31 DE ENERO ( Ejercicio 1 )

Elizabeth despertó esta mañana con una sensación extraña en el ambiente de su

habitación, se asomo por su ventana como todas las mañanas buscando calmar
esa inquietud y noto que el Jasmín huele delicioso ya que el olor le llegaba desde
el jardín a su habitación. regreso a su cama y se tiro sobre ella. Respiro profundo y
se esforzó por olvidar ese sentimiento de intranquilidad y ansiedad que estaba
empezando a asfixiarla miro a su lado y cambio la hoja de su calendario que
marcaba el día 31 de enero que estaba en su mesa de noche.
Se alisto para poder salir a pasear con el pequeño labrador que sus padres le
habían regalado en las recientes fiestas, llevaba un par de semanas intentando
educar al cachorro, pero el perro lo único que hacia era correr sin control, jugar
con la tierra y masticar sus zapatos. Después de un buen rato en el parque
intentado enseñar tan siquiera un truco al cachorro sin éxito, finalmente se rindió y
decidió regresar a casa donde tendría que recoger sus cosas ya que saldría más
tarde.
Horas después de haber regresado a casa una de sus amigas toco la puerta ya
que ellas y sus amigos se reunirían al tardecer en la casa de su mejor amigo
donde prepararían las cosas para irse de campamento. Una vez preparados
salieron todos juntos en un mismo auto pero de camino al bosque empezó a
oscurecer y tuvieron que apurar su llegada ya que había indicios de lluvia y su
destino estaba cerca de un rio muy conocido por sus recurrentes desbordes por
lluvias.
Aun así, decidieron disfrutar su trayecto ya que la gente solía decir que las
estrellas brillan todas las noches en el cielo de ese bosque, mostrando
constelaciones que ningún otro lugar se podrían observar. Durante el trayecto final
uno de sus amigos comenzó a contar una historia algo peculiar mientras
observaban un pequeño cometa pasar, al parecer sus abuelos habían visitado ese
mismo bosque hace muchos años durante una lluvia de meteoritos donde sintieron
un llamado que nació de la profundidad del rio y les abrió los ojos mostrándoles
una segunda oportunidad en la vida.
Eso es lo que intentaba decir antes de que uno de sus amigas lo interrumpieran
ofreciendo sándwiches y limonada de los que llevaba para la cena. Aunque ´no
pudieron comer ya que un trueno interrumpió la tranquilidad que había en el
ambiente, pronto las nubes comenzaron a cubrirlos y una lluvia intensa empezó a
caer en el lugar, entonces su mejor amigo al volante empezó a tener problemas
para ver y controlar el auto, visualizando a pocos metros el puente que los hará
cruzar el rio y poder llegar a su destino.
Antes de llegar al puente de madera tuvieron que descender de su vehículo y
correr a la zona segura del campamento donde se visualizaba una cabaña
cómoda, segura y calidad. Pero cuando iban cerca de la mitad un rayo ilumino el
cielo el cual cayo a poca distancia impactando en un gran árbol a la orilla del rio, el
gran árbol se partió por la mitad y el troco cayo y patio el puente provocando la
caída de Elizabeth y sus amigos.
Una vez en el agua Elizabeth intento nadar a la superficie fallando en el intento por
la fuerza del rio, hasta que sintió que no podía respirar y comenzó a descender
mirando hacia la superficie y noto que todo comenzó a volverse oscuro.
De pronto abrió de nuevo sus ojos despertando esa mañana con una sensación
extraña en el ambiente de su habitación, se asomó por su ventana como todas las
mañanas y se dio cuenta que aun era 31 de enero.