Tema 4: el estatuto del empresario mercantil: la inscripción en el registro

mercantil.
I. Consideraciones preliminares: concepto y efectos del registro mercantil. La
organización y fundamentación del registro mercantil.
El registro mercantil, es un registro público al cual tendrán accesos sujetos que lleven a cabo una actividad
mercantil.
Hay que inscribirse porque el llevar a cabo una actividad económica hace que los terceros deban conocer el
contenido de esa actividad. La actividad económica de ese empresario hace obligatorio someterse a un
registro.
Existe un registro mercantil central, con sede en Madrid; junto a el existe una descentralización, cada
capital de provincia cuenta con un registro mercantil. Además, en algunas ciudades cuentan igualmente con
otra sede económica (Ej.: Santiago).
¿Dónde se publican? – tienen un amplio soporte en el cual se pueden insertar (Ej.: BORNE, periódicos
oficiales, en el Registro Mercantil). Lo que se publica en este registro puede tener distinto alcance:
1) Hay momentos que se publica para que los terceros puedan conocer datos de los sujetos
sometidos a inscripción (esto un uso del registro mercantil).
2) Aquellos datos que acceden al registro, que ya se tienen conocidos por los terceros 1. Aquellos
actos que pueden ser oponibles a los terceros por el mero hecho de estar publicados.
El objeto puede ser amplio, fundamentalmente es de publicidad de los empresarios (persona física); las
sociedades mercantiles; y los hechos y actos relativos de esos sujetos.
No tienen la misma importancia, porque la publicidad de los empresarios, salvo excepciones, es voluntario.
Mientras que la de las sociedades mercantiles es obligatoria.

Institución dirigida a terceros (presunción legal de conocimiento). Existen 2 instrumentos técnicos de

publicidad: RM (territorio) y BORME.

- El sistema registral mercantil español es descentralizado.

- RM es una Oficina pública radicada en cada capital de provincia.
- Dispone de un sistema de hoja personal (art. 3 RRM).
- Cancelación de los asientos se hace por el “cierre definitivo” de la hoja. Entre ambos
instrumentos, el RM Central (art. 17.3 C.Com y 279 RRM).
Art. 16.1 C.Com – es un registro tanto de personas como de actos. Pero con el paso del tiempo se
aprobó un registro (mercantil de inmuebles) que saco del RM todas las denominadas “cosas” (último
apartado del tema).
II. Caracteres del RM. Sujetos y actos inscribibles. Especial referencia a los principios
registrales.
Al RM podrán acceder tanto sujetos como actos:

- Sujetos – tienen acceso al RM los enumerados en el art. 81 RRM. Son aquellos sujetos que de
manera obligatoria, su inscripción debe constar en el RM, porque hay un elemento (empresarios
individuales), cuya inscripción tiene carácter voluntario, quedaba a merced del propio empresario
acceder o no al RM. Fuera de esa excepción todos tienen obligación de inscribirse.

- Actos – el reglamento prevé que los actos podrá varias si se refieren a las hojas de los empresarios
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Nos referimos a terceros de buena fe.

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 individuales (art. 87 RRM: 1) identificación de ese empresario; 2) poderes generales que este haya
atribuido; 3) apertura y cierre de sucursales; 4. Declaraciones judiciales que le afecten; 5) concretas
capitulaciones matrimoniales que afecten o puedan afectar),
O a las hojas de los empresarios sociales (art. 94 RRM: 1) constitución de la sociedad;
2) modificación de la escritura, estatutos sociales; 3) modificaciones estructurales; 4) apertura y cierre
de sucursales; 5) resoluciones judiciales que afecten al empresario social).

- Hasta la reforma podían acceder “cosas”, sin embargo, ahora tiene lugar su inscripción en otro registro
(Registro de Bienes Muebles).
Distinción entre “Publicidad Formal” y “Publicidad Material”.
 Publicidad formal – mera posibilidad de conocer el contenido del registro, a través de un certificado
expedido por el registrador (nota simple) en la que se detallan los datos solicitados (art. 12 RRM).

 Publicidad material – se refiere a la eficacia que despliega la inscripción registral. Se obtendrá, primero
con la inscripción registral; y segundo contando con la publicación en el BORME. A su vez habrá que
distinguir entre:
1) Publicidad material positiva – solo será oponibles los actos inscritos y publicados. El reflejo
de esta se encuentra en el art. 9 RRM.
2) Publicidad material negativa – se refiere a que no se podrá alegar el acto no inscrito por
quien esté obligado a efectuarla, procurarla (art. 4.2 RRM).
Tienen especial trascendencia los denominados “principios registrales”, previstos tanto en el RRM como
en el C.Com, por ello para algunos encontramos una doble regulación. Estos principios vienen a recoger el
funcionamiento del RM, de ahí que un sector de la doctrina los califique como el fundamento de la
actividad registral.
1) Principio de Titulación Pública (art. 5 RRM y 18.1 C.Com) – al RM solo acceden
documentos públicos.
2) Principio de legalidad (art. 6 RRM y 18.2 C.Com) – los registradores calificarán tanto la
legalidad de los documentos que accedan, como la capacidad de las personas que los otorgan,
bajo su exclusiva responsabilidad (Arts. 58 a 65 RRM se establece el proceso de calificación).
3) Principio de legitimación (art. 7 RRM) – en base a este principio, se prevén que lo que
establece el RM va a ser valido y exacto. Aquel que comercialice confiando en el registro
estará amparado por el mismo. Como existe una presunción de validez se va a defender a
aquel tercero (de buena fe) que realice una transacción comercial amparándose en el registro.
4) Principio de Fe pública (art. 8 RRM y 20.2 C.Com) – relacionado directamente con el
anterior. En base a este se establece que la declaración de nulidad no afectará a los terceros de
buena fe.
5) Principio de prioridad (art. 10 RRM) – recoge un axioma de anterioridad. En base a este
principio se prevé que el documento que acceda al RM en primer lugar tendrá carácter
preferente frente a aquellos que accedan con posterioridad.
6) Principio de Tracto Sucesivo (art. 11 RRM) – para poder inscribir actos, contratos, de un
determinado sujeto es necesario la previa inscripción de dicho sujeto. Esto hace referencia a
que para inscribir una modificación estatutaria es necesario que este inscrito con anterioridad.
Hay una salvedad respecto a este principio y tiene que ver con el empresario individual. En
caso de que no quiera inscribirse las consecuencias que tendrá es que no se podrá acceder a su
hoja personal ningún acto, en ese caso el código prevé un método.

III.Las funciones auxiliares de RM.

La trascendencia de este punto es que el RM, más allá de las funciones registrales, posee una serie de

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funciones auxiliares. Con el paso de los año, con la promulgación del C.Com se le ha ido introduciendo
funciones, a través de diferentes leyes se le han introducido funciones añadidas al RM.
- Legalización de los libros contables de los empresarios (art. 329-227 RRM): Tradicionalmente
esta competencia no la tenía el RM, esta función se encargaba a los Organos judiciales. Sin embargo
tras una reforma del C.Com, cuando un empresario quiere legalizar sus libros deberá hacerlo en su RM
correspondiente, el de su domicilio. Esos libros obligatorios son: el libro de cuentas anuales, y el libro
viejo. El empresario jurídico, además de estos, deberá llevar otros.
Esta solicitud tendrá que ir con un contenido obligatorio, identificación del empresario, los libros que
pretende legalizar (relación de los libros pertinentes), la fecha de apertura y cierre de los libros
legalizados, la fecha de la solicitud en la que se solicita dicha legalización.
Sin que se haya producido legalización expresa, existe una ley (emprendimiento y externalización) que
permite la posibilidad de legalizar los libros contables de manera telemática. Pero no existe una ley
derogatoria en ella, pero de su contenido habrá que entender una derogación tácita de esos artículos
puesto que se facilita la vía telemática para la legalización de los libros; seguirá siendo en el RM.

- Nombramiento de expertos independientes (art. 67 y 76 LSC; 338-349 RRM):

Hay veces, en la ley de sociedad de capital (LSC), que en el texto regulador es frecuente el recurrir a
una figura para asegurar, dar fe, a algunas valoraciones.
Cuando la aportación es no dineraria han de estar valoradas por un experto independiente. En la
Sociedad Limitada se puede sustituir el nombramiento de experto por un sistema distinto de
responsabilidad aportante.
Arts. 228-349 RRM establecen el procedimiento del nombramiento del experto.

- Nombramiento de auditores de cuenta (art. 265 LSC y 350-364 RRM):

Esta función alcanza su importancia porque la LSC obliga a que la contabilidad de un determinado
empresario debe estar sometida a una verificación contable, una auditoria. La obligación de que toda
sociedad cuente con ese proceso hace que toda sociedad tenga que tener sus cuentas auditadas. Hay
veces que el auditor no es desigando, bien porque la persona designada no cumpla o la junta general
no lo designe, se prevé la posibilidad que dichos auditores sean asignados por el RM.
Hay sociedades que dado su volumen estan exceptuadas de la obligación de auditar sus cuentas.
Aquellas sociedades que cumpliendo algunos requisitos, no es necesario auditarlas y no hace falta
nombrar al auditor.

- Depósito y publicidad de los documentos contables (art. 279 LSC; y 365 y ss. RRM): Los
administradores de cualquier sociedad mercantil estan obligados a dar publicidad a sus cuentas
anuales, para ello las depositarán en el RM de su domicilio. Esta obligación está sometida en un
plazo, tendrán que ser depositas dentro del mes siguiente al que hayan sido aprobadas. Las cuentas de
una sociedad deben ser aprobadas, y además que se depositen al mes de haber sido aprobadas. Será el
RM el encargado de depositar, y dar publicidad, a esos documentos contables.

- Nombramiento del experto sobre acuerdos de refinanciación preconcursal:

Hay una serie de acuerdos, que dada su complejidad es necesario que exista un informe justificativo de
un experto ese experto será nombrado por el registrador mercantil.

- Convocatoria de las juntas generales de las sociedades de capitales (art. 169 LSC): Posibilidad de
la convocatoria de la junta en la sociedad mercantil. Las Juntas Generales tienen que ser convocadas
para que los socios tengan la posibilidad de concurrir.
Para que se celebre esa junta, y se pueda desarrollar su asamblea se debe convocar. Esta convocatoria,
por regla general, será realizada por los administradores.
Existen supuestos excepcionales, como que el administrador no quiera convocarla, en ese caso se
acude a otro ente, el registrador mercantil. Esta posibilidad ha sido la más reciente de las nuevas

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 funciones (Ley jurisdicción voluntaria, la que ha regulado esta función).

IV. El Registro de Bienes Muebles.

1. Concepto y régimen jurídico.
2. Regulación y secciones.

Se regula por un RD de 1828/1999.

¿Qué accede al registro de bienes muebles? – al registro de bienes muebles accede: titularidades y
gravámenes sobre bienes muebles. El encargado de la llevanza son los registradores mercantiles. El objeto
de este registro es dar publicidad tanto de la propiedad como de las cargas. Se estructura en 6 secciones:
1) Buques y aeronaves.
2) Automóviles.
3) Maquinaria industrial.
4) Garantías reales.
5) Otros bienes muebles registrales.
6) Registro de condiciones generales:
7)
 Concepto Condición General Contratación – se trata de una cláusula que ha sido
insertada en el contrato que no ha sido negociada por ambas partes; una de ellas la ha
impuesto a la otra parte. No significa que tenga que ser aceptada de manera obligatoria,
solo que no ha sido negociada individualmente.

 Carácter voluntario de la inscripción de las CGC – El hecho de que en el Registro

Bienes Muebles exista una condición de estos bienes, no implica que tenga que estar
inscrito obligatoriamente.
Carácter obligatorio de la inscripción de las sentencias - Lo que si es obligatorio es que
si sobre una de las condiciones de contratación se haya pronunciado un Juez por la
nulidad por ser abusiva, entonces si es obligatorio que acceda al registro porque al
publicarse esa sentencia tendrá una eficacia para los demás procedimientos.

 Eficacia de una sentencia.