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La depreciación del activo fijo es un proceso contable que permite reflejar el desgaste y el
uso en el valor de un activo a lo largo del tiempo. Se trata de un concepto fundamental en
la contabilidad y finanzas institucionales, ya que afecta directamente al balance y a la
rentabilidad de la organización. La depreciación se aplica a los activos fijos tangibles, como
maquinaria, edificios y vehículos, y por tanto, su adecuada gestión y cálculo es esencial
para conocer el verdadero valor y estado de los activos de la empresa. En este sentido, el
estudio de los métodos de cálculo y los criterios de depreciación es fundamental para
cualquier gestor financiero o contador. A raíz de aquello, revisaremos, en este instructivo,
algunos conceptos claves para entender dicho proceso.
Depreciación
La depreciación de un activo finalizará cuando éste sea dado de baja. Por tanto, la
depreciación no cesará cuando el activo esté sin utilizar, cuando sea entregado en
comodato o se haya retirado del uso. La vida útil de un activo se debe revisar al término
de cada ejercicio.
La normativa chilena establece que para aplicar la depreciación en los bienes del activo
fijo es necesario que cumplan las siguientes condiciones:
Que el bien sea propiedad de la empresa y esté destinado a ser utilizado en sus
actividades productivas.
Que tenga una vida útil limitada, es decir, que se estime que su uso se agotará con
el tiempo.
Algunos ejemplos de bienes del activo fijo que son susceptibles de depreciación según la
normativa vigente son:
Es importante destacar que, según la normativa, cada tipo de bien tiene una tasa de
depreciación específica que debe ser aplicada en la contabilidad de la institución.
En resumen, los bienes del activo fijo que pueden ser susceptibles de aplicar la
depreciación son aquellos que son propiedad de la institución, que tienen una vida útil
limitada y cuyo valor disminuye con el tiempo.
Depreciación Lineal
Este método es especialmente útil para activos que no sufren grandes fluctuaciones en su
desgaste a lo largo del tiempo, como edificios, maquinarias y equipos. Además, resulta
sencillo de calcular y aplicar en comparación con otros métodos de depreciación.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la depreciación lineal no siempre refleja
el verdadero desgaste del activo. En algunos casos, el activo puede experimentar mayor
deterioro al inicio de su vida útil, lo que no se reflejaría en la depreciación lineal. Para
estos casos se deben buscar otros métodos de depreciación que se adecuen mejor a las
necesidades de la empresa. En resumen, aunque la depreciación lineal es un proceso
sencillo y comúnmente utilizado en contabilidad, es importante tomar en cuenta que no
siempre refleja el verdadero desgaste de un activo a lo largo del tiempo.
La Tabla de Vida Útil de los Bienes del Activo Fijo es una herramienta contable y tributaria
que se utiliza para determinar el tiempo de vida y depreciación de cada uno de los bienes
registrados dentro del activo fijo de una empresa. Esta tabla establece la duración
estimada en años de cada bien y su tasa de depreciación anual según la normativa chilena.
Esta información es de gran utilidad para las empresas, ya que les permite hacer una
adecuada planificación financiera y gestionar de manera efectiva sus activos fijos,
evitando así problemas contables y tributarios. Además, esta tabla es requerida por el
Servicio de Impuestos Internos (SII) de Chile, por lo que su cumplimiento es obligatorio
para las empresas que operan en el país.
Para ejemplificar, mostraremos un modelo de tabla de vida útil para diferentes tipos de activos fijos:
Activo Fijo Vida útil (años)
Maquinaria pesada 10-20
Edificaciones y construcciones 30-50
Vehículos de transporte 5-10
Equipos de oficina 3-7
Herramientas portátiles 2-5
Mobiliario y enseres 5-10
Computadoras y equipos electrónicos 3-5
Es importante tener en cuenta que la vida útil de un activo fijo puede variar según su uso,
mantenimiento y condiciones de operación, por lo que esta tabla es solo una referencia y conviene
conocer de manera más precisa la vida útil de cada activo fijo en particular.
El cálculo de la depreciación de los bienes del activo fijo según la normativa chilena se
basa en el método de línea recta, el cual consiste en dividir el valor de adquisición del bien
entre la cantidad de años de vida útil que se estima tenga. A continuación, veremos 3
ejemplos:
1- Adquisición de Vehículo
Supongamos que una institución adquirió un vehículo por $10.000.000 en enero de 2020 y
se estima que su vida útil es de 5 años, por lo que al final de este periodo se espera que su
valor residual sea de $1.000.000. El cálculo de la depreciación sería el siguiente:
2- Adquisición de Maquinaria
Presumamos que una institución tiene un activo fijo que consiste en una maquinaria
utilizada para la producción de bienes. La máquina fue adquirida por un valor de
$10.000.000 y su vida útil estimada es de 10 años.
La normativa chilena establece que el método de depreciación a utilizar para estos bienes
es el método lineal. Esto significa que la depreciación anual será la misma durante toda la
vida útil del activo fijo y se calculará dividiendo el valor de compra por la vida útil.
3- Adquisición de Inmueble
Tomemos por ejemplo una corporación que ha adquirido un edificio por un valor de
$300.000.000 CLP y que tiene una vida útil estimada de 30 años. Para calcular la
depreciación anual, se debe dividir el valor del edificio por la cantidad de años de vida útil,
es decir:
Conclusión
Material pedagógico:
M1_APUNTEcontabilidadGubernamentalVF