EUTANASIA, ORTOTANASIA Y VOLUNTAD ANTICIPADA

La conferencia ofrecida a través del ius canal multimedia radio del colegio de notarios de
la CDMX en colaboración con la facultad de derecho de la UNAM, el cual fue conducido
por Liliana Gutiérrez y Mischel Cohe, en él se inició mencionando la importancia del mes
de marzo ya que en este mes comienza la voluntad anticipada, es por eso por lo que se
llevó a cabo esta conferencia.
La conferencia contó con la presencia del notario de la CDMX, Cesar Mayorga,
básicamente la voluntad anticipada se refiere a la redacción de un documento como por
ejemplo el testamento, en el contenido de este, cuenta con las posibilidades de redacción
del mismo, lo que puedo destacar es que las asesorías por parte del colegio de notarios
son totalmente gratuitas de manera presencial con un notario de la CDMX y la importancia
social es esta, ya que obtener esta información que mejor manera que sea gratuita y así
mismo saber todo lo que conlleva la realización de este documento y la diferencia entre
eutanasia, ortotanasia y voluntad anticipada.
Es importante hacer la distinción entre los conceptos de voluntad anticipada y eutanasia
ya que no son lo mismo, la palabra eutanasia se refiere a la intervención deliberada para
poner fin a la vida de un paciente sin perspectivas de cura, está prohibida en la ley
general de salud de la CDMX, publicada en el año 2021, ya que se menciona
expresamente que dicho personal de salud bajo ninguna circunstancia y en ningún
momento podrá suministras medicamentos o tratamientos médicos que provoquen de
manera intencional de manera deliberada la muerte de un enfermos que se encuentre en
etapa terminal.
Existe una controversia respecto a que hay gente que piensa que como en la CDMX ya se
reguló la voluntad anticipada, dan por hecho que la eutanasia u ortotanasia están
permitidas, es importante aclarar que no es así, al igual que en ninguna entidad federativa
estará permitido, quien se atreva a cumplir con esto, no solo estará cometiendo una falta
administrativa, sino que también estará cometiendo un delito.
Doctrinalmente se analiza la eutanasia positiva que se conoce en un termino coloquial
como desconectar al paciente para dejar que de manera natural se cause la muerte del
individuo, en el 2008 existió la ley de voluntad anticipada y que posteriormente en el 2012
se suprimió el concepto de ortotanasia, el cual se conoce como la muerte natural de un
enfermo en etapa terminal o desahuciado sin someterlo a una prolongación medicamente
inútil de su agonía.
La ley de voluntad anticipada de la CDMX en el articulo 149 señala que la voluntad
anticipada es el acto que expresa la decisión de una persona con capacidad de ejercicio
para decidir si se somete o no se somete a tratamiento o procedimientos médicos que
pretendan prolongar su vida, siempre y cuando se encuentre en etapa terminal, no
necesitan ubicarse en el supuesto de encontrarse en una etapa terminal para ejercer su
voluntad anticipada, simplemente la voluntad anticipada es preventiva y surtirá efectos
solo si el sujeto llegase a estar en el supuesto de una enfermedad en etapa terminal y que
por razones medicas sea imposible naturalmente sostener su vida, siempre y cuando se
respete en todo momento la dignidad de la persona, en este caso hablamos de
ortotanasia, la muerte correcta, sin agonía, sin provocarla, se permite que la muerte llegue
de manera posible de manera digna.
Si analizamos estos conceptos nos podemos dar cuenta que si tienen su fundamento en
derechos humanos reconocidos en la constitución política de los estados unidos
mexicanos.
¿Existe un mecanismo para ser sometido a procedimiento de ortotanasia? en la CDMX si
existe y es el documento de voluntad anticipada que comprende todo lo que tiene que ver
con cuidados paliativos, no es así en cuanto a la eutanasia, no existe al menos en la
ciudad de México un documento que avale este hecho.
La ley general de salud de la CDMX, señala que se puede obtener un documento de
voluntad anticipada, el cual se puede formalizar por 2 vías, ante notario público o ante la
institución de salud correspondiente en presencia de 2 testigos, siempre y cuando por
tratarse de un derecho humano de la persona, deberá comparecer en los términos
correspondiente el propio paciente, quien será el encargado de tomar la decisión,
actualmente por algunos transitorios establecidos en la ley general de salud se sigue
aplicando el reglamento de la ley de voluntad anticipada anterior y ahí mismo se legitima a
que si el enfermo en etapa terminal no esta consciente para tomar este tipo de decisiones
la persona que estará facultada para tomar esta decisión podrá ser el cónyuge, concubino
o concubina, los hijos, siempre y cuando no sean menores de edad, los padres o los
hermanos.
El documento de voluntad anticipada únicamente lo puede otorgar la persona de cuya
vida se trata, por otro lado, se le llama formato al que se otorga por parte del enfermo y
que, si no estuviera en posibilidades mentales de otorgarlo, lo podrá hacer cualquier otra
persona mencionada con anterioridad.
Las personas deben saber que cambiar nuestra voluntad anticipada es muy fácil, basta
con otorgar una nueva, el documento de voluntad anticipada se puede revocar y modificar
en todo momento ante notario con las mismas formalidades establecidas previamente al
igual que el formato. Los requisitos para llevar a cabo este documento o formato son estar
capacitado legalmente, tener 18 años, estar libre y sujeto de amenazas, estar en los 5
sentidos y que nadie haga presión sobre nosotros, dependiendo de los notarios podrán
solicitar testigos si así lo consideran.
Es importante recalcar que la elaboración de este documento no es de difícil elaboración
ya que tan solo con una identificación oficial y datos generales se podrá realizar, el tiempo
en que se tardarán en hacerlo será muy corto, en general no es un acto costoso y más si
se realiza en el mes de marzo, es similar a los costos del testamento. Así mismo es
indispensable señalar que no es necesario que nos encontremos en una situación grave
de salud para poder realizar el documento, lo podemos hacer en cualquier momento de
nuestras vidas, cuando nos encontramos muy bien de salud.
Finalmente la ley pide que se plasme en el documento de voluntad anticipada como
requisitos mínimos que se designe a un representante así como exteriorizar nuestro
consentimiento a que podamos donar nuestros órganos después de morir. El
representante será la persona encargada de vigilar el cumplimiento de lo establecido.
Las dudas que tengo son en el supuesto de estar incapacitado, es decir, que en todo caso
de ser sordo o mudo ¿cuáles serán las medidas que deberá tomar el notario y que sean
permitidas, previamente establecidas en la ley para que se lleve a cabo la elaboración del
documento de voluntad anticipada?, al igual que en función de las creencias religiosas.