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Mi limitación partió del saber que no tenía una canción que me haga sentir todo lo que

pasaron estos 6 años de secundaria, pero bien se que me manejo mas con una lirica propia de
mis versos que no se esconden entre los matorrales del “segundo significado”, puesto que soy
directo, punto y al pie. Los años me mantuvieron la espera de un entendimiento que no
dispuse a la hora de entrar al primer salón de secundaría.

Durante muchos años los he visto crecer, se quienes son, para desconocidos está la calle que
transitan todos los días. Mas de una risa vino pegada a un lloriqueo de peleas internas entre
esos grupos de amigos. Hoy los veo y no niego que son aquello que mas aprecie durante mis
exhaustivas clases, entiendan que entre mis pensamientos no quedaran olvidados.

No les niego a nadie que este año pudo estar lleno de mas de una experiencia, hay que tener
mas que presentes que algunas cosas son tan mínimas que no les encuentro el sentido en este
momento, a sabiendas de la situación algunos de hacen la ley del hielo para no tener que
bancarse por alguna estupidez, el mayor error de una vida sería perderla y se preocupan por
cosas tan insignificantes a veces. El mayor error es el que no se quiere ver, porque ya pasamos
lo peor como grupo y lo demás serían pequeñeces y caprichos. Aprendan a ser amados y a
amar a los demás, porque se les olvida que se rigen por las construcciones más estúpidas de la
televisión que los manejo como quiso, amen de verdad a su pareja y demuestren
verdaderamente quienes son, quizá así es como creo que funciona, o quizá a mí.

Este año fueron mas de una sola experiencia, entendí mas mi futuro que años anteriores, y
ahora los veo, aunque lea estas palabras los puedo leer como libros abiertos, esa preocupación
que los engancha como una prenda de ropa, más de uno se maneja incierto de su futuro,
caminan temerosos a la oscuridad misma.

No puedo prometerles la certeza de que les va a ir bien, nadie puede hacerlo y sé en qué
momento de presión se sienten algunos, están indecisos, se miran al espejo y no saben
quiénes son aún, ven a los demás ingresar a un mundo laboral y se miran en retrospectiva para
pensarse “¿dónde estoy parado?”. Ingresan a la cocina y los ven a sus viejos llegando de un
laburo del cual se viven quejando y piensan “es lo que me toca”, y seguro llega la inesperada
pregunta de manera inquisitiva: ¿De qué vas a trabajar?” y no sabes responder, te incitan a
laburar de lo que ellos quieren y no tenés en cuenta tus propias preferencias hasta que es
demasiado tarde.

Es obvio que un éxito se alcanza única y exclusivamente con un empeño de película, pero es lo
que hay, mas de una ves me mire al espejo y me preguntaba que voy a hacer de mi vida, y mas
de una vez lo sigo haciendo. Me veo en ese esfuerzo continuo de búsqueda informática sobre
mi futuro, esa preparación solida del artista.

No me dejaran mentir, muchos de acá pavonean ignorando el futuro hasta que es tarde. Sexto
no se repite y ahora todo requiere un titulo universitario, la tecnología gana poder y todo se
vuelve mas difícil. Sencillamente a muchos no los voy a volver a ver y si piensan que me
equivoco, sencillamente demuéstrenmelo, sean exitosos en lo que les gusta, vivan de su
profesión futura. Somos los martillos y las ruedas de la nueva sociedad, no se queden
esperando un cambio en la cama, levanten la frente y sean el modelo a seguir de las nuevas
generaciones, que ya hace rato que todo esta en una mierda absoluta.

Se que no querían que toque este tema, pero si quiero hablar de este año, no lo puedo dejar
pasar así nomás, porque muchas de las risas, muchas de las preguntas sobre “quien quiero
ser” se las planteaba Mia.
La perdida es un factor que deja trastocado a aquel que la sufre, mas si es a una temprana
edad. Yo los veo a mis amigos llorando sin derramar lágrimas, las sonrisas se confunden con
dolor y todo nos remite al vació que dejo en cada uno esa ausencia. Todos preferiríamos que
sea mentira, algún “chascarrillo”, pero no. Me ahogo en lagrimas inexistentes que no dejan de
llorar cada que escribo, porque mi manera de seguir es plasmar lo que soy en texto y pintura.
Pero no me es suficiente.

Me lamento cada que pienso a todos los que van a estar en las fiestas añorándola, extrañando
esa sonrisa de oreja a oreja, alguna boludez que diga y cite alguna novedad. a veces todo me
hace verte acá, pero se que no es verdad.

Te veo en sueños y no escucho tu voz, parece que no me contestaras a mis preguntas, abro los
ojos y no te veo, pero al cerrarlos sobre noto que estaba ciego, porque mas de una vez te me
apareces, cuando te encuentro, te intento alcanzar por mas de dos segundos, pero te vas. En
esos sueños intentas hablar, pero ya no puedo recordar tu voz, simplemente me apego como
un bebe a su madre y sollozo en un silencio propio de un mundo onírico. Me miras y decís que
nada paso y luego despierto enojado por no ser verdad lo que dijiste. Las hojas del árbol de mi
alma todas se marchitaron desde tu partida, renacen cuando te veo y se caen cuando te vas.
Un ciclo infinito.

Espero que haya sido verdad esa ves en la que apareciste solo para decirme que estabas bien
en el otro mundo, aún así no sea creyente, por vos creo hasta en el budismo si así lo querés.
Porque fuiste parte de sexto, de quinto, de cuarto, de tercero, segundo y primero. Así que este
año también lo representas en mis palabras, porque mi grupo te vio en esas carcajadas, esa
vestimenta típica dark, y esa manera extraña que tenías de ser.

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