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Reproducción e

quina.
Se considera al equino como una especie poliéstrica
estacional, fototropica positiva, por lo que la estación
reproductiva se manifiesta a fines de primavera y durante el
verano. Generalmente luego del anestro invernal, las yeguas
entran en un periodo de transición caracterizado por
una actividad cíclica errática antes de ingresar al periodo de
actividad sexual regular y fértil. Este periodo de transición es
sumamente variable entre los individuos tanto en
características como en duración.

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Pubertad
La pubertad se alcanza al año y medio de edad, pero se debe
incorporar a la reproducción entre 36 y 60 meses, cuando su
organismo está apto física y orgánicamente para la reproducción.
Todas las potrancas se deben revisar, evaluar y domar antes de la
incorporación al evento reproductivo.

Celos
Los celos ocurren a intervalos de 18-21 días (ciclo estral), duran de 2
a 7 días, y pueden ser mayores, en dependencia de la raza, estado
físico, calidad de la alimentación y la presentación de trastornos
reproductivos.
Ovulación
La ovulación ocurre de 24 a 48 horas antes de la terminación del
celo. El conocimiento de la duración de los ciclos y los celos de cada
reproductora, permite la utilización eficiente de los sementales, el
día para la cubrición efectiva y la estrategia a seguir con cada
hembra en la campaña reproductiva. La yegua presenta un canal de
parto perfecto, a diferencia de otras especies, que facilita la rapidez
y facilidad del evento y es a la vez una de las especies que menos
partos distócicos registra. La gestación dura de 335 a 345 días, o
sea, 11 meses como promedio si se gesta con caballo y 12 meses si
se gesta con asno.

Preparación de la yegua para las cubriciones


La hembra destinada a la reproducción tendrá la edad, desarrollo
somático y genital adecuados. Se le someterá a examen
hemotoquímico, hemoparásitos y exudados vaginales a las vacías
de la campaña anterior o que tengan antecedentes de procesos
infecciosos, aplicando los tratamientos específicos,
previo antibiograma. El celo se determinará por los signos externos
de la hembra, post-tratamiento ante el caballo,
evaluando micciones frecuentes y parpadeo del miembro
reproductor de la yegua. Se emplea un caballo celador, que se
maneja por un personal experimentado, para evitar daños a las
reproductoras, o se prescinde de su uso, siempre que el operario
reconozca los signos de celo. Si no se conoce el celo, se comenzará
a cubrir en el 3er día de celo y continuar en días alternos hasta la
desaparición de los signos y la hembra comience a rechazar al
caballo. Si se conoce el tipo y duración de los celos, se busca el
momento óptimo entre el último y penúltimo día de celo, lo que
garantiza que no se desgasten los sementales y sea más efectiva la
cubrición. En el caso de aplicar la Inseminación Artificial se revisa el
crecimiento del folículo por palpación rectal, cada 8 horas, hasta
que tenga 6 cm (folículo maduro) y esté cerca de la fosa de
ovulación, para garantizar un uso racional del semen y diminuir el
número de servicios por gestación. La yegua que pare en la campaña,
se debe comenzar a recelar después del 4to día del parto, aunque la
mayoría presenta un celo fértil entre el 7mo y 9no día, que después
repetirá entre los 28 y 29 días después del parto. La hembra en celo,
tanto para la monta dirigida como la inseminación artificial debe
estar limpia, con la cola vendada para evitar lesiones y
contaminación, utilizar trabones en las patas traseras, higienizar
la vulva, el ano y todo el tren posterior, interno y externamente, en
un lugar tranquilo y seguro, con una solución desinfectante de lugol
al 0,5% o permanganato de potasio al 0.02%. Solo después de
cumplir con estos requisitos, el semental se conduce a la monta, por
el personal especializado o se efectúa la inseminación, previa
evaluación del semen. Después de terminar las cubriciones y el celo,
la yegua se debe seguir recelando a partir del día 16 de la ultima
cubrición y de no presentar celo, se prepara para el diagnostico de
gestación, que puede ser por palpación rectal (a los 50 o 60 días) o
por ultrasonido (a los 18- 21 días), siempre lo más rápido posible.

Apareamiento
La hembra en celo atrae a los machos gracias a
las feromonas presentes en la orina y descargas vaginales. Los
machos por su parte realizan un cortejo sistemático y muy elegante
que incluye:

 Mira a la hembra en celo de manera insistente.


 Relincha constantemente de manera prolongada y con mucha
energía.
 Levanta las orejas.
 Trata de mostrar mayor volumen corporal doblando su cuello.
 Abre los ojos de manera excesiva.
 Dilata los ollares.
 Marcha elegantemente delante de la hembra.
 Se acerca de frente a la yegua.
 Olfatea los ollares, las orejas, el cuello, las axilas y el bajo
vientre de la yegua.
 Lame los miembros posteriores de la yegua
 Lame y olfatea la zona genital de la yegua, luego estira el cuello
y levanta el labio superior mostrando sus dientes (reflejo de
Flehmen).
 Golpea a la yegua con el pecho para cambiarla de posición.
 Mordisquea con suavidad la crin y se frota contra ella.
 La erección del caballo aumenta cuanto más guiña la vulva la
yegua.
 El semental se excita aún más cuando la hembra aparta la cola y
deja el paso libre, ya que esto significa que la sumisión es total,
eliminando completamente el temor al rechazo.
Hay que procurar que el pene del caballo esté en posición correcta
durante la monta.

Durante la erección el miembro reproductor del caballo puede


alcanzar una longitud de metro y medio, la cópula es breve. Luego
de seis o siete movimientos se da la eyaculación. Y se puede
evidenciar por un movimiento de la cola hacia arriba y hacia abajo,
denominada movimiento de bandera

Sistema de manejo
Depende de la raza, las condiciones del centro de cría, las
posibilidades económicas de los criadores y el entorno en que se
manejan los animales. Se deben perfeccionar para lograr resultados
rápidos, animales de mayor calidad y un crecimiento de la masa
estable.

 Monta libre: Se utiliza un semental por 25 yeguas, todos juntos en


áreas de pastoreo. El semental se debe cambiar en cada campaña
o asegurarle un descanso fuera de la yeguada. Esto trae consigo
gran deterioro del semental, lo que implica en algunos casos,
pérdida de animales valiosos o de sus capacidades reproductivas.
 Monta dirigida: En cada campaña reproductiva, cada semental
puede cubrir hasta 40 yeguas. El semental se mantiene estabulado
en cuadras, con sus regímenes de alimentación y manejo
diferenciados y se le asigna un grupo de yeguas según el plan de
apareamiento y presentación de celo. Como en el resto de los
sistemas, hay que realizar un examen riguroso de sementales y
yeguas y utilizar solo los que estén aptos para la reproducción.
Este es una variante más efectiva, garantiza la seguridad de
sementales y yeguas y un trabajo individual hembra a hembra.
 Inseminación artificial: Permite que un semental de servicio a gran
número de yeguas: con semen fresco o congelado este efecto se
amplia a grandes distancias, inclusive a otros países, garantiza un
mejor control de la reproducción, se usan sementales de mayor
calidad en más hembras y una mejora genética más rápida. Su
implementación necesita preparación técnica y mayor cantidad de
recursos e instalaciones específicas para la extracción,
procesamiento y utilización del semen en las condiciones
adecuadas.
 Transplante de embriones: Garantiza la obtención de ejemplares
de alta calidad de forma rápida y eficiente. Consiste en
extraer óvulos fecundados de una reproductora élite y
trasplantarlos a otra que sirve de recipiente, la cual lo desarrolla,
lo pare y mantiene hasta el destete. Se puede obtener más de una
cría/año de un mismo apareamiento y de una misma reproductora.

Proceso de parto
Se desencadena entre los 335 y los 350 días contados desde el
momento de la fecundación. El parto se divide en tres etapas.

1. La yegua presenta contracciones uterinas involuntarias, el feto


se ubica en posición de expulsión, comienza la dilatación del
cuello uterino y otras estructuras. Esta etapa puede durar
entre una y ocho horas.
2. La yegua realiza esfuerzos voluntarios de expulsión. El feto
entra en la pelvis de la yegua y comienza a pasar a través del
cuello. Las contracciones uterinas se complementan y
amplifican con el esfuerzo de expulsión voluntario.
3. Se da la expulsión de lasmembranas fetales. Esta etapa dura
entre una y dos horas.

Al mismo tiempo que suceden estas tres etapas la hembra va


presentando los siguientes síntomas:

 La yegua se pasea de un lugar a otro.


 Agita la cola mostrando molestias en intervalos regulares.
 Se mira constantemente los costados.
 Presenta incomodidad, se acuesta y se levanta de manera
repetida.
 Suda.
 Expulsa un chorro de agua por la vagina, lo que indica la rotura de
la bolsa de aguas, con escape del líquido alantoideo.
 La yegua se acuesta y comienza a pujar, emitiendo fuertes
gruñidos.
 Aparecen entonces los miembros anteriores del potro, cubiertos
por membranas, la yegua puede levantarse, caminar dando vueltas
por el establo y acostarse de nuevo hasta la siguiente
contracción.
 Luego aparece la cabeza del potro, apoyada sobre los miembros
anteriores, mientras la yegua continúa pujando. Después que
salen los hombros, el potro se desliza de forma fácil, aún cubierto
parcialmente por membranas.
 El potro nace mojado y presenta el cordón umbilical que lo une a
la placenta.
 La yegua puede permanecer acostada por un período de hasta
media hora, recuperando fuerzas.
 Luego de unas breves contracciones serán expulsadas
las membranas fetales.
 El potro intenta levantarse repetidamente y de igual manera cae al
suelo.
 En caso de que pase más de una hora y el potro no consiga
mantenerse en pie, se le puede ayudar un poco asegurándole el
consumo de la mayor cantidad de calostro que sea posible.

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