2023

Apertura de la sucesión, aceptaci

Diana soriano diocelina

santos milagros
María bernal
Mfbo3010@outlook.com
De la apertura de la sucesión, aceptación, repudiación e inventario

Autores:
Diana Soriano
Milagros Gonzalez
María Bernal
Diocelina Santos
Universidad de Panamá, Facultad de Derecho y Ciencias Políticas

Profesora:
Yanireth Herrera
24-10-2023

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 INDICE

A. Hoja de Presentación
B. Índice
C. Introducción
D. Concepto
E. Apertura de la Sucesión
F. Requisitos para la Apertura de la Sucesión
G. Fase Judicial
H. Sucesión del Municipio
I. Aceptación de la Sucesión
J. Procedimiento para la Aceptación
K. Repudiación de la Sucesión
L. Procedimiento para la Repudiación de la Herencia
M. Inventario
N. Procedimiento del Inventario
O. Conclusión
P. Referencias

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 INTRODUCCIÓN

El derecho de sucesiones o derecho sucesorio es aquella parte del derecho

privado que regula la sucesión mortis causa y determina el destino de las
titularidades y relaciones jurídicas tanto activas como pasivas de una persona
después de su muerte. Cuando una persona fallece, el derecho sucesorio es el
marco legal en el que se basan las herencias y los testamentos. Así pues, esta
área del derecho es fundamental para garantizar una adecuada distribución de los
bienes de una persona fallecida y evitar conflictos entre los posibles herederos. En
el presente trabajo analizaremos y explicaremos la importancia del derecho de
sucesiones, la apertura, la aceptación, la repudiación y el inventario son pasos
fundamentales en el proceso de sucesión en Panamá.

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1. CONCEPTO

El derecho sucesorio es una rama del derecho civil que regula la

transmisión de los bienes y los activos de una persona fallecida hacia sus
herederos y legatarios, así como los derechos y las obligaciones entre las
partes implicadas. El principal objetivo de esta área del derecho es
determinar quiénes son los herederos y legatarios de una persona fallecida
y cómo se distribuirán sus bienes.
En derecho sucesorio, los derechos hacen referencia a la transmisión de la
propiedad, el pago de deudas pendientes y la distribución de los bienes
entre los herederos. De esta manera, el derecho sucesorio establece la
forma en que se distribuirán los bienes de una persona, a quién se le darán,
y qué derechos tendrán los herederos sobre los bienes. Asimismo,
establece también los requisitos para la elaboración de testamentos y la
forma en que se deben cumplir los deseos de una persona después de su
muerte.

El derecho sucesorio se puede clasificar en dos categorías.

 Sucesión testamentaria: Se refiere a la transmisión de los bienes de
una persona fallecida de acuerdo con las disposiciones contenidas
en su testamento. En este caso, el testador tiene la libertad de
distribuir sus bienes entre sus herederos y legatarios de la forma que
considere adecuada. Cabe destacar que la sucesión testamentaria
está sujeta a las limitaciones establecidas por la ley.
 Sucesión intestada: Se produce cuando una persona fallece sin dejar
un testamento válido o cuando las disposiciones contenidas en el
testamento no pueden ser aplicadas. En este caso, la ley establece
un orden de prelación de herederos que se aplicará para distribuir los

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 bienes del fallecido. Entonces, los herederos que tienen derecho a la
sucesión intestada se llaman herederos legales

2. APERTURA DE LA SUSECIÓN
La apertura de la sucesión es el momento en que se reconoce legalmente
la existencia de una sucesión después del fallecimiento de una persona
(causante). En cuanto al inicio de su proceso, se considera abierta desde el
momento de la muerte del causante. A partir de ese momento, se inicia el
proceso para determinar la distribución de sus bienes y activos entre los
herederos y legatarios.
Toda persona al momento de su muerte deja un conjunto de derechos y
obligaciones que conforman su patrimonio y que son susceptibles de ser
traspasados, ya sea por medio de la sucesión testada o intestada. El
artículo 628 del Código Civil patrio define la sucesión como la transmisión
de los derechos activos y pasivos que componen la herencia de una
persona muerta, a la persona que sobrevive, a la cual la Ley o el testador
llama para recibirla. Será considerado heredero al que sucede a título
universal, y legatario al que sucede a título singular.
En el caso de la sucesión intestada, nos referimos puntualmente a aquella
transmisión patrimonial que efectúa una persona cuando ésta no manifestó,
en vida, su última voluntad sobre el destino de sus bienes por medio de un
testamento, es por ello que en tales circunstancias la Ley será la encargada
de indicar que personas, en un orden específico, tendrán derecho a heredar
los bienes dejados en vida del de cujus de acuerdo al parentesco, tal cual lo
establece el artículo 646 y subsiguientes del Código Civil. En cierto modo,
se podría considerar a la sucesión ab intestato como un testamento basado
en lineamientos jurídicos que determinarán quienes serían supuestamente
los herederos del causante como si hubiera sido su última voluntad.

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3. REQUISITOS PARA LA APERTURA DE SUSECIÓN
Es necesario determinar, al menos aproximadamente, a cuánto asciende la
cuantía de la demanda en base al patrimonio del causante. Si los bienes de
una sucesión exceden de CINCO MIL BALBOAS (B/. 5,000.00) serán
competentes para conocer del negocio los juzgados de circuito. En
contrario sensu, si los bienes de una sucesión no exceden los CINCO MIL
BALBOAS (B/. 5,000.00) el procedimiento será oral y serán competentes
los juzgados municipales del último domicilio del causante.
Por otro lado, el artículo 1527 del Código judicial señala los requisitos que
toda persona interesada en pedir la apertura del proceso de sucesión
deberá aportar con la demanda:
 Prueba de la defunción del causante de la herencia: Se obtiene
mediante certificado de defunción expedido por el Registro Civil.
 Certificado del notario o notarios del domicilio del causante en la
República de Panamá en que conste que no otorgó testamento ante
ellos: Se deberá concurrir a la(s) notaria(s) del domicilio del causante
para que el notario certifique, con su sello y firma, que tal persona no
otorgó testamento alguno.
 Prueba plena del parentesco en que el demandante funda su
derecho: por ejemplo, si es el hijo el que solicita la apertura de la
sucesión intestada, se prueba mediante certificado de nacimiento
expedido por el Registro Civil.

4. FASE JUDICIAL
Una vez presentada la demanda ante el tribunal de justicia competente, los
pases a seguir son los enunciados a continuación:
A. Con la demanda se solicita la apertura del proceso de sucesión de
acuerdo a los argumentos plasmados en ella.

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 B. El tribunal analizará la demanda en base al derecho argumentado
por el demandante y podrá admitirla u ordenar su corrección en caso
que estuviera defectuosa.
C. Si la demanda es admitida se le dará traslado de la solicitud al
Ministerio Público por el término de cinco (5) días. En el evento que
el agente del Ministerio Público dejare transcurrir el término del
traslado sin evacuarlo, el juez exigirá la devolución inmediata del
expediente y dictará el auto de declaratoria de heredero tal cual lo
establece el artículo 1530 del Código Judicial.
El auto de declaratoria debe contener lo siguiente:
 La declaratoria de apertura de la sucesión intestada.
 La declaratoria de que son herederos, sin perjuicio de terceros, las
personas que hubieran probado su derecho.
 La orden de que comparezcan a estar en derecho en el proceso
todas las personas que tengan algún interés en él, incluyendo el
representante del fisco.
 Se deberá publicar el edicto de la resolución que contiene el auto de
declaratoria de herederos enunciado ut supra por un período de tres
(3) días en un diario de circulación nacional tal cual lo establece el
artículo 1510 y 1531 del Código Judicial. Tal edicto permanecerá por
el término de diez (10) días en el tribunal para que comparezcan
todas las personas que tengan derecho en la presente causa. Si
dentro de los diez (10) días comparece alguna persona que pruebe
su derecho a ingresar como heredero dentro del juicio sucesorio,
entonces tal persona será considerada como heredero, de acuerdo a
su condición de parentesco, de los bienes dejados en vida del de
cujus. En el evento que una persona acuda al tribunal para ser
considerado como heredero declarado fuera del término otorgado
por Ley, podrá hacer valer su pretensión mediante incidente contra
los herederos ya declarados, siempre y cuando no se haya
ejecutoriado el auto de adjudicación.

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  Una vez transcurrido los supuestos señalados a priori, la etapa que
sigue es la concerniente a la diligencia de inventario y avalúo, la cual
podrá ser judicial y extrajudicial. El inventario será judicial cuando
entre los herederos haya menores de edad, incapaces o ausentes; y
será extrajudicial cuando todos los herederos puedan disponer
libremente de sus bienes y se hallen presentes. En la diligencia de
inventario y avalúo se incluirán todos los bienes que haya tenido el
causante al momento de su muerte, como por ejemplo: propiedades,
acciones o títulos valores, cuentas bancarias, vehículos,
semovientes, dineros, prendas personales, etc.

El tribunal señalará una fecha en la cual se deberá realizar la diligencia de

inventario y avalúo en la cual participarán las siguientes personas: perito del
tribunal, perito de los herederos, testigos actuarios y los apoderados
legales. Una vez finalizada la diligencia de inventario y avalúo se deberá
entregar un acta, la cual estará firmada por todas las personas que
participaron en ella, en la cual constará todos los resultados obtenidos en
tal diligencia y la misma será entregada al tribunal.
Una vez el tribunal reciba la diligencia de inventario y avalúo se dará
traslado a los interesados por el término de tres (3) días para que presenten
las objeciones que estimen conveniente (si las hubiere). Las objeciones al
inventario tienen como propósito adicionar o modificar para que se incluyan
nuevas partidas o se excluyan las que se consideren indebidamente
incluidas.

Concluida la etapa de la diligencia de inventario y avalúo, el tribunal de la

causa procederá a emitir una resolución la cual consistirá en el auto de
adjudicación, y tal cual como lo indica su nombre, se procederá a adjudicar
a los herederos declarados los bienes dejados en vida por el causante, los
cuales conforman aquellos bienes que ya fueron inventariados en la
referida diligencia. De igual modo, aquellas personas que tengan en su

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 poder bienes que pertenecían al causante deberán entregarlo
inmediatamente a los herederos declarados. Por ejemplo, en el caso de
cuentas bancarias, el juez ordenará al banco, mediante oficio acompañado
con su respectiva resolución, que entregue a los herederos las sumas de
dinero a las cuales tengan derecho en la proporción que corresponda; o si
por ejemplo en la diligencia se incluyó en el inventario algún vehículo
propiedad del causante, entonces una vez sea adjudicado el mismo a los
herederos se deberá efectuar el cambio de propietario correspondiente en
el Municipio y la Autoridad de Tránsito y Transporte Terrestre (ATT).
Por otro lado, en el supuesto de que existan bienes inmuebles
inventariados y que por ende forman parte de la masa herencial, el tribunal
ordenará que los mismos sean elevados a escritura pública ante un notario
e inscritos en el Registro Público de Panamá (efecto erga omnes). Tal
actuación es de suma importancia pues lo que se busca es que el
registrador transfiera la propiedad que era del causante a favor de los
herederos declarados tal cual ordenó el Juez. Tales aclaraciones son
importantes pues a veces se tiende a pensar que una vez el Juez adjudica
los bienes a los herederos el proceso sucesorio finaliza, sin embargo, es
necesario que las autoridades pertinentes (dependiendo de la naturaleza de
los bienes heredados) sean informadas al respecto para que efectúen los
cambios de propiedad correspondientes.

5. DE LA SUCESIÓN DEL MUNICIPIO

El artículo 692 del Código Civil establece que a falta de personas que
tengan derecho a heredar conforme a los dispuesto en los precedentes
capítulos, heredará el municipio donde tuvo su último domicilio el difunto. A
su vez, para que el municipio tome posesión de los bienes hereditarios,
habrá de preceder declaración judicial de heredero, adjudicándole los
bienes por falta de otros herederos. Somos de la opinión que el artículo
citado ut supra tuvo que haber sido redactado un poco mejor pues al
señalar que heredará el municipio del último domicilio del difunto, podría

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 interpretarse que un municipio extranjero tenga derecho a reclamar la
herencia si el último domicilio del causante era fuera de la República de
Panamá.

Sin embargo, a pesar de lo señalado anteriormente, no es menos cierto que

el espíritu del artículo referido debe entenderse en el sentido que el Estado
(municipio) sea el único que pudiera apoderarse de los bienes que sus
ciudadanos dejen disponibles o vacantes, pues recordemos que en este
caso el Municipio será considerado como un heredero forzoso al ser el
último que podría heredar la herencia vacante a falta de personas que
tengan derecho a heredar tal cual previene la Ley.

6. ACEPTACIÓN DE LA SUSESIÓN
La aceptación es la acción por la cual una persona designada como
heredero en un testamento o con derechos sucesorios según la ley de
sucesión intestada acepta su designación y los derechos y obligaciones que
conlleva.
Cuando un heredero acepta su designación, está dispuesto a recibir su
parte de la herencia y asume la responsabilidad de cumplir con las
disposiciones del testamento y las obligaciones legales relacionadas con la
sucesión.
La herencia se podrá aceptar:
 Pura y simplemente: En este caso, se aceptan los bienes y deudas
de la herencia. El heredero responde con su patrimonio personal de
las deudas hereditarias.
 A beneficio de inventario: En este caso, el heredero responde de las
deudas del causante hasta donde alcance el patrimonio hereditario.
El heredero no responde con sus propios bienes de las deudas de la
herencia.

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  Repudiar o renunciar la herencia: el llamado como heredero
manifiesta ante Notario en escritura pública su voluntad de rechazar
o renunciar a la herencia.
La aceptación a beneficio de inventario supone que las deudas del difunto
no se mezclaran con los bienes y el patrimonio del heredero, por lo que solo
se responderá de las deudas del fallecido con los bienes de la herencia.
Por otro lado, respecto de la aceptación pura y simple, cabe hacer una
diferenciación, ya que se puede aceptar pura y simplemente a la herencia,
pero esta puede ser expresa o tácita. Es por ello que se comprende lo
siguiente:
 Hasta que no pasan 9 días desde el momento del fallecimiento del
causante, no se puede exigir a ninguno de los herederos que se
manifieste sobre si acepta o rechaza la herencia. Una vez que
transcurre ese plazo, los interesados pueden acudir al notario para
solicitar el acta de interpelación notarial. A través de este trámite,
desde notaría se ponen en contacto con el heredero para que
comunique si acepta la herencia, o si la repudia. En caso de
aceptarla, también debe indicar si lo hace pura y simplemente, o bien
a beneficio de inventario (en cuyo caso, solo responderá de las
deudas de la herencia con los bienes de la misma, sin afectar a su
patrimonio).
 El heredero tiene un plazo de 30 días para transmitir su decisión. El
Notario le advertirá de que, en caso contrario, se entenderá que
acepta la herencia de forma pura y simple. Esto conlleva que se hará
responsable de las cargas de dicha herencia incluso con sus propios
bienes, y no solo con los que integren la masa hereditaria.
 Cuando un heredero fallece sin aceptar ni repudiar la herencia, pasa
a sus herederos el derecho que él tenía. Esto se conoce como
derecho de transmisión. De esta forma, el derecho a aceptar o
renunciar a la herencia del primer causante es un derecho que forma
parte de la herencia del segundo.

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  No se debe pasar inadvertido a la hora de heredar es que no solo se
heredan los bienes del fallecido sino también sus deudas.

En Panamá, la aceptación de la sucesión se refiere al acto de aceptar

formalmente la herencia de una persona fallecida. Una vez que se ha
abierto la sucesión y se han determinado los bienes del causante, los
herederos deben decidir si desean aceptar o renunciar a la herencia. La
aceptación de la sucesión puede darse de dos formas: expresa o tácita.
La aceptación expresa es cuando el heredero manifiesta de manera clara y
voluntaria su intención de aceptar la herencia. Esto se puede hacer a través
de una declaración escrita ante el Juzgado de Sucesiones o mediante la
firma de un documento notarial. Por otro lado, la aceptación tácita ocurre
cuando el heredero realiza actos que implican una clara intención de
aceptar la herencia. Por ejemplo, si el heredero comienza a administrar los
bienes de la herencia o realiza actos de disposición sobre ellos, se
considera que han aceptado la sucesión de forma tácita.

7. PRODICIMIENTO PARA LA ACEPTACIÓN

 Obtener un Certificado de Defunción: El proceso comienza con la
obtención de un certificado de defunción del causante, que certifica
su fallecimiento.
 Localizar y Revisar el Testamento: Si el causante dejó un
testamento, este debe ser localizado y revisado. El testamento es un
documento legal que establece cómo se deben distribuir sus bienes
y activos después de su fallecimiento.
 Determinar los Herederos: Si no existe un testamento, se aplicarán
las reglas de sucesión intestada para determinar quiénes son los
herederos legales del causante. En caso de existir un testamento, los
herederos serán aquellos designados en el testamento.
 Nombrar un Albacea: En algunos casos, se designa un albacea en el
testamento para administrar la herencia y asegurarse de que las

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 disposiciones testamentarias se cumplan correctamente. El albacea
puede ser una persona de confianza designada por el causante.
 Inventario de los Bienes y Activos: Se realiza un inventario detallado
de todos los bienes y activos del causante. Esto incluye propiedades,
cuentas bancarias, inversiones, vehículos, objetos personales, entre
otros.
 Pago de Deudas y Obligaciones: Antes de la distribución de la
herencia, se deben liquidar las deudas y obligaciones pendientes del
causante. Esto puede incluir deudas testamentarias, impuestos,
gastos funerarios y otras deudas financieras.
 Liquidación de la Herencia: Una vez que se han identificado los
herederos y se han pagado las deudas, se procede a la distribución
de la herencia de acuerdo con las disposiciones del testamento o las
leyes de sucesión intestada.
 Presentación ante la Autoridad Judicial: En algunos casos, es
necesario presentar la herencia ante una autoridad judicial para
obtener la aprobación y la autorización para llevar a cabo la
distribución de los bienes y activos.
 Pago de Impuestos: Dependiendo del valor de la herencia y las leyes
fiscales vigentes, es posible que sea necesario pagar impuestos
sucesorios. Es importante cumplir con las obligaciones fiscales
correspondientes.
 Registro de la Transferencia de Bienes: Los bienes inmuebles y otros
activos sujetos a registro deben transferirse legalmente a los
herederos. Esto puede requerir la presentación de documentos y
trámites ante las autoridades pertinentes.
 Finalización del Proceso: Una vez que se han completado todos los
pasos anteriores y se han cumplido todas las obligaciones legales y
fiscales, se considera que el proceso de aceptación de la herencia
ha concluido.

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8. REPUDIACIÓN DE LA SUSECIÓN
La repudiación es el acto mediante el cual una persona designada como
heredero o legatario en un testamento renuncia a su derecho de heredar o
recibir un legado. Cuando alguien repudia su derecho a la herencia, se
considera que renuncia a todos los derechos y obligaciones relacionados
con la sucesión. Esto significa que no recibirá ningún bien o legado y no
estará obligado a asumir deudas o responsabilidades de la sucesión.

En Panamá, si un heredero decide renunciar a la sucesión, debe hacerlo

mediante una declaración formal de renuncia ante el Juzgado de
Sucesiones. En caso de renuncia, los derechos de herencia del renunciante
se distribuirán entre los demás herederos de acuerdo con las disposiciones
legales aplicables. En el Art 894 se nos explica que, si se produce a
beneficio de inventario en favor del heredero los efectos siguientes:
 El heredero no queda obligado a pagar las deudas y demás cargas
de la herencia sino hasta donde alcancen los bienes de la misma;
 Conserva contra el caudal hereditario todos los derechos y acciones
que tuviere contra el difunto;
 No se confunden para ningún efecto, en daño del heredero, sus
bienes particulares con los que pertenezcan a la herencia.

Si se desea repudiar una herencia en Panamá, debes hacerlo mediante una

declaración formal de repudio ante el Juzgado de Sucesiones
correspondiente. La declaración debe incluir la información relevante sobre
el causante, tu relación de parentesco con el causante y tu decisión de
repudiar la herencia. Es importante tener en cuenta que una vez que
repudias una herencia, pierdes todos los derechos y beneficios
relacionados con ella. Además, la repudiación no puede ser revocada
posteriormente.

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9. PROCEDIMIENTO PARA LA REPUDACIÓN DE LA HERENCIA
El procedimiento de repudiación de una herencia en Panamá es un proceso
legal mediante el cual un heredero renuncia a sus derechos sucesorios y
decide no aceptar la herencia que le corresponde. Este procedimiento
puede ser necesario por diversas razones, como la existencia de deudas o
cargas que superen el valor de la herencia, desinterés por los bienes
heredados, conflictos familiares, entre otros motivos. A continuación, se
describe el procedimiento general para repudiar una herencia en Panamá:
 Consultar a un Abogado: Antes de tomar cualquier acción, es
recomendable consultar a un abogado especializado en derecho
sucesorio en Panamá. Un abogado puede proporcionar
asesoramiento legal específico y guiar a la persona a través del
proceso de repudiación de la herencia.
 Identificar y Revisar el Testamento: Si el causante dejó un
testamento, es importante revisarlo para asegurarse de que se
comprendan todas las disposiciones y las consecuencias de la
repudiación. El testamento puede contener instrucciones específicas
sobre la repudiación.
 Evaluar los Bienes y Deudas: Es necesario hacer un inventario de
los bienes y activos heredados, así como de las deudas y
obligaciones relacionadas con la herencia. Esto ayudará a
determinar si es conveniente repudiar la herencia.
 Presentar una Declaración de Repudiación: Para repudiar la
herencia, el heredero debe presentar una declaración escrita de
repudiación ante el juez de sucesiones competente. En esta
declaración, se deben expresar claramente las razones de la
repudiación y la renuncia a todos los derechos sucesorios.

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  Notificación a los Demás Herederos: Si hay otros herederos, es
importante notificarles sobre la repudiación de la herencia. Esto
puede requerir el envío de notificaciones formales, y los herederos
tienen el derecho de aceptar o repudiar su parte de la herencia.
 Registro de la Repudiación: La declaración de repudiación debe ser
registrada ante la autoridad judicial competente. Este registro
formaliza la repudiación y la hace efectiva.
 Consecuencias de la Repudiación: Una vez que se ha repudiado la
herencia, el heredero renuncia a todos los derechos y obligaciones
relacionados con la herencia. No recibirá ningún bien ni activo de la
herencia, pero tampoco estará obligado a asumir las deudas o
responsabilidades de la misma.
 Asesoramiento Legal Continuo: Es importante mantener una
comunicación continua con el abogado a lo largo del proceso para
asegurarse de que se cumplan todos los requisitos legales y
formales. Cabe destacar que el proceso de repudiación de una
herencia puede ser irreversible una vez completado, por lo que es
fundamental tomar esta decisión con pleno conocimiento de las
consecuencias y después de haber obtenido el asesoramiento legal
adecuado.

10. INVENTARIO
El inventario de la sucesión se refiere a la lista de bienes, activos y
propiedades que se encuentran en la herencia de una persona fallecida. En
este proceso, se realiza un inventario detallado de los elementos que
forman parte de la herencia, incluyendo inmuebles, vehículos, cuentas
bancarias, inversiones, muebles, joyas y cualquier otro activo de valor.
El inventario en la sucesión es fundamental para determinar los bienes que
se distribuirán entre los herederos según las disposiciones del testamento o
las leyes de sucesión en Panamá.

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 Además, permite establecer el valor total de la herencia y facilita el proceso
de liquidación y reparto de los bienes. Para llevar a cabo el inventario en la
sucesión, es necesario contar con la asistencia de un abogado
especializado en derecho sucesorio. Este profesional se encargará de
recopilar la información necesaria, verificar la titularidad y valor de cada
activo, y realizar los trámites legales correspondientes para la transferencia
de la propiedad a los herederos.
De acuerdo con el Art 894, el beneficio de inventario produce en favor del
heredero los efectos siguientes:
 El heredero no queda obligado a pagar las deudas y demás cargas
de la herencia sino hasta donde alcancen los bienes de la misma;
 Conserva contra el caudal hereditario todos los derechos y acciones
que tuviere contra el difunto;
 No se confunden para ningún efecto, en daño del heredero, sus
bienes particulares con los que pertenezcan a la herencia.

En el Art 902 comprendemos que el heredero pierde el beneficio del

inventario cuando pase lo siguiente:

 Si a sabiendas dejare de incluir en el inventario alguno de los

bienes o acciones de la herencia o supusiere deudas que no
existen.
 Si antes de completar el pago de las deudas y legados enajenase
bienes muebles de la herencia sin autorización judicial o la de
todos los interesados, o no diese al precio de lo vendido la
aplicación determinada al concederle la autorización.

11. PROCEDIMIENTO DEL INVENTARIO

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El procedimiento de inventario de una herencia en Panamá es una etapa
fundamental en el proceso de sucesión que implica la elaboración de un
listado detallado de todos los bienes, activos y deudas del causante (la
persona fallecida). Este inventario es esencial para determinar el patrimonio
del causante y para llevar a cabo la distribución de los bienes y la
liquidación de las obligaciones de la sucesión de manera adecuada. A
continuación, se describe el procedimiento general para llevar a cabo el
inventario de una herencia en Panamá:
 Nombramiento de un Albacea o Representante Legal: En muchos
casos, el causante habrá designado a un albacea en su testamento
para administrar la herencia y llevar a cabo el inventario. El albacea
es responsable de coordinar y supervisar este proceso.
 Identificación de los Bienes y Activos del Causante: El albacea y los
herederos (si los hay) deben identificar y localizar todos los bienes y
activos del causante. Esto incluye propiedades, cuentas bancarias,
inversiones, vehículos, objetos personales y otros activos.
 Obtención de Documentación Legal: Se deben recopilar documentos
legales que respalden la propiedad y el valor de los activos. Esto
puede incluir escrituras de propiedad, estados de cuentas bancarias,
certificados de acciones, contratos de seguros y otros documentos
pertinentes.
 Valuación de los Bienes: Se debe determinar el valor justo de
mercado de cada uno de los bienes y activos. Esto puede requerir la
asistencia de peritos o tasadores en casos de bienes de alto valor o
complejidad.
 Registro de Deudas y Obligaciones: Además de los activos, se
deben identificar y registrar todas las deudas y obligaciones del
causante. Esto incluye préstamos, hipotecas, impuestos pendientes,
facturas pendientes y cualquier otro compromiso financiero.
 Elaboración del Inventario: Con toda la información reunida, se
elabora un inventario detallado que enumera todos los bienes,

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 activos, deudas y obligaciones del causante. Este inventario debe
ser claro y completo.
 Presentación ante la Autoridad Judicial: En algunos casos, el
inventario debe ser presentado ante una autoridad judicial para su
revisión y aprobación. Esto puede depender de la complejidad de la
herencia y de las regulaciones locales.
 Distribución de la Herencia: Una vez que se ha completado el
inventario y se han liquidado las deudas y obligaciones, se procede a
la distribución de la herencia de acuerdo con las disposiciones del
testamento o las leyes de sucesión intestada.
 Registro de Transferencias de Propiedad: Si es necesario, se deben
realizar los trámites legales para transferir la propiedad de los bienes
a los herederos de acuerdo con el inventario.
 Registro Fiscal y Legal: Es importante cumplir con todas las
obligaciones fiscales y legales relacionadas con el inventario y la
distribución de la herencia.

CONCLUSIÓN

El derecho sucesorio es una parte clave del derecho privado que regula
cómo se distribuyen los bienes de una persona después de su muerte, ya
sea a través de un testamento o según las leyes cuando no hay testamento.
Esto es fundamental para evitar conflictos y asegurar que se cumplan los
deseos de la persona fallecida. En la universidad, hemos aprendido que
esta área del derecho es esencial para garantizar una transferencia justa y
ordenada de activos y patrimonio en casos de sucesión mortis causa.

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 REFERENCIAS

1. Código Civil de la República de Panamá.

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