Las Garantías Jurisdiccionales en el Artículo 86 de la

Constitución de la República del Ecuador:

Introducción

Las garantías jurisdiccionales, piedra angular de cualquier Estado de Derecho,

desempeñan un papel crucial en la protección de los derechos fundamentales de los
ciudadanos. En el contexto ecuatoriano, el artículo 86 de la Constitución de la
República se erige como un pilar fundamental que consolida y asegura estas garantías.
Este ensayo busca explorar la naturaleza, alcance y relevancia de las garantías
jurisdiccionales en el marco del artículo 86, proporcionando una visión crítica y
reflexiva sobre su importancia en la consolidación de un sistema legal justo y equitativo.

Desarrollo

Las garantías jurisdiccionales son un conjunto de mecanismos y principios que buscan

asegurar que los ciudadanos tengan acceso a un sistema de justicia imparcial, eficiente y
transparente. Estas garantías son esenciales para la protección de los derechos
individuales y colectivos, así como para prevenir el abuso del poder estatal. En el
contexto ecuatoriano, el artículo 86 de la Constitución establece un marco jurídico
sólido que refuerza y promueve estas garantías.

En primer lugar, el artículo 86 garantiza el derecho al debido proceso, un principio

fundamental que asegura que todas las personas tengan la oportunidad de ser
escuchadas y defendidas de manera justa ante un tribunal imparcial. Este derecho abarca
diversas etapas procesales, desde la notificación hasta la ejecución de las sentencias,
garantizando que ninguna persona sea privada de sus derechos sin un juicio previo y
justo.
Además, el artículo 86 consagra la tutela efectiva de los derechos, lo que implica que
los ciudadanos tienen el derecho de acudir a los tribunales para obtener la protección
inmediata de sus derechos fundamentales. Esta garantía se convierte en un mecanismo
crucial para prevenir y corregir posibles violaciones de derechos, proporcionando a los
individuos una vía legal para la reparación de daños.

Asimismo, el artículo 86 de la Constitución ecuatoriana refuerza la independencia

judicial, un principio esencial para la garantía de un sistema de justicia imparcial y libre
de influencias externas. La independencia judicial no solo implica la ausencia de
presiones políticas o económicas, sino también la autonomía para interpretar y aplicar la
ley de manera objetiva, basándose en principios jurídicos y en el respeto a los derechos
fundamentales.

Por otro lado, el artículo 86 establece la prohibición de la doble persecución penal,

asegurando que ninguna persona sea juzgada dos veces por el mismo delito. Esta
garantía no solo protege contra la arbitrariedad del Estado, sino que también contribuye
a la estabilidad y seguridad jurídica, evitando la posibilidad de persecuciones
injustificadas.

En el ámbito de la justicia indígena, el artículo 86 reconoce la jurisdicción de las

autoridades indígenas para la resolución de conflictos internos, siempre y cuando se
respeten los derechos fundamentales establecidos en la Constitución. Esto refleja el
compromiso del Estado ecuatoriano con la diversidad cultural y el reconocimiento de
sistemas jurídicos propios de las comunidades indígenas.

Conclusión
En conclusión, el artículo 86 de la Constitución de la República del Ecuador despliega
un conjunto de garantías jurisdiccionales que desempeñan un papel fundamental en la
consolidación de un sistema legal justo y equitativo. Estas garantías no solo protegen los
derechos fundamentales de los ciudadanos, sino que también fortalecen la confianza en
el sistema de justicia y contribuyen a la construcción de un Estado de Derecho sólido.

La tutela efectiva de los derechos, el derecho al debido proceso, la independencia

judicial y la prohibición de la doble persecución penal son pilares que sustentan un
sistema jurídico que busca preservar la dignidad y la libertad de los individuos. Además,
el reconocimiento de la justicia indígena en el artículo 86 refleja el compromiso del
Estado con la diversidad cultural y la coexistencia de diferentes sistemas jurídicos en el
país.

No obstante, es crucial señalar que el verdadero impacto de estas garantías

jurisdiccionales radica en su efectiva implementación. La existencia de normas en papel
no garantiza automáticamente un sistema de justicia eficiente y equitativo. Se requiere
un compromiso constante con la aplicación imparcial de la ley, la capacitación continua
de los actores judiciales y la promoción de una cultura de respeto a los derechos
fundamentales.

En última instancia, la vigencia y efectividad del artículo 86 de la Constitución

dependerá en gran medida de la voluntad política y social para mantener y fortalecer un
sistema judicial que garantice la justicia para todos. Solo a través de un compromiso
sostenido con los principios consagrados en este artículo, se podrá construir una
sociedad en la que la justicia prevalezca y las garantías jurisdiccionales sean la piedra
angular de un Estado de Derecho robusto y justo.