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1. POBREZA
La preocupación por la pobreza se ha expresado por siglos, aun cuando su prioridad en
la agenda de la acción política no siempre ha sido elevada. Sus diferentes significados y
manifestaciones han sido materia de estudio de historiadores, sociólogos y economistas
principalmente, lo que ha dado como resultado una gran variedad de definiciones,
entonces el Diccionario de la Lengua Española de la Real Academia Española, define el
sustantivo pobreza como “necesidad, estrechez, carencia de lo necesario para el sustento
de la vida”.
Ahora buscando un concepto más certero a la palabra pobreza, se logró encontrar lo
siguiente:
El autor Bazdresh P. (2001), en su libro “Educación y pobreza: una relación
conflictiva”, menciona que la pobreza se puede entender como una situación en la cual
las personas carecen de los recursos necesarios, para satisfacer sus necesidades básicas
y gozar de un nivel de vida adecuado. Es por ello que el autor sostiene que es un estado
de privación y escasez, que afecta tanto a nivel material como social, limitando las
oportunidades de desarrollo y bienestar de las personas.
Por otro lado, también, la autora Arriaga I. (2005), nos dice que la pobreza absoluta
hace referencia a la falta de recursos básicos necesarios para sobrevivir, como por
ejemplo: la alimentación, la vivienda, la educación y la atención médica. Este tipo de
pobreza se determina a través de un umbral de ingresos establecido por cada país, así se
considera que una persona vive en pobreza multidimensional si carece de varios de
estos elementos esenciales para una vida digna. (p. 10).
Dentro de este marco teórico, la definición de los tipos de pobreza se refiere a las
diferentes formas en que se puede experimentar la falta de recursos económicos y
sociales. Estos tipos pueden variar según la perspectiva y el contexto en el que se
analice la pobreza, por ejemplo, Boltvinik (2000), señala los términos de pobreza y nos
dice que la palabra “pobre”, llega a estar asociado a un estado de necesidad y carencia,
así también, se relaciona con lo necesario para el sustento de la vida. Esto significa que
la pobreza es una inevitable situación de comparación entre lo observado y una
condición normativa (p.30).
Por su parte, Amartya S. (1981), afirma que la pobreza no es falta de riqueza o ingreso,
sino de capacidades básicas, por ello es que la pobreza no solo consiste en carencia de
materiales, sino también, la falta de oportunidades y capacidades que permitan a la
persona desarrollar su potencial.
Por lo demás, Gary Fields (2001), define la pobreza como la incapacidad de un
individuo o una familia para disponer de los recursos suficientes para satisfacer sus
necesidades básicas; mientras que, Spicker P. (1999), reconoce once posibles formas de
identificar esta palabra, como: necesidad, estándar de vida, insuficiencia de recursos,
carencia de seguridad básica, falta de titularidades, privación múltiple, exclusión,
desigualdad, clase, dependencia y padecimiento inaceptable, todas estas interpretaciones
serían mutuamente excluyentes, aunque varias de ellas pueden ser aplicadas a la vez, y
algunas pueden no ser aplicables en toda situación (pp.151-160).
Ahora, dentro de este marco, Peter Townsend (1993, p. 446), analiza tres concepciones
de la pobreza que se han desarrollado en el siglo XX, la pobreza como privación
relativa, como subsistencia y como necesidades básicas. Este autor también define la
pobreza como la situación en la que viven aquellos cuyos recursos no les permiten
cumplir las elaboradas demandas sociales y costumbres que han sido asignadas a los
ciudadanos.
En este mismo contexto el Banco Mundial (1990, p.323), señala que pobreza no es lo
mismo que desigualdad, la pobreza se refiere al nivel de vida absoluto de una parte de la
sociedad, por su parte, la desigualdad se refiere a los niveles de vida relativos en la
sociedad en general. Es decir, con un determinado nivel de desigualdad se podría
encontrar un nivel de pobreza nulo, donde nadie es pobre, así también, un nivel de
pobreza máxima donde todos son pobres.
En base a las definiciones anteriores, podemos argumentar que, si bien la marginación y
la pobreza son fenómenos similares, no describen la misma situación. En la pobreza,
generalmente se define a la población que se encuentra con algún grado de carencia o
necesidad, por su parte, en la marginación hacemos referencia a aquellos grupos de la
sociedad que se encuentran excluidos y que no se ven beneficiados por el desarrollo del
país. Es decir, se puede ser pobre, pero no excluido de la sociedad, también se puede ser
pobre y participar en la generación de la riqueza de un país y recibir algunos beneficios.
Así Ramón, F. ( 2002), menciona que pueden existir muchas causas sobre la pobreza,
pero ahora lo definiremos como las características, situaciones que contribuyen o
generan la falta de recursos básicos, oportunidades y bienestar económico, esto se
refiere a los factores subyacentes que originan la pobreza y perpetúan la desigualdad en
diferentes aspectos de la vida que al transcurrir el tiempo traen muchas consecuencias.
Ahora, ya establecido el concepto sobre pobreza, podemos tocar el punto sobre cuáles
son las consecuencias de la pobreza, las cuales como imaginamos abarcan muchos
factores, pero que en parte está estrechamente relacionado con la calidad de vida de
algún sujeto, el bienestar personal y por sobre todo la falta de oportunidades en cuanto a
educación se refiere, ya que esta limitará las oportunidades de una persona, debido a que
ya no tendrá la posibilidad de acceder a una educación adecuada y necesaria.
2. CONDICIONES DE POBREZA
El pedagogo Gramsci A. (2015), abordó la relación entre la educación, las condiciones
sociales y económicas, así también, introdujo el concepto de “hegemonía cultural”, que
se refiere al control que las élites ejercen sobre las ideas y creencias de la sociedad.
Debido a eso es que este autor argumenta que, las instituciones educativas pueden
reproducir la desigualdad social existente y perpetuar las condiciones de pobreza, al
mismo tiempo que puede llegar a ayudar con la solución de cierto caso que afecta en el
rendimiento educativo.
Cabe considerar, que por otra parte Bourdieu P. (2015), argumentó que las escuelas
suelen favorecer a aquellos que poseen capital cultural, es decir; conocimientos,
habilidades y valores, que se transmiten a través de la socialización familiar y son más
comunes en las clases altas, por lo tanto, las condiciones de pobreza pueden actuar
como barreras para que los estudiantes de familias pobres tengan éxito académico y un
buen desarrollo. Al mismo tiempo hay comunidades que luchan en contra de esta
situación que se presenta en muchos lugares, dando oportunidad a estudiantes con bajos
recursos y encontrando una solución a este problema. Así mismo, Elaine M. (2003),
indica que la pobreza es la desventaja económica que tiene un fuerte impacto en la
educación de los niños y jóvenes de comunidades urbanas pobres. La falta de recursos
económicos limita el acceso a oportunidades educativas de calidad, ya sea por la falta de
inversión en infraestructura escolar, la escasez de materiales educativos o la falta de
recursos para contratar y retener a maestros calificados.
3. EDUCACIÓN
Según Rousseau J. (1712-1778), la educación es una forma de dominio social, lo que
nos quiere decir, es que, la educación hace imponernos sobre otros mediante el
conocimiento. Sin embargo, el autor Freire P. (2003), en su libro “La educación en el
pensamiento de Paulo Freire”, menciona que la educación es una herramienta
fundamental para la liberación y el empoderamiento de las personas. Debido a que se le
toma a la educación como un proceso liberador que busca la transformación social, por
ello es que, se dice que la educación debe promover la concientización y
empoderamiento de las personas, permitiéndoles comprender y transformar su realidad.
Según Marcelo S. (2005), la educación con calidad es un aspecto fundamental para
garantizar el desarrollo de las personas y promover la igualdad de oportunidades. Se
define que el acceso a una educación con calidad, debe ser adecuada y correcta con esto
se refiere, a que el niño o niña, joven o señorita, debe de tener una educación de calidad,
ya que es fundamental para el desarrollo de un individuo y también para mejorar e
impulsar sus habilidades y su capacidad de mejorar su condición económica según nos
dice L Roncona (2001). Sin embargo, existen barreras que dificultan el acceso a la
educación, como la falta de infraestructuras educativas en algunas zonas, la falta de
recursos económicos, entre muchos otros factores que dificultan el acceso a una
educación con calidad.
Para Freire, P. (1971. P. 71), en su libro “Pedagogía del oprimido”, propone un enfoque
revolucionario de la educación, basado en la liberación de las personas oprimidas, así
también, critica el modelo tradicional de enseñanza y aboga por una educación
liberadora que fomente la conciencia crítica y la participación activa de los estudiantes
en la construcción de su conocimiento. Aguilar Cruz, E. (2020), destaca la importancia
de la educación como herramienta de emancipación y empoderamiento individual y
defiende un modelo educativo basado en el diálogo, el pensamiento crítico y la reflexión
sobre la realidad social. Ahora bien, para Ponce A. (2015), la pobreza en la educación le
dio a proponer una educación orientada hacia la formación crítica y activa de los
estudiantes, con el objetivo de superar las desigualdades socioeconómicas a través de
una educación integral y transformadora.
4. RELACIÓN ENTRE POBREZA Y EDUCACIÓN
Cuando hablamos sobre la relación entre pobreza y educación, podemos descartar a
varios autores, debido a que esta relación se da muy frecuentemente y por ello, existen
variedad de autores que se refieren a la conceptualización de estas palabras y sus
significados como tal, pero para abordar de mejor manera esta investigación, solo se
tomara en cuenta el criterio de algunos autores.
Según Rose P. (2015), la educación de calidad es un factor clave para romper el ciclo de
la pobreza. El acceso equitativo a una educación inclusiva y de calidad no solo brinda
conocimientos y habilidades, sino, también empodera a los individuos y les proporciona
herramientas para mejorar sus vidas y contribuir al desarrollo de sus comunidades.
Bazdresch P. (2001), nos explica que el escaso nivel educativo en la pobreza, se refiere a
la falta de acceso a una educación de calidad en comunidades o personas que se
encuentran en situación de pobreza. Esta situación limita las oportunidades de desarrollo
personal y social, ya que la falta de educación impide el desarrollo de habilidades y
conocimientos necesarios para mejorar la calidad de vida. En resumen, el escaso nivel
educativo en la pobreza se refiere a la falta de accesos y oportunidades educativas en
contextos de pobreza. Así también, señala que la pobreza es un factor determinante en el
acceso y la calidad de la educación; las personas en situación de pobreza generalmente
enfrentan dificultades para acceder a una educación de calidad, debido a la falta de
recursos económicos, muchas veces las familias en situación de pobreza no pueden
cubrir los gastos asociados con la educación.
Gravini (2016), señala que el riesgo económico es un factor que aumenta las
posibilidades de que un joven que ingresa por primera vez a la universidad, abandone la
misma, esta probabilidad aumenta 15 veces en comparación a uno que no tenga estas
dificultades económicas.
Según Ramirez Mauricio (2011), en su artículo pobreza y rendimiento escolar: estudio
de caso de jóvenes de alto rendimiento, menciona que en los últimos trabajos
investigativos que se realizó sobre la pobreza y el aprendizaje, tienen una relación,
debido a que los estudiantes con un nivel económico más alto presentan un desempeño
más óptimo que los estudiantes con un nivel económico más bajo.
Complementando a la idea anterior, el autor Ed Serrano (2003), afirma que la condición
económica de las familias, puede tener un impacto significativo en el acceso a una
educación de calidad. Debido a que el mismo problema económico puede llevar a que
los niños y jóvenes no puedan acceder a la educación o se vean obligados a
abandonarla. Además, la falta de recursos económicos puede limitar las oportunidades
de formación y desarrollo profesional de los estudiantes.
5. EDUCACIÓN Y POBREZA
Bazdresch Parada, M. (2001), en “Educación y pobreza: una relación conflictiva; en
dicho artículo, el autor nos llega a mostrar empíricamente la existencia de una relación
compleja entre la educación y diversos elementos de la economía tales como: el trabajo,
el bienestar, la desigualdad, el ingreso, la equidad y la igualdad de oportunidad y como
estas proyecciones realizadas en base a datos afectan en la relación entre las variables
“educación” y “pobreza”.
Tarabini Castellani, A. (2008), menciona de educación, pobreza y desarrollo: Agendas
globales, políticas nacionales, realidades locales; en este artículo científico, el autor nos
desarrolla como desde los años noventa la educación ocupa un lugar fundamental en la
agenda global de lucha contra la pobreza, esta misma trata de desarrollar métodos,
estrategias que puedan reducir la existencia de personas con muy bajos recursos, aunque
ha tenido buenas propuestas, aún no ha logrado concretar una forma de reducir
totalmente la pobreza.
También mencionamos a Lloyd, M. (2020), la cual nos muestra verificablemente que la
pandemia causó serias afectaciones en materia de desigualdad escolar, por lo tanto; no
podemos ignorar que esta tendencia ya era alarmante 20 años atrás. Por ello, en uno de
sus trabajos, logramos observar que regiones tuvieron grandes avances en la educación
preescolar y primaria; pero del nivel secundario en adelante, las cifras no son muy
alentadoras. Por ello, este autor nos dice que en materia de deserción escolar, desde hace
más de dos décadas se observa que el 46% de la población estudiantil más pobre no
concluye la educación secundaria, así también, en el caso de la educación superior, la
tendencia de los últimos 10 años, apenas entre el 2% y 4% de la población universitaria
que es de bajos ingresos concluye una carrera.
6. INDICADORES ECONÓMICOS
Según Morales (2020), un indicador económico es un tipo de dato económico, el cual
nos permite conocer el estado de una economía. Hay que señalar que existen una
infinidad de indicadores económicos que podemos medir a través del producto interior
bruto (PIB). Así también, nos muestra otro indicadores para medir todas aquellas
variables que influyen en esta, como puede ser el desempleo, que mediríamos a través
de la tasa de desempleo, o la inflación, que la seguiríamos a través de indicadores como
el índice de Precios al Consumo (IPC).
Mientras que Stiglitz (2015), en su artículo “El precio de la desigualdad: el 1% de la
población tiene lo que el 99% necesita”, examina el impacto de la desigualdad
económica en la sociedad y argumenta que esta no solo es injusta, sino, también tiene
consecuencias negativas para el crecimiento económico y la estabilidad social. Así,
Bangkok (2013), en su artículo “El Nobel de economía Stiglitz”, critica el uso del PIB
(Producto Interior Bruto), para medir la economía de un país y propone la inclusión de
indicadores más completos que contemplen aspectos como la equidad, la sostenibilidad
medioambiental y la calidad de vida de las personas.
7. CRECIMIENTO ECONÓMICO
Según Flores Nayezkha y Rafael Rodríguez (2010), el crecimiento económico
sostenible ha sido tradicionalmente uno de los principales objetivos en la agenda de los
países de América Latina, porque representa la principal fuente de financiamiento del
desarrollo económico. El crecimiento económico consiste en el mayor aprovechamiento
de los recursos disponibles, no obstante, no existe crecimiento económico sostenible sin
factores productivos desarrollados, de modo que la relación no es lineal, sino, se trata de
términos que se retroalimentan en un proceso dinámico.
Ahora bien, según Wilson Wiliam Julius (1996), el crecimiento económico sostenible es
determinado por los mercados y las instituciones sociales en eficiente funcionamiento,
es decir, el crecimiento económico es un medio para el desarrollo humano, no un fin en
sí, pues depende de ciertas condiciones para convertirse en tendencia permanente. Por
otra parte, las sociedades no detienen su nivel de desarrollo económico y humano, esta
no es una meta fija, sino, condición dinámica que exige la mejora continua del bienestar
y calidad de vida de los individuos que viven en sociedad, romper el ciclo de pobreza en
estas comunidades desfavorecidas ya que la falta de empleo es el obstáculo más
importante para la educación de calidad. Para combatir la pobreza y mejorar la
formación de los jóvenes, es necesario abordar la falta de empleo en estas áreas urbanas
y mejorar el apoyo comunitario y educativo (p. 37).
Conclusión
En conclusión, existen diferentes perspectivas en cuanto a los autores citados, algunos
enfatizan más un tipo de relación educación-pobreza, enlazando la misma con los
términos “bajo rendimiento académico” y otros autores como Ramírez Mauricio que a
través de su estudio en un grupo poblacional reducido, logró encontrarse con resultados
muy distintos al de otros autores, poniendo una observación muy llamativa, en la cual,
los estudiantes con bajos recursos económicos denominados “pobres” demuestran un
rendimiento académico más alto que aquellos que tienen los recursos necesarios.
Algo que párrafos anteriores mencionamos, era la idea de otros autores, que dicen que la
población en condiciones de pobreza tiende a tener una familia más unida. Debido, que
la pobreza es conocida como ingresos económicos insuficientes para poseer una vida
digna, entonces el hecho de no poseer los recursos insuficientes, incluso para tener
alimentación, vestimenta, educación, etc., significa una serie de complicaciones en la
familia, como ser: disgustos, peleas, frustraciones, tendencias a peleas y riñas, entre
otras. Por lo mismo, es algo contradictorio el mencionar que se puede tener un ambiente
familiar unido. Sin embargo, las condiciones de pobreza plantean desafíos significativos
para el acceso y el aprovechamiento de la educación obligatoria. Los hogares en
situación de pobreza a menudo enfrentan dificultades económicas, falta de recursos y
acceso limitado a servicios básicos como la alimentación, la salud y el transporte. Estos
factores pueden tener un impacto negativo en el rendimiento académico y la asistencia
escolar de los estudiantes de bajos ingresos.
Entonces, la enseñanza obligatoria es fundamental para el desarrollo de los individuos y
para reducir la desigualdad, así también, las condiciones de pobreza plantean desafíos
significativos para el acceso y el aprovechamiento de la educación y para abordar esta
problemática, se requiere de políticas y programas que aseguren que todos los
estudiantes, independientemente de su nivel socioeconómico, tengan acceso a una
educación de calidad y oportunidades de aprendizaje equitativas, además, es necesario
enfocarse en mejorar las condiciones socioeconómicas de las familias en situación de
pobreza, para brindar un entorno propicio para el desarrollo educativo.
II. JUSTIFICACIÓN
(PERSPECTIVA TEÓRICA MACROSOCIAL)
Optamos direccionar la investigación con una perspectiva teórica Macrosocial, debido a
que el problema y la hipótesis que estamos presentando hace hincapié al estudio de un
determinado sector de trabajo, poniendo como delimitación principal un área urbana, la
cual podremos investigar más a fondo con cuestionarios que nos arrojarán resultados,
los cuales después de procesarlos podremos afirmar o negar la misma hipótesis
presentada a inicios de nuestro perfil investigativo.
Para ello, se eligieron los textos de Wilson W. (1996) y Walker E. (2003), debido que
ambos autores proporcionan una comprensión macrosocial de la interconexión entre la
pobreza, la educación y las desigualdades socioeconómicas. En particular, el trabajo de
Wilson W. (1996) enfatiza en cómo la falta de empleo en las comunidades urbanas
empobrecidas afecta significativamente en la educación y perpetúa el ciclo de pobreza,
mientras que Walker E. (2006), se centra en cómo la raza y la clase social influyen en el
acceso a oportunidades educativas de calidad en comunidades urbanas pobres.
Al combinar el pensamiento de estos dos autores, logramos observar que ambos
abordan las desigualdades estructurales y sistémicas que perpetúan la pobreza y la
desigualdad en la educación. Es por ello, que esta perspectiva se debe abordar no solo
los factores individuales que afectan el rendimiento académico de los estudiantes, sino
también, las barreras estructurales tales como la falta de empleo, la segregación racial y
la reproducción cultural, que limitan el acceso a oportunidades educativas de calidad.
Además, que deben incluir teorías interseccionales que destacan cómo la raza, la clase
social y otros factores interconectados y sistémicos, influyen en la educación y la
pobreza en comunidades con escasos recursos económicos. Es así, que al tener en
cuenta estos factores relacionados, se pueden desarrollar soluciones más integrales y
efectivas para abordar los desafíos educativos y socioeconómicos en estas mismas.
Por consiguiente, es esencial que, para comprender las desigualdades en la educación y
la pobreza en el contexto de las comunidades urbanas pobres, se debe reconocer y
abordar los factores estructurales y sistémicos que perpetúan la pobreza y las
desigualdades educativas, que puede generar un cambio real y significativo para los
estudiantes y las comunidades en general.
En primer lugar, los estudios y análisis de Wilson W. (1996) y Walker E. (2006), se
basan en investigaciones sólidas y una metodología rigurosa, debido que sus textos
están respaldados por datos empíricos y estudios de casos que nos brindan una base
sólida para comprender la relación entre pobreza y educación. Además, los puntos de
vista de los mismos se complementan y enriquecen el debate sobre la pobreza y la
educación desde diferentes perspectivas. Mientras Wilson W. (1966) se centra en los
efectos de la falta de empleo en las comunidades de bajos ingresos, Walker E. (2006)
destaca la influencia de la raza y la clase social en el acceso a oportunidades educativas
de calidad.
En segundo lugar, otra razón es que ambos autores son reconocidos expertos en el
campo de la sociología y han dedicado gran parte de sus carreras a investigar y analizar
las causas y consecuencias de la pobreza y las desigualdades educativas. Su experiencia
y conocimiento en el tema aportan credibilidad y autoridad a sus argumentos y
conclusiones.
En segundo lugar, otra razón es que ambos autores son reconocidos expertos en el
campo de la sociología y han dedicado gran parte de sus carreras a investigar y analizar
las causas y consecuencias de la pobreza y las desigualdades educativas. Su experiencia
y conocimiento en el tema aportan credibilidad y autoridad a sus argumentos y
conclusiones, por ello, en estos textos no solo se limitan a identificar y analizar los
problemas, sino también ofrecen recomendaciones y propuestas para abordar y superar
las desigualdades en la educación en comunidades urbanas pobres. Por lo cual sus
enfoques teóricos y prácticos proporcionan una orientación y sugerencias para
implementar políticas y acciones que promuevan una mayor equidad y acceso a una
educación de calidad.
Por tanto, la elección de ambos textos, se justifica por sus investigaciones basadas en
evidencia, la complementariedad de sus perspectivas, su experiencia en el campo y la
relevancia de sus análisis para abordar las desigualdades educativas en las comunidades
urbanas de bajos ingresos. Todos estos factores contribuyen a enriquecer el debate sobre
la pobreza y la educación y a promover la búsqueda de soluciones más efectivas y
equitativas.
La relación entre educación y pobreza es, sin lugar a dudas, una relación conflictiva
debido a que la falta de acceso a una educación de calidad es uno de los principales
factores que perpetúa la pobreza en entornos macrosociales. La pobreza limita las
oportunidades y recursos disponibles para acceder a una educación de calidad, lo que a
su vez dificulta la capacidad de las personas para salir de la situación de pobreza en la
que se encuentran.
Es por ello que, desde una perspectiva macrosocial, es importante destacar que la
pobreza no es solo un problema individual, sino también un problema estructural que
está arraigado en las desigualdades sociales y económicas que existen en una sociedad.
En este sentido, la educación juega un papel fundamental como una herramienta para
romper este ciclo de pobreza.
Ahora bien, para Aguirre, A. (2016), la desigualdad educativa en América Latina, es
producto de muchos factores que a lo largo de la historia abrieron una enorme brecha de
equidad y oportunidades académicas a las que los niños y jóvenes tienen el derecho de
acceder. Debido a la falta de acceso a una educación de calidad puede manifestarse de
diferentes maneras, como por ejemplo, puede traducirse en la falta de recursos
necesarios para asistir a la escuela como uniformes, material escolar o transporte, lo que
limita la capacidad de las familias pobres para enviar a sus hijos a la escuela, por otro
lado, puede manifestarse en la falta de infraestructuras educativas adecuadas, como
escuelas en mal estado o la falta de profesores capacitados, lo que limita la calidad de la
educación que se ofrece.
Es importante tener en cuenta que la educación también desempeña un papel crucial en
el desarrollo de habilidades sociales y emocionales, así como en la formación de valores
y actitudes que son fundamentales para la convivencia pacífica y el desarrollo humano,
así también, podemos mencionar la falta de acceso a una educación de calidad, la cual,
puede contribuir a la reproducción de patrones de comportamiento y actitudes negativas
que perpetúan la pobreza, como la falta de ambición, la desesperanza y la exclusión
social.
Según Banerjee A. y Duflo E. (2012), una causa de la pobreza es el tremendo fracaso
del esfuerzo, liderado por el orden establecido y para impulsar la educación que cae de
arriba a abajo. Así también, nos indican que es inútil construir escuelas y contratar
profesores si no existe una fuerte demanda de educación subyacente, es decir, si no es
de interés de los estudiantes, se les incita subconscientemente a optar por un trabajo
laboral. En contraste, si hay demanda real de destrezas y habilidades, surgirá
naturalmente la demanda de educación y a ella responderá la oferta (p. 61-62).
Por consiguiente, observaremos también, lo que paso con el COVID-19 debido a que
este también causó serios factores en la relación que existe entre educación y pobreza,
los cuales no podemos ignorar, sino, reflexionar una manera de salir de la situación que
nos dejó esta terrible amenaza.
Según Gajardo, M. (2020) los últimos veinte años, se logró observar una inflación
generalizada de la escolarización a nivel preescolar y primaria. Debido a eso, para tener
un panorama más específico de las regiones con mayores problemas en materia de
desigualdad educativa, el estudio de la CLADE decidió hacer una división en 5 grupos,
del cual, nos importa más en el que está nuestro país que junto a los países de Brasil y
Ecuador, los cuales mostraron que en este grupo hubo un gran avance en términos de
cobertura, permanencia y conclusión del periodo escolar, así como en el cierre de
brechas educativas (p.103).
Ahora bien, Lara Caballero M. (2017), nos muestra el tema del derecho a la educación
en la medición de la pobreza, que es de suma importancia, ya que la educación es un
factor determinante para el desarrollo integral de las personas y de las sociedades en
general. El acceso a una educación de calidad no solo brinda conocimientos y
habilidades a los individuos, sino que también les permite mejorar sus condiciones
socioeconómicas y superar la pobreza.
En este sentido, el análisis complejo desde la perspectiva macrosocial, en su estudio nos
permite comprender la relación propia que existe entre el derecho a la educación y la
medición de la pobreza. Debido a ello, el autor argumenta que la educación no solo es
un derecho humano fundamental, sino, también es uno de los principales mecanismos
para combatir la pobreza y promover la equidad social.
De acuerdo con el autor Lara Caballero M. (2017), medir la pobreza únicamente a
través de indicadores económicos y monetarios, como el ingreso o el consumo, resulta
insuficiente para comprender la verdadera dimensión de la privación y las
desigualdades, por ello es que es necesario considerar también dimensiones no
monetarias, como el acceso a servicios básicos, la inclusión social y especialmente, el
acceso a una educación de calidad.
El análisis macrosocial propuesto por Lara Caballero M. (2017), nos permite entender
que la educación no solo es un medio para salir de la pobreza, sino, también es un
derecho que todas las personas deben tener garantizado. La educación no solo
proporciona herramientas para el desarrollo individual, también para el desarrollo de las
comunidades y de los países en su conjunto. Además, esta perspectiva amplía nuestra
visión de la pobreza al considerar, no solo la situación económica de las personas, su
acceso a oportunidades, su participación en la sociedad y su capacidad para ejercer sus
derechos. En este sentido, el derecho a la educación se convierte en un elemento clave
para medir la pobreza, ya que refleja tanto las condiciones de vida de las personas como
sus posibilidades de movilidad social.
Por ello, optamos citar el artículo pobreza y rendimiento escolar: estudio de caso de
jóvenes con alto rendimiento, porque los autores Ramírez, M. y Quiñonez, R. (2011),
realizan el trabajo visto desde una perspectiva poblacional reducida de un sector urbano
específico, lo cual denota que se puede hacer un trabajo macrosocial tomando como
objetos de estudio ciertos sujetos de ciertas condiciones, los cuales arrojaron resultados
muy concretos al juntarlos con otros grupos, dando así resultados claros y verídicos; el
artículo que los mismos presentan.
Es así que recopilando toda esta información de diferentes autores y manifestando a lo
largo de la presente, nuestro tema se inclina hacia la perspectiva macrosocial, decidimos
enfocarnos en la misma y así mediante esta, solidifiquemos nuestra postura en la
investigación y la profundicemos y así obtener buenos resultados de nuestro propósito.
III. CUADRO DE OPERALIZACIONES
El presente cuadro se realizo con el fin de poder medir y cuantificar los conceptos que
son objeto de estudio, en este caso, los conceptos que se eligieron son la Educación
Regular y las Condiciones de Pobreza. La operalización de estas variables implica
definir claramente cómo se van a medir. Esto incluye la selección de las escalas de
medición adecuadas, el establecimiento de los criterios de medición, la definición de las
categorías o valores que se utilizarán, y la determinación de los métodos o instrumentos
de recolección de datos. Es por ello, que es importante porque permite hacer que los
conceptos abstractos puedan ser observados y medidos de manera objetiva.
VARIABLES CONCEP DIMENSION INDICADOR VARIABLE
(VARIABLES TO ES ES S SEGÚN
GENERALES) (VARIABLES EL NIVEL
EMPÍRICAS) DE
MEDICIÓ
N
Edad
Sexo
- Femenino
- Masculino
Colegio de Procedencia
- Fiscal
- Privado
- Rural
-Convenio
- Menos de 1000
- 1000 - 2000
- 2000 - 3000
- Más de 3000
- Si
- No
- A veces
Tipo de vivienda
- Propia
- Alquilada
- Anticrético
- Prestada
- Otra...
- 30 a 50
- 51 a 70
- 71 a 100
- Si
- No
- A veces
- Si
- No
- A veces
- Falta de atención
- Sueño
- Siempre
- A veces
- Casi nunca
- Sí
- No
- Sí
- No
- Si
- No
- Si
- No
- Insatisfactorias
- Satisfactorias
- Buenas
- Excelentes
¿En una escala del 1 al 5, ¿cuál fue su promedio en las pruebas de conocimientos
generales del último año?
-1
-2
-3
-4
-5
-1
-2
-3
-4
-5
¿En una escala del 1 al 5, qué tan satisfecho/a está con su nivel de capacidad
académica durante el último año?
-1
-2
-3
-4
-5
- No hay correlación
- Débil correlación
- Moderada correlación
- Fuerte correlación
- Si
- No
- A veces
- Si
- No
Bibliografía
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