Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
OTRA DE VAMPIROS
(Obra registrada)
carloscazila@gmail.com
mensaje70@yahoo.com.ar
PERSONAJES
SUSY ……… Mujer joven
ROMAN………. Hombre joven
SIRVIENTE ……... Hombre maduro
BELLA……….. Mujer joven
LUCAS……….. Hombre joven
CONDE ………… Hombre maduro
CONDESA SANGRIENTA… De fugaz aparición
SUSY: O mejor, “El vampiro que quieras”, “El vampiro que te ame”
ROMAN: (en sorna) Ese, ese también.
SUSY: No, no es cuestión que me des la razón en todo, como a los locos.
ROMAN: No es que te dé la razón. Estás loca, bueno, loca no, pero no voy
a discutir.
SUSY: Pero vos sos el director. Tenés que imponerte.
ROMAN: Si trato de imponerme, temo que me asesines.
SUSY: No. No. ¡Tenés que imponerte, ya es hora!
ROMAN: Entonces acepto y te digo que estás en condiciones de entrar en
un trance…en un extraño trance…
SUSY: ¿Cómo?
ROMAN: Me refiero a tu personaje en la obra.
SUSY:¿Pero el loco sos vos? ¿Por qué voy a tener que entrar en trance, y
justo acá?
ROMAN: Habías pedido que me impusiera.
SUSY: Sí, pero no tanto.
ROMAN: ¿No tanto? Todo esto me parece dudoso. Yo, mejor, renuncio.
SUSY: ¿A qué?
ROMAN: Al libro, a la dirección, a lo que sea.
SUSY: Ah, ¿entonces yo me tendría que hacer cargo de todo?
ROMAN: Si no es posible llegar a un acuerdo….
SUSY: No, no es posible. No me gusta entrar en trance. Me parece
peligroso.
ROMAN: Pero acá estoy yo para cuidarte.
SUSY: Por eso mismo.
ROMAN: ¿Qué? ¿No te sentís segura a mi lado?
SUSY: Creo que me sentiría más segura estando sola.
ROMAN: En realidad, lo que me parece es que querés sacarme del medio.
Pues bien…
SUSY: Pero, ¿como se te ocurre?
ROMAN: Dijiste “preferiría estar sola”. ¿No es bastante?
SUSY: Veo que nuestra relación ha ingresado en zonas oscuras. No es lo
mismo decir preferiría estar sola, que escribir todo, yo sola.
ROMAN: No sé. No sé qué ocurrencias tendrás. Va a ser mejor que me
tome la bicicleta.
SUSY: ¿Serías capaz de hacer eso? ¿Serias capaz de abandonarme en estas
circunstancias?
ROMAN: Todavía no sé qué circunstancias.
4
ROMAN: Bueno, está bien, hagamos las paces. Hoy podemos recorrer
todo, y mañana nos vamos.
SUSY: ¿Y quién hablo de irse?
ROMAN: Soy yo el que lo digo. Acá las cosas no van y vos me pediste que
me impusiera, ¿no es así?
SUSY: Sí, no. No sé qué dije…Tenemos que quedarnos, si… Hablemos de
los personajes….¡Ay!... ¿Sabés? ¡De pronto me vino un presentimiento!
¿Qué te parece si nos vamos?
ROMAN: El coche vuelve mañana. ¿Salimos en bicicleta?
SUSY: Eso, mismo, afuera hay una bicicleta.
ROMAN: Esperemos que vuelva ese hombre.
SUSY: ¿Tomás?
ROMAN: Ese hombre, Tomás, podrá aclarar.
SIRVIENTE: (entra) Perdonen la tardanza, una cuestión doméstica.
SUSY: ¿La bicicleta anda?
SIRVIENTE: ¿La bicicleta?, ¿qué bicicleta?
SUSY: Esa, que vimos afuera.
SIRVIENTE: Ah, no, lo lamento pero es del cartero.
SUSY: ¿Acá llegan cartas?
SIRVIENTE: Ninguna.
ROMAN: (en sorna) Ah, que bueno… ¿y para qué el cartero?
SIRVIENTE: Para ver si estamos vivos.
SUSY: ¿El cartero?
SIRVIENTE: No, el cartero desapareció.
SUSY: Pero la bicicleta…
SIRVIENTE: ¿Qué pasa con la bicicleta?
SUSY: La bicicleta, entonces…
ROMAN: Yo no me atrevería…
SUSY: ¿Cuántas personas puede llevar?
SIRVIENTE: Nunca se calculó. Pero dado que está en llanta…
ROMAN: ¿Alguna gomería por acá cerca?
SIRVIENTE: Se habrán dado cuenta de que el poblado está muy lejos, y aún
así, no sé para que querrían una bicicleta.
ROMAN: Ah,no, yo tampoco.
SUSY: Es tan sólo un paseíto… distensión, eso mismo.
SIRVIENTE: Discúlpeme, pero no lo apruebo.
ROMAN: El señor tiene razón. En realidad, fue un capricho venir, aunque
no nos ponemos de acuerdo de quién fue el capricho.
6
SIRVIENTE: ¿Señor?
BELLA: Retírese.
SIRVIENTE: Como mande.
BELLA y LUCAS: ¡Hans!
SIRVIENTE: (a ellos) Mejor me mando mudar. (sale)
BELLA: ¿Entendés ahora?
LUCAS: ¿Si entiendo qué?
BELLA: Estamos haciendo el ridículo.
LUCAS: Ya te dije. Toma un trago.
BELLA: Un trago. El ritual de siempre en esta casa. No más que fijación
oral…¿Pensás que con un trago va a cambiar todo?
LUCAS: Todo no, pero…
BELLA: Sí, para mí será el último (toma el vaso del agua y trata de beber
compulsivamente. Se atraganta. Tose)
LUCAS: Salud, salud…¿Estás bien? …¿Fuiste capaz de suicidarte por mi
culpa?
BELLA: No solamente por tu culpa.
LUCAS: ¿Qué? ¿Hay alguien más?
BELLA: No nadie. Nadie más. (intenta beber nuevamente)
LUCAS: ¡No! ¡No lo hagas! Perdón, perdón, te ruego tu perdón…
BELLA: Nos estamos lastimando demasiado. Ya te insinué una posible
solución.
LUCAS: Ni se te ocurra.
BELLA: Pero yo lo creo.
LUCAS: Eso, nunca. Yo, a un analista, jamás.
BELLA: Si tan solo pudiera…Si pudiera…
LUCAS: ¿Qué?
BELLA: Romper el contrato con el Conde.
LUCAS: ¿No valdría la pena con tal de salvar lo nuestro?
BELLA: ¿Intentar una vida nueva? Como la gente común y corriente? Lo
pienso, y no...Mi deseo es de otra cosa. No sé de qué, pero otra cosa.
LUCAS: ¿No será influencia de ese analista?
BELLA: El, hasta ahora no habló
LUCAS: ¿Nunca?
BELLA: Nunca
LUCAS: ¿Y cómo sabés si está vivo?
BELLA: ¿Qué? ¿Querés insinuar que yo…?
LUCAS: No, lo dije sin pensar. Pero entiendo que te sientas atada.
BELLA: ¿Al conde?...No quisiera. Pero un pacto es un pacto, y hay ciertas
cosas que él cobra muy caras.
13
BELLA: ¿Consentimiento? Yo, apenas una joven inocente que solo deseaba
coquetear…
LUCAS: Lo estás reconociendo.
BELLA: Coquetear como cualquier otra, jugar, nada más.
LUCAS: Para mí no es juego.
BELLA: Ya veo que no. Todo lo tuyo es siniestro.
LUCAS:¿Me negás tus pies y también me llamás siniestro?
BELLA: Siniestro, sí. Te interesan más mis pies que mi alma.
LUCAS: ¡Ah!, ¿Qué decis?
BELLA: Sí, aunque no lo creas, he descubierto que tengo alma.
LUCAS: Bueno, esto no lo escuché nunca. Qué va a decir el conde…
BELLA: ¿Pensás contárselo? ¿No puedo evolucionar?
LUCAS: ¿Con alma, vos?
BELLA: Aunque lo niegues es así.
LUCAS: ¿Otra cosa más de tu análisis?
BELLA: ¿Mi análisis? Estoy dispuesta a dejarlo.
LUCAS: ¿Y a mí también estás dispuesta a dejarme?
BELLA: Sabés que eso sería un disparate.
LUCAS: Por eso mismo. Sé que sos capaz de hacer muchos disparates.
BELLA: Nuestras leyes lo prohíben. Terminarían por descubrirlo. Me
aniquilarían.
LUCAS: Eso quiere decir que estamos juntos solo por deber.
BELLA: Así lo mandan. Y no pienso luchar por los derechos civiles.
LUCAS: El conde decretó que para anular la unión, hay que fulminar a los
cónyuges.
BELLA: ¿A los cónyuges o al conyuge?
LUCAS: ¿Serías capaz de aniquilarme?
BELLA: Nunca. Me da mucho miedo.
LUCAS: Entonces es sólo por miedo. ¿De lo contrario serias capaz?... ¿Por
qué me odiás tanto?
BELLA: Me sentí dominada, violada. Me mordiste un tobillo y yo era una
virgen. Yo era una virgen.
LUCAS: De ese pié, sí.
BELLA: ¿Qué querés decir?
LUCAS: Solo puedo dar cuenta de ese tobillo…lo demás, muy bien no lo sé.
BELLA: Hablás así. ¿Cómo no voy a tener motivos para odiarte?
LUCAS: Nunca he revisado tu cuello, ¿no te parece raro en alguien tan
celoso?
BELLA: Porque solo te interesan mis pies. ¡Qué humillación!
15
(Susy se escabulle)
ROMAN: ¿Pero con qué? ¿Con qué lo intentó?
CONDE: No es tu obligación explicarlo, Hans.
SIRVIENTE: Para que el señor Román se quede tranquilo, puedo decirle
que he probado con una llave maestra y hasta con un destornillador.
ROMAN: ¿Y eso es suficiente?
CONDE: ¡Más que suficiente! Podés retomar tus tareas Hans.
SUSY: (entra) Es cierto, no se puede abrir.
CONDE: No se puede. Claro que no se puede. Es necesario que entiendan,
que aprendan a confiar en mi palabra. Tampoco está nada bien cuestionar
los métodos de Hans. El pobre, es muy susceptible, y en este momento,
sin duda, se encuentra llorando. Con esto quiero decirles que por las
buenas, todo puede andar muy bien. (hace una señal para que se sienten)
ROMAN: Por las buenas, sí, claro.
SUSY: Pero yo tengo miedo.
CONDE: El miedo es muy simple y muy pasajero. Ya se alegrará usted con
el banquete.
ROMAN: ¿No era día de abstinencia?
CONDE: La abstinencia consiste en que esta noche no se ha de morder a
los humanos.
SUSY: ¿Y mañana?
CONDE: De día, tampoco se muerde. Por eso mi consejo de que traten de
sentirse seguros.
SUSY: Sí, sí, ya estamos más tranquilos. Pero, ¿por qué?
ROMAN: ¿Por qué se dice que es tan temible?
CONDE: Veo que es cierto que desconocen mi historia. ¡Es notable!...
¡Haber venido con tan poca información!... O quizá ninguna.
SUSY: Y…Nosotros somos así.
ROMAN: Dejamos que fluya…
CONDE: ¿Como la sangre, no es cierto?
SUSY: ¿Eh? Sí. No. No, no. Eso no.
CONDE: Claro que sí. Y en abundancia. Les comentaba que he llegado a ser
príncipe, hace ya varios siglos. Tanto mi padre como yo pertenecemos a la
Orden del Dragón. De ahí mi nombre de Drácula.
SUSY: ¡¿Ay, usted, Drácula?!
CONDE: Así es. Es un honor compartir conmigo, ¿no es cierto? En mi reino,
siempre hice gala de grandes virtudes. Los principios éticos han sido un
blasón eterno en mí, y me enorgullezco de haber inculcado un grado de
19
SUSY: ¡Ay!
ROMAN: ¿Y ahora qué hora es?
CONDE: No se impacienten. Estamos próximos. Elmer ha ido a buscar un
cuchillo.
SUSY: ¡No!
CONDE: Eso, eso, griten. Les concedo ese privilegio.
AMBOS: ¡Ayyy!
CONDE: Ya ven. Han logrado gritar, y nada ha pasado. ¿Qué otra cosa se
les ofrece?
ROMAN: ¿Con…con un cuchillo, dijo?
CONDE: Con un cuchillo, pero si lo pienso bien, y tratándose de tan
amables visitantes, digo, tratándose de ustedes dos, soy capaz de dejarlos
si adivinan un par de acertijos ¿Les parece? (los otros asienten) Pues bien,
acá va el primero: “Si ando bajo la lluvia, no me mojo? ¿Quién soy?”
AMBOS: Usted.
CONDE: Muy bien. Acá va el otro: “¿Quiénes serán mis dos próximas
víctimas esta noche?” ¿Eh? ¿Quiénes? ¿No saben?…¿No arriesgan?... Han
perdido entonces ¿Lo sabremos a las doce?...¿O prefieren un acertijo de
gracia? (ellos asienten)
El SIRVIENTE SE ACERCA RAPIDAMENTE POR DETRÁS DEL CONDE Y PONE
ALGO EN SUS NARICES. EL CONDE CAE MORTALMENTE
SIRVIENTE: ¿No esperaban esto, no? Tan solo un golpe, un shock de ajo,
de ajo mortal….
SUSY: ¡Desátenos, por favor!
SIRVIENTE: ¿Desatarlos? No sé si sería de mi agrado.
SUSY: ¡Se lo ruego!
SIRVIENTE: “Por favor…se lo ruego”… ¿Saben acaso cuáles son mis planes?
¿No? Yo sí. Ya conocen la historia de un príncipe glorioso, pero no la de un
criado ejemplar, que siempre le rogó a ese príncipe poder entrar en el
círculo de los mordientes y al que el sádico siempre se lo negó.
ROMAN: Con más razón entonces.
SIRVIENTE: Claro que con más razón entonces, ansioso por estrenar mis
artes…Ahora sit Butcher, el Destripador. Este cuchillo ha sido siempre mi
debilidad, y pronto podrán comprobarlo. ¿Alcanzan a ver su filo? ¿Qué tal
quedaría en sus yugulares?
SUSY: (sale de su rol) ¡Bueno, basta!
SIRVIENTE: (también sale) ¿Qué?
SUSY: Suficiente por hoy. Ayúdenme a desatarme.
26
FINAL
2016
Origen: Argentina
27
28
29