Realizado por:

Brisa Iveth Flores

Aceves

Técnica de Relajación
Progresiva
¿Qué es la Relajación Progresiva?
Las técnicas de relajación son consideradas de educación o reeducación ya
que pueden ser organizadas como programas de auto entrenamiento, la
relajación es muy efectiva tanto a nivel físico como emocional.

Dentro del ámbito psicológico se utiliza para el control del estrés, para reducir
la irritabilidad y también son empleadas para trabajar en trastornos como
fobias o ansiedad

¿Cómo funciona?
Es una técnica de relajación que permite que los músculos del
cuerpo se relajen, y con esto, el estrés o la tensión que se
tenga acumulado se ve reducido de manera significativa.

Beneficios de la Relajación Progresiva

Dentro de los beneficios de la relajación muscular progresiva se
encuentran

• Reducir la tensión muscular • Disminuir el estrés

• Disminuir el dolor • Disminuir la frecuencia cardíaca
• Sentirse relajado • Ayudar a controlar la ansiedad

Recomendación
Independientemente del tipo de entrenamiento en relajación
que se elija hay una serie de condiciones que son requeridas
para cualquier procedimiento, tales como una cómoda ropa, un
lugar adecuado, y música relajante (Opcional), instrucciones
claras y precisas por parte del terapeuta.

Pasos a seguir
Como primer paso siéntate en una silla con los pies planos en el
suelo, o siéntate con las piernas cruzadas sobre un cojín
Mantén la espalda erguida y las manos posadas en el regazo, es
importante que no te muevas cuando meditas, ya que es la base
física del autocontrol
Si adviertes el instinto de rascarte una parte del cuerpo, acomodar
los brazos o cruzar y descruzar las piernas, intenta ser consciente
del deseo sin dejarte llevar por él
Este simple acto de mantenerte quieto es en parte lo que hace que
la meditación sea tan buena para incrementar la fuerza de voluntad
Estás aprendiendo a no seguir automáticamente cualquier impulso
del cerebro y el cuerpo

Inclúyelo a tu día a día

Empieza meditando 5 minutos al día, cuando adquieras este
hábito, alarga la sesión a 10 o'15 minutos diarios, siempre es
preferible que se realice esta breve sesión de meditación diaria.
Medita a la misma hora, por ejemplo, después de ducharte, te
ayudará a hacerlo cada día. Si esto te resulta imposible, ser
flexible te ayudará a meditar cuando sea posible.

Cautela, J. R., & Groden, J. (1985). Técnicas de relajación (Manual práctico para adultos, niños y
educación especial). Ediciones Martínez Roca. S. A.