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Desborde popular y

crisis del Estado


José Matos Mar

Integrantes :
Cristina Huayama Espinal
SAMANTHA GERONIMO MENDOZA
Índice
de contenidos
01 Introducción
03 El nuevo rostro urbano:
La forja de una identidad

02 El nuevo rostro
del Perú
04 La crisis del estado y
el desborde popular
Introducción
Este libro fue escrito por José Matos Mar fue
publicado en 1984 y refleja el aura de una década
marcada por el retorno a la democracia , la crisis
económica y la expansión del terrorismo a la capital.
El paso del tiempo hizo necesaria una actualización
de información ya que la realidad del pais es otra, 20
años después, en el 2004, el autor vuelve sobre el
para “re-contextualizarlo” y darle una mirada al Perú.
EL NUEVO ROSTRO DEL PERÚ
Matos señala en el contexto internacional,
durante la década de 1970.
El reordenamiento mundial en las relaciones
de poder
Una crisis económica internacional
Un acercamiento en las comunicaciones
entre todas las naciones

2 PERIODOS: 1968-1975 , 1975-1980


EL NUEVO ROSTRO DEL PERÚ
En el ámbito social y económico se expone como el rostro del pais a
cambiado ya que las migraciones de pobladores de los andes a las
ciudades costeñas son cada vez mas comunes debido a la
búsqueda de mejores servicios y atenciones del estado.
MATOS MAR señala la existencia de dos circuitos económicos
coexistiendo: El oficial y el alternativo. El segundo es creado como
respuesta a la indiferencia desde la clase política que maneja el
pais .La inflación ya se encontraba en marcha y a inicios de la
decada 1980, con el retorno de la democracia, el costo de vida en el
pais iba aumentando. Las estructuras familiares se estructuraron
buscando la supervivencia. Una de las características que señala
Matos es la familia como centro de la empresa en el sector
contestatario.
Añadiendo también la fuerte presencia femenina
como líder dentro de este grupo. Frente a este
fenómeno la accion del estado para controlarlo fue
mínima ya que el reprimirlo, como se indica
conllevaría a la aparición de “formas violentas de
obtención de recursos o ingresos ( robo)”. Por lo que
no le quedaroa otra alternativa que tolerar el
desborde generado . El cual, fue generado por su
mismo inoperancia, asi como tambien la del sistema
legal. Por otro lado, las minfestaciones populares:
paros, huelgas fueron mas frecuentes durante la
decada de 1980
Se expone , hacia el final del capitulo, la separación
entre el ESTADO Y LA SOCIEDAD. La cual es visible
desde la década de 1950 con una relación de oposición
a los formal, que fue establecido por la sociedad
peruana del siglo XIX. El proceso de urbanización
acelerado no fue acompañado por un proceso de
industrialización, por lo que las estructuras económicas,
sociales y culturales estan deterioradas, surgiendo la
respuesta contestaria antes señalada.
El nuevo rostro urbano : la forja de una
buena identidad
Del 80% de poblacion en los sectores
contexto populares: aprox 37% barriadas, 23% en
1954 : Lima Metropolitana con una poblacion
de aprox 6 millones distrubida en 47 distritos y urbanizaciones populares y 20% callejones
2 provincias : Lima y Callao.Su expansion y corralones . En el perido de 1940y 1984
urbana esta conectando 3 valles costeros: la capital del Perú aumentó si poblacion
Rimac,Chillon y Lurin . Su poblacion esta casi 10veces. Censo de 1940: 645,172
polarizada .Por un lado aprox 80% vive en habitantes
asentamientos urbanos populares y el 20% en
Censo de 1961: 1,652,000
barrios residenciales de los sectores medios y
opulentos
censo de 1972: 3,302,523
Censo de 1981: 4,492.260
en 1984: 6 millones
Este salto demografico constituye uno de los mayores cambio en el proceso peruano . La geografia de la captial ha sufrido alteraciones y
cambios. En 1940 era rural 65% y ahora urbano 65%.El ritmo de crecimiento de la capital es mayor que el nacional. Lima tasa de crecimiento anual
de 3.7% periodo de 1972-1981, el pais solo tuvo un 2.5%. en el mismo tiempo.
Lo cual significa que Lima Metropolitana albergo 41%poblacion urbana del pais y al 27% de su poblacion total .Julio de 1984 viven en Lima cerca
50% de la poblacion urbana nacional y 30% de la poblacion total del Peru .
La gran Lima absorbe una de las mas altas proporciones de los migrantes del pais , los cuales abandonan su lugar de origen para buscar
oportunidades.
Segun Censo nacional 1981 el 41% de su poblacion (1.901,697 habitantes ) era migrante de lps cuales el 54%provenia sierra. De la poblacion
inmigrante proveniente e los 24 departamentos : Ancash (10.6%) ,Ayacucho (8.38%), Junin (8.11%)y la mas baja Madre de Dios (0.13%). Cabe
destacar mas del 10% de estos inmigrantes provenian de las otras provincias de Lima. especialemnte distritos serranos.En 1984 Lima es ciudad de
forasteros. ( mutlitides de origen provinciano desbordan el espacio urbano).
El crecimiento de la poblacion ocurre paralelamente a la expansion del area ocupada . la superficio urbana de Lima crecio :
periodo de 1930-1940 en 800 Has ( 3,166 a 3,966 Has)
1940-1961: 4,711 Has( 3,966 a 8,677 Has)
1961-1981 :19,716 Has (crecimiento explosivo ) (8,766 a28,393 Has)
en los tres años siguientes de 28,393 a 31,255 Has
Dividiendo LIma en dos zonas : primera corresponde a los distritos surgidos de barriadas y urbanizaciones popilares como . San Matin de Porras ,
Carabayllo, Comas, Independencia ,VMT, El Agustino, San Juan de Lurigancho y la segunda corresponde a los disrteitos tradicionales y modernos
(constituidos pr urbanizacion formal) .En el censo 1972 la primera zona abergaba al 24,4% de poblacion limeña y la segunda al 75,6%. En un estidio
realizado por el INSTITUTO DE ESTUDIOS PERUANOS (1983) la primera alcanzo el 36.,4% y la segunda disminuyo al 63,6% (lo cual significa en 14 años
un incremento del 12% para los distritos surgidos invasion y urbanizacion popular y una disminucion para los distritos constitudios por urbanizacion
tradicional y legal). Hay un desborde espacial y demografico del sector considerado de poblacion de bajo ingreso .
La invasion de nuevas areas como margenes del Rio Rimac , los cerros y arenales han reducido a los sectores medios y opulentos a una situacion
de aislamientos en sus barrios residenciales .Esta mayor concentracion migrante en barriadas y urbanizaciones populares ha constituido un factor
determinante de la NUEVA DINAMICA SOCIAL METROPOLITANA.
Hasta la decada 1950 el crecimiento urbano de Lima se desarrollo soguiendo normas oficiales (dentro de los arcos oficiales de los planes de
expansion municipal)
Las migraciones masivas chocaron con este regimen que no fue pensabdo como habitat para poblaciones provincianas.El encuentro de estas masas
migratorias con esta barrera produjo en 1950 las primeras rupturas de la legalidad trradicional : enfrentando un problema de vivienda sin solucion
debido a los terminos impuestos por el desrrollo normal de la estructura urbana de la propiedad , iniciaron la ocupacion de terrenos publicos y
privados imponiendo el reconocimiento de su derecho a un lugar donde vivir (via protesta popular y violencia)
MIGRANTE- INVASION
EL migrante tuvo que adaptarse al conexto de la ciudad y buscar soluciones dentro de sus posibilidades. Tenia dos opciones :
opcion 1: someterse al sistema legal imperante aceptando la falta de techo
opcion 2: violentar los limites del sistema establecido .
Decidiendo la segunda opcion : la invasion de areas marginales posibles de ser urbanizadas . Tanto migrantes como los nativos que conformaban
los sectores populares urbanos se convirtieron en invasores de terrenos llegando a apropiarlos por la fuerza, siendo ei tiempo su mejor aliado pues
gracias a su tenacidad lograron que las fuerzas del orden se cansaran y aunque la posesion del suelo no estuviera asegurada LEGALMENTE,
empezaron construir sus viviendas ( esteras a ladrillo) . Alcanzaron el reconocimiento legal y los titutos de propiedad.
La invasion : fenomeno social primero urbano y luego rural.
Con el paso del tiempo se mostraria que la presion ejercida por los masas fue suficiente para forzar el reconocimiento del Estado o almenos
alcanzar de las autoridades una actitud de conveniente indiferencia , iniciandse la era de la nueva contestacion de las masas.
La crisis economica de fnales de la decada de 1970 la nueva masa urbana quedó abandonada ante una insuperable barrera
economica, social y cultural.
La reduccionde las opciones laborales , el crecimiento de la tasa de inflacion, los bajos niveles salariales etc. pusieron fuera del
alcance del nuevo limeño los estilos cosmopolitas en que las clases dirigentes aspiraban a enmarcar el desarrollo de la nueva
Lima.
Para 1984 la inmensa corriente mifratoria ha reducido y el fenomeno de desplazamiento demografico empieza a perder importancia
pero se empiezan recien a manifestarse las consecuencias de este proceso , Lima se ha convertido en escenario de una masivo
desborde popular , Lima tiene una nueva identidad ( composicion dominante andina de su nueva poblacion )
El centro de Lima aquiere aspecto de ferias provincianas ,la construccion de casas deriban de modelos mas serranos que europeos ,
ejemplo : el techo a dos aguas y la teja, se practica sistemas de reciprodidad como la minka. Ceremonias asociadas a la
construccion andina de viviendas en forma urbana : el techado de casas y edificios se celebra agasajando a los que participaron del
trabajo , la nueva vivienda es bautizada con la tinka andina y cruz de flores en la parte mas elevada de la construccion , se colocan
talismanes y amuletos para proteger la casa del mal .
}
Nuevas formas de organizacion social urbana
Entre las nuevas formas de organizacion social urbana que surgen del aporte serrano tenemos las asociaciones de migrantes
que combinan formas de organizacion gremial con sistemas andinos comunales de reciprocidad y agrupacion, El migrante en Lima , participa activamnete de estas
asociaciones. Sus locales son centros de atraccion familiar, se festejan bautizos , bodas, cumpleaños y aniversarios .
Como en el pueblo de origen la vida de la asociacion provinciana gira en torno a la fiesta folkloricca . Innumerables migrantes en Lima siguen usando la fiesta como eje
importante de organizacion e identidad.
Las asocioacones y clubes que agrupan migrantes de aldeas, pueblos y ciudades serranas han proliferado en Lima llegando casi a 6 mil, estas asociaciones tienen en comun
ofrecer al migrante que no se sienta aislado con una base de vida social y una representacion frente a las autoridades y el Estado . Refuezan la capacidad del nuevo limeño
para transerir el vinculo andino y defender su identidad cultural. El baila y la musica forman parte de este sistema cultural .
Musica andina
La musica andina en su nuevo ambiente evoluciona y se urbaniza,: en Lima residen ahora los mejores compositores y los mejores fabricantes de instrumentos serranos ,la
musica andina adopta la tecnologia moderna y se vale de ella como instrumentos que recoge formas variadas del folkore deelviendo a la sierra un nuevo folklore nacional.
surge acveso del migrante andino a la radio y tv ( emisoras radiales limeñas con musica andina)
La popularizacion de la musica andina promueve fusion de culturas que opera en 2 direcciones opuestas:
1)introduce en la juventud de sectores medios y altos un nuevo interes por intrumentos serranos como la quena, zampoña, el charango y se los incorpora en musica rock ,
pop , salsa y otros ritmos
2)por otro lado surgen generos nuevos como la chicha . cumbia peruana y guaracha andina , es el mas importante y llegado a ser el segundo ritmo musical popular
desdpues de la salsa ( desde su nacimiento en 1968)
LA CRISIS DEL ESTADO Y EL DESBORDE
POPULAR

Perú Oficial
de las instituciones del Estado, los partidos, la banca y las empresas, los
Perú Marginado
plural y multiforme; del campesinado y la masa urbana, de las
sindicatos, las universidades y colegios, las Fuerzas Armadas y la Iglesia; de asociaciones de vecinos, los cabildos tradicionales, las rondas y los
los tribunales, la burocracia y el papel sellado; de la cultura exocéntrica. varayoc; de los talleres clandestinos, los ambulantes y las economías de
trueque, de reciprocidad y de mera subsistencia; de los cultos de los
Privilegiado por ser el representante de la cultura cerros
del conquistador, fueron las ciudades. En ellas; residencia de españoles, Surgido de las guerras de la Independencia, sin
criollos y mestizos, se constituyeron las bases de un mundo político, realizar mayores intentos de incorporarse al resto del
económico, religioso y cultural que, articulado desde la metrópoli, creó país definió su propia identidad como Estado
una imagen de unidad. Con una presencia insignificante de los Nacional, sobre la base del supuesto implícito de que
representantes del pueblo conquistado y manteniendo con el Perú rural, la nación era el mundo oficial de las ciudades; de que
plural y multiforme de los campesinos, apenas relaciones de su relativa unidad cultural e institucional, eran la
explotación y dependencia señorial, el mundo de las ciudades pudo misma unidad de la nación y de que el ajeno universo
durante largo tiempo incubar la ilusión de ser el depositario de la de las mayorías que persistía más allá de las
identidad y del poder. Lima, en oposición al Cusco del Tahuantinsuyo, ciudades representaba apenas una marginalidad
se constituyó desde esa época en corazón y símbolo de esa ilusión de intrascendente, a la que tarde o temprano, el
identidad. desarrollo de la civilización haría desaparecer
La existencia de una estructura real que concentraba los poderes y las
participaciones en el monopolio exclusivista de las clases urbanas daba visos de
realidad a esta ilusión. El derrumbe de la economía oficial del país, como
consecuencia de la derrota de 1879, dio comienzo al resquebrajamiento ideológico
de la ilusión de identidad. La participación decisiva del campesinado en la Campaña
de la Breña trajo a primer plano la existencia de un Perú que, ajeno al mundo urbano,
se reclamaba tan peruano como éste. El desarrollo de las plantaciones azucareras y
algodoneras de la costa, convirtió a parte de ese campesinado marginal, en actor
protagonista de la economía oficial, al tiempo que lo proletarizaba desplazándolo
hacia una condición urbana y semi-urbana. Los ideólogos de la época redescubrieron
el «Perú Indígena» y sacaron a la luz una identidad alternativa: se hicieron los
portavoces de una «nación incásica». Pero aunque sus reflexiones reclamaron al
Perú Oficial a la conciencia de que su monopolio se encontraba amenazado, no
llegaron a cristalizar acciones eficientes de transformación. El Perú había cambiado
poco desde los tiempos de la colonia. Las ciudades seguían siendo reductos
privilegiados de criollos y mestizos viviendo una cultura de casi exclusiva raíz
europea y concentrando los instrumentos del poder
El Perú había cambiado poco desde los tiempos de la colonia. Las
ciudades seguían siendo reductos privilegiados de criollos y mestizos viviendo una cultura de
casi exclusiva raíz europea y concentrando los instrumentos del poder. Las masas rurales
marginadas seguían siendo ajenas a toda verdadera participación. Sin embargo, dos problemas
comenzaban a aflorar. La incongruencia de un Estado Nación que no representaba ni expresaba
las aspiraciones de la gran mayoría de sus súbditos, extraños a esa específica definición de
nacionalidad

Y el problema de una identidad nacional que no se expresaba en la cultura formal,


frente a una cultura formal que se proponía como identidad, pero que desconocía la
multiplicidad de las tradiciones populares y se desarraigaba cada día más. Estos problemas no
llegaron a hacer crisis y el horizonte de las ideologías de la época no pudo formularlos en su
verdadera dimensión. El ingreso y difusión de las doctrinas revolucionarias europeas, a partir de
los comienzos de este siglo, no hizo sino reforzar las estructuras heredadas desde los tiempos
coloniales. Las utopías proveídas por socialistas y anarquistas, carecían de raíces en el suelo
autóctono y contribuyeron frecuentemente a desfigurar, en la conciencia de los intelectuales y
de la masa urbana en expansión, las imágenes del pasado andino y de su realidad vigente. La
aspiración del artesanado y el proletariado de la naciente izquierda era, no la transformación de
los términos y relaciones entre lo Oficial y la nación plural de las mayorías, sino la mera captura
y aprovechamiento de las estructuras de poder del Estado Oficial
Las mayorías nacionales se
mantuvieron durante largo tiempo, ajenas a una revolución que .les resultaba tan extraña como
la de la Independencia. En tanto las instituciones del Perú Oficial se expandían y consolidaban,
poderosas presiones demográficas se gestaban 'en el medio campesino, preparando, de manera
silenciosa, la explosión del medio siglo.
Las transformaciones sufridas por el Perú desde la década de 1950, han repercutido recién en
forma poderosa sobre el balance y equilibrio de las relaciones entre el mundo de la oficialidad y
el de las mayorías, abriendo cauces aún nuevo estilo de revolución.
El huaino y la «chicha» entran en los barrios residenciales a través de nuevas clases medias de
origen provinciano, las programaciones del cine, la radio y la televisión se modifican para
satisfacer los gustos de la mayoría. Sectores de élite hacen también esfuerzos para adaptarse o
se encierran en cenáculos y pequeños círculos. El proceso en marcha corroe y disuelve la vieja
ilusión criolla de la identidad nacional y pone en tela de juicio las estructuras institucionales del
Estado-Nación. Por vez primera, estos dos problemas, soterrados desde la Conquista en los
sótanos de la conciencia nacional, no pueden dejar de ser planteados. El espectáculo de un
Estado cuya autoridad, ya cuestionada, se reduce y cuyas instituciones se ven desertadas por
las masas; y el de una cultura oficial que desconoce la lengua y la tradición mayoritaria,
mientras que se expresa en lenguajes y formas de origen extranjero; abren interrogantes sobre
la legitimidad del Estado y la definición de la nacionalidad. El Perú Oficial no podrá imponer otra
vez sus condiciones. Deberá entrar en diálogo con las masas en desborde, para favorecer la
verdadera integración de sus instituciones emergentes en el Perú que surge.
Una presencia cuestionadora
La presencia masiva y cuestionadora de las barriadas en el Perú transformó radicalmente el paisaje urbano y la dinámica social del país.
Desafiaron las normas establecidas, tanto en la ocupación del espacio urbano como en la participación en la vida política y económica. A
través de invasiones organizadas y una activa urbanización, demostraron una determinación firme para reclamar su lugar en la sociedad
peruana.

Esta revolución urbana, sin precedentes en la historia del país, marcó un cambio estructural profundo a nivel nacional. Las barriadas,
siguiendo el modelo de los ayllu de las comunidades campesinas andinas, se convirtieron en los motores de la organización social y
cultural de base. Mientras tanto, los nuevos distritos populares y medios en las principales ciudades emergían como centros dinamizadores
de un Perú moderno y pluralista.

Sin embargo, el Perú oficial, arraigado en una tradición que data desde la independencia en 1821, seguía un camino divergente. Concentrado
principalmente en los intereses de una élite limeña, este sector del país mostraba una desconexión con las demandas y aspiraciones de las
grandes masas urbanas. La prioridad estaba puesta en proteger los intereses económicos y el poder nacional, descuidando aspectos
fundamentales como la buena gobernanza y la lucha contra la corrupción.
El acceso al mercado
La presencia de la barriada en el contexto económico peruano tiene dos aspectos principales. En primer lugar, representa la incorporación masiva de
una población al mercado de consumo y al mercado laboral. Esta población, proveniente mayormente de la economía campesina, al llegar a la ciudad
se convierte en una demanda creciente de bienes y servicios, especialmente en áreas como alimentos, bebidas, servicios y construcción, lo que impulsa
el crecimiento del mercado interno.

En cuanto al mercado laboral, durante el período entre 1940 y 1970, la población de las barriadas se integró en la fuerza laboral urbana, obteniendo
ingresos salariales y cierta cobertura de seguridad social. Sin embargo, a partir de 1970, el crecimiento de la oferta de mano de obra superó la
capacidad del aparato productivo para absorberla, generando así una "población excedente" de trabajadores.

Inicialmente, el Perú oficial adoptó una actitud tolerante hacia el fenómeno de la barriada, dado su impacto positivo en la demanda de bienes y
servicios y en la oferta de mano de obra. Sin embargo, esta actitud cambió cuando el fenómeno se convirtió en un problema social y su gestión se
volvió complicada.

En lugar de abandonar el mercado laboral, los habitantes de las barriadas optaron por una estrategia inesperada: construir su propia economía, generar
autoempleo y aceptar condiciones laborales precarias para sostenerse o acumular un pequeño capital. Esta situación, conocida como informalidad,
representa una forma peculiar de integración al mercado capitalista, ya sea como proveedores de bienes y servicios, compitiendo deslealmente o como
consumidores, dando así un primer paso, aunque atípico, hacia la modernización económica.
El escape de la pobreza extrema
El establecimiento de las barriadas significó para los migrantes provincianos una transición desde la pobreza extrema rural hacia una forma de pobreza
urbana. Aunque para algunos analistas esta distinción pueda parecer sutil, para quienes vivieron este cambio representó una nueva perspectiva de vida.

De la carencia y aislamiento de la comunidad rural a los desafíos y rigidez de la vida citadina, de la falta de oportunidades a la entrada a un mercado
laboral más amplio, de la ausencia total de servicios básicos a la posibilidad de acceso a ellos en la ciudad en desarrollo, la migración trajo consigo una
serie de transformaciones significativas en la vida de los migrantes. Aunque estas experiencias no se reflejaban en las estadísticas de pobreza de la
época, quedaron grabadas en las historias personales de quienes se vieron inmersos en este proceso.

El proceso de adaptación no fue fácil. Se tuvieron que superar barreras culturales y sociales desconocidas en la ciudad, así como buscar empleo y
establecer redes sociales. Familiares, compadres y paisanos desempeñaron un papel crucial al ayudar a los recién llegados a integrarse en la ciudad y
encontrar trabajo.

En el ámbito laboral, los migrantes se enfrentaron al desafío de encontrar empleo en un mercado competitivo. Algunos lograron emplearse en la
industria, otros incursionaron en el comercio, mientras que otros se vieron limitados a trabajos eventuales o múltiples. Sin embargo, la unidad económica
familiar fue fundamental para la subsistencia, con todos los miembros contribuyendo al ingreso familiar a través de diversas actividades económicas.

A pesar de las dificultades, la aspiración común entre los migrantes era el sueño de tener una casa propia, como una forma de reducir costos y asegurar
un futuro mejor. La educación también se convirtió en una prioridad, considerada como el camino hacia el progreso y una herencia valiosa para sus hijos.
No una, sino muchas Lima
Al llegar al final de la última década del siglo XX, las barriadas habían logrado una transformación sin precedentes en Lima. Esta revolución, aunque
silenciosa, fue notable: las barriadas se convirtieron en distritos, estos distritos se organizaron en nuevos espacios agrupados en conos, y la población
marginada gradualmente se convirtió en la población mayoritaria.

Mientras tanto, el Perú oficial seguía aferrado a un modelo centralista y tradicional, dependiente y moderno, con una fuerte influencia occidental. Este modelo,
a menudo denominado "blanquiñoso", se mantenía distante de la idea de construir una sociedad nacional andina, pluralista y multiétnica. No lograba formular
un plan nacional de desarrollo que reflejara la realidad del país.

En contraste, el "Otro Perú" había construido una realidad limeña completamente nueva. Aquellos que, en un principio, fueron considerados indios, serranos, o
cholos, ahora eran tan limeños como cualquier otro habitante de la ciudad criolla tradicional. Había surgido un nuevo grupo de limeños con un estilo de vida
dinámico, trabajador y emprendedor, que representaba verdaderamente la diversidad del Perú.

Esta transformación fue un logro emocionante y complejo que no puede describirse completamente. Millones de personas, en tan solo unas décadas, lograron
obtener vivienda propia en Lima, encontrar empleo, formal o informal, y convertirse en ciudadanos activos y participativos. Superaron numerosos obstáculos y
aprovecharon las oportunidades sin integrarse en partidos políticos, movimientos radicales o gobiernos militares.

Al finalizar esta etapa en 1990, ya no eran vistos como marginados, sino como parte integral de la población de los sectores populares y medios de la gran
ciudad y de todo el país. Se convirtieron en ciudadanos económicos y políticos competentes y participativos, contribuyendo a la conformación de un Perú
moderno y representativo de su diversidad cultural.
¡Gracias!

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