Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
públicas para la infancia es un estudio profundo y complejo que nos permite comprender las
distintas visiones y enfoques que han surgido a lo largo del tiempo en relación a la protección y
promoción de los derechos de los niños. Estos paradigmas son representaciones sociales que
se reflejan en prácticas, dispositivos y estructuras que abordan los problemas relacionados con
la infancia según la visión dominante de una época.
La primera postura es la de los polos opuestos. Esta postura se caracteriza por presentar dos
polos opuestos, uno centrado en el control, la tutela y la "Ley de Patronato", y el otro en la
protección, la asistencia, la promoción y la Convención sobre los Derechos del Niño (CIDN). En
esta postura, prevalece un análisis normativo-prescriptivo que busca superar el paradigma de
la "situación irregular" y pasar al de la "protección integral". Se reconoce la importancia de
proteger y garantizar los derechos de los niños, pero también se enfatiza la necesidad de
control y tutela para mantener el orden social.
La segunda postura es la de la convivencia paradigmática. Esta postura sostiene que todos los
enfoques conviven en la actualidad y están presentes en las políticas sociales para la infancia,
debido a las diferentes representaciones sociales existentes. Aquí se enfatiza un análisis
técnico-político que busca comprender la realidad y tomar decisiones más consistentes. Se
reconoce que existen diferentes visiones e interpretaciones de los paradigmas que rigen las
políticas sociales para la infancia, y se enfatiza la necesidad de comprender el trasfondo de
cada paradigma y visualizar las prácticas asociadas a cada uno de ellos para interpretar el
funcionamiento de los abordajes de la problemática.
Además de estas posturas analíticas, el artículo también examina dos paradigmas históricos en
Argentina: el paradigma de la "situación irregular" y el paradigma de la "normalización de la
infancia". El paradigma de la "situación irregular" se basaba en la Ley de Patronato y promovía
la institucionalización y el control social de los niños considerados en situación irregular. En
este enfoque, se consideraba a los niños como sujetos problemáticos y se buscaba regular y
controlar su conducta.