Leveling... RL - Harem 151 - Fin

Mundo Ocs – Novelas Ocs
Tabla de contenido
Capítulo 151 El Dragón Negro
Capítulo 152 Soy Lizanna
Capítulo 153 Habitaciones
Capítulo 154 Louise lo quiere todo [R-18]
Capítulo 155 Una posición memorable [R-18]
Capítulo 156 El proyecto de Leon
Capítulo 157 Un ejército problemático
Capítulo 158 Ella es natural [R-18]
Capítulo 159 Una Posición Memorable 2 [R-18]
Capítulo 160 ¡Vamos al reino de los enanos!
Capítulo 161 El Señor de la Muerte
Capítulo 162 Planes
Capítulo 163 Comienza el caos
Capítulo 164 La estrella de nueve colas
Capítulo 165 El emperador humano ha vuelto
Capítulo 166 El dragón y el corazón de Louise
Capítulo 167 Confía en mí
Capítulo 168 ¡Reunión de paz!
Capítulo 169 Ella es una amenaza que debe ser eliminada
Capítulo 170 Preferiría morir antes que seguir el destino
Capítulo 171 El fénix de hielo
Capítulo 172 Reunión

Capítulo 173 Un hombre menos
Capítulo 174 La verdad
Capítulo 175 El Dragón del Caos vs. El emperador humano
Capítulo 176 Vampiresa legendaria
Capítulo 177 Rodeado
Capítulo 178 Sin brazos
Capítulo 179 Muerto
Capítulo 180 El final

Capítulo 151 El Dragón Negro

Capítulo 151: El Dragón Negro
"¡Hola, Celes! ¡Lo tienes, niña! ¡Regresa al negocio, verdad! ¡Sabía que sobrevivirías al ataque de ese imbécil!
Veo que solo has perdido tus niveles, pero volver a tu pico será pan comido con Yo alrededor y tu talento... De
todos modos, escuché algunos rumores. Viniste aquí con un hombre, ¿no? ¡Finalmente, mi niña! Nada en contra
de las lesbianas, pero tu cuerpo humeante necesita buenas bofetadas varoniles y una polla caliente dentro de
ti, golpeando ese viejo como el vientre de mierda".
¿Qué carajo? Louise pensó mientras creía que sus orejas de zorro le mentían.
Pero, ¿cómo podrían los oídos legendarios dejar de grabar lo que la voz fuerte que amenazaba con romper las
ventanas le acababa de decir a la vampiresa? ¡No estaba equivocada, y alguien tan descarado y salvaje había
llegado a las puertas de su nueva casa!
Mientras Celes se quedó sorprendida porque no esperaba ver a la mujer lobo familiar, Louise se acercó a ellos
y miró desde un lado, con ojos fríos.
"Oh, realmente eres tú..." Con los ojos en el rostro de Louise, la mujer loba expresó sus pensamientos
descuidadamente. Luego se volvió hacia Celes y le susurró al oído. "Terminaste con un verdadero desastre. Me
estoy interesando cada vez más en tu hombre que puede domar a esa mujer loca".
"Estoy más loco que ella". Celes murmuró, desconcertando a su amiga.
Louise sonrió, consciente de algunos fragmentos de la confesión de Leon a la vampiresa. "¿Eres?" Ella insinuó
eso con sus cejas levantadas, haciendo que la vampiresa la mirara.
Louise no se detuvo y giró hacia la mujer lobo. "¿Es cierto que a las mujeres lobo les gusta más por detrás?
¿Llegas al clímax con tus parejas si te lo hacen al aire libre?"
La mujer lobo curvó sus labios en una amplia y exultante sonrisa. "Me preocupaba que fueras frío e inaccesible,
¡pero puedo ver que compartimos algunas olas! ¡Ja! Sí, nos encanta hacerlo al aire libre. Es aún mejor si es
arriesgado, eso exactamente hace que nos corramos en baldes. nuestra posición favorita, pero también nos
encanta acostarnos boca arriba con las extremidades dobladas como perros, agitándolas y esperando que
nuestras parejas nos bañen con sus semillas, pero eso es solo en una fase de luna llena cuando nuestros
machos están llenos de energía. Por lo general, los apretamos tanto que solo pueden correrse una o dos veces.
Los juegos previos son imprescindibles cuando tienes un arranque espléndido. Meh, eso ya lo debes saber".
Louise y Celes no respondieron a estas palabras.
"Tus expresiones me preocupan... No me digas-" La mujer lobo comenzó una nueva oración con tal
incredulidad que Celes tomó su mano, la hizo entrar y cerró las puertas.
La vampiresa señaló la casa vacía. "Está vacío, así que siéntate en el suelo".
"Y preséntate. Soy Louise". Louise descruzó los brazos y estiró la mano derecha hacia adelante.
La mujer lobo nunca en su vida había esperado estrechar esa pequeña pero peligrosa mano. "Liz. El nombre
real es Lizanna, pero suena tan femenino y diferente a mí que nadie puede usar ese nombre, ni siquiera tú. Solo
llámame Liz".
"Justo." Louise no tenía ganas de discutir con esa mujer porque la brecha de nivel seguramente era un
concepto problemático.
Y aunque Liz entendió eso, no se atrevió a ser altiva en presencia de la existencia cuyo apodo no quería decir
en voz alta. No fue como si eso también se confirmara. Además, el nivel de Louise era mucho más bajo que
antes, pero una existencia como la suya seguramente podría causar demasiados problemas en el futuro.
No valía la pena correr el riesgo de discutir demasiado.
Liz también sintió que podía hacerse amiga de ese astuto.
Dejó caer casualmente su pesado trasero en el suelo.
Y también Celes y Louise, ya que tampoco tenían sillas.
"¿Por qué estás en este gremio?" Celes comenzó la charla.
Liz bostezó y se encogió de hombros. "Después del ataque del Emperador Humano, nuestro continente no es
realmente un buen lugar para vivir. Sus antiguos aliados se arraigaron allí peor que los parásitos. Cuando este
idiota atacó nuestros reinos, usaron su guerra para hacer conexiones con nobles corruptos, atraparlos. de su
lado y prometió seguridad, luego dibujó un contorno de los castillos reales y los pasadizos ocultos. Todo es un
desastre, pero The Vampire and The Werewolf Kingdoms, como muchos otros, son marionetas ahora. Ni
siquiera quiero quedarme allí y esperar un buen momento para devolver el golpe. ¡He vivido lo suficiente como
para saber que debo disfrutar mi vida y obtener una nueva fama en un nuevo continente!
Si bien hablar sobre su razón de estar aquí aburría a Liz, ya que había hablado mucho sobre eso, los asuntos
íntimos y la construcción de su nueva fama fue uno de los temas que la emocionó.
La vampiresa se tomó un tiempo para aceptar la verdad.
Celes se mordió los labios y luego preguntó débilmente. "¿Alguna noticia sobre mis hermanas de juramento?"
"Lamentablemente no." Liz negó con la cabeza. "Si sobrevivieron como tú, deben ser leales a Veronica y
conspirar para devolver la libertad a su reino. Puedo verlos trabajando junto con mi hermano, cuyo deseo es el
mismo. Nunca me cuenta sobre su progreso porque sabe que yo Eso no te importa un carajo. Demasiado para
ayudar a los demás... Participó en la batalla final contra El Emperador Humano... ¿Y ahora qué? ¿Dónde está la
gente para ayudarnos? ¡Ja! ¡Mi hermano es un idiota!
Louise intervino. "Te pareces a Leon, aunque él no pasó por nada de eso".
"¿Leon? ¡Sonabas tan dulce en este momento que ese debe ser el nombre del padre de Else! Es bueno saber que
él no está jugando a la democracia y otras mierdas. ¡Caíste en buenas manos, Celes!" Lizanna siguió asintiendo,
alabando a Leon.
Louise también se sentía bien.
Celes susurró. "¿Diamante?"
"Tu familia está viva, pero seguramente son marionetas". Liz miró hacia el pasado. "Ha pasado mucho tiempo
desde la guerra final... Tus nuevas generaciones nunca vieron el poder y la fama de los vampiros. Los logros
pasados y anteriores no son más que una ilusión. Necesitas más que un buen momento para contraatacar... Te
das cuenta, ¿verdad? ?"
Al ver como la mujer lobo de repente se volvía callada y vulnerable, Celes se puso seria y respondió con mucha
más emoción en su voz. "Entiendo que... Tú no tienes la culpa".
Louise también vio eso y agregó sus cinco centavos. "No tienes la culpa de querer una vida nueva y mejor. Pero
debes respetar la elección de tu hermano de quedarte atrás y luchar por la libertad. Es su elección..."
Celes se sintió inmensamente orgulloso de ese zorro por alguna razón.
"No es que yo sea tan egoísta". Liz se rió en voz alta para ocultar sus sentimientos. "Hay una verdadera mente
maestra detrás de los problemas de nuestros reinos. La única existencia cuya muerte liberará nuestros hogares
y la luna".
Louise y Celes entrecerraron los ojos y se inclinaron más cerca de la mujer lobo.
Liz los miró seriamente, luego susurró. "El Dragón Negro".
¡El corazón de Louise ardía mucho y de repente escuchó un grito masculino!
[¡Mataste a mi hermano!]
"Es él…"
"Sí, debes conocerlo bien. Es el hermano anterior [del Dragón]". Liz le sonrió a Louise. "Si solo tuviera una gota
de tu fuerza anterior, sería capaz de encontrar su ubicación. Ya confirmé que tenía algunos vínculos con The
Human Emperor y las razas que este imbécil había conquistado. Desde mi perspectiva, parece que le había
dado a su gente como regalos al Emperador Humano. Y este dragón solo tiene unos pocos dragones a su
alrededor, trabajando más con diferentes razas. Tan jodidamente extraño... Meh, debo cazar más gremios
oscuros cuyos miembros hayan hecho contacto con dragones malvados. ... El resto de esos lagartos se
esconden en su reino espiritual. ¡Tampoco la pasan tan bien! ¡Jaja! ¡Al menos esto!"
¡Golpear! ¡Golpear! ¡Golpear!
He traído los carruajes del amo. ¿Estáis dentro, señoras?

El verdadero dragón llamó a las puertas...

Capítulo 152 Soy Lizanna

Capítulo 152: Soy Lizanna
Usando su función de minimapa, Leon encontró su nueva casa sin ningún problema.
También vio su carruaje y sus caballos, por lo que León esperaba que todos pasaran un buen rato hablando de
sus planes para amueblar sus habitaciones con muebles de su preferencia.
Pero después de abrir las puertas, Leon parpadeó tres veces cuando lo primero que vio fue una mujer
extranjera.
Gracias a su Libro de los Monstruos, Leon descubrió que ella era una niña lobo. Su ropa informal había liberado
sus orejas y cola de lobo, por lo que Leon no dudó de sus pensamientos sobre su raza. Esta chica musculosa era
un poco similar a su sirvienta dragón, ya que revelaba sus músculos usando una camisa sin mangas y
pantalones cortos.
Sus piernas y brazos parecían armas poderosas y maduras.
A Leon le encantaría comparar su espalda con la de Alexandra, ya que esos maníacos del entrenamiento tenían
una bonita curva por detrás, pero el cabello azul oscuro de esta mujer lobo estaba desordenadamente
enredado detrás de su espalda, cubriendo la mayor parte de su espalda, dejando solo una pequeña parte de
ella. piel ligeramente bronceada.
¡Pero basta de esta mujer!
La expresión de Alexandra advirtió a Leon que se había producido una discusión en la nueva casa.
"¿Lo que está sucediendo?" Leon dio un paso adelante y se colocó al lado de Alexandra, mirando a Liz a los
ojos.
Esos tonos azul oscuro se habían estrechado y destellaban con una luz peligrosa de la que Leon desconfiaba. Su
nivel no era nada de lo que burlarse, y seguramente era una de las existencias de alto nivel con las que Heaven
Library Guild amaba trabajar. Sin embargo, fue extraño verla aquí tan rápido.
León esperaba que algunos problemas lo visitaran al menos unos meses después.
"Ella es Lizanna, mi amiga. Aunque no nos hemos visto en mucho tiempo, esta chica sigue siendo la misma. Se
vuelve tan difícil hablar con ella cuando cree en algo desde el fondo de su corazón. Y mucho menos hablar con
ella". ella, es difícil convencerla de que ella también está equivocada". Sorprendentemente, Celes abrió los
labios y explicó lo que había sucedido.
Al escuchar cómo esta mujer lobo había visitado a Celes como su amiga, feliz de verla de regreso, Leon decidió
no decir lo que se le había escapado y tomó un enfoque diferente con ella. "En otras palabras, ¿crees que mi
sirvienta dragón tiene información sobre el Dragón Negro? Si ella dice que no conoce sus planes o ubicación,
debe ser eso".
La mujer lobo apretó los dientes y miró a Leon con el ceño fruncido. "Ordénale que trabaje conmigo. Es famosa
por su crueldad, y el Dragón Negro seguramente la tomará en sus filas. La usaré para encontrar a ese pedazo
de mierda y resolver nuestros problemas".
"No." León negó con la cabeza.
Liz entrecerró más los ojos, haciéndolos parecer las rajas de un enloquecido. "No te lo estoy pidiendo. Te estoy
obligando a que me la des".
"Si estar en el nivel trescientos fuera suficiente para exigirlo todo, no tendrías problemas, para empezar". Leon
inclinó la cabeza y entrecerró los ojos también. "Puedes exigir cosas, pero eso hará que me disgustes más. Y
estás preguntando por mi doncella dragón con quien me siento cómodo. No importa lo que digas y hagas, no te
la daré".
A Liz no le gustaron esas palabras.
En su estado actual, que era más salvaje debido a la apariencia del dragón, sus ojos y su mente estaban
confusos, por lo que no podía ver correctamente las palabras de Leon. Él solo la irritó. Y como mencionó su
nivel, Liz decidió mostrarle la diferencia entre el nivel trescientos y noventa.
Ella desapareció.
León permaneció tranquilo.
Un sentimiento familiar pero bastante olvidado se extendió por su mejilla. Era la sensación incómoda que
había sentido unas cuantas veces al comienzo de su vida en otro mundo. Ese instinto lo ayudó a hacer frente a
sus enemigos, lidiando con ataques impredecibles y habilidades de las que Leon no estaba al tanto.
Leon levantó su brazo justo a tiempo, atrapando el puño de Liz.
[¡Has perdido 240 134 HP!]
Sus huesos crujieron, todos lo escucharon. Louise y las otras chicas se pusieron tensas y saltaron al lado de
Leon, solo para verlo pasar la mano por detrás, diciéndoles que no se acercaran.
"Unas pocas grietas no me matarán". Leon dijo, una vez más mirando a los ojos de Liz, cuyos tonos habían
estado oscilando desde que Leon la había atrapado con el puño. "Es extraño cómo la gente puede morir cuando
sus puntos de salud caen por debajo de cero... Si atacas mi otro brazo y luego mi otra extremidad de la misma
manera, simplemente moriría por la pérdida de puntos de salud...".
La gente podía vivir sin extremidades, pero en el Mundo Freya, debido al sistema, la gente también podía morir
de esa manera.
Liz explicó, desconcertada. "Tu corazón simplemente explotaría".
Sobrevivir a un golpe de alto nivel, simplemente recibirlo, era algo tan desconocido en el Mundo Freya que el
estado salvaje de Liz estalló como lo haría el corazón al perder todos los puntos de salud, y vio a Leon bajo una
luz diferente, asombrada. Él era de una raza tan diferente que tenía ganas de aparearse con él y darle todo su
cuerpo.
Esos eran sus instintos naturales de anhelar a alguien cuyo talento pudiera proporcionarle mucho placer y
alegría y un futuro mejor.
¡Y eso fue cuando tenía el nivel noventa!
Si estuviera a su nivel, ¡sería capaz de obligarla a acostarse con solo una mirada!
¡Liz era una mujer tan sencilla!
"Puedo ir por un segundo golpe si todavía quieres a mi doncella dragón". ¡Leon golpeó su corazón con esas
palabras, ya que su voz sonaba como si nunca le fuera a dar a Liz la oportunidad de lamerlo!
"Ya no me interesa". Liz volvió a su lugar anterior y miró a todos los demás. "Fue agradable hasta que vi a Blue
Thanatos. Bien por ustedes dos por haber encontrado a un hombre tan fuerte. Pensé que me necesitarías,
Celes, pero debes quedarte con tu amado y hacer que se vuelva adicto a ti. Lo mismo va por ti, foxy. En cuanto a
mí, me iré pronto. Si este dragón no puede ayudarme, encontraré más en los gremios oscuros. Buenas noches".
Todos posaron sus ojos en la espalda de Liz.
Se detuvo en el marco de la puerta y miró a Leon. "¡Guapo! ¡Soy Lizanna! Recuerda ese nombre. Solo usa ese
nombre para llamarme. De lo contrario, no contestaré tus llamadas".
Louise y Celes la miraron como si fuera una persona diferente.
Liz salió de la casa y su propiedad, cuidando sus pasos. Ella no quería moverse como un vulgar...
Capítulo 153 Habitaciones

Capítulo 153: Habitaciones
Han pasado algunos días desde el té de la noche de Leon y el breve intercambio con la mujer lobo.
La nueva casa de Leon era tan grande que estaba preocupado por su dinero. Sí, tenía mucho dinero vendiendo
sus trofeos del mini-mundo, pero incluso eso no era suficiente para mantenerlo viviendo como un rey.
¡Había gastado mucho y seguía desapareciendo de su sistema!
"Al menos nuestra casa se ve mucho mejor". León comentó en voz alta, ignorando la dolorosa pérdida de las
monedas de oro.
Los muebles de su nueva casa resplandecían y su olor fresco llenaba cada rincón de su nueva morada. Fue
agradable ver todo hecho, ya que Leon y sus mujeres trabajaron duro para tener un buen lugar para ellos. Y
también fue un momento bastante divertido, ya que Leon recorrió la capital con ellos.
Celes, Louise y Alexandra causaron tantas reacciones en los corazones de otras personas que Leon se había
acostumbrado a sus identidades y bellezas únicas. También se lo pasó bien comparando la Metrópolis Madevin
con su ciudad de la Tierra, olvidándose de que estaba en otro mundo.
Él recordó sus nuevas circunstancias cuando Louise casualmente levantó toda la cama.
¡Era tan pequeña, pero tanto poder habitaba dentro de ella!
Celes y Alexandra eran iguales.
Leon no necesitó de ninguna compañía que lo ayudara a mover sus cosas… Y luego, cada uno amueblaba sus
habitaciones y las preparaba a su gusto. Desafortunadamente para Leon, no pudo hacerlo igual que en su casa
anterior en la Tierra, pero logró que fuera algo similar.
Por lo tanto, no fue nada especial. Leon tenía una cama bastante ancha en el costado de su habitación, luego un
escritorio en el lado opuesto, con su armario cerca. No le gustaban las alfombras, por lo que el suelo seguía
siendo de madera, y sus ventanas ni siquiera tenían visillos, ya que los consideraba inútiles.
"Tu habitación es tan simple". Celes comentó en voz alta, sin ocultar sus pensamientos. "Necesitas una parte de
mi estilo para hacerlo más interesante".
"¿Cual es tu estilo?" Leon preguntó con curiosidad mientras Louise asentía, queriendo agregar algo de su
habitación también. Alexandra sintió lo mismo, pero se lo guardó en el corazón.
Y así, todos fueron a la habitación de la vampiresa.
"Necesitas sombras". La vampiresa dijo con orgullo mientras ocupaba el centro de su habitación.
Solo sus ojos rojos brillaban ya que todo lo demás era negro… Eso era porque las persianas estaban en las
ventanas, no dejaban entrar la luz. Además, Celes tenía un escritorio negro y muebles marrones viejos. Tenía
una pared con su mejor colección de licores que ya había comprado en Madevin Metropolis.
Estaba tanto en su habitación como en su inventario. Su cama era suficiente solo para dos personas, con una
manta de color rojo oscuro bastante real que ocultaba su zona cómoda lejos de los ojos de todos. Y cuando
Leon y otros entraron, sintieron que una linda alfombra esponjosa les hacía cosquillas en los pies.
"También necesitas mi manta. Solo dormí una vez en esa manta, pero me envolví bien en ella, así que está llena
de mi fragancia". Celes se preparó para ello y rápidamente le entregó a su amado su cobija.
León susurró, sonriendo. "Solo tomo esta manta... y supongo que esta botella de licor".
"Bien." Celes sonrió y extendió su mano por el licor deseado de Leon, poniéndose de puntillas y sacudiendo ese
trasero regordete para él.
Entonces Louise llamó la atención de su amado. "También necesitas algo de mi habitación. ¡Vamos, Leon!"
¿Cómo podría Leon rechazar a su adorable zorro? ¡Él ya tomó algo de su vampiresa!
La habitación de Louise tampoco era tan especial, a excepción de las lámparas naranjas que brillaban con
piedras especiales que parpadeaban como llamas. Detrás de esas lámparas de papel, nadie podía decir si
Louise tenía un fuego real dentro de ellas o algo más. Sabía que su casa estaba bien y que la conflagración no se
comería su vivienda.
"Es una linda habitación". Leon vio muchas cosas que Louise aprendió en su nueva vida. ¡Tenía una pared con
libros de cocina y un calendario único con recetas para el desayuno! Parecía que se inspiró en Leon, ya que la
distribución de su habitación era similar a la de él, con la cama y el escritorio en el mismo orden.
Muchas linternas únicas a las tradiciones de su raza llenaban su habitación. Esos también cuelgan alrededor
del calendario y los estantes de libros, llenando a Leon con una imagen de cómo se vería su casa por la noche.
No vio muchas cosas aquí ya que Louise nunca antes había tenido su habitación.
¡Fue increíble y encantador de su parte hacer que pareciera tan especial sin experiencia previa!
"Toma esta linterna, Leon... ¡Que esté alrededor de tu escritorio y tu cama!" Louise le pasó lindamente a su
amado la linterna más grande y le sonrió, derritiendo su corazón.
Leon asintió y metió ese tesoro en su inventario.
Por fin, Leon se dio la vuelta y miró a Alexandra. Creo que también puedo inspirarme en ti, Alexandra.
"¡Ya veo!" Claramente sin esperar eso, Alexandra tartamudeó y rápidamente se dio la vuelta, guiando a su
maestro a su propia habitación con la que había sido bendecida.
No era tan grande como los demás, pero ese era el pequeño lugar que cuidaría a diario.
Leon y sus dos amados miraron peculiarmente dentro de esa habitación.
"¿No es esto como un gimnasio?"
"¿Lo es? Estaré atendiendo mis deberes más que pasar tiempo aquí, así que pensé que solo sería útil aquí... Solo
necesito una cama y todas estas cosas de entrenamiento. Es realmente único... No lo había visto antes". ."
Alexandra señaló las cosas modernas que Leon sabía que algún extraterrestre trajo consigo a este mundo.
También miró a los gatitos que tenían sus propias camas cerca de la de Alexandra. Los pequeños gatitos
saltaban alrededor de ese material de entrenamiento pesado mientras sus padres se relajaban mientras
tomaban el sol en el alféizar de la ventana.
"Tomaré esos pesos". Leon sonrió y se rió alegremente de su doncella dragón. "No tropieces y te lastimes aquí".
"¡No lo haré, Maestro!" Alexandra también sonrió ampliamente.
¿Cómo podría lastimarse a sí misma como un dragón?
Leon sabía que no lo haría, pero aun así dijo eso que la calentó.
Y después de que León vio las habitaciones de todos, se fue a su herrería para continuar con su proyecto.
Realmente necesitaba un negocio.
Y cuando llegó la noche, León estaba bastante agotado.
Pasaba demasiado tiempo en su herrería.
Ahora, solo pensaba en sus seres queridos y en quién sería el primero en colarse en su cama. Sin embargo, en
su camino de regreso a su habitación, Leon vio el cuerpo desnudo de Louise mientras su toalla se deslizaba por
sus curvas. Acababa de salir del baño y tenía prisa, por lo que no se había fijado en su amado.
Pero cuando Leon grabó su cuerpo desnudo en su corazón, principalmente esas tetas que sobresalían y se
movían, recibió tanta energía que ya no se sentía exhausto. Se sintió preocupado abajo cuando su miembro
duro como una roca se empujó contra sus pantalones.
Todos habían estado trabajando en su casa y habitaciones, por lo que era normal que estuvieran ocupados y
cansados... Leon también vio que Celes pasaba más tiempo en su clase de alquimia, lo que significaba que se
esforzaba por cumplir su pedido.
Era la sorpresa que ella le había prometido.
Louise también estaba ocupada y pasó tanto tiempo reflexionando sobre sus habilidades y lecciones de cocina
que estaba preocupada de ser la segunda en invadir la cama de su amado.
Eso significaría una derrota contra la vampiresa.

Sin embargo, Louise no sabía que su amado estaba de humor para algo más que abrazos.
Leon abrió su sistema y la llamó.

Capítulo 154 Louise lo quiere todo [R-18]

Capítulo 154: Louise lo quiere todo [R-18]
[Te quiero esta noche, Louise. Sólo tu.]
Después de enviar ese mensaje, Leon esperó a su mujer zorro frente a su habitación. Estaba seguro de que ella
sabía lo que él quería esta noche y que su mensaje tenía un tono de deseos carnales que se habían estado
acumulando dentro de ellos desde hace un tiempo. No había aceptado el trato debido a algunas cosas.
Lo más importante era que Leon era simplemente un tonto con respecto a sus relaciones.
El harén era un tema tan problemático para él que incluso cuando sabía que tenía que ser egoísta como sus
mujeres, Leon todavía quería ser justo con ellas. Y eso solo lastima a todos, ya que Leon ni siquiera pensó
mucho en tener su tiempo con ellos.
Algunas personas podrían aprobar y atesorar a Leon por tal decisión, ya que sonaba como si él no quisiera
construir su relación sobre el sexo, pero estuvieron juntos durante el tiempo suficiente, incluso Leon no pudo
ignorar sus deseos.
Esos se apoderaron de él, y su polla le dolió.
No era ninguna enfermedad, pero Leon simplemente se puso tan duro que solo podía dejar salir su frustración
a través de la masturbación.
Las otras razones fueron los eventos que sucedieron en su vida. León también se sintió apurado para crear su
negocio o al menos obtener alguna fuente de ingresos para mantenerse a sí mismo y a su futuro. Estaba
cansado de amueblar su habitación y ocuparse de los asuntos de sus mujeres.
'Tal vez, esas pequeñas discusiones suceden más porque los mantengo frustrados.' Sintiendo el pico de esa
frustración, Leon estaba seguro de que una buena paliza resolvería muchos problemas de relación por lo
menos durante algún tiempo.
"Leon... Buenas noches..." La tímida voz de Louise pronto llegó a los oídos de Leon.
Se giró hacia ella y sonrió, incapaz de apartar los ojos de una mujer tan adorable. Estaba claro que Louise había
captado un indicio de sus deseos carnales a través del mensaje mientras permanecía de pie con las piernas
apretadas una contra la otra, mirando tímidamente a los ojos de Leon.
Su hermoso rostro se iluminó con rosas escarlatas, haciéndola más hermosa.
"Buenas noches." Leon sonrió, sus emociones se calmaron lentamente.
Y mientras su polla todavía rugía debajo de sus pantalones, la mente de Leon se aclaró y recordó que Louise
era virgen. Tenía sus momentos fríos y frescos y un tiempo lindo con él. Pero a pesar de que era una mujer tan
fuerte, el verdadero yo de Louise era esa adorable zorra que atesoraba todos esos momentos calientes con él.
El deber de Leon era introducirla en el sexo y hacer que se enamorara de él y de él.
"Te vi desnuda, Louise, corriendo a toda prisa hacia mi habitación... Ni siquiera tuviste tiempo de ponerte el
pijama... Solo un vistazo de tu cuerpo desnudo me puso duro". Leon señaló el bulto en su entrepierna,
sonriendo.
Louise siguió su mirada.
Había notado esa tienda antes de llamarlo, pero ahora que Leon guió sus ojos aquí, Louise se quedó
boquiabierta ante esa reacción prominente con los ojos muy abiertos.
Era virgen, pero esa vista no la asustó. Louise había prestado mucha atención a su cuerpo y su relación,
aprendiendo sobre cosas que no le importaban en el pasado. El tamaño de la polla de su amado no importaba:
su coño se adaptaría y lo haría sentir fuera de este mundo.
Pero fue genial ver que Leon fue bendecido abajo.
"¿Es por mi culpa?" Louise preguntó después de que sus pensamientos golpearon su corazón.
León inclinó la cabeza y se rió entre dientes. "Eso es lo que dije."
Sonrojándose aún más, Louise abrió la puerta de su habitación e invitó a su amado a entrar. Se había olvidado
momentáneamente de las palabras de su amado porque recordaba sus estudios sobre las relaciones sexuales.
¡Y lo que la astuta había inferido de todos esos estudios era que solo debía confiar en sus instintos!
¡Ella no debería pensar en otra cosa que no sea su hombre! ¡Ella debería responderle desde el fondo de su
corazón sin pensarlo antes!
"Luisa". León la llamó por su nombre con una mezcla de impaciencia y culpa. "Dije que prepararía una buena
habitación para nuestra primera vez. Pero una vez más te fallé y me concentré en otras cosas, manteniendo
nuestra relación neutral. Incluso te dije que te llenaría de más amor, pero presté atención a otras cosas. Tal
vez, mi cuerpo entiende las fallas de mi mente débil. No puedo dejar de pensar en tu cuerpo: tengo tantas
ganas de comerte".
Leon no estaba pensando con su cerebro, Louise entendía eso.
León continuó. "Has amoblado tu habitación de manera tan hermosa que creo que es el mejor lugar para que
pierdas tu virginidad. Puede ser una excusa, pero mientras te presento el placer, nada más que nosotros
importará".
Sonriendo, Louise se dio la vuelta y miró a su amado. "¡Piensas demasiado, León!" Sabiendo lo que amaba su
amado, Louise extendió sus manos, invitándolo a abrazarlo. "Tienes todo mi consentimiento. ¡Enséñame sobre
el sexo! ¡Muéstrame lo que quieres hacer conmigo! ¡Quiero sentirlo todo!"
El corazón de Leon se estremeció después de escuchar esas palabras. Era demasiado pronto para todo lo que
quería hacer con su foxy, y sabía que ella primero debería entender una simple sensación de él llenándolo.
Pero esas palabras dibujaron manchas rojas en el rostro de Leon. Aceptó la invitación de Louise, envolvió sus
brazos alrededor de sus suaves curvas y tomó sus labios. Su lengua bailó con la de ella, entrelazadas en una
pasión sofocante, donde ambos se olvidaron de respirar, simplemente conduciéndose a más placer.
Louise fue la primera en perder en ese ardor. Se apoyó en su amado, sin aliento. Su pequeña nariz se expandió
más mientras inhalaba mucho aire, fundiéndose con Leon.
Él usó eso como una oportunidad para burlarse de ella y finalmente darle la oportunidad de ver más de su
cuerpo. "¿Quieres sentirlo todo? ¿No es demasiado pronto, Louise?"
Leon se quitó la camisa, dejando al descubierto su pecho desnudo.
Louise había visto la parte superior de su cuerpo desnuda muchas veces, pero ahora se sentía diferente. Eso
fue porque Leon era suyo por esta noche, y él también le había dado su consentimiento. Trazó sus dedos sobre
su pecho musculoso y sin vello, luego se deslizó hacia abajo para sentir sus abdominales, e incluso sintió ganas
de picotear sus pezones y lamerlo por completo.
¡El foxy de Leon tenía contenido de alta calidad para aprender!
No es demasiado pronto. Louise dijo, inhalando más del olor de Leon y dejando su saliva en su pecho. Tenía un
cuerpo tan fino y entrenado que la región inferior de Louise hormigueaba, y él seguía excitándola.
León se sentía orgulloso de sí mismo y divertido por su adorable zorra, cuyos ojos eran cálidos, iluminados por
sus deseos carnales. Él le acarició el cabello mientras ella usaba la lengua y los dedos para dejar marcas en su
pecho.
Luego recogió un mechón de mechones de su cabello y le levantó la barbilla. "Hay más que aprender sobre mí,
Louise. Pero lo hacemos paso a paso, y también quiero ver tu pecho".
Luisa asintió.
Dio dos pasos atrás y se desabrochó el pijama. Lo hizo lentamente, manteniendo su atención en el rostro de su
amado. Sus ojos fijos en sus pechos habían borrado su timidez, y Louise tomó lentamente el control de Leon, ya
que ahora todo estaba en sus manos.
Después de exponer más de su escote, Louise dobló su dedo y empujó su pijama hacia un lado, mostrándole un
pico de su pezón erecto.
Antes de que Leon mirara correctamente su pecho, Louise soltó su pijama y volvió a desabrocharlo.
Leon levantó los ojos, solo para verla sonriendo.
"Quédate quieto y no te muevas". Louise susurró en un tono melodioso.
Esa era una zorra segura de sí misma, sonriente, con la cola moviéndose detrás de ella y sus orejas de zorro
aleteando. Y como esa vista era sexy y adorable, ya que Louise era muy linda, Leon podía ver por qué las
mujeres zorro eran conocidas como tentadoras, porque podía imaginar lo que Louise sería capaz de hacer en el
futuro si solo se concentrara en su sensualidad.
No podía esperar por eso. ¡Él quería que ella explorara más su pasión!
Así, cuando Louise se quitó el pijama, Leon no le dio la oportunidad de volver a invitarlo. Atrapó sus tetas
desde abajo, empujando hacia arriba sus pezones erectos. Se llenó la boca con una de sus perlas rojas,
chupando y mordiendo fuertemente. Su mano izquierda acarició el seno derecho de Louise, rascándole el
pezón de vez en cuando.
"Ah... Ahh... Ahhh..."
Louise gimió sobre él, sus gemidos aumentaron con el tiempo cuando finalmente sintió el deseo de Leon con su
cuerpo. Era tierno pero tampoco podía controlarse bien con la suavidad de ella en sus manos. Ella lo puso más
cachondo y lo obligó a perder la cabeza por su cuerpo...
Eso se tradujo en que Louise se volvió más sensible, ya que naturalmente quería que su amado se divirtiera
más. Ella también quería sentirse bien.
Y mientras Louise perdía lentamente la fuerza sobre sus piernas, Leon deslizó su mano y la enrolló alrededor
de su cintura. La llevó a la cama y la bajó suavemente.
Dejó algunos besos en ella empapados en su pecho de saliva, luego bajó lentamente. "Te bajaré los pantalones".
"Sí…" Louise asintió, apretando sus mantas.
Leon puso sus manos en su cintura y hundió sus dedos en sus pantalones. Luego, comenzó a quitarse esa parte
molesta de su atuendo de noche. Lo hizo muy lentamente, todo por las bromas de Louise. Esa fue su venganza,
y funcionó, ya que Leon notó una gran mancha húmeda en las bragas de Louise. 𝒇𝒇ee𝒇𝒇𝒇n૦𝒇el coｍ
Sus muslos también brillaban.
León no podría estar más contento.

Capítulo 155 Una posición memorable [R-18]

Capítulo 155: Una posición memorable [R-18]
Leon se inclinó más cerca de las bragas de Louise e inhaló su fragancia lasciva. "Hueles muy bien, Louise".
"Me vine un poco..." Louise sonrió tímidamente y levantó la parte superior de su cuerpo para mirar a su amado.
Parecía tan contento y no podía dejar de sonreír después de sus palabras. Al recordar su dura polla, Louise
entendió que él se estaba conteniendo y se tomó las cosas con calma para introducirla adecuadamente al
placer sexual. Su cuerpo se estremeció de amor y cariño, entonces Louise se encargó de bajarle las bragas.
Levantó sus esbeltas piernas, luego realizó un espectáculo un poco torpe pero encantador, revelando más de
su cuerpo. Con sus bragas mojadas colgando de su pie, Louise las tiró, luego separó las piernas con confianza,
dándole a Leon más que un vistazo de su coño empapado en jugos.
"¿Cómo es?" preguntó Louise con una sonrisa confiada y lujuriosa.
Leon simplemente tenía una palabra para describir esos labios inferiores. "Hermoso."
De hecho, fue hermoso. El adorable zorro de Leon estaba tan sin pelo por debajo como lo estaba en su pecho.
No tenía vello púbico, y su piel tenía colores tan encantadores que el coño de Louise era como una fruta
suculenta, ¡lo tentaba a separar los labios y engullirla!
Leon puso sus manos sobre los muslos de Louise, luego se inclinó para besar su coño. Su respiración errática le
hizo cosquillas primero, luego Leon sacó su lengua, lamiendo su vulva. Después de provocar algunos gemidos,
Leon presionó sus labios en los labios inferiores y empujó su lengua dentro, chupando sus jugos.
La mente de Leon se llenó con su olor, sabor, gemidos y sonidos descuidados.
Su dulce sabor hizo que Leon tuviera sed.
Quería más de ella.
Por otro lado, Louise abrió más las piernas y arqueó la cabecita hacia atrás. Cerró los ojos y disfrutó de la
sensación de que su amado le comía el coño. Sintió un placer indescriptible llenando su corazón y su mente,
todo lo cual provenía de su punto de miel.
Derramó tantos jugos que Leon aparentemente la chuparía durante años. Sin embargo, cuando los gemidos de
Louise cesaron momentáneamente y sus paredes internas se contrajeron alrededor de la lengua de Leon,
Louise experimentó el primer orgasmo serio que fue similar a sus jugos rompiendo un dique dentro de ella.
"¡Ya voy!" Louise gritó fuerte, oh tan fuerte.

Su mente explotó y estalló con un placer que nunca antes había sentido. Era como si el mundo dejara de existir,
y solo ella flotara en algún universo, sintiéndose feliz, mientras el toque de su amado aún la calentaba, estando
con ella. Nada importaba más que el contacto de su piel con Leon mientras ese placer la recorría.
Hablando de esa amada, tanto líquido de Louise brotó de su coño que la cara de Leon se empapó en su semen.
Dejó de comerla y miró hacia arriba, respirando con dificultad.
Necesitaba ese descanso.
Y Louise necesitaba más mientras se acostaba en la cama, tomando tanto aire como podía. Leon usó eso como
una oportunidad para sentir más su cuerpo. Frotó sus muslos, besó esa carne excitante y bajó, acariciando las
esbeltas piernas de Louise con mucho cuidado.
Sujetó su pie con fuerza y también plantó aquí un beso.
Entonces, Louise regresó de su viaje y miró a Leon con ojos encantadores. Quería que él sintiera lo mismo y
correspondiera a sus sentimientos.
Ella se puso de pie, llena de energía, y envolvió sus brazos alrededor de su cintura. "¡Es mi turno de bajarte los
pantalones!"
Leon se puso de pie y miró a su foxy en sus cuatro. Asintiendo, se dejó a su cuidado, posando sus ojos en su
rostro satisfecho y sonriente.
Louise rápidamente se puso a trabajar. "Quiero lamer tu polla".
Le bajó los pantalones hasta la mitad y luego hizo lo mismo con sus calzoncillos. Por fin, la polla erecta de Leon
saltó a sus ojos, haciendo que esos hermosos tonos azules se ensancharan en una agradable sorpresa. La polla
de su amado era tan gruesa y larga que Louise sintió que era del tamaño perfecto para ella.
También se veía tan sabroso aquí abajo.
"Es un líquido preseminal, ¿verdad?" preguntó Louise, y sin esperar la respuesta de Leon, Louise lamió su
punta, reuniendo algo de su líquido preseminal en su lengua.
Cerró los labios con fuerza y probó su sabor.
fue amargo
Pero era demasiado adictivo. Louise quería más, así que rápidamente separó los labios y lamió más el glande
de su amado. Su sabor la excitó y la obligó a producir más de sus jugos. Incluso ahora, mientras simplemente lo
lamía, el coño de Louise goteaba tantos jugos que sus muslos brillaban y había un charco debajo de ella.
Louise sujetó con fuerza la vara de Leon y la bombeó un par de veces. Su reacción la divirtió cuando su polla se
estremeció. Ella se enamoró de esa parte de él mientras Leon la calentaba más y más. Ella también quería
sentir más de él, por lo que Louise separó los labios y engulló su punta.
No podía ir por más, ya que era su primera vez, pero Louise hizo lo mejor que pudo con su lengua azotando a
Leon dentro de su boca, recogiendo más líquido preseminal.
Luego movió la cabeza sobre su eje, cada vez mejor.
Louise siguió sus instintos y deseos, perdiéndose en el gusto de su amado. Ella también entendió su defecto,
por lo que Louise siguió acariciando el eje de Leon mientras lo lamía. Y luego, soltó su glande y rodeó su polla,
dejando más besos a su alrededor. Ella también miró a su amado, y después de encontrarlo mirándola con ojos
asombrados, Louise agregó ese movimiento a su mamada, mirando constantemente su rostro.
Leon se quedó inmóvil, clavado en el suelo.
Ha pasado tanto tiempo desde que sintió que una mujer le daba una mamada que Leon no sabía si sería capaz
de contenerse por mucho tiempo. Incluso ahora, tenía ganas de doblar las piernas y agarrar el cabello de
Louise. Pero como se sentía tan bien y Leon quería que Louise aprendiera más, hizo todo lo posible para no
correrse todavía.
Eso falló cuando Louise comenzó a llamar su atención. Sus gemidos y esos ojos azules brillando con lujuria
hacia él, con sus labios pegados a su glande, simplemente hicieron que Leon fuera incapaz de mantenerse fiel a
su deseo.
Extendió su mano hacia su cabello y lo agarró con fuerza. "Iré pronto. Muy pronto, mujer sexy".
Los ojos de Louise brillaron alegremente. ¡No podía esperar para probar la semilla de su amado!
"¡Luisa!" León gritó en sumo éxtasis.
Louise engulló su polla y cerró los ojos, sintiendo su semilla pegajosa llenar su boca. Algunas de sus cosas
blancas bajaron por su garganta, pero muchas rezumaron afuera, bajando por su barbilla. Louise
instintivamente ahuecó las manos hacia abajo para atrapar todo lo que pudiera.
Mientras tanto, su cabecita volvió a llenarse de un nuevo tipo de placer. Esta vez, su estómago también se
sentía tan caliente y su coño picaba como nunca antes, diciéndole que recogiera ese líquido también.
Louise soltó la polla de su amado y luego miró hacia arriba.
Leon tenía los ojos en su rostro todo este tiempo, y se sorprendió al ver lo que había resultado.
Su foxy se sentó con sus manos ahuecadas, manteniendo su semilla afuera. Su rostro estaba tan rojo que era
peligroso, pero aun así seguía sonriendo, curvando esos labios de manera pervertida. Leon vio algo de su
semilla en su rostro, lo cual fue bastante excitante. Todas sus curvas se sonrojaron más y más.
Louise también parecía muy satisfecha.
Ella sonrió y levantó las manos, bebiendo más de la semilla de Leon. "Me encanta tu sabor, Leon. Es agridulce...
Tan único, tan caliente y tan... tan adictivo. Lo quiero más... Y también puedes seguir adelante, ¿verdad?"
León miró su polla, que estaba tan dura y erecta que dudó si se había corrido. Estaba listo para más tan rápido
que Leon estaba bastante desconcertado.
Pero Leon era [Eros], y eso era simplemente normal.
Louise también compartió una parte de sus estudios. "¡Los hombres normales pueden venir al menos tres
veces!"
León se humedeció los labios.
Luisa continuó. "Pero vendrás innumerables veces para mí. ¡Haré que produzcas tanto semen que necesitarás
que me corra! ¡Tus bolas no producirán ninguna semilla sin mí!"
Esa fue una declaración bastante audaz.
Leon sonrió y extendió su mano. "Quiero follarte primero en una posición... En una posición memorable".
Louise creció curiosa y tentada. Ella tomó su mano.
Y antes de que el adorable zorro se diera cuenta, Leon la llevó bastante alto. Ella lo miró, sintiendo sus manos
debajo de sus piernas, manteniéndola más alta que él.
Leon miró hacia arriba y sonrió genuinamente. "Exactamente lo que pensé".
¡Movió los dedos y apagó todas las linternas!
Louise abrazó con fuerza a su amado, hundiendo los dedos en sus hombros.
Solo el cabello, las colas de zorro y las orejas de Louise brillaban en esta habitación oscura. Esos brillaban tanto
por los sentimientos que recorrían las curvas de Louise.
Su nuevo tono carmesí rebosaba sus vetas. Sus colas de zorro eran como las únicas linternas que Leon
necesitaba. Y esas orejas de zorro combinaban bien con el cabello de Louise.
"Eres mi sol". Leon lanzó la línea favorita de Louise.
En esa posición, Louise era realmente como el sol. Lo entendió después de mirar los ojos dorados de Leon, que
habían reflejado su expresión. Su imaginación se puso en marcha y Louise pintó una imagen perfecta de sí
misma siendo como el sol en los brazos de Leon.
La abrazó con fuerza, diciéndole que ese sol le pertenecía solo a él.
¡Y sólo él podía encender a esa mujer!
Leon sonrió y lentamente guió a Louise para que se sentara en su pene. Pronto, él la empaló en su eje, entrando
en sus entrañas. Su foxy no tenía himen después de todos esos años de lucha, pero podía decir que era la
primera vez que sentía a alguien dentro de ella. Su apretado coño lo envolvió, contrayéndose por la alegría de
sentir su calor.
"Estás dentro…" Louise gimió, sintiendo perfectamente a Leon enfundado dentro de ella.
Él estiró sus entrañas y la penetró por completo, empujando su matriz. Sacudió sus caderas y lo hizo de nuevo,
luego retiró su polla, solo para llenar a Louise de nuevo. Él rascó más su interior con su glande hinchado,
acelerando lentamente el ritmo y construyendo más placer dentro de ella.
Todavía era bastante difícil en esta posición.
No obstante, Leon había creado un momento tan memorable que Louise estaba más sensible que nunca. Ella
también lo ayudó con sus movimientos, dándole más facilidad para empujar su polla dentro de ella.
Con ella fundiéndose con él, estando arriba como el sol, Louise supo que pronto vendría. Parecía tan fácil, pero
Leon jugó bien todas sus cartas e hizo que su mujer se enamorara de él una y otra vez.
Leon también hizo lo mejor que pudo con sus movimientos.
Por fin, Louise le rodeó el cuello con los brazos y gritó. "¡Está viniendo!"
Leon coincidió con su tiempo, y ambos llegaron juntos.
Leon la llenó hasta el borde, llegando incluso más que su primer trago antes. Pronto, Louise experimentó un
orgasmo aún más significativo cuando sintió que ahora brillaba en un universo desconocido, perteneciendo
estrechamente a su amado. Su fuerza abandonó su cuerpo y se acostó sobre Leon.
Leon se puso de pie mientras ejercía cada gota de su fuerza, ya que sentía que su astuto succionaba algo más
que su semilla. Sus líquidos cayeron al suelo en abundancia...
"Te amo, León". Louise susurró apoyada por su amado, sintiendo que él era su mundo.
"Yo también te amo, Luisa". Leon besó su frente y sonrió.
Claramente satisfecho, León acostó a su mujer en la cama y le acarició la mejilla.
Louise abrió los ojos y miró a Leon. "Quiero más."
"¿Puedes seguir?" León preguntó seriamente.
Louise miró su polla, que estaba empapada en sus líquidos, erguida. "¡Sí!"
Leon le dio a su astuto una mirada peculiar. "Ahora que estamos en la cama, será más intenso".
La memorable posición tenía sus pros y sus contras. Era bueno tener a su mujer acostada sobre él y
mostrándole de lo que era capaz, incluyendo follarla mientras estaba de pie. Sin embargo, se trataba más de su
relación. Louise brillaba demasiado en la vida de Leon y él quería que ella siguiera brillando en todos los
aspectos.
Pero estaba claro que no podía contenerse en una posición adecuada.
Louise estaba más que contenta de asumir ese desafío. "¡Fóllame hasta que quede inconsciente!"
Leon se lamió los labios y alineó su polla con su coño. Se introdujo en sus pliegues, luego comenzó los
movimientos apasionados, con su adorable zorro debajo de él como un plato de la más alta calidad.
Y Leon pronto demostró que sabía cómo comer mujeres como Louise.
"¡Ohhhh! ¡Ohhhhhhh!" Louise gimió peor que una puta. "¡León! ¡León! ¡Mmmmm!"
Él la comió a fondo.
Capítulo 156 El proyecto de Leon

Capítulo 156: El proyecto de Leon
Después de tanto tiempo, León amaneció con una mujer desnuda y satisfecha en sus brazos.
Louise se quedó pegada a él, no queriendo dejarlo ir. Había estado sudando mucho durante el coito con Leon,
por lo que estaba bastante pegajosa. No obstante, esas suaves curvas pegadas a su amado seguramente lo
complacieron.
León abrió los ojos y, de hecho, se sintió genial hasta el punto en que se levantó la madera de la mañana,
levantando una tienda de campaña.
Louise sintió su reacción y reveló lánguidamente sus tonos azules. "Buenos días, Leon... todavía me siento tan
bien... y cansado... Jeje".
"Lo mismo. No tengo ganas de despertarme en absoluto". Leon se rió entre dientes de su astuto risueño y la
abrazó con más fuerza.
Por fin, realmente no tenía que preocuparse por sus reacciones y deseos. Louise ya le había dicho que estaba
dispuesta a intentarlo todo con él y que amaba cuando no ocultaba sus sentimientos. También era bastante
pervertida, como muchas mujeres zorro.
"¿Cuándo vamos a repetir eso?" Louise sabía que no volvería a tener un día tan memorable, pero le encantaría
repetir la posición memorable y brillar por encima de Leon con él empalándola en su miembro erecto.
A Leon no le importaba hacer eso cada vez que su adorable zorro quería sentirlo por dentro, pero su voz
insinuaba que Louise pensaba en el sexo como algo demasiado importante.
Leon le acarició la mejilla y susurró. "Siempre que tengas ganas de follarte a tu amada, solo insinúa eso y te
diré si estoy de humor".
Si bien Leon era realmente egoísta y aún no había pensado en Celes, sabía que no siempre estaría dispuesto a
vincularse íntimamente con sus mujeres. El harén era un concepto bastante exigente, y su mujer lo apretaba
tan fuerte que incluso el cuerpo divino de Leon no podía mantenerlo duro durante toda la noche.
¡Louise lo dejó seco, y Celes también!
León no quería que creyeran que él siempre sería capaz de satisfacer sus necesidades. También sabía que no
podía esperar eso de ellos también. Todos necesitaban un momento y un estado de ánimo adecuados para eso.
Por supuesto, como Leon había aprendido que podía recibir un impulso repentino de energía con solo ver las
curvas desnudas de sus mujeres, entendió que solo el trabajo realmente duro, la falta de tiempo o el mal
humor absoluto podrían evitar que las follara.
"Quiero jugar con tu pene ahora". Louise maulló en el pecho de su amado, extendiendo su mano para acariciar
su miembro erecto.
Leon también necesitaba lidiar con eso.
Estaba seguro de que aún no se había recuperado, pero seguro que podría tomar algo de su tiempo de la
mañana... Eso también dejaría a Celes y Alexandra en paz... León también tenía su agenda…
"Ah, a la mierda este horario..." Leon entendió que no podía tener demasiados puntos en su agenda,
particularmente con mujeres tan adorables en su harén, y permitió que Louise hiciera lo que quisiera con él.
Se tumbó en la cama.
Louise captó la indirecta y supo que su amado no quería pasar demasiado tiempo en la cama. Ha pasado algún
tiempo desde que se despertaron y se abrazaron. ¡No podían estar así toda la mañana!
Por lo tanto, Louise se arrastró sobre Leon y simplemente abrió la boca, escupiéndole saliva y lidiando solo con
su problema matutino con sus labios.
Después de eso, Leon y Louise fueron al baño y se limpiaron.
Los gemidos de Louise habían llegado a todos en la casa.
Celes lo pasó peor desde que su hombre eligió a otra persona. Si bien estaba bien con eso, como se dijo
repetidamente a sí misma que Leon se le confesó primero, sus celos se apoderaron de ella y se toqueteó en la
cama de su amado.
Sin embargo, su tiempo en solitario fue muy diferente.
Con las bragas rojas que Leon le había hecho, Celes deslizó sus dedos delgados sobre esas bragas, dándose
placer a través de ellas.
A pesar de que esas bragas estaban abajo, cubriendo su lugar secreto, la pequeña nariz de Celes estaba llena
del olor de Leon. Además, ella no sintió sus dedos, sino como si fuera Leon dándole placer.
¡Ese era el poder de la clase de artesanos de Leon!
El material que había usado para esas bragas también era único, porque esos malditos hilos salieron por sí
solos, dándole a Celes un nuevo tipo de habilidad... ¡Esos salieron para él y para ella!
Aún así, eso no fue suficiente para la vampiresa.
Sabía que era la segunda y eso la irritaba.
Ella juró trabajar más duro para ganar la atención de su amado.
¡Eso pronto resultaría en que ayudaría al negocio de Leon!
- 𝒇re𝒇w𝒇𝒇𝒇𝒇ѵeƖ c𝒇𝒇
León estaba en su herrería.
Con sus experiencias y clases anteriores, Leon aprendió herrería y oficios enanos secretos, que eran mechas a
sus ojos. Leon quería utilizar ese oficio y hacer algo que pudiera vender a otros. Llevaba bastante tiempo
trabajando en ese proyecto.
No tenía nada que lo presionara en este momento, así que Leon se concentró en eso.
"¡Perfecto!" Leon miró su brazo derecho, cubierto con un guante mecánico.
¡Ese era el proyecto de León!
Todavía era un prototipo, por lo que Leon no le dio demasiado significado a su apariencia. Su guante parecía
como unas pocas piezas de metal fundidas a la fuerza. ¡Sin embargo, Leon sintió un inmenso poder habitando
dentro de ese brazo! No era nada comparado con su cuerpo, pero sería una bendición para la gente común.
Su primera idea fue crear un guante mecánico para ocultar sus cadenas en el interior. Sería capaz de
esconderlos y usar el guante para liberarlos a un ritmo más rápido, controlando perfectamente su longitud y
potencia. Con esa idea, Leon quiso fabricar guantes para esconder otras armas y venderlas en masa.
¡Leon no abandonó esa idea, sino que recibió una segunda y aparentemente mejor!
"¡Si puedo meter pociones dentro de ese guante y hacer que esta nave enana inyecte pociones en los cuerpos,
podré sacudir todo el mercado de pociones!" León sonrió.
Los defectos de la poción eran que tenía que beberlos y esperar a que surtieran los efectos.
¡Pero con este guante, quería lidiar con esos defectos!
¡Golpear! ¡Golpear!
"Leon…" La voz de Celes vino del otro lado. "¿Recuerdas mi regalo?"

Ella vino con un regalo.

Capítulo 157 Un ejército problemático

Capítulo 157: Un ejército problemático.
Celes había prometido darle un regalo a León.
Y ahora que sus sentimientos la empujaban a trabajar más duro, Celes no pasaba su mañana habitual
durmiendo sino trabajando. ¡Sus habilidades de alquimia dieron sus frutos y vino con el regalo!
León estaba emocionado de verla. "Sí. Lo recuerdo bien".
Al ver sus ojos excitados, Celes se sintió mucho mejor y sacó la calavera negra.
Había sido encantado y se convirtió en un objeto legendario.
Si bien creó una de las mejores pociones que Leon podría vender por una gran suma, Leon sabía que la gente
común era el objetivo principal de todos los negocios. Era importante tener artículos que los plebeyos
pudieran pagar, por lo que Leon quería que su vampiresa creara tales pociones.
Además, si bien el cráneo negro podía crear una poción de alta calidad, absorbía demasiado maná de Leon.
Incluso con sus estadísticas dominadas, Leon podía crear, como máximo, algunas pociones. Luego tendría que
descansar y pasar tiempo holgazaneando en su habitación.
Dado que ese elemento legendario no absorbió su resistencia, Leon ya pensó en crear algunas pociones de alta
calidad y luego entregarse a su excitado zorro.
Y eso hizo que León se sintiera mal ya que Celes aún era virgen.
Han pasado al menos diez días desde que reventaron la cereza de Louise.
Celes no había hecho ningún escándalo, pero sus celos eran obvios. Louise también se burló de que cuando
Leon estaba ocupado en su herrería, estos dos podían hacer tanto ruido que Leon conocía sus argumentos.
Celes sonrió como si no pudiera ver los ojos de su amada. "Lo hice."
Sacó un vaso con agua cristalina. No parecía una poción, pero Leon se sorprendió gratamente al ver sus
estadísticas y escuchar sobre el proceso de creación.
¡Su vampiresa podría hacer miles de esas pociones solo con una poción de alta calidad!
"¡Bien hecho, Celes! ¡Siempre creí en ti!" León estalló de felicidad, tomando a Celes en sus brazos. Besó sus
labios y dominó su pequeña boca.
Fue tan fácil porque Celes todavía estaba un poco molesto por el hecho de que aún no la había deshuesado.
Pero cuando su amado entrelazó su lengua con la de ella y le chupó la saliva, no pudo quedarse quieta y no
hacer nada. Sus sentimientos se apoderaron de ella y le correspondió el beso, derritiéndose en él.
Los sonidos descuidados se apoderaron de la habitación y duraron bastante tiempo.
Después de eso, ambos sin aliento, Leon le dio asiento a su vampiresa y le presentó su proyecto. Habló sobre su
plan para los guantes y cómo combinaría eso con sus pociones.
"Si hay algo que puede inyectar pociones en los cuerpos, entonces solo puede ser la nave de los enanos". Leon
confiaba en ese concepto y en sus habilidades.
Tenía el martillo divino, después de todo.
Celes asintió, animándolo. Estaba encantada de saber que ella era una pieza tan importante en el plan de su
amado, queriendo trabajar aún más para él.
Pero sus ojos también traicionaban sus sentimientos, y lo deseaba más que nunca.
Leon captó la indirecta y le dijo que le dejara una puerta abierta para esta noche.
"Voy a salir limpio". Leon dijo eso mientras se limpiaba las marcas de quemaduras de su cara.
Celes se rió entre dientes e hizo lo mismo mientras las manos de su amado dejaban un poco de suciedad en su
ropa y curvas. Entonces me quedaré holgazaneando el resto del día.
Y con esas palabras, la pareja se dedicó a sus deberes.
Era tan fácil hacer ranuras para pociones en su guante.
Leon no tuvo ningún problema con eso.
Sin embargo, cuando se trataba de usar la nave enana para inyectar pociones en su cuerpo, Leon encontró
algunos problemas. Bueno, en el sentido común de la Tierra, carecía de conocimientos de programación. Y no
era como si hubiera aprendido ese oficio de la mejor fuente, ya que Leon atrapó a un joven prodigio, nadie
significativo.
Se sentó y se alborotó el cabello. "Maldita sea."
Sería tan agradable comenzar un nuevo negocio. Leon estaba interesado en cómo progresaría eso. ¿El sistema
destacaría su tienda o le pediría que pague por la publicidad? Tal vez, le pediría que pague por los anuncios, o
Leon tendría que hablar con otros dueños de tiendas para comenzar una nueva fama.
Leon se arrepintió un poco de haber ignorado su fama [Ender], ¡pero la leche ya se había derramado!
"Puedo tratar de vender pociones, pero sería mejor dejar caer dos artículos a la vez... Hacer que la gente se
acostumbre a los guantes y las pociones...". Leon suspiró y salió de su herrería.
Se dirigió directamente a su baño.
En su camino, Leon vio a Alexandra cuidando sus curvas. Trabajó su cuerpo con tanta pasión que León se
quedó clavado en el suelo, observándola sudar y tensar los músculos. Pensó que ella trabajaba más duro que
cualquier otro luchador de la Tierra, pero eso era claramente un sesgo aquí.
Leon negó con la cabeza con una sonrisa y la dejó sola.
Alexandra siguió su espalda antes de volver a su rutina: su ritmo disminuyó significativamente.
Debajo de la ducha, Leon pensó en su proyecto. "Debería dirigirme al Reino de los Enanos y obtener más
conocimiento sobre su oficio. Esa es la única forma de mejorar mis planes de negocios... También le dije a
Louise que su búsqueda en ese reino no será un problema..."
Leon creía que podría robar con éxito las llamas de los enanos gracias a su martillo divino. No era como si
estuviera pensando en formar una buena relación con ellos.
Si pudiera ocultar la identidad de su martillo, Leon usaría sus habilidades de herrero para sacarlos del lado
bueno y luego infiltrarse en su reino para robar las llamas.
"Soul Weapons and Mecha..." El corazón de Leon se estremeció al pensar en algo... "Esos hijos de puta pueden
crear un ejército problemático si combinan esos dos elementos... Necesito un concepto de arma de alma para
mi proyecto de guantes... ¿verdad?"
¡Con el conocimiento de Leon, podría pensar en una forma de infiltrarse en el Reino de los Enanos!
También podría usar el conocimiento y las misiones de su gremio.
Pero por ahora, Leon dejó el baño todo limpio.
Por lo tanto, sabía que tenía un asunto más importante entre manos.
¡Su vampiresa lo necesitaba!

Capítulo 158 Ella es natural [R-18]

Capítulo 158: Ella es natural [R-18]
Leon se había puesto al día con los principios de este mundo, descubriendo que las mujeres atesoraban más
que suficiente.
Y aunque no estaba mal, la razón de tal cosa preocupaba a Leon. Su adorable zorro no sabía qué hacer a
continuación para recibir una noche con su amado. Incluso pensó que necesitaba desbloquear más de sus
recuerdos para que Leon la llenara y hiciera que otra parte de ella se enamorara de él.
¡Pero todo lo que tenía que hacer era ir por él!
Leon estaba en camino de enseñárselo a su vampiresa.
Ahora que su fase de excitación con Louise había terminado, se sentía más culpable por dejarla sola. Bueno, era
la emoción básica en una relación de harén. Pero solo unos pocos hombres se sentían así, ya que la mayoría de
los hombres en el harén simplemente pensaban más en sí mismos y sabían que sus mujeres entendían lo que
habían firmado.
¡Golpear! ¡Golpear! ¡Golpear!
Leon llamó a la puerta de la habitación de su vampiresa.
"Adelante." La voz de Celes le abrió la puerta a Leon.
Entró e instantáneamente notó a Celes sentada en un camisón negro en su cama. Era bastante transparente, lo
que le permitió vislumbrar su abundante pecho y su enorme areola que Leon había visto por primera vez en la
fortaleza. Desde entonces, había pensado en esos picos más que suficiente.
Tenía los brazos detrás de la espalda, sacando esas tetas. Celes tenía las piernas unidas a la altura de los
tobillos: toda su postura tenía una mezcla de timidez y sensualidad. Su hermosa cara mostró la mayor parte de
esa excitante mezcla, mientras sus labios se cerraban con fuerza y sus ojos brillaban con impaciencia y lujuria.
Leon se quedó clavado en el suelo después de verla curvar levemente los labios.
Eso fue, naturalmente, porque Celes había visto que su apariencia hizo que Leon se pusiera más duro y
asombrado mientras la miraba boquiabierto aturdido de pies a cabeza, recorriendo algunos círculos alrededor
de sus curvas.
Su habitación también olía a nada más que a su fragancia fresca. Leon inhaló gran parte de eso y lentamente
cerró la distancia, solo para caer con impaciencia sobre Celes.
Él la tomó en sus brazos y le plantó un beso en los labios. "Vampiro sexy..."
"¿Te he llenado con más energía?" preguntó Celes, cerrando los ojos para sentir más los besos de su amado.
Leon no pensó demasiado en sus palabras y en lo que se escondía detrás de esa pregunta. Le comió más el
cuello, mordiendo su carne suave y dejando más marcas rojas.
"Sí." Respondió genuinamente y continuó con sus besos.
Y como el pecho de Celes había llamado su atención, Leon inconscientemente agarró su pico, sopesándolo. No
podía retirar la mano, así que añadió más fuerza y amasó esa teta suave pero firme. Su vampiresa gimió más en
sus brazos, envolviéndose alrededor de él.
Se sentía más feliz ya que había dejado el mismo efecto que Louise en su amado. Ese astuto se había estado
burlando de ella y, naturalmente, Celes no quería perder.
Ahora que Leon se había ido en su suavidad, besándola y acariciándola continuamente, Celes hizo lo mismo,
oliéndolo y plantando besos en su cuello.
"Quitate la ropa." Celes pronto descubrió que la ropa de su amado era una parte molesta.
Esas palabras despertaron a León de su estupor. Recordó que Celes también era virgen y necesitaba que él
también la introdujera adecuadamente en el mundo sexual. Ella siempre desprendió muchas vibraciones
maduras y contaba con abundante experiencia mundial, y aún ahora lo tentó a comérsela de tan buena manera
que Leon se olvidó de eso.
Afortunadamente, solo acarició sus senos a través de su camisón y le chupó la sangre del cuello.
"Como desees, mi vampiresa." Leon sonrió y se quitó la camisa, dejando al descubierto su pecho desnudo.
Aunque no la había llamado a través de un título de realeza, Celes se sentía como una reina y aún más, sus
labios se curvaron en una amplia y deslumbrante sonrisa. Miró boquiabierta el pecho y los abdominales
cincelados de Leon, luego deslizó sus dedos por esos músculos, inhalando más de su olor.
Leon mantuvo sus deseos bajo control cuando Celes exploró más de su cuerpo. Ella entendió que tenía todo un
privilegio y consentimiento. Sabía que a su amado no le importaría si le mordía los pezones y más.
"¿Gusta?" Leon se rió entre dientes y se inclinó más cerca de su oído único, comiendo su lóbulo.
Celes asintió y gimió en aprobación, derritiéndose lentamente en el cuerpo desnudo de su amante. León,
naturalmente, recuperó el acceso a su cuello, por lo que mordió esa carne suave y chupó más de su sangre.
"Quiero llenar tu coño y chupar tu cuello al mismo tiempo". Leon sopló sus deseos en el corazón de su
vampiresa mientras chupaba su pezón ahora.
El corazón de Celes saltó por esas confesiones contundentes, y arqueó su pequeña cabeza hacia atrás, dándole
más y más acceso a su pecho. Sus ojos se cerraron, imaginó la escena, y algo de su miel se escapó de su vagina.
"Será nuestra posición memorable, mi vampiresa... Pero antes de que lleguemos a ese punto, necesitas ver más
de mí... Yo también quiero verte desnuda". Leon dejó ir las curvas de Celes y se levantó de la cama. Hizo un
espectáculo de striptease rápido y se quitó los pantalones y el resto de la ropa, dejándose solo en calzoncillos.
Celes inhaló mucho de su olor sudoroso mientras posaba sus ojos rojos y temblorosos en su pene erecto. Su
miembro aún estaba escondido en su cueva, pero Celes podía ver cuán prominente era su amado.
Leon falló su espectáculo de burlas ya que rápidamente sacó su polla. Eso hizo que Celes sonriera
ampliamente, pero tenía un toque de nerviosismo, esperando internamente que su lado loco la ayudara a
comerse esa polla. No estaba asustada sino contenta de que su amado estuviera tan bien dotado, pero sus
nervios la hacían sonrojarse cada vez más.
Celes levantó la parte superior de su cuerpo y extendió su mano para acariciar la polla de Leon. "Me falta la
experiencia para comentar sobre tu polla, Leon... Pero verte tan cerca y acariciando ese eje con esas venas
deslizándose en mi palma me hizo correrme ya un par de veces...".
"Si sigues acariciándome así, me correré". Leon sonrió, mirando profundamente a su vampiresa, cuyos nervios
se derritieron lentamente mientras jugaba con su polla.
Sintió que pronto haría desaparecer su lado avergonzado y sacaría a esa mujer loca de afuera.
Así, para disfrutar más de su tímida vampiresa, Leon abrió los labios y preguntó. "¿No deberías chuparme?"
Capítulo 159 Una Posición Memorable 2 [R-18]

Capítulo 159: Una posición memorable 2 [R-18]
Celes ya había hablado con su amado sobre mamadas y algunas otras actividades sexuales.
Eso fue después de su confesión que ambos aprendieron más el uno del otro. Y aunque no estaba sorprendida
de que él le ordenara que le chupara la polla, Celes estaba gratamente sorprendida de verlo deseando tanto su
cabeza.
Ella lindamente asintió y sonrió, luego se inclinó más cerca de su polla.
Leon había filtrado parte de su líquido preseminal, por lo que Celes se concentró en eso. Respondiendo a sus
deseos, la vampiresa sacó la lengua y tomó un poco de su líquido. Ella lo probó. En su caso, era más agrio pero
tan adictivo como en el caso de Louise. Celes rápidamente quiso más de su amado.
"¡Mmm!" ¡Y antes de que ella se diera cuenta, Celes había devorado su glande, deslizando sus labios sobre su
punta!
Al igual que Louise, movía la cabeza con pasión, pero la fuerza de succión de Celes era muy diferente. Leon
instantáneamente perdió fuerza en sus piernas cuando ella lo lamió. ¡Movió su lengua alrededor de él como
una serpiente! Pero, por supuesto, Leon creía que esta habilidad provenía de su raza.
Las vampiras eran realmente unos tontos asombrosos.
"Celes... vendré pronto". Leon no pudo seguir el ritmo de sus instintos y ya le había dicho sobre la liberación
inminente. Lentamente encontró ayuda para sí mismo poniendo sus manos sobre su pequeña cabeza.
Y luego, dejó que sus deseos se apoderaran de él.
"¡Próximo!" Leon gimió y dejó salir todo a la vez.
Sintiendo su liberación, similar a su vampiresa absorbiendo su salud, maná, resistencia y alma, la respiración
de Leon se volvió errática y su agarre más fuerte. Sintió que se corría a cántaros dentro de ella y que su
liberación congeló el tiempo.
Y mientras miraba hacia abajo, Celes lo tenía quieto en su boca, sin dejar que ni una gota de su semilla
recorriera sus labios.
"Increíble… Increíble…" le ordenó Leon a su amada, luego le rogó que lo dejara ir, tomando lentamente su
lugar en la cama. Se tumbó y miró al techo, sin aliento.
Ahora, Leon sintió que entendía por qué tantas razas estaban dispuestas a aparearse con vampiros y mezclar
su linaje con ellos. Era tan bueno, y eran instintivamente buenos en cosas íntimas.
¡La polla de Leon todavía estaba erecta y temblaba de más!

El ojo de Celes brilló con lujuria y amor cuando lo vio. "¿Puedo chuparte más?"
"Adelante." León se preparó para más desafíos.
Su vampiresa apretó su miembro con sus dos manos y lo volvió a poner en su boca. Bombeándolo, Celes azotó
alegremente a su amado con la lengua, jadeó, luego lo dejó ir y esparció más saliva alrededor de su eje.
Mientras su polla brillaba por completo, Celes una vez más lo devoró, chupándolo.
Su mano izquierda soltó su polla. Lo llevó hasta su coño y se tocó mientras comía a su amado.
Leon también la había estado sosteniendo con su mano, manteniéndola en su cabello, pero pronto ni siquiera
pudo hacer eso ya que su vampiresa era demasiado buena. ¡Ella era natural!
Él la dejó ir y simplemente disfrutó del placer alucinante que lo atravesaba.
"Volveré otra vez... Muy pronto". Fue muy pronto esta vez.
Celes sonrió y respondió con sus labios en la punta de su amado. "Yo también vendré pronto".
León sonrió.
Por fin, estalló por segunda vez, llenando la boca de Celes. Ella también vino, lo que provocó que no pudiera
beber por completo la semilla de Leon. Mucho se derramó sobre la cama.
Leon levantó lentamente la parte superior de su cuerpo y miró a su vampiresa.
Su cabello pegado a sus curvas mientras sudaba tanto. Pero ella resplandecía sin embargo, aún más, por su
sudor, pero esa sonrisa pervertida y satisfecha seguramente la hacía brillar más. Leon vio esa satisfacción y
sintió una nueva y profunda energía dentro de sí mismo: su polla volvía a subir.
"Me encantaría chuparte el coño, pero quiero follarte más y más". Leon trajo a Celes a su regazo: su polla
frotando su húmedo y sediento coño. "Tomaré tu coño para el desayuno. Ahora, quiero que esta noche sea
memorable". 𝒇𝒇𝒇𝒇wℯ 𝒇𝒇o𝒇el. 𝒇𝒇𝒇
"Sí, fóllame…" Celes sonrió amorosamente y permitió que su amado la guiara.
Siguiendo sus palabras, ella levantó su trasero, luego Leon provocó su arranque durante unos segundos, solo
para introducir su punta dentro de su coño. Lentamente se abrió paso a través de su estrecho canal, estirando
y frotando sus entrañas. Pronto, el trasero de Celes golpeó los muslos de Leon, envolviéndolo por completo por
dentro.
Se estremecieron por ese sentimiento.
"Chupame la sangre". Leon dijo, inclinándose hacia el cuello de Celes.
Celes prestó atención a sus palabras.

Y pronto, sus almas también se conectaron. La sangre se les subió al cuello. Leon se sintió hincharse dentro de
Celes, y su coño también se contrajo a su alrededor. Simplemente se abrazaron, chupándose el uno al otro, con
sus lugares privados estrechamente conectados.
Todavía no se habían movido, pero se sentía como si Celes y Leon se hubieran follado completamente.
Sin aliento, soltaron sus cuellos y se miraron.
"Te amo."
"Te amo."
Dijeron eso al mismo tiempo.
Riendo, Leon deslizó su mano por las curvas de Celes, deteniéndose en la nalga. Amasó esa carne suave, luego
abofeteó, dándole a Celes la orden de mover ese trasero hacia arriba.
Ella movió ese trasero sobre su polla, llevándose lentamente a un placer carnal. Era hora de igualar esa
sensación que acababan de sentir y alcanzar nuevas cotas de placer. Celes era naturalmente lenta y se tomaba
su tiempo, pero su apretado coño hacía maravillas, y ese culo regordete golpeando los muslos de Leon
producía sonidos tan fuertes y adictivos.
Leon se apoderó de ella lentamente y la obligó a quedarse quieta encima de él.
Sacudió sus caderas desde abajo y lentamente penetró más profundamente en ella.
"¡Ah! ¡Ahhh! ¡Ahhhh!" Celes gimió fuerte, oh tan fuerte.
Sintió a su amado hurgando en su vientre, queriendo embarazarla. Pero como Celes ya había dicho que no
estaba interesada en los niños, no se quedaría embarazada sin importar nada. Sin embargo, nada impidió que
Leon la llenara hasta el borde y, naturalmente, sabía que no tenía que contenerse ni usar ninguna protección.
Él frotó egoístamente sus entrañas, envainando y desenvainando su polla en ese apretado tarro de miel.
Por fin, Leon gimió. "¡Vendré!"
"¡Todavía no! ¡Yo también estoy muy cerca!" Celes gimió y le rogó que no la llenara todavía.
Leon recordó la valiosa sabiduría de su libro ero y apagó todas las luces.
Abrazó con fuerza a su vampiresa y aumentó su velocidad, conteniéndose con todas sus fuerzas.
En esa oscuridad, Celes se volvió mucho más sensible.
Finalmente, le dio luz verde a su amado.
¡Y ambos vinieron, mezclando sus jugos!

"¡Ohhhhhh!"
Ambos gimieron como nunca antes. Tantos jugos llenaron a Celes y pronto se filtraron afuera cuando Leon
dejó su coño, concentrándose solo en el placer que dejaba su mente en blanco. Él la abrazó con cariño, pero
incluso esa suavidad se volvió inexistente; sólo su calor permaneció en su corazón mientras se corría.
Celes estaba igual, solo pensando en su amado y su amor, con ese placer borrando el mundo a su alrededor.
Pronto, se miraron a los ojos, se besaron y abrazaron.
La noche continuó, pues León era un hombre con mucha energía.
¡Y Celes tenía muchas de sus necesidades, vaciando incluso al hombre cuyo cuerpo era divino y Eros!
Capítulo 160 ¡Vamos al reino de los enanos!

Capítulo 160: ¡Vamos al Reino de los Enanos!
Heaven Library Guild era un terreno perfecto para las personas que querían usar su poder y sus habilidades
únicas para crecer en fuerza y volverse famosos. Con su inteligencia, tenían un montón de información sobre
los gremios oscuros (Leon sospechaba que tenían algunas relaciones comerciales con ellos para obtener más
conocimiento sobre sus habilidades) y sus plataformas para ver a través del talento de las personas
naturalmente tentaron a muchas estrellas prometedoras a unirse a ellos.
León no era una de esas personas.
Algunas personas podrían estar enojadas con él por sus planes, pero Leon simplemente quería iniciar un
negocio y tener un ingreso pasivo. Entendió que pronto subiría de nivel a través de las funciones de búsqueda
y que siempre podría realizar una búsqueda para obtener un artículo deseado a través de su tienda del
sistema.
No estaba limitado como los demás.
Sus estadísticas crecieron tanto que Leon creía que también podría solucionar los problemas de sus mujeres
en el futuro.
Aun así, Leon había chocado contra la pared.
"Te has convertido en miembro del gremio principal. Eso te hace elegible para iniciar misiones y unirte al
sistema de clasificación..." Madam Jasmin hablaba con normalidad, pero Leon había captado indicios de su
agotamiento. "El Reino de los Enanos es demasiado peligroso, y preferimos no ser enemigos de ellos".
Leon había acudido a ella para preguntarle sobre misiones en el reino de los enanos ya que Louise tenía una
misión allí, y quería progresar en sus proyectos utilizando su conocimiento.
Pero incluso este gremio no quería causar demasiados problemas en las tierras de la gente baja.
Leon infirió que las conexiones de The Dwarven Kingdom superaban en número a los amigos del Heaven
Library Guild y que su gremio también necesitaba las habilidades de herrería de los chicos bajos.
Él asintió y cambió de tema. "No soy una persona que hable de tu cansancio, pero soy amiga de Else, así que
puedes dárnosla por unos días si ahora es un gran problema".
"Ella es una buena niña..." Madam Jasmin curvó sus labios en una hermosa sonrisa. "Pero su sed de
conocimiento y experiencia de primera mano se volvió demasiado después de tu aventura con ella. Tendré en
cuenta tu oferta. Sin embargo, ¿cuándo te irás?"
Parecía que esta chica había visto a través de Leon.
Él sonrió débilmente. "Pasaré unos días holgazaneando".

"¿Está todo listo?" Después de revisar el carruaje, Leon miró a su doncella dragón, cuyas manos estaban
bastante sucias.
Alexandra se dio la vuelta, bajó las tetas, hizo una reverencia y respondió con una amplia sonrisa. "¡Todo está
listo y listo, Maestro!"
Leon compartió su entusiasmo y chocó los cinco con su doncella dragón. "¡Bien hecho! ¡Llamaré a otros y
comenzaremos una nueva aventura!"
"¡Si señor!" Alexandra sonrió, alimentando a Leon con más energía.
Ha pasado alrededor de un mes desde que León llegó a Madevin Metropolis. Se convirtió en miembro de
Heaven Library Guild, compró una buena casa e incluso hizo algunos amigos. Había pasado algún tiempo con
nuevos amigos, pero eran principalmente Arthur y sus mujeres.
También se estaban preparando para una nueva aventura, por lo que Leon habló más sobre el mundo y sus
vidas fuera de la ciudad.
Else también lo visitó algunas veces, lo que obligó a otros a jugar con ella y hablar sobre la historia.
En su casa, León pasaba los días holgazaneando. Al contrario de su horario habitual, León solo dedicaba una
hora a la herrería y la sastrería, y luego dedicaba el resto de su tiempo a sus mujeres. Tenía citas y cosas
comunes con ellos. Cuando llegó la noche, Leon usó todo su maná para crear pociones de alta calidad.
Sus compañeros usaron eso como una oportunidad para intimidarlo, montando su cuerpo más sensible.
Y ahora, era hora de otra aventura.
Su sirvienta dragón seguramente estaba emocionada por eso porque ella era un dragón. No le importaba vivir
en una casa, pero dar la vuelta al mundo y hacer cosas era mucho mejor, incluso mejor con su amo a su lado. Y
mientras a los dragones les encantaba infundir miedo, el dragón altruista anhelaba diferentes perspectivas.
¡Ella contagió a Leon con su emoción!
Además, Alexandra fue la única que llamó a Leon a través del título [Maestro]. Si bien Leon tardó un tiempo en
aceptar eso, ahora le gustaba ese apodo. Alexandra era simplemente una criada leal y muy diferente de sus
mujeres. Había algo sobre las sirvientas y la fantasía sobre ellas.
Leon mantuvo sus fantasías encerradas en su corazón.

"¡Nos llevará un tiempo llegar a los enanos!" León estiró sus miembros.
En ese momento, Celes y Louise salieron de la casa. Sus inventarios estaban listos para una aventura y parecían
estar bien con un nuevo viaje. Por supuesto, Celes extrañaría su cama y su baño, pero regresaría regularmente
a esta hermosa casa.
Fue tan hermoso porque su amado hizo tantas cosas buenas por ella allí.
Louise estaba en el lado opuesto.
Estaba bien mientras Leon estuviera con ella.
"El Reino de los Enanos..." Louise apretó sus pequeñas manos. "Desbloquearé más recuerdos pronto".
"Vas a." Leon le dio unas palmaditas en el hombro y sonrió.
Louise correspondió a su sonrisa, sus mejillas cálidas. Sintió tanta felicidad y calidez de su amado que no podía
imaginarse olvidándose de él otra vez. No podía imaginar que a sus otras partes no les gustara él.
Con esas emociones, ella lo miró fijamente.
Leon le revolvió el pelo y todos subieron al carruaje.
Y así, comenzó la nueva aventura.
Las mujeres de Leon habían conmocionado a las comunidades en Heaven Library Guild.
Personas de alto nivel habían visto a través de las identidades de Celes, Louise y Alexandra, por lo que tenían
planes para atraerlos y matarlos por su pasado. Alexandra había cometido muchas atrocidades, Celes siguió las
órdenes de Su Alteza y la presencia de Louise simplemente asustó a quienes conocían su identidad.
El adorable zorro también era demasiado egoísta a sus ojos.
Pero Madam Jasmin había visto a través de eso.
Cuando el carruaje de Leon salió de su capital, envió ayudantes de confianza para mantener a Leon a salvo.
Trabajaban en las sombras como aquellos que planeaban lastimar a las mujeres de Leon.
Eso se equilibró y no ocurrió ninguna batalla.

Sin embargo, no sería así por mucho tiempo.
Todos creían que tendrían su oportunidad en el futuro, sin tener idea de la velocidad de crecimiento de Leon y
su familia.
Capítulo 161 El Señor de la Muerte

Capítulo 161: El Señor de la Muerte
León y su familia se habían aventurado a través del desierto, pueblos, ciudades e incluso grandes capitales de
muchos reinos. Su gremio les había facilitado las cosas y absorbieron fácilmente las nuevas tierras como
turistas. Fue divertido, particularmente su tiempo en el carruaje, ya que la amada de Leon quería tenerlo solo
para ellos.
Leon y los demás rara vez dormían cerca uno del otro como en los buenos tiempos.
Pero cuando sucedieron esos momentos, Leon se aseguró de tener a dos adorables mujeres durmiendo sobre
su pecho.
A Celes y Louise no les gustaba eso.
El adorable zorro a menudo se quejaba de que el aliento de Celes apestaba a licor y sangre.
¡La vampiresa le lanzó las mismas quejas, diciéndole a su amado que su zorro olía como una bestia salvaje e
indómita!
Sin duda fue un momento divertido…
Finalmente, el Reino de los Enanos estaba ante los ojos de Leon.
"La gente también lo llama El Reino Subterráneo". Leon levantó los ojos y miró fijamente la aguja de la gran
montaña.
Con sus sentidos, lo había visto a través de las nubes y vio fácilmente su contenido. En el punto más alto, León
vio un pequeño edificio con tipos bajos que miraban a los visitantes. Quienes pudieron verlos terminaron en
una lista de advertencia, y sus apariciones alcanzaron las regalías.
Leon lo sabía, y deliberadamente atrajo la atención de los enanos.
Por otro lado, sus mujeres pasaron por un cambio significativo. El cabello largo de Celes se convirtió en una
larga cola de caballo. Llevaba gafas negras y cubría sus curvas con largas túnicas blancas. El cabello largo de
Louise se convirtió en dos colas gemelas bajas que colocó sobre su pecho. Se puso un sombrero en la cabeza y
envolvió sus colas alrededor de su cintura.
Eran tan grandes que Louise también necesitaba una túnica larga.
Parecía una pelota pequeña y esponjosa, lo cual era un poco lindo.
Alexandra continuó con su traje de sirvienta. Siguiendo la guía de Leon, se ató el cabello en un moño, usó
anteojos normales y siguió sonriendo. Lo último no fue un problema ya que había estado emocionada con la
aventura desde entonces. Para el disfrute de Leon, ¡su nuevo peinado y anteojos lo complacieron!
¡Era una criada muy sexy!
Esos tres no miraron al pico de la montaña.
"No puedo creer lo fácil que puedes cambiar tu apariencia..." Leon no creía que solo unos pocos cambios
convertirían a sus mujeres en otra persona, pero esa era la verdad.
¡Las mujeres eran en verdad existencias enigmáticas!
La amada de Leon y su doncella dragón simplemente le sonrieron.
Pronto, Leon bajó la pendiente y entró en el reino de los enanos.
La sonrisa de Louise desapareció cuando entró en un mundo diferente.
Primero, la capital de los enanos estaba bajo tierra, por lo que se sentía como si todos hubieran entrado en un
mundo nuevo. Además, tenía recuerdos desagradables de los enanos, y su corazón se volvía más frío cada vez
que era una enana feliz.
Los enanos eran conocidos por sus habilidades como herreros, pero su cerveza también era de primera
categoría.
León vio muchas herrerías y restaurantes. Además, debido a los negocios de los enanos, toda la capital estaba
llena de diferentes razas.
Leon había visto muchas razas nuevas en Heaven Library Guild, pero el reino subterráneo tenía un encanto
nuevo y diferente que lo hacía sentir como si también estuviera en un mundo diferente.
"Me uniré a uno de los herreros e invadiré lentamente sus filas". Leon le dijo a sus amados.
Su plan era bastante simple. Como solo podía confiar en sí mismo, haría parecer que quería vivir en el Reino de
los Enanos y pulir sus habilidades bajo ellos. Por esa razón, trajo a sus amados aquí. Su apariencia debería
convencer a los enanos de que vinieron aquí con una intención genuina.
Leon también tenía bastante buena información de su gremio.
"Cuando ven que alguien que no sea un enano tiene buenas habilidades de herrero, lo tientan con su
conocimiento, luego lo vuelven adicto a sus herreros y habilidades. Y cuando el alma tan tentada cae en sus
manos, lo limitan y mantienen limitado su talento. ." León sonrió.
A él no le sorprendió en absoluto la noticia, y tampoco a sus mujeres.
"¡Consigamos una posada para nosotros, luego pruebe la cerveza de este reino!" León encontró la mejor
posada, compró un lugar para su carruaje y luego hizo turismo por la capital.
Y mientras Celes y Alexandra estaban bastante interesadas en este nuevo mundo por motivos personales,
Louise se mantuvo fría e indiferente. Ella solo sonrió cuando Leon le dio de comer en el restaurante. Cuando
Alexandra habló de los cuerpos cortos de los enanos y de cómo la ciudad se hizo teniendo en cuenta su altura,
Louise la miró fijamente.
Cuando Celes comentó sobre la cerveza de alta calidad, Louise apretó los dientes y frunció el ceño a la
vampiresa.
Fue entonces cuando Leon supo que no podía hacer nada.
Sacó un libro y empezó a leerlo.
[La conquista de la muerte (legendario)]
Leon ya estaba a la mitad de este libro.
"¿Es interesante?" preguntó Luisa.
Leon le sonrió torpemente ya que sus ojos le decían que se sentía sola ante la doncella dragón y la vampiresa.
"Es... Verás, el Señor de la Muerte podía convocar y convertir a otros en criaturas no muertas... Pero él mismo
no era un no muerto ni inmortal... Era simplemente... un humano".
Louise entrecerró los ojos.
"Estamos de vuelta en casa, mi señor." Un esqueleto negro con túnicas blancas y ojos dorados se arrodilló ante
un hombre cuya piel era mortalmente pálida pero joven.
El hombre apareció de unos veinte años, vestido con ropa de cuero negro. Sus ojos brillaban dorados,
reflejando el reino subterráneo.
Pasó por alto el esqueleto negro y se acercó a la barandilla, supervisando la tierra familiar pero desconocida.
El esqueleto negro se puso de pie, palmeó su túnica y se acercó a su maestro. "Los enanos desprecian a
aquellos que llaman a su reino El Reino Subterráneo... Es tan divertido, ¿no es así, mi señor? ¡El nombre
original prevaleció a pesar de sus intentos de cambiarlo!"
El hombre se burló y levantó las manos. "¿Puedes verlo, Úrsula? Tus grilletes ya no pueden retenerme. Estoy
de vuelta".
Los dientes del esqueleto negro castañetearon. "¡El Señor de la Muerte ha vuelto!"
[El maestro del gremio del grimorio perdido, el señor de la muerte (???) Lv. 90 HP: 300 000/300 000 PM: 600
000/600 000]
"Recuperaré lo que es mío". Los ojos dorados del Señor de la Muerte brillaron intensamente. Dentro de esos
tonos, serpientes oscuras daban vueltas. "Los grilletes de esta perra se debilitaron... lo que significa que el
propósito de mi gremio ha fallado".
El esqueleto negro cayó al suelo, arrastrándose ante su amo. "¡Hemos matado a tantos seres de otros mundos
como pudimos, mi señor! Nosotros... ¡Incluso hemos confirmado que algunos de ellos son los cuerpos de la
humanidad máxima!"
"Cállate… Sé que lo hiciste." El Señor de la Muerte chasqueó la lengua. "Los cinco pueden aparecer en este
mundo gracias a mí. Rompí el sistema y lo arreglaré... Esa es la única forma de convertirme en la muerte".
"¡Lo lograrás, mi señor!" El esqueleto negro 'lamió' las botas de su amo.
"Consígueme la posada. Y hazte crecer la piel para cubrir tu identidad. Recorreré este reino primero para
recordar los buenos viejos tiempos...". El Señor de la Muerte se dio la vuelta y salió a caminar.
Su esqueleto negro se convirtió en humano y fue a reservar una habitación para su maestro.
Capítulo 162 Planes

Capítulo 162: Planes
Leon no tuvo ninguna dificultad para encontrar trabajo en la herrería de los enanos.
Había sido marcado por fuerzas externas como alguien poderoso, vino aquí con su familia y trabajó
genuinamente bajo las órdenes de los enanos, absorbiendo su conocimiento y experiencia. Los enanos aún
dudaban de sus orígenes, pero Leon se enfrascó en sus habilidades y no podía preocuparse por ellas.
Cuando regresó a casa, las futuras esposas de León lo mimaron y lo ayudaron a relajarse después del trabajo.
"Deberías venir a mi trabajo mañana".
Esas palabras sorprendieron a sus amados ya que pensaron que los enanos sospechaban demasiado de él.
León negó con la cabeza. "Es alguien más".
Celes, Louise y Alexandra abandonaron su vivienda actual en el reino de los enanos.
A Louise no le gustaba salir para ver tantos enanos, pero su hombre le habló de alguien interesante y
necesitaba su presencia, al igual que la vampiresa y la doncella dragón.
Al recorrer las calles, todos se preguntaban quién podría ser.
Por fin, los amados de Leon lo notaron parado no muy lejos de su lugar de trabajo actual. Leon no estaba solo y
tenía dos presencias impactantes a su lado derecho.
Uno de ellos era un hombre con ropa de cuero negro y cabello blanco. Parecía enfermo ya que su piel era
demasiado pálida, incluso para los estándares de los vampiros. Sus ojos dorados brillaban con misteriosos
destellos negros, que eran serpientes dando vueltas en sus tonos.
A su derecha, el hombre tenía a otro hombre cuyo cabello era azul y largo. Tenía una piel más saludable y una
expresión sin emociones; parecía tan falso que las mujeres de Leon comenzaron a sospechar de ellos.
Leon sonrió a su familia y luego se volvió hacia el hombre. "En este punto, supongo que no tenemos que
esconder nada".
El Señor de la Muerte asintió, sonriendo.
Se había fijado en Leon en uno de sus paseos e instantáneamente se dio cuenta de que la identidad de este
hombre era similar a la suya. A sus ojos, Leon era uno de los cinco humanos con cuerpos de humanidad pico.
Encontró divertido cómo ambos terminaron en este lugar.
"No entiendo por qué estás tratando de trabajar con enanos en lugar de obligarlos a trabajar para ti". El Señor
de la Muerte se cruzó de brazos y se apoyó en el edificio.
León negó con la cabeza. "Solo soy un hombre con una pequeña familia. No tengo un ejército como tú".
El Señor de la Muerte entrecerró los ojos. "Suena imposible".
Leon sonrió y agitó la mano, recordando las palabras del espíritu negro, que decía que las personas con
cuerpos de humanidad máxima gobernaban masas y conquistaban mundos con miles de personas bajo su
estandarte. "Corté mi conexión y me convertí en una existencia separada de ese destino".
El hombre de cabello azul jadeó. "¡Imposible!"
Su maestro levantó la mano y detuvo al esqueleto negro disfrazado de hacer ruidos. "Ahogaré este reino en el
caos y recuperaré lo que es mío".
Leon y los corazones de sus mujeres temblaron por esas palabras.
Fue porque la voz del hombre era tan segura y ejerció presión para hacer que sus palabras fueran una certeza.
Leon también sabía que el Señor de la Muerte tenía uno de los poderes divinos, pero aún no sabía que era 'El
Señor de la Muerte'.
El Señor de la Muerte continuó. "Este lugar ha vencido a la vida y la muerte hace eones. Me aferré a la muerte
en ese momento. Si estás buscando un poder relacionado con la muerte, entonces somos enemigos".
"No soy." León respondió secamente.
El hombre sonrió. "Entonces te dejaré moverte libremente durante mi carnaval de la muerte. Usa eso como
una oportunidad para obtener lo que quieres y vete. No dejaré que nadie como tú viva casualmente en mi
reino. Tenlo en cuenta". ƒ𝒇e𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇. 𝒇o𝒇
Leon y sus amados solo podían ver el rostro sonriente del hombre, luego su espalda, mientras se daba la vuelta
y se dirigía a su posada.
-
"El Señor de la Muerte". León suspiró. "Estaba seguro de que existía... Así que salió... Si lo hizo, otros también
deberían estar libres de los grilletes del destino... Esto se está poniendo feo... Debemos subir de nivel".
Leon no se preocupó por sus estadísticas ya que tenía demasiadas, pero estaba preocupado por sus amados y
sus destinos. Louise tenía mucha fuerza bruta dentro de sí misma, esperando ser desbloqueada. ¡Y Celes
también tuvo su misión legendaria! ¡Alexandra también debería poder volverse mucho más fuerte al subir de
nivel!
Leon odiaba el hecho de que su lenta vida estuviera a punto de dar un gran vuelco, pero eso era importante.
Celes compartió sus puntos de vista. "Si él comienza el caos, podemos subir de nivel a los enanos. Sin duda,
invadirá las regalías, para que podamos seguir su estela, entrar al castillo real y arrebatar las llamas. Esto
desbloqueará los recuerdos de Louise. Pero antes ella los desbloquea, deberíamos subir de nivel con los
enanos".
Sus ojos brillaron con un brillo frío.
Louise sintió que estaba en la misma ola que esta vampiresa, la miró con una sonrisa agradable, luego se giró
hacia su amado, asintiendo.
Alexandra permaneció en silencio.
Leon la miró a los ojos y también asintió. "Necesitamos mantener vivos a algunos enanos reales y llevarlos al
Heaven Library Guild. Sus conocimientos y habilidades son preciosos. En cuanto al resto, los mataremos".
Los enanos del pasado no tenían problemas para matar zorros escarlatas en masa, por lo que Leon enfrió su
corazón y se convirtió en lo mismo. También quería que la frialdad de su adorable zorro impactara su corazón
y aliviara su carga, así que Leon hizo exactamente eso y puso su mano en la frente de Louise.
Aunque era imposible que esa frialdad entrara en su corazón, el gesto de Leon calentó a Louise. Sus ojos se
derritieron.
Celes les sonrió y continuó. "Si cinco de ellos salieron, entonces significa que el sucesor del espacio ha venido a
este mundo. Es posible que se haya puesto en contacto con las personas que has masacrado, Leon".
León asintió gravemente.
Celes se rió entre dientes. "A menos que cinco de ellos se unan para conquistar el mundo, el mundo seguirá
existiendo. Sin embargo, creo que es muy poco probable que los cinco sucesores divinos se conviertan en
aliados. El emperador humano tiene muchos asuntos pendientes, y el resto ha sido encadenados a la fuerza.
Vienen de diferentes épocas".
Louise intervino. "Significa que el mundo será el mismo, pero con muchas guerras a nuestro alrededor. Su
negocio, las pociones y el brazo mecánico, podrían salvar a mucha gente. Es el escenario perfecto para
nosotros".
Leon no sabía qué pensar al respecto, así que simplemente asintió y miró por la ventana.
El Reino Subterráneo vivió su propia vida...
Nadie quería causar problemas, porque los enanos eran demasiado valiosos...
Sin embargo, una persona estaba esperando que su gremio llegara a este lugar.
Capítulo 163 Comienza el caos

Capítulo 163: Comienza el caos
Han pasado unos días desde la charla de Leon con El Señor de la Muerte.
Leon detuvo todas sus actividades y simplemente se preparó para lo inevitable en su posada. Sus amados eran
los mismos, afilando sus armas en silencio.
Por fin, el Señor de la Muerte flotó hasta el techo del reino subterráneo.
Su presencia robó la atención de todos.
"La noticia de sus armas del alma llegó a mis oídos, enanos. ¡Incluso con mis poderes, no pudieron utilizar ese
concepto correctamente y necesitaron la influencia de un tercero para derretir y domar la frialdad de mi pozo
subterráneo! ¡Son seres vivos inútiles y sin valor! Te doy por muerto". El Señor de la Muerte se rió en voz alta.
Y mientras mucha gente pensaba que estaba loco, algunos talentos con sentidos excepcionales comenzaron a
huir del Reino de los Enanos. Por desgracia, cuando llegaron a la salida, sus ojos se salieron de sus cráneos
cuando un ejército de monstruos no muertos les impidió el paso.
Los esqueletos negros, los caballeros de la muerte, los liches, los zombis negros, los fantasmas blancos y más.
Todos ellos no podían dejar de sonreír como si fueran suyos, y solo el señor regresó para ordenarlos.
¡Los humanos no muertos y otras razas también estaban extasiados y emocionados de salir y comenzar la
masacre!
El Señor de la Muerte abrió los brazos y llamó a su legendaria mascota. "¡El esqueleto gigante no muerto, cuyos
huesos son la base de este reino, escucha mi orden y comienza el caos!"
Todo el lugar subterráneo tembló. Huesos gruesos y largos sobresalían de las paredes, destruyendo todo a su
paso. Los enanos y sus casas se derrumbaron y murieron. Otras razas corrieron la misma suerte. Al mismo
tiempo, el ejército de muertos vivientes se derramó dentro del reino, comiendo la carne viva.
El Señor de la Muerte no había terminado. "¡Surgir!"
Las almas negras se elevaron a los cielos y se reunieron alrededor de su palma. Tenía un mini orbe negro
flotando a su lado, absorbiendo cada alma muerta. Pronto arrojó ese orbe al castillo real.
Se elevó y expandió durante su vuelo, convirtiéndose en una poderosa masa de destrucción ante el castillo
real.
Pero entonces, el mecha gigante salió de la puerta y lo cortó con su espada ancha y gruesa. Detuvo ese orbe por
no más de unos minutos, luego el maná negro borró su existencia.
¡Bang!
Las puertas reales se convirtieron en escombros y las criaturas no muertas entraron.
"Los cuerpos y las almas son las mejores armas, no algunos trozos de metal. ¡Jaja!" Su señor descendió
casualmente al camino y caminó como si estuviera paseando.
Al mismo tiempo, Leon y su grupo también entraron.
Leon y su familia no estaban en la lista de muertos vivientes.
De hecho, ningún no muerto les apuntó con sus armas.
"Señor hipócrita... ¡Sus no-muertos usan armas!" Louise comentó, solo para recibir una mirada de su amado.
No era el momento de comentar sobre el Señor de la Muerte y su gente. Además, Leon no quería ponerse del
lado malo de este hombre, ya que claramente poseía medios más que suficientes para matarlos aquí. ¡Todo
este lugar era suyo! Sus poderes en bruto también eran absurdos ya que se hizo más fuerte con las muertes a
su alrededor.
Leon sabía que el Señor de la Muerte había subido de nivel inmensamente.
"¡Debemos subir de nivel también!" León gritó, luego se volvió hacia Louise. "¿Puedes sentir algo?"
"¡No puedo!" Luisa negó con la cabeza.
Sería mejor si Louise pudiera sentir las llamas de su raza y luego guiar a su familia allí. Pero si no podía,
significaba que los enanos habían hecho un buen trabajo sellando ese poder. Leon no la culpó y se concentró
en una tarea diferente.
"¡Maten a los intrusos!" Los enanos con sus trajes mecánicos les apuntaron con sus armas.
Leon y sus seres queridos se pusieron a trabajar al instante.
Louise se sintió entusiasmada y saltó primero para enfrentarse a los enanos. Todo su cuerpo brilló con poder
puro, y chispas de fuego la abandonaron... ¡Aplastó su pequeño puño contra el mecha! Su fuerza era tan
diferente a la anterior que la defensa de metal del mecha se derritió en un abrir y cerrar de ojos.
Celes también era mucho más fuerte, y sus hilos ensangrentados derribaron muchos mechas.
Alexandra encantó muchos pasajes y ahogó a los enemigos de su amo.

Leon, su bufanda de fuego también se derritió en su camino. Pronto, su bufanda ensangrentada sacó a un
enano afuera. "¿Dónde están tus llamas reales?"
"¡Como si fuera a decírtelo, humano!" Ladró el enano.
Leon le escupió y usó sus hilos ensangrentados para chupar los puntos de salud del enano.
[Has matado a Lv. 200 Enano.]
"Eso fue tan fácil". Leon chasqueó la lengua y luego miró al frente.
Muchos más mechas bloquearon su camino.
Sin embargo, los muertos vivientes pronto vinieron a ayudarlo y atacaron a esos tipos bajos escondidos en
trajes mecánicos. Leon no sabía si el Señor de la Muerte quería hacerse amigo de él o si tenía un motivo oculto
diferente, ¡pero aceptó con gusto esa ayuda y continuó subiendo de nivel!
Cuanto más profundo iban, más cerca estaban de las llamas reales.
Por fin, las colas y las orejas de Louise se erizaron. "¡Siento algo!"
León sonrió ampliamente. "¡Buen trabajo! ¡Guíanos!"
Pasando por muchos pasajes y cadáveres, Leon y su grupo se adentraron más en el castillo real. Todavía no
habían conocido a ninguna realeza, principalmente porque el Señor de la Muerte los sacó afuera. Y cuando las
grandes puertas los separaron de sus llamas deseadas, León sacó su espada divina y la abrió.
"Intrusos... ¡Esas llamas son el corazón de nuestro reino! ¡No dejaré que las toméis!" El mecha, que tenía al
menos veinte metros de altura con tres colas de serpiente detrás, habló.
[El Guardián Enano Lv. 300 HP: 1 000 000/1 000 000 PM: 250 000/250 000]
Todavía sosteniendo su espada divina, Leon miró al monstruo. Y luego, su espada brilló con dos energías,
evolucionando en algo que Leon podría usar fácilmente.
[Tu espada divina ha evolucionado.]
[Has recibido dos nuevas habilidades.]
[Zona de Louise.]
[Zona de Celes.]
[Puedes usar ambos al mismo tiempo. Tenga cuidado con el consumo de maná.]
"Tengo toneladas de maná". Leon sonrió y levantó su espada, solo para empalarla en el suelo. "No hemos
tenido tiempo de desarrollar habilidades combinadas adecuadas. ¡Así que las desarrollaremos ahora!"
Capítulo 164 La estrella de nueve colas

Capítulo 164: La estrella de nueve colas
Leon colocó su espada divina ante sí mismo, activando dos nuevas habilidades.
Esas habilidades recibieron el nombre de sus seres amados, y cada una trajo un nuevo tipo de zona.
A su izquierda, la Zona Celes de Leon envolvía la cámara oculta en la oscuridad. La luna roja de repente brilló
intensamente en esa zona como si un ojo oculto se hubiera abierto. No luchó contra la oscuridad, ya que ese
elemento oscuro permaneció intacto.
En cambio, estos dos elementos se complementaron entre sí: allí hacía bastante frío.
A su derecha, la Zona de Louise de Leon invocó innumerables estrellas ardientes. Esas estrellas eran similares
a linternas en la habitación de Louise, brillando ciegamente. ¡El calor subió tanto que el suelo se derritió!
[Tus armas divinas, bufandas, cada una obtiene bonificaciones adicionales en sus respectivas zonas.]
[Leon Blade (Ender) Nv. 105 CV: 600 000/600 000 PM: 520 000/520 000]
"¡Este subirá tanto de nivel que no puedo esperar para deshacerme de él!" Leon sonrió ampliamente y
desdobló sus bufandas.
Su bufanda roja anaranjada se mezclaba en la zona de Louise mientras que la roja y negra aprovechaba la zona
de Celes. Leon ya sentía mucha más conexión con sus amados y que podría combinar a la perfección sus
habilidades con las de ellos. Sus mujeres eran las mismas, sintiendo un impulso significativo fortaleciendo sus
estadísticas.
"¡Un poder para afectar al mundo! ¡¿Qué eres?!" El enano en el mecha exclamó, desconcertado y asustado.
Usó sus habilidades mecánicas para asaltar a Leon. Sus tres colas mecánicas fueron tras Leon, Louise y Celes.
Y mientras Leon se dio la vuelta y le dijo a Alexandra que estuviera lista, Louise y Celes disfrutaron de su nuevo
encendido con su amada a su lado. En la oscuridad de Celes, la frialdad fue más baja que Absolute Zero, y ella
simplemente congeló la cola que la perseguía.
Las estrellas de Louise se calentaron y derritieron la cola, inutilizando al enano.
Leon se dio la vuelta y vio la cola del mecha bastante cerca de su cara. Instantáneamente levantó la mano, usó
sus dos bufandas para enrollarse alrededor de la cola y luego eligió su combinación favorita.
"Amén."
Dos elementos diferentes brotaron de sus armas, provocando la explosión en cadena que devoró la cola.
[Has borrado el alma de la princesa Medusa.]
"Así que tenían almas en esas colas... ¿Y pertenecían a una princesa? Son muy astutos, enanos". Leon comentó
en voz alta mientras el enano sentía un miedo inimaginable hendiéndole el corazón.
Leon fijó sus ojos entrecerrados en el mecha, luego dijo su plan en voz alta. "Provocaré otra reacción en
cadena, y tú acabarás con el mecha, Celes. Cuando el enano quede expuesto, Louise lo derrotará. Lo
necesitamos con vida".
Sus amados asintieron.
Leon ignoró por completo las armas del mecha. Sus bufandas eran más ágiles y flexibles que las serpientes,
como si fueran peces en el agua, ya que las zonas de la espada divina de Leon eran una habilidad demasiado
poderosa. Rápidamente los envolvió alrededor del torso del mecha, luego rellenó más del cincuenta por ciento
de su maná.
Las enormes explosiones rasparon al mecha altamente defensivo y lo derribaron hacia atrás.
Y luego, el gran murciélago proyectó su sombra sobre el torso caído del mecha. Cayó como una estrella y
destruyó la cabina, dejando al descubierto al hombre bajito que había dentro.
Luego, la verdadera estrella se movió y Louise voló hacia los cielos, sus curvas y rasgos de zorro se calentaron.
Ella controló su maná y su fuerza y cayó sobre el enano.
"¡Ughhh!" El hombre gritó hasta el olvido.
Pero aunque le dolía el pecho, cuando la mujer zorro golpeó su palma contra él, no sintió que su vida estuviera
en peligro. Sí, pronto perdería su libertad, pero era mucho mejor que morir. Él al menos vería los siguientes
eventos del caos del Señor de la Muerte y más.
El enano cerró los ojos.
León y Celes confirmaron que el hombre perdió el conocimiento y quedó inservible.
"Yo lo llevaré... Pero por ahora, necesitamos conseguir las llamas". León miró a su adorable zorro, cuyo rostro
era una mezcla de nervios y emoción.
Ella creía completamente que sus otros yos estaban enamorados de Leon, pero no sabía qué pasaría en
realidad.
Louise quería aprender más sobre sí misma... Y eso la empujó a recuperar las llamas de su raza. Encontró una
pequeña caja de metal escondida al final del pasillo.
Louise lo tomó en sus manos y lo abrió.

En un instante, su corazón se estremeció y sintió la mano de otra persona agarrando esas llamas. Por supuesto,
nada salió de Louise, pero sintió que no había rescatado esas llamas. En cambio, fue como si alguien más los
hubiera arrebatado...
Las hermosas llamas anaranjadas desaparecieron como si nunca hubieran existido.
Y luego, dentro del corazón de Louise, las cadenas se rompieron.
Las últimas cadenas que contenían los recuerdos del pasado de Louise se conocían como La estrella de nueve
colas.
Louise perdió el conocimiento y cayó al suelo.
"Lo he visto todo, Amaterasu". La estrella de nueve colas se materializó en el corazón de Louise.
No se veía diferente a Louise. Era una mujer bajita con nueve colas y ojos fríos. Esos ojos fríos eran muy
diferentes a los de Louise, ya que mucho más odio rebosaba esos tonos. Sin embargo, era un poco diferente de
su yo pasado. Eso fue porque su cabello era completamente rosado.
Amaterasu sonrió. "También te has enamorado".
"¿Y por qué crees que cambió el color de mi cabello? ¡Es porque no quiero ninguna conexión contigo,
Amaterasu! Te odio. Te odio desde el fondo de mi corazón. Bueno, eso lo sabes". La estrella de nueve colas
puso su mano en su cintura y altivamente posó sus ojos en la existencia legendaria. "Aunque saliste a salvarme
al final de mi vida, todavía te odio".
Amaterasu había usado su fuerza para salvarse a sí misma y a Louise del Emperador Humano. Esa era
exactamente la razón por la que Louise se veía a sí misma con brazos y cuerpo más largos; simplemente era la
fuerza pasada de Amaterasu que se apoderaba de ella.
"Debes estar hirviendo por dentro. Te conozco muy bien... Fue entonces cuando vi a Leon, supe que no podía
perder la oportunidad de decirle mis sentimientos. De lo contrario, habrías hecho que me odiara. Ahora que
viste todo , debes estar empeñado en matarme... La cuestión es que no puedes matarme, Louise". Amaterasu
permaneció compuesto. "Y es la primera vez que podemos mirarnos y hablar así... ¿Qué tal si miramos al
pasado y llegamos a una tregua? Leon nos quiere a los dos".
"¡Él te quiere porque lo has encantado!" La estrella de nueve colas escupió con enojo.
"Creo que solo le gustan las chicas zorro. Nuestra raza es la mejor cuando se trata de placer y esponjosidad... Es
por eso que debemos unirnos y mantenerlo alejado de otros zorros... También vi a una chica lobo que le
gustaba. No No queremos lobos en nuestra familia, ¿verdad? Amaterasu continuó en un tono dulce pero
también agudo.
"Solo necesita una mujer zorro". La estrella de nueve colas extendió su mano hacia el corazón encadenado y
rompió todas las cadenas a la vez, tomando los recuerdos.
Pero como ella era una existencia tan exaltada, tenía todos los recuerdos intactos. En cambio, simplemente
obligó a Louise a recordar todo, incluidos los últimos momentos de su vida.
Lo hizo en el orden correcto, sabiendo también que la consecuencia equivocada de los eventos podría conducir
a muchos problemas.
"Y mientras recuerda su pasado, te borraré". La estrella de nueve colas saltó alto. Se congeló en el aire y
comenzó a invocar una gran bola de llamas debajo de sus pies.
Esa fue su estrella cuando nueve colas sobresalieron de esa bola de llamas.
"Me odias porque todos te culparon por no poder alcanzar el Asiento Amaterasu. Las figuras potenciales, como
El Dragón, se enteraron de que eres una reencarnación mía. La mayoría de ellos, incluida nuestra raza, te echan
toda la culpa. Todo porque no podías iluminar el sol. La luna era mejor... Tsuyukomi trataba mejor a su gente".
Amaterasu fulminó con la mirada a la mujer zorro que traía todo su poder. "No has mostrado ninguna amenaza
de ser Amaterasu... Tenías defectos desde el principio, ya que eras una mujer pequeña incapaz de sacar maná
del exterior. Pero mírate ahora, lo has solucionado". 𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇ѵ𝒇𝒇. 𝒇o𝒇
La estrella de nueve colas apretó los dientes. "Nadie usó mi nombre... ¡Seguían llamándome un fracaso de
Amaterasu! ¡Todo fue mi culpa! ¡Miraron hacia el pasado y me echaron la culpa de todo! ¡Todo! No tenía
aliados, porque todos querían mi cuerpo. Ellos ¡querían aparearse conmigo y forzar otra reencarnación!
Querían diezmarme y cortarme las extremidades. ¡Solo el Dragón tenía buenas intenciones, pero su maldito
hermano lo manipuló! Y luego... Ese pedazo de mierda... El Emperador Humano me abrumó...
La expresión de Amaterasu se suavizó y sonrió. "Realmente amo mi nombre... Pero antes de convertirme en
Amaterasu, mi familia me dijo que solucionaría todos los problemas si me convertía en Amaterasu. Nunca
esperé convertirme en uno, pero trabajé duro para ser tan fuerte como el mismo Amaterasu. Sí, en ese
momento, un hombre tenía ese título. Me tomó en su familia y subí de rango para convertirme en su sucesor.
Yo era como su hija... Me había mostrado un mundo y que Amaterasu significaba nada más que más. problemas
por delante. Todavía creía que sería capaz de arreglar eso y fracasé... Siento que podemos llegar a un consenso
aquí, La estrella de nueve colas... Nuestra raza, y las personas que manejan llamas, no valen nada".
"No cambia nada, Amaterasu. Te borraré. No necesitamos el sol". La estrella de nueve colas declaró.
"Sin embargo, eres el sol de Leon". Amaterasu tiró de las fibras del corazón con esas palabras.
Y su oponente lo despreció por completo mientras su rostro se contraía feamente.

¡Le arrojó su estrella a Amaterasu!
"¡Todo lo que necesita es a Louise, a mí!"

Capítulo 165 El emperador humano ha vuelto

Capítulo 165: El Emperador Humano ha vuelto.
"¡Luisa!" Leon gritó, sus ojos reflejando la caída de Louise.
Había pensado en lo que podría pasar después de recuperar las llamas de su raza, y una de sus ideas era que
Louise perdería el conocimiento. Sin embargo, sucedió demasiado rápido.
Leon corrió a su lado mientras ordenaba a su doncella dragón. "¡Corta ese mecha en partes y colócalas en tu
inventario!" Luego se volvió hacia su vampiresa. "Llévate a ese enano. ¡Nos iremos de este lugar pronto!"
"Entiendo." Celes asintió y usó su gran bate para levantar al hombre bajo.
Usando sus hilos ensangrentados, Celes también ayudó a Alexandra con su tarea. Al final, todos querían irse
rápidamente de este lugar. Era muy peligroso permanecer en The Death Lord's Mayhem.
Esa existencia era poderosa y podía cambiar su intención muy rápido.
"Ella es demasiado caliente". Leon exclamó con una cara seria desprovista de cualquier lujuria. Su adorable
zorro estaba demasiado caliente para que un humano la sostuviera. Afortunadamente, su amado ya no era el
mismo, y sus abundantes estadísticas le permitieron soportar su estado actual.
Con las manos chisporroteando y las primeras capas de piel derritiéndose, Leon se levantó y miró hacia atrás.
Sus compañeros estaban cerca de terminar su trabajo, por lo que soportó en silencio todo el dolor.
Cuando Celes y Alexandra tuvieron todas las piezas de mechas en sus inventarios, se acercaron a Leon y
salieron corriendo del salón, siguiendo su espalda.
Leon siguió perdiendo puntos de salud mientras sostenía a Louise.
Al mismo tiempo, se quedó boquiabierto ante sus notables cambios. "¿Otra cola brotó?"
Fue increíble. A Louise le tomó un tiempo obtener más colas, y con las Llamas de Amaterasu, comenzó a
crecerlas nuevamente a una velocidad absurda. ¡La tercera cola también comenzó a salir! Además, sus colas ya
formadas se extendieron y pasaron por otro cambio.
Se hicieron más delgados y más largos.
Pronto, Louise se puso tan caliente que Leon perdió más de mil puntos de salud por segundo.
Ahora tenía nueve colas.
"La estrella... de nueve colas". Celes desvió la mirada hacia su rival enamorada y comentó en voz alta.
El rostro de Alexandra palideció al escuchar esas palabras. La vista de esas colas y el poder ardiente de Louise
que era lo suficientemente fuerte como para lastimar a su maestro la convenció de que Louise era de hecho la
existencia que había matado al Dragón.
Leon entrecerró los ojos, sin decir nada.
Pronto, León y su familia abandonaron el castillo real. Entonces vieron la escena directamente de la película.
Un ejército de muertos vivientes cubrió todo el reino, matando a todos a la vista. Los enormes esqueletos de
razas legendarias batieron sus alas huesudas en lo alto del techo, y algunos arrasaron con todo lo que
encontraron a su paso.
Lo peor fueron los huesos gigantes que sobresalían por todas partes alrededor de la capital.
Esos eran claramente conscientes y lo suficientemente fuertes como para borrar a todos los intrusos.
"No nos prestan atención... ¡Todavía tenemos ese pase! ¡Busquemos nuestro carruaje y salgamos de este lío!"
Leon entró en pánico con el estado desconocido de Louise, y rápidamente corrió hacia su carruaje.
Lo encontró intacto.
Dejó escapar un suspiro de alivio y luego metió a Louise adentro.
A pesar de que tenía tanto calor, no encendió el carruaje en llamas. Tal vez, su cuerpo estaba en un estado
defensivo donde ningún ser vivo podía tocarla.
Leon pensó así y rápidamente tomó el asiento del conductor.
"¡Vamos!"
Por lo tanto, dejó a salvo el Reino de los Enanos.
Al día siguiente, el Señor de la Muerte anunció su regreso.
"¿Puedo hacerle una pregunta, mi señor?"
Tienes mi permiso.
"¿Por qué dejaste ir a ese hombre?"

El Señor de la Muerte negó con la cabeza. "Cuando lo vi por primera vez, me di cuenta instantáneamente de
que es un tipo difícil de tratar. Tengan en cuenta que tengo muchas de mis habilidades selladas, así que usé los
cimientos de mi reino para mover a la bestia oculta— o más bien, un guardián de nuestro lugar, con el que ni
siquiera los enanos podrían lidiar. También demostró que está separado del plan, así que lo dejaré vivir".
"¿No quieres tener el mundo entero envuelto en la muerte?"
"Esa es la segunda pregunta".
El Esqueleto Negro dejó de existir.
En uno de los muchos reinos súcubos, apareció un hombre de repente.
Flotó con su cuerpo humano de pie sobre un suelo invisible. Pronto, una mujer bronceada con cabello rubio
cayendo en cascada detrás de ella apareció detrás de él. Ella lanzó una mirada al hombre, luego ocultó sus
emociones./
El hombre abrió los brazos. "Escuché que ustedes, demonios, han encontrado un poder para igualar la
grandeza de la humanidad. Monstruos tontos y pecadores, ¡su poder no es más que combustible para
devolverme a mi cima!"
El Emperador Humano se rió entre dientes, llamando a sus fuerzas.
En un instante, un ejército en ascenso apareció detrás de él. Esos eran súcubos que Irene Crownedge había
reunido mientras dormía. Esas mujeres eran todas suyas ahora.
Además, The Human Emperor trajo razas humanas y razas que le eran leales. Y peor aún, los esclavos que aún
tenían su marca aparecieron detrás de él.
Los súcubos y sus miembros de la realeza salieron, sus expresiones llenas de miedo e ira.
"El Emperador Humano... Irene Crownedge... Y El Dragón Negro..."
De pie lejos de esa escena, una mujer lobo entrecerró los ojos y maldijo debajo de su pequeña nariz. "Ha
vuelto... ¡Lo estabas esperando, el Dragón Negro!"
Sus palabras se hicieron realidad cuando vampiros, hombres lobo y más razas de su continente natal se
unieron con fuerza al lado del Emperador Humano.
Peor aún, la luna brillaba intensamente sobre ellos.
"Todo me pertenecerá". Roger Dream, El Emperador Humano, declaró.
Su ejército descendió sobre los demonios.
Y luego, El Emperador Humano mostró la fuerza máxima de la humanidad, usando nada más que un puño para
matar a uno de los reyes de los súcubos.
Cuando la esposa de ese hombre se arrojó histéricamente sobre él en un intento de vengarse, Roger Dream
congeló el tiempo, se quitó la ropa y cuando estaba a punto de bendecir a la reina súcubo con una vara de
carne caliente, apagó su habilidad y perforó su apretado agujero.
Estaba más cachondo que nunca.
"La reproducción es un derecho de la humanidad. Estás condenado a no ser más que un juguete sexual".
"¡Gracias, gracias, gracias!" La reina del súcubo disfrutó de la carne caliente con la lengua fuera, agradeciéndole
por tan buena comida.
El Emperador Humano se rió.

Capítulo 166 El dragón y el corazón de Louise

Capítulo 166: El dragón y el corazón de Louise.
En el reino de los espíritus, los representantes del Royal Dragon Guild se habían reunido.
El asiento del Dragón estaba vacío, porque no habían encontrado un reemplazo adecuado después de todos
esos años. Sin embargo, en la era reciente, los dragones tenían un nuevo plan.
Un plan para conseguir la mejor versión de El Dragón y recuperar lo que era suyo: la adaptación.
Nos está llamando.
"¿Significa que ha tenido éxito?"
"Probablemente."
Los dragones abandonaron su salón y se dirigieron a cierto templo ubicado en la montaña más alta de sus
tierras espirituales. Nadie podía entrar en esa montaña excepto los dragones elegidos. En el pasado, cierto
dragón azul quería romper esa regla y ver lo que había dentro del templo, para convertirse en el Dragón Azul, y
miserablemente perdió toda su prominencia y niveles, ya que todos los dragones la castigaron.
Dentro de ese templo, residía una piscina de caos familiar.
Afortunadamente, los dragones habían conseguido ese elemento. Además, tenían al humano con ese poder
encerrado dentro de ese templo. Era uno de los humanos con cuerpos de humanidad pico, cuyo elemento era
el elemento del caos. Por supuesto, había causado mucho lío en el pasado, pero ningún hombre vivía para
siempre.
Fue forzado a bajar por nadie más que el Oráculo.
Los dragones hablaron con esa mujer y ofrecieron su templo para mantener sellado al hombre.
De esta manera, querían hacer una conexión con alguien por encima de los humanos. Y en la última era, los
dragones decidieron probar un nuevo plan: obtener el elemento del caos para ellos mismos.
El Dragón seleccionó a un representante para entrar en ese templo.
Y ese hombre había estado encerrado aquí por mucho tiempo, sin poder siquiera presenciar la noticia de la
muerte del Dragón.
Su tarea principal era adaptarse al elemento del caos y devorar al humano con él. ¡Había estado soportando
una tortura peor que la muerte durante eones! Entonces, algo sucedió en el mundo, cuando el elemento del
caos comenzó a aceptarlo... No pasó mucho tiempo después de que Leon se convirtiera en Eros.
Las puertas del templo se abrieron solas.

Y de adentro salió un dragón desnudo.
Tenía una forma humanoide, con grandes alas negras y grises brotando de su espalda. Tenía dos colas, ojos
dorados y piel fina. Su largo cabello negro se balanceaba detrás de él mientras inhalaba el aire fresco.
"Soy el dragón".
Los dragones ante él se arrodillaron.
El Dragón continuó. "He visto el pasado de nuestra raza de dragones. El destino de lectores anteriores y los
pecados de la humanidad... Los derribaremos a todos, incluidas las traiciones de nuestra raza. Perdí todos mis
niveles, así que debo subir de nivel... Anunciar la guerra a todos razas espirituales".
"¡Como desées!"
Se produjo otra masacre.
Leon acarició el cabello de Louise, a pesar de que estaba ardiendo.
No podía preocuparse por sus heridas y tenía sus pociones altas en el inventario, ¡así que nada malo le pasaría!
Quería estar con ella ya que estaba claro que Louise tenía un gran drama en su corazón.
Pronto, Leon escuchó un grito.
[¡Morir!]
Sin duda era la voz de Louise.
Sin embargo, sonaba muy diferente.
[No puedo ser asesinado.]
Y luego, la voz de Amaterasu se deslizó en su mente.
Leon estaba desconcertado, pero pronto comenzó a conectar los puntos. Podía fallar o estar perfectamente en
el lugar cuando se trataba de las dificultades de sus amados. Esta vez, Leon vio perfectamente el problema de
Louise y entendió que Amaterasu y Louise estaban en una pelea.
'Ella debe haber llegado a odiar a Amaterasu en algún momento.'

Como si esas palabras fueran la llave del corazón de Louise, la conciencia de Leon entró en ella.
Pronto, estaba en una habitación donde las llamas dominaban la escena. Este elemento rebosó el corazón de
Louise, y León no vio nada más que lenguas de fuego bailando a su alrededor.
Levantó los ojos y jadeó.
A su derecha, Leon vio La estrella de nueve colas. Tenía un mini-planeta bajo sus pies, del cual brotaban nueve
colas como serpientes.
Todos estaban en llamas, atacando a Amaterasu.
Amaterasu flotaba con el sol detrás de ella.
Todo se derritió en su presencia excepto las nueve colas de Louise. Para luchar contra ellos, Amaterasu tuvo
que usar sus piernas y puños.
Parecía que estaban en un punto muerto.
"¡Basta, ustedes dos!" Leon gritó y apretó las manos, su voz sonaba enojada.
Su aparición congeló la escena.
Louise y Amaterasu se acercaron a él.
Su adorable cabello rosado de zorro revoloteaba tímidamente mientras sus mejillas se encendían. No había
esperado que solo ver a Leon la convertiría en una mujer adorable, pero la estrella de nueve colas se había
convertido exactamente en ese tipo de mujer. Ella también estaba en una fase de luna de miel, ya que era la
primera vez que interactuaba con Leon, además de verlo desde el corazón de Louise.
Después de todo, todavía no se había asimilado al corazón de Louise.
Por lo tanto, el rostro y la voz enojados de Leon le cortaron el corazón.
Amaterasu también se sorprendió al verlo. Se puso nerviosa porque nunca quiso que su amado viera esa
escena. Y por cómo se veía, no parecía que su intención fuera clara. Amaterasu estuvo del lado defensivo todo
este tiempo, queriendo llegar a una tregua con la estrella de nueve colas.
Por lo tanto, estaba un paso por detrás de Louise.
Louise, o mejor dicho, su último recuerdo, voló y se paró frente a él.
Ella le dio la espalda y abrió los brazos, gritando. "¡Odio a esta mujer, Leon! Ella es la causa de mi dolor y
soledad. ¡Por ella, estaba solo y no podía confiar en nadie! Si no fuera por ti, nunca sentiría amor y sería un
resfriado". asesino vagando por el mundo sin ningún propósito!"
El rostro de Amaterasu se arrugó y gritó. "Ambos somos víctimas del Asiento Amaterasu. ¡Claramente no es un
asiento para nosotros!"
"¡Cállate, perra! ¿Cuántas veces has dicho que te encanta ese nombre? ¿Recuerdas tu propio nombre después
de todo este tiempo?" La estrella de nueve colas gruñó y apretó sus pequeños puños, lista para luchar de frente
contra esta mujer.
Ahora que Leon estaba aquí, Louise estaba lista para hacer todo lo posible.
Leon se quedó desconcertado, sin saber qué decir.
"¿Podrían todos... empezar desde el principio?" Preguntó.

Capítulo 167 Confía en mí

Capítulo 167: Confía en mí
"¿Pueden todos empezar desde el principio?"
Completamente en un estado de confusión, Leon le preguntó a su adorable zorro y a Amaterasu. Bueno,

pronto, incluso Amaterasu se volvió demasiado adorable, ya que ella y la estrella de nueve colas reaccionaron
de la misma manera a sus palabras.
"¡Ella me está intimidando!"
Amaterasu y La Estrella de Nueve Colas giraron el uno hacia el otro, mirándose.
Leon parpadeó un par de veces. ¡Estos dos tienen poderes para amenazar al mundo, pero actúan así durante su
acalorada discusión que amenaza la vida!
La estrella de nueve colas gruñó primero. "Ella claramente está equivocada. En primer lugar, ¡ni siquiera
debería existir en esta era! ¡Su sola presencia me está intimidando!"
"¿Y quién dice que yo no debería existir en esta era? ¿Tú? ¡¿Quién te crees que eres?!" Los ojos de Amaterasu
brillaron con su nitidez habitual ya que ya no podía estar del lado defensivo.
Con Leon como el tercero en su pelea, Amaterasu infirió que podría ser ella misma.
Leon preferiría mantenerla en el lado más adorable. "¡Empieza desde el principio! ¡Louise, tú primero!"
La estrella de nueve colas se quedó muda durante unos segundos. Pronto sonrió nerviosamente y se dio la
vuelta, ahora frente a Leon con una expresión adecuada. Serena y con las emociones bajo control, La estrella de
nueve colas comenzó su relato, que León escuchó con atención.
Ella era el último recuerdo, pero tenía recuerdos completos intactos.
Leon asintió y sonrió ante sus primeros veinte años de recuerdos, luego mantuvo la cabeza fría cuando Louise
habló sobre su tiempo en el escuadrón de linternas. Luego habló sobre la masacre que había ocurrido en su
pueblo, su viaje en solitario para encontrar al traidor y su lucha con él y otros.
Por fin, la estrella de nueve colas habló sobre su repentino despertar de maná y el control continuo sobre él,
que había sucedido durante su difícil situación.
Su presencia brillaba como Amaterasu, y eso atrajo la atención de muchas razas, incluida la suya.
A partir de ese momento, todos le amontonaron sus problemas. Era como si ella fuera la respuesta a todos los
problemas, eso o su muerte.
"Querían ese poder dentro de mí. Nadie me miró... ¡Todo era Amaterasu, Amaterasu, Amaterasu! Estaba tan
solo... Ahora puedes entender por qué la desprecio, ¿verdad, Leon? No me hagas aceptarla... Yo ¡No quiero ser
como ella!" La estrella de nueve colas habló en el tono habitual de Louise, su voz llena de amor y afecto.
Quería ser el único zorro en la vida de Leon.
Leon casi sintió que su corazón se derretía y tomaba forma para pertenecer solo a esta hermosa mujer. Sin
embargo, sabía que más personas confiaban en él y que ya había compartido sus sentimientos con más que
solo con ella. Extendió su mano, acarició su mejilla y luego volvió sus ojos hacia Amaterasu.
"Tu turno." León sonrió.
Amaterasu cerró los ojos. "Ya sabes la mayor parte. Creía que tendría una vida plena si me convirtiera en
Amaterasu... Esa creencia surgió de las enseñanzas de mis padres, quienes habían sido salvados una vez por la
bondad de Amaterasu. También me gustó ese nombre. y trabajaron hasta los huesos para cumplir sus sueños.
Cuando me convertí en Amaterasu, entendí por qué el dueño anterior salvó a mis padres.
"Él solo podía salvarlos a ellos, porque el resto era indigno. Y mucho menos tener una vida plena, rara vez
sonreía con el sol detrás de mí, porque veía lo desastrosas que eran las cosas. Ingenuamente pensé que podía
arreglar las cosas, pero fue en vano. En Por último, llegó el momento de mi fallecimiento... Miré hacia atrás y
conté las cosas que amaba: ese era mi nuevo nombre y poderes. Todavía sentía que desperdicié mis mejores
días y nunca logré nada grandioso en mi vida. Por lo tanto, quería ser más feliz en mi próxima vida. Forcé una
reencarnación clara y consciente y esperé a que naciera mi próximo yo. Por desgracia, eso resultó en que ella
fuera defectuosa. Louise tenía sus propios problemas, y rara vez podía ayudarla ". Amaterasu suspiró.
Habiendo visto dos caras de la misma moneda, Leon le hizo señas a Amaterasu para que se pusiera a su lado. A
su adorable zorro no le gustó eso, pero Leon atacó sus orejas de zorro y la obligó a permanecer en silencio. En
su yukata, Amaterasu voló hacia abajo y se puso de su lado.
Leon se tomó un tiempo para ordenar sus pensamientos. Tampoco podía concentrarse fácilmente, ya que tenía
dos mujeres adorables y sexys mirándolo desde una distancia tan cercana. Eran tan similares, pero diferentes,
y cada uno tenía su propio encanto único.
Finalmente, Leon separó los labios. "Si no fuera por Amaterasu, no te habría conocido, Louise".
La estrella de nueve colas entrecerró los ojos y se mordió los labios.
León continuó. "Ella te salvó al menos dos veces. Primero, fue para mantener tus recuerdos dentro de ti... En
segundo lugar, cuando todavía no tenía ni idea de mí mismo, sin darme cuenta de la fuerza y el potencial que
moraba dentro de mí... No, estaba consciente de eso, pero conscientemente lo sostuve". Yo mismo de vuelta...
Antes de que desbloquearas ese lado mío, sufriste un golpe peligroso, y los poderes de Amaterasu te trajeron
de vuelta a mí.
"Hay un mundo en el que naciste como una chica zorro escarlata normal, solo para vivir y morir una muerte
normal... Puedo decir por tu historia que esta reencarnación te lastimó mucho... Te llevará mucho tiempo
aceptar eso, pero piensa en ello como algo que nos unió a los dos. Poco a poco, verás a Amaterasu bajo una
nueva luz".
La estrella de nueve colas permaneció en silencio, sin responder a las palabras de Leon. Pero su habilidad, aún
flotando en el aire, se derrumbó, sus escombros cayeron ruidosamente al suelo.
Leon le sonrió y le dio un beso en la frente.
Luego se volvió hacia Amaterasu. "Pronto vivirás una vida mejor. Debido a cierto zorro adorable, será todo un
desafío, pero puedes confiar en mí".
Louise hizo un puchero mientras los labios de Amaterasu se curvaban en una hermosa sonrisa.
"De todo corazón confiaré en ti, Leon, mi amor". Amaterasu se puso de puntillas y besó a Leon.
Y entonces, sucedió el primer desafío.
Louise le dio una bofetada en la mejilla y la envió volando, tomando los labios de Leon con los suyos. En su
odio por Amaterasu, descartó su timidez y simplemente presionó sus labios contra Leon.
El cuerpo de Louise dejó de calentarse fuera de esa desafiante habitación y todo volvió a la normalidad.
En el interior, la cabeza de Leon volaba de izquierda a derecha mientras sus mujeres seguían queriendo
besarlo.
Capítulo 168 ¡Reunión de paz!

Capítulo 168: ¡Reunión de paz!
Leon regresó a Madevin Metropolis.
Al instante fue llamado por Madam Jasmin.
Sin cansarse en absoluto, ya que el viaje de regreso a casa fue bastante largo, Leon dejó su carruaje a sus
amados y se dirigió a la casa de Jasmin. Leon notó la atmósfera tensa desconocida y extraña mientras recorría
la ruta ya familiar.
La gente ya ha aprendido sobre El Señor de la Muerte.
Sin embargo, eso no fue todo.
Leon captó algunos nombres más que lo sorprendieron. "El Emperador Humano... El Dragón del Caos... Maldita
sea... Las cosas se están poniendo realmente estresantes..."
Leon aceleró hasta la casa de Madam Jasmin.
En el interior, vio a Else leyendo un libro en silencio. Cuando sus ojos dorados se posaron en León, sonrió y se
cubrió la cara con el libro, pues la mirada seria de su madre le ordenaba no molestarlos. Además, Jasmin quería
tener a su hija cerca más que nunca.
El potencial y el talento de Else eran demasiado fuertes, y estaba segura de que la gente pronto volvería a
apuntar hacia ella... ¿Quién sería esta vez? ¿El emperador humano? ¿El Dragón del Caos? ¿O alguien más?
"Lograste regresar a salvo de ese desastre... Con el regreso del Señor de la Muerte y su caos, debes haber
sufrido muchos nervios en ese lugar, pero debo pedirte detalles". Madam Jasmin se volvió hacia Leon y habló
con voz tranquilizadora.
León asintió. "Nuestro viaje de regreso duró algún tiempo, así que tuve suficiente tiempo para pensar en ello y
calmarme. Bueno, ¿cómo debo comenzar esta historia?"
Su principal problema era que Leon no sabía si debía hablar sobre su identidad. Plantearía muchas preguntas
si él le dijera que los muertos vivientes no habían apuntado a él ni a su grupo en absoluto.
Pero Leon sintió que su presencia podía disipar muchas de las preocupaciones de Madam Jasmin, así que habló
de todo.
"Te pasaré ese enano pronto. Primero quiero absorber sus habilidades... Me concentraré más en el lado
comercial mientras otros continúan con sus planes". León dijo seriamente.
Sintió una gran mirada curiosa sobre él, se volvió hacia Else, y notó que rápidamente se tapó los ojos.
Madam Jasmin estaba más sorprendida que nunca. El hombre que tenía delante estaba al mismo nivel que el
Dios de la Muerte, y sintió que era su responsabilidad hacer que subiera de nivel lo más rápido posible. Y dado
que subir de nivel no se limitaba solo a matar monstruos en este mundo, decidió ayudarlo con su negocio.
Leon no rechazó su amabilidad, aunque sabía que ella también lo hacía por su gremio.
"Gracias, y nos vemos pronto entonces". León hizo una reverencia.
Madame Jasmin asintió suavemente y se volvió hacia su hija. "Eres muy afortunada, Else".
Los siguientes días de Leon fueron bastante ocupados.
En primer lugar, tuvo una charla con el enano. Era una guardia real y de la realeza, pero comprendiendo sus
circunstancias y viendo a León y sus mujeres a su alrededor, el enano se apresuró a cooperar. Le enseñó
mucho a Leon, y el proyecto de Leon fructificó.
Al mismo tiempo, Celes trabajaba con la alquimia, elaborando pociones.
Louise recuperó todos sus recuerdos. Aunque no parecía que hubiera cambiado mucho porque su amor por
Leon era el mismo, si no más fuerte, Louise a menudo había hablado y luchado contra Amaterasu,
fortaleciéndose a sí misma.
También le dio a Leon mucha información del pasado.
Leon trabajó con su gremio para iniciar su nuevo negocio.
[¡Has recibido una misión! ¡Conviértete en un comerciante superventas en tu primer día!]
[Recompensa: 20 niveles.]
Él clavó esa búsqueda.
Sus productos también eran demasiado buenos y útiles para las personas necesitadas, ya que el caos se
produjo en todos los continentes, ¡así que los artículos de Leon se vendían más rápido que los productos
calientes anteriores!
También fue principalmente por las pociones de Celes, lo que resultó en que inevitablemente cayeran juntos a
la cama para celebrar los frutos del arduo trabajo.
Y mientras la familia de Leon continuaba su progreso, también lo hacían los demás.
"¿Reunión de paz?" León le preguntó a su amigo.
Arturo asintió. "Nuestro gremio será el anfitrión de esa reunión pronto. En pocas palabras, todas las personas
que lucharon contra el Emperador Humano se reunirán para discutir sus próximos movimientos. No es solo el
Emperador Humano ahora... El Señor de la Muerte anunció su regreso, y la Masacre del Dragón del Caos
continúa. en el reino de los espíritus... ¡Todos deben trabajar juntos si queremos mantener nuestros hogares
intactos!"
Arthur recibió algunas pociones de alta calidad de la tienda de Leon por esa información.
Leon asintió y continuó con ese tema. "El Dragón del Caos me parece el mayor misterio... Quiero decir, el Caos
debería ser un elemento que solo los humanos pueden manejar... Algo cambió, y se convirtió en elegible para
usar ese poder... Creo que su próximo movimiento será traer de vuelta su adaptación. a su raza... Ese es el
movimiento que unirá a todos los dragones, incluso a aquellos que trabajan con humanos y gremios oscuros".
Arthur tembló de miedo. "El Emperador Humano trajo a sus aliados bajo su nombre... Incluso un imperio
conocido por su odio hacia él de repente cambió su postura y le juró lealtad... El Señor de la Muerte no ha
abandonado su reino conquistado y permanece en silencio allí..."
Leon se preguntó acerca de los otros dos elementos.
Debe haber una persona con un concepto de vida divina. Además, Leon había desechado su concepto espacial,
por lo que se preguntó si eso también jugaría un papel en los asuntos del mundo. ¿Hubo alguien que se hizo
cargo de ese concepto? ¿Quizás alguien de la familia del antepasado anterior hizo eso?
Leon tenía la sensación de que pronto vería rostros familiares.
"Somos una de las personas de confianza... Nuestra tarea será mantener segura la Reunión de Paz... No
queremos que nadie se infiltre en nuestra capital y cause un lío aquí...". Arthur estaba tan nervioso que no
podía expresar correctamente sus palabras.
Pero León lo entendió.
Sería un desastre si alguien impidiera la Reunión de Paz. En ese momento, era importante que los humanos y
otras razas estuvieran juntos y trabajaran como una unidad, ya que otras existencias amenazaban la existencia
del mundo.
Sin embargo, el objetivo del Emperador Humano era bastante simple. Quería volver y tener humanos en la
cima. Apestaba que fuera un gobernante tan cruel y apático.
El Dragón del Caos seguramente haría una aparición pronto.
El objetivo del Señor de la Muerte debería ser cubrir el mundo con la muerte... Pero Leon encontró ese objetivo
bastante vergonzoso.
En cuanto a los demás, Leon esperaría y continuaría subiendo de nivel con sus amados.
En tierras nevadas, se reunió la Realeza de los Hijos del Invierno.
Debajo de ellos, un ejército de los individuos más fuertes se mantuvo erguido, con rostros graves.
En medio de ellos, uno podía encontrar muchas hermosas flores cuyas expresiones reflejaban la gravedad de
su terrible situación.
Una flor en particular se destacó, su rostro envuelto en soledad y una zona antisocial palpable: Snow
Demoness.
"¡Vamos a la Reunión del Gremio de la Biblioteca Celestial por la Paz! ¡Es una reunión importante en la que
hablaremos sobre el destino de nuestra raza y del mundo!" Anunció el Rey Nacido del Invierno.
Luego convocó al gran wyvern de hielo y lo ensilló solo.
Se volvió hacia su esposa e hijos y luego asintió. "Mantener nuestra casa segura".
¡Sus amados asintieron, jurando proteger sus tierras heladas hasta el final!
- gratis𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇. 𝒇𝒇ｍ
Y desde todos los rincones del mundo, muchas razas que sintieron miedo del Emperador Humano, el Señor de
la Muerte y el Dragón del Caos se dirigieron directamente al Heaven Library Guild.
Era hora de una reunión seria que cambiaría la vida de muchos, incluida la de Leon.
Capítulo 169 Ella es una amenaza que debe ser

eliminada
Capítulo 169: Ella es una amenaza que debe ser asesinada.
De todos los rincones del mundo, varios representantes de reinos, imperios, gremios y más llenaron los
caminos que conducen al Heaven Library Guild. Tomaron caminos tallados en el suelo, pero también caminos
de zonas de vuelo e incluso pasajes subterráneos, ya que muchas carreras eran así de únicas.
Pronto, todos ellos se apiñaron en Madevin Metropolis.
Fue una vista bastante espectacular.
Era similar a un festival.
Sin embargo, el estado de ánimo tenso en torno a todos los visitantes borró todos los pensamientos de
carnaval. La gente también entendió que muchas amenazas habían regresado y amenazado al mundo, por lo
que nadie estaba realmente de humor para ningún festival. La gente común simplemente miraba boquiabierta
a muchas personas mientras la gente adecuada los saludaba.
Leon estaba en su casa, mirando criaturas voladoras con gran interés.
Flanqueado por sus mujeres en un sofá, Leon estaba de muy buen humor. Su negocio se hizo famoso desde el
principio, ya que la gente necesitaba equipos. También estaban interesados en un nuevo uso de pociones. Con
estos dos elementos combinados y las experiencias de las personas frente a las nuevas amenazas, que estaban
muy por encima de las expectativas, las personas comenzaron a comprar los artículos de Leon al por mayor.
Necesitaba trabajar más duro para mantener a todos satisfechos, pero Leon sabía que era un momento para
estar lleno de energía y resistencia, ya que muchas carreras llegaban a la capital.
"Estaremos atentos para asegurarnos de que nadie tenga pensamientos extraños". Leon se preguntó, de todas
esas razas prominentes que estaban llegando, quién sería el que causaría el caos.
Peace Gathering era un lugar perfecto para debilitar a los humanos y a otros. Además, la biblioteca aquí
albergaba tanta información valiosa que Leon estaba cien por ciento convencido de que alguien intentaría
asaltar y conquistar esa zona.
"¿Podemos ver a otros desde nuestra casa?" Celes ronroneó de satisfacción, inhalando la fragancia de su
amado. Se volvió aún más perezosa después de todo su arduo trabajo. Parecía que ella solo quería estar con
Leon.
Luisa era igual.
León se rió y sacudió la cabeza. "Vamos a dar un paseo".

Unos días después, todos los representantes se instalaron en Madevin Metropolis.
Sin más preámbulos, la Reunión de Paz había comenzado. Personas que uno nunca vería juntas estaban
sentadas junto a una mesa redonda, esperando que el anfitrión comenzara las charlas.
Fuera de esa gran sala, todos tenían sus propios guardias. Habían enviado una patrulla alrededor del edificio
de reunión, que era una gran mansión de tres pisos. El Heaven Library Guild también había dispersado a sus
miembros por toda la metrópolis, manteniendo las piezas más fuertes cerca de la reunión.
León estaba más bien en el medio. No estaba cerca del edificio principal, pero tampoco en las afueras de la
ciudad. Seguido por sus encantadores compañeros, Leon caminó como si estuviera dando un paseo, a menudo
asintiendo con la cabeza a otros miembros del gremio cuyos rostros no estaban tan cómodos como el suyo.
"Bueno, creo que tenía razón". Leon miró a sus amados, sonriendo misteriosamente.
Celes, como la que siempre se mantenía al tanto de su entorno, asintió y suspiró. Ya había visto sombras
interesantes blandiendo sus armas hacia los miembros del gremio. Sus habilidades para esconderse eran
excelentes, pero no fue suficiente contra la vampiresa, cuyas habilidades habían sido agudizadas por mucho
amor y sus experiencias. 𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇ѵ𝒇𝒇. 𝒇oｍ
"Parece que nos vamos a divertir mucho..." Celes susurró.
Alexandra se puso tensa, porque también había sentido la presencia de un dragón.
"Notificaré a los demás. Continuemos nuestra caminata e identifiquemos tantas amenazas como sea posible".
Leon abrió su sistema, hizo clic en la pestaña de amigos y luego se puso en contacto con el asistente de
confianza de Madam Jasmin.
Ese hombre pronto notificó a los demás y ordenó a los miembros del gremio que trataran en silencio y
apropiadamente las amenazas ocultas.
"¿Está Chaos Dragon aquí? No esperaba que estuviera interesado en esta reunión... No había terminado su
masacre en el reino de los espíritus, y vi gente de ese reino dirigiéndose a la reunión... Supongo que los quiere
..." Leon entrecerró los ojos y miró a su alrededor en busca de un dragón, por desgracia, no había encontrado a
nadie.
Bueno, no era como si esta batalla fuera su batalla.
Él podría ayudar a lo sumo.

Por supuesto, Leon preferiría vivir en un mundo sin una mayoría de personas atemorizadas. Y por lo que vio,
todos eran así debido al Emperador Humano, al Dragón del Caos y al Señor de la Muerte. Sería bueno si las
personas fuertes pudieran encontrar un lenguaje común y trabajar juntos para borrar lentamente esas
amenazas.
Al final, Leon era solo una entidad y tenía a dos mujeres encantadoras a su lado. Alexandra era su doncella
dragón, y eso era todo lo que tenía. No podría decidir el destino del mundo ni luchar solo contra todos esos
hombres y sus fuerzas.
Pero estar separado del destino significaba que Leon podía agregar fácilmente su fuerza.
Por lo tanto, esperó pacientemente a que terminara la reunión y escuchar las noticias.
Pero entonces, la gran sombra voló sobre la capital. Era tan ancho que toda la capital quedó envuelta en la
oscuridad durante unos segundos.
Leon levantó la vista y vio al Dragón Negro.
Y luego, miró hacia abajo y descubrió que Alexandra se había ido.
"Él la arrebató... ya todos los dragones de esta ciudad". Celes comprobó rápidamente la situación. "¿Él quiere
enojar al Dragón del Caos? ¿O su objetivo es mantener alejados a los dragones de esta reunión?"
Leon no sabía qué era exactamente.
Pero la pérdida de su doncella dragón realmente lo enfureció.
Al mismo tiempo, las conversaciones entre figuras prominentes se detuvieron repentinamente.
"Rey nacido en el invierno... La noticia de tus planes furtivos ha llegado a mis oídos". Un hombre, claramente
un humano, sonrió y fijó sus ojos rojos en el hombre de hielo.
Winterborn King no dejó que nada brillara en sus ojos o apareciera en su rostro, aunque estaba confundido
por la voz de ese hombre. "¿Qué plan?"
El hombre de ojos rojos se rió entre dientes y se inclinó más cerca de la mesa, pronto sosteniendo su cabeza
con sus dos manos. "Tienes a una mujer con físico yin en tus filas. ¡Una mujer cuyo destino es convertirse en
una reina de los humanos con el cuerpo de la humanidad pico!"
Se produjo un silencio en la habitación y todas las miradas se posaron en el hombre de hielo.
Sabiendo que las mentiras solo lo pondrían en mayor desventaja, la voz fría del hombre pasó por alto sus
labios y sorprendió a todos en la habitación. "Sí. Ha destrozado su humanidad y se ha convertido en uno de
nosotros".
"Me temo que es una amenaza que debe ser eliminada".
El corazón de Winterborn King saltó de miedo.
Temía lo que haría su esposa si realmente permitía que Snow Demoness muriera.
Capítulo 170 Preferiría morir antes que seguir el

destino
Capítulo 170: Prefiero morir que seguir el destino.
"Como dije antes, ya no es humana. Sí, tiene talento y tiene el potencial de convertirse en una de las mujeres
más fuertes de nuestro mundo... Pero eso es todo. Nunca se convertirá en la reina de otra persona ni planea
ninguna conquista". Winterborn King decidió continuar con sus conversaciones sin ocultar demasiados
detalles.
Eso fue porque esta reunión era demasiado importante.
Si pensara en mentiras, cavaría un hoyo debajo de sí mismo y pronto sería enterrado por sus propias mentiras.
"Se dice que solo los humanos pueden manejar los conceptos divinos. Eso es porque los ancestros humanos
ganaron ese privilegio en el pasado lejano... Pero ya hemos confirmado que esta regla ya no se aplica. El Dragón
del Caos es un ejemplo perfecto. ¿Qué pasa si quieres usar a esta mujer para atraer al portador divino a tu lado
y luego hacer que tu hijo devore ese concepto, tal como lo había hecho el Dragón del Caos?" El hombre de ojos
rojos continuó.
Winterborn King apretó las manos.
¿Cómo podía decir que a su esposa le gustaba su mujer y la trataba como a su hija? ¿Eso convencería a ese
hombre y haría que renunciara a perseguir la muerte de Snow Demoness? Winterborn King no era tan ingenuo
como para creer eso, así que tuvo que pensar en un argumento diferente.
"Snow Demoness encontró refugio en nuestro reino. Se convirtió en parte de nosotros, se asimiló a la cultura y
se convirtió en un objeto de admiración para muchos. Mi esposa también la atesora y vierte mucho amor en
esa mujer abandonada. De hecho. Ella tiene sido herida y abandonada por los humanos. Todo lo que esta mujer
quiere es una vida en la que nadie pueda tocarla. Si ella atrae el cuerpo de la humanidad pico a nuestras
tierras, no permitiré que hablen".
"Has planteado un buen punto". El mismo hombre sonrió, aliviando momentáneamente a Winterborn King,
pero sus siguientes palabras hicieron que el hombre de hielo apretara los dientes. "Ella puede atraer a la
humanidad pico humana. No sabemos dónde están los otros dos conceptos y qué están planeando. Si Snow
Demoness es una de sus futuras reinas, su presencia traerá al hombre con un concepto divino a nuestros pies. .
"Supongo que debemos mantenerla encerrada, esperando a que aparezca ese hombre. Para eso, ofreceré mis
servicios. Como saben, nuestra familia tiene una larga historia de encarcelar a las personas, no de matarlas
como es común en nuestro mundo. Nuestro Las defensas de la prisión son de primer nivel, y nadie puede
escapar de ellas, y mucho menos entrar libremente. Como ella es alguien especial, le ofreceremos buenas
condiciones de vida. Es solo que no podrá salir de su celda.
Winterborn King palideció aún más, una imagen del rostro arrugado de su esposa golpeando su conciencia.
Rápidamente pensó en otra cosa. "¿Cómo has aprendido acerca de la singularidad de Snow Demoness?"
"Tengo mis propias fuentes". El hombre sonrió, sus palabras molestaron a algunas personas. "Y esas fuentes
tienen razón ya que has confirmado que... ¿Quién está de acuerdo con mi oferta?"
Pronto, muchas personas levantaron la mano.
Eso conmocionó a Winterborn King.
Y luego, Madame Jasmin separó sus labios. "Debe indicar sus fuentes. No podemos excluir la posibilidad de que
esté trabajando con... un portador de conceptos divinos".
Esas palabras estresaron al hombre de ojos rojos más de lo que esperaba.
- 𝒇𝒇𝒇e𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇ѵ𝒇𝒇. c𝒇𝒇
Leon intentó encontrar al Dragón Negro.
Por desgracia, ya no pudo encontrar ni rastro de él. Rápidamente hizo su trabajo y se fue, dejando a Leon y
algunas otras personas irritadas.
Leon perdió a su doncella dragón. Había pasado por mucho y estaba abierta a más experiencias. Aunque sus
circunstancias seguramente estaban fuera de este mundo, trabajó duro para su nueva vida.
Ella era una buena doncella dragón.
León murmuró debajo de su nariz. "Entonces... ¿Así es como me atraerás a tu mierda, El Emperador Humano?"
Ante sus palabras, Louise y Celes permanecieron inexpresivos, aunque sus corazones latían con fuerza, ya que
sentían que seguramente se enfrentarían a las fuerzas del Emperador Humano.
Por eso, León se interesó en la reunión.
Hizo su camino aquí.
-
"¡¿Crees que creeré en tu mierda de bola de cristal?!" Winterborn King rugió y se puso de pie.
El hombre de ojos rojos se vio obligado a declarar sus fuentes, por lo que dijo que se enteró de Snow Demoness
a través de la bola de cristal. Murmuró sobre alguna adivinación y otras cosas que activaron al hombre de
hielo.
Otras personas, que no habían levantado la mano antes, enfocaron sus ojos en ese hombre.
Por otro lado, los que sí estuvieron de acuerdo con sus ofertas parecían tensos.
"¡Debes estar trabajando para el cuerpo máximo de la humanidad, humano! ¡¿Quién es?! ¿El espacio? ¡¿La
vida?! ¡¿Quién?" Winterborn King ahora estaba seguro de que algo estaba pasando detrás de escena.
Ordenó a su gente que protegiera a Snow Demoness, porque ya no era asunto suyo mantenerla a salvo.
Heaven Library Guild y otros hicieron lo mismo.
Pronto, el espacio sobre la mesa redonda se agrietó y un hombre se dejó caer sobre él. "Espacio."
El hombre parecía joven, no mayor de treinta años, y sonreía de pies a cabeza mientras tarareaba y golpeaba la
mesa con la punta de los zapatos. Estaba de buen humor, listo para sacudir toda la escena.
[Adán Lv. 120 CV: ??? parlamentario: ???]
"Soy nuevo en este mundo, pero trabajé muy rápido para estar en la cima de la escena... Verás, un sucesor
anterior del espacio abandonó ese concepto y se fue a vivir su propia vida... Así que tengo mucho más trabajo
por hacer. … Por ejemplo, encontrar mi propia reina”. Adam se rió entre dientes y fijó sus ojos en Winterborn
King. "No puedes protegerla... Nadie puede".
¡Usó su nuevo concepto y robó Snow Demoness de todos!
Pero como solo estaba en el nivel cien, su control no era tan bueno. Pronto, un portal apareció ante él, y una
mujer de cabello blanco salió de él.
De pie, sorprendida y cautelosa, Snow Demoness fijó sus ojos en Adam.
Él sonrió y dijo. "Tienes el destino de trabajar conmigo. Otros realmente no quieren trabajar juntos como cinco
ancestros del pasado, por lo que debemos confiar solo en nosotros mismos. Si no quieres morir como un perro,
conviértete en mío".
Los fríos labios de Snow Demoness se separaron. "Prefiero morir que seguir el destino".
"¡No te mates!" Rugió Winterborn King, ya canalizando su maná.
Pero antes de que pudiera hacer algo más, el espacio se agrietó de nuevo y más personas invadieron la
reunión.
Leon los reconocería a todos.
Esos eran sus parientes lejanos.

Capítulo 171 El fénix de hielo

Capítulo 171: El Fénix de Hielo
El edificio de la Reunión de la Paz había sido estrechamente rodeado por varias razas, todas en un deber
estricto.
Cuando Leon estaba a unos metros de interactuar con algunos miembros del gremio de su gremio, se desató
una gran conmoción dentro del edificio. Una gran cantidad de maná se derramó afuera, enviando a la gente en
guardia.
Sintiendo un maná familiar, Leon entrecerró los ojos.
"Parece que mis pensamientos se están convirtiendo en realidad. Espero estar equivocado sobre el concepto
de la divinidad de la vida". León escupió y aceleró para acortar la distancia con el edificio, deseando
desesperadamente echar un vistazo al interior.
Sus mujeres estaban tan concentradas que no comentaron sus pensamientos en voz alta.
Si Leon tenía razón, entonces un nuevo poseedor de la divinidad espacial estaba dentro de la habitación.
Y seguramente causó más caos del que esperaban.
Toda la reunión se había dividido.
Un grupo se paró detrás de un titular de la divinidad espacial: Adam.
Otro grupo tenía a Winterborn King, Madam Jasmin y algunas otras personas que miraban con el ceño fruncido
a Adam y otras personas que los habían traicionado.
"Aquí estás... Wow, eres más hermosa de lo que pensaba". Adam había traído a Snow Demoness aquí, por lo
que obviamente estaba más cerca del grupo anterior.
Apretó las manos, incapaz de luchar contra el concepto espacial. Congelada ante el divino-humano, Snow
Demoness elaboró lentamente un plan para liberarse mientras esperaba sus próximos movimientos.
Adam inclinó la cabeza y sonrió. "Estás destinado a ser mío. No es como si abusara de ti o te tratara mal...
Quiero tener una buena relación con mi reina. Ven conmigo. Estoy seguro de que pronto te caeré bien. "
A pesar de que había dicho esas palabras amablemente, Adam tenía un brillo bastante posesivo en sus ojos, lo
que decía más que suficiente: ¡no dejaría ir a esta mujer, incluso si ella lo rechazara!
En ese momento, Snow Demoness canalizó su maná y lo conectó con el collar azul en su cuello. Recordó a la
persona que le había dado esa pieza y cómo había cambiado su vida.
Primero, había recibido ese collar de manos de su prometida, lo que le provocó lindos recuerdos. Su pecho se
hinchó con calor por un segundo, solo para recordar los siguientes eventos. Murió y recibió una segunda
oportunidad.
Esa segunda oportunidad fue demasiado difícil de aprovechar, ya que los padres de su prometida no la habían
recibido. Pero al final, Snow Demoness se arrojó a otro mundo. En un lugar extraño, se acercó a los humanos y
comenzó una nueva vida, en la que decidió subir de nivel y usar su cuerpo inusual para ayudar a los demás.
Había estado ayudando a la gente en la Tierra y parecía que quería continuar con esa tendencia.
Por supuesto, en otro mundo, y con su físico único, Snow Demoness podría ayudar mejor a las personas
luchando contra monstruos y adquiriendo recursos raros. Pelear sola también era un poco peligroso, y quería
amigos para calmar su corazón de soledad.
Pero en medio de la construcción de esa amistad, Snow Demoness descubrió que nunca estaba sola.
Ella quería cambiar su vida por eso. Por desgracia, eso no era lo que querían sus nuevos amigos, y pronto
revelaron sus verdaderos colores, llevándose la única felicidad de Snow Demoness.
También querían quitarle la vida. Pero antes de que eso pudiera suceder, el collar azul, el único regalo que
tenía de su mundo anterior, brilló con una inmensa frialdad, salvándole la vida.
Esa frialdad la guió a las Tierras de Winterborn. Aún mejor, la Reina se dio cuenta y encontró a un humano
herido.
[¡No quiero ser un humano!]
Los humanos de otro mundo eran diferentes a los de la Tierra.
Snow Demoness deseaba ser diferente. No le importaba en qué raza se había convertido; ella no quería ser
humana.
[Puedo cumplir tu deseo. Pero debes pagar el precio por eso. Este collar azul en tu cuello es un tesoro perdido
de nuestra gente.]
[¡Nunca! León me lo dio! ¡Nunca me lo quitaré!]
Como si el artículo fuera sensible, el collar azul lanzó una ola azul, congelando a la Reina Winterborn.
[Parece que el Fénix de Hielo te ha elegido. Respetaré su deseo y te tomaré como mi hija.]
Y desde ese día, las dos niñas interactuaron consigo mismas a diario, convirtiéndose pronto en un combo de
madre e hija.
Snow Demoness también aprendió sobre el collar único que de alguna manera atravesó el espacio, como si su
prometida realmente quisiera buscar algo bueno para ella, y cómo usarlo.
Ahora estaba lista para desatar el poder del Fénix de Hielo y convertirse ella misma en el fénix, ya que tenía un
cuerpo que podía albergar y evolucionar hasta convertirse en esa bestia legendaria: ¡tenía un cuerpo solo
superado por el cuerpo de la humanidad!
¡Pah!
Una grieta se extendió por la cuenta del collar azul.
Una cantidad inimaginable de maná se derramó afuera, cubriendo las hermosas curvas de Snow Demoness.
Evolucionó instantáneamente, extendiendo enormes alas azules detrás de su espalda. ¡Sus ojos se convirtieron
en rendijas y miró a Adam con furia!
"Entonces te enfrentaré de frente. Pareces una chica dura que necesita muchos azotes". Adam se humedeció
los labios y apretó las manos.
Le indicó a su gente que comenzara una batalla con otros, creando una escena en la que solo él y Snow
Demoness podían estar.
Snow Demoness también tenía suficientes medios para crear su propio entorno para ayudarla. Un tornado de
viento frío se elevó hacia los cielos, abriendo un agujero en el techo. Congeló todo a su alrededor mientras sus
estadísticas seguían subiendo y subiendo, igualando grandes figuras detrás de ella y estirándose lentamente
para igualar las estadísticas de Adam.
Adam dobló el espacio y cerró la distancia, luego lanzó un puñetazo.
"Oh."
Rompió el estatuto de hielo de Snow Demoness.
Fragmentos de hielo rotos lo arrojaron. Al mismo tiempo, Snow Demoness descendió desde arriba de él a una
velocidad tan alta que toda su forma era como un rayo.
Su pie se hundió en un pequeño espacio vacío, que se rió de su intento de herir a Adam.
Snow Demoness tiró de su pie hacia atrás y giró, enviando otro ataque rápido al hombre divino. Por el rabillo
del ojo, vio que sus fragmentos le habían causado un daño considerable, lo que infirió que Adam no podía
protegerse adecuadamente de muchas habilidades a la vez.
Sus brazos oscilantes conjuraron muchos elementos de hielo, en forma de fragmentos, carámbanos e incluso
pequeñas bolas parecidas a granizo, y ella los arrojó todos hacia él, sin olvidar atacarlo.
"¡Te enteraste de mi debilidad demasiado rápido!" Adam sonrió como si estuviera orgulloso de ella y se llevó la
peor parte de todos sus ataques con su cuerpo divino.
Luego miró hacia arriba y se cruzó de brazos, sin prestar atención a la sangre que corría por sus extremidades.
"Te mantendré en un solo lugar ahora".
El espacio detrás de Snow Demoness se agrietó, expandiéndose como la mandíbula de un monstruo. Era lo
suficientemente ancho como para tragársela, aunque su propósito era aplicar una fuerza similar a la gravedad
sobre Snow Demoness y succionarla dentro en su lugar.
Eso detuvo por completo a Snow Demoness y toda su frialdad.
¡Ante sus ojos, todo el viento frío comenzó a precipitarse directamente hacia el agujero en el espacio!
Adam caminó a su lado, luego extendió su mano, agarrando su garganta. "¿Te gusta rudo?"
Él apretó su garganta.
Snow Demoness no dejó escapar ningún sonido, aunque le dolió mucho.
Entrecerró los ojos, mirando al hombre.

Capítulo 172 Reunión

Capítulo 172: Reunión
Leon y otros se sorprendieron al sentir la presencia del Fénix de Hielo.
Por supuesto, nadie estaba tan sorprendido como Winterborn King, cuyos labios se abrieron lo suficiente como
para que la gente pudiera llenar su boca con un huevo. ¡No podía creer que Snow Demoness tuviera acceso al
maná de este legendario guardián! Se maldijo a sí mismo y un poco menos a su esposa, luego juró proteger a
Snow Demoness aún más.
Sin embargo, toda la escena pertenecía a Adam y a ella.
El espacio se resquebrajó a su alrededor. Los vientos fríos y azules seguían arremolinándose a su alrededor,
sin dar a la gente la oportunidad de mirar dentro para ver qué estaba pasando. Unos cuantos gruñidos
sorprendieron a los seguidores de Adam, pero pronto los gritos de Snow Demoness quitaron las
preocupaciones de sus corazones y sonrieron.
Adam seguramente estaba ganando contra esa mujer.
¿Por qué no lo haría? ¡Él era un sucesor divino! Era un hombre que crearía un nuevo mini-mundo y viviría una
vida allí como nadie lo había hecho antes. ¡Sería más que un rey de unas pocas tierras!
Sin darse cuenta de la presencia de Leon acercándose, el apoyo de Adam deleitó los gritos de Snow Demoness.
¡Se sintieron más confiados en él y vieron un gran futuro en el que el concepto espacial creaba abundantes
mundos de recursos!
Todos ellos ignoraban por completo que los gritos de Snow Demoness sonaban familiares en los oídos de Leon.
Se quedó congelado por un segundo antes de correr como un loco a través de los guardias que luchaban contra
él.
"¡Es él!" Uno de los familiares de León lo reconoció, gritando a todos.
Otros parientes giraron en su dirección, jadeando ante el cambio de Leon. Aunque apenas reconocibles, esos
ojos de desprecio hacia ellos conjuraron los recuerdos exactos de la desaparición de su mini-mundo.
Algunos de esos parientes le cerraron el paso a Leon.
Les aulló. "¡A la mierda mi pantalla!"
Echó los brazos alrededor. Más rápido que nunca, las bufandas de Leon abandonaron sus mangas. Esas mangas
atravesaron los obstáculos con facilidad, luego Leon utilizó sus armas divinas, creando una gran explosión de
fuego. Sus llamas no eran nada de lo que burlarse, y muchos sufrieron pérdidas significativas en medio de ellas.
Leon invocó inconscientemente su espada divina, que estaba lista para usar las nuevas zonas.
Louise y Celes pasaron a su amada. "¡Saca nuestras zonas!"
Leon activó ese nuevo poder profundo, pintando la reunión con los colores de su familia. Mientras la oscuridad
de la luna roja y el calor del sol se asentaban, Louise y Celes trajeron su propio terror a Madevin Metropolis.
Por supuesto, Louise era mucho más fuerte ya que ahora estaba completamente despierta.
Ya sin amnesia e incluso trabajando con Amaterasu viviendo dentro de ella, Louise formó estrellas ardientes
en su zona, allanando el camino para su amado.
Sabiendo que ella tenía el mismo potencial y que no era un momento para sentir amargura, Celes se centró
únicamente en sí misma y superó la mayor cantidad de obstáculos posible. Su velocidad aumentó, y brilló con
una palidez de luna roja en comparación con sus ojos confiados y rebosantes de amor.
Leon se sentía dulce por dentro, ya que no tenía que preocuparse por las plagas. Por supuesto, los parientes
fuertes y los nuevos aliados de Adam le cerraron el camino por segunda vez.
Pero Leon estaba lejos de estar solo.
Madam Jasmin conectó algunos puntos y le prestó su poder. Muchos cristales brillaron alrededor de Leon,
luego el maná crudo explosivo cayó sobre los nuevos obstáculos de Leon, haciéndolos desaparecer.
Leon agarró su espada divina y empujó la punta dentro de los vientos fríos y arremolinados. "¡ATENAS!"
"¡ATENAS!"
En este mundo, solo una persona sabía su nombre. Era la Reina Nacida del Invierno.
Sin embargo, la voz que nunca imaginó volver a escuchar resonó en sus oídos. Sí, Athena había pensado a
menudo en el destino de Leon desde que era consciente de su cuerpo único. Quería que él también estuviera
con ella, pero no podía desear su muerte. Por lo tanto, enterró esos pensamientos en lo profundo de su
corazón.
Y ahora que su enemigo le estaba apretando la garganta, Athena confundió la voz de Leon, imaginando que era
solo una imaginación, que lo había escuchado mal.
Sin embargo, su corazón sabía la verdadera respuesta. Sus sentimientos, que eran un recuerdo lejano debido a
un flujo diferente entre la Tierra y el Mundo Freya, se habían encendido nuevamente. Y mientras su corazón
ardía y producía más maná, encontrando una nueva y misteriosa conexión con su amado, el cuerpo de Athena
se volvió mucho más frío.
Ella era una mujer de nieve, después de todo.
Aparte de su hombre, nadie podía mantenerla caliente.
El hielo se deslizó por el brazo de Adam mientras miraba boquiabierto el rostro de Athena, que ya tenía
hermosas manchas rojas en las mejillas.
Entonces, el viento helado amainó.
En su lugar, se paró un hombre con una espada divina.
La espada era de hielo, con una hermosa rosa azul en la empuñadura. Ese hombre la sujetó con fuerza,
frunciendo el ceño al hombre cuya mano había estado agarrando la garganta de Athena.
[Has recibido una nueva zona: ¡la Zona del Fénix de Hielo de Atenea!]
[Has activado la Zona del Fénix de Hielo de Atenea.]
Leon clavó su espada en el suelo, dejando que sus poderes se apoderaran de la escena. Ante Athena, el espacio
literalmente se congeló, devolviéndole la libertad. Levantó la mano y la puso en el antebrazo de Adam,
agregando más maná al hielo que ya se arrastraba sobre su piel. Esto obligó a Adam a retirar su mano.
Atravesando una tierra nevada, con copos de nieve danzantes y pisos de hielo que reflejaban su rostro feliz,
Athena voló al lado de su amado con las manos extendidas hacia su rostro.
Pronto atrapó su rostro y le plantó un beso profundo.
¡Sus alas de fénix de hielo aletearon mientras la zona de hielo enloquecía de amor, convirtiendo los copos de
nieve en shurikens! Al mismo tiempo, el suelo de hielo propagó algo parecido a una enfermedad del hielo que
arraigó a otros.
Leon y Athena solo se tenían el uno al otro en sus ojos.
"Debería haberlo pensado... Debería haber esperado que estuvieras aquí". Leon chocó su frente con la de
Athena, mirando más profundamente sus tonos.
Athena se sentía como un ser humano, eso estaba mal. ¡Se sentía como una mujer feliz!
No podía pensar en ningún error ni nada más en ese estado de ánimo eufórico, simplemente queriendo sentir
el calor de su amado y verse a sí misma en sus ojos.
Esos eran diferentes, pero aunque estuvieran envueltos en otro color, Leon la miraba de la misma manera, lo
que la hacía más feliz a cada segundo que pasaba.
"Tú viniste, y eso es todo lo que importa". Atenea susurró.

Luego sintió que el poder del espacio intentaba agarrarla por la espalda, pero Leon rápidamente la rodeó con
sus brazos, apretándola contra su pecho, y luego miró hacia arriba. "Ella es mía."
"Renunciaste al concepto espacial. ¡Por lo tanto, renunciaste a ella!"
"¿Eres virgen o algo así?"

Capítulo 173 Un hombre menos

Capítulo 173: Un hombre menos
Era virgen antes de venir a otro mundo.
Luego, los familiares de Leon lo descubrieron rápidamente y lo alimentaron con una bendición de oro. Adam lo
tenía todo, desde la fuerza hasta diferentes tipos de mujeres. Era como si fácilmente pudiera saborear varios
fetiches y curvas, desde mujeres de pecho plano hasta regordetas y voluptuosas más allá de las medidas
normales.
Él estaba viviendo en el cielo.
Él no era estúpido para simplemente vivir una vida abundante. Por cada día de placer, entrenaría al menos tres
veces más y subiría de nivel, absorbiendo nuevos conocimientos y principios. Incluso después de los eventos
de hoy, quería volver rápidamente a ese horario, mezclando la comodidad con el trabajo arduo.
Adán apretó los dientes. "Seré un rey para siempre si te mato ... Posteriormente, matarte también romperá a
Snow Demoness. La moldearé a mi gusto".
Después de revelar sus verdaderos colores, Adam canalizó su maná y conjuró técnicas espaciales. Ignoró la
nueva zona de Leon, creyendo que sus ardientes sentimientos borrarían ese molesto obstáculo.
El espacio tembló alrededor de Leon, luego se abrió ampliamente, escupiendo armas afiladas y rayos
corrosivos de maná puro.
Sorprendentemente, Leon sacó bufandas azul nieve de sus mangas. Esos quedaron encantados aún más con la
nueva zona, agregando más frialdad al ya debilitante entorno de hielo. La temperatura siguió bajando.
Y como León tenía a su reina, cuyo cuerpo era un gran apoyo contra las existencias divinas, sus nuevas
bufandas congelaron una vez más todo lo que iba en su contra.
Athena también estaba de muy buen humor. Movió los dedos, convirtiendo todas las habilidades de Adam en
escombros. Incluso el espacio se convirtió en maná bruto que se desmoronó en polvo.
Adam, y todos los demás que no se llamaban Athena y Leon, miraron boquiabiertos esa escena con los ojos
muy abiertos.
Leon sonrió y se burló del hombre divino. "¿Dónde está tu reina?"
Adam no respondió a esa pregunta. Interiormente, consideraba que Leon tenía razón. Eso era cierto. ¡Él era
cierto! Adam aún no tenía una reina y todavía era un novato. No tuvo tiempo suficiente para adaptarse
adecuadamente a ese mundo... Una vez que Leon convierta a esa Demonio de las Nieves en su mujer, otra
mujer con el mismo físico debería aparecer en el Mundo Freya.
¡Para entonces, él la encontrará y subirá de nivel!

Significaba una cosa: ¡debería escapar!
Su nueva facción ya había dejado una gran huella en las filas de la nueva alianza. De hecho, teniendo dinero de
los parientes de Leon, Adam usó su plan y recursos para contactar a muchas razas y ponerlas de su lado,
prometiéndoles nuevos mundos.
Una oferta para recibir un mundo nuevo era demasiado buena para dejarla pasar.
Eso también le dijo a Adán que tenía más de lo que se necesitaba para ser el emperador de los mundos.
Y nadie siempre salió victorioso.
De ahora en adelante, estaba bien para él escapar ahora.
Un gran portal apareció detrás de él. Adam rápidamente pateó el suelo, arrojándose contra él. Pero no se había
hundido en un placentero y misterioso abrazo espacial sino en un frío e inflexible en no dejarlo pasar por la
pared.
Abrió mucho los ojos, no queriendo aceptar sus pensamientos.
León lo hizo en su lugar. "Estás en nuestra zona. Solo puedes irte cuando te lo permita... Bueno, no como si te lo
permitiera. Pero puedes convencerla".
Al ver cómo Leon se inclinaba para oler el cabello de Athena, Adam supo que ella no lo dejaría ir. Esos ojos
fríos ya lo vieron muerto.
Leon levantó la mano y lo apuntó. Los pañuelos azules corrieron como toros hacia el hombre divino. Sin nada
más que su cuerpo, Adam lanzó sus golpes de aficionado. Las armas de Leon esquivaron fácilmente esos
lamentables intentos, enrollándose alrededor de las muñecas de Adam y derribándolo.
Adam golpeó el suelo con la cara, rompiéndose la nariz.
Luego, Atenea invocó sus copos de nieve, que eran más afilados que las armas comunes.
Toda la nieve cayó sobre la espalda de Adam, clavándose en su carne. La sangre brotó y brotó en todas
direcciones, eliminando sus puntos de salud más rápido de lo que nadie lo había hecho antes.
Adán gritó pidiendo ayuda. Sin embargo, nadie tenía una espada divina o cualquier otra arma para escabullirse
dentro de la zona como lo había hecho Leon. Los aliados de Adam solo podían escuchar sus gritos, sus rostros
llenos de horror.
Winterborn King y sus aliados estaban del lado triunfante, derribando a más y más enemigos. No los mataron,
pero planearon apoderarse de sus activos para fortalecer sus filas. Aparte de este idiota divino, había más
amenazas divinas que debían ser eliminadas.
Leon permaneció frío, mirando al hombre sin ninguna emoción.

"Es peor que la tortura. Tiene tantos puntos de salud que nos quedaremos aquí hasta el atardecer". Hizo una
cara bastante graciosa.
Atenea lo miró. "No me importa... No es como si tuviera que poner toda mi atención en matarlo... Puedo gastar
más en ti, Leon".
Leon la miró boquiabierto, comprendiendo que su prometida también se había convertido a los duros
estándares de este mundo. Él besó sus labios y asintió.
Pronto, el hombre divino del concepto espacial murió.
El nivel de Leon se disparó como nunca antes.
La Reunión de Paz tomó una ruta diferente a la que todos habían planeado.
Los que querían la paz y no la ruina del mundo habían luchado contra un hombre divino y su pueblo. No
lograron atraparlos a todos, pero la mayoría no logró escapar. Tener más riqueza y recursos fue lo único bueno
que salió de ese evento, además de la muerte de Adam y la nueva relación profunda entre las fuerzas aliadas.
Pero eso fue lo que se dio…
León había ganado más.
Regresó a casa con una amplia sonrisa en su rostro.
Sin embargo, una vez que comenzó la presentación, su sonrisa se desvaneció lentamente.
Athena se volvió fría y él realmente no podía tocarla.
Celes también permaneció bastante frío.
Louise fue la mujer más informal en esa reunión familiar. "Me alegro por ti, Leon. Eso es todo, ¿supongo?"
Amaterasu aulló en el corazón de Louise, pero la adorable zorra se encogió de hombros y salió de la habitación.
Celes la siguió y se dirigió a su habitación.
León pronto comprendió que Alexandra se había ido de su vida.

Bueno, recordaba eso. Honestamente, si él también la presentara, estaría en una situación más fría. Sin
embargo, con mucho gusto lo haría ahora y haría que todos se adaptaran nuevamente.
En el fondo, él realmente no entendía qué estaba mal.
Después de todo, todos sabían sobre Atenea.
Sus dos mujeres deberían saber que nunca se daría por vencido con ella.
Entendió a Athena, así que decidió hablar con ella.
"Me ayudaron a pisar fuerte en este mundo..."
"Estaba embarazada, León".
"..."
El corazón de Leon se volvió frío.

Capítulo 174 La verdad

Capítulo 174: La verdad
"Estaba embarazada."
El corazón de Leon se enfrió porque no podía imaginarse a Atenea sola con un bebé. Sabía que esas cosas
estaban fuera de su control, pero aún se sentía mal.
Sin embargo, fue peor de lo que había imaginado.
Athena lo miró a los ojos y lloró. "Me di cuenta de que estaba embarazada unos meses después de venir a este
mundo. Quería dejar mi nueva vida de inmediato y no pelear más con monstruos y otros... Cuando era más
vulnerable, mis amigos se convirtieron en lobos..." En ese momento, las lágrimas cayeron por el rostro de
Athena y apenas podía hablar. "Y perdí a nuestro hijo".
Leon separó los labios, pero ninguna palabra rozó sus labios.
Sintió como si alguien apretara su corazón y exprimiera con fuerza todos sus sentimientos, dejando solo una
semilla fría dentro de su pecho, que brotó en un árbol adulto de odio hacia la humanidad.
Athena describió vívidamente cómo sus amigos humanos la atacaron y la obligaron a perder su única felicidad.
Leon solo podía escuchar esas palabras que resonaban en su mente.
"Estoy feliz de que estés aquí... Pero no puedo deshacerme de la sensación de que has vivido una buena vida
mientras yo luchaba e incluso renuncié a mi humanidad... La pérdida de nuestro hijo pesó en mi corazón por
más de cincuenta años... A menudo tengo pesadillas de esa noche también... Entonces... Si bien es común que
los hombres tengan harenes... me duele que tengas a alguien más en tu vida. Haré todo lo que esté en mi
corazón para aceptarlo, pero será difícil. Será demasiado difícil..." Athena miró hacia abajo, derramando más
lágrimas.
Leon extendió su mano en silencio y la presionó suavemente contra su pecho, dándole más espacio para llorar.
Sus gritos y lágrimas se hundieron en su camisa mientras escuchaba y poco a poco se transformó en un
hombre diferente.
"Entiendo... Te daré suficiente tiempo para aceptar eso... Siempre estaré a tu lado también". Leon acarició el
cabello de Athena, plantando unos besos suaves en sus mechones, luego la llevó lentamente a su habitación.
Al no tener la fuerza o la voluntad para quitarse la ropa, Athena y Leon simplemente se inclinaron y se
acostaron en la cama de Leon. Él la abrazó con cariño, abrazándola.
Pero muchas obstrucciones cambiaron en la mente de Leon.
Detestaba a la humanidad.
-
Louise y Celes escucharon la historia de Athena.
Como mujeres, no podían imaginar qué tipo de dolor tenía que pasar Atenea. Además, su amado estaba en un
mundo diferente y no tenía a nadie más en quien confiar. Estando sola en un mundo tan cruel, Atenea sufrió
mucho más que León.
Si bien estaban celosos y se sentían un poco injustos, ambos juraron ayudar a Athena a asimilarse a la vida de
Leon y aceptarla como alguien más que una rival en el amor.
Al día siguiente, Leon recibió la visita de Winterborn King.
Pero el hombre de hielo ni siquiera vio la cara de Leon, ya que Leon y Athena se negaron a salir de la
habitación. Celes habló con él y le explicó algunas cosas, luego prometió transmitirle las noticias que había
traído Winterborn King. El hombre también dijo que su esposa seguramente visitaría a Leon pronto y que no lo
dejaría solo sin ver a Athena al menos una vez.
Celes se lo tomó en serio y sonrió levemente.
Los días siguientes fueron bastante molestos para la familia de León.
Eso fue porque Leon y Athena eran una pareja que tenía la fuerza suficiente para matar a los seres divinos.
Eran como piezas esenciales para lidiar con El Señor de la Muerte, El Emperador Humano, El Dragón del Caos y
el último hombre divino de la vida.
Sin embargo, Leon se negó a hablar con nadie.
Celes se ocupó de todas las conversaciones, luego conoció a su amigo lobo.
Lizanna llegó con noticias bastante aterradoras. "Vi a tus hermanas... El Emperador Humano también se
volvió... demasiado lujurioso".
"¿Qué quieres decir con eso?" Celes entrecerró los ojos.

Cada tema relacionado con el sexo la irritaba más de lo que debería en la actualidad.
Lizanna describió una escena en la que el emperador humano mostró abiertamente sus habilidades en la cama
durante la conquista, como si todos los años de estar encadenado lo hubieran convertido en un perro
cachondo. Él no era así antes ya que no había tocado a la estrella de nueve colas y otras hermosas mujeres
esclavas.
Pero ahora, lentamente se estaba comiendo a todos. 𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇ℯ 𝒇𝒇𝒇ν𝒇𝒇. c𝒇m
"Lo está haciendo desde las mujeres de más alto rango, luego va hacia abajo. En este momento, se está
enfocando en las personas que tiene que conquistar, pero pronto, debería poner sus manos sobre las súcubos
debajo de él... Irene Crownedge no le permitió tocar a su leal súcubos, lo vi". Lizanna suspiró. Por eso temo que
tus hermanas estén en manos de lobos.
"¡Todo el mundo es un maldito lobo!" Celes gritó, luego rápidamente bajó sus palabras. "Excepto Leon... De
todos modos, viniste aquí para explorarnos, ¿verdad?"
"Sí." Lizana asintió. "Nuestras fuerzas no están tan heridas, y podemos movernos juntos rápidamente para
detener el crecimiento del Emperador Humano... También se burló del Dragón del Caos, y escuché que los
dragones también se están preparando para lidiar con él. Queremos usar su conflicto para lidiar el golpe
decisivo y salvar a la gente bajo su control, como tus hermanas.
Celes lo pensó mucho y luego asintió. "Iré. Solo yo".
Louise vino entonces de las sombras. "No dejaré que vayas allí solo".
La vampiresa curvó sus labios en una sonrisa suave pero inmensamente encantadora.
"Un concepto de vida divina ha caído en manos equivocadas". El Señor de la Muerte invadió la raza forestal
élfica, corrompiendo su bosque con energía de muerte.
Cubierto desde la cima hasta las raíces, todo el bosque se volvió negro.
Y en el árbol más alto, un hombre con el concepto de vida divina se acobardó ante el Señor de la Muerte. "Eres
un cobarde, peor que la divinidad del espacio caído".
Con sus fantasmas, el Señor de la Muerte había visto a través de la batalla de Leon contra Adam. Aunque Adam
era un novato y se deleitaba con los tesoros y las bellezas, tenía un corazón trabajador. Solo le faltaba tiempo.
Y, de hecho, fue arrojado con bastante fuerza al Mundo Freya.
Por otro lado, el portador del concepto divino de la vida era un hombre que era como una planta. Sí, era un
humano, pero los elfos del bosque solo podían alimentar a ese hombre con su riqueza y hacerlo crecer en
fuerza. Usaron su presencia para impulsar su bosque e influencia sobre el mundo, pero eso fue todo.
El hombre mismo no podía ejercer demasiado de ese poder y era nada menos que una amenaza.
Era un hombre que necesitaba que otros le dieran las cosas.
El Señor de la Muerte ni siquiera podía fruncirle el ceño. "Solo muere."
Otro concepto divino murió así.
El Señor de la Muerte miró a los cielos. "Parece que has guiado a otros hacia Roger Dream. E incluso lo
obligaste a burlarse del Dragón del Caos... ¿Eres tan impaciente o te has cansado, El Oráculo?"
Darle a Leon una oportunidad de vivir fue una de las mejores elecciones que había hecho. Leon se ocupó del
hombre del espacio divino, y el Señor de la Muerte borró el concepto de vida divina.
Ahora, solo el caos y el tiempo quedaron atrás.
Leon estaba completamente fuera de ese sistema, pero el Señor de la Muerte sintió que el destino lo haría
chocar con ese hombre muy pronto. Tratándolo como su última prueba para convertirse en muerte, el Señor
de la Muerte giró y dejó el árbol más alto con una sonrisa en su rostro.
De hecho, solo las existencias poderosas podrían hacerlo sonreír.

Capítulo 175 El Dragón del Caos vs. El emperador

humano
Capítulo 175: El Dragón del Caos contra el Emperador Humano
Celes y Louise le mintieron a Leon, diciéndole que ayudarían a Heaven Library Guild en sus preparativos para
proteger sus tierras y su alianza en general. Incluso recalcaron que no se irían de Madevin Metrópolis. Eso fue
para que Leon no se preocupara por ellos.
Por supuesto, en realidad, estos dos estaban listos para ir con otras fuerzas a luchar contra el Emperador
Humano. Su información decía que el Dragón del Caos ya había descendido sobre las fuerzas del Emperador
Humano.
Louise y Celes tenían un objetivo simple: salvar a las hermanas juradas de Celes.
El resto dependía de existencias poderosas.
Por lo tanto, estos dos se fueron con ese simple objetivo en mente.
Por otro lado, Leon pasó unos días trabajando en su negocio y atendiendo las heridas de Athena. Creía que sus
otros amados no lo odiarían por sacrificar toda su atención a Atenea. Y su tiempo en la herrería fue su escape
habitual de la realidad, de lo que Louise y Celes deberían ser muy conscientes a partir de ahora.
Pero incluso con su corazón envuelto en frialdad y odio hacia las personas que habían matado a su hijo, los
ojos de Leon no estaban lo suficientemente nublados como para no ver que algo andaba mal.
Athena también sospechó que Louise y Celes se fueron lejos de Madevin Metropolis.
"No puedo contratarlos a través del sistema... ¡Están muy lejos!" Leon apretó las manos, apretando su cerebro
para ver la intención de su amada.
Después de algunos pensamientos, Leon se mordió los labios y llegó a una conclusión aterradora. "Se han ido al
lado del Emperador Humano... Celes había visto una vez a través de Irene Crownedge y sabe que sus hermanas
están a su lado. Ahora que este hombre salió y está alborotado, ella sabe que no tienen demasiado mucho
tiempo."
Atenea asintió. "Si es eso, no se enfrentarán directamente al Emperador Humano. En el peor de los casos, se
enfrentarán a su reina".
Leon estuvo de acuerdo con ella, ligeramente apaciguado.
Luego preparó todo lo necesario para emprender una nueva aventura: empacó algunas pociones y se puso un
equipo de mucha más alta calidad adecuado a su nivel (150), y salió de la casa con Athena de pie a su lado.
"Es bueno... Dejaré salir todos los sentimientos de sus fuerzas y salvaré a las hermanas de Celes y Alexandra".
[¡Mátalos! ¡No dejes que esos dragones inferiores te miren de esta manera!]
Alexandra estaba ubicada en la prisión subterránea, con muchos otros dragones encadenados a las paredes.
Con las extremidades levantadas por esas cadenas de sellado, todos simplemente miraban con el ceño fruncido
a Alexandra.
Eso fue porque ella era un dragón que se había convertido en un espíritu contratado y pertenecía a un humano.
Según los estándares del Dragón del Caos, ella era la traidora.
Sin embargo, Alexandra estaba en un nivel diferente al de esos dragones. Fácilmente podría liberarse de estas
cadenas y matarlos a todos para beber su sangre y alimentarse de su carne. Sin embargo, la sirvienta dragón
no quería hacerlo, y para el alma de Alexandra Aquarisen le ordenó que lo hiciera.
Ella podría matar a esos dragones, ¿entonces qué?
No podría salir de la prisión subterránea y el Dragón Negro acechaba en las sombras.
Pero entonces, Alexandra escuchó temblores sobre ellos. Sonaba como si algunos gigantes cayeran del cielo a
la vez, causando terror en la escena. Eso despertó los intereses de tanto Alexandra.
Seguramente era una oportunidad para salir de esa prisión y volver a la libertad, ¿verdad?
'Debo esperar una oportunidad perfecta... Los dragones inundarán esta habitación pronto... Debería poder usar
su confusión para salir de esta celda'. Alexandra, sin embargo, esperando pacientemente.
"Esos bastardos divinos no son omnipotentes". Louise se cruzó de brazos y miró a los dos hombres que
flotaban en lo alto del cielo.
Uno de ellos tenía alas de dragón, mientras que el otro vestía ropa de emperador. Y aunque solo el primero se
veía grandioso, mientras su ropa ondeaba con el viento, ambos eran gobernantes de sus respectivas fuerzas.
El Emperador Humano y el Dragón del Caos comenzaron su batalla.
Celes los miró y susurró fríamente. "Que se maten entre ellos".
Mientras estas dos existencias rompieron las reglas del mundo, sus fuerzas pululaban por los alrededores.
Dado que esas eran tierras del Emperador Humano, las tierras demoníacas, sus fuerzas conocían muy bien
todo el diseño y usaron varios trucos para atacar a los dragones.
En este momento, solo los dragones y las fuerzas de Roger Dreams se revelaron.
La Alianza por la Paz se coló en las sombras, con los miembros menos importantes planeando debilitar a las
fuerzas de ambos gobernantes.
Louise y Celes, aunque seguramente no podrían llamarse menos importantes, estaban aquí como ayudantes,
por lo que su tarea era exactamente la misma. Lizanna también los había dejado y se había ido al lado de su
hermano, con la esperanza de liberar su continente y reino de las manos de los traidores.
Por lo tanto, estos dos estaban solos.
"¿Qué pasa con Alejandra?" preguntó Luisa.
Celes pensó por un segundo. "Si lo que dijo Liz es cierto, entonces se la considera una traidora. La
perseguirán... Si no encuentra una habitación para escapar y nosotros la encontramos, podríamos ayudarla.
Eso depende de si seremos capaces de hacerlo". ayudarla."
Alexandra no tenía el mismo estatus que ellos, por lo que Celes podía verse dándose por vencida con ella. Por
supuesto, Leon era más o menos igual, aunque estaba bastante interesado en su nuevo y trabajador yo.
Luisa asintió.
La vampiresa y el adorable zorro comenzaron su búsqueda. En su camino hacia el lado de los súcubos, mataron
a muchos demonios y bebieron muchas pociones para recargar su maná y salud.
No fue difícil encontrar súcubos.
Esos pertenecían a Irene Crownedge. Usó a su gente para ayudar a su rey y los distribuyó uniformemente
alrededor de él y de los dragones más fuertes.
"Las veo…" Celes estaba aturdida, levantando los ojos para mirar a sus hermanas de juramento.
Aunque eran solo tres de ellos, claramente se vieron obligados a ayudar en todo el ataque. Sus razas se
convirtieron en una mezcla de vampiros y súcubos, que también era una combinación bastante devastadora.
Celes se alegró de verlos con vida.
"¿Cómo nos acercamos a ellos?" Louise chasqueó la lengua al darse cuenta de que esas mujeres estaban cerca
de Irene Crownedge.
Eran como sus leales guardias.
"Esperamos." Celes dijo con severidad.
Tenía la sensación de que las cosas no eran tan simples como parecían.
Capítulo 176 Vampiresa legendaria

Capítulo 176: Vampiresa legendaria
El Emperador Humano, Roger Dream, se enfrentó al Dragón del Caos.
Sonrió y levantó su espada, apuntando su punta al cuello del dragón. "Te convertiré en una armadura".
Las armas de Roger eran su habilidad con la espada y el control del tiempo. El primero provino de la
espléndida adaptación de los humanos, ya que en el pasado, los humanos crearon armas para luchar contra los
monstruos. Era solo cuestión de tiempo antes de que los humanos se volvieran más prominentes que esas
bestias.
Y luego, esas bestias se convirtieron en monstruos que imitaban a los humanos.
Roger Dream nunca se sintió tan orgulloso de ser humano.
La segunda arma, su control de tiempo, era lo que empujaría a los humanos a la siguiente etapa. El Emperador
Humano también estaba naturalmente orgulloso de sí mismo al respecto, listo para marcar el comienzo de una
nueva era para los humanos.
El Dragón del Caos frunció el ceño. "Mutilaré tu cuerpo humano y orinaré en tus carnes destrozadas. Me
sorprende cómo puedes actuar de la misma manera a pesar de que la historia es muy diferente. Los humanos
ya no son la única raza que maneja el concepto divino, y todos ustedes luchan contra ¡entre sí!"
"¡Puedo cumplir mis sueños porque soy el Emperador Humano!" Roger Dream se rió y voló al lado del dragón.
Las armas del dragón eran naturalmente sus garras, colas y alas. Luchó en combate cuerpo a cuerpo, cubriendo
su presencia y sus armas con la energía del caos. Ese concepto divino era mucho más simple que cualquier otra
cosa, ya que simplemente rompió todo a su alrededor.
Era un poder destinado a destruir todo, porque todo comenzó con el caos.
Sin embargo, el dragón no lo manejaba a la perfección, y su nivel no era alto, y mucho menos su cuerpo, por lo
que el Emperador Humano pudo sobrevivir al caos que mordía sus armas y su carne, riéndose.
Parecía que estaban en un punto muerto.
El Emperador Humano evitó ataques letales leyendo unos segundos por delante.
El Dragón del Caos era un dragón duro y el caos lo protegía de ataques letales.
En este escenario, parecía que lo único que podía cambiar el flujo de su batalla era el tercero si ambos
ignoraban su resistencia. En adelante, Roger Dream llamó a su reina.
"¡Irene!"
Esas palabras fueron un detonante de un futuro inesperado.
Todo el campo de batalla se oscureció, luego una luna brillante brilló sobre ellos. Era luna llena, y se podía ver
la presencia de una mujer sentada con las piernas cruzadas ante ella. Detrás de ella, una gran sombra negra
extendió sus alas, convirtiéndose en El Dragón Negro, cuyos ojos rojos miraban con furia a ambos hombres
divinos.
Irene Crownedge se unió a esa escena.
Una brillante luz de luna se fusionó entre las manos de Tsuyukomi. Dirigió ese rayo hacia ambas existencias,
atrapándolas en la luz de la luna.
El Dragón Negro abrió mucho la boca, preparándose para un rugido.
Irene Crownedge extendió su mano y fusionó la hoja. Era un arma bastante similar a la espada de Leon, ya que
tenía algunos orígenes. Era rojo y apestaba a sangre, pero también tenía escamas de serpiente atravesando la
hoja y la empuñadura, con la cola de súcubo actuando como una empuñadura.
Formó un rayo de energía grueso y poderoso, apuntando a su rey y al dragón del caos.
¡Estaba claro que estos tres querían matar dos pájaros de un tiro!
¡Finalmente, sus poderes se mezclaron al unísono y se tragaron al Dragón del Caos y al Emperador Humano!
Después de que se calmó, nadie pudo ver El Emperador Humano.
Por otro lado, el Dragón del Caos se encontraba en diferentes escalas. Era como si se pusiera una nueva
armadura, o más bien, como si renunciara a su lado humanoide.
Sus escamas se agrietaron y cayeron al suelo, pero estaba bien.
Y luego.
"¡Ah!"
La espada atravesó el pecho de Irene Crownedge.
Se dio la vuelta y vio a Roger Dream mirándola a los ojos.
"Tuve una visión de que me traicionarías... Así es como es".
"Tú nunca confías en mí..."
"No al menos en este campo de batalla, con todos esos tipos alrededor". El Emperador Humano miró hacia
atrás y le sonrió al Dragón Negro, cuya vasta forma se convirtió en un yo humanoide.
El Emperador humano arrojó a Irene, dejando que su cuerpo herido pasara volando entre las nubes y cayera al
suelo. Luego se enfrentó al Dragón Negro y Tsuyukomi.
"Quiero una luna... ¿Cómo lograste controlarla mentalmente? Dímelo y te daré una muerte rápida".
El Dragón Negro negó con la cabeza. "¿Por qué te diría eso? Ya estás muerto, Roger Dream".
El Emperador Humano entrecerró los ojos.
Irene Crownedge cayó de bruces al suelo.
Muchos súcubos la rodearon, queriendo salvar su vida. Pero luego, grandes llamas los devoraron, dejando solo
a tres mujeres intactas.
Esas eran las hermanas de Celes.
La fuente de esas llamas era, naturalmente, el adorable zorro, de pie con los ojos encendidos. Celes pasó
corriendo junto a ella y miró a sus hermanas.
Su amor destrozó la habilidad de control mental.
Pronto, los tres terminaron llorando, yendo al lado de Celes.
Irene Crownedge miró la escena con los ojos muy abiertos. "Ayúdame…"
Pero todos la ignoraron. Solo Louise mantuvo sus ojos en ella, pero eso fue solo para no dejar que esta mujer
hiciera algo furtivo. En el fondo de su corazón, odiaba a esa mujer por convertirse en una traidora. Aunque era
del lado del Emperador Humano, Louise odiaba a los traidores.
Había matado a muchos de ellos en su vida, porque la desaparición de su raza comenzó con una fuga
traicionera.
Pronto, Celes se vio obligado a mirar a Irene.
[¡Has recibido una misión!]
[Devorar a Su Alteza Veronica durmiendo en el cuerpo de Irene Crownedge.]
[¡Completarás tu misión para convertirte en una vampira legendaria!]

Celes dejó ir a sus hermanas juradas. Ellos la miraron, confundidos. Celes caminó más cerca de Irene, tal como
lo había hecho Su Alteza Veronica en el pasado.
Luego ensilló a la mujer moribunda y agarró su corazón. "¿Donde esta ella?"
Sus ojos fríos y rojos sacaron a relucir a Su Alteza Verónica.
El cabello dorado de Irene se volvió negro y su piel palideció.
Al ver a esa vampiresa, Louise y los demás se quedaron sin aliento.
Y pronto, Celes se inclinó, tomando la primera ración de carne suave en su boca, ¡directamente del cuello de
Irene Crownedge!
"¡Ahhhhhh!"
Los ojos de Celes brillaron cuando comenzó su evolución.

Capítulo 177 Rodeado

Capítulo 177: Rodeado
"¡Muere, traidor!"
Alexandra había usado la situación para escapar de su prisión.
Atravesó muchos corredores, evitando a los dragones. Ella también los había perdido y estaba bastante libre,
solo para ver a uno de los ancianos, cuya presencia la hizo temblar.
Ese fue el anciano cuya palabra fue la más alta en la ausencia del Dragón.
Él fue quien despojó a Alexandra de sus niveles y la desterró a terrenos de bajo nivel.
No estaba solo. Muchos otros dragones le gritaron después de rodear a la doncella dragón.
Alexandra estaba en apuros y no tenía adónde ir.
"Las personas como tú, que voluntariamente se convierten en esclavos de los humanos, no tienen cabida en
nuestra nueva era". El anciano suspiró y extendió su mano, formando una hoja de viento.
Cortó a través de la ropa y la carne de Alexandra, dibujando una gran laceración atravesando su torso. Ella
gritó y cerró los ojos, solo para abrirlos de par en par. Manteniendo el equilibrio, Alexandra jadeó y miró a los
dragones.
El agua bailaba a su alrededor, lista para protegerla.
"Es raro verte tan callado". El mayor sonrió levemente. "Esperaba escuchar un montón de maldiciones tuyas.
¿Qué tan dócil te has vuelto, Alexandra?"
Los vientos atravesaron a la doncella dragón, cortando su carne. La sangre brotó en abundancia, salpicando a
su alrededor. Alexandra una vez más sintió ganas de perder el conocimiento, pero aguantó y se enderezó.
Sin responderle al anciano, elaboró un plan en su mente para escapar.
[No tienes suficiente maná para escapar.]
El dragón malvado dijo desde adentro.
[¡Ven a verme!]
Esas palabras no fueron el habitual ataque de ira. Había un tono de mando en las palabras del malvado dragón,
lo que obligó a la conciencia de Alexandra a entrar en su alma.
En esta alma, ambas Alexandra se miraron a sí mismas.

El dragón malvado se abalanzó sobre la sirvienta dragón, derribándola hacia atrás. La ensilló y la miró
directamente a los ojos, que le devolvían la mirada.
En comparación, los ojos de Alexandra Aquarisen se llenaron de miedo.
"No le temas a ese anciano".
"Tú haces."
"Lo hago. Podrías pensar que me encantaría morir a manos de ese hombre. ¡Eso está mal! ¡Yo decidiré sobre mi
muerte! ¡Solo yo! ¡Es por eso que me suicidaré!" Alejandra gritó.
Esa fue una declaración bastante lamentable y de perdedor.
La doncella dragón se mordió los labios y le gritó a la espalda. "¡Así que ve y mátate! ¡Sobreviviré, escaparé de
ellos y regresaré al lado del maestro!"
"Si me mato, tú también morirás". Alexandra Aquarisen se burló. "Y eso es lo que te salvará".
Una repentina comprensión brilló en los ojos de la doncella dragón.
Ella entendió el significado de esas palabras y lo que pronto sucedería. Como si no tuviera ningún medio para
detener o impedir ese plan, la doncella dragón cerró los ojos y dejó escapar lágrimas.
Alexandra Aquarisen posó los ojos en ese rostro lloroso y luego, con el odio atravesándola, gritó. "¡Me
suicidaré ahora! ¡Solo yo puedo suicidarme! ¡Solo yo puedo decidir sobre eso, nadie más!"
Y con esas palabras, Alexandra Aquarisen se inclinó y mordió el cuello de la doncella dragón. En este mundo
del alma, no salió sangre, y una parte significativa del cuello de la doncella dragón desapareció así.
La doncella dragón abrió sus ojos llorosos y mostró sus dientes. Pronto hizo lo mismo con el dragón malvado,
comiéndola.
Ambos dragones azules se comen a sí mismos lentamente.
Sus almas se unieron en una.
Sus corazones se hicieron uno.
Sus mentes y experiencias se convirtieron en una.
Y así, el nivel de Alexandra Aquarisen se disparó y sus estadísticas se recargaron.
-
"¡Mundo acuático trémulo!"
Las estadísticas recargadas de Alexandra Aquarisen limpiaron su cuerpo de las heridas. Levantó la mano en
alto e invocó una gran técnica que convirtió todo a su alrededor en agua. Ese elemento se agitó a su alrededor,
convirtiéndose en una zona en la que ningún dragón normal podría sobrevivir.
Todos esos dragones que le gritaban insultos perdieron el equilibrio y se arremolinaron a su alrededor,
perdiendo pronto la vida.
Alexandra subió de nivel cada vez más.
Ella sonrió ampliamente y miró al anciano. "¿Te gusta eso, idiota?"
El dragón anciano era como una montaña inamovible. Sonrió ante las palabras de Alexandra y negó con la
cabeza. Luego, dio un paso adelante, sus aspas de viento dibujaron rayas vacías en el suelo.
Sin embargo, Alexandra esperaba eso.
Ella controló su agua de una manera que parecía como si el viento formara surcos. Y cuando el anciano pisó
suelo seco, revirtió su elemento agua y lo atrapó dentro.
El agua engulló al anciano.
Alexandra rápidamente extendió sus alas y escapó de él.
El anciano miró hacia arriba y suspiró. "Supongo que no puedo matarla ahora que ha vuelto".
[Te has convertido en el vampiro legendario.]
[Tu línea de sangre de vampiro glotón ha alcanzado la perfección.]
[Has absorbido el concepto divino.]
[El físico de tu cuerpo ha avanzado y has recibido el Físico Yin, elegible para ejercer el control del tiempo.]
Celes se convirtió en alguien como el igual de Louise. Y con los siguientes cambios, parecía que estaba aún
mejor. Aunque le molestaba tener un cuerpo que era la Reina del Emperador Humano, podía usar ese poder
para frustrar sus planes.
Esa evolución no pasó por los ojos de Roger Dream.
Ignoró al Dragón Negro y descendió ante Celes y otros.
"No puedo creer lo que ven mis ojos". Roger Dream le sonrió a Louise y luego miró a Celes. Dime, ¿eres virgen?
Celes y Louise se rieron a carcajadas y en voz alta.
Las hermanas de juramento de Celes se pusieron tensas, pero alguien cuya risa apaciguó sus miedos.
Roger Dream entrecerró los ojos. "Respóndeme."
Celes negó con la cabeza. "Estoy hablado por mí".
"¡Así que no mereces ese poder!" Roger Dream empujó su espada.
Congeló el tiempo por un segundo para poder tener suficiente espacio para matar a Celes de una sola vez. Pero
cuando se detuvo en ese momento, vio que Celes se movía muy bien, ignorando por completo su concepto
divino. Cubrió su mano con sus hilos ensangrentados negros y rojos, luego desvió el golpe.
El tiempo continuó.
Louise pronto se elevó a los cielos e invocó a su estrella.
Los vampiros estaban debajo de él, sin verse afectados por ese calor. "Supongo que lo enfrentaremos..."
"Es porque eres demasiado codicioso". Louise puso los ojos en blanco.
Y luego, la doncella dragón descendió detrás de ellos. "¡Amas!"
Celes la miró y asintió con aprobación. "Protegelos." Señaló a sus hermanas.
Alexandra miró a las tres mujeres y escupió. "Prefiero pelear con ese tipo, pero puedo ver que no tengo lugar
en esa batalla... Entonces los mantendré a salvo".
Ese cambio sorprendió a Louise y Celes, pero se encogieron de hombros y se concentraron en El Emperador
Humano.
Pronto, mucha más gente se unió a su lado.
Esas eran las fuerzas de Peace Alliance.
Gente como August y Lotus Eve estaban entre ellos.
"Eso me trae algunos recuerdos desagradables". dijo el anciano.
El Emperador Humano, totalmente ajeno al concepto de envejecimiento, se burló. "Me quitaste esas palabras
de la boca, August".
Capítulo 178 Sin brazos

Capítulo 178: Sin brazos
Había tanta gente influyente y diversa a su alrededor que Celes no se molestó en pensar en ningún plan.
Con Louise a su lado, Celes sabía que tenía suficientes medios para permanecer intacta por algún tiempo. Y con
sus nuevos poderes, Celes fue la única que leyó el concepto del tiempo divino del Emperador Humano.
Cuando congeló el tiempo, ella fue la única que no se vio afectada.
"¡No lo harás!" Celes vio a Roger Dream ir por el corazón de August.
Envió su bate para ayudar al anciano, protegiéndolo del golpe letal. Luego, el tiempo siguió avanzando,
sorprendiendo al anciano por un mero segundo. Luego agradeció a la vampiresa y preparó el mismo viejo
truco.
"Paradoja del tiempo." El anciano suspiró, preparándose para romper las leyes de su mundo.
Roger Sueño negó con la cabeza. "Puedes probar el mismo método. Pero estoy más que despierto. ¡El mundo
ha entrado en una nueva era donde los poderes divinos crecen más rápido y más amplios que antes! ¡Puedo
detener el tiempo por más e incluso tener visiones futuras! En esa visión, ¡Los vi a todos muertos! ¡Vayan!
¡Desperdicien su precioso maná!
Sin duda, era extraño ver a ese hombre alardeando de tanta confianza hasta el punto de que incluso reprendió
a la alianza y los tentó a intentar ese movimiento.
Mientras la alianza contemplaba su próximo movimiento, Roger Dream miró en dirección al Dragón del Caos.
Ese hombre luchó contra el Dragón Negro.
El Emperador Humano se burló y movió sus ojos hacia Celes.
Ella era el objetivo principal ahora. Ella tuvo que ser asesinada.
Silenciosamente envolvió su concepto divino alrededor de su espada. Y luego, sin hacer ningún gran
movimiento como lo había estado haciendo hasta ahora, Roger Dream envió su espada silenciosamente contra
ella. A los ojos de todos, Roger Dream estaba de guardia. Nadie vio que su espada abandonaba su mano.
Eso fue, naturalmente, debido a su astuto control del tiempo.
Celes tampoco pudo verlo hasta que apareció ante su corazón. Rápidamente se lanzó hacia un lado, sin dejar
que la espada le sacara el corazón. Sin embargo, no era tan rápida y el arma le raspó el brazo.
Mirando su herida, Celes hizo una mueca y entrecerró los ojos, ya que era una laceración bastante grave.
Y luego, inesperadamente, Roger Dream se paró frente a Celes. Louise llegó justo a tiempo para evitar que
extendiera su mano hacia la garganta de Celes. Su mano ardiente envió una poderosa ola de llamas, lo que
obligó al hombre a retroceder unos pasos.
"Cuando estoy tan cerca de ti, el control de tiempo no me afecta". Louise recitó antes de tomar otra posición de
batalla para enfrentarse al Emperador Humano.
"Bien." Celes asintió. "Y gracias."
"Ningún problema." Luisa sonrió.
Entonces, otra ola de ataques cayó sobre El Emperador Humano. Sin embargo, a pesar de su bajo nivel, era aún
más fuerte que antes, repeliéndolos fácilmente a todos. Usó su control de tiempo en situaciones extremas, pero
la alianza no pudo forzar muchas de estas para empezar.
Además, The Chaos Dragon estaba ganando lentamente contra The Black Dragon.
"Planeaste matar a tu hermano a través de los poderes de la estrella de nueve colas. ¿Siempre has sido tan
manipulador, Blackly?" El Dragón del Caos se burló al ver que su oponente estaba a punto de morir.
El Dragón Negro carecía de escamas a pesar de tener forma humana. Peor aún, ya no tenía alas ni cola. Su
control sobre Tsuyukomi también se estaba desvaneciendo, por lo que todo su plan comenzó a desmoronarse
lentamente.
Estaba peor que nunca.
Levantó la vista y se burló. "Sin el elemento del caos, ¿qué eres? Un completo don nadie".
"Y este nadie controla a los dragones y te matará". El Dragón del Caos se humedeció los labios y se lanzó en
dirección al Dragón Negro con las manos extendidas.
Recubriéndolos en su elemento, atravesó las defensas del Dragón Negro y luego desgarró su cuerpo en
pedazos.
Su risa reverberó a lo largo de toda la escena.
El Dragón del Caos subió de nivel significativamente.
Ya no tenía ninguna herida a causa de esa bendición.

Con sus sentidos agudizados y vivos de nuevo, miró hacia abajo.
Un ejército de humanos y otras razas lucharon en conjunto contra las fuerzas del Emperador Humano. Roger
Dream se enfrentó a los peores oponentes e incluso a La Estrella de las Nueve Colas. Pero la mujer de cabello
negro fue la estrella de esa batalla ya que podía leer la habilidad del tiempo de Roger Dream como un libro.
Pronto se convirtió en la prioridad de ese hombre.
"¡Ja ja!" El Dragón del Caos sonrió. "Mátalo. Luego iré por ti".
Llamó a todas sus fuerzas a su lado. Luego, los dragones dejaron atrás a todos los dragones traidores e
indignos, batiendo sus alas de regreso a su reino.
En un futuro cercano, regresarían a sus tierras y se despojarían de los grilletes del mundo de los espíritus.
Al menos, eso era lo que todos estaban pensando.
"¿Qué?" El Dragón del Caos entró en su reino espiritual y abrió mucho los ojos.
Ese reino aún no estaba completamente bajo su control porque las razas fuertes se escondían detrás de sus
tierras envueltas en muchos hechizos de protección y otras habilidades de masa terrestre. A sus ojos, era solo
cuestión de tiempo antes de que los dragones conquistaran ese reino.
Pero ahora que entró en su casa, el Dragón del Caos descubrió que estaba demasiado oscuro.
¡Pronto, el mundo entero tembló, y esqueletos gigantes, cuyas formas eran más grandes que montañas,
marcharon hacia el Templo del Dragón!
"El Señor de la Muerte... ¿Cómo es que ya es tan fuerte?"
La voz del Señor de la Muerte se extendió por todo el reino. "Puedes ejercer ese poder gracias a mí, el dragón.
Parece que mi buen amigo pronto luchará contra ese niño emperador humano, así que debo tratar contigo,
¿verdad?"
Todos los dragones pronto sintieron el abrazo de la muerte.
Y nadie sobrevivió, incluido el Dragón del Caos.
Ese concepto simplemente dejó de existir, incluso en el inventario de Leon, ya que tenía parte de él después de
su viaje en el mini-mundo.
La vida, el espacio y ahora el caos simplemente se habían ido.
Y The Time's Death era solo cuestión de tiempo antes de que Celes perdiera su extremidad.
¿Cómo reaccionaría Leon al ver a su amada sin su brazo?

Capítulo 179 Muerto

Capítulo 179: Muerto
El Emperador Humano no era una calamidad antes sin ninguna razón.
Era un bastardo hella fuerte cuyo poder se extendía por todo el mundo. Demostró eso y sus habilidades, ya que
incluso fue más allá de la habilidad de control de tiempo común y separó el brazo de Celes de su cuerpo.
Sí, había estado apuntando a su corazón todo este tiempo.
Pero la pérdida de su brazo era suficiente para satisfacerlo por ahora.
Pronto, ella no podrá escapar de él.
"¡Y puedes hacer una mierda contra mí! ¡Jaja!" Roger Dream aulló porque nadie era una amenaza para él.
La batalla continuó, con The Human Emperor obteniendo lentamente más ventajas. Había matado a más
miembros de la alianza, todo para disgusto de Celes, y siguió subiendo de nivel, limpiándose las heridas.
¡Ese sistema ahora estaba en contra de la familia de Leon!
Louise también estaba visiblemente cansada, quemando tanto maná para mantenerse relevante en esa batalla.
Las cosas simplemente se veían peor.
Roger Dream aprovechó su otra oportunidad, pasando por alto La estrella de nueve colas. Él la pateó por
detrás, la envió volando, luego giró y miró a la vampiresa.
Su bate, sus hilos ensangrentados y sus habilidades vampíricas no eran nada ante él.
Levantó su espada y cortó hacia abajo.
¡Bang!
Y luego, de la nada, un hombre con ojos dorados similares apareció ante él, sosteniendo una espada divina
bastante genial en sus manos. Bloqueó ese movimiento mortal y salvó a su vampiresa.
Por supuesto, era León; ¿quién más?
"Esperaba que un tipo cachondo como tú tratara mejor a las mujeres".
"Ella no es mi tipo, y preferiría matar a esa perra".
"Te mataré por hacerle daño".
"¿Puede?"
"Puedo."
¡Bang!
Leon empujó al hombre y luego clavó su espada en el suelo. "¡DE REPENTE!"
Todas sus zonas brotaron de debajo de él. Con su maná y sentimientos alimentando eso, Leon formó una zona
donde nada más que los sentimientos de Leon y sus seres queridos importaban. Los nuevos poderes de Celes
también ayudaron a Leon desde esa zona, y de ahora en adelante, la habilidad de tiempo de Roger Dream
perdió todo efecto. 𝒇𝒇𝒇ℯ 𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇𝒇e𝒇. co𝒇
Mientras la oscuridad con la luna roja, las estrellas ardientes y las tierras nevadas se unían en una extraña
amalgama de armonía, las heridas de la amada de Leon se curaron como si hubieran subido de nivel.
¡Celes incluso recuperó su brazo!
Sus poderes aumentaron tanto que nadie, excepto el Emperador Humano, podía permanecer cerca.
Lo mataremos juntos y luego viviremos nuestra vida. León había terminado con todos los asuntos.
Nunca quiso ser una estrella que resolviera los problemas del mundo.
Sus amados sonrieron levemente y asintieron.
Leon soltó sus bufandas. Ellos también estaban en un concierto.
Louise bañó los cielos con sus soles ardientes y los preparó para algo parecido a un espectáculo de meteoritos.
Celes mantuvo intacta la oscuridad, y su luna roja centró su luz en el Emperador Humano. Incluso si poseyera
la habilidad de ocultar su presencia, nunca podría escapar de sus ojos.
La zona de Athena convirtió todo el piso en hielo. La oscuridad de Celes funcionó bien con ese elemento, y su
frialdad se duplicó, reduciendo significativamente la velocidad de movimiento de Roger Dream.
"¡Atacaremos juntos y de una vez!" León declaró con decisión.
Ató sus bufandas juntas y luego formó algo parecido a una lanza elemental. Esa lanza, al conectarse, explotaría
con tanto poder divino que nadie podría sobrevivir fácilmente. Agregando la técnica de sus amados, Leon
confiaba en que pronto matarían al Emperador Humano.
Mirando todos esos elementos, Roger Dream miró su espada. "Todo lo que me queda es el poder de la
humanidad. Bueno, entonces... ¡Te mostraré el poder de los humanos!"
"¡AHORA!" León gritó.
Esas palabras fueron el detonante de la última habilidad. Su lanza elemental se elevó y fue contra el corazón de
Roger Dream. Al mismo tiempo, la frialdad de Athena se extendió desde el suelo, agarrando las piernas de
Roger Dream. Los soles ardientes de Louise eran como marionetas a las que les hubieran cortado los hilos y
cayeran sobre él.
La luna roja de Celes brilló tanto que Roger Dream quedó momentáneamente cegado.
Pronto descubrió que no podía moverse en absoluto.
¡Solo podía usar sus brazos y empujar su espada hacia adelante!
Primero chocó con la lanza elemental de Leon.
Leon sonrió y se quitó las bufandas. Sus armas divinas se abrieron como la mandíbula de un demonio y luego
se enrollaron alrededor de la espada de Roger Dream.
Conociendo su intención, el Emperador Humano abrió mucho los ojos y maldijo.
Entonces, el hielo lo cortó desde abajo.
Y los soles ardientes cayeron sobre él, hundiéndolo más profundamente en el suelo frío. Ese hombre era
bastante duro cuando los soles ardientes se estrellaron contra su cabeza. Bueno, ¡El Emperador Humano no
era conocido por su cerebro! ¡Parece que no tenía nada allí!
Sin embargo, todavía dolía como la mierda.
"¡Arghhhhhh!"
León entregó el finalizador. "¡Amén!"
Los elementos de sus bufandas ignoraron toda armonía y explotaron en una reacción natural, destrozando el
cuerpo del Emperador Humano... Al menos eso es lo que todos sintieron.
Pero cuando todos los poderes disminuyeron, el Emperador Humano se puso de pie.
La sangre goteaba de la cabeza a los pies y se aferraba a su vida como una cucaracha.
Leon caminó hacia él y sacó su espada divina en su camino.
Luego lo empujó dentro del corazón del Emperador Humano. "Una espada es una creación humana, ¿verdad?
Excepto que esta espada es creada por un dios... Y creo que los dioses le dieron a los humanos ese
conocimiento. Entonces... Siempre te has equivocado".
Roger Dream lanzó su última mirada a Leon, luego la luz de sus ojos se evaporó.
Cayó muerto.
Leon destruyó por completo ese cuerpo, luego disipó todos los poderes.
La Alianza se quedó boquiabierta ante la escena.

"¿Dónde está?"
"Muerto." Leon los miró, luego llamó a su carruaje y miró a sus amados. "Estamos yendo a casa."
"Sí." Todos respondieron dulcemente.
Todos exhaustos, todos cayeron al suelo.
De esta forma, la familia de León regresó a Madevin Metrópolis, donde León pasó unos días en su casa.
Después de eso, Leon desapareció de la vida de todos, llevándose a sus mujeres a otra parte. Encontró una
buena montaña vacía y construyó su casa allí.
Inició su vida lejos de las comunidades.
Por supuesto, sabiendo que el Señor de la Muerte todavía estaba en el mundo, Leon lo llamó.
Capítulo 180 El final

Capítulo 180: El fin
Pasaron algunos años después de la muerte del Emperador Humano.
El mundo supo que el Dragón del Caos había muerto y que la mayoría de los dragones lo seguían. Solo unos
pocos dragones, traidores según sus estándares, sobrevivieron y encontraron refugio en las tierras de la
alianza.
Leon escuchó las noticias del chat del gremio pero las ignoró.
Estaba viviendo su propia vida, la que siempre había querido.
"¡Sí! ¡Por fin estoy embarazada!" ¡Louise gritó de alegría!
Por alguna razón, fue muy difícil para ella quedar embarazada. Por otro lado, Athena y Celes ya tenían hijos,
por lo que estaba bastante celosa de ellos.
"Sí, finalmente." Leon sonrió y abrazó a su adorable zorro.
Su vida continuó entonces.
En un momento, Leon tuvo un invitado bastante inesperado.
¡Bang!
La Diosa Freya descendió a su mundo y lo buscó.
"Leon Blade... ¿Por qué no terminas el trabajo?" Fue directamente al tema que la había estado molestando.
Había visto su mundo muchas veces después de la muerte de humanos con divinidades. Había visto cómo
había cambiado, principalmente, el Señor de la Muerte conquistó la mitad del mundo, dejando todo lo demás
intacto.
Sin embargo, no estaba tan intacto.
Siguió enviando sus fuerzas para luchar contra otras razas y humanos.
Pero el Señor de la Muerte no estaba interesado en luchar hasta la muerte.
"El Señor de la Muerte no está interesado en pelear conmigo. Eso es todo". León sonrió.
La Diosa Freya no se dio por vencida. "Si lo matas, podrás recuperar el cuerpo de Amaterasu y darle una nueva
vida".
"Esa es una oferta tentadora... la reconsideraré pronto". Leon sonrió y permaneció igual, incluso con la diosa
dándole muchas bendiciones.
Después de matar a Roger Dream, Leon dejó Madevin Metropolis y encontró una nueva vida. Sabía que el
Señor de la Muerte era una amenaza, pero ¿había necesidad de luchar contra él?
Leon conoció a ese tipo y habló con él.
Sacó a relucir temas como que la muerte no es nada sin la vida y que el Señor de la Muerte nunca podría
convertirse en la muerte misma porque había demasiados mundos.
El Señor de la Muerte entendía un poco esos temas. Se sorprendió al aprender sobre diosas y otros mundos,
pero eso tenía sentido. Al final, todo fue un juego. Decidió perseguir la muerte desde un tema diferente y
permitió que sus muertos vivientes vivieran su propia vida.
Eso resultó en el nacimiento de muchos gremios y comunidades de no-muertos.
El Señor de la Muerte era como un rey cuyo reino poseía la mitad del mundo.
Estudió a su gente y cómo interactuaban con la vida.
"El mundo nunca fue pacífico... Pero es una paz que todos querían". Leon se encogió de hombros y levantó a
uno de sus hijos. Era un bebé joven. "¿Podrías bendecir a este chico? Se alegrará de saber que la verdadera
diosa lo bendijo".
La diosa Freya suspiró y tocó suavemente la mejilla del bebé y, hablando en su idioma único, lo bendijo.
"Pensé que te convertirías en mi gladiador... Suspiro". Ella suspiró de nuevo entonces.
León sonrió levemente. "Supongo que tenías más planes para mí... Pero no nací para eso. Aunque espero que
tengas algunas ideas para este mundo... No quiero ser la única divinidad, aparte del Señor de la Muerte".
"¡Tenía planes! Rompiste el destino, ¡así que eres como un gladiador perfecto para luchar en el coliseo divino!
Mi clasificación es baja y mis mundos sufren por eso...". La Diosa Freya tomó asiento en el sofá de Leon y se
quejó en voz alta.
"Creo que el Señor de la Muerte podría estar interesado en eso". León ofreció algunas ideas.
La diosa Freya negó con la cabeza. "¡Si se llama así en un plano divino, la gente lo tomará como un idiota y me
mirará con disgusto!"
Leon y sus esposas se humedecieron los labios con nerviosismo.
El Señor de la Muerte tenía suficiente talento, esquemas y habilidades para matar seres divinos. Era como
Leon, un tipo talentoso. Sin embargo, el mundo más allá de su pequeño mundo era solo un nivel diferente.
Leon podía imaginar emocionantes batallas contra muchas otras personas talentosas como él. De hecho, podía
verse a sí mismo convirtiéndose en un dios apropiado. ¿Pero era eso lo que realmente quería? Por supuesto,
había estado buscando una manera de sacar a Amaterasu del cuerpo de Louise y darle una nueva vida.
Dado que podía entrar en un extraño ciclo de reencarnación, la respuesta seguramente estaba en Freya World.
Pero si no pudiera encontrar la pista de eso, Leon siente que pronto se unirá al Señor de la Muerte y
comenzará una nueva aventura.
Sus esposas eran tan únicas que también podrían ir con ellas.
"Esa es una historia para otro momento, ¿no?" Leon se rió entre dientes, sus palabras hicieron que el hermoso
rostro de la Diosa Freya se derrumbara en un puchero.
¡Su yo haciendo pucheros era bastante adorable!
El corazón de Leon se estremeció al pensar en ella así.
Todas las mujeres adorables cayeron en sus manos, por lo que debería tener cuidado con sus palabras.
"Bueno, debo hablar con el Señor de la Muerte y explicarle que no es más que una plaga en una gran escena...
Bueno, ambos lo somos. Ojalá pudiera grabar tus palabras". Leon se dio cuenta de que había comenzado a
poner algunas excusas, su rostro sudaba.
Simplemente llamó adorable a esa diosa, y el destino ya le había hecho una broma.
¡Sus esposas también lo miraban con ojos extraños!
La Diosa Freya sonrió. "Puedo registrar esa información".
Haría todo lo posible para convencer a Leon de luchar por ella. Después de grabar su propia voz y presencia en
una piedra brillante, Freya la unió con su santidad. Luego se lo pasó a Leon y le deseó buena suerte.
Tal vez, hizo algunos cambios en el mundo y sabía que Leon no podría traer a Amaterasu de vuelta a su lado
sin su ayuda.
No obstante, Leon y Amaterasu estaban bien con eso.
Ya era mucho pedir.
Además, era una historia para otro momento.
Leon sonrió y llevó a su familia afuera a hacer un picnic.
¡Y eso era mucho mejor que luchar contra otros hasta la muerte!
Leon esperaba más su vida lenta y esos hermosos momentos.

"¿Tal vez una de nuestras pelusas se convierta en un tipo de héroe?"
"No lo maldigas".
Sus amados lo apuñalaron con los ojos.
León se rió en voz alta.
El fin.

Leveling... RL - Harem 151 - Fin

Cargado por

Información del documento

Título original

Derechos de autor

Formatos disponibles

Compartir este documento

Compartir o incrustar documentos

Opciones para compartir

¿Le pareció útil este documento?

¿Este contenido es inapropiado?

Copyright:

Formatos disponibles

Leveling... RL - Harem 151 - Fin

Cargado por

Copyright:

Formatos disponibles

Mundo Ocs – Novelas Ocs

Capítulo 152 Soy Lizanna

Capítulo 153 Habitaciones

Capítulo 154 Louise lo quiere todo [R-18]

Capítulo 155 Una posición memorable [R-18]

Capítulo 156 El proyecto de Leon

Capítulo 157 Un ejército problemático

Capítulo 158 Ella es natural [R-18]

Capítulo 159 Una Posición Memorable 2 [R-18]

Capítulo 160 ¡Vamos al reino de los enanos!

Capítulo 161 El Señor de la Muerte

Capítulo 162 Planes

Capítulo 163 Comienza el caos

Capítulo 164 La estrella de nueve colas

Capítulo 165 El emperador humano ha vuelto

Capítulo 166 El dragón y el corazón de Louise

Capítulo 167 Confía en mí

Capítulo 168 ¡Reunión de paz!

Capítulo 169 Ella es una amenaza que debe ser eliminada

Capítulo 170 Preferiría morir antes que seguir el destino

Capítulo 171 El fénix de hielo

Capítulo 172 Reunión

Capítulo 173 Un hombre menos

Capítulo 174 La verdad

Capítulo 175 El Dragón del Caos vs. El emperador humano

Capítulo 176 Vampiresa legendaria

Capítulo 177 Rodeado

Capítulo 178 Sin brazos

Capítulo 179 Muerto

Capítulo 180 El final

Capítulo 151 El Dragón Negro

"Estoy más loco que ella". Celes murmuró, desconcertando a su amiga.

Louise y Celes no respondieron a estas palabras.

No valía la pena correr el riesgo de discutir demasiado.

Liz también sintió que podía hacerse amiga de ese astuto.

Dejó caer casualmente su pesado trasero en el suelo.

Y también Celes y Louise, ya que tampoco tenían sillas.

"¿Por qué estás en este gremio?" Celes comenzó la charla.

La vampiresa se tomó un tiempo para aceptar la verdad.

Louise también se sentía bien.

Celes susurró. "¿Diamante?"

Celes se sintió inmensamente orgulloso de ese zorro por alguna razón.

Liz los miró seriamente, luego susurró. "El Dragón Negro".

¡El corazón de Louise ardía mucho y de repente escuchó un grito masculino!

¡Golpear! ¡Golpear! ¡Golpear!

He traído los carruajes del amo. ¿Estáis dentro, señoras?

El verdadero dragón llamó a las puertas...

Capítulo 152 Soy Lizanna

Sus piernas y brazos parecían armas poderosas y maduras.

¡Pero basta de esta mujer!

"No." León negó con la cabeza.

A Liz no le gustaron esas palabras.

León permaneció tranquilo.

Leon levantó su brazo justo a tiempo, atrapando el puño de Liz.

[¡Has perdido 240 134 HP!]

Liz explicó, desconcertada. "Tu corazón simplemente explotaría".

¡Y eso fue cuando tenía el nivel noventa!

¡Liz era una mujer tan sencilla!

Todos posaron sus ojos en la espalda de Liz.

Louise y Celes la miraron como si fuera una persona diferente.

Capítulo 153 Habitaciones

¡Había gastado mucho y seguía desapareciendo de su sistema!

¡Era tan pequeña, pero tanto poder habitaba dentro de ella!