7.

LA LUCHA BABILONICA Y EGIPCIA

Una reconstrucción de los movimientos históricos de este período de tiempo se hace

principalmente sobre la base de las crónicas Babilónicas y la información en los dos
libros del Viejo Testamento, Reyes y Jeremías.
La correlación entre estas tres fuentes es fantástica y exitante. Iluminan la historia de
Babilonia, por un lado y la historia de Judea, por otro. La importancia de los eventos
que se tuvieron lugar en 610 y 609 Antes de la Era Común, que llevaron a la
desaparición de Asiria, fue claro tanto para Egipto como para los Babilónicos.

Esto se evidencia en los esfuerzos en los que invirtieron ambas parte para ganar el
control de Harran. Existieron dos campañas consecutivas por Nabopolasar con el
objetivo de eliminar Asiria y establecer su reinado sobre Harran y sus alrededores. Al
mismo tiempo, se exigió hubieron dos campañas consecutivas por los egipcios,
encabezados por Necao Segundo, con el objetivo de ofrecer ayuda a Siria y prevenir
que los Babilónicos tomaran la ciudad.
También tenemos información acerca de los esfuerzos de Necao por establecer el
dominio egipcio sobre Asiria y la tierra de Israel. Riblah se convirtió en un gran centro
egipcio. Y desde allí, Necao probablemente realizó arreglos para que los egipcios
reinaran en el centro y norte de Siria.

Uno debe asumir que al mismo tiempo, también hizo arreglos similares en otras áreas
bajo su control. Esto ayuda a comprender los arreglos realizados en Judea, luego del
asesinato del rey Josías en Megiddo. Cuando los egipcios fueron en ayuda de Siria,
tan solo unas semanas antes de la batalla en Harran, probablemente a finales de
mayo o principios de Junio 609 AEC.
Luego de finalizar la batalla, como parte de su esfuerzo por establecer su reinado al
oeste del Eúfrates, Necao deportó a Joacaz, hijo de Josías, quien, de acuerdo al
segundo libro de Reyes, capítulo 23, versículo 34, había sido designado en Judea sin
la aprobación de Necao. De acuerdo a los versículos 35 y 36 del mismo capítulo,
Necao luego designó a Joaquim, quien era el hermano mayor de Joacaz, y recolectó
un amplio tributo de Judea.
Trataremos con estos eventos en Judea en la siguiente parte de este curso.
En forma paralela a los estadíos durante los cuales Egipto se estableció a si mismo en
Siria y en la tierra de Israel, los Babilónicos establecieron su control a lo largo de el
límite sur del reino de Urartu, en una serie de tres campañas.
En septiembre 609 AEC, en el otoño del 70mo. año de su reinado, inmediatamente luego
del retiro de las fuerzas sirio-egipcias de Harran, Nabopolasar continuó en dirección
norte hacia el límite de Urartu. Aparentemente su objetivo era establecer su reinado y
evitar que los habitantes de las montañas invadieran las áreas cercanas al Eúfrates, las
cuales habían sido antes gobernadas por Asiria. Una campaña adicional en la misma
área fue llevada a cabo el año siguiente. Desde agosto o septiembre y hasta Diciembre
608 AEC, Nabopolasar partió a la cabeza de una armada a lo largo de la orilla del Tigris
y estableció su reinado sobre las secciones más orientales de las regiones montañosas.
La tercera campaña de estas series tuvo lugar entre los meses de Simano, Sivan, en
Hebreo, y Ululu, Elul en Hebreo, en el 19no. año del rey, desde mayo hasta agosto
607 AC. El rey y su armada partieron nuevamente junto con su heredero,
Nabucodonosor, a la cabeza de su propia armada. Tengo que admitir que me gusta
mucho el nombre Nabucodonosor. Tenía tres elementos: Nabu, Nabu es un dios, el
hijo de Marduk, el dios principal de Babilonia. Kudduri, es mi primogénito en Acadio,
Uzzur, es el que mantiene, el que guarda. Entonces, el significado de este nombre es
por favor dios, protege a mi primogénito.

Nabopolasar regresó a Babilonia en medio de la campaña y dejó el peso del Baal a su

hijo, Era la primera vez que el futuro rey tenía que manejarse solo con la armada
Babilónica en áreas lejanas y complicadas, como preparación y quizás también como
un tipo de prueba para el período en el que él regiría el imperio. El retorno de
Nabucodonosor a Babilonia en el mes de Ululu, le permitió a Nabopalasar hacer
acopio de la fuerza de sus tropas en el mes de Tasritu, Tishrei en hebreo, alrededor
de octubre 607 AEC, y de partir por el medio del Eúfrates como parte del comienzo de
la lucha directa en contra de Egipto.
Es interesante mencionar que en el 19no año del reinado de Nabopolasar
hubo un año de intercalación y hubieron dos meses de Ululu. Entonces, entre el
regreso de Nabucodonosor en el mes de Ululu y la partida de Nabopolasar en Tasritu,
al menos un mes completo había pasado.

De acuerdo a la descripción en las crónicas babilónicas, la armada babilónica cruzó el

Eúfrates y sitió la ciudad de Kimuhu. El sitio se mantuvo hasta los meses Kislimu,
Kislev, alrededor de diciembre 607 AEC,
cuando la ciudad fue conquistada y una guarnición fue dejada allí. El objetivo
babilónico era aparentemente establecer un punto de apoyo al oeste del Eúfrates,
como el comienzo de una futura actividad más allá del río, y para amenazar a la
guarnición egipcia, que estaba asentada en Carchemish. La amenaza babilónica era
clara, y la reacción egipcia no tardó en llegar. Durante la primavera o principios del
verano de 606 AEC, una fuerza egipcia partió hacia Kimuhu y sitió esta ciudad por
cuatro meses. De acuerdo a las crónicas babilónicas, la ciudad cayó bajo los egipcios,
y la guarnición babilónica que estaba allí fue derrotada.
Nabopolasar no acudió en auxilio de su armada, quizás por el gran peligro que
involucraba tanto el cruzar el Eúfrates con una gran armada, como el luchar con los
egipcios, quienes estaban localizados en la orilla oeste del río. Fue tan sólo en el mes
de Tasritu, Tishrei, septiembre u octubre 606 AEC, que los babilónicos partieron
nuevamente hacia el medio del Eúfrates y acamparon en la ciudad de Quramati, que
se encuentra al sur de Kimuhu y al este del Eúfrates.
Desde allí, las fuerzas babilónicas partieron a conquistar las ciudades de Sunadiri,
Elammu y Dahammu, que están al oeste del Eúfrates, aparentemente con un plan de
crear un puente alternativo para cruzar el río.
La conquista de estas ciudades terminó en el mes de Sabatu, Shabbat, en enero,
febrero 605 AEC, cuando Nabopolasar regresó a Babilonia. Pero luego de un corto
período, entre la mediados de febrero y abril, el ejército egipcio dejó Carchemish,
cruzó el río y conquistó la ciudad de Quramati.

La armada babilónica fue forzada a retroceder, y los egipcios establecieron un puesto

fronterizo al este del Eúfrates, que podía servir como una base de salida para una
futura ofensiva en contra de los territorios controladios por los Babilónicos en esa
región.
El evento del verano de 605 AEC decidió el resultado de la batalla.
La amenaza egipcia forzó a los babilónicos a concentrar todo su poder a la decisiva
lucha, que ocurrió a manos de Nabucodonosor. quien partió a la cabeza de la armada
babilónica.
Su objetivo era Carchemish, el principal fuerte egipcio en las orillas del Eúfrates.
Nabucodonosor y su armada cruzaron el Eúfrates y se movieron hacia la orilla oeste
del rio, en una ubicación desconocida, aparentemente, cercana a Carchemish. En la
batalla en contra de la armada egipcia, ganaron una victoria decisiva. De acuerdo a
las crónicas babilónicas, y cito, en el campo abierto ellos lucharon unos contra otros, y
la armada egipcia se retiro frente a Nabucodonosor, el consiguió su derrota y los
venció.
No está claro si Necao II mismo estaba en Carchemish en ese momento. En las
crónicas babilónicas no hay mención al respecto. Adicionalmente, de acuerdo a la
profecía en Jeremías, capítulo 46, versículo dos, no está muy claro, y estoy leyendo

Carchemish fue capturada, y los egipcios remanentes se retiraron a la provincia de

Hamat, donde fueron capturados por los babilónicos, quienes les dieron a los egipcios
un golpe mortal. De acuerdo a las crónicas babilónicas, y aquí estoy citando
nuevamente, en el distrito de Hamath, las tropas babilónicas capturaron y derrotaron a
éstos, de forma tal que ni siquiera un hombre escapara a su país.
En un corto período de tiempo, la suerte había sido echada. A partir de entonces, era
claro que los babilónicos estaban destinados a gobernar a través de Siria y la tierra de
Israel.
Los egipcios tuvieron que darse prisa, para defender los límites de su propio reino

La muerte del rey Nabopolasar en el octavo mes de Abu, Av, de ese año, 15 o 16 de
agosto de 605 AEC, luego de más de 20 años de reinado, simboliza el final de una era
de establecimiento del imperio babilónico. El ascenso al poder de Nabucodonosor, en
el primer mes de Ululu, septiembre 607, 605 ; y sus primeros dos años de reinado,
fueron marcados por la toma de poder de los babilónicos sobre toda el área de
Ghatulent. La lucha de titanes sobre el control de las tierras del imperio asirio, había
sido decidida. Babilonia obtuvo una resonante victoria, y Egipto estaba retrocediendo
sobre todas sus propiedades en Asia. De todas formas, la lucha no terminó y así como
tanto Babilonia como Egipto lo entendieron, los reinos en la región entre Judea
también lo entendieron. Este fue el comienzo de un período de gran incertidumbre,
que afectó el destino de la región y dio forma a los eventos que continuaron
sucediendo allí.

Oded Lipschits. Profesor de historia judía y el director del Instituto de

Arqueología Sonia y Marco Nadler en la Universidad de Tel Aviv