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1
Revista de la Universidad Autónoma Latinoamericana. No. 29-30. 2010. Pp. 179-
194.
las propias manos. Pero también es cierto, y es esto lo que nos proponemos
decir, ha habido en el país una educación para la minoría de edad, para que
seamos niños obedientes y no causemos problemas. Desde la colonia, se
nos ha dicho a quien tenemos qué defender, a quién tenemos que seguir y
qué tenemos qué hacer para alcanzar la salvación. Y así hemos aceptado
cambiar favores por votos, salvación por diezmos y ascensos por amistades
o familia.
1. RECLUTAS.
En la historia colombiana, los reclutas, en general, han sido conscriptos a
la fuerza para servir a un determinado grupo o partido. Si bien el ejército ha
sido medio de ascenso social de quienes no tenían otra alternativa de vida,
lo más común era reclutar gente del pueblo y campesinos mediante
encerronas para servir obligatoriamente en las guerras. Carlos Eduardo
Jaramillo nos habla así de la guerra de los mil días:
4
Jaramillo, Carlos Eduardo. Reclutamientos, ascensos y deserciones. Revista Credencial Historia,
Bogotá, Enero 2000. Nùmero 121.
5
Ibidem.
--¿Yo?... ¡yo soy mayor...!
6
Porras, Belisario. Memorias de las campañas del Istmo 1900. Panamá: Imprenta Nacional, 1974.
7
Roger Brew. Aspects of politics in Antioquia, 1850-1865. Oxford, 1971. pp. 159-160.Citado en Ortiz,
Luis Javier (dir). Ganarse el cielo haciendo la guerra, Medellín, Unal, 2004. (Obra en prensa).
La defensa del estado no se realizó como una defensa del contrato social o
de la comunidad imaginada, sino como una obligación forzosa de acabar
con el otro que es el enemigo. Enemigo elaborado por los detentadores del
poder. Estos nos decían quién era el enemigo. La tradición latinoamericana
antes de la llegada de los europeos fue una tradición comunitaria vivida en
términos tribales. Luego del arribo de los españoles se nos inculcó la
tradición hobessiana: somos los enemigos de los otros. El español es el
enemigo que viene a destruír nuestra cultura. Luego el español logró
inculcarnos que el luterano es el enemigo y también el hereje, el distinto. Y
en la época de la independencia, se nos inculcaba que el realista o el
patriota eran los enemigos. Más tarde el liberal o el conservador eran los
contrincantes a destruír. Posteriormente el marxista y ahora el guerrillero o
el paramilitar o el soldado; o el vicioso o el malito. Todos los otros son los
enemigos.
Y las personas son conscriptas a la fuerza para destruír al enemigo
denominado así por los de arriba. Formados para obedecer órdenes no
importa su calidad de órdenes injustas o arbitrarias. “Las órdenes se
cumplen o se acaba la milicia”. Obediencia ciega a la injusticia camuflada
como defensa del orden, o como construcción de una sociedad justa.
2. SUBDITOS.
Para muchos hoy, se considera lo más corrupto del país la clase política.
Todo se puede hacer, aún los peores delitos, siempre y cuando se tenga el
apoyo de un cacique, de un amigo en el poder, de una “palanca” que pueda
abrir las puertas, aún las de la cárcel.
INSTITUCIONES Nº % N % % %
ALUM º PROFES COLO MUN
NOS ORES MBIA DIAL
1. PARTIDOS 264 39.52 6 34.8 38 29.7
POLITICOS 8
10
Garay, Luis Jorge. Op. Cit.
11
Cazorla, José. Del clientelismo tradicional al clientelismo de partido: evolución y características.
Universidad de Granada. Barcelona, 1992. www.diba.es/icps/working_papers/docs/Wp_i_55.pdf
12
Arboleda Mora, Carlos; Fernández Ochoa, L. Fernando. Diálogos de fe y razón. Cultura de la
honestidad. Medellín, UPB, 2004. p. 29.
2 Sistema judicial 123 18.41 4 23.5 3.4 13.7
6
3 Policía 75 11.07 1 8.2 8.5 11.5
6
4 Ingresos fiscales 67 10.02 2 10.7 12.9 5.2
1
5 Sistema educativo 38 5.68 1 8.7 8.8 7.5
7
6 Servicios médicos 32 4.79 3 1.5 8.8 8.4
7 Servicios públicos 29 4.34 3 1.5 8.1 4.1
8 Aduana 16 2.39 1 0.5 3.4 4.2
9 Sector privado 11 1.64 4 2.1 1.4 3.1
1 Otros 6 0.8 7 3.5 3.4 2.2
0
1 Oficina de 4 0.59 5 2.5 1.0 3.3
1 pasaportes
1 Licencias 3 0.44 3 1.5 2.4 7
2 comerciales
13
Informe sobre "Corrupción, Desempeño Institucional y Gobernabilidad: Desarrollando Una Estrategia
anticorrupción para Colombia", 21 de marzo de 2002; ver
www.transparenciacolombia.org.co/textos_word/info_corrupcion
Colombia asciende a USD 2.600 millones por año, el equivalente al 60 por
ciento de la deuda del país.” 14
La corrupción no es la conducta desviada o inmoral de un individuo
aislado, es la conducta de una clase de caciques que ni siquiera la juzgan
como antiética sino como el aceite que lubrica el sistema o la forma normal
de vivir el servicio público.
Acepta así la tesis de que los países colonizados por España tienen en
promedios sistemas legales más corruptos y con menos protección de los
inversionistas, que los países colonizados por otras potencias como
14
Ver wbln0018.worldbank.org/LAC/lacinfoclient.nsf/d29684951174975c85256735007fef12/
921d461c069a434d8525696f00514142/$FILE/LJ%20SPEECH.pdf . Tomado de:
http://www.globalcorruptionreport.org/download/gcr2003/SPANISH_Sudamerica.pdf
15
Fajardo, Luis Eduardo. La corrupción heredada: Pasado colonial, sistema legal y desarrollo económico
en Colombia. Revista de Estudios sociales. Universidad de los Andes. Facultad de ciencias sociales.
Bogotá-Colombia. Número 12, Junio de 2002, pp. 18-26.
16
La Porta, Rafael; López-de-Silane, Florencio; Schleifer, Andrei y Vishny, Robert W. Law and
Finance. NBER working paper 5661. Boston, NBER, 1996.
17
Fajardo, Luis Eduardo. Op. Cit. P. 23
Inglaterra. Aunque es de notar, que hace la salvedad de que la connivencia
del sistema legal débil con un estado clientelista, no es un determinismo
absoluto y que hubo también decisiones posteriores de las élites o de los
grupos dominantes.
3. FELIGRESES.
18
WEBER, Max, Economía y sociedad: esbozo de sociología comprensiva, México-Buenos Aires, Fondo de
Cultura Económica, 1964. p. 171.
En cuanto a lo religioso, la Iglesia ejerció un control de tipo no sólo
religioso, sino también moral y social sobre sus fieles, de tal manera que
regía las conciencias individuales y deseaba regir también el sistema social.
En la época de la colonia, no hubo mayores conflictos pues sociedad civil y
sociedad religiosa, en general, coincidían y era la corona la que ejercía el
control sobre la iglesia y sus ministros. Esta regía, con la ayuda de la
corona toda la vida social. Se exigía a los indígenas la asistencia al culto y
a los sacramentos, se sancionaba al pecador con castigos civiles, se
orientaban las lecturas a tal punto que sólo ingresaban aquellos libros
permitidos, etc. Todo lo diferente era considerado pecaminoso o satánico.
El peso de la Iglesia en la vida social y política era mucho mayor que el del
incipiente Estado. Un diplomático norteamericano anotaba en 1834: "Un
19
Jorge Villegas. Colombia: Enfrentamiento Iglesia-Estado, 1819-1887. Medellín, Centro de
Investigaciones Económicas C.I.E., Universidad de Antioquia, 1977, pág. 1A.
tercio del Senado y una cuarta parte de la Cámara de representantes están
constituídos por miembros del clero."20
20
Citado en Ibid., pág. 2A.
21
“Carta del señor Caro al señor Groot, el 20 de enero de 1874”, en: Thesaurus. Boletín del Instituto
Caro y Cuervo, tomo VIII, 1952 pág. 189.
Lo que había dicho el Segundo Concilio Provincial en 1874 al respecto se
puede resumir en una cuantas afirmaciones:
1. Los escritores católicos no deben desmayar en su tarea de defender la
fe;
2. Pero esos escritores pueden ser causa de innumerables males e
inconvenientes para la Iglesia;
3. Por eso, la desenfrenada libertad no debe tener cabida entre los hijos de
la Iglesia;
4. Sino que deben tener gran prudencia en tratar ciertas cuestiones, no
anticipar el juicio, ni prescribir a los fieles y, aún a los pastores, la
conducta que han de observar, pues no se puede trastornar el orden de
los poderes establecidos por Nuestro Señor Jesucristo en la Iglesia,
tomando las ovejas el lugar de sus pastores;
5. Los escritores católicos deben optar por el camino de la sumisión a sus
pastores.
Se pensaba que así se podría controlar el celo excesivo de los escritores que
los llevaba a una confrontación con el gobierno y que impedía
conciliaciones en materia de instrucción religiosa. El señor Groot, sin
embargo, en una carta del 23 de Agosto de l875 se manifiesta inconforme:
Empezaré por observar, que todo lo que en él se dice, se refiere
precisamente a los que escribimos sobre asuntos de religión en
Bogotá, y principalmente al señor Caro y a mí. Es verdad que se
habla en términos generales, pero con una generalidad que a cada
paso deja traslucir el designio de individualizar [...].22
CONCLUSIÓN
28
Cortina, Adela. Ciudadanos como protagonistas. http://www.javeriana.edu.co/pensar/EA.html
29
Ibidem.
traslados de dineros de los bolsillos del estado a los de los empleados
públicos? Es una labor compleja pues es una mentalidad y una actitud de
muchos siglos. Pero si queremos ser hombres y mujeres de verdad,
ciudadanos serios y responsables, tenemos que abandonar la idea de seguir
siendo las ovejas despistadas, los burros de carga, y convertirnos en
personas que asumen con honestidad su vida y su destino.