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Martinez Pedro

V6.931.534

Sección 2102T

LAS DESIGUALDADES SOCIALES Y LA ADMINISTRACIÓN DE JUSTICIA

INTRODUCCION.
La desigualdad social es un problema de las sociedades contemporáneas, producto del desarrollo
desigual de las diversas regiones del globo y de la imposición de ciertas ideologías o valoraciones de
unos seres humanos por encima de otros. De hecho, la desigualdad social es el origen de la
discriminación , ya que esta última consiste en tratar de manera distinta a quienes se vean
desfavorecidos económica, social o moralmente.

Visto de esta manera, la desigualdad social implica una distribución inequitativa de oportunidades,
del respeto y del acceso a los bienes y servicios, que se fundamenta en diversas razones de tipo
cultural o social. No es, como muchos quisieran hacer creer, un rasgo natural u obvio de la existencia
humana, ni es una forma de Justicia o castigo divino.

La desigualdad social no se da del mismo exacto modo en todos los lugares y ámbitos. En algunas
sociedades se trata de un tema vinculado exclusivamente con la clase socioeconómica, mientras que
en otros lugares implica también consideraciones sobre la raza, la religión, la orientación sexual, etc.

DESARROLLO.

Tipos de desigualdad social


La clasificación más obvia de la desigualdad social tiene que ver con los motivos de la
discriminación. Así, podemos hablar de desigualdad social según:

Posición económica. Probablemente la más común de las formas de desigualdad social,


tiene su anclaje en la capacidad económica del individuo o de la clase a la que
pertenece, separando así el mundo de los ricos, la clase media y los pobres, en
detrimento obviamente de los que ocupan los peldaños inferiores. Quienes están más
abajo en la escala tienen menos acceso a bienes y servicios, a una representación
política, a la visibilidad simbólica y cultural, así como al estudio e incluso a una
alimentación adecuada. Dependiendo de lo alejados que estén estos estratos sociales, se
podrá hablar de sociedades de castas, en las que escalar a los peldaños superiores es
prácticamente imposible.
Religión. Las luchas religiosas son tan antiguas como el hombre, y en muchas
sociedades modernas aún constituyen un factor de desigualdad entre grupos humanos,
reservando el poder y las oportunidades a quienes profesen una determinada fe, y
condenando a los de otras, a menudo referidos como “infieles” o “herejes”.
Genero. Se trata de la discriminación por sexo biológico (como en el caso de las
mujeres) o por orientación sexual (como en el caso de la colectividad LGBT), que
reserva las posiciones mandantes y más favorecidas para los hombres
heterosexuales (sobre todo si son blancos) y margina a quienes no se inscriban en cierto
ordenamiento tradicional de los roles sexuales o eróticos.
Etnia. La discriminación racial otorga la posición superior a determinadas razas o etnias,
subyugando a su voluntad a otras por considerarlas “inferiores” o “diferentes”, y negándoles
así el acceso a bienes o incluso a derechos fundamentales, como el de la vida. Algunas de
las grandes masacres y genocidios de la historia tienen su fundamento en este tipo de
discriminación.
Ideología. En este caso se trata de discriminación política, o sea, la desigualdad de
oportunidades y bienes entre quienes se adhieran a una doctrina política y quienes no, o
quienes se les opongan. Es lo que ocurre en gobiernos totalitarios o en dictaduras.
Causas de la desigualdad social
La desigualdad social no tiene una única causa, sino que es una consecuencia del modo en
que ha transcurrido nuestra historia como especie.

El pensador francés Jean-Jacques Rousseau reflexionó sobre el origen de la desigualdad


entre los hombres y aseguraba que el origen de ésa se hallaba en el estado social, es decir,
que el hombre no nace en la desigualdad, sino que la adquiere al empezar a compararse con
sus semejantes y ver el modo en que éstos viven.

El estudio de las sociedades primitivas ha demostrado que se trataba de sociedades mucho


más igualitarias en el reparto del trabajo y de los beneficios, pero en algún lugar del período
neolítico se inició un proceso de jerarquización y de construcción del Estado que implicó la
repartición del trabajo y la división social, algo que alcanzaría su pico con la invención de la
esclavitud y de la explotación del hombre por el hombre.

Igualdad de género.

La igualdad de género es más que un logro social y la superación de una condición previa de
desigualdades. Permitir a las mujeres un mayor acceso a la educación y el progreso incide directa y
notoriamente sobre el Producto Interno Bruto de muchas naciones en vías de desarrollo. Esto se debe
a que permite a la sociedad sacar un mayor provecho de sus recursos humanos.

La salud social puede no resultarnos tan común como el de la salud física o incluso la salud
emocional, pero es tan importante como cualquiera de estos. Se entiende por salud social al conjunto
de factores y condiciones de tipo económico y social que influyen en el estado de salud de los
individuos, en el largo plazo.

Se trata de factores de tipo comunitario (en lugar de individuales, como podrían ser la
herencia genética o el estilo de vida personal) que también inciden de manera vital en la expectativa
de vida o la vulnerabilidad de los individuos frente a las enfermedades. Por este motivo, la
OMS estudia este tipo de factores mediante la Comisión sobre Determinantes Sociales de Salud.

Nuestra salud social está determinada por el tipo de vínculos sociales que podemos establecer en
nuestra comunidad, en la influencia positiva o negativa que ejercen, y en las condiciones de armonía
o de estrés en que nuestra vida social se desarrolla. En ello intervienen factores tales como:

Exclusión y marginación social.


Condiciones de empleo.
Programas de salud pública y acceso a servicios educativos.
Equidad de género y discriminaciones culturales.
Condiciones de vida urbana.
Naturaleza de los vínculos afectivos y vida emotiva.
Es sabido que en entornos sociales tóxicos, depauperados, aislados y de empobrecimiento constante,
los vínculos sociales tienden a deteriorarse y a convertirse en fuentes de sufrimiento, teniendo a la
larga consecuencias negativas para la salud física y mental.

Esto no tiene que ver con las dinámicas de superación personal o la autoayuda, sino con el grado de
salubridad del entorno social en el que los individuos se desarrollan.

Por eso los individuos socialmente aislados, enemistados con la comunidad o marginados por ésta,
tienen grandes dificultades para el ascenso social y económico, aun siendo miembros productivos de
la sociedad. Por el contrario, quienes gozan de una mejor salud social tienen más posibilidades de
desarrollo incluso si hallan en el mismo peldaño económico.

Las principales contribuyentes de la salud social en una nación suelen ser las políticas públicas de
salud, así como las iniciativas de combate contra la pobreza, la desigualdad y la segregación en sus
diversas facetas posibles.

Los problemas sociales son aquellos que aquejan a largos sectores de la población y tienen que ver
con las condiciones objetivas y subjetivas de vida en sociedad. Sus causas pueden hallarse en
aspectos económicos, políticos, etc. Además, los problemas sociales suelen tener consecuencias en
otras dimensiones de la vida de una nación.

Los problemas sociales han existido desde el surgimiento mismo de la humanidad, aunque en
determinadas épocas y situaciones hayan sido peores que en otras, como es normal. En la
contemporaneidad han pasado a ser una preocupación recurrente de gobiernos populares y
ONG internacionales, o de organizaciones multilaterales como la ONU o la UNICEF.

Uno de los grandes inconvenientes de los problemas sociales es que son difíciles de resolver: es
complicado lograr un consenso respecto a cuáles son más urgentes o cuál es la metodología para
darles respuesta.

Algunos ejemplos comunes de problemas sociales son:

Hambre. Grandes sectores de la población mundial viven en situaciones de marginalidad y


abandono tan desesperados, que literalmente no tienen qué comer.
Inseguridad. Las poblaciones con grandes márgenes de actividad delictiva suelen ser las mismas
que están sometidas a la pobreza y a una vida sin perspectivas futuras, presa fácil para
actividades ilegales: robo, narcotráfico, prostitución, etc.
Discriminación. Ya sea por raza, sexo, religión, nacionalidad u orientación sexual, se basa en la
segregación de una población no deseada, o sea, en no darle a todo el mundo las mismas
oportunidades, por razones de prejuicio.
Pobreza. El más grande de los problemas económicos y sociales y económicos, y el que más
problemas sociales engendra a su vez. No tiene que ver simplemente con la falta de dinero, sino con
la total exclusión del sistema productivo. Se estima que casi la mitad de la población mundial vive
en algún margen de pobreza, y que 400 millones de niños viven en pobreza extrema.
Desigualdad. La convivencia en una sociedad de clases sociales enormemente separadas, es decir,
de pobres muy pobres y ricos muy ricos, con pocas oportunidades de movilidad de clase. Este tipo
de sociedades son caldos de cultivo para el resentimiento social.
La justicia social es un concepto complejo que abarca temas como la igualdad social, la igualdad de
oportunidades, el Estado de bienestar, la pobreza,las reivindicaciones laborales, el feminismo, entre
muchos otros, que tienen como norte común la construcción de una sociedad más equitativa y
menos desigual.
Según algunos estudiosos del tema, la justicia social vendría a ser más o menos lo propuesto por
Aristóteles en su “justicia distributiva”. Es decir que es lo correcto o justo en la repartición de los
bienes dentro de una sociedad.

No existe un origen definido de este término, ya que los reclamos por una sociedad más justa datan
desde los albores de la humanidad. Sin embargo, hay evidencias tempranas de reclamo por “justicia
social” como una obligación de los monarcas europeos del siglo XVIII, en artículos de la época de la
ilustración, donde apareció como sinónimo de mayor justicia en la sociedad.

Desde entonces, diversos pensadores católicos del siglo XIX se hicieron eco del término, en especial
los fundadores de la Doctrina Social de la Iglesia.

La administración de Justicia
Es el modo es que es impartida la justicia. Esto se aplica sobre todo a la
organización del poder judicial y al sistema procesal que se utiliza para
concretar una solicitud ante los órganos judiciales. Ejemplo: «Una
correcta administración de justicia exige la elección de jueces por
concursos y no a dedo.
De acuerdo con su ordenamiento jurídico, la República Bolivariana de Venezuela es un Estado
Democrático, Social de Derecho y de Justicia. Es un Estado federal, descentralizado en los términos
que consagra la Constitución, en el cual la soberanía reside intransferiblemente en el pueblo, quien la
ejerce directamente en la forma prevista en ella y en la ley, e indirectamente, mediante el sufragio, a
través de los órganos que ejercen el Poder Público (artículos 2 y 5 Constitución).
El Poder Público tiene atribuidas sus competencias de manera exclusiva, las cuales se ejercen
con
 fundamento en los principios de honestidad, participación, celeridad, eficacia, eficiencia,
 transparencia, rendición de cuentas y responsabilidad, con sometimiento pleno a la ley y al
 derecho (artículo 141 Constitución).
 El Poder Público se encuentra distribuido según la estructura político territorial a nivel de la
 República. El mismo, está integrado por el Poder Público Nacional, de los Estados a los
cuales
 corresponde el Poder Público Estadal y de los Municipios que corresponde al Poder Público
 Municipal (artículo 136 de la Constitución). El Poder Público Nacional está dividido en
cinco
 poderes: Legislativo, Ejecutivo, Judicial, Ciudadano y Electoral. Estos dos últimos poderes
 fueron incorporados en la normativa Constitucional aprobada en 1999. El Poder Público
Nacional
 se regula conforme al principio de la separación de poderes.
 El Poder Legislativo Nacional es ejercido por la Asamblea Nacional, órgano parlamentario
de
 forma unicameral, integrado por diputados elegidos en cada una de las veinticuatro
entidades
 federales, los cuales tienen representación proporcional según una base poblacional y son
electos por periodos de cinco años. Entre sus atribuciones está la de legislar en materias de
competencia
 nacional y sobre el funcionamiento de las distintas ramas del Poder Nacional; proponer
 enmiendas y reformas a la Constitución; ejercer funciones de control sobre el Gobierno y la
 Administración Pública, en los términos establecidos en la Constitución y en la ley; y
discutir y
 aprobar el presupuesto nacional.
 El Poder Ejecutivo Nacional está conformado por el Presidente de la República, el
Vicepresidente
 Ejecutivo, los Ministros, el Consejo de Ministros, la Procuraduría General de la República y
el
 Consejo de Estado. Entre sus deberes y atribuciones se encuentran la de cumplir y hacer
cumplir
 la propia Constitución y las leyes; la dirección de la acción del Gobierno y de las relaciones
 exteriores; dictar decretos con fuerza de ley, previa autorización de una ley habilitante;
 reglamentar las leyes; administrar la hacienda pública; celebrar y ratificar tratados,
convenios o acuerdos internacionales; dirigir y ejercer el mando supremo de la Fuerza
Armada Nacional; dirigir informes o mensajes especiales a la Asamblea Nacional,
personalmente o por intermedio del Vicepresidente Ejecutivo; y las demás atribuciones que
le señalen la Constitución o la ley.
El Poder Judicial es el encargado de la administración de justicia y de conocer sobre las
causas y asuntos de su competencia, mediante los procedimientos que determinen las leyes
y ejecutar o hacer ejecutar sus sentencias. Este Poder goza de autonomía funcional,
financiera y administrativa y no está facultado para establecer tasas, aranceles, ni exigir
pago alguno por sus servicios –justicia gratuita- (artículo 254 de la Constitución).
La equidad intenta promover la igualdad, más allá de las diferencias en el sexo, la cultura, los
sectores económicos a los que se pertenece, etc. Es por ello que suele ser relacionado con la justicia
social, ya que defiende las mismas condiciones y oportunidades para todas las personas, sin
distinción, solo adaptándose en los casos particulares.

Es decir que para que la equidad sea real no puede ser aplicada la norma en general a todos los
individuos, sino que deben ser acatadas ciertas excepciones para cada caso particular. Además cada
persona debe ser capaz de hacer valer sus derechos, sin importar de donde provenga.

La equidad lucha contra la pobreza, la discriminación, el racismo, la xenofobia, la homofobia, entre


otras cuestiones que fomenten la distancia y las diferencias entre los individuos.

La movilidad social es un concepto proveniente de la sociología, que designa los


desplazamientos que efectúan los individuos o los núcleos familiares de una sociedad, dentro de un
determinado espectro socioeconómico. Es decir, se refiere a la permeabilidad de las clases sociales,
que permite la incorporación de nuevos individuos en ascenso.

En una sociedad sin movilidad social, las clases o estamentos sociales quedan fijos, inamovibles, sin
que los individuos tengan esperanza de ascender. Esto implica que los nacidos en un estrato
beneficiado pueden no merecer sus privilegios y menos favorecidos tampoco merecen su falta de
oportunidades.
La movilidad social es activamente perseguida por las sociedades contemporáneas a través de
métodos distintos, ya que es garantía de una sociedad más equitativa y con menores desigualdades.
La posibilidad de ascenso social es imprescindible para combatir la pobreza, ya que la desesperanza
social, o sea, el convencimiento de que el sistema jamás le permitirá al individuo desarrollarse,
empuja a los estratos desfavorecidos hacia posturas políticas y sociales radicalizadas, o a buscar
atajos económicos ilícitos que solamente complican más su trayectoria.

Tipos de movilidad social


Existen diversos tipos de movilidad social, dependiendo de los criterios empleados para clasificarla.
Un primer caso distingue entre:
Movilidad horizontal. Ocurre dentro de un mismo estrato. Se da cuando un grupo humano se
desplaza de un círculo ideológico, laboral o social, sin que se produzca un cambio de estatus social.
Movilidad vertical. Implica un abandono de la clase social inicial para optar por una nueva, ya sea
más arriba (enriquecimiento) o más abajo (empobrecimiento) en la escala socioeconómica.
Causas de la movilidad social.
La inversión en la educación .
personas con mayores niveles educativos pueden aspirar a mejores empleos, pueden renovar sus
conocimientos con más facilidad y por lo tanto tienen mejores oportunidades para adaptarse a
nuevos entornos.
La partenalidad planificada.
Dado que las familias demasiado numerosas, especialmente las monoparentales, tienen muchísimas
menos probabilidades de ascenso social que las familias de número más manejable. Por otro lado, el
embarazo adolescente suele truncar las posibilidades de estudio y preparación de los individuos,
insertándolos prematuramente en el mercado de trabajo.
La migración.
Dado que las personas que cambian de país suelen tener que empezar desde cero, pero también
dejan espacios ocupables por otros individuos en la sociedad original.
La lucha contra las resistencias culturales.
Ya que ciertos discursos de tipo religioso, fundamentalista o tradicional pueden entorpecer la
movilidad social, especialmente en lo que al lugar de la mujer en la sociedad se refiere.
La movilidad social y pobreza.
La movilidad social es uno de los factores vinculados con la pobreza, en el sentido de que las
sociedades con baja movilidad social son aquellas en las que existen mayores índices de pobreza.
Los estratos más bajos de la sociedad, imposibilitados para el ascenso, se multiplican a sí mismos,
víctima de un espiral de empobrecimiento y falta de oportunidades.

Obviamente, la movilidad social también permite el empobrecimiento de clases medias o altas, pero
fuera de escenarios catastróficos, dichos desplazamientos suelen ser menos frecuentes y a menudo
reversibles.

Además, la movilidad social se vincula también con la desigualdad, ya que las sociedades más
igualitarias son aquellas en las que existe movilidad de clases y se tiende a una gran clase media. En
cambio, las sociedades rígidamente estratificadas tienden a ser brutalmente desiguales, con enormes
e insalvables distancias entre una clase y la otra.

Los problemas económicos.

Al conjunto de fenómenos producidos cuando los recursos no son suficientes para satisfacer las
propias necesidades. Esto puede ocurrir tanto con los recursos de las naciones, organizaciones y
personas. Justamente, la economía estudia cómo satisfacer las necesidades de la población, a través
de un conjunto finito de recursos y posibilidades. Los países y organizaciones invierten buena parte
de sus esfuerzos en prevenir los problemas económicos, procurando la mayor estabilidad posible en
la materia.

Este tipo de inconvenientes desencadena otros problemas sociales, culturales y políticos.


Desatendidos, los problemas económicos pueden crecer o hacerse más complejos, para finalmente
abrir la puerta a situaciones más catastróficas o irreparables.

Tipos de problemas económicos.

La orientación del proceso productivo.


Es la decisión de cuántos bienes, cuando se producirán y que elementos implican su producción.

Una de las funciones esenciales de nuestro Estado de Derecho es garantizar la tutela de los derechos
e intereses legítimos de los ciudadanos. Con esa finalidad, dentro del derecho público, se encuentra
el derecho procesal, que establece los distintos mecanismos de resolución de conflictos, que aplican
al caso concreto, la norma sustantiva correspondiente (derecho civil, penal, mercantil, laboral, etc.),
para resolver la controversia jurídica de fondo planteada por las partes.

El aumento progresivo de litigios en los últimos años, ha agudizado el endémico retraso


jurisdiccional, con procesos lentos y costosos para el Estado y las partes litigantes. Las reformas
procesales en el ámbito jurisdiccional han aportado soluciones parciales para agilizar la jurisdicción,
pero hace falta complementarlas con otros sistemas alternativos, que garanticen la convivencia
social, absorbiendo gran parte de la litigiosidad. La jurisdicción debería quedar reducida a la
solución de controversias que no se puedan solucionar por otros mecanismos alternativos, por no ser
materia de libre disposición, o cuando los sistemas auto compositivos han fracasado.

En este sentido, un buen funcionamiento del arbitraje y los mecanismos auto compositivos de
resolución de conflictos, mejorará la propia jurisdicción.

La negociación.

La negociación la podemos definir como un sistema de resolución de conflictos mediante el cual dos
o más partes con intereses contrapuestos se comunican para llegar a un acuerdo, cediendo en algo
cada una de ellas.

Es frecuente que las partes o al menos una de ellas, intente llegar a un acuerdo antes de acudir a la
vía jurisdiccional o arbitral, por lo que suele ser

el primer sistema de resolución de conflictos al que acuden las partes. Incluso, iniciado el proceso
judicial o el arbitral, es posible que las partes.

el pluralismo jurídico no tiene autonomía propia de cara a la ciencia jurídica,


ya que esta ha sido plenamente sustituida por las disciplinas sociológica y
antropológica, en las que ha quedado absorbido de manera confusa. El
arraigo a los conceptos de estas disciplinas y la clasificación del pluralismo
jurídico en débil y fuerte, a pesar de la matización intentada por algunos
autores, hace que el pluralismo jurídico se salga de los límites que
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naturalmente debería tener.


Las ciencias que actualmente estudian el pluralismo jurídico, definido como la
coexistencia de más de un sistema jurídico en un espacio social.
Los juristas deben ocuparse de los principios que han de guiar al Estado en el
ejercicio de su derecho, en este evento, del pluralismo jurídico.

CONCLUSION.
La carencia de políticas públicas educativas en materia de civismo, ha traído en Latinoamérica un
grave deterioro del sistema de justicia.

No hay norma mejor acatada que aquella en la que se cree, porque se relaciona con los valores de la
persona y éstas activan la conducta, el cumplimiento. A esto hay que agregarle la necesidad de
aplicar una política legislativa que tienda a la creación de normas que permitan ejecutarlas sin
demasiadas dificultades y para ello se requiere consciencia de los jueces sobre la importancia de
admitir y de acordar la protección debida ante el reclamo vecinal, pues en ello está la preservación
del equilibrio social. El incumplimiento de una norma no significa ineficacia de la misma sino más
bien la carencia de sanciones oportunas, a fin de evitar la impunidad.

El Derecho tradicional impone la obligación de motivar, es decir, de explicar y razonar


exhaustivamente la decisión con base en pruebas, que incluyen los indicios y las presunciones, así
como la valoración de la conducta pre procesal y procesal de las partes. Con mayor razón, el
Derecho de la Justicia de Paz lo debe considerar obligante pero, a diferencia de otros derechos, en
éste surge de una convicción comunitaria. Luego del Juicio de Paz en el que han intervenido todos
los interesados del grupo social, la verdad de la prueba y la convicción de que la solución a la que se
ha llegado, siempre en forma conciliatoria es la mejor, queda en evidencia ante todos, pues todos han
intervenido, todos han presenciado, todos han adquirido la convicción, en forma similar a la que lo
hace el jurado de los juicios convencionales, pero a diferencia de aquel que es mudo, en la Justicia
de Paz la comunidad es activa, interviene, opina, aporta y decide.

Tenemos la convicción de que bajo la luz de un concepto evolucionado del Derecho, la rama
llamada «Derecho Privado» no se entenderá más en el sentido que lo conocían los romanos, como un
Derecho egoísta separado del colectivo.

El sistema de justicia no sólo será tutelado por el Derecho sino que el factor conciliación-mediación
es fundamental para su logro.

La protección no debe ser sólo jurídica, sino que debe extenderse a las necesidades humanas y a
todo el grupo afectado: víctima, victimario, familiares y amigos de ambos.

La protección de la víctima será coordinada en una primera etapa por el Derecho Penal y por la
Ciencia de la Victimología y luego, específicamente por el Derecho de los Derechos Humanos y en
una fase avanzada de la sociedad, por el Derecho de la Justicia de Paz y por el Derecho de los Daños
Morales. Su abordaje podrá realizarse (como de hecho ya empieza a manifestarse, especialmente en
materia de niños y adolescentes), con base en un nuevo enfoque jurídico, de carácter
interdisciplinario y holístico, ya que deberá integrar las herramientas de las ciencias sociales y
humanas que sirven para el logro de la justicia en sentido solidario y participativo.

La protección estará referida a los derechos, a los intereses de la persona, a su integridad (psiquis,
imagen externa, autoimagen y prestigio), es decir, a todo lo que permite a una persona vivir de modo
conforme con su dignidad, concretada y realizada a través de sus derechos de la personalidad.

No sólo el Estado tutelará los derechos vulnerados sino también la propia comunidad, que tendrá un
papel protagónico y participativo, a través de las formas privadas de justicia no litigiosa aceptadas
por la sociedad.

BIBLIOGRAFIA.

Desigualdad social
Autor: Equipo editorial, Etecé. De: Argentina. Para: Concepto. De. Disponible en:
https://concepto.de/desigualdad-social/. Última edición: 2 de febrero de 2022.

Alianza. MAGO VENDAN, Oscar El Juez de paz y su comunidad, Caracas

Luisa, Los modos alternativos de resolución de conflictos.

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