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ACTIVIDADES ARGUMENTACIÓN

EJERCICIOS

1. Lee el siguiente texto y responde a las preguntas que aparecen a continuación.

Os quiero

Después de muchos años conviviendo con gente de mi década, tras observar su forma
de actuar o de hablar en las redes sociales o teléfonos móviles, he llegado a la
conclusión de que la generación nacida en los 90 y en el siglo XXI no conoce el
verdadero significado de un “te quiero”. Y es que actualmente el “te quiero” se utiliza
prácticamente como un “hola” o un “adiós”, especialmente entre personas del sexo
femenino. Es tan sencillo como entrar al Tuenti y observar los comentarios que se hacen
entre amigos, en un alto porcentaje finalizados con un “te quiero” como sustitutivo del
“adiós”. No obstante, no suelen utilizarlo tanto los hombres con otros hombres, aunque
también es verdad que cada vez lo utilizan más con expresiones del tipo “te quiero tío”.
Esta “moda”, si es que así se le puede llamar, está llegando a niveles en los que dejan al
“te quiero” como un simple saludo y no como una palabra con la que demostrar amor a
otra persona. Incluso podría admitirse que se utilizara para un ser querido, como un
familiar, o hasta un mejor amigo o amiga, pero que se utilice con cualquier conocido me
parece casi un insulto a la expresión. ¿Qué palabra usa esa gente para expresar el amor?
Está claro que también existiría un “te amo”, pero creo que eso son palabras mayores y
que no deberían usarse si realmente no sale del corazón decirlas. Supongo que también
habrá gente de esta generación que piense de -lo que a mí me parece- una forma
coherente, pero está claro que somos una minoría.
Yo solo sé que, si esto sigue igual, el “te quiero” perderá todo su significado, si es que
no lo ha perdido ya, y que tarde o temprano pasará lo mismo con el “te amo” y la única
solución que yo le vería a eso sería inventar palabras nuevas, pero me parecería llegar a
extremos innecesarios, ya que yo, el “te quiero”, lo uso y siempre lo usaré para
demostrar el amor a mi pareja, y si quedamos unos pocos que lo usemos como debe ser,
su significado no desaparecerá nunca.
Ignacio Ruiz
a) Indica cuál es la tesis que defiende el autor de este texto.
b) Divide el texto en partes de tal forma que se correspondan con la exposición de la
tesis, el cuerpo argumentativo y la conclusión.
c) ¿Qué funciones del lenguaje aprecias en el texto? ¿Cuáles y por qué?
c) Expresa de forma argumentada tu opinión acerca del tema que aborda el texto. ¿Estás
de acuerdo con la tesis que mantiene el autor del mismo?
Cinetimados
El suave caminar sobre el suelo enmoquetado, las risas de los niños, el peculiar olor a
sal y mantequilla unido al repiqueteo constante del crujir de palomitas…Vamos, lo que
viene siendo la experiencia de una tradicional tarde de cine es hoy en día, señores y
señoras, una soberana estafa.
Tú, inocente ciudadano, llegas al cine feliz y contento, esperas pacientemente una cola
eterna, que más que en el cine pareces que estar en el metro en hora punta, y cuando
llega tu turno pides educadamente tu entrada. Como hay mucha gente te toca una butaca
de esas de las primeras filas, de las que hacen que salgas del cine con tortícolis.
Entonces, sin aviso previo, sin anestesia, la cajera ni corta ni perezosa te dice el precio,
comienzan a sudarte las manos y buscas torpemente en tu cartera. Transcurridos unos
minutos después del pago, te recompones, no ha sido para tanto, intentas convencerte a
ti mismo, será por eso de la crisis que la vida está más cara, te dices, pero lo que no
sabes es que lo peor está aún por llegar. ¿Qué es un cine sin refresco y palomitas? Nada.
Por eso te dispones a ponerte de nuevo a la cola, a comprar algo de picar, y de nuevo te
estafan, no es que las palomitas estén menos ricas que antaño o que tu refresco tenga
menos burbujas. Es que, de nuevo, esos cinco euritos se han vuelto a quedar cortos, ¡y
tan cortos! Disfrutas de la película, como siempre, te ríes, lloras o simplemente
observas, pero esta vez al llegar a tu casa, tras mirar tristemente tu cartera, descubrirás
que tendrá que pasar mucho tiempo hasta que puedas volver al cine… Porque sí, hoy en
día el cine se está convirtiendo en un lujo que no todos nos podemos permitir.
Me gustaría que alguien me explicara qué ha pasado, por qué si la industria del cine está
tan de capa caída a causa de las famosas descargas ilegales no hace nada para
incentivarnos a ir al cine, al contrario, nos lo pone aún más difícil y se excusa alegando
que es para compensar las pérdidas económicas que la piratería les supone. ¿Bajarán
entonces los precios si cesan las descargas? Permítanme que lo dude. Hay quien se
contenta con pensar que son aquellos que fijan los precios los que con estos se ven
perjudicados, al ser cada vez más personas los que se niegan a pagarlos. Sin embargo, a
mí me sabe amargo pensar que alguien pueda dejar de acudir al cine por una cuestión de
precios. Por supuesto que ninguno de nosotros va a faltar a un estreno esperado o a una
cita especial por no pagar la entrada, pero quizá aquellos que acuden al cine con
regularidad, aquellos que disfrutan del simple hecho de pasar allí la tarde tanto o más
como de la película, se replanteen el acudir tan frecuentemente, pues hoy en día, tal y
como están las cosas, el no ir al cine puede resultar algo superfluo. Por eso hoy quiero
dedicar estas palabras al cine, al séptimo arte, al entretenimiento de mayores y de
pequeños, tan viejo como eficaz, y a la estafa más sutil del momento.
Marta Cardó
a) Enuncia la tesis que mantiene la autora del texto.
b) ¿Qué persona verbal predomina en este texto? Pon algún ejemplo. ¿Qué efecto crees
que pretende conseguir la autora con su uso? ¿Con qué función del lenguaje relacionas
este rasgo?
c) ¿Podríamos afirmar que la autora del texto ofrece argumentos de tipo emotivo en este
texto? Justifica tu respuesta.

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