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¿Quién soy yo?

La búsqueda de un elemento o característica que defina y explique el concepto de lo que es,


o sé cree del ser humano es ineficiente. Esto debido a que cada persona se diferencia por su
personalidad y como esta personalidad tiene un equilibrio entre los instintos y lo moral, sin
embargo, no siempre actuamos equilibradamente, algunas veces podemos llegar a estar
totalmente instintivos o morales. Esto nos permite pensar un interesante problema para la
filosofía ¿Somos seres equilibrados? si la respuesta es negativa ¿Qué nos impide tener este
equilibrio? Para trabajar esto se explicarán diferentes perspectivas filosóficas a lo largo del
texto.
Las perspectivas que se explicarán y usarán para entender esta condición son, el
pensamiento de Aristóteles sobre la Akrasia y la libertad y como contra restante la teoría
tripartita del inconsciente de Freud. Además, como un apoyo a estos conceptos pensaremos
primero, en la agencia según Frankfurt y como segunda postura filosófica abordaremos el
placer desde la filosofía epicúrea.
Para desarrollar esta idea tendremos como principal pensador a Aristóteles y a su
perspectiva frente a la Akrasia. Aristóteles veía este fenómeno como el hecho de estar
consciente sobre los actos que no están bien o son malos, y aun así cometerlos, es como
decir que una persona este en contra de su juicio y su conocimiento moral, y por esta razón
tiene una falta de autocontrol. Entonces, aunque cada persona sea moral y ética, en algún
momento no va a tener en cuenta estos valores y va a preferir actuar desde sus deseos por la
debilidad o falta de voluntad. Un ejemplo de esto serían las personas que utilizan sus
celulares en las horas de clase, y que, aunque sepan que claramente hacer esto está
prohibido, lo hacen, esto pasa debido al placer que les genera usar este dispositivo y por la
falta de autocontrol que tienen, por esto prefieren romper las normas a ser moralmente
correctos.
Como segundo pensador y contra restante de Aristóteles, se hablará de la teoría tripartita
del inconsciente de Sigmund Freud la cual nos presenta la división del ser humano en tres
partes, el “Ello-yo-super yo” en otras palabras al “Inconsciente – preconsciente –
consciente” como la base para el desarrollo de la personalidad de cada persona, donde el
Ello son nuestros instintos y deseos, el Super yo son esas normas que nos impone la
sociedad y la moral que tiene cada uno, y como último aspecto está el Yo que es ese
equilibrio que hay entre estos dos aspectos, por lo tanto, ese equilibrio seriamos nosotros y
lo que le mostramos a la sociedad. Dar un ejemplo de esto no es posible, ya que las
personas no siempre actúan desde este equilibrio sino desde sus deseos.
Teniendo en cuenta estos dos pensamientos podemos decir que la Akrasia contradice a
Freud ya que el ser humano no siempre actúa desde este equilibrio, o sea el yo, al contrario,
muchas veces las personas actúan desde el placer y los deseos en vez de hacerle caso a lo
moral y a lo ético, tratando de tener cierta libertad al romper ese balance.
Del mismo modo, un pensador muy importante que nos ayudara a apoyar el pensamiento de
Aristóteles es Frankfurt, ya que él dice que los seres humanos son capaces de tomar una
decisión conscientemente sin saber si es correcta o no, solo es tomada porque es nuestra
elección. Frankfurt tiene como pensamiento una actualización del fenómeno de la Akrasia,
este pensamiento es la agencia. La agencia es fundamental para el desarrollo de la
personalidad y su aspecto más importante es la libertad de voluntad. La libertad de voluntad
es poder tener esa capacidad de tomar una sola decisión y ponerla en acción. Este concepto
de la agencia se caracteriza por tener la cualidad de actuar intencionalmente, pero guiados
por la razón. Además, Aristóteles también menciona las voliciones, dice que actuamos
desde la volición de primer orden, pero pensamos y tenemos en cuenta a la volición de
segundo orden.
Por otro lado, está el filósofo Epicuro quien se centra en la búsqueda del placer como el
objetivo principal de la vida, por lo tanto lo único importante para él es que las personas
consigan su comodidad. Para Epicuro el placer no era meramente sensorial o inmediato,
más bien lo veía como una forma de estar en bienestar de forma duradera y gratificante. Él
creía en la importancia de evitar las incomodidades innecesarias y el dolor solamente para
llegar a un estado de tranquilidad y satisfacción.
En conclusión los seres humanos no se pueden entender como un equilibrio perfecto que
hay entre lo moral y lo instintivo. Esto se puede explicar a partir de la teoría aristotélica
sobre la Akrasia que dice que cuando hay una falta de voluntad se puede llegar a un
desequilibrio entre lo moral y lo instintivo, dejándose llevar por lo instintivo y por los
deseos, aunque sean conscientes de que no es moralmente correcto, de esta forma se
entendería al ser humano, no como un ser akratico ni como un equilibrio perfecto, sino
como un flujo entre estos dos. La personalidad aquí también es muy importante, ya que
mediante estos comportamientos se evidencia la capacidad de cada persona para tener una
capacidad de decisión

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