SEMESTRE: 2 – SECCION 2 ASIGNATURA: TEORIA GENERAL DEL TRIBUTO ESTUDIANTE: CARLOS CONTRERAS. C.I 26.883.815 CIUDAD BOLIVAR, 19 DE ENERO DE 2024
EL ESTADO Y ACTIVIDAD FINANCIERA DEL ESTADO
El estado cumple un papel crucial en el ámbito económico al establecer las reglas y normas que rigen las relaciones comerciales, fomentar el crecimiento económico, proteger los derechos de propiedad, regular los mercados, y garantizar la estabilidad y el bienestar de la sociedad. A través de políticas económicas, como la fiscal, monetaria y comercial, el estado busca promover la inversión, el empleo, la competitividad y el desarrollo sostenible. El estado y la actividad económica son dos elementos intrínsecamente ligados en el funcionamiento de una sociedad. El estado, como entidad política, tiene la responsabilidad de regular, promover y proteger la actividad económica dentro de su territorio. A su vez, la actividad económica es fundamental para el desarrollo y bienestar de la sociedad, ya que se encarga de la producción, distribución y consumo de bienes y servicios. Tal como lo indican los economistas, Ha-Joon Chang (2015), "El estado tiene un papel importante en la economía, no solo como regulador, sino también como promotor del desarrollo y redistribuidor de la riqueza” y Adam Smith (1776), "La actividad económica es el motor que impulsa el progreso y la prosperidad de una sociedad." Cada uno de ellos dando su perspectiva con relación a los conceptos y su prioridad en la sociedad. El estado es una entidad fundamental en la organización política y social de una nación. Está compuesto por dos elementos principales, para su funcionamiento los cuales son, la población y el territorio. La población es el primer elemento del estado. Se refiere al conjunto de individuos que habitan en un territorio determinado y que están sujetos a las leyes y regulaciones establecidas por el gobierno. La población es esencial para el estado, ya que son los ciudadanos quienes participan en la toma de decisiones mediante el ejercicio de sus derechos y deberes. Además, la población aporta diversidad cultural, conocimientos y talentos que enriquecen la sociedad. El territorio es el espacio físico en el cual se establece el estado. Puede comprender diferentes regiones, ciudades y fronteras. El territorio del estado es fundamental para establecer límites y fronteras, así como para ejercer el control y la protección de los recursos naturales y las infraestructuras. Además, el territorio es el espacio en el cual se desarrolla la vida de la población y se llevan a cabo las actividades económicas y sociales. El sistema jurídico se refiere al conjunto de normas, leyes e instituciones que regulan la convivencia y las relaciones entre los individuos y el estado. Este sistema proporciona un marco legal que establece derechos y obligaciones, así como mecanismos para resolver conflictos y asegurar la justicia. El poder político, por su parte, se refiere a la capacidad de tomar decisiones y ejercer influencia sobre la sociedad. El poder político se materializa a través de las instituciones y los cargos gubernamentales. El poder político se divide en: el poder ejecutivo, el poder legislativo y el poder judicial, el poder ciudadano y el poder electoral. El poder ejecutivo es responsable de la administración del gobierno y la implementación de las políticas públicas. Es ejercido por el presidente, primer ministro u otro líder designado, y su función principal es tomar decisiones y hacer cumplir las leyes. El poder legislativo es responsable de la creación de leyes y la representación de los ciudadanos. En la mayoría de los países, el poder legislativo está compuesto por un parlamento o congreso, y sus miembros son elegidos por el pueblo. Su función principal es debatir y aprobar leyes que reflejan las necesidades y los intereses de la sociedad. El poder judicial es responsable de la interpretación y aplicación de las leyes. Está compuesto por jueces y tribunales, cuya función principal es garantizar la justicia y resolver conflictos legales de acuerdo con la ley. El poder judicial también tiene la tarea de proteger los derechos individuales y garantizar el estado de derecho. El poder ciudadano es esencial para mantener el control y la rendición de cuentas de los gobernantes, así como para promover el bienestar y la justicia social. La participación ciudadana fortalece la democracia y garantiza que el poder político esté al servicio de los intereses y necesidades de la sociedad. El poder electoral, por su parte, se refiere al derecho y la capacidad de los ciudadanos para elegir a sus representantes políticos a través de elecciones libres y justas. Las elecciones son un mecanismo fundamental para la expresión de la voluntad popular y la legitimidad del poder político. El poder público se divide en tres niveles: el nivel nacional, el nivel estadal y el nivel municipal. Esta división se basa en la descentralización del poder para asegurar una gobernanza más cercana a la ciudadanía y adaptada a las necesidades específicas de cada nivel territorial. Poder Público Nacional: es el nivel más alto de gobierno y está encabezado por el presidente o jefe de Estado. En este nivel se toman decisiones y se implementan políticas que afectan a todo el país. Poder Público Estadal: es el nivel intermedio de gobierno y está encabezado por un gobernador o jefe de gobierno regional. En este nivel se toman decisiones y se implementan políticas que afectan a un estado o región específica dentro del país. Poder Público Municipal: es el nivel más cercano a la ciudadanía y está encabezado por un alcalde o jefe de gobierno municipal. En este nivel se toman decisiones y se implementan políticas que afectan a un municipio o localidad específica dentro del país. Por otro lado, la actividad económica es el motor que impulsa el progreso y la prosperidad de una sociedad. Incluye la producción de bienes y servicios, el comercio, la inversión, el consumo y el trabajo. La actividad económica genera empleo, ingresos, riqueza y oportunidades de desarrollo para los individuos y las empresas. Además, influye en la calidad de vida de la población al proporcionar acceso a bienes y servicios básicos, educación, salud, infraestructuras y otros aspectos fundamentales para el bienestar social. Las necesidades colectivas se refieren a las demandas o requerimientos que afectan a un grupo de personas o la sociedad en su conjunto. Las leyes que sustentan la actividad económica del estado son la Constitución de la Republica, la ley de presupuesto nacional y del sector público es una legislación que establece las normas y procedimientos para la elaboración, ejecución y control del presupuesto del gobierno a nivel nacional. Esta ley es fundamental para garantizar una gestión financiera transparente y eficiente por parte del Estado. Los impuestos: son pagos obligatorios que los ciudadanos y empresas realizan al Estado para financiar los gastos públicos y los servicios proporcionados por el gobierno. Las tasas: son pagos que se realizan por el uso de bienes o servicios públicos, como los peajes en las autopistas o las tasas de matriculación de vehículos. Los precios públicos: son los pagos que se realizan por la prestación de servicios públicos, como la educación, la salud o el transporte. Los préstamos: son una forma de financiamiento que puede utilizar el gobierno para cubrir sus necesidades de gasto. La emisión de deuda pública: es otra forma de financiamiento que utiliza el gobierno. Consiste en la emisión de bonos o títulos de deuda que son adquiridos por inversionistas, quienes recibirán un pago de intereses y la devolución del capital invertido en un plazo determinado. Todas estas herramientas de financiamiento son utilizadas por el estado para cubrir sus gastos y cumplir con sus responsabilidades. Sin embargo, es importante que sean utilizadas de manera responsable y transparente, garantizando la sostenibilidad de las finanzas públicas. Los ingresos y gastos públicos son componentes fundamentales de la actividad económica del estado y reflejan la forma en que el gobierno obtiene recursos y los utiliza para cumplir con sus responsabilidades y brindar servicios públicos a la sociedad. A continuación, se detallan los conceptos de ingresos y gastos públicos: Ingresos públicos: Impuestos: Los impuestos son la principal fuente de ingresos para el gobierno. Pueden incluir impuestos sobre la renta, el consumo, la propiedad, las transacciones financieras y otros conceptos imponibles. Tasas y contribuciones: Son pagos que se realizan por el uso de servicios o bienes públicos específicos, como tasas por servicios de agua, recolección de basura, licencias, entre otros. Ingresos no tributarios: Incluyen los ingresos derivados de la venta de bienes y servicios públicos, como la venta de bienes inmuebles, concesiones, multas, entre otros. Endeudamiento público: El gobierno puede obtener recursos a través de préstamos y emisión de bonos para financiar proyectos o cubrir déficits presupuestarios. Estos recursos se devuelven en el futuro con intereses. Gastos públicos: Gastos corrientes: Son los gastos regulares y recurrentes del gobierno, como salarios y beneficios para los empleados públicos, servicios públicos, mantenimiento de infraestructuras, entre otros. Gastos de inversión: Estos gastos están destinados a proyectos de infraestructura, educación, salud, investigación y desarrollo, entre otros, con el objetivo de promover el crecimiento económico y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Transferencias y subsidios: Estos gastos implican la transferencia de recursos a individuos, empresas u otras entidades para apoyar programas sociales, fomentar la actividad económica o brindar asistencia en áreas específicas como vivienda, agricultura, educación, entre otras. Servicio de la deuda: Los gastos relacionados con el servicio de la deuda incluyen el pago de intereses y amortizaciones de préstamos y bonos emitidos por el gobierno. Es importante destacar que el estado y la actividad económica deben trabajar en conjunto para lograr un equilibrio entre el crecimiento económico, la equidad social y la preservación del medio ambiente. El estado tiene la responsabilidad de regular y supervisar la actividad económica para evitar prácticas abusivas, promover la competencia justa, proteger los derechos de los consumidores y preservar los recursos naturales. En resumen, el estado y la actividad económica son dos elementos interdependientes que se complementan mutuamente. El estado proporciona el marco legal y las políticas necesarias para promover un entorno favorable para la actividad económica, mientras que esta última es fundamental para el desarrollo y bienestar de la sociedad. Una relación armoniosa entre ambos es esencial para lograr un crecimiento económico sostenible y una sociedad próspera. Referencias Bibliográficas
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Introducción al derecho internacional privado: Tomo III: Conflictos de jurisdicciones, arbitraje internacional y sujetos de las relaciones privadas internacionales