Frau Abrines, L.: Diccionario Enciclopédico de la Masonería. Berbera Editores S.A. México, 2018.

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Págs. 64-65

Cadena de Unión.-
Se encuentra a la vez en el Compagnonnage y en la Masonería. Consiste en
formar un círculo (una cadena) dándose mutuamente las manos, en torno al
templo, dejando en su interior las tres grandes luces (escuadra, compás y libro de
la Ley) y el Cuadro de la Logia. La posición de los hermanos al formar la cadena
corresponde a la proyección de sus respectivos sitios sobre ella, excepto el Maestro
de Ceremonias que se sitúa diametralmente frente al Venerable.
El sentido sociológico de la cadena de unión es la necesidad de adaptarse a la
vida colectiva e integradora de la Orden, el vínculo social de la adhesión voluntaria.
En la Cadena de Unión se invoca a la potencia creadora e iluminativa del Gran
Arquitecto, y a todos los antepasados, míticos o históricos, que participaron en la
construcción del Templo espiritual, que según se dice: ... no es hecho por mano del
hombre". Esta invocación vertical se realiza mediante la unión encadenada y
fraterna de todas las fuerzas vivas" presentes en la Logia (todos los hermanos),
que de esta manera establecen una comunicación sutil y espiritual entre sus res
pectivas individualidades, sirviendo ello de soporte a la manifestación de la
influencia sagrada: "antes de separarnos elevémonos juntos hacia nuestro Ideal (el
Gran Arquitecto), que El inspire nuestra conducta en el mundo profano, que guíe
nuestra vida, que sea la Luz sobre nuestra vida y sirva de faro luminoso para
alumbrar nuestro camino.
Decir que esta cadena simboliza la universalidad de la Orden es decir que une
todos los corazones, al mismo tiempo que realiza en todas las consciencias el
sentimiento de solidaridad que los une. El valor ritual reside en que al unir lo
visible con lo invisible, constituye el lazo de unión entre el cuerpo y el espiritu
masónicos.
La cadena formada por las manos unidas de los masones constituye un canal
por el que fluyen las energías concentradas en sus cuerpos (contenidas por los
guantes). Es a la vez creativa y receptiva, y sirve de protección y sirve de recepción
de influencias benéficas. Para que esta cadena sea efectiva, debe asignarse un fin a
la misma, para lo que el Venerable, si mismo o solicitándoselo a otro hermano,
propone una dedicación sobre la que concentrarse todos los que la componen. Este
es el punto material desde el que se canalizan las voluntades que, al tender hacia
un fin común, se suman y proyectan hacia planos sutiles. La ruptura de la Cadena
se efectúa cuando, tras unos momentos de silencio y reflexión, a una señal del
Venerable Maestro todos realizan (a la vez) una triple sacudida los brazos
(momento en el que tiene lugar la proyección hacia el fin propuesto) mientras
entonan la aclamación del grado y una triple presión de las manos a la vez que se
pronuncian las palabras: “salud, fuerza, unión". En la cadena de unión se
transmiten las palabras secretas simbólicas (palabras del semestre, anuales, de
orden, etc.), representando así la solidaridad y la fuerza de la Orden. Aquí, el
Venerable dice al oído de los hermanos colocados a su izquierda y derecha la
palabra correspondiente, los cuales se la comunican al oído del hermano que les
sigue, y así sucesivamente hasta que llega por ambos lados hasta el Maestro de
Ceremonias (colocado diametralmente opuesto al Venerable) quien, si recibe la
misma palabra por ambas direcciones, comunica al Venerable: “la palabra ha
circulado justa y perfecta”.
En el seno de la Cadena de Unión es donde se recibe a los nuevos miembros
tras haber superado las pruebas, y donde reciben éstos la Luz. También se forma
alrededor de la tumba de un hermano fallecido en los funerales masónicos.
La Cadena de Unión puede ser de dos tipos:
- Cadena corta: con los brazos cruzados, derecho sobre izquierdo. Se realiza
cuando se ha tratado algo secreto.
- Cadena larga: se hace con los brazos abiertos, y se puede hacer cuando no
hay secreto que mantener en los temas tratados.