Está en la página 1de 14

ALIMENTACIÓN DEL NEONATO Y LACTANTE

L as prácticas óptimas de alimentación del lactante y del niño pequeño, se sitúan entre las
intervenciones con mayor efectividad para mejorar la salud de la niñez.

En general, la alimentación del lactante y del niño pequeño con frecuencia no reciben un enfoque
apropiado durante la formación del personal de salud.

Una adecuada nutrición durante la infancia y niñez temprana es esencial para asegurar que los niños
alcancen todo su potencial en relación al crecimiento, salud y desarrollo. La nutrición deficiente
incrementa el riesgo de padecer enfermedades que puede desencadenar en muerte de los infantes.

Los avances médicos han hecho posible mejorar los lineamientos en el soporte nutricional y por ende
la supervivencia de recién nacidos (RN), de pretérmino y a término en las unidades de cuidados
intensivos neonatales (UCIN), así como de los lactantes.

Una nutrición óptima para el neonato y lactante, se ha definido como la que da lugar a un crecimiento
y desarrollo normales sin exceder sus capacidades metabólicas y excretoras. Por lo tanto, los primeros
dos años de vida brindan una ventana de oportunidad crítica para asegurar el apropiado crecimiento y
desarrollo de los niños, mediante una alimentación óptima.

NEONATO

Se define el periodo neonatal, como el tiempo transcurrido desde el nacimiento hasta los primeros 28
días de vida; clasificándolos de acuerdo a la edad gestacional como:

• Inmaduro (< 2 8 semanas)

• Prematuros/pretérmino: < 37 semanas

• Neonatos a término: 37 a 42 semanas

• Postérmino (> 42 semanas)

Clasificación del recién nacido de acuerdo al peso al nacer:

• Macrosómico: > 4 000 g

• Peso normal: 2 500 a 3 999 g


• Bajo peso: < 2 500 y >1 500 g

• Peso muy bajo: < 1 500 g

LACTANTE

El lactante es el niño que se alimenta fundamentalmente de leche. El lactante menor, comprende la


edad que va desde 1 mes a 12 meses.

Se caracteriza por un crecimiento acelerado y de las habilidades psicomotrices.

En los primeros meses todos los lactantes sanos tienen el mismo potencial de desarrollo sin influencia
de factores geográficos o raciales.

OBJETIVOS DE LA ALIMENTACIÓN DE UN LACTANTE

Cubrir el mantenimiento de las funciones basales, el gasto energético y la demanda propia de la


formación de nuevos tejidos.

Facilitar el crecimiento y desarrollo del lactante

Disminuir el riesgo de muerte en los lactantes.

LACTANCIA MATERNA

Tras el parto la madre produce el alimento óptimo para el recién nacido que cubre todas sus
necesidades nutritivas, se aporta a demanda y se regula al volumen adecuado para su crecimiento sin
sobrecarga para el aparato digestivo ni de otros sistemas aún inmaduros. La leche materna (LM), suple
y estimula el desarrollo del sistema inmune del recién nacido (RN) que no funciona de forma completa
durante los primeros meses de vida.

Su composición se adapta a las limitaciones fisiológicas del tubo digestivo, del metabolismo
intermediario y de la función renal, aportando además una serie de ventajas nutricionales,
inmunológicas, psicológicas y económicas.

Sus componentes, junto con el intercambio de estímulos físicos y afectivos entre madre e hijo, logran
el máximo potencial de desarrollo.

El crecimiento es el índice más sensible de salud y un parámetro fundamental para la evaluación de la


nutrición. Un adecuado patrón de crecimiento en los primeros años de vida es fundamental para
garantizar un normal desarrollo neurosensorial.
BENEFICIOS DE LA LACTANCIA MATERNA

 Estimula sistemas enzimáticos y metabólicos específicos que logran la programación


nutricional, intestinal, enzimática y metabólica para el futuro.
 La leche de la propia madre consigue el mayor rendimiento nutritivo con la menor sobrecarga
metabólica.
 Es el órgano inmunológico de transición que moldea y estimula el desarrollo del sistema
inmune del recién nacido. Con el contacto cercano madre-hijo, la madre es estimulada para
producir y transferir por la leche anticuerpos. Todo ello explica los beneficios en la salud del
niño mientras recibe LM y después, con menor número y gravedad de las enfermedades
infecciosas y de enfermedades relacionadas con una respuesta inmune anómala.
 Se añaden un gran número de ventajas en el establecimiento del vínculo afectivo. Mayor
desarrollo cerebral y sensorial con especial importancia en los prematuros y recién nacidos de
bajo peso (BPN)
 Ventajas sobre la salud de la madre con un puerperio más fisiológico, retrasando la ovulación,
disminuyendo el sangrado posparto y con mejor recuperación posterior de las reservas de
hierro. Menor incidencia de algunos tumores ováricos y mamarios premenopáusicos.
 Supone un gran ahorro económico para los servicios sanitarios y la sociedad.
 Comodidad para la madre y sin riesgos derivados de la preparación de las FI.

Datos que confirman un buen aporte lácteo:

– Pérdida fisiológica de 3-4 días, de 6-10 % que recupera hacia el 10-14 día y con aumento
posterior de más de 20 gr. día. Los desnutridos al nacer deberían no perder o tener pérdida
mínima.

– Niño activo, succión vigorosa y relajado al finalizar.

– Tras succión rápida inicial, la succión se enlentece y se observa al RN deglutir, la madre nota que
sale leche, sensación de reflejo activo y pecho más vacío.

– Succionan vigorosos desde pocos minutos a 10-15 min. Cada RN tiene su forma de tomar

– Moja 4-6 pañales al día a partir del 4º día. Deposiciones blandas 5-6 por día o espaciadas cada 2-
3 días pero abundantes.
Teniendo en cuenta los beneficios de la lactancia, se considera que su promoción, es una de las
intervenciones más efectivas en la Promoción de la Salud. Los promotores de la Salud deben
considerar también que el apoyo cercano a la madre lactante, mejora el estado emocional de la
madre y de la familia. Conseguir que la época de lactancia sea placentera para la madre y la
familia, es la única forma para lograr la prolongación de las lactancias.

Normas prácticas:

– Contacto precoz piel con piel desde el paritorio. Dejar al RN reptar y acercarse hacia el pecho de
la madre. No se recomienda la separación y la succión rutinaria de las vías altas a los niños sanos.
Puesta al pecho con supervisión experta lo antes posible tras el parto. Incluso si es por cesárea. Si
recibió anestesia general ponerle al despertar. En los primeros minutos el RN estresado por el
parto está activo y succiona de forma vigorosa, después puede pasar a dormir varias horas
seguidas.

– La succión precoz y frecuente 10-12 tomas al día, acelera la secreción, facilita el vaciado y evita
la congestión de los primeros días.

– La succión nocturna produce altos picos de prolactina.

– Ponerle al pecho cuando el RN dé señales de hambre, sin establecer horarios rígidos.

– Las primeras tomas aportan pequeñas pero suficientes de cantidades de calostro (gotas a ml.)
rico en inmunoglobulinas. Tras 48-72 horas, aumento del volumen de leche que se mantendrá
estable con una media de 500-600 ml de leche al día.

– El calostro estimula el vaciado intestinal.

– Cada niño tiene su ritmo para tomar. La madre lo aprende pronto.

– Los líquidos adicionales y las tetinas no son necesarios y alteran la succión y el apetito.

– Dar suplementos solo cuando estén médicamente indicados: separación del niño, riesgo de
hipoglucemia y dificultades en la succión.

– La postura correcta de la boca al succionar evita lesiones del pezón. La boca bien abierta ha de
abarcar el pezón y parte de la areola para que la lengua actúe como un rodillo que exprime la
leche hacia fuera.
– Dejar que el primer pecho se vacíe al máximo, al final la leche contiene más grasa y sacia más al
niño y produce menos cólicos. Poner al otro pecho después si quiere más. Alternar en la otra
toma.

– Si hay exceso de leche, la extracción manual o con sacaleches alivia y puede guardarse.

– En el hospital ha de valorarse la succión, enganche y transferencia de leche y anotarlo en historia


clínica al menos 3 veces al día.

– Es mejor relajarse y buscar lugares tranquilos para lactar.

– La ducha diaria es suficiente para la higiene del pezón.

– La propia leche aplicada sobre el pezón alivia si está irritado.

– La OMS recomienda que las madres al salir del hospital sean informadas de cómo extraer su
leche si fuera necesario y como obtener soporte para la lactancia.

– Aconsejar a las madres que anoten el nº y duración de las tomas y las micciones y deposiciones,
durante el hospital y en la primera semana y que tras el alta han de ser valorados por personal
experimentado en RN a las 2-5 días .

LACTANCIA ARTIFICIAL. FORMULAS DE INICIO

La composición y formas de administración han sido establecidos por organismos científicos . Las
Fórmulas de inicio pueden sustituir a la leche materna cuando ésta no es posible, han de cubrir las
necesidades del RN con peso mayor de 2500 gr. al nacer hasta los 4- 6 meses. La forma de crecimiento,
parámetros biológicos, grado de salud y desarrollo afectivo han de ser los patrones a alcanzar ante el
uso de sustitutos de la Lactancia Materna
COMPARACIÓN DE LA LECHE HUMANA Y LA LECHE PARA LACTANTES

REQUERIMIENTO

El conocimiento de las necesidades nutricionales del lactante en los primeros meses se ha obtenido del
modelo biológico insuperable que es la leche materna. Se admite que la leche materna es capaz de
cubrir, por sí sola, las necesidades energéticas hasta los 6 meses, pero a partir de entonces podrían
establecerse carencias en algunos nutrientes.

Las necesidades energéticas del lactante para el crecimiento durante el primer año son muy grandes,
inversamente proporcionales a la edad del niño, y varían con la velocidad de crecimiento y tipo de
tejido sintetizado según la edad. Las necesidades de mantenimiento incluyen el metabolismo basal,
excretas y acción dinámico específica de los alimentos.

Las necesidades diarias de agua son aproximadamente 150 ml/kg de peso y día.
Las requeridas para la actividad física oscilan entre 9 kcal/kg/día en los primeros meses, hasta 23
kcal/kg/día en el segundo semestre. El ajuste de energía aconsejable es de 108 kcal/kg/día en los
primeros 6 meses y 96 kcal/kg/día de los 6 a 12 meses.

Así, las grasas deben aportar el 50-54% de la energía, los hidratos de carbono, el 36-40%, y las
proteínas, un 7% de la energía.

• P r o t e í n a s . El cálculo de la ingesta proteica en el lactante se basa en el de los alimentados a


pecho es decir: 2,04 g/kg/día en los primeros 3 meses y 1,73 g/kg/día de los 3 a los 6 meses (tabla I).

• G r a s a s . Las recomendaciones de ingesta grasa son de 3,3 g por 100 kcal (30% de las calorías
totales).

• Hidratos de carbono. Son necesarios como aporte energético y no se pueden reemplazar por otro
tipo de nutrientes. La lactosa es el disacárido predominante sintetizado por la glándula mamaria. La
cantidad aconsejada es de 8-12 g. por 100 kcal. (5,4-8,2 g/100 ml de fórmula). Debe proporcionar el
50-55% de las calorías de la dieta.

• M i n e r a l e s: El hierro es el que puede dar lugar a deficiencias. Aunque la leche materna es pobre
en hierro, su biodisponibilidad es muy elevada y puede cubrir las necesidades hasta los 4-6 meses. Las
fórmulas, sin embargo, deben ser suplementadas.

INGESTA RECOMENDADA DE VITAMINAS Y PROTEINAS


NUTRICIÓN ENTERAL EN NIÑO CON PATOLOGÍAS

La nutrición enteral (NE) es la técnica de nutrición artificial que utiliza la vía digestiva y en su
concepto más amplio incluye la administración de fórmulas de composición definida tanto por boca
como por sonda. La NE está indicada en aquellos pacientes con desnutrición o con riesgo de
desarrollarla que tienen una función digestiva suficiente para hacer frente a todas sus necesidades de
energía y nutrientes, pero que no son capaces de consumirlas en forma de alimentos naturales por vía
oral. Puede usarse también en combinación con la nutrición parenteral cuando la función digestiva no
permita la cobertura de todos los requerimientos por vía digestiva.

INDICACIONES

El continuo avance de la medicina hace que cada vez exista mayor número de pacientes pediátricos
crónicos con muy diversas enfermedades de base, incapaces de hacer frente a sus necesidades de
energía y nutrientes mediante el consumo de alimentos naturales. En estas circunstancias es necesario
el soporte artificial, siendo la NE la técnica de nutrición artificial de elección cuando la función
digestiva está conservada.

— La administración de fórmulas habitualmente por sonda y sólo excepcionalmente por vía oral,
siendo en estos casos necesaria su justificación.

— La administración de fórmulas completas para cubrir al menos el 50% de las necesidades16; el uso
de módulos sólo se aplicará a los pacientes con requerimientos especiales de energía o nutrientes.

Se indica en :

Dificultades para la digestión y deglución

Anomalías orofaciales

- Hendidura palatina, síndrome de Pierre-Robin, otras alteraciones del desarrollo orofacial

- Traumatismos y tumores orofaciales Disfagia cricofaríngea Alteraciones esofágicas

- Atresia o estenosis esofágica

- Fístula traqueoesofágica Inmadurez del reflejo de succión

- RN de edad gestacional < 34 semanas RN que no cubren sus requerimientos por vía oral
- RN pretérmino - RN con asistencia respiratoria Encefalopatías con retraso psicomotor .

Dificultades para la digestión y absorción

Síndrome de intestino corto quirúrgico

Diarrea grave o prolongada por alteraciones en la mucosa de origen diverso

- Síndrome de malabsorción

- Infecciones - Enteritis posquimioterapia, post-irradiación

- Enfermedad de injerto contra huésped Alteraciones graves de la motilidad del tracto

- Seudoobstrucción intestinal crónica idiopática

- Enfermedad de Hirschsprung extensa

Pancreatitis grave (infusión yeyunal)

Insuficiencia pancreática grave Hepatopatía/colestasis crónica

Trasplante intestinal, hepático

Enfermedades extradigestivas con incremento de requerimientos que no se pueden cubrir por vía oral
Enfermedad renal crónica

Cardiopatías congénitas Enfermedad respiratoria grave

- Fibrosis quística - Displasia broncopulmonar

- Malformaciones de la caja torácica Pacientes críticos Enfermedad oncológica, TMO Alteraciones


graves de la integridad cutánea

- Grandes quemados

- Epidermólisis ampollosa grave

- Ictiosis grave Infecciones de repetición con/sin inmunodeficiencia

CONTRAINDICACIONES

 Existen unas contraindicaciones generales en el uso de las vías enterales: la obstrucción intestinal
completa, el íleo adinámico o la hipomotilidad intestinal, la presencia de diarrea severa, la existencia
de fístulas intestinales externas proximales o de alto débito, el paciente en “shock” y la presencia de
pancreatitis aguda severa.

MÉTODOS DE ALIMENTACIÓN ENTERAL

 Nutrición enteral oral. Se toman por boca productos obtenidos de los alimentos y diseñados
especificamente para que tengan muchas calorías, o algún nutriente determinado según la
enfermedad del niño. Estos productos se denominan “fórmulas o módulos nutricionales”, aunque
tradicionalmente se usa de manera errónea el término “batido”. Las fórmulas se comercializan de
forma líquida o en polvo y se suelen saborizar para que sepan a vainilla, chocolate, fresa, etc. (Por eso,
quizá, la denominación de “batido”).
 Nutrición enteral por sonda. Se administran dichas fórmulas a través de un tubo fino, largo y flexible.
Este tubo se puede introducir a través de la nariz o la boca hasta el estómago o el intestino (sondas
nasogastricas, desde la nariz al estómago; nasointestinales, desde la nariz al intestino; orogástricas,
desde la boca al estómago, etc.), o a través de agujeros que se hacen en quirófano en el estomago o
en el intestino (gastrostomía, agujero en el estómago).
Formas de administración enteral por sonda
Alimentación por bolos: en la alimentación por bolos, se administran dosis grandes de fórmula varias
veces al día por la sonda de alimentación. Esto es muy similar a la rutina de alimentación normal.
Alimentación continua: en la alimentación continua, se usa una bomba electrónica para administrar
pequeñas cantidades de fórmula a lo largo de un período de horas. Algunos niños pueden necesitar
alimentación continua para ayudar a reducir las náuseas y los vómitos.
Alimentación por gravedad: en la alimentación por gravedad, se coloca una bolsa de alimentación en
un soporte de IV y una cantidad definida de fórmula gotea lentamente a través de la sonda. La
cantidad de tiempo varía según el paciente.

ALIMENTACIÓN PARENTERAL EN EL NIÑO

La nutrición parenteral (NP) en el niño enfermo tiene como principal objetivo suministrar las
demandas específicas de energía y nutrientes debidas a su enfermedad, manteniendo un balance de
energía positivo que permita un crecimiento y desarrollo adecuados, procurando evitar tanto la infra
como la sobrenutrición.

OBJETIVOS
a. Proporcionar unas calorías adecuadas que impida el catabolismo (un mínimo de 50-60 Kcal/kg/d)
cuando la alimentación enteral no es posible.
b. Conseguir un balance nitrogenado positivo. c. Conseguir en el prematuro un crecimiento y
desarrollo postnatal similar al que tendría un feto de la misma edad postconcepcional en el útero de la
madre (es decir un aumento ponderal medio de 15 g/kg/d).
INDICACIONES
a. Prematuridad:
- Prematuros menores de 30 semanas y/o 30 semanas que no vayan a tolerar la alimentación enteral
completa en el plazo de 5 días (por intolerancia digestiva, SDR, sepsis, etc.)
b. Enterocolitis necrotizante
c. Anomalías quirúrgicas del tracto gastrointestinal (gastrosquisis, atresia de esófago, atresia intestinal,
hernia diafragmática, etc.) o cardiovascular.
d. Insuficiencia respiratoria

COMPONENTES DE LA NUTRICION PARENTERAL

AMINOÁCIDOS

En pacientes pediátricos, y especialmente en neonatos, está recomendado el uso de soluciones


de aminoácidos (AA) específicas debido a la inmadurez de sus sistemas enzimáticos. No existen
estudios sobre la adecuación de estas soluciones a niños de mayor edad, aunque tampoco
sobre la idoneidad de las soluciones para adultos.

El aporte proteico por vía intravenosa se administra en forma de soluciones de L-aminoácidos


libres o dipéptidos y aportan aproximadamente 4 kcal por gramo. Además de los ocho AA
esenciales y de la histidina, los recién nacidos pretérmino (RNPT) y a término (RNT), debido en
parte a su inmadurez hepática y/o renal, requieren también cisteína, tirosina y taurina. Existen
soluciones de nutrición parenteral (NP) específicas para el recién nacido y el lactante. Estas
soluciones se han diseñado intentando reproducir el aminograma plasmático del cordón
umbilical o el del niño alimentado con leche materna.

LÍPIDOS
Los lípidos deben formar parte de las soluciones de NP por su elevada densidad calórica, por
ser fuente de ácidos grasos esenciales (AGE) importantes para el neurodesarrollo
(especialmente en RNPT), por disminuir la osmolaridad de la solución y por evitar los efectos
negativos de la sobrecarga de glucosa. Además, se ha demostrado que su adición a la NP
mejora el balance de nitrógeno (23). Se recomienda que constituyan del 25 al 40% de las
calorías no proteicas, pero su máxima oxidación se produce cuando suministran el 40% de las
calorías no proteicas en el RN y hasta el 50% en resto de los lactantes (1,5).

HIDRATOS DE CARBONO

Como fuente de hidratos de carbono en NP pediátrica se utilizan exclusivamente soluciones


estériles de D-glucosa. En el mercado español existen soluciones de concentraciones entre el
5% al 70%.

ELECTROLITOS

Los electrolitos tienen un papel fundamental en la regulación de muchos procesos orgánicos.


Existen en el mercado distintas presentaciones en viales o ampollas que aportan los distintos
electrolitos requeridos. En pediatría se recomienda utilizar las presentaciones de menor
concentración porque si se produce un error en la elaboración de la NP, su repercusión sería
menor. En situaciones de acidosis se utilizará el acetato, ya que se transforma en bicarbonato
en el organismo. Este último no se puede añadir directamente a la NP ya que es inestable.

VITAMINAS

Existen multivitamínicos intravenosos (IV) diseñados para pediatría por sus necesidades
específicas.

BIBLIOGRAFIA

A.Muñoz Guillen* y J. Dalmau Serra. Alimentación del Recién Nacido Sano , 2008 Servicio de
Neonatología y Sección de Nutrición y Metabolopatías del Hospital “La Fe”. Valencia
Alimentación del lactante sano Aurora Lázaro Almarza y Juan F. Marín-Lázaro Protocolos diagnósticos y
terapéuticos en pediatría 2008

A. Entrala Bueno*, E. Morejón Bootello y A. Sastre Gallego. Nutrición enteral, Departamento de


Nutrición Humana. Facultad de Ciencias de la Salud Universidad Alfonso X el Sabio. Madrid Unidad de
Nutrición Clínica. Hospital Ramón y Cajal. Madrid Facultad de Ciencias. UNED. Madrid

Rosa A. Lama More y otros . NUTRICIÓN ENTERAL EN PEDIATRÍA 2.ª edición . junio 2015
Unidad de Gastroenterología y Nutrición Infantil. Centro Médico D-medical. Madrid. Editorial
Glosa, S.L
https://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0212-16112017000800006
https://dx.doi.org/10.20960/nh.1376 https://scielo.isciii.es/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S0212-16112017000800004#:~:text=La%20nutrici%C3%B3n
%20parenteral%20(NP)%20en,la%20infra%20como%20la%20sobrenutrici%C3%B3n.
https://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/v9n4a526pdf001.pdf

También podría gustarte