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PRESENTACIÓN

Queridos hermanos, con mucha alegría nos preparamos a


vivir nuestra Semana Vocacional “Hagan todo por amor”
(cf. 1 Cor 16, 14) que va en relación con el Aguinaldo de
este año “Hagan todo por amor, nada a la fuerza”, y que
se realizará del 7 al 13 de marzo en la Sierra-Oriente y del
15 al 21 de agosto en la Costa con la finalidad de mirar la
vida como vocación y como un llamado que Dios nos hace
a la plenitud. La animación vocacional es un elemento
esencial en nuestra congregación e Inspectoría y por eso
queremos asumir el compromiso de seguir fortaleciendo
el camino que se ha venido haciendo en estos años con
la dedicación de los equipos vocacionales integrados por
salesianos y seglares en nuestras comunidades.

Por ese motivo acogiendo con prontitud el compromiso


en la animación vocacional que todos los salesianos te-
nemos y estamos llamados a asumir, queremos ofrecer
desde el Sector este subsidio para que lo podamos com-
partir al interior de nuestras comunidades (Eucaristía,
Adoración, lectura espiritual) comprometiéndonos a orar
y acompañar a los jóvenes en su llamado a los diversos
estilos de vida cristiana para ello ofrecemos un subsidio
con “Los Buenos días” y un momento formativo para rea-
lizarlo con los jóvenes durante sus clases de RyDH o en
un encuentro que programemos con ellos (100 minutos).

Finalmente, para los jóvenes que estén interesados y


quieran vivir un momento de convivencia vocacional (5
horas), ofrecemos el material con el objetivo de acompa-
ñar a los jóvenes en su camino de búsqueda y de discer-
nimiento proponiendo de manera específica la vocación
y a partir de ella emprender un camino de seguimiento y
acompañamiento en su opción vocacional.

Pedimos a cada una de las comunidades y los equipos


vocacionales que podamos llevar adelante esta sema-

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na preparándola con la mejor dedicación y entrega para
brindar a los jóvenes un espacio de encuentro consigo
mismo, con los demás y con Dios. Vale recalcar queridos
hermanos que contaremos para esta experiencia de se-
mana vocacional con la ayuda de los Prenovicios y Pos-
novicios, por lo cual es importante organizarse junto con
ellos.

Que nuestro Padre San Juan Bosco nos acompañe, él que


tanto trabajó por el bien de los jóvenes y dio a la Iglesia
y al mundo tantas vocaciones pues la continua preocu-
pación de D. Bosco por las vocaciones se manifestó de
múltiples maneras. En sus palabras, acciones y escritos
mostró la necesidad de buscar el mayor número posible
de vocaciones, aprovechando cualquier momento para
descubrir a los jóvenes más motivados. Un sermón, una
salida con sus muchachos, una visita a personas cono-
cidas… cualquier momento se convertía en oportunidad
para encontrar jóvenes con signos de vocación. Que tam-
bién nos inspire en esta noble misión de la animación vo-
cacional ayudándonos a ser signos de la alegría de seguir
al Señor en comunidad y sirviendo a los más necesitados
al estilo salesiano.

Fraternalmente en Don Bosco,

P. Marcelo Tigrero sdb

Delegado de Animación Vocacional, Misionera y


Voluntariado.

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Cristo, no tiene manos, tiene solamente nuestras manos
para hacer el trabajo de hoy.

Cristo no tiene pies, tiene solamente nuestros pies para


guiar a las personas por sus sendas

Cristo no tiene labios, tiene solamente nuestros labios para


hablar a las personas de sí.

Cristo no tiene medios, tiene solamente nuestra ayuda para


llevar a las personas a sí.

Nosotros somos la única Biblia, que los pueblos lees aún;


somos el último mensaje de Dios escrito en obras y palabras.
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SUBSIDIOS PARA
LA COMUNIDAD
SALESIANA

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EUCARISTÍA DE INICIO DE LA
SEMANA VOCACIONAL
Monición de entrada:

Queridos hermanos nos hemos reunido en este día para


dar inicio a nuestra Semana Vocacional “Hagan todo por
amor” pidiéndole al dueño de la mies que envié obreros
a sus campos, con un corazón lleno de amor al estilo del
Buen Pastor. Y nosotros le decimos “Aquí estamos Se-
ñor para ser instrumentos de tu paz”. Que a ejemplo de
nuestro padre San Juan Bosco pongamos en el centro de
nuestras vidas a Dios para poder amar a todos nuestros
hermanos especialmente a los niños y jóvenes más nece-
sitados haciendo todo por amor y nada a la fuerza. Em-
pecemos esta celebración cantando con entusiasmo.
Canto: “Alma misionera” Alma misionera - Banda Huellas

P: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu


Santo.
A: Amén

P: El Señor, que dirige nuestros corazones para que ame-


mos a Dios, esté con todos ustedes.
A: Y con tu Espíritu.
Momento Penitencial

Hermanos: para celebrar dignamente estos sagrados mis-


terios, reconozcamos con humildad nuestros pecados.
Tú que nos invitas a vivir la Santidad.
Señor ten piedad.

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Tú que nos llamas a practicar la caridad.
Cristo ten piedad.

Tú que quieres en nosotros un corazón humilde.


Señor ten piedad

P: Dios todopoderoso, tenga misericordia de nosotros,


perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna.

A: Amén

P: Alabemos a un solo a nuestros Dios por las maravi-


llas que obra en nosotros sus hijos.

Canto: Gloria Trinitario….

Oración colecta

P: Señor, Padre Santo, tú que invitas a todos los fieles a


alcanzar la caridad perfecta, pero no dejas de llamar a
muchos para que sigan más de cerca las huellas de tu
Hijo, concede a los que tú quieras elegir con una voca-
ción particular llegar a ser, por su vida, signo y testimonio
de tu reino ante la Iglesia y ante el mundo. Por nuestro
Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo, en la
unidad del Espíritu Santo, y es Dios por los siglos de los
siglos.

A: Amén.

Monición para las lecturas

El Señor ha hablado desde Siempre, su Palabra es Viva y


viene hoy a nosotros para inundar nuestra mente y cora-
zón y para llevarnos a la acción. Escuchemos con aten-
ción el mensaje que el Señor nos quiere regalar hoy.
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Primera lectura

Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los


Corintios (1 Cor 16, 5-12.13.23-24)

Hermanos:

Iré donde ustedes, después de atravesar Macedonia, por-


que allá no haré más que pasar. A lo mejor me quedo
entre ustedes algún tiempo, y aun paso el invierno para
que ustedes mismo me encaminen hasta el lugar donde
tengo que ir.

Porque esta vez no quiero verlos de pasada, sino que de-


seo ardientemente quedarme algún tiempo con ustedes,
si el Señor lo permite. De todos modos permaneceré en
Éfeso hasta Pentecostés, ya que se me abre una puerta
muy grande y con muchas esperanzas, aún cuando los
enemigos son numerosos.

Si llega Timoteo, traten que no se encuentre incómodo


entre ustedes. Piensen que él trabaja como yo en la obra
del Señor. Que nadie, pues, lo desprecie y que pueda vol-
ver contento a mí: los hermanos y yo lo esperamos.

Estén despiertos, permanezcan firmes en la fe, sean hom-


bres, sean fuertes. Que todo lo hagan con amor.

La gracia del Señor Jesús permanezca con ustedes.

Los amo a todos en Cristo Jesús.

Palabra de Dios

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Salmo Responsorial (Salmo 22)

R/ Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad


Señor escucha mi oración en este día.
Aquí estoy contigo.
He venido para encontrarme contigo y conmigo mismo,
a pensar sobre el sentido de mi vida. R/.

Hoy quiero descubrir algo nuevo en mí.


Quiero saber qué es lo que hay en el fondo de mí.
No quiero vivir la vida por vivir.
Quiero vivirla sabiendo que puedo hacer mucho con ella
R/.

Me han dicho que tú tienes un gran sueño para mí


Y es: “Ser feliz”
Pero ¿cómo? ¿dónde? ¿Cómo saberlo? ¿Qué hacer?
Yo quiero ser feliz pero no sé por dónde empezar R/.

Señor Jesús, tú amaste a los jóvenes, los animaste,


Los levantaste, los miraste con amor y los llamaste.
Los amaste como amigos y juntos formaron una comu-
nidad
Para servir al mundo. R/.

A veces yo quisiera hacer mucho por este mundo


Pero no sé qué, cómo, hacia donde orientar mis deseos.
Señor Jesús, busco tu rostro; busco tu amor;
Busco el sentido de mi vida, permíteme mirarte cara a
cara R/.

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Evangelio

Lectura del Santo Evangelio según san Juan


(Jn 15, 1-17)

Yo soy la Vid verdadera, y mi Padre el viñador. Si alguna


de mis ramas no produce fruto, él la corta; y limpia toda
rama que produce fruto para que dé más.

Ustedes ya están limpios: la palabra que les he dirigido


los ha purificado. Permanezcan en mí y yo permaneceré
en ustedes.

Como la rama no puede producir fruto por sí misma si


no permanece en la planta, así tampoco ustedes producir
fruto si no permanecen en mí. Yo soy la vid y ustedes las
ramas. Si alguien permanece en mí, y yo en él, produce
mucho fruto, pero sin mi no pueden hacer nada.

Mi Padre encuentra su gloria en esto: que ustedes pro-


duzcan mucho fruto, llegando a ser con esto mis auténti-
cos discípulos. Yo los he amado a ustedes como el Padre
me ama a mí; permanezcan en mi amor. Si guardan mis
mandatos, permanecerán en mi amor, así como yo per-
manezco en el amor del Padre, guardando sus mandatos.

Yo les he dicho todas estas cosas para que en ustedes esté


mi alegría, y la alegría de ustedes sea perfecta. Mi man-
damiento es éste: Ámense unos con otros, como yo los he
amado. No hay amor más grande que éste: dar la vida por
sus amigos.

Ustedes son mis amigos si cumplen lo que les mando. Ya


no les diré servidores, porque un servidor no sabe lo que
hace su patrón. Les digo: amigos, porque les he dado a
conocer todo lo que aprendí de mi Padre.

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Ustedes no me escogieron a mí. Soy yo quien los esco-
gí a ustedes y los he puesto para que vayan y produzcan
fruto, y ese fruto permanezca. Y quiero que todo lo que
pidan al Padre en mi Nombre, él se lo dé. Yo les ordeno
esto: que se amen unos a otros.

Palabra del Señor.

Oración de los fieles

Hermanos: En unión con la Virgen María y confiando en


su intercesión, roguemos al dueño de la mies que envíe
operarios a su mies: Padre Bueno, escucha nuestra ora-
ción.

Por el Papa Francisco, por nuestros obispos, sacerdo-


tes y diáconos de todo el mundo, para que propongan
a los fieles el mensaje del Evangelio y exhorten con
valentía a los fieles para el seguimiento de Cristo. Ro-
guemos al Señor.

Para que Cristo resucitado ilumine a muchos fieles ge-


nerosos, a estar dispuestos a servir en la Iglesia con
mayor disponibilidad. Roguemos al Señor.

Por los jóvenes, a los que el Señor dirige su invitación


a seguirlo de cerca, para que abran con generosidad su
corazón a la suave voz de Cristo que los llama. Rogue-
mos al Señor.

Por los jóvenes voluntarios y aspirantes a la vida reli-


giosa o sacerdotal para que comprendan la grandeza
de su llamada y se decidan generosamente. Rogue-
mos al Señor.

Por todas las familias cristianas para que sean semi-


lleros de vocaciones al servicio de la Iglesia. Rogue-
mos al Señor.

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Por todos los sacerdotes, religiosos y miembros de la
Familia Salesiana para que con su testimonio sean
el mejor estímulo para el seguimiento entusiasta de
Cristo. Roguemos al Señor.

Escucha, Padre, la oración de esta familia: que tu gracia


nos ayude a caminar de acuerdo con la vocación recibida
y a dar frutos de buenas obras. Por Jesucristo, nuestro
Señor. Amén.

PRESENTACIÓN DE LAS OFRENDAS

CORAZÓN: Te presentamos Señor este corazón que


nos recuerda el amor con el que debemos tratarnos los
unos a los otros y al mismo tiempo el amor con el que
debemos hacer todas las cosas.

Bendito seas por siempre Señor

HUELLAS: Te presentamos Señor estas huellas que


indican el camino que deseamos seguir y al cuál tú nos
invitas a ser pleno, a entregar la vida desde la vocación
que tienes preparada para cada uno de nosotros.

Bendito seas por siempre Señor

CRUZ: Te presentamos esta cruz, signo de nuestra


entrega y compromiso como cristianos, ayúdanos a
superar las dificultades y vivir con alegría nuestro ser-
vicio en medio de la comunidad y nuestros destinata-
rios.

Bendito seas por siempre Señor

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PAN Y VINO: Te presentamos Señor este pan y este
vino fruto de la tierra y del trabajo de la humanidad,
con ellos te ofrecemos también nuestras vidas, con to-
das sus alegrías y también con los momentos difíciles.
Que ellos se conviertan en nuestro alimento espiritual
y en la fuerza que nos mueva a ser auténticos cristia-
nos comprometidos por un mundo mejor.
Bendito seas por siempre Señor
Oración sobre las ofrendas

P: Que los dones que te presentamos, Padre, sean expre-


sión del ofrecimiento espiritual de nosotros mismos: y,
convertidos en Cuerpo y Sangre de tu Hijo, realicen nues-
tra santificación. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Oración después de la comunión

P: Señor, Dios nuestro, que nos has alimentado en tu


mesa haznos vigilantes en la prudencia, ricos en obras de
caridad y disponibles en el servicio a los pequeños y po-
bres, para manifestar en la vida el misterio de tu amor de
Padre. Por Jesucristo Nuestro Señor.

A: Amén.

Bendición y despedida

P: El Señor esté con ustedes


A: Y con tu Espíritu
P: El Señor que inspira todo buen propósito, les proteja
siempre con su gracia y les ayude a ser fieles a las prome-
sas de su bautismo.
A: Amén.

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P: Cristo, el buen pastor, les ayude a servir con alegría a
los hermanos imitando el ejemplo de San Juan Bosco.
A: Amén.
P: A nosotros que celebramos la alegría del encuentro, el
Señor nos conceda caminar siempre en la fe, en la espe-
ranza y en el amor.
A: Amén.
P: Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo + y
Espíritu Santo descienda sobre ustedes y les acompañe
para siempre.
A: Amén.
P: Anunciemos con alegría el Evangelio del Señor, pode-
mos ir en paz.
A: Demos gracias a Dios.
Lectura Espiritual

Reflexión para la Comunidad Salesiana y los Equipos


Vocacionales

16
El MISTERIO DE LA
VOCACIÓN
17
(Capítulo II del Documento Final “Los jóvenes,
la Fe y el discernimiento vocacional)

La búsqueda de la vocación

vocación, viaje y descubrimiento

77. El relato de la llamada de Samuel (cf. 1 Sm 3,1-21)


permite darse cuenta de cuáles son los rasgos fun-
damentales del discernimiento: la escucha y el reco-

77
nocimiento de la iniciativa divina, una experiencia
personal, una comprensión progresiva, un acompa-
ñamiento paciente y respetuoso del misterio en acto,
una destinación comunitaria. La vocación no se im-
pone a Samuel como un destino que debe padecer; es
una propuesta de amor, un envío misionero en una
historia cotidiana de confianza recíproca.

Para el joven Samuel, así como para cada hombre y


mujer, la vocación, aunque tenga momentos fuertes
y privilegiados, conlleva un largo viaje. La palabra del
Señor exige tiempo para ser comprendida e interpre-
tada; la misión a la que llama se va desvelando gra-
dualmente. A los jóvenes les fascina la aventura del
descubrimiento progresivo de sí mismos. Aprenden
de buena gana de las actividades que desempeñan y
de los encuentros y las relaciones, implicándose en la
vida cotidiana. Sin embargo, necesitan que se les ayu-
de a dar unidad a las diversas experiencias y a leerlas
desde una perspectiva de fe, venciendo el riesgo de la
dispersión y reconociendo los signos a través de los
que Dios habla. En el descubrimiento de la vocación,
no todo está claro en seguida, porque la fe «“ve” en la
medida en que camina, en que se adentra en el espa-
cio abierto por la Palabra de Dios» (Francisco, Lumen
fidei, 9).

18
78
Vocación, gracia y libertad

78. A lo largo de los siglos, la comprensión teológica


del misterio de la vocación ha conocido acentos diver-
sos, según el contexto social y eclesial en el que se ela-
boraba el tema. En cualquier caso, cabe reconocer el
carácter analógico del término “vocación” y las nume-
rosas dimensiones que connotan la realidad que este
designa. Esto lleva a poner en evidencia algún aspecto
concreto que no siempre ha sido visto en una perspec-
tiva que salvaguardase con equilibrio la complejidad
del conjunto. Para entender en profundidad el miste-
rio de la vocación que tiene en Dios su origen último,
estamos pues llamados a purificar nuestro imaginario
y nuestro lenguaje religioso, recuperando la riqueza y
el equilibrio de la narración bíblica. El entramado entre
la elección divina y la libertad humana, en particular,
hay que concebirlo fuera de todo determinismo y de
todo extrinsecismo. La vocación no es ni un guión ya
escrito que el ser humano debería simplemente recitar
ni una improvisación teatral sin esquema. Puesto que
Dios nos llama a ser amigos y no siervos (cf. Jn 15,13),
nuestras elecciones concurren realmente a la realiza-
ción histórica de su proyecto de amor. La economía de
la salvación, por otra parte, es un Misterio que nos su-
pera infinitamente; por esto solo si escuchamos al Se-
ñor sabremos qué papel estamos llamados a tener en
ella. Vista con esta luz, la vocación aparece realmente
como un don de gracia y de alianza, como el secreto
más bello y valioso de nuestra libertad.

79
Creación y vocación

79. Afirmando que todo fue creado por medio de Cris-


to y para él (cf. Col 1,16), la Escritura orienta a leer el
misterio de la vocación como una realidad que mar-
ca la creación de Dios. Dios ha creado con su palabra,
que “llama” al ser y a la vida, y después “distingue” en

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el caos lo indistinto, imprimiendo al cosmos la belleza
del orden y la armonía de la diversidad. San Pablo VI
ya había afirmado que «toda vida es vocación» (cf. Po-
pulorum progressio, 15), y Benedicto XVI insistió en
que el ser humano es creado como ser en diálogo: la
palabra creadora «llama a cada uno personalmente,
manifestando así que la vida misma es vocación en
relación con Dios» (cf. Verbum Domini, 77).

80
Para una cultura vocacional

80. Hablar de la existencia humana en términos vo-


cacionales permite poner de relieve algunos elemen-
tos que son muy importantes para el crecimiento de
un joven: significa excluir que esté determinado por el
destino o sea fruto de la casualidad, así como que sea
un bien privado a gestionar de modo autónomo. En el
primer caso no hay vocación, porque no hay reconoci-
miento de un destino digno de la existencia, mientras
que en el segundo caso, un ser humano pensado “sin
vínculos” se convierte en alguien “sin vocación”. Por
esto es importante crear las condiciones para que en
todas las comunidades cristianas, a partir de la con-
ciencia bautismal de sus miembros, se desarrolle una
verdadera cultura vocacional y un constante compro-
miso de oración por las vocaciones.

La vocación a seguir a Jesús

81
El atractivo de Jesús

81. Muchos jóvenes se sienten atraídos por la figura de


Jesús. Su vida les parece buena y bella, porque es pobre
y sencilla, hecha de amistades sinceras y profundas,
entregada por sus hermanos y hermanas con genero-
sidad, nunca cerrada a nadie sino siempre disponible a
donarse. La vida de Jesús sigue siendo hoy profunda-

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mente atractiva y fuente de inspiración; para todos los
jóvenes es una provocación que interpela. La Iglesia
sabe que esto se debe al hecho que Jesús vive un vín-
culo profundo con cada ser humano, porque «Cristo,
el nuevo Adán, en la misma revelación del misterio del
Padre y de su amor, manifiesta plenamente el hombre
al propio hombre y le descubre la grandeza de su vo-
cación» (Gaudium et spes, 22).

82
Fe, vocación y discipulado

82. De hecho Jesús no solo fascinó con su vida, sino


que también llamó explícitamente a la fe. Encontró a
hombres y mujeres que reconocieron en sus gestos y
en sus palabras el modo correcto de hablar de Dios y
de relacionarse con él, accediendo a la fe que lleva a
la salvación: «Hija, tu fe te ha salvado. Vete en paz»
(Lc 8,48). Otros que se encontraron con él, en cambio,
fueron llamados a ser sus discípulos y testigos. Él no
escondió a quien quería ser su discípulo la exigen-
cia de cargar cada día con la propia cruz y de seguir-
lo por un camino pascual de muerte y resurrección.
La fe testimonial sigue viviendo en la Iglesia, signo e
instrumento de salvación para todos los pueblos. La
pertenencia a la comunidad de Jesús siempre ha co-
nocido diversas formas de seguimiento. La mayoría de
los discípulos vivió la fe en las condiciones ordinarias
de la vida cotidiana; otros, en cambio, incluidas algu-
nas figuras femeninas, compartieron la existencia iti-
nerante y profética del Maestro (cf. Lc 8,1-3); desde el
principio los apóstoles tuvieron un papel especial en
la comunidad y los asoció a su ministerio de guía y de
predicación.

21
83
La Virgen María

83. Entre todas las figuras bíblicas, que ilustran el mis-


terio de la vocación, es preciso contemplar de modo
singular la de María. Mujer joven que con su “sí” hizo
posible la Encarnación, creando las condiciones para
que cualquier otra vocación eclesial se pudiese gene-
rar, ella es la primera discípula de Jesús y el modelo
de todo discipulado. En su peregrinación de fe, María
siguió a su Hijo hasta los pies de la cruz, y después
de la resurrección acompañó a la Iglesia naciente a
Pentecostés. Como madre y maestra misericordiosa
sigue acompañando a la Iglesia e implorando al Espí-
ritu que vivifique toda vocación. Es por tanto evidente
que el “principio mariano” tienen un rol eminente e
ilumina toda la vida de la Iglesia en sus diversas ma-
nifestaciones. Al lado de la Virgen, también la figura
de su esposo José constituye un modelo ejemplar de
respuesta vocacional.

Vocación y vocaciones

84
Vocación y misión de la Iglesia

84. No es posible entender en plenitud el significado


de la vocación bautismal si no se considera que esta es
para todos, sin excluir a nadie, una llamada a la san-
tidad. Esta llamada implica necesariamente la invita-
ción en participar a la misión de la Iglesia, que tiene
como finalidad fundamental la comunión con Dios
y entre todas las personas. Las vocaciones eclesiales,
en efecto, son expresiones múltiples y articuladas me-
diante las que la Iglesia realiza su llamada a ser sig-
no real del Evangelio acogido en una comunidad fra-
terna. Las diversas formas de seguimiento de Cristo
expresan, cada una de un modo propio, la misión de
testimoniar el acontecimiento de Jesús, en el que todo
hombre y toda mujer encuentra la salvación.

22
85
La variedad de los carismas

85. San Pablo habla repetidas veces en sus cartas de


este tema, recordando la imagen de la Iglesia como
cuerpo constituido por varios miembros y poniendo
de relieve que cada miembro es necesario, y al mismo
tiempo relativo al conjunto, ya que solo la unidad de
todos hace que el cuerpo sea vivo y armónico. El após-
tol descubre el origen de esta comunión en el mismo
misterio de la Santísima Trinidad: «Hay diversidad de
carismas, pero un mismo Espíritu; hay diversidad de
ministerios, pero un mismo Señor; y hay diversidad
de actuaciones, pero un mismo Dios que obra todo en
todos» (1 Co 12,4-6). El Concilio Vaticano II y el magis-
terio sucesivo dan indicaciones importantes para ela-
borar una correcta teología de los carismas y de los
ministerios en la Iglesia, a fin de acoger con recono-
cimiento y valorizar con sabiduría los dones de gracia
que el Espíritu continuamente hace surgir en la Iglesia
para rejuvenecerla.

86
Profesión y vocación

86. Muchos jóvenes viven la orientación profesional


en un horizonte vocacional. No es raro que se recha-
cen propuestas de trabajo atractivas porque no están
en línea con los valores cristianos, y la elección de los
itinerarios formativos se hace preguntándose cómo
sacar fruto de los talentos personales al servicio del
Reino de Dios. Para muchos el trabajo es ocasión para
reconocer y valorar los dones recibidos: de este modo,
hombres y mujeres participan activamente en el mis-
terio trinitario de la creación, redención y santifica-
ción.

23
87
La familia

87. Las dos recientes Asambleas sinodales sobre la fa-


milia, a las que siguió la Exhortación apostólica Amo-
ris laetitia, ofrecieron una rica contribución sobre la
vocación de la familia en la Iglesia y la aportación in-
sustituible que las familias están llamadas a dar como
testimonio del Evangelio mediante el amor recíproco,
la procreación y la educación de los hijos. Hay que vol-
ver a la riqueza que presentan los recientes documen-
tos, a la vez que hay que recordar la importancia de
retomar el mensaje para descubrir de nuevo y hacer
comprensible a los jóvenes la belleza de la vocación
nupcial.

La vida consagrada

88
88. El don de la vida consagrada que el Espíritu suscita
en la Iglesia, tanto en su forma contemplativa como
en su forma activa, tiene un especial valor profético,
ya que es testimonio gozoso de la gratuidad del amor.
Cuando las comunidades religiosas y las nuevas fun-
daciones viven auténticamente la fraternidad se con-
vierten en escuelas de comunión, centros de oración
y de contemplación, lugares de testimonio de diálogo
intergeneracional e intercultural y espacios para la
evangelización y la caridad. La misión de muchos con-
sagrados y consagradas que cuidan de los últimos en
las periferias del mundo manifiesta concretamente la
dedicación de una Iglesia en salida. Pese a que en algu-
nas regiones se experimente una disminución numé-
rica y la fatiga del envejecimiento, la vida consagrada
sigue siendo fecunda y creativa, en corresponsabilidad
con numerosos laicos que comparten el Espíritu y la
misión de los diversos carismas. La Iglesia y el mun-
do no pueden prescindir de este don vocacional, que
constituye un gran recurso para nuestro tiempo.

24
89
El ministerio ordenado

89. La Iglesia ha tenido siempre un cuidado especial


por las vocaciones al ministerio ordenado, consciente
de que este último es un elemento constitutivo de su
identidad y es necesario para la vida cristiana. Por esta
razón ha cultivado siempre una atención específica a la
formación y al acompañamiento de los candidatos al
presbiterado. La preocupación de muchas Iglesias por
la disminución numérica de vocaciones al ministerio
ordenado hace que sea necesaria una nueva reflexión
sobre la vocación y sobre una pastoral vocacional que
sepa mostrar el atractivo de la persona de Jesús y de
su llamada a ser pastores de su rebaño. También la
vocación al diaconado permanente requiere mayor
atención, porque constituye un recurso del que toda-
vía no se han desarrollado todas las potencialidades.

La condición de los “single”

90
90. El Sínodo ha reflexionado acerca de la condición
de las personas “single”, reconociendo que con este
término se pueden indicar situaciones de vida muy
diversas entre ellas. Tal situación puede depender de
muchas razones, voluntarias o involuntarias, y de fac-
tores culturales, religiosos y sociales. Por tanto, puede
expresar una gama de recorridos muy amplia. La Igle-
sia reconoce que tal condición, asumida en una lógica
de fe y de don, puede convertirse en uno de los mu-
chos caminos mediante los que se realiza la gracia del
Bautismo y se camina hacia la santidad a la que todos
estamos llamados.

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ADORACIÓN
EUCARÍSTICA
“VEN Y SÍGUEME”

26
Canto de Adoración: Dios está aquí Dios está aquí, tan cier-
to como el aire que respiro

Exposición del santísimo

S: ¡Seas por siempre bendito y alabado!

T: ¡Mi dulcísimo Jesús por mi amor Sacramentado!

Padre Nuestro, Ave María y Gloria

MONICIÓN

Queridos hermanos: Dios, nuestro Padre, toma la inicia-


tiva de venir a nuestro encuentro; por eso estamos hoy
frente a él, para decirle que queremos conocerle y amarle,
y que, desde luego de conocerle, nos dé valentía para po-
der darle a conocer a los demás, haciéndonos comprome-
tedores de su Reino, llevando en nuestras vidas la semilla
de su Palabra.
Canto: Ven y sígueme Ven y Sigueme

ORACIÓN A DOS COROS

Guía: Señor, tú eres el Dios vivo,

Todos: Yo soy una criatura que vive en Ti.

Guía: Eres por siempre bendito, Señor.

Todos: Tú bendices para siempre a todas las criaturas,

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Señor.

Guía: Brote desde las profundidades de la existencia la


alabanza para ti.

Todos: Resplandece sobre todo el mundo tu omnipoten-


cia creadora y misericordiosa.

Guía: Señor, tú eres la Palabra de Vida eterna; tu presen-


cia para nosotros es fiesta.

Todos: Alabado seas, mi Señor.

Guía: Tú te hiciste Pan de vida para que en nosotros flo-


rezca la vida.

Todos: Alabado seas, mi Señor.

Guía: Señor, tú que te has hecho don de amor, para que


entre nosotros reine el amor.

Todos: Alabado seas, mi Señor.


Canto: No me habéis vosotros elegido No me habéis voso-
tros elegido - Yuli y Josh - Cover

Guía: El Evangelio que vamos a proclamar nos presenta


a Pedro, quien obedeciendo y creyendo en la Palabra de
Jesús, obtiene una pesca abundante: esto nos dice que
todas las veces que obedecemos y creemos en la Pala-
bra del Señor, el Señor cumple lo que dice: “NO TEMAS,
DESDE HOY EN ADELANTE SERÁS PESCADOR DE
HOMBRES”.

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Evangelio de San Lucas 5,1-8

Cierto día la gente se agolpaba a su alrededor para escu-


char la Palabra de Dios, y él estaba de pie a la orilla del
lago de Genesaret. En eso vio dos barcas atadas al borde
del lago; los pescadores habían bajado y lavaban las re-
des. Subió a una de las barcas, que era la de Simón, y le
pidió que se alejara un poco de la orilla; luego se sentó y
empezó a enseñar a la multitud desde la barca. Cuan-
do terminó de hablar, dijo a Simón: “Lleva la barca mar
adentro y echen las redes para pescar”. Simón respondió:
“Maestro, por más que hicimos durante la noche, no pes-
camos nada; pero si tú lo dices, echaré las redes”. Así lo
hicieron, y pescaron tal cantidad de peces, que las redes
casi se rompían. Entonces hicieron señas a sus compa-
ñeros que estaban en la otra barca para que vinieran a
ayudarles. Vinieron y llenaron tanto las dos barcas, que
por poco se hundían. Al ver esto, Simón Pedro se arrodilló
ante Jesús diciendo: “Señor, apártate de mí, que soy un
hombre pecador”.

Palabra del Señor.

Silencio de adoración personal

(Música instrumental)
Canto: “Pescador de hombres” Raly Barrionuevo - Pescador
de hombres

L 2: Recemos juntos, la oración por las vocaciones a la


Familia Salesiana, diciendo:
Bendito seas, Señor,
por habernos dado a Don Bosco
como Padre, Maestro y amigo de los jóvenes,
por haberlo llenado de muchas cualidades,

29
y por haber formado en él
un corazón que sale al encuentro
de aquellos que se sienten solos, tristes y desamparados.
Te pedimos que envíes a la Familia Salesiana,
vocaciones entusiastas y alegres,
para que así puedan prolongar tu amor
en medio de los jóvenes más pobres:
para escucharlos, animarlos y acompañarlos
en el camino de la Vida,
mediante la pedagogía de la bondad.
Ayúdanos a ser signos y portadores de tu amor a los jó-
venes,
para que así nuestro testimonio
les muestre que Dios existe y su amor puede llenar
de sentido y felicidad una vida.
Amén

BENDICIÓN CON EL SANTÍSIMO


Canto: A tan grande Sacramento TAMTUN ERGO.- A tan
grande Sacramento-NUEVOTRIGO

ORACIÓN

Guía:

Les diste pan del cielo

- Que contiene en sí todo deleite

Oremos.
Te pedimos, Jesús, autor y origen de toda vocación humana,
que, al contemplar los misterios de tu Cuerpo y tu Sangre,
sintamos la necesidad de testimoniar las obras grandes que

30
has hecho en nosotros, de manera que los jóvenes se sientan
atraídos para seguirte en los caminos de una vocación
específica. Te lo pedimos a ti, que vives y reinas por los siglos
de los siglos. Amén.
Alabanzas de desagravio
Bendito sea Dios.
Bendito sea su santo Nombre.
Bendito sea Jesucristo, verdadero Dios y verdadero
Hombre.
Bendito sea el nombre de Jesús.
Bendito sea su Sacratísimo Corazón.
Bendita sea su Preciosísima Sangre.
Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar.
Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito.
Bendita sea la excelsa Madre de Dios, María Santísima.
Bendita sea su Santa e Inmaculada Concepción.
Bendita sea su gloriosa Asunción.
Bendito sea el nombre de María Virgen y Madre.
Bendito sea San José, su castísimo Esposo.
Bendito sea Dios en sus Ángeles y en sus Santos.
Danos, Señor…

Canto Final: Hoy te quiero cantar Hoy te quiero cantar

31
SUBSIDIO PARA CES,
MJS, ORATORIOS,
PARROQUIAS, UPS, pse
32
BUENOS DÍAS
Primer día

Monición: Al iniciar esta semana vocacional nos enco-


mendamos bajo la protección de nuestro Buen Padre
Dios, de nuestra Madre Auxiliadora y San Juan Bosco,
para pedirle que nos ayude a acoger en nuestras vidas el
mensaje de salvación y de esperanza para que inundado
nuestros corazones de esta alegría podamos hacer todo
“por amor” y “nada a la fuerza”

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén
Canto: No me habéis vosotros elegido - Yuli y Josh - Cover -
YouTube

Monición: Hoy nos introduciremos en este


apasionante tema de la vocación considerando
nuestro primer llamado a ser persona.

La vocación a ser persona

G: Querer vivir humanamente

T: es ya una forma de responder a Dios

G: es tomar la vida

T: como vocación

G: Estamos llamados a ser

T: Lo mejor de nosotros mismos.

33
Esta primera vocación común tiene diferentes aspectos
estrechamente relacionados entre sí:

La relación con uno mismo: desarrollar lo mejor del


propio ser.

La relación con el mundo, las cosas: ejercer y vivir una


profesión.

La relación con los otros: abrirse al amor en grupo, en


familia, en comunidad.

La relación con Dios, hacer crecer la necesidad y el de-


seo de Dios que hay en cada persona.

Pedimos al Señor para que nos ayude a comprometernos


con la vida y aceptarla como el don más valioso que él
nos ha dado, digamos juntos. Padre Nuestro…

María Auxiliadora de los cristianos…Ruega por nosotros

San Juan Bosco…ruega por nosotros.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén

34
BUENOS DÍAS
Segundo día

Monición: Bienvenidos amigos, ayer hemos visto breve-


mente la vocación a ser persona, hoy profundizaremos en
cada uno de los aspectos que esto implica: crecer como
persona, recreando el mundo con el trabajo, teniendo
una relación de amistad y amor con los demás y abierta a
Dios. Que esta experiencia nos ayude a seguir valorando
este llamado especial que Dios nos ha hecho.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén
Canto: El Profeta Cover // Xtian y Angie

Crecer como persona

Es la primera llamada que Dios hace: a vivir, a ser


persona hecha a imagen y semejanza suya, a ser
protagonista del propio destino. Hechos para la vida y
para el amor, pues Dios es vida y amor.

Recreando el mundo a través del trabajo

En relación con el mundo que circunda, con las cosas.


La persona está llamada a ejercer una profesión, a hacer
un trabajo donde se sienta útil y con el que colabore con
Dios a re-crear y mejorar este mundo.

35
Teniendo una relación de amistad y amor con los de-
más

Dios nos llama a amarnos y a que ese amor sea fecundo.


Ser es amar y amar es ser. El amor es la vocación de toda
persona. La vida es don y sólo tiene sentido en el darse a
los demás.

Abierta a Dios

La vocación radical de la persona es la de convertirse en


hijo, ser a imagen de Dios, parecerse al Padre. Tenemos
“vocación de Dios” por gracia, no por mérito ni conquis-
ta. Somos “cariño de Dios”. Todos estamos llamados a la
santidad, a la comunión plena con Dios.

Y nosotros ¿Cómo estamos viviendo esta vocación que


el Señor nos ha dado?

Pidamos al Señor que nos ayude a ser siempre agradeci-


dos por la vida que hemos recibido y nos mueva al servicio
a nuestros hermanos más necesitados. Padre Nuestro…

María Auxiliadora de los cristianos…Ruega por nosotros

San Juan Bosco…ruega por nosotros.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Es

36
BUENOS DÍAS
Tercer día

Monición: Hay muchas maneras de construirse y ser


persona. El encuentro con Jesucristo a través de la Iglesia
nos hace comprender toda nuestra vida de manera nue-
va. Jesús no ha venido a ayudarnos a ser “ángeles”, sino
a ser “personas”. Adentremos en el camino del conoci-
miento de la vocación cristiana.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén
Canto: Mensajero de Tu amor - Canto Vocacional 2015

Ser cristiano……es vivir todo mi ser persona se-


gún el estilo de Jesús.

Ser cristiano…es vivir en comunión con Jesúcristo

Ser cristiano…es valorar el mundo como Él.

Ser cristiano…estimar sus valores, amar como Él amó.

Ser cristiano…es escuchar y obedecer la Palabra como lo


hizo Jesús.

Ser cristiano…es colaborar en la edificación del Reino de


Dios

Ser cristiano…es reconocer a Dios como Padre-Amor.

37
Todos los cristianos, desde el Bautismo, estamos llama-
dos a ser santos y a vivir al servicio de los demás. La voca-
ción cristiana es la gran vocación que nos unifica a todos,
que hace que todos seamos iguales.

Oración: “Balón de fútbol”


Quisiera ser
Quisiera ser, Señor,
Como un balón de fútbol,
Que está para todos,
Que alegra y divierte a todos,
Sobre todo a los niños…
Quisiera
No hacer daño a nadie con mi vida,
Quisiera gastarme y desgastarme
Para hacer felices a los otros,
Mientras les invito a hacer Equipo…
Quisiera llenarme del “Aire”
Que es tu Espíritu;
Que los “pinchazos” no me desinflen,
Que los golpes no me destruyan…
Sé, Tú, mi impulso,
Ponme Tú “en juego”.

Que dé lo mejor que yo tengo.


Que los “goles” que meta
No me hagan creído.
Que mi juego sea tu juego.
Que mis planes sean tu voluntad.

38
Que mi “reglamento” sea tu Evangelio.
Que mi modelo sea Jesucristo.
¡Haz conmigo lo que quieras, Señor!
¡Haz de mí un instrumento de felicidad!
Amén.

Pedimos al Señor que renueve el compromiso de tantos


hermanos y hermanas que han consagrado su vida al ser-
vicio del Señor y del prójimo con amor y alegría. Padre
Nuestro…

María Auxiliadora de los cristianos…Ruega por nosotros

San Juan Bosco…ruega por nosotros.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén

39
BUENOS DÍAS
Cuarto día

Monición: La vocación a ser persona y cristiano se puede


vivir desde diferentes estados de vida o caminos vocacio-
nales. Esto es lo que llamamos “La vocación específica”.
A grandes rasgos y de manera muy elemental, podríamos
decir que hay tres grandes opciones vocacionales: laical,
religiosa y ministerial.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén
Canto: Pescador de hombres

Monición: Jesús nos llama a cada uno por nues-


tro propio nombre, y nos ama con un amor par-
ticular. Nos llama porque nos ama y nuestra mi-
sión es el amor. La vocación es el sueño de amor
que Dios tiene en el corazón para cada uno. Todos po-
demos y debemos ser instrumentos y signos del amor de
Dios al mundo.
G: Una vocación específica
T: se define más por lo que es, que no por el servicio que
hace.
G: En la vocación específica
T: importa más el cómo, por qué y por quién.
G: Una vocación específica
T: afecta y colorea todas las dimensiones del ser persona
y ser cristiano,
Dirijamos ahora todos juntos esta oración que nos invita
a profundizar en el conocimiento y seguimiento de Jesús:

40
Oración para el encuentro con el Señor

Señor Jesucristo,
¡cómo me gustaría conocerte y llegar a ser tu amigo!
¡Cómo me gustaría llegar a creer en Ti,
no sólo por lo que me digan los demás,
sino por tener la gracia de encontrarme contigo perso-
nalmente!
Tú que eres la LUZ que ilumina a todo hombre,
abre mis ojos para que yo pueda reconocerte caminando
junto a mí,
actuando en mi vida.
Tú que eres la PALABRA VIVA DE DIOS,
abre mis oídos para que yo escuche tu voz,
para que tu llamada penetre en mi corazón y cambie mi
vida.
Tú que tienes palabras que hacen VIVIR con fuerza y
plenitud incomparables,
háblame y descúbreme tu secreto,
dime lo que quieres que haga,
para que pueda seguirte por todos los caminos de la ver-
dad y la justicia.

Señor, como los dos de Emaús,


te quiero contar mi vida, lo que me preocupa y llevo en
mi corazón.
Como a ellos, interpélame y cuestióname
por mis torpezas y negligencias.
Como a ellos, ábreme las Escrituras,
para que tus palabras enciendan mi corazón
y llenen mi vida de esperanza y de fuerza.

41
Como a ellos, dame el deseo de compartir contigo,
de sentarme yo a tu mesa y Tú a la mía.
Como a ellos, dame la inmensa alegría de CREER EN TI,
de experimentarte vivo y anunciarte vivo
al resto de mis hermanos y amigos.
Amén.
Con la alegría de sentirnos hijos amados de Dios e invita-
dos a colaborar en la edificación del Reino de Dios, diga-
mos confiadamente Padre Nuestro…

María Auxiliadora de los cristianos…Ruega por nosotros

San Juan Bosco…ruega por nosotros.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén

42
BUENOS DÍAS
Quinto día

Monición: “Fraile o no fraile me quedo con don Bosco”


fueron las palabras de Juan Cagliero uno de los 17 jóvenes
que estuvieron el 18 de diciembre de 1859 en la habita-
ción de Don Bosco, día que nació nuestra congregación
salesiana y quien después se convertiría en Obispo y en
un gran misionero en la Patagonia Argentina. Y es que
quedarse con Don Bosco es asumir una espiritualidad ju-
venil, alegre y de encuentro con Cristo. Hoy en nuestro
último día de esta semana vocacional queremos invitarte
a hacer tuyas las palabras de este gran misionero y a pro-
curar que en cada lugar por donde estés puedas reflejar
la alegría de ser salesiano de corazón y continuar con la
gran obra que Don Bosco inició hace muchos años con
sus jóvenes. ¡Atrévete joven a ser un Don Bosco hoy!

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén
Canto: “Don Bosco amigo” DON BOSCO AMIGO - YouTube

Monición: No me sueltes de la mano le hemos


dicho en el canto, y se lo seguimos diciendo hoy
también. Nos unimos con esta oración al Señor
para darle gracias por habernos dado a Don Bosco y le
pedimos que nos regale el don de la audacia para llevar
la Buena Nueva a todos nuestros hermanos como lo hizo
nuestro Padre San Juan Bosco.

43
Oración a Don Bosco

Padre y Maestro de la juventud,


San Juan Bosco, que dócil a los dones del Espíritu y
abierto
a las realidades de tu tiempo
fuiste para los jóvenes, sobre todo para los
pequeños y pobres,
signo del amor y de la predilección de Dios.
Sé nuestro guía en el camino de amistad con el Señor
Jesús,
de modo que descubramos en Él y en su Evangelio el
sentido de nuestra vida
y la fuente de la verdadera felicidad.
ayúdanos a responder con generosidad
a la vocación que hemos recibido de Dios,
para ser en la vida cotidiana constructores de comunión,
y colaborar con entusiasmo,
en comunión con toda la Iglesia,
en la edificación de la civilización del amor.

Obtennos la gracia de la perseverancia


al vivir una cota alta de vida cristiana,
según el espíritu de las bienaventuranzas;
y haz que, guiados por María Auxiliadora,
podamos encontrarnos un día contigo en la gran familia
del cielo.
Amén.

44
Encomendemos hoy a todos los niños y jóvenes de las
obras salesianas en nuestra Inspectoría, de manera es-
pecial por los jóvenes Prevoluntarios, voluntarios y jóve-
nes con inquietud vocacional para que su testimonio sea
una motivación para otros jóvenes que buscan el sentido
a sus vidas en el servicio a los demás respondiendo al lla-
mado de Dios. Por eso decimos: Padre Nuestro…

María Auxiliadora de los cristianos…Ruega por nosotros

San Juan Bosco…ruega por nosotros.

En el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo.


Amén

45
MOMENTO
FORMATIVO
46
Tema: “Allí está, Él vive en Ti”

Objetivo: Profundizar en el tema de la Voca-


ción a partir de un acercamiento al Proyecto
Personal de Vida y el acompañamiento espi-
ritual como elementos fundamentales para
discernir la voluntad del Señor.

Tiempo: 100 minutos

20 min PRESENTACIÓN DEL TEMA:

“Allí está, Él vive en Ti”

Apenas llegan los jóvenes se presenta el objetivo y se les


da la bienvenida con alguna técnica de animación.

En este tema, queremos acercarnos al Proyecto Personal


de Vida como un elemento fundamental para encaminar
nuestra vocación.

Objetivo:

Profundizar en el tema de la Vocación en sus tres tipos,


a partir de un acercamiento al Proyecto Personal de
Vida y el acompañamiento espiritual como elementos
fundamentales para discernir la voluntad del Señor.

47
PROYECTO PERSONAL DE VIDA (PPV)

Luego se proyecta el video N°1: El rey león “El vive en Ti”

Breve compartir de preguntas

¿Qué te llama la atención del video? ¿Cuáles son los per-


sonajes?

¿Qué significa él vive en ti en la escena del video?

¿Qué mensaje te deja el video para tu vida

48
25 min EJERCICIO

Se invita ahora a hacer el ejercicio de la “Estrella de mi


vida” (ver anexo 1- pág 66)

Se puede compartir las resonancias del ejercicio

LA ESTRELLA DE MI VIDA
1
¿Qué puedo hacer en beneficio de los demás?

2 3
Mis intereses Mis ideales

4 5
Personas significativas Describe tu vida con una palabra

En este rectángulo escribe las características que más te identifican (cualidades y defectos)

49
Ahora se invita a hacer el ejercicio de las huellas: ¿Quién
soy? ¿Quién soy para los demás? ¿Qué me siento llamado
a ser?, mi frase bíblica motivadora (ver anexo 2-pág 67)

yo
actual

yo ideal
 yo

 social

frase biblíca
motivadora

Compartir espontáneo

50
La Vocación cristiana

VEN Y VERÁS…

una invitación a compartir un “programa/proyec-


to” de vida

Jesús vino a anunciar el Reino de Dios Padre. Conocerlo


y hacerlo propio implica comenzar a participar de una ló-
gica distinta, de una cultura alternativa, de un modo de
comprender la vida. Así, la respuesta al “ven y verás”, no
da la posibilidad de llegar a ser contados entre los hijos

1
del Reino de Dios Padre:

Invitándote a vivir la pobreza, alejándose de las fanta-


sías compensatorias del consumismo, que ocultan las
verdaderas necesidades humanas, de las cuales la más
básica es el amor. Y amar significa comprometerse sin
garantías, sin las falsas seguridades que dan las pose-
siones, sin ponerse a la defensiva unos de otros, en los
ámbitos interpersonales o grupales del amor.

(“Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el


reino de los cielos”)

51
2
Invitándote a descubrir la fecundidad del dolor, en vez
de considerarlo una experiencia absurda o inacepta-
ble. Por el contrario, la experiencia de la vida dura, del
sacrificio en las tareas, de la disciplina personal, tem-
plan el corazón y permiten reconocer que hay que ac-
tuar no solo por lo que me gusta sino por lo que me
corresponde. Asumir el dolor permite transformarlo
en fortaleza moral, en serenidad interior, que son las
traducciones del consuelo que reciben los que lloran.

3
(“Dichosos los afligidos por que Dios los consolará”)

Invitándote a experimentar la dinámica de la pacien-


cia, desdeñando el engaño que oculta el inmediatis-
mo, el compulsivo afán de vivir el momento y la in-
madura intolerancia de las frustraciones. La virtud de
la paciencia implica empeñar las energías con la fide-
lidad que necesitan los proyectos de largo plazo, para
merecer la herencia de la tierra.

(“dichosos los humildes, porque heredarán la tierra”)

4
Invitándote a experimentar el hambre y sed de justi-
cia, porque sólo así se construye la fraternidad univer-
sal, única patria verdadera para la humanidad. Fuera
de la fraternidad universal, cualquier seguridad que
creamos encontrar será siempre precaria, transitoria,
engañosa. En la fraternidad universal, el hambre y sed
de justicia, sin duda, serán siempre saciadas.

(“Dichosos los que tiene hambre y sed de hacer la voluntad


de Dios, porque Dios los saciará”)

52
5
Invitándote a vivir la compasión, como aquella capa-
cidad de sentir con el otro, de poner al otro dentro de
sí mismo y de ponerse a sí mismo en el lugar del otro.
El corazón compasivo siembra el consuelo y recibe mi-
sericordia, porque es capaz de reconocerla y de abrirse
a ella.

(“Dichosos los misericordiosos, porque Dios tendrá miseri-


cordia de ellos”)

6
Invitándote a vivir con un corazón limpio, para mirar
la vida con transparencia, para acoger con ingenuidad
el sentido siempre nuevo de la vida. El dolor mal asu-
mido, el individualismo egocéntrico y el narcisismo
secan el corazón y hacen vivir a la defensiva, con cál-
culo hasta con doblez. Es necesario limpiar el corazón
para ver a Dios.

(Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios”)

7
Invitándote a trabajar por la paz, en la doble tarea de
estar en paz consigo mismo y contribuir a la paz entre
los hombres. Descubrir que no puede haber paz con-
sigo mismo en el individualismo egocéntrico, en la re-
sistencia al dolor y en la falta de compasión, porque la
paz consigo mismo nace de no estar ajenos al propio
corazón, de saldar las deudas consigo mismo para vi-
vir una genuina identidad. Y descubrir que la paz en la
humanidad pasa por la justicia y la fraternidad. Esa es
la paz que nos hace hijos de Dios.

(“Dichosos los que construyen la paz, porque Dios los llama-


rá sus hijos”)

53
8
Invitándote a asumir los riesgos de “vivir contra la co-
rriente”, porque vivir con criterios del Reino es descon-
certante para los demás y el desconcierto casi siempre
se vuelve agresivo. Es el riesgo de ser una persona que
se guía más por los valores y persona de Jesús, que por
las influencias manipuladoras del medio social. Ac-
titud que produce desconcierto a quienes tratan de
imponer sus ideología, anti valores o intereses parti-
culares.

(“Dichosos los perseguidos por hacer la voluntad de Dios,


porque de ellos es el reino de los cielos”)

54
15 min ILUMINACIÓN:

Cuento: “El capataz y el jefe”

Cuento: EL CAPATAZ Y EL JEFE

“El capataz se acercó a su jefe y le dijo: Estoy envejeciendo


y deseo pasar los últimos años de mi vida con mi esposa y
mis hijos. He decidido dejar el trabajo y jubilarme. Al jefe
le dolió esta proposición, pues apreciaba mucho el traba-
jo de su capataz y quiso manifestarle su gratitud. Le dijo:
“Sólo te pido que construyas la última casa”. El capataz,
para no desairar a su jefe a quien le unía una amistad de
años, aceptó el pedido. Empezó a construir la casa, pero
no puso el profesionalismo ni el entusiasmo acostumbra-
do. Los materiales que usó eran de segunda categoría...
Unos meses después la casa estaba lista. “Voy a verla”, le
dijo el jefe. Inspeccionó la casa, subió al segundo piso, ob-
servó las puertas, las ventanas, los acabados, los cuartos,
la cocina, ... Al final se acercó al capataz y ofreciéndole
las llaves le dijo: “Esta casa es para ti. Es expresión de mi
gratitud por todo lo que tú hiciste por la empresa y por la
amistad que nos unió por tantos años”.

Sólo entonces el hombre reparó en lo necio que había


sido. ¡Había construido la peor casa de su vida y en ella
tenía que vivir lo que le quedaba de vida...! ¡De haber sa-
bido que era para él habría puesto más empeño!”.

¿Qué ideas resaltas de este cuento?

¿Cómo relacionamos este cuento con nuestra vida?

55
SÍNTESIS DEL PPV

Al decir “Proyecto de vida” no pensamos en un documen-


to sino en “una vida en proyecto”.

Al hablar de “proyecto personal de vida” necesitamos


ubicarnos en el corazón de nuestro ser, en ese núcleo in-
terior, íntimo y profundo que vive en nosotros como re-
flejo del ser de Dios. Es ese núcleo interior el que estamos
llamados a desarrollar para ser fieles al proyecto de Dios
que nos soñó viviendo nuestro ser en plenitud.

Empezar esta iniciación en el camino PPV implica una


decisión de perseverancia. Son muchos los que empiezan
y menos los que terminan, y más bien, pocos, los que per-
severan a lo largo del tiempo en este camino.

El PPV requiere ahora y siempre, una decisión de amor


a nuestra vida, nuestra única vida. Por eso, necesitamos
darnos tiempo para ir cuidando su calidad, de modo que
cada día tenga un poco más de plenitud. Es esta una pri-
mera convicción que necesitamos interiorizar y desarro-
llar: Dios me regaló la vida: yo necesito cuidarla y de-
sarrollarla: para eso, necesito darme tiempo. Sin esta
convicción es preferible no entrar por este camino.

56
10 min PAUSA

Mientras se hace la pausa se pide a los jóvenes que pre-


paren un pequeño altar ahí donde están (si están en sus
casas) para el momento de celebración.

30 min II MOMENTO

“El ACOMPAÑAMIENTO ESPIRITUAL”


Se procede a ver el video: EL MAESTRO OOGWAY SE DESPI-
DE DE SHIFU || KUNG FU PANDA

¿Qué significa para ti acompañamiento?

¿Tienes un amigo del alma que te escucha con atención?

¿Consideras que es importante el acompañamiento para


acompañar el Proyecto de Vida?

57
CELEBRACIÓN:

Se invita a encender la velita y con música instrumental


motivar a dar gracias por las personas que han acompa-
ñado su vida hasta el momento.
Se concluye el momento con el canto: Querido amigo -
Patricio mena

Padre Nuestro…

Dios te salve María…

Bendición y despedida.

58
CONVIVENCIA
VOCACIONAL
Tiempo: 5 horas (300 minutos)

PRIMERA PARTE DE LA CONVIVENCIA

Tema 1: La Vocación: Un llamado a la vida y a la


santidad

Objetivo: Presentar el tema de la vocación en primer


lugar como un llamado a la vida, que hay que cuidar y
desarrollar y también como el llamado a la santidad a la
que todos estamos invitados.

Tiempo: 175 minutos

Preparar ambiente de fiesta


Cuenta regresiva…
Escenario con fondo verde

59
15 MIN CASA QUE ACOGE…

Saludo y bienvenida.

• Dinámica o cantos

• Dinámica de presentación

Video de los objetivos…

40 MIN ESCUELA QUE EDUCA PARA LA VIDA

Tema: “Invitados a levantar la mirada”

Lluvia de ideas

• ¿Qué han escuchado sobre la vocación?

• ¿Qué piensan ustedes qué es la vocación?


Video sobre la vocación: CS 1 - La Vocación - YouTube

Intervenir por medio de las preguntas

• ¿Qué te llamó la atención del video?

• ¿A qué se refiere la palabra Vocación


según el video?

Lectura del cuento “La bandada de patos”

Breve explicación sobre la vocación

60
30 MIN PARROQUIA QUE EVANGELIZA

Trabajo en grupos

A cada grupo se entrega dos bienaventuranzas del do-


cumento de la Vocación cristiana. Este trabajo tendrá 3
partes:

Trabajo personal

¿Qué frase de esta invitación te desafía más en tu vida


como cristiano? (Subraya la frase y escríbela)

• En el grupo

Compartir, brevemente, tu frase.

• Llegar a una frase de consenso (escribirla en el


power point).

• En Plenario:

• Uno del grupo hace la presentación y otro en-


ciende una velita

“Para nosotros Jesús nos llama

a……………………………….…………………..…………..….”

61
20 MIN PATIO PARA HACERNOS AMIGOS
Y PASARLA BIEN

Trabajo Personal: “El Cofre de la Vida”

Se colocan sobre una mesa diversos materiales: papeles,


cartulina de buena calidad, tijeras y pegamento e invita
a los jóvenes a confeccionar un cofre con sus ma-
nos. Mientras se trabaja poner música de fondo.
Si no se sabe hacer cofre, aquí hay un link.
Como Hacer una Caja de Papel Origami ¡MUY FACIL!

10 MIN EL ORATORIO SOY YO…

Veamos este video sobre la santidad en lo cotidiano:


DOMINGO SAVIO , QUIERO SER SANTO – YouTube

Le agradecemos al Señor por el cofre de nuestra


vida y por llamarnos a la santidad

Orando como él nos enseñó Padre Nuestro

50 MIN EL JUEGO DE LA OCA SALESIANO

Preparar con un cartón u otro material un dado para


el juego (Ver anexo 1-pág 65)

• Se dividen a los participantes por grupos

• Se empieza el juego

62
10 MIN DESCANSO

SEGUNDA PARTE DE LA CONVIVENCIA

Tema: “Dios te llama a ser pleno” Vocación laical, sa-


cerdotal y religiosa

Objetivo: Dar a conocer los tres tipos de vocación espe-


cífica a la que somos llamados por medio de un acerca-
miento a sus características y testimonios que enciendan
que nuestro deseo de búsqueda de la voluntad de Dios.

Tiempo: 125 minutos

10 MIN CASA QUE ACOGE…

Animación y dinámicas

50 MIN ESCUELA QUE EDUCA…

Video sobre el joven: Christus Vivit (exhortación del papa


Francisco)

Introducción a los tres tipos de vocaciones

Testimonios vocacionales por medio de pre-


guntas (FORO VOCACIONAL)

• Datos personales

• Gustos (comida, dulces, deportes, hobbies)

• ¿Dónde nace tu vocación?

63
• ¿Qué papel juega tu familia en este camino vo-
cacional’

• ¿Cómo vives tu vocación?

Invitados

• Un/a consagrado/a

• Un laico comprometido o un matrimonio com-


prometido

• Un sacerdote

• Se invita a los jóvenes a formular algunas pre-


guntas a los invitados.

10 MIN PATIO PARA HACERNOS AMIGOS


Y PASARLA BIEN

Preparar un juego para hacerlo con los chicos (con enfo-


que vocacional)

El rey manda, o Don Bosco manda

10 MIN Llenar la Ficha vocacional

45 MIN Eucaristía y despedida

64
LLEGADA 34 33 32 31 30

Diga una frase de Don Retroceda un espacio Cante una canción a Levante la botella Complete la frase:
Bosco Don Bosco con la caña María Auxiliadora de
los cristianos…

24 25 26 27 28 29

Nombre del hermano Rece la oración del Complete la frase El vaso loco
mayor de Juanito Ave María Salve Don Bosco
santo…

23 22 21 20 19 18

Salte con el globo Rece la oración del Avance un espacio Nombre del Inspector Con los ojos vendados Cante una canción a
entre las piernas Padre Nuestro de los Salesianos ponle el bonete a Don Don Bosco
Ecuador Bosco

12 13 14 15 16 17

¿A qué edad Don Bosco Lleve la pelota en la ¿cuántos años tenía Puntería con aros la Sacerdote que le Cómo se llamaba el
tuvo el sueño? cuchara Juanito cuando murió silla ayudó a estudiar hombre que apareció
su papá? cuando Juanito era en el sueño de los 9
niño años de Juanito
11 10 9 8 7 6

Cante el coro de “Un Don Bosco fue Mujer a quien rezaba Niño del oratorio que
corazón tan grande” sacerdote Don Bosco llegó a ser santo
Si o No

1 2 3 4 5
INICIO
¿Cómo se llamaba la Tiro al blanco Fecha de nacimiento de ¿En qué mes murió Elabore una pirámide
mamá de Don Bosco? San Juan Bosco Don Bosco? vasos con un base de
6
LA ESTRELLA DE MI VIDA
1
¿Qué puedo hacer en beneficio de los demás?

2 3
Mis intereses Mis ideales

4 5
Personas significativas Describe tu vida con una palabra

En este rectángulo escribe las características que más te identifican (cualidades y defectos)

66
yo
actual

yo ideal
 yo

 social

frase biblíca
motivadora

67
ANIMACIÓN VOCACIONAL 2022

Lugar de la convivencia:
Fecha:
Responsables:

CONVIVENCIA VOCACIONAL 2022


Nombres y Apellidos:

Lugar y fecha de nacimiento:

Dirección:

Telf.: Celular:

Colegio: Curso:

Grupo Pastoral de pertenencia:

Deportes y habilidades:

¿Cuántas veces has participado en las convivencias?

Nombre del Padre:

Profesión:

Nombre de la Madre:

Profesión:

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Número de hermanos (incluido/a tú): ______

(varones: _____ mujeres: ____) lugar que ocupas: ________

¿Quieres ser Religioso/Sacerdote Salesiano

Alto Medio Bajo

¿Quieres ser voluntario Salesiano (por un año)?

Alto Medio Bajo

Email:

Facebook:

Twitter:

Observaciones:

¿Qué piensa tu familia acerca de tu inquietud (vocación)


de servicio a los demás?

Tienes una relación (enamorada):

si no cuánto tiempo ?

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Aspectos Varios

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