Está en la página 1de 1

CASO “Sabate SAS en Covisan SA”

Plataforma fáctica

Sabate Sas se presenta en el concurso preventivo de “Covisan SA” y solicita verificación tardía de un crédito que
tenía contra la sociedad concursada por venta de mercaderías a pagar en dólares. Comparece mediante apoderado y
aclara que se sede social está situada en la República de Francia.

Peticiona que su obligación no se pesifique y acompaña prueba instrumental de su crédito alegando que debe ser
pago mediante transferencia bancaria. Ante esto, la sindicatura se opone a la verificación de dicho crédito
basándose que tal situación encuadraba en el supuesto del art 4 de la LCQ y el acreedor no había probado la
reciprocidad exigida en el mismo artículo.

Resolución del caso.

 En 1° instancia la jueza rechaza el incidente de verificación tardía considerando al igual que el síndico que no
había sido probado el criterio de reciprocidad del art 4. El actor apela.

 En 2° instancia la cámara de apelaciones rechaza la apelación por considerar al igual que la jueza de 1°
instancia que era aplicable el art 4 de la LCQ y no había sido acreditada la reciprocidad.

 El actor interpone recurso de Inconstitucionalidad ante la Corte alegando que la decisión es arbitraria, ya
que había desnaturalizado la forma de pago expuesta por el actor al decir que la obligación debía ser
cancelada por medio de depósito bancario en un banco situado en Francia mientras que de la prueba
acompañada surgía que debía cancelarse mediante una transferencia bancaria a través de un banco situado
aquí en Argentina y por lo tanto no era aplicable el art 4 ni debía cumplir con el requisito de la reciprocidad
que establece el mismo.

La Dra. Kemelmajer seguida por el voto de adhesión del Dr. Perez Hualde entre otros argumentos dictamina que si
bien como regla la norma en cuestión no es inconstitucional no puede ignorarse la realidad de que normalmente,
cuando se pacta que la obligación es pagadera en el extranjero es porque el acreedor es de nacionalidad de ese país
o está domiciliado en ese país. Consecuentemente, un exceso de rigor en la carga de la prueba puede llevar,
indirectamente, a la discriminación del acreedor mismo.

Aunque en principio la carga de la prueba de la reciprocidad incumbe al acreedor peticionante, su omisión no


necesariamente debe determinar el rechazo del pedido verificatorio desde que el requisito puede acreditarse a
través de la actividad del síndico o incluso del propio juez. Más aun teniendo en cuenta La ratificación argentina de la
CIDIP II, la cual en el art. 2 de ese documento dice: "Los jueces y autoridades de los Estados Partes estarán obligados
a aplicar el derecho extranjero tal como lo harían los jueces del Estado cuyo derecho resultare aplicable, sin perjuicio
de que las partes puedan alegar y probar la existencia y contenido de la ley extranjera invocada".

El criterio de la convención ha sido seguido por el art. 377 última parte del Código Procesal Civil y Comercial de la
Nación, que dispone: "Si la ley extranjera invocada por alguna de las partes no hubiere sido probada, el juez podrá
investigar su existencia, y aplicarla a la relación jurídica materia del litigio".

También podría gustarte