Resumen: Historia de la cultura- Segundo Parcial

Primera Unidad: Edad antigua: Grecia y Roma

Inicio: invención de la escritura -4000 a.c hasta la caída del imperio Romano en Occidente -476 d.c.

La historia de la antigua Grecia se divide en tres períodos principales: la era Arcaica (desde finales del siglo
XI a.C. hasta el siglo VI a.C.), la era Clásica (que abarca desde el siglo VI a.C. hasta el siglo IV a.C.), y la
era Helenística. Los griegos, inicialmente invasores de la región, eran un conjunto de pueblos indoeuropeos
que emigraron desde el Cáucaso.

En la formación de la cultura griega, los pelasgos desempeñaron un papel importante, especialmente en las
islas Cícladas y Creta, donde se desarrollaron las culturas minoica o cretense. Cerca del año 1800 a.C.;
pueblos de raza aria emprendieron un movimiento migratorio desde la región de Danubio; avanzando sobre
los territorios ocupados por los pelasgos. Las cuatro ramas más importantes que invadieron estas regiones
fueron; aqueos, eolios, jonios y dorios. Los primeros en entrar en Grecia fueron los aqueos, quienes
fundaron una ciudad: Micenas. Sin embargo, los invasores dorios, a partir del 1200 a.C., arrasaron a los
micénicos y provocaron una diáspora de aqueos, jonios y eolios hacia las islas del Egeo y las costas de Asia
Menor.

❖ La guerra de Troya, ubicada en el siglo XII a.C., fue un evento crucial en la historia griega,
inmortalizado en la "Ilíada" atribuida a Homero.

Grecia es considerada la cuna de la cultura occidental, junto con Roma. La mente griega buscaba expresar
un ideal civilizacional distintivamente griego, donde se valoraba la cultura como un producto del esfuerzo
humano, en contraste con la visión de otras antiguas civilizaciones que veían la cultura como una creación
divina.

La cosmovisión antigua griega se caracterizaba por una profunda conciencia mítica, donde todo en el mundo
tenía una dimensión religiosa, explicado a través de la intervención de dioses, semidioses y héroes. La
mitología griega se acercaba más a la filosofía y al pensamiento lógico en comparación con otras mitologías.
Los dioses griegos estaban intrínsecamente ligados al mundo y no se concebía una noción de trascendencia.
El destino humano estaba determinado por un fatalismo cósmico, y la vida después de la muerte no prometía
una vida plena. Sin embargo, la llegada del cristianismo transformó la cosmovisión griega y romana,
introduciendo la idea de un Dios trascendente y amoroso, la libertad humana, la misión en la Tierra y la
promesa de un destino eterno de plenitud y felicidad.

El Poeta Homero
Homero desempeñó un papel fundamental como educador en la antigua Grecia. Los poetas, en un principio,
transmitían la tradición griega a través de cantos y composiciones mitológicas. La función social del poeta
era atesorar el conocimiento del pasado y la religión, lo que proporcionaba identidad al pueblo griego.
Homero se destacó como el poeta que narró las bases de la educación griega.
Los mitos desempeñaban un papel central en la educación y cultura griegas. Estas narraciones poéticas y
fantásticas tenían un carácter religioso y buscaban dar explicaciones a preguntas humanas y causas de los
hechos históricos. Los mitos griegos se caracterizaban por su búsqueda de causas naturales y secuencia
lógica, así como su antropomorfismo y valores morales. Homero recolectó y compiló este saber mitológico
en sus dos epopeyas, la "Ilíada" y la "Odisea," que proporcionaron a los griegos:

1. Origen histórico: La guerra de Troya marcó el comienzo de la aventura griega en el Egeo y presentó usos,
costumbres y organización militar de los primeros pueblos griegos. Homero también ofreció un primer
vistazo a la formación social y política del mundo griego arcaico, incluyendo la monarquía, la boulé
(consejo de jefes) y la asamblea general de hombres libres (Ecclesia). La polis, que surgió en los siglos VIII
y VII a.C., definió la Grecia antigua.

2. Fundamentos religiosos y morales: Los mitos de Homero presentaban modelos de conducta basados en
valores y subordinación al destino. También destacaban la importancia de la intervención divina en la vida
humana y la necesidad de reconocerla.

3. Unidad cultural y política: La polis, o ciudad-estado, fue un fenómeno central en Grecia, que proporcionó
unidad cultural al mundo griego. Los ciudadanos vivían activamente en la polis, participaban en la vida
política y compartían un lenguaje y modo de vida comunes.

Entonces….

Homero contribuyó significativamente a la educación y formación de la identidad griega al transmitir mitos

que abordaban las cuestiones fundamentales de la vida y la moral. La polis, con su carácter político y
cultural único, también jugó un papel fundamental en la configuración de la sociedad griega.

Las Polis
Los orígenes de las polis en la antigua Grecia se remontan a la desintegración de los reinos micénicos
después de la toma de Troya por los aqueos. Este colapso se atribuye a varios factores, como la destrucción
de centros económicos por los "Pueblos del Mar," los gastos de empresas reales, la sublevación de
poblaciones sometidas a los reyes aqueos y la llegada de los dorios a Grecia.

Durante casi cuatro siglos, las comunidades griegas experimentaron cambios significativos. La colonización
de las costas de Asia Menor llevó a la formación de un mar interior griego en el Egeo. Alrededor del 1100
a.C., después de una invasión doria, la monarquía perdió poder, dando paso a una formación aristocrática y,
posteriormente, a una expansión colonial. Entre el 750 y el 600 a.C., las aldeas se transformaron en
ciudades-estado (polis) a medida que los griegos buscaban nuevas tierras en el extranjero.

La unidad de las polis se basaba en la cultura, los mitos y la religión. Los mitos eran una parte fundamental
de la educación y transmitían valores morales. La lengua griega también era un vínculo importante, y el
término "bárbaro" se usaba para describir a quienes no hablaban griego. La polis era la escuela de vida del
griego, donde se educaban en la plaza, el templo y el gimnasio.

La polis se caracterizaba por su independencia política, autonomía económica y estructura social que
diferenciaba entre ciudadanos y no ciudadanos. La independencia política se basaba en la soberanía de la ley
y la participación activa de los ciudadanos en la vida pública. La comunidad política estaba compuesta por
ciudadanos, y la ciudadanía se definía por la participación en el poder político y judicial de la polis.
La polis no solo era un espacio habitable sino también un lugar de educación y participación en la vida
pública. El deber del Estado era educar a sus ciudadanos. A pesar de que la perspectiva de la persona
trascendente estaba ausente, la creatividad y grandeza de los griegos se reflejaban en la filosofía y la
creación de la polis.

Filosofía
El surgimiento de la filosofía en Grecia coincide con el origen de las polis y está relacionado con las
doctrinas recopiladas por los griegos en sus colonias. La filosofía comenzó en Mileto, en la costa de Asia
Menor, donde los ciudadanos griegos buscaban respuestas basadas en la observación y el razonamiento a
preguntas sobre el cambio, el origen de la vida y las causas en la naturaleza. Estos primeros filósofos,
conocidos como "amantes de la sabiduría," se centraron en encontrar causas naturales (arché) en la
naturaleza (physis) y sentaron las bases de la filosofía y la ciencia. Diferentes filósofos, como Tales de
Mileto y Pitágoras de Samos, realizaron contribuciones significativas en matemáticas y física.

A medida que se daban respuestas, surgían nuevos interrogantes, lo que llevó al desarrollo de diversas
escuelas filosóficas en la Grecia Clásica. La filosofía griega se basaba en la búsqueda de la verdad y la
participación en la vida pública. La democracia ateniense se destacaba por la participación activa de los
ciudadanos en la vida pública, donde la libertad se entendía como el respeto por la ley.

Los sofistas se centraron en la enseñanza de la retórica y la oratoria para persuadir y demostrar la verdad de
un argumento, lo que se volvió esencial en un contexto democrático. En este marco, la democracia ateniense
se basaba en la eleuthería (libertad), isegoria (derecho a la palabra) y isonomía (igualdad ante la ley).
La filosofía y la democracia en Atenas se entrelazaban, y el poder de la palabra y la argumentación se
volvieron cruciales en la vida pública. Las contribuciones de los sofistas y filósofos no solo afectaron la
filosofía, sino también la forma en que los ciudadanos participaban en la vida política y social de Atenas.

Pericles y debilitamiento de Las Polis

Pericles (495-429 a.C.) fue un destacado hombre de estado griego que ejerció un papel crucial en la
transformación de Atenas en el centro cultural y económico de Grecia. Bajo su liderazgo, Atenas
experimentó una profunda democratización, aumentando la participación ciudadana y recompensando a los
ciudadanos por sus servicios al Estado. Pericles emprendió la reconstrucción de Atenas después de la
Primera Guerra Médica, no solo restaurando la ciudad, sino también embelleciéndola. Además, implementó
reformas legislativas que contribuyeron al crecimiento y la grandeza de Atenas, consolidándola como la
capital espiritual de Grecia. La figura de Pericles es tan relevante que todo el siglo V a.C. se conoce como el
"siglo de Pericles". Su contribución a la democracia y la promoción de la cultura y las artes en Atenas
marcaron una era de esplendor.

Sin embargo, su legado debe entenderse en el contexto de la polis griega, una originalidad que daba sentido
a la vida griega y que se materializaba en ciudades-estado como Atenas. En ese contexto, la sofística, un
movimiento filosófico y educativo, surgió con ideas de escepticismo y relativismo. Los sofistas sostenían
que la verdad y la moral eran subjetivas y dependían de la persuasión.

Sócrates, en contraposición a los sofistas, promovió la búsqueda de la verdad objetiva y la moral a través de
la razón y la virtud. Su método de indagación, basado en la ironía y la mayéutica, enfatizaba la
autorreflexión y la búsqueda de la verdad en el individuo. Sócrates consideraba que la virtud era resultado
del conocimiento y defendía la importancia de la conciencia moral y el sentido del deber. El legado de
Sócrates se transmitió a sus discípulos, como Platón, padre del idealismo, y Aristóteles, padre del realismo,
quienes contribuyeron significativamente al pensamiento filosófico occidental.

Las Guerras del Peloponeso entre las ciudades-estado griegas, en particular Atenas y Esparta, marcaron el
inicio del declive de la polis como forma de vida. Tras estas guerras, Atenas y Grecia en su conjunto
sufrieron un agotamiento económico, militar y moral. La lucha constante y el individualismo contribuyeron
al debilitamiento de la polis. El auge de Macedonia, bajo el liderazgo de Filipo II, marcó el final de la
independencia política de los griegos, quienes quedaron bajo la autoridad de los reyes macedonios. La
decadencia de la polis y el surgimiento del individualismo y el cosmopolitismo marcaron una nueva era en la
historia griega y en la filosofía griega.

Alejandro Magno, un Modelo de Imperio para Roma

Después del asesinato de su padre, Filipo II, Alejandro Magno emergió como un líder que rápidamente
sofocó las revueltas en algunas ciudades griegas contra Macedonia y luego dirigió su ejército contra el vasto
Imperio Persa después de cruzar el Helesponto. A su muerte en el 323 a.C., el imperio que forjó se extendía
desde el Adriático hasta el Indo y desde el Mar Caspio hasta el Alto Egipto.

Durante el curso de once años, Alejandro Magno logró una serie de notables victorias sobre los persas en
batallas como Gránico, Isos, una expedición a Egipto y Gaugamela. Tras tomar Persépolis, Alejandro
emprendió una gran expedición hacia el este, explorando los límites de su vasto imperio que abarcaba desde
los Balcanes hasta Afganistán y desde Egipto hasta el Indo.

En la organización y administración de su imperio, Alejandro demostró una visión amplia. Fomentó la

fusión de la cultura griega con las culturas de los territorios conquistados, permitiendo la adopción de ritos y
ceremoniales locales. Fundó ciudades con la intención de promover un estilo de vida griego y mejoró las
vías de comunicación para estimular la actividad económica. Su muerte prematura a los 32 años frustró la
realización de proyectos aún más ambiciosos.

Más allá de sus conquistas, Alejandro tenía un objetivo más grande: helenizar el mundo. Su visión incluía:

1. Respeto y tolerancia hacia los pueblos conquistados.

2. Creación de ciudades, bibliotecas y centros de estudio.

3. Reconstrucción de ciudades destruidas durante las conquistas.

4. Fomento de matrimonios interraciales entre sus soldados.

Su principal idea era promover la homonoia, la igualdad mundial de los hombres, y aspiraba a un gobierno
mundial basado en principios de igualdad y respeto. Sin embargo, este último objetivo no se cumplió, ya que
sus sucesores dividieron su imperio en partes.

Las conquistas de Alejandro Magno y la posterior fundación de reinos en el este promovieron la penetración
de los valores culturales griegos en Oriente. Esto llevó al surgimiento de ciudades como Pérgamo en Asia
Menor y Alejandría en Egipto, que se convirtieron en centros culturales importantes. Soldados, comerciantes
y artesanos griegos emigraron y se establecieron en estas ciudades, fusionando sus costumbres y
conocimientos con los de la población local. Esta fusión resultó en la cultura helenística, que tenía un
carácter cosmopolita y unitario.

La lengua griega (koiné) se enriqueció con términos de diversas regiones, lo que impulsó un comercio
extenso que integraba a China, India y el interior de África. Se intercambiaban una amplia gama de
productos, incluyendo esclavos, vino, cerveza, arroz, cereales, marfil, madera, lino, lana, seda, incienso,
mirra, azufre, sal, oro, plata, vidrio y coral.

Tras la muerte de Alejandro en el 323 a.C., el mundo helenístico se fragmentó en una lucha por el poder, y el
vasto territorio conquistado fue dividido entre sus sucesores. En medio de estas divisiones políticas,
Alejandría se destacó como un ejemplo del triunfo de las ideas de Alejandro. Fue una maravilla del mundo
antiguo y un centro cultural clave.

Alejandro Magno llegó a Egipto en el 332 a.C. después de vencer a Darío III, y los egipcios lo recibieron
como el "libertador de Grecia" del yugo persa. Fundó la ciudad de Alejandría en el año 331 a.C. con un
diseño urbanístico planificado, incluyendo un faro y una biblioteca famosa. La biblioteca de Alejandría,
llena de papiros y manuscritos de diversas culturas, llegó a contener cerca de 900,000 volúmenes,
incluyendo obras de autores como Platón y Aristóteles. La ciudad también albergó un museo dedicado a las
nueve musas, que fue un centro de estudio para científicos y filósofos destacados.

Bajo la dinastía de los Tolomeos, especialmente con Tolomeo Soter, Alejandría se convirtió en el centro
cultural del mundo antiguo, atrayendo a viajeros, sabios, científicos y filósofos. Esta ciudad desempeñó un
papel crucial en la preservación y difusión del conocimiento antiguo.
Finalmente, después de la muerte de Alejandro, su legado tuvo un profundo impacto en la historia, y sus
conquistas y visiones influyeron en la fusión de culturas y la expansión del conocimiento en el mundo
antiguo. La cita de Solón advierte sobre los peligros de la codicia y el mal gobierno, resaltando la
importancia de un buen gobierno para el bienestar de una ciudad-estado.

Seguimos con Roma…

Los horizontes geográficos de la Antigua Roma fueron ampliándose a lo largo de su historia, pero
inicialmente, su conocimiento geográfico no difería significativamente del de los griegos antiguos. A medida
que Roma avanzaba en sus conquistas y exploraciones, su comprensión del mundo se expandía.

Al comienzo de la historia de Roma, su horizonte geográfico se limitaba a las siete colinas que
posteriormente formaron la base de la ciudad de Roma. La ciudad creció rápidamente, y pronto expandió su
dominio por Italia y luego hacia el norte de África, más allá del Mediterráneo. Sin embargo, el punto
culminante de la expansión territorial romana se alcanzó bajo el régimen imperial. En ese momento, decir
"Roma" prácticamente equivalía a decir "el mundo conocido". El Imperio Romano se extendía desde el
extremo occidental de España hasta el norte de Inglaterra, desde el Bósforo en el este hasta los confines de la
India en el sureste. Hacia el sur, abarcaba Arabia y el norte de África, y hacia el norte, llegaba un poco más
allá de los ríos Danubio y Rin. Estas tierras pertenecían al Imperio en diversas formas, ya sea como
provincias imperiales, provincias senatoriales o protectorados. Roma ejercía su autoridad y administración
de manera efectiva en todo su territorio.

Italia, el lugar donde comenzó la historia romana, es una península montañosa que se adentra en el Mar
Mediterráneo. Se divide en dos regiones muy diferentes: Italia continental, en el norte, es una fértil llanura
entre los Alpes y los Apeninos, bañada por el río Po. En la antigüedad, esta región se conocía como Galia
Cisalpina. La Italia peninsular, al sur, está atravesada por los montes Apeninos y se divide en dos partes:
Apulia en el este y Calabria en el oeste, separadas de la isla de Sicilia por el estrecho de Mesina. Cerca del
continente se encuentran las islas de Cerdeña, Córcega y Elba.

La historia de Roma se caracteriza por sus conquistas y la expansión de su cultura. Esta expansión territorial
contribuyó al rápido crecimiento del poder en figuras como Julio César y, tras su muerte, al surgimiento del
Imperio. La asimilación de la cultura de los pueblos conquistados y la tolerancia hacia estos fueron
características distintivas de las conquistas romanas. Los romanos establecieron guarniciones y colonias en
las tierras conquistadas, construyendo infraestructura como acueductos y carreteras. Esto fomentó la
romanización de las provincias y su incorporación a la cultura romana.

--La fundación de Roma se relaciona con la leyenda de los gemelos Rómulo y Remo, criados por una loba y
fundadores de la ciudad. La historia romana pasó de la leyenda a hechos históricos más claros durante el
período republicano, marcado por la expulsión de los reyes etruscos y la instauración de una república con
un Senado y un consulado.--

A partir del siglo V a.C., Roma emprendió una expansión territorial significativa y transformó su
ordenamiento jurídico. No obstante, estas conquistas llevaron a una concentración progresiva de poder en
manos de líderes individuales y a la disminución de los ideales republicanos. Julio César se convirtió en
dictador perpetuo en el año 48 a.C., pero fue asesinado por senadores que temían su poder. Su legado recayó
en su sobrino, Octavio, conocido como César Augusto, quien restableció la paz y sentó las bases del Imperio
Romano. A lo largo del Imperio, se produjeron persecuciones a los cristianos, aunque posteriormente el
cristianismo se difundió ampliamente en el Imperio, transformando su cultura. El siglo III d.C. marcó el
declive del Imperio Romano, con amenazas constantes de bárbaros en las fronteras y una ineficaz
administración en la ciudad de Roma.

El cristianismo
El cristianismo es una religión que se originó en una remota provincia del Imperio Romano y tuvo un
profundo impacto en la historia romana y, en última instancia, en la historia del mundo. A lo largo de su
evolución, el cristianismo se estableció como una de las principales religiones monoteístas, y su relación con
el Imperio Romano desempeñó un papel significativo en su desarrollo.

Cristianismo:

El cristianismo se basa en la figura de Jesucristo, quien vivió en Judea durante el primer siglo de la era
común. Su nacimiento y enseñanzas llevaron a la creación de una nueva religión, que se convirtió en una
fuerza poderosa en la historia de Occidente. El cristianismo enseña que Jesucristo es el Mesías y el Hijo de
Dios, y que su vida, muerte y resurrección son fundamentales para la salvación de la humanidad.

Relaciones entre el Imperio y el Cristianismo:

Las relaciones entre el Imperio Romano y el cristianismo pasaron por varias etapas. Inicialmente, el
cristianismo no fue bien entendido por las autoridades romanas y se vio a menudo como una secta judía. Sin
embargo, a medida que la fe cristiana se extendió y se distanció del judaísmo, comenzaron las tensiones.

La persecución de los cristianos por parte de las autoridades romanas se hizo común en el siglo I y continuó
intermitentemente durante varios siglos. Los cristianos se negaron a adorar a los dioses romanos y al
emperador, lo que a menudo se consideraba un acto de deslealtad hacia el Imperio. Sin embargo, a pesar de
la persecución, el cristianismo continuó creciendo y atrayendo a seguidores.

Difusión del Cristianismo:

La difusión del cristianismo se benefició de varios factores, como la decadencia del paganismo antiguo, el
uso generalizado del griego como lengua común, la influencia de la filosofía griega que había cuestionado
las antiguas creencias religiosas, la diáspora judía, la paz en el Imperio Romano y las sólidas redes de
comunicación a través de las vías romanas. Además, los valores internos del cristianismo, como su enfoque
escatológico de la historia y su respuesta a los problemas humanos, también contribuyeron a su propagación.

Relación con el Judaísmo:

El cristianismo compartió raíces con el judaísmo, pero con el tiempo se distanció. Esto se evidenció en el
Concilio Apostólico de Jerusalén, donde se decidió que los gentiles podían convertirse al cristianismo sin
tener que seguir las costumbres judías. A pesar de las similitudes iniciales, estas dos religiones tomaron
caminos separados.

Persecución y Martirio:

Los cristianos enfrentaron persecuciones, particularmente a medida que crecía su número y comenzaron a
desafiarse abiertamente las prácticas religiosas y la autoridad del Imperio. Fueron acusados de ser una
amenaza para la unidad del Imperio y se les tachó de ser subversivos. Los cristianos se negaron a rendir
homenaje al emperador y a participar en los ritos paganos, lo que les valió la hostilidad de las autoridades
romanas. Estas persecuciones llevaron al martirio de muchos cristianos, quienes a menudo eran sometidos a
torturas crueles y ejecuciones públicas. A pesar de la persecución, el cristianismo siguió creciendo, y los
mártires se convirtieron en un testimonio de la fuerza de su fe.

Finalmente, en el siglo IV, bajo el reinado del emperador Constantino, el cristianismo se convirtió en la
religión oficial del Imperio Romano. Esto marcó un punto de inflexión en su historia, y la relación entre el
cristianismo y el Imperio evolucionó de la persecución a la aceptación oficial. El cristianismo, como
resultado, se convirtió en una fuerza dominante en la historia de Occidente y, finalmente, en todo el mundo.

Diferencias cristianismo- paganismo

Desde el punto de vista religioso, social y moral, las diferencias entre el cristianismo y el paganismo en la
antigua Roma eran notables:

Religión:

- En Roma, se practicaba un politeísmo en el que se adoraban a numerosos dioses, y cada ciudad tenía sus
propios dioses protectores. Además de los dioses tradicionales, Roma incorporó las divinidades de las
naciones conquistadas a su panteón. Incluso los emperadores eran a menudo divinizados y requerían culto.
Los placeres, los vicios y las pasiones también eran objeto de culto.

- Por otro lado, el cristianismo promulgaba la creencia en un solo Dios, al que se le debía adorar con un
culto austero y virtuoso. Los cristianos se aferraban a la enseñanza de Jesucristo y la moral cristiana.

Sociedad:

- En la Roma antigua, existía una fuerte división entre las diferentes clases sociales. Los amos tenían un
poder absoluto sobre sus esclavos, y los propietarios de tierras podían oprimir a sus colonos.

- El cristianismo, en contraste, promovía la idea de que todos los seres humanos son iguales ante Dios y
hermanos en Cristo. Enseñaba la dignidad de los esclavos y fomentaba una fraternidad caritativa entre los
miembros de la comunidad cristiana.

Moral:

- En el momento del nacimiento del cristianismo, la moral en Roma había declinado significativamente. La
búsqueda del placer a menudo prevalecía sobre la moralidad y la humanidad. La famosa frase "Pan y circo"
resume la actitud general.

- En contraste, el cristianismo promovía el servicio a Dios a través del trabajo y el renunciamiento a los
placeres desordenados. Abogaba por una vida basada en la moralidad y la ética, en la que los valores
espirituales eran fundamentales.

La relación entre el cristianismo y el Imperio Romano cambió significativamente a principios del siglo IV,
especialmente bajo el emperador Constantino. En el año 312, Constantino derrotó a su rival Majencio y,
según se dice, tuvo una visión celestial. Ese mismo año, emitió el Edicto de Milán junto con Licinio, su
colega en el Este, que garantizaba la libertad de culto para todos los súbditos del imperio. Si bien esto no
estableció oficialmente al cristianismo como religión del imperio, marcó el fin de las persecuciones y allanó
el camino para que el cristianismo eventualmente se convirtiera en la religión oficial bajo el emperador
Teodosio en el año 380. Constantino otorgó privilegios a los cristianos y apoyó a la Iglesia, y su conversión
al cristianismo marcó un hito en la historia al convertirse en el primer emperador cristiano. Aunque las
razones de su conversión han sido objeto de debate, su actitud hacia los paganos se volvió cada vez más
negativa. Constantino fundó la ciudad de Bizancio, que se convirtió en la "Nueva Roma" o Constantinopla y
promovió la influencia del cristianismo en la vida social y cultural. Además, el cristianismo influyó en la
cultura romana y comenzó un proceso de inculturación. Los cristianos participaron en todas las actividades
del imperio y gradualmente cambiaron las costumbres y prácticas que iban en contra de sus creencias. Este
proceso se conoce como inculturación, donde el cristianismo se adaptó y transformó la cultura existente.

Las herejías también surgieron en la Iglesia cristiana, como el arrianismo, que cuestionaba la naturaleza
divina de Cristo. Esto llevó a la convocatoria de concilios ecuménicos, como el de Nicea en 325, para definir
y defender las creencias fundamentales de la fe cristiana.

En resumen, el cristianismo y el paganismo en Roma representaron dos mundos diferentes desde el punto de
vista religioso, social y moral. La relación entre el cristianismo y el Imperio Romano cambió con el tiempo y
dejó una huella profunda en la cultura europea, marcando la transición de la antigüedad a la Edad Media.

Crisis s. III y Arte de la Antigua Roma

La crisis del siglo III y la disolución del Imperio Romano en Occidente:

1. Crisis del siglo III:

- A partir del siglo III, el Imperio Romano experimentó una crisis marcada por una serie de factores
debilitantes.

- La emigración de la población hacia las zonas rurales llevó a la ruralización y al abandono de la vida
urbana.

- Una ley imperial intentó prohibir que las personas abandonaran sus oficios, pero esta medida no fue
efectiva, lo que exacerbó la desintegración urbana.

- Las luchas por la sucesión en el poder imperial, generalmente respaldadas por facciones militares,
crearon un período de anarquía en el Imperio.

2. Intentos de solución:

- El emperador Diocleciano (283-305 d.C.) dividió el imperio en dos partes: Occidente y Oriente,
estableciendo un sistema de tetrarquía con un emperador (augusto) y su sucesor (césar) en cada parte. Sin
embargo, este sistema no perduró mucho tiempo y no pudo prevenir la anarquía.

3. Constantino y el cristianismo:

- En el año 312, Constantino asumió el control de Roma y, un año después, promulgó el Edicto de Milán
(313), que garantizó la libertad de cultos y puso fin a la persecución de los cristianos.

- Constantinopla, ubicada estratégicamente en el Bósforo, se convirtió en la nueva capital del imperio en el

año 330, promoviendo la paz y la tolerancia religiosa.

4. Teodosio y la división del Imperio:

- Teodosio fue nombrado emperador de Oriente en 379 y, en 394, también asumió el control de Occidente.
 - Fomentó el cristianismo al otorgar fuerza de ley a los acuerdos del Concilio de Nicea.

- Estableció la herencia de sus dos hijos, Arcadio para el Oriente y Honorio para el Occidente.

5. Caída del Imperio Romano en Occidente:

- En el año 476, el último emperador de Occidente, Rómulo Augústulo, fue derrocado por Odoacro, el rey
de los hérulos, marcando el colapso del Imperio Romano en Occidente.

Arte en la Roma Antigua:

1. Características del arte romano:

- El arte romano fue práctico, funcional y ecléctico, centrado en la resolución de problemas arquitectónicos
y decorativos.

- La arquitectura incorporó elementos griegos, etruscos y creó un nuevo orden llamado "compuesto."
 - La escultura romana se centró en el realismo, la fidelidad a los rasgos y tocados, con influencias griegas
y etruscas.

- La pintura ornamental destacó en escenas narrativas de la vida cotidiana, mientras que los mosaicos se
usaron ampliamente en la decoración.
2. Ingeniería romana:

- La ingeniería romana contribuyó significativamente a la consolidación del imperio al crear una red de
caminos, puentes, ciudades y acueductos.
Arte Paleocristiano:
1. El arte Paleocristiano:

- El arte paleocristiano se desarrolló desde el siglo II d.C. hasta el inicio de la Edad Media.

- Durante las persecuciones, los cristianos construyeron pequeñas iglesias en torno a las tumbas de figuras
cristianas importantes, como San Pedro y San Pablo.

2. Edicto de Milán y expansión del arte Paleocristiano:

- El Edicto de Milán en 313 permitió a los cristianos construir basílicas, baptisterios, iglesias y sepulcros,
lo que impulsó la creación de arte paleocristiano.

- El arte paleocristiano incorporó temas y símbolos cristianos en la decoración de iglesias, especialmente a

través de mosaicos.

3. Mosaicos y continuidad artística:

- El arte paleocristiano se destacó por sus mosaicos que representaban temas religiosos.

- Esta forma de arte continuó su evolución hacia el arte románico en los siglos V y VI, marcando una
transición hacia la Alta Edad Media.

El arte romano y paleocristiano refleja la evolución histórica y cultural de la civilización romana, así como
la creciente influencia del cristianismo en la sociedad y el arte.
1ra Etapa s. II al s. IV
Primera etapa (s. II al s. IV):

- En el contexto de las persecuciones a los cristianos, se destacan dos espacios clave: las catacumbas y los
domus ecclesiae.

- Las catacumbas son galerías subterráneas utilizadas para enterrar a los primeros cristianos en Roma en el
siglo II. Están excavadas en el suelo y contienen nichos para sepulturas.

- Las catacumbas representan la humildad y la igualdad de todos los cristianos ante Dios.

- En las pinturas de las catacumbas se encuentran narraciones que recuerdan historias del Antiguo y del
Nuevo Testamento, destinadas a presentar ejemplos de virtud y salvación a los recién convertidos.

- El arte de las catacumbas es sencillo desde el punto de vista técnico y formal, pero con un contenido
significativo y simbólico.

- Se utilizan símbolos como el pez para representar a Cristo, la paloma para simbolizar la paz del paraíso y
el ancla para expresar la firmeza de la fe.

- Los cristianos encontraron en las catacumbas la fuerza y el apoyo para enfrentar las persecuciones.

Domus ecclesiae:

- Estas eran casas privadas donadas por los primeros cristianos a las comunidades cristianas.

- Los domus ecclesiae se adaptaban para el culto y la administración de los sacramentos, especialmente la
Eucaristía.

- Inicialmente, las salas estaban dedicadas a la formación doctrinal tanto de los fieles como de los
catecúmenos.

- Se nombraban según el propietario de la casa y, posteriormente, se cambiaron los nombres por los de
mártires y santos.
2nda Etapa s. IV al V
Segunda etapa (s. IV al V):

- Tras el Edicto de Milán y el Edicto de Tesalónica, que otorgaron tolerancia religiosa y establecieron el
cristianismo como religión oficial del Imperio Romano, se dio un florecimiento del arte Paleocristiano.

- La basílica romana se transformó en basílica cristiana, un lugar de culto y oración, destacando por su eje
longitudinal que conduce hacia el altar.

- Las basílicas presentaban áreas públicas en el acceso, incluyendo pórticos, atrios, nártex y la nave de la
iglesia.

- El presbiterio, separado por columnas, estaba reservado para los presbíteros, y el ábside era una
característica común.

- Los mártires y santos eran venerados, y se construían criptas para guardar sus reliquias.

- El arte Paleocristiano destacaba por su contenido simbólico, mosaicos y bajorrelieves que transmitían
mensajes religiosos y morales.

- Los mártires y santos eran figuras comunes en las representaciones artísticas.

Creación de una iconografía cristiana:

- El cristianismo adaptó las imágenes como símbolos, emblemas y motivadores de la devoción en lugar de
prohibirlas.

- En un principio, se buscaba la sencillez y el esquematismo en las representaciones para hacer comprensible

el cristianismo a personas con cosmovisiones diferentes.

- Surgieron alegorías para los evangelistas (tetramorfos) y otros símbolos como el pez, la paloma y el ancla.

- San Agustín aportó a la teología de la historia, destacando la lucha entre la Ciudad de Dios y la Ciudad
Terrenal, representando el bien y el mal.

- En su visión, la historia es lineal, con un principio y un fin en el que la Ciudad de Dios triunfará, y la paz
es el objetivo, alcanzada a través del orden y la justicia.

- La Iglesia es vista como guía y mentora de la sociedad y el Estado.

- La historia tiene seis épocas, y Cristo es el Salvador y centro de la historia.

- La presencia del pecado original, la caída de Roma y la lucha entre el bien y el mal son temas cruciales en
la visión de la historia de San Agustín.
- La historia es Cristocéntrica, y la Iglesia desempeña un papel fundamental en la salvación de los
individuos.

- La voluntad y libertad de Dios y del hombre

Unidad 4: Edad Medieval

Europa medieval se caracterizó por una serie de elementos cruciales:

1. Geocentrismo y concepción ptolemaica: Durante la Edad Media, prevaleció la idea de que la Tierra era
el centro del universo (geocentrismo). Esta perspectiva se basaba en la concepción astronómica de Claudio
Ptolomeo, que consideraba que la Tierra era esférica y ocupaba un punto fijo en el espacio. Esta visión
astronómica se mantuvo en Europa durante la Edad Media y estaba en concordancia con los supuestos
astronómicos de Aristóteles.

2. Fragmentación territorial: La Europa medieval experimentó una fragmentación territorial significativa.

Esta fragmentación se debió en parte a la división del Imperio Romano en Oriente y Occidente y también al
establecimiento de diversos reinos por invasores bárbaros. Como resultado, se formó un mosaico de reinos
en toda Europa, cada uno con su propia autoridad y cultura

3. Influencia del contacto con el Islam: El contacto con el mundo árabe, que se produjo debido a la
invasión árabe en Occidente, aportó nuevos conocimientos geográficos a Europa. Esto incluyó una mejor
comprensión de la geografía descriptiva, como la confirmación de la existencia de China y un mayor
conocimiento del continente africano. Este intercambio cultural y de conocimientos influyó en el desarrollo
posterior de la Europa medieval.

4. Las Cruzadas: Las Cruzadas, una serie de expediciones militares que tuvieron lugar entre los siglos XI y
XIV, desempeñaron un papel fundamental en el contacto entre los espacios de Occidente y Oriente. Estas
cruzadas tuvieron consecuencias significativas en la estructura económica de la Europa medieval, ya que
llevaron al intercambio de bienes, conocimientos y culturas entre Europa y Oriente.

5. El término "Edad Media": El término "Edad Media" es una construcción moderna que se ha utilizado
para describir un período de transición entre la antigüedad y la era moderna. Durante la Edad Moderna, se
consideraba a la Edad Media como una época de "oscurantismo" y "barbarie". Sin embargo, en la actualidad,
los estudiosos han revisado esta concepción y reconocen que la Edad Media fue una etapa de desarrollo y
evolución histórica, con su propia riqueza y herencia cultural. No se puede considerar simplemente como un
puente entre la antigüedad y la era moderna, ya que tuvo sus propios procesos críticos y de desarrollo.

6. Los orígenes de la Edad Media: La transición hacia la Edad Media no fue sencilla para Europa
Occidental. Se caracterizó por la decadencia del Imperio Romano en Occidente, coincidiendo con las
llamadas "invasiones bárbaras", que fueron, en realidad, oleadas migratorias de pueblos germanos y
vikingos. Estos grupos migratorios ocuparon gradualmente las regiones del Imperio y contribuyeron a la
fragmentación territorial de Europa.

7. El monacato: pilar del mundo medieval: Los monasterios desempeñaron un papel fundamental en la
vida y cultura medieval. Los monjes, que llevaban una vida de oración, trabajo y servicio, evangelizaron
regiones donde la palabra de Dios no había llegado. Además, fueron los copistas que preservaron textos
antiguos y crearon manuscritos iluminados, contribuyendo a la conservación del conocimiento y la cultura
de la antigüedad.

8. Nuevas órdenes religiosas: A partir del siglo XII, surgieron nuevas órdenes religiosas mendicantes,
como los dominicos y los franciscanos. Estas órdenes revitalizaron la evangelización y la caridad,
atendiendo a los pobres y enfermos, y desempeñaron un papel esencial en la vida y cultura de la Europa
medieval.
Cosmovisión medieval

La cosmovisión medieval es una comprensión del mundo que predominaba en la Edad Media y que se
basaba en la creencia de que el mundo era un orden creado por Dios. En este marco conceptual, el orden
divino era el principio rector de la vida y de todas las estructuras de la sociedad medieval. Esto tenía un
profundo impacto en las concepciones jurídicas, políticas y sociales de la época, en marcado contraste con la
mentalidad posmoderna que se caracteriza por el relativismo y la falta de jerarquías.

Algunos aspectos clave de esta cosmovisión incluyen:

1. Jerarquía y Orden Divino: El orden divino era la verdad fundamental en la que se basaba la Edad
Media. Según esta concepción, Dios había establecido un orden jerárquico en la creación, y esto se reflejaba
en todos los aspectos de la vida. La jerarquía era una característica central en la organización de la sociedad,
la Iglesia y el gobierno.

2. Subordinación a lo Divino: El orden natural se consideraba subordinado al sobrenatural. La fe religiosa y

la relación con lo divino eran el centro de la vida en la Edad Media, lo que llevaba a una perspectiva
teocéntrica del mundo, donde Dios ocupaba el lugar central.

3. Geocentrismo y Cosmología Medieval: La visión del universo en la Edad Media era geocéntrica, lo que
significa que se creía que la Tierra ocupaba el centro del universo, con la luna, el sol y los planetas girando a
su alrededor, siguiendo una visión aristotélica.

4. La Importancia del Ser Humano: El ser humano era visto como la máxima creación de Dios y se
consideraba a sí mismo como un "microcosmos". En otras palabras, se creía que en la naturaleza humana se
sintetizaban todas las perfecciones de los seres inferiores y se aspiraba a una semejanza más perfecta con
Dios.

5. Sistema de Estamentos: La sociedad medieval se organizaba en base a un sistema de estamentos, que

eran grupos cerrados con un estatus social y roles específicos. La pertenencia a un estamento estaba
determinada por el linaje y la herencia de sangre, y no necesariamente por la riqueza. La movilidad social
era limitada y dependía de méritos extraordinarios o matrimonios.

6. Privilegios y Sangre Noble: La nobleza se destacaba como un estamento privilegiado, y la riqueza estaba
fuertemente relacionada con la sangre noble. Los privilegios concedidos por el rey a los nobles, como tierras
y exención de impuestos, se basaban en la herencia de sangre y el servicio al rey.

7. Papel de la Iglesia: La Iglesia tenía un papel central en la vida medieval como intermediaria entre los
hombres y Dios. También desempeñaba un papel político importante, ya que el poder político se consideraba
subordinado al poder espiritual. La Iglesia también otorgaba legitimidad a la autoridad del rey.

8. Cristiandad Medieval: La sociedad medieval se consideraba una Cristiandad, donde el orden espiritual
(el cristianismo y la Iglesia) y el orden temporal (representado por el rey) estaban estrechamente
relacionados. El Estado se veía como una entidad cuyo propósito era el bienestar temporal de los súbditos,
subordinado a un orden eterno y sobrenatural.

En resumen, la Edad Media se caracteriza por una cosmovisión teocéntrica en la que el mundo se ve como
un orden divino jerárquico. La sociedad estaba organizada en estamentos, la Iglesia desempeñaba un papel
central y la fe religiosa era el fundamento de la vida medieval. Esta concepción del mundo influyó en la
organización social y política, así como en la mentalidad de la época.

La Alta Edad Media y el Imperio Carolingo

La Alta Edad Media, que abarca los siglos V al XI, fue un período histórico caracterizado por varios
aspectos importantes en Europa:
1. Fragmentación política y territorial: La caída del Imperio Romano llevó a la fragmentación del poder
político. En lugar de un poder centralizado, se formaron una serie de reinos y señoríos que caracterizaron la
Alta Edad Media. Esto resultó en una estructura política descentralizada y una falta de unidad en Europa.

2. Tres tradiciones culturales influyentes:

- Tradición Grecolatina: Europa heredó la cultura grecolatina a través de la influencia del Imperio
Romano. La educación clásica, la filosofía y las artes tuvieron un impacto duradero en la Alta Edad Media.

- Tradición Germánica: Las tribus germánicas que se asentaron en Europa trajeron sus propias tradiciones
culturales, legales y sociales, que se mezclaron con las anteriores.

- cristianismo: La cristianización fue un proceso esencial en esta época. La Iglesia desempeñó un papel
crucial en la vida de la sociedad y ejerció una gran influencia en la cultura, la moral y la política.

3. Feudalismo temprano: El feudalismo se desarrolló durante la Alta Edad Media. Los campesinos se
volvieron dependientes de los grandes propietarios (señores) a cambio de protección y justicia primitiva.
Surgieron lazos de vasallaje y servidumbre, y se establecieron relaciones feudales que se basaban en prestar
servicios militares y otros servicios al señor a cambio de tierras.

4. Aristocracia guerrera: Los grandes propietarios, con raíces germánicas, consolidaron una aristocracia
guerrera. Los lazos de parentesco y las relaciones de vasallaje jugaron un papel crucial en la estructura de
poder. El feudalismo fue un proceso largo que se consolidó en los siglos XI y XII.

5. Unidad en la fe y la Iglesia: En un contexto de fragmentación política, la unidad de los pueblos

medievales recaía en la fe cristiana y en el papel civilizador de la Iglesia. La Iglesia proporcionó un marco
de referencia moral y social y desempeñó un papel central en la vida de la sociedad medieval.

6. El feudalismo temprano: Durante esta época, la sociedad medieval se basaba en la idea de que la
pertenencia a un estamento estaba vinculada a la sangre, lo que significa que alguien era considerado noble
debido a su linaje. Esto se relaciona con las relaciones clientelares romanas y la nobleza guerrera germánica.

7. El auge del Imperio Carolingio: Carlomagno, un líder destacado de la Alta Edad Media, fundó el Imperio
Carolingio. A lo largo de su reinado, Carlomagno extendió las fronteras de su reino, luchó contra los
musulmanes y los lombardos en Italia, y consolidó su poder como protector de la Iglesia.

8. La coronación de Carlomagno como Emperador de los Cristianos: En el año 800, el Papa León III
coronó a Carlomagno como Emperador de los Cristianos, un acto que simboliza la unión de poder político y
religioso en Europa. Esto marcó un cambio significativo en la relación entre el poder imperial y la Iglesia.

En resumen, la Alta Edad Media fue un período de fragmentación política, desarrollo del feudalismo y una
influencia significativa del Cristianismo, con la Iglesia desempeñando un papel central. El Imperio
Carolingio representó un intento de restaurar la unidad bajo un liderazgo imperial cristiano y fusionó las
tradiciones culturales para dar forma a la Europa medieval.

Renacimiento Carolingo
Educación y alfabetización: Aunque se sabe que Carlomagno aprendió a leer y escribir más tarde en su
vida, valoraba la educación y promovía la alfabetización en su imperio. Estableció escuelas en monasterios y
catedrales, donde se enseñaba latín, gramática, retórica, dialéctica y matemáticas. Además, incentivó la
copia y la preservación de manuscritos clásicos y cristianos, lo que ayudó a preservar el conocimiento de la
antigüedad.

Renacimiento intelectual: El Renacimiento Carolingio no solo se centró en la recuperación del

conocimiento antiguo, sino que también vio el desarrollo de una nueva erudición y filosofía. Se fomentó la
discusión y el debate intelectual, y la enseñanza se basó en textos clásicos y religiosos.

Lenguas y diversidad cultural: A pesar de que Carlomagno era de habla germánica, también promovió el
aprendizaje del latín y otras lenguas extranjeras. Esto condujo a un aumento en la diversidad cultural y
lingüística dentro del imperio.

Promoción de la Iglesia: La Iglesia desempeñó un papel fundamental en el Renacimiento Carolingio.

Carlomagno trabajó en estrecha colaboración con líderes religiosos, incluidos Alcuino de York, para
promover la educación y la cultura, y para fortalecer la influencia de la Iglesia en su imperio.

El Renacimiento Carolingio, o Renacimiento Carolingio, fue un período de renovación cultural en la Europa

occidental durante el gobierno de Carlomagno y su Imperio Carolingio, que abarcó el siglo VIII y el siglo
IX. Además de sus esfuerzos en la educación y la promoción del aprendizaje, el Renacimiento Carolingio
también dejó un impacto significativo en el arte y la arquitectura de la época. Aquí se detalla más sobre el
arte y la arquitectura de este período:

1. Arquitectura:

- Capilla Palatina de Aquisgrán: Esta iglesia, construida por orden de Carlomagno en Aquisgrán,
Alemania, es uno de los ejemplos más notables de arquitectura carolingia. Combina elementos de la
arquitectura romana y bizantina, con una gran cúpula central y un altar que se asemeja a la basílica de San
Pedro en Roma. La Capilla Palatina se convirtió en un modelo para muchas iglesias carolingias posteriores.

- Monasterios e iglesias rurales: Además de las estructuras imperiales, el Renacimiento Carolingio

también influyó en la arquitectura de monasterios y iglesias en áreas rurales. Estas iglesias a menudo
presentaban paredes de piedra gruesas y pequeñas ventanas, lo que creaba un ambiente austero y
penumbroso en su interior

- Fortificaciones: Además de las estructuras religiosas, se construyeron fortificaciones, como castillos y

murallas, en esta época para protegerse de las incursiones bárbaras. Estos castillos tenían un diseño
funcional, con gruesos muros y torres de vigilancia.

2. Escultura:

- Las esculturas carolingias se caracterizan por ser decorativas y se centraban en temas religiosos. Los
capiteles (las partes superiores de las columnas) estaban adornados con motivos geométricos, figuras
humanas y representaciones religiosas.

- Los tímpanos de las puertas de las iglesias eran especialmente notables. Muchos de ellos presentaban
esculturas del Juicio Final o la Maiestas Domini, que representaba a Cristo en su gloria.

- Los temas religiosos se centraban en la adoración de Cristo, la Virgen María y escenas bíblicas.
3. Pintura:

- La pintura románica se encontraba principalmente en las iglesias y monasterios. Los frescos y murales
eran comunes y a menudo representaban escenas bíblicas y religiosas.

- Los colores eran intensos y se usaba una paleta limitada. Los artistas se esforzaron por comunicar
mensajes religiosos y morales a través de sus obras.

4. Manuscritos iluminados:

- Los manuscritos iluminados eran libros manuscritos que contenían texto ilustrado. Estos manuscritos
eran comunes en los monasterios y se utilizaban para la oración y el estudio.

- Los iluminadores decoraban los manuscritos con intrincadas ilustraciones, a menudo con detalles y
colores vivos. Los manuscritos más famosos de esta época incluyen el Evangeliario de Lorsch y el
Evangeliario de Godescalco.

5. Influencias artísticas:

- El arte carolingio fue influenciado por la arquitectura romana y paleocristiana, así como por la tradición
artística bizantina. Se mezclaron elementos de estas tradiciones con un enfoque cristiano y germánico
distintivo.

El Renacimiento Carolingio desempeñó un papel crucial en la evolución del arte y la arquitectura en Europa
occidental. Aunque se basó en influencias antiguas, logró desarrollar un estilo propio que sentó las bases
para los estilos posteriores, como el románico y el gótico. Este período no solo revitalizó la educación y la
cultura, sino que también dejó un legado artístico duradero en la historia europea.

6. Centros de aprendizaje: Carlomagno fundó la Escuela Palatina en Aquisgrán, que se convirtió en un

importante centro de aprendizaje e investigación. Además, alentó la creación de escuelas en monasterios y
catedrales en todo su imperio, lo que contribuyó al florecimiento cultural.

7. Legado cultural duradero: Aunque el Imperio Carolingio se fragmentó después de la muerte de

Carlomagno, su legado cultural perduró. El Renacimiento Carolingio sentó las bases para la educación en la
Edad Media y más allá. La influencia de Carlomagno se puede ver en la posterior fundación de
universidades y la preservación de textos antiguos.

8. El Tratado de Verdún y el Sacro Imperio Romano Germánico: Después de la muerte de Carlomagno, el

Imperio Carolingio se dividió en tres reinos según el Tratado de Verdún en 843. Sin embargo, la idea de un
imperio unificado fue revivida posteriormente por Otón I, quien se convirtió en el emperador del Sacro
Imperio Romano Germánico en 962, marcando el resurgimiento de un imperio de influencia europea en el
siglo X.

9. Arte románico: El Renacimiento Carolingio influyó en el arte de la Alta Edad Media, dando lugar al
estilo románico, que se caracterizó por la construcción de iglesias y catedrales con elementos arquitectónicos
sólidos, como muros gruesos y bóvedas de cañón. La temática religiosa y las figuras esculpidas adornaban
estos edificios, y los manuscritos iluminados también se desarrollaron en esta época.

El arte románico, surgido en Europa en el siglo XI y extendido hasta mediados del siglo XIII, es el primer
estilo de alcance internacional en la historia del arte europeo. Originado en la región de Borgoña en Francia
y asociado a la Orden Benedictina, especialmente a la abadía de Cluny, el arte románico encontró su
esplendor a lo largo del Camino de Santiago, una ruta de peregrinación cristiana que atrajo a viajeros de toda
Europa. Desde allí, se irradió a diversas regiones, incluyendo España, Inglaterra, Suiza, los Países Bajos,
Hungría, Croacia y Eslovenia. Este estilo artístico internacional, el primero de su tipo en Europa, se nutrió
de influencias anteriores, como el arte bizantino, árabe, romano y germánico. Su aparición coincidió con el
período del Feudalismo en Europa, un tiempo de cambio y expansión en la vida urbana, demográfica,
política, artística y económica del continente.

Los elementos arquitectónicos característicos del románico se centraban en la iglesia o el edificio de culto
cristiano, el monasterio, el castillo y, posteriormente, los palacios y las murallas de las ciudades en
crecimiento. Las iglesias románicas solían tener muros gruesos y contrafuertes para soportar bóvedas de
cañón y bóvedas de arista. Las ventanas eran pequeñas, especialmente en los ábsides, donde se encuentra el
altar.

En términos de planta arquitectónica, las iglesias pasaron de ser basilicales (sin naves) a presentar una, tres o
cinco naves, adoptando finalmente una planta de cruz latina, que simboliza la Cruz de Cristo. También se
utilizó la planta circular o poligonal, como en las iglesias templarias, y la de cruz griega. El interior de las
iglesias románicas era poco luminoso debido a los muros gruesos y las ventanas estrechas, creando un
ambiente de recogimiento y espiritualidad.

El románico también se destacó por su escultura y pintura, que se consideraban elementos supeditados y
decorativos del edificio. La decoración de las iglesias a menudo se centraba en los capiteles de las columnas
y los tímpanos sobre las puertas, donde se representaban temas religiosos como el Cristo Todopoderoso,
rodeado por los Tetramorfos, y el Juicio Final.

El arte románico se caracteriza por la presencia de elementos esculpidos llamados canecillos, que se
encuentran bajo las cornisas de los edificios. Estos canecillos tenían una función didáctica y moralizante,
transmitiendo mensajes y enseñanzas a través de su simbología. Podían ser geométricos, representar figuras
humanas realizando acciones cotidianas o mostrar animales reales y fantásticos, cada uno con un significado
específico. Además de la arquitectura y la escultura, la pintura mural también desempeñó un papel
importante en el arte románico. A menudo se utilizaban técnicas de fresco y temple, y los colores intensos se
usaban para difundir mensajes cristianos en las paredes de las iglesias. Las miniaturas en biblias y salterios
eran otras manifestaciones de la pintura románica..
10. Peregrinaciones y difusión del arte románico: Las rutas de peregrinación, como el Camino de Santiago,
promovieron la difusión del arte románico en toda Europa, ya que los peregrinos visitaban iglesias y lugares
santos decorados con elementos románicos.

Las Cruzadas
Las Cruzadas, un conjunto de campañas militares que se desarrollaron entre los siglos XI y XIII, tuvieron un
profundo impacto en la Edad Media y marcaron una época de cambios significativos en Europa. Aquí se
presenta un análisis más detallado:

Orígenes de las Cruzadas: Las Cruzadas surgieron como respuesta a la expansión musulmana en Europa y
el Medio Oriente. En el siglo VIII, los musulmanes habían conquistado gran parte de España y avanzado
hacia el norte. El Imperio Bizantino se veía amenazado por la presencia de musulmanes, que habían
establecido su capital en Nicea, cerca de Constantinopla. En 1095, el Papa Urbano II convocó al Concilio de
Clermont en Francia, donde se llamó a la cristiandad occidental a emprender una serie de incursiones
militares con el fin de recuperar Jerusalén y el Santo Sepulcro, que habían caído en manos musulmanas. La
Primera Cruzada comenzó en 1096.

Consecuencias de las Cruzadas:

- Renacimiento de la vida rural y urbana: Las Cruzadas generaron un auge en la actividad económica. Los
caminos de peregrinación, los viajes de los cruzados y el establecimiento de mercaderes impulsaron la vida
rural y el resurgimiento de las ciudades. Se produjo un aumento en la población, la agricultura prosperó, y se
roturaron nuevas tierras. Este período coincidió con una Europa en expansión en todos los aspectos de la
vida.

- Transformación del comercio: El comercio floreció con la apertura de nuevas rutas hacia Oriente y la
creación de ferias comerciales en primavera. Mercaderes de diversas naciones, como ingleses, franceses,
lombardos, genoveses y otros, comerciaban en estas ferias. El establecimiento de ligas comerciales, como la
Liga Hanseática, consolidó el poder de las ciudades comerciales en el norte de Europa y el Mar Báltico.

- Auge de las ciudades libres: El rápido enriquecimiento de la burguesía llevó al reconocimiento de ciudades
libres, lo que marcó una creciente autonomía frente a los señores feudales. Las ciudades libres se
organizaron en ligas o hermandades para fortalecer su actividad comercial y protegerse contra las
pretensiones de los señores.

- Corporaciones de comerciantes y artesanos: Surgieron corporaciones que agrupaban a maestros y

aprendices de un mismo oficio bajo la protección de un santo patrón. Estas corporaciones promovieron la
dignidad del trabajo y la búsqueda de la perfección en la confección artesanal.

- Nuevo enfoque de la vida monástica: Surgieron órdenes religiosas dedicadas a la acción apostólica, la
educación y la predicación contra herejías. Los monasterios se dedicaron a la enseñanza en universidades y
al combate contra creencias heréticas.

- Arte Gótico: El arte gótico, caracterizado por la arquitectura de catedrales con impresionantes vitrales,
reflejó la espiritualidad y el esplendor de la época. Las catedrales góticas se convirtieron en expresiones
arquitectónicas de la cosmovisión de la Edad Media.

En resumen, las Cruzadas desencadenaron un período de transformaciones significativas en la Edad Media,

que incluyó un resurgimiento en la vida rural y urbana, un auge en el comercio, la creación de ciudades
libres y el desarrollo de corporaciones de comerciantes y artesanos. También promovieron un nuevo enfoque
en la vida monástica y dieron lugar al florecimiento del arte gótico en el siglo XII y XIII. Estos cambios
sentaron las bases para lo que se conoce como la "Plena Edad Media".
Universidades y el saber medieval
En la Edad Media, las universidades jugaron un papel crucial en el desarrollo y la promoción del
conocimiento. Comenzaron como escuelas parroquiales que enseñaban habilidades básicas como la lectura,
matemáticas, catecismo y gramática. Sin embargo, a medida que el interés por el saber creció, estas escuelas
evolucionaron y comenzaron a enseñar las "artes liberales", que incluían el Trivium (Gramática, Retórica y
Dialéctica) y el Cuatrivium (Aritmética, Geometría, Música y Astronomía). Esto se asemeja a lo que hoy
conocemos como educación primaria y secundaria.

Con el tiempo, estas escuelas evolucionaron aún más y se convirtieron en "estudios generales", instituciones
educativas abiertas a la población en general. Aunque no ofrecían una educación profesional, servían como
una base introductoria para aquellos que deseaban continuar estudiando.

En el siglo XIII, surgieron las primeras universidades en Europa, como Bolonia, París, Oxford y Salamanca.
Estas universidades ofrecían una amplia gama de disciplinas, incluyendo Derecho, Filosofía, Teología y
Medicina. Se centraron en la Escolástica, un enfoque intelectual que buscaba reconciliar la fe con la razón,
utilizando un método lógico-deductivo. Un ejemplo destacado de la promoción del conocimiento en la Edad
Media fue Hildegard de Bingen, una abadesa que hizo contribuciones significativas a la medicina, botánica,
zoología y música. Creía en la interrelación entre el macrocosmos y el microcosmos y se consideraba un
instrumento de Dios en la búsqueda de la verdad.

Por último, en la Edad Media, hubo una sistematización del conocimiento matemático y científico. Por
ejemplo, monasterios copiaron y preservaron textos antiguos, como la "Aritmética de Boecio", que resumía
obras de autores clásicos como Nicómaco de Gerasa, Euclides y Ptolomeo. Este conocimiento matemático
resultó útil en la construcción de catedrales góticas, que no solo eran obras de arquitectura impresionantes,
sino también ejemplos de aplicaciones prácticas de ciencias y matemáticas.

Crisis hasta la Edad Moderna

La Baja Edad Media, que comprende los siglos XIV y XV, estuvo marcada por una serie de eventos y crisis
que allanaron el camino hacia la Edad Moderna. Aquí se detallan las principales características y
acontecimientos de este período:

Crisis Económica:

En el inicio del siglo XIV, Europa experimentó una profunda crisis económica. Lluvias torrenciales y malas
cosechas amenazaron la producción de alimentos, lo que condujo a la hambruna y al aumento de la
mortalidad. Además, la economía basada en la agricultura sufrió a raíz de estas condiciones climáticas
adversas. La falta de metales preciosos y la necesidad de financiar costosos gastos de guerra y burocracia
llevaron al endeudamiento de los estados feudales y la amenaza de quiebras.

Surgen las Monarquías Absolutas:

La crisis económica contribuyó al surgimiento de monarquías absolutas. La burguesía apoyó a los reyes en
su consolidación de poder al frente de los estados, lo que marcó un cambio significativo en el sistema de
gobierno feudal. Las universidades, que antes estaban bajo la tutela del Papado, comenzaron a respaldar
teóricamente a las nuevas monarquías y se involucraron más en la política estatal.
Crisis entre el Poder Temporal y la Iglesia:

Las tensiones entre el poder temporal y la Iglesia se agudizaron. En particular, el conflicto entre el rey
francés Felipe IV y el Papa Bonifacio VIII marcó un hito en la evolución de la concepción moderna del
"estado". La necesidad de los estados de obtener recursos económicos condujo a la creación de impuestos
sobre propiedades eclesiásticas, lo que generó una disputa entre la autoridad temporal y la Iglesia.

Guerra de los Cien Años:

La Guerra de los Cien Años (1337-1453) enfrentó a Francia e Inglaterra. Esta guerra se debió a rivalidades
dinásticas y a la pretensión de los reyes ingleses de reclamar el trono francés. La guerra contribuyó a
acelerar la decadencia del feudalismo, ya que los señores feudales quedaron en bancarrota por los costos de
mantener ejércitos y las luchas. Esto también exacerbó la crisis económica general.

Descenso Demográfico, Pestes y Hambre:

Un aspecto importante de la Baja Edad Media fue el descenso demográfico. La peste negra, que comenzó en
1348, se propagó por Europa y mató a aproximadamente un tercio de la población. Esta enfermedad, que se
originó en Asia, llegó a través de las rutas comerciales y fue devastadora. Además de la peste, se
experimentaron otros problemas como hambrunas y epidemias.

La Caída de Constantinopla y el Comienzo de las Exploraciones:

El período final de la Baja Edad Media vio la caída de Constantinopla en manos de los turcos otomanos en
1453. Esto marcó el fin del Imperio Romano de Oriente y el comienzo de una nueva era. La exploración
hacia el Atlántico, en busca de rutas comerciales con Oriente, culminó con el Descubrimiento de América en
1492.

Este período de transición hacia la Modernidad también vio el florecimiento de Florencia como un
importante centro comercial y cultural, que lideró el Humanismo y el Renacimiento italiano. A pesar de los
conflictos internos, Florencia prosperó y sentó las bases para el Renacimiento europeo.

El pensamiento: el humanismo bajomedieval, transición hacia el mundo Moderno.

El pensamiento humanista bajomedieval, que emergió en Italia a finales del siglo XIII, representó un
importante cambio intelectual y cultural que se propagó por toda Europa, marcando una transición hacia el
mundo moderno. Los humanistas, al usar el término "Humanitas," expresaban un ideal de hombre que
abogaba por el desarrollo armonioso y completo de todas las capacidades, habilidades y valores del ser
humano.

Este movimiento humanista no se basó en un "redescubrimiento" de la antigüedad clásica, sino en una

renovación de enfoque, promoviendo una nueva orientación que difiere de la perspectiva latina y medieval.
Para comprender y abrazar plenamente los escritos clásicos, los humanistas se centraron en la filología y en
el dominio de las lenguas clásicas. Este enfoque los llevó a un "retorno a las fuentes," buscando comprender
y asimilar el espíritu de los escritos antiguos.

El objetivo máximo del humanismo era la formación integral y armónica del individuo, abarcando no solo
sus aspectos intelectuales sino también los morales y religiosos. Los humanistas creían que los clásicos
podían servir para elevar la posición del ser humano dentro de la Creación. A pesar de que muchos de los
pioneros del humanismo eran cristianos, buscaron una formación profundamente cristiana, promoviendo el
estudio de las fuentes cristianas, incluyendo el Antiguo Testamento, el Evangelio y las obras de los Santos
Padres.

A lo largo del siglo XIV, también hubo una corriente humanista "paganizante" que se alejó de la influencia
religiosa. Esta corriente fue influenciada por la crisis entre el Imperio y el Papado y marcó un movimiento
hacia la secularización cultural y la afirmación de la autonomía humana.

El movimiento humanista se desarrolló en asociaciones y academias en lugar de en el ámbito de las

universidades. Sin embargo, su influencia se extendió a las instituciones académicas, impulsando el estudio
de los clásicos. Florencia se considera la cuna del humanismo, desde donde se propagó a otras partes de
Europa, culminando así la era de esplendor medieval y preparando el terreno para la Edad Moderna.

Dante Alighieri y su obra "La Divina Comedia" simbolizan la culminación del espíritu medieval. La obra de
Dante incorpora elementos medievales, como el simbolismo del número tres y la cosmovisión aristotélico-
tomista, al tiempo que refleja influencias humanistas al escribir en toscano, expresar admiración por los
poetas latinos y combinar elementos religiosos y seculares en su narrativa.

En resumen, el pensamiento humanista bajomedieval marcó una transición hacia la modernidad,

combinando elementos medievales con un enfoque en el individuo, el conocimiento de las fuentes clásicas y
la formación integral del ser humano. La obra de Dante Alighieri, "La Divina Comedia," ejemplifica esta
síntesis cultural y filosófica.

Fin… (creo)