Está en la página 1de 4

Nerea González Carrilero GRUPO E

REDACCIÓN:1

La Constitución de 1812, también conocida como la "Constitución de Cádiz" o la


"Constitución Liberal", es una de las primeras constituciones españolas. Fue
promulgada el 19 de marzo de 1812 durante la época de la Guerra de la Independencia
Española contra las fuerzas napoleónicas.

La Constitución de Cádiz de 1812 está estructurada en 384 artículos agrupados en 10


títulos que contemplan las siguientes materias

El título I De la nación española y de los españoles. El Título II Del territorio de las


Españas y los españoles. El título III de las cortes, encontramos también el título IV del
rey. El título V De los tribunales y de la administración de justicia en lo civil y en lo
criminal. El título VI del gobierno interior de las provincias y de los pueblos. El título
VII de las contribuciones y el título VIII de la fuerza militar nacional. El título IX de la
instrucción pública y el título X de la observancia de la constitución, y modo de
proceder para hacer variaciones en ella.

Fue una de las primeras constituciones promulgadas en Europa y en el mundo. Esta


constitución estableció una serie de derechos y principios fundamentales que fueron
precursoras de las futuras constituciones y que reflejaban las ideas de la Ilustración y los
ideales liberales de la época. Algunos de los derechos reconocidos en la Constitución de
1812 incluyen la igualdad ante la ley, libertad de expresión, de industria y de comercio
así como también la de culto. Establece la separación de podres en ejecutivo, legislativo
y judicial, con el objetivo de garantizar un sistema de control y equilibrio. Y también la
soberanía nacional, establecía que la soberanía residía en la nación, y no en el monarca,
marcando un cambio importante en la estructura del poder político.

La Constitución de 1837 fue una de las Constituciones que se promulgaron durante el


período conocido como el Trienio Liberal en la historia de España. Esta Constitución
introdujo importantes cambios en la organización política del país. Esta CE consta del
La Constitución Española de 1837, también conocida como la "Constitución de la
Regencia de María Cristina", consta de varios títulos que establecen la organización del
Estado y los derechos de los ciudadanos. Estos son Título I: De la Nación Española,
Título II: De la Religión del Estado Título III: De la Regencia Título IV: De las Cortes
Título V: Del Poder Ejecutivo Título VI: Del Poder Judicial Título VII: De la Milicia
Nacional Título VIII: De los Municipios, Título IX: De las Reformas de la Constitución
y Título X: De las Garantías de la Constitución.
Algunos de los derechos y principios reconocidos en la Constitución de 1837 incluyeron
la ciudadanía española y se establecieron requisitos y procedimientos para la
adquisición de la ciudadanía. Se estableció el principio de igualdad ante la ley,
proclamando que todos los ciudadanos eran iguales en derechos y obligaciones sin
distinción de clase social. La Constitución garantizaba la libertad de expresión y de
imprenta, aunque con ciertas limitaciones. Se reconocía la libertad de culto, permitiendo
a los ciudadanos practicar la religión de su elección sin restricciones. Protegía el
derecho a la propiedad privada, aunque con ciertas limitaciones en caso de necesidad
pública.
Se reconoció el derecho a la educación y se estableció la obligación del Estado de
promover la instrucción pública. También la división de poderes en la que se reconocían
el Poder Legislativo, el Poder Ejecutivo y el Poder Judicial. Se estableció un sistema de
representación parlamentaria, con la creación de las Cortes Generales como órgano
legislativo. La Constitución incluía una declaración de derechos individuales, aunque
estos derechos estaban sujetos a limitaciones y regulaciones legales.

La Constitución de 1845 es la carta magna que estuvo en vigor en España durante el


reinado de Isabel II. Esta Constitución estableció una monarquía constitucional y
reconoció una serie de derechos y libertades para los ciudadanos españoles. Esta se
organiza La Constitución Española de 1845 fue una de las constituciones promulgadas
durante el reinado de Isabel II de España. Esta constitución constaba de varios títulos
que establecían la organización del Estado y los derechos de los ciudadanos. Los títulos
principales de la Constitución de 1845 son Título I: De la Nación Española, Título II:
De la Religión Católica, Título III: Del Poder Supremo, Título IV: De las Cortes
Generales, Título V: De las Cortes del Reino, Título VI: Del Senado, Título VII: Del
Poder Ejecutivo, Título VIII: Del Poder Judicial, Título IX: De los Ciudadanos, Título
X: De las Diputaciones Provinciales, Título XI: De los Ayuntamientos, Título XII: De la
Milicia Nacional, Título XIII: De la Reforma de la Constitución y Título XIV: De la
Garantía y Ejecución de la Constitución
Algunos de los derechos reconocidos en la Constitución de 1845 incluyen la igualdad de
todos los españoles ante la ley, así como la inviolabilidad de la propiedad privada y la
libertad personal. También se reconocía el derecho a la seguridad personal y la
prohibición de detenciones arbitrarias. La Constitución de 1845 establecía la libertad de
expresión y prensa, aunque con algunas limitaciones en casos de difamación o
incitación a la violencia. Se reconocía la libertad de culto y religión, aunque se
establecía que la religión católica era la religión del Estado.
La Constitución establecía un sistema parlamentario en el que se reconocía el derecho
de los ciudadanos a elegir a sus representantes a través de elecciones. Sin embargo, el
sufragio estaba restringido a un número limitado de ciudadanos, ya que se requería un
cierto nivel de propiedad o ingresos para poder votar. Se garantizaba la propiedad
privada y se establecían limitaciones para su expropiación por parte del Estado.
La Constitución española de 1869, que estuvo en vigor durante la Primera República
Española, reconoció una serie de derechos y libertades fundamentales para los
ciudadanos. Algunos de los derechos reconocidos en esta Constitución incluyen el
derecho a la igualdad, el derecho a la libertad personal y a la libertad de expresión. Esta
constitución reconoce también el derecho a la libertad de religión, libertad de culto y la
separación entre la Iglesia y el Estado.
Reconocía la propiedad privada como un derecho fundamental, aunque también
establecía ciertas limitaciones en el interés público. Derecho a la educación: Reconocía
la importancia de la educación y la libertad de enseñanza. El Derecho a la inviolabilidad
del domicilio: Prohibía las entradas y registros en el domicilio de una persona sin una
orden judicial previa.
Se establecía el sufragio universal para los ciudadanos varones mayores de 25 años y
garantizaba el derecho a un juicio justo y a la asistencia letrada. Reconocía la libertad de
asociación y el derecho a la huelga, así como la regulación de las condiciones laborales.
Es importante destacar que esta Constitución estuvo en vigor durante un período
relativamente corto debido a la inestabilidad política que caracterizó a la Primera
República Española, que duró desde 1873 hasta 1874, cuando fue restaurada la
monarquía. Por lo tanto, estos derechos y garantías no tuvieron un impacto duradero en
la historia constitucional de España hasta que se promulgó la Constitución de 1931, que
estableció una nueva república y consolidó algunos de estos derechos.
La Constitución de 1931 fue la carta magna de la Segunda República Española, que
estuvo en vigor desde 1931 hasta 1939, cuando fue interrumpida por el estallido de la
Guerra Civil Española y la posterior dictadura de Francisco Franco. Esta constitución
introdujo una serie de derechos y reformas significativas en comparación con la
constitución anterior de 1876, que estaba en vigor bajo la monarquía.
Esta constitución cuenta con una serie de derechos y libertades individuales como la
igualdad ante la ley, la libertad de expresión y de culto. Se reconocieron derechos
laborales así como derechos a la mujer y políticos y sociales. Se llevaron a cabo
esfuerzos por mejorar la educación, la sanidad y las condiciones de vida de la
población.
La Constitución Española de 1978, promulgada el 6 de diciembre de ese año, reconoce
una amplia gama de derechos y libertades fundamentales para los ciudadanos de
España. Estos derechos están consagrados en su Título I, que se titula "De los derechos
y libertades fundamentales". La constitución de 1978 reconoce algunos derechos como
el derecho a la Vidal la integridad física y moral. Se protege también la libertad y la
seguridad. La libertad de expresión, de religión y el derecho a la igualdad. El derecho de
reunión y asociación, derechos políticos y derecho a la educación y propiedad privada
así como intimidad e inviolabilidad del domicilo. Es importante tener en cuenta que la
Constitución también establece limitaciones y restricciones a algunos de estos derechos
en ciertas circunstancias, con el fin de garantizar el orden público y la seguridad.
Además, la jurisprudencia y las leyes posteriores han desarrollado y aclarado estos
derechos en detalle.
El Fuero de los Españoles de 1845, también conocido como la Constitución de 1845,
fue una ley fundamental en España durante el reinado de Isabel I y por tanto de un
contexto histórico específico. Este documento estableció algunos derechos y garantías
para los ciudadanos españoles de la época. Algunos de los derechos reconocidos en el
Fuero de los Españoles de 1845 incluyen son el derecho a la igualdad ante la ley, la
libertad personal y de expresión y prensa, la libertad de asociación y reunión y derecho
de la propiedad. Se reconocía la religión católica como la religión oficial del Estado,
aunque se permitía la práctica de otras religiones en privado
En conclusión, la historia constitucional de España se ha caracterizado por la variación
en el poder de los moderados y los liberales. Es por ello que las constituciones se
caracterizan por el cambio pendular entre unas y otras habiendo algunas más liberales
como la de 1812 y otras más tradicionales como la Constitución de 1845.
Podemos encontrar semejanzas entre las constituciones de 1812, 1837, 1869 y la de
1978 en el aspecto de la garantía y reconocimiento de derechos fundamentales y
libertades públicos. Estas semejanzas se deben al marco histórico con tendencia liberal
en el que son promulgadas.
Por otro lado, las CE de 1845 enmarcada en la Década Moderada es una constitución
más tradicional y conservadora. Esta coindice con el Fuero de los Españoles de 1845.

También podría gustarte