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La sentencia falla a favor del demandante ordenando al demandado pagar una pensión alimenticia equivalente a un ingreso mínimo mensual remuneracional de $301,000 para cubrir las necesidades básicas y de educación del hijo. El tribunal determinó que los gastos reclamados por el demandante para la educación universitaria de su hijo son acordes a la etapa de vida del hijo y que el demandado tiene la capacidad económica para cubrir dichos gastos según lo establecido en el Código Civil.
La sentencia falla a favor del demandante ordenando al demandado pagar una pensión alimenticia equivalente a un ingreso mínimo mensual remuneracional de $301,000 para cubrir las necesidades básicas y de educación del hijo. El tribunal determinó que los gastos reclamados por el demandante para la educación universitaria de su hijo son acordes a la etapa de vida del hijo y que el demandado tiene la capacidad económica para cubrir dichos gastos según lo establecido en el Código Civil.
La sentencia falla a favor del demandante ordenando al demandado pagar una pensión alimenticia equivalente a un ingreso mínimo mensual remuneracional de $301,000 para cubrir las necesidades básicas y de educación del hijo. El tribunal determinó que los gastos reclamados por el demandante para la educación universitaria de su hijo son acordes a la etapa de vida del hijo y que el demandado tiene la capacidad económica para cubrir dichos gastos según lo establecido en el Código Civil.
- El primer Tribunal de Familia de San Miguel, estima que los medios
presentados en audiencia de juicio son suficientes y no decreta por tanto otros medios de prueba de oficio. - En vista y considerando que en los procedimientos que recaen en los Tribunales de familia según la Ley 19.968 específicamente en el art. 32 de esta misma Ley, advierte que las reglas de apreciación de la prueba corresponderán a la sana crítica, los cuales no podrán contradecir los principios de la lógica, las máximas de experiencia y los conocimientos científicamente afianzados. - Aun cuando no se han acreditado de forma completa las necesidades de mi representado, se puede establecer que estos gastos cubren necesidades principalmente de manutención, que consisten casi en su totalidad a el pago de la matricula correspondiente a 23 UF anuales además de 220 UF que representan el pago de un año de carrera de Ingeniería Comercial en la Universidad Adolfo Ibañez, de acuerdo a lo mencionado en el argumento de defensa anterior es que de acuerdo a las reglas de la lógica y las máximas de experiencia es que se debe señalar que mi representado genera gastos que son acordes a la etapa de vida en que se encuentra en este momento, argumento que es válido para dar lugar a la demanda interpuesta por esta parte, y en consecuencia como ya fue decretado por el Primer Tribunal de Familia de San Miguel se ordena al pago de un ingreso mínimo remuneracional mensual para cubrir las necesidades básicas y de educación de mi representado. - Estamos conscientes que según el artículo 232 del Código Civil, es responsabilidad de ambos padres la manutención de los hijos (en este caso son dos) y esto es en base a sus propias condiciones y capacidades económicas, capacidades que fueron probadas y reconocidas por el Primer Tribunal de Familia de San Miguel. - Remitiéndonos al artículo 329 también mencionado en el Código Civil, debemos considerar que la tasación de los alimentos se deberá tomar siempre en consideración en base a las facultades económicas del alimentante, en este caso las facultades son altas y fueron acreditadas en audiencia de juicio, puesto que según los criterios de la sana crítica, el tribunal accede a un 100% de un ingreso mínimo remuneracional y no a la suma económica que solicitamos, por ende la rebaja en nuestra pretensión (167% de un IMR) fue muy sustancial. - Además, debemos considerar que, bajo el criterio para determinar el monto de la pensión pretendida, se logra acreditar fidedignamente las actuales facultades de la parte demandante, Y RECALCAMOS FIRMEMENTE QUE se acredita que el recurrente en este caso NO POSEE OTRAS CARGAS DE FAMILIA ADEMÁS DE NUESTRO REPRESENTADO DE AUTOS. - De acuerdo al fundamento contemplado en el artículo 7° de la Ley N° 14.908 la cual se refiere sobre abandono de familia y al pago de pensiones alimenticias, debemos mencionar que a este punto que se refiere el Tribunal que dicta una sentencia favorable para nuestro representado es que no se podrá exceder de un 50% una suma o porcentaje de las rentas del alimentante, en este caso como mencionamos anteriormente el tribunal accede a concedernos un monto sumamente accequible para el alimentante, el cual nunca excede de ninguna forma el % de las rentas del alimentante, pero en vista de que nuestra pretensión de pensión de alimentos fue alta en base a la acreditación de documentos ofrecidos como medio de prueba es que el tribunal acoge nuestro requerimiento parcialmente hasta el monto de dicho porcentaje, accediendo finalmente a un monto de $301.000 pesos como pensión de alimentos mayores. - No se condena en costas a ninguna de las partes, puesto que ninguna resultó totalmente vencida y además los motivos son plausibles para haber litigado respecto de ambas. - Y visto y lo dispuesto en los artículos 3 y siguientes de la Ley 14.908, artículos 8 Nº 4, 28, 32, 33, 55, 59, 61, 63, 65 y 66 de la Ley 19.968, SE RESUELVE: SYGXNWMPXC Primer Juzgado de Familia de San Miguel: - Que se acogerá por tanto parcialmente a la demanda interpuesta, y se fija por tanto como pensión alimenticia a pagar por el demandado JAIME ANDRES MONJE PUGLISEVICH, cédula nacional N° 13.085.775-2 en favor de su hijo BENJAMIN ESTEBAN MONJE CARRASCO, cédula nacional N°19.701.071-1, un ingreso mínimo mensual Remuneracional, lo que en la actualidad asciende a la suma de $301.000.- mensuales. II.- Que la forma de pago será en la cuenta de ahorro a la vista del Banco Estado ya existente a nombre del demandante, dentro de los primeros cinco días de cada mes a contar del mes siguiente a la fecha en que la presente sentencia se encuentre ejecutoriada. - La sentencia de fecha 2 de enero de 2020 fue dictada por Doña María Ester Castillo Grandón, Juez titular del Primer Juzgado de Familia de San Miguel.