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REGLAMENTO DE TESIS
Artículo 9°:
RESPONSABILIDAD
Solamente el estudiante, asesor y revisor serán los responsables ante terceros, del contenido y
desarrollo de los trabajos de graduación, quienes deberán hacer del conocimiento del Decanato
cualquier anomalía que se diere en el proceso de su elaboración.
vii
ÍNDICE GENERAL
PAGINA
INTRODUCCIÓN..................................................................................................................1
CAPITULO I
ARGUMENTOS HISTÓRICOS
1. Antecedentes remotos.......................................................................................................3
2. Definición de Estado........................................................................................................6
3. Fines del Estado................................................................................................................7
4. La Pena de muerte y el Estado.........................................................................................8
5. Argumentos filosóficos...................................................................................................10
6. Búsqueda de la justicia. ¿Es justo matar a los delincuentes?........................................10
7. Contradicción de principios (éticos, religiosos, morales)..............................................11
CAPITULO II
Argumentos Normativos......................................................................................................19
CAPITULO III
viii
CAPITULO IV
TENDENCIA EN EL MUNDO DE LA PENA DE MUERTE
CONCLUSIONES...............................................................................................................60
RECOMENDACIONES…………………………………………………………… 62
BIBLIOGRAFÍA.................................................................................................................63
ix
INTRODUCCIÓN
Sin duda alguna, la pena de muerte es la sanción más grave y antigua de la historia.
Seguramente por ello, es la que en la actualidad se ha convertido en el mayor debate o
discusión. Este carácter controversial es debido, también, a que dicha sanción, conlleva un
modo de ver a la sociedad y, en particular al individuo, en especial el sujeto delincuente. Así,
en el debate, se ven implicadas muchas disciplinas, etiquetadas bajo el nombre de ciencias
sociales, que van desde la sociología a la criminología, pasando por la política, la filosofía y el
derecho entre otras. También es evidente, que la religión, a pesar de no ser una de estas
disciplinas, también se ve implicada, puesto que la religión da una visión del mundo y de las
personas, así como de la vida y la muerte.
El objeto de esta investigación consiste en analizar algunas exigencias que el derecho vigente
en Guatemala establece, respecto de la regulación y aplicación de la pena de muerte, desde el
punto de vista de las razones o justificaciones de por qué no se aplica a las mujeres, si
penalmente cometen los mismos delitos por lo que a los hombres se le imputa la pena de
muerte, ya que en países que aplican la pena de muerte no hay discriminación pues también es
aplicado a mujeres tal es la legislación de los Estados Unidos, donde está vigente la pena de
muerte en algunos Estados.
El desarrollo del tema “Consideraciones Jurídicas sobre la Pena de Muerte en la Legislación
Guatemalteca” se especifica esencialmente desde aspecto de la discriminación ya que la
Constitución exime de la pena capital a las mujeres. Para el desarrollo de tema se plantean
cuatro capítulos siendo los siguientes: El Capítulo I, se describen los antecedentes históricos
del surgimiento de la pena de muerte, que es tan antigua como el origen del ser humano, como
se institucionaliza de acuerdo a progresos de la civilización que es a través del surgimiento del
Estado, argumentos filosóficos sobre la pena de muerte y las contradicciones en el ámbito,
ético, religioso y moral en cuanto a la aplicación de la pena de muerte.
El Capítulo II, hace referencia a los argumentos normativos en cuanto a la aplicación de la
pena de muerte así como para su abolición, en este mismo capítulo como es normativo se
plantea la normativa de Guatemala es decir la Constitución Política de la República y la
normativa internacional como son todos los tratados, convenios y pactos sobre Derechos
Humanos. En este mismo orden de ideas también se realiza una interpretación sistemática de
la Constitución de la República de Guatemala.
En el Capítulo III, se retoma específicamente el tema de la Pena de Muerte en
Guatemala haciendo énfasis en el proceso penal de esta sanción vigente en la legislación
guatemalteca. Por otro lado se aborda qué países y cómo se aplica la pena de muerte a las
mujeres en otros países que aún tienen vigente en su legislación la pena capital.
En este capítulo también se hace una reflexión sobre del porqué en la legislación guatemalteca
actual no se aplica la pena de muerte a las mujeres, vista por algunos como un acto
discriminatorio, y por ultimo este capítulo hace insistencia en la
1
2
tendencia a nivel mundial sobre la abolición de la pena de muerte para la mayoría de delitos.
El Capítulo IV, plantea la tendencia en el mundo sobre la vigencia de la pena de muerte en las
legislaciones de algunos países y su abolición
Asimismo se arriban a las conclusiones y recomendaciones a que se llegaron en todo el
proceso de investigación, y por último se describe las fuentes bibliográficas consultadas.
El carácter excepcional de la pena de muerte, la exigencia de su aplicación restrictiva y la
necesidad de revestir de las máximas garantías su imposición, son principios incuestionables
comprendidos en el derecho positivo guatemalteco. Estos principios generales, que informan
el ordenamiento jurídico de la República de Guatemala, han cuestionado y dividido la opinión
sobre la aplicación de la pena de muerte.
CAPITULO I
ARGUMENTOS HISTÓRICOS
1. Antecedentes remotos
La pena de muerte o pena capital ha existido a la par de la humanidad, se conoce
que los griegos tuvieron gran influencia cultural en Roma, si bien los romanos
destacaron por su vasta jurisprudencia y los griegos por ser grandes filósofos dicho
binomio hizo surgir la filosofía del derecho, de ahí la regulación de las relaciones
entre los hombres y el Estado, así como consecuentemente el castigo a quienes
cometen violaciones a las leyes impuestas por el Estado. Sin embargo con anterioridad,
el pueblo hebreo dejó testimonios de la existencia de esta sanción.
En Roma el primer delito castigado con la pena de muerte fue el Perduellio (alta
traición), por traición a la patria, más adelante en las XII Tablas texto legal que
contenía normas para regular la convivencia del pueblo romano. También recibió el
nombre de ley decenviral. Por su contenido se dice que pertenece más al derecho
privado que al derecho público. Fue el primer código de la Antigüedad que contuvo
reglamentación sobre censura (pena de muerte por poemas satíricos)., se reglamentó
también para otros delitos y era ésta, la pena imperante; un tiempo después y aunque
sin ser abolida cayó en desuso, restableciéndose posteriormente con los emperadores.1
Así es como esta sanción es conocida y aplicada desde los primeros tiempos de la
humanidad y puede decirse que en todas las culturas, pero teniendo algunas variantes
como por ejemplo el tipo de delitos por los que se imponía, siendo el más común el
delito de homicidio.
Las formas de ejecución de la pena fueron muy variadas de acuerdo a los usos y
costumbres de los diferentes pueblos, había entre otras: la lapidación, la rueda, el
garrote, la hoguera, todas eran formas muy crueles ya que su finalidad consistía en
imponer el mayor sufrimiento al condenado a dicha pena.
1
CARIO, Roberto, La pena de muerte en el umbral del tercer milenio, Madrid, Edersa, 1996.
2
ALVAREZ, C. Discurso sobre el derecho de castigar y la pena de muerte Madrid. 1873
3
4
Durante la vigencia de las XII Tablas, la autoridad podía dejar la aplicación del Talión
al ofendido o a sus parientes, sin embargo existían también funcionarios encargados
de la ejecución.
En este sentido la pena de muerte inicialmente fue concebida como una aflicción
retributiva originada por la comisión de un delito, apareciendo así prácticamente en la
totalidad de las leyes antiguas.
Entre los aztecas, las leyes se caracterizaban por su estricta severidad, entre las penas
existentes, se encontraba la lapidación, el descuartizamiento, la horca y la muerte a
palos o a golpes, y aun cuando las cárceles no tuvieron ninguna significación también
existía la pena de la pérdida de la libertad.
También en el pueblo de los tarascos (se ubicaron en las regiones cercanas al lago
Pátzcuaro, en el occidente mexicano, a comienzos del siglo X de nuestra era) existía la
pena de muerte y en los delitos como adulterio, la pena era impuesta no sólo al
adultero, sino que ésta trascendía a toda su familia.3
En cuanto al pueblo maya, al traidor a la patria se le castigaba con la pena de muerte, y
existían también otras penas como la lapidación, si bien existieron algunas diferencias
en cuanto a los delitos por los que se aplicaba, así como la forma de ejecutarla, se
puede afirmar que fue común a todas las culturas en la antigüedad.
3
GONZÁLEZ, RAMÓN LUIS El Concepto de Pena en la Dogmática y en la Política Criminal”
5
Ahora bien esto sucedió en los inicios de la historia, sin embargo las sociedades se
fueron desarrollando y por ende la necesidad de dictar normas de convivencia social,
por lo tanto surgió el Estado, cuyo origen radica en el intento de solución de conflictos
sociales, fundamentalmente de carácter interno. Dicho de otra manera: el origen del
Estado está, en el surgimiento de un excedente de producción del que se apropian
grupos sociales que crean, en torno a ellos, una estructura que les permite el
mantenimiento de esta situación de claras diferencias dentro de una misma sociedad.4
De tal cuenta que el Estado es la coacción legítima y específica. Es la fuerza bruta
legitimada como "última ratio", que mantiene el monopolio de la violencia a través de
instituciones reguladoras y la aplicación de las leyes a través de castigos, sanciones y
penas, en este caso específicamente la pena de muerte, por lo que es oportuno conocer
a agrandes rasgos lo que es el Estado.
2. Definición de Estado
El concepto de Estado ha evolucionado a la par de la sociedad, desde las primitivas
definiciones realizadas por Maquiavelo, pasando por las aberrantes afirmaciones
absolutistas “el Estado soy Yo”, y llegando a las definiciones modernas del Estado; se
puede afirmar que el Estado es una organización compuesta por tres elementos
fundamentales: un territorio, un pueblo, y un poder que a su vez de subdivide en: una
infraestructura administrativa, una base económica, un estamento militar y una tribuna
diplomática. El territorio es el bloque físico donde habita una sociedad determinada,
la cual está regida por un poder encargado de controlar el normal funcionamiento de
los integrantes del Estado.5
En otro orden de ideas el Estado se puede concebir como un compuesto social de los
procesos de asociación en el emplazamiento cultural y superficial, asentada de
manera permanente en un territorio que le corresponde, entendiendo por territorio el
espacio dentro del cual se ejerce el poder estatal. Como esfera de competencia el
Estado delimita espacialmente la independencia de éste frente a otros Estados, es el
suelo dentro del que los gobernantes ejercen sus funciones sujeta a un poder soberano
que crea, define y aplica un orden jurídico que estructura la sociedad estatal, con
capacidad o autoridad de dominio, freno y control a los seres humanos, con objeto de
limitar su libertad y reglamentar su actividad. Este poder puede ser por uso de la
fuerza, la coerción, voluntaria, o por diversas causas, pero en toda relación social, el
poder presupone la existencia de una subordinación de
4
SERVICE, E.R. (1990): El origen del Estado y la civilización. Alianza. Madrid.
5
HELLER, HERMANN. "Supuestos históricos del Estado actual", FCE, Pag. 142
6
De esta cuenta en defensa del bien común de la totalidad de la población que engloba
el Estado o de la pervivencia del mismo, se utiliza frecuentemente la llamada “Razón
de Estado”, término acuñado por Nicolás Maquiavelo por la que el Estado, perjudica o
afecta de una u otra forma a personas o grupos de personas, en pro del resto de
individuos que lo conforman, generalmente obviando las propias normas legales o
morales que lo rigen. Tal es el argumento esgrimido, por ejemplo la aplicación de la
pena de muerte a personas que cometen delitos graves por lo que es importante abordar
el tema de los fines del Estado.
El Estado liberal surgió luego de la Revolución Francesa, más que buscar el bien
común, debía brindar las condiciones adecuadas para que cada individuo se desarrolle,
siendo necesaria su intervención solo en supuestos extremos, como la protección de la
vida, la seguridad, garantizar el libre comercio y el derecho de propiedad; pero en
cuestiones de índole económica debería abstenerse de intervenir, como por ejemplo en
la fijación de precios, pues el libre juego de la oferta y la demanda lo colocarían
naturalmente en las condiciones justas, sin mediación estatal.7
Las injusticias del Estado liberal, originaron el surgimiento de las ideas socialistas, que
bregaron para el reconocimiento de los derechos de todos, y no solo de los hombres
propietarios. En los modernos estados democráticos se constituye como fin del Estado
el bienestar general, lo que significa lograr el pleno respeto y vigencia de los derechos
humanos en el seno de la población, tanto en lo que respecta a los derechos civiles,
como a los sociales y a los políticos.
4. La pena de muerte y el Estado
6
HERRERA, HUGO EDUARDO, ¿De qué hablamos cuando hablamos de Estado? Ensayo filosófico de justificación de la praxis política.
7
BLÁZQUEZ, NICETO. Estado y la pena de muerte. Noticias. Madrid, 1989
7
La pena de muerte es el instrumento legal de sanción del delito y el medio idóneo para
mantener y defender la autoridad del Estado cuando acto de carácter delictivo hacen
que se ponga en peligro la seguridad y el orden del régimen legal y social. Eugenio
Cuello Calón define la pena de muerte como “el sufrimiento impuesto por el Estado
en ejecución de una sentencia, al culpable de una sanción penal.”
En otro orden de ideas se entiende por pena de muerte el castigo infligido por el Estado
a un individuo en virtud de un presunto delito, en aplicación de la legislación vigente.
La operatividad de la definición se evidencia cuando se repara en que por pena de
muerte no se entiende un homicidio fortuito, un linchamiento realizado por una chusma
enfurecida, ni tampoco un homicidio cometido en defensa propia por un funcionario
encargado de hacer cumplir la ley en un acto dirigido a impedir el daño inmediato
resultante de una agresión ilegítima: al aplicar la pena de muerte, el Estado aniquila a
un ser humano de forma premeditada y a sangre fría. Esta pena difiere de otras
categorías de lo que pueden considerarse violaciones de niega, sino que forma parte de
las leyes de un país.
8
AMNISTÍA INTERNACIONAL. Edai. Madrid, 1989 Cuando es el estado el que mata.
9
ALVAREZ, C. Discurso sobre el derecho de castigar y la pena de muerte Madrid.
8
conducta, de una conducta que infringe una norma y que previamente ha sido tipificada
como delito, es por eso se dice que la aplicación de la pena de muerte es una facultad
exclusiva del Estado, quien la impone y ejecuta a través de sus órganos
jurisdiccionales, al finalizar un proceso legalmente establecido. Actualmente, el
derecho penal de los países con un mejor desarrollo doctrinario reconoce que la
culpabilidad del sujeto es condición necesaria para la imposición de la pena
Una vez que un Estado aplica la pena de muerte por cualquier razón, resulta más fácil
para los demás utilizarla con cierta apariencia de legitimidad por cualquiera de otros
motivos. En este sentido si se puede justificar la pena de muerte para un delito, se
encontrarán justificaciones para otros distintos que concuerden con las opiniones que
prevalezcan en una sociedad o entre sus gobernantes. Cualquiera que sea el propósito
razonado, la idea de que el Estado pueda justificar un castigo tan cruel como la muerte
entra en conflicto con la propia concepción de los derechos humanos. La importancia
de estos derechos estriba precisamente en que hay ciertos medios que no pueden ser
nunca utilizados para proteger a la sociedad, ya que su uso anula los valores mismos
que hacen que la sociedad merezca ser protegida.
Cuando se hace caso omiso de esta distinción esencial entre los medios apropiados e
inapropiados en nombre de algún “bien superior”, para aplicar una pena todos los
derechos se hacen vulnerables y por lo tanto la misma sociedad se encuentra
amenazada, de esta cuenta surgen diversos argumentos para abordar la aplicación la
pena de muerte o pena capital como se conoce también.
5. ARGUMENTOS FILOSÓFICOS
Desde la concepción filosófica común y universalmente adoptada en la actualidad, la
persona humana es el sujeto, el centro y el vértice de toda la realidad social, cultural,
política y económica. El hombre no es una cosa entre las cosas y se resiste a la
instrumentalización injusta.10
Ahora bien, esto se afirma porque la persona humana ostenta una intrínseca dignidad
que no la concede la sociedad, sino que es anterior a la misma, no la concede el Estado;
es anterior al mismo, asimismo no la conceden las declaraciones de derechos por parte
de asambleas políticas legítimamente constituidas; es anterior a las mismas. Dicha
dignidad personal es fuente de los derechos que en numerosos documentos y
declaraciones solemnes son reconocidos como inalienables, inviolables e
imprescriptibles.
10
MACIAS Y ORTIZ DE ZUÑIGA .Estudios jurídicos, históricos y filosófico-jurídicos sobre la pena de muerte Madrid, 1972.
9
Entre esos derechos, se encuentra el de la vida, sin el cual ningún otro derecho podría
existir. Ante ese don gratuito de la vida, porque de hecho nos descubrimos gozando de
ese don, la persona ha de entenderse a sí misma no como dueña o propietaria absoluta,
sino más bien como administrador responsable de su vida.
Sin embargo, cuando un Estado en donde prevalece la violencia y los castigos que le
impone al agresor llegan a un límite que no provocan una reprimenda y un aprendizaje
sobre como funcionar adecuadamente en su sociedad, y éste (el agresor)
reincidentemente continúa con la misma conducta, provocando actos similares a sus
víctimas y a veces hasta con mayor frialdad, el Estado se encuentra ante la disyuntiva
de proteger a la mayor parte de ciudadanos de este mal incorregible, acudiendo a las
penas más drásticas, que sean de ejemplo a quienes deseen cometer los mismos
crímenes que este agresor.
Puede decirse que desde la ética el derecho a la vida está íntimamente ligado a la
dignidad de la persona y éste debe ser absolutamente inviolable, el Estado no es dueño
de la vida, además el acto de quitar la vida forzosamente a una persona también se
ataca la libertad personal, al menos en lo que a esa persona respecta, de una manera
definitiva, inmodificable. Además en nombre de la justicia, de la seguridad, de la
comunidad, de la propiedad privada o de la divinidad se pueden cometer in sinfín de
injusticias irreversibles en contra de la vida de un ser humano. La pena de muerte
atenta contra los principios de autonomía, justicia, beneficencia, no maleficencia y
contra los derechos humanos.11
11
MACIAS Y ORTIZ DE ZUÑIGA .Estudios jurídicos, históricos y filosófico-jurídicos sobre la pena de muerte Madrid
11
En tanto el argumento del castigo merecido se reduce con frecuencia a un simple deseo
de venganza cubierto tras un principio de justicia, por lo que tanto puede ser el deseo
de venganza a tal punto que logra comprenderse y reconocerse, pero hay que resistirse
a llevarlo a la práctica. La historia de los esfuerzos por establecer el estado de derecho
de la restricción progresiva de la venganza personal en las líneas públicas de conducta
y en los códigos jurídicos en el mundo.
Una ejecución no puede servir de manifestación de condena del acto de matar cuando
ella misma consiste en dar muerte a una persona. Este tipo de acto refleja que el Estado
tiene la misma disposición que el criminal a emplear la violencia física contra una
víctima.
Lo más cierto es que la pena de muerte sigue vigente en muchos países del mundo, y
en tanto el debate continúe, algunas personas pueden ser enjuiciadas y corren el riesgo
de morir. Es necesario comprender el problema, discutirlo donde será necesario
comprender y analizar las causas por las que se aún persiste en el mundo la aplicación
de la pena de muerte.
12
SERRANO TÁRRAGA, MARÍA DOLORES. La pena capital en el sistema español.
12
Pero la certeza adquirida por tales investigaciones no es tal que impida a algunos
cultivadores de las ciencias sociales seguir sosteniendo la tesis contraria. Además no
hay que olvidar que no es posible fundar o hacer depender una legitimación o
ilegitimación ética de la pena de muerte de
13
ALVAREZ, C. Discurso sobre el derecho de castigar y la pena de muerte (Madrid)
14
González, Ramón Luis. “El Concepto de Pena en la Dogmática y en la Política Criminal
13
Desde el punto de vista religioso (y mitológico), la muerte es uno de los aspectos que
distinguen a la humanidad de la divinidad, el miedo a y la negación de la muerte son el
fundamento de toda religión.
Es así como en este argumento es la vida humana, sagrada e inviolable la que debe ser
siempre protegida y precisamente por esto se dice que Dios se hace juez severo de toda
violación del mandamiento “no matarás” lo que conlleva a que ésta es la base de la
convivencia social e indica el límite que nunca puede ser transgredido.
15
GONZÁLEZ, RAMÓN LUIS. “El Concepto de Pena en la Dogmática y en la Política Criminal.
14
Ahora bien desde otro punto de vista religioso muchos especialistas abogan por dejar a
un lado la cuestión de la religión a la hora de solucionar o debatir la cuestión de la pena
de muerte, lo cierto es que en la realidad ha jugado un papel muy importante. Sin
duda alguna, durante muchos siglos, y todavía aún, las religiones y sus instituciones
han tenido un poder enorme en la mentalidad de los hombres. Como apunta J. K.
Galbraith: “En los primeros momentos del cristianismo, el poder se originó con la
vigorosa personalidad del Salvador. Casi inmediatamente surgió una organización, que
fueron los Apóstoles, y con el tiempo la Iglesia, como organización se convirtió en la
más influyente y duradera de todo el mundo.” Es por ello que se considera importante
tomar en cuenta las consideraciones dogmáticas religiosas.
Las posturas frente a la pena de muerte han ido variando a lo largo del tiempo. Si bien
es cierto, que la pena de muerte ha encontrado justificación en palabras del Antiguo
Testamento, en la actualidad, la postura no es tan clara. Sin duda alguna, la Iglesia ha
sido partidaria durante muchos siglos de la sanción capital, sólo basta recordar la
Inquisición, en la que fue impuesta por la propia Iglesia.
Sin embargo en los tiempos actuales, a pesar de que la Iglesia siga teniendo una
importancia elevada en la vida de las personas, la secularización, que se ha ido
produciendo durante el XXI, ha conllevado que las personas vivan ya
15
una religión más privada, y por lo tanto, una relación directa con Dios. Ello
conlleva, que el juicio ético-moral, no lo pueden hacer (como en la Inquisición) las
instituciones de la Iglesia, sino que es el mismo Dios el que lo debe hacer. En la
actualidad, la posición de la Iglesia, no es del todo clara, si bien es cierto, que
muchas veces, en su historia ha intercedido para salvar la vida a los reos, sin
embargo hay que apuntar, que existen una serie de valores cristianos que justifican
la abolición (perdón, amor, etc.)16
La pena de muerte, en nuestros días, es una pena cuestionada sea desde el punto de
vista jurídico como moral, sin embargo, se puede justificar a la luz del principio de
legítima defensa. Lo que debe quedar claro es la perspectiva de la vida, en orden a la
defensa de la vida inocente se puede llegar a suprimir al agresor, “el valor intrínseco de
la vida y el deber de amarse a sí mismo no menos que a los demás son la base de un
verdadero derecho a la propia defensa.”
“La legítima defensa puede ser no solamente un derecho, así reconoce el Catecismo
sino un deber grave para el que es responsable de la vida del otro del bien común de la
familia o de la sociedad.”
La eliminación del reo se debería llegar sólo en caso de absoluta necesidad, es decir,
cuando la defensa de la sociedad y de la vida de los demás no sea posible de otro modo
por la alta peligrosidad social del mismo. Hoy por cierto gracias a la organización cada
vez más adecuada de la institución penal, estos casos son ya muy raros y además,
permanece válido el principio indicado por
16
ELLERO, P.Sobre la pena de muerte (Madrid).
16
el Catecismo, según el cual “si los medios incruentos bastan para proteger de él al
orden público y la seguridad de las personas, en tal caso la autoridad se limitará a
emplear sólo los medios.”
La abolición de la pena de muerte parece más conveniente por otras tres razones, por
permitir un posible rescate y encomienda del reo, por no tener ninguna fuerza de
disuasión social y por la imposibilidad de comprobar la responsabilidad plena y
culpabilidad absoluta de quien se condena a muerte (numerosos son los casos de
inocentes ajusticiados a muerte).
Es entonces que tampoco por razón de Estado se debería llegar a este extremo remedio,
puesto que la persona humana con su dignidad jamás puede ser reducida a medio para
que el Estado alcance sus fines. Otra razón más abolicionista nace de la constatación
de cómo, la pena de muerte, ha sido instrumentalizada por el poder para reprimir
“legalmente” la oposición y por otro lado desde el punto moral la legitimidad ética de
la sentencia judicial de pena de muerte es uno de los escollos con que se enfrenta el
derecho moral. Para los detractores de la pena de muerte existen dos principios por los
que la pena capital no puede ser aplicada:
La incapacidad del hombre para conocer la plena verdad sobre la culpabilidad del
procesado.
La sentencia debe ser reparadora, o sea, un castigo cuyo objeto es rehabilitar al
condenado del delito cometido y reinsertarlo en la sociedad.
Existen ordenamientos jurídicos que sólo reconocen esa legítima defensa en casos de
situaciones límites, como la defensa en caso de guerra.
No basta que la vida pueda estar en peligro por causa de una agresión, sino que el
peligro sea evidente, y además, la proporcionalidad de los medios exige que los actos
para la neutralización del agresor sean los que puedan causarle el mínimo daño posible.
Mutans mutanti estos principios éticos a la situación de defensa social, habría que
determinar que la pena de muerte sólo estaría éticamente legitimada cuando se dieran
la situación de que la amenaza de la vida de los ciudadanos fuera evidente y que no
pudieran aplicarse otros medios para controlar al delincuente.
1. ARGUMENTOS NORMATIVOS
En general, toda sociedad admite e impone normas jurídicas cuya infracción trae por
consecuencia una reacción contra el infractor. Muchas veces no se trata solamente de que
éste deba compensar a la víctima por el daño causado, sino que también debe responder a
la sociedad por el quebrantamiento del orden jurídico, todo ello a través de una reacción
especial que tradicionalmente se ha denominado PENA. En este sentido, la pena “es la
privación o disminución de un bien jurídico, aplicable a quien haya cometido un delito o
sea muy probable que lo cometa, a fin de corregirlo y de prevenir posibles ataques contra
la sociedad.19
De manera general, es conveniente precisar que el origen y las primeras formas reales del
Derecho Penal, tanto como normas punitivas cuanto como reglas de conducta, deben ser
investigadas en los pueblos de la más remota antigüedad, vale decir entonces que aquellos
pueblos en los cuales se formó seguramente toda primera manifestación intelectual y
social, que han tenido afinidad y relación directa con las formas de defensa y castigo
contra las manifestaciones de la delincuencia.
Es por ello, que las propias sanciones deben estar sometidas a valorización en cuanto a su
naturaleza y gravedad. Consecuentemente no se puede imponer como sanción, aquello
que vaya en contra de las profundas convicciones morales o jurídicas de una sociedad,
así como tampoco se pueden atacar cualquiera de los bienes jurídicos, con el simple
argumento de que se trata de reacciones proporcionales al daño causado por el
delincuente; y precisamente en función a todo ello, se ha cuestionado severamente la
vigencia y aplicación de la pena de muerte.
La pena de muerte según comenta el profesor Eugenio Cuello Calón-, que se imponía en
los tiempos pasados, no solamente con la finalidad de privar de la vida al condenado, sino
con la de hacerle sufrir, tuvo enorme importancia en los antiguos sistemas penales.
19 BACIGALUPO, Enrique: “DERECHO PENAL PARTE GENERAL”. Edit. ARA. Primera Edición. Lima 2004.
20
21
Algunos afirman que “La pena de muerte surge con el Derecho Penal e históricamente
ha subsistido a lo largo de todos los tiempos” y continúan
20 Amnistía Internacional.
22
No es posible que esta institución pueda desaparecer por la mala práctica, el abuso o
los errores que se hayan cometido, si la humanidad la ha practicado durante toda su
historia no puede ser una práctica tan equivocada. Sin embargo, si bien es cierto que
siempre se ha practicado también es cierto que la delincuencia no se ha erradicado.
21
Constitución Política de la República de Guatemala 1985.
23
…En los países que no se ha abolido la pena de muerte ésta sólo podrá imponerse por los
delitos más graves, en cumplimiento de sentencia ejecutoriada de tribunal competente y
de conformidad con una ley que establezca tal pena, dictada con anterioridad a la
comisión del delito. Tampoco se extenderá su aplicación a delitos a los cuales no se la
aplique actualmente.
22
Código Penal de Guatemala.
24
Actualmente en Guatemala se goza de una moratoria de hecho, pues desde el año 2000 la
pena de muerte no se aplica, a pesar de existir sentencias pendientes de ejecución, ya que
como se ha indicado, tanto la Constitución Política de la República de Guatemala como
los Tratados internacionales mencionados, prohíben la ejecución de la pena de muerte
mientras esté pendiente la resolución del último recurso, y este no se puede solicitar y
tramitar debido a la ausencia de una ley que regule el mencionado recurso de gracia.
Por otro lado, se observa que algunas normas que imponen la pena de muerte son
contrarias a la Convención Americana de Derechos Humanos, Pacto de San José, y al
Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, ratificados por Guatemala y que
prohíbe, en determinados casos, la aplicación de la pena de muerte.
Con las penas de muerte aplicadas en el 2000, son 5 el número de ejecutados desde la
firma de los Acuerdos de Paz de 1996. El ex-Presidente Alfonso Portillo renunció a su
potestad de indultar a los penados a muerte. Ante esta situación la Corte de
Constitucionalidad (CC) resolvió que la ley que regula el proceso y que data de 1982 no
especifica qué autoridad debe encargarse de valorar los recursos de gracia presentados
por los condenados, por lo que le correspondía al Congreso legislar para enmendar este
vacío legal, mientras tanto, la pena capital quedó en suspenso.
En 2008 el Congreso de la República votó por la aprobación de una nueva ley que volvió
a facultar al Presidente en curso para decidir sobre los indultos,
26
apoyaron esta medida los dos partidos mayoritarios, Unidad Nacional de la Esperanza y
Partido Patriota, El partido Encuentro por Guatemala votó en contra. Amnistía
Internacional emitió un comunicado instando al presidente a dar marcha atrás. Álvaro
Colom decidió vetarla, al considerar que esta forma de castigo entra en contradicción con
el derecho a la vida del reo, la retroactividad de la ley y los compromisos internacionales
firmados por Guatemala como miembro de la Convención Americana de Derechos
Humanos, posición que se ha mantenido hasta el día de hoy.
Cabe mencionar que la pena de muerte en Guatemala se ha venido aplicando desde hace
siglos, sin embargo, hace su primera aparición en un texto constitucional en la
Constitución Política de la República de Guatemala, de 1945. A decir en el Seminario La
abolición de la pena de muerte y sus implicaciones: “…los constituyentes
tuvieron que regular esa institución, precisamente para ponerle límites, habida cuenta los
abusos, excesos y arbitrariedades de que con dicha penalidad habían cometido gobiernos
dictatoriales anteriores” (Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales de
Guatemala, 2005). Las siguientes constituciones siguieron regulando la pena de muerte y
se buscó restringir la imposición de dicha pena en este caso quedan excluidas la mujeres
así como garantizar a las personas la no imposición y ejecución arbitraria y abusiva de
dicha pena.23
23
Constitución Política de la República de Guatemala. Guatemala, 1985.
27
Luego, se prohíbe su imposición a los mayores de sesenta años. Con esto se da un avance,
en materia de respeto a los derechos humanos de las personas de la tercera edad, pues en el
Código Penal, Decreto 17-73, está permitida hasta los setenta años. Estas dos últimas
disposiciones dejan claro que los constituyentes quisieron preservar de la pena de muerte a
dos grandes sectores de la población, a quienes, por alguna razón, consideraron de especial
protección.
…Como delitos políticos, los que atentan contra el Estado, su seguridad externa e interna,
los poderes y autoridades del mismo, contra la Constitución o derechos políticos de los
ciudadanos o principios del régimen imperante. El elemento subjetivo complementario de
tales ilícitos es el móvil de lograr, por medios inadmisibles para el orden legal establecido,
el quebrantamiento del orden jurídico y social, variar la forma de gobierno existente o el
régimen económico o político de la sociedad. (Gaceta No. 46. Expedientes acumulados 8 y
20-1997. Fecha de sentencia: 07/10/1997)…
28
Por otro lado es interesante observar que algunas constituciones, que contemplan la
abolición de la pena de muerte como norma general, dejan como excepción su imposición
en tiempos de guerra, y especialmente para los delitos de alta traición a la patria, sin
embargo, en la Constitución Política de la República de Guatemala está prohibido.
la puerta abierta para que el Congreso de la República lo hiciera, incluso mediante una
reforma constitucional con mayoría simple, ya que la Constitución Política de la República
de Guatemala no la crea, sólo reconoce y regula lo que ya existe en las normas ordinarias.
El Código Penal, Decreto Número 17-73, establece en el Artículo 43 La pena de muerte,
tiene carácter extraordinario y sólo podrá aplicarse en los casos expresamente consignados
en la ley y no se ejecutará, sino después de agotarse todos los recursos legales.
No podrá imponerse la pena de muerte:
En estos casos y siempre que la pena de muerte fuere conmutada por la de privación
de libertad, se le aplicará prisión en su límite máximo.
El Código Penal al clasificar las penas establece que hay penas principales y accesorias, las
cuales tendrían carácter ordinario, y esto último, se deduce porque luego declara que la
pena de muerte tiene carácter extraordinario. No se aclara qué significa el carácter
extraordinario de la pena, y al respecto se dice lo siguiente:
En 1965 se promulga otra Constitución y ésta, por primera vez, preceptúa el carácter
extraordinario de la pena de muerte. No hay una explicación muy doctrinaria sobre porqué
la califican de “extraordinaria”, pero en los debates se deduce que se refiere a que sólo
podría imponerse a delitos de extrema gravedad (Instituto de Estudios Comparados en
Ciencias Penales de Guatemala, 2005), También vale la pena considerar la opinión
consultiva de la Corte de Constitucionalidad, en la que se lee:
…la pena de muerte tiene carácter extraordinario, de manera que está prevista únicamente
para los responsables de la comisión de determinados delitos, entre los que están: el
asesinato, parricidio, caso de muerte del Presidente de los otros Organismos del Estado o
del Vicepresidente de la República, violación calificada, plagio o secuestro, dejando a
criterio razonado del juzgador su aplicación cuando estime que las circunstancias en las
que se cometió el hecho, la manera de cómo se realizó y los móviles, revelen una mayor o
particular peligrosidad del autor del hecho (Gaceta No. 29. Expediente 323-93. Fecha de la
opinión consultiva: 22/09/1993).
30
31
32
fueron fusilados dos condenados a muerte. En 2000 la pena fue cambiada a muerte por
inyección letal, siendo ejecutados ese año otros dos condenados. Durante el gobierno de
Alfonso Portillo, en marzo de 2000, el Congreso derogó la ley mencionada, dejando en
suspenso la aplicación de las sentencias pendientes de ejecución.24
Mientras tanto, el Código Penal (Decreto 17-93) es más claro, ya que en el Artículo 43
expresa que ésta es una pena de carácter extraordinario, y que sólo podrá aplicarse hasta
haber agotado todos los recursos legales, también enumera las prohibiciones que
aparecen en la Constitución para ejecutar la pena; y que podrá conmutarse – sinónimo de
cambiar – con la privación de la libertad, y en este caso será la pena máxima. El
Artículo 41, siempre del Código Penal, trata sobre las penas principales, y dice que éstas
son la de muerte, la de prisión, el arresto y la multa.
24
Código Penal de Guatemala. 1973.
33
Dicho Código hace una completa separación de los sexos; regula que todo condenado a
muerte será pasado por las armas (fusilamiento), así mismo, estipula que esta condena
también sería ejecutada a mujeres, pero no podía llevarse a cabo si la condenada se
encontraba en estado de gestación, y que no se notificaría la sentencia sino hasta
cuarenta días del alumbramiento. El Código Penal de 1877 hizo referencia a los
procedimientos franceses, y se ejecutaba con la muerte mientras no existieran los centros
legales donde se debería guardar prisión, es por eso que no hizo distinción de sexo.
En 1936 se dio el primer cambio al Código Penal, por ende también cambió la forma de
ejecutar las penas, y así mismo la pena de vida. Para este tiempo ya se clasificaban las
penas en principales, dentro de estas estaban la de muerte, la de prisión correccional, el
arresto mayor, arresto menor, prisión simple y multa; y como penas accesorias se
conocían las de pérdida o suspensión de ejecución de algunos derechos, cargos o
empleos públicos y pérdida o comiso de los instrumentos y objetos de delito. A
diferencia del código de 1877, éste limita la prisión correccional a 20 años, y prohíbe
ejecutar la muerte a las mujeres delincuentes. De la misma forma, es el primero que
señala que la pena inferior inmediata a la de muerte era la de 20 años de prisión.
2. EL INDULTO PRESIDENCIAL
Este es el último recurso que le queda a todo condenado a muerte, ya que consiste en el
perdón que el Presidente del Organismo Ejecutivo da a quién haya sido encontrado
culpable de cometer delito punible con la pena capital. En la actualidad en Guatemala,
no hay quién haga posible la realización del indulto, ya que en el gobierno de Alfonso
Portillo fue quitado el recurso de perdón. Debido a esto se puede ver los expedientes de
delincuentes que han acumulado dos condenas a muerte, en tal sentido la pena de
muerte para mujeres también está excluida no solo de la Constitución de la República
sino también del Código Penal Vigente. Probablemente esta medida fue considerada
porque ya se contempla todo el proceso legal que debe llevar la solicitud y aplicación
de la pena de muerte a un reo, si en los tribunales de justicia se han considerado todos
los aportes de prueba y defensa, se ha permitido la participación de todos los
implicados durante este procedimiento y se ha llegado a la conclusión del caso con una
sentencia firme de la aplicación de muerte, no tiene sentido que el Presidente de la
República, intervenga a favor del reo; pues esta práctica es propia del sistema
monárquico, en donde el rey es el soberano con el poder para perdonar la falta del reo.
En el mundo, más de la mitad de los países la aplican la pena de muerte, pero el caso
más sangrante es el de EE.UU. dado que supuestamente lidera las democracias libres si
bien la había abolido, en 1976 la pena de muerte fue reimplantada en 37 Estados. Desde
entonces unas 600 personas han sido ejecutadas entre hombres y mujeres, pero la
progresión de ejecuciones por año va en aumento, por lo que más de 3,000 condenados
esperan saber el día de su ejecución de ambos sexos. Una reciente encuesta revela que
un 75 % de los norteamericanos está a favor de la pena de muerte. Por ello, muchos
políticos juegan con esta carta para aumentar su número de votos. Una vez más, para
ellos, el fin justifica los medios.25
25
Informes Amnistía Internacional
35
bastante en los países donde aún se aplica la pena de muerte es rara por delitos graves,
entre los que se pueden mencionar aparte de los Estados Unidos a Japón y China.
Sin embargo Amnistía Internacional destaca los casos de mujeres que se enfrentan a la
pena de muerte y cuyos derechos a un juicio justo y al debido proceso les han sido
denegados tanto en el ámbito del sistema ordinario de justicia penal como en el de los
códigos penales de la sharia (ley islámica).
De tal cuenta que hay mujeres a las que se han acusado formalmente de delitos punibles
con la muerte y que en algunos casos, permanecen recluidas en espera de juicio durante
periodos prolongados, sin acceso a asistencia instruida, razón por la cual en el ámbito
del sistema ordinario de justicia penal, a algunas mujeres se las ha mantenido
encarceladas en espera de ejecución durante periodos de hasta 10 años señala esta
organización.
Esta práctica contraviene tanto las normas del derecho internacional así como las de la
legislación en países islámicos.
Es importante resaltar que los países con una interpretación islámica severa aplican la
pena de muerte por lapidación a mujeres y hombres adúlteras, no se trata de una ley
coránica: sino a la luz de esta ley especifica que la fornicación debe castigarse con 100
latigazos, a la mujer que cometa este abominable donde también se les impone a las
mujeres adúlteras la pena de muerte.
Pero en este mismo orden de ideas las reglas del Antiguo Testamento son más
estrictas, válidas teóricamente para judíos y cristianos, el adulterio se prohíbe en los
diez mandamientos y se castiga con la muerte “sin remisión”, impuesta a la mujer
casada y al hombre con el que comete el adulterio, no se mencionan restricciones a la
vida sexual de un hombre casado mientras no interfiera con la vida marital de otro
hombre.
26
Informe de Amnistía Internacional 2011
37
Apreciada desde una perspectiva puramente técnica, la pena de muerte es una sanción de
CARÁCTER EXTRAORDINARIO, por el mismo deber que tiene el Estado de
Guatemala de garantizar la vida y por la tendencia de la Ciencia Criminalística moderna
que se fundamenta en la posibilidad de rehabilitación del delincuente y su reinserción
exitosa en la vida social como un individuo cambiado y productivo. Dados esos
argumentos, nuestra Constitución Política sigue una tendencia ABOLICIONISTA de la
Pena de Muerte, que puede ser observada en las legislaciones de casi todos los Estados
Occidentales Modernos y Civilizados.
Por ello, no se puede determinar la igualdad de los hechos o los actos humanos o de las
personas sobre una base empírica o de la simple apreciación de la realidad natural, sino
que la explicación de la igualdad trasciende al territorio de la ética. Resulta obvio que
los seres humanos “no somos materialmente iguales”, nuestra igualdad surge de la
estimación jurídica de la persona humana hecha por el legislador, inspirada en los
valores fundamentales sobre los cuales se ha erigido la civilización.
Esto explica la situación de las mujeres ante la aplicación de la pena de muerte, pues no
es posible negar en primer lugar que físicamente la mujer tiene grandes limitaciones
frente al sexo masculino y que la función social de la mujer en nuestra cultura es
esencialmente distinta que la del varón: Antropológicamente la mujer es el soporte real
de la cultura de los pueblos y es por mucho, la encargada de su transmisión y de la
transmisión de todo sistema de valores a las generaciones futuras, es decir que se le da el
rol biológico, social, cultural y religioso de la maternidad, es decir la prolongación de la
especie humana.
Pueden ser algunos de esos motivos, por los que los legisladores extraordinarios
encontraron razonable establecer un trato diferente a las mujeres, entre otros sujetos, en
lo que se refiere a la aplicación de la pena de muerte, sin que ello implique una violación
al principio de igualdad. Además, no es posible que una norma constitucional contradiga
a otra, lo cual implicaría la inconstitucionalidad de la propia Constitución Política y la
violación a toda la normativa internacional que protege a la mujer.
Pero también es cuestionable sobre un tema que se relaciona con la Pena de Muerte y es
el tema de los Derechos Humanos, específicamente el tratamiento que reciben los
Convenios Internacionales en la materia en el ordenamiento jurídico interno.
Desde su fundación, las Naciones Unidas han manifestado preocupación por el tema de la
pena capital, así el 20 de noviembre de 1959 en su resolución 1396 (XIV), la Asamblea
General invitó al Consejo Económico y Social a iniciar un estudio sobre la pena capital.
- Abolicionistas de facto, son los países que mantienen la pena de muerte para los
delitos comunes, pero no han ejecutado a nadie durante los últimos años cuando menos.
- Retencioncitas, son los países en los que la pena de muerte está vigente y en los
que ha habido ejecuciones.
De esta cuenta actualmente más de la mitad de los países del mundo han renunciado a
la pena de muerte. Los países del oeste de Europa (España, Portugal, Francia, Gran
Bretaña, Italia, Suiza, etc.) ya la han abolido, pero la mayoría del este del continente
europeo aún la admiten. La mayoría de países asiáticos y la mitad de los africanos la
siguen ejerciendo, mientras que en Oceanía y el continente americano estos países son
minoría.
Por lo menos desde la Segunda Guerra Mundial existe una tendencia clara a nivel
mundial hacia la abolición de la pena de muerte. En 1977, 16 países eran
abolicionistas de facto, cantidad que asciende en 2007 a 128 y 89 países han abolido la
pena capital para todos los crímenes, 10 para todos excepto
27
Conveción Américana de Derechos Humanos
41
La República Popular China realizó más de 3.400 ejecuciones en 2004, más del 90%
del total mundial. Aunque en algunos casos se emplea un pelotón de ejecución, China
ha decidido recientemente que todas las ejecuciones se realicen mediante inyección
letal, generalmente efectuadas empleando furgonetas de ejecución. Irán realizó 159
ejecuciones en el 2004. En los Estados Unidos de América, Texas es el estado que más
ejecuciones realiza, con 370 entre 1976 y 2006. Singapur es el país con más
ejecuciones per cápita del mundo, con 70 ahorcamientos para una población de cerca
de 4 millones.
Según de datos de 2011, según Amnistía Internacional, la mayoría de las ejecuciones
tuvieron lugar en China, que ejecutó ella sola a más de mil personas (este país no hace
público el dato oficial, que es secreto), más que el resto del mundo en su conjunto.
Arabia Saudí ejecutó a al menos a 82, Corea del Norte al menos a 30, Estados Unidos a
43 (fue el único país americano que ejecutó), Irak al menos a 68, Irán al menos 360,
Somalia a 10 y Yemen al menos a 41.
El uso de la pena de muerte está cada vez más restringido en los países que aún la
aplican. Japón, Corea del Sur, Taiwán, Singapur y Estados Unidos son las únicas
naciones consideradas primermundistas que mantienen la pena de muerte. Durante los
años 1980, la democratización de América Latina supuso un gran incremento en la
cantidad de países abolicionistas. Tanto la Unión Europea como el Consejo de Europa
exigen de manera estricta a los estados miembros que prohíban expresamente la pena
de muerte, con excepción del Protocolo 6 de la Convención para la Protección de los
Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales, que aún autoriza el uso de la pena
capital dentro de la Unión para crímenes ocurridos en tiempos de guerra.28
El único miembro que aún se acoge a esa excepción es Bielorrusia, ésa es la razón de
que dicho país esté aún excluido del Consejo de Europa. Por otro lado, la rápida
industrialización en Asia ha incrementado la cantidad de estados desarrollados
retencionistas. En dichos países, la pena de muerte cuenta con un amplio apoyo
popular, y recibe poca o ninguna atención por
28
Informe Amnistía Internacional 2011
42
parte del gobierno y los medios. Curiosamente, algunos países africanos y de Oriente
Medio en los que el apoyo a la pena de muerte es bajo, han seguido la misma tendencia
de ignorar el tema.
Algunos países han reanudado la práctica de la pena capital tras haber suspendido las
ejecuciones durante largos periodos. Los casos más notables son los de Estados
Unidos, que suspendió las ejecuciones en 1973 pero volvió a iniciarlas en 1977; la
India, donde no hubo ninguna ejecución entre 1995 y 2004; y Sri Lanka, que
recientemente ha declarado el fin de su moratoria sobre la pena de muerte, pero que
aún no ha realizado ninguna ejecución. En las Filipinas se reintrodujo la pena capital
en 1993 tras su abolición en 1987, pero volvió a ser abolida en 2006.
En los países democráticos, con las notables excepciones de los EEUU y Japón con se
ha resaltado anteriormente, actualmente no se aplica la pena de muerte. El nivel de
apoyo a la pena de muerte varía mucho en cada país, pero con la notable excepción de
los dos países citados, en los países democráticos suele haber menos apoyo a la pena
de muerte que en los autoritarios, pese a que en los autoritarios esta pena se aplica con
frecuencia sin las debidas garantías y por delitos que no son de sangre tal es el caso de
aplicación de la pena de muerte a mujeres. En algunos países abolicionistas, sin
embargo, la mayoría de la población sigue apoyando o ha apoyado la pena de muerte,
pero la abolición ciertamente ha debido ser adoptada a consecuencia de cambios
políticos, como el paso de un régimen autoritario a otro democrático, por considerarse
la abolición como exigible para ser un país democrático respetuoso de los derechos
humanos. También influyó en los países del este de Europa el hecho de que la
abolición se convirtiera en condición necesaria para poder integrarse en la Comunidad
Europea.
En los países partidarios de la pena capital, el punto de vista del gobierno suele tener
un amplio apoyo popular y recibe poca atención de la clase política o los medios de
comunicación. Estados Unidos es una notable excepción: algunos estados han
prohibido la pena de muerte desde hace décadas (el primero en abolirla fue Míchigan
en 1846), mientras otros aún la practican; la pena capital es hoy día un tema polémico
de discusión en ese país. Sin embargo, en otros países es raro que se prohíba la
aplicación de la pena de muerte a consecuencia de una discusión pública activa de sus
méritos y consecuencias.
En los países abolicionistas a veces se reactiva el debate sobre la pena de muerte como
reacción por algún asesinato especialmente brutal, aunque pocos países la han
readmitido después de abolirla. Sin embargo, incrementos
43
La muerte de los ya condenados estaba en espera y con esta decisión podrán ser
ejecutados. Rápidamente Amnistía Internacional emitió un comunicado instando al
presidente a dar marcha atrás y acusando al gobierno de no haber hecho ninguna
medida positiva contra la violencia, en este sentido en Guatemala la pena de muerte
está establecida en su Constitución Política, en la práctica no es aplicada, debido a los
Pactos Internacionales sobre Derechos Humanos aceptados y ratificados por
Guatemala, es decir que la tendencia en el mundo es hacia la abolición de la pena de
muerte, en el marco de los Convenios, tratados y pactos internacionales mismos que
Guatemala ha ratificado.
CAPITULO IV
TENDENCIA DE LA PENA DE MUERTE EN EL MUNDO
Sin embargo, algunos países que llevaban mucho tiempo sin hacer uso de la pena de muerte
llevaron a cabo ejecuciones, entre ellos Pakistán (la primera ejecución en más de cuatro años),
India (la primera en más de ocho años) y Gambia (la primera en casi tres decenios). 29
Los principales países ejecutores en 2012 fueron China, Irán, Irak, Arabia Saudí, Estados
Unidos y Yemen, por este orden. China siguió siendo el país del mundo con mayor número de
ejecuciones pero, debido a la falta de transparencia en torno al uso de la pena de muerte en el
país, volvió a ser imposible confirmar los datos para disponer de unas cifras verdaderamente
representativas de la realidad de la pena capital en ese país.
Estados Unidos siguió siendo el único país de América donde hubo ejecuciones, pero en
2012 se observó un avance imparable hacia la limitación del uso de la pena capital en el país y
sólo se llevaron a cabo ejecuciones en 9 estados, en comparación con los 13 de 2011. En la
mayoría de los países donde se condenó a muerte o ejecutó a alguien, los procedimientos
judiciales no cumplieron las normas internacionales sobre juicios justos. En algunos, tal
incumplimiento supuso la obtención de “confesiones” mediante tortura u otros malos tratos,
por ejemplo en Afganistán, Bielorrusia, China, Irán, Irak, Corea del Norte, Arabia Saudí y
Taiwán.31
La pena de muerte es un castigo inhumano e innecesario, que supone una violación de dos
derechos humanos fundamentales: el derecho a la vida y el derecho de toda
29
CARLOS DE LAS HERAS. Responsable del trabajo contra la pena de muerte en Amnistía Internacional, España. 2013.
30
ALAI, Publicaciones América Latina en Movimiento. Agencia Latinoamericana de Información. Mayo. 2013.
31
CARLOS DE LAS HERAS. Responsable del trabajo contra la pena de muerte en Amnistía Internacional, España. 2013.
44
45
Ninguno de los estudios realizados ha podido nunca encontrar pruebas convincentes que
demuestren que la pena capital tiene un mayor poder disuasorio frente al crimen que otros
castigos. Tampoco el estudio acerca de la relación entre la pena de muerte y los índices de
homicidios, elaborado para la ONU en 1988 y actualizado en el año 2002.
Una de las medidas más importantes que puede tomar un país para garantizar el respeto a
los derechos humanos de todas las personas bajo su jurisdicción es abolir la pena de
muerte suprimiéndola de sus leyes. Si el país prohíbe también la pena de muerte en su
Constitución, la abolición se convierte en algo aún más seguro.
De los 57 países del mundo que hasta la fecha han abolido la pena de muerte para todos los
delitos, 24 han dado un paso más y la han prohibido en la Constitución, en muchos casos
por motivos de derechos humanos.(1) El último fue Islandia, que enmendó su
Constitución en 1995 para que incluyera la prohibición de la pena de muerte. Otros cinco
países (2) tienen disposiciones constitucionales que limitan los delitos por los que puede
imponerse la pena de muerte.33
Este documento incluye los textos de las disposiciones constitucionales a que nos hemos
referido. Estos ejemplos pueden animar a otros países a adoptar disposiciones similares.
32
ALAI, Publicaciones América Latina en Movimiento. Agencia Latinoamericana de Información. Mayo. 2013.
33
Amnistía Internacional. Secretariado Internacional. Junio 1996.
46
A menudo una Constitución puede ser vista como la encarnación de los valores más
elevados de un país, que extiende las garantías de derechos humanos a todas las personas
bajo la jurisdicción de ese país. Al incluir la abolición en su Constitución, un país muestra
la importancia que concede a su decisión de abolir la pena de muerte.
Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte por considerarla una violación de los
derechos humanos y sostiene que viola el derecho a la vida y que es la pena castigo más
cruel, inhumana y degradante. Las prohibiciones constitucionales que vinculan la abolición
de la pena de muerte a los derechos humanos, en particular al derecho a la vida y al
derecho a la seguridad de la persona (y específicamente al derecho a no ser sometido a
torturas u otros tratos o penas crueles inhumanos o degradantes) apoyan la postura de
Amnistía Internacional. Algunas decisiones judiciales respaldan también esta posición, en
particular la decisión del Tribunal Constitucional de Sudáfrica de junio de 1995, según la
cual la pena de muerte atenta contra la Constitución provisional sudafricana por constituir
una violación del derecho a no ser víctima de tratos o penas crueles, inhumanos o
degradantes. 34
También sustenta esta postura la decisión del Tribunal Constitucional del 24 de octubre de
1990 según la cual la pena de muerte viola el derecho a la vida y la dignidad humana,
protegidas por la Constitución. Este apoyo se evidencia también por la adopción de
instrumentos internacionales y regionales que estipulan la abolición de la pena de muerte:
el Segundo Protocolo Facultativo del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos,
el Protocolo Núm 6 del Convenio Europeo para la Protección de los Derechos Humanos y
de las Libertades Fundamentales (Convenio Europeo de Derechos Humanos) y el
Protocolo de la Convención Americana sobre Derechos Humanos Relativo a la Abolición
de la Pena de Muerte.35
Más de dos tercios de los países del mundo han abolido la pena de muerte en su legislación
o en la práctica. El número de países abolicionistas y retencionistas se distribuye en la
actualidad de la siguiente forma:
35
Amnistía Internacional. Secretariado Internacional. Junio 1996.
47
Países cuyas leyes establecen la pena de muerte únicamente para delitos excepcionales,
como los delitos previstos en el código penal militar, o los cometidos en circunstancias
excepcionales, como los cometidos en tiempo de guerra.
Brasil, Chile, El Salvador, Fiyi, Israel, Kazajistán, Perú.
La Federación Rusa adoptó una moratoria sobre las ejecuciones en Agosto 1996. Sin
embargo, ejecuciones se llevaron a cabo en la República Chechena entre 1996 y 1999.
6. PAÍSES RETENCIONISTAS
Países y territorios que mantienen la pena de muerte para delitos comunes. Afganistán,
Antigua y Barbuda, Arabia Saudí, Autoridad Palestina, Bahamas, Bahréin, Bangladesh,
Barbados, Belice, Bielorrusia, Botsuana, Comoras, Corea del Norte, Cuba, Chad, China,
Dominica, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Estados Unidos de América, Etiopía,
Gambia, Guatemala, Guinea, Guinea Ecuatorial, Guyana, India, Indonesia, Irak, Irán,
Jamaica, Japón, Jordania, Kuwait, Laos, Lesoto, Líbano, Libia, Malaisia, Nigeria, Omán,
Pakistán, Qatar, República Democrática del Congo, San Cristóbal y Nevis, San Vicente
y las Granadinas, Santa Lucía, Singapur, Siria, Somalia, Sudán, Sudán del Sud,
Tailandia, Taiwán, Trinidad y Tobago, Uganda, Vietnam, Yemen, Zimbabue.
1990: Andorra, Croacia (2), la República Federativa Checa y Eslovaca (3), Hungría,
Irlanda, Mozambique, Namibia y Santo Tomé y Príncipe abolieron la pena de muerte para
todos los delitos.
1992: Angola, Paraguay y Suiza abolieron la pena de muerte para todos los delitos.
1993: Guinea-Bissau, Hong Kong (4) y Seychelles abolieron la pena de muerte para todos
los delitos.
1994: Italia abolió la pena de muerte para todos los delitos.
1995: Yibuti, Mauricio, Moldavia y España abolieron la pena de muerte para todos los
delitos.
1996: Bélgica abolió la pena de muerte para todos los delitos.
1997: Georgia, Nepal, Polonia y Sudáfrica abolieron la pena de muerte para todos los
delitos. Bolivia abolió la pena de muerte para los delitos comunes.
1998: Azerbaiyán, Bulgaria, Canadá, Estonia, Lituania y Reino Unido abolieron la pena de
muerte para todos los delitos.
1999: Timor Oriental, Turkmenistán y Ucrania abolieron la pena de muerte para todos
los delitos. Letonia abolió la pena de muerte para los delitos comunes.
2000: Albania abolió la pena de muerte para los delitos comunes. Costa de Marfil y Malta
abolieron la pena de muerte para todos los delitos.
2001: Bosnia y Herzegovina abolió la pena de muerte para todos los delitos. Chile abolió la
pena de muerte para los delitos comunes.
2002: Chipre y Yugoslavia (ahora dos Estados, Serbia y Montenegro abolieron la pena de
muerte para todos los delitos.
2003: Armenia abolió la pena de muerte para todos los delitos.
2004: Bután, Grecia, Samoa, Senegal y Turquía abolieron la pena de muerte para todos los
delitos.
2005: Liberia y México abolieron la pena de muerte para todos los delitos. 2006;
Filipinas abolió la pena de muerte para todos los delitos.
2007: Albania, Islas Cook, Kirguistán y Ruanda abolieron la pena de muerte para todos
los delitos. Kazajistán abolió la pena de muerte para los delitos comunes.
2008: Uzbekistán y Argentina abolieron la pena de muerte para todos los delitos. 2009:
Bolivia, Burundi y Togo abolieron la pena de muerte para todos los delitos. 2010: Gabón
abolió la pena de muerte para todos los delitos.
2012: Letonia abolió la pena de muerte para todos los delitos.
Notas:
En 1990, la República Democrática Alemana se unificó con la República Federal
Alemana, donde la pena de muerte se había abolido en 1949.
Eslovenia y Croacia abolieron la pena de muerte cuando eran aún repúblicas de la
República Federativa Socialista de Yugoslavia. Las dos repúblicas obtuvieron su
independencia en 1991.
50
La pena de muerte ha sido aplicada por todos los países de América Latina en algún
momento histórico, aunque a inicios del siglo XXI está prohibida en la mayoría. Solamente
Bahamas, Cuba, Guatemala, Guyana, Jamaica, Trinidad y Tobago y algunas de las
Pequeñas Antillas continúan aplicándola. Además, en Bolivia y Perú algunas comunidades
indígenas continúan ejecutando a ladrones, secuestradores y otros criminales, haciéndolo
al margen de la ley. Cabe destacar que sí sucedieron ejecuciones de personas durante el
siglo XX entre los años 60 y 90, época en la cual varios países sudamericanos
cayeron bajo regímenes
51
Aunque en Latinoamérica varias circunstancias han propiciado que se alcen algunas voces
pidiendo que ese se reinstaure, la tendencia global hacia la abolición de la pena de muerte
parece imparable.
El reto que tienen por delante quienes luchan por que se prohíba la pena de muerte siempre
es grande porque nunca hay garantías suficientes de que, el día de mañana, la misma no
será instaurada, restablecida o aplicada con mayor frecuencia en uno u otro rincón del
mundo. Hace un año, cuando Amnistía Internacional presentó su informe sobre la
administración de la pena capital correspondiente a 2008, se constató que, aunque cada vez
menos países la aplican, el número de ejecuciones en aquellos que sí lo hacen casi se
duplicó. A finales de marzo, Amnistía Internacional hará público su reporte
correspondiente a 2009.37
Cuba y Guatemala están entre los pocos países de América Latina en donde la pena capital
sigue siendo legal. En Guatemala, la aplicación de la misma se suspendió en 2002 y
volvió a activarse en 2008 bajo argumentos como el del
36
EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela. 2013
37
FEDERICO MAYOR ZARAGOZA: Presidente de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte. La pena de muerte se habrá
relegado a los libros de historia en menos de 20 años. Amnistía Internacional. 2013.
52
general retirado y político conservador Otto Pérez Molina: “la pena de muerte es la única
medida para disuadir a los delincuentes”. Pero la apología de la pena capital no proviene
solamente de la derecha: en enero de este año, el Partido Verde Ecologista de México
propuso reimplantar este castigo, alegando que, ante el auge de los secuestros y los
homicidios, la mayoría de la población estaba de acuerdo con la medida.38
En este sentido se puede señalar que la noción de la pena capital como medida de
seguridad preventiva no es aceptada en los campos del derecho penal y la criminología
porque su efecto disuasivo carece de evidencias empíricas; no hay pruebas de que la pena
de muerte garantice el cumplimiento de las leyes ni la reducción de la violencia. No
obstante, diversos sectores de las sociedades de El Salvador, Honduras, Colombia y Perú
han pedido que se reimplante y se amplíe la aplicabilidad de la condena a muerte para
ponerle coto a la violencia y al crimen organizado.
38
FEDERICO MAYOR ZARAGOZA: Presidente de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte. La pena de muerte se habrá
relegado a los libros de historia en menos de 20 años. Amnistía Internacional. 2013.
39
EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela. 2013
40
ELEONORA TAFURO DD.HH. Revista + explicado. España. 2013
53
En una Nota Oficial, fechada el 11 de abril del 2003, el Gobierno de Cuba dio a conocer
al pueblo cubano y a la opinión pública en general, que la Sala de los Delitos contra la
Seguridad del Estado del Tribunal Popular de la Ciudad de la Habana, en Juicio
Sumarísimo, tal y como está previsto en los Artículos 479 y
41
FEDERICO MAYOR ZARAGOZA: Presidente de la Comisión Internacional contra la Pena de Muerte. La pena de muerte se habrá
relegado a los libros de historia en menos de 20 años. Amnistía Internacional. 2013.
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ELEONORA TAFURO DD.HH. Revista + explicado. España. 2013
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480 de la Ley de Procedimiento Penal, había considerado probados los hechos cometidos
por los ciudadanos, Lorenzo Enrique Copello Castillo, Bárbaro Leodán Sevilla y Jorge
Luis Martínez Isaac, secuestradores de la embarcación de pasajeros "Baraguá", y que
estos "constituían graves delitos de terrorismo previstos en la Ley 93 contra Actos de
Terrorismo, del 24 de diciembre del 2,001," siendo sancionados los mismos a la Pena
Capital. La sanción de muerte en Cuba se ejecuta por fusilamiento, y fue aplicada en la
madrugada de ese día.43
ARGENTINA
Respecto a Argentina, considera a los desaparecidos entre 1976 y 1983 como ejecutados
legalmente, puesto que se trataba de ejecuciones realizadas subrepticiamente. El 6 de
agosto de 2008 el Congreso de la Nación abolió el Código de Justicia Militar, que era el
último remanente de aplicación posible de la pena de muerte en el país.44
CHILE
En Chile la pena de muerte fue derogada en 2001 por Ley Nº 19.734, que modificó
diversas leyes y normativas (entre ellas, el Código Penal, la Ley de Seguridad del Estado y
el Código de Justicia Militar), reemplazando la pena capital con la de presidio perpetuo
calificado. El Código Penal establece, en su artículo 32 bis regla 1ª, que aquel condenado
por esta última pena no podrá optar a la libertad condicional sino una vez transcurridos 40
años de privación de libertad efectiva.
En el caso de la Justicia Militar, la pena de muerte se mantiene para los tiempos de guerra.
También se contempla en la Constitución en su Artículo 19, número 1, que indica que la
pena de muerte sólo podrá establecerse por delito contemplado en ley aprobada con
quórum calificado. La Constitución Política de Chile, en su articulado transitorio Primero,
mantuvo vigente las disposiciones anteriores a ella que se referían a la pena de muerte,
hasta la dictación de las leyes de quórum calificado que nunca hasta la derogación de la
pena de muerte se dictaron.
La pena de muerte como castigo máximo se aplicó en Chile desde tiempos coloniales. En
Chile 58 personas fueron condenadas por los tribunales a la pena de muerte desde que ésta
fuera incluida en el ordenamiento jurídico en 1875. Del total, 29 de ellos habían
cometido robo con homicidio; 24, homicidio calificado; uno por asalto con homicidio;
uno por homicidio con incendio y tres por homicidio con violación. El primer ejecutado
fue acusado de robo con homicidio y enfrentó el pelotón de fusilamiento el 3 de febrero
de 1890. La última vez que se aplicó fue
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EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela. 2013
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EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela . 2013
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el 29 de enero de 1985, terminando con la vida de los carabineros Carlos Alberto Topp
Collins y Jorge Sagredo Pizarro, responsables de una docena de homicidios en serie
perpetrados en Viña del Mar.45
COSTA RICA
El 26 de abril de 1882, por Decreto N° VII, el presidente Tomás Guardia adoptó algunas
modificaciones a la Constitución de 1871 y el artículo 45 fue sustituido por el
siguiente: “La vida humana es inviolable en Costa Rica”, convirtiéndose en el tercer país
del mundo en abolir la pena de muerte.
GUATEMALA
La constitución guatemalteca contempla la pena de muerte, dándole la facultad al
Congreso de abolirla, y se le garantiza al reo hasta el último recurso. Aunque la última
ejecución de la pena máxima en el país fue hace 11 años, ésta sigue estando contemplada
en el Código Penal, justificación a la que se aferran ciertos partidos políticos y un alto
porcentaje de sociedad civil.
Con las 2 aplicadas en el 2000, son 5 el número de ejecutados desde la firma de los
Acuerdos de Paz de 1996. El ex-Presidente Alfonso Portillo, que llevaba en el poder poco
más de 6 meses, renunció a su potestad de indultar a los penados a muerte. Ante esta
situación la Corte de Constitucionalidad resolvió que la ley que regula el proceso y que
data de 1982 no especifica qué autoridad debe encargarse de valorar los recursos de
gracia presentados por los condenados, por lo que le correspondía al Congreso legislar
para enmendar este vacío legal. Mientras, la pena capital quedó en suspenso.
El 12 de febrero de 2008 el congreso votó por la aprobación de una nueva ley que volvió a
facultar al Presidente en curso para decidir sobre los indultos. Apoyaron esta medida los
dos partidos mayoritarios, Unidad Nacional de la Esperanza y Partido Patriota, El partido
Encuentro por Guatemala votó en contra. Amnistía Internacional emitió un comunicado
instando al presidente a dar marcha atrás. Álvaro Colom decidió vetarla, al considerar que
esta forma de castigo entra en contradicción con el derecho a la vida del reo, la
retroactividad de la ley y los compromisos internacionales firmados por Guatemala como
miembro de la Convención Americana de Derechos Humanos, posición que ha mantenido
hasta el día de hoy.46
PUERTO RICO
En Puerto Rico la pena de muerte no es legal. Se aplicó hasta que en 1952 se aprobó la
constitución prohibiendo este castigo capital. En 2006 el gobierno de los
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EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela. 2013
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EVAN ROMERO-CASTILLO. Derechos humanos en Latinoamérica. Venezuela. 2013
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Estados Unidos quiso imponer la pena capital en la isla. Esto originó una fuerte
controversia entre el gobierno estadounidense y las autoridades puertorriqueñas. El
gobierno estadounidense prefirió retirar su propuesta.
URUGUAY
La pena de muerte en Uruguay fue abolida por la Ley Nº 3238 del 23 de septiembre de
1907, durante el gobierno de Claudio Williman. La misma establece en su artículo 1º:
Queda abolida la pena de muerte que establece el Código Penal. Queda igualmente abolida
la pena de muerte que establece el Código Militar.
La última ejecución se había llevado a cabo en el departamento de Maldonado el 29 de
septiembre de 1902.5
VENEZUELA
La abolición legal de pena de muerte sucedió en 1863, bajo la presidencia de Juan
Crisóstomo Falcón, con el decreto de Garantías. Esta abolición será inscrita en la nueva
Constitución de 1864.7 Desde esta fecha, la prohibición de la pena de muerte ha estado
inscrita en todas las constituciones de la República, siendo el primer Estado abolicionista
del mundo.
OTRAS REGIONES
En otras regiones todavía se contempla la posibilidad de ejecutar a ciertos criminales. Se
trata de países como Bahamas, Guyana, Jamaica, Trinidad y Tobago y algunas de las
Pequeñas Antillas. En las colonias europeas pertenecientes a Francia, el Reino Unido y los
Países Bajos la pena de muerte no es legal.
En 2012, al menos 1.722 personas fueron condenadas a muerte en 58 países. Este dato, a
pesar de ser escalofriante, representa una disminución si lo comparamos con las cifras
de los años inmediatamente anteriores. En 2011,
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ELEONORA TAFURO DD.HH. Revista + explicado. España. 2013
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China
No solo es el país donde más ejecuciones hay en el mundo, sino que también es el menos
transparente. A pesar de que China defiende que ha habido una sustancial disminución en
el número de ejecuciones, AI cree que ascienden a miles y rechaza incluir las estadísticas
del gigante asiático por su poca fiabilidad, ya que el Gobierno considera los datos sobre
ejecuciones como secreto de Estado.
Irán
Con 314 ejecuciones declaradas, el régimen de Mahmoud Ahmadinejad ocupa el segundo
lugar de la lista. No solo asesinos o enemigos del Estado: en Irán también se ejecutan a
apóstatas y homosexuales.
Irak
Al menos 129 personas han sido ejecutadas en 2012. Es el único país de la región (junto
con la franja de Gaza), donde las ejecuciones se han casi duplicado con respecto a 2011.
La situación política del país tiene mucho que ver con este aumento. De hecho, los cargos
más generalizados son el terrorismo y la connivencia con el régimen de Saddam Hussein.
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ANTONIO MUÑOZ AUNIÓN. POR LA ABOLICIÓN UNIVERSAL DE LA PENA DE MUERTE. Valencia, España. 2010
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Arabia Saudí
79 personas han sido ajusticiadas en 2012 y los métodos más extendidos son la
decapitación pública y la crucifixión, aplicados incluso para delitos menores como puede
ser el robo de unas joyas. Pero además de la pena capital, en Arabia Saudí la tradición
arcaica del ojo por ojo sigue siendo un principio rector de la justicia. A este respecto,
podemos mencionar el caso de un hombre al que supuestamente le habrían inducido una
parálisis quirúrgicamente como condena por haber causado una parálisis a otra persona.
Estados Unidos
Si el país americano se conoce por ser un lugar de contradicciones extremas, la
persistencia de la pena capital representa seguramente una de sus mayores paradojas. En
EEUU se puede observar una tendencia a la reducción de los estados que aplican la pena
de muerte: hubo 43 ejecuciones a lo largo de 2012 (el mismo dato de 2011), de las cuales
tres cuartas partes se concentraron en 4 estados (Arizona, Missisipi, Oklahoma y Texas),
mientras que ascienden a 18 los estados abolicionistas (de un total de 32 en los que sí se
contempla la pena capital).49
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relegado a los libros de historia en menos de 20 años. Amnistía Internacional. 2013.
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Amnistía Internacional
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Estas resoluciones no son legalmente vinculantes para los gobiernos, pero constituyen
importantes logros para el movimiento abolicionista y suponen un avance incesante hacia
la completa desaparición de la pena de muerte en el derecho internacional.
En 2007 y 2008, la Asamblea General de la ONU adoptó dos resoluciones que respaldan la
petición de una moratoria mundial de las ejecuciones.
Organizaciones regionales intergubernamentales y sociedad civil: instrumentos para
respaldar una moratoria mundial de las ejecuciones Tras la adopción de estas resoluciones,
organismos regionales y coaliciones de la sociedad civil expresaron su apoyo a una
moratoria mundial de las ejecuciones y pidieron a los gobiernos que la aplicasen.54
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Amnistía Internacional
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Informe de Amnistía Internacional 2012
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Informe 2012 de Amnistía Internacional.
CONCLUSIONES
3. La sanción de la pena de muerte tiene más allá un valor humano que jurídico, ello porque
si bien se conoce que muchos ordenamientos jurídicos en el mundo no la ha abolido y le
da cierta libertad al legislador de habilitarla por ley de quórum calificado, son realmente
los miembros de la sociedad quienes alzan el tema ante un hecho controversial como
posible alternativa a la resolución de un delito.
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11. Los encargados de misión consideran que varios de los aspectos del sistema jurídico
guatemalteco contravienen gravemente los siguientes lineamientos establecidos en el
Artículo 6 del Pacto Internacional de los Derechos Civiles y Políticos (PIDCP), en el
Artículo 4 de la Convención Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y en las
salvaguardas para garantizar la protección de los derechos de los condenados a la pena de
muerte de Naciones Unidas.
12. En Guatemala existe una moratoria que data de más de doce, cuando fueron aceptados
tratados internacionales al respecto, como es el denominado Pacto de San José, dicha
iniciativa cobró más fuerza a raíz de la visita a esta nación de la Alta Comisionada para los
Derechos Humanos de la ONU, Navi Pillay, cuando recomendó al poder Legislativo
suprimir ese castigo; basando su petición en el artículo de la Constitución guatemalteca
que da a los parlamentarios la potestad de eliminar la pena de muerte sin obligar a una
reforma en la Carta Magna.
RECOMENDACIONES
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BIBLIOGRAFÍA
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