“La celebración del Misterio Cristiano” Prof.

Lorenzo Vigil Saavedra

ACTIVIDAD DE EXTENSIÒN I
Amelia Ysolina Guìvar Pérez.

1.- Sistematizar: “La Liturgia: el “hoy” de la historia de la salvación” de la Carta

Apostólica “Desiderio Desideravi” del Papa Francisco.
Las palabras de Jesús nos hacen ver la profundidad del amor de las Personas de las Santísima
Trinidad hacia nosotros. La creación, tosa la historia es una gran preparación de aquella
Cena. Nadie se ganó el puesto en esa Cena, todos fueron invitados, Jesús sabe que es el
Cordero de esa Pascua, esta es la novedad absoluta de esa Cena. todos están invitados al
banquete de bodas del Cordero, lo único que se necesita es la fe, todos podemos sentarnos
a la Cena del sacrificio del Cordero y vivir de Él.
Antes de nuestra respuesta a su invitación, está su deseo de nosotros: puede que ni siquiera
seamos conscientes de ello, pero cada vez que vamos a Misa, el motivo principal es porque
nos atrae el deseo que Él tiene de nosotros., nosotros debemos entregarnos a su amor. El
contenido del Pan partido es la cruz de Jesús, su sacrificio en obediencia amorosa al Padre,
no hubiéramos tenido la última Cena, no habríamos podido comprender cómo la ejecución
de su sentencia de muerte pudiera ser el acto de culto perfecto y agradable al Padre.
La iglesia siempre ha custodiado, como su tesoro mas preciado, el mandato del Señor:
“haced esto en memoria mía”. Desde los inicios, la iglesia ha comprendido, iluminada por el
Espíritu Santo, que aquello que era visible de Jesús, lo que se podía ver con los ojos y tocar
con las manos, sus palabras y sus gestos, lo concreto del Verbo encarnado, ha pasado a la
celebración de los sacramentos.

2.- ¿Cómo cree UD. que se complementan, actualizan o solucionan los puntos en
reflexión sobre liturgia expuestos por el Papa San Juan Pablo II en su Carta
Apostólica “Spiritus Et Sponsa” y lo expuesto por el Papa Francisco en su
Carta Apostólica “Desiderio Desideravi”?
Es preciso que en este inicio de milenio se desarrolle una espiritualidad litúrgica, que lleve a
tomar conciencia de Cristo como primer liturgo, el cual actúa sin cesar en la Iglesia y en el
mundo en virtud del misterio pascual continuamente celebrado, y asociado a sí a la Iglesia,
para alabanza del Padre, en la unidad del Espíritu Santo.

3.- ¿Qué relación sobre liturgia encontramos entre “La Iglesia: Sacramento del
Cuerpo de Cristo” expuesto por el Papa Francisco en su Carta Apostólica
“Desiderio Desideravi” por el Papa San Juan Pablo II en su Carta Apostólica
“Spiritus Et Sponsa?
Se sitúa la liturgia en el horizonte de la historia de la salvación, cuyo fin es la redención
humana y la perfecta glorificación de Dios.
Del costado de Cristo dormido en le cruz brotó el admirable sacramento de toda la Iglesia
Cristo se hace presente, de modo especial, en las acciones litúrgicas, asociado a sí a la Iglesia.
“La celebración del Misterio Cristiano” Prof. Lorenzo Vigil Saavedra

4.- ¿En qué consiste el “Sentido teológico de la Liturgia”, expuesto como parte de
las reflexiones por el Papa Francisco en su Carta Apostólica “Desiderio
Desideravi”?
La liturgia es el antídoto más eficaz contra el veneno del subjetivismo, la liturgia no nos deja
solos en la búsqueda de un presunto conocimiento individual del misterio de Dios, sino que
nos lleva de la mano, juntos, como asamblea, para conducirnos al misterio que la Palabra y
los signos sacramentales nos revelan.

5.- Sistematizar la Audiencia General del Papa Benedicto XVI, sobre “La Liturgia,
escuela de oración: el Señor mismo nos enseña a rezar”, del miércoles 26 de
septiembre de 2012; al finalizar déjanos tu reflexión Litúrgica.

La principal escuela de oración –comienza explicando–, además de la Escritura, es la liturgia:

otro espacio precioso, otra fuente preciosa para crecer en la oración, "un lugar privilegiado en
el que Dios nos habla a cada uno de nosotros, aquí y ahora, y espera nuestra respuesta".
El requisito fundamental es que la celebración de los sacramentos –sobre todo la misa– sea
oración. Hay que tener en cuenta que la liturgia no es una oración cualquiera, sino un modelo
de oración. Solemos pensar que la oración consiste en que le digamos a Dios, sin más, lo que
se nos ocurre, lo que pensamos. Y eso está muy bien. Pero siguiendo a San Bernardo, observa
el Papa que la liturgia nos enseña a hacerlo al revés: primero está la Palabra (en la Escritura) o
las palabras que la Iglesia reza, y luego nuestro pensamiento debe modelarse según esas
palabras de Dios o de la Iglesia.