CARACAS, 31 de octubre de 2023

FISCALÍA SUPERIOR DEL ÁREA METROPOLITANA DE CARACAS

UNIDADES DE ATENCIÓN A LA VÍCTIMA

SU DESPACHO. –

Yo, ROSALINA GONZALEZ DE RAMIREZ venezolana, de ochenta y seis (86) años de

edad, identificada con el número de cédula: V-3.193.338, domiciliada en PARQUE

RESIDENCIAL JUAN PABLO II, RESIDENCIAS PARQUE SIETE, Piso Cinco,

Apartamento 2B-05, parroquia La Vega, del Municipio Libertador, actuando en mi

condición de VICTIMA y amparada por el programa El Ministerio Público Protege al

Adulto Mayor, ocurro ante su competente autoridad, a los fines de presentar

DENUNCIA FORMAL ESCRITA, de conformidad con lo establecido en los artículos

265, 266 y 267 del Código Orgánico Procesal Penal, bajo los siguientes términos:

DE LOS HECHOS

Es necesario y pertinente señalar que, si bien los hechos en sus inicios no son de

naturaleza penal, derivaron en los graves desórdenes procesales y ostensibles

violaciones al ordenamiento jurídico que sí son competencia de su despacho. Es

menester hacer de su conocimiento que todo tiene su inicio en virtud de un acuerdo

verbal entre el hoy occiso MANUEL DIAZ, venezolano, titular de la cedula de identidad

N° 602.339, quien en vida fuese mi CONCUBINO, por veintidós (22) años

ininterrumpidos, según constancia de concubinato emitida por la Jefatura Civil de la

Parroquia Sucre de fecha 07 de agosto de 2001, y la ciudadana de nombre ZAIRA

MORALES, a la cual hace aproximadamente 10 años atrás, se le facilitó el acceso al

apartamento N° B-102, piso 10, del bloque 9, ubicado en la urbanización Lomas de

Pro-Patria, Parroquia Sucre, Municipio Libertador, con el objeto de cuidar y mantener el

inmueble en buen estado, el cual le pertenecía en vida al ciudadano MANUEL DIAZ,

según consta en documento de propiedad de fecha 21 de diciembre de 1989,

quedando registrado en la oficina subalterna del Primer Circuito de Registro del

Municipio Libertador, bajo el N° 13, Tomo 34, Protocolo 1°. En el mismo orden de

ideas la precitada ciudadana ZAIRA MORALES, obrando de mala fe, se apropió

indebidamente del inmueble en cuestión, valiéndose de documento público falso,

redactado por el abogado RIGOBERTO MEJIA, para posteriormente cambiar las

cerraduras del apartamento e impedirme el acceso, alegando que dicho inmueble es de

su propiedad, cosa que niego rotundamente, pues nunca se realizó tradición alguna

sobre el bien inmueble en cuestión.

DEL DERECHO

Sin lugar a dudas y a todas luces nos encontramos en presencia de una situación que

constituye una flagrante violación al DERECHO A LA PROPIEDAD, derecho

consagrado no sólo en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, sino

en convenios y tratados suscritos por Venezuela en materia de DERECHOS

HUMANOS, lo cual constituye ilícitos penales contemplados en nuestro ordenamiento

jurídico y que en el caso concreto por emanar de un acuerdo verbal entre las parte,

para posteriormente incurrir en apropiación indebida a través del uso de documento

falso, encuadra dentro de los tipos penales contemplados en los artículos 466, y 321

ambos del Código Penal.

En este sentido dispone la referida disposición legal lo siguiente:

Artículo 466°

“El que se haya apropiado, en beneficio propio o de otro, alguna cosa ajena

que se le hubiere confiado o entregado por cualquier título que comporte la

obligación de restituida o de hacer de ella un uso determinado, será

castigado con prisión de tres meses a dos años […]”

Artículo 321°

“El individuo que hubiere falsificado o alterado, total o parcialmente, alguna

escritura, carta u otro género de papeles de carácter privado, de modo que

 haciendo él, u otro, uso de dichos documentos, pueda causarse un perjuicio

al público o a particulares, será castigado con prisión de seis a dieciocho

meses.”

PETITORIO

Por todos los razonamientos antes expuestos le solicito que sea admitida y sustanciada

la presente denuncia por no ser contraria a derecho, en contra de los ciudadanos

ZAIRA MORALES y RIGOBERTO MEJIA por haber incurrido según los términos

anteriormente señalados en el delito de APROPIACIÓN INDEBIDA Y DOCUMENTO

PUBLICO FALSO previsto y sancionado en los artículos 466, y 321 del Código Penal

Venezolano y en consecuencia una vez establecida la comisión de estos ilícitos

penales, se proceda al DESALOJO INMEDIATO de los ocupantes ilegales y la debida

restitución de mis derechos de propiedad sobre el bien inmueble en cuestión.

Es justicia que espero en Caracas a la fecha de su presentación.