial.
2) Requisitos "propios":
12. - Un breve cuadro aclara el carril previo del recurso extraordina- a) existencia en la causa de una cuestión (o caso) cOllslilucioll al (o
rio. federal);


436 ('O~1I'€NDIO DE DERECHO COl'STI1\TIONAL El. RECURSO EXTR¡\fJRDIN¡\RlO 437

b) n.'lació" directa ent re esa cu(;:stión constitucional y la solución que El requisito de So.;llIencia definitiva puede ;Jsimis!1lo ser eximido cuando sobre
la sentencia recurrida ha dado al juicio: la ~ueslión constitucional anidada en el juidu se dicta Ulla resolución que, sin ser
e) que l a scntt!llci u recurrida haya sido cOllIrariu (y no favorable) :JI sentellcia definitiva. re\'istc "gravedad in~tilucional",
deret:ho federal invocado por el proponente;
16. ~ La conceptualización sobre el "tribunal superior de la cama"
d) ex istencia de:
necesita aclararse desde una subdivisión e1emenlal que deri va de aplicar el
d') sell1l'11cia definitiva dictada por sentido de "superior tribunal de /" causo" (de cada una) en j urisdicción
ti") el superior (1ÍllimoJ tribul/al cOlllpetell/e de la cmlm (para resol· federal. y en jurisdicción de las provilldas.
ver la cuestión constitucional). a) En jurisdicciól/ federal. cuya última inslancia posible es la de la
3) Requisitos "Jon/mles"; Corte Suprema, eabe Jecir que "cada causa" tiene su "superior lribwlal"
a) illtmducciól/ oportuna y e/ara (o planteo "el//iempo ") de la C!/{!,5' según la índole de esa causa (o proceso) y las instancias que para ella
tifÍlI cOlIsr;tuC'iol/(l1 en el juicio. por parte de quien luego interpone el re- proceden de la ley ; normalmente. será un tribunal federal de alzada (o cá-
curso (se llama también "reserva del caso federal" para el recurso fmuro). mara de apelaciones). pero en algunos casos podrá ser un tribunal de pri-
b) 11I(lIII('JlilllieIllO sucesivo de dicha cuestión en IOdas las instancia,;; mera instancia Guzgado) si es que de su decisión no hay recurso ante un
del iuicio; tribunal de segunda instancia (dinar<! de apelaciones).
e) illfcrposiciólI por escrito del reCllrso contra la sentencia detiniti- b) En jurisdicciólI provillcial, la cuestión difiere: si en un proceso
VD. con debido fundamentu y COn relación completa de las circunstancias tramitado ante tribunales de provincia se aspira a llegar a la Corte Supre-
del juicio que se vincu lan a la cuestión constitucional planteada. ma mediante recurso extraord inario, es imprescindible que, cualquiera sea
el sistema judiciario y procesal de instancias para ese caso, el Juperior
t..¡. - Conviene ahora abordar el requisito de que cltribunal contra tribul/al di' esa provillcia (o corte de justicia) illfervellga previameme
cuyo fallo se ref.:urre ante la Corte haya dictado seluencia en un ·'juicio'·. dictalldo Uf/a seJllellcia que resueú'a la misma cueMión fet/eral que lue-
que podemos equ iparar a proceso judicial. go lleganí a la Corte Suprema. Tallo que damos como principio inexora-
En el derecho judicial de la Corte. y a los efectos del recurso extraor- ble del derecho judicial de la Corte. en el curso progresivo que arranca del
dinario, juicio es "todo asunto susceptible de ser llevado ante los lIibuna- caso "Slrada" en 1986 y fue scguidoen el caso ''Di Mascio" en 1988.
les de justicia mediante alguno de los procedimientos establecidos a ese
efecto". 17. - La conclusión es ésta: ell "todos"los procesos que tramitan
El requisito de "juicio" se inserta en la trilogía ..tribunal judicial-jui- alife tribullales provil/ciales y el/ los que existe ul/a cuestión federal. el
eio-scnlenda delinitiva". Ello signi1ica que en el "juicio" debe haberse superior tribullal de cada prodllCitl tielle juris(iicciólI y c;ompetencia de
dictado "sentencia Jcliniti va" por el "uibunal judicial" imerviniemc; y este ejercicio obligmori(l (aunque el derec¡Ju) provi"ciallo pro/¡{ba, o l/O su-
tribunal debe haber sido "el tribunal superior de la caus(/ ". ministre recursos) para decidir esa cuestióll!ederal con carácter previo
al recurso extraordinario alife la Corte Suprema.
15. - Ti ene naturaleza de se1l1eflcia definitiva la decisión que pone
Jin a la cuestión deba/ida en el juicio. deforma que tal cuestión 110 pue- 18. - Para hacer viable la jun:sdicciófl federal en su última instan-
da ya re1/ovarse o replamearse 1/i en ese juicio I/i en otro posterior. cia, conforme al ano 116 en común eOIl el 117 .la reglllaciórl del acceso a
Hay que agregar que la Corte considera también como selllellci(/s la jurisdicción de la Corte SuprellUl desde las jurisdicciol/es provincia-
defillitivas a todas las decisiones judiciales que en cualquier etapa del les es competellcía exclusiva de las leyes del congreso y del derecho
juicio impiden su cofllilllwción. o que cau.wl/ un agravio de imposible, judicial de la propia Corte. COII el objeto de prescribir cu61 es el "supe-
difícil o deficie/lle reparación ulterior. rior tribunal de la causa" y cuál la se1lfe"cio "defi1/itim " recurrible.
43" COl>1I'I;SOIO 01:. llEJl.fJ.:1I0 CUNSTfl1Jl"IONAL
El . RECURSO EXTRAORDINARIO 439

El recurso de Quejol
úlumo a la jurisdicción fcderal (en nuestro ca.<:;o. a la extraordinaria de la
Cone). no impide que en el umbral de ese evcllI ual acceso la Corte dispon-
19. - Si la conces ión del recurso extraordinario es denegada por el I:!a de una \'ólvllla legal para abrir o cerrar su intervención. Ello porque
tribunal ante el cual se lkbe interponer ---<¡uc tiene que ser el "t rihunal su- ~l arl. / / 7 prevé su j urisdicción apelada de acuerdo a las reglas y excep'
perior tlc la causa" en la que recayó la sentencia ;;definiti va" que se apela y. ciolles que establezca el cOf/greso. y tal es lo que ha hecho el congreso al
en las provindas. el superior trihunal de j usticia local- se puede acudir ell dictar la ley 23.774.
"queja" directame1lte al/te fa COrIe SUfJrema .
23. - Como resumen, dejamos sentado nuestro criterio así:
El recurso de queja -(Iue talllbién se ha úcnominado recurso "de hecho"- dcbl!
a) el arto 280 del código procesal según ley 23.7741/0 es incomtitu-
reproducir el fund.1J1lCllto dd recurso extraordinario denegado y. ad<!lllás. :llacar el
fundamento de la rc~lud6n por la cual lo denegó c11ribunal inferiúr ("~uperi0r ciollal;
tribunal dI,! la causa"). b) tampoco lo es la ltabiliwciól/ que. COII razo1/abilidad suflciellle.
permite a la Corte reclUlZllr el recurso extraordinario CDII la sola cita
del arf. 280 mencionado. porq ue la remi sión a su sana discreción desearla
El ccrtiontri la arbitrariedad,

20. - La ley 23.774. del año 1990. im:orporó el ccrtiorari en el urt.


280 del cód igo procesal civil ycomerdal .
Según la nueva norma, la Corte puede, según su $(11/0 discreción \'
eOIl la sola ¡nvocaciól/ del arto 280, rechazar el recurso exlraordinario
en tres supuesLOs, que están tipificados así:
a) cuundofalla agravio federal suficiente;
b) cuando las cuestiones plan teadas son il/sustanciales;
e) cuando esas mismas cuestiones carecen de trascendel/cia.
,
Fundamentalmente, el certiorari argelllino es visto como negalil'O, porque la
norma que lo habilita pre\'é supuestos en que la Corte pl/ede excll/ir su interven·
ción. AUIl siendo así, hay un perfil de certiorari posi/i"Q (implícito) porque ante la
diversid:IIJ de cnu~as llegad as a la jurisdicci6n apelada de la Corte, d tribunal que
selt!cciona cuáles excluye cn virtud del art. 280 del código proce~al, también opla
por cuál.!s vn l1 (:onQCer y decidir.

21. - No cabe duda de que. tanto si la Corte emplea el ceniorari para


restrillgircomo paraasumirel acceso de una causa, el certiorari argentino
es un instrumento procesal discrecioflaL en manos de la Con e.

22. - La circunstancia de que el art. 116 de la constitución obligue a


que "todas las causas" que por razón de materia componen el bloque de
"constitución, leyes (federales) y tratados" tengan posibilidad de acceso

LA JURlSDlCCION SUPRAESTATAL

La jurisdicción interna y la jurisdicción intemacionul

1. - Al ratificar la República Argentina la Convención Americana


de Derechos Humanos, llamada Paclo de San José de Costa Rica, acotó la
jurisdicción imenwciollal de la Comisiól/ ¡memmer;call(/ de Derechos
Huma/Jos por tiempo indefinido. y la de la Cone lllleramerical/fl de De-
recfws Huma1los bajo cond ici6n de reciprocidad. conforme 10 estableció
la ley 23.054. aprobatoria de la mencionada convención.

2. - Hemos sostenido que confornlC al arto 116 de nuestra constitu-


ción hay jroisditcióllfederal illl¡Jrorrogable de nuestros tribunales en "to-
das" las causas que versan sobn.: IJUll105 regidos por los lmllldos. Ello
plantea duda acerca de si el acatamiento prestado por nuestro estado a la
jurisdicci6n internacional de la Corte Lnteramcricanaconfigura un supues-
to de "prórroga" inconstitucional de la jurisdicción argentina.
A nuesuo entender, en el caso l/O se produce prórroga algullo de (a
jurisdicciól/ argemilla. En efecto;
a) la prórroga supone que en vez de ser Juzgado un caso por tribuna-
les argentinos lo es por tribunales extranjeros; en el supuesto que analiza-
mos. hay que destacar que: a') la Corte IlIlerameric(/t/a es 111/ //,¡bllltal
¡lItemaciof/a{ (supracstatal) y no un tribu nal de un estado exuanjero: a")
además, 110 se suslituye eljuzgamielllO por los tribullales argemil/os. ya
que para el acceso de un caso a la Corte lntcrarncricana. previa interven-
ción de la Comisión. los particu lares denullciantes de violaciones al Pacto
de San José deben agotar. como principio, las instancias internas ante los
tribunales argentinos (las pocas excepciones a este principio no llegan a
desvirtuar nuestra atirmación):
442 Cm.1pE.i''OIO DE DERECHO CmNfrl1JClONAL

b) eventualmente, ello se retuerza al tomar en cuenta que ahora el Pacto


de San José de Costa Rica tiene jerarquía constitucional por la ref0n11a
de 1994. y que en las "condiciones de su vigencia" a que se refiere el art.
75 inc. 22 de la constitución ha de darse por incluido --para Argcmina- el
acatamiento a la jurisdicción supraestatal. ,

3. - El acatamiento argentino a la jurisdicción internacional de la


Corte Interamericana tampoco implica instituir una suerte de juicio en dos
instancias (una inlema y aira internacional), porque la Corte /meralllen- CAptruLo LIl
cal/al/o aClúa COIIIO tribunal de alUlda respecto de/tribullal argcmillo
que falló ell sed" ¡mema. 11; revisa -por ellde- su sen/ellcia. Se lrata de EL TITULO SEGUNDO DE LA CONSTITUCION SOBRE
unprocesn illlemaciollo1 que es independiente del tramitado ante tribunal "GOBIERNOS DE PROVINCIA"
argentino, o sea, de un "lluevo juicio" distinto del anterior finiqu itado en
sede interna.
Los artículos 121 a 129
4. - Decir esto significa recordar que {a Corte bllemmeriC(/II(1 110
ef/(ra al (jl/{ílisis de la cOllsIi/ucionalidad o ülcon.\'li/ucionalidad qlle de l. - El título segundo de la constitución fue siempre una especie de
acuerdo al derecllO imenlo !'llet/l>1I afec/dI" al acto o la omisiólI acusa- abreviatura de competencias que, en parte. sistematizaba mucho de lo que
dos de violatorios al Pacto allle la jurisdicciólI sllpraestatal. lo que de- contenía el texto constitucional en el resto de sus normas.
muestra qu..: no hay identidad tOlal de "materia" entre lo juzgado en sede Este perfil no ha desaparecido con la refomlade 1994, pero ha recibi-
interna y lo que se juzga en sede internacional. do retoques con nllevas competencias que ahora se agregan, y con la in-
serción de ese lambién l/lIevo sujeto de la relaci6t1 federal que es la ciu-
5. _ Nuestra comprensión dc la doble jurisdicción -Ulla intema y otra inter- dad autónoma de Buenos Aires.
nacional-nos !leva a sostener que ni la Corte Suprema de Justicia ha dejado de ser
"Suprema" (y última instancia en nucstra jurisdicción intcrna) ni la Corte Interamc- Bien que con insistencia hemos recalcado que la ciudad de Buenos
ricana de Derechos Humanos es un tribunal que revisa -o eventualm<.!nte "revoca"- Aires no se equipara a una provincia, la inclusión del art. 129 en este sec-
sentencias argentinas. Se trata de dosjruisdiccion es sep<ffadas que no infervienen tor de la constitución reviste el alcance, a nuestro criterio, de servir como
en rlll mismo proceso. presunción favorabl e a la autonomía de la ciudad cada vez que haya que
despejar dudas o interpretar congruentemeOlc nomms ambiguas. y hasta
para integrar carencias normativas. Ello en todo cuanto hace a la situación
de la ciudad autónoma en relación con su condición de capital federal y
con las autoridades y competencias del gobierno federal.
,
1.11;.,,--, JJ '; J Ir 2. - El tradicional duaJjsrnd de "est¡lOO federal-provincias" nos acostumbró a
hablar de gobierno federal y gobiemos provinciales, y de las respectivas competen-
",ft\l \\" ".' jt! cias calificadas con los dos niismos adjetivos.
1 J, ~.

La actual intercalación dcl 8obiemo autónomo de la ciudad de Bllenos Aires,


no siempre pennite darlo por ilicluido implícitamente con la mención de los gobier-
nos ''provinciales'' y sus recíprocas competencias. porque la ciudad. no es una pro-
vinda y no se la equipara. ni por naturaleza ni por competencia.
De ahí que. a veces, y e n cuanto haya semejanza de la ciudad con las provin-
444 ('OMPE.... \)IO DE DERECHO CO:"S [t [VClON"'I , EL Tt"n.:LO SEOl ~1)() DE LA COM I! luaó",

cías. pueda genéricamentl! hacerse referencia a gobiernos "Ioctllt't" y a ('olllpt'/;.m - También sin reforma. el lIrt. 128 se refiere al deber rederal de los go-
cios "Ioc(lles", si es que ulla cuestión dclermin.:ada habilita a subsumir en esa ca[~­ bernadores de provincias.
goría t:omún a lo pro\'incial ya lo propio de la ciudad. El nuevo arto 129 está dedi cado á1 gobierno autónomodc la ciudad de
Buenos Aires.
1:.1 articulado
El F.statuto Organi1,.ati\'o de ht ciudad de Buenos Aires
:\. - En rigor. el texto que va desde el arto 121 hasta e l 129 obliga a
hacer rccapiluladont.:s y reenvíos. De alguna manera, el l..Iesarrollo que pro-
4. - El arl. 129 dio la denominación de "Estatuto Organizativo" al
curamos dar a toda la consti tución en este Compendio contiene los lemas a ordenamiento qUl! debía dictar - y que dictó en 1996~ el órgano de origen
los que acá hay que remitir.
electivo convocado al erecto.
En un recordatorio abreviado, se ha de repasar (Odo cuanto alude a
nuestro federalismo -antes y dt:spués de 1994-, a las provillcias, a la ciu- Arduo debale se susdt6 en lumo de esa denominación. ¿El ESlaluto era o 110
dad aulÓIIO/lla de Buel/os Aires, eOIl más el reparLO de compe/encim. era l/na "("ollslilllci6/¡" pura la dudad autónoma'!

El (In. /21, cuya red acción no ha variado con la reforma de [994, Más allá de la di~cusi6n I.k vocabulario. recordemus que el prdmbulu del E.'\-
incita a repetir que con ella aparecieron nuevas competencias concurrentes latUlo concluye afirmando que lus rcpres\:nlantcs del pueblo de la eiudad :'sallCio-
namos y promulganXJs la pre;;cnle ("(JII~lilllción como E}tllluto Orgllfu¡;¡ItIl'O de la
en los arts, 41 y 75 ine. [7, Yque se plasmó la figura de la " I cy~convcnio"
dudad de OUCllOS Aires".
en Illátt:ria de copart id pación red eral impositi va (ar1. 75 ine. 2°).
En cuantO al an /22, también sin modificaciones, cabe dec,ir que la 5. - El articulado comienza así:
norma describe. en convergencia con la primera parle del arto 123. la ex~ "Artículo 1°. ~ La CiuJaJ de Buenos Ai res, conforme al principio fe~
presión de las autonomías provinciales. Debe relacionarse. además, con la
deral establec ido en la Consti tución Nacional, orgal/i:a SI/S ú'slilucioneJ
glJr(lIllía federal que depara el ano 5° y con el remedio excepcional de la
autónoll/(u <:omo democracia participativa y adopta para su gobierno la
imerve"ció" federal. fornla republicana y representativa. Todos los actos de gobierno son pú~
El arto 123. reformado, apunta a la supremacía rederaL e instala sin blicos. Se suprimen en Jos actos y documelllos oficiales los títulos honorí~
lugar a duda la autonomía de los municipios. ficos de los funcionarios y cuerpos colegiados.
El art. 124 es nuevo. y agrupa una trilogía: la regionalización. los co n ~ La Ciudad ejerce lodo td poder l/O conferido por la C01l.nilUciáll Na-
venios internacionales que pueden concertar las provincias. y el dominio cional al Gobiemo Federal . ..
provincial de los recursos nalurales.
"Artículo 2°. ~ La Ci ud ad de Duenos Aires se denomina de este modo
El arto /25 reproduce en su primerpárrafoeltexlO del ex ano 107. Yen o como "Ciud ad Autónoma de Buenos Aires".
el párrafo segundo desdobla: por un lado. competencias locales en materia
"Anículo 3". ~ Mientras la Ciudad de Buenos Aires sca Capital de la
de seguridad social y, por el Olro. competencias concurrentes enlre el cs l a~
República su Gobierno coopera con las autoridades federales que residen
do rederal.las provincias y la ciudad de Buenos Aires.
en su territorio para el pleno ejercicio de sus poderes y funciones ... "
El arl. /26 no ha tenido modificaciones, y agrupa remisiones a podc~
(La ba~ t urdilla es nuestra.)
res prohibidos a las provincias, así como alusiones a temas varios (comc r ~
eio. navegación. aduanas. bancos, moneda, etc.). El texto del Estatuto es sumamente extenso: tiene 140 artículos y 24 cláusulas
El art. /27 subsiste sin reforma. Implícitamente. cabe ligarlo al tema transitorias. El coll\enido abarca principios gen\!rales: una detallada declaración de
de los límites inlerprovindales. dcrechos y garantías: una serie de políticas especialé:s que cubren un arco amplio de
446 Ccl~I'l'.'lJlO UE DERECUO ("O¡';SHn :C10NAL

materias y cuestiones. para luego entrar al detalle de la estructura orgánica y funcio-


nal del poder.

6. - Una sola reflexión merece no ser omitida.


Cuando SI.'! promulgó e l Estatuto surgieron objecinnt:.s centradas fun -
damenta lmente en el argumcnlodc que. por no ser un .. constilución. había
excedido sus limites al desarrollar una "parle dogmática" que. según ese
enfoque, le era impropia y ajena.

U debilidad del akgato cae sin esfuerw cuando, más allá nuevamente del
nombre as.ignado al Estatuto y hasta de su namralc .....a ontológica, damos por seguro
que todo ordenamiemo jurídico-político destinado a una comunidad tcrritorialmente
demarcada y dotada de autononúa incluye y resuelve nccesariamente en su conteni-
do -sea breve o eXICllS(l- dos cll es/iones: a) la /llanera de situar {/ las personas en
esa ~mullidud (part!! dogmática), y b) la organización del poder (parte orgánica).
Si al térmillo "Estatuto Orgaoizmivo" que consigna el art. 129 se lo pretendió
circunscribir a la "organización" de la estructura de podcr, se olvidó que además de
un "cstodo-IIJX!rllIO" siempre hay ilk:scindiblcmcnte unido un '·cstado-cO/llIl1lidml".
scglÍn cnsdia Pablo Lucas VerdlÍ, y que se trata de las dos caras r.k una misma
moneda: la COllvivencia polítka.
En la ciudau de Buenos Aires hay seres humanos que convi\"t.~n: un "Estatuto"
que organiza a la ciudad los abarca y los instala, y cuando o rganiza al pod ...-r lo
oq;aniza ''para'' pro\'ccr al bienestar dc los cOllvivientes .

j. ,
JI

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