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05-2012-EZT-2010-E-5217-B (creado: Mayo 2010) Item number 47359 FUNDACIÓN ESPAÑOLA DE ARTERIOSCLEROSIS
FUNDACIÓN ESPAÑOLA DE ARTERIOSCLEROSIS
SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ARTERIOSCLEROSIS
SOCIEDAD ESPAÑOLA DE ARTERIOSCLEROSIS
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EDICOMPLET
Índice
CAPÍTULO 1. Definición, clasificación, detección y
diagnóstico de las hiperlipemias................................... 9
Coordinadores
Ángel Díaz Rodríguez
Médico de familia. Centro de Salud Bembibre. León.
Coordinador del Grupo de Trabajo de Lípidos de SEMERGEN.
Autores
Artemio Álvarez Cosmea
Centro de Salud Ventanielles-Colloto. Oviedo. Asturias.
Miembro de la Sociedad Española de Arteriosclerosis.
Coordinador editorial
Federico E. Pérez Agudo
Médico de familia. Equipo de Atención Primaria Madrid 5.
Profesor Honorífico de la Facultad de Medicina.
Universidad de Alcalá. Madrid.
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7
Prólogo
Para ambas Sociedades Científicas, a las que representamos en este momento, es un motivo
de profunda satisfacción poner a disposición de los profesionales el presente Documento de Con-
senso.
Encierra, en sí mismo, el esfuerzo compartido de ambas Sociedades con el objetivo principal
de servir a la mejora continua de nuestra asistencia sanitaria, y -aún más allá- contribuir con dicho
esfuerzo a la disminución de la morbi-mortalidad cardiovascular, señalando la forma y modo de
abordar los problemas del riesgo cardiovascular asociado a las dislipemias.
No se trata de un documento más, sino de una iniciativa singular. Por vez primera, el marco de
la atención primaria y de la atención especializada se unen para ofrecer una visión compartida del
problema y de las soluciones, haciéndose eco de las mayores y mejores evidencias científicas en
este campo, proporcionando un instrumento educativo y pragmático que propone actuaciones
homogéneas de los médicos en la gestión de las alteraciones lipídicas. Por lo tanto, este docu-
mento ha de ser premonitorio de que, conseguida la visión unitaria del problema, en la práctica
clínica el abordaje del mismo también va a ser común y con una visión integradora entre la aten-
ción primaria y especializada que garantice la continuidad asistencial.
Este documento, además de proporcionar a los clínicos un método de actualización de cono-
cimientos y de formación postgrado, surge con una vocación eminentemente práctica para el ma-
nejo de las dislipemias y la toma de decisiones orientada a la consecución de objetivos terapéuti-
cos, independientemente del nivel asistencial en el que se encuentre el paciente.
Queremos agradecer a los distintos autores, miembros destacados de ambas Sociedades, su
colaboración, esfuerzo y dedicación, así como su didactismo, su capacidad de síntesis de los pro-
blemas y su valiosa aportación científica. Y no queremos dejar de señalar la ayuda que, desde una
independencia y respeto absoluto, ha brindado MSD para que nuestras Sociedades manifiesten el
orgullo de haber podido realizar una obra conjunta.
Se trata de un Documento de Consenso que nos atrevemos a señalar como esperado por la
comunidad científica española. Confiamos en no defraudar las expectativas que hemos puesto en
este trabajo y que se pueden resumir en una: hacer que este documento se transforme en la pie-
dra angular para el manejo de las dislipemias en nuestro medio.
Por último, esperamos que el lector encuentre en este Documento de Consenso un instru-
mento útil para su formación continuada y su práctica clínica habitual en el manejo integral de las
dislipemias, para que el grado de control de los pacientes de alto riesgo sea cada vez mayor, con
lo que contribuiremos en el futuro a disminuir la carga y el impacto de la enfermedad cardiovas-
cular en nuestro país.
Capítulo 1 Definición,
clasificación,
detección y
diagnóstico de las
hiperlipemias
Artemio Álvarez Cosmea
Centro de Salud Ventanielles-Colloto.
Oviedo. Asturias.
Miembro de la SEA.
ción secundaria y diabetes) y CT ≥ 250 mg/dl Sin embargo a la vista de los conocimien-
(prevención primaria). 2. Hipertrigliceridemia: tos actuales, la clasificación más adecuada es
TG ≥ 200 mg/dl. 3. Hiperlipemia mixta: CT ≥ aquélla que distingue 2 grandes grupos, en
200 mg/dl y TG ≥ 200 mg/dl. base a la etiopatogenia de la alteración lipídi-
ca: PRIMARIAS (sin causa evidente) y SECUN-
DARIAS (a proceso o enfermedad subyacen-
2.Clasificación de las te).
hiperlipemias
2.1.Hiperlipemias primarias
Aunque una de las primeras clasificaciones Las hiperlipemias primarias tienen carácter
de las hiperlipemias fue la de Fredrickson hereditario y son causadas por defectos enzi-
(1963), y posteriormente modificada por un máticos o de receptores que intervienen en el
comité de expertos de la OMS (1970), utilizan- metabolismo de las lipoproteínas. La clasifica-
do la electroforesis de las lipoproteínas, te- ción más aceptada es la etiopatogénica 1,3
niendo en cuenta el tipo de lipoproteínas y el (Tabla 1.2). Todas ellas se acompañan de un
lípido aumentado, no se utiliza mucho en el elevado riesgo cardiovascular.
momento actual, ya que no permite distinguir En los apartados posteriores correspon-
entre HLP primarias y secundarias y además dientes se señalan las características funda-
no tiene en cuenta los mecanismos fisiopato- mentales de las mismas, así como las singulari-
lógicos de la HLP3. dades en lo relativo a su diagnóstico y trata-
De forma práctica, podemos utilizar una miento.
clasificación SIMPLIFICADA de las HLP, tenien- Las hiperlipemias primaria suponen,
do en cuenta los conceptos de hipercolestero- tanto para la atención primaria como para la
lemia, hipertrigliceridemia, así como su combi- especializada, un reto en lo referente a su de-
nación (mixta). tección. La razón es doble: por una parte el
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15
1.Evaluación clínica de un
ALTERACIÓN HDL BAJO paciente con dislipemia
MIXTA
Confirmar la
dislipemia
Caracterizar la
Descartar Evaluar el riesgo Toma de
Historia alteración
hiperlipemia asociado a la decisiones
clínica fisiopatológica
secundaria dislipemia terapéuticas
concreta
Establecer
el fenotipo
1. Historia clínica
a. Anamnesis
I. Antecedentes familiares de dislipemia y de ECV prematura.
II. Antecedentes personales.
Análisis de la alteración lipídica
1. Presencia de ECV o pancreatitis.
2. Presencia de otros FRCV convencionales.
3. Características de la dislipemia
a. Grado de intensidad.
b. Edad de diagnóstico.
c. Respuesta al tratamiento.
4. Hábitos dietéticos.
5. Actividad física.
6. Consumo de tabaco y alcohol.
b. Exploración física
I. Presión arterial, frecuencia cardiaca, peso, talla, cálculo del IMC, perímetro de la cintura
abdominal, auscultación cardiaca y de soplos vasculares, exploración de pulsos, búsqueda de
xantomas y xantelasmas, bocio.
c. Estudios complementarios
a. Analítica
I. Hemograma.
II. Bioquímica.
1. Perfil lipídico (colesterol total, c-LDL, c-HDL y triglicéridos).
2. Glucemia, creatinina, ácido úrico, transaminasas y GGT.
3. Sistemático de orina (con microalbuminuria en diabéticos).
4. Se solicitará TSH en:
a. Sospecha clínica de hipotiroidismo.
b. Pacientes con colesterol > 300 mg/dl.
c. Sospecha clínica de disbetalipoproteinemia.
d. Diabéticos.
e. Hipercolesterolemia de aparición en pacientes > 50 años con valores previos normales.
f. Mala respuesta al tratamiento.
g. Desarrollo de miopatía con estatinas.
5. Se solicitará CPK en caso de mialgias.
b. ECG (valoración de HVI, signos de isquemia, bloqueos de rama, arritmias, etc.).
c. Búsqueda de arteriopatía subclínica:
I. Realización del índice tobillo/brazo (patológico si < 0,9), siendo recomendable su
determinación en diabéticos y pacientes > 50 años con RCV (SCORE) 3-4%, especialmente si son
fumadores.
II. Ecografía carotídea (si está disponible).
Figura 2.3. Listado de la evaluación clínica completa de un paicente con dislipemia.
Díaz Rodríguez A, Brenes Bermúdez FJ, Bonet Ivars V, Carrasco Carrasco E, Comas Samper JM, De la Cruz Marcos R, et
al. Dislipemias. Documentos Clínicos SEMERGEN. Madrid: EDICOMPLET 2009.
Capítulo 2. Estudio del paciente dislipémico: evaluación clínica, diagnóstico de laboratorio e índices aterogénicos
17
lares en parientes de primer grado < 55 básico. Éstas son el colesterol total (CT), los tri-
años en hombres y < 65 años en mujeres. glicéridos, el colesterol de las lipoproteínas de
También sobre antecedentes familiares de baja densidad (c-LDL) y el colesterol de lipo-
alteraciones lipídicas en parientes de pri- proteínas de alta densidad (c-HDL)9. El c-LDL se
mer grado, con el fin de descartar hiperlipi- determina mediante un cálculo matemático,
demias congénitas aterogénicas (HF, hiper- empleando la fórmula de Friedewald10:
lipemia familiar combinada y disbetalipo-
proteinemia). c-LDL = CT - [c-HDL + triglicéridos/5] (en mg/dl)
Exploración física. Con especial relevancia (si los valores se expresan en mmol/l los trigli-
se observará la existencia de estigmas cu- céridos se dividen por 2,21 en lugar de por 5)
táneos de dislipemias, alteraciones de los
pulsos arteriales, presión arterial, peso y Esta fórmula no puede aplicarse cuando
talla e índice de masa corporal (IMC), perí- las concentraciones de triglicéridos son altas,
metro de la cintura abdominal. Electrocar- en particular cuando superan los 400 mg/dl.
diograma (ECG). En estos casos se puede utilizar el colesterol
Valorar la realización de una prueba índice no HDL (c-no HDL), que es la suma del coleste-
tobillo-brazo (ITB) en las personas con ries- rol vehiculizado por partículas aterogénicas,
go intermedio. esto es VLDL + LDL + IDL y otros remanentes.
2. Confirmar la dislipemia, teniendo en cuen- Se calcula con la siguiente fórmula: c-no HDL =
ta los factores preanalíticos que se detalla- CT - c-HDL.
rán posteriormente. Posteriormente se detallarán otras deter-
3. Descartar la existencia de una hiperlipemia minaciones y cocientes de mayor complejidad
secundaria: diabetes mellitus, hipotiroidis- para la evaluación del paciente con alteración
mo, nefropatía, hepatopatías, dietas abe- del metabolismo lipídico9.
rrantes, consumo de alcohol y fármacos.
En todos los casos se debe realizar la me-
dida de la concentración de glucosa, crea-
2.Consideraciones al
tinina, enzimas hepáticas, acido úrico y diagnóstico de las
hormonas tiroideas. La proteinuria tam-
bién debe ser excluida, porque el síndrome
dislipemias
nefrótico puede inducir pronunciada hi-
La dislipemia es una patología usualmente
percolesterolemia.
asintomática que suele detectarse y diagnosti-
4. Si es primaria establecer el fenotipo, y si es
carse gracias a las pruebas de laboratorio. La
posible caracterizar la alteración genética
importancia de las mismas, como se explica en
fisiopatológica concreta.
otros capítulos, es su relación con la patología
5. Evaluar el riesgo asociado a la dislipemia:
vascular. Las elevaciones de la concentración
a. Determinar la concentración de lípidos
del c-LDL y los descensos del c-HDL constitu-
e índices aterogénicos (ver a continua-
yen un factor de riesgo mayor para el desarro-
ción).
llo de aterosclerosis. Por estos motivos se hace
b. Detectar otros factores de riesgo y la
indispensable disponer de métodos normali-
existencia de manifestaciones de ate-
zados para la medición de las diferentes mag-
rosclerosis previa.
nitudes lipídicas, que permitan realizar un co-
c. Calcular el riesgo cardiovascular.
rrecto diagnóstico y utilizar con seguridad los
6. Toma de decisiones terapéuticas.
valores obtenidos en el laboratorio para las
decisiones de intervención en nuestros pa-
1.2.Estudio del metabolismo cientes11.
lipídico básico Por otro lado, actualmente en la asistencia
Para valorar el metabolismo lipídico deben sanitaria precisamos métodos diagnósticos
determinarse cuatro magnitudes bioquímicas que ofrezcan resultados transferibles entre
principales, que constituyen el perfil lipídico distintos laboratorios. Esto tiene especial rele-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
18 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
vancia cuando se utilizan valores discriminan- decide realizar el estudio lipídico hasta que la
tes fijos, para tomar decisiones, como en el muestra, ya preparada, entra en la fase analíti-
diagnóstico y seguimiento de las dislipemias. ca.
Para facilitar la transferibilidad de los resulta- Es una fase tan decisiva como las otras ya
dos, hay que conseguir que las condiciones que los factores que inciden en ella afectan de
que preceden al análisis y que afectan al pa- forma trascendental a los resultados. Dentro
ciente y a la muestra sean repetibles a lo de ésta encontramos la variabilidad biológica.
largo del tiempo en un mismo laboratorio, y Ésta se suele dividir en intraindividual e inte-
reproducibles entre distintos laboratorios. rindividual (Figura 2.4).
Para lograrlo, los centros de salud, las unida-
des hospitalarias y los laboratorios clínicos Variabilidad biológica intraindividual
deberían utilizar los mismos criterios de con- La variabilidad biológica intraindividual se
trol de la calidad en todas las fases del proce- define como las variaciones de cualquier mag-
so diagnóstico. nitud bioquímica en un individuo debidas a la
Una cuestión de gran importancia en el homeostasis; su influencia se reduce al deter-
momento de considerar la concentración de lí- minar la magnitud bioquímica en varios espe-
pidos en un individuo concreto es el conoci- címenes obtenidos del individuo durante un
miento de sus fuentes de variabilidad, y en periodo de tiempo determinado. Los coeficien-
consecuencia la posibilidad de que el resulta- tes de variación biológicos intraindividuales
do obtenido no represente fielmente y con publicados para los lípidos son altos, debién-
precisión su metabolismo lipídico real y que dose reducir lo máximo posible para que
las anomalías que podamos encontrar no se pueda estimarse con fiabilidad el riesgo car-
deban a una situación patológica que deba- diovascular (Tabla 2.1).
mos tratar. Como todas las mediciones de la- Por ello, la determinación en una sola oca-
boratorio, las de las concentraciones de lípidos sión es insuficiente para poder establecer las
están sometidas a tres tipos de fuentes de va- concentraciones habituales en el paciente, re-
riación: la variabilidad preanalítica, la analítica comendándose antes de tomar una decisión,
y la postanalítica11. la extracción de dos especímenes de sangre
como mínimo, con un intervalo de una o dos
2.1.Fase preanalítica semanas intentando mantener las mismas
La fase preanalítica incluye todos los pro- condiciones preanalíticas controlables durante
cesos que van desde el momento en que se este tiempo12,13.
VARIACIÓN
BIOLÓGICA INTRAINDIVIDUAL INTERINDIVIDUAL
que deseemos conocer su efecto sobre las 4. Se debería suspender cualquier medica-
concentraciones de lípidos del paciente. ción no imprescindible, por lo menos, un
f) Diversas enfermedades. Endocrinas, me- mes antes de la extracción.
tabólicas, renales y hepáticas como la diabetes 5. El diagnóstico se hará preferiblemente en
mellitus, hipotiroidismo, síndrome nefrótico, in- sujetos sin enfermedad en fase, o en pro-
suficiencia renal, etc. pueden inducir alteracio- ceso agudo. Hay que realizar las determi-
nes secundarias de los lípidos. También las in- naciones después de transcurrir tres sema-
fecciones y las inflamaciones causan dislipemias nas tras una enfermedad intermitente o
con incrementos de los triglicéridos y de la lipo- tres meses tras una enfermedad grave.
proteína(a) y descensos de colesterol y c-HDL. 6. Para reflejar los valores usuales de lípidos
Para reducir este efecto, se recomienda que la de una persona tras un infarto agudo de
valoración del riesgo individual se haga preferi- miocardio, el espécimen de sangre debe
blemente en sujetos supuestamente sanos, o ser obtenido durante las primeras 24 horas
en procesos agudos, después de transcurrir un posteriores al infarto o después de los tres
tiempo desde la curación o la recuperación. meses.
g) Infarto agudo de miocardio. Se asocia 7. Los resultados obtenidos en una mujer
con disminuciones de los lípidos y aumento embarazada sólo serán valorables tras la
de la lipoproteína(a). Las concentraciones de lactancia.
los lípidos permanecen estables durante las 24 8. El ayuno previo de 12 a 14 horas es indis-
horas posteriores al infarto y luego disminu- pensable para el diagnóstico y seguimien-
yen gradualmente permaneciendo disminui- to de las dislipemias. Eventualmente, y sólo
dos durante 6-8 semanas. Por ello, si se quie- para el cribado, las medidas de colesterol y
ren reflejar los valores usuales de lípidos de c-HDL se pueden realizar utilizando mues-
una persona, el espécimen de sangre debe ser
tras de pacientes que no han realizado el
obtenido durante las primeras 24 horas poste-
ayuno previo.
riores al infarto o después de los tres meses.
9. Los cambios posturales pueden afectar a las
h) Embarazo. El sistema endocrino está
concentraciones de los lípidos, por ello se
muy afectado durante el embarazo, alterando
debe realizar la extracción de sangre siem-
las concentraciones de diversas magnitudes
pre con el paciente en la misma posición.
bioquímicas, las lipídicas se incrementan signi-
10. El torniquete no debe estar puesto más de
ficativamente principalmente en el segundo y
1 minuto durante la venopunción.
tercer trimestre. Por ello, sólo serán valorables
11. El espécimen de elección es el suero obte-
después de tres meses posparto o de 3 meses
nido al centrifugar la sangre en condicio-
tras la suspensión de la lactancia.
nes refrigeradas, antes de que transcurran
Por todo ello se han de adoptar medidas
dos horas de su toma.
preventivas para reducir y controlar la variabi-
12. Lo ideal es realizar la medición el día de la
lidad preanalítica que, generalmente, en las
extracción. Si no fuera posible, se puede
magnitudes lipídicas es superior a la analítica.
conservar la muestra separada y preserva-
Éstas son las recomendadas por la Sección de
da de la luz teniendo en cuenta los límites
Lípidos y Riesgo Cardiovascular de la Sociedad
de estabilidad de la magnitud a medir.
Española de Bioquímica Clínica y Patología
13. Para establecer la concentración habitual
Molecular11:
de lípidos del paciente y antes de tomar
1. El individuo debe mantener la dieta habi-
tual y el peso estable durante las 2-3 se- una decisión, se debe realizar la extracción
manas previas a la extracción. de dos muestras de sangre como mínimo,
2. Los niveles de ejercicio físico, consumo de con un intervalo de una semana y conside-
tabaco e ingesta de alcohol no se modifi- rar el valor medio.
carán durante las 2-3 semanas previas a la
extracción. 2.2.Fase analítica
3. Se deben evitar los ejercicios intensos las Como ya hemos dicho, la fase analítica o
24 horas previas a la extracción. metrológica incluye todos los pasos necesarios
Capítulo 2. Estudio del paciente dislipémico: evaluación clínica, diagnóstico de laboratorio e índices aterogénicos
21
Tabla 2.3 Cocientes lipoproteicos más comúnmente utilizados y valores indicativos de riesgo
cardiovascular
COCIENTE PREVENCIÓN PRIMARIA PREVENCIÓN SECUNDARIA*
Cifra de riesgo Objetivo Cifra de riesgo Objetivo
Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer
CT/c-HDL >5 > 4,5 < 4,5 < 4,0 > 4,0 > 3,5 < 3,5 < 3,0
c-LDL/c-HDL > 3,5 > 3,0 < 3,0 < 2,5 > 3,0 > 2,5 < 2,5 < 2,0
Apo B/Apo A-I > 1,0 > 0,9 < 0,9 < 0,8 > 0,8 > 0,7 < 0,7 < 0,6
*o situación de riesgo equivalente
CT: colesterol total; c-HDL: colesterol de las lipoproteínas de alta densidad; c-LDL: colesterol de las lipoproteínas de
baja densidad; Apo: apolipoproteína.
Millán J, Pintó X, Muñoz A, Zúñiga M, Rubiés-Prat J, Felipe Pallardo L, et al. Lipoprotein ratios: Physiological significance
and clinical usefulness in cardiovascular prevention. Vascular Health and Risk Management 2009:5 757-765.
Capítulo 2. Estudio del paciente dislipémico: evaluación clínica, diagnóstico de laboratorio e índices aterogénicos
23
colesterol a los tejidos periféricos con la consi- remanentes de las lipoproteínas ricas en trigli-
guiente internalización arterial del colesterol y céridos. Por dicho motivo se ha recomendado
el transporte reverso de colesterol hacia el hí- el colesterol no HDL como objetivo terapéuti-
gado. La Figura 2.6 muestra como cuanto co secundario en los individuos con triglicéri-
mayor es el cociente Apo B/Apo A-I, mayor dos elevados, y se ha sugerido que podría ser
cantidad de colesterol de las lipoproteínas ate- un marcador vicario en la práctica clínica de la
rogénicas circulará por el compartimento plas- concentración sérica de Apo B. Sin embargo,
mático y será susceptible de inducir disfunción hay que señalar que el colesterol no HDL no
endotelial y de desencadenar o acelerar el siempre muestra una potente asociación con
proceso de la aterogénesis. Por el contrario, la Apo B, y de forma particular en presencia de
cuanto menor es el cociente Apo B/Apo A-I, hipertrigliceridemia29,30.
menor será la agresión vascular del colesterol
plasmático, y mayor y más eficaz será el trans- 3.5.Poder predictivo de los
porte reverso de colesterol, así como de otros
cocientes sobre el riesgo
efectos beneficiosos, y en definitiva menor
será el riesgo de enfermedad cardiovascular26. cardiovascular
Las evidencias derivadas de los grandes
estudios observacionales sugieren que el co-
3.3.Cociente colesterol LDL/Apo B ciente colesterol total/colesterol HDL es un
Aunque la Apo B no es una apolipoproteí-
predictor del riesgo coronario más potente
na exclusiva de las LDL ya que está presente
que el colesterol total, colesterol LDL y coleste-
en otras lipoproteínas aterogénicas como las
rol HDL utilizados de forma independiente. Así,
IDL y VLDL, el cociente colesterol LDL/concen-
el valor predictivo del desarrollo de episodios
tración de Apo B proporciona una información
coronarios de los cocientes colesterol total/co-
aproximada del tamaño de las partículas de
lesterol HDL y colesterol LDL/colesterol HDL
LDL27. En este sentido, se ha sugerido que una
iniciales en los grupos placebo de los estudios
relación menor de 1,3 indicaría la presencia de
WOSCOPS, AFCAPS/TexCAPS y 4S fue superior
un mayor número de partículas de LDL con
al de otros parámetros lipídicos en análisis
menor contenido en colesterol, compatibles
multivariados. De hecho, el cociente colesterol
con LDL pequeñas y densas28.
total/colesterol HDL se ha incluido en la ecua-
ción de Framingham para mejorar la predic-
3.4.Cociente colesterol no ción del riesgo31.
HDL/colesterol HDL Cuando no se dispone de una medida fia-
El colesterol no HDL, es decir, el colesterol ble del c-LDL, por ejemplo en los individuos
total menos el HDL, es una medida del coleste- con hipertrigliceridemia (triglicéridos séricos
rol de las LDL, de las VLDL y de las partículas > 400 mg/dl), situación en la que la fórmula
Figura 2.6. Impacto del cociente Apo B/Apo A-I en el balance aterogénico.
Millán J, Pintó X, Muñoz A, Zúñiga M, Rubiés-Prat J, Felipe Pallardo L, et al. Lipoprotein ratios: Physiological significance
and clinical usefulness in cardiovascular prevention. Vascular Health and Risk Management 2009:5 757-765.
Capítulo 2. Estudio del paciente dislipémico: evaluación clínica, diagnóstico de laboratorio e índices aterogénicos
25
de Friedewald para la estimación del c-LDL el cociente Apo B/Apo A-I y el cociente coles-
no es válida, habrá que utilizar el cociente co- terol HDL/colesterol LDL fueron predictores
lesterol total/colesterol HDL. El cociente co- potentes de los cambios en la carga ateroma-
lesterol total/colesterol HDL fue el mejor pre- tosa.
dictor del riesgo en un subanálisis de la co- Al menos en prevención secundaria, el
horte de 14.916 varones del Physicians Health poder predictivo de los cocientes respecto al
Study y tras ajustar por otros factores, se ob- beneficio de la intervención es generalizable a
servó que cada incremento de una unidad de países con menor prevalencia de enfermedad
este cociente se asociaba a un aumento del coronaria, como España. En una cohorte de
53% del riesgo de infarto de miocardio. Tam- 882 pacientes coronarios incluidos en el Pro-
bién se ha observado que el cociente coleste- grama de Prevención Secundaria del Hospital
rol total/colesterol HDL es un buen predictor de Bellvitge que fueron seguidos durante un
del grosor íntima-media de la arteria carótida periodo medio de 34 meses, los que alcanza-
con un poder superior al de las variables ais- ron el objetivo terapéutico fijado, es decir, un
ladas y similar al del cociente apolipoproteína valor del cociente colesterol LDL/colesterol
B/apolipoproteína A-I y al del colesterol no HDL < 3,7, o lo disminuyeron ≥ 15%, vieron re-
HDL32. ducido su riesgo de hospitalización por enfer-
Aunque los cocientes colesterol total/co- medad cardiovascular y de muerte a menos de
lesterol HDL y colesterol LDL/colesterol HDL la mitad en comparación con los que no logra-
predicen un mayor riesgo cardiovascular ante ron dicho objetivo34.
un amplio margen de concentraciones de co-
lesterol o triglicéridos, el riesgo es notable- 3.7.Colesterol no HDL y
mente más alto cuando coexiste una hipertri-
apolipoproteína B en la
gliceridemia. En el estudio Helsinki, el cociente
colesterol LDL/colesterol HDL fue un predictor
valoración de la dislipemia
Aunque el c-LDL es el principal objetivo te-
potente del riesgo cardiovascular, sobre todo
rapéutico en el control de las dislipemias, su
en los individuos con triglicéridos altos.
valoración - independientemente de proble-
mas metodológicos- no representa la totalidad
3.6.Predicción de la magnitud de partículas aterogénicas que también com-
del efecto preventivo prenden las VLDL e IDL, debido a lo cual se ha
Los cocientes colesterol total/colesterol propuesto la introducción en clínica de la
HDL y colesterol LDL/colesterol HDL son tam- cuantificación del denominado "colesterol no
bién buenos predictores del grado de benefi- HDL". Éste se define como la diferencia entre
cio clínico de la intervención sobre los lípi- el colesterol total y el c-HDL y, por tanto, com-
dos33. En el estudio LRC-CPPT con colestirami- prende el colesterol vehiculizado por las partí-
na, los descensos del cociente colesterol culas VLDL, IDL y LDL que constituye el deno-
total/colesterol HDL en el grupo de tratamien- minado colesterol aterogénico al cual podría
to activo se relacionaron con el beneficio clí- añadirse el procedente de los "remanentes de
nico. El cociente colesterol total/colesterol quilomicrones" y de la lipoproteína(a) [Lp(a)],
HDL inicial también tuvo mayor valor predicti- lipoproteínas también potencialmente atero-
vo que el resto de parámetros lipídicos en el génicas por contener Apo B. Por tanto, el c-no
grupo control del estudio; los cambios induci- HDL incluye todas la lipoproteínas que contie-
dos por el tratamiento en ese cociente fueron nen Apo B.
los mejores predictores del riesgo en el grupo En la mayoría de los pacientes con triglicé-
que recibió simvastatina, calculándose una di- ridos (TG) normales o inferiores a 200 mg/dl, el
ferencia de riesgo de -17,6% por cada reduc- colesterol VLDL, no es sustancialmente alto y,
ción en una unidad del cociente. En un me- por tanto, el c-LDL se correlaciona de manera
taanálisis de los estudios de seguimiento de importante con el c-no HDL. Sin embargo,
la aterosclerosis coronaria con ecografía in- cuando los triglicéridos son superiores a 200,
traarterial en pacientes tratados con estatinas, el colesterol no asociado a las HDL refleja con
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
26 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
mayor exactitud las concentraciones de todas Dado que existe una única molécula de Apo B
las lipoproteínas aterogénicas, que el c-LDL por cada partícula lipoproteica, la concentra-
solo. Es por ello, por lo que el ATP-III recomien- ción total de Apo B es una medida del número
da para las personas con triglicéridos > 200 total de partículas aterogénicas, mientras que
mg/dl como objetivo secundario del trata- el c-no HDL refleja exclusivamente el conteni-
miento al c-no HDL. Esto es válido para cuan- do de colesterol de las mismas. Ya que el 90%
do los TG estén entre 200 y 499 mg/dl, porque de Apo B se encuentra ligada a partículas LDL,
con TG > 500 mg/dl, parte del colesterol se en- para una concentración similar de c-LDL unos
cuentra en forma de quilomicrones y VLDL de niveles elevados de Apo B van a reflejar la pre-
mayor tamaño, y por tanto el c-no HDL resulta sencia de lipoproteínas pequeñas y densas.
menos fiable como predictor de riesgo de en- Por lo que se refiere a la apolipoproteína B
fermedad coronaria. El objetivo establecido en (Apo B) parece demostrado que sus niveles
c-no HDL es 30 mg superior al objetivo en tér- son mejores predictores de episodios cardio-
minos del c-LDL (Tabla 2.4). vasculares que los de c-LDL38,39.
Se ha propuesto el uso del c-no HDL en En la diabetes tipo 2 se ha observado que
lugar del c-LDL en la evaluación clínica del ries- el c-no HDL y la Apo B son asimismo marcado-
go en base a que en múltiples estudios los ni- res de riesgo más potentes de enfermedad
veles de c-no HDL parecen mostrar una mayor cardiovascular que el c-LDL, siendo no obstan-
predicción de morbilidad y mortalidad cardio- te en este grupo de pacientes el cociente co-
vascular que los valores de c-LDL. Asimismo, se lesterol total/colesterol HDL el parámetro que
ha mostrado el c-no HDL como un predictor en mejor predice tal episodio. Asimismo, las con-
la identificación de arterioesclerosis subclínica centraciones de Apo B se asocian más estre-
en adultos jóvenes32. Existe suficiente evidencia chamente que los niveles de c-no HDL con el
para que el cálculo de c-no HDL, que además índice de masa corporal, resistencia insulínica,
es fácil y barato, sea un componente de prime- hiperglucemia y marcadores inflamatorios o
ra línea para ser evaluado en la dislipemia dia- trombogénicos, constituyentes del denomina-
bética, proponiéndose su uso en todos los pa- do síndrome metabólico40.
cientes con diabetes35,36. Se necesitan más estu- En resumen, la determinación de Apo B
dios en enfermos diabéticos que puedan con- presenta la ventaja sobre la determinación de
firmar la superioridad del c-no HDL sobre el c- c-no HDL que no precisa estado de ayunas, es
LDL antes de que el NCEP pudiera recomendar un método automatizado y bien estandariza-
en futuros consensos el uso de c-no HDL como do y probablemente es mejor predictor de
objetivo primario en enfermos con diabetes riesgo vascular e independiente de la tasa de
tipo 2. Sin embargo, a la hora de valorar el se- trigliceridemia. A pesar de lo expresado, la
guimiento de la terapia hipolipemiante el obje- cuantificación rutinaria de Apo B no está con-
tivo a alcanzar sigue siendo la normalización templada en las guías terapéuticas al uso, así
de los valores de c-LDL, aunque en futuras re- como también se han discutido los objetivos a
comendaciones hay evidencias para que se in- alcanzar. La Sociedad Canadiense de Cardiolo-
troduzcan otros objetivos37. gía y algunos autores han defendido concen-
Las lipoproteínas VLDL, IDL y LDL contie- traciones plasmáticas de Apo B inferiores a 90
nen Apo B-100 y se originan en el hígado. mg/dl41.
Tabla 2.4 Nivel diana del colesterol no asociado a las HDL correspondiente a los niveles diana del
colesterol HDL
NIVEL DIANA DEL COLESTEROL LDL NIVEL DIANA DEL COLESTEROL NO ASOCIADO A LAS HDL
< 160 mg/dl < 190 mg/dl
<130 mg/dl <160 mg/dl
<100 mg/dl < 130 mg/dl
Frontini MG, Srinivasan SR, Xu J-H, Tang R, Bond MG, Berenson G. Utility of Non-High-Density Lipoprotein Cholesterol
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Capítulo 2. Estudio del paciente dislipémico: evaluación clínica, diagnóstico de laboratorio e índices aterogénicos
27
Variables individuales
Colesterol
Apo A-I
Colesterol
total
Colesterol
Apo B100
No-HDL
colesterol
Alta sensibilidad
CPR
Ratios de lípidos
LDL-C/HDL-C
Apo B100/HDL-C
Colesterol total/HDL-C
Hazard ratios
Figura 2.7. Esta figura muestra los valores predictivos de los distintos marcadores. Se comparan los quintiles más
altos con los más bajos (hazard ratios).
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Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
28 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
que la disminución del mismo puede indicar Apo B/Apo A-I, y en todos los casos, superior al
un menor contenido proporcional de coleste- de parámetros aislados.
rol, lo que es compatible con partículas más La determinación de otros parámetros
pequeñas y más densas. como las apolipoproteínas y el cálculo de co-
En determinadas circunstancias, se ha pro- cientes e índices lipoproteicos que mejoran el
puesto el empleo del c-no HDL en lugar del c- poder diagnóstico y predictor serán, sin duda
LDL, por presentar un mayor poder predictivo. incorporados en un futuro próximo en los
El poder predictor del c-no HDL alcanza a la instrumentos para el cálculo del riesgo car-
identificación de la arteriosclerosis subclínica y diovascular y en las guías de actuación para
al grosor íntima-media, y es semejante al del el diagnóstico y tratamiento de las dislipe-
cociente colesterol total/colesterol HDL y al de mias.
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31
No fumador Fumador
180
sistólica (mmHg)
Presión arterial
160
140
120
Colesterol (mmol)
4. Utiliza el RCV mortal en vez del total. Los perfecta que sea, y estimar el RCV de manera
episodios de ECV no mortales varían según habitual en nuestras consultas para así, cono-
las definiciones, los métodos diagnósticos ciendo el RCV absoluto del paciente, tomar
y a lo largo de los años. una decisión terapéutica con rigor y funda-
5. La calibración de las tablas SCORE es posi- mento científico.
ble conociendo la mortalidad cardiovascu-
lar y datos de prevalencia de los FR de 2.4.Consideraciones especiales
cada país.
6. Permite flexibilidad en el manejo: cuando
con SCORE
El RCV solamente se debe calcular en pre-
no se puede alcanzar el nivel ideal en un
vención primaria. No es necesario calcular el
factor de riesgo, se puede bajar el riesgo
riesgo a pacientes que han padecido una ECV,
total mediante la reducción de los otros
presentan diabetes tipo 2, diabetes tipo 1 con
FR.
microalbuminuria o niveles muy altos de uno
7. Establece un lenguaje común de riesgo
o más factores de riesgo, que implican, por sí
para los clínicos.
mismos, un RCV elevado y requieren trata-
8. Muestra cómo el riesgo aumenta con la
miento y control intensivo (CT > 320 mg/dl [8
edad.
mmol/l], c-LDL > 240 mg/dl [6 mmol/l] y/o pre-
9. La nueva tabla de riesgo relativo ilustra
sión arterial > 180/110 mmHg). En el resto de
cómo una persona joven con un riesgo ab-
las personas, la tabla SCORE es útil para esti-
soluto bajo puede estar en una situación
mar el RCV, siempre que esté indicado de
de riesgo relativo elevado y susceptible de
acuerdo a los distintos algoritmos publicados
intervención para reducirlo.
en las distintas guías (Figura 3.3).
10. El uso generalizado de un único método
de cálculo facilita un consenso nacional y
europeo para poder estimar el RCV de ma- 2.5.Edad
nera homogénea y poder realizar compa- Si hablamos de las tablas SCORE respecto
raciones entre regiones y poblaciones di- a la edad, nos surgen ciertas inquietudes. En
versas y evitar la confusión existente ante primer lugar, el riesgo absoluto en personas
la elección de una u otra tabla en los pro- jóvenes difícilmente alcanzará un nivel del 5%
fesionales que tienen que medir el RCV, a pesar de tener muy elevados los factores de
mejorando de esta forma el grado de utili- riesgo. Debido a la intensa dependencia de la
zación de la estimación del RCV, escasa- edad, a edades jóvenes el cálculo del RCV casi
mente incorporado en la práctica clínica nunca es alto y podríamos infratratar a sujetos
habitual. jóvenes si nos guiásemos sólo del Riesgo Ab-
11. De la observación de la tabla anterior se soluto (RA), por lo que éste puede no ser el
puede también inferir que la sensibilidad y mejor indicador de su situación real. El RA
el valor predictivo positivo de ambas, utili- puede indicar situaciones muy diferentes. Un
zando en REGICOR el punto de corte en SCORE 3% puede ser muy bajo a los 65 años
10%, son muy similares. en comparación con los de su misma edad y
Ambas tablas son instrumentos imperfec- sexo, y ser muy alto en jóvenes y, si el trata-
tos pero, hasta este momento, en tanto no miento es insuficiente o poco agresivo, puede
dispongamos de la información procedente llevar a estos sujetos a un estado de alto ries-
de una cohorte española de dimensiones ade- go parcialmente irreversible años después y,
cuadas, no podremos disponer de una fun- sin embargo, en ambos casos se etiqueta de
ción de la que se pueda obtener con mayor riesgo moderado. Por ello, para una correcta
fiabilidad la estimación del RCV de nuestra valoración del RCV en personas jóvenes es ne-
población. La buena noticia es que en la ac- cesario calcular, además del riesgo absoluto
tualidad existe un proyecto en esta dirección mediante la tabla del SCORE, el riesgo relativo
denominado Estudio Hermes 7 que se está para mostrar la necesidad de cambios en los
desarrollando en Cataluña. En cualquier caso, estilos de vida y dirigir nuestras actuaciones
siempre será mejor utilizar una tabla, por im- terapéuticas.
Capítulo 3. Estratificación del RCV (SCORE), prioridades en prevención de la ECV y establecimiento de objetivos terapéuticos
37
● Lo primero es proporcionar orientación sobre el ejercicio y la Orientación sobre el estilo de Orientación sobre el
dieta, así como prestar atención a todos los factores de riesgo vida durante 3 meses, y reevaluar estilo de vida para
El objetivo es reducir el colesterol total a < 175 mg/dl (~ 4,5 el SCORE y los lípidos en ayunas reducir el colesterol
mmol/l ) o < 155 mg/dl (~ 4 mmol/l) si es factible*, y el c-LDL a total a < 200 mg/dl
< 100 mg/dl (~ 2,5 mmol/l) o < 80 mg/dl (~2 mmol/l) si es Riesgo Riesgo (~5,2 mmol/l y el c-
factible*. SCORE SCORE LDL a <130 mg/dl
● Esto requiere tratamiento con estatinas en la mayoría de todavía ahora (~ 3 mmol/l)
casos**. ≥ 5% < 5%
Los objetivos del tratamiento no están definidos para el c-HDL y los triglicéridos, pero un c-HDL < 1 mmol/l (40 mg/dl) para los varones
y < 1,2 mmol/l (45 mg/dl) para las mujeres, y unos triglicéridos en ayunas de > 1,7 mmol/l (150 mg/dl) son marcadores de riesgo
cardiovascular aumentado.
Por contra las tablas SCORE sólo se pueden 2.7.Otros factores de riesgo
aplicar a personas de 40 a 65 años. No hay in- La inclusión de otros FR (niveles bajos de
dicaciones claras sobre cómo estimar el riego c-HDL, índice de masa corporal, historia fami-
en individuos que tengan edades fuera de liar o nuevos marcadores de riesgo) es dificul-
este intervalo. Podremos considerar que los tosa si ha de circunscribirse a una tabla. Aun-
más ancianos tendrán, al menos, el mismo ries- que existen nuevos FR no incluidos en la tabla
go que presentarán a los 65 años. Las perso- (niveles de homocisteína o proteína C reactiva)
nas con 60 o más años alcanzan un RCV del su contribución al riesgo absoluto es modesta.
5% o superior en la mayoría de los casos inde- En todo caso, la mayoría pueden valorarse a
pendientemente de los valores de los FR. Esto través de los modificadores de riesgo.
puede conducir a un exceso de indicación de
tratamiento farmacológico. Además de un ries- 2.8.Diabetes
go alto deben existir pruebas científicas claras El impacto global de la diabetes en el ries-
de la eficacia del tratamiento farmacológico go parece ser mayor que el estimado en la co-
en estas edades. horte de Framingham, llegando a incrementar
el riesgo relativo en aproximadamente 5 pun-
2.6.Sexo tos en mujeres y 3 puntos en hombres. En el
En cuanto al sexo, la mujer, en cualquier momento actual, creemos necesario conside-
tramo de edad, parece que tiene un riesgo rar a la diabetes tipo 2 y a la diabetes tipo 1
menor que el hombre. Sin embargo mueren con microalbuminuria como un equivalente
más mujeres que hombres de ECV. Al observar de riesgo coronario en base a las recomenda-
las tablas podemos ver que su riesgo está sim- ciones de la ATP III modificadas en 2004 y al IV
plemente diferido unos 8 años con respecto a Documento Conjunto de las Guías Europeas
los varones. La mujer tiene mayor expectativa de Prevención Cardiovascular de 2007, por lo
de vida que el varón pero no menos morbi- que no se debe calcular el riesgo a estos pa-
mortalidad. cientes y se deben tratar como individuos de
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
38 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
alto riesgo en prevención secundaria, con un en sujetos con riesgo bajo o intermedio, por
objetivo de control LDL < 100 mg/dl y, si ade- ser ésta una población mucho más numero-
más de ser diabético, ha tenido una enferme- sa, fenómeno conocido como la paradoja de
dad coronaria el objetivo de control ha de ser Rose8.
LDL < 80 mg/dl. Las prioridades de la prevención cardiovas-
cular, en la práctica clínica, son por este orden:
1. Pacientes con enfermedad cardiovascular
3.Establecimiento de ateroesclerótica establecida.
prioridades, estimación 2. Pacientes asintomáticos con RCV elevado
debido a:
del riesgo global y a. Múltiples factores de riesgo que produ-
objetivos cen un RCV ≥ 5% según SCORE.
b. Diabetes tipo 2 o diabetes tipo 1 con
Desde la publicación de la Guías Europeas microalbuminuria.
de 1994 se recomienda la valoración del RCV c. Aumento marcado de los FR individua-
como una herramienta clave para orientar el les especialmente si se acompaña de
manejo del paciente, ya que debe tratarse el afectación de órganos diana.
RCV global del individuo en lugar de los FR in- 3. Familiares de pacientes con ECV prematura
dividualmente, cuya interacción puede ser o con muy alto riesgo.
multiplicativa. No debe olvidarse que los mé-
dicos tratan a las personas y no factores de 3.2.Objetivos de control
riesgo. Es difícil establecer el umbral a partir Después de conocer el RCV, ya podemos
del cual debe iniciarse una intervención. El establecer los objetivos de control terapéuti-
RCV es un continuo y no existe un punto cos. Las guías americanas del NCEP- ATP III
exacto a partir del cual un fármaco, por ejem- (National Cholesterol Education Program) no
plo, esté indicado de forma automática y ge- han modificado las cifras objetivo de control
neralizable. del colesterol; no sucede lo mismo con los
Las tablas de riesgo pueden ser útiles no objetivos del IV Documento Conjunto de las
sólo para estimar el RCV, sino también para Guías Europeas de Prevención Cardiovascular
evaluar la forma de reducir el riesgo global de 2007, donde establecen un c-LDL < 115
abordando diferentes FR. Por ejemplo, en un mg/dl como cifra objetivo para prevención
sujeto hipertenso difícil de controlar óptima- primaria. Tras la adaptación para España de
mente puede reducirse adicionalmente el RCV dicho IV Documento Conjunto de las Guías
dejando de fumar o, quizá, reduciendo aún Europeas de Prevención Cardiovascular, reali-
más el colesterol. zada por el CEIPC en 2008, quedarían como
objetivos para prevención primaria un c-LDL
3.1.Prioridades en preveción <130 mg/dl. En la Tabla 3.1 se muestran los
objetivos de prevención primaria y secunda-
cardiovascular
ria de las dos guías de consenso más impor-
Los pacientes de alto riesgo se pueden
tantes.
beneficiar de una intervención orientada a la
detección, estratificación y control del RCV
individual. Esta acción se debe complemen- 3.3.Control integral de todos los
tar con medidas de salud pública dirigidas a FRCV
la población general para reducir los niveles En la población general además de con-
poblacionales de los factores de riesgo y es- seguir los objetivos lipídicos se debe redu-
timular los estilos de vida saludables. Aun- cir el RCV global controlando intensivamen-
que los individuos de alto riesgo son los que te todos los FRCV presentes en un individuo
tienen más posibilidades de obtener un be- al objeto de disminuir el riego cardiovascu-
neficio clínico con las intervenciones preven- lar y el impacto de la enfermedad cardio-
tivas, la mayoría de los casos de ECV se dan vascular.
Capítulo 3. Estratificación del RCV (SCORE), prioridades en prevención de la ECV y establecimiento de objetivos terapéuticos
39
● Objetivo LDL < 130 mg/dl ● Inicio del tratamiento farmacológico 12 meses
Bibliografía
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41
MEDIDAS H-D +
FÁRMACOS
Escenario 2. Sujetos con evidencia de ECV (prevención secundaria), portadores de una dislipemia primaria
aterogénica, diabéticos tipo 2 y diabéticos tipo 1 con microalbuminuria.
bilidades de manejo farmacológico de que dis- siguiéramos alcanzar el objetivo, con las venta-
ponemos, de manera sucesiva, hasta lograrlo. jas añadidas de utilizar dosis medias-bajas de
Para ello, necesitamos conocer la potencia de ambos fármacos que suelen tolerarse mejor
reducción del c-LDL de las diversas estatinas que la monoterapia en dosis muy altas.
disponibles al utilizarlas en monoterapia y los Se ha considerado7,8 que, dado que no te-
efectos añadidos en la reducción cuando las nemos evidencias hasta este momento de dis-
combinamos con otros fármacos6. Es importan- minución de morbi-mortalidad CV con los in-
te recordar que las dosis más bajas de cual- hibidores de la absorción del colesterol y sí
quiera de las estatinas disponibles son las que con dosis altas de estatinas, se debería alcan-
consiguen la mayor bajada del c-LDL, entre el zar la titulación máxima permitida de la estati-
20-40%, según su potencia y según la respues- na más potente que podamos utilizar y si, a
ta individual de cada individuo, aspecto muy pesar de manejar estas dosis no se consigue el
importante que siempre deberemos conside- objetivo de control, entonces sí estaría indica-
rar. Una vez que administremos una estatina en do asociar el segundo fármaco.
dosis media-baja y conozcamos su efectividad Ensayos clínicos en desarrollo9 nos darán
real en la disminución del c-LDL, que se suele luz sobre cuál de las dos pautas es la más efi-
estabilizar alrededor de las 4 semanas de ini- caz. En cualquier caso lo importante es conse-
ciar el tratamiento, si no hemos alcanzado el guir que el c-LDL se encuentre en objetivos y
objetivo de control (< 100 mg/dl), sólo conse- cuanto más bajo, mejor10.
guiremos reducciones suplementarias sobre el úl- Una vez elegida la pauta farmacológica
timo valor obtenido en el c-LDL de 6-7% cada vez correctora, emitiremos las recetas correspon-
que dupliquemos la dosis (titulación), lo cual su- dientes y citaremos al paciente en una consul-
pone que titular tres veces (por ejemplo, pasar ta programada tipo A (médico) en 8 semanas,
de 10 mg de atorvastatina a 80 mg), sólo va a con la indicación de realizar determinación de
permitir un descenso añadido del c-LDL des- las fracciones lipídicas y enzimas hepáticas (es
pués de la primera dosis, de, a lo sumo, un 20%. importante descartar toxicidad subclínica
Este dato es muy importante ya que nos cada vez que modifiquemos el tratamiento
va a permitir saber si un paciente concreto va farmacológico, la determinación de CPK sólo
a alcanzar o no el objetivo utilizando una esta- está indicada si el paciente se queja de dolor
tina potente en monoterapia a dosis plena. muscular) unos días antes de la visita, insis-
Veamos un ejemplo. Un paciente diabético tiendo, como siempre, en las medidas H-D y
(objetivo c-LDL: < 100 mg/dl) presenta un c- en el cumplimiento terapéutico correcto, aler-
LDL de 130 mg/dl y tiene pautada atorvastati- tando al paciente de los posibles efectos ad-
na 20 mg que toma regularmente sin efectos versos.
adversos desde hace varios meses. Tenemos A las 8 semanas volveremos a evaluar el c-
que reducirle el c-LDL > 30 mg para alcanzar LDL, la cumplimentación y los posibles efectos
el objetivo, lo que supone bajarlo al menos un adversos. Si se encuentra en objetivos y tolera
23% (si 130 es el 100%, 30 -a reducir- será X, bien la medicación seguiremos al paciente en
luego, por una simple regla de tres, 30 x 100 / consultas programadas tipo B. En el caso de
130 = 23%). Pasar de la dosis de 20 mg de que el c-LDL > 100 mg/dl, reevaluaremos
atorvastatina a otra de 80 mg conseguirá re- todas las posibles circunstancias causales ya
ducir el c-LDL sólo un 12% (dos titulaciones), mencionadas, tras lo cual, procederemos a
por lo cual, seguramente no conseguiremos el ajustar el tratamiento, una vez más, en función
objetivo con esta intervención, ya que precisa- del porcentaje de reducción del c-LDL necesa-
mos una reducción del 23%. rio para alcanzar el objetivo, tal y como hemos
Sabemos que si asociamos a esta dosis de descrito. El paciente volvería a ser citado en
atorvastatina un fármaco inhibidor de la ab- consultas programadas tipo A cada 8 semanas
sorción intestinal del colesterol como ezetimi- hasta llegar al control o a las dosis máximas de
ba, conseguiríamos teóricamente una reduc- los fármacos hipolipemiantes tolerados que
ción de, al menos, un 25% más, por lo que es permitan mantener lo más bajo posible el c-
muy probable que con esta asociación sí con- LDL.
Capítulo 4. Intervención para la consecución de objetivos en función de los niveles de lípidos, riesgo cardiovascular
47
PREVENCIÓN PRIMARIA
LOD (+) y/o RCV (SCORE) ≥ 5%
OBJETIVO C-LDL: < 130 mg/dl
MEDIDAS H-D
CONTROL 12 SEMANAS*
REEVALUACIÓN RCV (SCORE)
MEDIDAS H-D +
FÁRMACOS VISITA PROGRAMADA TIPO B
CONTROL SITUACIÓN CLÍNICA
ADHERENCIA TRATAMIENTO
VALORACIÓN OTROS FRCV
VISITA PROGRAMADA TIPO A
CONTROL SITUACIÓN CLÍNICA
ADHERENCIA TRATAMIENTO
AJUSTE FARMACOLÓGICO EN FUNCIÓN %
REDUCCIÓN C-LDL
Escenario 3. Sujetos sin evidencia de ECV pero con afectación de órganos diana (lesiones ateromatosas
subclínicas, HVI, microalbuminuria, etc.) y/o RCV (SCORE) > 5%.
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Proyecto1:Blanca 165x280 20/04/10 10:22 Página 1
51
DETECCIÓN OPORTUNISTA
DIAGNÓSTICO DE DISLIPEMIA
(Al menos 2 determinaciones)
vida, añadiremos tratamiento farmacológico ner los niveles de colesterol total < 200 mg/dl
hasta lograr un c-LDL < 130 mg/dl. y c-LDL < 130 mg/dl, reevaluando el SCORE
Si a los 3 meses el SCORE < 5%, implemen- anualmente.
taremos modificaciones en el estilo de vida 12 La conveniencia de que los individuos en
meses para lograr un CT < 200 mg/dl y un c- prevención primaria con un nivel de riesgo
LDL < 130 mg/dl. Los objetivos del tratamiento elevado según la función de SCORE (≥ 5% a
no están definidos para el c-HDL y los triglicé- los 10 años) o según las de Framingham o
ridos, pero un c-HDL < 40 mg/dl (1 mmol/l) REGICOR calibrada (> 20% a 10 años) reciban
para los varones y < 45 mg/dl (1,2 mmol/l) tratamiento farmacológico, después de un
para las mujeres, y unos triglicéridos en ayunas periodo de modificaciones en el estilo de
de >150 mg/dl (1,7 mmol/l) son marcadores vida, se ha fijado por consenso. Según la guía
de riesgo cardiovascular aumentado. En el del NCEPIII13, tratar con fármacos a individuos
caso de que el RCV sea de inicio < 5% hare- con un riesgo bajo (< 10%) no es coste-efecti-
mos lo mismo que en el caso anterior. vo.
Si el SCORE < 5%, se realizará orientación El problema aparece cuando valoramos el
sobre el estilo de vida 6-12 meses para mante- manejo de individuos en la franja de riesgo in-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
54 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
PREVENCIÓN PRIMARIA
Los objetivos del tratamiento no están definidos para el c-HDL y los triglicéridos, pero un c-HDL < 40
mg/dl (1 mmol/l) para los varones y < 45 mg/dl (1,2 mmol/l) para las mujeres, y unos triglicéridos en
ayunas de >150 mg/dl (1,7 mmol/l) son marcadores de riesgo cardiovascular aumentado.
termedio (3-4% para SCORE, 10-20% para Fra- terapéuticos. Los pacientes de alto riesgo se
mingham y REGICOR) para decidir a partir de pueden beneficiar de una intervención orien-
qué punto han de recibir tratamiento farmaco- tada a la detección, estratificación y control del
lógico. Según los ensayos clínicos disponibles RCV individual. Aunque los individuos de alto
en prevención primaria, tratar a poblaciones riesgo son los que tienen más posibilidades de
con riesgo de cardiopatía isquémica (CI) ≥ 16% obtener un beneficio clínico con las interven-
es efectivo, mientras que no haya pruebas de ciones preventivas, la mayoría de los casos de
que en individuos con un riesgo coronario in- ECV se dan en sujetos con riesgo bajo o inter-
ferior al 13% los beneficios de las estatinas su- medio, por ser ésta una población mucho más
peran a los posibles efectos adversos en la numerosa, fenómeno conocido como la para-
mortalidad a 10 años10, 11. doja de Rose12.
En las personas con riesgo bajo (≤ 2% No se han modificado los objetivos de
según SCORE, < 10% según Framingham y RE- control del colesterol en las Guías america-
GICOR), el tratamiento será solamente orienta- nas del NCEP- ATP III (National Cholesterol
ción sobre el estilo de vida con controles cada Education Program)13, pero sí los objetivos del
2 años. IV Documento Conjunto de las Guías Europe-
as de Prevención Cardiovascular de 2007 14,
3.Establecimiento de que ha establecido como objetivos de con-
trol de colesterol en prevención primaria un
objetivos terapéuticos c-LDL < 115 mg/dl. Datos del año 2005
en prevención primaria muestran que el 50% de la población de Gi-
rona presentaba cifras de c-LDL > 130
Después de conocer el RCV y clasificar a mg/dl15. Teniendo en cuenta que se trata de
los pacientes en función de su RCV global ya una población de baja incidencia de cardio-
podemos establecer los objetivos de control patía isquémica16.
Capítulo 5. Manejo del paciente con hipercolesterolemia en prevención primaria
55
Tabla 5.1 Cifras objetivo de c-LDL según riesgo del paciente y niveles de c-LDL para aconsejar el inicio
del tratamiento farmacológico en prevención primaria*
OBJETIVO c-LDL NCEP (ATP III REVISIÓN 2004)13 OBJETIVO c-LDL ADAPTADO
PARA ESPAÑA DE LA GUÍA EUROPEA
DE PREVENCIÓN CARDIOVASCULAR 200714
RIESGO MODERADO ALTO RCV alto ≥ 5%:
2 o más factores de riesgo‡. Riesgo a 10 años ● Objetivo c-LDL < 130 mg/dl.
Control y seguimiento
Consecución objetivos
tanto a nivel poblacional como en los indivi- 1. La remodelación de los hábitos dietéticos
duos de alto riesgo cardiovascular. sobre los siguientes principios:
Las intervenciones sobre el estilo de vida - Reducción de la ingesta total de coleste-
no son de todas formas fáciles de implantar rol, ácidos grasos saturados y ácidos gra-
por la dificultad de cambiar los hábitos y las sos "trans".
costumbres de las personas, dadas las limita- - Aumento de carbohidratos complejos y
ciones de las distintas técnicas de educación fibra alimentaria.
para la salud, aplicables a la instrucción y a la - Disminución de azúcares simples.
motivación de los pacientes para que de - Limitación de proteínas, sobre todo en
forma efectiva cambien de conducta y adop- aquellos casos en los que ya se observe
ten estilos de vida saludables. De todas for- nefropatía y/o proteinuria.
mas, es imprescindible intentarlo aunque no - Consumo moderado de alcohol.
se consiga en muchos casos unos resultados - Reducción de la ingesta de sal.
como los esperados. No hay que olvidar que 2. Normalización del peso en los pacientes
con estas intervenciones podríamos reducir las obesos o con sobrepeso, lo que exigirá:
cifras de c-LDL hasta un 30%, lo que hace irre- - Ajustar las calorías de la dieta reduciendo
nunciable plantearlas y proponerlas a los pa- la ingesta calórica.
cientes siendo en muchos casos suficientes - Aumentar el gasto energético incremen-
para conseguir objetivos de buen control de tando la actividad física.
los FRCV consiguiendo en otros casos reducir 3. Práctica de ejercicio físico regular, preferi-
tanto la potencia de los factores de riesgo que blemente de tipo aeróbico.
puede llegar a evitar o retrasar la necesidad de 4. Abandono del hábito tabáquico.
instaurar un tratamiento farmacológico hipoli-
pemiante, antihipertensivo o hipoglucemiante.
Las intervenciones sobre hábitos no salu-
4.Recomendaciones
dables con el objetivo de modificarlos suelen dietéticas
requerir una buena motivación y un gran es-
fuerzo tanto por parte de los profesionales Las recomendaciones dietéticas (Tabla 5.2),
como de los pacientes, pero su excelente rela- en lo que a proporción de nutrientes se refie-
ción coste/beneficio y su impacto sobre la re, presentan algunas variaciones de unas so-
salud las justifican plenamente, siendo sinérgi- ciedades a otras.
cos con cualquier otra medida terapéutica. Sin embargo, después del estudio de los
Los ejes de actuación para conseguir la Siete Países (Figura 5.2), se ha dado en caracte-
MEV y un cambio hacia estilos de vida saluda- rizar lo que se ha denominado como dieta me-
bles incluyen: diterránea, identificado por su valor y sus efec-
Capítulo 5. Manejo del paciente con hipercolesterolemia en prevención primaria
57
Tabla 5.4 Estudios de intervención sobre los efectos de la dieta mediterránea y omega 3
RESULTADOS DE ESTUDIOS REALIZADOS CON SUPLEMENTO DE OMEGA 3 EN LA DIETA
ESTUDIO DART24 Demostró una reducción de un 27% de infartos y
500-800 mg/día de omega 3 de un 29% de la mortalidad por todas las causas.
ESTUDIO GISSI25 Demostró una reducción de un 20% de la
Suplementando 1 g al día de omega 3 mortalidad total, de un 30% de mortalidad por
causa cardiovascular y de un 46% muerte súbita.
ESTUDIO LYON DIET HEART STUDY26 Reducción de un 68% de muerte de origen
cardiaco e infarto no fatal.
WOSCOPS-P
Porcentaje con CI
WOSCOPS-S
ALLAT-S AFCAPS-P
AFCAPS-S Prevención Primaria
ALLAT-P
CARDS ASCOT-P Pravastatina
CARDS Lovastatina
ASCOT-S Atorvastatina
tivo en la incidencia de cáncer (datos proce- cular con un riesgo absoluto de mortalidad
dentes de 10 ensayos n=45469), RR 1,02 cardiovascular > 5% empleando las tablas
IC95%:0,94-1,11, p=0,59, ni de rabdomiolisis SCORE (> 20% según las tablas de Framing-
(datos procedentes de 9 ensayos n=39383), RR ham), con una desfavorable relación en indivi-
0,97 IC 95%:0,25-3,83, p=0,96. Los autores con- duos de bajo riesgo, < 2% empleando las ta-
cluyen que las estatinas tienen un claro papel blas SCORE (< 10% con las tablas de Framing-
en la prevención primaria de muertes o even- ham), debiendo individualizar en los pacientes
tos clínicos significativos de origen cardiovas- de riesgo intermedio, 3-4% SCORE (10-20% de
cular y esperan que sus resultados centren el Framinghan).
debate en criterios clínicos y farmacoeconómi- Cuando no se puedan utilizar estatinas o
cos para iniciar el tratamiento. Añaden que los éstas estén contraindicadas la alternativa son
beneficios, riesgos y costes de un tratamiento la ezetimiba, las resinas y la niacina. No hay es-
para toda la vida deberían ponderarse cuida- tudios de prevención primaria con ezetimiba,
dosamente con otras estrategias de preven- ni con ácido nicotínico. Las resinas fijadoras de
ción primaria. ácidos biliares se han estudiado en prevención
En los grandes ensayos de prevención pri- primaria en dos grandes ensayos, el colestipol
maria, las mujeres han estado escasamente re- en el estudio Upjohn y la colestiramina en el
presentadas (< 20%), por lo que no dispone- estudio LRC46 (The Lipid Research Clinics Primary
mos de información suficientemente contras- Prevention Trial), aleatorizado doble ciego de 7
tada. Un metaanálisis realizado en 2004 con a 10 años de duración asociado a medidas die-
las mujeres que participaron en estudios de téticas en hombres sin arteriopatía coronaria
prevención primaria45, con diversos hipolipe- conocida y colesterol inicial > 265 mg/dl, ob-
miantes, no pudo evidenciar diferencias signi- servándose una disminución estadísticamente
ficativas en prevención de morbi-mortalidad significativa de infarto no mortal o muerte por
CV, ni mortalidad total del tratamiento frente a cardiopatía coronaria. La mortalidad global no
placebo. se alteró. En el seguimiento posterior durante
La eficacia de las estatinas es riesgo de- 6 años se observó que las tasas de mortalidad
pendiente, de manera que son más eficaces por cáncer y otros procesos era similar en los
cuanto mayor es el riesgo cardiovascular. dos grupos, pero la mortalidad total fue menor
Según las evidencias actuales, el tratamiento en los tratados.
con estatinas es coste-eficaz en la prevención El abordaje de los TG elevados y del HLD
primaria de pacientes de alto riesgo cardiovas- bajo, desde el punto de vista del RCV se consi-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
64 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
deran objetivos secundarios, siempre subordi- y se pueden emplear asociados a los fibratos
nados a la consecución del descenso del c- en el caso de no conseguir el objetivo (< 500
LDL. En circunstancias clínicas especiales será mg/dl).
necesario realizar un abordaje específico de
este problema en prevención primaria. La cifra
de los TG plasmáticos que presente un deter-
7.1.Seguimiento del paciente
minado paciente definirá el conjunto de ac- hipercolesterolémico en
tuaciones a desarrollar. prevención primaria
Si el paciente presenta TG ≥ 500 mg/dl, el Tras el diagnóstico, la evaluación del RCV y
riesgo fundamental que tiene es el desarrollo la instauración del tratamiento, será necesario
de una pancreatitis, sobre todo si los TG ≥ evaluar y seguir al paciente. El seguimiento
1.000 mg/dl. Deberemos descartar causas se- habrá de hacerse en la consulta médica pro-
cundarias y/o factores agravantes que pue- gramada de tipo A, cada 6-8 semanas hasta lo-
dan ser abordados y corregidos específica- grar los objetivos lipídicos en los pacientes de
mente. En caso de persistir la elevación de los alto riesgo. Consistirá en la reevaluación en
TG será necesario un abordaje terapéutico cada visita del perfil lipídico y de las transami-
enérgico con modificaciones en el estilo de nasas, tomando las decisiones pertinentes (do-
vida estrictas, restringiendo la ingesta de gra- blando o triplicando dosis de estatina en mo-
sas a menos del 15% del total, suprimiendo el noterapia o proponiendo terapia combinada)
alcohol, normalizando el peso y estimulando hasta lograr los objetivos.
la realización de ejercicio físico. Los fármacos Cuando el paciente haya sido controlado
de elección serán los fibratos. Los fibratos se se programarán consultas de revisión de tipo
han estudiado en prevención primaria en 3 B (médico y enfermería) para valorar la situa-
ensayos clínicos: el WHO-OMS con clofibra- ción clínica, el RCV, otros FRCV, adherencia al
to47, el HHS con genfibrocilo48 y el FIELD con tratamiento y realizar educación sanitaria
fenofibrato49. según necesidades detectadas:
Niacina y ácidos grasos omega 3, a dosis 1. Cada 6 meses (riesgo alto ≥ 5%).
de 2-4 g/día, son la alternativa a los fibratos, 2. Cada 12 meses (riesgo moderado 3-4%).
consiguen reducciones importantes de los TG 3. Cada 2 años (riesgo bajo 0-2%).
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Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
66 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
miocardio, el 23% de los hombres y el 31% de de c-LDL acompañado del aumento en los ni-
las mujeres padecerán un segundo infarto en veles de c-HDL y el descenso de TG en estos
los 6 años siguientes; el 9% de los hombres y pacientes conduce a la disminución del riesgo
el 18% de las mujeres sufrirán un ictus; y la cardiovascular.
muerte súbita se presentará en el 13% de los Numerosos son los ensayos clínicos que han
hombres y el 6% de las mujeres. Además hay demostrado los beneficios del tratamiento hipo-
que añadir otra serie de complicaciones fre- lipemiante en los pacientes en prevención se-
cuente en estos pacientes como la insuficien- cundaria. Así, el estudio 4S incluyó pacientes con
cia cardiaca, la angina de pecho o las catastró- angina o infarto de miocardio previos2; el estu-
ficas secuelas que pueden quedar tras sufrir dio CARE exigía para su inclusión que los pa-
un ictus1. Todo ello redundará en la necesidad cientes tuvieran infarto de miocardio previo3; en
de numerosos ingresos hospitalarios y la pér- el estudio LIPID en el que se incluyeron pacien-
dida de calidad de vida. tes con infarto de miocardio previo y hospitali-
La aparición de un evento cardiovascular zación por angina inestable 4 y en el estudio
es el reflejo del fracaso de la prevención lleva- SPARCL en el que los pacientes debían tener un
da en ese paciente, bien por defecto en la ictus o un accidente cerebral transitorio previos5.
identificación del paciente de riesgo cuando Todos ellos han mostrado beneficio con el em-
aún se encontraba en prevención primaria o pleo de estatinas en la reducción del riesgo de
bien por la insuficiente intensidad en la aplica- sufrir nuevos eventos cardiovasculares en pa-
ción del tratamiento tanto en la prevención cientes en prevención secundaria. Este beneficio
secundaria como en la primaria. se ha alcanzado claramente cuando se ha valo-
Por todo ello, en el paciente en prevención rado tanto el descenso conseguido del c-LDL6,
secundaria será preciso intensificar el trata- del colesterol no-HDL7, o de una variable com-
miento haciendo especial hincapié en la pre- puesta por el descenso del c-LDL y el incremen-
vención de nuevos eventos cardiovasculares, to en el c-HDL8 y, todo ello, independientemente
evitar las complicaciones del proceso y mejo- del fármaco utilizado o el modo de alcanzarlo.
rar aquellos síntomas que empeoren las condi- Este beneficio se alcanza, incluso, en pa-
ciones de vida del paciente. cientes con cifras consideradas normales de c-
Debido al origen multifactorial de la enfer- LDL. En el estudio HPS9 se incluyeron 20.536
medad cardiovascular será necesario identifi- sujetos (25% mujeres) de los cuales el 87%
car todos y cada uno de los factores de riesgo eran sujetos en prevención secundaria, con
que sean susceptibles de ser modificados en edades comprendidas entre 40-80 años y alea-
ese paciente, y que no son otros que los facto- torizados a recibir 40 mg de simvastatina fren-
res de riesgo cardiovascular. te a placebo durante 5 años. Se observó una
Abordar desde un punto de vista global el disminución significativa de la mortalidad
riesgo del paciente nos permitirá un control total (12%), de los eventos coronarios mortales
aún más estricto de alguno de los factores de y no mortales (27%), así como de ictus de ori-
riesgo que pueda compensar la imposibilidad gen isquémico (25%) y todo ello era indepen-
del suficiente control de otros (Tabla 6.1). diente de la edad, el sexo y de los niveles ba-
sales de c-LDL, observándose que incluso
aquellos pacientes con cifras basales de c-LDL
2.Evidencia del beneficio por debajo de 116 mg/dl obtenían, con el em-
en el tratamiento de la pleo de estatinas, un beneficio similar.
Este beneficio del descenso del c-LDL, in-
dislipemia en prevención dependiente de la edad del paciente, se ha ob-
secundaria servado incluso en pacientes con edades por
encima de los 80 años10, 11.
En el momento actual no existe duda de Además de todo ello, la evidencia nos
que el tratamiento de la dislipemia en el pa- muestra que un tratamiento intensivo, con es-
ciente en prevención secundaria es beneficio- tatinas potentes a dosis altas, aporta benefi-
so y coste-efectivo. El descenso de los niveles cios añadidos en la disminución de los even-
Capítulo 6. Manejo del paciente con hipercolesterolemia en prevención secundaria
69
intensificar el ya existente.
● Si c-LDL basal entre 70 y 100 mg/dl, será razonable iniciar
mg/dl.
● Razonable el posterior descenso del colesterol no HDL < 100 mg/dl.
● Las opciones para disminuir el c-no-HDL son:
dieta mediterránea y la realización del ejerci- papel relevante. Estos efectos pleiotrópicos es-
cio físico apropiado, además del abandono del tarían relacionados con los efectos antiinfla-
hábito tabáquico y el control del resto de fac- matorios, antiagregantes y anticoagulantes
tores de riesgo cardiovascular presentes en el que se observan con las estatinas y que son
paciente. dosis dependiente20.
Suspender el tratamiento con la estatina
3.1.Objetivos lipídicos en el cuando el paciente sufre un evento cardiovas-
cular o una vez iniciado el tratamiento va a re-
paciente en prevención percutir en la evolución del mismo, incremen-
secundaria tándose el riesgo de aparición de nuevos
El objetivo principal del tratamiento de un eventos o de muerte. Cuando el evento sufrido
paciente en prevención secundaria consiste en es un ictus y se suspende el tratamiento con la
reducir la mortalidad por el evento sufrido, dis- estatina a lo largo del primer año de evolución
minuir la aparición de nuevos eventos y dismi- se incrementa el riesgo de muerte o de de-
nuir las secuelas debidas al evento. pendencia, el deterioro neurológico y se incre-
Por esto, el tratamiento hipolipemiante ha menta el volumen del infarto21-23.
de iniciarse lo antes posible. Existe evidencia Por todo lo expuesto existe la creencia de
de que iniciar el tratamiento con una estatina que en los pacientes en prevención secundaria
de forma precoz tras sufrir un evento cardio- el objetivo de c-LDL es "cuanto más bajo
vascular conduce a una reducción del riesgo mejor", cifra que podríamos situar entre los 50
en la misma fase aguda del evento cardiovas- y 70 mg/dl, independientemente de la edad o
cular. En el estudio MIRACL 19 se incluyeron el sexo del paciente24.
3.086 pacientes con angina inestable o IAM no A pesar de esto, los objetivos lipídicos en
Q. Se aleatorizaron a atorvastatina 80 mg o la prevención cardiovascular difieren ligera-
placebo en las 24-96 primeras horas tras sufrir mente según las recomendaciones de las so-
el evento y se siguieron durante 16 semanas. ciedades científicas25, 26. Estos objetivos se de-
El c-LDL pasó de 125 a 136 mg/dl en el grupo berían considerar como mínimos a conseguir.
placebo y se redujo de 124 a 72 mg/dl en el Estos mínimos vienen marcados por la eviden-
grupo de atorvastatina. Los pacientes que fue- cia sugerida en diferentes ensayos clínicos, y
ron sometidos al tratamiento con atorvastati- que en el caso de la prevención secundaria
na presentaron una reducción del 16% en el son indiscutibles (Tabla 6.2).
riesgo relativo del objetivo principal combina- El primer objetivo que deberemos marcar
do (muerte, IAM agudo no fatal, parada cardia- es el de alcanzar niveles de c-LDL por debajo
ca o isquemia miocárdica sintomática con hos- de 100 mg/dl y si fuera posible por debajo de
pitalización). Este beneficio se obtuvo de ma- 70 mg/dl. Para conseguir estos objetivos debe-
nera temprana y, en gran medida, previo a la mos, además de conocerlos, tener confianza
reducción de los niveles de c-LDL. Esto nos en la necesidad de alcanzarlos para poder así
puede hacer pensar que en las fases agudas transmitírselo a los pacientes y obtener el má-
de los eventos cardiovasculares los efectos ximo beneficio de nuestra actuación27. Sin em-
pleiotrópicos de las estatinas pueden tener un bargo cuando se revisan los datos de los pa-
cientes en tratamiento con estatinas se obser- ran tener una estatina en su tratamiento, salvo
va que sólo el 40,2% de los varones de alto en aquellos casos de total intolerancia a las
riesgo y el 10,2% de las mujeres de alto riesgo mismas. En muchas ocasiones deberemos de
presentan cifras de c-LDL por debajo de los recurrir a la asociación de varios fármacos hi-
100 mg/dl28. Estos datos nos hacen reflexionar polipemiantes para controlar esa dislipemia,
sobre el control del c-LDL alcanzado en los pa- en función de los niveles de c-LDL o del perfil
cientes de alto riesgo y especialmente en el lipídico que presente el paciente, todo ello al
caso de las mujeres. objeto de disminuir el riesgo residual cardio-
Este fracaso en alcanzar los objetivos de c- vascular que se aprecia en los diferentes ensa-
LDL marcados puede ser debido a diferentes yos clínicos (ver capítulo 12). Dado que los pa-
circunstancias entre las que podemos desta- cientes en prevención secundaria van a estar
car: elección inadecuada de la estatina debido sometidos al tratamiento con distintos fárma-
a la insuficiente eficacia para conseguir el des- cos tanto hipolipemiantes como de otro tipo,
censo requerido del c-LDL, no titular a dosis dos aspectos a tener en cuenta serán las posi-
más alta la estatina cuando esto sea necesario bles interacciones farmacológicas que puedan
y posible, abandono del tratamiento por parte surgir y el de la cumplimentación terapéutica
del paciente (50% de incumplimiento en el por parte del paciente. Para poder soslayar
tratamiento con estatina), falta de asociación estos dos problemas deberemos, por un lado,
con otros fármacos hipolipemiantes cuando estar convencidos de la necesidad de cumpli-
ello sea preciso o la creencia, errónea, de que mentar correctamente el tratamiento y, por
en prevención secundaria las mujeres tienen otro lado, conocer las características de los fár-
un menor riesgo que los varones. Todos estos macos que estamos utilizando en ese pacien-
factores lo deberemos tener en cuenta en el te.
momento del seguimiento del paciente en tra-
tamiento para poder tomar las medidas co-
3.2.Tratamiento hipolipemiante
rrectoras oportunas.
Disponemos de fármacos con buen perfil en el paciente en prevención
de seguridad que, actuando por diferentes secundaria
mecanismos de acción, mejoran el perfil lipídi- Dado que el objetivo primario en el con-
co, utilizándolos en monoterapia o en asocia- trol del riesgo cardiovascular en el paciente en
ción seremos capaces de alcanzar los objetivos prevención secundaria es el c-LDL y que son
mínimos deseables en los diferentes paráme- las estatinas los fármacos más eficaces en el
tros lipídicos y, de esta manera, reducir el ries- descenso del c-LDL, el tratamiento inicial con-
go de nuevos eventos cardiovasculares. sistirá en la toma de una estatina. Debemos
No hay duda de que el fármaco de primera tener en cuenta una serie de factores para ele-
elección en el control del paciente en preven- gir la estatina adecuada y su dosis (Tabla 6.3).
ción secundaria son las estatinas y que todos A pesar de que podemos conocer el por-
los pacientes en prevención secundaria debie- centaje de reducción del c-LDL con las diferen-
tes dosis de la estatina elegida, la respuesta a dolas, en muchos casos, a ezetimiba. De esta
la misma será individual. El hecho de recomen- manera conseguiremos que un gran número
dar la "dosis máxima tolerada" hace pensar de pacientes alcance los objetivos de c-LDL,
que el tratamiento ha de ser de "prueba", es hecho que ha quedado demostrado al asociar
decir, iniciar con la dosis menor que ha demos- 10 mg/día de ezetimiba con 40 mg/día de ro-
trado un efecto clínico para ir titulando a dosis suvastatina, combinación con la que se consi-
mayores mientras vayan siendo toleradas. Otra guió que el 94% de los pacientes de alto ries-
opción sería dar, desde el inicio, la dosis con la go mantuvieran cifras de c-LDL por debajo de
que se demostró la mayor eficacia, lo que nos 100 mg/dl31.
llevaría a utilizar las dosis máximas autorizadas En esa respuesta individual que los pacien-
de las estatinas más potentes que fueron las tes presentan al empleo de las estatinas
utilizadas en los ensayos en los que se testaba hemos de recordar que éstas no están exentas
un tratamiento intensivo con estatinas frente a de efectos secundarios, y que en algunos pa-
un tratamiento "convencional". Probablemente cientes las dosis necesarias de la estatina no
es el momento de recordar que en la práctica serán bien toleradas. En estas ocasiones debe-
habitual, el tratamiento ha de ser individualiza- remos reducir la estatina a la dosis tolerada y
do y que lo importante es el descenso del c- asociar otros fármacos hipolipemiantes que en
LDL hasta alcanzar los objetivos recomenda- el caso de precisar un descenso mayor de c-
dos y que esto será preciso alcanzarlo de la LDL serán de elección la ezetimiba o las resi-
manera más rápida posible sin perder de vista nas de intercambio iónico, y en el supuesto de
los posibles efectos secundarios y la seguridad que se precise una modificación del perfil lipí-
del paciente. En esta individualización del tra- dico mediante un incremento en los niveles de
tamiento tendremos que valorar si es preferi- c-HDL y/o un descenso de los niveles de trigli-
ble seguir duplicando la dosis de la estatina céridos, serán fenofibrato o niacina los fárma-
elegida o bien es preferible asociar ezetimiba cos a elegir (Tabla 6.4).
que nos aportará un descenso mayor y más rá- En aquellos casos extremos en que no se
pido en los niveles de c-LDL que la simple du- tolere el empleo de la estatina a la dosis preci-
plicación de la dosis de la estatina, sin renun- sa de forma diaria, se ha valorado el empleo
ciar a seguir duplicando la dosis de la estatina de ezetimiba a la dosis de 10 mg/día asociado
tras la asociación con el ezetimiba. En este al empleo de una estatina potente y de larga
sentido se ha observado que pacientes trata- vida media como es la atorvastatina 10 mg to-
dos con estatina tanto a dosis bajas (atorva 10 mada 2 días a la semana, con lo que se consi-
mg/día, fluva 80 mg/día, prava 40 mg/día o guieron descensos en el c-LDL del 37%32. La ro-
simva 20 mg/día) como a dosis altas (atorva 20 suvastatina, la estatina más eficaz y con mayor
mg/día, rosu 5 mg/día o simva 40 mg/día), vida media de las que disponemos, ha mostra-
cuando eran aleatorizados a la combinación do que con la toma de 10 mg a días alternos
ezetimiba 10 mg/simva 20 mg o a rosuvastati- consiguió descensos del 39% en los niveles de
na 10 mg/día en monoterapia, el descenso en c-LDL frente al 48% que se consiguió con la
los niveles de c-LDL era más importantes en el toma diaria de esos mismos 10 mg de rosuvas-
grupo en que utilizó la combinación EZE tatina33. Aunque el estudio se realizó con el ob-
10/simva 20. Este mayor beneficio era superior jetivo de abaratar el coste del empleo de la es-
en aquellos pacientes que estaban utilizando tatina, bien podría ser utilizada, en los casos de
previamente la estatina a dosis altas y en los intolerancia a la estatina, de esta forma o aso-
pacientes diagnosticados de diabetes29. Ade- ciada a ezetimiba si fueran precisos mayores
más, en pacientes diabéticos tipo 2, asociando descensos del c-LDL.
ezetimiba a la estatina podemos conseguir un Existe alguna circunstancia en la que el be-
mayor número de pacientes en objetivos de c- neficio de la estatina se puede ver mermado,
LDL, de c-no-HDL y de ApoB30. Por todo ello, al como ocurre en los pacientes en los que la es-
precisar grandes descensos de c-LDL en los tatina está asociada al empleo de betablo-
pacientes en prevención secundaria será preci- queantes. Aparentemente, el resultado de esta
so emplear las estatinas más potentes asocián- asociación conduce a la disminución del bene-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
74 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Tabla 6.4 Efecto de los fármacos hipolipemiantes y sus combinaciones sobre el perfirl lipídico
C-LDL (%) C-HDL (%) TRIGLICÉRIDOS (%)
ESTATINAS
Rosuvastatina ‚ 45 - 63 · 8 - 14 ‚ 10 - 35
Atorvastatina ‚ 26 - 60 · 5 - 13 ‚ 17 - 53
Simvastatina ‚ 26 - 47 · 8 - 16 ‚ 12 - 34
Lovastatina ‚ 21 - 42 · 2 - 10 ‚ 6 - 27
Fluvastatina ‚ 22 - 36 · 3 - 11 ‚ 12 - 25
Pravastatina ‚ 22 - 34 · 2 - 12 ‚ 15 - 24
OTROS HIPOLIPEMIANTES
Ezetimiba ‚ 7 - 20 · 0-3 ‚ 6 - 11
Resinas ‚ 20 - 25 · 3-5 · 0 - 10
Fibratos ‚ 5 - 20 · 10 - 25 ‚ 30 - 50
Niacina ‚ 5 - 25 · 15 - 35 ‚ 20 - 50
POSIBLES COMBINACIONES CON ESTATINAS
Estatina + ezetimiba ‚ 55 - 60 · 10 - 15 ‚ 30 - 35
Estatina + fibrato ‚ 40 - 45 · 15 - 20 ‚ 50 - 55
Estatina + niacina ‚ 45 - 50 · 30 - 35 ‚ 45 - 50
Modificada de Vaughan CI, Gotto AM. Update on Statins 2003. Circulation 2004;110:886-892.
Modificada de Nicholls SJ, Kalidindi S, Nissen SE. Reducción intensiva de los lípidos en el paciente cardiovascular, ¿a
quién, cuánta reducción y por cuánto tiempo? Current Cardiovascular Risk Reports; Edición en Español 2008;2:77-84.
ficio cardiovascular y el menor descenso del c- lol en pacientes postinfartados36. Este posible
LDL cuando la estatina está asociada a la toma efecto deletéreo fue mayor en los pacientes
de atenolol. Así en el estudio ASCOT-LLA, en el que emplearon propranolol frente a los que
grupo de pacientes en tratamiento con la tomaron metoprolol. Esto nos puede estar in-
combinación atorvastatina 10 mg/día con am- dicando que no todos los betabloqueantes
lodipino se produjo una reducción relativa del provocan el mismo efecto cuando se combi-
riesgo de 53% en la incidencia acumulada de nan con la estatina y que esta circunstancia
infarto de miocardio no mortal y enfermedad debiéramos tenerla en cuenta al tratar a un
coronaria mortal, mientras que en el grupo de paciente en prevención secundaria. Aunque
pacientes en tratamiento con la combinación aún no existe una respuesta clara en la actitud
atorvastatina 10 mg/día con atenolol la reduc- a tomar en estos pacientes, seleccionar ade-
ción del riesgo relativo fue del 16%, sin que al- cuadamente el betabloqueante prescrito y va-
canzara significación estadística en este último lorar adecuadamente el beneficio sobre el per-
caso34. En el estudio TIPS, en el que se testaba fil lipídico de la estatina prescrita con el fin de
una combinación farmacológica en un solo cambiarla a una de mayor eficacia, titularla a
comprimido (Polypill) de 5 fármacos que habí- una dosis mayor o emplear la combinación de
an demostrado su beneficio por separado en varios fármacos hipolipemiantes pudiera ser la
prevención secundaria (tiazida 12,5 mg, ateno- solución.
lol 50 mg, ramipril 5 mg, simvastatina 20 mg y Habrá ocasiones en las que no podamos
aspirina 100 mg) se observó que el efecto alcanzar los objetivos marcados de c-LDL por
sobre el descenso del c-LDL de la Polypill fue presentar, el paciente, niveles basales muy ele-
menor que el empleo de la simvastatina 20 vados. En estos casos deberemos marcarnos
mg como fármaco único (-27 mg/dl vs -32 descensos mínimos del 50% en los niveles de
mg/dl), así como un menor descenso en los ni- c-LDL, límite a partir del cual se ha observado
veles de triglicéridos y de Apo B35. También se la regresión de la placa de ateroma37-39. Estos
ha observado que el efecto antiinflamatorio descensos en los niveles de c-LDL sólo serán
de la simvastatina, mediante la valoración en posibles con el empleo de las estatinas con
los cambios de la PCR, se ha visto mermado mayor eficacia y a las dosis más potentes
cuando se asociaba a metoprolol o proprano- (Tabla 6.5).
Capítulo 6. Manejo del paciente con hipercolesterolemia en prevención secundaria
75
Tabla 6.5 Estatina y dosis capaz de alcanzar descensos mínimos del 50% en el c-LDL
DOSIS PRECISA SEGÚN REDUCCIÓN C-LDL REQUERIDO
ESTATINA ‚48% ‚55% ‚60% ‚65%
Rosuvastatina 10 mg 20 mg 40 mg 80 mg
Atorvastatina 40 mg 80 mg
Simvastatina 80 mg
Modificada de Díaz Rodríguez A. Dislipemia y cardiopatía isquémica. En: Dislipemias. Documentos Clínicos
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Por todo ello, al abordar el tratamiento hi- mínimos deseables y de un modo reglado pro-
polipemiante en los pacientes en prevención poner la mejor opción terapéutica para ese
secundaria debemos marcarnos los objetivos paciente (Tabla 6.6).
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Capítulo 6. Manejo del paciente con hipercolesterolemia en prevención secundaria
77
se han identificado 110, de las cuales cuarenta rior celular; por último, los alelos defectuosos
son autóctonas. Se han encontrado mutacio- para el reciclaje (clase 5), en los que no se
nes de todo tipo: de cambio de aminoácido o produce el reciclaje de la proteína.
"missense", de codón de parada o "nonsense", Los pacientes con la forma de presenta-
de ayuste o "splicing", de cambio de la pauta ción homocigota pueden clasificarse en dos
de lectura o "frameshift", mutaciones en pauta grupos, según la magnitud de la actividad del
o "inframe" y deleciones e inserciones que se receptor de LDL: receptor negativo o nulo (<
distribuyen a lo largo de todo el gen. 2% de la actividad normal del receptor) y re-
En poblaciones aisladas por motivos geo- ceptor defectuoso (2 a 25% de actividad).
gráficos, religiosos, culturales o por haberse Las claves para un diagnóstico secuencial
generado por emigración de grupos aislados, de la HF heterocigótica se describen en la
canadienses franceses, los afrikaner de Sud- Tabla 7.33. Se debe sospechar una HF heteroci-
áfrica, los finlandeses, los judíos Askenazi o gótica en cualquier persona con cifras muy
los libaneses cristianos una o unas pocas mu- elevadas de colesterol total (300-500 mg/dl) y
taciones puede ser las causantes de la mayo- de c-LDL (>230 mg/dl) acompañada de trigli-
ría de las HF en esas poblaciones. Sin embar- céridos normales, y que se acompañe de ante-
go, en la mayoría de los países donde las po- cedentes de hipercolesterolemia o de enfer-
blaciones son genéticamente más heterogé- medad cardiovascular precoz (principalmente
neas, como ocurre en España, existe un am- cardiopatía isquémica) en familiares de primer
plio número de mutaciones entre los pacien- grado. El árbol genealógico, que resulta obliga-
tes con HF. En función de la parte del proceso do, detallará la relación entre el caso índice o
de endocitosis de las LDL que se vea afecta- probando y el resto de familiares afectados.
do tendremos un tipo de mutantes u otros
desde un punto de vista funcional. De esta Diagnóstico de presunción
forma, se denominan alelos nulos (clase 1), - Hipercolesterolemia. Supera en la mayoría de
aquéllos en los que no se produce proteína los casos los 300 mg/dl (200-400 mg/dl) y ni-
funcional; alelos defectuosos para el trans- veles de triglicéridos normales en la edad
porte (clase 2), aquéllos en los está impedido adulta en pacientes con la forma heterocigo-
el avance del receptor del retículo endoplás- to de HF. En edades tempranas el diagnóstico
mico hacia el Golgi, con lo que los receptores puede sospecharse mediante el examen de
no aparecen en la superficie; alelos defectuo- sangre del cordón umbilical, con el hallazgo
sos para la unión (clase 3) en los que la prote- de una colesterolemia que es el doble de la
ína producida no reconoce a su ligando y la de un recién nacido sano. En las formas ho-
asociación está impedida; alelos defectuosos mocigóticas de HF, los niveles de colesterol
para la internalización (clase 4) en los que la total (CT ) suelen ser superiores a los 500
proteína es capaz de unirse al receptor pero mg/dl y pueden alcanzar cifras que superan
el complejo no logra agruparse en vesícula los 1.000 mg/dl. En el recién nacido hay tam-
de clatrina, con lo que se introduce en el inte- bién una importante hipercolesterolemia.
- Suelen servir los mismos criterios referidos elevados, alcanzando cifras intermedias entre
en la HF heterocigota, aunque por lo general los niveles observados en las formas homoci-
estos enfermos tienen niveles plasmáticos de gotas y heterocigotas de la HF.
colesterol ligado a lipoproteínas de baja den- - En el estudio familiar se objetiva que los pa-
sidad (c-LDL) algo más bajos. dres son portadores obligados del gen muta-
do y tienen el colesterol plasmático normal.
Diagnóstico de certeza - Estigmas cutáneos. Presencia de xantomas
- Se lleva a cabo mediante el estudio genético, tendinosos a edades muy tempranas.
a través de la secuenciación del gen de la - Cardiopatía coronaria prematura.
Apo B-100.
Diagnóstico de certeza
2.3. Hipercolesterolemia - En el estudio funcional del r-LDL la función
del receptor de LDL en cultivos de fibroblas-
autosómica recesiva
tos es normal o moderadamente reducida,
(mutaciones en una proteína en tanto que la misma en cultivos de hepato-
citosólica1,10) citos es insignificante.
Es un trastorno autosómico recesivo, muy - En lo que respecta al estudio genético en el
poco frecuente - con un importante efecto diagnóstico diferencial con la forma homoci-
fundacional en Cerdeña-. La prevalencia de la gota de la HF, permite establecer con certeza
enfermedad se estima en menos de un caso ambas entidades.
por 1.000.000 de habitantes.
Está causada por mutaciones en una pro- 2.4. Hipercolesterolemia
teína citosólica que interviene en la endocito- poligénica (HP)1,2,11
sis hepática mediada por el r-LDL. Es la enfermedad más frecuente de todas
las hipercolesterolemias primarias; represen-
Diagnóstico de presunción taría el 80 de las mismas. La prevalencia de la
- Aumento de CT y del c-LDL, de magnitud si- enfermedad se estima en alrededor del 5%
milar al presentado por los pacientes con HF de la población. Se calcula que en España
en su forma homocigoto. En su defecto valo- están afectadas no menos de un millón de
res algo inferiores, pero significativamente personas.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
84 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
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Proyecto1:Blanca 165x280 20/04/10 10:22 Página 1
89
Las dislipemias secundarias son aquellos que las primarias, un importante factor de ries-
trastornos del metabolismo lipoproteico pro- go cardiovascular y puede complicar el trata-
ducidos por enfermedades, estados fisiológi- miento de una dislipemia primaria o enmasca-
cos o tratamientos con distintos fármacos rarla.
(Tabla 8.1). Suponen entre un 20-40% del total La importancia del diagnóstico de una dis-
de las hiperlipemias (HLP). Su diagnóstico se lipemia secundaria radica en:
basa en la coexistencia de una alteración lipí- - Descubrir las causas de la dislipemia, que tra-
dica y una causa subyacente que potencial- tadas pueden corregir la misma.
mente puede alterar el metabolismo lipídico. - La posibilidad de descubrir enfermedades
El reconocimiento precoz de estas formas de subyacentes que necesitarían tratamiento es-
HLP es necesario porque constituyen, al igual pecífico.
- Investigar los fármacos que está tomando el pa- enfermedades endocrinas y enfermedades sis-
ciente, que pudieran ser causa de su dislipemia. témicas, a trastornos dietéticos y a fármacos.
- Orientar al médico en la forma de abordar
este problema con terapia específica para la
dislipemia, si ésta no se corrige al tratar la
1. Dislipemias debidas a
causa secundaria que la originó. enfermedades endocrinas
- Dar una respuesta eficiente a aquellas dislipe-
mias resistentes al tratamiento, en cuya géne-
y sistémicas
sis está casi siempre una causa secundaria.
- Evaluar posibles alteraciones genéticas, que 1.1. Dislipemia diabética2
harían al paciente susceptible a desarrollar La diabetes mellitus (DM) es una enferme-
dislipemia secundaria a algunos fármacos. dad crónica que precisa un estricto control de
Aunque el tratamiento, habitualmente, es los factores de riesgo cardiovascular (FRCV) que
el de la causa etiológica, en ocasiones, no se presente el paciente (dislipemia, hipertensión ar-
consigue un control adecuado de la enferme- terial, tabaco, alcohol, obesidad, antecedentes fa-
dad responsable (ej.: diabetes mellitus) o no se miliares de enfermedad precoz), a fin de evitar la
pueden retirar o disminuir los fármacos (ej.: aparición de complicaciones micro y macrovas-
pacientes trasplantados), por lo que hay que culares. Aunque el seguimiento de todos ellos
realizar un tratamiento dietético y/o farmaco- resulta relevante, la reducción del riesgo cardio-
lógico de la dislipemia1. vascular (RCV) está particularmente influenciada
En la Tabla 8.2 se exponen las causas más por el adecuado control del perfil lipídico. No
frecuentes e importantes de dislipemia secun- obstante este último y el enlentecimiento de la
daria, así como las alteraciones que provocan aterogénesis, será difícil si el control glucémico
en el perfil lipídico. es deficiente3. Hasta el punto de que si persisten
De una forma simplificada podemos es- las alteraciones lipídicas en el paciente con buen
tructurar el manejo de las dislipemias secun- control de DM, debe plantearse la coexistencia
darias en cuatro grandes grupos: las debidas a de una HLP primaria.
Tabla 8.2 Causas más frecuentes de HLP secundarias y alteraciones que provocan en el perfil lipídico
TG C-LDL C-HDL VLDL QUILOMICRONES ACTIVIDAD CT ALBÚMINA LIPOPROTEÍNA
LPL (A)
PLASMÁTICA
DM1 ‚ · · ‚
DM2 · · ‚ Alteración ‡ó‚
(postpandrial) aclaramiento
Obesidad · · ‚
Síndrome · · ‚
metabólico <
tamaño
Baja
densidad
Hipotiroidismo Puede · ·
Hiperuricemia ·
Alcohol · · ·
Anticonceptivos · ·
orales (HDL2)
Síndrome · ‡ó‚ ‚ ·
nefrótico
Embarazo · ·
Trasplante renal · · ‚
Postrasplante · ·
cardiaco
Capítulo 8. Manejo del paciente con dislipemia secundaria
91
rencia, para los pacientes diabéticos con ECV aunque a partir de los 45 años la incidencia es
manifiesta y, en aquéllos sin ECV mayores de mucho mayor en el sexo femenino.
40 años y que tienen uno o más factores de La obesidad, por sí sola, incrementa la tasa
riesgo de ECV. Si los pacientes tratados con fár- de morbi-mortalidad pero, además, se asocia
macos no llegan a los objetivos de control, una en un elevado número de casos al síndrome
reducción del colesterol LDL de un 30-40% del de resistencia a la insulina y la existencia futu-
valor inicial es un objetivo terapéutico alterna- ra de DM2. Por ello es de vital importancia mo-
tivo (ADA 2010)9. dificar los hábitos de vida, manteniendo un
El objetivo primario del tratamiento ha de adecuado plan nutricional y de actividad física.
ser siempre reducir el c-LDL que es lo que más El diagnóstico de sobrepeso y obesidad
ha demostrado disminuir nuevos episodios car- debe basarse no sólo en el IMC, sino también
diovasculares, morbi-mortalidad cardiovascular en la valoración de la circunferencia de la cin-
y mortalidad total. El tratamiento de elección tura (buena correlación con el acúmulo de
son las estatinas a las dosis máximas toleradas. grasa perivisceral o abdominal), fijándose los
La combinación de estatinas con ezetimiba valores de riesgo a partir de 94 cm de períme-
ayuda a lograr mejor estos objetivos. Cuando se tro abdominal en hombres y 80 cm en mujeres.
alcancen los objetivos de c-LDL, se deben con- La alteración lipídica más frecuente es el
trolar otros parámetros lipídicos como el c-HDL aumento de TG, seguida del descenso del c-
y los TG para reducir el riesgo residual de com- HDL y del aumento y modificación del c-LDL.
plicaciones macro y microvasculares10. Los fibra- Siempre que se asocie sobrepeso u obesi-
tos son el tratamiento de elección para reducir dad a diabetes, HTA y/o dislipemia, se debe re-
los TG y elevar el c-HDL y están indicados en la comendar perder peso para un mejor control
hipertrigliceridemia aislada cuando los TG son > de la patología acompañante. Además de una
500 mg/dl por el riesgo de pancreatitis, y en dieta hipocalórica, una pérdida de peso mode-
asociación a las estatinas (fenofibrato) para dis- rada y la práctica de ejercicio físico, es necesa-
minuir el riesgo residual. La niacina y los omega ria la educación sanitaria recomendando que
3 son la alternativa a los fibratos y se pueden los ácidos grasos saturados supongan menos
usar solos o en combinación con estatinas. del 7% de la ingesta calórica total y que el co-
El tratamiento hipolipemiante de las HLP se- lesterol sea < 200 mg/día.
cundarias, si no se corrige al tratar la causa, no El tratamiento farmacológico para reducir
varía respecto al utilizado en las HLP primarias, peso corporal está indicado en pacientes con
por lo que en cuanto a aspectos comunes tales sobrepeso (orlistat si el IMC es de 28-29,9
como: dosis de partida, grupo farmacológico kg/m2) que presentan factores de riesgo aso-
empleado y uso de monoterapia o asociación ciados o enfermedades relacionadas con el ex-
farmacológica se remite al lector al capítulo 6. ceso de peso, y en pacientes con obesidad
(IMC ≥ 30 kg/m2)11,12.
1.2. Obesidad2 El tratamiento quirúrgico de la obesidad se
La obesidad es un problema de salud pú- valorará si el paciente no ha perdido peso tras el
blica. La Organización Mundial de la Salud tratamiento básico y tiene IMC ≥ 40 kg/m2 o IMC
(OMS) recientemente alertaba no sólo del au- entre 35-39,9 kg/m2 y comorbilidad grave11,12.
mento de obesos en los países industrializa- Si no es suficiente el tratamiento de la
dos, sino además de la extensión de la "epide- causa subyacente para mejorar el perfil lipídi-
mia" a países en vías de desarrollo. En España co, podrían emplearse fibratos y/o estatinas.
la prevalencia de sobrepeso (índice de masa
corporal [IMC] ≥ 25 kg/m2) se acerca al 50%. 1.3. Síndrome metabólico
Mientras que el estudio DORICA (Dislipemia, La observación de que diversos factores de
Obesidad y RIesgo CArdio-vascular) tasó la riesgo cardiovascular, como obesidad, dislipemia,
prevalencia de obesidad (IMC ≥ 30 kg/m2) en diabetes e hipertensión arterial, se agrupan con
el 13,2% en hombres y el 17,3% en mujeres. frecuencia en un mismo individuo fue realizada a
Ésta aumenta con la edad en ambos sexos, finales de los años sesenta13. Desde el año 1988
Capítulo 8. Manejo del paciente con dislipemia secundaria
93
que Reaven lo definió como "síndrome X", han del c-HDL, presencia de LDL tipo B, aumento de
sido múltiples los términos empleados para defi- ácidos grasos libres y lipemia postprandial) y
nir el Síndrome Metabólico (SM), denominándolo obesidad, con un incremento de la morbi-mor-
síndrome plurimetabólico, síndrome de resisten- talidad de origen ateroesclerótico15.
cia a la insulina o más recientemente síndrome Si bien existen discrepancias, tanto en la
cardiometabólico. Término empleado por las So- definición como en los criterios diagnósticos,
ciedades Americanas de Diabetes y Cardiología los parámetros más extendidos para identificar
(ADA y AHA, julio de 200614) para designar un el SM son los propuestos en 2001 por el Natio-
proceso fisiopatológico, en el que además de nal Cholesterol Education Program-Adult Treat-
estar implicados los factores ya descritos, se aso- ment Panel III (NCEP-ATP III) y actualizados en
cian una serie de factores emergentes derivados 2005 por la AHA (Tabla 8.3). Siendo conscientes
de la existencia de un estado inflamatorio de no obstante, de que a pesar de ser la más prác-
bajo grado (elevación de la PCR, estado protrom- tica y fácil de utilizar en atención primaria, no
bótico con aumento del inhibidor del activador tiene en cuenta: la presencia de diabetes como
del plasminógeno 1 y el fibrinógeno, etc.). criterio necesario, factores de riesgo como la
El SM es una entidad clínica controvertida microalbuminuria o la resistencia a la insulina y
que aparece, con amplias variaciones fenotípi- el índice cintura-cadera (OMS); el perímetro ab-
cas, en personas con una predisposición endó- dominal (Grupo Europeo de Resistencia a la In-
gena, determinada genéticamente y condicio- sulina, EGIR); o la presencia de obesidad abdo-
nada por factores ambientales (obesidad cen- minal (Internacional Diabetes Federation, IDF).
tral o abdominal, sedentarismo, dieta hipercaló- Su prevalencia aumenta con la edad y la
rica rica en grasas y carbohidratos, tabaquismo). obesidad, y varía según los criterios de definición
Se caracteriza por la presencia de insulina-resis- y diagnóstico utilizados. En España oscila entre el
tencia e hiperinsulinismo compensador asocia- 19,3% (criterios OMS) y el 15,5% (criterios EGIR).
dos a trastornos del metabolismo hidrocarbo- El estudio DORICA observó una prevalencia del
nado, cifras elevadas de presión arterial, altera- 12,15% en hombres y del 9,9% en mujeres. El SM
ciones lipídicas (hipertrigliceridemia, descenso afecta al 42% de las mujeres y el 64% de los va-
rones con intolerancia a la glucosa, y al 78% de para HbA1c serán ≥ 6,1%, glucosa en plas-
las mujeres y 84% de los varones con DM2. ma venoso < 110 mg/dl y autocontroles
Los objetivos a conseguir, en consenso con preprandiales entre 70-90 mg/dl y post -
el paciente con SM, serán15: prandiales entre 70-135 mg/dl.
1. Estilo de vida saludable (incrementar y/o El objetivo del tratamiento es disminuir el
mantener la actividad física, realizar una riesgo de ECV, prevenir el desarrollo de la DM2 y
dieta cardiosaludable y evitar la obesidad controlar los FRCV. La lucha contra la obesidad es
y el sobrepeso). el pilar fundamental. Será necesaria la detección
2. Supresión del hábito tabáquico. oportunista de FRCV. En prevención primaria
3. Cifras de presión arterial: será el riesgo cardiovascular global del paciente
- En población general: < 140/90 mmHg. el que marque la necesidad de tratamiento.
- En DM y en prevención secundaria: < Mientras que la prevención secundaria, se cen-
130/80 mmHg. trará en efectuar un diagnóstico y tratamiento
- En pacientes con insuficiencia renal y/o precoz, interviniendo sobre los FRCV asociados.
proteinuria: < 125/75 mmHg. El tratamiento del SM no es distinto del re-
4. Cifras de colesterol y otras fracciones lipídicas: alizado sobre cada uno de sus componentes.
- En población general: CT < 200 mg/dl o Comenzando por las medidas higiénico-dietéti-
c-LDL < 130 mg/dl. cas, práctica de ejercicio físico y abandono del
- Pacientes con ECV establecida o DM: CT < hábito tabáquico. Si estas medidas resultaran
175 mg/dl o c-LDL < 100 mg/dl. ineficaces, se recurrirá a la intervención farma-
- c-HDL > 40 mg/dl en varones y 50 mg/dl cológica, que salvo en el caso del tratamiento
en mujeres, y cifras de TG < 150 mg/dl. de las alteraciones del perfil lipídico (Tabla 8.4)
5. En pacientes con diabetes los objetivos exceden a la pretensión de este artículo.
Elaborada a partir de Brakert E. Circulation 2003;107:31-28; Grundy et al. Implications of Recent Clinical Trials for the
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Capítulo 8. Manejo del paciente con dislipemia secundaria
95
La periodicidad de los controles se estable- ría determinarse la TSH, como estudio de ruti-
cerá, de manera individualizada en cada pa- na para descartar hipotiroidismo.
ciente, según los distintos FRCV presentes, su
evolución y el nivel de control alcanzado. 1.5. Enfermedades renales
Como norma general se realizarán contro- Muchos pacientes con insuficiencia renal
les cada 1-3 meses para valorar la consecución crónica, presentan niveles elevados de VLDL,
de objetivos cuando se inicien cambios en el hipertrigliceridemia, y c-HDL bajo. Estas altera-
estilo de vida o se introduzca algún fármaco, ciones persisten, aún después de iniciarse la
salvo que el juicio clínico aconseje acortar hemodiálisis, o la diálisis peritoneal; incluso se
estos intervalos, según el riesgo del paciente. podría esperar un incremento en los niveles
En las sucesivas visitas se evaluará y reforzará de triglicéridos con esta última y podrían ser
el cumplimiento de las recomendaciones no explicadas por defectos en la lipoproteinlipa-
farmacológicas (dieta, ejercicio, abandono del sa, o el incremento en la síntesis de triglicéri-
hábito tabáquico y control de peso), el nivel dos.
de cumplimentación de los fármacos prescri- En el síndrome nefrótico existe hipercoles-
tos y la posible aparición de efectos secunda- terolemia como un componente del mismo,
rios o interacciones medicamentosas entre aunque también se puede observar incremen-
ellos. to en las VLDL y triglicéridos, así como tam-
Una vez alcanzados los objetivos de con- bién de la Lp(a). Se debe sospechar síndrome
trol se recomienda realizar seguimientos se- nefrótico en hipercolesterolemia resistente al
mestrales con controles analíticos según el tratamiento, y el sistemático de orina en busca
factor de riesgo presente (perfil lipídico en hi- de proteinuria, sería un examen obligado.
perlipémicos y hemoglobinas glicosiladas en
diabéticos bien controlados). Anualmente se 1.6. Enfermedades hepáticas
solicitará un perfil general -incluidos iones en La colestasis puede ser causa de hiperco-
el caso de hipertensos tratados farmacológica- lesterolemia grave y elevación de c-LDL. Los
mente- y microalbuminuria. En pacientes trata- pacientes con cirrosis biliar primaria muestran
dos con estatinas sólo se pedirá la CPK en el valores de colesterol que pueden superar los
caso de que la sintomatología referida por el 500 mg/dl, y tienen además alterada la síntesis
paciente sugiera patología muscular. de apolipoproteínas. Frecuentemente, se en-
Se deben desarrollar programas específi- cuentra una lipoproteína anómala, conocida
cos de educación sanitaria que proporcionen como lipoproteína X (Lp-X), formada por leciti-
individualizadamente la información e instruc- na biliar, colesterol libre, albúmina y Apo C, en
ción necesarias para alcanzar los objetivos individuos con lesión hepatocelular. Es necesa-
propuestos15. rio determinar los niveles de fosfatasa alcalina,
en aquellos pacientes con sospecha de hepa-
1.4. Hipotiroidismo topatía obstructiva.
Es una causa muy frecuente de elevación
del colesterol total y el c-LDL. La tiroxina oca- 1.7. Embarazo
siona una regulación baja de los receptores de Es frecuente observar alteraciones en las
LDL, elevando los niveles de c-LDL16. cifras de los lípidos durante el embarazo, espe-
Adicionalmente la actividad de la lipopro- cialmente incrementos en niveles de triglicéri-
teinlipasa disminuye, produciendo un incre- dos y colesterol, a partir del segundo trimestre,
mento en las VLDL. Menos frecuentemente que suelen normalizarse después del parto;
puede producir elevación de los triglicéridos. aunque es posible encontrar cifras muy eleva-
Se debe sospechar la coexistencia de hipotiroi- das de triglicéridos, que pondrían a la paciente
dismo en aquellos pacientes en los que a en riesgo de desarrollar pancreatitis aguda, y
pesar del tratamiento hipolipemiante, experi- debería considerarse la hospitalización, cuan-
menten pobre mejoría en su perfil lipídico. En do los niveles de triglicéridos sean iguales o
todo paciente con hipercolesterolemia, debe- superiores a 2.000 mg/dl.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
96 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
se debe administrar este tipo de medicamen- nes se sospeche dislipemia secundaria, se-
tos a personas con niveles basales elevados de rían:
triglicéridos, por el riesgo de severa hipertrigli- - Sistemático de orina (síndrome nefrótico).
ceridemia. - Fosfatasa alcalina (enfermedad hepática
obstructiva).
3.6. Ciclosporina - Glucemia en ayunas (diabetes mellitus).
Aumenta de forma importante el c-LDL y 3. Pensar en el alcohol como una causa fre-
la Lp(a), y ocasionalmente los triglicéridos. cuente de hipertrigliceridemia leve a mo-
Puede incrementar el riesgo de miositis con el derada.
uso concomitante de estatinas. 4. Determinar los niveles basales de triglicéri-
dos, en aquellos pacientes en los que se
inicie la terapia con anticonceptivos orales,
3.7. Inhibidores de proteasa estrógenos o retinoides.
Incrementan los niveles de triglicéridos, a
5. Pensar en anormalidad subyacente de li-
través de la síntesis elevada de las VLDL. Tie-
poproteínas o nefropatía asociada, en los
nen la posibilidad además, de disminuir el c-
pacientes diabéticos con niveles elevados
HDL, y producir resistencia a la insulina17. Es
de c-LDL.
importante, evaluar los niveles de triglicéri-
6. Los betabloqueantes o diuréticos, a pesar
dos en pacientes a quienes se formulen
de producir alteraciones en el perfil lipídi-
estos medicamentos, especialmente, aquéllos
co, deberían de ser utilizados en aquellos
con riesgo para desarrollar pancreatitis
pacientes que lo requieran, y su beneficio
aguda.
esté demostrado.
7. Monitorizar triglicéridos durante el tercer
4. Otras causas de trimestre del embarazo, por riesgo de pan-
creatitis aguda, y hospitalizar a la paciente
hiperlipemia secundaria con niveles iguales, o superiores a 2.000
mg/dl.
En las Tablas 8.2 y 8.5 se resumen otras 8. Sospechar síndrome nefrótico en hiperco-
causas de HLP secundaria (hipotiroidismo, hi- lesterolemias resistentes al tratamiento.
peruricemia, ingesta enólica, anticonceptivos 9. Tener precaución con el uso de las estatinas
orales, síndrome nefrótico, gestación, tras- en los pacientes renales crónicos o con tras-
plante renal y postrasplante cardiaco), así plante renal por el riesgo de miopatía18.
como su prevalencia, alteraciones provoca- 10. No se aconseja el uso de estrógenos en la
das en el perfil lipídico, diagnóstico y trata- prevención primaria o secundaria de la en-
miento. fermedad cardiovascular.
11. Los antihipertensivos con efecto neutro
5. Manejo de las sobre los lípidos son: los IECAS, ARA II, cal-
cioantagonistas y simpaticolíticos. Tienen
dislipemias secundarias un efecto beneficioso los bloqueadores
alfa y el carvedilol.
Las dislipemias secundarias deben descar- 12. Recordar entidades como la enfermedad
tarse en la fase de diagnóstico y clasificación hepática obstructiva y la insuficiencia renal
de las dislipemias, porque se corrigen general- crónica, como causas de dislipemia secun-
mente tratando la causa que las origina. Para daria.
ello, al menos, debemos de realizar las siguien- 13. Siempre intentar tratar la causa de base de
tes actividades y tener en cuenta una serie de la dislipemia inicialmente, antes de iniciar
consideraciones: tratamiento farmacológico.
1. Solicitar TSH, en cualquier paciente con hi- 14. No olvidar nunca que la dislipemia de
percolesterolemia. nuestro paciente puede estar relacionada
2. Otros pruebas de laboratorio que se deben con él, o los fármacos que le hemos pres-
de realizar en aquellos pacientes, en quie- crito.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
98 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
15. Explorar el tipo de dieta y el estilo de vida, 16. No olvidarse nunca de la comorbilidad
realizando educación sanitaria y favorecer asociada a las dislipemias y pensar siempre
los hábitos de vida saludables que contri- que detrás de una dislipemia puede haber
buyen no sólo al control de la dislipemia, una causa secundaria potencialmente tra-
sino al control integral de otros factores de table que debemos descubrir y tratar antes
riesgo cardiovascular. de iniciar el tratamiento hipolipemiante.
Capítulo 8. Manejo del paciente con dislipemia secundaria
99
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Proyecto1:Blanca 165x280 20/04/10 10:22 Página 1
101
Esta elevación de los TG puede desenmas- miento durante 20 años20 se confirmó que las
cararse o agravarse cuando concurren otras concentraciones iniciales de TG eran predicto-
causas de hipertrigliceridemia con las que se res de mortalidad entre familiares de primer
asocia con frecuencia la enfermedad ( Tabla grado de sujetos con hipertrigliceridemia fa-
9.2). La hipertrigliceridemia familiar se asocia miliar, independientemente de la concentra-
con mayor riesgo cardiovascular, obesidad, in- ción de colesterol y otras variables.
tolerancia a la glucosa, resistencia a la insulina, En cambio, las infrecuentes concentracio-
hipertensión arterial e hiperuricemia. También nes superiores a 1.000 mg/dl (11,40 mmol/l)
la agravarán otras causas tales como una dieta en esta enfermedad pueden presentar un sín-
rica en hidratos de carbono, ingesta de alcohol drome hiperquilomicronémico y acompañarse
o administración de estrógenos, glucocorticoi- de dolor abdominal, xantomas eruptivos, lipe-
des, diuréticos o betabloqueantes. Las mani- mia retinal, y hepatoesplenomegalia, con ries-
festaciones clínicas dependen de la concentra- go elevado de pancreatitis.
ción de TG que presenten los afectados. Así, El diagnóstico requiere la demostración de
con concentraciones inferiores a 500 mg/dl varios familiares con hipertrigliceridemia y
(5,70 mmol/l) la mayoría de los pacientes no concentraciones de c-LDL normales y con un
presentan manifestaciones externas de la en- patrón de herencia autosómico dominante,
fermedad, pero presentan un mayor riesgo según los siguientes criterios21:
cardiovascular ligeramente mayor que la po- 1. Se debe realizar al paciente un perfil lipídico
blación sin dislipemia. En un estudio de segui- que incluya colesterol, c-HDL, c-LDL y TG tras
HIPERTRIGLICERIDEMIA
TG ≥ 200 mg/dl, CT < 200 mg/dl
MEV + FIBRATOS
ALTERNATIVA: NIACINA, OMEGA 3 MEV
FIBRATOS + OMEGA 3 ESTATINAS ± EZETIMIBA
NIACINA + OMEGA 3 FIBRATOS, ÁC. NICOTÍNICO, OMEGA 3
moderación o cesación del consumo de alco- macológico del paciente con este trastorno.
hol). Es muy probable que con estatinas, que Los fármacos de elección para esta situación
son los fármacos de elección, se consiga el ob- son también las estatinas29. Se debería iniciar el
jetivo de control del c-LDL y de los TG. La si- tratamiento inicialmente con estatinas e incre-
tuación de RCV definirá el objetivo de control mentar la dosis de éstas hasta lograr los obje-
de los TG, < 150 mg/dl en caso de RCV ≥ 5%, < tivos de c-LDL. Si con dosis medias-altas de es-
200 mg/dl si RCV < 5%. tatinas no se consiguen los objetivos de con-
En el caso de presentar valores de TG > trol, en cualquiera de los dos parámetros se
400 mg/dl, la fórmula de Friedewald, para cal- debería considerar la adición de ezetimiba, fi-
cular el valor del c-LDL, no tiene suficiente bratos, niacina o ácidos grasos omega 3 hasta
grado de exactitud. En este caso, para valorar obtener el objetivo del colesterol no-HDL.
el grado de control utilizaremos, en vez del Si los TG no están muy elevados y/o esta-
nivel de c-LDL, los niveles de Apo B y/o el nivel mos lejos del objetivo de control del c-no HDL,
de colesterol no-HDL (c-no HDL= CT - c-HDL) podremos asociar a la estatina, ezetimiba.
que valora el colesterol ligado a las lipoproteí- Cuando los TG estén muy elevados puede con-
nas VLDL, IDL y LDL, así como el nivel de TG. siderarse la asociación de la estatina a un fi-
Los objetivos del c-no HDL se establecen brato (fenofibrato, a dosis de 145-200 mg/día)
según el grado de RCV: separando 12 horas las tomas de ambos fár-
- Si RCV ≥ 5% el objetivo de c-no HDL < macos. Otra opción terapéutica en esta situa-
130 mg/dl. ción es la combinación de estatinas con niaci-
- Si RCV < 5% el objetivo de c-no HDL < na o ácidos grasos omega 3 para disminuir el
160 mg/dl. riesgo residual. No está aprobado en ficha téc-
Este perfil lipídico es típico de la hiperlipe- nica utilizar ezetimiba junto con fibratos, aun-
mia familiar combinada y de la dislipemia aso- que se dispone de ensayos clínicos en los que
ciada a la obesidad, diabetes tipo 2 y al síndro- la asociación fenofibrato con ezetimiba se de-
me metabólico. Ambas entidades, por ser muy muestra muy beneficiosa en el control del per-
aterogénicas, presentan RCV elevado. Debere- fil lipídico aterogénico30. Probablemente la uti-
mos ser exigentes y estrictos en el manejo far- lización de los tres fármacos juntos será en el
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
110 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
futuro una medida muy útil para alcanzar el pacientes con dislipemia aterogénica-HDL bajo
control en estos pacientes tan difíciles. e hipertrigliceridemia- mostró beneficio en la
Si el paciente presenta TG ≥ 500 mg/dl, el reducción de accidentes cardiovaculares.
riesgo fundamental que tiene es el desarrollo
de una pancreatitis. Deberemos descartar cau- 6.2. Fibratos
sas secundarias y/o factores agravantes que Los fibratos (gemfibrocilo, fenofibrato y be-
puedan ser abordados y corregidos específica- zafibrato) son fármacos de elección en las hi-
mente. El objetivo inicial es disminuir el riesgo pertrigliceridemias32. Actúan sobre los recepto-
de pancreatitis aguda, especialmente si lo ni- res activados por proliferadores peroxisómicos
veles de triglicéridos es superior a 1.000 alfa (PPAR-α), siendo sus tejidos diana el hepá-
mg/dl. En estos pacientes con niveles superio- tico y muscular. Elevan en estos tejidos la cap-
res a 1.000 mg/dl se debería instaurar una tación de ácidos grasos libres (AGL) al activar
dieta muy pobre en grasas (15% o menos de la enzima LPL; disminuyen la síntesis de Apo
la ingesta calórica), una reducción agresiva del C-III, por lo que se produce un descenso de las
peso corporal, prohibición absoluta de alcohol partículas VLDL ricas en TG, disminuyendo los
e iniciar tratamiento farmacológico. Los fárma- TG plasmáticos; aumentan la síntesis de Apo
cos de elección serán los fibratos, recomen- A-I y Apo A-II, por lo que elevan las concentra-
dando fenofibrato a dosis de 145 mg/día. La ciones de c-HDL; reducen el número de partí-
alternativa a los fibratos es la niacina/laropri- culas LDL pequeñas y densas e intervienen en
pant a dosis de 2.000/40 mg/día y/o omega 3, la síntesis de ABC1 y SR-B1, por lo que aumen-
a dosis de 2-4 g/día. Fibratos y niacina se pue- tan la extracción y eliminación de colesterol.
den combinar con los omega 3 con el objetivo Todas estas acciones condicionan el efecto be-
de obtener una objetivo de TG < 500 mg/dl. neficioso sobre las alteraciones lipídicas rela-
En caso de persistir la hipertrigliceridemia y el cionadas con la dislipemia aterogénica.
riesgo de pancreatitis a pesar del tratamiento, Se consideran los fármacos más efectivos
derivar al paciente al especialista. para disminuir los TG, consiguiendo reduccio-
nes del orden del 50%, directamente propor-
6. Tratamiento cional al nivel sanguíneo de partida. Consi-
guen disminuciones del c-LDL no tan potentes
farmacológico como las estatinas, en torno al 20% y elevacio-
nes del c-HDL entre el 10-20%, además tienen
Las estatinas, fibratos y niacina, y ácidos un efecto beneficioso sobre las alteraciones de
grasos omega-3 (solos o en distintas combina- la hemostasia asociadas al síndrome metabóli-
ciones) son eficaces en cuando está indicado co y disminuyen la proteína C reactiva.
el tratamiento farmacológico en las hipertrigli- Los fibratos son eliminados por vía renal,
ceridemias. Aunque el tratamiento de elección pudiendo acumularse en plasma en pacientes
son los fibratos, las estatinas lo son cuando el con insuficiencia renal, lo que puede provocar
c-LDL está elevado. miositis. A la hora de elegir un fibrato es impor-
tante tener en cuenta qué gemfibrocilo, en su
6.1. Estatinas metabolismo y degradación, comparte la iso-
Las estatinas de última generación en dosis enzima 1A1 y 1A3 de la uridindifosfato glucu-
altas pueden reducir notablemente los niveles ronosiltransferasa (UGT), al menos, con simvas-
de TG y elevar el c-HDL. Su indicación principal tatina y pravastatina, lo que provoca aumentos
es para disminuir los niveles de c-LDL hasta un acusados de las concentraciones de estas esta-
60%. Con estas reducciones de c-LDL han redu- tinas y una mayor probabilidad de aparición de
cido la morbi-mortalidad cardiovascular. Los efectos adversos. Esta situación no se da con
efectos beneficiosos potenciales de la asocia- fluvastatina. Fenofibrato no comparte ninguna
ción de estatinas y fibratos en el tratamiento de isoenzima con las estatinas mencionadas ni
la diabetes tipo 2 han sido investigados en el con rosuvastatina, por lo que, en la práctica clí-
estudio ACCORD31 en el que sólo el grupo de nica, éste será el preferido cuando debamos
Capítulo 9. Manejo global del paciente con hipertrigliceridemia
111
asociar fibratos con estatinas, para evitar, en lo - Es el único fármaco que disminuye la
posible, efectos adversos34. Deberemos tener Lp(a) hasta un 25%.
especial cuidado cuando se utilice o asocie en Ha demostrado su eficacia en disminuir los
pacientes con insuficiencia renal o hipertiroi- eventos cardiovasculares tanto en monotera-
dismo y con el uso concomitante de fármacos pia como asociada a otros hipolipemiantes.
que utilicen la vía del citocromo P450. Pode- Hasta hace poco tiempo su uso generaliza-
mos aumentar la seguridad si administramos do estuvo limitado por sus efectos secunda-
los hipolipemiantes en tomas separadas 12 h rios, fundamentalmente la rubefacción facial,
(p. ej. estatinas por la noche, fibratos por la ma- picor, aumento de la glucosa y elevación del
ñana). El paciente deberá estar instruido sobre ácido úrico, limitaban seriamente su uso en la
los síntomas de una posible miopatía. práctica clínica. Una formulación de liberación
Los fibratos han demostrado su eficacia en prolongada, que se administra una sola vez al
la disminución de la enfermedad cardiovascular día, reduce la frecuencia de esos efectos se-
en diferentes estudios de intervención35-38, aun- cundarios, que generalmente son transitorios.
que con menor consistencia que las estatinas. Esta formulación también disminuye la toxici-
Indicados en hipertrigliceridemia aislada, dad hepática.
disbetalipoproteinemia, prevención secundaria Recientemente ha sido aprobada en Euro-
con LDL normal y HDL bajo y en dislipemias pa por la EMEA una nueva formulación, el
secundarias con fenotipo B (DM, síndrome me- ácido nicotínico asociado a laropiprant 41. El
tabólico, etc.). ácido nicotínico es un agente modificador de
Contraindicados en el embarazo, niños e lípidos. Laropiprant es un antagonista selecti-
insuficiencia hepática o renal. Especial precau- vo del receptor D2 de prostaglandina (PGD2)
ción en pacientes con colelitiasis. Pueden pro- subtipo 1 (DP1) y suprime el rubor asociado a
ducir miopatía y efectos secundarios gastroin- la administración de ácido nicotínico mediado
testinales, en especial colelitiasis. por el receptor PGD 2 . Laropiprant no tiene
La combinación ezetimiba+fenofibrato efecto sobre los niveles lipídicos ni interfiere
está autorizada por la FDA. con los efectos del ácido nicotínico sobre los
lípidos42. Sus beneficios se basan en la capaci-
6.3. Niacina dad de modificar los niveles lipídicos reducien-
La niacina disminuye rápidamente los ni- do simultáneamente los síntomas de rubor in-
veles de ácidos grasos libres, seguido de una ducidos por el ácido nicotínico.
disminución de las concentraciones plasmáti- Son la alternativa a los fibratos en la hiper-
cas de TG, VLDL y LDL. Este efecto está media- trigliceridemia, sola o en combinación con áci-
do por la interacción con los receptores del dos grasos omega 3. Están indicados en el tra-
ácido nicotínico (receptores acoplados a la tamiento de la dislipemia, particularmente en
proteína G 109 A o GPR 109A). La niacina tam- pacientes con dislipemia mixta combinada, hi-
bién inhibe la síntesis de Apo B-100 y aumenta percolesterolemia primaria, en pacientes que
el catabolismo de las VLDL por la LPL. presenten alteraciones de la tríada lipídica, hi-
La niacina modifica todas las fracciones li- pertrigliceridemia y en el síndrome metabóli-
pídicas más importantes para el RCV, excepto co. Debe utilizarse en combinación con estati-
los quilomicrones39,40: nas cuando éstas no consiguen los efectos es-
- Disminuye los TG hasta en un 45%. perados sobre los niveles lipídicos y en mono-
- Disminuye el c-LDL hasta en un 20%. terapia en los casos en que el tratamiento con
- Aumenta el HDL hasta un 25%, según los estatinas no se considere apropiado o no sea
valores basales de éste. Los pacientes con tolerado por el paciente.
unos valores basales de HDL < 30 mg/dl Los efectos adversos más frecuentes a
son los que muestran el mayor aumento parte del rubor, incluyen elevaciones de las en-
de HDL. Aumenta la Apo A-I y la Apo A-II zimas hepáticas, aumento de los niveles de
y la HDL-2 (subfracción más grande y ácido úrico, problemas gastrointestinales y dis-
menos densa de las HDL). minución de la tolerancia a la glucosa.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
112 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
6.4. Ácidos grasos omega 3 sos omega 3 han sido aprobadas en España
Los ácidos grasos omega 3 (ácido eicosa- para la disminución de los TG en adultos. Cada
pentaenóico [EPA] y ácido docosahexaenóico cápsula contiene 1 g de omega 3. La dosis
[DHA]), son ácidos grasos esenciales y, por aprobada para reducir los TG es entre 2-4
tanto, se deben obtener de la dieta, ya sea en g/día. A esas dosis disminuyen los TG entre un
forma de pescado graso o bien como suple- 28-45% y elevan las HDL entre un 5-13%.
mentos de aceite de pescado. Reducen la lipo- A dosis de 1 g/día han demostrado ser úti-
génesis hepática y aumentan la oxidación de les en pacientes que han sufrido un infarto de
ácidos grasos en el hígado y en el músculo es- miocardio reciente, disminuyendo la morbi-
quelético. mortalidad (muertes de causa CV, IAM no mor-
En los estudios aleatorizados sobre ácidos tal e ictus no mortal) un 20% con respecto a
grasos omega 3 (GISSI, DAT y JELIS) se ha ob- placebo tras 3,5 años de seguimiento43.
servado una reducción del 20% en la mortali- Los efectos secundarios son escasos y con-
dad total, debida en gran medida a una reduc- sisten en un gusto residual a pescado y altera-
ción del 45% en la incidencia de muerte súbi- ciones gastrointestinales leves (náuseas, dis-
ta. tensión abdominal y eructos), tiempo prolon-
Están indicados como complemento o al- gado de sangrado a dosis altas y ligero au-
ternativa a los fibratos y al ácido nicotínico mento de LDL (subfracciones menos aterogé-
para reducir los TG. Las cápsulas de ácidos gra- nicas).
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115
poproteinemia tipo III. Esto simplifica el diag- Son de gran ayuda e interés los anteceden-
nóstico ya que la ultracentrifugación es un mé- tes familiares de anomalías lipídicas o enferme-
todo caro, laborioso y no exento de errores. Por dades relacionadas con las mismas.
tanto, la observación de un genotipo E2/E2 o Partiendo de la historia clínica del paciente,
bien la presencia de una variante rara de Apo E podemos valorar diferentes circunstancias, fi-
asociados a una hiperlipidemia, confirma el siológicas o patológicas, que influyan en la
diagnóstico de hiperlipoproteinemia tipo III. concentración plasmática de los lípidos. De
este modo, hemos de tener presente (a modo
1.2. Hiperlipemias mixtas de ejemplos) que:
- La determinación de lípidos no debe ha-
secundarias
cerse en el post-infarto inmediato (hay
Las hiperlipoproteínas mixtas secundarias
que esperar al menos 3 meses).
se pueden clasificar, por su fenotipo según su
- El embarazo conlleva la aparición de una
etiología ( Tabla 10.2). El reconocimiento de
hiperlipemia fisiológica.
estas formas de hiperlipoproteinemias se hace
- Hay procesos intercurrentes que pue-
necesario al constituir, al igual que las primarias,
den implicar cambios en el patrón lipí-
un importante factor de riesgo coronario. Sue-
dico (como es el caso de un síndrome
len corregirse al controlar la causa subyacente
gripal).
cuando es posible, pero si persiste la dislipemia,
Dentro del contexto de la historia clínica,
por su alta capacidad aterogénica requiere tra-
hemos de considerar que la principal manifes-
tamiento farmacológico y modificaciones del
tación de una hiperlipemia primaria suele ser
estilo de vida para disminuir el riesgo cardiovas-
la enfermedad coronaria a edades tempranas
cular global de los sujetos que la padecen.
de la vida (a lo largo de la cuarta década), del
mismo modo que suele asociarse a obesidad,
2. Diagnóstico hiperinsulinismo, intolerancia hidrocarbonada
y diabetes mellitus.
El primer planteamiento ha de ser discernir En la exploración física hay que buscar la
si se trata de una dislipemia primaria o esta- existencia de arco corneal, xantelasmas, lipe-
mos ante una dislipemia secundaria. mia retinalis, xantomas tendinosos o cualquier
otro dato que apunte a la existencia de una La dieta es el principal factor exógeno que
causa específica. influye sobre las grasas plasmáticas siendo,
Como apoyo a la valoración clínica, conta- además, una variable susceptible de ser modi-
mos con la mejor y más rentable exploración ficada. Su importancia reside no sólo en que la
complementaria: el análisis de sangre. Con las trasgresión dietética puede determinar la exis-
variables lipídicas podremos establecer (o hacer tencia de una de las denominadas dislipemias
una aproximación) al fenotipo de la alteración inducidas por la dieta, sino que también influi-
en estudio. A partir de aquí, sigue todo el proce- ría, acentuándolas, sobre las demás alteracio-
so de: establecer diagnóstico preciso (habiendo nes lipídicas de base genética.
descartado otras situaciones similares) y diseñar Por estas razones, el tratamiento dietético de
la intervención específica. Todo lo comentado las hiperlipemias es una medida fundamental
se recoge en la Tabla 10.3, a modo de resumen. en el manejo del paciente con dislipemia y debe
instaurarse en el momento en que las cifras de
3. Aspectos terapéuticos lípidos superen el objetivo clínico a conseguir4,5.
Los cambios dietéticos que se han de se-
El tratamiento de las hiperlipoproteine- guir en tales casos implican disminuir la inges-
mias mixtas se justifica desde dos puntos de ta de grasas saturadas y colesterol, dando un
vista fundamentales: papel principal al consumo de gasas poli o
1. El tratamiento de la hipercolesterolemia monoinsaturadas.
se traduce en una significativa disminu- Es preciso indicar que la disminución de
ción de la morbi-mortalidad por ECV. las variables lipídicas, por medio de la inter-
2. La normalización de las hipertrigliceride- vención dietética, puede tardar 2-3 meses en
mias (ver más detalles en capítulo 9) observarse, aún cuando dicho efecto podría
evita ataques de dolor abdominal y epi- iniciarse 3 semanas después de la modifica-
sodios de pancreatitis aguda. ción de la dieta y se mantendría durante el
● Dieta
● Función hepática
● Sedimento de orina
● Hormonas tiroideas
Hemograma ● VCM
● Hemoglobina
Estudio genético*
Electroforesis de
lipoproteínas*
ECV: enfermedad cardiovascular; VCM: volumen corpuscular medio.
*Cuando se considere pertinente.
Capítulo 10. Manejo del paciente con hiperlipemia mixta
119
tiempo de observación de la misma. Una vez tos6. Sin embargo, el tratamiento más apropia-
establecida la dieta a seguir, ésta debe quedar do para las hiperlipemias mixtas no ha sido es-
como hábito definitivo. tablecido con suficiente claridad.
Las normas aconsejadas, para una adecua- La elección del fármaco a utilizar debe ha-
da intervención dietética, son las que quedan cerse en base a:
recogidas en la Tabla 10.4. - Los objetivos de c-LDL a conseguir.
Por lo que respecta al ejercicio físico, consi- - El perfil lipídico específico.
derado un coadyuvante de la dieta específica, Puede, de este modo, ser un buen indica-
se indica (para todos aquellos sujetos en los dor la Tabla 10.5.
que no exista una contraindicación derivada El enfoque terapéutico de las hiperlipopro-
de situaciones de comorbilidad), la práctica de teinemias mixtas, por lo tanto, vendría a ser el
ejercicio físico, adaptado a cada caso (en fun- que se refleja en la Figura 10.1.
ción de la edad y el sexo). En pacientes con hiperlipemia mixta, la
Si las intervenciones realizadas con la dieta combinación de fibratos y estatinas es muy
específica y la práctica de ejercicio no nos per- eficaz para disminuir los triglicéridos y elevar
miten alcanzar los objetivos establecidos, se la cifra de c-HDL, en tanto que se mantiene, o
ha de avanzar al segundo nivel de interven- se potencia, el efecto de las estatinas sobre el
ción: el tratamiento farmacológico. colesterol. Dicha combinación tiene un riesgo
de efectos secundarios un poco mayor, espe-
3.1. Tratamiento farmacológico6-11 cialmente en lo que concierne a la afectación
Se ha demostrado con claridad que el tra- muscular, por lo que, a modo de prevención,
tamiento más conveniente para la hipercoles- antes de instaurar el tratamiento (y durante el
terolemia pura son las estatinas y el más indi- curso del mismo) debemos realizar (con perio-
cado para la hipertrigliceridemia son los fibra- dicidad mensual, al menos):
Secundaria Primaria
● Dietaespecífica
● Ejerciciofísico
● Control de peso
● ‚consumo de alcohol
● No fumar
¿Objetivos alcanzados?
Sí No
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Proyecto1:Blanca 165x280 20/04/10 10:22 Página 1
123
Tabla 11.1 Cambios de los lípidos plasmáticos en las enfermedades renales crónicas
TFG ≥ 15 TFG < 15 SÍNDROME HEMODIÁLISIS DIÁLISIS POST-
NEFRÓTICO PERITONEAL TRANSPLANTE
RENAL
Colesterol total SC SC ·· SC ·· ·
Triglicéridos SC o · (+PPD) · (+PPD) ·· · (+PPD) ··· SC o ··
Colesterol LDL SC o · SC o ‚ · SC o‚ · SC o ·
Colesterol HDL ‚ o SC ‚ ‚ ‚ ‚ SC
TFG: tasa de filtrado glomerular (ml/min/1,73 m2); SC: sin cambios; (+PPD): con presencia de partículas LDL pequeñas
y densas.
Modificada de Chan DT, Irish AB, Dogra GK, Watts GF. Dyslipidaemia and cardiorenal disease: mechanisms,
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Capítulo 11. Manejo del paciente con hiperlipemias en situaciones especiales (nefropatías, VIH, ancianos, embarazadas)
125
superiores a 500 mg/dl son de tratamiento Una modificación del algoritmo de manejo de
prioritario para evitar riesgos de pancreatitis. la dislipemia en el paciente con ERC que figura
Dieta. La recomendación de la guía en una publicación muy actualizada26, se expo-
K/DOQI es que la dieta de los pacientes con ne en la Tabla 11.2.
ERC no debe diferir de las recomendaciones
clásicas para el resto de pacientes. Sin embar-
go, la situación de aquellas personas con una
2. Infección por el virus
TFG menor de 15 ml/min/1,73 m2 es más com- de la inmunodeficiencia
pleja, debido a sus profundos cambios meta-
bólicos y hormonales. La restricción proteica humana y dislipemia
enlentece el paso a un estadío de IRC final,
pero cuando los pacientes entran en diálisis, Las nuevas pautas de tratamiento antirre-
esta limitación no es necesaria. Los suplemen- troviral han convertido a la infección por el
tos nutricionales y de aminoácidos pueden virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) en
mejorar el estado nutricional de los hemodiali- un proceso crónico, que ha permitido observar
zados. No obstante, la falta de ensayos dietéti- que los pacientes infectados tienen un desa-
cos controlados impide marcar una pauta clara rrollo acelerado de los procesos arterioscleróti-
en estas situaciones24. cos, constatándose además que muchos de
Fármacos. La guía K/DOQI aconseja el em- ellos presentan alteraciones en los lípidos plas-
pleo de estatinas para disminuir el c-LDL y de máticos. Por este motivo, se considera al con-
fibratos para bajar los TG, evitando el resto de trol de la dislipemia ligada al VIH un problema
hipolipemiantes hasta no disponer de datos de salud de primera magnitud en esta pobla-
que garanticen su seguridad. No establece ob- ción, pese a que su impacto sobre las compli-
jetivos para el c-HDL y emula al NCEP-ATP III25 caciones cardiovasculares a corto y largo plazo
al considerar objetivos de colesterol no-HDL. no está aún completamente definido.
Tabla 11.2 Algoritmo del tratamiento de la dislipemia en pacientes con enfermedad renal crónica
ALTERACIÓN LIPÍDICA OPCIÓN TERAPÉUTICA
Tasa de filtrado glomerular: 15-59 ml/min/1,73 m2
Elevación de c-LDL 1) Atorvastatina. Añadir ezetimiba si objetivo c-
LDL no alcanzado
2) Fluvastatina. Añadir ezetimiba si objetivo c-
LDL no alcanzado
Dislipemia mixta 1) Atorvastatina o fluvastatina + ezetimiba
2) Estatina + fenofibrato 48 mg/día. Añadir
ezetimiba si objetivo no c-HDL no alcanzado
3) Estatina + omega 3. Añadir ezetimiba si
objetivo no c-HDL no alcanzado
4) Fluvastatina + gemfibrozilo 600 mg/día +
ezetimiba si objetivo no c-HDL no alcanzado
Hipertrigliceridemia grave: triglicéridos > 500 mg/d 1) Gemfibrozilo 600 mg/día
2) Omega 3, 3-4 g/día
3) Fenofibrato 48 mg/día
Tasa de filtrado glomerular: < 15 ml/min/1,73 m2
Elevación de c-LDL Atorvastatina 10-40 mg/día o fluvastatina 40
mg/día. Añadir ezetimiba si objetivo c-LDL no
alcanzado
Dislipemia mixta Atorvastatina o fluvastatina 40 mg/día. Añadir
ezetimiba u omega 3, 3-4 g/día si objetivo no c-
HDL no alcanzado
Hipertrigliceridemia grave: triglicéridos > 500 mg/d Omega 3, 3-4 g/día o gemfibrozilo 600 mg/día
c-LDL: colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad. no c-HDL: colesterol no unido a lipoproteínas de alta
densidad.
Modificada de Harper CR, Jacobson TA. Managing Dyslipidemia in Chronic Kidney Disease. J Am Coll Cardiol
2008;51:2375-2384.
Capítulo 11. Manejo del paciente con hiperlipemias en situaciones especiales (nefropatías, VIH, ancianos, embarazadas)
127
bien conocido y, por tanto, no deberían usarse 2.4. Manejo de la dislipemia en los
concomitantemente. Son menores los efectos
pacientes infectados por el VIH
observados para atorvastatina, y casi ninguno
La actual guía de manejo de la dislipemia
para fluvastatina y pravastatina, lo que las hace
de los pacientes con VIH47, atribuye a ésta una
preferibles38. En una revisión reciente, se cons-
influencia en el riesgo coronario - y por tanto,
tata que también la rosuvastatina es segura y
un beneficio de su control - al menos similar a
efectiva en el tratamiento de la dislipemia del
la de la población no infectada, y sigue las reco-
paciente VIH sometido a terapia antirretrovi-
mendaciones y objetivos del NCEP-ATP III25. Pro-
ral39. Un estudio en marcha con este fármaco
pone que antes de iniciar el tratamiento anti-
precisará más sus cualidades40. A la inversa, ne-
rretroviral - y a los seis meses de cada cambio -
virapina y efavirenz pueden disminuir los nive-
se determine el perfil lipídico del paciente en
les de las estatinas y reducir su efectividad.
ayunas, la evaluación de su riesgo, la modifica-
Fibratos. Dado que se metabolizan dual-
ción de los factores asociados, así como medi-
mente por el sistema del CYP4a y por el
das dietéticas y ejercicio. Para el tratamiento de
CYP3A4, las interacciones con los IP son poco
la hipercolesterolemia, considera a las estatinas
probables, aunque disminuyen su eficacia41. Sin
los fármacos de primera elección y a los fibra-
embargo, se dispone de muy pocos ensayos
tos su alternativa. Si los pacientes presentan
aleatorizados, aunque en casi todos ellos se
una hipertrigliceridemia mayor de 500 mg/dl,
muestran aceptables disminuciones de los TG,
recomienda iniciar la terapia con fibratos. Sitúa
c-LDL y aumento del c-HDL, siendo el fenofibra-
to el de mayor eficacia. En un estudio, la combi- a la niacina como medicamento de segunda
nación de fenofibrato con pravastatina resultó línea, principalmente para reducir los triglicéri-
segura y superior a la monoterapia de ambas, dos, sola o combinada con las estatinas. En la
tanto en la corrección de la dislipemia, como en fecha de publicación de esta guía, no se dispo-
la consecución de los objetivos NCEP-ATP III42. nía de datos para recomendar otros hipolipe-
Ezetimiba. En los escasos ensayos obser- miantes, mencionando al ezetimiba como pro-
vacionales y en un solo estudio aleatorizado y metedor para las elevaciones del colesterol, y a
doble ciego, parece que este fármaco no inter- los ω-3 como de uso complementario en el au-
fiere con la medicación antirretroviral -incluido mento de TG resistentes a otras sustancias. Más
los inhibidores de la proteasa, al no metaboli- reciente, la guía europea para la prevención y
zarse vía citocromo P450- y reduce el c-LDL al control de las enfermedades metabólicas de los
mismo nivel que en la población general, sin pacientes con SIDA48 da instrucciones para di-
afectar al c-HDL ni a los TG43. versos factores de riesgo incluida la dislipemia.
Niacina. Aunque los datos disponibles son Evalúa el riesgo coronario mediante la ecuación
muy limitados, parece que la niacina consigue de Framingham, aunque marca unos puntos de
en los pacientes VIH una disminución de TG y corte de c-LDL diferentes a los de cualquier
un aumento del c-HDL similar a lo que aconte- otra guía destinada a población general. Ade-
ce en el no infectado44. Es bien tolerada pero más de enfatizar la importancia del abandono
incrementa la intolerancia hidrocarbonada en del tabaquismo, de la práctica habitual de ejer-
esta población, aunque no se describe el desa- cicio y del seguimiento de una dieta saludable,
rrollo de diabetes. prioriza el cambio de la terapia antirretroviral
Ácidos grasos omega 3. La mayoría de los antes de introducir fármacos hipolipemiantes.
resultados con los ω-3 ponen de manifiesto su También clasifica a las estatinas como agentes
notable valor como reductores de los TG, sin de primera elección para reducir el c-LDL, pero
efectos secundarios 45. Su uso concomitante considera a la ezetimiba de utilidad para com-
con fenofibrato incrementa su poder hipotri- binar con ellas. Reserva a los fibratos para las
gliceridemiante46. hipertrigliceridemias severas, o para los casos
Resinas. No hay estudios publicados con de c-HDL bajo, y para combinar con estatinas
resinas, probablemente debido a su capacidad en presencia de una dislipemia mixtas. La Tabla
de disminuir la absorción, y por lo tanto, la efi- 11.3 ilustra el posicionamiento de esta guía en
cacia de la terapia antirretroviral. el empleo de fármacos hipolipemiantes.
Capítulo 11. Manejo del paciente con hiperlipemias en situaciones especiales (nefropatías, VIH, ancianos, embarazadas)
129
Tabla 11.3 Recomendaciones del tratamiento hipolipemiante según la guía europea para la
prevención y control de las enfermedades metabólicas de los pacientes con SIDA
TIPO DE DISLIPEMIA 1ª ELECCIÓN FÁRMACO A COMBINAR
Hipercolesterolemia aislada Estatina Ezetimiba
Hiperlipemia combinada Estatina Fibrato (ácido nicotínico)
Hipertrigliceridemia aislada Dieta, abstinencia del alcohol --
(TG = 200-1.000 mg/dl)
Hipertrigliceridemia severa Fibrato Omega-3 (ácido nicotínico)
(TG > 1.000mg/dl)
c-HDL bajo aislado < 35mg/dl) Fibrato Ácido nicotínico
Modificada de Lundgren JD, et al. European AIDS Clinical Society (EACS) guidelines on the prevention and
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que en pacientes mayores con antecedentes fatal. No disminuyó los ACV, pero sí el riesgo
de IAM, los que habían sido tratados con esta- de accidente isquémico transitorio en un 25%.
tinas experimentaron las siguientes reduccio- Otros tres ensayos de prevención primaria in-
nes: del 50% en los casos muerte de origen co- cluyeron grupos de personas mayores67-69. En
ronario o IAM no fatal, beneficiándose incluso todos se vio que la prevención cardiovascular
los mayores de 90 años; del 60% para acciden- tras reducir el colesterol fue independiente de
tes cerebrovasculares (ACV), favoreciéndose la edad del paciente. En uno de ellos, efectua-
hasta los 90 años, aunque no posteriormente; do en diabéticos (CARDS)69, los ancianos llega-
y del 48% de los casos de insuficiencia cardia- ron incluso a superar significativamente a los
ca. La disminución de nuevos IAM o ACV se ex- más jóvenes en la reducción del riesgo absolu-
tendió si los valores de c-LDL descendían por to de disminución de eventos coronarios ma-
debajo de los 90 mg/dl. En el caso de los epi- yores.
sodios coronarios esto ocurrió independiente- Estudios de prevención secundaria. La
mente del uso de aspirina58. Otros estudios de mayoría de los ensayos más importantes de
pacientes a los que se les prescribió una estati- prevención secundaria, que supusieron la cer-
na, y que habían tenido una afección arterios- tificación del beneficio de reducir el c-LDL con
clerótica en diversos territorios vasculares, una estatina, contenían personas por encima
arrojaron resultados en concordancia con los de los 65 años. Por cuestiones de espacio, se
anteriormente citados59-61. Tampoco se advirtie- sintetiza en la Tabla 11.4 los datos relevantes
ron diferencias significativas entre los diferen- de los más trascendentales70-75.
tes tipos de estatina empleados y el resultado La capacidad de disminuir el c-LDL y los
combinado de muerte o IAM63. En la cohorte beneficios logrados eran iguales entre los par-
de veteranos americanos, de los que más de ticipantes de cada uno de estos ensayos, inde-
medio millón superaban los 70 años, la media pendientemente de la edad. En algunos estu-
de supervivencia de los que tomaban una es- dios70-72, la reducción del riesgo absoluto fue
tatina se prolongó más de dos años frente a superior en el grupo de ancianos. En el 4S, se
los que no lo hacían64. El estudio más reciente - objetivó que para lograr el objetivo primario,
que incluye 20.132 hombres con una edad en las personas mayores el número necesario
media de 67,7 años, de los que 1.752 supera- a tratar (NNT) fue de 15, frente a 67 en los de
ban los ochenta, - demuestra que la disminu- menor edad. El HPS74 y el CARE71 corroboran
ción del riesgo cardiovascular fue proporcional esta eficacia en el anciano ya que, para lograr
a la magnitud de la reducción del c-LDL, inclu- evitar en el primero cualquier evento CV, o en
sive en personas mayores de 80 años 65. De el segundo cualquier evento coronario, el NNT
hecho, todos aquéllos que lograron bajar sus necesario de ambos fue sólo de 11.
concentraciones de c-LDL más de 70 mg/dl La última prueba la aporta un reciente
consiguieron reducir su riesgo un 70%, alcan- metaanálisis de 9 ensayos de prevención se-
zando, en todos los casos, una reducción del cundaria con datos de pacientes entre 65 y 82
riesgo absoluto superior a los de menor edad. años de edad75. Concluye que las estatinas dis-
Estudios de prevención primaria. Sólo minuyen la mortalidad total en esta población
hay un ensayo de prevención primaria especí- un 22% tras 5 años de tratamiento. Las tasas
ficamente diseñado para población anciana: el de IAM no fatal, ACV y la necesidad de revas-
estudio PROSPER 66. En él, 5.804 personas de cularización se reducen aún más, y en los oc-
ambos sexos con alto riesgo cardiovascular se togenarios la mortalidad total se rebaja un
aleatorizaron a recibir 40 mg de pravastatina o 50%.
placebo. Tras más de 3 años de seguimiento, el ¿Se pueden dar dosis altas de estatinas
fármaco redujo significativamente en un 15% en los ancianos? La preocupación de que las
el objetivo primario combinado muerte por altas dosis generen efectos adversos en la po-
cardiopatía coronaria, infarto no fatal o ACV en blación anciana suelen impedir a ésta el logro
comparación con el placebo. También consi- del máximo beneficio al no serles prescritas.
guió reducir un 19% el objetivo combinado Sin embargo, la evaluación de los subgrupos
muerte por cardiopatía coronaria e infarto no de personas de mayor edad de los ensayos
Capítulo 11. Manejo del paciente con hiperlipemias en situaciones especiales (nefropatías, VIH, ancianos, embarazadas)
131
Tabla 11.4 Ensayos de prevención secundaria con estatinas con subgrupos de personas mayores*
ESTUDIO PACIENTES LÍPIDOS ESTATINA** OBJETIVO RESULTADOS
4S67 1.021 ≥ 65 CT del Simvastatina Mortalidad total. ‚34% RRR de mortalidad total
años subgrupo: 20 ó 40 Mortalidad CV ‚43% RRR de mortalidad
213-309 mg/día x 5,4 coronaria
mg/dl años
CARE68 1.283; 65-75 CT del Pravastatina Mortalidad ‚32% RRR de eventos CV
años subgrupo: 40 mg/día x coronaria. mayores
155-271 5 años IAM recurrente. ‚45% RRR de mortalidad
mg/dl Necesidad de coronaria
revascularización. ‚40% RRR de ACV
ACV
LIPID69 3.514; 65-75 CT del Pravastatina Mortalidad total. ‚21% RRR de mortalidad total
años subgrupo: 40 mg/día x Mortalidad ‚24% RRR de mortalidad
155-271 6 años coronaria o IAM coronaria
mg/dl no fatal; ACV ‚22% RRR de mortalidad
coronaria o IAM no fatal
‚26% RRR IAM
PPPP70 4.843; 65-75 c-LDL del Pravastatina Mortalidad ‚26% RRR de mortalidad
años subgrupo: x 5-6 años coronaria o IAM coronaria o IAM no fatal
125-212 no fatal
mg/dl
HPS71 5.750 ≥ 70 LDL medio Simvastatina Mortalidad total; ‚28% RRR de eventos CV
años del 40 mg/día x eventos CV mayores
subgrupo: 5 años fatales o no ‚29% RRR de ACV
131 mg/dl
Metaanálisis72 19.569; c-LDL Varias Mortalidad total. ‚22% RRR de mortalidad total.
65-82 años medio de estatinas Mortalidad ‚30% RRR de mortalidad
estudios: 0,8-6,1 años coronaria coronaria
l32-190 (*** 5 años) IAM no fatal. ‚26% RRR de IAM no fatal
mg/dl Revascularización ‚30% RRR de revascularización
coronaria. coronaria
ACV ‚25% RRR de ACV
*Se muestran sólo los datos del subgrupo de personas mayores. **Estatina: dosis en mg/día comparada con placebo
y duración del ensayo. ***Resultados del metaanálisis estimados en 5 años de tratamiento.
CT: colesterol total; c-LDL: colesterol unido a lipoproteínas de baja densidad. CV: cardiovascular; RRR: reducción del
riesgo relativo; IAM: infarto agudo de miocardio; ACV: accidente cerebrovascular agudo.
que han demostrado el beneficio del trata- último, un subanálisis de 1.001 personas entre
miento intensivo con estatinas, apoya su em- 65-78 años del estudio ALLIANCE, que admi-
pleo en este colectivo. Así los subanálisis de nistraba hasta 80 mg de atorvastatina o trata-
los estudios MIRACL y TNT, en los que los pa- miento convencional para lograr un c-LDL <
cientes recibían 80 mg de atorvastatina, de- 80 mg/dl, demostró igualmente un mayor
mostraron que la disminución del riesgo abso- poder reductor de la dosis alta en el objetivo
luto de los objetivos combinados múltiples, muerte coronario o IAM no mortal, llegando a
fue similar entre ancianos y personas más jó- la significación estadística, hecho que no lo-
venes76,77. El estudio PROVE-IT, que comparó la graron los menores de 65 años80.
eficacia entre 80 mg de atorvastatina frente a Seguridad del tratamiento con estatinas
40 de pravastatina tras un síndrome coronario en personas mayores. En los ensayos ante-
agudo, indica que los ancianos consiguen una riormente expuestos, las ganancias clínicas se
mayor reducción del objetivo primario que los lograron con leves incrementos de los eventos
más jóvenes, tanto del riesgo relativo: 40% adversos, entre 0,1 y 3,1% en términos absolu-
frente a 26%, como del absoluto: 8% frente a tos, si se comparan con personas más jóvenes
2,3%78. En el ensayo SAGE, que confrontó tam- o con dosis menores. Si bien, hay que destacar
bién una dosis de 80 mg de atorvastatina fren- que hubo un aumento de la tasa de abando-
te a otra de 40 mg de pravastatina, se identifi- nos del fármaco. Estos inconvenientes se ven
có que la dosis más potente redujo significati- limitados por la magnitud de los beneficios
vamente un 70% más la mortalidad total79. Por conseguidos.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
132 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
mujeres con un número de gestaciones superior una atenta supervisión25. Otro tanto valdría para
a seis tienen más probabilidad estadística de el periodo de lactancia94. Aunque, como se ha
desarrollar problemas cardiovasculares, pero es comentado anteriormente, las estatinas no pa-
muy probable que un sesgo del estado educa- recen mostrar efectos indeseables en el emba-
cional y económico, así como de otros factores razo, se precisan más estudios que confirmen su
de riesgo, influya en este resultado92. En cambio, inocuidad, antes de que se pueda aconsejar su
si está descrito que la hipercolesterolemia ma- empleo durante la gestación95. Los fibratos, la
terna produce un aumento de las estrías grasas niacina y el ezetimiba se han mostrado terato-
aórticas en el feto, acelera el desarrollo de lesio- génicos en animales y tampoco pueden ser
nes arterioscleróticas en la infancia, y modula la usados en el embarazo. El tratamiento de la hi-
expresión de genes en la pared arterial, aunque pertrigliceridemia extrema durante la gestación
aún no se sabe con certeza si ello se traducirá debe comenzar por una dieta muy pobre en
en una mayor prevalencia de eventos cardiovas- grasas. Los suplementos de ω-3 parecen tener
culares en momentos posteriores de la vida93. una modesta eficacia96. La nutrición parenteral
No hay ninguna indicación para el trata- total, la aféresis de lipoproteínas, la plasmafére-
miento de la hipercolesterolemia en el embara- sis, la lipidifiltración y el recambio plasmático
zo. La recomendación del NCEP-ATP III en el son otras opciones terapéuticas90. Recientemen-
caso de que la gestante padeciera alguna forma te se han descrito algunos éxitos en el empleo
de hipercolesterolemia familiar, es el empleo de profiláctico del recambio plasmático en emba-
una dieta hipolipemiante - que puede reducir razadas con hipertrigliceridemia familiar para
un hasta 20% el nivel de CT - o de resinas, bajo prevenir los episodios de pancreatitis aguda97.
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Figura 12.1. Impacto de los principales estudios de intervención con estatinas en el riesgo cardiovacular.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
140 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
constata que las cifras anteriores ponen de ma- de riesgo, incluso con estatinas a dosis están-
nifiesto que de un 60 a un 80% del riesgo basal, dar/alta. Un metaanálisis con la inclusión de
no se modifica por el tratamiento con estatinas. 90.056 participantes, de los cuales 18.686 eran
Es de destacar que este riesgo permanece ele- diabéticos, procedentes de 14 estudios aleato-
vado incluso cuando los pacientes alcanzan los rizados indicó que por cada mmol/l de reduc-
objetivos de colesterol LDL propios de las po- ción del c-LDL, el tratamiento con estatinas
blaciones de alto riesgo (< 70 mg/dl) como ha permitía reducir el riesgo de episodios vascu-
demostrado el estudio Treating New Targets lares graves un 21%. A pesar de ello, el riesgo
(TNT)3. Por tanto, aunque la terapia con estati- vascular residual a lo largo de un periodo de
nas es la piedra angular en el manejo farmaco- cinco años de seguimiento continuaba siendo
lógico de la dislipemia de acuerdo con las dife- elevado; un 14% de los pacientes presentaron
rentes recomendaciones de consenso, tanto na- un episodio cardiovascular a pesar de haber
cionales como internacionales, los estudios sido asignados al grupo de tratamiento con
prospectivos de intervención en poblaciones estatina, en comparación con el 18% en los
con distintos niveles de riesgo han constatado asignados al grupo placebo7,8. La evidencia clí-
que persiste un riesgo cardiovascular elevado nica de los últimos estudios respalda la conse-
después del tratamiento. Resulta evidente, que cución de objetivos más agresivos para las
todavía estamos lejos de conseguir un buen concentraciones de c-LDL en los pacientes de
control de la enfermedad cardiovascular a pesar alto riesgo 1,9. Sin embargo, aún alcanzando
de las buenas expectativas apuntadas a finales estos objetivos persiste todavía un riesgo car-
del siglo XX, y que el tratamiento exclusivo de diovascular elevado3,10. En el estudio TNT, aun-
los factores de riesgo clásicos como el consumo que el tratamiento con 80 mg de atorvastatina
de cigarrillos, la hipertensión arterial y el au- se asoció a una disminución del 22% en el
mento del colesterol LDL pueda no ser suficien- riesgo relativo de episodios cardiovasculares
te, al menos, en algunos pacientes. graves en comparación con la dosis de 10 mg
Además, no debemos olvidar el creciente del mismo fármaco, 1 de cada 11 pacientes
aumento en la prevalencia de obesidad, sín- presentó algún episodio clínico en los cinco
drome metabólico y diabetes tipo 2, hecho años de seguimiento3.
que sin duda alguna amenaza la lucha en la Además, los estudios epidemiológicos y ob-
prevención por la enfermedad cardiovascu- servacionales constatan de forma generalizada
lar4,5. A la vista de estas tendencias epidemioló- que el control de los principales factores de
gicas, se prevé que la enfermedad cardiovas- riesgo, evaluado en función del grado de conse-
cular supere a las enfermedades transmisibles cución de los objetivos terapéuticos es deficien-
e infecciosas como principal causa de pérdida te, tanto en el ámbito de la atención primaria
de años de vida con capacidad laboral en todo como de la especializada, e indican con claridad
el mundo 6. Ello determina la necesidad de que nuestra práctica clínica es mejorable11.
ofrecer intervenciones efectivas capaces de re- Por otra parte, no debemos olvidar que la
ducir el riesgo de episodios cardiovasculares y aterosclerosis es una enfermedad multifactorial,
de complicaciones microvasculares en los pa- y que una intervención terapéutica centrada
cientes con dislipemia, obesidad, síndrome únicamente en la reducción de la concentra-
metabólico y diabetes que ya reciben los es- ción de c-LDL no consigue los resultados espe-
tándares actuales de tratamiento. rados en términos de morbi-mortalidad cardio-
vascular. Así, por ejemplo, aunque la importan-
cia de la dislipemia es capital, ésta no se debe
2. Riesgo cardiovascular definir sólo por la concentración de c- LDL, tal y
residual como ha demostrado el estudio INTERHEART12.
En dicho estudio, la dislipemia se valoró en fun-
Al hablar de riesgo cardiovascular hemos ción del cociente apolipoproteína B respecto a
de tener en cuenta que este término es "poli- la apolipoproteína A-I (Apo B/Apo A-I), cociente
facético". La enfermedad cardiovascular está que indica la relación entre las lipoproteínas de
presente en pacientes tratados por los factores muy baja densidad (VLDL), de densidad inter-
Capítulo 12. Riesgo residual. Terapia combinada
141
media (IDL) y LDL que representan las lipopro- Hay que resaltar que la dislipemia aterogé-
teínas aterogénicas, respecto a las HDL que son nica, caracterizada por triglicéridos elevados,
ateroprotectoras. En un posterior análisis del es- bajas concentraciones de c-HDL, y predominio
tudio IDEAL, llevado a cabo para evaluar las po- de partículas LDL pequeñas y densas, a menu-
sibles relaciones entre el perfil lipídico en situa- do con elevación de Apo B y de no c-HDL, es
ción de tratamiento activo y los resultados clíni- muy prevalente en los pacientes con diabetes
cos, el cociente Apo B/Apo A-I fue el mejor pre- tipo 2, síndrome metabólico, hiperlipemia fami-
dictor de episodios coronarios graves posterio- liar combinada y/o enfermedad cardiovascular
res13. Otro ejemplo, estaría representado por los establecida16,17. Numerosas evidencias avalan
estudios de prevención secundaria con inter- que, además del c-LDL, la hipertrigliceridemia y
vención sólo dietética. Dichos estudios han el descenso del c-HDL son predictores de en-
puesto de manifiesto que puede reducirse el fermedad cardiovascular15,18. Así, en un metaa-
riesgo de episodios cardiovasculares en cotas nálisis de 29 estudios prospectivos la razón de
incluso superiores a las obtenidas por los estu- odds para el riesgo coronario fue de 1,72 cuan-
dios de intervención farmacológica con estati- do se comparaban sujetos en el tercil superior
nas como el 4S o el LIPID, sin disminuir la con- (correspondiente a triglicéridos > 178 mg/dl)
centración plasmática de c-LDL14. con el tercil inferior (< 115 mg/dl), ajustados
En términos generales, podemos decir que por el resto de factores de riesgo convenciona-
hay un riesgo residual inherente a la no conse- les19. Estos resultados han sido corroborados en
cución de los objetivos terapéuticos de los un revisión sistemática efectuada por Morrison,
principales factores de riesgo cardiovascular; et al20. Desde los trabajos pioneros de Zilvers-
pero que incluso aquellos individuos que al- mit, et al21 que describieron el impacto de las
canzan un control óptimo de los factores de alteraciones de la lipemia postprandial en la
riesgo, presentan también un riesgo residual aterogénesis, se ha demostrado la importancia
permanente. Por dicho motivo la iniciativa R3i de los triglicéridos postprandiales como un fac-
(Residual Risk Reduction Initiative)15 ha definido tor de riesgo significativo, particularmente en
el riesgo cardiovascular residual como el ries- las mujeres y sobre todo cuando son determi-
go de episodios macrovasculares y complica- nados a las 2-4 horas de la ingesta22,23.
ciones microvasculares que persiste en la ma- Mientras que las concentraciones de c-LDL
yoría de pacientes a pesar de los tratamientos están en los rangos deseables o ligeramente
de referencia actuales, incluida la consecución elevados en los pacientes con diabetes y/o sín-
de los objetivos de c-LDL y el control de la drome metabólico, la concentración de Apo B
presión arterial y la glucemia. puede estar incrementada24. La concentración
de Apo B representa de forma conceptual el nú-
mero de partículas circulantes de VLDL, IDL y
3. Riesgo macrovascular LDL, ya que cada una de ellas tiene una sola mo-
lécula de Apo B. Una amplia evidencia avala que
Los subanálisis de los estudios de interven- la Apo B es mejor predictor de enfermedad co-
ción con estatinas han demostrado un menor ronaria que la determinación del c-LDL, tanto en
beneficio en determinados grupos de pacien- estudios observacionales25,26, como de interven-
tes entre los que cabe destacar aquéllos con ción27,28. El consenso de la ADA/ACC9 señala la
concentraciones bajas de colesterol de las li- necesidad de considerar las concentraciones
poproteínas de alta densidad (HDL), con hiper- plasmáticas de Apo B como un componente del
trigliceridemia, con síndrome metabólico o riesgo vascular residual a causa de que la deter-
con diabetes mellitus tipo 215. Ello debe atri- minación de c-LDL infraestima la capacidad ate-
buirse al hecho que las estatinas modulan el rogénica conjunta de las partículas VLDL y LDL.
riesgo LDL dependiente, pero no el relaciona- Los estudios observacionales, como el
do con otros componentes lipídicos de riesgo PROCAM, han evidenciado una clara relación
vascular, dado que tienen un efecto marginal pronóstica inversa entre c-HDL y morbi-morta-
sobre los otros componentes del perfil lipídico, lidad cardiovascular, con independencia de las
es decir los triglicéridos y el c-HDL. concentraciones de c-LDL 29. El Framingham
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
142 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Heart Study fue uno de los primeros estudios al riesgo cardiovascular de pacientes hospitali-
epidemiológicos que demostraron la asocia- zados por síndrome coronario agudo y tratados
ción entre el mayor riesgo relativo de enfer- con estatinas32. Aquéllos que alcanzaban un c-
medad cardiaca coronaria y los niveles subóp- LDL inferior a 70 mg/dl, la incidencia combina-
timos de c-HDL 30. En este sentido, la Figura da de muerte, infarto de miocardio o síndrome
12.2 ilustra la relación entre las concentracio- coronario recurrente a los 30 días era superior
nes de c-HDL y LDL con el riesgo relativo de en un 36% en los pacientes con triglicéridos >
episodios cardiovasculares, de forma que tiene 200 mg/dl (comparado con < 200 mg/dl), mien-
un mayor riesgo relativo la asociación c-HDL tras que se elevaba al 40% después de ajustar
muy bajo con c-LDL bajo que la situación c- por el resto de factores de riesgo.
HDL alto con c-LDL muy alto.
Las aportaciones del metaanálisis Choleste-
rol Treatment Trialist's Collaborators indican que 4. Riesgo microvascular
la presencia de c-HDL bajo y/o triglicéridos ele-
vados incrementan notablemente el riesgo vas- La dislipemia aterogénica también se en-
cular6,7. En un subanálisis del estudio TNT31, la cuentra implicada en la patogenia de la micro-
concentración de c-HDL alcanzado a los tres angiopatía diabética33. Diversos estudios sugie-
meses de tratamiento era un factor predictor ren que los lípidos plasmáticos pueden tener
de los episodios cardiovasculares graves en pa- un papel causal en el desarrollo de los exuda-
cientes que alcanzaban el objetivo terapéutico dos duros retinianos y la maculopatía diabéti-
de c-LDL inferior a 70 mg/dl. En estos pacientes, ca 34-36. En el Early Treatment Diabetes Retino-
una concentración de c-HDL por debajo de 37 pathy Study (ETDRS), los pacientes con aumen-
mg/dl se asociaba a un incremento de riesgo to de colesterol total, c-LDL, y triglicéridos pre-
de episodios cardiovasculares del 39%, compa- sentaron un riesgo mayor de desarrollar macu-
rados con los que tenían un c-HDL por encima lopatía34. Asimismo, estas alteraciones lipídicas
de 55 mg/dl. Por otra parte, un subanálisis del estaban implicadas en el desarrollo y la progre-
estudio Pravastatin or Atorvastatin Evaluation sión de la retinopatía diabética, y en concreto,
and Infection Therapy-Thrombolysis in Myocardial los triglicéridos fueron un factor de riesgo para
Infarction 22 (PROVE-IT TIMI-22) ha señalado la la retinopatía proliferativa37. En el Diabetes Con-
contribución de la elevación de los triglicéridos trol and Complications Trial/ Epidemiology of
Figura 12.2. El riesgo relativo de enfermedad cardiaca coronaria (ECC) aumenta al decrecer las concentraciones de
c-HDL por cada nivel de concentración de c-LDL según los datos del Framingham Heart Study.
Gordon T, Castelli WP, Hjortland MC, Kannel WB, Dawber TR. High density lipoprotein as a protective factor against
coronary heart disease. The Framingham Study. Am J Med 1977;62:707-14.
Capítulo 12. Riesgo residual. Terapia combinada
143
Diabetes Interventions and Complications Study esta forma sólo se consigue una reducción en-
(DCCT/EDIC), la presencia de retinopatía se re- torno al 6% adicional (regla del 6) y para con-
lacionaba con la presencia de partículas LDL seguir un 18% adicional es necesario alcanzar
pequeñas y densas, con el número total de par- las dosis más altas de estatinas.
tículas LDL, y con los niveles de Apo B. Además, El problema que supone la falta de conse-
la gravedad de la retinopatía se asociaba posi- cución de los objetivos terapéuticos en la pre-
tivamente con la trigliceridemia y de forma ne- vención macrovascular (es decir, cardiovascu-
gativa con la concentración de c-HDL38. lar) y microvascular con estatinas en monotera-
El incremento de las lipoproteínas ricas en pia, puede solventarse adoptando una serie de
triglicéridos también está estrechamente aso- estrategias centradas en los diversos compo-
ciado con la progresión de la albuminuria, un nentes modificables de la dislipemia aterogéni-
marcador de nefropatía39. En el UKPDS, la hi- ca, en la que los triglicéridos y el c-HDL desem-
pertrigliceridemia se asociaba de forma inde- peñan un papel fundamental. Tales estrategias
pendiente a la aparición de micro y de macro- comprenden modificaciones del estilo de vida
albuminuria40. Un índice triglicéridos/HDL ele- y el uso de otros fármacos hipolipemiantes.
vado se asocia también de forma indepen-
diente con la progresión de microalbuminu- 5.1. Cambios en el estilo de vida
ria41. En lo relativo al papel del c-HDL en la ne- La adopción de una dieta saludable, la pér-
fropatía, algunos datos han mostrado que los dida de peso, el ejercicio regular y el abando-
pacientes con diabetes sin nefropatía tienen no del consumo de tabaco constituyen las pri-
concentraciones de c-HDL superiores a aqué- meras medidas en la reducción del riesgo resi-
llos con nefropatía, sugiriendo la posibilidad dual, incluso en pacientes tratados con inhibi-
de que el c-HDL pueda tener un efecto protec- dores de la HMG-CoA reductasa. Extensos es-
tor frente al desarrollo de albuminuria42-44. tudios han puesto de manifiesto que el 68%
Las alteraciones lipoproteicas también tie- de los infartos de miocardio en varones trata-
nen un cierto papel en el desarrollo de la neu- dos con estatinas podrían haberse prevenido
ropatía diabética. En el European Diabetes (EU- con la aplicación de estas medidas47. Sin em-
RODIAB) Prospective Complications Study en bargo, gran parte de los pacientes no consi-
diabéticos tipo 1, los factores más fuertemente guen modificar sus estilos de vida de forma
ligados a la neuropatía diabética fueron la hi- global y duradera y, en consecuencia, es nece-
pertrigliceridemia junto a niveles elevados de sario recurrir al tratamiento farmacológico.
colesterol total y c-LDL, así como un aumento
en la excreción urinaria de albúmina45. En una
aportación adicional de dicho estudio, las con-
5.2. Tratamiento farmacológico
Aunque las recomendaciones terapéuticas
centraciones bajas de c-HDL y la hipertriglice-
identifican el control del c-LDL como el princi-
ridemia se asociaban también a la neuropatía
pal objetivo de la prevención cardiovascular,
autonómica46.
también reconocen que el c-HDL y los niveles
elevados de triglicéridos son importantes ob-
5. Enfoque terapéutico jetivos secundarios y recomiendan la adición
de fibratos, niacina o ácidos grasos omega 3 al
para la reducción del tratamiento con estatinas (Tabla 12.1)1,48-51.
riesgo vascular residual
Fibratos
El uso de ezetimiba ayuda a conseguir más Los principales efectos de los fibratos son
fácilmente los objetivos de c-LDL. En un solo una reducción de los triglicéridos entre el 20 y
paso consigue una reducción del 18-25% de c- el 50% y un aumento de la concentración de
LDL adicional a la obtenida con la primera c-HDL entre el 10 y el 35%, en función del tipo
dosis de la estatina elegida con un buen perfil de dislipemia y del fármaco utilizado18.
de seguridad. Ello representa una ventaja fren- La monoterapia con fibratos se asocia a
te a duplicar dosis de la estatina, ya que de aumento del riesgo de miopatía en compara-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
144 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Tabla 12.1 Tratamiento farmacológico de la dislipemia aterogénica según las principales guías de
práctica clínica
National Cholesterol ● Para pacientes con diabetes tipo 2 o no diabéticos: aunque las
Education Program ATP III evidencias que abogan por el uso de fibratos no son tan consistentes
(2004)1 como los referidos a las estatinas, los fibratos pueden desempeñar un
papel complementario en el tratamiento de pacientes con niveles
elevados de triglicéridos/niveles bajos de c-HDL, sobre todo en
combinación con estatinas.
International Diabetes ● Las directrices requieren la obtención previa de un perfil lipídico
Federation (2005)48 completo y análisis bioquímicos complementarios, y el uso de ácido
acetilsalicílico, estatinas y fibratos, como mínimo.
● Una vez que se han alcanzado los niveles deseables de c-LDL con una
estatina, debe añadirse fenofibrato cuando los triglicéridos > 2,3 mmol/l
(> 200 mg/dl).
● En pacientes en los que no se alcanzan los objetivos lipídicos o en los
nicotínico o fibratos.
National Institute for Health ● Debe prescribirse un fibrato (fenofibrato como primera opción) cuando
and Clinical Excellence los niveles de triglicéridos se mantengan por encima de 4,5 mmol/l (400
(2008)50 mg/dl), con independencia de otras posibles causas.
● Si el riesgo vascular es alto, como suele suceder en los pacientes con
ción con las estatinas52, aunque el riesgo abso- zados de intervención con fibratos. En el Helsin-
luto con ambos tipos de fármacos es bajo. Los ki Heart Study (HHS)54 y en el Veterans Affairs
datos sobre seguridad aportados por la base HDL Intervention Trial (VA-HIT)55 se registró una
de datos del Sistema de Notificación de Efectos significativa reducción del riesgo de ECC. Los
Adversos de la Food and Drug Administration estudios Bezafibrate Infarction Prevention (BIP)56
(FDA) (1998-2002) ponían de manifiesto que la y Fenofibrate Intervention and Event Lowering in
rabdomiolisis presentaba una prevalencia 15 Diabetes (FIELD)57 no mostraron efectos signifi-
veces más alta con la combinación de gemfi- cativos en sus respectivos objetivos principales,
brozilo y una estatina (excepto la cerivastatina, aunque en el FIELD el fenofibrato redujo de
retirada del mercado) que con la combinación manera significativa los episodios cardiovascu-
de fenofibrato y estatina53. Lo más probable es lares totales (variable secundaria predefinida).
que esta diferencia se deba a la competencia Es interesante reseñar que los subanálisis
entre estatinas y el gemfibrozilo por las princi- de estos estudios (HHS, VA-HIT, BIT y FIELD)
pales enzimas hepáticas implicadas en el me- dieron lugar a resultados coherentes, que mos-
tabolismo de cada uno de los fármacos. traban que la reducción del riesgo relativo de
episodios de enfermedad cardiovascular era
Efectos sobre los episodios macrovascu- significativa y mayor en pacientes que presen-
lares. Se han realizado varios estudios aleatori- taban componentes del síndrome metabólico,
Capítulo 12. Riesgo residual. Terapia combinada
145
dentes de infarto de miocardio, ictus o enfer- Study (JELIS) mostró que la combinación de
medad arterial periférica y cuyas concentracio- ácidos grasos omega 3 (1.800 mg/día) y una
nes de c-LDL se optimizaron con estatinas. dosis baja de estatina reducían la incidencia
de episodios coronarios graves en compara-
Efectos sobre las complicaciones micro- ción con los registrados con estatina sola, pero
vasculares. Hasta la fecha no se dispone de sin modificar las tasas de muerte súbita81.
datos referidos al efecto de la niacina sobre las
complicaciones microvasculares. Efecto sobre las complicaciones micro-
vasculares. Hasta la fecha no se dispone de
Ácidos grasos omega-3 datos referidos al efecto de los ácidos omega-
Los ácidos grasos omega-3 reducen los tri- 3 sobre las complicaciones microvasculares.
glicéridos elevados y las lipoproteínas rema-
nentes asociadas a la dislipemia aterogéni-
ca75,76. También se han observado beneficios en 6. Conclusión
la modificación del perfil lipídico cuando los
ácidos grasos omega-3 se asocian al trata- Como aún cerca del 50% de los pacientes
miento con estatinas77. de alto riesgo continúan sin alcanzar los obje-
tivos de c-LDL, pensamos que sería adecuado
Efectos sobre los episodios macrovascu- recalcarlo también en las conclusiones y recor-
lares. Los ácidos grasos omega-3 reducen de dar la importancia del control de c-LDL como
forma significativa el riesgo de mortalidad objetivo primario.
total y cardiovascular, el de infarto de miocar- A pesar que el tratamiento con estatinas,
dio no mortal y el de ictus no mortal en pa- pilar fundamental del abordaje terapéutico del
cientes con infarto de miocardio previo (estu- colesterol, consigue reducciones eficaces del c-
dio GISSI-Prevenzione) 78. El estudio GISS-HF LDL, todavía persiste un significativo y elevado
(Gruppo Italiano per lo Studio della Sopravviven- riesgo vascular. Considerados en conjunto,
za nell'Infarto miocardico) también ha puesto estos datos respaldan la necesidad de aumen-
de manifiesto que la suplementación con áci- tar la percepción de la importancia de la disli-
dos grasos omega-3 (1 g/día) aporta una pe- pemia aterogénica en el riesgo residual tanto
queña, pero significativa, mejora del pronósti- macrovascular como microvascular, así como
co en lo que respecta a mortalidad y hospitali- de proporcionar una perspectiva clara respec-
zación en pacientes con insuficiencia cardia- to al tratamiento efectivo de esta frecuente al-
ca79. Se ha planteado la hipótesis de que el be- teración lipoproteica. Se están realizando estu-
neficio del tratamiento observado en grandes dios de morbi-mortalidad como el AIM-HIGH y
estudios prospectivos con ácidos grasos HPS2-THRIVE para evaluar si las estrategias te-
omega-3 se relacione con los efectos sobre el rapéuticas encaminadas al abordaje integral
ritmo cardiaco80, más que con la disminución de la dislipemia se traducen en un efecto be-
de los lípidos plasmáticos o de la presión arte- neficioso clínico superior al alcanzado con las
rial. En cambio, el Japan EPA Lipid Intervention estatinas en monoterapia.
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Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
150 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Capítulo 13 De la investigación
a la práctica clínica
A pesar de que poseemos herramientas Ahora bien, según los datos de los grandes
muy potentes para prevenir las complicacio- estudios con estatinas, el tratamiento farmaco-
nes de la enfermedad aterosclerótica en sus lógico actual del riesgo cardiovascular con
distintas localizaciones, aquélla continúa sien- éstas, administradas a largo plazo, tiene un lí-
do la principal causa de mortalidad en las so- mite de eficacia que se sitúa entre el 20%
ciedades occidentalizadas. (para una descenso medio del c-LDL de 1
La aparición de las estatinas, hace ya casi mmol/l [38,7 mg/dl]) y el 40% (para un des-
un cuarto de siglo, nos ha permitido dismi- censo medio de 2 mmol/l [77,4 mg/dl]) de re-
nuir más de un 50% las cifras de colesterol ducción de la morbilidad y mortalidad cardio-
unido a lipoproteínas de baja densidad (c- vascular. Incidir en este denominado "riesgo
LDL), principal factor de riesgo de la enfer- residual" va a constituir un auténtico reto en
medad coronaria. Los estudios de interven- los próximos años.
ción farmacológica efectuados en la última
década con ellas nos han mostrado que des- 1. Introducción
censos más enérgicos del c-LDL se acompa-
ñaban de una mayor reducción del riesgo La enfermedad cardiovascular no sólo es
cardiovascular, incluso detención de la pro- la principal causa de muerte prematura en
gresión/regresión de la placa de ateroma 1,2 Europa, sino que es una causa muy importan-
sin que hubiera un aumento clínico de efec- te de invalidez, contribuyendo significativa-
tos adversos 3. Este beneficio clínico ha sido mente al aumento imparable de los costes
demostrado en subgrupos poblacionales he- sanitarios6.
terogéneos y es independiente del sexo, la Aunque el abordaje de los pacientes debe
edad, las cifras basales de c-LDL y la existen- ser global, actuando sobre todos los factores
cia o no de diabetes, y es tanto mayor cuan- de riesgo, de todas las estrategias efectivas, la
to más se reduce el c-LDL4. Aunque el bene- terapéutica sobre los lípidos plasmáticos es
ficio se atribuye principalmente a la reduc- posiblemente la que ha demostrado mayor
ción de las concentraciones plasmáticas de contribución a la disminución de morbi-mor-
colesterol unido a lipoproteínas de baja talidad5, y ello fundamentalmente en las po-
densidad, algunos estudios clínicos y mu- blaciones que son de alto riesgo. De la revisión
chos experimentales indican que parte de crítica de los numerosos estudios en este
su actividad cardioprotectora puede deber- campo se desprenden importantes implicacio-
se a una combinación de efectos pleitrópi- nes, cuyo traslado a nuestra práctica clínica
cos2. diaria,constituye todo un reto.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
152 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
momento de la inclusión, de forma que conti- cia. Hubo un 8,7% de pacientes con episodios
nuaban tomando la dosis de 10 mg o pasaban cardiovasculares mayores en el grupo de 80
a recibir 80 mg diarios durante 5 años. La varia- mg frente a un 10,9% en el grupo de 10 mg (p
ble principal de eficacia combinada fue la apa- < 0,001). En el riesgo relativo de muerte coro-
rición de un infarto de miocardio no mortal, la naria hubo reducciones del 20% (p=0,09), del
muerte de origen coronario, la parada cardiaca 22% en el de infarto de miocardio no mortal
resucitada y el ictus fatal o no fatal. Fueron in- (p=0,004), del 4% en el de parada cardiaca re-
cluidos 10.001 pacientes. El c-LDL medio antes sucitada (p=0,89) y del 25% en la tasa de ictus
de iniciarse tratamiento abierto con atorvasta- (p=0,02) (Tabla 13.1). También hubo reduccio-
tina fue de 152 mg/dl, y se redujo hasta 98 nes significativas en el riesgo de episodios co-
mg/dl al final de dicho periodo, inmediatamen- ronarios mayores, de episodios cerebrovascu-
te antes de la aleatorización. El seguimiento fue lares, de necesidad de hospitalización por in-
de 4,9 años. El c-LDL medio durante el estudio suficiencia cardiaca y en la aparición de cual-
fue de 101 mg/dl en los pacientes que recibie- quier episodio cardiovascular o coronario (Fi-
ron una dosis de 10 mg y de 77 mg/dl en los gura 13.1), aunque no hubo diferencias signifi-
que recibieron la dosis de 80 mg. cativas en cuanto a la mortalidad, si bien el es-
Los resultados del estudio TNT mostraron tudio no fue diseñado para dar respuesta a
que el tratamiento de pacientes con CI estable esta pregunta13. La tasa de efectos adversos re-
con 80 mg de estatina fue superior al de con lacionados con el tratamiento fue del 8,1% en
10 mg, con una reducción del riesgo relativo los sujetos que recibieron 80 mg frente al 5,8%
(RR) del 22% en la variable principal de efica- en los que recibieron 10 mg. La presencia de
Tabla 13.1 Reducción del riesgo de ictus, tanto en prevención primaria como secundaria, en los
principales ensayos con estatinas
ESTUDIO AÑO PREVENCIÓN/POBLACIÓN ESTATINA/CONTROL RRR (%)
4S 1994 1ª + EC Simvastaina- placebo 30
CARE 1996 1ª + EC Pravastatina-placebo 31
LIPID 1998 1ª + EC Atorvastatina 80/10 19
TNT 2005 1ª + EC Atorvastatina- placebo 25
ASCOT-LLA 2003 1ª sin EC Atorvastatina- placebo 27
CARDS 2004 1ª sin EC Atorvastatina- placebo 48
SPARCL 2006 2ª Atorvastatina- placebo 16
Modificada de Castilla L, et al. Clin Invest Arterioscl 2008;20(6):239-246.
No hay riesgo
TMO
Revascularización + TMO
Figura 13.1. End point (IAM no fatal o muerte cardiaca) en pacientes randomizados a recibir terapia médica
óptima (TMO) versus revascularización + TMO.
Modificada de O'Keefe JH, et al. Mayo Clin Proc 2009;84:741-757.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
154 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
mialgias se comunicó en un 4,8 y un 4,7%, y la ron la idea de reducir el c-LDL más allá de las
de hipertransaminasemia persistente en un recomendaciones actuales del NCEP, que lo si-
1,2 y un 0,2%, respectivamente. Hubo 5 casos túan en 100 mg/dl. Si bien actualmente se reco-
de rabdomiólisis, todos ellos justificables por mienda reducir el c-LDL por debajo de 70
otras condiciones clínicas de los pacientes. Es mg/dl en pacientes de muy alto riesgo cardio-
decir, en conclusión, el número de efectos ad- vascular, es decir, en los que presentan una en-
versos fue similar con ambas dosis del fárma- fermedad coronaria junto con factores de ries-
co, a excepción de un moderado incremento go no controlados, parece razonable que esta
de la hipertransaminasemia en el grupo que recomendación se extienda al total de la pobla-
recibió 80 mg frente al que recibió 10 mg y, ción en prevención secundaria o sus equivalen-
como sabemos, la hipertransaminasemia aso- tes, mucho más cuando son muchas las voces
ciada con las estatinas suele ser moderada y que abogarían por niveles de entre 50 y 70
revierte al suspender el fármaco o reducir su mg/dl12, es decir cercanos a los niveles fisiológi-
dosis, no habiéndose descrito casos de hepati- cos que presenta el recién nacido48. Los resulta-
tis fulminante ni de daño hepático crónico por dos del Heart Protection Study (HPS)10, donde se
ellas. No hubo diferencias en el porcentaje de observó que los pacientes tratados con simvas-
sujetos que presentaron un incremento de la tatina, que fueron incluidos con cifras de c-LDL
creatincinasa entre los dos brazos del estudio. por debajo de 100 mg/dl, tuvieron un beneficio
En cuanto a la reducción del RR respecto similar en cuanto a reducción de tasa de episo-
de la variable principal de eficacia, el estudio dios que los que entraron con cifras superiores
TNT mostró que los pacientes con el nivel de a 100 mg/dl, refuerzan esta idea. Así pues en la
c-LDL en el quintilo más bajo (inferior a 64 actualidad, se dispone de la suficiente evidencia
mg/dl) se asociaron con menor prevalencia de para recomendar este objetivo terapéutico en
eventos mayores cardiovasculares (muerte co- sujetos en prevención secundaria, a pesar de
ronaria, IAM mortal e incluso ictus isquémico), los resultados del estudio SEARCH (Study of the
volviéndose a constatar el concepto de "c-LDL, Effectiveness of Additional Reductions in Choleste-
cuanto más bajo, mejor". rol and Homocysteine)15, en donde no se encon-
Así pues las implicaciones clínicas de los re- tró valor adicional a las dosis altas de simvasta-
sultados de este estudio nos permiten concluir tina con respecto a las dosis bajas. En este estu-
que el tratamiento hipolipemiante con 80 mg dio se randomizó a 12.064 supervivientes de in-
de atorvastatina en pacientes con cardiopatía farto de miocardio a recibir elevadas dosis de
isquémica estable reduce la incidencia de com- simvastatina (80 mg/día) o bajas dosis (20
plicaciones cardiovasculares mayores, concreta- mg/día). Las elevadas dosis de simvastatina die-
mente la tasa de infarto de miocardio y de ictus ron lugar a una reducción de 14 mg/dl, que no
fatal y no fatal, en comparación con una reduc- fue suficiente para disminuir la tasa de eventos
ción más moderada del colesterol con la admi- CDV mayores y sin embargo sí que comportó
nistración de 10 mg. Estos datos, que ya habían un incremento en el riesgo de miopatía (53
sido descritos en el momento de salir publica- casos versus 3, respectivamente). Así pues una
dos los resultados del TNT en pacientes que de las conclusiones de este estudio es que la
acababan de sufrir un síndrome coronario dosis de 80 mg de simvastatina está en el um-
agudo, se confirmaron para la población de pa- bral de un nivel tóxico y, por tanto, de usarla,
cientes con coronariopatía estables e indicaron debería hacerse con mucha precaución, espe-
que el descenso del c-LDL más allá de las reco- cialmente si ese trata de un paciente politrata-
mendaciones vigentes se acompañaba de una do con factores de comorbididad. En este con-
reducción adicional del riesgo, por lo que se texto, el grupo colaborativo SEARCH realizó un
postuló la necesidad de revisar las recomenda- análisis de asociación genómica, demostrando
ciones de las guías. Los datos de este ensayo, la existencia de una fuerte asociación de mio-
junto a los obtenidos en los estudios ARBITER, patía con un polimorfismo de nucleótido único
ASAP, REVERSAL, PROVE IT, y también en el In- (SNP, por sus siglas en inglés) rs4363657 que se
cremental Decrease in End points through Agres- encuentran dentro de SLCO1B1 (el cual codifica
sive Lipid lowering (IDEAL)14 Study Group avala- el polipéptido OATP1B1 que regula la captación
Capítulo 13. De la investigación a la práctica clínica
155
hepática de las estatinas) en el cromosoma 12; No podemos finalizar este apartado sin
polimorfismo que llegaba a explicar el 60% de mencionar los numerosos resultados que nos
los casos de miopatía y una distinta respuesta ha aportado la Cholesterol Treatment Trialists'
hipocolesteremiante. Sin duda la identificación (CTT ) Collaboration 17. Ésta periódicamente
de estas variaciones permitirá en el futuro que elige los estudios de mayor calidad para anali-
los beneficios del tratamiento con estatinas zar conjuntamente sus datos, con lo que au-
sean más eficaces y seguros. menta su potencia estadística; para evitar los
Otra parte del estudio SEARCH aleatorizó a efectos debidos a las múltiples intervenciones,
los pacientes a recibir ácido fólico 2 mg y vita- se utilizan los intervalos de confianza al 99%.
mina B12 1 mg diarios o placebo y se hizo un El metaanálisis del Cholesterol Treatment
seguimiento de 7 años, concluyendo que a Trialists (CTT ) 4, que incluyó más de 90.000
pesar de mantener bajos valores de homocis- (90.056) sujetos procedentes de 14 estudios
teína, 3-4 µmol/l durante 6,7 años, no hubo randomizados, dejó claro que por un descenso
efectos significativos en la incidencia de even- de 1 mmol/l de c-LDL obtenemos un 21% de
tos vasculares de cualquier tipo, cáncer o cual- reducción de eventos cardiovasculares mayo-
quier otro evento. Estos resultados, que con- res (0,79; 0,77-0,81; p<0,0001), una disminu-
cuerdan con los obtenidos previamente en es- ción de la mortalidad debida a IAM del 19%
tudios con menor número de pacientes y de (0,81; 0,76-0,85; p<0,0001) y de un 12% de la
menor duración, nos llevan a afirmar que no mortalidad total ([RR] 0,88; 95% CI 0,84-0,91;
tiene sentido el utilizarlos en prevención car- p<0,0001). Dicho de otra manera la reducción
diovascular a menos que el paciente tenga un de 1 mmol/l en los niveles de c-LDL se acom-
déficit de alguno de ellos. Dicho de otra mane- paña de la reducción de una quinta parte de
ra, el uso generalizado de suplementos de los eventos mayores cardiovasculares. Esta re-
ácido fólico (para evitar defectos de tubo neu- ducción, que es significativa ya en el primer
ral) a través del enriquecimiento de la harina año, es independiente del nivel de c-LDL del
es seguro, pero no tendrá efecto sobre las en- que se partía y es proporcional a la reducción
fermedades vasculares o el cáncer. absoluta del c-LDL lograda.
A pesar de todo lo expuesto hasta aquí, no Esta disminución de mortalidad y de even-
se puede determinar si unos descensos aún tos cardiovasculares se daba igualmente en la
mayores en la concentración de colesterol que población diabética según se vio en un metaa-
los vistos, irían acompañados de reducciones nálisis del CTT18 del año 2008 que incluyó más
adicionales en el riesgo cardiovascular o si hay de 18.000 (18.686) sujetos diabéticos tratados
un umbral que por el momento no ha sido en- con estatinas, procedentes de 14 estudios ran-
contrado, por debajo del cual el descenso del domizados. Hubo una disminución del 9% en
colesterol no comporte un mayor beneficio. la mortalidad global por mmol/l de reducción
Por otra parte, no podemos dejar de citar de c-LDL (99% CI 0,82-1,01; p=0,02) similar al
uno de los subestudios16 del TNT que analizó 13% visto en la población no diabética. La re-
de todos los pacientes con cardiopatía isqué- ducción de eventos mayores del 21%, que se
mica, aquéllos afectos de diabetes y en estadío observó tanto en el territorio coronario como
III de insuficiencia renal crónica (IRC), es decir el en el vasculocerebral, fue muy significativa
subgrupo de mayor riesgo, constatándose una (0,79; 0,72-0,86; p<0,0001); de hecho sólo 42 de
reducción del RR del 37% y del 7% del RA al re- 1.000 pacientes tratados con estatinas presen-
cibir tratamiento con 80 mg de atorvastatina. tó algún evento en 5 años. Estas reducciones
Así pues otra de las conclusiones que nos fueron similares a las observadas en pacientes
enseñó el estudio TNT, con importantes conse- no diabéticos (0,79; 0,76-0,82; p<0,0001).
cuencias en nuestra práctica clínica diaria, es La constatación de que los efectos de las
que estos pacientes de mayor riesgo, en los estatinas en los diabéticos eran independien-
que a veces los abordajes son poco contun- tes de que hubiera o no clínica previa cardio-
dentes, deben ser tratados con una estatina vascular (CV) y de los parámetros metabólicos
potente a elevadas dosis; en este caso, lo fue- basales, comportó un cambio en la práctica
ron con atorvastatina 80 mg. clínica de forma que se generalizó el trata-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
156 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
miento con estatinas en la población diabética análisis de los resultados22 (que tuvo en cuenta
dado el beneficio que sobre el riesgo cardio- que en el grupo control había individuos que
vascular de los diabéticos aportaban. tomaban estatinas) dividió los casos en 3 gru-
En relación a los eventos cerebrovascula- pos, según la reducción del c-LDL obtenida (sin
res, aunque los estudios epidemiológicos ini- cambios o incremento en el c-LDL [32,7%], re-
cialmente despertaron dudas de la relación ducción < 50% [39,4%] y superior al 50%
del colesterol con el ictus, hoy se dispone de [27,9%]). Los individuos del grupo en el que se
una evidencia clara de esta asociación. Ade- consiguió una disminución del c-LDL del 50%,
más, numerosos estudios (Tabla 13.1) y varios en comparación con el grupo en el que el c-
metaanálisis posteriores, como el referido del LDL no se redujo o se incrementó, presentaron
Cholesterol Treatment Trialists' Collaborators una reducción de ictus isquémico del 31% (HR
(CTT), en más de 90.000 pacientes, han demos- = 0,69; IC del 95%, 0,55-0,87; p = 0,0016), sin un
trado que las estatinas disminuyen la inciden- aumento significativo de los ictus hemorrágico,
cia de ictus, con una reducción de riesgo rela- aunque este tema sigue en estudio.
tivo (RRR) del 21% (OR = 0,79; intervalo de Los resultados del estudio SPARCL incidie-
confianza [IC] del 95%, 0,73-0,85), y que este ron en las indicaciones actuales de las estati-
efecto se debe fundamentalmente al grado de nas en pacientes con enfermedad cerebrovas-
reducción del c-LDL, con una reducción de un cular previa, de forma que la indicación de las
15,6% (IC del 95%, 6,7-23,6%) del riesgo de estatinas para prevenir la aparición y la recu-
ictus por cada 10% de reducción del c-LDL17-19. rrencia del ictus isquémico es clara: sabemos
Tras años de ensayos con estatinas, una de que en pacientes de riesgo, el uso de las esta-
las cuestiones aún pendientes era saber el be- tinas supone una reducción de la incidencia
neficio que éstas presentan en los pacientes de un primer ictus del 16% por cada 10% de
que habían tenido un ictus o un AIT. Esto es reducción del c-LDL. También sabemos que el
consecuencia, en prevención secundaria del tratamiento prolongado con dosis altas de es-
ictus, de la escasez de pacientes con estas ca- tatinas en individuos con ictus previo no car-
racterísticas incluidos en esos ensayos y, sobre dioembólico, además de disminuir los episo-
todo, de que no haya ningún estudio cuyo ob- dios coronarios, reducirá de forma significativa
jetivo primario sea aclarar esta cuestión. De la recurrencia del ictus (hasta un 31%).
hecho, aunque las primeras evidencias del be- En el 2009 los datos del registro BADAPIC23,
neficio de la utilización de estatinas en pacien- de pacientes afectos de insuficiencia cardiaca
tes con enfermedad cerebrovascular previa las (IC), demostraron que el tratamiento con éstas
proporcionó el HPS20, hasta una fecha tan re- tuvo un valor predictivo independiente favora-
ciente como es el año 2006, con la publicación ble sobre la mortalidad. Así pues, el tratamiento
del estudio Stroke Prevention by Aggressive Re- con estatinas de pacientes con IC parece mejo-
duction in Cholesterol Levels (SPARCL), no ha ha- rar la supervivencia de forma independiente.
bido una evidencia clara en ese sentido. En el La utilidad de las estatinas ha sido proba-
estudio SPARCL21, los pacientes afectos de ictus ba ampliamente también en prevención pri-
isquémico (67%), isquemia transitoria aguda maria. Destacamos un metaanálisis publicado
(31%) o ictus hemorrágicos (2%) sin enferme- en el British 24 con más de 50.000 sujetos en
dad coronaria fueron randomizados a recibir 80 prevención primaria (PP) demostrando que
mg de atorvastatina o placebo, evidenciándose aquéllas también reducen la mortalidad y los
en el grupo tratado con atorvastatina, y en un accidentes el riesgo de enfermedad CV en
seguimiento medio de 4,9 años, una reducción adultos de riesgo, sin evidencia clínica de en-
de la incidencia de ictus (RRR = 16%; HR = 0,84; fermedad cardiovascular.
IC del 95%, 0,71-0,99; p = 0,03), así como de epi- En el mismo periodo de tiempo se realiza-
sodios cardiovasculares. El aumento de la inci- ron otros estudios sobre técnicas de revasculari-
dencia de ictus hemorrágicos (55 casos en el zación combinadas o no con tratamiento médi-
grupo con atorvastatina frente a 33 casos en el co intensivo. Estos estudios, de los que sólo
grupo placebo; HR = 1,66; IC del 95%, 1,08-2,55) mencionaremos dos, contribuyeron a un cambio
observada no ha sido refrendada. Así un ulterior de paradigma, que nos está llevando a realizar
Capítulo 13. De la investigación a la práctica clínica
157
El estudio JUPITER32, estudio internacional pendiente (infarto de miocardio 54%, ictus 48%,
randomizado, incluyó pacientes sin ateroscle- revascularización 46%)32, objetivándose también
rosis, ni diabetes mellitus o hipercolesterole- un 43% de reducción en el tromboembolismo
mia. Los pacientes de este estudio presenta- venoso33. La mortalidad global se redujo un 20%,
ban niveles de c-LDL que podríamos conside- a pesar de aparecer un mayor número de casos
rar normal, en concreto inferiores a 130 mg/dl, de diabetes en el grupo tratado, siendo necesario
y niveles de proteína C reactiva elevados. tratar a 95 pacientes (NNT) durante 2 años para
El ensayo analizó si personas aparentemente evitar un evento cardiovascular. Los niveles me-
sanas con niveles de LDL inferiores a los umbrales dios de c-LDL que se alcanzaron en el grupo tra-
de tratamiento recomendados, pero con cifras tado con rosuvastatina, fueron de 55 mg/dl, es
elevadas de PCR-as, podrían beneficiarse de la te- decir el nivel más bajo alcanzado en un estudio
rapia con rosuvastatina. El estudio incluyó a casi de estas proporciones. Asimismo, los hallazgos
18.000 individuos (hombres > 50 años o mujeres fueron consistentes al analizar los diferentes sub-
> 60 años) aparentemente sanos, con cifras de grupos establecidos. Rosuvastatina no indujo más
LDL inferiores a 130 mg/dl (media 108 mg/dl) y miopatía o casos de cáncer en comparación con
con PCR-as elevada (> 2 mg/l), los cuales fueron el grupo placebo. De todas formas, el estudio JU-
randomizados a recibir 20 mg de rosuvastatina PITER muestra que existen ciertas limitaciones en
frente a placebo. Se estableció como objetivo pri- la asociación entre la elevación de PCR-as y el
mario el combinado de infarto de miocardio, empleo de rosuvastatina: 1) De los aproximada-
ictus, revascularización, hospitalización por angina mente 90.000 individuos seleccionados para par-
inestable o muerte de causa cardiovascular. Rosu- ticipar en el ensayo, el 30% fueron excluidos por
vastatina redujo un 50% las cifras de colesterol PCR-as < 2 mg/l. 2) No permite la comparación
LDL (de un nivel basal de 109 mg/dl) y un 37% entre los individuos con PCR-as <2 mg/l y > 2
las cifras de PCR-as. El estudio fue interrumpido mg/l. 3) No establece un objetivo concreto a al-
de forma prematura después de una mediana de canzar con respecto a los niveles de PCR-as. Los
seguimiento de 1,9 años (el seguimiento máximo firmantes del estudio sugerían que tal vez debie-
fue de 5) al reducirse el riesgo relativo del objeti- ran monitorizarse los niveles de PCR-as en pa-
vo primario combinado un 44% en el grupo tra- cientes de riesgo intermedio (e incluso en los de
tado con rosuvastatina (Figura 13.2). La reducción alto) en los que no hubiera indicación preexisten-
relativa del riesgo se observó, igualmente, en te de recibir estatinas. Ahora bien desconocemos
todos los eventos considerados de forma inde- la prevalencia en la población de pacientes con c-
Figura 13.2. Eventos CDV en el grupo tratado con rosuvastatina frente a placebo.
Modificada de O'Keefe JH, et al. New Engl J Med, 56.
Capítulo 13. De la investigación a la práctica clínica
159
LDL bajo y PCR-as elevada. Un estudio del pasado No podemos dejar de recordar que una
año34 en Estados Unidos calculó que, en este país, serie de cambios en el estilo de vida, principal-
serían subsidiarios de tratamiento con estatinas, mente la práctica de ejercicio físico, la pérdida
de seguir los criterios del mencionado estudio, de peso y el aumento de la ingesta de frutas y
más de 6.500.000. Ello no ha sido óbice para que verduras 35-37 pueden llegar a disminuir de
hace unas pocas semanas la FDA (U.S. Food and forma muy significativa los niveles de PCR.
Drug Adminsitration), basándose en el estudio JU-
PITER, acabe de aprobar una nueva indicación
para la rosuvastatina: la de la prevención primaria
4. Progresión de la
de enfermedades cardiovasculares en individuos aterosclerosis
aparentemente sanos, sin enfermedad cardiaca
clínicamente evidente, pero con riesgo aumenta- La terapéutica hipolipemiante ha demos-
do en base a la combinación de los siguientes trado no sólo reducción de eventos cardiovas-
factores de riesgo: Edad (> 50 años en los hom- culares a través de la disminución de los nive-
bres o > 60 años en las mujeres), proteína C reac- les del c-LDL, sino también efectos favorables
tiva de alta sensibilidad (PCR-as) > 2 mg/l, y la sobre el desarrollo y la progresión. Un metaa-
presencia de, al menos, un factor de riesgo car- nálisis de los estudios de regresión de la placa
diovascular adicional (por ejemplo, HTA, niveles ha mostrado que la progresión de la ateros-
bajos de HDL, tabaquismo o antecedentes fami- clerosis disminuye proporcionalmente a la re-
liares de enfermedad cardiaca prematura). Así ducción alcanzada en los niveles de c-LDL; de
pues, rosuvastatina ha sido la primera estatina esta forma al alcanzar niveles de 70-75 mg/dl
aprobada para su empleo en prevención primaria el crecimento de la placa se detiene. La regre-
en personas con colesterol LDL "bajo" y sin enfer- sión de la placa es posible cuando el nivel de
medad cardiaca aparente, que cumplen los crite- c-LDL decrece por debajo de 70 mg/dl (Figura
rios indicados. 13.3).
Grupo de estatinas
Grupo de placebo
Cambios en MLD de la arteria coroaria (mm/y)
Figura 13.3. Relación entre niveles de c-LDL y regresión en pacientes en prevención secundaria tratados con estatinas.
ASTEROID: A Study To Evaluate the Effect of Rosuvastatin on Intravascular Ultrasound-Derived Coronary Atheroma
Burden; CCAIT: Canadian Coronary Atherosclerosis Intervention Study; LCAS = Lipoprotein and Coronary
Atherosclerosis Study; MAAS = Multicentre Anti Atheroma Study; MARS = Monitored Atherosclerosis Regression Study;
MLD = Minimum Lumen Diameter; PLAC I = Pravastatin Limitation of Atherosclerosis in the Coronary Arteries;
REGRESS = Regression Growth Evaluation Statin Study.
SI factor conversor: para convertir los valores de c-LDL a mmol/l, multiplicar por 0,0259.
De Circulation, 65 con permiso de Wolters Kluwer Health.
Modificada de O'Keefe JH, et al. Mayo Clin Proc 2009;84:741-757.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
160 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
embargo, la relación entre HDL y aterotrom- son la de los triglicéridos61. Sin embargo, aún
bosis es compleja. Así, existen deficiencias he- en estos casos, el aumento máximo de c-HDL
reditarias de HDL, como la Apo A-I Milano, con estatinas no supera el 15%. Los fármacos
que no sólo no inducen mayor riesgo cardio- activos sobre la hipertrigliceridemia, como los
vascular, sino que confieren protección contra fibratos o el ácido nicotínico, pueden aumen-
la enfermedad cardiovascular. Por otra parte, tar en promedio el c-HDL un 15% y un 20%,
la demostración del papel protector de los fi- respectivamente62. Datos de estudios epide-
bratos en prevención secundaria (como fár- miológicos sugieren que las enfermedades
macos que disminuyen los triglicéridos y au- cardiovasculares se reducen un 1% por cada
mentan el colesterol HDL) está siendo más di- reducción del 1% del c-LDL y al menos un 1%
ficultoso de lo previsto. Por último, el estudio por cada aumento del 1% del c-HDL. Va to-
ILLUMINATE57, un ensayo clínico con torcetra- mando fuerza el concepto de que la suma de
pib (un inhibidor de la proteína transferidora los porcentajes de cambio de cada fracción li-
de ésteres de colesterol - CETP), realizado en pídica tiene un efecto aditivo sobre el riesgo
un contexto de prevención secundaria, tuvo cardiovascular63.
que ser interrumpido por un aumento de Resumiendo podemos decir, pues, que dis-
mortalidad tanto cardiovascular como no car- ponemos de menos evidencias de que la ele-
diovascular, a pesar de aumentar un 72% el c- vación farmacológica de HDL se acompaña de
HDL y disminuir un 25% el c-LDL. Todas estas beneficios clínicos netos. Ahí los resultados no
evidencias (revisadas por Sing IM, et al., 2007) han superado definitivamente la controversia,
sugieren que cualquier mecanismo de eleva- si los comparamos con los obtenidos respecto
ción del c-HDL no tiene por qué ser necesaria- a los efectos de disminuir LDL mediante el em-
mente efectivo en reducir el riesgo cardiovas- pleo de estatinas. A pesar de ello, habitual-
cular. Por tanto, es de interés el análisis de las mente se recomienda alcanzar concentracio-
modificaciones que inducen los diferentes tra- nes adecuadas de colesterol HDL en diversas
tamientos sobre los mecanismos antiaterogé- situaciones clínicas. Diversas guías de trata-
nicos de la HDL, más allá de que sean capaces miento (ATPIII, ACC, AHA, ADA, ESC y NICE) in-
de aumentar el c-HDL, y disponer de estudios cluyen este aspecto como un objetivo tera-
de morbi-mortalidad, con mayor razón aún en péutico secundario, por lo que frecuentemen-
este caso. te será preciso la utilización de tratamiento
No revisaremos los estudios que existen combinado.
sobre las estrategias no farmacológicas para Fibratos. Los fibratos elevan el c-HDL en
aumentar el c-HDL y que incluyen abandono torno a un 10-20%, pero se asocian también a
del hábito tabáquico, ejercicio físico regular, descensos más modestos del colesterol ligado
pérdida de peso, así como dietas ricas en gra- a lipoproteínas de baja densidad (c-LDL) y más
sas monoinsaturadas y en ácidos grasos poliin- importantes de los triglicéridos64. Por este mo-
saturados omega 3 y pobres en hidratos de tivo es difícil discernir la contribución específi-
carbono de absorción rápida58,59. ca de los cambios del c-HDL a los efectos pro-
Los fármacos hipolipidemiantes disponi- tectores cardiovasculares65.
bles actualmente tienen una capacidad limita- El Helsinki Heart Study evaluó el efecto de
da, pero en modo alguno desdeñable, de au- 1.200 mg de gemfibrozilo en 4.081 sujetos con
mentar el colesterol HDL. hiperlipemia combinada en prevención prima-
El estudio STELLAR 60 nos mostró que las ria y mostró una reducción del 34% de las
estatinas aumentan el c-HDL un 6% de prome- complicaciones coronarias y del 26% de la
dio, si bien con diferencias entre distintas mo- mortalidad coronaria, sin efectos sobre la mor-
léculas (mayor en la rosuvastatina que en la talidad global. El tratamiento se asoció con un
atorvastatina), y este aumento no guarda nin- aumento del 11% del c-HDL, al que podía atri-
guna relación con la reducción del c-LDL, aun- buirse una parte importante del beneficio clí-
que sí depende de las cifras basales de trigli- nico. Como sabemos, se estima una reducción
céridos y c-HDL, aumentándolo más cuanto del 3% en la tasa de eventos coronarios por
más bajas son sus cifras basales o más altos cada 1% de aumento del c-HDL, independien-
Capítulo 13. De la investigación a la práctica clínica
163
te de los efectos sobre LDL y triglicéridos. Es lar (9%) no alcanzó la significación estadística.
importante hacer notar que en un análisis de No obstante, se pudo demostrar de nuevo una
subgrupos dicho beneficio se concentraba en asociación entre los niveles alcanzados de c-
pacientes con triglicéridos > 200 mg/dl y c- HDL y la mortalidad coronaria.
HDL < 42 mg/dl, en los que la reducción del Sin duda, los resultados de estos estudios
riesgo alcanzaba el 66%. limitan el papel de los fibratos en las actuales
Los resultados del estudio FIELD66 extien- guías de práctica clínica como tratamiento de
den dicha observación a pacientes con diabe- la dislipemia.
tes mellitus tipo 2 tratada, sin enfermedad car- En este sentido el estudio ACCORD Lipid,
diovascular previa, los cuales constituían el cuyos resultados acaban de ser publicados,
90% de los 9.795 pacientes incluidos. evaluó la capacidad de dos estrategias hipoli-
Se evaluó el efecto de 200 mg de fenofi- pemiantes (simvastatina + fibrato versus sim-
brato durante cinco años, observándose un vastatina + placebo) para reducir el riesgo car-
aumento del c-HDL (5%) y reducciones apre- diovascular en diabéticos tipo 2. En este caso
ciables de c-LDL (12%) y triglicéridos (28%), se analizaron 5.518 pacientes diabéticos tipo 2
pero con una reducción (11%) no significativa tratados con simvastatina, que recibieron de
de la morbilidad. Este 11% de reducción del forma aleatoria fenofibrato o placebo. La varia-
riesgo relativo de que se produjera uno de los ble principal fue la aparición de infarto de
componentes del objetivo primario no alcan- miocardio no mortal, ictus no mortal o muerte
zaba significación estadística, que sí se obser- de causa cardiovascular. Tras un seguimiento
vaba en el objetivo secundario (infarto de de 4,7 años, la tasa anual de eventos fue del
miocardio, ictus, muerte cardiovascular y nece- 2,2% en el grupo de fenofibrato y 2,4% en el
sidad de revascularización) al analizar el sub- grupo placebo. Si bien podría concluirse que la
grupo sin enfermedad cardiovascular previa combinación de fenofibrato y simvastatina no
(reducción del 19%; p < 0,004). De nuevo, los redujo la tasa de complicaciones cardiovascu-
pacientes con c-HDL bajo y triglicéridos eleva- lares en comparación con la monoterapia con
dos parecían concentrar el beneficio terapéuti- simvastatina, del análisis en profundidad de
co. Algunos subestudios muestran beneficio los resultados se deduce que: la adición de un
en la patología microvascular, en concreto dis- fibrato al tratamiento con estatinas sólo se
minuyendo la tasa de progresión de retinopa- acompaña de reducción de morbimortalidad
tía diabética y de amputaciones67, que será ne- vascular en aquellos pacientes que presentan
cesario confirmar en estudios diseñados espe- bajos niveles de c-HDL e hipertrigliceridemia.
cíficamente para ello. Niacina. El beneficio que produce la niaci-
En prevención secundaria, el estudio VA- na (uno de los fármacos hipolipemiantes más
HIT evaluó el efecto de la misma dosis de
68
antiguos) sobre los lípidos está fuera de toda
gemfibrozilo frente a placebo en 2.531 varo- duda. Es el fármaco que actualmente presenta
nes durante cinco años. El tratamiento activo un perfil global más completo sobre las altera-
se asoció con un incremento del 6% del c-HDL ciones lipídicas potencialmente aterogénicas,
y una reducción del 22% de eventos corona- al aumentar los niveles de colesterol HDL al
rios. Si bien las cifras de c-HDL durante el trata- tiempo que reduce los de colesterol LDL y de
miento se relacionaron significativamente con triglicéridos. Paradójicamente, y probablemen-
el efecto protector, estos cambios explican te en relación con la mala tolerancia de las
apenas un 23% del beneficio clínico obtenido. presentaciones de liberación rápida, ha tenido
Sin embargo, otros estudios con fibratos un desarrollo de investigación clínica limitado,
no han obtenido resultados clínicos tan claros. a pesar de lo cual, como veremos, ha demos-
Así, en el estudio BIP 69, 3.090 pacientes de trado su efecto de reducir la morbi-mortali-
ambos sexos, fueron asignados aleatoriamente dad.
a tratamiento con 400 mg de bezafibrato o El Coronary Drug Project70 evaluó el efecto
placebo durante seis años. El tratamiento se de 3 g/día de niacina frente a placebo en
asoció a un aumento del 18% del c-HDL, pero 4.081 pacientes con infarto agudo de miocar-
la reducción de morbi-mortalidad cardiovascu- dio documentado por electrocardiograma
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
164 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
(ECG). El tratamiento activo se asoció con una nicotínico es más eficaz por su mayor efecto
reducción del colesterol total del 10%, del 27% sobre el c-LDL, el c-HDL y los triglicéridos que
de los triglicéridos y con un descenso de las ambos fármacos en monoterapia, y lo mismo
complicaciones cardiovasculares del 34%, sin puede afirmarse en relación con la asociación
efectos sobre la mortalidad. Sin embargo, la de AN con fibratos, aunque en este caso el des-
extensión del estudio a 15 años sí mostró una censo del c-LDL se incrementa en menor medi-
reducción significativa de la mortalidad total da que al asociar una estatina al AN.
(11%) con respecto al placebo. El principal efecto secundario del AN es la
Otros ensayos clínicos (Stockholm Ischae- aparición de enrojecimiento facial o Flushing
mic Heart Disease Secondary Prevention, HATS, (EF) secundario a vasodilatación, que están
FATS y AFREGS) han evaluado el efecto de la mediados por la prostaglanina D2 (PGD2) y
niacina en asociación con fibratos, estatinas o son una causa frecuente de interrupción del
resinas en prevención secundaria en un núme- tratamiento. Con la finalidad de disminuirlos se
ro pequeño de pacientes. De modo agregado, han ideado sistemas de liberación retardada o
el tratamiento combinado que incluye la niaci- presentaciones que añaden antagonistas de
na se asocia a una reducción de la tasa de las prostaglandinas D2 como el laropiprant. A
complicaciones cardiovasculares. este respecto, los estudios que valoran estas
Recientemente se ha evaluado el efecto de dos presentaciones, la niacina de liberación re-
la niacina en comparación con la ezetimiba en tardada (NR), -permitiéndose añadir ácido ace-
la evolución del grosor medio-íntima carotí- tilsalicílico o algún otro antiinflamatorio no es-
deo (GIM) en pacientes en prevención secun- teroideo- o niacina simple a dosis plena de la
daria (o riesgo vascular equivalente) tratados misma unida al laropiprant (N/L), demuestran
con estatinas, c-LDL< 100 mg/dl y c-HDL < 50 que es esta segunda presentación la que dis-
mg/dl (mujeres < 55 mg/dl). El estudio ARBI- minuye más los EF, siendo la seguridad y tole-
TER 6-HALTS71 fue interrumpido tras 14 meses rabilidad de la niacina similar en ambos gru-
de seguimiento de 208 pacientes, al detectarse pos 73. Así pues, esta nueva formulación N/L
una clara regresión en el GIM en el grupo asig- permite alcanzar antes las dosis óptimas y,
nado a niacina frente a la estabilización del sobre todo, disminuir la tasa de abandonos.
grupo de ezetimiba. Si bien el número de Se ha descrito una disminución de la toleran-
eventos clínicos fue limitado y se trató de uno cia a la glucosa con AN e incrementos de la glu-
de los objetivos secundarios del estudio, no cosa en ayunas de un 4-5%. Sin embargo los pa-
podemos dejar de reseñar que el tratamiento cientes tratados con AN, en el principal estudio
con niacina se asoció a una reducción de la de prevención cardiovascular con AN, el Coro-
tasa de eventos cardiovasculares. nary Drug Project, no necesitaron aumentar el tra-
Otro estudio independiente, por parte del tamiento antidiabético en relación a los que to-
grupo del Dr. Choudhury en Oxford, ha repor- maron placebo. Por otra parte, el efecto preventi-
tado unos resultados similares en cuanto a re- vo del AN se observó por igual en los pacientes
gresión de placa carotídea, esta vez evaluada diabéticos y en los que no lo eran. Los datos de
con RM, en una población similar72. Estos dos los ensayos clínicos con más de 6.000 pacientes
estudios independientes sugieren que en pa- tratados con distintas combinaciones de AN y
cientes bajo tratamiento con estatinas y con estatinas no sugieren que haya un mayor riesgo
niveles acorde con las guías de tratamiento, el de miopatía que con la monoterapia.
incremento de HDL se asocia a un beneficio Los estudios AIM-HIGH, con niaspan, cuyos
incremental en términos de regresión de volu- resultados tendremos en el 2011 y TRIHE-HPS2
men de la placa. con AN/ laropiprant cuyos datos apareceran
El AN a dosis plenas aumenta el c-HDL en el 2013, nos darán mucha más información
entre un 15-35%, a dosis menores de 2 g/día se a pesar de la solidez de la que ya disponemos.
da un aumento de alrededor de un 20%. Como Por último comentaremos dos grupos farma-
ocurre con otros fármacos, el efecto es más acu- cológicos de antidiabéticos orales utilizados
sado en los pacientes con valores de c-HDL dis- en el tratamiento de la diabetes mellitus con
minuidos. La combinación de estatinas y ácido efecto sobre su perfil lipídico.
Capítulo 13. De la investigación a la práctica clínica
165
Recordemos que también en los pacientes De hecho, sabemos que los niveles postpran-
afectos de diabetes tipo 2, optimizar el perfil li- diales de glucosa y triglicéridos tienen una
pídico va a ser la intervención más importante mejor correlación con la tasa de eventos que
para reducir el riesgo de muerte por enferme- los niveles en ayunas79. Los picos postprandia-
dad coronaria, IAM, ictus y procedimientos de les que aparecen en estas poblaciones com-
revascularización74. Este tratamiento debe lle- portan un aumento de las especies reactivas
varse a cabo en el contexto de un tratamiento de oxígeno (radicales libres), con el consi-
intensivo global de los factores de riesgo ate- guiente aumento del estrés oxidativo, disfun-
rógenos, estrategia con beneficio demostrado ción endotelial, vasoconstricción, aterosclero-
en el STENO 275; en este estudio se demostró sis, hipercoagulabilidad e hiperactividad del
una importante disminución de la morbi-mor- sistema simpaticomimético80-82.
talidad en comparación a la que alcanzó el Glitazonas. Las glitazonas actúan activan-
grupo de pacientes que se tratan con una es- do los receptores de proliferación de peroxiso-
trategia terapéutica clásica. Un control meta- mas (PPAR) gamma, aumentando la sensibili-
bólico adecuado sostenido (con HbA1C < 7% ) dad a la insulina en tejido graso e hígado. Su
no sólo reduce el riesgo de presentar retino- efecto metabólico y principal indicación tera-
patía, nefropatía y neuropatía (como demostró péutica es la reducción de la glucemia en pa-
UKPDS), sino que puede jugar un papel impor- cientes con diabetes mellitus tipo 2. Si bien
tante en el control adecuado de la dislipemia; tanto la pioglitazona como la rosiglitazona
ello debe hacerse evitando regímenes hipo- producen un incremento similar del c-HDL
glucemiantes agresivos (HbA1C < 6,5%) que (10%), la rosiglitazona aumenta el c-LDL en
aumentan el riesgo de presentar eventos CDV, torno a un 10%, mientras la pioglitazona no lo
especialmente en personas afectas de enfer- modifica. El estudio PROACTIVE 83 evaluó el
medad coronaria que sufren hipoglucemias75. efecto de la pioglitazona frente a placebo
La revisión del Adult Treatment Panel III re- sobre las complicaciones cardiovasculares en
comendó reducir los niveles de c-LDL al 5.238 diabéticos tipo 2 con afectación macro-
menos de un 30 a un 40% para los pacientes vascular. El tratamiento activo se asoció con
tipo 2, sin tener en cuenta el nivel basal. Las una reducción del 16% de la tasa de complica-
guías clínicas del ACC/AHA indican que obte- ciones cardiovasculares frente a placebo. Inde-
ner un nivel de c-LDL inferior a 70 mg/dl es ra- pendientemente del posible aumento de la in-
zonable en pacientes afectos de DM. En el do- cidencia de insuficiencia cardiaca secundaria a
cumento elaborado por el CEIPC (Comité Es- la retención hídrica producida por glitazonas,
pañol Interdisciplinario para la Prevención Car- no existen ensayos que demuestren un efecto
diovascular), que adapta las guías europeas al protector de la rosiglitazona sobre las compli-
entorno español, se recomienda, si es posible, caciones cardiovasculares, por lo que en pa-
alcanzar niveles < 80 mg/dl. Diversos estudios cientes diabéticos dislipémicos, hoy por hoy,
dan soporte a la recomendación de tratar de optaremos por la pioglitazona.
disminuir intensivamente el c-LDL en la pobla- Inhibidores de la glucosidasa. Han de-
ción diabética76-78. Entre ellos destacamos el es- mostrado mejorar el dismetabolismo post -
tudio CARDS76 en 2.838 pacientes, cuyo nivel prandial, reduciendo subsiguientemente la
basal promedio de c-LDL era de 119 mg/dl, tasa de eventos 84. El estudio STOP-NIDDM
que fueron randomizados a recibir 10 mg de randomizó 1.429 pacientes a recibir 100 mg
atorvastatina o placebo. Tras cuatro años, el de acarbosa dos veces al día o placebo. Hubo
grupo tratado con atorvastatina (con un nivel una disminución del 25% en la aparición de
promedio de c-LDL de 72 mg/dl) redujo el RR DM y de un 49% en la de eventos CDV. Otras
de presentar eventos CDV mayores un 37% terapias, como modificaciones de los hábitos
(5,8% vs 9,0%; p<0,001). higiénico-dietéticos, ejercicio, análogos de
Los factores de riesgo tradicionales son las incretinas, glinidas, glitazonas e insuliniza-
responsables de una parte de los eventos que ción basal, han mostrado disminuir la gluce-
tienen lugar en personas con DM tipo 2, sín- mia postprandial, pero escapan de esta revi-
drome metabólico o intolerancia a la glucosa. sión.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
166 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Las implicaciones clínicas de todos estos mizar los niveles de HDL y/o triglicéridos o
estudios nos ayudarán, sin duda, con el fin de ambos? ¿Debo utilizar para ello un tratamiento
optimizar el tratamiento, a dar respuesta ante combinado, con dos o incluso con tres fárma-
cada paciente a preguntas tales como: ¿He al- cos? ¿Cuál/cuáles de las combinaciones posi-
canzado el nivel óptimo de c-LDL (o el de no-c- bles sería mejor en este caso? ¿Cuál sería la re-
HDL en caso de que el paciente presente los lación coste beneficio de cada intervención?
TG elevados)? ¿Cuál es su riesgo residual? ¿Qué Todo ello con la mirada puesta en alcanzar la
papel juegan en él los hábitos de vida y cuál regresión clínicamente significativa de las lesio-
sería la estrategia para abordarlos84-86? ¿Debo nes ateromatosas, con el objetivo final de dis-
intensificar aún más el descenso de LDL u opti- minuir la morbi-mortalidad cardiovascular.
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Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
168 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
Capítulo 14 Criterios de
derivación a las
Unidades de Lípidos.
Mapa de Unidades
de lípidos
Xavier Pintó Sala
Unidad Funcional de Lípidos y Riesgo Vascular.
Servicio de Medicina Interna. Hospital Universitario
de Bellvitge. Hospitalet de Llobregat. Barcelona.
Miembro de la SEA.
Las Unidades de Lípidos están plenamente miento de los factores etiológicos, con el fin de
integradas en nuestro sistema sanitario y en evitar las recurrencias isquémicas, actividad que
ellas se desempeña una función asistencial, se conoce como prevención secundaria. La pre-
docente y de investigación dirigida al diagnós- vención primordial depende de distintos orga-
tico y tratamiento de las alteraciones del me- nismos e instituciones, más allá de las que se
tabolismo lipídico, el control global de los fac- encuadran en el estamento sanitario, entre
tores aterogénicos y la prevención de las en- éstos el Ministerio de Agricultura, Ganadería y
fermedades cardiovasculares1. Pesca, las Direcciones de Educación Física y De-
En los últimos años han tenido lugar impor- portes, los ayuntamientos, las escuelas, los esta-
tantes avances en el diagnóstico y tratamiento blecimientos de restauración, las empresas de
de los factores de riesgo cardiovascular, la pato- alimentación y muchos otros, que en su conjun-
logía ateromatosa y sus complicaciones isqué- to influyen de forma decisiva en los hábitos de
micas. Sin embargo, la principal herramienta vida de la población. El segundo nivel se lleva a
para luchar contra la aún elevada morbi-morta- cabo sobre todo en la atención primaria, por
lidad cardiovascular que afecta a la población parte de los médicos generales y de familia, y
general, es la prevención. En referencia a las en menor medida por los servicios médicos de
Unidades de Lípidos podemos dividir las activi- Empresa, de Medicina Preventiva y determina-
dades preventivas en tres niveles de actuación. dos servicios hospitalarios, entre los que se en-
El primero consiste en la promoción de los há- cuentran el de Endocrinología, Reumatología,
bitos de vida saludables en la población gene- Aparato Digestivo o Dermatología. La preven-
ral, sobre todo una alimentación equilibrada y ción secundaria se inicia de forma principal a
la actividad física, para evitar la aparición de los nivel hospitalario durante el ingreso por patolo-
factores aterogénicos, como la hipertensión, la gía isquémica aguda y a largo plazo se realiza
obesidad, la diabetes y las dislipemias, una acti- en la atención primaria. Las Unidades de Lípi-
vidad que se denomina prevención primordial. dos actúan como centros de referencia sobre
En el segundo nivel, se lleva a cabo la detección los tres niveles mencionados de la prevención
precoz y el tratamiento de los factores de ries- cardiovascular. En el primer nivel influyen de
go cardiovascular en la población que aún no forma parcial y colaboran en las tareas docen-
ha presentado episodios de enfermedad car- tes y educativas dirigidas a la población general
diovascular, actividad conocida como preven- mediante acciones sobre su entorno, que, en
ción primaria. En el tercer nivel la prevención se general, se desarrollan en colaboración con los
centra en el paciente que ya ha sufrido la enfer- mencionados organismos e instituciones, y en
medad y consiste en la detección y el trata- el marco de la sociedad científica a la que per-
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
172 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
pidos existe la tendencia creciente a realizar liar (HF). Podemos considerar que una hiperco-
exploraciones no invasivas del sistema vascular lesterolemia es severa, en general, cuando la
a los pacientes de riesgo intermedio o alto, de concentración de colesterol total es mayor de
edad media o superior, con el fin de diagnosti- 300 mg/dl y la de c-LDL > 190 mg/dl, o de
car la aterosclerosis subclínica antes de la apa- forma más individualizada, cuando la concen-
rición de las manifestaciones isquémicas7. En el tración de colesterol total o de c-LDL es mayor
presente capítulo no vamos a describir otras al percentil 95 de las concentraciones que en-
tareas que se desarrollan en las Unidades de Lí- contraríamos en sus correspondientes grupos
pidos, relacionadas con la docencia y la investi- de edad y sexo. Las Unidades de Lípidos dispo-
gación, y nos vamos a limitar a las asistenciales. nen de las herramientas de diagnóstico clínico
y de laboratorio para establecer o descartar el
diagnóstico de este trastorno. Existen una serie
2.Criterios de derivación a de características que sugieren una mayor pro-
una Unidad de Lípidos babilidad de que se trate de una HF y, por
tanto, la necesidad de remitir al paciente a una
En términos generales, todo paciente que Unidad de Lípidos, la primera es la severidad
a juicio del médico responsable de su cuidado de la hipercolesterolemia. En ausencia de cau-
presente una alteración del metabolismo lipí- sas de dislipemia secundaria, entre ellas un hi-
dico o una situación de riesgo cardiovascular potiroidismo o un síndrome nefrótico, cuanto
cuya complejidad diagnóstica o terapéutica más alta es la cifra de colesterol y de coleste-
supere su habilidad clínica debería ser deriva- rol-LDL (c-LDL), mayor es la probabilidad de
do a una Unidad de Lípidos. En aras de concre- que se trate de una HF. La existencia de pa-
tar, las principales situaciones clínicas que son rientes de primer grado, es decir padres, her-
tributarias de derivación a una Unidad de Lípi- manos o hijos, con hipercolesterolemia o con
dos son las que se sintetizan en la Tabla 14.1 y enfermedad isquémica, también aumenta el
se describen en los apartados siguientes. grado de sospecha de HF. Si se confirma el
diagnóstico en la Unidad de Lípidos de refe-
rencia se iniciará el trámite administrativo para
2.1.Diagnóstico de las
que el paciente se acoja a la aportación redu-
hiperlipemias y del riesgo cida en el pago de las estatinas que son los
cardiovascular fármacos de primera elección para el trata-
miento de este trastorno, a la que puede ser
Hipercolesterolemias severas necesario añadir ezetimiba, también con apor-
En los pacientes con hipercolesterolemia tación reducida. La prestación de aportación
severa es necesario valorar la posibilidad de reducida va dirigida a la HF y consiste en que
que se trate de una hipercolesterolemia fami- los pacientes con HF en situación laboral acti-
Tabla 14.1 Principales situaciones clínicas tributarias de derivación a las Unidades de Lípidos
A. Problemas clínicos relacionadas con el diagnóstico
- Hipercolesterolemias severas
- Hiperlipemias mixtas
- Hipertrigliceridemias severas
- Hiperlipemias secundarias
- Déficit de colesterol de las lipoproteínas de alta densidad (c-HDL)
- Estudios familiares
- Estudio de la arteriosclerosis subclínica
- Valoración del riesgo cardiovascular global
cado realizar el estudio de las principales causas tivo de derivación a las Unidades de Lípidos,
primarias y secundarias que pueden alterar el en general en los pacientes de edad media o
metabolismo de las HDL, ya que la mayoría se superior con dos o más factores de riesgo car-
asocian a un mayor riesgo cardiovascular y re- diovascular, o en los pacientes con mayores
quieren medidas terapéuticas específicas14. grados de riesgo cardiovascular. Las Unidades
de Lípidos cuentan con los recursos diagnósti-
Pacientes con isquemia prematura con y cos, ya en su propia estructura, ya en los servi-
sin factores de riesgo aparentes cios asociados, para la realización de las explo-
Los pacientes que han sufrido un episodio raciones vasculares necesarias en cada caso.
isquémico antes de los 55 años en el caso de ser Asimismo, en las Unidades de Lípidos puede
varones y de los 65 años si son mujeres, pueden realizarse la valoración global de los factores
ser portadores de una carga genética adversa de riesgo cardiovascular, incluyendo los facto-
que les predisponga a sufrir nuevos episodios is- res clásicos y los factores no convencionales o
quémicos o a fallecer a causa de la enfermedad emergentes, mediante la integración de la in-
cardiovascular. En estos pacientes es necesario formación aportada por las ecuaciones de ries-
detectar dichos factores genéticos mediante el go y la de las exploraciones vasculares2,5.
despistaje de los factores de riesgo clásicos o
convencionales, entre ellos las dislipemias atero- 2.2.Tratamiento de las
génicas antes mencionadas y los déficits de lipo-
proteínas de alta densidad (HDL) de presenta-
dislipemias y del riesgo
ción familiar o esporádica. Si no se detectan o su cardiovascular global
presencia no explica de forma suficiente la apa-
rición de la enfermedad, habrá que buscar otros Hiperlipemias severas
factores menos habituales, como el exceso de Las hiperlipemias que por su severidad su-
homocisteína15 o de lipoproteína(a)16. ponen una mayor dificultad terapéutica, tanto
las hipercolesterolemias, como las hipertriglice-
Estudios familiares ridemias, son tributarias de ser atendidas en una
En todas las dislipemias de herencia domi- Unidad de Lípidos. Los pacientes con dislipe-
nante, y sobre todo si se asocian a un alto ries- mias severas requieren un consejo sobre los há-
go cardiovascular, como ocurre en la hiperco- bitos de vida ajustado a las características del
lesterolemia familiar o la hiperlipemia familiar paciente y una intervención farmacológica que
combinada es necesario estudiar a todos los con frecuencia va a requerir dosis máximas en
miembros de la familia, lo cual suele suponer monoterapia o la combinación de 2 o más fár-
importantes problemas de gestión de las cita- macos hipolipemiantes. En el caso de las hiper-
ciones y organización de las visitas. Las Unida- trigliceridemias severas el consejo sobre los há-
des de Lípidos han de ofrecer la infraestructu- bitos de vida ha de ser impartido por personal
ra adecuada para realizar las tareas necesarias con experiencia en el cambio de la conducta ali-
para estudiar a los miembros de las familias mentaria y de los hábitos de actividad física17,18.
afectadas o promover el estudio de los miem-
bros que vivan en lugares alejados1. Hipoalfalipoproteinemia o déficit de c-
También es necesario el estudio de las fa- HDL
milias en los que uno o más miembros han su- El tratamiento de la hipoalfalipoproteine-
frido un episodio de enfermedad isquémica mia encierra mayor complejidad que el de la
prematura. En estas familias se realizarán los hipercolesterolemia y la hipertrigliceridemia,
mismos procedimientos que se han descrito tanto debido a que su valoración diagnóstica
para los pacientes con isquemia prematura. relacionada con el riesgo vascular y las indica-
ciones de tratamiento es más compleja, igual
Estudio de la arteriosclerosis subclínica y que la terapia en sí misma, ya que el manejo
del riesgo cardiovascular global de los fármacos para aumentar el c-HDL es
La sospecha de arteriosclerosis subclínica algo más complejo y la respuesta más variable
va a convertirse de forma creciente en un mo- que en el caso de la hipercolesterolemia19.
Documento de Consenso SEMERGEN-SEA
176 ABORDAJE COMÚN DEL PACIENTE DISLIPÉMICO
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