MARÍN RIVEROS, José; “Islam, guerra y Jihad” en Revista archivum, año III, Nª 4.

a) Orígenes y fundamentos del Islam.

Siglo VII en Arabia, el Profeta Mahoma comienza a recibir revelaciones que constituyen la base
de una nueva religión y toda una civilización. Rescatando elementos de las tradiciones
preislámicas pero también aportando aspectos novedosos, dio forma a una nueva creencia.

El Corán es la primera y más auténtica fuente del Islam. Es la palabra divina.

Fue revelado en árabe y eleva a esta lengua a rango de sagrada y un pilar de la unidad de la
religión islámica. Se divide en suras y aleyas que fueron reveladas a Mahoma entre 612 y 632.
Las suras más religiosas se relacionan con a época de la predicación en La Meca y el resto
corresponde al período de Medina y sus disposiciones reflejan la experiencia de la primera
comunidad islámica.

Transmitido primero en forma oral, en lenguaje poético y rítmico; después de la batalla de

Yamama (633), donde muchos de los “memoriones” murieron, se vio la necesidad de poner por
escrito al Corán. Esto fue hecho por los califas de Umar (634- 644) y Utmán (644- 656). Hacia
el 651 ya se contaba con un texto oficial.

El Corán es un código religioso, ético, moral, civil, que involucra el ordenamiento completo de
la Umma donde se reconoce un fuerte sentido comunitario que descansa en la fe y la lengua. Se
entiende a la Umma como una verdadera comunidad matriz. Esta forma de organización tiene
una base religiosa que reemplaza a las relaciones de parentesco de las antiguas comunidades
tribales, como vínculo de unidad. Fue en Medina cuando Mahoma fundó la primera comunidad
islámica.

Teóricamente, la jefatura de la Umma corresponde a Dios cuyo representante y vicario es el

Profeta o su sucesor. Se constituye así la Umma en comunidad político- religioso- jurídico y se
instaura el Corán como Ley suprema sobre la costumbre tribal. Cuando se plantea a la
comunidad un problema cuya solución no está en el Corán puede recurrir a los hadices del
Profeta. E conjunto de los haduces conforman la sunna o “tradición”.

El Corán y a Sunna son las fuentes de la ley (sharía) que estudian los juristas: la jurisprudencia:
fikh.

b) De La Meca a Medina.

622, fecha de la Hégira. Yatrib pasará a llamarse Madinat al- Nabi, ciudad del Profeta. Allí se
conformó la primera comunidad a partir de la llamada “Constitución del Año I” o “Pacto” por el
cual todos se sometieron a la autoridad de Mahoma que asume funciones de juez, de general y
gobernante, además de ser líder religioso y guía espiritual. Así quedan ligadas las esferas civil y
religiosa.

Con la expulsión de los judíos, Medina se transforma en una comunidad islámica homogénea,
una umma hegemónica y combatiente. Aca es el fin de la época de la predicación para pasar al
de la práctica.
 c) Guerra y Jihad.

La guerra adquiere nuevo sentido, se totaliza. Pasa de la razzia, necesaria para las exigencias
materiales de la comunidad, a una guerra total, dado su carácter religioso. La experiencia militar
del profeta será clave para su prestigio en Arabia y, por tanto, para conseguir nuevas
adhesiones.

En el periodo medinés se hacen las revelaciones que hacen lícita la guerra por defensa a la fe
que se relaciona con la noción naciente de comunidad. Muchos consideran a la Batalla de Badr
(624) como la primera jihad pues se trata de una razzia traducida como la primera victoria
contra los infieles. La conquista de La Meca, en el 630, es revestida de un manto religioso
también. Para algunos, las guerras del Profeta son las únicas verdaderamente santas.

El término Jihad se forma a partir de la raíz árabe: j.h.d, significando “esfuerzo” en la vía de
Alá. Se trata del combate por el triunfo de la fe, un esfuerzo físico y moral del creyente; es una
acción piadosa que trae nuevos adeptos al islam y es un deber colectivo de defender y expandir
el islam. Este esfuerzo puede ser llevado a cabo por la palabra (predicación), por el pensamiento
(lucha con uno mismo y el demonio) y por acciones contra los infieles que puede incluir la
guerra. Las primeras son jihad mayor y la ultima, menor.

La muerte en el combate borra las faltas, es un mártir shahid.