Un delito es una acción u omisión que viola una ley penal establecida por un determinado

sistema jurídico. Se trata de una conducta considerada como ilícita y prohibida por la sociedad,
y cuya realización puede conllevar sanciones o penas establecidas por las autoridades
judiciales.

Los delitos pueden variar en gravedad y naturaleza, abarcando desde infracciones menores,
como faltas administrativas o contravenciones, hasta delitos más graves, como robos, asaltos,
homicidios, fraudes, entre otros. En general, todos comparten la vulneración de principios
fundamentales que atentan contra el orden social, la seguridad o los derechos de los
ciudadanos.

Se conoce como acto ilícito al acto contrario a derecho. La causa ilícita, por otra parte, es
aquella que se opone a las leyes o a la moral.

A diferencia que un acto ilegal, un acto ilícito no solamente va contra la normativa recogida en
un código, sino que además tiene tintes éticos o morales. De hecho, la causa por la cual se
encuentra recogido en la ley es porque es inmoral o no es acorde a la justicia.

Un ejemplo sería una norma que dijera: Está prohibido matar. No solo será ilegal sino que está
motivada por tintes morales y por la idea de justicia.

Ocurre igual que con los actos ilegales y las acciones ilícitas serán castigadas con su
correspondiente sanción, recogida igualmente en una norma.

Implicaciones Sociales

Las diferencias entre delitos e ilícitos tienen importantes implicaciones sociales. Los delitos a
menudo tienen un impacto más directo y severo en la seguridad y el bienestar de las personas
y la sociedad en general. Por lo tanto, se les da mayor prioridad en términos de persecución
legal y sanciones. Los ilícitos, aunque pueden afectar las relaciones comerciales y personales,
generalmente no ponen en peligro la seguridad pública de la misma manera que los delitos.
Los delitos en Honduras se rigen por el Código Penal y otras leyes pertinentes. Las penas para
delitos varían según la gravedad de la infracción. Entre las penas más comunes se incluyen:

Prisión: Los delitos más graves, como homicidio, violación y tráfico de drogas, pueden estar
sujetos a penas de prisión prolongadas.

Multas: Además de la prisión, las personas condenadas por delitos también pueden ser
sancionadas con multas monetarias.

Libertad Condicional: En algunos casos, se permite la liberación anticipada bajo ciertas

condiciones, como buen comportamiento y cumplimiento de programas de rehabilitación.

Los ilícitos, que generalmente involucran violaciones de normas y regulaciones civiles o

administrativas, no suelen llevar penas de prisión.

En lugar de eso, las sanciones se centran en aspectos financieros. Ejemplos de ilícitos podrían
incluir infracciones de propiedad intelectual, incumplimiento de contratos o violaciones de
regulaciones comerciales.

Propósito de las Sanciones por Ilícitos

El propósito de las sanciones por ilícitos puede variar.

En primer lugar, buscan disuadir a las personas y entidades de cometer acciones que infrinjan
regulaciones y normas establecidas. Al imponer sanciones financieras o exigir la corrección de
la infracción, se espera que los infractores eviten comportamientos similares en el futuro.

En segundo lugar, las sanciones por ilícitos buscan restaurar el equilibrio y reparar el daño
causado. Esto puede incluir la obligación de pagar daños y perjuicios a la parte afectada o
restablecer el estado de cosas previo a la infracción. Esta restauración puede ser
especialmente importante en muchos casos.
Algunos argumentos en contra de la extradición en Honduras:

Soberanía y Control Jurisdiccional:

La extradición podría analizarse como ceder parte de la soberanía del país, ya que se está
permitiendo que otro país tome jurisdicción sobre un hondureño. Esto podría ser visto como
una pérdida de control sobre el sistema de justicia y la aplicación de la ley.

Falta de Garantías de Derechos Humanos:

Uno de los principales argumentos en contra de la ley de extradición en Honduras podría ser la
preocupación por la posible violación de los derechos humanos del individuo solicitado en
extradición. Hay casos en los que países solicitantes podrían tener sistemas legales o
penitenciarios deficientes, lo que podría poner en riesgo la integridad y los derechos del
acusado.

Persecución Política:

Otra preocupación es que la ley de extradición podría ser utilizada para perseguir a personas
por motivos políticos. Extraditar a individuos acusados de crímenes políticos o de expresión
podría ser visto como un intento de reprimir la oposición y limitar la libertad de expresión.

Impacto en las Familias

La extradición de una persona puede tener un impacto devastador en sus familias y

comunidades. Separar a una persona de su entorno y sus seres queridos podría tener
consecuencias negativas en la vida de las personas y en la estabilidad social en general.