Al escuchar Big Data nos referimos a la generación de enormes volúmenes de datos, que no pueden ser tratados de manera convencional, por cuanto superan los límites y capacidades del software tradicional principalmente para el análisis de datos. En este sentido, la educación se suma al potencial que tiene Big Data. Los expertos que usan Big Data, aseguran que el ámbito de la educación evolucionará con esta tecnología, con la finalidad de crear un nuevo sistema de aprendizaje basado en el análisis de datos de grande volúmenes de datos extraídos de los estudiantes. Por ejemplo, predecir el éxito o fracaso de un estudiante, entre otras. Procedencia de los datos La mayoría de instituciones de educación pública o privada, buscan de manera eficaz, en conjunto con las tecno- logías de la información y la comunicación (plataformas virtuales), sea el nexo para la generación de millones de datos. Para ello, el uso y aplicaciones, son características que explotan analistas de datos, pues el almacenamiento masivo, procesos, interacción de estudiantes a través de plataformas virtuales, son una masa de datos o materia prima, que permitirá encontrar información valiosa. El uso constante de plataformas virtuales, durante varios períodos lectivos, generan sin darnos cuenta, ingentes cantidades de datos e información, como el, tiempo y veces quien visitó algún foro, cuantos documentos subió a la plataforma, tiempo de permanencia en la plataforma, entre otras. Además, gracias a la interactividad, web y educa - ción (e-Learning), también generan información relacionada con la enseñanza y aprendizaje (progreso del curso, dedicación al curso, entre otras).