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MAESTRIA EN GESTIÓN PÚBLICA

“ORGANIZACIÓN ESTRUCTURA Y FUNCIONAMIENTO DEL ESTADO”

TITULO:
INFORME ACADEMICO SOBRE
“EXPLICACIÓN DEL PROCESO EL PROCESO DE DESCENTRALIZACIÓN”

AUTOR:
CHAVEZ PEREZ, CIPRIAN HENRY

DOCENTE:
DRA. VIDAL SENADOR, MARÍA ELENA

PERU -2023
ÍNDICE

1. Introducción....……….…..…………………………………………….…………….…. 3
Proceso de Descentralización …………………………….………….…………………… 5
2. Desarrollo ……..……………………………..………………………….………………. 5
2.1 Descentralización en el Perú………………………….………….…………………... 5
2.2 Aspectos Positivos de la Descentralización………………………………………… 6
2.3 Aspectos Negativos de la Descentralización…………….………………………….. 7
2.4 Experiencias Exitosas………….... ……………………………………………….... 10
3. Conclusiones……………………………………………………………………………11
Referencias…………………………………………………………………………………. 12
1. Introducción
En el caso de Perú, la descentralización corresponde al deseo sincero de reforma
entre un pueblo afectado por el abrumador centralismo del Estado, reflejado en la
prosperidad económica histórica de Lima y las aparentes asimetrías de poder en
relación con el resto del país, comenzando con el Virreinato y luego la capital de la
República (Herz, 2019). Asimismo, en ausencia de mayores oportunidades
económicas y políticas para explotar los diversos potenciales de desarrollo que
poseen los territorios regionales y locales, mejorar estos potenciales puede significar
cambios significativos en el intercambio, la negociación y las relaciones de poder.
Poblaciones de las zonas más desatendidas (Campana, 2017)

El último intento importante de reforma descentralizadora se inició en 2001, el


octavo durante la República de China, y se aprobó la "Ley Básica de
Descentralización", la "Ley de Grupos de Autogobierno Local", etc. El propósito más
importante de la descentralización es finalizar con el centralismo que ha una
característica del Estado peruano desde su fundación republicana (Azpur et al.,
2006). El centralismo ha creado grandes inestabilidades entre Lima y las regiones,
afectando las condiciones de vida de todos los peruanos. La concentración del poder
político y económico en la capital y en unas pocas ciudades es el resultado de este
problema estructural que define a todo el país, la economía y la sociedad (Farfán,
Lovón & Pflücker, 2020).

Por lo tanto, la descentralización es un proyecto de gran escala que debe plantear


interrogantes sobre los ejes organizativos de la distribución del poder y la riqueza en
el Perú. Del mismo modo, se trata de un proceso complejo y contradictorio,
necesariamente de mediano a largo plazo.

Este estudio se justifica teóricamente, porque busca nuevos aportes a los


conocimientos existentes acerca del tema de la descentralización, tomando en
consideración a grandes estudiosos del tema como Herz (2019) y Contreras
(2000).En cuanto a la justificación práctica, se puede señalar que ayudará a los
profesionales que requieran información sobre el tema. Respecto a la justificación
social, se aporta conocimiento acerca de un hecho que atañe a todos los peruanos,
tal y como es la descentralización. Para finalizar se justifica en el aspecto
metodológico, porque se realiza una búsqueda y selección de información teniendo
en cuenta criterios relevantes para la investigación científica.

En cuanto al objetivo general de esta investigación, se plantea Analizar el proceso


de descentralización en el Perú. Como objetivos específicos se proponen 1. Analizar
el impacto positivo y negativo de la descentralización en Perú. 2. Comparar las
experiencias de estados descentralizados exitosos con el caso peruano.
2. DESARROLLO

2.1. Descentralización en el Perú

Luego de analizar la descentralización desde 1930, se observa que se ha creado


un marco regulatorio y sus procesos, cuyos pilares son la Ley N° 27783 sobre bases
de la descentralización (2002), Ley de Descentralización Fiscal, Decreto Legislativo
N° 955 (2004). La Ley Orgánica de Descentralización establece el desarrollo integral,
armonioso y sostenible del país a través de la separación de poderes y funciones y el
ejercicio equilibrado de competencias por parte de los gobiernos locales, regionales y
regionales.

El proceso actual se remonta a la Constitución de 1979, que introdujo el término


“región” y aprobó elecciones libres y directas para los poderes de los gobiernos
locales (Comisión Nacional de Descentralización, 2006). La misma carta también
prevé el desarrollo de un plan nacional de regionalización y prevé un período de
cuatro años para la creación de regiones. A pesar de algunos retrasos, esta tarea
recién comenzó a formularse durante el segundo gobierno de Fernando Belaunde, y
no fue hasta 1984 que se presentó un proyecto de ley sobre descentralización y
creación de bases regionales (Consejo Nacional de Descentralización, 2005).

Ticse (2017) señaló que tras una serie de largas y complicadas discusiones, la ley
finalmente fue aprobada e implementada en 1987. Sin embargo, este esfuerzo de
descentralización para crear 12 regiones con autoridades autónomas, aunque no
elegidas directamente, duró poco. , desde su repentina pausa en 1992. Fujimori
incluyó esto en su nueva constitución política de 1993 en sus distritos capitulares y
en su mandato constitucional de 1979 para que las autoridades locales fueran
elegidas mediante elecciones directas y el gobierno tuviera un mandato de cinco
años. (Bercholc, 2016).
En cambio, las regiones y autoridades creadas por el gobierno de García, fueron
desmanteladas y reemplazadas por el Consejo Administrativo Regional de Transición
(CTAR), subordinado al poder ejecutivo a través del Ministerio de la Presidencia.
Cuando cada departamento crea un CTAR, se devuelven las divisiones territoriales
del departamento. No fue hasta 2002 que Perú reanudó el proceso de
descentralización. (Belaunde, 2007) Para ello, como primera medida, se reformó el
Capítulo 14 de la Constitución de 1993 sobre Descentralización de Poderes. En esta
reforma, que se convirtió en el pilar fundamental del proceso, se reafirmó la división
territorial del país en departamentos, provincias y regiones (Prud’homme, et al, 2005)

2.2. Aspectos Positivos de la Descentralización.

De acuerdo a lo señalado por Vega (2008) en su estudio, se puede afirmar que:

En la década de 1970, el académico peruano Manuel Pulgar Vidal propuso,


reelaboró y optimizó la teoría de la regionalización horizontal. Desafortunadamente,
no hubo una alianza fuerte entre la política y la academia, y la centralización como
condición sine qua non para el gobierno de facto retrasó cualquier intento hasta la
década de 1980.
El Consejo Administrativo Regional de Transición (CTAR) fue establecido como
una entidad descentralizada de la Oficina Presidencial y reestructurado para este
propósito. El presidente del CTAR es designado por el gobierno central y es
responsable de gestionar las oficinas regionales de varios ministerios y de llevar a
cabo algunos proyectos de infraestructura.

La adopción del Acuerdo Nacional el 22 de julio de 2002, por iniciativa del


gobierno del entonces Presidente de la República, Alejandro Toledo, fue el primer
hito para afirmar la democracia y relanzar el debate sobre la descentralización.

Finalmente, el más relevante es el del artículo 190, que estipula que la creación de
regiones debe basarse en "un área contigua integrada histórica, cultural,
administrativa y económicamente, formando una unidad geoeconómica sostenible"
(Constitución de la República del Perú, 2002). De hecho, el debate sobre la
descentralización continúa, particularmente en lo que respecta al desarrollo de
iniciativas de investigación y acción de la sociedad civil.

2.3. Aspectos negativos de la descentralización.

Teniendo en cuenta lo planteado en el estudio realizado por Carrión (2003), se


puede afirmar que:

A nivel regional, tras la descentralización de las multas en la década de 1980, las


regiones que se formaron arbitrariamente en muchos casos en 1992 no
contribuyeron al país durante una de las peores crisis económicas que jamás haya
experimentado el país. Mejoró la calidad de los servicios públicos y agravó la crisis
económica debido a las competencias fiscales que se les otorgaban.

El segundo factor que frena este proceso es, sin duda, la burocracia de mano
dura. De hecho, el debate sobre la descentralización continúa, particularmente en lo
que respecta al desarrollo de iniciativas de investigación y acción de la sociedad civil.

Otro factor que generó serias tensiones y obstaculizó el desarrollo del proceso de
descentralización fue el conflicto social, que se produjo esencialmente por la falta de
compensación adecuada a las comunidades campesinas de las zonas mineras, y
que no ha cesado, frenando así cualquier descentralización seria.

Un factor relacionado que socava la descentralización es el papel de los partidos


políticos. Un sistema altamente fragmentado derrotado por los problemas actuales,
completamente dividido por el severo atraso del régimen de Fujimori y los gobiernos
que encabezó en los años noventa, marcando un estado de tensión permanente que
no permite establecer un sistema de partidos y el manejo de las políticas nacionales.
2.4 Experiencias Exitosas

La descentralización implica la transferencia de poderes y recursos del gobierno


central a otro gobierno de una fuente diferente manteniendo la autonomía. La
descentralización se refiere a la delegación de poder de una agencia administrativa
central a ciertas agencias afiliadas (Alvarado, Botero y Ruiz, 2020). Finalmente, la
descentralización o privatización se refiere al proceso de reducir la centralidad
ocupada por la política y el público a través de la informalización o privatización como
medio para amplificar la eficacia pero renunciando al Estado, al público y a las
políticas (Carrión 1996).

Italia y Alemania son pioneros en el tema de la descentralización y siguen


modelos diferentes. En Alemania, un estado federal, la descentralización se basa en
las estructuras existentes y busca profundizar la autonomía de los estados. Italia ha
fortalecido sus tendencias nacionales en la organización del país. Esto quiere decir
que, en ambos tipos de organización estatal (federal y unitaria) y en ambas formas
de organización territorial (regiones y estados), la descentralización va acompañada
de un factor común: el afianzamiento de un orden intermedio de gobierno (Carrión y
Joerg 1995).

En Inglaterra, después de un enorme esfuerzo por parte de las administraciones


locales durante los años de Thatcher, comenzó la devolución del poder a Gales y
Escocia y más tarde al Ulster, con la elección en 1999 de los primeros parlamentos
en Escocia y Gales. Tras la caída de la dictadura de Franco, España unió fuerzas
para hacer frente al enfrentamiento entre las "dos Españas": una España
centralizada, católica, monárquica y capitalista, y una España federal, laica,
republicana y socialista (Ortega, 1998)

En América Latina, la forma organizativa estatal no parece ser una variable que
influya en la descentralización. Una evaluación rápida de cuál de los dos sistemas es
más eficiente y democrático a la hora de abordar la descentralización lleva a la
conclusión de que se trata de una pregunta falsa. México es un estado federal,
quizás uno de los más centralizados de la región, mientras que Argentina y
Venezuela también son estados federales con niveles considerables de
centralización (Rojas, 1993). Por otro lado, estados unitarios como Colombia, Bolivia
y Chile son ejemplos útiles de descentralización. Brasil, como estado federal, ha
mantenido y profundizado el proceso de intensificación municipal. El Ecuador unitario
continúa centralizándose, mientras que el Perú, también unitario, ha retrocedido
después de varios años de interesante descentralización (Han, 2000).

3. Conclusiones

En la actualidad, mientras se intensifica el proceso de descentralización y


autonomía territorial entre las naciones de la región, también se desarrollan
fenómenos como la internacionalización y la integración regional. Por ello, todos los
procesos antes mencionados se llevan a cabo en el contexto de la globalización, lo
que tiene un valor de referencia muy importante para realizar investigaciones sobre
los procesos de descentralización de los gobiernos locales.

En Perú, desde su fundación republicana, el debate sobre la forma del Estado


aún no ha terminado debido a la ola independentista en América Latina. El monismo,
al mantener el centro del poder en una sola región, se ha convertido con el tiempo en
una forma de hipercentralismo que ha retrasado gravemente el desarrollo de las
ciudades del interior y no muestra signos de resolución.
El caso peruano requirió lo que podríamos llamar un intenso proceso de
transformación descentralizadora, ya que una centralización significativa surgió
debido a diversos factores. El siglo XIX fue una época desastrosa para el Perú.
Elementos dañinos para el estado, tales como el autoritarismo, la corrupción y el
poco compromiso con la república ciertamente no le hacen ningún bien al Perú.
Referencias
Azpur J, Ballón E, Chirinos L, Baca E y Távara G (2006) La descentralización en el
Perú Un balance de lo avanzado y una propuesta de agenda para una reforma
imprescindible. Consorcio de Investigación Económica y Social Antero

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