PROCESOS DE QUIMICOS EN LA MIEL

Un elemento para algunos esencial en nuestra vida diaria es la miel. Una disolución acuosa y
viscosa con un alto contenido en azucares: 40% fructosa, 30% glucosa, 20% agua, entre
otras. El contenido siempre puede variar, ya que depende de las plantas donde hayan ido las
abejas productoras.

Una característica de la miel, causada por su bajo contenido en agua, es su función

hidrofílica, capaz de absorber agua fácilmente. Eso hace que sea muy complicado que se
desarrollen bacterias en la miel, ya que es capaz de matarlas tras absorber el agua que
poseen, por eso este producto se conserva durante mucho, mucho tiempo.

La miel está compuesta por más de 181 componentes químicos, entre los cuales
encontramos vitaminas, aminoácidos proteínas y otros nutrientes. Tiene un sabor único
gracias a su complejo proceso químico.

Un elemento esencial para la producción de miel es el néctar de las flores. Este producto lo
producen las flores para atraer a insectos y así realizar la función de polinización. El néctar
contiene un 80% de agua, por lo que el mayor trabajo que tienen las abejas es reducir esa
cifra hasta llegar al 20%. Para lograrlo, las abejas van pasándose el néctar de unas a otras de
manera continua para rebajar la cantidad de agua, evaporando el agua y enriqueciéndolo con
enzimas que van generando, transformándolo químicamente. Este proceso puede llegar a
durar días, dependiendo de la humedad y temperatura. Una vez finalizado el proceso las
abejas depositan el néctar concentrado en el panal, y ya tenemos lista la miel para su
recolección.

Las funciones de las enzimas que comentábamos son: deshidratar, transformar la

composición química y modificar el pH. Estas enzimas convierten la sacarosa en dos
carbohidratos simples como son la glucosa y la fructosa, por eso la miel esta tan concentrada
en estos elementos y menos en sacarosa.