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Universidad del Istmo

Facultad de Derecho y Ciencias Políticas

Licenciatura en Derecho y Ciencias Políticas

Derecho Civil I – Actividad 2

Supuestos Teóricos del Hecho Jurídico

Integrantes:

Aníbal Aparicio 9-729-1136

Arlene Herrera 8-1015-1985

Ariel Abrigo 1-737-1662

José Rodríguez 4-771-997

Roselyn Obaldía 8-1004-898

Profesor: Joel Santos

Fecha de entrega:

Jueves 20 de julio de 2023

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Índice

Introducción……………………………………………………………………………………...3

Contenido………………………………………………………………………………………...4

Definición de hecho jurídico según la


doctrina…………………………………….....4

Clasificación de los hechos jurídicos……………………………………………….....5

Hechos jurídicos naturales…………………………………………………......5

Hechos jurídicos humanos o voluntarios…………………………………......6

Teorías que diferencian el hecho jurídico del acto jurídico…………………………7

Teoría de la declaración de voluntad………………………………………….8

Teoría del interés jurídico………………………………………………………9

Teoría de los elementos negativos…………………………………………..11

Teoría mixta o ecléctica……………………………………………………….12

Conclusión……………………………………………………………………………………..14

Bibliografía……………………………………………………………………………………..15

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Introducción

Los hechos de la vida real ya sean resultado de actos de la naturaleza o de las


intenciones de las propias personas, tienen consecuencias jurídicas y alteran la
realidad jurídica. Por eso, los hechos jurídicos nos siguen de por vida.

Cada vez que hacemos algo relacionado con la ley, cuando celebramos contratos,
acuerdos y ventas, cuando ejercemos nuestros acuerdos de voluntad, cuando
aplicamos nuestros derechos y obligaciones contractuales, siempre nos enfrentamos a
estos supuestos. Por eso es tan importante este tema. Hay hechos en nuestro mundo
que pueden o no afectar el mundo legal como resultado. Por tanto, hay hechos
jurídicos y hechos no jurídicos.

Debe expresarse la intención necesaria para un acto jurídico. Este testamento tiene un
propósito específico para lograr un efecto legal. Por esta razón, los estudiosos del
derecho buscan establecer principios generales que puedan aplicarse a todo tipo de
hechos jurídicos, señalando que toda norma jurídica se basa siempre en hechos
jurídicos y que un conjunto de normas es la premisa básica.

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Contenido

Definición de hecho jurídico según la doctrina

La definición de hecho jurídico según la doctrina puede ser abordada desde diferentes
perspectivas y enfoques. En líneas generales, el hecho jurídico se refiere a un
acontecimiento o suceso que tiene relevancia jurídica y que genera efectos legales en
el ordenamiento jurídico.

Según la doctrina clásica, el hecho jurídico se divide en dos categorías principales: los
hechos jurídicos en sentido estricto y los actos jurídicos. Los hechos jurídicos en
sentido estricto son aquellos acontecimientos naturales o humanos que,
independientemente de la voluntad de las personas, generan consecuencias legales.
Estos pueden incluir el nacimiento y la muerte de una persona, un accidente, un
desastre natural, entre otros eventos que tienen un impacto jurídico

Por otro lado, los actos jurídicos son eventos voluntarios realizados por las personas
con el propósito de producir consecuencias jurídicas. Estos actos pueden ser expresos,
como la celebración de un contrato, o tácitos, como el ejercicio de un derecho. Los
actos jurídicos implican la manifestación de la voluntad y la capacidad legal de las
partes involucradas. En Panamá, se aplican las disposiciones del Código Civil y otras
leyes pertinentes para regular los actos jurídicos y establecer sus requisitos de validez
y eficacia.

Es importante destacar que los hechos jurídicos, ya sean en sentido estricto o actos
jurídicos, están sujetos a los requisitos establecidos por la ley para su validez y
eficacia. Estos requisitos pueden variar según el tipo de hecho jurídico y la legislación
aplicable.

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Clasificación de los hechos jurídicos

Los hechos jurídicos abarcan tanto los sucesos naturales como los actos voluntarios
realizados por las personas, y son de suma importancia en el ámbito legal.

Los hechos jurídicos naturales son aquellos acontecimientos que ocurren


independientemente de la voluntad humana, como el nacimiento y la muerte. Estos
hechos tienen implicaciones legales, como la adquisición de derechos o el inicio de
obligaciones.

Por otro lado, los hechos jurídicos humanos son eventos voluntarios que las personas
realizan con el propósito de producir efectos legales, como la celebración de un
contrato o el ejercicio de un derecho. Estos actos están regidos por las normas y
regulaciones jurídicas y tienen consecuencias legales para las partes involucradas.

En conjunto, los hechos jurídicos naturales y los hechos jurídicos humanos conforman
la base de la estructura legal de una sociedad. Los primeros se basan en la realidad y
los sucesos inherentes a la vida misma, mientras que los segundos reflejan la
capacidad de las personas para crear relaciones jurídicas mediante su voluntad. Ambos
tipos de hechos contribuyen al establecimiento de derechos y obligaciones que rigen
las interacciones sociales y comerciales.

Hechos jurídicos naturales

Los hechos jurídicos naturales son sucesos inherentes a la realidad y a la vida misma,
que ocurren independientemente de la voluntad humana y que tienen implicaciones
legales.

Estos hechos se refieren a eventos naturales que pueden tener consecuencias


jurídicas, como el nacimiento de una persona, su muerte, el paso del tiempo o los
fenómenos naturales. Estos sucesos no requieren ninguna acción previa por parte de
las personas, sino que se dan por sí mismos.

El nacimiento es un hecho jurídico natural que establece la existencia legal de una


persona y su adquisición de derechos y obligaciones. Por otro lado, la muerte marca el

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fin de la personalidad jurídica y puede dar lugar a la transmisión de bienes y
responsabilidades.

Además, el paso del tiempo puede generar consecuencias legales, como la


prescripción de derechos o la caducidad de ciertos procedimientos. Los fenómenos
naturales, como los desastres naturales, también pueden generar situaciones legales,
como la responsabilidad por daños o el ejercicio de seguros.

El envejecimiento es otro hecho jurídico natural que implica el paso del tiempo y puede
tener implicaciones legales en términos de derechos de pensión o jubilación. Los
fenómenos naturales, como terremotos o inundaciones, pueden generar situaciones
legales relacionadas con la responsabilidad civil, el seguro o la recuperación de bienes.

Hechos jurídicos humanos o voluntarios

Los hechos jurídicos humanos, también conocidos como hechos jurídicos voluntarios,
son eventos o acciones realizados por las personas de forma voluntaria con el
propósito de producir efectos legales. Estos hechos están regidos por las normas y
regulaciones jurídicas y son fundamentales para el funcionamiento de la sociedad y el
sistema legal.

Los actos jurídicos son un tipo de hecho jurídico humano que se manifiesta a través de
la voluntad de las partes involucradas. Estos actos pueden ser expresos, como la
celebración de un contrato, o tácitos, como el ejercicio de un derecho. La celebración
de un contrato es un ejemplo común de un acto jurídico que implica el acuerdo entre
dos o más personas y crea derechos y obligaciones recíprocos. Otro ejemplo de hecho
jurídico humano es el testamento, donde una persona expresa su voluntad sobre cómo
deben distribuirse sus bienes después de su muerte. La adquisición de la propiedad, el
matrimonio, la constitución de una sociedad o el ejercicio de un derecho son ejemplos
adicionales de hechos jurídicos humanos que tienen consecuencias legales.

Estos hechos jurídicos voluntarios son fundamentales para la creación y regulación de


relaciones jurídicas y el establecimiento de derechos y obligaciones. Los actos jurídicos
pueden tener diversos efectos legales, como la creación, modificación o extinción de

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derechos y obligaciones. Además, pueden generar responsabilidades legales en caso
de incumplimiento o violación de los términos establecidos.

Teorías que diferencian el hecho jurídico del acto jurídico

En el lenguaje normativo, se habla con frecuencia de hechos y actos jurídicos, dos


ideas que tienen distintos referentes en la petición de ley y que deben caracterizarse de
forma independiente.

Inicialmente, un hecho jurídico es cualquier ocasión, peculiaridad o actividad de


comienzo regular o humano, que los legisladores adecuados consideran que produce
impactos o resultados lícitos, como la creación, cambio o eliminación de privilegios y
compromisos. (Artículo de Equipo, 2021).

Al fin y al cabo, un hecho jurídico es todo aquello que puede suceder y tener resultados
lícitos, según lo que consagra algún reglamento, norma, costumbre o estatuto.

Los hechos jurídicos, por lo tanto, son de naturaleza gigantescamente cambiante, y se


agrupan por su punto de partida como regulares y humanas, contingentes
independientemente de si son el resultado de la acción humana directa. Las
manifestaciones lícitas son un tipo de verdad legítima, como veremos a continuación.
Ejemplos de manifestaciones legítimas son: el paso, la presentación de un individuo,
una declaración formal de guerra, un acontecimiento cataclísmico, un fiasco de
bienestar.

Por otra parte, los actos jurídica son hechos jurídicos, pero siempre deliberadas, que
tienen la expectativa de producir resultados legales según la ley, ya sea haciendo,
ajustando o anulando privilegios y compromisos.

Así pues, suelen ser consecuencia de la voluntad humana y requieren la presencia de


tres componentes fundamentales: al menos un sujeto que comunique su voluntad, un
objeto o motivo de la manifestación lícita y una relación legítima que los vincule.

De igual manera el acto jurídico es fundamental en el ámbito del derecho y se ha


definido de diversas formas en la teoría jurídica. A continuación, te presento algunas
definiciones y diferencias entre el acto y el hecho jurídicos:

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Definición de acto jurídico:

El acto jurídico se puede definir como una manifestación de voluntad que tiene por
objeto crear, modificar o extinguir derechos y obligaciones jurídicas. Es un acto
consciente y voluntario que busca producir efectos jurídicos en el mundo legal.

Diferencias entre el acto y el hecho jurídicos:

1. Voluntad: Mientras que el acto jurídico implica una manifestación de voluntad, el


hecho jurídico no está necesariamente ligado a la voluntad de las personas. Los
hechos jurídicos son acontecimientos que generan consecuencias legales sin la
intervención consciente de los individuos.

2. Intencionalidad: El acto jurídico requiere una intención específica por parte de quien
lo realiza, mientras que el hecho jurídico puede ocurrir de manera accidental o
involuntaria.

3. Creación de derechos y obligaciones: El acto jurídico tiene el propósito de crear,


modificar o extinguir derechos y obligaciones. Por otro lado, el hecho jurídico puede
tener consecuencias jurídicas, pero no necesariamente implica la creación o
modificación de derechos y obligaciones.

Teoría de la declaración de voluntad

La teoría de la declaración de voluntad es una teoría jurídica que busca diferenciar


entre el hecho y el acto jurídicos. Esta teoría se basa en que para que exista un acto
jurídico válido y eficaz es necesario que exista una declaración de voluntad por parte
de la persona que realiza el acto jurídico. Esta teoría se basa en la idea de que el acto
jurídico es una manifestación de voluntad que tiene como objetivo producir efectos
jurídicos, mientras que el hecho jurídico es una situación o suceso acontecido en la
realidad que también puede generar consecuencias jurídicas.

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El acto jurídico requiere de una declaración de voluntad por parte del sujeto que lo
realiza, es decir, una manifestación concreta de la voluntad que tiene como finalidad
producir un cambio en el mundo jurídico. Esta declaración de voluntad puede ser
expresa, mediante una manifestación verbal o escrita, o tácita, a través de hechos o
conductas que denotan la intención de realizar un acto jurídico.

Por otro lado, el hecho jurídico es una situación o suceso que no depende de la
voluntad de las personas, sino que surge de manera espontánea o natural. No requiere
de una manifestación concreta de la voluntad y puede ser independiente de la conducta
de las personas. Algunos ejemplos de hechos jurídicos son el nacimiento, la muerte, la
pérdida de capacidad jurídica, entre otros.

Es importante destacar que tanto el acto como el hecho jurídico pueden tener
consecuencias jurídicas, es decir, pueden generar derechos y obligaciones para las
personas involucradas. Sin embargo, la diferencia radica en que el acto jurídico se
origina a partir de la voluntad de las personas, mientras que el hecho jurídico no
depende de la voluntad de las misma

La teoría de la declaración de voluntad es fundamental en el derecho civil y en el


estudio de las relaciones jurídicas. Permite distinguir distintas categorías de actos
jurídicos y establecer las condiciones necesarias para su validez. Además, esta teoría
también es relevante en el ámbito del derecho contractual, ya que permite analizar si
existe o no un acuerdo de voluntades entre las partes.

En conclusión, la teoría de la declaración de voluntad es una herramienta fundamental


en el derecho para diferenciar entre el acto jurídico, que es una manifestación de
voluntad con el fin de producir efectos jurídicos, y el hecho jurídico, que es un suceso
acontecido en la realidad que también puede generar consecuencias jurídicas. Esta
distinción es esencial para comprender y aplicar correctamente las normas jurídicas.

Teoría del interés jurídico

La teoría del interés jurídico es una teoría utilizada en el ámbito del Derecho para
diferenciar entre el hecho y el acto jurídicos. Esta teoría sostiene que la diferencia
fundamental radica en el interés protegido por el ordenamiento jurídico.

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El hecho jurídico se refiere a aquel el hecho y el acto jurídicos. Esta teoría busca
establecer los criterios que permiten distinguir ambos conceptos y determinar cuándo
estamos frente a uno u otro.

En primer lugar, es importante comprender qué se entiende por hecho jurídico. Un


hecho jurídico es un suceso o acontecimiento que produce consecuencias jurídicas sin
la intervención de la voluntad humana. Es decir, ocurre de manera independiente a la
voluntad de las personas y puede generar derechos u obligaciones.

Por otro lado, el acto jurídico es una manifestación de voluntad destinada a producir
consecuencias jurídicas. En este caso, se requiere la intención consciente de una
persona para realizar ciertos actos que producirán efectos jurídicos. Ejemplos de actos
jurídicos son el contrato de compraventa, el testamento, la donación, entre otros.

La teoría del interés jurídico busca diferenciar ambos conceptos considerando el


elemento subjetivo de la voluntad. Según esta teoría, cuando existe un interés subjetivo
que se manifiesta a través de una voluntad orientada a producir efectos jurídicos,
estamos ante un acto jurídico. En cambio, si no hay una voluntad previa y deliberada
de una persona, sino que el suceso ocurre de manera natural o es causado por un
tercero, estamos ante un hecho jurídico.

Para determinar si nos encontramos ante un hecho o un acto jurídico, es fundamental


evaluar si existe una intención consciente y dirigida hacia la producción de efectos
jurídicos. Si esto se cumple, estamos frente a un acto jurídico. Si, por el contrario, no
hay una voluntad premeditada y el suceso ocurre independientemente de la voluntad
humana, estamos ante un hecho jurídico.

La distinción entre hecho y acto jurídico es relevante en el ámbito del Derecho, ya que
implica diferentes consecuencias jurídicas. Los actos jurídicos son aquellos que
generan derechos y obligaciones para las partes involucradas, mientras que los hechos
jurídicos pueden generar consecuencias legales, pero estos derivan de su propia
naturaleza y no dependen de la voluntad de las personas.

En resumen, la teoría del interés jurídico busca diferenciar entre hecho y acto jurídicos
tomando en consideración la presencia o ausencia de una voluntad previa y consciente

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de producir efectos jurídicos. Esta distinción es fundamental para determinar la
naturaleza jurídica de una situación y aplicar las normas correspondientes.

Teoría de los elementos negativos

La teoría de los elementos negativos es una corriente jurídica que busca diferenciar
entre el hecho y el acto jurídicos. Esta teoría sostiene que existen ciertos elementos
que hacen que un acto pueda considerarse como acto jurídico, y que su ausencia o
negación de estos elementos daría lugar a un acto jurídico. Para comprender esta
teoría, es necesario entender primero qué se entiende por hecho y acto jurídicos.

El hecho jurídico es un acontecimiento que produce consecuencias de tipo jurídico, sin


que sea necesario la voluntad de una persona. Estos hechos pueden ser naturales,
como el nacimiento o la muerte, o pueden ser causados por la acción de terceros,
como un accidente de tráfico.

Por otro lado, el acto jurídico se refiere a una manifestación de voluntad destinada a
producir efectos jurídicos. En este caso, es necesario que haya una intención por parte
de una persona de crear, modificar o extinguir derechos y obligaciones.

La teoría de los elementos negativos establece que hay determinados elementos que
permiten distinguir un hecho jurídico de un acto jurídico. Estos elementos negativos
son:

1. Ausencia de voluntad: En el hecho jurídico no existe una intención o voluntad por


parte de alguien para producir efectos jurídicos. Es decir, estos hechos no dependen de
la voluntad de las personas involucradas, sino que ocurren de forma objetiva y sin
control humano.

2. Irrelevancia de la voluntad: En el hecho jurídico, la voluntad de las personas no tiene


importancia, ya que los efectos jurídicos se producen de forma automática,
independientemente de lo que las personas deseen o no.

3. Imposibilidad de control: Los hechos jurídicos son sucesos que escapan del control
de las personas. No se pueden evitar o modificar mediante la voluntad humana. Por

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ejemplo, un terremoto o una inundación son hechos jurídicos que no pueden ser
controlados por las personas.

Es importante destacar que la teoría de los elementos negativos no niega la existencia


de una relación entre el hecho y el acto jurídicos. Ambos pueden estar interconectados
y pueden influir en la creación de derechos y obligaciones. Sin embargo, esta teoría
busca resaltar las características y diferencias entre ambos conceptos.

En conclusión, la teoría de los elementos negativos trata de diferenciar entre el hecho y


el acto jurídicos, enfatizando la ausencia de voluntad, la irrelevancia de la voluntad y la
imposibilidad de control en los hechos jurídicos. Esta teoría es importante para
entender cómo se generan los efectos jurídicos en distintas situaciones y para
establecer las responsabilidades correspondientes.

Teoría mixta o ecléctica

La teoría mixta o ecléctica es una corriente del pensamiento jurídico que busca
diferenciar el hecho jurídico del acto jurídico. Esta teoría surge como una respuesta a
las limitaciones de las teorías tradicionales, como la teoría subjetiva y la teoría objetiva.

En la teoría del acto jurídico. Esta teoría argumenta que existen dos categorías
diferentes en el ámbito legal: los hechos y los actos jurídicos.

El hecho jurídico se refiere a cualquier suceso o acontecimiento que tiene relevancia


jurídica sin necesidad de la voluntad humana. Un ejemplo de hecho jurídico es un
terremoto que causa daños materiales a las propiedades de las personas. En este
caso, el terremoto es un hecho jurídico porque tiene efectos legales, pero no ha sido
causado o generado por la voluntad de alguien.

En cambio, el acto jurídico está relacionado con las acciones voluntarias de las
personas que tienen consecuencias legales. Para que se considere un acto jurídico
válido, deben cumplirse ciertos requisitos, como la capacidad legal de las partes
involucradas, la manifestación de voluntad libre y consciente, y el cumplimiento de las
formalidades establecidas por la ley. Un ejemplo de acto jurídico es la compraventa de

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una propiedad, donde ambas partes han acordado voluntariamente llevar a cabo la
transacción y cumplen con los requisitos legales correspondientes.

La teoría mixta o ecléctica busca distinguir entre estos dos conceptos y establecer una
clara diferencia entre ellos. Según esta teoría, los hechos jurídicos no están sujetos a la
voluntad humana y pueden tener efectos legales, mientras que los actos jurídicos están
vinculados a la voluntad humana y deben cumplir con ciertos requisitos para ser
válidos. Además, la teoría sostiene que los hechos jurídicos pueden generar
consecuencias legales para las partes involucradas, aunque no hayan sido causados
por su voluntad.

Esta distinción resulta fundamental en el ámbito jurídico, ya que permite analizar y


clasificar los diferentes fenómenos y situaciones que pueden surgir en la vida social y
sus implicaciones legales. Al diferenciar entre hecho y acto jurídicos, se pueden
establecer las responsabilidades y consecuencias legales correspondientes de manera
más precisa y justa.

En resumen, la teoría mixta o ecléctica busca diferenciar el hecho jurídico del acto
jurídico. Mientras que los hechos jurídicos se refieren a sucesos o acontecimientos con
repercusiones legales sin la intervención de la voluntad humana, los actos jurídicos son
acciones voluntarias que tienen consecuencias legales y deben cumplir con ciertos
requisitos para ser considerados válidos. Esta distinción es fundamental para el análisis
y aplicación del derecho en la sociedad.

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Conclusión

Cada hecho será un evento u ocurrencia específica que ocurrirá en su propio contexto.
Los hechos positivos y los hechos negativos sólo pueden realizarse a través de la
realización de eventos, así como toda norma presupone hechos jurídicos para regular
la conducta humana. Se puede observar que los hechos jurídicos se refieren a todas
las cosas que pueden cambiar y transformar el mundo externo objetivo, es decir, la
fenomenología del mundo jurídico, con cuya ayuda pueden generarse, ajustarse,
cambiarse y eliminarse derechos u obligaciones en las relaciones jurídicas de dos o
más partes. Por tanto, los hechos jurídicos son sus tipos y su legislación. Entonces
será legal porque tendrá consecuencias legales (consecuencias legales relacionadas
con la ley)

Por otro lado, un hecho es ilegal, es decir, es ilegal, si no tiene fuerza legal, es decir, es
de poca importancia para la ley, si una mosca pasa volando en invierno o en verano, es
decir, disminuye la decencia de las personas, lo cual se manifiesta en las relaciones
sociales, o si llueve un día, o si cae un meteorito en un río.

De estos últimos hechos causados por la naturaleza, la doctrina los llama naturales o
fortuitos, ya que nunca interviene la voluntad del hombre. El denominador común entre
los incidentes voluntarios y forzados es la legalidad. En definitiva, los hechos jurídicos
son aquellos hechos que pueden ser fruto de la propia naturaleza o del hombre, pero
cuya influencia en el campo del derecho será trascendente, dando lugar a un proceso
jurídico o jurídico común a través de diversos fenómenos que modifican el mundo
jurídico.

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Bibliografía

Equipo editorial, E. (07 de 09 de 2021). concepto. Acto y hecho jurídico:


https://concepto.de/acto-y-hecho-juridico/#:~:text=Diferencia%20entre%20hechos%20y
%20actos%20jur%C3%ADdicos,-La%20diferencia%20fundamental&text=Si%20dicho
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BOBBIO, Norberto. Teoría General del Derecho. Debate, Madrid, 1993.

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