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El control de niño sano o supervisión de salud incluye todas las actividades destinadas a la
prevención, detección y tratamiento oportuno de enfermedades, además del acompañamiento y
educación al niño y su familia, con el fin de lograr un adecuado desarrollo y crecimiento.
Las sesiones deben incluir los siguientes aspectos, desarrollados según las necesidades y/o
problemas del niño:
Prevención de enfermedades
Idealmente debe existir una consulta prenatal, que explique los objetivos de los controles de
salud, su periodicidad y la importancia de la lactancia materna. Posteriormente los controles se
fijaran de acuerdo con la edad del niño y los posibles problemas pesquisados, siguiendo
idealmente la siguiente pauta:
Recién nacido a 6 meses: Control a los 15 días, al mes de vida y luego mensualmente
Seguimiento del crecimiento y desarrollo. Puede ver cuánto ha crecido el niño desde la
última visita y hablar con el médico sobre el desarrollo del niño. Puede discutir los
logros/progresos de su niño, su comportamiento social y su aprendizaje.
Plantear inquietudes. Haga una lista de los que quiere hablar con el pediatra de su niño,
tales como desarrollo, comportamiento, sueño, alimentación o como se lleva con otros
miembros de la familia. Traiga consigo los 3 principales temas o preocupaciones a tratar
con su pediatra al comienzo de la cita médica.
Enfoque en equipo. Las visitas regulares crean relaciones estrechas y de confianza entre
el pediatra, el padre y el niño. La AAP recomienda las visitas de control del niño sano
como una forma para que los pediatras y los padres atiendan las necesidades de los niños.
Este enfoque de equipo ayuda al desarrollo óptimo de la salud física, mental y social del
niño.
Se deben realizar incluso si el niño (a) está sano (a), ya que lo que se busca es prevenir y
detectar alteraciones, factores de riesgo; así como conversar sobre pautas de nutrición,
crianza, cuidados y seguridad.
También se realiza un seguimiento del crecimiento y desarrollo, logros y progresos en el
aprendizaje; se responde inquietudes y se revisa el esquema de vacunación y asesoría en
lactancia materna.
Recuerda: no debemos esperar a que el niño esté enfermo para llevarlo al pediatra. Las
visitas periódicas ayudan a llevar un estilo de vida saludable desde la infancia.