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Documento de trabajo: Pantallas y dispositivos digitales en el

hogar y en las escuelas

2019/ Foro Internacional de la Educación Steiner/Waldorf


10 consejos para las escuelas Steiner Waldorf

Declaración sobre
pantallas y dispositivos digitales para una infancia saludable : Navegando las olas de la
tecnología para una infancia saludable

Las tecnologías digitales son parte de la vida moderna y necesitan un lugar apropiado en la
educación, tanto en la enseñanza como en el aprendizaje. Los niños desarrollan sus capacidades
para experimentar el mundo en etapas sucesivas de desarrollo: táctil, emocional, social y cognitiva.
En consecuencia, las respuestas a las preguntas “¿Cuándo?” y “¿Cómo?” para aprender y utilizar
los medios digitales son cruciales para el desarrollo de una infancia saludable. Ni el uso ingenuo de
las tecnologías digitales ni su rechazo defensivo pueden conducir a aplicaciones hábiles y
apropiadas. Lo que se necesita es un enfoque holístico que abra el camino desde experiencias
concretas y primarias del mundo (actividad sensorial, motora y rítmica), a través de una
familiaridad con una variedad de medios diversos (libros ilustrados, textos impresos, manuscritos,
películas, teatro) hasta la comprensión de las tecnologías digitales y sus aplicaciones como
herramientas para el aprendizaje.
La Educación Waldorf reconoce que estas herramientas están destinadas a mejorar
determinadas habilidades humanas, pero comprende que, al principio, se necesita tiempo para
desarrollar estas habilidades humanas, incluidas las habilidades sociales. Cuanto más avanzada sea
una habilidad, más se podrá aprovechar un dispositivo diseñado para mejorarla. En la medida en
que uno domine las operaciones matemáticas, por ejemplo, un dispositivo de cálculo puede ser de
gran ayuda. Sin embargo, cuando la calculadora se introduce antes de que se desarrolle la habilidad
matemática requerida, la calculadora puede, como resultado, servir para reemplazar una habilidad
en lugar de apoyarla.
En el caso de los dispositivos digitales (computadoras, tabletas, teléfonos inteligentes y
similares), las habilidades que pretenden respaldar son las funciones cognitivas de la experiencia
humana consciente. De hecho, simulan estas funciones. Eso significa que las capacidades humanas
se mejoran (pueden ser) y se benefician del uso de estos dispositivos. Pero el principio sigue siendo
válido: primero desarrolle la habilidad y sólo después utilice la herramienta para mejorarla.
Desde este punto de vista, la pregunta fundamental respecto del uso de la tecnología digital en
la educación debe ser: ¿Cómo desarrollamos toda la paleta de la experiencia humana para que la
tecnología digital pueda mejorarla, en lugar de suplantarla? En un intento de contribuir al discurso
en torno a esta cuestión, el Foro Internacional para la Educación Waldorf (Círculo de La Haya) ha
redactado los siguientes 10 principios:
Hacia una “infancia sana en la era de la tecnología digital”:
1. Los niños aprenden mejor mediante el contacto directo con las personas.
2. Los niños aprenden de manera diferente en diferentes etapas de su desarrollo.
3. Los niños necesitan moverse para aprender. Cuanto más pequeño es el niño, mayor es la
necesidad de estar activo y prácticamente comprometido.
4. El desarrollo de la motricidad gruesa precede y potencia el desarrollo de la motricidad fina.
También los potencia.
5. Los niños deben completar, en gran medida, el desarrollo físico de sus órganos perceptivos o
sensoriales antes de que estos sean aplicados a los dispositivos digitales.
6. El juego sin guión iniciado por los niños es el trabajo más productivo de la niñez, ya que les
permite desarrollar su imaginación explorando y experimentando el mundo que los rodea.
7. A medida que los jóvenes estudiantes comienzan a tener acceso a tecnologías digitales
basadas en pantallas, es vital que los adultos garanticen que los niños y los jóvenes estén seguros en
el mundo en línea y que los niños aprendan a utilizar estas tecnologías con cuidado y
responsabilidad. Las facultades humanas de percepción, discernimiento y pensamiento objetivos,
que constituyen la base de la libertad y la responsabilidad, necesitan tiempo y espacio para madurar.
8. Los niños necesitan primero desarrollar habilidades para la vida como base para adquirir
habilidades digitales basadas en pantallas.
9. La educación debe guiarse por valores pedagógicos, más que por intereses económicos o
políticos.
10. El aprendizaje consiste más en desarrollar capacidades humanas que en acumular y retener
información.

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