tyroid hpa

suplemento alimenticio
DESCRIPCIÓN:
Suplemento alimenticio aporta minerales y vitaminas

Auxiliar en casos de:

• Tastornos tiroideos y
sus síntomas asociados:
Bocio, letargo, aumento
o disminución de
peso, frío, depresión
y debilitamiento del
cabello.

Ingredientes: Cont. Neto: 60 Cápsulas de 450 mg

L-Tirosina, Cobre, Yodo, Selenio, Zinc, Raíz de Código: 85267
Ashwagandha (Withania somnifera), Alga Espirulina
(Arthrospira platensis), Raíz de Cúrcuma (Curcuma
longa), Multiminerales, Grenetina.

Modo de empleo:
Tomar 2 cápsulas al día.

Precauciones:
Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia y niños
deberán consultar a su médico antes de consumir este
producto. No se ingiera si es intolerante o sensible a los
ingredientes de la fórmula.
Este producto no es un medicamento
y no sustituye a ninguno.
El consumo de este producto es responsabilidad de
quien lo recomienda y de quien lo usa.

No contiene cafeína ni edulcorantes.

Empresarios Cardí S.A. de C.V.

Calz. Federalismo Sur 325 C.P. 44100
Guadalajara, Jal. México.
tyroid hpa
l-tirosina:
Desempeña un papel muy importante en el correcto
funcionamiento de la glándula tiroides, en la formación
de la hormona T4 o también conocida como Tixina.
Esta interactúa con el Yodo, un mineral, por lo que la
administración de ambos como suplemento puede ser
beneficiosa en casos de tiroides hipoactivas. L-Tirosina se
ha usado en la medicina alternativa como ayuda para el
funcionamiento mental, la memoria, depresión, trastorno
de déficit de atención (TDA o TDAH; ADD o ADHD por sus
siglas en inglés.
yodo:
El yodo es un mineral presente en muchos alimentos, el
cual es necesario para que la glándula tiroides produzca
hormonas toroideas.
vitamina c:
La glándula tiroides necesita esta vitamina para
mantenerse sana. Una deficiencia prolongada hace que
la glándula tiroidea secrete demasiada hormona. Las
personas con hipertiroidismo necesitan dosis extras de
vitamina C adicional, ya que ésta es drenada de los tejidos
del cuerpo.
vitamina e:
Una vez más, la falta de esta vitamina alienta a la glándula
tiroides a segregar demasiada hormona, así como muy
poca TSH por la glándula pituitaria. Las personas con una
tiroides hiperactiva suelen necesitar una mayor ingesta
de la vitamina E.
hierro:
Existe una estrecha relación entre la ferritina y las
enfermedades autoinmunes. Tener bajos niveles de
hierro puede afectar a tu sistema inmunológico, y como
consecuencia, a tu glándula tiroides. Sin embargo,
los síntomas pueden depender de la gravedad de tu
deficiencia de hierro.
calcio:
Mineral que el cuerpo necesita para mantener huesos y
dientes fuertes. Indispensable para el envío y recepción de
señales nerviosas, el mantenimiento de un ritmo cardiaco
normal, entre otros beneficios.
magnesio:
El magnesio es necesario para la conversión de T4 en T3,
por lo que este mineral debe ser suplementado. Algunas
personas pueden perder magnesio a gran velocidad al
orinar. También parece que una dieta alta en alimentos
refinados y cafeína fomentará la pérdida de magnesio.
ashwagandha:
Podría aumentar la calidad de hormona tiroidea que
produce el cuerpo.
Empresarios Cardí S.A. de C.V.
Calz. Federalismo Sur 325 C.P. 44100
Guadalajara, Jal. México.
selenio:
La suplementación de selenio en pequeñas dosis diarias
mejoraron la función tiroidea a los 6 meses en personas
con enfermedad de Graves, selenio es un componente
crucial de la enzima que convierte la T4 en T3 en el cuerpo.
Sin selenio, la T3 no puede ser producida en las cantidades
correctas, y los órganos funcionarán como si tu tiroides
fuera poco activa, aunque los niveles de los análisis de TSH
de sangre sean normales.
zinc:
El zinc es otro de los nutrientes que utiliza la tiroides
para la producción de la hormona tiroidea, regulando la
actividad de las enzimas que participan en la activación
y desactivación de las hormonas tiroideas, la hormona
liberadora de tirotropina (TRH) y la síntesis de la hormona
estimulante de la tiroides (TSH). Las investigaciones
han demostrado que tanto el hipotiroidismo como el
hipertiroidismo dan lugar a una deficiencia de zinc.
También juega un papel en el funcionamiento del sistema
inmunológico. Se han encontrado bajos niveles de zinc en
personas con enfermedades autoinmunes.
cúrcuma:
La curcumina puede proteger la tiroides contra el daño
oxidativo. Además, tomarla junto con otros compuestos
antiinflamatorios puede ayudar a reducir el tamaño de
los nódulos tiroideos, que son comunes en la enfermedad
de Hashimoto. La suplementación con cúrcuma ha
demostrado en muchos estudios que puede mejorar la
función del endotelio vascular, reducir la presión arterial y
reducir la tensión en el corazón derivada de los trastornos
de la tiroides. El hipertiroidismo y el hipotiroidismo se
caracterizan por un estrés oxidativo excesivo.
alga espirulina:
La espirulina ayuda a combatir la debilidad física y la
disfunción tiroidea. Fortalece y estimula nuestro sistema
inmunológico. Es detoxificante y revitalizante, regula el
metabolismo y también es conocida por su contenido en
antioxidantes que protegen la tiroides del estrés oxidativo,
aporta yodo al consumirse.