Nacionalidad de las personas jurídicas en la Ley de Inversión Extranjera:
La Ley de Inversión Extranjera instituyó una nueva persona jurídica a la que
denominó entidad extranjera sin personalidad jurídica en el art 2 fracc III, que a la letra establece Para efectos de esta ley, se entenderá por Inversionista extranjero: la persona física o moral de nacionalidad distinta la mexicana y las entidades extranjeras sin personalidad jurídica. De acuerdo con lo anterior, la Ley de Inversión Extranjera admite que las personas morales extranjeras tienen personalidad y determina la obligación de obtener la autorización para operar; así lo dispone en los arts 17 y 17 A : Artículo 17. Sin perjuicio de lo establecido en los tratados y convenios inter- nacionales de los que México sea parte, deberán obtener autorización de la Secretaría: III. Inversionista extranjero: la persona física o moral de nacionalidad distinta a la mexicana y las entidades extranjeras sin personalidad jurídica. De acuerdo con lo anterior, la Ley de Inversión Extranjera admite que las personas morales extranjeras tienen personalidad y determina la obligación de obtener la autorización para operar; así lo dispone en los arts 17 y 17 A: Artículo 17. Sin perjuicio de lo establecido en los tratados y convenios inter- nacionales de los que México sea parte, deberán obtener autorización de la Secretaría: I. Las personas morales extranjeras que pretendan realizar habitualmente actos de comercio en la República, y II. II. Las personas a que se refiere el artículo 2736 del Código Civil para el Distrito Federal en materia común, y para toda la República en materia federal, que pretendan establecerse en la República y que no estén reguladas por leyes distintas a dicho Código. Artículo17 A. La autorización a que se refiere el artículo anterior, se otorgará cuando se cumplan los siguientes requisitos: a) Que dichas personas comprueben que están constituidas de acuerdo con las leyes de su país; b) Que el contrato social y demás documentos constitutivos de dichas personas no sean contrarios a los preceptos de orden público establecidos en las leyes mexicanas, y c) En el caso de las personas a que se refiere la fracción I del artículo anterior, que se establezcan en la República o tengan en ella alguna agencia o sucursal; o en el caso de las personas a que se refiere la fracción II del artículo anterior que tengan representante domiciliado en el lugar donde van a operar, autorizado para responder de las obligaciones que contraigan. Toda solicitud que cumpla con los requisitos mencionados deberá otorgarse dentro de los quince días hábiles siguientes a la fecha de su presentación. Concluido dicho plazo sin que se emita resolución, se entenderá aprobada. B. El individuo El individuo comienza a tener una incipiente personalidad jurídica en virtud de la cual se le empiezan a reconocer ciertos derechos y obligaciones internacionales y, en algún caso, incluso, cierta capacidad para hacerlos valer ante órganos internacionales o para incurrir en responsabilidad internacional por la violación de esas obligaciones. En el ámbito de los recursos hídricos, su papel principal es como titular de un derecho al agua todavía en formación, que ha impuesto a la soberanía de los Estados un límite, pero también una responsabilidad, así como de un creciente derecho a la participación en la gestión de los recursos hídricos. En este sentido hemos visto, en primer lugar, como se ha ido configurando progresivamente un derecho al agua en el ordenamiento jurídico internacional, si bien se encuentra contemplado principalmente en textos de naturaleza no vinculante como la Observación General nº 15 del Comité DESC, de 2002; la Resolución 64/292 de la Asamblea General, de julio de 2010; o la Resolución 15/9 del CDH, de octubre de ese mismo año. Convenio 87 sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación (1948) Este Convenio se puede resumir de la siguiente manera: Las organizaciones de trabajadores y de empleadores tienen derecho de redactar sus estatutos y reglamentos administrativos, elegir libremente sus representantes, organizar su administración y sus actividades y formular su programa de acción. También tienen derecho de constituir federaciones y confederaciones y afiliarse a las mismas, y estas últimas, de agruparse internacionalmente. B. Es obligación de las autoridades públicas no entrometerse en el ejercicio legal de las organizaciones sindicales. Además, la adquisición de la personalidad jurídica no puede condicionarse de tal forma que limite la aplicación del Convenio. Y finalmente, la legislación nacional deberá determinar hasta qué punto se aplicarán a las Fuerzas Armadas y a la Policía las garantías previstas en el Convenio (OIT, Convenio 87, 1948). C. Convenio 98 sobre el derecho de sindicación y de negociación colectiva (1940) Este Convenio establece que los trabajadores deberán gozar de adecua- da protección contra actos de discriminación que puedan menoscabar la libertad sindical en relación con su empleo y que dicha protección deberá ejercerse especialmente contra todo acto que tenga por objeto: ART. 7.- Cada Estado parte y las personas jurídicas de derecho público organizadas de acuerdo con su ley, gozarán de personalidad jurídica privada de pleno derecho y podrán adquirir derechos de contraer obligaciones en el territorio de los demás Estados partes, con las restricciones establecidas por dicha ley y por las leyes de estos últimos, en especial en lo que respecta a los actos jurídicos referentes a derechos reales perjuicio de invocar, en su caso, la inmunidad de jurisdicción. ART. 8.- Las personas jurídicas internacionales creadas por un acuerdo internacional entre Estados partes o por una resolución de una organización internacional, se regirán por las estipulaciones del acuerdo o resolución de su creación y serán reconocidas de pleno derecho como sujetos de derecho privado en todos los Estados partes, del mismo modo que las personas jurídicas privadas y sin perjuicio de invocar en su caso la inmunidad de jurisdicción. ART. 9.- La ley declarada aplicable por esta Convención podrá no se