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“RELATOS SALVAJES”

Adaptación

● Las Ratas (Página 2 a 4)

● La Propuesta (Página 5 a 10)

● Bombita (Página 11 a 14)

● El más fuerte (Página 15 a 17)

● Hasta que la muerte nos separe (Página 18 a 22)

● Pasternak (Página 23 a 26)


LAS RATAS
CAMARERA: -Buenas noches, ¿Uno solo?

POLÍTICA: -Veo que sos buena para las matemáticas…Uno, si

CAMARERA: -Donde quiera…De plato del día tenemos lentejas con


arroz (le deja el menú)

POLÍTICA: -Mmm que rico (la camarera se va a la cocina)

COCINERA: -¿Pidió? Eh! (chasqueando los dedos)

CAMARERA: -(en shock) Esa mina es de mí pueblo, usurera,


mafiosa, nos remató la casa y por su culpa mí mamá se terminó
suicidando. Dos semanas después del entierro, se trató de
levantar a mí papá, lo acosó tanto que nos tuvimos que venir
para acá. Sabes cuantas veces soñé con tenerla así, ¿Delante
de mí? Yo algo le voy a decir

COCINERA: -¡¿A decir?! Por culpa de esa mina se suicidó tu


mamá ¿Y lo único que se te ocurre es insultarla? ¿Por qué no
le ponemos veneno para ratas en la comida? En el depósito
hay, una buena dosis y en 5 minutos le revienta el corazón

(Camarera vuelve al salón)

POLÍTICA: -(llama a la camarera) ¿Mucho trabajo?

CAMARERA: -No, con esta lluvia

POLÍTICA: -Porque hace un rato te estoy llamando, tenes que


mirar más al salón, bebé

CAMARERA: -Perdón ¿Ya sabe que va a pedir?

POLÍTICA: -Traeme unas papas fritas a caballo. Si me quedo


con hambre te pido otra cosa (amaga con el menú)

CAMARERA: -¿Para tomar?

POLÍTICA: -Coca light

CAMARERA: -¿Coca light?


POLÍTICA: -Coca…light…papas fritas…a caballo, ¿Querés que te
lo anote?

CAMARERA: -(vuelve a la cocina) ¡La odio! ¡La odio! Hacele


unas papas fritas a caballo. (cocinera le muestra el veneno)
¿Vos estás loca? ¿Querés que vaya presa?

COCINERA: -¿Presa? ¿Crees qué a este escuerzo le van a hacer


una autopsia los del FBI? Papas fritas a caballo, van a
pensar que fue el colesterol

CAMARERA: -(guarda la lata) Hacele las papas fritas, queres


(vuelve al salón porque la llaman)

POLÍTICA: -¿Te pido una opinión? Vos que pareces una chica
despierta, vení acércate (le muestra unas fotos) ¿Cuál te
gusta más? ¿Esta o esta?

CAMARERA: -Me quedo con el rojo (se retira)

POLÍTICA: -Gracias

COCINERA: -(armando plato) Además no es tan terrible la


cárcel, tiene mala prensa nomas. Te dan de comer, no pagas
alquiler, vivís sin preocupaciones. Y si te toca un buen
grupo, la pasas bien. Jugas a las cartas…

CAMARERA: ¿Vos estuviste presa?

COCINERA: -Un tiempo, y te aseguro que que me sentía mucho


más libre que acá. Esto es una mierda

CAMARERA: ¿Qué hiciste?

COCINERA: -Nada de lo que me arrepienta

CAMARERA: -¡Encima se va a presentar a intendente, esa hija


de puta! ¿Lo podes creer?

COCINERA: -¿Pero cómo no me lo voy a creer? Si los hijos de


puta gobiernan el mundo. Despertate nena (le muestra el
veneno) ¿Qué decís? ¿Le hacemos un favor a la comunidad? (le
da el plato)

POLÍTICA: -(camarera entrega la comida) Estupendo


CAMARERA: -(vuelve a la cocina) (cocinera limpia el frasco de
restos de veneno y camarera la ve) ¡¿Se lo pusiste?!

COCINERA: -Hacete la mosquita muerta ahora y decime que no te


diste cuenta

CAMARERA: - ¿Eh?

COCINERA: -¿Ehhh? Así está el país, todos quieren que alguien


que alguien les de su merecido estos personajes pero nadie
hace nada. Sentite orgullosa nena, por primera vez estás
haciendo algo que vale la pena

CAMARERA: -No no, yo no estoy haciendo nada eh…

COCINERA: -¿Ah no? ¿Te quedas acá en vez de ir a sacarle el


plato? (camarera intenta ir al salón y la agarra la
cocinera). Tranquila, vos no te tenes que preocupar por nada.
Si hay una investigación voy a decir que hoy estuve echando
veneno en la cocina porque estaba llena de bichos, que por
otro lado es absolutamente cierto, y que casualmente una
piedrita cayó dentro de una olla ¿Qué me van a decir a mí?

CAMARERA: -Es una locura esto (mirando hacia el salón)

COCINERA: - Che ¿Esta mierda no estará vencida? ¿No? (busca


el veneno). No dice la fecha ¿Cómo es? Cuando está vencido
¿Es más o menos dañino?

CAMARERA: -(va hacia el salón a retirarle el plato) Le agrego


un poco de sal que la cocinera se olvidó

POLÍTICA: -No, deja. Si necesito más sal te lo pido

(camarera intenta agarrar el plato)

POLÍTICA: -¡No! ¡Deja, deja! ¡¿Pero quién carajo te enseñó a


atender?! ¡¿Podes dejar comer a la gente en paz?! (camarera
le tira la comida en la cara a la política) ¡¿Qué haces negra
bastarda?! (tira todo y agarra del cuello a la camarera).
Ahora las vas a juntar ¡Una por una!

CAMARERA: -¡Ay no!


COCINERA: -(cocinera acuchilla por atrás a la política)
¡Tomá! ¡Acá tenés delicuentes! ¡Te voy a sacar el hígado como
un pollo!

FIN
LA PROPUESTA
Helena está mirando las noticias, se encuentra nerviosa,
camina de un lado a otro.

Mientras se escucha la voz del reportero.

V.O. /REPORTERO – Sucedió hace unas horas, en plena Avenida


del Libertador, un conductor, atropelló a una mujer
embarazada y se dio a la fuga. No se detuvo a auxiliar a la
víctima que fue trasladada de urgencia… (Disminuye la voz)

HELENA – ¿Y? ¿Todo mal?

ABOGADA – No, todo bien… El fiscal está dispuesto a llegar a


un arreglo, pero va a salir caro…

HELENA – (Preocupada) ¿Caro cuánto?

ABOGADA – Y… “Un palo verde”

HELENA – (Alarmada) ¡¿Un millón?! ¡¿Dólares!?

ABOGADA – Y, vio como vivís… La casa que tenes, no va a


agarrar por menos… Lo bueno es que nos maneja todo. Conoce al
comisario, a la mayoría de los jueces y nos ayudaría a
reforzar la coartada…

HELENA – ¡Esta bien!, pero no se si tengo tanto dinero en


efectivo, ¡es un millón de dólares!

ABOGADA – Si ya sé… Y además está mi parte.

HELENA – ¿Tu parte?

ABOGADA – Bueno, mi parte, yo soy la que te está arreglando


todo…

HELENA – Pero yo le pago fortunas a tu estudio por año…


ABOGADA – Pero eso es por otras cosas Helena… Estos no son
honorarios… Yo estoy arriesgando mi reputación…. Estuve a
punto de darles mi camioneta a tu pareja y a tu hijo para que
se escapen… Me parece que estás siendo un poco
desconsiderada…

HELENA - ¿De cuánto estamos hablando?

ABOGADA - No sé… ¿Otro quinientos? (Helena aturdida no lo


puede creer)

HELENA – ¿Y no se lo puede dejar a José afuera?

ABOGADA – No Helena… Un responsable tiene que haber. (Helena


la mira consternada) … Mira, si querés llamar a otro abogado,
mi trabajo termina acá.

HELENA – (Mira a la abogada con rabia) … ¡Anda, cerra todo


anda!

La abogada sale. Helena con la misma rabia se dirige a


Santiago.

HELENA – ¡Santiago!... A mi decime la verdad, ¿Qué


tomaste?... ¿Fumaste marihuana?, ¿Eh?... ¡Pelotudo!, ¡Nos
arruinaste la vida a todos!

Entra JOSE, el jardinero, quien escucho la conversación.


Helena lo mira y le pregunta…

HELENA - ¿Todo bien JOSÉ?

JOSÉ – Y… ¡La verdad que no!, Por ir preso unos años, ¿me
llevo lo mismo que su abogada?... ¡Que vaya presa ella
entonces!... ¡O vaya usted!... Yo anoche me tomé un
Cachamate, como todas las noches, me vi una película de
vaqueros y me tiré a dormir.

HELENA – Habla claro José que no hay tiempo… ¡¿Decime que


querés?!

JOSÉ – Lo que acordamos y… Un departamento en Mar del Plata.

Entra la abogada.
ABOGADA – Ya está, el fiscal quiere que nos reunamos para
definir ciertas cuestiones. (Mira a Helena y a José) … ¿Todo
bien? ... (Nadie responde. Hace pasar al fiscal) … ¡Adelante
por favor!

Mientras el fiscal ingresa, Helena sube el volumen del


televisor donde se escucha la noticia sobre la muerte de la
mujer atropellada y los dichos del marido de la víctima.

V.O./REPORTERO – Acaban de confirmar que falleció la mujer


atropellada y su bebé… Estas fueron las palabras del marido
de la víctima y padre del bebé…

V.O./MARIDO – ¡No importa dónde te escondas, te voy a


encontrar y te voy a matar! ¿Me oíste?... ¡Te voy a encontrar
y te voy matar!

FISCAL – ¡Suficiente!, apague el televisor. Vamos a apurarnos


porque el tiempo apremia y no queremos ningún mal entendido…
La historia como la armaron, se mantiene tal cual…

José, usted de ahora en adelante no va a hablar con nadie que


no sea su abogada.

(Dirigiéndose a Helena) … Desde ahora el nexo entre nosotros


será a través de su abogada. En los próximos días voy a
citarla a usted y a su familia a declarar, procuren no viajar
a ninguna parte, ni hagan declaraciones en los medios.

José, usted va a salir esposado y con el rostro cubierto.


Afuera va a haber gente gritando e insultando, usted no emite
palabra… De los medios me encargo yo.

Voy a necesitar para el lunes a primera hora, que me haga


llegar a mi oficina 30 mil dólares en efectivo para gastos
operativos.

HELENA – Perdón que pregunte, pero… ¿Cuáles serían esos


gastos operativos?

FISCAL – Bueno, afuera hay oficiales, está el comisario,


trámites internos… Si alguien vio o escucho algo hay que
hacerlo participar… Tenemos que estar atentos a cualquier
cabo suelto que pueda llegar a aparecer… Así que, si les
parece bien, hago ingresar al comisario y a los oficiales
porque no los puedo demorar más.

HELENA – (Tensa, interrumpe) No tengo inconveniente en


hacerle llegar ese dinero el lunes, pero le aclaro que sale
del presupuesto ya acordado, ¿eh?... ¡Yo no pongo un centavo
más!

ABOGADA – Helena por favor…

HELENA – ¡Sí!, eso mismo digo yo, ¡por favor!... Ya sé que


estoy en una situación complicada pero tampoco es para que me
destripen de esta manera…

ABOGADA – Lo que te está pidiendo es razonable… No desviemos


el foco de atención por 30 mil dólares…

HELENA – ¡Ponelo vos entonces!

ABOGADA- ¡Ah! ¿Yo los tengo que poner?

HELENA – (Dirigiéndose al fiscal) … O que salga de su parte…


¡Usted va a cobrar 1 millón de dólares!

FISCAL - ¿Quién le dijo que yo voy a cobrar 1 millón de


dólares?

Helena sorprendida, se da cuenta del engaño, mientras la


abogada agacha la cabeza, todos la miran al mismo tiempo.

ABOGADA – No, eh… El millón de dólares incluye el dinero para


las contingencias, eh… Quedate tranquila.

HELENA – ¿Saben qué?... Se cortó… ¡No hay trato!

ABOGADA – No, ¡Helena espera! ¿Cómo que no hay trato?

HELENA – Se cortó… Se terminó… ¡No hay nada para nadie! (Se


levanta y le grita a Santiago) … ¡Santiago!... ¿Vos querías
confesar lo que hiciste?... Me parece perfecto, Salí a la
calle y hacelo, yo te di la mejor educación y vos siempre
hiciste lo que se te cantaron las pelotas… Así que ahora…
¡Jodete viejo!

Helena toma el control remoto, enciende el televisor y


comienza a cambiar de canales.
Mientras tanto la abogada, el fiscal y José murmuran por lo
bajo, en secreto, buscando una alternativa a la situación.
Luego de un instante la abogada se dirige hacia Helena.

ABOGADA - Helena, ¿podemos hablar de forma civilizada?

HELENA – Ya les dejé en claro que no quiero saber más nada…


¡Se terminó! ¡Listo! ¡Váyanse de mi casa!

ABOGADA – Helena, te recuerdo que hay dos muertos, si a


Santiago lo llegan a encontrar culpable, esto les va a costar
muchísimo más… José en cambio es insolvente.

HELENA – Justamente… ¿Quién va a indemnizar a la familia de la


víctima?, ¡que la plata vaya a parar ahí, que es lo que
corresponde!

ABOGADA – Mira, ya habíamos llegado a un acuerdo, ¡fue poco


ético retirarse así!... (Helena se ríe a carcajadas) … Mira,
yo te pido disculpas si en algo te ofendí, pero desde que
llegué a esta casa, no hago otra cosa que defender los
intereses de tu familia.

HELENA – (Riéndose)… Te lo agradezco de corazón, sos un pan de


Dios… ¿Vos querés defender a mi hijo?, fija tus honorarios con
él, a ver si te puede pagar.

ABOGADA – Por favor Helena, escúchame… Ya está, llegamos a un


arreglo con José y el fiscal y tenemos una propuesta
superadora… Los 30 mil dólares lo vamos a absorber entre
todos. José dice que se queda con los 500 mil iniciales y que
te olvides del departamento en Mar del Plata, el fiscal y yo
compartimos el millón… Punto, ni un centavo más… Pero eso sí,
hay que hacerlo ahora porque están todos los medios afuera y
el fiscal me dice que no puede demorar más el ingreso del
comisario y los efectivos.

HELENA – ¡No!, yo pongo un millón de dólares en total, y


ustedes se los reparten como quieran.

ABOGADA – Helena, ¿Cómo un millón en total?

HELENA – Es eso o nada, ¡si les va bien! ¡Y sino su ruta


viejo!... Me seguís rompiendo las pelotas y yo mismo salgo a
denunciarlos por extorsión, ¡A vos y al fiscal!.
La abogada la mira sorprendida. Se retiran con el fiscal y con
José cubriéndose el rostro.

Helena sube el volumen del televisor y se queda mirando la


transmisión del noticiero en vivo desde la puerta de su
domicilio.

Se escucha la voz del reportero preguntándole al fiscal.

V.O./REPORTERO – ¿Dr. Podría dar detalles de lo ocurrido? ...

FISCAL – No puedo dar detalles debido al secreto de sumario,


pero puedo confirmarles que el caso está prácticamente
resuelto,

V.O./MARIDO – ¡Te dije que te iba a matar hijo de puta!... (Se


escuchan 3 golpes)

HELENA – (Se tapa los ojos mientras grita) … ¡Noooo!

FIN
BOMBITA
EMPLEADO PLAYON: El que sigue.

SIMÓN: Que tal, mira yo estacione mi auto…

EMPLEADO PLAYON: La cedula verde por favor.

SIMÓN: Si… Si podes hablame bien.

EMPLEADO PLAYON: Le estoy hablando bien señor.

SIMÓN: Maso menos.

EMPLEADO PLAYON: Bueno. El servicio de acarreo son $ 490 y la


multa por infracción la va a recibir en su domicilio.

SIMÓN: Si pero es que, no me escuchas lo que yo te quiero


explicar, el cordón estaba absolutamente despintado, o sea no
había ninguna forma de que yo me enterara de que ahí no se
podía estacionar.

EMPLEADO PLAYON: Comprendo, ahora si quiere retirar el


vehículo de acá tiene que abonar el servicio de acarreo ¿sí?,
después si quiere puede realizar un descargo de lunes a
viernes de 08 a 14 en la dirección nacional de tránsito que
está en Carlos Pellegrini 211 primer piso.

SIMÓN: ¡Eeeeh no! mira sabes que vamos a hacer, yo te voy a


pedir por favor que vayas a hablar con quién tengas que
hablar, yo me quiero llevar mi auto de acá sin pagar un solo
centavo, que me devuelvan lo que gaste en el taxi hasta acá y
que me pidan las correspondientes disculpas. (El empleado lo
mira eh involuntariamente suelta una pequeña risa).
SIMON: ¿De qué te reis? Te estoy hablando enserio, ¿Dónde
está la oficina donde te piden disculpas cuando cometen un
error?

INFRACTORA: ¡Estamos todos en la misma señor, apúrese por


favor! EMPEADO PLAYON: Mire el acta del oficial dice que su
auto estaba en infracción, nosotros no necesitamos más que
eso. Entonces le vuelvo a reiterar, si quiere sacar ahora su
vehículo de acá tiene que abonar, caso contrario le pido que
se retire y me deje seguir atendiendo.

SIMÓN: ¿Y si no tengo plata?

EMPLEADO PLAYON: Puede cancelarlo con tarjeta de crédito o


débito o bien venir otro día, lo que si se le va a cobrar el
estacionamiento. Simón saca su billetera rendido para abonar
el acarreo.

SIMÓN: Sabes que sos un delincuente no.

EMPLEADO PLAYON: Estoy haciendo mi trabajo señor.

SIMÓN: ¡No! Los que trabajan para delincuentes son, otros


delincuentes.

EMPLEADO PLAYON: Bueno, es una manera de verlo. SIMÓN: Un


miserable servidor de este sistema corrupto.

EMPLEADO PLAYON: Gracias que tenga un buen día. Simón se


retira de la playa de infractores, se dirige hacia su casa
rápidamente ya que está llegando tarde al cumpleaños de su
hija.

VICTORIA: ¿No te podías tomar un taxi eh ir a buscar el auto


después?

SIMÓN: ¡No! No.

VICTORIA: Te perdiste el cumpleaños de tu hija Simón.

SIMÓN: Pero que fácil que es todo para vos, yo estoy harto de
que me roben la plata, el cordón estaba absolutamente
despintado, ¿Vos tenés idea de la indignación que a mí me
produce eso?
VICTORIA: Vos tenés idea de la indignación que a mí me
produce que siempre encuentres una excusa para todo, que
culpes a la sociedad por todo. Hoy fue la grúa, ayer había
sido el tránsito, mañana va a ser la manifestación, la verdad
es que vos perfectamente podrías haber salido con tiempo, me
podrías haber ayudado a organizar las cosas y hubieses estado
para recibir a los amiguitos de tu hija, pero no, todo es
prioritario menos tu familia.

SIMÓN: No.

VICTORIA: Y yo como una pelotuda pienso que algún día vas a


cambiar ¿y sabes qué? La sociedad no va a cambiar, vos no vas
a cambiar, y yo estoy cansada.

SIMÓN: ¿Qué significa eso?

VICTORIA: El ingeniero sos vos, calculalo.

(En la oficina de tránsito. Es el turno de Simón)

SIMÓN: Que tal, buen día.

EMPLEADO: ¡Buen día!

SIMÓN: Eh mira, me hicieron esta multa, yo ya pague el


acarreo, pero hay un error porque el cordón estaba
despintado.

EMPLEADO: ¿Me permite?

SIMÓN: Si EMPLEADO: Son $ 560

SIMÓN: Mira, yo estoy un poco nervioso, asique te pido que


por favor me escuches.

EMPLEADO: Si

SIMÓN: El cordón estaba sin pintar, yo creo que deberían


mandar a alguien a la dirección donde me levantaron el auto
para verificar que tengo razón, después en nombre del
gobierno de la cuidad pedirme disculpas porque tengo razón,
devolverme la pata del acarreo e indemnizarme por todo este
tiempo que me están haciendo perder.
EMPLEADO: El acta de infracción dice que el auto estaba mal
estacionado y eso se considera prueba suficiente, la multa
son $ 560 que usted tiene que abonar si o si, si no paga
empiezan a correr los intereses.

SIMÓN: ¿Vos me estas escuchando? Prueba suficiente las


pelotas, te estoy diciendo que el cordón estaba sin pintar.

EMPLEADO: Primero le voy a pedir que no me insulte, porque yo


estoy trabajando, segundo usted debería informarse sobre cómo
funciona la ley, que desconozca las normas no significa que
esté exento de pagar las consecuencias por incumplirlas,
usted mañana mata a alguien y dice “No, no pero yo no sabía
que no se podía matar” va preso, está bien por ahí nadie se
lo explico, pero va preso igual, ¿Se entiende?

SIMÓN: Este ejemplo que das es bastante desacertado, porque


con ese criterio yo tendría que saber de memoria cuales son
las calles en la que se puede estacionar y en las que no se
puede estacionar, independientemente de que estén bien o mal
señalizadas

EMPLEADO: Exacto, la información está disponible en la página


del departamento de tránsito.

SIMÓN: Bien, necesito hablar con algún superior tuyo por


favor.

EMPLEADO: No, no hay ningún superior para llamar.

SIMON: ¿A no? Quien sos el presidente de la república


pelotudo.

EMPLEADO: Caballero hay mucha gente, si no quiere pagar por


favor déjeme seguir atendiendo.

SIMÓN: ¿Qué se siente ser un chorro? Eh, decime, contame.

EMPLEADO: ¡Seguridad cabina siete!

SIMÓN: Llamas a seguridad, que bien, yo estoy haciendo un


reclamo me estoy defendiendo como un ciudadano y soy un
delincuente, llamas a seguridad, ¿Querés llamar a seguridad?
(Simón agarra un matafuego que estaba colgado en la pared y
empieza a golpear el vidrio de la cabina)
SIMÓN: ¡Llama a seguridad! Llamala. Llama a seguridad ahora.

FIN

EL MÁS FUERTE
CUADRO:

Se sitúa en un taller clandestino de costura. Intervienen:


DANIEL, el dueño del taller – MARIA empleada.

SITUACION:

MARIA se encuentra cosiendo en una máquina. Tose. Se la


observa preocupada. Detiene la máquina, mira hacia atrás,
mira a su alrededor, piensa por un instante. Tose. Escucha
que DANIEL se acerca y vuelve a coser.

Entra DANIEL hablando por teléfono. En su otra mano sostiene


un destornillador con el que se rasca la cabeza por momentos.
MARIA deja detiene la máquina, se levanta y se dirige a
buscar unas telas.

DANIEL – Si MAURICIO, no se preocupe, estamos trabajando el


doble de tiempo para cumplir con la producción… (Observa a
María pisar un cable, deja el destornillador sobre la mesa y
con la misma mano cubre el micrófono del teléfono) … ¡Cuidado
pelotuda! ¡No pises el cable que es de alta tensión!...
(Vuelve a la llamada) … No, por favor no hace falta que hable
con la señora JULIANA. En cuanto tenga lista la última
partida se la envío… ¿Hola?... ¡Hola!... ¡Este hijo de puta
me corto!... ¡Podes apurarte que necesito entregar el
pedido!... (Tose)… ¡Vagos de mierda!, uno les da trabajo, la
posibilidad de progresar y quieren todo fácil. (María Tose).
MARIA – Señor, disculpe, pero es que no me siento bien, me
duele mucho el pecho, no puedo respirar bien… Con esto del
virus, no sé qué pensar… Debería ver a un médico.

DANIEL – ¡Un médico!... (Tose)… ¡Vos no estas acá para


pensar!... ¡Vos estas acá para trabajar!, ¡así que apúrate
querés!

MARIA – Señor Daniel, podría al menos, pagarme lo del mes


pasado para comprarme algún remedio, por favor le pido.

DANIEL - ¿Cuántas veces te lo tengo que decir?... Hasta que


no se entregue esta partida, la señora Juliana, no nos va a
pagar… Además, vos no podés salir, ¡ya te lo dije mil
veces!... Sos indocumentada, no podés andar en la calle sin
documento… ¿Vos sabes lo que eso significa?... ¡Te enganchan
en la calle sin documento y te llevan presa!

MARIA – Pero no es culpa mía, usted me prometió que me iba a


hacer el documento, que me iba a dar un lugar para vivir
(Tose)… ¡Mire cómo está el cuarto que me dio!... Entra frio
por todas partes, ¡las paredes se están viniendo abajo por la
humedad que hay!... ¡Cuando llueve, llueve más adentro que
afuera!... ¡Así no se puede vivir señor!

DANIEL - ¿Vivir?... ¿Y vos que mierda sabes de vivir?, ¡si


llegaste muerto de hambre acá!... ¿Te das cuenta?... Por eso
a ustedes no los quieren… ¡Porque son mal agradecidos… Vagos…
Sucios!... ¡Acá te di un lugar, te doy de comer, te doy
trabajo!... ¡Gracias a mí tus hijos comen allá! ¡Gracias a
mí!, que le mando plata al borracho y vago ese de tu marido,
que de seguro te mete los cuernos y se gasta la plata que le
mando con otra… ¡Infeliz!... Pero claro, ¿Qué se puede
esperar de una negrita cabeza como vos? ... (Voltea y se pone
a guardar telas en una bolsa).

María nerviosa, piensa un instante. Toma el destornillador.


Piensa. Lo deja y toma una trincheta de la mesa de trabajo,
se levanta, corta el cable de alta tensión y lo levanta,
parándose detrás de Daniel quien voltea a verlo.

DANIEL - ¿Qué haces?... ¡Solta eso querés!... ¡Pará!...


Hablemos… ¿Querés ir preso? (Se va acercando a María) …
¡Pensa!, ¡Tenes dos hijos que criar! (María agacha la cabeza,
queda un instante pensando. En eso Daniel le saca el cable de
la mano y lo sostiene).

DANIEL - ¡Negra de mierda!... ¡Debería aplastarte como a una


cucaracha!

María se ciega, toma el destornillador de la mesa y se lo


clava en el cuello, a la altura de la garganta.

Daniel se cubre la herida reciente con la mano libre y


comienza a desplomarse. Al caer al piso, Daniel le extiende
la mano que presionaba su cuello a María, como pidiendo
auxilio. María, con miedo, se acerca.

Daniel la toma y la estira contra su cuerpo. María grita.


Daniel coloca el cable de alta tensión sobre la espalda de
María.

FIN
HASTA QUE LA MUERTE NOS SEPARE
ROMINA: Ariel ¿Cómo se llama esa chica de pelo largo?

ARIEL: ¿Cuál?

ROMINA: Esa, tu compañera de trabajo.

ARIEL: Lourdes ¿Por?

ROMINA: ¿Y de donde conoce Lourdes a tu profesor de guitarra?

ARIEL: ¿A mi profesor de guitarra?

ROMINA: Si, cuando hace un par de meses te pregunte de quién


era ese número que corto cuando yo atendí tu teléfono, me
dijiste que era de tu profesor de guitarra, como me pareció
extraño lo agendé y es raro que ahora llamo y atiende esta
chica Lourdes ¿O no?

ARIEL: Mi amor no tengo idea de lo que me está hablando.

ROMINA: No sabes de lo que te estoy hablando.

ARIEL: No.

ROMINA: De eso Ariel que con todas las empresas de celulares


que hay y todas las promociones que tiene es rarísimo que
esta chica justo le haya comprado la línea a tu profesor de
guitarra, sobre todo si vos nunca nos presentaste, ¿No es una
casualidad increíble?
ARIEL: Mmm…

ROMINA: ¿Y?

ARIEL: ¿Qué?

ROMINA: Ariel dame una respuesta porque si no le voy a


preguntar a ella.

ARIEL: Romi te pido por favor…

ROMINA: Romi las pelotas, contestame lo que te pregunto.


Ariel, ¿Toda la mesa 27 sabe que te cogiste a esa mina?
Invitaste a todos esos pelotudos a nuestro casamiento ¿Qué
hiciste?

(Romina y Ariel bailan el vals)

ROMINA: ¿Estuviste con esa mina? Por favor te lo pido,


necesito saber.

ARIEL: Si mi amor, pero para mí no significo absolutamente


nada te lo juro. Romi te pudo por favor que no hagamos una
escena delante de todo el mundo, fue una estupidez te lo
juro.

ROMINA: ¡Soltame!

ARIEL: ¡Te pido perdón, discúlpame!

ROMINA: ¡Sacame la mano de encima!

ARIEL: Cometí un error.

ROMINA: ¡Quiero estar sola! (Romina sale del salón llorando


desconsoladamente, Ariel la sigue por atrás pero la pierde de
vista)

Romina se dirige al techo.

MOZO: ¿Todo bien?, ¿Querés que llama a alguien…? ¿Pero estas


bien? Evidentemente bien no estas

ROMINA: ¡No!

MOZO: Tranquilízate, ¿Qué te paso?


ROMINA: ¡Me acabo de enterar que mi marido me engaño con otra
invitada!

MOZO: Uy que mal.

ROMINA: ¡Y ahora no sé qué hacer, con toda la gente ahí!

MOZO: Tranquilizate estas cosas pasan, se superan con el


tiempo, toma (le da un pañuelo), si lo querés a la larga lo
vas a poder perdonar, si es tu hombre

ROMINA: ¡No! Nose si lo quiero, nose si es mi hombre, es un


pelotudo.

MOZO: Ah bueno, pero entonces aprovecha y pasa a otra cosa, y


la gente bueno tampoco vayas a creer que sos la primera
engañada del salón, además si vas a tener tan en cuenta la
opinión de los otros sonaste pichona. ¿Nos tranquilizamos?
Mira, si yo fuera vos bajo acelero todo para que la fiesta
termine cuanto antes y después a la noche, tranquila en tu
casa te separas. Lo que te paso es terrible no te lo voy a
negar, pero hay que salir adelante. ¿Mejor?

(En ese momento Romina abraza al mozo y automáticamente


después lo besa. Al poco tiempo llega Ariel al techo y los
encuentra a los dos teniendo sexo)

ARIEL: ¿Romina?

ROMINA: Vos te vas ya mismo de acá no decís ni mu, no sabes


con quien te metiste. Te voy a sacar hasta el último centavo,
hasta la última propiedad que tu viejo puso a tu nombre para
evadir al fisco va a ser mía, estamos casados ¡Legalmente
casados! Voy a dedicar mis días a acostarme con cualquier
persona que me tire un mínimo de onda, con todo aquel que me
dé un gramito de amor, y cuando vos te quieras separar, voy a
tomar clases de actuación para sentarme frente al juez con
cara de perrito mojado y decirle que la estoy luchando que la
estoy luchando así nuestro matrimonio se prolonga
indefinidamente. Voy a divulgar por facebook todos tus
secretos, te voy a meter el dedo en la llaga y revolverlo
hasta que llores de dolor, vas a padecer tantas humillaciones
que tu única salida va a ser subirte a un banquito y tirarte
por el balcón y ahí sí, cuando la muerte nos separe, ¡Cuando
tu muerte nos separe! Me voy a quedar con todo.

(Inmediatamente después de estas palabras Ariel se tira al


piso y empieza a vomitar, al segundo Romina vuelve a la
fiesta)

(Romina entra al salón)

MEJOR AMIGA DE ROMINA: Boluda, ¿Dónde estabas, todo bien?

(Romina se pone a bailar con los invitados. Todos siguen


bailando y en un momento Romina agarra a Lourdes que se
estaba a punto de ir)

ROMINA: Como ¿Ya se están yendo? Por favor no quédense.

LOURDES: No es que…

ROMINA: Enserio está todo hablado, no hay problema veni Lour.

(Romina la lleva al centro de la pista, la agarra de las


manos y ambas empiezan a dar vueltas)

LOURDES: ¡Para por favor me estoy mareando!

ROMINA: Relajate, está buenísimo

LOURDES: ¡Basta enserio!

ROMINA: ¿Vos agarraste la época del Ital Park o sos mas


chica? Viste que lo cerraron porque un carrito salió volando.

(En ese momento Lourdes se estrella contra un espejo, los


invitados van a ayudarlas y llaman al médico)

ROMINA: ¿Pero tiene una buena obra social?

ROMINA: Che y si aprovechamos este hueco para hacer la torta, eh.


Vengan chicas dale no me dejen así pagando.

MEJOR AMIGA DE ROMINA: Vamos chicas dale, ¡Dale chicas!

ROMINA: Tuve un momento de mierda pero bueno ahora me quiero


relajar y disfrutar de mi casamiento, no creo que me case otra
vez. ¿Va?

(Entra Ariel)
ARIEL: ¡Suspendemos!, suspendemos.

ROMINA: Ay pero porque, que mala onda que tenés. ¿Además


todavía falta el pastron caliente no? Saben lo que costó,
decí la verdad Ariel estuvimos toda una semana discutiendo
que si el pastron caliente sí, que si el pastron caliente no,
definimos que si lo pagamos y ahora me lo quiero comer ¿Puede
ser señor?

ARIEL: ¡Romina! Basta. Dejemos que la gente se vaya yendo, no


es una pavada lo que estás haciendo, para que te des una idea
el abogado de mi familia recomendó que te fuera a hacer una
denuncia por amenazas.

ROMINA: Ay, no me digas que todo esto es un plan de tu mamá.

ARIEL: Romina enserio cortala.

ROMINA: Tu mamá es una auténtica weding planet.

ARIEL: ¡BASTA! ¡Que te hice! No te hice nada comparado con lo


que me estás haciendo vos.

ROMINA: Mamadera, fílmame esto Néstor, ¡Néstor! Fílmame esto


por favor. (al otro camarógrafo) Vos también vení, filma por
favor. Si me vuelvo a casar, si me consigo un tipo que valga
la pena, voy a poner esto como blooper e la pantalla gigante,
¡No! Esto me lo voy a ver hasta con mis hijos, en vez de dora
la exploradora y todas esa pelotudeces les voy a poner este
video, ¡Ya se! Lo voy a poner en esos portarretratos
electrónicos que se quedan haciendo un lup todo el día…

(Ambos se tranquilizan. Se miran. Romina se acerca a Ariel y


terminan juntos).

FIN
PASTERNAK
(Isabel toma su valija de mano para guardarla en el porta
equipaje superior).

SALGADO: ¡Te ayudo!

ISABEL: Bueno.

SALGADO: ¿Trabajo o placer?

ISABEL: Las dos cosas espero.

SALGADO: ¿Qué haces?

ISABEL: Soy modelo.

SALGADO: Perdón debí haberlo imaginado.

ISABEL: Gracias.

SALGADO: ¿Desfile o publicidad?

ISABEL: ¡Desfile!... desfile, ¿Usted, qué hace?

SALGADO: ¡Me mataste!

ISABEL: ¿Por qué?

SALGADO: Ese usted me hundió hasta el quinto círculo del


infierno, tengo que hacerme un ultra tejido urgente. Soy
crítico musical, suena terrible ya lo sé.
ISABEL: ¡No! ¿Rock?

SALGADO: Ahora la querés arreglar, clásica.

ISABEL: Mi primer novio era músico clásico, en realidad


estudiaba música clásica.

SALGADO: ¿Cómo se llama?

ISABEL: No, no es conocido, nada presento unos trabajos


cuando estábamos juntos en aquella época pero, que yo sepa
nunca publico… o edito ¿Cómo se dice?

SALGADO: Vos elegí el término que quieras, y yo lo instalo en


la comunidad artística

ISABEL: Pasternak, Gabriel Pasternak.

SALGADO: Pas-ter-nak, de haberlo sabido te decía que era


sepulturero y no crítico. Presento su tesis en el concurso
del conservatorio cuando yo era presidente del jurado, lo
defenestre.

ISABEL: Si yo estaba con él en ese momento, fue tremendo lo


que le hicieron, estuvo una semana en cama después de leer la
reseña

SALGADO: Y a veces es así, tengo que dañar la autoestima de


un pobre infeliz para proteger los oídos de toda la
población. Eventualmente puedo equivocarme pero en este caso…
este era un engendro impresentable, ¿lo seguís viendo?

ISABEL: ¡No, no! No terminamos muy bien que digamos, igual le


tengo cariño, no era una mala persona.

SALGADO: Mala no sé pero para presentar algo así en un


concurso, algún problema tenes que tener. Gabriel Pasternak
como olvidarlo, nos reímos durante meses.

PROFESORA LEGUIZAMON: Discúlpenme que los interrumpa pero


estaba escuchando la conversación, no puedo creer tanta
casualidad, yo fui profesora de Gabriel Pasternak en la
escuela número siete del palomar

ISABEL: ¡No!
PROFESORA LEGUIZAMON: Si, tuve la difícil tarea de informarle
que repetía el año, doy fe de que ese chico tenía problemas,
en treinta años de docencia nunca vi nada igual, alaridos
pegaba, lloraba como una criatura recién nacida

IGNACIO FONTANA: ¿Profesora Leguizamón?

PROFESORA LEGUIZAMON: Si.

IGNACIO FONTANA: Soy Ignacio Fontana ¿se acuerda?

PROFESORA LEGUIZAMON: ¡Ignacio Fontana! Pero esto es


increíble, acá hay una conexión cósmica, justamente
Pasternak, ¿no era compañero tuyo?

IGNACIO FONTANA: Si, ¿ustedes son amigos?

SALGADO: SI íntimos.

IGNACIO FONTANA: Pobre flaco como le dábamos.

GERENTE DE CASA TIA: Esto es más que increíble, yo fui


gerente de Casa Tía donde este enfermito del que ustedes
hablan trabajo un tiempo, como siempre tenía algún problema
con los clientes se lo tuvo que echar, cuando le digo…

SALGADO: ¡Perdón! ¿Alguien más conoce a Gabriel Pasternak


aquí? Muchos pasajeros en el avión levantan la mano afirmando
que todos conocen a Gabriel Pasternak.

SALGADO: ¿Porque están en este avión? ¿Ustedes sacaron los


pasajes?

GERENTE DE CASA TIA: ¡No! Trabajo para una inmobiliaria y me


lo mandaron para que fuera a ver unos campos que están en
oferta.

IGNACIO FONTANA: A mí me citaron a una reunión con el


ministro de turismo, lo sacaron ellos

PROFESORA LEGUIZAMON: Yo me lo gané en un sorteo no podía


cambiar la fecha, o viajaba hoy o nada.

AZAFATA: Gabriel Pasternak es el comisario de a bordo del


vuelo, hicimos el training juntos éramos amigo, después me
invito a salir y cuando le dije que no se empezó a poner… No,
no importa eso, a penas despegamos fue a llevar cafés a la
cabina, la puerta está cerrada con llave los pilotos no
contestan ¡Estoy desesperada no se qué hacer! Se escucha por
los altavoces la voz de Gabriel balbuceando algo pero nadie
entiende muy bien qué.

ISABEL: Yo lo engañe con su único amigo, ¡Con él! Se siente


una fuerte turbulencia, y después de unos segundos el avión
se empieza a caer en picada.

PSIQUIATRA: ¡Gabriel! ¿Gabriel estas ahí? ¡Soy Victoria!


Victoria Yense, ¡Habla conmigo por favor!

IGNACIO FONTANA: ¿Usted quién es?

PSIQUIATRA: Fui su psiquiatra durante años, en algún momento


aumente demasiado la sesión, se ofendió y no vino más.
¡Gabriel escúchame, vos no tenés la culpa de nada, vos sos la
victima de esta situación te lo digo lisa y llanamente, los
que te arruinaron la vida fueron tus padres, desde que
naciste te exigen demasiado depositaron en vos todas sus
frustraciones, ellos son los responsables de tu sufrimiento,
sacanos de acá, Gabriel no tenemos nada que ver!

(Todos los pasajeros gritan desesperadamente, el avión cada


vez cada vez se mese más y más hasta estrellarse contra la
casa de los padres de Gabriel)

FIN

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