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PYD SE II

Nuevo modelo de la comunicación


humana
1. ¿Es posible la comunicación sin usar señales convencionales?
Sí es posible la comunicación sin usar señales convencionales ya que
podemos obtener información de muchas maneras, pero solo hay
comunicación cuando existe intención comunicativa mutuamente
manifiesta. La comunicación lingüística no es la única que usamos, los
ruidos, los gestos, las miradas o el tacto son otros elementos que pueden
dar pie a la comunicación.
Si, ya que a lo largo del día y de la vida, se dan diversas situaciones que no
requieren de señales convencionales como sería llevarse la mano a la boca
con la intención de mandar callar, y comunicamos así muchas informaciones
de las cuales no nos damos cuenta, eso sí, todo depende de la información
comunicativa que presentemos, la intención comunicativa que hay entre
emisor y receptor debe ser implícita, es decir, que haya ganas de comunicar, si
no, serían señales sin intención comunicativa, con ello, hablaremos de
transmisión accidental de información, y no de comunicación.

2. ¿Hay comunicación cuando se produce una transmisión accidental


de la información?
No la hay.
a. ¿Por qué?
Porque la comunicación solo se da cuando hay intención
comunicativa ostensiva mutuamente manifiesta, cuando se transmite
información de forma accidental no se tiene la intención voluntaria de
transmitir esos datos y, por tanto, no se puede hablar de comunicación.
Para que haya comunicación necesitamos dos características
adicionales: primero que la intención sea explícita y que sea reconocida
por los demás. Si la intención no se hace explícita, no se reconocerá
como voluntaria. Si no es reconocida, no encontrará eco por parte de
los demás.
b. ¿Es lo mismo informar que comunicar?
No es lo mismo informar que comunicar ya que para que se dé la
comunicación, debe haber intención comunicativa ostensiva mutuamente
manifiesta, sin embargo, para informar o ser informados de algo, no es
necesario que haya intención comunicativa por ambas partes. Además,
puede haber transmisiones intencionadas de información (intención
informativa), sin que haya intención comunicativa mutuamente
manifiesta.
Comunicar no implica necesariamente transmitir información, sino que
esta función es secundaria, hasta cierto punto desarrollada
culturalmente, y se superpone a otra más básica, que consiste en
comunicar la intención de comunicar. La intención informativa consiste
en la decisión de transmitir un mensaje determinado. La primera es
mayor alcance e incluye a la segunda, de modo que siempre hay
intención informativa hay también una intención comunicativa, pero no
viceversa.

c. Explícalo con un ejemplo


Por ejemplo, si Mafalda está en la cocina intentando comer la sopa
sin saber que su madre la está observando, en el momento en el que ella
pone cara de dolor al probar la comida le estará transmitiendo a su madre
la información de que la sopa quema, ya que su madre lo inferirá por su
comportamiento. Este es un caso de transmisión de información sin
comunicación, ya que no hay intención mutuamente manifiesta.

3. ¿Cuándo es posible la comunicación?


La comunicación solo es posible cuando existe intención
comunicativa mutuamente manifiesta.
La intención sirve para diferenciar actos voluntarios que representan
formas de comportamiento (ej. cuando alguien se está alargando mucho y
comienzas a señalar o jugar con el reloj para indicar que se está
extendiendo) de actos involuntarios o reflejos (ej. alguien que tiene un tic
por el que guiña el ojo, no tiene intención de guiñar el ojo y/o comunicar
algo con esto, pero lo realiza porque es un acto involuntario).
Comunicamos más que informamos.
4. ¿Debe un modelo explicar los fracasos en la comunicación?
Sí, la teoría debe explicar la comunicación exitosa y también los fracasos.
No,porque muchas veces tenemos intenciones comunicativas y dadas las
circunstancias no se produce dicha comunicación, y por ello el modelo
comunicativo no significa que sea fallido ya que son casos particulares y no se
tiene que explicar particularidades.

¿Por qué?
Debe explicarlos porque, al explicar unas pautas sobre cuándo se da
la comunicación, debe saber detectar los fallos que se dan en ella.
5. Explica los antecedentes del modelo ostensivo-inferencial
El principio de cooperación de Grice, más concretamente su máxima
de relevancia, es el punto de partida para los relevantistas. Grice fue el
primero en separar el contenido explicito (lo dicho) del contenido
implícito (lo comunicado), siendo necesarias las inferencias para pasar de
un contenido a otro.
Sin embargo, Grice no le asigna al “hablante” un papel, son los
relevantistas los que definen su papel como ostensivo, aquel que va
guiando el proceso inferencial del oyente. Así el destinatario no deriva
información a ciegas, sino como el emisor le indica. Sperber y Wilson
comparan esta actividad conjunta como una pareja de baile, que se tiene
que coordinar para que el resultado sea armónico, pero en la que cada
miembro desempeña una tarea específica: uno lleva y el otro se deja llevar.
De ahí el nombre del modelo, ostensivo debido al papel del emisor e
inferencial debido al papel del destinatario.

6. ¿En qué consiste el modelo ostensivo-inferencial?


Definición Sonia: El modelo ostensivo-inferencial tiene dos partes, la
ostensiva y la inferencial, la ostensiva le corresponde al emisor y la
inferencial al destinatario.
La ostensión es la codificación de la información con una intención
(el objetivo comunicativo), tienes en mente a tu destinatario y vas
modificando el mensaje para que este lo comprenda lo mejor posible (el
mensaje depende entonces de la distancia social con el destinatario, de la
institucionalización de la situación ya sea formal o informal, del medio
escrito u oral y de los objetivos que persigas)
La inferencial es lo que hace el destinatario, tiene que pasar
obligatoriamente por reconocer la intención del emisor (el objetivo
comunicativo), y a partir de ahí ponerse él también en la mente del emisor
para saber qué le quiso transmitir.
Mía: El modelo ostensivo-inferencial consiste en la recuperación del
oyente de un pensamiento del hablante. A partir del mensaje y otros
índices establece unas premisas y, dichas premisas, conducen a una
conclusión. Para recorrer ese camino el oyente realiza un trabajo
inferencial guiado por el emisor.
Se basa en la idea de intención, que es previa a la transmisión de información,
y asigna a hablante y oyente dos tareas específicas y complementarias:
ostensión e inferencia.

a. ¿Qué aporta este modelo?


Aporta un sentido a la revisión del modelo del código de Sperber y
Wilson, un valor cognitivo a los planteamientos pragmáticos (entran las
ideas de los guiones, teoría de la mente y esos rollos) y además sirve para
dar el enfoque inferencial de la pragmática (aquí te metes de lleno en
muchas cosas).
7. ¿El lenguaje sirve para algo más que transmitir información?
La transmisión de información es una función secundaria del
lenguaje, la mayor parte de lo que emitimos y de las conversaciones que
mantenía no buscan informar de nada.
Para comenzar, debemos diferenciar entre lenguaje y comunicación,
puesto que puede haber lenguaje sin llegar a comunicar nada, por ejemplo,
mientras cantamos para nosotros mismos o estudiamos repitiendo la
lección en nuestra cabeza.
Sin embargo, hay que añadir que cuando empleamos el lenguaje en
la comunicación tampoco tenemos por qué informar, ya que no es lo
mismo informar que comunicar (puesto que no es lo mismo la intención
comunicativa que la intención informativa). Podemos comunicarnos sin
aportar ninguna información nueva, por ejemplo, cuando una madre ve la
nota de un examen (un suspenso) que su hijo le enseña y le dice “has
suspendido”, a pesar de que el niño ya lo sabe.
La función de informar solo es una función secundaria de la
comunicación. Puesto que estamos todo el rato hablando de banalidades,
expresando emociones simples, comunicándonos, pero no informando.
Por ejemplo: después de clase de educación física cuando le dices a una
amiga lo cansada que estás aun sabiendo que ella está igual que tú.
INFORMACIÓN DE MAITE

Idea clave: “partir de la intención para explicar el proceso


comunicativo implica (...) separar comunicación de comunicación
lingüística: (. . .) L a comunicación lingüística será una forma privilegiada
de comunicación, pero no la única” (p.14)
Puede haber transmisiones intencionadas de información (intención
informativa) SIN QUE haya intención comunicativa manifiesta.
NO ES CIERTO que “siempre que hay intención informativa hay
también intención comunicativa” (Pons, 2004: 14)
El que no pueda identificarse “un mensaje concreto” (Pons, 2004: 14)
“un significado concreto y unívoco” (Pons, 2004: 15), NO significa que el
intercambio carezca de intención informativa.
Una impresión (..) es un cambio en nuestro entorno cognitivo (...)
derivado de alteraciones relativamente pequeñas en el carácter manifiesto
de muchos supuestos.
“En el modelo de la comunicación ostensivo-inferencial (...) las
impresiones caen de lleno en el terreno de las cosas que pueden
comunicarse, e incluso su propia imprecisión puede describirse de manera
precisa. (..) En lugar de tratar un supuesto como si fuera algo que ha sido
comunicado o no comunicado, tenemos un conjunto de supuestos que,
como resultado de la comunicación, se vuelven manifiestos (...) en
diferente grado”.

“Podríamos concebir la misma comunicación, por consiguiente, como una


cuestión de grados. Cuando la intención comunicativa del emisor implica
hacer que un supuesto concreto se vuelva fuertemente manifiesto,
entonces ese supuesto habrá sido fuertemente comunicado. (...) Con las
formas más débiles de comunicación, el emisor solo puede esperar inclinar
los pensamientos del oyente en una dirección determinada. Muy a
menudo, en la interacción humana la comunicación débil resulta ser
suficiente o incluso preferible a las formas de comunicación fuerte”.
El hecho de que la información que transmitimos en ciertas situaciones no
sea trascendente no implica que el emisor pretenda decir otra cosa, o que
no diga “lo que realmente quiere decir”.

En ciertas situaciones, la expectativa de relevancia es tan baja


que, a poco que digamos, la comunicación se cumple con
éxito.
El oyente: su misión consiste en recuperar un pensamiento del hablante,
lo que implica no solo estar atento a descubrir sus intenciones
comunicativa e informativa sino, en el caso de la comunicación lingüística,
a ir más allá del contenido proposicional del mensaje para llegar al sentido
último del mismo o, dicho en otras palabras, a recuperar lo que el hablante
ha querido comunicar (Pons, 2004: 16)
Pero...¡¡¡¡ INTENCIÓN INFORMATIVA Y SENTIDO DESEADO SON LO
MISMO!!!!
El conjunto de ideas manifiestas que consideramos verdaderas o
probablemente verdaderas en un momento dado constituye nuestro
entorno cognitivo

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