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ROBERTO ENRIQUE Coscio

José FERNANDO SÁNCHEZ

MANUAL DE -
PSICOLOGIA

Tyche ediciones
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Roserro ENRIQUE Coscio - Jos FERNANDO SÁNCHEZ INTRODUCCIÓN

todo su origen, sus acepciones y sus modalidades, a fin de incitar la bús- do, como compleja es también la ciencia que lo estudia, razón por la que,
queda vocacional y la investigación científica, proponiendo al lector una de un modo progresivo y didáctico, iremos aportando en los sucesivos ca-
serie de interrogantes o cuestiones pensadas para actuar como un acicate pítulos un poco de luz para alumbrar la oscuridad que se cierne en torno a
que provoque en él la necesidad de profundizar en aquellas corrientes psi- todas estas cuestiones.
cológicas que resulten de su interés y de acuerdo con un criterio bien for- Menester es reconocer, de una manera sumaria, que el hombre puede
El hombre puede mado. ser definido, desde el punto de vista particular de nuestra ciencia, como
ser definido, Por lo pronto, es legítimo preguntarse por qué razón hay tantas concep- una unidad bio-psico-social que es extremadamente compleja y debido a
ciones diferentes y cuál es la causa de que, entre ellas, aparezcan algunas esa complejidad es que se ha procedido a dividirlo para simplificar su estu-
desde el punto de en franca oposición, en abierta contradicción, dado que, según suele creer- dio, pero esa división ha resultado parcial y de las soluciones la peor es
vista particular de se, la ciencia es una sola y, como tal, su discurso no debe ofrecer a quienes aquella que considera al hombre como partes. Por lo tanto, esa unidad
nos internamos en sus dominios ninguna posibilidad u ocasión de contra- bio-psico-social no puede ser reducida ni descompuesta en meras partes,
nuestra ciencia,
dicción. La respuesta no se hace esperar. En principio esto no es así, toda puesto que con tal proceder se oscurecería todavía más su conocimiento.
como una unidad ciencia tiene en su seno una multitud de teorías que no son necesariamente Abordar un estudio científico sobre el hombre, exige, ante todo, tomarlo

bio-psico-social. coincidentes entre sí; empero, tratándose de la Psicología, ciencia que tiene como una unidad y comprenderlo, explicarlo e interpretarlo, para descubrir
como objeto de estudio al “hombre”, entonces el problema se hace más sus hemisferios de oscuridad y arrojar luz sobre ellos. Es evidente que re-
complicado que en el campo de las ciencias naturales o físicas, donde el ducir al hombre, a cualquiera de los aspectos en él considerados, nos haría
objeto está signado por una cantidad de variables que el físico maneja, caer en la premisa fácil de pensar que la Biología estudia el cuerpo del
mientras que la Psicología, con su particular objeto, no maneja todas la hombre, la Psicología su mente y la Sociología sus relaciones con otros
variables de esa realidad compleja que denominamos “hombre” y por lo hombres, como si fuera posible separar al hombre de esos mundos; disyun-
tanto su tarea se hace más problemática y susceptible de ser abordada por ción que, desde ahora mismo, afirmamos como imposible, toda vez que
diferentes interpretaciones. solo es practicable solamente en una especie de reduccionismo idealista.
Llegados a este punto, plantearemos un interrogante capital: ¿qué es lo En efecto, únicamente desde un postulado simplista puede sostenerse que
que la ciencia psicológica debe estudiar del hombre: su mente, los produc- los distintos aspectos del hombre pueden estudiarse como parcelas separa-
tos que la actividad mental genera, la conducta o los aspectos ocultos de la das que responden independientemente a las necesidades metodológicas
mente a los que globalmente denominamos inconsciente? Sin duda, hablar ora del biologismo, ora del psicologismo, ora del sociologismo.
del hombre exige plantearnos en principio el problema de que es lo que Otra forma de esta división, es suponer que algunas de esas partes tie-
queremos significar con éste término, y, asimismo, una vez definido el ob- hen una jerarquía superior sobre las demás, o que unas son más influyentes
jeto que queremos estudiar, cuál es el aspecto de ese hombre que nos inte- 0 determinantes que otras, como ocurre, por ejemplo, cuando se conjetura
resa abordar desde una perspectiva científica. Vemos entonces que esta erradamente que lo psicológico resulta más importante que lo biológico, o
ciencia joven, nacida como tal en el año 1873, tiene al “hombre” como que lo biológico determina lo psicológico, etcétera. Este error es el que
objeto de estudio, pero, aquí surge otra dificultad, ese es también el objeto suelen cometer comúnmente tanto los médicos, cuando creen o postulan
que, desde otro ángulo de visión científica, estudian la Medicina, la Antro- que todo tiene su origen en lo biológico, como los psicólogos, cuando con-
pología, la Sociología, etcétera. Por lo pronto, entonces, se nos impone la cluyen que todo problema orgánico encuentra justificada su causa en lo
tarea de delimitar los alcances que el mismo objeto adquiere bien psíquico, cayendo los primeros, entonces, en un pan-biologismo, y los se-
diferencialmente en el campo de estas respectivas ciencias. Todo ello im- gundos, en un pan-psicologismo, ya que lo que verdaderamente interesa,
plica, en otras palabras, averiguar con nosotros en que sentido nuestra cien- en realidad, es verificar como esos mundos se articulan y relacionan entre
cia considera el “hombre” como objeto de estudio. De entrada, esta indaga- sí, afectándose mutuamente en esa unidad que es el hombre. Ampliaremos
ción nos obliga a hacer precisiones respecto a lo que se considera “hom- la discusión sobre estos temas más adelante, cuando nos toque hablar de la
bre”, y, a partir de esas precisiones, ir despejando otras cuestiones que esta salud y la enfermedad. Allí trataremos de establecer cuáles son las teorías
especial problemática lleva anexas, las cuales no podemos soslayar puesto que se han centrado en el estudio de los estados de alteración de lo humano.
que la Psicología posee un objeto de estudio que es sumamente complica- Respecto a la constitución del hombre existen otras concepciones que,

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RoBerto ENRIQUE Coscio - JosÉ FERNANDO SÁNCHEZ
INTRODUCCIÓN

basándose en posiciones idealistas, concluyen que el hombre se ha ido ale-


depositados, sin olvidarnos, claro está, de la deforestación indiscrimi-
jando gradualmente de ciertos estados ideales, cuyo extrañamiento en otros
nada, que incluye la tala de árboles centenarios, la caza brutal de espe-
estados o condiciones lo enferman o lo hacen sentir insatisfecho. Este tipo
de concepciones resultan hoy día tan utópicas cies de animales como las ballenas, etcétera. A la luz de estas pruebas,
como aquellas que anterior-
realmente, es difícil sostener que el hombre tiene una identificación con
mente lo habían dividido, dado que parten de un presupuesto que desvirtúa
toda noción completa de hombre, tal como se lo considera actualmente, el medio natural que lo rodea. Sin embargo, para estos pensadores que
creen en un hombre natural, que nos retrotrae a la noción del Buen
abstrayéndolo de su accionar cotidiano, vale decir, la circunstancia o con-
Salvaje de Rousseau, habríamos partido de un estado natural inicial que
tingencia que debe vivir un hombre real y concreto en este fin de siglo, con
nunca habría sido hostil, salvo en la medida que fuimos alejándonos de
todas sus vicisitudes y su problemática. Señalaremos, con ejemplos entre-
sacados del libro de J. Bleger, Psicología de la conducta, algunas de estas
Él. Por supuesto, que estas concepciones creen que el hombre se curaría
concepciones ideales, entre las cuales se inscriben las siguientes: 7) El hom- de su malestar si consiguiera volver al estado inicial de armonía con la
naturaleza.
bre natural; 2) El hombre aislado; y 3) El hombre abstracto.
El Hombre Aislado. Esta concepción es otra modalidad idealista que,
como la anterior, considera al hombre como un ser que podría vivir
1. El Hombre Natural. Una postura idealista es aquella que considera al
aislado, solitario, prescindiendo absolutamente de la relación con otros
hombre como un hombre natural, esto es, un hombre que originalmente
habría estado en armonía con la naturaleza, durante un tiempo donde congéneres, basándose en la suposición de que ese estado de soledad es
hombre y naturaleza conformaban una unidad simbiótica, constituyen-
el más perfecto, más equilibrado que el de un hombre inserto en lo
do el estado de mayor plenitud para el hombre. Concepciones de este social. Como dijimos, esta utopía tiene relación con la concepción ante-
tipo suelen partir del supuesto de que todo lo natural es bueno, de modo rior, empero, el ser humano real y concreto es un ser social, que para
que alejarse de la naturaleza resulta muy nocivo para el hombre, razón sobrevivir necesita de esas relaciones, de modo que suponer gratuita-
por la que puede afirmarse, desde el punto de vista idealista, que las
mente lo contrario implica desconocer una realidad que se impone de
complejidades sucesivas impuestas por la vida civilizada ha sido la res- hecho. De ningún modo, el aislamiento es la solución para los proble-
mas que la situación actual en el mundo le plantea al hombre.
ponsable de que el hombre se volviera un extraño para aquel estado
natural primigenio, puesto que este distanciamiento de lo natural no El Hombre Abstracto. Suele ser este un error habitual entre aquellos
hizo otra cosa que provocar un daño, y este presupuesto atraviesa la
que estudian al hombre como objeto de una observación científica, es
concepción idealista del hombre natural por su misma base, deducien- decir, el psicólogo, el médico, el sociólogo, etc., quienes pueden caer
en el error de suponer que aquello que estudian es una abstracción y no
do, en consecuencia, que cuanto mayor es la complejidad de una estruc-
un ser concreto, de carne y hueso, con una historia y una circunstancia.
tura social y de la cultura, más grande será el malestar que tendrá que
afrontar el hombre en su desenvolvimiento.
Suponerlo abstraído le permite al estudioso dividirlo en partes, para
poder estudiarlo más fácilmente, ocupándose de aquella parcela que es
Puede uno preguntarse como es que un ser que ha sido destinado para
vivir una existencia, esencialmente natural, ha podido, en un momento de su interés, ya sea la mente, el cuerpo o las relaciones del hombre. No
obstante, a pesar de las facilidades que este procedimiento ofrece al
dado, emprender una retirada tan extraordinaria de ese mundo hasta tal
estudioso, resulta inapropiado para estudiar al hombre íntegramente, ya
punto que, a la hora en que estamos, no sólo se ha alejado de él sino
que es imposible abstraerlo idealmente en tanto que hacerlo siempre
que, lamentablemente, lo esta destruyendo sistemáticamente, porque a
nadie escapa que ese proceso de asolamiento tecnológico en contra de implica el riesgo de romper esa unidad en la que tanto acento hemos
la naturaleza es la mayor obra de devastación emprendida alguna vez puesto y que seguiremos subrayando. El investigador científico en Psi-
por el hombre y, al respecto, bastarían unos pocos ejemplos
cología, debe evitar caer en esta simplificación o reduccionismo abs-
para
percatarnos de esto: a la destrucción de la capa de ozono, sumemos la tracto, abandonar toda forma estereotipada del concepto de hombre y
contaminación de las napas de agua con desechos tóxicos no reciclables tomarlo como un ser concreto y real.
y de la tierra con desechos nucleares que son imposibles de reabsorber
y que empobrecen la calidad de vida en los lugares donde han sido

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2. BREVE RESEÑA HISTÓRICA

2.1 La época de oro griega

Para comprender al hombre como una unidad, es menester que nos re-
montemos a las mismas raíces del pensamiento occidental, las cuales están
hundidas profundamente en la denominada Época de Oro del pensamiento
griego, que corresponde al momento en que se comenzaron a sentar las
bases de las ciencias del hombre. Retrotraernos en el tiempo para dirigir-
nos hacia la Antigua Grecia es pertinente, debido a que es allí donde la
Psicología se inicia de la mano de la Filosofía. Por lo tanto, resulta doble-
mente justificado este itinerario mental donde comenzaremos a recorrer las
distintas etapas que jalonan el camino histórico de la Psicología que, como
hemos adelantado, se inicia con la Época de Oro griega. Por consiguiente,
poner aquí el punto de partida de nuestro circuito nos dará ocasión, a medi-
da que avancemos, de ir desentrañando los conceptos que habrán de confi-
gurar nuestro conocimiento psicológico.
Comenzaremos nuestro periplo rastreando el origen etimológico de la
palabra psicología. El antiguo pensador griego concibió principios invisi-
bles que movían las cosas y, por tanto, también a los hombres; percibió, en
as palabras, la actividad vital del alma. En sánscrito, la palabra dhumas
significa arre. De ella se origina rimología, que significa tratado del princi-
pio que impulsa a los seres. Aristóteles dio a ese principio. capaz de dar
lorma a la materia y animarla. el nombre de psique (alma), soplo de aire
que promueve una acción o un movimiento. La rimología da lugar asf a la
prenmología, que es el conjunto de conocimientos y técnicas relativas al
pneuma (espíritu, también aire, soplo). Esta idea se mantuvo hasta el siglo
XVI. La palabra frenología, usada como antecedente de la palabra psicolo-
gía, viene de la raíz griega frenos, que significa diafragma, el tabique mus-
cular que en el organismo abre o cierra, regula el movimiento del aire.
Psicología es palabra moderna. Melanchton, en 1550, y Gloeckel, en 1590,
fueron los primeros que hablaron de la Psicología como tratado del alma.
Etimológicamente, el término psicología proviene del griego, de Psykhe,
alma, el yo, vida, aliento y Logos, palabra, ciencia, estudio, descripción,
etc. Por lo tanto, psicología significa, de acuerdo con su raíz etimológica,

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RoBerro ENRIQUE Coscio - JosÉ FERNANDO SÁNCHEZ BREVE RESEÑA HISTÓRICA

Ciencia del Alma. Pero aclararemos, sin demora, que la Psykhe, derivado (Umbanda, Kimbanda, Vudú, etc.), o en doctrinas eclécticas que mezclan
de psykhein, respirar soplar, que, a su vez, viene del indoeuropeo bhs-u-kh, estas concepciones animistas con modernas teorías científicas, como el lla-
respirar, no aparece en el pensamiento griego con el mismo sentido que se mado espiritualismo o espiritismo. A partir de una concepción primitiva
reconoce actualmente cuando decimos alma, razón por la que se hace ne- del alma, comienza, en la antigua Grecia, a desarrollarse una visión filosó-
cesario una distinción terminológica para aproximarnos a su moderno sig- fica que, a la vez que da cuenta de la trascendencia de este principio vital
nificado. invisible, trata de estudiar sus manifestaciones visibles de su inmanencia
Probablemente, la idea de alma surge en el pensamiento griego en rela- de una forma científica.
ción con las eternas preguntas que el hombre se hace frente al devenir, la En Sócrates (470-399 a. C.) que fue el creador del diálogo como méto-
muerte, el bien, lo bello, etc. Es presumible que esta idea de alma se haya do filosófico, la ciencia sale de los soliloquios de los pensadores para trans-
instalado en el pensamiento del hombre para justificar y comprender aque- formarse en un intercambio de ideas, donde los conceptos son sometidos a Sócrates
lla actividad del espíritu que siempre se presenta como inmanente al cuer- un análisis riguroso para llegar a su esencia, haciendo que la ciencia, enton- (470-399 a.C.)
po, pero, a la vez, trascendente respecto a él. Con ligeras variantes, todas ces, se enriquezca notablemente. Sócrates va a considerar que aquello que Precursor del siglo
las sociedades primitivas y las civilizaciones antiguas profesaron la creen- encamina al descubrimiento de lo más esencial en el hombre es la moral, de oro del
cia en una vida transmundana, concebida como un “modo de pasaje” o tanto en lo que se refiere a la búsqueda de la verdad, la virtud, la probidad, pensamiento griego.
existencia sutil en un “cuerpo espiritual”. ¿De dónde procede la palabra etc. El alma no es solamente aquello que mueve los cuerpos, sino, más A partir de Sócrates
alma?, se preguntaba C. G. Jung. En nuestra lengua, la palabra alma deriva propiamente, la sede del conocimiento verdadero, de lo inmutable, de las la Filosofía se
del término latino animus, puede traducirse como “espíritu” y anima en el ideas, que son lo uno en lo diverso. El descubridor de la espiritualidad del transforma en la
sentido de “alma”, equivale al griego anemos que significa “viento”, lo conocimiento, no podía no ocuparse en profundidad de la naturaleza del ciencia del diálogo.
mismo que pneuma que significa, a la vez, “viento” y “espíritu”. Parece ser alma; en efecto, para Sócrates, la naturaleza espiritual del conocimiento No se conocen obras
que ya el hombre del paleolítico superior creía en la existencia de un prin- deja vislumbrar con claridad la naturaleza del alma. El método, a través del del ilustre griego,
cipio invisible que después de la muerte prolongaba su vida en un mundo cual Sócrates llevaba a sus interlocutores a la búsqueda del concepto, es conocemos su
designado como método dialéctico, en el sentido de discusión, la que se pensamiento a través
sutil paralelo, pero contrario al mundo grosero y material. Entre los primi-
desarrolla en forma dialogada. Toda la discusión consistía en un examen. de los diálogos
tivos, según Frazer, la vida póstuma, o sea, en un estado post-mortem, no es
Examinarse a sí mismo y a los demás con la intención de mostrar que no platónicos.
objeto de conjetura ni de especulación. Es una certidumbre práctica, dado
que la idea de alma surge como continuidad con lo mágico, relacionada con hay conocimiento verdadero si la exploración de su objeto está incompleta.
las fuerzas anímicas de la naturaleza, razón por la que, mediante una visión El método dialéctico o socrático tiene dos momentos: el negativo, el del
totalizadora del mundo que no separa el yo y el no-yo, el hombre primitivo proceso inductivo que corresponde a la refutación como catarsis, y el posi-
admitía que el alma es una fuerza vital que habita tanto en los hombres tivo, el de la definición universal que corresponde a la mayeútica. Con la
como en los animales, incluso en las plantas y cosas, puesto que todo en la refutación. Sócrates buscaba eliminar aquel saber que no está debidamente
naturaleza está impregnado por esta fuerza vital. Por lo tanto una primera fundamentado, purgando o liberando (catarsis) al alma de sus errores. La
aproximación al concepto de alma podría ser la de ser “principio vital”, lo palabra griega catarsis significa “limpieza”, “liberación”, “purificación”,
que anima los cuerpos y les confiere su vitalidad. Por otro lado, podríamos en sentido religioso, y “purga”. Sócrates no imponía la verdad
preguntarnos que ocurre con el alma una vez que la muerte la separa o dogmáticamente, sino que por la mayéutica procuraba ayudar al alma de su
rompe su unidad esencial con el cuerpo en el cual habita. A esta pregunta interlocutor a “alumbrarla”, a “darla a luz”, como una comadrona ayuda a
los primitivos respondieron con concepciones míticas donde el alma dara luz a la parturienta. Mayéutica (maieutiké) significa, en griego, “arte
transmigraba, esto es, pasaba de un estado de vida inferior a otro superior o de partear”, de “ayudar a dar a luz”. En el Teéteto (148 e ss.), Sócrates
viceversa, podía acceder a otros reinos habitados por las almas. Más, en compara su método con el arte obstétrico de su madre, Fenarete, que era
otras concepciones, el alma regresa al mundo material ya sea para partera. Es imprescindible que nos detengamos ahora a hacer estas preci-
reencarnarse o para deambular fantasmagóricamente entre los vivos. De siones terminológicas y consideraciones generales, por cuanto muchas de
estas concepciones mágicas aun quedan resabios en nuestra época, espe- estas ideas, como veremos más adelante, van a ser usadas por diferentes
cialmente en aquellas creencias animistas de las religiones afroamericanas disciplinas de la investigación psicológica, razón por la que es menester

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ROBERTO ENRIQUE Coscio - Jos FERNANDO SÁNCHEZ
BREVE RESEÑA HISTÓRICA

ser vivo, la vista sería su alma; pues la vista es la esencia del ojo”. Aristóte
les orgánicas o físicas, por otro. Pero mientras Aristóteles consideraba el cora-
clasificó a las almas en vegetativas, sensitivas e intelectivas, en tanto
que zón como el verdadero órgano del alma, el médico griego Hipócrates había
cada una de ellas hace referencia, respectivamente, a los vegetale
s, los ani- reconocido el cerebro como órgano del alma, teoría que siglos más tarde
males y los hombres. También se ocupó del estudio de las sensaciones y de
fue compartida por otro médico célebre, Galeno (s. II d. de C), pero que no
la percepción, postulando una teoría de las sensaciones que mantien
e im- ha vencido sino muy moderadamente la autoridad del filósofo estagirita.
portantes diferencias con la de sus antecesores, muy especialmente, en lo
Podemos decir que la producción renacentista y moderna del conocimiento
tocante a la cuestión de cómo se forman las ideas a partir de las sensacio-
respecto a las ciencias del hombre continuaron la tradición griega
nes. Aristóteles sostiene: “no es piedra lo que está en el alma sino
su for- replanteando sus mismas preguntas, aunque al margen de los problemas
ma”, refiriéndose a las representaciones de los hechos sensibles. Su
estu- metafísicos con el objeto de encontrar desarrollos o ideas innovadoras que
dio de las sensaciones lo llevó también al estudio de los sentidos. Aristóteles
Es en le permitieran cobrar un nuevo impulso. Era necesario para el pensamiento
Aristóteles, por consiguiente, donde la psicología aparece por primera (384-322 a.C.)
vez científico desembarazarse de los problemas metafísicos a fin de no ser in-
como una reflexión de lo objetivo y se plantea así la posibilidad Filosofo griego,
de un terferido por la mentalidad religiosa de la época que concebía al mundo
estudio sistemático del alma. En resumen, es durante la Época de Oro discípulo de Platón y
de la como una jerarquía de seres creada por Dios, en cuyo punto más elevado se
antigua Grecia cuando se sientan las bases del conocimiento científic del cual toma
o y se encuentra el hombre como remate de la Creación divina, modelo de la per- muchas ideas y se
cultivan las condiciones para que las ciencias que tomaron como objeto de
fección natural o viviente, y que, por lo tanto, resultaba herético someterlo opone a otras. Fue el
estudio al hombre, como la medicina y también la psicología, tuvieran
un a una observación objetiva o científica, ya que se trata de un ser que Dios pensador griego de
incipiente pero significativo desarrollo; incipiente toda vez que ambas
cien- estableció en la tierra como su reflejo sensible, porque el hombre, como la época de oro que
cias se vieron postergadas por la metafísica y la física y por las ciencias
criatura, fue hecho a imagen y semejanza del Creador. sistematizó el
formales como la lógica y la matemática.
Es menester señalar que el desarrollo estrictamente científico de la Me- pensamiento
Aparte de establecer la solidaridad del alma y el cuerpo, Aristóteles filosófico. Escribe un
dicina y Psicología, junto con otras ciencias del hombre, se mantuvo inac-
distingue una jerarquía de las funciones psíquicas o de almas: alma nutriti-
tivo durante siglos. La ciencia medieval cultivó un pensamiento profunda- libro para cada
va (o vegetativa), sensitiva, locomotriz y racional, cada una de las cuales
mente influido por la religión y las ciencias ocultas (alquimia, magia, astro- problema planteado
presupone, a su vez, los grados inferiores, pero no a la inversa. El alma
es logía, etc.). Sin embargo, es posible encontrar aun en ella algunos rudimen- ala filosofía,
la entelequia primera, es decir, el conjunto de las funciones de que es capaz
tos que van a ser retomados por la ciencia moderna. Pero con la ciencia “Metalísica”,
el organismo, En relación con ese conjunto de funciones del alma,
Aristóteles “Lógica”,
medieval comienza un período de transición que recién va a culminar en el
emprende el estudio de las sensaciones y de la percepción. Para Aristóteles, “Psicológica”,
siglo XVI, durante el período del Renacimiento, cuando se sentaron las
las sensaciones son una suerte de alteraciones particulares que no pueden “Etica”, etc. Es el
bases de la ciencia moderna.
definirse más que distinguiendo entre potencia primera y potencia filósofo griego que
segun- El siglo XVI señala un punto de inflexión en el curso de la historia de la
da. Sostiene Aristóteles que hay una alteración que consiste para un más ha influido en el
sujeto ciencia, porque es la época en que el hombre comienza a tomarse como
1 recibir una modificación contraria a su estado anterior: así, por efecto pensamiento de
de objeto de estudio en investigaciones empíricas, El Renacimiento, como su
la enseñanza, el ignorante se hace sabio; la ignorancia es destruida por occidente.
la propio nombre lo indica, constituyó una renovación o un rejuvenecimiento
instrucción y reemplazada por un estado contrario. Así se comprende la
del saber de la época clásica a través del influjo intelectual de humanistas
comparación que ilustra la índole de la sensación en general: “no es piedra
de la talla de Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Paracelso, Maquiavelo,
lo que está en el alma, sino su forma”. Con esto quiere expresar
que la Copérnico, Pico della Mirándola, Marsilio Ficino, Tomás Moro, Giordano
sensación es lo que es capaz de recibir las formas sensibles sin la materia,
Bruno, Nicolás de Cusa, Erasmo de Rotterdam, Lutero, Gutenberg, etc.,
del mismo modo que un molde de cera recibe la impronta del anillo, sin
quienes abonaron con sus ideas todos los campos del conocimiento de su
estar en contacto ni con el hierro ni con el oro.
tiempo. Podemos ver uno de los efectos de ese cambio revolucionario, por
En la Época de Oro de la antigua Grecia, Aristóteles e Hipócrates (466-
ejemplo, en la medicina. Sabido es que la medicina medieval consideraba a
377 a. De C), sentaron las bases para que ciencias como la medicina y la
las manifestaciones de la locura como una forma de posesión demoníaca.
psicología pudiesen estudiar objetivamente el paralelismo que existe entre
Pero a partir del Renacimiento las manifestaciones de la locura son aborda-
el desarrollo de las facultades anímicas y espirituales, por un lado, y las
das con una actitud más comprensiva, humanista y científica, procurando
ROBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ BREVE RESEÑA HISTÓRICA

explicar sus síntomas de un modo racional y aliviarlos con una terapia me- análisis y concatenación segura de ideas, ofrece dificultades aparentemen-
nos elemental (dentro de las limitaciones terapéuticas de la época).
Desde te insalvables: ¿cómo aplicar el método al mundo y las cosas?
el Renacimiento, las enfermedades de la mente comienzan a ser objeto de Puestos a dudar, ¿hay tal mundo y tales cosas? No hay razón para fiar-
estudio de la ciencia médica y, en consecuencia, dejan de ser interpretadas nos de los sentidos, ya que ellos bien pueden engañarnos. Tampoco pode-
como manifestaciones de la posesión demoníaca. Podemos decir que el mos confiar en el raciocinio porque podría haber algo en nuestro modo de
siglo XVI crea las condiciones que serán aprovechadas, a lo largo del siglo pensar que podría engañarnos y conducirnos al error: ¿cómo podríamos
siguiente, por pensadores de fuste como René Descartes y Galileo Galilei, distinguir, entre los contenidos del pensamiento, aquellas ideas que se co-
padres fundadores del pensamiento científico moderno. rresponden con algo realmente existente y aquellas creencias que son fruto
de una alucinación? Hay imágenes de la realidad que es posible verlas en
un sueño, y bien podemos estar soñando con esa realidad, ya que a veces
2.2. El Racionalismo de René Descartes (1596-1650) recordamos haber soñado mientras creíamos estar despiertos. De este modo,
Descartes propone dudar de todo aquello que haya penetrado en su espíritu Descartes R.
Hegel, el filósofo alemán, considera a Descartes como el iniciador de la como un dato de la realidad, porque ese dato de la realidad que tiene el (1596-1650).
pensamiento cuando estamos despiertos puede acudir a nuestra mente tam- Pensador francés. No
filosofía moderna. Sin duda, el pensador francés ejerció una gran influen-
bién cuando dormimos, convirtiéndose así en simples ilusiones de sus sue- pudo seguir la
cia en la formación del pensamiento filosófico moderno, pero gravitó deci-
ños. carrera de armas por
sivamente asimismo en la mentalidad científica de su época, sobre todo en
El hombre es pensamiento y vive “encerrado” en su propia actividad ser un joven débil. Se
la Psicología que recibió un gran impulso a partir de los postulados de
pensante. Pero así como la duda, en el método de Descartes, encamina al interesó desde
Descartes, quizás en la misma proporción en que el pensamiento cartesiano
pensador hacia el solipsismo, el descubrimiento de la existencia de Dios le pequeño por la
fue receptivo a los problemas que planteó la psicología en relación con el Filosofía. Sus obras
alma y las percepciones. El pensamiento cartesiano fue el acicate que nece- permite superarlo. Pero el punto de partida es siempre la duda metódica. Al
son: El discurso del
respecto dice: “Advertí que, mientras yo quería pensar que todo era falso,
sitaron la Psicología, en particular, y las ciencias humanas, en general, para método,
era preciso que yo, que lo pensaba, fuera algo. Y observando que esta ver-
poder alcanzar la autoridad de una ciencia en el sentido que le era recono- Meditaciones
dad: yo pienso, luego soy, era tan firme y segura que no podían conmoverla
cido a la ciencia natural. metafísicas,
todas las mas extravagantes suposiciones de los escépticos, juzgué que po-
Descartes acometió con brío intelectual tanto los problemas atañederos Principios de
a la filosofía especulativa —y por ende a la metafísica- como los que día admitirlo sin escrúpulo como primer principio de la filosofía que yo Filosofía, Las
concernieron a la filosofía práctica. En el campo de la matemática, la apor- buscaba”. pasiones del alma.
tación de Descartes es fundamental y de ella surge la misma filosofía El punto de partida del pensamiento cartesiano es entonces: pienso, luego Sobresalió también
soy. Es evidente que para este pensar la realidad adquiere más peso cuando en Matemáticas y en
cartesiana: la intuición de un sistema de correspondencia entre álgebra y
es pensada que cuando es percibida por los sentidos. Esto quiere decir que la Física. Creador de
geometría, es decir, un instrumento racional y metódico que haga posible
lo que se piensa no es de la misma naturaleza de lo que se siente, Por lo la Geometría
desarrollar cualquier problema de relaciones espaciales, estableciendo una
tanto, Descartes divide al hombre en dos sustancias que son los atributos analítica.
translación numérica de cualquier punto dado del espacio y, al revés, una
representación en el espacio de cualquier ecuación algebraica. La idea bá- esenciales de la realidad y de las cuales se derivan todas las otras propieda-
sica de la geometría cartesiana es el uso del sistema de coordenadas que des. Dichas sustancias son: Pensamiento y Extensión. Pensamiento y Ex-
hoy lleva su nombre y que constituye la base de la geometría analítica. tensión son sustancias de diferente naturaleza y ambas están asociadas con
En el Discurso del Método, Descartes relata el desarrollo y uso de ese la mente y el cuerpo.
Por esta razón, Descartes va a encaminar su reflexión tanto hacia la
método en forma autobiográfica, en un francés claro y amable que está en
consonancia con el estilo de Montaigne y la literatura moral de su época. El sustancia pensante como hacia la sustancia extensa. Los contenidos del pen-
método parte de la duda y pretende superarla, pero la duda no afecta a la samiento son las ideas. Según Descartes, hay tres tipos de ideas, a saber:
confianza prístina que el hombre tiene del buen juicio innato, aunque en su por un lado, las adventicias que son derivadas de los sentidos, que son un
desarrollo esté expuesto a yerros y corruptelas. Pero dicho método, cuyas producto de la sensación y que establecen un puente entre la mente y los
reglas parecen tan fecundas desde una perspectiva matemática, en cuanto objetos reales; por otro lado, existen aquellas ideas puramente mentales o
ROBERTO ENRiQ!
BREVE RESEÑA HISTÓRICA

Jacticias que son generadas por


Dado que no hay duda de que el hombre piensa, en tanto que el acto de
aparecen en los sueños, las fantasías
pensar lo podemos verificar en cada uno de nosotros mismos, tampoco
aquellas ideas que son innatas porque no derivan del conocimiento sensi-
faltan evidencias de que esta actividad es la que ocupa nuestra mente y,
ble ni son una construcción de nuestra mente. Tales i
asimismo, que ese pensar lo hacemos con ideas que son los contenidos del
directamente como principios básicos del conocimiento. Esas ideas se nos pensamiento. Esas ideas que forman nuestro entendimiento las obtenemos,
presentan como ideas “claras y distintas
en primer lugar, de las sensaciones, ya que son éstas las que nos proporcio-
llegara ellas a través de esa maraña de otras ideas que hay en nuestr
nan las ideas simples, que a su vez proceden de la relación entre el objeto y
te. Ideas Innatas son las del Pienso,
nuestros órganos sensoriales. Este proceso de formaciones de ideas sim-
Curva Geométrica, etc.
ples es pasivo, de modo que las ideas se imprimen en nuestra conciencia sin
Sucintamente podemos decir que, para Descartes, e La corriente
que haya actividad del entendimiento.
depende de la experiencia sensible, sino que conocer consiste en descubrir
Una segunda fuente de las ideas es la reflexión, que es la actividad de la empirista tuvo
por el acto de pensar, en
mente y del entendimiento respecto a las ideas simples, referidas a los ac-
cipios básicos que son innatos y que serán una gran
tos de dudar, creer, razonar, querer, etc.
samiento cartesiano nos ha dejado como herencia
ciones filosóficas que se oponen a e
Es decir es la capacidad de nuestra mente de tomar posición respecto a influencia en el
las ideas. Basándose en los datos aportados por los sentidos, la razón puede
sustancia pensante — sustancia e pensamiento
transformar —mediante determinadas operaciones mentales las ideas sim-
desde diversos puntos de vista y
ples en ideas complejas. De manera que Locke no necesita recurrir a las psicológico, en
cuestiones y controversias, como.
ideas innatas de Descartes para explicar los procesos por los cuales se aquellas
cuerpo que lo sigue siendo hasta el punto de que la Medicina se ha ocupado
forman las ideas complejas en nuestra mente. En otras palabras, para Locke
del cuerpo y la Psicología de la mente, olvidándose, tanto una como otra
todas las verdades son adquiridas. De ello se sigue, en consecuencia, que corrientes que
ciencia, que el hombre constituye una unidad que ni siquiera es dual.
postula un punto de vista que es francamente opuesto al planteado por el asumieron una
de las cuestiones que la Psicología deberá plantearse es la de si el conoci-
pensamiento cartesiano, toda vez que, como vimos, Descartes sostiene que
miento es innato o es adquirido, división que franca posición
las verdades son innatas.
en Descartes, reparte las posiciones de
Por su lado, en el pensamiento de Hume prevalece la posición empirista empirista y
que había sido adoptada por Locke. Pero Hume establece una diferencia
asociacionista
entre impresiones e ideas. Afirma que las ideas están formadas por impre-
2.3. La Posición Empirista
siones y que estas impresiones se relacionan con las sensaciones (de color, como por
Contra la posición filosófica adoptada por René Descartes van a reac-
sonido, sabor, etc.) y surgen de la excitación de los sentidos. Aparece en la ejemplo el
cionar los empiristas, vale decir, aque relación de las ideas y las impresiones el concepto de asociación, la que se
produce de tres modos: por semejanza, por cantidad, por causa y efecto, Conductismo.
conocimiento se adquiere media
tanto, se opusieron a la teoría de las ideas innatas, Nos ocuparemos aquí de
etc. Si esto es así, entonces las impresiones serían los elementos o átomos
con los cuales se construyen todas las ideas. Por esta razón, estas concep-
dos de los pensadores que defendieron
(1632-1704) y David Hume (1711-1776) ciones son llamadas, indistintamente, empiristas, asociacionistas,
elementaristas o atomistas.
Locke se propuso estudiar la vida mental y sus contenidos -
y, al mismo tiempo, esclarecer el modo en que se producen dichas ideas en La corriente empirista tuvo una gran influencia en el pensamiento psi-
cológico, en aquellas corrientes que asumieron una franca posición empi-
nuestra mente. De ahí que, en e
considerarse como una suerte de tratado de Psic
rista y asociacionista como por ejemplo el Conductismo. No obstante, el
analítico. Nos referimos a su Ensayo sobre el entendimiento
pensamiento del empirismo inglés tuvo eco en Francia a través de Condillac
humano
quien, en su Tratado de las sensaciones, se basa en la posición empirista
Para Locke el conocimiento se adquiere mediante
razón. Por eso puede afirmar que
para explicar las operaciones mentales.
No olvidamos a otros pensadores como Berkeley, cuyas ideas influye-

[701
RoBerto ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ BREVE RESEÑA HISTÓRICA

ron notablemente en el pensamiento posterior, pero no es nuestra intención mientras que aquel, en cambio, va a suprimir el dualismo de Locke, postu-
construir una historia de la Psicología, sino, simplemente, señalar algunos lando que el origen de todas nuestras ideas es único.
hitos fundamentales que podemos presentar como antecedentes de esta cien- Cuando se analizan las ideas que Locke llama internal sense (sensacio- Locke J.
cia. Siguiendo esta misma línea del empirismo, debemos enfatizar la gravi- nes internas) es dable observar que éstas no mantienen una relación con la (1632-1704)
tación que estas ideas tuvieron sobre el pensamiento psicológico de su épo- percepción, en tanto que Condillac afirma que, por el contrario, guardan Médico y filósofo.
ca y de tiempos posteriores a través del pensador francés Condillac (1715- relación, concluyendo que la única fuente de las ideas es la percepción. En Profundizó en la
1780). Discípulo de Locke, es reconocido como un filósofo del /luminis- esto tamnbién sse distingue de Descartes, para quien, como se recordará, las obra de Descartes.
mo, aunque alejado del racionalismo tanto de Descartes como de Spinoza, ideas derivan de varias fuentes, a saber: las ideas innatas, las de la percep- Entre sus obras
puesto que la razón es, para Condillac, una suerte de instrumento que le ción se — e y las elaboradas por nuestra mente. Para sustentar su posi- podemos citar:
presta cierta utilidad, pero con todo no es a su juicio el más poderoso. ción, Condillac recurre a la alegoría de la estatua. Se trata de una estatua a Ensayo sobre el
Condillac retoma los problemas antes planteados por Locke en relación la cual se le van incorporando sucesivamente los distintos sentidos físicos, entendimiento
con el problema del conocimiento, en un intento por encontrar el origen, la de manera que los conocimientos irán surgiendo en el alma de la estatua a humano donde
capacidad y los límites del entendimiento humano. Empero, la diferencia medida en que los sentidos la conectan con el mundo exterior, resume sus
entre Condillac y Locke reside en que para éste el conocimiento se adquie- meditaciones.
re a través de dos fuentes: la sensación y la reflexión, como ya hemos visto;
2.4. La creación de las Ciencias Humanas

omo hemos dicho precedentemente, la filosofía Cartesiana marca un


Hume, David (1711-1776)
momento histórico fecundo al crear las posibilidades para que se asienten
Filósofo y Psicólogo inglés continuador d E pinsmo de Locke,
las bases de las ciencias humanas, puesto que le permite al hombre tomarse
sienta las bases del asociacionismo a través de sus tres leyes: conti-
como objeto de estudio y referirse a cuestiones de índole psicológica. Sin
guidad, semejanza, causalidad. Como filósofo empirista, Hume sos-
Aa que todo conocimiento en última instancia procede de la ex- profundizar en las cuestiones que han contribuido a la creación de las Cien-
cias del Hombre, podemos decir, no obstante, que tanto el Racionalismo Condillac
periencia: sea de la experiencia externrna, aquella que deriva de los (1715-1780)
sentidos, sea de la experiencia íntima, la autoexperiencia. Definió Cartesiano como el Empirismo (del gr. empeiría: experiencia) han concu-
rrido parejamente como o s que incidieron en el desarrollo del estudio Su nombre fue
enos psíquicos como percepciones del espíritu (donde percepción es Etienne Bonnot,
o de cualquier estado de consciencia). A las percepciones que se reciben sistemático de la ciencia, al mismo tiempo que brindó la oportunidad de
abate de Con ac,
directo las llamó impresiones, y las dividió en impresiones de la sensa- que el hombre emprendael estudio de sí mismo como objeto de la ciencia.
estudia en La
que vienen del oído, el tacto, la visión, el gusto, el olfato), e impresiones Cuestionando las ideas innatas —aquellas ideas que como sostuvo Des-
Sorbona y en Saint-
lexión (las de nuestra propia intimidad, como el estado de alegría o cartes no cran fruto de nuestra experiencia sensible sino que debían ser
Sulpice. Estudia
Estas impresiones, o representaciones originarias, se diferencian de las descubiertas dentro de nosotros mismos a través del método para que se
Letras y Filosofía,
iones derivadas, que llamó ideas (los hechos de la memoria o de la fan- hicieran claras y distintas al ojo de la razón—, el empirismo inglés asumió escribe varias obras
diferencia entre las impresiones y las ideas es de intensidad o “Tn una posición contraria afirmando que el entendimiento se logra por ese de las que
a esta actividad el espíritu no responde a otra legalidad que a la de ntacto con la experiencia, ya que es de ella de donde van a surgir las señalaremos: La
asociación de las ideas, donde las ideas “complejas se producen o ideas y la verdad. lógica, publicada
n de ideas simples. Podemos hacemos una idea compleja, como la de La discusión ha sido impulsada por renovados ímpetus, dado que cuan- póstumamente y el
taña de oro”, porque tenemos las ideas simples de “montaña” y “oro” — do filosóficamente se habla de “ideas innatas”, también débese aclarar que Tratado de las
rado. Su obra principal es Investigación sobre el entendimiento humano. se quiere expresar, que significado tiene el término “idea”, y, finalmente, sensaciones.
mo una hipnosis inútil y la reemplaza por una psico- reguntarse: ¿es la idea algo que está referido al pensamiento o al senti-
as actividades mentales. De él dijo Kant: “Hume fue quien, hace mu- miento?, ya que si bien los empiristas no aceptan la existencia de ideas
s, me despertó de mi sueño dogmático” : nnatas respecto al pensamiento, admiten que si existen, en cambio, en rela-
ón con los sentimientos.

[31]
Durve RESEÑA HISTÓRICA
RosBerro ENRIQUE Coscto - José FERNANDO SÁNCHEZ

ndo un carácter científico con independencia de la Filosofía. En


De estas controversias trabajosas surgieron los problemas que las cien-
I4H0 se inicia la enseñanza sistemática de Psiquiatría en la Cátedra de
cias del hombre tendrán actualmente que resolver, particularmente, la psi-
cología. Para dejar planteada la cuestión que iremos resolviendo a lo largo Medicina Legal, en la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos
Aires, Surgen así, en pocos años, la Cátedra de Patología Mental (1886), la
de nuestros desarrollos debemos decir, a modo de ejemplo, que de estas
de Enfermedades Nerviosas (1888) y la de Clínica Psiquiátrica (1893). En
discusiones surgen conceptos como el de Asociación. En efecto, dicho con-
cepto fue introducido por el empirismo para explicar la formación de ideas 1942 se funda —a instancias del Dr. Loudet— el Curso Superior de Medicina
complejas, porque, según Hume, las ideas establecen “vínculos secretos”, Psiquiátrica y, en 1953, la Cátedra de Psicología Medica de la Universidad
de Buenos Aires, cuyo profesor titular era el Dr. César Castillo.
haciendo que determinadas ideas se asocien con mayor frecuencia. Pichón Riviére,
Por lo tanto, una primera cuestión es aquella que está referida al Respecto a las Sociedades Científicas digamos que, en 1910, se funda
la Sociedad de Psiquiatría, Neurología y Medicina Legal, en 1923 la Socie- Enrique
asociacionismo, que a su vez remite al elementarismo, esto es, a la posibi- (1907-)
dad Argentina de Neurología y Psiquiatría y en 1959 la Federación Argen-
lidad de explicar los fenómenos por una reducción a sus elementos consti- Nacido en Ginebra
tutivos y de reconstruir las unidades más complejas por asociación. Este tina de Psiquiatras. En cuanto a las Instituciones privadas dedicadas al tra-
tamiento de las enfermedades mentales, se crea en 1880 el Instituto
emigró de niño a la
punto de vista sobre el que se apoyan los empiristas -muy cuestionado por Argentina donde
los racionalistas— sigue sirviendo de base a diferentes concepciones psico- Frenopático bajo la dirección del Dr. Ramos Mejía; en 1948 el Dr. Enrique
estudió medicina
Pichón Riviere funda el Instituto de Medicina Psicosomátical, y, en 1959,
lógicas actuales, sobre todo aquellas que sostienen que es factible reducir recibiéndose en
los hechos a sus componentes mínimos, mientras que otras concepciones,
el Centro de Psicología y Psiquiatría Infantil del Instituto de Pediatría, diri- 1936, año en que
pido por la Dra, Telma Reca. comenzó a trabajar
por el contrario, afirman que dicha simplificación no es posible.
Tales discusiones, que suelen generarse desde el campo de otras cien-
En 1896 surge la Primera Cátedra de Psicología Experimental en la en el Hospicio de las
cias humanas —como la Medicina, p. e., que comenzó a tener un auge ex- Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires, y, entre Mercedes. En 1937
sus profesores titulares, se encuentran los Doctores Rodolfo Rivarola, José se casó con Arminda
traordinario a partir del siglo XVI como una de las ciencias del hombre-,
N. Matienzo y Antonio Dellepiane. En 1901 obtiene la titularidad el Dr. Aberastury. En 1940
serán las encargadas de responder a los interrogantes planteados por estos
Horacio Piñeiro, mientras se hacen gestiones para comprar instrumental al comenzó su análisis
pensadores.
proveedor del Laboratorio de Leipzig y abastecer al laboratorio donde cum- didáctico con Angel
plía funciones académicas y de investigaciones psicofisiológicas; el renom- Garma.
we científico alcanzado obligó a que se desdoblara en una segunda cáte-
2.5. Historia de la Psicología en La Argentina
era ro, a cargo del Dr. Félix Krueger (discípulo de Wundt) y. luego.
«del Dr. José Ingenieros. Entre sus más célebres investigadores se inscriben
Con la finalidad de realizar un escrutinio histórico acerca de cómo fue-
los Doctores José Alberti. León Ostrov y Enrique Mounchet, quienes desa-
ron establecidas las bases de la Psicología Científica en nuestro país, ha-
bremos de recurrir a algunos datos que consideramos significativos. Estos » sus estudios sobre las emociones y sentidos. En 1898 se crea el
torio de Psicología Experimental en el Colegio Nacional de Buenos
vestigios pueden ser rastreados en los anales de algunas disciplinas afines,
Mires
en los archivos de ciertas entidades académicas, hospitalarias y científicas.
Y.i desde 1900 comienzan a surgir Laboratorios y Cátedras en diversas
Las dos vertientes que contribuyeron a la formación de las bases de la psi-
Facultades y Universidades del País, como, por ejemplo, en 1910 los cur-
cología en nuestro país son la Filosofía y la Medicina. De la primera ver-
sos de Psicología en las Facultades de Derecho de Buenos Aires y de Rosa-
tiente, la filosofía, se desprende en general una visión del hombre por la
río, En 1914 el Laboratorio de Psicología Experimental y Psicopedagogía
que se accede al conocimiento psicológico de las patologías mentales. Hoy
en la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universi-
manejamos un concepto más amplio de la psicología aplicable a las diver-
dad de la Plata, codirigido por los Doctores Carlos Melo y Víctor Mercan-
sas acciones e interacciones humanas.
te, En 1926, el Laboratorio de Psicología —anexo a la Cátedra de Legisla-
La Psicología Filosófica Escolástica comenzó a enseñarse en la Univer-
ción del Trabajo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad
sidad de Córdoba desde su fundación en el año 1621, para desarrollarse
con posterioridad en la Universidad de Buenos Aires y en diversos Institu- de Buenos Aires—, donde el profesor titular era el Dr. Alfredo Palacios.
tos Educativos de formación docente. Recién a principios de este siglo fue
Cabe resaltar el aporte hecho por el Dr. Palacios, quien a través de la publi-

[33]
RosBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ BREVE RESEÑA HISTÓRICA

cación de su trabajo sobre “La Fatiga”, primero desde su lugar de catedrá- En la historia de la Sociedad Argentina de Psicología, entre sus miem- Garma, Angel
tico y posteriormente desde su banca de Senador Nacional, llamó la aten- bros activos y honoríficos más eminentes figuran los Doctores: Alfredo (1904-)
ción respecto a la conveniencia de someter los trabajadores a un examen Calcagno, Carlos Bunge, Horacio Piñeiro, Carlos Melo, Rodolfo Senet, Médico español, se
psicofisiológico obligatorio. Gracias a esta iniciativa del Dr. A. Palacios Víctor Mercante, José Borda, Carolina Tobar García, Wolfgang Kóhler, formó en psiquiatría
tuvo lugar en 1925, por decreto del Poder Ejecutivo Nacional, la creación Bernardo Houssay, Bela Székely, Emilio Mira y López, León Ostrov, An- especializándose en
del Instituto de Psicotécnica y Orientación Profesional, que estuvo a cargo gel Garma, Juan Cuatrecasas, Telma Reca, Mauricio Knobel, Miguel Herrera Alemania, donde
del Dr. Carlos Jesinghaus (discípulo de Wundt) y se mantuvo funcionando Figueroa, Jean Piaget, José Bleger, Oscar Oñativa, Enrique Pichón Riviere, incursionó en el
hasta 1931, año en que quedóse sin presupuesto bajo el gobierno de facto Arnaldo Rascovsky, Nuria Cortada, entre muchas otras personalidades del Instituto
del Gral. Uriburu. quehacer de la Psicología Científica en nuestro medio. Y entre sus presi- Psicoanalítico de
En 1932 se creó el Gabinete Psicofisiológico de la Base Aérea Militar dentes los Doctores Enrique Mouchet, Osvaldo Loudet, José Alberti, Juan Berlín, lugar donde
de Palomar, cuya función era regular el ingreso —mediante un examen de KR. Beltrán, Humberto Bono y, actualmente, Mario Coscio.
conociera a las
selección y aptitud— de los aspirantes a la aviación militar y civil, y super- grandes figuras del
En 1938, con la llegada a La Argentina del psicoanalista español Angel
visar —por un examen de control— a los pilotos en actividad. En 1942 se psicoanálisis,
Garma, conjuntamente con quienes venían bregando por difundir el psi-
crea el Instituto de Psicología Experimental de Cuyo, a cargo de la Dra. teniendo a Theodoro
coanálisis en nuestro medio, entre quienes se distinguen Arnaldo Rascovsky,
Nuria Cortada y el Dr. H. Rimoldi. En 1943 tres cátedras de Psicología en Reik como analista y
Enrique Pichón Riviere y Celes Cárcano, comienza a gestarse la Asocia- profesor. Luego de
la Universidad de Tucumán, Facultad de Filosofía y Letras. En 1956 se ción Psicoanalítica Argentina (A.P.A.), que se funda en diciembre de 1942, un breve período en
crea la Carrera de Psicología en la Universidad de Córdoba; en 1957 la uniéndose a los ya mencionados la Dra. María Glas de Langer, proveniente París, donde conoció
Carrera de Psicología en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universi- de Viena. Estos cinco científicos fueron designados como los primeros miem- a Celes Cárcano,
dad de Buenos Aires; y en 1958 la Carrera de Psicología en la Universidad bros y docentes titulares de la Asociación. emigró a Argentina
de Cuyo. En 1958 los Doctores Angel Garma y Arnaldo Rascovsky fundan en 1938.
el Centro Promotor de la Formación Psicológica en la Universidad de Bue-
nos Aires. En 1962 se funda la Asociación de Psicólogos de Buenos Aires.
Nos parece importante señalar, para resaltar aún más la (mproba tarea
de los pioneros en la Psicología de nuestro país, que recién en 1985 fue
sancionada y promulgada la Ley N* 23.277 que regula el ejercicio profe-
sional de la psicología, sobre la que hablaremos más adelante. En 1908 los
Doctores Francisco de Veyga, Horacio Piñeiro y José Ingenieros, fundaron
la Sociedad de Psicología de Buenos Aires, con el objetivo de aunar estu-
dios e investigaciones entre las distintas áreas científicas que tienen rela-
ción con la Psicología. Si bien su duración fue un tanto efímera (hasta 1912),
integraron sus cuadros los más renombrados científicos y académicos de la
Epoca. Y además sentó las bases de la fundación, el 8 de agosto de 1930 de
la actual Sociedad Argentina de Psicología, cuyo primer presidente fuera el
Dr. Enrique Mouchet, y que continúa hasta hoy con el objetivo de promo-
ver investigaciones, congresos, y de propiciar en el ámbito académico el
estudio sistemático de la Psicología, ya que en esos años se reducía a dos
cursos del plan de estudios de la Facultad de Filosofía y Letras, y otros dos
cursos de Psicología General y de Psicopedagogía en la Facultad de Huma-
nidades de la Universidad de La Plata. Como se ve, no existían hasta enton-
ces Profesorados ni Carreras en Psicología, y la bibliografía era sumamen-
le escasa y poco específica.

[35]
3. EL NACIMIENTO DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA

3.1 Antecedentes

A principios del siglo XIX comienza a prevalecer en el pensamiento


europeo la tendencia a lo positivo, que había surgido como una oposición
al punto de vista metafísico hasta entonces sustentado por la filosofía, y
con este predominio del positivismo, en consecuencia, el pensamiento cien-
tífico asume la función de garante de la verdad. Esta era una época en la
que los pensadores se mostraban preocupados por los problemas relaciona-
dos con la medición y la demostración experimental. Esta preocupación se
hizo extensiva, incluso, al campo de la Psicología. Se trataba de medir las
funciones del alma (la que era considerada como un ente físico, susceptible
de medirse en el laboratorio) y para ello era menester separar el concepto
de alma de sus connotaciones metafísicas, ya que éstas no eran demostrables
en la experiencia.
Las ciencias como la Física, La Química, La Astronomía, ejercen un
predominio importante sobre todo el conocimiento y, encerrándolo en los
límites de sus propias metodologías, determinan lo que debe considerarse
científico y lo que no. Se va imponiendo entonces en el ámbito de la ciencia
el problema de la medición y de como resolverlo, pero, al mismo tiempo,
se echan dudas sobre todo aquello que no puede ser cuantificado ni medi-
do. Se recurre a los hechos, porque las ciencias son ciencias de los hechos.
Derivado de los problemas de la física, para la medición de fenómenos
ópticos, el estudio experimental de la percepción lleva a la conclusión de
que la percepción es un fenómeno psicológico. Es a raíz de la coincidencia
en estas cuestiones de la percepción que Física y Psicología se van a encon-
trar en el laboratorio.
Simultáneamente, en Inglaterra, hay pensadores que, como John Stuart
Mill (1806-1873), van a poner nuevamente de relieve la cuestión psicoló-
gica planteada en torno a la generación del conocimiento. Aparece así una
corriente de pensamiento que revitaliza el empirismo, dado que Stuart Mill
va a retornar sobre cuestiones que ya habían sido planteadas por Locke y
Hume. Otro de los intentos muy característicos de la época -desarrollado
sobre todo en Francia a través de los denominados Enciclopedistas

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ROBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ EL NACIMIENTO
DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA

(D'alembert, Bayle, etc.)— estaba centrado en la tarea de unir todos los los trabajos que en relación con las sensaciones llevó adelante E. H. Weber
conocimientos humanos en un sistema único y coherente, partiendo de las (1795-1878), intentó formular matemáticamente la relación entre la sensa-
ciencias naturales (Física, Química, Biología, etc.). Con ello, se quería lle- ción y el estímulo que le había producido. De los trabajos de estos dos
gar a los fundamentos mismos de todo el saber humano. De este intento pensadores ha quedado, en psicología, la ley de Weber-Fechner basada en
surgirá, por ejemplo, la “Gran Enciclopedia” donde D'alembert anunciaba la relación entre la sensación y el estímulo que la provoca. Es conocida
que había llegado el siglo de las ciencias y, por ende, el fin de la especula- también como Ley del Umbral, ya que ambos investigadores descubrieron Gustav Fechner,
ción metafísica. que para provocar un cambio en la sensación, el estímulo debe pasar de un quien había
En la misma época, Augusto Comte (1798-1857) funda el movimiento determinado umbral. Fechner postula incluso que la sensación es directa-
positivista. Este pensador se propuso organizar lo social fundamentándolo mente proporcional al logaritmo del estímulo y la formula de la manera
retomado los
en las ciencias. Para Comte la historia humana atraviesa inevitablemente siguiente: trabajos que en
por tres estados sucesivos, a saber:
relación con las
S=KlogE+C
* Teológico donde sensaciones llevó
* Metafísico S = sensación adelante E. H.
* Positivo K y C = son constantes
E = estímulo
Weber (1795-
Por lo tanto, para este pensador, el momento histórico que se vivía en el 1878), intentó
siglo XIX era el momento del positivismo que había dejado atrás al pensa- Por lo tanto se introduce en el seno de las cuestiones psicológicas el
miento religioso y la especulación metafísica. Por lo tanto, era el momento formular
problema de la medición y la posibilidad de llevar las leyes a la formula-
de basar el conocimiento en lo científico, que consiste en despreocuparse ción matemática. La cuestión que se plantea aquí es saber si los fenómenos matemáticamente
de aquel aspecto trascendente que puedan tener los fenómenos y preocu- psíquicos son susceptibles de una medición, vale decir, si permiten que se
parse, en cambio, por encontrar las conexiones y relaciones que el fenóme-
la relación entre
los reduzca a leyes que puedan formularse matemáticamente. El tema sigue
no presenta en el laboratorio y mediante la experimentación. y seguirá siendo objeto de controversias, puesto que para algunos pensado- la sensación y el
En Alemania cobra una gran fuerza la corriente Psicofísica que había res la medición es posible (psicofísica), mientras que para otras corrientes estímulo que le
hecho el intento de establecer relaciones entre los hechos físicos que la medición es imposible, toda vez que las sensaciones no dependen exclu-
actuaban como estímulos y los hechos psíquicos que resultaban de la exci- sivamente del estímulo sino de otra cantidad de variables subjetivas que
había producido.
tación física, y, al mismo tiempo, poder establecer los mecanismos de esta hacen imposible determinar a priori como será el comportamiento de un
relación mediante leyes. Gustav Fechner (1801-1887), quien había retomado sujeto frente a un estímulo.
La Psicofísica tiene una importancia que es indubitable, más allá de la
formulación matemática, debido a que con sus investigaciones ha posibili-
tado que la Psicología se centre en problemas objetivos y en ella encontra-
er, Gustav Throdor (1801-1887) mos el antecedente de la Psicología Científica que surge cuando consigue
soto y Físico alemán, quien en determinado momento se interesó por estu- desprenderse de la filosofía. El que asume la tarea de transformar a la psi-
relación existente entre el estímulo físico y la sensación, investigando cuán cología en una ciencia autónoma es Wilhelm Wundt (1832-1920), quien
o debe ser el estímulo para impresionara nuestros sentidos. Basándose en partiendo de los trabajos de la Psicofísica y los aportes de la Fisiología y de
de Weber (el aumento del estímulo necesario pora producir un aumento de la Astronomía, crea una psicología de laboratorio que se ocupa de los he-
sación se mantiene en relación constante con el estímulo total). Formula la chos y somete esos hechos al método experimental. Entonces se reconoce
posteriormente se llamó Ley de Weber-Fechner que expresa: si la sensa- en Wundt al creador de la Psicología Científica cuando, en 1878, inaugura
rece en progresión aritmética, el estimulo debe crecer en progresión el primer laboratorio de Psicología Experimental en Leipzig. Posteriormente
frica. , se crean otros laboratorios experimentales para observar los fenómenos
que estudia la psicología en otros países del mundo. Wundt, que estudió
MIENTO DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA
Medicina y Filosofía, había sido alumno de Von He mhaolt
vés de ella es posible la inspección del interior (la concien
Experto en temas de conducción nerviosa cia) del
La Astronomía había planteado un problema que vestigado. Sin duda, esta observación no es capaz de proporcionar
ción completa sin que deje de estar teñida por el factor subjetiv
y tenía íntima relación con estos temas de o.
ue contribuyó de una manera fervorosa para que la Psicolo
lidad. El problema que gía
ca se apoye en un método experimental fue Théodule
que cuando el astrónomo calculaba las velocidades de
los cuerpos celest Ribot (1839-
gracias a este impulso se crea, bajo su inspiración, una
4 través del anteojo astronómico— cátedra de
decirlo así—, razón por la que se pueden descubrir errore gía experimental y comparada” en el Colegio de Francia.
s entre las distintas » vemos, la Psicología Científica logra afianzarse y transfo
mediciones hechas por diferentes astrónomos rmarse
encia autónoma que es capaz de producir sus propias metodol Wundt W.
ducía un margen de error que dependía de ogías,
bién, fundamentalmente, preparada para operar como una (1832-1920)
observador, lo cual ob cien-
puede observar los hechos de un modo objetivo, mensur Filósofo y Psicólogo
este tipo de errores. Este problema también había
mot vado able y ex-
alemán. Fue
Wundt, quien, por otra parte
profesor de Filosofía
teorías relacionadas con
de la Universidad de
trabajo titulado Fundamento de psicología Fisiol
ógica Leipzig. En el año
de Leipzig, Wundt acomete e Psicología Científica
1874 publicó una
psíquicos y los procesos fisiológicos que obra Principios de
n la fundación del primer laboratorio de Psicología experimental,
en un “paralelismo Psicofísico psicología
se referían a consideraciones sobre cuestiones como tablece las bases de la Psicología Científica. Este hecho reviste fisiológica, donde
as que enumeramos a
continuación: n importancia en la historia de la Psicología porque le permite a los resume las vertientes
psicológicos pasar desde la especulación filosófica hacia la expe- psicológicas y
* La Psicofisiología de ón científica, en un intento de igualar sus posibilidades de inves- fisiológicas de la
* El tiempo de reacción a s ciencias naturales. Para que ello ocurriese, era necesario época. Se lo
* Laasociación menta gía estudiara un objeto físico, dado que el alma —considerada reconoce como el
encias naturales como un objeto Metafísico— es irreductible
al creador de la
e cualquier método empírico. Wundt se encontró frente Psicología Científica
La Psicología experime al dilema
losófica —con meaba el propio objeto de estudio de la psicología: la “experi y del primer
en-
or” no era separable de la “experiencia exterior”, Para superar laboratorio de
£los— y conduce al laboratoric esta
Wundt postula que los hechos físicos suscitan en nuestra percep- Psicología
nes de la Psicología. Pero e
sentaciones que no son otra cosa que una referencia a los propios Experimental en
ron estos investigadores
exteriores. Según Wundt: Leipzig.
sensaciones se manifes
, debían estud
epresentaciones cuyas propiedades intenta investigar
los estímulos. Habida cuenta de que era la psicolo-
son las mismas que aquellas de las que parte la investig
pensó que se podía acceder a e ación de la
raleza; y las emociones subjetivas, que quedan fuera de la
miento que ya había sido ut con
concepción científico-natural de las cosas, los sentimie
n-
transformó metodológicamente s emociones, los actos volitivos, no se nos dan mediante Órganos
eptivos especiales, sino que se unen, para nosotros, de modo
El método experimental supone una observación objetiv
a y mensurable direc-
e inseparable con las representaciones referidas a objetos
del objeto estudiado (por ejemplo: exterio-
medio de un electrocardiograma), de modo que la respues
ta también debe-
ría ser objetiva y mensurable.
ciencia. De ahí que resultara uencia, con arreglo a lo anteriormente citado, la “experiencia
mo objeto de estudio de la Psicología es inseparable de la expe-

ras:
ROoBErTO ENRIQUE Coscio - JosÉ FERNANDO SÁNCHEZ EL NACIMIENTO DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA

riencia general, de su índole directa e inmediatamente subjetiva. Por lo que es evidente de que en este terreno es harto complicado hacer
tanto la psicología debió inevitablemente recurrir al método experimental, formulaciones matemáticas dada la cantidad de variables que intervienen y
4 fin de poder controlar la experiencia y observar los procesos subjetivos. tornan prácticamente imposible cualquier suerte de formulación. Además,
La mera introspección no era suficiente, ya que los procesos psíquicos, ¿cómo podría efectuarse un control experimental similar al que emplean
como cualquier otro objeto de estudio científico, debían ser sometidos a un las ciencias naturales cuando el objeto de estudio de las ciencias sociales y
control experimental. Cabría preguntarse si la Psicología puede ser consi- la psicología son los seres humanos, y, por ende, los modos de relacionarse
derada como una ciencia natural en el mismo sentido que es estimada la con grupos, multitudes, etc.? Asimismo, ¿cómo controlar experimentalmente
Física, Para contestar a esto, antes es necesario saber que clase de conoci- las variaciones de las emociones, los sentimientos, los afectos, etc.? Entre las nuevas
miento implica la ciencia natural, y, fundamentalmente, averiguar cuál era A lo largo de nuestros desarrollos, iremos viendo cómo esta rigurosidad
concepciones
el concepto de ciencia que predominaba a fines del siglo pasado, que coin- exigida por la Física, en su calidad de ciencia experimental, habrá de sufrir
cide justamente con el momento en que nace la Psicología. Dejaremos pen- un colapso que producirá, en nuestro siglo, un profundo replanteo acerca que
diente, para más adelante, la crítica profunda que Bachelard hace a este de cuáles deben ser las características que definen una ciencia.
revolucionaron el
modelo de ciencia.
Quizás no huel gue aclarar que la ciencia que cumplía con los requisitos Universo de la
necesarios, para ser considerada como tal, era la Física. La Física era, por 3.3 La psicología a principios de siglo Psicología
lo tanto, el patrón al que las otras ciencias debían ajustarse para adquirir la
reputación de ciencias naturales. Tanto la Psicología como las Ciencias A caballo de los acontecimientos científicos producidos entre fines del podemos
Sociales, tuvieron inconvenientes para asemejarse al modelo de la ciencia siglo XIX y principios del XX, comienzan a insinuarse en el universo psi- mencionar, en
física, ya que esta última era considerada una ciencia natural desde los días cológico la presencia de otras disciplinas que, de un modo u otro, van a
primer lugar, al
de Galileo Galilei y, por lo tanto, gozaba de una autoridad indiscutible. El romper con el criterio convencional de que la psicología debía ser una ciencia
propio Kant consideraba que la psicología, como ciencia del alma, debía que debía limitar su objeto de estudio simplemente a las vivencias subjeti- Psicoanálisis
adaptarse al molde de la ciencia Física, de modo tal que todas sus investi- vas y utilizar para sus asedios científicos el método de la introspección. En
(1895), cuya
gaciones debían estar basadas en la observación sistemática de la realidad, consecuencia, también fue severamente cuestionado el criterio que reducía
la experimentación, la delimitación perfecta del objeto y metodología ex- los fenómenos de conciencia a meros contenidos elementales, que hacía principal
perimental. suponer que los fenómenos complicados o complejos podían ser estudia- innovación fue la
Es menester señalar que esta observación sistemática de la realidad y dos por sus componentes más simples, siguiendo una orientación señalada
ese recorte por el que el científico transforma a la realidad en objeto de por el empirismo que, como ya habíamos visto, se hacía eco del criterio de postular al
estudio de la ciencia, parte del supuesto de que la observación constituye el elementarista. inconsciente
objeto. La experimentación se fundamenta en la posibilidad de repetir una Es entonces cuando aparecen en el campo de la Psicología, concepcio-
como objeto de
experiencia en las mismas condiciones o variando las condiciones según la nes que van 4 oponerse a ideas hondamente arraigadas en el pensamiento
necesidad del científico. El científico es quien rodea de seguridad esas con- científico, incluso en el de los propios investigadores y experimentadores estudio de la
diciones, desarrollándolas en un ámbito apropiado (en general el laborato- en el terreno de la psicología. psicología.
rio) donde se pueda repetir la experiencia de una manera controlada. Las Entre las nuevas concepciones que revolucionaron el universo de la
leyes de una ciencia son creadas mediante el método experimental, pero Psicología podemos mencionar, en primer lugar, al Psicoanálisis (1895),
para ser tenidas por tales deben poseer validez universal. cuya principal innovación fue la de postular al inconsciente como objeto de
Esta forma de proceder era normativa para la Física y por lo tanto cual- estudio de la psicología. La ruptura epistemológica que el Psicoanálisis va
quier disciplina que aspirase a ser convalidada como científica debía cum- a producir con la Psicología de su tiempo, no será una ruptura total, ya que
plir con estos requisitos mínimos. A esto podría agregarse el hecho de que el aparato psíquico postulado por Freud incluye a la conciencia, ora como
la Física podía llevar sus leyes a la formulación matemática y aún describir sistema consciente, ora como cualidad de los contenidos del psiquismo.
la naturaleza con aplicación de aquellas leyes. Esto último sería el obstácu- Con el término ruptura queremos referirnos al hecho de que, para el Psi-
lo más difícil que debieron superar las ciencias sociales y la psicología, ya coanálisis, el psiquismo humano no necesariamente debe coincidir con la

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ROBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ

conciencia, sino que, en el psiquismo, hay una parte inconsciente que es 4. EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO
más abarcadora, razón por la que dicho psiquismo inconsciente no sólo
resulta determinante de la vida psíquica sino, inclusive, de todo lo cons-
ciente. Repitámoslo: con la irrupción del Psicoanálisis se introduce el in-
consciente como objeto de estudio en la Psicología. Más adelante, en el
capitulo correspondiente, volveremos a tratar acerca de los aportes valio-
sos hechos por la Escuela Psicoanalítica.
A principios de este siglo va a producirse otra decisiva ruptura con el 4.1. La ciencia tradicional
criterio que consideraba a la conciencia como objeto de estudio de la Psi-
cología. Dicha ruptura está señalada por la aparición en 1913 del ¿Es la Psicología una ciencia? Y si es una ciencia, ¿lo es en la misma
Conductismo que, de la mano de J. Watson, se instala como escuela en los medida en que podemos afirmar que la Física es una ciencia? Para decirlo
EEUU, Watson, lo mismo que Freud, también rompe de una manera radical de otro modo: ¿es una ciencia a pesar de que no haya coincidencia entre sus
con el criterio que toma a la conciencia como objeto de estudio y objetará, respectivos objetos de estudio ni entre los métodos que se utilizan para su
por lo tanto, la validez de la introspección como método. Hará su impugna- estudio? Tales preguntas nos llevan a responder que dichos requisitos son
ción tanto del objeto de estudio como de la metodología aplicada desde lo mínimo exigible para que una disciplina sea considerada como ciencia.
Galileo Galilei
una posición científica a ultranza, en un intento de llevar a la Psicología al Nos encontramos entonces frente a otro problema, puesto que, cuando
(1564-1642)
terreno de las ciencias naturales, y, para ello, era menester eliminar toda hablamos de ciencia en relación con el concepto que de ella se tenía en el
Uno de los
subjetividad en la comprehensión de los fenómenos psíquicos. Para lograr siglo pasado, bajo el influjo del positivismo, debe concebirse algo muy
fundadores del
ese cometido, propone descartar a la conciencia como objeto de estudio y distinto de lo que actualmente se entiende por ciencia, ya que a lo largo de método
observar en su lugar a las expresiones de la conducta, que, a diferencia de este siglo han habido serios replanteos, en el seno de la ciencia de la natu- experimental. Físico,
la conciencia, eran susceptibles de una perfecta delimitación y de estudiar- mleza, razón por la que resultará muy conveniente ponernos de acuerdo matemático y
se por el método experimental. respecto a cual era el criterio de cientificidad que predominaba en el pensa- asirónomo italiano.
Otra ruptura, aunque siguiendo una dirección distinta al Psicoanálisis y fico del siglo pasado. Sobre la base de esta distinción, podre- Descubrió las leyes
el Conductismo, la va a producir la Psicología del Acto —corriente impulsa- »s desde que perspec "a se sitúan críticamente las concep- de la caída de los
da por Brentano y una escuela que se hizo eco de esa concepción, vigente clones actuales, cuerpos, construyó el
hoy día. presentándola bajo el nombre Psicología de la Gestalt y que, muy »s visto anteriormente que el positivismo surge como una opo- primer anteojo
especialmente, van a oponerse a la Psicología Clásica o Experimental de Imiento científico experimental a la metafísica. En efecto. astronómico.
a del Acto propone estudiar la conciencia sin reducirla el positivismo critica acerbamente a la metafísica debido a su carácter es- Famoso por la
1 contenidos elementales, considerándola antes bien como unidad en la que pr vo. Adi a de ésta, aquel busca el fundamento de la vida hu- defensa que hizo de
el acto de conciencia y el acto de concienciar no pueden ser escindidos, mana a través de la ciencia, considerada como la forma más excelsa y obje- Copérnico.
sino a riesgo de romper el equilibrio. Por lo tanto los actos de conciencia Hiva de conocer. Esta consideración desmesurada hacia la ciencia empírica
no pueden reducirse a elementos sino hay que considerarlos como una uni- Mice de una confianza ilimitada en los descubrimientos científicos y en la
dad total. Mmzón, Es que el positivismo se apegaba a los hechos y a las experiencias de
En los capítulos siguientes vamos a tratar de modo más pormenorizado Inboraorio, concediéndole una importancia inusitada a las ciencias natura-
acerca de los fundamentos de la Escuela gestáltica y la Escuela conductista. les como la física,
Recapitulando lo dicho anteriormente, siquiera sea en unas pocas líneas, Comte, por ejemplo, colocaba por encima de la Física, solamente a las
podemos afirmar que la Psicología ha descartado el alma como objeto de Matemáticas y la Astronomía, aunque, nótese bien, la Astronomía misma
estudio científico, por considerarla un ente metafísico, y en su lugar ha puede ser considerada como una Física del Universo. En principio, el rasgo
preferido ocuparse sucesivamente de la conciencia, del inconsciente y la más saliente de la Física es su carácter experimental y, además, su posibili-
conducta. Las diferentes escuelas de Psicología estudian aún hoy día algu- au de estudiar los hechos sistemáticamente, de manera tal que el científi-
EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO
RoBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ

vimos, bien puede ser considerado tanto un “estado”, en la psicología de


co, el físico, es capaz de controlar de una forma segura las variables que
Wundt, como también un “acto”, en la fenomenología y la Gestalt.
intervienen en la experiencia e, incluso, mensurarlas. Al respecto, podemos
En tercer lugar, la ciencia debe cumplir con la exigencia de la
afirmar que la ciencia experimental nace en el siglo XVII con Galileo Galilei,
verificabilidad. Debe estar en condiciones de poder verificar las hipótesis
ya que fue él quien introdujo la experimentación como método apropiado
que surgen desde la observación y mediante las experiencias que demues-
para allegarnos un conocimiento de los fenómenos. Este primer paso de la
tran su validez. El método idóneo para la verificación de las hipótesis es el
ciencia experimental se completa cuando desde la observación surge una
experimental, ya que le permite al científico, en condiciones controladas,
ley que puede ser expresada en formulaciones matemáticas. Históricamen-
repetir la experiencia y comprobar si la hipótesis es válida o no. Es obvio
te, se trata de un paso fundamental, en tanto que le permite al científico
entonces que el método propio de la ciencia es el método experimental.
trascender los límites de la experiencia.
Otra de las exigencias a la que debía someterse la ciencia, en cuarto
Una consecuencia que se derivó inmediatamente de esta consideración
hacia la ciencia, en las postrimerías del siglo XIX, es que el método expe-
lugar, está referida a su carácter general. Esto significa que las leyes de la Otra de las
ciencia deben aplicarse con la mayor generalidad posible y, en consecuen-
rimental se constituyó en la forma de conocimiento más acabada, rigurosa exigencias a la
cia, el objetivo de la ciencia consistirá en extraer de su experiencia con los
y demostrable, que se hallaba a disposición del hombre. De modo que la
fenómenos, leyes que puedan aplicarse con toda generalidad. que debía
ciencia, para ser tenida como tal, debía presentar las siguientes caracterís-
La ciencia debe cumplir también, en quinto lugar, con el requisito de
ticas: someterse la
ser objetiva. Esto implica que aquello que puede ser observado por un cien-
En primer lugar, la ciencia debe ser analítica. Esto significa que el ob- ciencia, en cuarto
tífico debe ofrecer iguales resultados a la observación de cualquier otro
jeto de estudio debe sufrir tantas divisiones como sean posibles hasta que
científico que repita la misma experiencia. lugar, está
puedan encontrarse sus partes elementales (átomos), las que constituyen lo
Si una disciplina cumple con los requisitos anteriormente expuestos,
esencial del fenómeno. La ciencia debe buscar sin cesar las causas últimas referida a su
entonces, podemos considerarla como una expresión legítimamente cientí-
de su objeto. Recordemos que la psicología de Wundt estudiaba la con-
fica. Pero se echa de ver con facilidad que la Psicología no puede respon- carácter general.
ciencia del mismo modo, vale decir, analíticamente, puesto que también él
dera las exigencias que anteriormente enumeramos, ya que, aun tratándose
buscaba —en los estados de conciencia— los elementos mínimos, atómicos,
de una ciencia, no puede observar un comportamiento ni un procedimiento
convencido de que los fenómenos podían ser reducidos a sus elementos.
«que son propios de una ciencia natural como la física.
Digámoslo sin ambages: las ciencias de la naturaleza eran ciencias analíti-
Llegados a este punto, se impone el tratamiento del tema de la observa-
cas, y, por lo tanto, las ciencias del espíritu también debían serlo. Recorde-
ción. Sabemos que el observador científico es un observador sistemático
mos que contra esta concepción analítica se levantaron críticas que impug-
de la realidad. Sin embargo, cuando el científico observa un fenómeno de-
naron o refutaron la pretensión de querer reducir los fenómenos psíquicos a
terminado, ¿es capaz de mantenerse en una posición totalmente neutral o
meros elementos.
acaso sI presencia influye y modifica lo observado?
Siguiendo con las características que definen el concepto de ciencia,
enpgase en cuenta que para el criterio de la ciencia finisecular, produc-
podemos decir, en segundo lugar. que otro de los rasgos que debía presen-
to de una mentalidad positivista, el científico era un observador privilegia-
tar toda ciencia era el de la claridad. La ciencia no debe utilizar conceptos
do que no influía en el fenómeno, siendo su observación, por lo tanto, pura
ni definiciones ambiguos, el lenguaje científico debe ser técnico y conven-
y heutral, Empero, ¿qué ocurriría si esto no es así; si en lugar de mantenerse
cional a fin de que pueda ser empleado, sin dudas ni confusiones, por todos
en una posición neutral el observador acaba influyendo en el fenómeno?
los miembros de la comunidad científica, entendiendo dichos conceptos o
En tal caso, se hace necesario evaluar cómo influye, saber en qué consiste
definiciones en el mismo sentido, con el mismo significado. Si esta regla
la modificación que su intervención produce. Para el científico de finales
no se cumple el lenguaje de la ciencia estaría viciado de ambiguedad. Nó-
te siglo, como también para la gente aquella época, resultaba obvio el he-
tese al respecto, que la Psicología se encuentra en un estado de ambigtiedad
ho de que el observador científico era un observador privilegiado del fe-
en relación con algunos de sus conceptos, ya que si, por ejemplo, usamos la
hómeno estudiado, al que puede someter a controles y mediciones sin con-
expresión “el hombre” sin ninguna otra especificación, corremos el riesgo
taminario.
de ser interpretados en sentidos muy diversos y contradictorios. Otro con-
Toda la sociedad de ese tiempo estaba de acuerdo, salvo raras excep-
cepto que no tiene una significación unívoca es el de conciencia que, como
RoBerro ENRIQUE Coscio - JosÉ FERNANDO SÁNCHEZ EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO

ciones, de que la ciencia es una forma de conocimiento que es capaz de ciencia tradicional. La ciencia positiva que antes se había rebelado contra
poseer la verdad sobre la realidad que examina y mensura. Sin embargo, la metafísica a causa de su aspiración a un saber absoluto, se ha convertido
paradójicamente, esa misma creencia va a producir, en aquellos días, una ahora en objeto de la misma crítica, acusándola de pretender un saber abso-
profunda revisión de ese supuesto y así se empieza a cuestionar la supuesta luto a partir de ella misma, y esta debilidad, justamente, era vista como un
“objetividad pura” de la ciencia. Estas revisiones de aquel supuesto conlle- síntoma de incapacidad para ejercer la crítica que es tan necesaria para el
van una actitud desmitificadora de la ciencia que, en el fondo, se esfuerza desarrollo de la ciencia. En esta postura revisionista, que intenta promover
por demostrar que la perfección de la ciencia es una ilusión, un ideal espe- un profundo examen de los conceptos y de los métodos de la ciencia, se
cioso. A partir de estas objeciones, ya no se creerá en que el científico sea
sitúa el pensador francés Gastón Bachelard (1884-1962), famoso tratadista
un observador neutro y pasivo, sino que, por el contrario, ha demostrado de la filosofía de la ciencia y del psicoanálisis.
que el mismo termina influyendo en la comprensión del fenómeno que está Digamos, sin demora, que Bachelard es un filósofo formado en el cono-
Bachelard G.
observando. cimiento de las matemáticas y la física, dueño de un estilo fluido y ameno
(1884-1962)
que otorga a sus obras un encanto puramente literario. Se trata, sobre todo,
Filósofo francés.
de un pensador que critica certeramente, con agudeza incomparable, aque-
Después de sus
4.2. Críticas a la ciencia tradicional llas posiciones demasiado inamovibles que se encuentran ya instaladas en
estudios secundarios
el seno de la comunidad científica. Para criticarlas, propone realizar un estudia la
En los capítulos anteriores, hemos visto que es en el campo de las cien- psicoanálisis de la ciencia con el propósito de arrojar desde su interior al- licenciatura en
cias experimentales (física, química, biología, anatomía, etc.) y en el de las gunas cuestiones consideradas irracionales. Oígase este párrafo suyo, espi- Matemáticas y se
ciencias formales (matemática y lógica) donde, a partir de los cuestiona- gado de su libro La formación del Espíritu Científico (1938): licencia en 1912.
mientos profundos que estas mismas ciencias realizaron, se produjo una Enseña de todo un
“Una cultura detenida en un periodo escolar es la cabal negación de la poco en un colegio
modificación sustancial del concepto de ciencia, dando posibilidad a que la
cultura científica. No hay ciencia sino mediante una escuela permanen- de su ciudad natal.
Psicología y las Ciencias Sociales —a las que Dilthey denominó Ciencias te. Esta escuela es la que ha de fundar la ciencia. Entonces los intereses Más tarde se licencia
del Espíritu— encontrasen un lugar propio en el contexto general de las sociales se invertirán definitivamente: la sociedad se hará para la Es-
en Filosofía disciplina
ciencias. En apoyo de lo que acabamos de decir, traeremos a colación un cuela y no la Escuela para la sociedad”
a la cual le dedica
párrafo del cuaderno El Pensamiento Científico de Ludovico Geymourt,
mucho tiempo.
quien nos dice: Precisamente, de Gastón Bachelard tomaremos sus dos conceptos cen-
Decano de la
ales: el Concepto de Ruptura y el Concepto de Obstáculo Epistemológico. Facultad de Dijón.
“En efecto: a medida en que esas ciencias (las natura fueron afinan- slos a continuación: Finalmente en 1940
do sus medios de observación, resultó cada vez más evidente la imposi-
enseña en la
bilidad de encuadrar los hechos observados en los esquemas concep-
tuales elaborados por el pensamiento científico anterior. En consecuen-
Sorbona
4,3. El Concepto de Ruptura
cia, apareció mas evidente que a tales esquemas no les era lícito atri-
buirles aquel valor absoluto que el viejo positivismo. con una conf
demasiado ingenua, les había reconocido”. Hemos visto que para la ciencia tradicional el conocimiento tenía el
carácter de un saber absoluto y que este conocimiento se formaba por su-
La ciencia natural, en particular la Física, realiza una autocrítica en to- perposición de conceptos, por acumulación sucesiva de las verdades que la
dos los aspectos que en ella están involucrados. Esta autocrítica provocará ciencia era capaz de enunciar respecto a su objeto, de modo que todo aque-
no sólo la revisión de aquello que puede considerarse como ciencia, sino llo que resultaba desconocido para la ciencia, permanecía ignoto, según se
que, asimismo, emprende una crítica contra los métodos experimentales ereía, porque aun no se había producido la necesaria acumulación de cono-
basados en la medición y. yendo más lejos, se muestra desconfiada respec- eimientos. Quiere decir que aquello que el científico ignoraba necesitaba
to a la posición neutral del científico. En consecuencia, la ciencia del siglo ie cierto tiempo para llegar a conocerlo, puesto que la ciencia posce la
XX se sumerge en una profunda crisis, que, en el fondo, no es más que una herramienta idónea para obtener ese conocimiento.
crisis de los criterios que sustentan los puntos de vista filosóficos de la
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ROBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO

La ciencia del siglo XX, en cambio, realizó una profunda revisión de por la teoría psicoanalítica supone un Giro Copernicano, ya que así como
los conceptos y teorías que hizo ver que esa posición absolutista era errada. Copérnico le quitó a la tierra el lugar del centro en el universo, él desplazó
Bachelard denominó Ruptura al modo en que avanza la ciencia. Para él, no :1 la conciencia del centro del psiquismo. Adviértase que un postulado como
hay continuidad entre la concepción que de la ciencia se tuvo en el siglo el del Inconsciente debe implicar necesariamente una ruptura con la con-
pasado y la concepción que se tiene en la actualidad. Según Bachelard, la ciencia, precisamente, porque no es profundizando en el estudio de la con-
ciencia avanza por rupturas, mediante discontinuidades que hacen que un ciencia, acumulando conocimiento sobre ella, cómo la psicología puede
conocimiento nuevo no aparezca como un grado mayor de lo que ya nos es abrirse paso hacia el inconsciente.
conocido, sino, precisamente, como una “ruptura” que surge contra lo esta-
blecido, cuestionándolo y abrogándolo como un saber válido. Para decirlo Para Bachelard el
en otros términos, con arreglo al pensamiento de Bachelard, la ciencia avanza 4.4. El concepto de obstáculo epistemológico problema
en la medida en que está sometida a rectificaciones continuas, a críticas
constantes que desatan ásperas controversias, porque es de esta manera
epistemológico
Para Bachelard el problema epistemológico debe plantearse estricta-
cómo se alcanza la verdad en la ciencia. Desde el punto de vista de la mente en términos de obstáculos. En principio, para acercarnos al pensa- debe plantearse
ciencia moderna, el conocimiento involucra un acto que, contrariamente de miento de este epistemólogo, será conveniente que sepamos que concepto estrictamente en
lo que se creyó en algún momento, no nace de la pura contemplación. Con- tiene él de la ciencia. De acuerdo con G. Canguilhem, pueden encontrarse
viene aclarar aquí que, para Bachelard, no existen verdades primeras que en la obra de Bachelard tres axiomas que muestran claramente la estructura términos de
deban ser reencontradas, sino que, en cierto sentido, el modo de conocer de de su pensamiento, que permiten aproximamnos a su idea de la ciencia. El obstáculos.
la ciencia consiste antes bien en la búsqueda del error, más que la de la primer axioma es que lo que impulsa el desarrollo científico no es la verdad
verdad. Se trata de hallar los errores primeros, en lugar de las verdades sino el error. Veamos este pasaje:
primeras,
Nótese que en la misma medida que se produce el avance de la ciencia, “La verdad solo tiene pleno sentido al cabo de una polémica. No podría
ocurre también un retroceso de las teorías anteriores, creando un movi- haber aquí una verdad primera. Solo hay errores primeros”.
miento de flujo y reflujo del conocimiento que explica por qué ciertas teo-
rías muy acreditadas en el pasado son sustituidas por otras más recientes, Este axioma nos devuelve al tema de la “Ruptura”. Momentos fecundos
escasamente garantizadas. De esto se sigue, por lo tanto, que lo que resulta te la ciencia son aquellos donde una concepción es cuestionada y se de-
verdadero para el criterio de una determinada época histórica habrá de re- muestra que es errada. Dirá también, en otro lugar, lo siguiente:
sultar falso en una época posterior. Piensa Bachelard que. justamente, la
1 sobre un fondo de error, tal es la forma del pensamiento
verdad surge de la confrontación con el error. A modo de ejemplo se puede
Ir que es prácticamente imposible conciliar las diferentes concepcio-
nes que hubo históricamente sobre la materia. El atomismo moderno no es Ll segundo axioma se refiere a las intuiciones que, según Bachelard,
la continuación natural de las antiguas teorías atómicas sino que, mas bien, ileben ser destruidas. No es malo tener intuiciones, porque, de hecho, la
constituye la suma de todos los errores que fueron rectificados en la medi- Clencia ha avanzado muchas veces de la mano de intuiciones geniales, pero
da en que fue posible hallarlos. La suma de todos aquellos errores compo- luego esas intuiciones se transformaron en un conocimiento que fue revisa-
nen el conjunto de rupturas que despejaron el camino de la ciencia. do reflexivamente. Bachelard dirá lo mismo de diferentes maneras, “Las
Sin lugar a dudas, esta clase de rupturas también se produjeron en el intuiciones son muy útiles: sirven para ser destruidas”, dirá irónicamente
dominio de la Psicología a través de teorías que se opusieron contra un Huchelard, Se trata de una ironía, como dijimos, que hace hincapié en que
conocimiento convalidado en una época anterior, como la que produjo en toda intuición del científico deben someterse a una severa revisión o com-
1895 el Psicoanálisis cuando propuso al inconsciente como objeto de estu- probución continua, Aquello que la intuición ha permitido vislumbrar, debe
dio de la psicología, afirmando que la conciencia no agota lo psíquico sino Ber meluborado por el pensamiento que debe compulsar los datos inmedia-
que los mismos procesos psíquicos se producen en esa región oscura tos que la intuición aporta con la reflexión profunda,
psiquismo que nos es desconocida. Según Freud, la revolución producida NI tercer axioma se refiere al objeto de estudio de la ciencia, el que,
ROBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO

según Bachelard, parte de nuestra necesidad antes que del conocimiento de Se refiere, en este caso particular, a aquellas respuestas que se vuelven
lo Real. Entendámoslo bien: no parte la ciencia del conocimiento de lo real irreflexivas o aquellas otras que no suscitan nuevos interrogantes, y que,
sino, inversamente, se dirige a él de una manera inesperada. En resumen, por el contrario, en lugar de renovar un interés científico van a funcionar
digamos que Bachelard considera a la ciencia como una continua revisión como obstáculos que detienen el avance de la ciencia. Los obstáculos
de las teorías establecidas, o sea, como un estado de cuestionamiento ince- epistemológicos son fenómenos recurrentes, cíclicos, que suelen aparecer
sante que pone la ciencia en el camino de la verdad. Por lo tanto, la ciencia 1 lo largo de todo el desarrollo histórico de la ciencia, y pueden rastrearse Los obstáculos
se encuentra con obstáculos que no son exteriores a los estados del investi- desde la prehistoria hasta la actualidad, porque, sin duda, han habido, en epistemológicos,
gador, sino que, más propiamente, se encuentran alojados en el interior del todos los tiempos, ciertas ideas adquiridas que fueron una explicación váli-
da sobre determinados hechos que redundaban en provecho del conoci- una vez
científico, de modo que la ciencia se detiene justo allí, en el preciso mo-
mento en que el científico ya no se cuestiona más. miento científico, pero luego, al anquilosarse o cristalizarse, se transforma- arraigados en el
Entonces, uno de los obstáculos epistemológicos es, a saber: la propia ron en obstáculos epistemológicos cuya única razón de ser era la de funcio-
interior del
subjetividad del científico que provoca un detenimiento en el conocimien- nar meramente como trabas que cerraron el paso al verdadero espíritu cien-
to. Esta subjetividad, que se encuentra latente en el espíritu del científico, ico, provocando, ya lo dijimos, severos detenimientos o estancamientos. científico, se
se pone en funcionamiento inevitablemente. Por lo tanto, es necesario que A continuación, veremos cuáles son los obstáculos epistemológicos más transforman en
el científico se libre de ella. La búsqueda de la verdad, que en ciencia se comunes que pueden afectar el natural desenvolvimiento del verdadero es-
refiere al conocimiento del objeto, consistirá propiamente, según Bachelard, píritu científico, precisamente, por esa su invencible tendencia a recogerse causa de
en que el científico se libre de los obstáculos que se alzan desde su interior, en el interior del científico obligándolo a detenerse. Hay tres obstáculos detenimientos o
formando una especie de barrera que se convertirá en un impedimento para epistemológicos principales y son, a saber: la Opinión, la Experiencia Bá-
vica y el Conocimiento Anterior.
barreras que
encontrar la verdad. El verdadero Espíritu de la Ciencia se distingue por
mantenerse siempre receptivo, en una actitud que está permanentemente frenan el discurrir
abierta a las interrogaciones y cuestionamientos, mostrándose más preocu- 4.4.1. La opinión
de la reflexión
pado por poner en tela de juicio el saber ya adquirido que en proporcionar La ciencia es absolutamente contraria a la opinión. La ciencia basa su
respuestas sobre el objeto de estudio que le incumbe en un determinado conocimiento, tanto empírico como teórico, en la demostración de sus pro- crítica que debe
momento. El verdadero espíritu científico, por consiguiente, se manifiesta s y la probanza segura de sus leyes. Mientras que la opinión, en fluir
no por un saber ya adquirido. aquel que las experiencias e investigaciones paz de demostrar sus afirmaciones. Esta nulidad hace decir
a Hachelard, por ejemplo, que la opinión es una imputación. Y respecto a continuamente en
han acumulado en las bibliotecas, sino. por el contrario, a través de la posi-
bilidad que tiene el científico de interrogar ese saber. ella merepa el ejercicio de la
Los obstáculos epistemológicos, una vez arraigados en el interior del ciencia.
científico, se transforman en causa de detenimientos o barreras que frenan uee necesidades en conocimientos”.

el discurrir de la reflexión crítica que debe fluir continuamente en el ejerci-


cio de la ciencia. En efecto, de acuerdo con Bachelard, los obstáculos into significa que aquel que expresa una opinión, sólo es capaz de re-
epistemológicos se filtran inadvertidamente en el pensamiento del científi- parar en el carácter utilitario de los objetos y en la apariencia de las cues-
co y son las verdaderas causas de su estancamiento, su regresión e inercia. Hones que se refieren a ellos. Es por esto que la opinión tiende a funcionar
Sucede, muchas veces, que aquello que el científico cree saber se torna en tomo un obstáculo que impedirá acceder a un verdadero conocimiento. La
un obstáculo insalvable, actuando de un modo inadvertido como un freno opinión debe ser superada, puesto que suele inmiscuirse en el espíritu del
que le impide progresar en su camino hacia la verdad científica, haciéndole Cientifico de una manera polimorfa y ambigua. Si el científico no es capaz
refractario a la recepción o adquisición de nuevos y distintos conocimien- Me superarla, su conocimiento quedará expuesto a las distorsiones, aleján-
tos, que incluso bien pueden estar en franca contradicción con el conoci- ose del espíritu científico e induciendo al científico a que formule cuestio-
miento adquirido durante el período de formación. Nes mal planteadas, de las que, por lo mismo, sólo puede extraer respuestas
Piensa Bachelard que existen ciertas respuestas que se interponen al mulas. NI verdadero espíritu científico, aparece cuando el científico es
verdadero espíritu científico como una suerte de velo que oculta la verdad. Capaz de plantear correctamente las cuestiones que se suscitan a lo largo de
RoBERTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO

su búsqueda de la verdad, de evitar el uso de la opinión a fin de no provocar ritu del científico y hace que tropiece con aquel obstáculo habitual que
un detenimiento en el camino de la ciencia. Para ilustrar su afirmación res- consiste en confundir la experiencia básica con el verdadero conocimi
ento,
pecto a la opinión, Bachelard trae a colación una cita de Bergson que se cuando aquella, en realidad, lejos de constituir el fin, debe tomarse como el
pronuncia en el mismo sentido que hemos adelantado: comienzo de la reflexión. Por lo tanto, el científico no debe dejarse
arras-
trar por la seducción de la Experiencia Básica.
“Nuestro espíritu tiene una tendencia invisible a considerar más clara la
idea que le sirve más a menudo”.
4.4.3.El conocimiento anterior
Esta claridad que le viene a la idea mediante el uso consuetudinario, En el científico hay siempre una actitud dispuesta a comprender los
resulta engañosa debido a que se presenta como verdadera en la medida fenómenos. Es la misma actitud que debió mantener a la hora de dedicarse
al estudio de una ciencia determinada, ya que antes de estudiar, experimen- “Nuestro espíritu
que nos hemos acostumbrado a ella. En el uso cotidiano encuentra la opi-
nión su fuerza y la facilidad para acomodarse en el espíritu del científico de tar u observar, el científico debió atravesar una serie de etapas formativas, tiene una
una manera inadvertida o “invisible”. Débese considerar como opinión, en gracias a las cuales consiguió ponerse al día con el conocimiento científico,
tendencia
general, a toda forma de conocimiento que no pueda dar cuenta de sí mis- examinando las últimas teorías que dan cuenta de aquellos fenómenos que
mo y que, por lo mismo, se expresa de modo impreciso, vago, indefinido. A también él desea observar. Justamente, es su familiaridad en el trato con invisible a
la opinión no se le exige una definición, porque no necesita demostrase o esas distintas teorías, el factor que influye más autoritativamente en él, en
considerar mas
probarse como la verdad científica. Otro rasgo de la opinión es su gratui- la medida que corresponde al conocimiento anterior que adquirió durante
dad. Sin duda, podemos servirnos de innumerables ejemplos encontrados todo el proceso de su formación intelectual. En consecuencia, podemos clara la idea que
en la vida cotidiana, donde solemos escuchar distintas opiniones sobre los decir el Conocimiento Anterior es un obstáculo inevitable, imposible de le sirve más a
más diversos temas, generalmente, por boca de gente que apenas tiene una soslayar ya que se trata de un conocimiento básico que resulta imprescindi-
vaga idea acerca de lo que se trata. El trabajo del psicólogo, por ejemplo, ble durante la etapa de formación del científico. Por lo tanto, cuando el menudo”.
centrado en el estudio de aquello que en el hombre se expresa de un modo Científico observa los fenómenos relativos a su objeto de estudio, nunca
lo
inefable, el espíritu, es pasto para la opinión de quienes están poco avisa- hace desde una posición ingenua o desprovista de alguna teoría, sino que,
dos sobre los propósitos de la Psicología, ya que nunca faltan aquellos que por el contrario, realiza su observación sabiendo de antemano (Conoci-
esbozan toda clase de teorías sobre el hombre y su mente, basados simple- miento Anterior) aquello que debe observar.
mente en algunas lecturas superficiales o incompletas, cuyas lagunas —a Este conocimiento previo de los fenómenos puede ser un obstáculo, en
falta de un conocimiento preciso— son llenadas con opiniones. la medida que se ha convertido en un saber que ya no es cuestionado,
hasta
El punto de que el científico tratará de confirmarlo a pesar de las nuevas
4.4.2. La experiencia básica y tas 0 de las contrariedades que surjan desde la observación. Es así
La Experiencia Básica u Observación Básica, se presenta también como verdadero espíritu de la ciencia es dejado al costado, provocando
un obstáculo muy habitual en la ciencia, ya que la misma suele ir acompa- Un detenimiento en el avance de la ciencia. A fin de que ese Conocimiento
ñada por un repertorio interesante de imágenes coloridas, pintorescas, na- Anterior no se transforme en obstáculo, el científico debe mostrarse
capaz
turales, concretas, El científico queda maravillado ante el grato espectácu- vuesto a cuestionarlo, sometiéndolo constantemente a una severa revi-
lo que ofrecen. La Experiencia Básica hace creer que es obvia en sí misma, ión, ya que de no hacerlo así, el conocimiento anterior es objeto de los
que se demuestra sin esfuerzos, natural y fácilmente, prescindiendo de cual-
—— de fe del científico, algo que le resulta chocante al verdadero espíritu
quier reflexión posterior. El científico siempre está a la espera del experi- la ciencia.
mento que confirmará su teoría, de ahí que, normalmente, todas sus expec-
tativas están depositadas en esta experiencia primera o básica, a la que
accede con cierta ansiedad, ya que para eso ha cuidado la preparación del
5. El concepto de Paradigma
dispositivo experimental, cuya función, justamente, será la de rastrear las
evidencias empíricas que, a la postre, proporcionan el disfrute más sensual
Partiendo del concepto de “Ruptura” postulado por Bachelard, es dable
de la ciencia. Sin embargo, este colorido es lo que oblitera o cierra al espí-
Aervar que la ciencia avanza a través de las rupturas que se producen

[55]
RoBErrto ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO

cuando un nuevo descubrimiento o conocimiento pone en duda o en tela de Paradigmas se imponen con mucha fuerza, por eso no es tan fácil abando-
juicio los supuestos sobre los que descansaba el conocimiento establecido narlos, ya que no basta conque un Paradigma sea refutado para que se jus-
y adquirido. Podemos afirmar, en consecuencia, que cuando se produce un tifique su abandono, excepto que aparezca otro paradigma que pueda susti-
cambio de Paradigma en el pensamiento científico, como fruto de la susti- tuirlo. A esta transición o período por la que se pasa desde un viejo para-
tución de las viejas teorías por otras nuevas, esta ruptura con el conoci- digma hacia otro nuevo se lo denomina “Revolución Científica ”.
miento anterior trae aparejada una crisis profunda que es sentida como una El Paradigma no sólo influye en las ideas que los científicos de una
especie de “desgarro” en el seno de la comunidad científica. El concepto de época determinada pueden usar para reflexionar acerca de la realidad, sino
A toda esa
Paradigma se lo debemos a Kuhn, quien lo presenta, por primera vez, en su que se impone a las metodologías de investigación y, por lo tanto, también
libro La Estructura de las Revoluciones Científicas, un texto donde el con- influye en los modos en que se conciben y construyen los instrumentos de ingente cantidad
cepto de Paradigma señala un hito fundamental en la Filosofía de la Cien- medición. En otras palabras, el paradigma gravita directamente en el pen- de problemas
cia, samiento del científico y determina la forma en que el científico va a obser-
var y experimentar la realidad. En ciertas épocas históricas pueden convi- previamente
Para ilustrar el concepto de Paradigma, tan usado en nuestro tiempo,
recurriremos a la imagen del científico que en su afán de lograr el conoci- vir dos o más Paradigmas vigentes, aun en el seno de la misma comunidad planteados y que
miento sobre un determinado objeto, cualquiera que fuere —como, por ejem- científica. A este período de coexistencia Kuhn lo denominó “Preciencia”.
constituyen, tanto
plo, la luz, el átomo, las células, los procesos psíquicos o la conducta-—, Podrían prodigarse los ejemplos que muestran el modo en que funciona
deja prevalecer su calidad de observador del fenómeno, aunque, en princi- un Paradigma para una época y una mentalidad científica determinadas, en el orden
pio, se trate de una “observación sistemática” a partir de la cual serán crea- pero nos contentaremos con mencionar un caso bien típico relacionado con conceptual como
das aquellas hipótesis las cuales podrán ponerse a prueba en la etapa expe- la Astronomía. Quizás no huelgue recordar que Ptolomeo sostuvo en una
época que el centro del universo era la Tierra y que los astros giraban a su en el técnico, el
rimental. Tanto el científico como el filósofo, recurren al método hipotéti-
co deductivo cuando se trata de alcanzar un conocimiento desde aquellas alrededor, aún el propio sol. Copérnico cuestionó este punto de vista, sos- marco de
verdades conocidas. teniendo, por el contrario, que el centro del universo era el sol y que la
tierra era simplemente uno de los planetas que giraban a su alrededor.
referencia de la
El científico plantea cuestiones en relación con aquello que quiere co-
nocer. Equipado con estas herramientas metodológicas aborda el objeto de Otro caso característico, lo aporta la propia Psicología, ciencia que en investigación en
su incumbencia, guiándose además por las ideas que ha adquirido previa- hinado momento se ocupaba de estudiar la conciencia mediante el
marcha, se
mente, en tanto que ellas son las que verdaderamente orientan el sentido de metodo introspectivo. Contra esta posición se plantó el Conductismo des-
su investigación o reflexión. Por consiguiente, antes de comenzar con el plazando el objeto de estudio de la Psicología de la conciencia a la conduc- denomina
proceso de su investigación el científico ya tiene una idea clara de aquello ta, ya que ésta, a diferencia de aquella, ofrecía mejores posibilidades de ser Paradigma.
que desea estudiar, conociendo de antemano cuáles son las preguntas que y medida mediante la metodología experimental.
es menester formular y qué técnicas necesita aplicar a su objeto. Incluso
puede presumir o adelantar las respuestas que podrían surgir cventualmen-
te y hasta determinar cuales de esas posibles respuestas merecen conside-
rarse aceptables. A toda esa ingente cantidad de problemas previamente
planteados y que constituyen, tanto en el orden conceptual como en el téc-
nico, el marco de referencia de la investigación en marcha, se denomina
Paradigma.
Según Kuhn, los paradigmas evolucionan desde su creación, atraviesan
luego por un período de máximo esplendor —en el cual son considerados
infalibles—, hasta que finalmente son refutados y entran en crisis para luego
ser olvidados. Para este autor, aquel período histórico en el cual se impone
un determinado paradigma —funcionando como un paradigma único— co-
rresponde a lo que se considera un período de “Ciencia Normal”. Los
RogErTO ENRIQUE Coscio - José FERNANDO SÁNCHEZ

liciones, los pensamientos, que lición, en la actualidad, es voz perteneciente INDICE


enta y “vive” intensamente en a la psicología que indica todo acto de vo-
luntad. Voluntad es la facultad de querer, la
fine como volición a todo aquel potencia del espíritu dirigido siempre hacia
oluntad o acción de querer o de- un fin determinado.
0 escoger conscientemente. Vo-

AGRADECIMIENTOS ccziciciicnacinu ADA .9

| :2:70770 € a a 11

1. INTRODUCCIÓN .........eeeeneecerecnereereeneenes EAU


EII IZDA ans 19

2. BREVE RESEÑA HISTÓRICA


21 UA EPOER ICONO BCS: vara UA 19
2.2, El Racionalismo de René Descartes (1596-1650)......................m.......... 26
2:3-La Posicion Empiristá: ===... ].—v "oc 2
2.4. La creación de las Ciencias Humanas ................... sunoIp Ive 31
2.5. Historia de la Psicología en La Argentina ....................re=emeererereeneee. 32
3. EL NACIMIENTO DE LA PSICOLOGÍA CIENTÍFICA
3.1 Antecedentes ...................e.ereniimee De Re De eee 37
3.2 La Psicología Científica ............—.——.—.—.. menes NU =—— PT |
3.3 La psicología a principios de siglo .....................erererereneneree
nene 43
4. EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO
4.1.:La:ciencia tradicional +.-:=.:)=5:-:02es0es00ec AC OZ RA CE A
4.2. Críticas a la ciencia tradicional ......... O OT TN 48
4:3:El 'Concepto:de Ruptura === Zo os 49
4.4. El concepto de obstáculo epistemológico .................e.meere Si
4.4.1. La opinión .............. enteren eonene oe ne pere orar Ten eaaN rem ermTeE 53
4.4.2. La experiencia básica ................2er0eeereerene ee reevenennonenenernes 4
4.4.3.El conocimiento anterior ............. O
4.5. El concepto de Paradigma ...... encioieraeenee reeeeeeee Nnrinneneno
enn eeDe cenar 35

5. Los MÉTODOS DE LA PSICOLOGÍA


5.1. El problema metodológico en psicología ......................eseeeeeneeeee 9
5.2. Ciencias naturales, ciencias del espíritu ............w.m=...00..... ..60
5.3. Método introspectivo ...................=......
5.4. Método objetivo ..
5.5. Método Experimental
5.5.1. Las variables ..
5.6. Método Fenomenológico .
5.7. Método Clínico...
5.7.1 Antecedentes históricos de la Psicología Clínica ,
5.7.2 El Proceso Psicodiagnóstico ..................e.eeeeeeeeeee e 79

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