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Descripción
Gaudí diseñó el proyecto de remodelación de la Casa Batlló a los 52 años, cuando
ya había superado las modas historicistas de mediados del siglo XIX, y su estilo
arquitectónico había trascendido el mero academicismo para reflejar un visión
personal de la arquitectura, de gran originalidad y sello innovador.15 Sin embargo,
como es habitual en las obras de Gaudí, el diseño y la innegable artisticidad del
conjunto no privan de que el edificio esté concebido bajo el prisma de la
funcionalidad, a la que el arquitecto subordina todos los demás elementos. En ese
sentido, cabe resaltar la importancia otorgada tanto a la iluminación como a la
ventilación, dos ejes básicos para una vida sana y confortable en un edificio de
viviendas. Para ello dispuso un gran patio central en el centro del edificio, al que
daban las habitaciones de servicios, mientras que los salones y los dormitorios
daban a la fachada. Este patio también articulaba el movimiento dentro del edificio,
a través de escaleras y un ascensor.16
La Casa Batlló ocupa un total de 4300 m2, con 450 m2 de superficie por cada piso.
Tiene 32 metros de altura y 14,5 de ancho, aumentando considerablemente las
anteriores proporciones del edificio: 21 metros de altura y 3100 m2. El edificio tiene
ocho plantas: bajo el nivel de la calle se encuentra un sótano, destinado a
carboneras y trasteros; la planta baja se dedicó inicialmente a cochera y luego a
almacén, y junto a los accesos a las viviendas se ubicó una tienda, ocupada
primero por el establecimiento de fotografía Lumière, luego por la productora
cinematográfica Pathé Frères y posteriormente por la Galería Syra; la planta noble
estaba ocupada enteramente por la familia Batlló, y contiene además un gran patio
en la parte posterior del edificio; las otras cuatro plantas estaban destinadas a
alquiler, con dos viviendas cada una; por último se encuentra un desván, destinado
a zona de servicio, y cubierto por la azotea.17
Fachada
Bóveda de la fachada.
La fachada se hizo con piedra arenisca de Montjuïc, tallada según superficies
regladas en forma alabeada. Las columnas tienen forma ósea, con
representaciones vegetales.10 La carpintería es igualmente de superficies curvas, y
las ventanas son de vidrios de colores de formas circulares. Gaudí conservó la
forma rectangular de los balcones del edificio anterior, añadiendo unas barandillas
de hierro con forma de antifaz, y dando al resto de la fachada una forma ondulada
en sentido ascendente. Asimismo revistió la fachada con cerámica de pedazos de
cristal de varios colores (su famoso trencadís), que Gaudí obtenía en los desechos
de la vidriería Pelegrí, y cuya colocación dirigió personalmente desde el Paseo de
Gracia.18 Para su diseño el arquitecto realizó diversas maquetas en yeso, que
modeló con sus propias manos hasta conseguir la forma que buscaba, que
recuerda el oleaje del mar Mediterráneo o bien las sinuosas formas de la montaña
de Montserrat.19
Del conjunto de la fachada destaca la tribuna del piso principal —el de la familia
Batlló—, que se extiende por los laterales hasta el primer piso, alcanzando 10
metros de altura. Presenta cinco vanos cubiertos con vidrieras policromas, y
sostenidos por ocho columnas de forma ósea. Para su construcción Gaudí demolió
toda la parte baja de la fachada, sosteniendo el resto con unos puntales de
madera, en tan precario equilibrio que el constructor, Josep Bayó, temía que se
caería, durante los cuatro días que duró la operación. El friso de la tribuna está
rematado con motivos escultóricos de forma vegetal, aunque en el conjunto de la
forma que adquiere la tribuna algunos estudiosos creen ver la forma de un
murciélago.20
Fachada posterior.
Otro elemento característico de la fachada es su revestimiento con vidrios y
cerámica de vivos colores, que crean diversos efectos visuales según la luz que
incide en ellos. Para su confección, picó el anterior muro y lo recubrió de mortero
de cal, sobre el que colocó los vidrios del taller Pelegrí, combinados en diferentes
tonalidades; sobre estos vidrios esparció a todo lo largo de la fachada una serie de
discos de cerámica (un total de 330) fabricados de forma manual en Mallorca,
realizados en arcilla con diversos colores de óxidos naturales, y confeccionados en
cuatro tamaños: 15, 21, 27 y 35 cm.21
Otra de las singularidades de la fachada son sus balcones, realizados con hierro
fundido y pintados de carbonato de plomo para evitar su oxidación, circunstancia
que les otorga un color marfileño. Están colocados sobre peanas de piedra con
forma de concha marina. Hay un total de nueve balcones, además de las cuatro
terrazas situadas sobre la tribuna. Su forma evoca un antifaz o una máscara teatral
—aunque hay quien ve en ellos la parte superior de una calavera—, excepto el
balcón del desván, que tiene forma de flor o de bulbo vegetal, semejante al de un
tulipán o una alcachofa. Asimismo, el perfil quebrado y enroscado de estos
balcones recuerda la forma de un pergamino. Casi todos tienen el mismo tamaño,
excepto el del desván y el de la parte superior izquierda, que es una barandilla
doble, con tres huecos. En 1983 los balcones fueron restaurados y recuperaron su
color original, que se había oscurecido.22
Culmina la fachada una bóveda formada por arcos catenarios cubiertos con dos
capas de ladrillo, recubierta con cerámica vidriada en forma de escamas —
realizada en los Talleres Sebastià Ribó—, en tonos rojo, verde y azul, que recuerda
el lomo de un dragón. En la parte izquierda hay una torre cilíndrica de forma
bulbosa —semejante a una cabeza de ajo—, decorada con los anagramas de
Jesús (IHS), María (M con la corona ducal) y José (JHP), y rematada con la típica
cruz gaudiniana de cuatro brazos, orientada a los puntos cardinales.23 Una de las
interpretaciones simbólicas que se ha dado a esta fachada es la de San Jorge
luchando con el dragón, cuyas víctimas se hallan en la fachada representadas por
las columnas en forma de hueso y los balcones en forma de calavera. Así, la cruz
de cuatro brazos sería la espada clavada en el espinazo del animal, del que
brotaría la sangre, presente en la cerámica roja de esta parte de la cubierta.24
El edificio presenta una fachada posterior que da al patio interior de la manzana,
de igual forma ondulante y recubierta de trencadís de cerámica. El piso principal
tiene un patio que sobresale del cuerpo del edificio, al que se accede por el
comedor de la vivienda que fue de los señores Batlló. El resto de pisos tienen
terrazas que dan a esta parte posterior del edificio, cubiertas con barandillas de
reja metálica. La parte más destacada es la del desván, realizada con cerámica de
vivos colores, con motivos florales y geométricos.25
Interior[editar]
Otros espacios destacados del piso principal son: el recibidor, al que se accede por
el vestíbulo privado de la planta baja a través de una escalera cuya forma recuerda
la columna vertebral de un animal, y que algunos estudiosos interpretan como la
cola del dragón de la fachada; la sala de la chimenea, utilizada como despacho por
el señor Batlló, comunica el recibidor con el salón principal, y presenta una
chimenea situada en una concavidad con forma de seta y recubierta de losas de
material refractario, con unos bancos para sentarse a su lado inspirados en la casa
tradicional catalana, mientras que la pared de la sala está decorada con pan de
oro; y el comedor, ubicado en la zona posterior que da al patio trasero, donde
destacan igualmente unos amplios ventanales, con una doble columna inspirada
en las columnas del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada, revestidas de
trencadís de diversos colores, mientras que en el techo destaca un cielorraso con
forma de gotas de agua. Otro elemento singular es el patio posterior, de 230 m2,
diseñado también enteramente por Gaudí alternando el trencadís y los discos
cerámicos, como en la fachada. El actual pavimento del patio no es el original, que
se deterioró y hubo que sustituirlo; mientras que el de Gaudí era un mosaico
hidráulico de formas abstractas, el actual presenta unos dibujos en cenefas, en
tonos ocres y marrones. Destacan también las jardineras, de forma triangular y
recubiertas de trencadís, un nuevo diseño gaudiniano.32